47 FIESTA Y PODER EN LA MARCHENA DE LA EDAD MODERNA

FIESTA Y PODER EN LA MARCHENA DE LA EDAD MODERNA
Juan Luis Ravé Prieto
...quién da a la calle y quita a la floresta,
de suerte que los grandes, los menores,
en tu solemne fiesta
ven pompa, visten oro, pisan flores.
Luis de Góngora (1561-1627)
1. FIESTA ENTRE EL HUMANISMO Y EL BARROCO
a fiesta, entendida como ruptura de la rutina diaria, fue utilizada desde el
comienzo de la Edad Moderna a modo de instrumento de manifestación y de
afirmación del poder. En una villa de señorío las fiestas han de estudiarse
particularmente desde esta perspectiva, dada la estrecha relación que el Señor
mantiene con su villa. El poder emplea en la fiesta todo tipo de recursos para hacer
ostensible la imagen nueva de la autoridad, haciendo convivir la tradición todavía
caballeresca del Renacimiento y las nuevas formas expresivas del Barroco: teatro,
música, artes plásticas. El Barroco ampliará el espectro de los participantes y procurará
que la mayor parte de la ciudad participe de la fiesta impulsada desde las cima. Al
desear imprimir siempre a cualquier manifestación cultural una alta dosis de intención
moral utilizaban casi siempre la Retórica como expresión más conveniente a la propia
razón de ser y a la dignidad del poder. Se emplean además y todos los nuevos recursos
técnicos, científicos, literarios y estéticos del siglo para hacerla más cercana y
comprensible al común de la sociedad. Por otra parte, se aprecia una bipolaridad en
L
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cualquier manifestación lúdica de esta sociedad, un contraste entre lo popular y lo
culto, entre la elite que dirige y el común, espectador casi siempre pasivo. Aunque
ambos polos encontraron en el arte barroco, en la fiesta y en el teatro la fórmula ideal
para convivir y ser compatibles. Esta dualidad y convivencia a un tiempo, se extendió
a todos los ámbitos. En lo social, la tensión entre lo popular y lo aristocrático llenó de
dinamismo el Siglo de Oro y revitalizó todo el arte y la literatura. En las artes plásticas,
lo real visto con lupa ¯ es el gran siglo de la Óptica y de la pintura¯ convivió con lo
alegórico (simbólico), y así la naturaleza siempre fue leída en clave alegórica como
imagen de la fugacidad del tiempo, de la caducidad de las cosas y de los seres o del
espectacular reflejo de lo Infinito. Cuando miraban al pasado o al presente, el retrato
o la Historia, siempre eran leídos en clave de su simbolismo moral, ejemplar.
En el campo de lo religioso, liturgia y fiesta, se contraponen, se contrarrestan o
se complementan, según los casos, de tal manera que la dualidad entre lo sacro y lo
profano predominaba en todas las manifestaciones religiosas barrocas. Su única
reconciliación posible fue la paraliturgia de la procesión, la síntesis de la fiesta religiosa
barroca, en donde lo religioso era convertido en espectáculo, ejemplos todavía vivos
de esta tipología barroca de fiesta son nuestra Semana Santa, el Corpus o las
romerías...
A lo largo de la historia el poder ha pretendido y, muchas veces, ha conseguido
encauzar la fiesta como principal expresión de las necesidades lúdicas del ser humano.
Fiesta entendida como válvula de escape y ruptura de lo cotidiano. Un cronista de la
corte lo expresaba con claridad: «Bien son menester estos divertimentos para poder
llevar tantas adversidades». Pero no podemos olvidar que detrás de su aparente
neutralidad hay un uso político de la fiesta, ya que es un instrumento de cohesión del
cuerpo social y por ello podemos estudiarla como manifestación de una ideología
religiosa o política.
Igualmente dado su objetivo de cohesión social la fiesta en el Antiguo Régimen
es una celebración participativa. Pero, tal como veremos, su grado y modo de
participación están estrictamente reglamentados. No es una fiesta abierta y
carnavalesca, donde libertad y participación son totales. Incluso hay una gran parte
de la población que no participa, es espectadora Todo está reglamentado, las autoridades
deciden los límites: los sectores participantes, quienes participan, el orden y el modo
discurrir, el itinerario y la secuencia, la programación o el ceremonial y lo que es más
determinante, los contenidos simbólicos e ideológicos.
La fiesta barroca como expresión de una cultura dirigida -sigue un plan y un
discurso argumental- adquiere, por tanto, una dimensión teatral y plástica sin
precedentes. En cuanto a su aspecto formal se distingue por el gusto por lo asombroso,
por la espectacularidad, lo maravilloso, lo artificioso y por la implicación de todas las
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bellas artes. Para cumplir con su objetivo ideológico, sus contenidos simbólicos
pretenden convertirla en instrumento de implicación social a través de los recursos
emocionales, estéticos y de la participación ordenada y cooperante de los diversos
estamentos, nobleza, clero, gremios y pueblo llano que incluso y en algunos contados
casos puede pasar de espectador a actor. Las hermandades y cofradías andaluzas
han mantenido el espíritu de la fiesta religiosa barroca, la intervención de todos los
sentidos y la amplia participación de los cofrades. Así la ciudad se convierte en el
escenario de los mitos y los ritos. Cuyos hitos principales son la plaza, el teatro y los
templos, engalanados y transformados para la fiesta.
Había todo tipo de celebraciones vinculadas a la monarquía, la nobleza y otras
instituciones: Casi siempre son representaciones teatrales, carrozas, máscaras jocosas
o serias, toros, cañas, fuegos artificiales, gigantes y cabezudos, danzas populares y
aristocráticas, jeróglíficos, juegos varios, etc. En ellas conviven ritos ancestrales y
cristianos, expresión de sentimientos religiosos y humanos, rasgos de fiestas paganas
de carácter cíclico relacionadas con las estaciones, mezcladas con otros ingredientes
claramente barrocos. Entre estos últimos destacan el teatro, la música, la composición,
y los colores contrastados, el discurrir de la fiesta por un itinerario fijo y concreto, la
participación de la calle y de toda la ciudad en un uso distinto al cotidiano.
Como la Retórica, el arte Barroco es un instrumento de persuasión, y tal como
en los sermones, y en la decoración de las iglesias los programas iconográficos se
resuelven con un alto contenido ejemplarizante. A través de los cuales, más que
convencer racionalmente, se pretende conmover y persuadir. La arquitectura misma
se renueva en el sentido de hacerse más eficaz para el desarrollo de la ceremonia
religiosa y para permitir la percepción de lo sobrenatural y la conexión espiritual con
la imagen. En la fiesta no era necesaria tanta profundidad, sin embargo, se aprovechan
todos estos hallazgos plásticos o musicales, así, si es posible, los propios programas
iconográficos o los argumentos de las fiestas se constituyen como verdaderos sermones
formados con imágenes, se procuraba aleccionar, e incluso se utilizaban varios niveles
de lectura para que los ilustrados se divirtieran con complejos poemas o jeroglíficos y
los más sencillos pudieran encontrar imágenes inteligibles y juegos de ingenio accesibles
para todos.
2. LOS ELEMENTOS DE LA FIESTA
A. El cambio formal del espacio.
Mediante el uso de arcos, cortinajes, tapices, colgaduras, flores, plantas
aromáticas, y adornos, creados ex profeso para adornar las calles o sacados
temporalmente de los palacios, templos, instituciones y domicilios privados, se procedía
a cambiar por completo el aspecto cotidiano del pueblo. Muchas veces los arcos de
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triunfo se hacían con juncia o plantas aromáticas. Alguna de estas formas de
arquitectura tejida con vegetales se puede reconocer como precedente formal de la
arquitectura gótica final, como ocurre con la puerta del palacio de Marchena del
Alcázar sevillano1 .
La villa se mostraba revestida de adornos y permitía imaginar que es posible
otra forma de vivir. La ciudad real transformada en ideal deja de ser el lugar de las
fatigas cotidianas, para convertirse en espacio de diversión y espectáculo. Sin embargo,
casi siempre se mantienen los mismos espacios y los recorridos desde la época
medieval. En Marchena los lugares de la fiesta eran la plaza de arriba, las calles San
Pedro, San Juan y San Francisco, y en algunos casos la plaza vieja. De alguna forma
se intentaba instalar, por unos días o instantes, el cielo en la tierra o el palacio en
la calle al alcance de todos. Los elementos plásticos con que se juega son
fundamentalmente: el espacio, el color, el olor, la música y el movimiento. La
arquitectura efímera, el color las colgaduras. Se sacan a la calle las esculturas, las
pinturas las colgaduras de los interiores. Hay otros recursos intangibles o intelectuales
como la sorpresa, el humor, el artificio, el jeroglífico y sobre todo la música.
B. El ritual y las normas de la fiesta
El rito tiene la virtud de fijar el comportamiento y la relación entre el que dirige
la fiesta, si fuera liturgia le llamaríamos el oficiante y el resto de la comunidad. Es el
mecanismo cultural de fijación de unas ideas, de unos textos y de unas formas de
comportamiento, al convertirlo en gestos actitudes y frases repetidas la comunidad lo
va asimilando y haciendo propio.
En las fiestas religiosas la liturgia cristiana se amplía en multitud de formas
paralitúrgicas: octavarios, novenarios, triduos, rosarios de la aurora, procesiones, etc.
En todas ellas con reiteración cíclica se repite un ritual que vinculando siempre los
mismos protagonistas acabará igualmente por hacer mella en el sentir de la población.
Poco a poco se va conformando un ritual «marciense» en donde entran elementos de
la devoción local y otros aclimatados por influencia ducal o de las comunidades
religiosas de patronato ducal, que en parte se conserva todavía. Este ritual ancestral
estaría formado por la fiesta del patrono, la Inmaculada, el Corpus, la virgen del
Rosario, la Soledad o globalmente la Semana Santa… Para comprender la implicación
de la casa en el establecimiento de un calendario de festividades propio de Marchena
basta con repasar el documento que se refiere a los gastos de la casa ducal en este
aspecto2 (véase apéndice documental).
La relación de esta portada con la arquitectura efímera fue puesta de relieve en J.L. RAVÉ PRIETO ,
«Permanencia y cambio en el Patrimonio Arquitectónico. Primera parte», Actas de las V Jornadas
sobre historia de Marchena, 1999, p. 128.
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C. La música
La música ayer como hoy era un ingrediente fundamental en la fiesta,
distinguiendo la música más o menos popular que podía acompañar a las actividades
más lúdicas de las fiestas y cortejos, de la selecta música que emanaba de la capilla
de música ducal, cuyo momento de esplendor debió coincidir con la presencia de
Cristóbal de Morales en el palacio hasta su muerte. Lógicamente hay noticias referidas
a instrumentos, tanto a su compra como a su arreglo por ejemplo el pequeño órgano
de la capilla3.
La otra gran capilla musical estaba en la parroquia de San Juan y salvo algunos
momentos de crisis se puede rastrear su continuidad a lo largo del siglo XVI, XVII y
XVIII4. Cuando desapareció la capilla ducal, en una fecha que no podemos determinar,
la de San Juan acudía a solemnizar los actos ceremoniales de la casa. En medio de la
documentación económica ordinaria suele aparecer el gasto por el uso de la capilla
de música «por las asistencias que an tenido a las fiestas y entierro»...5 Hay otro
pago semejante en 1656.
D. La fiesta en movimiento, el cortejo o la procesión.
Casi todas las fiestas se componen a base de un cortejo-desfile o de una
procesión en donde siempre hay los siguientes componentes:
- Los elementos dramáticos:
Del teatro proceden las figuras disfrazadas de alegorías de conceptos
abstractos como la fe, la justicia, la caridad, figuras que habían sido tomadas del
teatro sacro o de los autos sacramentales. Estas figuras que estaban a medio camino
entre lo real y lo plástico: eran abundantes tanto en las fiestas religiosas como en las
profanas. En este mismo plano estaban las danzas, de muy diverso tipo que podían
acompañar a los cortejos y procesiones. Igualmente los carros con representaciones
teatrales que al parar hacían un pequeño recital o entremés. Y desde luego la farsa,
el teatro interpretado por compañías venidas de fuera y expresamente pagadas por la
casa, alternaban la comedia, el drama6 o el auto sacramental.
Estado de Arcos. Relación de los situados para fiestas de la casa del Duque mi Sºr que anualmente se
colocan en los lugares de todo el estado. A.H.N. Nobleza. Osuna, L. 1607. Véase Apéndice documental.
3
A.H.N Nobleza. Sec. Osuna. Cartas. L. 616 113. En 1539 se paga a un or ganista de Jerez por arreglar
el instrumento real de la capilla del Duque. Documento completo en el apéndice documental
4
A. RAMÍREZ PALACIOS Y M. A. R AMOS SUÁREZ , Catálogo del Archivo musical de la Parroquia de San
Juan Bautista de Marchena (Sevilla), Granada 2005, pp. 151-161.
5
1637, Enero 16 . 676 reales a la capilla de cantores y ministriles «por las asistencias que an tenido a
las fiestas y entierro», C. 550- 3. Otro pago semejante el 11 de febrero de 1656 en C550-4.
6
En 1542, se paga a Johan de Aguilera, farsante vecino de Sevilla, por una representación teatral con
motivo del carnaval. L. 16006 -4. A.H.N. Sec. Osuna. Cartas. L.513.
2
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- Los elementos lúdicos:
Entre los actos más aplaudidos por el público estaban ya desde el siglo XVI en
que aparecen las primeras noticias, los toros y cañas. Pero había muchos más
ingredientes, como las máscaras jocosas, los gigantes y cabezudos, los fuegos de
artificio y otras muchas formas de hacer aparecer el ingenio y lo asombroso en escena.
- Los elementos plásticos:
Al discurrir la fiesta por itinerario determinado la arquitectura efímera permitía
transmutar el espacio conocido y darle otra apariencia. Así los arcos de triunfo, los
túmulos, los tronos y retablos provisionales constituían el marco incomparable y
cambiante. Intervenían también las esculturas, sacadas de los ejemplos o
confeccionadas parcialmente con telas encoladas cuyo ejemplo más sólido serían las
figuras del antiguo monumento de San Juan, fotografiadas en el Inventario de 1985
en el convento de la concepción y hoy desaparecidas.
Un híbrido entre la escultura de culto y la imagen festiva es precisamente el
que protagonizan nuestros pasos de Semana Santa, a medio camino entre la escultura
de culto y la figura efectista realizada para ser vista en la calle.
Igualmente se utilizaban pinturas, lienzos, tablas, siluetas recortadas y pintadas,
tapices y reposteros para cubrir muros, engalanar fachadas o interiores de templos.
Casi siempre eran tomadas de colecciones particulares como cuando los duques
prestaban sus colecciones artísticas para las canonizaciones y fiestas del colegio
jesuita.
Precisamente lo que le daba una cierta coherencia es el empleo de emblemas,
alegorías y jeroglíficos que actualizaban el programa de imágenes y daban argumento
a la fiesta además de dar con los jeroglíficos una dimensión lúdica a la creación
plástica.
E. El torneo, entre las artes marciales y la competición deportiva
En una corte señorial donde el juego, las artes marciales y la caza estaban
entre las ocupaciones más importantes del grupo de pajes y de allegados al duque, es
seguro que en los días de fiesta hubiera exhibiciones, más o menos competitivas de
juego de pelota, de diversas modalidades de lucha y de preparación militar.
Evidentemente estas exhibiciones de tipo caballeresco serían más abundantes en la
Edad Media y se irían dulcificando o transformando en la Moderna.Todavía hay noticias
de torneo en los comienzos del siglo XVI7.
7 1518, Marzo, 6, Valladolid. Los bordadores Pedro de Cobarrubias y Bartolomé de Briones recibieron
4.500 mrs. «por un rosigante de terciopelo leonado, que se chapeó de oro de martillo para la fiesta de la
justa quando el rey nuestro señor justó». También recibieron, tres ducados, «por çiertas letras que
asentamos y bordamos en ciertos sayones de libreas que su señoría mandó dar a sus pajes». Texto
completo en Apéndice documental.
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F. La competición literaria o artística
Este tipo de competición marcial dejó de interesar poco a poco siendo frecuente
que se transforme en torneo de tipo literario o de enfrentamiento entre diversas formas
de ingenio. Igualmente estarían a la orden del día los concursos literarios siguiendo
los modelos que los jesuitas estaban proponiendo en su colegio.
G. El juego simbólico.
Ya desde la Edad Media se utilizaron elementos simbólicos. Emblemas, banderas,
cruces o estandartes según sea fiesta civil o religiosa. Más tarde el uso de jeroglíficos
se generalizó en los círculos humanistas y a partir del Barroco el jeroglífico se populariza,
la gente conoce los emblemas, no sólo relacionados con la nobleza sino la mayoría de
los atributos de santos y de símbolos dedicados a la virgen, a Cristo y a su Pasión.
Había analfabetos que sin embargo podían distinguir claramente los símbolos de la
letanía. Así pues combinar debidamente una serie de emblemas y símbolos era una
manera de enseñar deleitando a quien no sabe leer. O de divertir al intelectual que
puede acceder a un nivel superior de interpretación. No se construía ningún arco de
triunfo que no tuviera un buen conjunto de emblemas, ni se hacía un túmulo sin que
estuvieran presentes las armas o los signos del tiempo y de la muerte.
De esta cultura barroca tan popular y tan compleja han quedado ejemplos
admirables en las procesiones de nuestra Semana Santa, tanto en los emblemas de
los adornos (bordados, platería…) como materializados en objetos concretos como el
ajuar simbólico de la cofradía de Nuestro Padre Jesús de esta villa.
H. La relación.
Finalmente para conservar y mantener el sentido de la fiesta, explicar sus
detalles, sus objetivos e incluso resaltar o ensalzar a sus promotores era necesario
que quedara constancia escrita, que en muchos casos se ha perdido pero que puede
ser manuscrita como el conjunto de relaciones que van incluidas en la historia del
Colegio jesuita de Marchena8, o impresa como ocurre en un buen números de sermones
funerarios o de festividades relacionadas con algunos duques. Hoy esta cuestión la
solucionaríamos con un dvd que recoja la grabación de la fiesta y con una empresa de
comunicación que lo difunda.
8
Historia del origen y fundación del colegio de la Compañía de Jesús de la villa de Marchena. Serie de
sus rectores y sucesos acaecidos en él. AHPASI, Granada. Transcripción completa de J. L OZANO
NAVARRO, La Compañía de Jesús en el Estado de los Duques de Arcos: El colegio de Marchena (siglos
XVI-XVIII), Granada, 2002. Consultar el artículo de J. GARCÍA BERNAL, en este mismo tomo: «La estética
militante y la fiesta barroca: celebraciones jesuitas en Marchena».
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3. TIPOLOGÍA DE LAS FIESTAS DE PATROCINIO DUCAL
No vamos a referirnos a las fiestas propias del ayuntamiento9 o de otras
instituciones religiosas que tenían su sede en Marchena, hablaremos especialmente
de las que de alguna manera han dejado huella en la contaduría o en la documentación
ducal, o que siendo sufragadas por otras instituciones eran magnificadas por la
presencia de los duques, o de su representantes. Haremos una clasificación general
para comprender su función simbólica en el conjunto de las festividades.
I. Fiestas ducales extraordinarias:
A)
Las visitas reales
B)
Las entradas triunfales ducales
C)
Las tomas de posesión o la imposición de la orden del toisón
D)
Matrimonios y nacimientos
E)
Acciones de gracia
F)
Fundaciones, inauguraciones, consagraciones
G)
La muerte
II. Fiestas religiosas cíclicas:
H)
El corpus
I)
La Inmaculada
J)
El patrono
K)
San Agustín
L)
Carnaval
M) Semana Santa
III. Fiestas religiosas extraordinarias
I. Fiestas ducales extraordinarias:
A) Las visitas reales
Las visitas de los reyes debieron ser siempre motivo de alborozo y felicidad, la
presencia de los Reyes Católicos, o del emperador aunque sólo fuera por una noche,
debieron ser suficiente motivo para organizar una gran fiesta, pero tenemos pocos
datos directos. Quizás la visita más documentada sea la de Felipe V, de paso para
Granada desde Sevilla. Como la estancia fue de algo más de una semana dio tiempo
para organizar un gran acontecimiento ya que la enfermedad del rey requería
distracción. Permanecieron en Marchena desde el día 6 al 13 de Marzo de 173010. Lo
Han sido tratadas por otros historiadores en estas mismas actas. En algunos casos no tendremos más
remedio que comentarlas porque están estrechamente ligadas a las ceremonias señoriales.
10
Véase apéndice documental.
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conocemos a través de los gastos extraordinarios efectuados en azúcar, dulces,
chocolate y vino para regalar a los más importantes personajes del séquito como el
primer ministro, José Patiño, el embajador de Francia, el obispo de Segovia y marqués
de Fernán Núñez.
Probablemente se utilizaron para esta ocasión la carroza de gala que en su día
se habían traído los virreyes de Nápoles y se colgarían en los balcones del palacio
todos los reposteros y tapices de la casa, una de las colecciones más importantes de
Andalucía. El séquito era tan importante que el enorme palacio no fue suficiente y
hubo que habilitar el colegio de la Encarnación de Compañía de Jesús para poder
albergarlo11 . En esta ocasión el gran palacio remozado por Alonso Moreno se usó
para acoger a la corte, en realidad sería la última vez que el edificio se usó para los
fines por los que fue construido, a partir de ahora con los duques instalados en Madrid
y con la decadencia de la casa sobrevendría también el fin del edificio a fines del siglo
XIX.
B) Las entradas triunfales ducales
Las entradas ducales en la villa con motivo de la toma de posesión de un nuevo
duque o debido a una victoria en la guerra debieron ser espectaculares desde la Edad
Media como puede desprenderse de las biografías del marqués de Cádiz, cuando
entraba a la ciudad rodeado de cautivos. Debieron ser abundantes y espectaculares
el uso de banderas y blasones especiales. Tenemos un documento excepcional que
nos habla de estas banderas, hechas ex profeso con falsos caracteres moriscos.
Desde el punto de vista artístico nos interesan dos aspectos, las obras de arte de la
colección ducal usadas circunstancialmente en estas ocasiones y las creaciones
especialmente encargadas para estas ocasiones. Entre estas últimas especialmente
costosas y ricas eran las sillas de montar, porque eran el instrumento visible de
enaltecimiento y de ennoblecimiento. Al menos tenemos noticias de dos: una dorada
en madera y otra, probablemente, una de las sillas de montar más ricas creadas en el
renacimiento español.
Hay datos de un jaez de plata y grana realizado por Francisco Pérez, dorador
en 1541. Y algo después una impresionante silla de montar para la duquesa encargada
a uno de los mejores plateros del primer Renacimiento, Juan Ruiz el Vandalino12,
autor entre otras obras de la que ha sido objeto de un estudio específico. Estaba con
las fuerzas de Hércules, es decir, con los trabajos del héroe mitológico, siempre ejemplo
de esfuerzo y tesón para los príncipes cristianos.
Historia del origen..., 2002.
B. SANTAMARINA, «Platería civil andaluza: Juan Ruiz el Vandalino. Aproximación documental a su vida
y a su obra». En Academia. Boletín de la R.A.B.A de San Fernando, nº 75, Madrid, pp. 295-317.
11
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C) Las tomas de posesión o la imposición de la orden del toisón
Cuando un duque iniciaba su mandato se solía proceder a una ceremonia de
toma de posesión que habitualmente se realizaba en Santa María de la Mota. En el
interior se solía montar un alto estrado, una especie de escenario donde se procedía a
iniciar solemnemente el mandato ducal. Se usaba como instrumento ritual una magnífica
y valiosa sortija de diamantes que se imponía al duque. Una vez que concluía la
ceremonia se volvía a colocar en la imagen de la Inmaculada que custodiaban las
clarisas de la Concepción.
En la ocasión excepcional en que se impuso la orden del toisón de oro al III
duque, don Rodrigo, «el viejo», se volvió a usar este espacio ceremonial de Santa
María13 e igualmente se engalanó de forma extraordinaria. Evidentemente se trataba
de una ocasión única porque a esta orden, cuyo maestre era el Rey de España, sólo
pertenecía buena parte de los soberanos europeos y la flor y nata de la aristocracia
española.
D) Matrimonios y nacimientos
Evidentemente las bodas y los nacimientos eran ocasión especial para el regocijo
general, al igual que ocurría en España con los matrimonio y nacimientos regios en el
estado ducal se reproducían este tipo de fiestas a escala señorial. Del matrimonio que
tenemos más noticias, casi todas indirectas, es el de D. Luis Cristóbal Ponce de León
II Duque de Arcos con Dª María de Figueroa. En su momento analizamos la renovación
de la decoración del palacio que con motivo de esta solemne boda se hizo en el viejo
castillo. Todo el conjunto respiraba un profundo sentido humanista ya que precisamente
Don Lorenzo de Figueroa, tutor del Duque, había sido uno de los principales
introductores del Renacimiento en España. De esta forma toda la decoración nueva
se planteó, al gusto neoplatónico como una cárcel de amor en donde, el amor sacro y
el amor profano se complementaban. Lástima que todavía los últimos restos de esta
decoración única en Andalucía y las huellas de las yeserías que se llevó la condesa de
Lebrija, estén en peligro de perderse para siempre.
Estos elementos figurativos y simbólicos que fueron trasladados a las yeserías,
son propios de las decoraciones efímeras que se hacían con motivo de las bodas por
lo que no hay dificultad en imaginar cómo serían las decoraciones festivas para esta
boda. Arcos de triunfos engalanados con figuras de cupidos velados con su arco y su
carcaj, figuras contrastadas de amor sacro cabalgando sobre leones perfectamente
Un documento fechado en Marchena el 5 de diciembre de 1611 nos informa que el obrero mayor de
la casa, el arquitecto ducal, Francisco de Valderrama, «obrero de las obras de mi casa, recibe un pago de
7.682 mrs. gastados en el tablado y atajos que se hicieron en la Iglesia de Nra. Sra. de la Mota, para el
día que recibí el tusón». Se llevó 6 dias trabajando incluyendo el cambio de lugar del púlpito. A.H.N.
Nobleza, Sec. Osuna. Cartas L. 616 91. Documento completo en el apéndice documental.
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controlados y de amor profano cabalgando sobre caballos desbocados. Tondos
masculinos y femeninos de los grandes hombres y mujeres de la antigüedad en relación
con los tondos protagonistas de los contrayentes. Alusiones a Marte y a Venus,
paradigmas divinos de los propios Duques y alusiones a Hércules en la encrucijada,
imagen del hombre que lucha por tomar las decisiones adecuadas y conseguir con el
esfuerzo la gloria de la inmortalidad.
En este mismo contexto hay que encuadrar quizás la noticia documental más
importante relacionada con esta boda, el contrato y toda la documentación publicada
sobre una silla de montar de plata para la duquesa encargada en 1544 a uno de los
mejores plateros del renacimiento español, Juan Ruiz el Vandalino (1490-1550).
Aunque desgraciadamente no se conserva, por estos documentos sabemos
que estaba engalanada con hermosas decoraciones de grutescos al romano y con la
historia de los 12 trabajos de Hércules. De los mismos recibos y relaciones se concluye
que al platero se le encargaron muchas piezas para la casa, probablemente el nuevo
ajuar, y elementos para el adorno y el vestido personal. Para hacernos una idea de la
calidad de las piezas podemos todavía admirar sus custodias de la Catedral de Santo
Domingo en la República Dominicana, de Jaén, Fuenteovejuna, o el magnífico jarro
del museo Victoria and Albert de Londres, que, en este último ejemplo, nos permite
apreciar la prestancia de sus creaciones de corte civil. Coincidiendo con el aumento
de gastos en plata para la casa también se dispararon los gastos suntuarios
especialmente en lo que se refiere a las abotonaduras de oro, plata y brillantes.
Además de las fiestas organizadas por la propia casa había que referirse a las
fiestas sufragadas por el cabildo, para hacer participar al pueblo llano del regocijo
general. En este sentido es muy interesante la noticia de que en fecha tan crucial
para toda la región y la localidad como 1649, todavía no se había iniciado el templo
definitivo de San Agustín, aunque con motivo de una boda ducal, concretamente del
marqués de Zahara y Doña Victoria de Toledo y de la proclamación de San Agustín
como patrono, se plantea la conveniencia de emplear los tradicionales gastos del
«regocijo» de la villa, (las fiestas en honor de los recién casados) en la obra de la
iglesia aún no iniciada14.
Una vez celebrado el citado casamiento el 3 de septiembre de 1653 el duque ordenaba
lo siguiente: «e resuelto que lo que abía de gastar en demostraciones de rregosijo
Estos datos extraídos de las actas capitulares me han sido facilitados por Juan Antonio Arenillas al
que agradezco su amable aportación. A. M. M., Actas Capitulares 1649, Mayo 18. En este caso como
en la nota siguiente se deben referir ya a un nuevo templo monumental que se ha de construir ligado a
la voluntad de la casa ducal.
14
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se combierta en limosna para obra tan meritoria y de piedad como la fábrica de
la Yglecia del Conbento de San Agustín desta mi villa que está comenzada» 22
de agosto de 165315.
Evidentemente los nacimientos debieron de producir fiestas y ceremonias
religiosas de acción de gracias del mismo tipo que las bodas pero tenemos menos
datos.
E) Acciones de gracia
En una sociedad tan sacralizada y ritualizada como la barroca, las acciones de
gracia y los ex votos estaban a la orden del día. Hay algunas noticias sueltas que nos
pueden dar idea de que cada victoria, o cada liberación, incluso las curaciones de
enfermedad podían ser motivo de festejo. Hay indicios de que algunas fundaciones
se hicieron como ex votos por haber alcanzado alguna gracia. En la carta de fundación
del convento de la Concepción se detalla que fue fundada entre otras cosas más
sagradas para conseguir la continuidad dinástica de la casa, e incluso se hace constar
que en el momento de la firma del documento, esa gracia ya había sido conseguida,
porque la marquesa de Zahara ya estaba encinta.
Igualmente es clara la relación de la fundación del convento de Capuchinos en
1651 en Marchena, en contra de la opinión del cabildo, para agradecimiento a Dios y
a los capuchinos el haber salvado a los Duques en dos ocasiones, una grave enfermedad
en Valencia y de haberlo devuelto a Marchena con vida tras la revuelta de Masianello
en Nápoles. En ambas ocasiones los capuchinos ayudaron al duque y el traerlos a
Marchena era una forma de agradecimiento y de justicia.
F) Fundaciones, inauguraciones, consagraciones
Aunque todas las consagraciones de nuevos templos o tomas de posesión por
parte de las órdenes, reunían a toda la población, al clero secular y regular y a lo más
nutrido de la población en torno a la procesión que se iniciaba habitualmente desde
San Juan o desde el templo provisional que tuviese la nueva fundación, y consistían
fundamental en una procesión eucarística que permitía introducir la eucaristía por
primera vez en el templo de forma solemne. El rito de la consagración era más complejo
y seguía las normas litúrgicas establecidas. Daremos noticias de las más detalladas
en la documentación que no tienen por qué coincidir con las que fueron más
espectaculares o festivas.
Por ejemplo, en 1565 los jesuitas toman posesión de la casa provisional, en
1567 se inaugura ya el colegio, el claustro, la iglesia de prestado y el templo nuevo,
todavía inconcluso pero que estaba ya bastante elevado. La inauguración se hace
con toda solemnidad, presidiendo el obispo de Michoacán, oriundo de Osuna, asisten
15
A.M.M. Actas Capitulares, libro 8. 22 de Agosto de 1653.
58
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
el Duque viudo Don Luis Cristóbal y su hijo Don Rodrigo. En 1584 se trasladan a la
iglesia de la Encarnación los restos de Doña María de Toledo, la fundadora, por lo
que se puede dar por concluido el edificio16. De la consagración que más información
tenemos es de la del convento de los ángeles custodios de los padres capuchinos en
1651 que por su interés reproducimos parcialmente en el apéndice documental.
G) La muerte
La muerte ponía el contrapunto de muchas de las celebraciones que se producían
al cabo del año, pero no por ello su ritualización era menos compleja y su pompa
menor, al contrario, en la sociedad barroca la muerte se entendía como motivo de
reflexión diaria y su celebración permitía recordar lo inevitable y lo imprevisible de su
fatal presencia.
Los funerales eran también instrumentos de reflexión sobre las virtudes de los
poderes y de las instituciones básicas de la sociedad, era el momento de poner de
ejemplo a los reyes, duques, prelados y a otros personajes significativos. La muerte
real era especialmente celebrada en todas las ciudades del país, y en los señoríos se
tenía especial cuidado en recordar las estrechas relaciones de la monarquía con los
señores, al fin y al cabo sus representantes. Los funerales reales principales se
celebraban en San Juan, con asistencia de los Duques, si estaban en la villa, y eran
bastante espectaculares utilizando el monumento de Semana Santa como base, sobre
el que se disponían adornos funerarios, emblemas o jeroglíficos. Como ejemplo del
tipo de acto y especialmente de sermón es bastante significativo el que se producen
en 1621 tras la muerte de Felipe III17.
La muerte de los duques conformaba un tipo de ceremonial muy complejo y
reglamentado que sólo cambiaba dependiendo del lugar, la villa o la ciudad elegidos
para enterramiento. Los funerales oficiales de la casa se hacían habitualmente en
San Pedro, por ejemplo el de la marquesa de Priego en 156818 . De la importancia que
se le daba a este tipo de ceremonias nos puede dar una idea el hecho de que se
conservan muchas más relaciones de funerales que de otro tipo de fiestas. Hay
16
Historia del origen...2002.
Sermón/Predicado en las/ Honras, que en la villa de Mar/chena se hizieron, por el ínclito, y Chatolicisimo
Rey,/Don Philipe tercero nuestro Señor que está en el Cielo, por el Cabildo de la dicha Villa, con
asistencia.Del Excelentísimo Señor de ella, Duque de Arcos, por el muy Reverendo P.M.F. Augustín de
Garica, Pior del convento de San Pedro Martir de de Marchena, en 21 de Abril deste presente año de
1621. /Dedicado al al Excelentísimo, Señor, Don Rodrigo Ponce de León, Duque de Arcos, Marqués de
Zahara, Conde de Casares, Señor de Marchena y Mayrena y de la casa de Villagarcía de la insigne orden
del Tuzón de Oro.Con Licencia / Impresso en Marchena por Luys Estupiñán año de 1621.
18
Cartas 550-1.
17
59
Juan Luis Ravé Prieto
sermones funerarios de duques, duquesas, de Marqueses de Zahara e incluso de
algunos familiares cercanos.
El elemento central de la ceremonia de la muerte era siempre el funeral, aunque
también podían ser importantes los traslados de los cadáveres e incluso, la enfermedad,
muerte y los preparativos del entierro19. El funeral obligaba a transformar el templo
donde se celebraba a base de colgaduras, y el centro de la ceremonia giraba en torno
al túmulo que representaba al cuerpo del difunto. Pero veamos algunos ejemplos:
El objetivo del sermón no es sólo congregar a la comunidad para rezar por el
alma difunta, sino que también pretende recordar su gloria y fama mundana, sirviendo
de ejemplo a los súbditos,
Y para que dure la gloria y fama de mi Señora excelentísima, digna emulación de las
mayores, y ejemplar de las grandes, he querido solícito, que en el filial achivo de el
corazón de V. Excelencia tenga competente depósito; mientras corre por el universo
en otros ejemplares, para ejemplo, y edificación de los corazones magnánimos.
En cuanto a los elementos formales que entran en el discurso o a la forma
literaria del sermón, están presentes la retórica, oratoria, erudición sacra y profana,
incluso elementos dramáticos, teatro, tal como los describe perfectamente el censor
del funeral de doña Ana Spínola de la Cerda.
hallamos un sermón con todo aquel retórico artificio, que pide la Oratoria, abundante
ya en erudición sagrada, ya en prophana, predicado en un Teatro muy serio, en el
asumpto de el mayor respecto por los capuchinos…
Casi todos los oradores se quejan de que no han tendio tiempo para hacer una
pieza literaria digna de tan altos señores, y efectivamente el sermón ha tenido que ser
redactado con prisas, pero no olvidemos que muchos de los autores repiten sus ripios
y es que eran verdaderos maestros en fabricar estas piezas literarias cargadas de
citas bíblicas y eruditas llamadas a la antigüedad:
Y con la circunstancia de no haver correspondido el tiempo limitado de ocho días a tan
inmenso trabajo»,
Atribuido a M. HURTADO, Breve noticia de la enfermedad, muerte y entierro de Duquesa de Aveiro y
Maqueda, mi señora. Doña María de Guadalupe Lancaster y Cárdenas, viuda del Excmo. Señor Don
Manuel Ponce de León, Duque de Arcos y madre de Doña Isabel Ponce de León, Duquesa viuda de
Alba, Madrid 1715.
19
60
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
El orador procura, para que el efecto del sermón sea más plástico y total, que
haya coherencia formal y simbólica entre el túmulo, la arquitectura efímera, y el
contenido ideológico y descriptivo del sermón. Así el túmulo de doña Ana Spínola de
la Cerda estaba culminado por una esfera rematada con una enorme Águila20 . Se
justifica la presencia de este animal simbólico por la vinculación de su bisabuelo
Ambrosio de Spinola (el personaje principal del cuadro de las Lanzas de Velázquez)
con la casa real de los Austrias y al mismo tiempo se inicia el sermón con una cita de
Alciato, el emblema 33, que tiene como protagonista al águila situado sobre una especie
de catafalco.
Insideant timi timidorum busta columba
Nos aquilae intrepidis signa benigna domun
Y para darle la versión cristiana hace la cita bíblica complementaria del libro
de Job (Job 39/17).
In arduis ponit nidum suum.
Prácticamente sobre estas dos ideas, una extraída de la emblemática y otra de
la Biblia, gira todo el sermón. Se procura que la pieza literaria del sermón se justifique,
aquilate y homologue para ser digna de ser publicada con erudición profana y antigua.
Pero la justificación moral se hace con las numerosas limosnas que se repartían con
motivo de los fallecimientos ducales:
En beneficio de pobres sacerdotes reparte hoy la villa de Marchena por vía de sufragio
las limosnas, que les corresponden porque sirvan de alivio al alma de nuestra
excelentísima difunta, que con oraciones de todos, vuela más veloz al descanso, que
solicitamos.
En el afán de enaltecer al fallecido se hacen verdaderos malabarismos de
oratoria y forzados ejercicios retóricos que relacionan el linaje con la Biblia. Así se
llega a : Vinculación de Spinola, Espinosa, con la zarza donde se mostró Dios a Moisés.
Fray C. DEL PUERTO DE SANTA MARÍA, Gloriosa memoria y fúnebre oración panegyrica que en la
sensible muerte y lamentable pérdida de la Excma Sra. Doña Ana Espínola y la Cerda, Duquesa Madre
de Arcos, consagró su ilustre villa de Marchena a expensas de sus capitulares, como fieles vasallos en
la Iglesia parroquial de san Juan Bautista, dia 3 de Junio de 1745, fue el orador, el M.R.P.: Fray Carlos
del Puerto de Santa María Sevilla Juan de Bassons, frente a San Pablo, 1745.
21
Oración fúnebre en las exequias que al excelentísimo señor Don Manuel Ponce de León, Duque de
Arcos, consagró la excelentísima señora doña Isabel Ponce de León, Duquesa de Alva, su hija. En el
convento del gran doctor de la Iglesia, el señor san Agustín de la Villa de Marchena, el Sábado 9 de
Noviembre deste año de 1715. Díxola el M.R.P.—— lector habitual de Teología, dos veces definidor
desta provincia de Capuchinos de la Inmaculada concepción de Nuestra Señora en los Reynos de
Andalucía y predicador de su Majestad. Con Licencia: En Sevilla por los herederos de Tomás López de
20
61
Juan Luis Ravé Prieto
El exorno floral debía ser muy importante en los funerales de las duquesas porque se
alude a él, en el sermón, como aportación de toda la comunidad e imagen de sus
virtudes y de las oraciones y sufragios ofrecidos por la comunidad.
Muy interesante resulta contrastar las relaciones de Don Manuel Ponce de
León y de su esposa la duquesa de Aveiro21 porque revelan las contradicciones de
unos predicadores dispuestos a toda costa a defender la fama y la honra del fallecido
por encima de cualquier otro objetivo. Es interesante en el caso de doña María
Guadalupe la descripción del túmulo:
Este negro obelisco, atezado Etna con llamas, donde las luzes hazen mas densas las
sombras.
Los temas centrales del sermón vuelven a ser los mismos: está sacado del libro
de Job y del epitafio de la duquesa en Guadalupe:
Yo moriré en mi nido, y como fénix multiplicaré mis días.
Tambien hay citas a los escritos de la propia duquesa:
Se ha de tener una fe, por quién muera; una esperanza con que muera y una caridad
de que muera». Si en el caso de Ana Spinola la figura emblemática era el Aguila en
el caso de la duquesa de Aveiro la imagen de su vida fue el Ave fénix.
II. Fiestas anuales
Gracias a un sencillo documento que pretendía esquematizar los gastos fijos de
la casa ducal en las diferentes fiestas religiosas de todo el estado conocemos las
fiestas promovidas por la casa en Marchena, dado su interés lo reproducimos completo
en el apéndice documental.
H) El corpus
El corpus constituía la fiesta mayor por excelencia de la villa. En otro momento
hemos publicado los esfuerzos del cabildo por adecentar la villa para la ocasión:
Haro, en la calle Génova. Fray F. J. DE UBRIQUE , ORACIÓN/FUNEBRE/EN LAS EXEQUIAS/QUE
L A LA EXCELENTISSIMA SEÑOR/A Doña María de Guadalupe Alencastre y Cárdenas, Duquesa de
Aveiro, y/Maqueda, Consagró / el excelentísimo Señor / Don Joachin Ponce de León, Duque de Arcos,
su amante hijo, en su convento/ de reverendos Padres Capuchinos/ de su villa de Marchena, Lunes / día
10 de Febrero deste año de 1716./ Dixola el M.R.P. Fr. Fíes José de Ubrique, Lunes 10 de Febrero deste
año de 1716. Díxola el R.P. Sevilla, Herederos de Tomás López de Haro.
62
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
... Juan Huclés fiel esecutor de esta villa hizo relación e dixo que ya sus mercedes
saben que en la fiesta del Corpus Xti. suelen sacar e sacan carretas y porque el
empedrado no reciba dagno, no ha sacado a almoneda los juegos hasta que sus
mercedes lo sepan, que lo manden ver y proveer...
...Sus mercedes mandaron e acordaron que las que menos pudieren salir e escusarse
se escusen por el dagno que lo empedrado podría rescibir.
La pavimentación se hizo extensiva a la mayoría de las calles y sería posible el
estudio detallado de esta obra a través de los registros de las actas capitulares. Por
ejemplo, es bastante detallada la obra de la plaza de la fuente. También, dado el
interés general de la fiesta, tenemos noticias de que los duques aportan una cantidad
fija al año.
I) La Inmaculada
En Marchena la fiesta, e incluso la octava de la Inmaculada, se celebraba
desde tiempo inmemorial. Siguió la misma evolución histórica y un proceso de fijación
semejante al de la propia definición teológica del dogma. Probablemente esta inclinación
concepcionista se pueda relacionar con el origen de la historia misma del señorío de
los Ponces, vinculados por la sangre con la casa real de Aragón, donde la fiesta de la
Inmaculada tenía precedentes medievales. La mención a la fiesta aparece ya en el
Testamento de Pedro Ponce de León, I Conde de Arcos (1448) y en el de Juan
Ponce de León, II Conde de Arcos (1469). Ya en 1525 podemos confirmar la
costumbre, ya entonces inmemorial, de decir una misa a la Inmaculada todos los
miércoles sufragada por la casa ducal.22 En el testamento de Rodrigo Ponce de León,
Marqués de Cádiz, se puede comprobar que la fiesta se ha generalizado en todas las
villas y lugares de su Estado al igual que las donaciones ducales para que se extienda
la devoción en todas los templos de su Estado dedicados a la Virgen o en los principales
de cada una de sus villas. La duquesa Isabel Pacheco establece también una misa
mensual dedicada a la Concepción. Y en el testamento del primer Duque de Arcos
(1530) se menciona un voto para fundar un convento de monjas del hábito de la
Concepción que luego no se llegará a establecer y será conmutado por la fundación
del convento de San Pedro Mártir. En 1547 el duque ordena que se pueda gastar en
las fiestas una determinada cantidad: «que se gaste en la fiesta hasta en cantidad de
mill mrs. Que se suelen gastar en cada un año en la fiesta que se hace en esta villa de
Nª Sª de la Concepción que es de a ocho de Diciembre de cada un año».23 Más tarde,
cuando la esposa del segundo Duque realice la fundación del colegio de la Encarnación
de la Compañía de Jesús de Marchena, la casa apoyará, si no es también inductora,
22
23
A. H. N. Nobleza. Sec. Osuna L. 171-nº2.
A. H. N. Nobleza. Sec. Osuna L 1613-2-6
63
Juan Luis Ravé Prieto
el programa concepcionista del templo de la Encarnación, hoy Santa Isabel, cuya
síntesis se exhibe hoy perfectamente remozada y recuperada en el magnífico retablo.
Como ya había intuido el profesor Jonathan Brown el retablo está plagado de claras
alusiones concepcionistas. Tanto en la figura de la Sagrada Parentela como en la
propia «Encarnación», singularísima representación que culmina dicho retablo.
San Joaquín y Santa Ana contemplando estáticamente a la Virgen con el Niño,
entronizada en el cielo, es un tema que deriva de la tradicional alegoría de la
Inmaculada, basada en textos apócrifos -la escena de los lirios-, sólo que el pincel
innovador y naturalista de Roelas ha suprimido los elementos heterodoxos y ha
potenciado la representación de los afectos con la graciosa actitud del Niño y de la
Virgen, convirtiendo la esquemática composición ancestral en una novedosa
representación del tema de la genealogía cercana de Jesús, donde se aúnan la visión
mística y la relación afectiva de los personajes.
La Anunciación, obra igualmente de Roelas, titular del retablo y del colegio,
es también una pieza clave que ha sido recuperada recientemente al eliminarse el
repinte que ocultaba el anagrama de la Compañía y la figura del Niño Jesús.
Iconográficamente constituía una absoluta y atrevida novedad al ligar la tradicional
representación de la Encarnación presidida por la Trinidad, con la Inmaculada
Concepción y con la acción de la Compañía como colaboradora en la Salvación, cuyo
anagrama sirve de trono a la figura del Niño, constituyendo el emblema del Dulce
Nombre de Jesús. El conjunto viene a ser un resumen del ideario jesuítico en los
comienzos de siglo, donde se pone de manifiesto su apuesta por la pía opinión
inmaculista, que coincide con la propia voluntad ducal que muy pronto promoverá y
presidirá el juramento de toda la villa, junto a dos de los principios básicos de la orden,
la obediencia (San José y San Luis) y el martirio como consecuencia lógica de la
acción apostólica (San Juan y San Rodrigo).
Evidentemente la fiesta de consagración del retablo en 1610, aunque dedicada
a San Ignacio, estuvo también salpicada de alusiones a este misterio tan apreciado
por los jesuitas. Probablemente la fiesta más trascendental relacionada con la
Inmaculada será el Juramento del clero y del cabildo, presididos por el Duque, que se
realizó el 4 de septiembre de 1616 en Marchena. El juramento fue realizado por el
duque y todo el pueblo, con posterioridad hubo procesión y fiesta de toros. Esta fiesta
está enmarcada dentro del conjunto de manifestaciones a favor de la Concepción
Inmaculada que se desarrollan en toda la provincia y que tienen como origen las
disputas teológicas entre franciscanos y dominicos y de alguna forma, provocadas
por las profundas convicciones contrarreformistas del arzobispo sevillano Don Pedro
de Castro. En este contexto hay que encuadrar todas las acciones, fiestas, sermones
que se promueven desde las diversas fundaciones ducales, especialmente desde los
64
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
conventos franciscanos y los colegios jesuíticos. De estos últimos debió ser muy
importante el que se pronunció precisamente en el colegio de la Encarnación en
161824, del que conservamos la relación impresa que reproduce el contenido completo
del sermón. Nos interesa como ejemplo de influencia mutua entre las diferentes
especialidades artísticas y literarias y su interrelación. En el sermón se describe con
todo lujo de detalles, como si se estuviese viendo, un trono, referido a la propia Virgen
como trono de Dios, en el que en realidad se detalla un monumento efímero, propio de
las fiestas barrocas o un retablo barroco, lo cual nos permite apreciar hasta qué punto
los espectadores necesitaban en los sermones materializar, y hacer casi visibles, las
verdades de la fe. Y por otro lado nos permite explicar la significación religiosa y
eminentemente teológica de los excesos decorativos que exornan los retablos de la
época.
En 1653 también se anota una serie de gastos efectuados por la casa en la
defensa de la Inmaculada25.
Otro hito en la consolidación de la fiesta de la Inmaculada fue la fundación del
convento de la Concepción en 1623. Pero la identificación de la fiesta con una imagen
se hará a partir de la fundación de una capellanía por parte de Francisco Ponce de
León en 1673 y el encargo de una escultura que plasmase esta devoción a Pedro de
Mena y Medrano26. La escultura estaría dotada de un mecanismo que le permitía
girar completamente alrededor de su eje para uso eminentemente festivo y litúrgico.
Las vicisitudes de este encargo y de esta imagen hicieron que no llegara a Marchena
hasta mucho después de la defunción del artista (1688) y de su conclusión por Miguel
de Zayas (1692). La capilla estaba situada en la nave del evangelio de Santa María y
se le construyó un retablo encargado a Tomás Guisado que aún se conserva en San
Juan.
J) El patrono
La fiesta del patrono era sobre todo una fiesta capitular pero sabemos que
también la casa ducal aportaba una cantidad para su celebración.
Sermón/ predicado(/ por el padre/Dionisio Guillén, de/ la Compañía de Iesus, en/ su collegio de
Marchena. En fiesta que hizo a la Purí/sima Concepción de la Virgen María Madre de Dios, y/ Señora
Nuestra, el Excelentísimo Señor Don Rodrigo Ponce de León, Duque de Arcos, Marqués de Zahara, etc,
Cavallero del Rosón de Oro, a quién/ se dedica. Año 1618//Impreso en Sevilla, por Gabriel Ramos
Vejarano, en la calle Génova
25
A. H. N. Nobleza. Sec. Osuna L 127 nº11.
26
J. L. R AVÉ PRIETO , «Notas sobre una obra póstuma de Pedro de Mena». Pedro de Mena y su época.
Málaga 1990, pp. 455-463.
24
65
Juan Luis Ravé Prieto
K) San Agustín
Precisamente el comportamiento heroico de la comunidad con motivo de la
peste de 1649 hizo que el cabildo nombrara a San Agustín copatrono de la villa por lo
que muy pronto la devoción se amplía junto a San Miguel y a San Sebastián27 .
L) Carnaval
Está documentada la contratación de compañías de teatro de Sevilla para los
carnavales, pero no cabe duda de que esto sólo sería una mínima parte de la fiesta.28
M) Semana Santa
Aunque la Semana Santa en Marchena ha tenido siempre vida propia, podemos
rastrear algunos detalles de la vinculación con la casa ducal. La máxima expresión
festiva de Marchena es el Mandato y originariamente se hacía desde los balcones del
palacio, en una identificación del palacio con el Pretorio que exorcizaba cualquier
veleidad revolucionaria, o que al menos encauzaba las iras del pueblo contra el poder
establecido. Otro tema fundamental, la devoción a la Soledad, una devoción importada
de Francia por la propia reina Isabel de Valois en tiempos de Felipe II, fue plasmado
en escultura por primera vez por Gaspar Becerra en la imagen de los Mínimos de
Madrid, que curiosamente fue vestida por primer vez por la Duquesa de Arcos. Con
la primitiva vestimenta impuesta por la duquesa de Arcos puede verse aún en el ático
del retablo de Jesús Cansado, en San Juan. No es de extrañar por tanto que en su
villa se reprodujera muy pronto la misma devoción y se apoyara desde la casa su
consolidación, aparte de las relaciones protocolarias que por estar radicada en la
capilla palatina tuvo siempre.
III. Fiestas religiosas extraordinarias. El traslado o la vinculación de reliquias
al patronato de la casa.
No cabe duda de que la aproximación a las fuentes de la religiosidad es un
ejercicio muy practicado por la aristocracia del Barroco, ahí está el ejemplo del Conde
Duque y su familia con las numerosas aportaciones de reliquias a la colegiata de
Olivares y San Isidoro del Campo. Vincular focos de religiosidad a las fundaciones
ducales era una manera de conseguir a un tiempo la protección sagrada y el fervor y
el aplauso popular en el contexto de la mentalidad barroca y contrarreformista. Con
respecto a la casa ducal de Arcos hay un traslado paradigmático en este sentido, el
del cuerpo de la Venerable de la Antigua hasta el palacio ducal de Marchena29 . La
J. GUERRERO DEA HUMADA, Descripción histórica de la Villa de Marchena. Respuestas al Geógrafo de
Su Majestad, D. Tomás López. Biblioteca Nacional, Madrid. Sec. Manuscritos n. 20.263. T. LÓPEZ,
Diccionario Geográfico de Andalucía: Sevilla. edición de C. S EGURA GRAÍÑO , Granada, 1989, p. 111.
28
1542, Febrero 22, Marchena A. H. N. Nobleza. Sec. Osuna L. 1606 -4
29
M. T. RUÍZ BARRERA, «La Venerable Madre María de la Antigua. Notas para su Iconografía», VI Curso
de Verano San Francisco en la Historia, Arte y Cultura Española e Iberoamericana, Córdoba, 2000,
27
66
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
biografía de la Venerable madre de la Antigua (Cazalla de la Sierra 1566/ Lora del
Río 1617) ha sido ampliamente estudiada, lo mismo que la influencia de sus escritos.
Pero es necesario comentar alguno de estos datos, habiendo ingresado en el convento
franciscano de Santa Clara de Marchena, como donada, es decir en la categoría
inferior que una mujer podía adscribirse a un monasterio del Antiguo Régimen y que
en la práctica era una especie de sirvienta de las monjas. En 1617 decide abandonar
el convento Santa Clara e ingresar en la nueva fundación de las mercedarias descalzas
de Lora del Río. Poco tiempo después y antes de morir en el convento loreño fue
interrogada si deseaba ingresar en la por entonces nueva orden de la Merced y,
entonces, ya sin habla asintió con la cabeza. A partir de su fallecimiento el cuerpo y la
memoria, su caudal espiritual, fue disputado, podíamos decir sin equivocarnos mucho,
con uñas y dientes por las dos órdenes implicadas y por sus próceres. En 1623 el
cuerpo fue trasladado al nuevo convento descalzo de Lora y es el momento en que se
descubre la buena conservación del cadáver y se desata la lucha por la posesión de
los venerables restos. Los franciscanos irrumpen en la clausura y ponen el sello
franciscano sobre el cadáver, a consecuencia de lo cual los mercedarios deciden
trasladar el cuerpo a Sevilla al convento de San José. Mientras se inician dos procesos
de beatificación distintos, uno por parte de cada orden, con lo que eso suponía de
dispersión de esfuerzos y de mala imagen. Los franciscanos, siguiendo la tradicional
vinculación a la casa ducal, piden la mediación al Duque y finalmente el cuerpo es
encomendado al propio duque para que sea venerado en su propio oratorio privado.
Tradicionalmente se ha dicho que a cambio de esta concesión, algo anómala por otra
parte, prometió fundar un convento para mercedarias descalzas en Marchena y dos
conventos masculinos en Arcos y Bailén. Al final los duques sólo cumplieron parte de
su promesa, en lo que se refiere a la fundación de Marchena, porque los otros dos
conventos no llegaron a feliz término. Este episodio nos da para reflexionar sobre los
verdaderos intereses que se escondían tras el culto a las reliquias y la manipulación e
incluso el mercadeo que sobre ellas se escondía a veces.
El solemne traslado de la venerable tuvo lugar entre los días 28 y 30 de
Diciembre de 1636, venía acompañado de los principales jerarcas de la orden
mercedaria descalza, el provincial Alonso de la Concepción, Fray Melchor de los
Reyes, definidor y secretario de la provincia, el padre Fray Juan de San Ramón,
comendador de Sevilla y el Padre Fray Francisco de San Luis, comendador del Viso
del Alcor.
pp. 159-177. Sermón panegírico que en alabanza del glorioso y máximo Doctor Sr. S. Jerónimo dixo el
R.P. ex lector de Sagrada Teología y actual guardián del convento de Santa Eulalia, Franciscanos recoletos,
extra de la villa de Marchena, en el día 30 de Septiembre de 1795, en la iglesia titular de dicho Santo.
Sevilla hijos de Hidalgo y González de Bonilla. Sevilla.
67
Juan Luis Ravé Prieto
El cortejo salió de Sevilla en un cofre ricamente guarnecido forrado interiormente
de lamé de plata blanca y al exterior de damasco carmesí con galón de oro y clavos
dorados con el escudo y armas de la Merced. En Gandul fue recibido por toda la
población presidida por sus próceres. A la llegada a Marchena se organizó una gran
fiesta, salieron los duques a recibirla, hubo gran despliegue de pirotecnia, desfiles y
procesiones.Al final los venerables restos fueron depositados en la tribuna del duque
en Santa María.
Triste final para una mujer que en su pretensión de ser fiel a su libertad y a sus
indudables principios religiosos quiso salirse de la tutela ducal.
De todas formas, cualquier ocasión era buena para hacer una gran fiesta y dar
un adornado sermón, por ejemplo el que se dio en el convento de Santa Olalla en
honor de San Jerónimo en 179530.
IV. CONCLUSIONES
Las fiestas son uno de los exponentes más elaborados de la cultura de la Edad
Moderna. Especialmente compleja es la fiesta barroca en donde intervienen todas las
artes, Literatura, Música, Bellas Artes, Teatro, incluso hay elementos residuales de
las fiestas medievales como el torneo y sobre todo muchos elementos de la tradición
humanista.
Es una manifestación cultural dirigida por las elites. Desde el punto de vista
ideológico vienen a confirmar los poderes establecidos. Suelen poner en relación los
pilares de la sociedad -Monarquía, Nobleza e Iglesia-, en un afán de mantener los
presupuestos de la Contrarreforma y del Antiguo Régimen. A pesar de ser una cultura
dirigida, el pueblo la asume como propia. Su especial incidencia en esta ciudad ha
influido probablemente en la manera de entender las fiestas en la villa, hemos asumido
los mismos espacios simbólicos, los escenarios de la fiesta y los mismos itinerarios,
los mismos recorridos, verdaderos ejercicios de cohesión entre el pasado y el presente.
30
Fray F. GARCÍA, Sermón panegírico que en alabanza del gloriosos y máximo Doctor Sr. S. Jerónimo
dixo el R.P. ex lector de Sagrada Teología y actual guardián del convento de Santa Eulalia, Franciscanos
recoletos, extra de la villa de Marchena, en el día 30 de Septiembre de 1795, en la iglesia titular de dicho
Santo. Sevilla, hijos de Hidalgo y Gonzalez de Bonilla.
68
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
V. APÉNDICE DOCUMENTAL
1493, Octubre, 12, Marchena
Alonso de Fuentes mi criado e camarero yo vos mando que de los mrs. de
vros. cargos deste año de la fecha deste dedes a Alonso Sánchez pintor vesino desta
villa mil e doscientos mrs. que le mando dar porque por mi mandado pintó un pendón
de damasco blanco con letras de oro moriscas en el qual trabajó diez dias, a setenta
mrs. cada día, e metió mil dozientos e treinta panes de oro, a tres mrs. E dádselos
luego e tomad su carta de pago e con esta e con ella mando que vos sea reçibidos en
cuenta los dichos mrs. Fecha en Marchena doze de Setiembre de noventa e tres
años.
Duque y Luis Ponce
Recibí los mill y quinientos maravedís desta parte contenidos, por ser berdad lo
firmé con mi nombre
Alonso Sánchez de Castro
<A.H.N. Sec. Osuna.Cartas 550 16>
1518, Marzo, 6, Valladolid
/carta de pago resumen de los bordadores Pedro de Cobarrubias y Bartolomé de
Briones/
Conoscemos, yo Pedro de Cobarrubias y Bartolomé de Briones, bordadores,
estantes en esta corte de su alteza, que reçibimos de vos Hernand Ramires, Thesorero
del Duque de Arcos, diez y ocho mill mrs., los quales vos me diste por mandado de su
Señoría en esta villa de Valladolid, en las partidas y en la manera que aquí diz en esta
guisa:
(...)
Que rescibimos más, en cinco días del més de hebrero deste año de quinientos
e diez e ocho años, quatro mill e quinientos mrs., los quales vos me disteis por la rason
de un rosigante de terciopelo leonado, que se chapeó de oro de martillo para la fiesta
de la justa quando el rey nuestro señor justó.
Que recibimos más, en seis días del mes de Março deste año de quinientos e
diez e ocho años, tres ducados, los quales nos distes por çiertas letras que asentamos
y bordamos en ciertos sayones de libreas que su señoría mandó dar a sus pajes.
Así son cumplidos los dichos diez e ocho mill mrs. que vos el dicho Thesorero
nos disteis e pagasteis en las partidas y de la manera que de suso se contiene, de los
69
Juan Luis Ravé Prieto
quales, nos damos por contentos e pagados a toda nuestra voluntad y porque es
verdad que los resçibimos, los dichos diez mill mrs., firmamos de nuestros nombres.
Fecho en la Villa de Vallid a seis días del mes de Março de 1518 años
Bartolomé de Briones. Pedro de Cobarrubias
<A.H.N. Sec. Osuna. Cartas. L.513 7>
1539, Noviembre, 25, Marchena
- digo yo, Francisco de Villavicençio, maiordomo maior del duque, mi Señor
que igualé y conçerté con Rodrigo de Çárate, organista vezino de Xerez, que se le
diesen por su trabajo de los días que se a ocupado en esta villa de marchena, en este
més de Noviembre de la fecha en adobar los órganos y el instrumento real de la
capilla del duque mi señor y por çiertos cañones que hizo de nuebo para ellos que
faltaban en los dicchos órganos y ynstrumento, y por otros que adobó y otras pieças
de teclas y otras cosas que hizo, nueve ducados de oro que montan tres mill e
trezientos e setenta e çinco mrs., con los quales el a de ser pagado, de todo lo que por
lo susodicho ovo de aver e huvo sin deversele ninguna cosa y porque es verdad que
ygualé y conçerté con el susodicho, di esta firmada de mi mano. Fecha en Marchena
a 28 de Noviembre de quinientos e treynta e nueve años.
Francisco de Villaviçencio
<A.H.N. Sec. Osuna. Cartas. L. 616 113>
1542, Febrero 22, Marchena
farça
A Johan de Aguilera, farsante vecino de Sevilla, carta del gobernador, el conde
de castellar, fecha en Marchena a 22 de Febrero de 1652 años doze ducados que son
quatro mil quinientos mrs que el dicho señor gobernador le mandó dar a él y a los
otros su compañeros porque vinieron a Marchena a reciptar al duque mi señor una
farça que representaron en presencia de su señoría ayer martes en la noche día de
carnestolendas.
<L. 16006 -4>
70
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
1543, Marzo, 1, Marchena
Antón Ximenez carpintero con el acatamiento que devo, suplico a V.M. mande
que se me pague çinco dozenas y siete tablas por que tengo mucha neçesidad el
dinero porque no me mantengo yo y mi casa sino de mi trabaxo y en ello me ará V. M.
muy gran merced, cuya vida y Estado, nuestro Señor, por muy largos tiempos acreciente
en su santo serviçio (...)
(...) Deis a Antón Ximenez carpintero vezino desta villa de Marchena cinquenta
reales que montan mil e setecientos mrs. que se le deven de ciertas tablas que dió
para hazer un tablado en el mes de henero pasado donde por mi mandado se recibtó
una comedia que hizo Aguilera y paresce que bendidas las tablas que quedaron despues
de deshecho el tablado y pagado al dicho carpintero los mrs que de ellas se oveieron
se le quedaron de biendo los dichos mil setecientos mrs. (...) Fecho en Marchena a
primero de Março d quinientos y quarenta y tres años.
Luis
Lorenzo de Suarez
1547, Octubre, 25, Marchena
Relación de los mrs. que ha de aver Juan Ruiz, platero vezino de Sevilla por la
plata y hechura de çiertas pieças que a traído para la casa del duque mi Señor, en esta
manera:
(...)
E un sillón de plata blanca, sinzelado y labrado de la ystoria de Ercoles que se
entren e de respaldo y arzones, trasero y delantero, y tablilla de pies, que en estas
cosas ay las pieças siguientes; siete ystorias de las fuerças de Ercoles y ocho pilares
con ocho balaustres y dos chapas largas en que van clavadas, los pilares e ystorias e
dos cornisas que tienen unos leones por remates y dos pedestales y dos chapas en
triangulo que tienen dos bestiones en las esquinas y dos chapas de la tablilla de pies y
costañeras de la tablilla y un escudo que está en el respaldo y en el arzón delantero es
una cabeça de águila con una figura ençima y quarenta e nueve tornillos con questa
clavado todo el sillón y dos chapas de la clavazón del respaldo y arzón trasero, y 25
cabos y dos hevillas de la tablilla de pies, que pesó todo esto çinquenta e nueve
marcos y siete onzas, dos ochavas, que son noventa pieças grandes e pequeñas de
plata las que tiene el dicho sillón.
71
Juan Luis Ravé Prieto
- Unas tablas deste sillón que son quatro chapas e dos lomos y quatro cañones,
con remates e sus costañeras y clavos que pesó todo veinte marcos de plata.
- La guarnición deste sillón para la mula sin el pones sino las cabeçadas y
falsas riendas y pretal y gurupera y copas del freno y cabos y hevillas, tiene las pieças
siguientes: diez y nueve cruzes de plata que tienen soldadas quarenta e siete medias
rosas y diez e ochos rosas grandes enteras. E más otras çiento e siete rosas dobladas
de dos pieças, con un clavo en medio, de hechura de puntas de diamante, repartidas
e clavadas por toda guarnición e más çiento e diez e ocho rosas chiquitas y doze
cabos y doze hevillas y quatro costañeras y quatro pataletas, tres grandes y una
pequeña, dos capas de mula, tienen dos cabezas grandes de leones, dos pedaços de
hilo de plata en que abrá tres palmos, para clavar todo esto, que pesó todo quarenta e
çinco marcos y tres onzas y tres ochavas de plata que son todas trescientas y quarenta
y tres pieças chicas e grandes
- El paño de la mula de la dicha guarnición (...) pesaron nueve marcos e quatro
onzas e dos ochavas.
- Estos çientos e treinta e quatro marcos y seis onzas y siete ochavas de plata
montan a razón de dos mill e dozientos y diez mrs. el marco, montan dozientas e
noventa e nueve mill y treinta çinco mrs.
Conçertose con el dicho Juan Ruiz la hechura del dicho sillón en mill ducados
que montan 375.000 que se entren de la obra de todas las dichas pieças de plata(...)
- E monta una relaçión de gastos que el dicho Juan Ruiz hizo en ciertas caxas
que hizo para el sillón y en la hoca de hilo de plata y seda que se hizo para la guranición
y de una poma de oro que se hizo para la cámara de mi señora la duquesa y de diez
y ocho botones de oro para la cámara del duque mi Señor, la qual dicha relación va
con esta. 63.230
- Montan en la manera que dicha es los mrs. que se deven a Juan Ruiz platero
vezino de Sevilla un quento e çiento e çinquenta e un mill e setecientos e setenta e
çinco mrs. que ha de aver por la plata e hechura de un sillón que hizo para mi Señora
la Duquesa y de otras pieças de plata de aparador que pesó todo dozientos e noventa
e seis marcos y siete onzas, tres tomines de plata como se contiene en esta realaçión
de quenta de todo ello, lo qual yo averigué y conçerté con el dicho Juan Ruiz por
mandado de su señoría, como de suso va declarado, e porque es así verdad lo firmé
de mi nombre en 25 de otubre de 1547 años
Egas Venegas
<A.H.N. Sec. Osuna. Cartas. L. 616 96>
72
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
1565, Febrero, 6, Marchena
En el nombre de Dios Todo Poderoso que bibe sin principio e reyna sin fin y de
la Gloriosa Virgen Santa María, a quién yo tengo por abogada y Señora en todas mis
cosas, sepan quantos esta carta de testamento vieren, como yo Doña María de Toledo,
Duquesa de Arcos, estando enferma del cuerpo y sana de mi entendimiento y memoria,
temiendome de la muerte, que es cosa cierta a toda criatura y el día y la ora della
ynsierta , deseando poner mi ánima en el estado que por la misericordia de Dios se
pueda salvar, previniendo en las cossas necesarias para discargo de mi anyma, ordeno
y hago mi testamento en la forma siguiente:
- Primeramente mando mi ánima a Dios Nuestro señor que la crió y la redimió
por su preciosa sangre, y suplico a su Magestad la salve por sus méritos de su Pasión
y lleve a su santa Gloria y mi cuerpo a la tierra, de donde fue formada, el qual quiero
que sea sepultado en la Yglesia del colegio de la Compañía del Nombre de Jesus,
estramuros desta Villa de Marchena, en el lugar y parte eligieren y señalaren sepulcro
mys albaçeas para ello luego que la dicha yglesia esté acabada y la casa y colegio
entregado a el retor, padres y hermanos de la dicha compañía que en ella an de morar
y en el entretanto que se puede haser, esto mando: que sea depositado mi cuerpo y el
día que falleciere, otro día luego siguiente en la capilla o lugar que el duque, mi Señor,
mandare señalar para ello en el monasterio de santa Eulalia que es en el término
desta villa de Marchena, hasiendose el dicho depósito, por ante escrivano, y si el
dicho duque mi Señor fuere servido de ordenar y mandar otra cosa çerca de dicho mi
sepulcro e depósito aquello que su señoría mandare se cumpla y guarde.
- Yten mando que acompañe my cuerpo el día de mi fallecimiento, hasta el
lugar donde se ha de poner, todos los clérigos de esta villa y digan misas de requien y
se les de la limosna acostumbrada y también lo acompañen los religiosos, frayles de
Santo Domingo y San Francisco y digan mysas y se les de la mesma limosna.
- Yten mando que en el monesterio de Santa Eulalia y en el de san francisco
desta Villa y en el de San Pedro Martir, digan por my ányma en cada conbento cien
misas las quales digan todos los religiosos que uvieren de misa en los dichos conventos
y las comiençen a desir desde el otro día que fuere sepultado mi cuerpo y no çesen
hasta ser acabadas y an de ser de requien, con un responso, y mando que se paguen
a real cada misa y les den çera, con que se digan. (....)
- Fecha en la villa de Marchena a seis días de Febrero de mil e quinientos y sesenta
y cinco años y no a de valer ni valga la cláusula que dize que el vicario y clérigo digan dies
días cada uno, misa cada día porque aquello dexo proveido por otra orden la duquesa.
<Copia de la escritura original ante Rodrigo de Torres, realizada en 1577>
<A.H.N. Sec. Osuna. L. 144 1 b>
73
Juan Luis Ravé Prieto
1574, 13 de Enero
Antonio de Torres de los mrs. De vro. Cargo dad a Diego méndez, vezino de
carmona en quien su poder huviere quinientos y cincuenta reales que a de aver y se
le deven de ciento y una vara de bayeta que del se compraron de que se hizieron
algunos paños que estan colgados en el túmulo de mi padre que aia gloria y tomad su
carta de pago con la qual y con esta mandé que se reciban en cuenta y destos paños
que de la dicha bayeta se hicieron y de otrosos que allí están colgados, se le ha de
hazer cargo al guardarropa de mi casa, lo qual mando que haga luego Pedro de la
Barrera mi contador mayor informado de los que son y a vos luego dejo razón de
esta çédula para que cumpla lo en ella contenido. Fecha en Marchena 13 de Enero de
mil y quinientos y setenta y quatro años
El Duque
El 22 de octubre de 1573 entró con el cuerpo de Dn Luis procedente de Madrid.
<A.H.N. Sec. Osuna. C. 550-30>
1580, Junio, 2, Marchena
Recebí del Sr Luis Hernandez Melgarejo, maiordomo de el Excelentísimo Señor
Duque de Arcos ciento y quarenta reales que son por el adobio de doze paños de la
istoria de Eneas (...) lo firmé de mi nombre que es fecho en dos de Junio de 1580.
Fdo de Escobar
<A. H. N. Sec. Osuna. Cartas. L. 550 60>
1611, Diciembre, 5, Marchena
Miguel Diaz, Mayordomo de mi hazienda en esta mi villa de Marchena, de los
mrs. de vuestro cargo, dad a Francisco de Valderrama, obrero de las obras de mi
casa, siete mill y seisçientos y ochenta y dos mrs. que por su relación, deste otro
medio pliego, paresce aver gastado en el tablado y atajos que se hizieron en la Iglesia
de Nra. Sra. de la Mota, para el día que recibí el Tuson y tomad su carta de pago, con
la qual y con las que os a de entrregar, de las personas que sirvieron en esta obra y
dieron materiales para ella y esta mi libranza, de que tomará la razón uno de mis
secretarios, se os reciaban en quenta. Fecha en Marchena, cinco de Diziembre de
mill y seiscientos y onze años.
El Duque
74
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
(Sigue relación detallada del gasto, pagos a Juan Ximenez carpintero, por seis dias de
trabajo, en hacer el tablado las gradillas y los atajos cambio del púlpito...)
<A.H.N. Sec. Osuna. Cartas L. 616 91>
1618, Marchena
Sermón/ predicado(/ por el padre/Dionisio Guillén, de/ la Compañía de Iesus,
en/ su collegio de Marchena. En fiesta que hizo a la Purí/sima Concepción de la
Virgen María Madre de Dios, y/ Señora Nuestra, el Excelentísimo Señor Don Rodrigo
Ponce de León, Duque de Arcos, Marqués de Zahara, etc, Cavallero del Rosón de
Oro, a quién/ se dedica. Año 1618
Impreso en Sevilla, por Gabriel Ramos Vejarano, en la calle Génova
(...) Por muestra de grandeza, por aparato de majestad, y resplandor de gloria, fabricó
el rey pacífico en su Palacio un trono, en la materia tan rico, en la obra tan costoso, y
en el artificio tan exquisito, y raro, que haziendo la Divina escritura el dibuxo y montea
del 3 reg. 10. concluye diziendo: Non est factum tale opus in universis regnis, Nunca
jamás los siglos vieron semejante obra y quando el ingenio, el arte y la naturaleza
juntaran sus caudales a porfía, para hazerle competencia, no llegaran a igualarle.
Porque el ingenio fue divino, el arte inspirada del Cielo, para el material contribuyó la
naturaleza lo más precioso de sus joyas, y en su fábrica apuró su tesoro el más rico
Rey que uvo en el mundo. La materia era toda de Marfil precioso, transparente y
bruñido, bañado de un color rojo, sanguíneo, que imitaba la hermosura de la rosa (que
la escritura Divina llama Marfil antiguo). El marfil estaba guarnecido con recames y
perfiles de oro, del mayor quilate, y todo con tan lindo pulimento, que quando le
retocaban los rayos del sol, los reflejos de la luz matizavan el ayre con varios
resplandores de agradables visos. En las molduras, laços y, entalles y reliebes de
Marfil, y de Oro, se restaron todos los primores del arte; y aunque era tanta la riqueza,
pero la disposición traça y artificio sobrepujava sin medida. El trono era de eminente
altura, muy capaz, y en proporción descollado. Subíase a él por seys gradas, que a los
remates tenían seys leones por vanda, de oro maziço, con frente y garras levantadas.
En el descanso del trono estava una silla imperial de oro, con figuras de reliebe,
sustentada de dos manos humanas sobre peana de oro bruñido, y acompañavan los
dos lados de la silla dos leones, de mayor estatura, de aspecto feroz, erizada la melena,
y abierta las garras, que con sola su vista aterraban. La cumbre del trono era en
forma de torre, con remates y capteles de maravillosa arquitectura, y es a la que el
Esposo Canticorum llama Turris eburnea, a la qual compara, el cuello de su esposa
75
Juan Luis Ravé Prieto
conforme a la traslación del caldeo. Porque donde nuestra Vulgata lee: Collum tuum
sicut turris eburnea lee el Parafraste, Iudex tuus, qui iudicat iudituum tuum, fortis est
super populum...
Toda esta artificiosa traça estava llena de misterio, que en sus figuras se
representaban como en modelo, unas que representaban el Reyno de Salomón, y
otras que bosquejaban las calidades y virtudes, que ha de tener un Príncipe para su
gobierno. Pero entre todos los misterios, el mayor y de más lata y misteriosa
representación era, ser una traça y modelo de otro más magnífico y Real trono, mas
excelente y sublime, de mayor aparato y riqueza, que es la Virgen Purísma Madre y
Señora nuestra.
Al excelentísimo señor….
Muy usado es entre los versados en letras divinas, y humanas, (Señor
excelentísimo) comparar y nombrar con el nombre de Sol (…) a los Reyes, Príncipes
y Señores, que como personas excelentes y esclarecidas, ilustran como soles, sustentan,
mueven, conservan, aumentan y perfecciona las Repúblicas, los estados, los vasallos,
y criados, dándoles, en cierta manera, ser y vida, y sino, la natural, política y moral
(....)
1651, Octubre, 5, Marchena
Y en virtud de la dicha licencia de fundación su Exa. de el dicho Sr. Duque de
Arcos dispuso y trajo y fabricó a su costa un convento, con su iglesia y campanario,
con las officinas necessarias, junto a sus cassas y palacio, cerca del jardín del parque
de ellas, en el sitio donde eran cassas de juan Rodriguez Montiel, en que avía sucedido
Don Juan Guzman y Montiel y dispuesto convento en la piesa primera que está frontero
de la plaça que llaman de Arriba, se puso y fabricó un altar con su ara y relicario de
madera y dentro un baso de plata para colocar el Santíssimo sacramento asistiendo a
la disposición y ornato del dicho nuevo convento e Iglesia su Exa. del dicho Duque de
arcos y sus criados y el día que se contaron veinte y quatro del dicho més de octubre
del dicho año, como a las quatro de la tarde, en el patio, ante la dicha nueva iglesia y
en medio de el entre unos naranjos que en él estavan se izo un hoio y despues el Pe.
F. Bernardino de Granada tomó, con veneración, una cruz grande i laentró en dicho
hoio y su Exa. el dicho sr Duque de Arcos, quitado el sombrero la veneró y sin ayuda
de persona alguna tomó una piedra y la puso alpie de dicha cruz y afirmó el pie de ella
yotros religiosos echaron alguna tierra con que quedó puesta y fija dicha cruz en
señal de su primera acción y possesión y fundación del dicho convento. Y luego el
dicho Pe. F. Bernardino de Granada fue a la sacristía y se vistió con amito, alva,
cíngulo y estola y aviendose puesto en medio de la nueva Iglesia y frontero del dicho
76
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
altar y relicario y de un lienço en que estava pintado el seráphicoPadre San Francisco,
conavito de Capuchino y conforme al pontificaly ceremonial romano bendijo, con la
ceremonia que en el se disponen y mandan la dicha nueva Iglesia, en honra de Dios
Nuestro Sr. y de el Santo Angel Custodio a quien su Excelencia el dicho Sr. Duque de
Arcos que asistió a la dicha consagración, estando io preseente el dicho notario quiso
se dedicase la dicha nueva Yglesia y su Exa. mandó que el dicho mandamiento y
licencia para la fundación de el dicho convento, se manifestas del Sr. licenciado Don
Juan Macho Capela y loçano, capellán de su magestad en su Real capilla de la Santa
Iglesia Metropolitana de la dicha ciudad de Sevilla, juez comissario de la Santa cruzada
en el Marquesado de Ayamonte y vissitador general deste arçobispado que a la sazón
estava en la visita general desta villa por mandado de su Illustrissima y aviendosele
manifestado y leido lo obedeció y mando que en todas las iglesias desta villa se
hiziesse sonar con las campananas y repicasse y fue a la iglesia de Nuestra señora de
la Mota, dentro del castillo y palacio de su Excelencia, donde se mandó juntar todo el
clero desta villa y ministros de las iglesias de ella y allí Hizo formar una procesión
general con asistencia de la relijiones de esta villa y se revistió con amito, alva, cíngulo,
estola y capa blanca y fue a el altar maior y de el sagrario sacó una custodia con el
Sanctíssimo Sacramento y precediendo la cruz de la Parrochia de el dicho Sr. San
Juan Baptista y siguiendole las religiones de San Agustín, San Francisco, Sancto
Domingo y luego el clero y a lo último de la dicha processión Su Md. del dicho Sr.
Visitador, con el dicho relicario y en él el Santíssimo Sacramento asistiendole por
diácono su Md. de el licenciado Melchor Fernandez de Antequera, beneficiado propio,
parrocho i vicario de las iglesias desta villa i por subdiacono Don Diego de Saavedra
y Guzmán Vicario que fue de las dichas Iglesias debajo de un palio, con seis varas
que llevavan los seis beneficiados de las iglesias desta villa, con sus capas blancas y
asistiendo la capilla de cantores, todos con velas encendidas en las manos y asistiendo
su Exa. de el dicho Señor Duque de Arcos, y el Señor marqués de zahara y el Sr.
Marqués de Molina y sus criados, cavalleros y republicos y mucho concurso de jente,
con grande júbilo y alegría y veneración y devoción, solemne y gravemente fueron a
la dicha nueva iglesia y convento en cuia entrada y primera puerta salieron a reçevir
la dicha processión el dicho Padre F. Bernardino de Granada Provincial desta provincia,
Fr. Miguel de Granada desfinidor y guardián de Jaén. Fr. Gerónimo de Granada
desffinidor y guardián de Granada, Fr. Juan Francisco de Veles, custodio desta provincia,
Fr. Buenaventura de Ocaña, Fr. Ambrosio de Almonte, sacerdotes, Fr. Luis d la
Victoria, compañero del Pe. Provincial, Fr. Juan de Motril, Fr. Pedro Portalegre y Fr.
Diego Joseph de Sevilla, Fr. Diego de Jaen, legos todos en forma y orden de comunidad
y aviendo entrado su Magestad en la nueva iglesia llegó el dicho visitador al altar
maior y en él puso el dicho relicarrio y aviendo incensado, lo mostró al pueblo según
77
Juan Luis Ravé Prieto
tiene costumbre nuestra Sta. Madre Iglesia y cantó la oración Deus qui Nobis etc. y
hecha genuflección abrió la puerta del relicario que estava en eldicho altar y sacó un
vaso de plata, donde puso el Sanctíssimo Sacramento i lo colocó i dejó en dicho
Sagrario altar e iglesia, nuevamente erijida i bendita quedandose los dichos religiosos
capuchinos en la dicha Iglesia y convento, sin contradición ni inquietud de persona
alguna i luego la dicha comunidad i religiosos dixeron las primeras visperas del común
de la dedicación de templo según el Breviario Romano, a todo lo qual yo el dicho
notario estuve presente con el dicho clero y no ubo ni pareció persona alguna que
contradijesse la dicha fundación, ni impidiese, resistiesse o ocupasse la dichacolocación,
todo lo qual fue fecho y passó en el dicho día veinte y quatro de octubre deste presente
año, hasta las siete horas de la tarde, a que se hallaron presentes, por testigos, el
Licenciado Francisco de Vega Casagrande, Vicario que fue desta villa i juez actual
de Audiencia de el estado de su Excelencia y el Licenciado Don Luis Aguado de
Fonseca, juez de audiencia, y el licenciado Don Juan de la Rua y de la Cueva, asistente
y otras muchas personas eclesiásticas y seculares, hombres, mugeres y niños que se
hallaron a la dicha fundación y colocación y para que de ello conste, por mandado del
dicho Exmo. Sr. Duque de Arcos y de pedimento del Pe. Fr. Bernardino de Granada,
Provincial y dicho convento de los Capuchinos di el presente en la dicha villa de
Marchena a veinte y cinco dias de el mes de Octubre del dicho año de mil seiscientos
y cinquenta y uno.
Puse mi signo en testimonio de verdad.
Pedro Caro.
<A.H.N. Sec. Osuna L. 171 4 60>
1655, Setiembre, 16, Marchena
Hernando Pérez Moreno mi tesorero de los mrs. de vro. cargo dad a Teodoro
de Rivera vezino desta villa treinta y seis reales de Vellón que valen mill duzientos y
veinte y quatro mrs. que los a de haver por el travaxo y ocupación que tubo en el altar
que en mi cassa se hizo y adornó del túmulo del convento de San Pedro Martir en la
ocasión de la muerte de la marquesa de Zahara mi sobrina y tomad su carta de pago
con la qual y esta libranza de que a de tomar la razón uno de mis secretarios se
receviran en quenta. fecha en mi villa de Marchena, 16 de setiembre de 1655.
<A.H.N. Sec. Osuna. Cartas. L. 550 7>
78
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
1730, Marzo 13, Marchena
Agasajo a la familia de los reies
Más tres mil trescientos dos reales y quatro mrvs vellón y 46 arrobas 18 tts.
De azzucar pral que de orden de la duquesa madre mi señora se gastaron de regalos
a diferentes señores, en ocasión de haver venido los reyes a esa villa donde se
detuvieron desde el día 6 hasta el 13 de Marzo de 1730, por compra de cacao y otros
géneros, para la labor de 10 arrobas de chocolate, dulce comprado en Bohornos y
Málaga y 8 arrobas de vino pajarete que se distribuyeron de forma siguiente:
-Marqués de los Balbases: 1 arroba de chocolate y dos pilones de azucar
-Duquesa de Atri: 1 arroba de chocolate y dos pilones de azucar
-Obispo de Segovia: 1 arroba de chocolate y dos pilones de azucar y unos tarros de
dulce
-Al embajador de Francia: 2 pilones de azucar, una ternera y 8 arobas de vino pajarete
-Conde de Salazar 1 arroba de chocolate y dos pilones de azucar y dulce de coco y en
almivar.
-D. Carlos de Arriaga: lo mismo
-D. Miguel de Suaz Navas: dos pilones de azucar y 1 arroba de chocolate
-D. Joseph Patiño 2 pilones de azucar y 2 arrobas de chocolate, 8 tarros de chocolate
y una ternera
-Marqués de la paz: lo mismo
-Marqués de Fernán sele dieron después en Madrid 8 pilones de azucar
3.302 reales
1742, Febrero 26
Funerales por Don Joaquín Ponce de León
Más 1968 reales y un mrs. (...) al clero, beneficiados de esta villa y conventos
por las misas de novenario cantadas con sus vigilias en la parochial de San Juan y
dichos conventos, asistencias de dichas comunidades el día 6 de abril de dicho año de
1729. por el alma de del Exmo Sr. D. Joachin, primer duque de Arcos de este nombre
mi Señor que haya gloria. 1968 rs-2
Más 7.200 dados los 5400 dellos al convento de San Pedro Martir por limosna
de 1350 misas a 4 reales que la Señora Duquesa me mandó celebrar por el alma del
Duque Mi señor. 900 al convento de San Agustín por 30 misas a 3 reales. Recibo en
9 de mayo y 900 a los conventos de San Francisco y Capuchinos por otras 30 misas
que celebraron por mitad. 720
79
Juan Luis Ravé Prieto
Ca. 1750, Marchena
Estado de Arcos. Relación de los siutados para fiestas de la casa del Duque mi Sºr
que anualmente se colocan en los lugares de todo el estado.
Marchena
Fiestas de NªSª
Fiestas y misa de la Purificación, Asunción y Natividad
En la Iglesia de Santa María de la Mota
7 libras de cera
36 Rss. Y 4 libras de azúcar para cada sermón
312Rs
Concepción Con su octava y todo el gasto/ 4º libra y media de zera
332Rs
48 Rs al predicador
a los parroquiales
450Rs
Estipendio de 9 misas cantadas y general convite
San Cayetano y Santa Teresa En capuchinos y San Agustín
44 Rs y 19 l. de cera en cada caso.
334Rs
San Agustín limosna y cera
80Rs
Funerales
1216Rs
«Por las almas de los Excelentísimos señores difuntos de la casa»
Los generales en Santo Domingo en que hay el gasto siguiente;
78 libras de zera para el túmulo, altares, clero y comunidades
624Rs
Por limosna de 100 misas rezadas
200Rs
Y por la limosna de tres misas cantadas y vigilias que celebran las comunidades
De S. Fco. St Domingo, Sn. Agusín y asistencia
A 50 reales cada día
150Rs
32 reales para la sacristía
Al predicador 36 libras de azúcar
48
1360Rs
En el convento de San Agustín
Honras generales por D. Manuel con las mismas circunstancias,
Gastos y concurrencias
1360 Rs
En San Agustín por don Manuel la misa de aniversario
2782Rs
En San Agustín misa rezada por Manuel
730Rs
En Santa María de la Mota por los vasallos
1095Rs
En Capuchinos
80
Fiesta y poder en la Marchena de la Edad Moderna
Funerales por la Marquesa de Zahara
- Túmulo y altar, clérigos
Asistencia general misa y vigilis
Asistencia a misas cantadas, conventos de San Pedro,
San Agustín y San Francisco
Por la limosna de cien misas rezadas
Sermón
Capilla de Música
En el convento de Capuchinos a devoción del Duque mi Señor
1º Domingos, lunes y martes de cada mes / a Nº Señor,
manifiesto mañana y tarde
150 reales para el gasto de cera
Misa oratorio monte Palacio diaria
Colegio de santa Isabel/ por la intención de los duques
Santa María, Sacristán Mayor
Situados fijos / Lámparas
Oratorio de Montepalacio
Santa María de la Mota 12 lamparas
Pobres de la cárcel agus
Beneficiados
Por el alma del duque de Cádiz
Patronato del convento de Mercedarias
Colegio de Niñas Huérfanas de Santa Isabel
Concepción
San Pedro
San Francisco
Santa Olaya
Capítulo intermedio de San Francisco
Pan e los pobres
San Joaquín, la Magdalena los Santos,
Santa Teresa y San Cayetano.
Expósitos
Patronato de San Agustín de Sevilla 5.719-17
Convento de San Jerónimo de Buena Vista 1920.
624Rs
330Rs
200Rs
100Rs
1254Rs
48Rs
50Rs
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<L. 1607-2>
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