327 con el suelJo y emolumentos corespon dientes, en atención k sus distinguidos méritos y circunstancias. Circulares del mln isterio de Hacienda. El Rey se ha servido dirigirme el decreto que sigue: „Por la consideración y aprecio que me merece, y de. que es tan digno per su religiosidad y zelo público el Estado Eclesiástico de mis dominios, y por la confianza que tengo de que sin necesidad de sujetarlo á las itnposicioi.es con qne las llamadas Cortes generales y extraordinarias gravaron los frutos y rentas decimales por decretos de 2 5 de Enero de i 8 i i y i 6 de Junio de 1 8 1 2 , se prestará con la generosidad que siempre lo ha hecho al auxilio de las obligaciores y urgencias del Ejtado, he venido en abolir los dos decrejtos_ citados, V mandar que queden por consiguiente libres y exénros los frutos y rentas decimales de la contribución y gravánnen impuestos por los mismos decretos. Tendréislo entendido para su cumplí miento, m Rubricado de la Real mano. En palacio á 3.4 de Junio de 18 4 . = A D. Cristóbal de Góngora "• Y 16 traslado á _V. S. de Real orden para su inteligencia y cumplimiento. Dios guarde á V. 5. muchos años. Madrid ^ 4 de Junio de 1 8 1 4 . Un R. obispo, cuyo nombre ba suplicado á S.M. se 0cülte, le ha dirigido la siguiente representación: . . S e ñ o r : entre e l desorden d e la resolución, y después de haber contribuido con cerca d e t r e s m i l l o n e s e n e x a c c i o n e s y donativos voluntarios para las urgencias del reyno , pude reservarme ioo9 rs. , por si llegaba el caso de expatriarme, como ha sucedido á otros obispos. „ D e estos icod rs. mantengo todavía 6c^; y aunque á un obispo no le pueden faltar objetos dignos de su caridad á que destinarlos, creo que en el dia la necesidad mas urgente es la del estado, j,Suplíco, pues, á V. M. que disimulando mi atrevimiento, se sirva admitir esta ligera expresión, que aunque en otra providencia me cubriría de rubor por su aioiíedad, AL 1.'