fP$ áj q POR EL MINISTERIO DEL AIRE 1 XXVII / U rección DS y Redacción, Tel. 244 2612 - NUMERO 1967 JULIO Depósito legal: M. .416 L.iLtLr’ U ‘-UAXLJ L.XQ.i - - ROMERO ROBLEDO, 8 - MADRID - 8. - Administración: 320 - 1960 TeL 2 44 28 19 SUMARIO Pógs Mosaico mundial. La Aviación, arma decisiva en la guerra del Oriente Medio. La Administración Militar y la Jurisdicción contencioso’ administrativa. Con la VI Flota en ci Mediterráneo R. 5. P. Por 467 el General DíazPor de Villegas. 471 Francisco Salvador Por Nivela. Teniente Coronel Auditor del Aire. JoséPor Minguillón Vidal. Capitán Ayudante de Ingenieros Aero (II). 477 486 náuticos. Disuasión y proliferación nuclear. Fernando Por Fernández-Monzón y Fran cisco J. Pasqual del Pobil. Capitanes de Aviación (S. T.) Adrián Por Peces y Martín de Vidales. Teniente Vicario de 1. (R.). Jesús Por Salas Larrazábal. Comandante Ingeniero Aeronáutico. La libertad reiigiosa en las Fuerzas Armadas. Otras consideraciones sobre escalas. Información Nacional. Información del Extranjero. La bomba que ganó una guerra. Control y maniobra de las crisis. Las Fuerzas Aéreas; paradoja del Vietnam. Bibliografía. CONCEPTOS EXPUESTOS EN Número corriente15 Número atrasado25 ESTOS 495 501 506 Fligt.) (De Strategie.) (De Air (De Force.) ARTICULOS pesetas. » REPRESENTAN LA OPINION 525 531 536 PERSONAL Suscripción semestral90 Suscripción anual180 Suscripción extranjero300 pesetas. DE SUS AUTORES pesetas. 1 Nimcro REVISTA DE AERONAUTICA 320 Julio 1967 - Y ASTRONAUTICA MOSAICO MUNDIAL Por R. S. P. Israel supo emplear la Fuerza Aérea.. Treinta y seis horas fueron suficientes, para decidir la guerra entre menos. de’ 3 millones de israelitas y 110 millones de’ árabes: el tiempo que tardó la aviación de Israel en imposibilitar el despegue, en. primer lugar, y destruir a continuación las. Fuerzas Aéreas de cuatro naciones árabes. Tres. horas bastaron para derrotar a Egipto. La guerra más rápida y aplastante de la Historia estaba decidida. El resto se limitó a unos; simples ejercicios de tiro. Se comprende aue una victoria tan fulmi nante causara sensación en el mundo entero. Durante muchos años. se hablará de ella y se analizará con todo detalle. Ya, existen comentarios para todos. los gustos.. Algunos de ellos;, a nuestro entender, tan desacertados como el del corresponsal de “Flight” en Tel Aviv, que figura en otro lugar de esta REvIsTA, donde insinúa que uno de los se’ cretos del éxito tan rotundo pudo constituir en que; Israel se’ ap.artó ‘de’los manuales, en contraste con Egipto que se aferró rígida mente a las. inflexibles. doctrinas. militares tipo “Maginot”. La. realidad, sin embargo, parece ser, más bien la contraria. La gran lección de la guerra de Oriente Medio es que unas Fuerzas Aéreas con medios muy inferiores en número y calidad a la de sus adversarios., pueden aniquilar éstas., por el sólo hecho de aplicar correctamente la Doctrina Militar. Los egip cios. disponían, en gran cantidad, de las me jores armas que pudiera suministrar la tec nología soviética: magníficas instalaciones radar y modernos, aviones, supersónicos., fren te a la Potencia Aérea Israelí, con bastante menor número de aviones, siendo la g.ran mayoría de ellos transónicos o subsónicos;, de tipo anticuado. Los, únicos, aparatos super sónicos con que contaba eran. unos cuantos. cazas “Mirage III”. Sin embargo, los “Oura gan”, los “Vautours” y los “Fouga Ma.gisH ter” destruyeron a los “Mig-21 porque se ajustaron sabia y estrictamente a los prin cipios; del moderno Arte Militar Aéreo, al que, por supuesto, se le puede tachar de todo menos. de’ inflexible. “, 467 En cualquier moderno manual aéreo que hojeeios., podremos. leer que subraya la. ne cesidad de disponer de: centralización en e’l Mando Aéreo, control del aire, iniciativa, ofensiva, sorpresa, concentración de esfuer zos., medidas de seguridad para las fuerzas aéreas propias, etc., etc. Observaremos qtie ha.ce hinca.p.ié en lo enormemente tributaria que es. la aviación ofensiva de unos Servicios de Información veraces y minuciosos; leere mos. también razonamientos; sobre la impor tancia que tiene ho.y día ‘el primer golpe y, como consecuencia, sobre el imperativo (le disponer desde tiempo. de p.a.z,de’ una política militar bien definida, respecto a. los presuntos enemigos, con planes desarrollados, hasta el último’ detalle y ensayados hasta haberlos convertido, en rutinarios. No es. fácil qtie en contremos nada sobre’ “Maginot”, aunque todo es posible, ya que también del error se sacan ensenanzas. La verdadera genialidad de los generales Itzha.k Rabin y Mordecai Hocl como planifi cadores, y de’ D’ayan como su brillante’ reali zador, consistió en demostrar que, cuando suena el primer tiro, es cuando’ verdadera mente tienen aplicación los libros. Nunca hubo, antes, una guerra más ortodoxa, ni más milimétricamente ajustada a los. concep’ tos básicos del Arte d.e la Guerra. Un ver dade’ro. cano’n desarrollado con una fidel idaci que’ llegó a extremos. difícilmente’ superables.. La Do’’ctrina nos dice’, por ejemplo, que hay que’ a.signar una finalidad común, única para todas las Fuerzas Aére’a.s.y evitar toda acción aére’a que no contrib’uya directamente a conseguirla. Finalidad, que’, en el momento de’ iniciars.e’ las hostilidades, ha de ser pre’ cisamente, la consecución de’ la Sup’e’riori..lad Aére’a, ya que’, el que’ pierde’ la batalla del air’e’ ha perdido’ la guerra. Ciñéndose’ a es.ta norma, los israelitas, empeñan en la batalla aére’a todos sus medios a partir de las. seis tre’inta de’ la mañana del día 5 de’ junio’, .en un ‘es.fuerzo total, en el que los aviones toma b’an tie’rra el tiempo justo p’a.ra repostar y volver a ‘despegar, y. las tripulaciones. llegaron a hacer hasta o’cho servicios. de’ guerra en ‘el día. Saben que’, así como una estrategia (le’ fensiva es una invitación a la. derro.ta, tina REVISTA DE AERONA UTICA NIíniero Y ASTRONA UTICA 320 Julio 1967 - ofensiva diseminada o dosificada con cuenta desorientar a los árabe’s sobre’ las posibilida gotas, de esas sobre las que se oye hablar (les de sus medios aéreos y de’sus fuerzas de hoy en día, que pretenden aplicar, únicamen supe’rficie’, ‘haciéndoles cree’r que la de los te, una potencia proporcionada a la amenaza primerós eran mucho menores, y mayores, enemiga, sería —en el mejor de los casos— en cambio, las de’ sus carros, y al elegir el el medio más seguro (le alargar indefinida momento del ataque, cuando, desp’ués de tan mente el conflicto. to’s días de tensión, parecía supe’rada la ame La .guerra aérea (Israel lo sabe), no per naza. Sorpresa táctica (como el propio Nas al atacar a mite este tipo de sutilezas, ni se puede librar ser reconoció ingenuamente) Egipto’ viniendo desde el NO., después de a alfilerazos, sino a devastadores golpes de describir, sobre el mar, una curva en vuelo maza. rasante, apantallados de la magnífica estación Se bombardearon todos los aeródromos (le radar jordana de’Ajiun, por los Montes (le enemigos, incluídos los que se creían secre Judea, y sorpresa técnica, al utilizar, para la tos. Primero las pistas y las instalaciones neutralización de’ pistas, la bomba que se radar, luego los aviones en tierra. Primero (letalla en otro’ lugar de este’ número, que las bases de aviones de bombardeo, de acuer llega al suelo con ángulo de impacto igtial a do con el principio de dar prioridad a la ma cero por estar do’tada de cohetes que anulan yor amenaza enemiga; luego las de caza. la con ponente’ horizontal de su velocidad y Pero el hecho que queremos hacer resaltar refuerzan la vertical, evitando :de esta forma como significativo es, que en esos momentos los rebotes que’ sufren las bombas, en los iniciales, en la Península de Sinaí, las fuer ataques a baja altura, al incidir en el cemento zas acorazadas israelíes, compuestas por una con gran ángulo de impacto y aumentando heterogénea formación de carros, algunos la precisión del bombardeo’ que, a juzgar po’r (le los cuales datan de la segunda guerra las fotografías, fué verdaderamente extraor mundial, van a enfrentarse con las fuerzas dinaria. Atendieron, por último’, los judíos, egipcias, muy superiores, formadas por mo a la seguridad de lo’s medios aéreos propios, (lernos carros soviéticos T-34 y T-55, que al disponer de’ aeródromos en los que cada todavía están intactas, y van a hacerlo sin avión tenía su cobertizo subterráneo, a p’rue el menor apoyo de la Aviación israelita. ha de bombas; mantener una alerta en el Israel resiste la tentación de apoyar la aire de veinticuatro horas a,l día y contar con maniobra ‘de sus carros desde el aire y no tinas magníficas carpetas. de objetivos, don(listrae ni un solo avión de la. batalla aérea, (le se detallaban todo’s los medios de las Fuer que’ sabe’ que es la de’cisiva, y de esta forma, zas Aéreas adversarias, con información, in cluso, de las maquetas en madera simulando sin sombrilla aérea pro’tectora— qué sober bia ‘lección de’ Arte’ Militar !—los carros de aviones y, por supuesto, co’n indicación de Israel irrumpen en territorio’ egipcio. Como la táctica de ataque’ y armamento’ más idó inciso, diremos que la maniobra de’ los carros neo’s ‘para cada objetivo. Loe’ egipcios, por el ostentó también las más puras líneas clásicas, contrario, tenían sus aviones al descubierto al infiltrarse por lo’s intervalos entre’ las di y alineados unos junto’ a otros, como para visiones acorazadas enemigas, evitando’ el tina revista de inspección, y no’ fueron capa ataque frontal y fijándolas, mientras una di ces de mandarlos instantáneamente al aire, visión israe’lita profundizaba, en finta, hasta que’ es lo que marca la tabla ante’ la inminen el Canal (le Suez, para revo’lverse inmediata cia de un ataque’, cuando’ no son del tipo mente y apo’yar a sus compañeras viniendo VTOL o STOL, sino que están sujetos a la servidumbre (le las pistas, con toda su mons (lesde la retaguardia y cortando la retirada trtiosa vulnerabilidad. egipcia. No’ vamos a intentar e’xp’licar las causas Si citamos esta decisión del alto mando de’ que estos aviónes fue’ran sorprendidos en judío es por creerla una de las más sintoniá ticas de la concepción guerrera israelita, pero tierra, aunque, a fin de cuentas, todo’ prm todas las actuaciones de sus Fue’rzas Aére’as cedió de’ una Defensa Aére’a defectuosa y no’ fueron sino tina materialización de los contra toda doctrina. Pero, en estas líneas, Principios esenciale’s del Arte Aéreo. Asu lo’ que hemos tratado de analizar ha sido la mieron siempre’ la iniciativa; hicieron el uso guerra que’ libraron las Fuerzas Armadas (le más extenso posible de la sorpresa en todas Israel y, en particular, sus Fuerzas Aéreas, sus manifestaciones: Sorpresa estratégica al que’ fueron las que consiguieron la Decisión. 468 Número REVISTA 320 Julio 1967 - Y ASTRONAUTICA rápido, con gran poder de penetración en la atmósfera, los: planos tendrán forma de: f lecha. Esto último lo sa.ben hasta los, fliñOS que:, con la primera plana de A B C, construyen el aeroplano: capaz .de cruza.r el patio y en trar por la ventana del vecino: pelma iue siempre está empollando. Los profesores de Arte Militar Acreo, con independencia de la nación a que pertenez can, ni del bando sobre el qu.e tuvieran pues tas sus simpatías, habrán observado, con sa tisfacción, los resultados de poner en prác tica los Principios que se enseñan, en la ac tualidad, en las Escuelas de E. M. del Aire del mundo entero, con la posible excepción (le las de los países árabes, si fuéramos a juzgar por los hechos. El E-ui, Luego., si lo’ que queremos es un avión supersónico capaz de operar desde cualquier pequeña pista de emergencia, O:‘de’sdeun por- avión de geometría, variable, ha realizado ya, sin escalas y sin ser repostado en el aire, el vuelo desde Estados Unidos a Europa. Terna taviones, bastará COfl que, en el aire, cambie’ mos: la incidencia de los planos.. con variaciones. Primero nació: la idea, luego se bautizó por último:, vinieron las complicaciones: y las sorpresas. La idea era bien sencilla; para que un avión tenga mucha sustentación y pueda to— mar tierra y despegar en poco terreno y a baja velocidad, los planos. deben incidir per pendicularmente al eje: de marcha; por el contrario, si lo: que querernos es un avión y, DE AEROJlAUTlCA Ya está concebido el avión de mañana. Se le llamó “avión de geometría variable”. En Norteamérica, la idea data de 1961, En ocasión de :hallars.e’ el presidente: Kennedy presenciando: el despegue, desde un portavio— ne’s, •de una extensa gama de reactores, le preguntó a McNamara: “Para qué necesi tamos. tantos. tiios de’ aviones? ¿No Jx)dría mo’s construir uno que satisfacie’ra todas las 469 REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA N’új’nero 320 Juli o 1967 - misiones ?“ Nunca escuchó palabras más (le su agrado el titular del Departamento de Defensa, ya que basa su política en la rela ción coste-eficacia, y trata de evitar dupli caciones, sobre todo en el Campo (le la In vestigación y Desarrollo, que es un gran (le vorador de negadólares. Así nació el F—111. El avión polivalente, apto para toda clase (le misiofles citie equi paría tanto a las Fuerzas Aéreas como a la Marina. Empiezan las (Iifictlltatles : La LTSAF quiera un bombardero estratégico qtie vuele a 20.000 metros, a 2,5 de Mach y que lance las bombas en vuelo’ supersónico a me nos (le 300 metros de altura. La Kavy, por su parte, lo que necesita es un avión para protección (le la Flota, capaz de estar en “alerta en el aire” de tres a cuatro horas, dotado de’ misiles. “Phoenix” y del conipli cadísimo sistema de’ control necesario para guiarlos a su destino. Además, deberá ser de poco peso. O sea, que la cosa está clara: 1-la (le ser un avión pequeño, con gran capa cidad de carga, que pueda desarrollar gran des velocidades, que’ vuele a muy poca velo cidad, con un complejísimo equipo electró nico y con peso ultraligero; vamos, algo. así como un 600, con la velocidad de un Ferrari y la capacidad (le un autobús Pegaso. No obstante, la Técnica moderna hace milagros, y de verdadero milagro puede ca lificarse el prototipo del F-111 A, para la USAF, que ya se ha trasladado de Estados Unidos a Etiropa, en vuelo sin escalas, ni repostado en vuelo, y que es capaz de volar con 5(1 sistema automático (le seguimiento’ (Id terreno a menos (le 75 metros (le altura. Sin embargo, ni la USAF ni la Navv están satisfechas. La primera, porque sigue en sus trece (le que lo que necesita es un avión tripulado avanzado de bombardeo es tratégico (AMSA), y la segunda, porque el Prototipo del F—111 B ha resultado más qe— saJo de lo que se’ pensaba y bastante más (le lo que sería conveniente jara operar (les(le la cubierta (le un portaviones. Pero no sólo ha variado el peso del avión, sino su precio, que ya es un 190 por 100 su perior al que se’ había estimado. Para acabar (le complicar las cosas, si bien la USAF po(Iría conformarse con este avión, como cazabombardero, Gran Bretada, en cambio, quie re comprarlo’ para que le efectúe misiones de bombardeo estratégico, y Australia lo desea en versión (le reconocinnento. Para remate, en el Congreso (le los Estados Unidos em piezan ya a torpedear el costosísimo proyec to (fabricando 1.100 aviones saldría a unos 500 millones (le pesetas cada avión), a la vista de tantas dificultades y disparidad (le criterios. Paralelamente, en Europa se’ ha ido (lesarrollando tin proceso’ similar. También aquí pensaron que la geometría variable era la fórmula del avión del futuro y, como resul taba cara, se’ unieron Inglaterra y Francia para fabricarlo al 50 por 100: British Air craft Co’rporation y Dassault en encargan (le’ la célula y Bristol Siddelev y Snecma del motor. Es curioso observar que, también aquí, como en Norteamérica, varía la opinión sobre’ los requisitos que debe reunir. Francia quiere’ un interceptor de elevadas caracterís ticas qtie efectúe el relevo de los Mirage III. Inglaterra, obstinada en hacer frente a sus compromisos a.l este de Suez, desea por el contrario, un avión de apo’yo’al suelo. Pero también en Europa se complican las cosas. Francia recuerda que’ hubo’ un moinen to en que Inglaterra pensó echar a pique el proyecto del “Concorde” y recela (le su co partícipe. En vista (le eso le encarga a Das satilt un avión de’ geometría variaAe 1OC) por 100 francés. Inglaterra, entonces, e alar ma. Necesita el avión franco-británi:’o’ por razones políticas, tales como su posible in greso en el Mercado o’mún Europeo y fi nancieras, para continuar colocando en Fran cia artículos aeronáuticos británicos, como el motor del Caravelle, equipos electrónicos, et cétera. Si fallara este proyecto tendría que invertirlo todo en compras del F—111 en los Estados Unidos o asociarse a un nuevo provedo germano-americano que se halla en es tado (le gestación. Comentando estas alternativas un diplo— matico británico declaró : “Estamos conde nados a seguir una política (le geometría va riable.” La expresión es tan gráfica como acerta (la. Política (le geometría variable, con res pecto a este avión, tanto en Europa como en Norteamérica, (le’ la misma forma que ha resultado variable también su p’eso’,su precio y ‘las características que debe reunir. Em pieza tino’ a preguntarse’ si no’ serán éstas, ya, demasiadas variaciones para el mismo tema. 470 Número REVISTA 320 Julio 1967 - DE AERONA UTICA Y ASTRON4UTICA LA AVIACION, ARMA DECISIVA ENLAGUERR DELORIENTE MEDIO Por «Quien El campo de batalla. Oriente Medio es, sin duda alguna, el punto más sensible de la estrategia mundial. De ahí la peligrosidad de la tensión allí. De los 1.504 millones de toneladas de petróleo que se producen actualmente en el mundo, 420.500—el 27 por 100—proceden del Orien te Melio. Pero aún hay que añadir algo más a este respecto. Si cerca de la tercera parte del petróleo del mundo surgo—como ve mos—én el Oriente Medio, la realidad es que tales países, productores del mismo’, con sumen poco. Por tanto, Oriente Medio f a cuita, al consumo mundial, una. cantidad (le petróleo superior, con mucho, a la.que brinda América del Norte’; que si produce, en efecto, aún más—422. 500 toneladas—, las consume “in sitti”, en gran parte, a su vez. Y no se olvide que al referirnos al petróleo citamos la. primera materia estratégica actual; la. clave de la guerra moderna, porque significa lo esencial de la batalla del motor, la aviación, los carros, el transporte automóvil y la ma rina., incluso, a su vez. Pero Oriente Medio es, además, un ltigar capital en la estrategia global; porque es tina región confín de tres mundos diferentes y una plataforma giratoria que une entre sí a Africa, Eurcpa y Asia. ¡ Más todavía! Oriente Medio es un punto vitalísimo en la logística mundial, Relaciona, en efecto, el General DIAZ domine el ajee, domina DE VILLEGAS La Oerra y el mar».----DouHyT. oriente y Occidente. El Mediterráneo con el Rojo, el Indico y el Pacífico, a través (le1 Canal de Sue7, el paso más frecuentado I0r la marina del mtindo, entre todos los cons truidos por el hombre, con un total de unos 25.000 buques y 260 millones (le toneladas anuales. En el Oriente Medio está, pues, la clave de la seguridad mundial, aunque no nionopolice esta posición, naturalmente, la exclusiva de la zozobra universal. Un antecedente próximo. Las circunstancias (lemográficas—di fe rencias raciales, lingüísticas y religiosas— complican el problema, ya de por si bastante agravado allí tras (le la última Gran Guerra, con la constitución artificiosa del Estado (le Israel, decidido por la O. N. U. del mismo ni(xlo a como esta organización (lecidió tam bién últimamente la retirada. (le los “cascos azules” (lel pasillo (le Gaza, por cuya doble circunstancia las Naciones Unidas son las directamente responsables de la crisis del Oriente Medio y de la última guerra allí además.. Una guerra, ésta última, que se parece no poco a la (le 1956, cuando la. avia ción y la marina de Francia y de Inglaterra lanzaban un ataque aero-nava.l sobre la. em bocadura mediterránea del canal cuando los judíos, exactamente a como lo han hecho ahora, atacaron, decididamente, en la. prime- 471 REVISTA DE AERONA LÍTICA Número 320 Julio 1967 - Y ASTRONAtJTICA mundo árabe comprometido sum 6 tinos cien millones de habitantes. Los beligerantes.. Israel, con una extensión apenas de 20.700 kilómetros cuadrados, como Badajo7, y con dos millones y medio’ de habitantes, como Ga licia, estaba, pues, rodeada de enemigos. Is rael disponía de un ejército nmvilizable en un plazo’ mínimo, del tipo del suizo, pero con un núcleo permanente muy importante y bien instruído. En resumen, 60.000 hombres (le Ejército; 3.000 al servicio de la Marina, y 8.000 al de la Aviación, bien que la moviliza ción general pusiera sobre las armas cerca (le 300.000 hombres en total. La R. A. U.—casi un millón (le kilóme tros cuadrados y 30 millones (le habitantes— tenía sobre las armas 160.000 soldados, ade más (le 11.000 hombres más al servicio’ (le la Marina, y otros 15.000 al (le la Aviación. El teatro de operaciones del Oriente Medio. Los reservistas incorporados a filas inme’dia Israel suma dos millones y medio de Jiabi taniente pasaron (le los 124.000. Jordania tantes. Los árabes implicados en el conf l’icto alineó, en la batalla, otros 70.000 hombres y aseen dan a cerca del centenar de millones. Siria alrededor de 100.000. Los Estados árabes beliqerantes fueron real Los egipcios disponían (le 1.200 carros y mente tre. pero, además, declararon la gue vehíctilos blindados. Los jordanos (le 140, rra o ‘rompieron con fsra.el rtros nueve. y los sirios de 400. Israel tenía 800. Esto es, alrededor del 46 por 100 de sus rivales. En ctianto a la aviación, que decidiría la bata ra gran batalla del Sinaí, a los egipcios, re lla., Egipto’ disponía de 500 aparatos, Jo’r chazados hasta las orillas mismas del canal. dania de 66, Siria de’ 80 e’Israel de 400; esto Curiosamente’ la guerra se ha repetido ahora es, el 62 por 100 del total de’ stis enemigos. a la letra. Asombra que’ los vencidos enton ce’s se hayan dejado sorprender del mismo Victoria de la técnica. modo’ ahora también, sin que la. lección (le la historia, les haya servi(lo (le gran cosa. Y es Mientras que los filósofos de la guerra que la historia resulta implacable siempre (lisctltían, sin cesar, a lo’ largo’ de’ todo’ el Pal-a los que la ignoran. siglo’ último y principio’ del actual si aquélla Esta vez no’ ha habido franco-ingleses y, era realmente una ciencia o un arte, los he en cambio, se’ han incorporado al bando’ egip chos de’ las últimas contiendas, muy prin cio los jordanos y los sirios, como más efec cipalme’nte de ésta que glosamos rápidamen tivos, pero’ luego una secuela de potencias te, han decidido’ la cuestión. ¡La. guerra motambién, cuyo apoyo casi siempre fué más (lerna e’s, sobre to’do, técnica! Y en este teórico que práctico; más diplomático que orden de’ cosas la ventaja de’ Israe’l era evi militar, porque las dificultades logísticas y dente. Mtichos, sino todos los principales la rapidez del tritinfo judío. no dieron tiem cuadros militares dirigentes se’ habían mspo para otra cosa. En efecto, se alinearon truído en el extranjero’. Muchos extranjero’s, jtinto a Egipto, o prometieron ayuda, además por aáadidura, a su vez, habían ido a Israel (le Jordania y Siria, Iraq, Kuwait, Sudán, como instructores. La escuela de radar y de Túnez, Marruecos, Líbano, Arabia Saudí, electrónica de Haifa se’ hizo pronto’ famosa. Argelia y el Yemen movilizados más o’ me Los e’gipcios tenían, sobre’ to’do, técnicos so nos a fondo al grito de “guerra santa”. El viéticos. Según la doctrina. so’viética, se ima 472 REVISTA Número 320 Julio 1967 - DE AERONA UTICA Y AsTR0NAUTIcA ginaron “T-54/55”, de 30 y 36 toneladas, respectiva primera mente, y carros pesados “Stalin III”, (le 46. Este material resultó evidentemente infe rior al israelita, procedente de Francia (AMX-13) ; Inglaterra (“Centurión”), y (le los Estados Unidos (“Sherman”). La aviación egipcia era igualmente rusa; aviones “Mig—l9”, de 1 “Mach”; “Mig—21 (le 2 “Mach”, ambos cazas, y transportes tres líneas sucesivas de defensa: la integrada por carros y artillería propulsada; la segunda:, por artillería anti carro, y la tercera, por un cintorón de obs táculos antitanques y campos minados. El material puesto en juego por parte de los aiiados—R. A. U., Siria y Jordania—consis tió principalmente en carros rusos “PT-16” ligero, de 14 toneladas; “SU-lOO” y “, En. el gráfico, los Ejércitos en presencia. El Irán, país no árabe, no intervino en la lucha. Argelia y Marruecos intentaron hacerlo, pero les faltó tiempo ante la fulminante victoria israelita:. 473 REVISTA DE A.ERONAUTICA Número 320 Julio 1967 - Y ASTRONAUTICA El material ruso aniquilado en Labatallade Sinai igi Velocidad 1,4 mach. 2 caiiones de 37m/m. Caza. PT.76-Ugero. l4tons.-50 Kms, Caion de 76m/m. Migi Velocidad—2mach. Techo —19.000 mts. Caza. StalinLII.—pesado. 46 tons.—35 Kms. Caion del2Om/m. — 1 1114. Velocidad 430 Kms. Tra nsporte. SU —100— medio. 30 tons.- 56 Kms. Cañon delOOm/m. AntonovAn—12. Velocidad 600 Kms. Transporte. T54/65-medio. 3 tons.—45 Kms. Cañon de 100m/m. — — El material de guerra ruso—e gipcio, sirio y jordano—destruldo o perdido en la lucha valía más de sesenta mil millones de pesetas. 11-14” y “Antnov An-12”, de 430 y 600 kilómetros de velocidad. Este material resultó notoriamente in f e rior al de Israel, integrado por cazas france ses, ingleses y americanos “Mystére” y “Mi rage”; “Vantour”, “Ouragan” y “Magis ter” (1). Pero debió ser, sobre todo también, como ocurrió con los carros, muy stiperiores las tripulaciones israelitas a las rivales. El (1) Contra lo que generalmente se supone La ayu da americana, fuá mucho mayor a los árabes que a Is rael; en diez años, 3.700 millones de d6iares a ios pri meros y 705 a los judíos. Concretamente, la ayuda mi litar americana fué diez veces mayor. tiro (le los carros (le Israel fué mucho más eficaz. Y en cuanto a lo ocurrido con la aviación, la lección es, en todo caso, más concluyente aún. Y es que la técnica requie re, sobre todo, instrucción. La guerra de las. setenta y dos horas. La batalla del Oriente Medio, que según alo-unos duro cuico días, o incluso cuatro, según otros, en esencia no: duró más que tres. ¡Tres días tan sólo’ fueron suficientes para íiestruir a los rivales áraies. empleando las líneas interiores y batiendo prmiero al bando más fuerte—Egiptoy luego’ a los 474 Número REVISTA 320 Julio 1967 - demás. Israel precisaba DE AERONA UTICA Y ASTRONAUTICA ganar la batalla en seguida. Para ello el arma indispensable era la sorpresa. Y, a ser exactos, lo hizo con singular maestría. Por eso la batalla del Oriente Medio duró, en realidad, sólo tres (lías, por lo cual no fué la batalla, de las cien horas, como también se la ha llamado, sino solamente la. batalla; de las setena y dos. Un resumen rápido (le su desarrollo nos (lirá que el (lía 5 (le junio, a las nueve (le la mañana., estallaba la guerra. Cien mil egip cios estaban desplegados en el desierto, ante la frontera de Israel. La línea de operaciones atravesaba, pues, ampliamente la. región de sértica del Sinaí, inconveniente logístico y estratégico evidente. Trescientos mil hom bres tenía Israel sobre las armas, a su vez. Setenta mil integraban la Legión Arabe (le Jordania y unos 100.000 sumaban los sirios, (lesplegados por su parte. La aviación israe lita entró inmediatamente en acción. Se em pleó en masa, con rapidez y decisión, contra los aeropuertos de Egipto, de Jordania y (le Siria. La apertura (le las. operaciones recuer (la a la ‘letra. la de 1956, o. la (le Alemania contra. Polonia en 1939. Era preciso’ batir, antes (le na(la, la aviación enemiga en su propio nido’! Ganada así la batalla aérea, todo lo demás vendría dado, luego’, por afia (lidura! El éxito fué tal, en efecto, que en pocas horas más (le’400 aviones árabes fue’ron (lestruídos. Un portavoz israelita pudo anunciar así: “Remos aniquilado las fuerzas aéreas enemigas.” Inmediatamente lo’ judíos se lanzaron sobre el desierto de Sinaí, cu bierto su cielo ya, mientras enviaban desta camentos aéreos a Sharm el Sheikh para abrir el golfo (le Aqaha, bloqueado por los egipcios y ‘la causa ocasional de la guerra. Otras fuerzas israelitas se lanzaron sobre la franja de Gaza. En el frente jordano Is rael lanzó tres ataques (le diversión. En el sirio se’ libraron encuentros menos impor tantes, co’n ventaja para los judíos. Al final del primer día. las fuerzas aéreas árabes estaban batidas; los soldados. israe litas, en perfecta conexión, avanzab.an triun fales por la península •de Sinaí y en Gaza. Se capturó gran cantidad de prisioneros y material árabe’. Según los informadores, la batalla aérea había (lecidido de antemano la suerte de la guerra. Al p.arecer los, jordanos emplearon mal su cintura de radar, por cuan to resultaba cegada a los; vuelos bajos (le los aviones enemigos, protegidos por e’l relieve del país. En cuanto al ataque sobre Egipto, la pantalla radar de la defensa estaba orien tada hacia el Este, naturalmente’, pero la aviación judía atacó por el Oeste, sobrevo lando’ el mar a baja altura, según los, infor madores. El seg’uido día (le batalla. fué el 6 (le junio. Sin enemigo’ aéreo todo parecía sencillo ya. Se’ alcanzó El Arish, e incluso la llanura donde, en 1956, habían sido ya batidos los egipcios, en plena península (le Sinaí. La retirada egipcia, primero ordenada, comen zó a desintegrarse. En el frente jordano, un movimiento envolvente dominó Jerusalén. Por la noche se combatía a las puertas (le Belén. Los sirios, a. su vez, habían retroce’ dido, haciendo fuego con su artillería pesa- He aquí, sucintamente apuntados, los proble mas de la paz: 1) ¿Se retirarán de Gaza. los ¡u.díos?—2) Libertad de negación por el Canal de Suez.—3) Igualmente por el Es trecho de Tirán y Golfo de Aqaba.—4) Con serva.ción de las colinas que dominan el Mar de Galilea, por los judíos.—5) Régimen fu turo’ de Jerusalén.—6) Retirada de’ los israe litas de la. península. de Sinaí y seguridades al efecto. 475 REVISTA DE AñRONA UTICA Número 320 Julio - 1967 Y ASTRONAUTICA da. Al finalizar la jornada los judíos habían destruído 200 carros egipcios y estaban a mitad (le’camino en el desierto (le Sinaí; gran parte (le Jordania caía de este modo en ma nos (le los israelitas; la Legión Arabe esta ba derrotada. La II. A. U. y Sus aflhigOS Co menzaron a agitar el campo (liplomático por que la suerte de la guerra estaba ya (lecidida. Egipto cierra el canal y niega los suministros (le petróleo para ciertos países. El tercer día, el 7 (le julio, va a decidirlo todo en realidad. Los judíos llegan hasta el paso de Mitia, a 40 kilómetros al este (le Suez, en el extremo meridional del canal. Cien tanques más pierden los egipcios esta misma jornada.. Los cañones de los para caidistas de Shar el Shikh (lominan va el estrecho (le Tirán, que sirve (le acceso al golfo de Aqaba. Las lanchas torpederas ju (lías, desde Eliat, hacen saltar el bloqueo. Los egipcios tienen orden (le retirar-se tras del Canal. Jordania abandona la lucha. Egip to (lice que seguirá luchando, pero cóiiio Pocos (lías después, la (lerrota es tan cvi(lente, que Egipto acepta la tregua y Nasser ofrece su (limisión, que luego es retirada. La guerra está ya decidida. A la Ivitalla militar sucede así la batalla política o (liplomática. menos cruenta sin duda, pero no menos em peñada. Material destruído. l)e mmlo fulgurante Israel había inant e— nido una defensiva maniobrada frente a Si ria y Jordania, mientras se había lanzado en niasa—la aviación en punta—contra el enemigo princinal. Inmediatamente, tras (le fulminar a éste, volvió sobre sus otros adver sarios, a los que aniquiló. No iniportó nada la superioridad naval, enorme, Oc la R. A. U. Los beligerantes tenían fronteras comunes y no hubo tiempo para hacer sentir el peso del poder naval. Tampoco sirvió de nada la superioridad numérica, ni de material, en tierra. La batalla preliminar aérea lo decidió previamente todo. En este ataque inicial y fulgurante varios centenares de aviones ru sos fueron destruidos en el suelo; otros tu vieron igual final en el aire. La relación (le material perdido, por Egipto, suma 31 hoin harderos pesados “TU-16”, 29 “Ilvushin 28”, (le tipo medio, 17 bombarderos de combate “Surkhoi 7”, 145 interceptores rápidos (le ombate “Mig-21”, 105 “Mig-17”, 8 gigan tescos “Antonovs”, de transporte; 31 “Ilyus hin 14, (le transporte igualmente; 16 heli cópteros soviéticos i’vII-6” y “MI-4”, más otros varios aviones de diferentes tipos. Todo este material, los 10.000 camiones igualmen te perdidos por Egipto, más la aviación y artillería, y carros destruídos de los aliados de la R. A. U. significa una pérdida (le más de 60.000 millones de pesetas. Las 20 bate rías de cohetes rusos SA-2 fallaron por no estar en estado (le alerta. El secreto del éxito. La paz ha llegado así, tras de la fulmi nante victoria (le esta batalla (le las setenta y dos horas. Ahora compete a los políticos restablecer ‘la calma. ¡No parece ello tarea más fácil paradójicamente, sin embargo, que ganar la guerra! Pero hay algo que (lehe deducirse como enseñanza esencial de esta guerra decisiva y breve. ¡El triunfo (le la técnica! Esto es, (le la instrucción “de la puesta a punto”; (lel iriétodo y de la organizacIón sobre la improvisación. Cuando Federico’ II (le Pru sia asombró con su lección de arte militar al inundo a través (le la llamada Guerra (le los .viete años, con una simplicidad singular los estadistas (le SU tiempo se creyeron en el deber (le enviar apresuradamente comisiones a Postdam para averiguar el secreto de la victoria. Federico el Grande, para reírse (le ellos, hacía desfilar a sus hombres ante la explanada (le su palacio, y burlonamente les explicaba que sus éxitos dependían (le aque llos ejercicios (le parada, qtie ensimismaban, por otra parte, a los Embajadores. La histo ria explicó, ciertamente, de otro modo los éxitos del Gran Federico. Los encontraba en la bondad (Id Ejército’, fraguado por el Rey Sargento y que sti hijo heredó. En la orga nización y en la instrucción perfecta. En la disciplina táctica... Ahora no’ faltan, tanipo so, los emisarios a Tel Aviv. La razón del triunfo israelita está claro: superioridad téc nica y (le instrucción, igualmente, aunque tu vieran inferioridad numérica de’ armamen tos, pero no de’ calidad. La guerra la gana, hoy, la técnica! He aquí tina verdad que conviene no olvidar! ¡Es lección reiterada por la historia moderna! 476 REVISTA Número 320 Julio 1967 - DE AERONAUTICA Y ASTROAUTJCA LAADMINISTRACION MILITAR Y LAJURISDICC CONTENCIOSO ADMINISTRATIVA - Por FRANCISCO SALVADOR NI VELA Teniente Coronel Auditor del Aire. (Trabajo premiado en el de Artículos N. S. de Loreto.) legislador, cuestiones ambas que, pese a su indiscutible interés doctrinal y prácti co, no ha sido objeto, a nuestro juicio, del debido estucho por parte de quienes, (le tina u otra forma, estamos implicados en esta Administración. He aquí, pues, planteado en sus líneas generales el propósito que nos anima al abordar este trabajo y anticipado al lec tor lo que de interés pueda tener para él, si decide (letener en estas líneas su aten ción. Propósito. Ei tema que vamos a desarrollar en este trabajo requiere (le un breve, pero previo, planteamiento. Se trata, en primer lugar, de poner de relieve, siquiera sea a base de grandes pinceladas, cómo la «Administración mi litar», si bien no constituye un género distinto de la civil (1), ostenta, sin em bargo, respecto (le ésta, una auténtica « especialidad». Sentada esta premisa previa, que nos servirá a manera de ambientación del tema, entraremos en el estudio de lo que pudiéramos decir constituye la idea ma triz de nuestro empeño, a saber, el hacer resaltar lo más gráficamente posible, có mo esa especialidad (le la «Administra ción militar» repercute en el ámbito pro pio de la Jurisdicción contencioso-admi nistrativa, operando en un doble sentido De tina parte, excluyendo del cono cimiento revisorio de (licha Jurisdicción determinadas decisiones del Gobierno que afecten a la «defensa del territorio nacio nal», al «Mando» y a la «Organización militar» ; y De otra, no permitiendo la interpo sición (le recursos contencioso-administra tivos ante el Tribunal Supremo contra al gunos de sus «actos administrativos», en los casos taxativamente señalados por el 1 La «especialidad» de la Administración militar. Aun cuando la Administración del Es tado actúa con personalidad jurídica «úni ca», proclamada en el artíctilo 13 de su Ley de Régimen Jurídico, ello no impide que en el conjunto de Organos jerárqui camente ordenados que la constituyen pueda distinguirse tina Administración ci vil y una militar, a manera de dos brazos o ramas de aquel tronco único y común. No entra en nuestro ánimo, ni tendría utilidad al fin último de este trabajo, (le— tenernos en disquisiciones doctrinales ni sobre la diferenciación histórica entre am bas Administraciones (2), ni respecto (le su actual (helirnitación conceptual. — (1) XXII1 Concurso Así lo afirmó el sefior López Rodó en su discurso ante las Cortes al defender el Proyecto de Ley de Procedimiento Administrativo, en la sesión del día 15 de julio de 1958. 477 (2) Históricamente, Administración civil y militar anduvieron separadas. En la antigua Roma, la primera actuaba dentro de sus murallas, mientras que la mi litar ejercía su «imperium» fuera de ellas, en los terri torios sometidos a su dominio. REVISTA DE AERONAUTICA Número Y ASTRONAUTIcA Nosotros partimos (le la existencia, den tro (le nuestra organización (lel Estado, (le una «Administración militar», no en el sentido lato que antaño se le dió a esta expresión (3), sino en el genérico (le una «actividad administrativa» que, al igual que la civil, se halla encomendada a ulios (letermínados Departamentos ministeria les—los Ministerios (lel Ejército, Marina y Aire—que, junto con el resto (le los enumerados en el artículo 3•2 (le la cita da Ley de Régimen J urídico, integran la Administración Central. Así enfocado el tema, esto es, contem plando en su realidad fáctica y jurídica a la «Administración militar», únicamente nos proponemos en esta primera parte (lejar claramente sentada su «especiali dad», pues ello nos auxiliará en el plan teamiento (lel problema «Administración militar» y «Jurisdicción contencioso—ad ministrativa» que, repetimos, constituye el objetivo final (le este trabajo. Anticipémonos a proclamar que la «es pecialidad» (le nuestra Administración arranca (le su propio concepto Para A. Guaita (4) se puede (listili— guir en el concepto (le «Ad mínistración militar» un sentido objetivo y otro subje tivo. En sentido objetivo, la define como el sector (le la actividad (le la Adminis tración «que provee a la seguridad y (le— fensa exterior e interior del Estado». Y, en sentido subjetivo, como el conjunto de órganos públicos cuya competencia es triba y consiste, fundamentalmente y (le modo excluyente, «en la realización (le aquella (lefeusa». Por su parte, el General López-Mu ñiz (5) la define como la «actividad que el Estado desarrolla parzt garan tizar la (lefeusa (le su soberanía y la integridad e independencia del territorio nacional». El uso, sin embargo, nos dice el propio autor, ha consagrado el empleo (le tliclia voz para significar «el conjunto (le cono— 320 Julio 1967 - cimientos y actividades encaminadas a or ganizar y pipantr la Nación para la guerra». Cualquiera (le estas definiciones es útil a nuestro empeño, l)ties, a través (le ellas, podemos intuir la «especialidad» (le la «Administración militar» en tina triple di mensión A) En cuanto a su «fin». Xl ieutras el objeto de la Adunnistración civil es la prestación (le «servicios públi cns», la militar provee a un solo y tras cendente fin la defensa nacional (6). Sin entrar en la polémica administrati va (le si la defensa nacional es o no un «servicio público» (7), pties ello nos (les— viaría (lel eje de marcha (le nuestro tra bajo, es lo cierto que, ni edian te la salva— guarda (le aquélla, la «Ad ministracion mi litar» hace posible a la civil el cumpli miento (le su misión, indiscutible realidad que ba llevado a reconocer a más (le un tratadista (le Derecbo administrativo jtie, si bien los Ministerios militares no pres tan (lirectamente servicios públicos, co operan a su satisfacción mediante el tnan— tenimiento (le la paz que permite su nor mal desenvolvimiento. El «fin», por tanto, asignado por el Es tado a la «Administración militar» im— pregna, como seguidamente veremos, (le « especialidad » a su actuación. B) En cuanto a sus «órganos». La defensa nacional requiere y exige jmra ser efectiva (le una(s Fuerzas Arma— (las, esto es, (le unos Ejércitos ele Tierra, Mar y Aire, cuya presencia constituya la niejor garantía para su seguridad interior y exterior. Ahora bien estos Ejércitos son, (le por sí, instituciones nacionales que se rigen por sus Leyes y (lisposiciones especia— (3) La Ley Constitutiva del Ejército, de 29 de noviembre de 1878, enumeró entre las Armas, Cuer pos y Servicios a la «Adminis(ración militar». (6) La reciente «Ley Orgánica del Estado» dice en su artículo 37 que: «Las Fuerzas Armadas de la Nación, constituídas por los Ejércitos de ‘Fierra, Mar y Aire y las Fuerzas de Orden Público, garantizan la unidad e independencia de la Patria, la integridad de sus territorios, la seguridad nacional y la defensa del orden institucional.» (4) «Administración Pública y Defensa Nacional». Madrid, 1961. (5) «Diccionario Ilustrado de la Guerra». 478 (7) Para A. Guaits, la defeni nacional es un caso típico de servicio «uti universi», en cuanto que el destinatario del mismo es la colectividad, global mente considerada, y no unos determinados particulares. Ntmero REVISTA 320 Jutio 1967 - DE AERONATJTICA Y ASTRONAUTICA les (8) en todo lo relativo a su Organi zación, Mando y jerarquía. Y ello, corno es lógico suponer, provoca la consiguiente «especialidad» (le la «Administración mi litar» por cuanto en ella hay que distin guir : de una parte, una neta «actividad administrativa», que es la que desarrollan los Ministerios del Ejército, Marina y Aire como órganos (le la Administración Central y que se irradia por la periferia a través (le las Atitoridades militares res pectivas (9) ; y (le otra, una acción de i/Iando, organización y disciplina de los Ejércitos, ejercida ior los propios Minis terios castrenses y Autoridades mencio nadas, en el ámbito de sus respectivas competencias, la cual no se encuadra en el marco jurídico (le aquella actividad ad ministrativa, sino que se rige por las Le yes orgánicas y disposiciones especiales (le los mismos (10). Esta distinción fijé claramente advertida por el legislador al elaborar la vigente Ley de Procedimiento Administrativo, pues al defender el señor López Rodó el Proyecto de Ley ante las Cortes (11) dijo : «No se olvide que al hablar (le procedimiento se hace referencia al que regula la actividad administrativa (le lOS Ministerios, no, na turalmente, a la organización, disciplina ni acción de los Ejércitos que, corno es ló gico, se rigen y han de regirse por sus propias Leyes especiales.... No se trata, pues, de aplicar una Ley (le Procedimien to a los tres Ejércitos, sino a la actividad que desarrollan sus respectivos Departa— nientos ministeriales, en cuanto órganos (le la Administración Central», (8) Artículo 1. de la Ley Adicional a la Consti tutiva del Ejército, de 19 de julio de 1889: «El Ejér cito constituye una Institución nacional regida por Leyes y disposiciones especiales. (9) El artículo 7.° de la Ley de Conflictos juris diccionales, de 17 de julio de 1948, reformada por la de 8 de junio de 1957, atribuye a los Capitanes Generales de Región Militar y de Departamento Ma rítimo y a los Generales jefes de Región y Zona Aéreas el concepto de «Autoridades administrativas» como representantes de los diversos ramos de la Ad ministración del Ejército, Marina y Aire. Ver tam bién el artículo 45 del Código de justicia Militar. (10) El artículo 21 de la Ley de Régimen jurídico advierte que: «Los Ministerios del Ejército, Marina y Aire se regirán, en lo que afecta a su Organización, Mando y jerarquía, por sus disposiciones especiales...» (11) Citado en la Nota 1. No se ocultará al lector que esta doble vertiente acttiacional, además de consti tuir una acusada «especialidad» (le la «Ad ministración militar», ha de tener honda repercusión cuando se trate (le someter a revisión ante la Jurisdicción contenciosoadministrativa su actividad. C) Respecto del «estattito jurídico» propio (le esta Administración. Fácil es suponer que en razón al fin y a la singularidad de sus órganos de actua ción, el legislador haya tenido que dotar de un marco jurídico especial a la «Admi nistración militar». Sin pretender realizar un estudio ex haustivo de este estatuto, pues ello des bordaría los límites del presente trabajo, vamos a intentar dar al lector una visión panorámica del mismo, a base de poner simplemente (le relieve sus perfiles más acusados que, a nuestro juicio, se pueden resumir así 1) En el estatuto jurídico de la «Ad ministración militar» resalta, en primer lugar, lo que los administrativistas deno minan u «autarquia», esto es, la facultad legal (le proveerse a sus propias necesida des orgánicas y funcionales con indepen dencia de la civil (Jurisdicción y Tribuna les propios, Academias, Escuelas y Ccii tros de enseñanza militar de cada Ejército, Indtistrias militares, etc.). 2) El régimen jurídico específico de su «personal militar» (12), y hasta el del ci vil a su servicio, funcionario o no (13), dacIas las peculiaridades de los Departa mentos en que cumplen sus cometidos. 3) La normativa aplicable a su «pro cediniiento administrativo», es decir, a la actividad de esta naturaleza que des arrollan los Departamentos militares, «sal vo en lo que afecta a la organización, mando y jerarquía de los Ejércitos» (14). (12) Consagrado en el artículo 49 de la Ley de Régimen jurídico. Ver también las recientes Leyes 113 y 112/1966, de 28 de diciembre, sobre sus «retribu ciones» y «derechos pasivos». (13) Ver: Ley 103/1966, de 28 de diciembre, y el Decreto de 20 de febrero de 1958, relativos a este «personal civil», Funcionario y No Funcionario. (14) Artículo 1. del Decreto 1408/1966 («Bo letín Oficial del Estado» núm. 146), adaptando la Ley de Procedimiento Administrativo a los Departa mentos militares, y Disp. Final 2.5 479 REVISTA Niinero DE AERONAUTICA 320 Julio 1967 Y ASTRONAUTICA ramas de aquella Administración, es in— cuestionable, y (le tal prcipio hay que paltir, que los «actos» que (le la misma emanen quedan sujetos al control revisio nal (le la JÇA, o lo que es lo mismo, son impugnables en vía contencioso—adminis trativa ante el Tribunal Supremo. Es lógico que sea así, ya que, como dice la Exposición de Motivos de la U, «úni camente a través de la justicia, a través (le las normas y principios del Derecho, es posible organizar la sociedad y llevar a cabo la administración del Estado mnocler— no». La JCA constituye, en definitiva, una última y segura garantía «no sólo para el administrado, sino para la propia Admni— nistración» (18). II Sin embargo, aquel pl’illcipio apuntado no puede predicarse (le una manera abso Cómo repercute la «especialidad» de la luta, en cuanto que la «especialidad» de administración militar en el ámbito propio la «Administración militar» impone muy de la Jurisdicción contencioso-adminis particulares excepciones en su aplicación. trativa. Veanlos: La rúbrica que antecede, anticipa al lec tor cuál va a ser el objetivo (le esta se A) La “defensa nacional” y el “mando y orqanización militar”. gunda parte, sobre el que, séanos per1itida, una brevísima digresión He aquí el primer gran sector, esencial El artículo 1. de la Ley reguladora de mente vinculado a la «Administración mi la jurisdicción contencioso-administrativa litar», que el legislador excluye expresa (16), al atribuir a ésta el conocimiento (le mente del ámbito propio de la JCA. En las pretensiones que se deduzcan en rela efecto; el artículo 2. de la U dice textual ción «con los actos de la Administración mente pública sujetos al Derecho administrativo «Art. 2. No corresponderán a la Ju y con las disposiciones con categoría in ferior a la Ley», .riene a proclamar «ab risdicción contencioso—administrativa initio» una vinculación entre Administra Ii) Las cuestiones que se susciten en ción pública y Jurisdicción contenciosorelación con los actos políticos del Gobier administrativa (17) en cuanto que, para no, corno son los que afectan a la defensa tener acceso a esta Jurisdicción, es requi del territorio nacional, relaciones interna sito «sine qua non» que el acto impugnado cionales, seguridad interior del Estado y proceda de un órgano encuadrado en dicha mando y organisación militar, sin perjuicio A rlm in is t ración. de las indemnizaciones que fueran proce Pues bien; como quiera que la «Adnii (lentes, cuya determinación sí corresponde nistración militar» es uno (le los brazos o a la Jurisdicción contencioso—administra tiva. Por consiguiente, los «actos políticos» (15) Por ejemplo: Artículo 107 de la Ley de Ex’ del Gobierno qtie afecten a esas tres mate propiación Forzosa; Decreto’Ley de 27 de julio de castrenses subrayadas, aun cuando 1959, sobre inversiones de capital extranjero en ]as rias empresas espafiolas, que excluye de su ámbito a las puedan suscitar cuestiones, son «prima fa- 4) Finalmente, la «adaptación» que en muchos casos ha de experimentar la le gislación general para su aplicación por la «Administración militar», y la no aplica ción en la misma de determinadas dispo siciones por razones (le (letensa nacio nal (15). Creemos que este rápitio bosctiejo acer ca (le la «especialidad» (le la «Administra ción militar» será suficiente para que en tremos ya, sin más dilación, en el estudio (le nuestro principal empeño, a saber, cómo opera esa especialidad al entrar en contacto con el ámbito propio (le la Turis (licción contencioso-administrativa, industrias relativas a la defensa nacional. yo (16) U. De 27 de diciembre de 1956, en lo sucesi’ (17) En lo sucesivo la designaremos con la si’ gla JCA. (18) Trujillo, Quintana y Bolea. «Comentarios a la Ley de lo Contencioso’ administrativo». Ediciones Santillana. Madrid. 480 kEVIsTA bE ARO7AUTICA ÁT»rnero 320 JuUo 196 Y ASTRONAUTICA - 2) Tales decisiones han de afectar a las materias castrenses indicadas de un modo «trascendente», es decir, han de te ner una naturaleza «política». 3) A «sensu contrario» no merecen tal calificación las resoluciones de los Depar tarnentos militares clue, sin ser adoptadas por el «Gobierno», contemplan pretensio nes o situaciones particulares de los inte resados. Así, la Jurisprudencia ha declarado «iiiadmisibles», de conformidad con el apar tado b) del artículo 2. de la U, lo.3 recursos contencioso_administrativos in terpuestos en los casos siguientes Constituye «acto político» del Go bierno, en cuanto afecta a la organizacióli militar de la Armada, la Orden acordada en Consejo de Ministros, a propuesta del de Marina, disponiendo el pase del recu rrente a la Escala de Tierra, al estimar no reunía condiciones para el mando de bu ques de la Escuadra (S.S de 16 de mayo cte 1960, Sala 5,5), Afecta a la «organización militar» y, por ende, son ajenas a la competencia de la jCA, las cuestiones relativas al ascenso del personal de la Escala de Tierra del Arma de Aviación, promovidas por los interesados al amparo del Decreto de 24 de noviembre de 1939, después de promul gada la Ley de 15 de julio de 1952 (55 de 22 de marzo, 17 de abril y 30 de mayo de 1958, Sala 5•5)• (19) Sobre el concepto de los «actos políticos» Demandándose por el recurrente «la puede verse: Sánchez Agesta. «Concepto jurídico del promoción de disposiciones que. afectan a acto político». 1. E. Reus. 1959.—A. Guaíta. «Actos la organización militar», resulta incompe políticos y justicia administrativa». Universidad de San tiago, 1960.—García de Enterría. «La lucha contra tente para ello la JCA (S.5 de 10 de marzo las inmunidades del Poder en el Derecho administra de 1964, Sala 5•5). tivo». R. A. Pública núm. 38. En cambio, no se ha aplicado tal ex Véase también la Exposición de Motivos de la U acerca de esta exclusión de los «actos políticos», por cepción, pese a invocarla el Abogado del ser esencialmente distintos de los «administrativos». Estado, en los recursos siguientes (20) Aun cuando la Jurisprudencia fué, ea prin No es acto político del Gobierno, ni cipio, vacilante respecto a la concreción del Organo afecta al mando ni a la organización mi emisor para que el acto pueda ser calificado subjeti litar el hecho cte que el Consejo Superior vamente de «acto político», pues la S.5 de 18 de julio de 1959 (Sala 5.s) estimó como tal una Orden de de la Armada clasificase a determinados cje» infiscalizables ante esta Jurisdic ción (19). Sin duda no se ocultará a la intuición del lector que la parquedad de expresión del legislador al aludir tan genéricamente a esas tres materias castrenses_defensa nacional, mando y organización militar— puede plantear las consiguientes dudas respecto qué cuestiones sí y cuáles no se encuentran comprendidas en ellas. Efec tivarnente, así es, por cuanto como reco nocen los comentaristas de la U, el legis lador se limita a enunciar las «materias irrecurribles», pero deja sin concretar «su objeto o contenido propio». Hay que acudir, pues, a la Jurispruclen cia para, a través de sus pronunciamientos, venir en conocimiento de qué se entiende por el Tribunal Supremo «actos políticos» del Gobierno que, por afectar a la defensa nacional, al mando o a la organización mi litar, son infiscalizables ante la JCA. De entre las sentencias compulsadas (todas ellas dictadas con posterioridad a la vi gente U), podemos deducir la siguiente. doctrina 1) Han de tratarse de verdaderos «ac tos políticos», es decir, de decisiones «adoptadas en el seno del Gobierno, con cebido como unidad de conjunto». Tal es la doctrina sentada respecto de dichos ac tos, a partir cte la interesante Sentencia cte 18 de febrero (le 1963, Sala 4. (20). — — — — la Presidencia del Gobierno aisladamente adoptada; y la S.5 de 10 de noviembre de 1959 (Sala 5.5) dió igual calificación a una Orden emanada del Ministerio del Aire, de 27 de diciembre de 1958, convocando un Curso de Estado Mayor, por estimar que la selec ción de este personal corresponde a la potestad de «organización militar»; sin embargo, a partir de di cha 55 de 18 de febrero de 1963 (Sala 4.5) la doc trina jurisprudencia1 es terminante exigiendo, con un evidente criterio restrictivo, que el organismo emisor de la decisión «lo ha de ser el Gobierno, concebido como unidad de conjunto», es decir, los Ministros presididos por el Jefe del Estado. La trascendencia de esta doctrina, por evidente, no requiere de mayor ponderación. 481 kViSTÁ b AÉkÓNAUTÍÓA Numero Y ASTRONAUTICA 320 Julio - 1967 Coroneles para el ascenso al Generalato. (Sentencia (le 11 (le octubre (le 1961, Sala quinta) (21). No afecta a la defensa nacional iii al Mando militar, el (lestino (le un Coman dante Interventor a un Servicio Regional, amén (le que el acto impugnado no fué adoptado por el Gobierno (S.’ (le 7 (le abril (le 1960, Sala 5.’). No Puede calificarse (le cuestión Po lítica, a los efectos (lel apartado b) del ar ticulo 2. (le la U, la pretensión del re currente (le ser ascendido a Coronel Au (litor de la Escala Complementaria (Sen tencia de 5 tIc octubre de 1961, Sala 5.’). terminados» ascensos y recompensas, es (lecir, los que se otorgan pr los Ministe rios militares con arreglo a los respectivos «Reglamentos de Recompensas en tiempo de guerra» (22), pues; es incuestionable que la «Administración militar» ha de obrar en estas concesiones con la más absoluta discrecionalidad, puesto que se trata (le apreciar «merecimientos contraídos en campaña y hechos de armas», incompati ble con cualquier control jurisdiccional posterior. No así, cuando se trata (le as censos de Jefes, Oficiales y Suboficiales en régimen ordinario, o de recompensas que no tengan tan específica causa ie conce sión (23). B) Actos administrativos emanados de la La Jurisprudencia del Tribunal Supre “Administración militar” que no son mo nos confirma esta distinción, puesto que recurribles ante la Jursdwcj6n con ten cwso-adminjstratjva, 1.1. V i e n e conociendo de cuantos recursos contencioso_admjnjstrtti_ Se trata, concretamente de los supues vos se interponen por Jefes, Oficia tos contemplados por el legislador en los les y Suboficiales de las Fuerzas apartados c), 0) y f) del artículo 40 (le Armadas, en materia (le «ascen la U. sos» en régimen normal (la ju En ellos, se alude a verdaderos «actos risprudencia es copiosísirna) administrativos» dimanantes tic la «Admi 1.2. Ha rechazado los recursos (leman nistración militar» que, como tales, serían (laudo la «Medalla Militar Indivi— Perfectamente fiscalizables por la JCA, a dual» (S.’ de 7 de junio (le tenor del artículo 1. (le su U ; sin em 1961, Sala 5.’) y la «Medalla de bargo, el legislador no permite la interpo Marruecos» (S.’ (le 24 de marzo sición tic recursos contencioso_adnijiiistm_ (le 1960, Sala 5.5), al fundamentartivos contra los mismos, eir razón a la se «en merecimientos contraídos propia «especialidad» de nut stra Adminis en campaña». tración que opera con efecto «excluyente» 1.3. En cambio, ha admitido los recur al entrar en contacto con el ámbito (le sos interpuestos contra (lenegacio dicha Jurisdicción nes de la «Medalla de Sufriniien— Analicemos seguidamente cada uno (le tos poi la Patria», por accidentes tales supuestos ocurridos en actos de servicio 1. «Ascensos» y «recompensas» a Je (Sentencias (le 10 de mayo de 1958, 29 de octubre y 16 de diciembre fes, Oficiales y Suboficiales (le los (le 1965; y 30 de junio de 1966, Ejércitos (le Tierra, Mar y Aire Sala 5.’) ; contra denegaciones de «por merecimientos contraídos en la «Cruz (id Mérito Militar» y de campaña y hechos (l e armas» (apartado c) del artículo 40 EJ. la «Cruz del Mérito Aeronáutico» El legislador contempla aquí unos «de— (21) Esta Sentencia es anterior a la promulgación por Marina de la Ley 168/65, de 21 de diciembre (eB. O. E.» núm. 306), la cual, como más adelante veremos, excluye expresamente del recurso contencioso. administrativo las decisiones que, en el ejercicio de sus funciones, adopte el Consejo Superior de la Armada. (22) Véase el Reglamento del E. de Tierra (Ley de 14 de marzo de 1942), aplicable al Aire (I.ey de 18 de junio de 1942) y el de la Armada (R. Decreto de 19 de octubre de 1921). (23) Lo limitado de este trabajo nos impide cital la legislación sobre ascensos en régimen normal en los tres Ejércitos, ni la de recompensas actualmente vigente. 482 Nirnero 320 - Julio REVISTA 1967 AROAUTICA Y ASTRONAUTICA solicitadas al amparo de los Decretos de 31 de enero (le 1945, 21 (le octubre de’ 1954 y 31. de diciembre (le 1959 (Sentencias de 16 de di ciembre (le 1965 y 10 (le noviem bre de 1966, Sala 5,, respectiva mente) ; y, asimismo, contra de negaciones de la «Cruz de la Constancia en el Servicio», pro nunciadas lor el Ministerio del Aire (S.’ de 20’ (le enero de 1964, Sala 5•5), y por el Ministerio del Ejército (S.5 de 16 de febrero (le 1966.) 2. Resoluciones que recaigan en ex pedientes gubernativos segtndos a Oficiales, Suboficiales y Clases (le Tropa o Marinería, «con arreglo al artículo 1.011 y siguientes del Código de justicia Militar» (apar taclo d) del artículo 40 L.J). Las 00. MM. que pongan fin a dichos expedientes, decretando la separación (Id servicio del expedientado, no son recurri bies ante la JCA, ya que la estimación por el Mando militar de si es o no perjudicial la continuación del interesado en el servi cio de las armas, excluye, por su propia esencia, todo otro control jurisdiccional posterior (24). 3. Resoluciones que tengan origen «en otros procedimientos estable cidos por el mismo Código» (apar taclo ci) (lel artículo 40 (le la U). Contempla aquí el legislador los siguien tes procedimientos regulados en el Código tic Justicia i’Iilitar. 3.1. El procedimiento (le los «Tribuna les (le Honor» (arts. 1.025 al 1.046), ya que las Resoluciones (le los Ministerios militares, decretan— (lo la separación del servicio y baja del residenciado, no son suscepti bles (le recurso alguno’ (55 (le 19 de abril de 1960.) 3.2. El procedimiento pal-a la invalida— (24) La Jurisprudencia, sin embargo, aun recono’ ciendo que. a. la JCA le está vedado entrar a conocer sobre tales resoluciones, ha entendido, no obstante, que ostenta facultades para «examinar y velar por la pureza del procedimiento, por ser éste de orden pú’ blico’» (S. de 10 de mayo de 1960). D ción de notas desfavorables (ar tículos 1.047 al 1.060), dado el carácter de «gracia» que ostentan las solicitudes o propuestas (le in validación. 4. Resoluciones que se refieran a «postergaciones impuestas regla mentariamente» (apartado d) del artículo 40 de la U). Aquí el legislador no hace sino recoger la exclusión de todo recurso cine, con ante lación a la vigente U, habían ya procla mado las disposiciones castrenses regula doras (le la «postergación» de jefes, Ofi ciales, Sul.)oficiales y asimilados (25), ya que ésta es una situación militar pre vista en el Decreto de 12 de marzo de 1954, común para los tres Ejércitos, a la que se pasa como consecuencia de «cali ficaciones desfavorables» en que pueda in currir en su vida profesional el militar, materia no apta tampoco de ser fiscalizada por la Jurisdicción que nos ocupa. 5. Finalmente, aquellos «actos que se dicten en virtud de una Ley que expresamente les excluya de la vía contencioso-administrativa» (apartado f) del artículo 40 (le la U). Todos los comentaristas (le la L.J coin ciden en afirmar que este apartado f) (le su artículo 40, en cuanto que impide la interpretación de recursos contencioso-ad ministrativos contra aquellos actos que se dicten en virtud de una Ley cine expre samente los haya exciuído (le tal recurso, es el que tiene más trascendencia (le todos los supuestos contemplados por dicho ar tículo, ya que si a través de Leyes se van cercenando los límites de la JCA, se corre el evidente riesgo (le disminuir el alcance y finalidad que en un Estado de Derecho tiene esta Jurisdicción. Sin embargo, la Jurisprudencia, forzoso es consignarlo, viene mostrándose parti cularmente «restrictiva» en la aplicación (le este apartado por’ cuanto, de una parte, exige que la exclusión del recurso conten cioso—administrativo venga impuesta por Ley (o’ por Decreto-Ley, según la Senten (25) Ver: Decretos de 28 de septiembre de 1951. 16 de noviembre de 1951 y 1 de jubo de 1965. 483 kÉVisrÁ DE AERÓ7AUTI’A Nsmero Y ASTRONAUTICA cia de 4 (le mayo (le 1963); y, de otra, que ha (le constar con toda claridad que la vta que se excluye sea la contencioso—adminis trativa, ya que la expresión «sin ulterior recurso» utilizada frecuentemente cii las (liSpoSiciones adniinistrativas, carece (le eficacia a estos efectos (S.’ de 26 (le enero (le 1960, entre otras). No obstante, esta doctrina ha sido objeto (le una inipor tante excepción, como seguidarnente verenios, tratándose del «Reglamento (le la Real y Militar Orden (le San Hermene gildo», aprobado por Decreto (le 25 (le mayo (le 1951. Examinemos a continuación qué «actos» emanados (le la «Administración militar» están excluídos del recurso contenciosoadministrativo por aplicacióa de este apar tado f) del artículo 40 (le la U. 320 .íulio 1967 - naturaleza especial militar en cuanto (lis— ciernen conductas en el servicio (le las armas con el más acrisolado honor militar, que han (le ser consultadas con S. E. e] Jefe del Estado y Generalísimo (le los Ejércitos, en su calidad (le Jefe y Sobe rano (le la Orden, lo cual excluye a sus actos (le toda revisión jurisdiccional (26) (27). Las resoluciones (le los Miiiiste nos militares, acordando la expul sión o baja (le las Clases (le Tropa o Marinería «que no tengan reco nocido en propiedad su empleo». La imposibilidad (le interponer recurso contencioso—administrativo contra (lichas resoluciones, fué expresamente procla niada por la Ley de 30 (le julio de 1959, y ha sido confirmada por la Jurisprudencia (le 18 (le mayo y 30 (le junio 5.1. Los Acuerdos (le la Asamblea (le (Sentencias la «Real y Militar Orden (le San (le 1960.) Hermenegildo», s o b r e ingresos, 5.3. Las decisiones del «Consejo Supe ascenso y permanencia en la Or rior del Ejército», en materia (le den. clasificación e inclusión en los cua (lros (le elección para el ascenso Tanto la Ley (le la Jurisdicción con ten al Generalato, (le acuerdo con la cioso-administrativa (le 22 (le junio (le 1894 Ley (le 19 (le abril de 1961 (<Bo como el Texto refundido de 8 (le febrero letín Oficial del Estado» núm. 96.) (le 1952, excluyeron expresamente (Id re curso contencioso-administrativo las reso El artículo 17 de dicha Ley expresaluciones consultadas por el Consejo Supre mente dispone que «Contra las decisiones mo (le Justicia Militar, como Asaml)lea (le (Id Consejo Superior del Ejército en el las Ordenes Militares (le San Hermetie ejercicio (le las funciones que le atribuye gildo y San Fernando. esta Ley, no se dará rectirso alguno, y quedan también excluidas dichas decisio Al n recogerse en la vigente U tal ex nes (le la vía contencioso—administrativa». clusión en su artículo 40 que estamos co Por consiguiente, la «inadmisihilidad» por mentando, la (loctrina entendió que (lichas aplicación (Id apartado f) del artículo 40 resoluciones había que entenderlas some (le la U es bien manifiesta. tidas al control revisional (le esta Jurisdic 5.4. Las decisiones del «Consejo Supe c iói i. rior (le la Armada», en uso de las No lo ha entendido así el Tribunal Su facultades que le concede la Ley premo. Pese a que el Reglamento (le la (le 21 (le diciembre (le 1965 G<Ro Real y Militar Orden de San I-Iermene gildo fué aprobado por Decreto de 25 de mayo de 1951, la pioliibicióii impuesta por (26) SS.a de 17 y 24 de enero, 7 de febrero, 27 su artículo 41 (le 110 caber recurso en vía de marzo, 28 de abril y 19 de mayo de 1961, y muy particularmente la S. de 8 de marzo de 1963. contencioso-administrativa contra las re soluciones (le su Asamblea, hace «iiiadmi (27) Ello, no obstante, la S. de 26 de enero de 1960, Sala 5., conoció de un recurso contra Acuerdo sibles», según la Jurisprudencia, los inter de la Asamblea de la Orden en que se «denegó el puestos p o r los interesados, (lado lo abono de un determinado tiempo» al recurrente. Y dispuesto en el apartado f) del artículo 40 la S. de 7 de diciembre de 1960, Sala 5., parece (le la U, afiadiendo, por otra parte, que distinguir la naturaleza de los Acuerdos, admitiendo recurso contra los que se refieran a «materia pura. se trata (le resoluciones que revisten una el mente económica». 484 5.2. Número REVISTA 320 Julio 1967 DE AERONAUTICA - letín Oficial del Estado» núrne— ro 306), sobre clasificación (le Vicealmirantes, Contralmirantes, Generales, Capitanes (le Navío y Coroneles, para el ascenso al em pleo inmediato. También el artículo 55 de dicha Ley prevé : «Contra las decisiones del Consejo Superior de la Armada en el ejercicio (le las funciones que le atribuye esta Ley, no se dará recurso alguno, incluído el conten cioso-administrativo». Mediante esta ex clusión por «Ley», entra en juego el apar taclo f) del artículo 40 de la U y se evita q puedan interponerse recursos conten cioso-administrativos contra las decisiones (le este Consejo, como ocurrió con el cine fué objeto (le la S.5 de 11 de octubre de 1961, Sala 5•a, a que aludimos en la No ta 21 (le este trabajo (28). 5.5. Las resoluciones que recaigan en solicitudes promovidas al amparo del Derecho de Petición regulado en la Ley de 22 de diciembre de 1960 y Decreto cte 18 de enero (le 1962, que dió normas para su ejercicio por el personal de las Fuerzas Armadas. La S. de 22 (le febrero de 1965, Sala Quinta, declara tales resolticiones ex cluídas del recurso contencioso-adminis (28) Por lo que se refiere al «Consejo Superior Aeronáutico», ni la Ley de 17 de julio de 1948 («Bo letín Oficial del Etado» núm. 200), que determina sus facultades para la clasificación de los Generales y Coroneles que deban cubrir las vacantes en los em pleos superiores, ni el Decreto de 24 de enero de 1958 («B. O. E.» núm. 29) sobre sus facultades para la designación de los Coroneles que hayan de asistir a los cursós de aptitud para el ascenso a General, ni el Decreto de 18 de agosto de 1959 («B. O. E.» nú mero 204), que regula el procedimiento para la adop ción de sus acuerdos, contienen una prohibición ex presa de interposición de recursos contra las decisio nes que adopte en uso de sus mencionadas facultades. Nos limitamos a consignar tal circunstancia, que creemos digna de meditación, sobre todo .a la vista de las «Leyes» dictadas por Tierra y Marina, exclu yendo expresamente la «vía contencioso,adminístrativa» contra las decisiones de sus respectivos Consejos Su periores (tal como exige el apartado f) del artículo 40 de la U), ya que el estudio jurídico de la legislación apuntada y de sus consecuencias prácticas desbordaría los concretos límites de este trabajo. Y ASTRONAUTICA trativo por imperativo del apartado f) del artículo 40 (le la U. Por lo que respecta a las decisiones que adopten los Ministros militares en materia de reclamaciones formuladas por el personal no funcionario dependiente de sus respectivos Establecimientos mili tares, regidos por la Reglamentación Na cional de 20 de febrero cte 1958, si bien su artículo 90 declara que contra aqué llas «no se ciará ulterior recurso ante la J urisclicción de Trabajo, ni cualquier otra ordinaria o especial; sin embargo, es lo cierto cjue el Tribunal Supremo en S. de 26 de noviembre de 1963, Sala 4a, no ha entendido tal exclusión comprendida en el apartado f) del artículo 40 de la U, al ostentar dicha Reglamentación rango de Decreto y exigirse por aquél (!UC sea una «Ley» la que expresamente excluya la materia de la vía coitencioso-adniinis trativa, doctrina cjue, a nuestro juicio, no ha valorado debidamente la entidad del problema, ya que en tales decisiones se resuelven, en definitiva. «cuestiones labo rales» derivadas de la relación de trabajo entre Establecimiento militar y personal contratado, los cuales, por Sil proput na turaleza y contenido, se hallan, en todo caso, fuera del ámbito (le la JCA por ex— ires. declaración contenida en el aparta— do a) del artículo 2. de su U. Advertiremos, finalmente, que las (lecisio nes de las «Asociaciones Mutuas Benéfi cas» de los tres Ejércitos e Institutos ar mados no son recurribles en vía conten cioso—administrativa, según reiterada Ju risprudencia (SS.’ de 16 de junio cte 1964 y 18 de enero y 26 de octubre de 1965. Sala 5.). al no ser aquéllas Org-anos de la Administración ni estar sujetos stis ac tos al Derecho administrativo. * * * El tema no queda agotado con cuanto antecede; pero dentro de los límites im puestos por la concreta extensión de este trabajo, creemos que podrá servir de mo desta aportación al estudio más profundo y ambicioso de la problemática aparejada a la «especialidad» de nuestra «Aciminis tración militar». 485 REVISTA DE AERONAUTIcA Y Número ASTRONÁUTICA 320 Julio 1967 CON LAVIFLOTA ENELMEDITERRA Por JOSE MINCUJLLON i’IDA L Cafitdn Ayuclonte de iuuen jeros /Jeronáuticos. II La visita al «Independence». todo esto, y porque no quiero causarles la más Iníninla molestia, les ruego se con Como les prometí, hoy hablaremos del formen con un breve resumen informativo «.[ndepenclence». Para ello, lo mejor sería (le aquella charla y con lo q (le buenamente trasladarles la magnífica y detallada con sacar (le mi torpe condición de ferencia que en el «briefing» de Puente (le puedan «cicerone» en la visita imaginaria (lflC Mando nos dió su Comandante, el Capitán efectuaremos (le inmediato por las (listínde Navío John P. Fox. Pero confieso mi tas (lependencias del barco. incapacidad a tal efecto, entre otras ra Lo (le las molestias, pronto lo compren zones, porque no tengo la transcripción li teral de la misma, ni los conocimientos y (lerán. Vayamos, pues, al extracto de lo competencia de tan ilustre marino, ni que nos dijo el Comandante Fox. siquiera conservo la profusión de fotogra El «In(lependlence», adeniás (le un mo fías que él utilizó en su disertación. Por (lerno aeródromo, con cerca (le cien avio486 REVISTA DE AERONÁUTICA Número 320 Julio 1967 Y A5VROXAUVICA - y, tal vez porque soy de «secano», nes de dotación, es una ciudad flotante de cabeza fracasé. conseguí descubrir el proce unos cuatro mil quinientos habitantes, que dimiento No de apretar el grifo con una mano dispone de todas las instalaciones necesa y lavarme la cara con las otras dos... El ñas en una aglomeración urbana de ese se me complicó cuando pretendí volumen, desde un hospital hasta lujosas problema cafeterías, incluidos estudios de televisión, obtener agua templada; había que mante apretados los dos grifos, uno con cada bibliotecas, cine, una planta potabilizadora ner mano, y tratar de meter la cabeza bajo de agua del mar, iglesias, periódico, etc. del chorro. Tres veces lo intenté, y en Yo recorrí el barco en sus tres dimen las tres ocasiones, mi frente se estrelló siones varias veces y conservo todavía en contra el borde inferior del armario de mi cuerpo bastantes agujetas y moraduras aseo. Por fin encontré la solución: Como de las que suelen producirse, por falta de en las crisis internacionales, concerté un costumbre, cuando se suben y bajan es tratado de buena amistad con el inquilino trechas escaleras, se recorren kilómetros y del camarote de estribor. Los dos habría kilómetros de interminables pasillos, se mos de salir beneficiados. Y ocurrió lo franquean angostas puertas y se tropieza que muchas veces sucede con la firma de con todo aquello que sobresale más de dos un compromiso: cuando uno apretaba los centímetros del suelo, techo o paredes. He grifos, el otro se mojaba hasta los za aquí mi preocupación por no molestarles patos... y el motivo de haber sustituido tan fati Salvando estos detalles de anécdota goso paseo por una simple crónica des que justifican mi pretensión por relevarcriptiva. Eso sí, les ruego que a cambio, les de pongan ustedes un poco de imaginación y toro. cualquier incomodidad, vayamos al de orden en el relato, porque mi fuerte no El «Independence» es un barco de cs la Literatura. 80.000 de desplazamiento, cuya Pan que vean mis buenas intenciones cubiertatoneladas tiene la dimensión exacta de trataré también de que no pasen una no tres campos de fútbol, puestos uno a con che a bordo, sobre todo si no están ha tinuación de otro. Cuatro poderosas má bituados a la vida marinera y muy parti quinas accionan otras tantas hélices, gran cularmente a la de la Armada, porque des des, de cinco palas y 7 metros de diáme pués de lo que yo no dormí, tengo la tro, capaces de imprimir al portaviones convicción de que la ingeniería naval es una velocidad de 60 kilómetros por hora. una difícil técnica, en la que tras muchos ¿Y saben ustedes cuántos caballos de fuer años de estudio, se consigue situar un za tienen esos motores? Pues al «cambio camarote—o al menos ocurrió con el oficial», los mismos que reúnen 40.000 mío—, debajo de una hormigonera, a la coches modelo «Seat 600». ¿Se imaginan derecha de• una apisonadora y encima de el tamaño de los depósitos de combusti un compresor neumático de los que se de ble de este barco la cartera que se ne dican a romper el pavimento de las calles. cesita para mantenerlos llenos, sabiendo En el local recayente a la cabecera de la que consume diariamente 450.000 litros cama, pura coincidencia, estaba la carpin de petróleo? tería. La sierra mecánica alternó, durante Sí. El «independence» es grande, de toda la noche, con los martillazos, a un verdad, y le ocurre lo que a la inteligen ritmo y con un vigor tan extraordinarios cia, que se valora en grados crecientes a que llegué a dudar si el dndependence» medida que más el detalle. Lla corría grave peligro de hundimiento y se mamos genioestudia al hombre que sal)e mu había dado la orden de construir el Arca cho de nada. En el «Independencea son de Noé para salvarnos. Pero esto no es grandes hasta los agujeros. Yo he visto todo: la Construcción Naval se comple los escobones desde la bodega interior menta, como la Arquitectura, con el Arte cierto, una sala inmensa, limpísima, Decorativo y el empleo de buenos mate —por muy bien que se utiliza tam riales. Mi lavabo, por ejemplo, era muy bién comoiluminada, capilla protestante—, me bonito, de acero inoxidable, con una gri parecieron dos gigantescos túnelesy con fería de presión robusta y bien diseñada. sendos trenes de mercancías detenidos a Quise utilizarlo para aliviar mi dolor de 487 REVISTA DE AERONAUTICA Y Número ASTRONALTTICA sti entrada : eran las cadenas clas, cuyos eslabones pesan de las an cada uno 320 Julio 1967 - Para ‘los Servicios de Búsqueda y Salva mento, y como’ enlace’ y transporte entre lo’s barcos de la VI Flota, está la Unidad (le Helicópteros, con tres aparatos del tipo UH-2 Sea-Sprite, que eventualmente’ se eni pican también en la lucha antisubmarina. 750 kilos. El «Independence» sirve (le base al :la Aérea núm. 7, cuya composición es la siguiente Dos Escuadrones de Combate (núme ¡ Ah!, se nos olvidaba un grupo de heli ros 41 y 84) (le aviones a reacción F4B cópteros que parecen (le juguete, sin tripu Phantom, conocido como el mejor avión lación ni cabina, que cargados con torpedos convencionales o nucleares, son (lirigidos por de combate del mundo ; el (le mayor te radio contra los barcos enemigos. Esta Uni cho, más radio de acción y más potencia (le fuego. Puede alcanzar una velocidad dad se’ integra en la Task Fo’rce-60, o Fuer dos veces y media superior a la del so za de Ataque (le Portaviones. nido. Este aparato opera en todo tiempo La dotación efectiva (le material volante y va equipado con «misiles» convencio para cada una de estas Unidades Aéreas es i’ales o nucleares dirigidos por radio o ‘la siguiente célula térmica, procedimiento este último, Jet Fighter Bomber como ustedes saben, que orienta y lleva 24 aparatos. Jet Attack Bomber el proyectil hacia el avión enemigo, apro 36 » Jet Recon-Attack vechando la acción (le los rayos infrarro 6 » Special Mission jos procedentes del calor emitido por los 10 » Logisic Transport motores del propio avión. 1 » Helicopters 3 » Un Escuadrón de Ataqtie (núm. 75 con reactores A6A Intruder (Intrnso, Para cuyo’ servicio’ tiene asignada una plan modernos aparatos que pueden cargar tilla (le 1.500 hombres, entre’ oficiales y sol— 9.000 kilos de bombas o cohetes, volando (lados. a baja altura a la velocidad del sonido Las misiones que’ (iesen1pea esta avIación cii las condiciones (le tiempo más adver sas. Llevan (los pantallas (le radar y un cniharcaçla es la propia del Poder Aéreo’: defensa de’ las Fuerzas propias, caza, ata sistema de navegación inercial controla(lo por la técnica de los integradores di que convencional, lucha contra el dispositivo antiaéreo enemigo, reconocimiento y vigi gi tales. lancia, transporte’ y apoyo inmediato a las Dos Escuadrones (le Ataque (nÚnie Fuerzas de tierra. ros 86 y 324) con aviones Douglas A4A El personal de los Servicios (le’p’ista, man Skyhawk, conocido como el más pequeño reactor de los Estados Unidos; Es un tenimiento’ y abastecimiento, trabaja en “tec nicolor”. Me explicaré. Cada especialidad se monoplaza que incluye en su armamento «misiles» aire-tierra y aire-aire, así como diferencia a primera vista, por el color (le un “sweter” o chaleco que lleva encima del torpedos y dos cañones de 20 m/m. uniforme, tic acuerdo’ con el siginente có Un Escuadrón de Reconocimiento y Ata (ligo: el verde, lo utilizan los mecánicos (le que (nÚm. 1), al oue pertenece el gigantesco catapultas; el blanco, es para los (le comu reactor RA-5C Vigilante, de 32 toneladas nicaciones, y co’n una cruz ro’ja en la espal (le peso, con velocidad doble ‘de la del sonido da, distingue a los sanitarios ; el pardo o y un radio de acción de’ 3.700 kilómetros, marrón identifica a los mecánicos (le super especialmente equipado para reconocimiento ficie; el azul lo visten los especialistas de’ la radar-fotográfico y bombardeo. El coste’ de zona de estacionamiento, que tienen a su estos aparatos es del orden de los 450 mi cargo la responsabilidad del anclaje’ sobre llones de’ pesetas. cubierta de los aviones. Por último, llevan Otro Escuadrón de Reconocimiento’ a baja chaleco amarillo’ los seflaleros. altura (núm. 12) utiliza aviones. Grumman Todos estos hombres atienden al funcio Tracer, verdadero laboratorio electrónico vo namiento y servicios de las catapultas, cables lante, que requiere una tripulación de cinco de frenado, grúas, remolques, carros de’ ba hombres: dos pilotos y tres operadores de’ terías, coiibustible, municionamiento, con radar. traincendios, balizaje, etc., etc. ‘ 488 REVISTA Número 320 Julio 1967 - DE AERONA UTICA Y Pero dejemos la pista. de vuelo y pene tremos en el barco. Podemos ir hacia arriba o hacia abajo porque, creo recordar, que entre la sentina y el puente de Mando hay 19 pisos. Cada uno tiene una placa con el número que le corresponde. A partir de la cubierta principal, los superiores llevan tina numeración de dos cifras, siendo la primera el cero. Los inferiorés se designan con un solo guarismo. En total hay unos 1.500 com partimientos, y la. red telefónica interior comprende cerca (le 2.500 extensiones. Hay escaleras convencionales y mecáni cas. Estas últimas, oue enlazan los pisos (le tres en tres, se utilizan habitualmente por los, pilotos, ya. qtie son más anchas y rábidas nue las otras, lo que les permite mayor liber tad de movimientos y el ciue puedan alcanzar sin fatiga los aviones cuando salen a volar. No olvi(lenlos que un piloto es una mezcla (le buzo, marciano y turista (le “a.uto—stop”. Llevan un traje (le vuelo con varias pren— (las interiores (le abrigo y por encima un mono de gonla aiustado, color calabaza, que sirve (le nrotección contra el frío, en caso de une por accidente desciendan sobre el mar y tengan que permanecer varias horas en el agua. El casco, parecido al de los astronáu tas, cierra sobre un cuello que semeja la ritierta de un submarino; por todas partes se a(orna el traje C(fl enchufes, cordones, tubos, bolsas, cremalleras, etc., para la ca lef acción, e’loxígeno, los auriculares y el mi crófono (lo la radio, el sistema de presuriza ción, etc. Si a eso añadimos el chaleco salvar vidas, el paracaídas, las carteras de navega ción y otros documentos del servicio, ten (lremos una idea del aspecto nue ofrecen estos hombres en el ya abigarrado escenario’ del nortaviones. Pero sigamos con ci personal volante. Cada Unidad tiene sti “h.riefing” ; es decir, tina habitación •dnnde se reúnen las tripula ciones con su Jefe para conocer y discutir los últimos detalles del servicio que van a realizar. Están cómodamente instaladas, con butacas tipo avión, aire acondicionado, co rrecto alumbrado y cuantos medios de con sulta, estudio y trabajo precisa la función a que’ se destinan, incluso otros complementos rue facilitan el descanso y la grata perma nencia. en el local. Un sistema de televisión en circuito ce rrado se extiende por todas las dependencias relacionadas con las operaciones a.éreas. En ASTRONÁUTICA la pantalla se ve una panorámica de la.s pis tas de’ vuelo, con las entradas y salidas de aviones, y en un recuadro, por dispositivo electrónico, se señala la fecha, la hora, con orecisión del segundo, y el rumbo y veloci— dad del viento en cubierta. Ahora pasemos al hangar. Es inmenso. Sirve de taller, almacén (le repuestos, depó sitos complementarios (le combustible y Maestranza., con bancos de prueba para mo tores. Tiene tinas grandes puertas corredi zas para su acceso por el costado del huq tic, y cuatro ascensores que lo comunican con la cubierta. El local se prolonga, debidamente conpartimentado. con otro semejante desti nado a varadero (le botes, lanchas., canoas y oarq tic auto.nl óvil, abundantemente dotado (le cada uno de estos medios de transporte. Los pañoles de municiones, aparte las po derosas y rapidísimas instalaciones mecáni cas de carga y (lesca.rga, dispone (le un sis tema. “vertical” de entrada y salida (lel per sonal, constituido por “bocas (le hombre” enlazadas cori escala.s (le gato. Como medida (le seguridad en caso (le accidente y para evitar una caída, une (le pro(ucirse sería (le varios pisos de alttira, entre cada dos cu biertas se extiende una red (le cables (le acero. Los Servicios Sanitarios a bordo están, como en otros muchos, muy bien instalados y atendidos. El “Independence” dispone de dos hospitales, con un total (le 90 camas; (los quirófanos, ctiatro clínicas dentales, con sus laboratorios de prótesis, y tina sala. para reconocimiento de los pilotos, con las espe cialidades de oftalmología. y oto’rrinolarin— mdo.gía. En la. primera (le éstas existe tam bién su óptica para. la fabricación (le lentes. El examen del aparato auditivo’ puede realizarse en una cámara. acústica, con ins trumental adectiado para la .deteriiiinación (le curvas (le respuesta a sonidos de .diyersa intensidad y frecuencia. L.a. plantilla. facul tativa. se compone (le cinco doctores. Un resumen estadísticode la actividad médica. a bordo’ nos proporcionó la, siguiente información: Como medida preventiva, an tes de embarcar el personal recibe’ algo así como ocho vacunas (liferentes. El reconoci miento anual comprende: exploración por rayos. X—de cuyos aparatos, dicho sea entre riaréntesis, creo’ haber visto más cantidad que’ enfermos—, un análisis de’ sangre y la 489 REVISTA DE AERONAUTICA Y Número 320 Julio 1967 - ASTROAUTICA obligada visita al (lentista; porque, es cu rioso, pero esta especialidad es la. que más tral ajo tiene, hasta. el punto (le registrar tinas 3.000 consultas mensuales entre las cuatro clínicas odontológicas del barco. Sin embargo, las hospitalizaciones (lan un por centaje muy bajo (le lo que pudiéramos lla mar enfermedades “caseras”. La. mayoría (le los ingresos corresponden a traumatología por accidentes y cirugía (le apéndice y bernia. Para la vida espiritual (le la tripulación el “Independence” dispone (le’servicios re-ligiosos católicos y protestantes. En la Orden (Id (lía se publican los horarios de las misas y turnos para las confesiones. Los capellanes multiplican su apostolado más allá del por taviones, y así, los domingos, (lías (le precepto y ctiando SOfl requeridos, se trasladan en he licóptero a otros navíos (le la VI Flota que carecen (le aquellos servicios. Y ya que’ estamos con el “factor hombre veamos algo (le lo (]UC atiende al manteni miento de’ su cuerpo. ¿ Saben lo que es dar (le comer tres veces al día a 4.500 perso nas? Las cocinas trabajan sin descanso vein titrés. horas seguidas, y sólo cierran durante sesenta minutos para la limpieza (le locales y enseres; en verdad que se aprovecha, esta pausa, porque todo reluce como si fuera tina joyería. Da. la sensación que se limpia hasta el aire. En el “Indep’endence” no htiele ni el café... Una plantilla .de 38 cocineros se’ releva en turnos convenientes para preparar las 13.000 comidas que se sirven cada jornada. La ra zón (le estos turnos continuados se com prende, porque los servicios en el aire y en el mar son permanentes, con horarios (listintos para ca.da equipo, tinidad o puesto (le trabaj o. Existen tres comedores para los 350 ofi ciales que forman en la (lotación del “In— de’pendence”. Están muy bien instalados, y son atendidos por camareros, preferenteni en te (le origen filipino. El consumo (le víveres es, naturalmente, elevado’. Las despensas, que almacenan gé nero stificiente para alimentar a una fami lia (le cuatro personas durante (lO’Scientos sesenta y cinco aflos !, funcionan al ritmo (le Charlot en “Tiempos Modernos Todo está debidamente conservado y ‘listo para tin suministro inmediato. D’e no ser as.í, los pro’ blemas que’ se plantearían no tendrían solu “. ción. Una comida, por ‘ejemplo, en la que figtira un plato’ (le pOllO, con ración (le tina (le estas aves para cada cuatro personas, exi giría. el sacrificio de un millar (le piezas, por lo menos. Y esto, (le tener que’ hacerlo’ en un gal linero, sólo’ po’dría. lograrsie con bastante escándalo no muchas garantías (le’ éxito, empleando’ bombas de mano. Como les (lecía en mi primera crónica, los menús son como una espe’cie’(le abecedario vitamínico, donde’ los ah mentos pueden ex— presarse’ mediante fórmulas bromatológi cas o (le’actierdo’ con ‘la terminología (le tin rece’ tario. Yo estoy convencido’, dejando ap.arte e1 humor, que el régimen alimenticio a bordo está muy estudiado’ en cuanto’ a composición, cantidad, contenido energético’, calorías, et cétera, para aportar al organismo’ las reser vas ne’ce’sarias a su conservación y desarro llo. Ni se siente tino lleno’ después (le comer, ni ante’s (le sentarse a la mesa se padece gran sensación (le apetito’. Una. rápida revisión (le lo: productos que’ con mayor frecuencia. vi 11(;5 en lo’s platos de las tres comidas nos trae a la memoria, la lechuga, las zanahorias, el repollo, las mermeladas, la. crema (le leclic, las. espinacas, la mantequilla., la conipu— ta (le frtitas, etc. Huevos y carne, poco. El pan casi no se’ “usa.”. De beber, ya. lo saben ustedes, nada (le’alcohol, y sí zumos (‘lefruta, té y café. De postre, natillas, cremas y he lados. Estos menús son tan perfectos que’ me re cordaban el chiste del camarero’ novato que involuntariamente’ derramó encima. de’ un comensal tina salsera de mayonesa. Eso’ lo hizo tan bien, qtie ni sobró mayonesa ni faltó ono’king. Pero, la verdad, estábamos inadaptados para tina dietética ta.n cuidada. Padecimos estados (le obsesión y pesadillas de’ cocina ibérica. La “paella.”, el cochinillo asado, la fabada. asttiriana, los huevos frito’s con pa tatas, etc., bailaron en mi imaginación (iti— rante’ la. estancia en el “Indep’en’dence”, como si fueran sevillanas en una caseta de la Fe ria de Abril. La apoteosis final s.urgió, en Forma de espejismo’ sahariano’, a bordo del “Gruman”, que no’s devolvía a tierra: en ese medio’ sueflo que pro’dtice’ el monótono zum bar (‘le los motores reviví, con detalle” (le voces y hasta el olor (le las. ctibas repleta.s (le’ vino (le Yecla y (‘l.eJumilla.. la. escena. (le una comida “a ttmib’a abierta” que’ hice el ao pasado en “El Rincón de Pe’p’e”, (le’ la l;ella capital mtirciana... 490 Número 320 Julio - REVISTA 1967 Quedan las distracciones. En el “mdc’ p’endence” hay, cómo no’, cine. Se pasan pe lículas recientes y menos recientes. La qtie nosotros vimos posiblemente’ no’ se haya. pro yectado todavía, en Espaba. Su argumento era el clásico de los “weste’rn”: una. cara vana que marcha hacia las nuevas tierras, los indios que atacan, el Ejército que sale del Fuerte a defenderla, y la lucha, cruel, despiadada, con tantos muertos de una y otra parte que, como diría Alfonso Sánchez :en Televisión, a cincuenta pesetas butaca no paga cada espectador más allá de tres reales por “fiambre”. También visitamos, en el portaviones un Estudio de Radio’ y Televisión. Disponía de un locutorio, con dos cáma ras, varios micrófonos y un equipo de’ ilu minación. En el Control estaban los gira discos y la fonoteca. Detrás, en tina pequena habitación, había un telecine y tin proyector (le fotos fijas. Luego fuimos. al periódico; nos interesamos nor su tirada, la linotipia., las fuentes informativas, y hasta hubo quien pregtintó por las modelos de los, anuncios. Para terminar en la visita de hoy con ‘el factor hombre, (ligamos que para sus pc’ queflas necesidades y caprichos dispone en el propio barco de varias tiendas y comer cios donde pueden adq uiri rse desde reloj es y máquinas fotográficas., ha.sta cigarrillos y encendedores. Nos queda todavía, por hablar de la “gue’ rra”, es decir, de las maniobras y (le las ins talaciones y dependencias. que’ forman parte (le:l Cuartel General Operativo, así como de las Ayudas a la Navegación. Maniobras y despedida. de’ babor. A popa, cruzando’ la zona (le ate rrizaje, hay cuatro gruesos cables de’ acero que sirven para el frenado de’ 1os ay iones. En el momento que’ tin aparato toma tierra., un fuerte gancho que lleva en la parte infe rior de’ la cola queda. retenido por tino (le los cables, lo’ que motiva sti detención en pocos metros. Un mecanismo (le recogida vuelve’ el cable a sti posición inicial, mien tras el avión se retira a su estacionamiento’. Estas operaciones se’ efectúan con tal ra pidez y precisión que el ritmo normal (le aterrizaje’s viene’ a ser (le’ uno cada treinta segundos Para los despegues, según el tipo’ de avión, pue’den utiliza.rse las pistas o las cata.p’tiltas, (le las qtie’ existen cuatro, y que son unos dispositivos accio’nado’s a. vapor, montados sobre unas guías, a los que se’ enganchan los aparatos, y cuando’ éstos tienen sus motores a pleno’ régimen se disparan a gran veloci dad, lanzándolos al aire’ tras un recorrido <le 70 a 80 metros. Como’ se comprenderá el sistema no tiene nada (le’ delicado, pero. gracias al mismo he’— mo’s visto salir reactores, (le’ tres en tre’s, con la misma sencillez que salen los platos (le’ las máquinas (le tiro al blanco. Un jtiego (le semáforos, verde ro’jo, a poca y proa, indica, el estado (le’ utilización (le los cables (le’ frenado’ y (le’ las catapultas, p’ara seg’uri (lad (le las maniobras.. Nos queda po.r explicar la. instalación (le balizamiento que’ permite’ al piloto’, una vez establecido e!l contacto visual co’n la pista, llegar a. la misma co’n la altura conveniente. Se’ trata, como supongo’ conocerá la mayo ría. (le’ mis lectores, (le’una crtiz grande for mada por tina barra horizontal (le’ fo’cos ver (les otra. vertical en su centro, (le reflec tores amarillos. Lo curioso del caso’ es que la luz de’ e’sto’súltimos tiene’ tina orientación ta.l ‘que desde’ el aire, y entrando por pop’a, sólo se’[)e’rcibe una (le’ellas. S’i‘el piloto’ vuela alto, verá el foco amarillo por encima (le los verdes, y en caso’ contrario’, por debajo’. La posición correcta del avión, ya se adivina, es cuando la. luz amarilla queda. en línea con la.s verdes. La. Torre’ ‘(le’Mando comprende varias sa las: tina., a po’pa ‘del puente, so’b’re’cubierta, (lo’n(le los cronónie’trado’re’s toman las ma. trícula.s y tiempos (le’llegada de los, aviones; otra, cons.tittiye el Centro (le’ Comunicacio nes e Información Aeronáutica que’ p’ropo’r ‘ ‘ Ya tenemos tina idea (le lo que es la VI Flota., (le la dotación y organización del Poder Aéreo que’ embarca el “Indep:enden ce”, así como’ de algunas características y detalles de este gigantesco portaviones. Hoy, durante las maniobras, veremos el funcio namiento (le las Ayudas al Vuelo y el tra bajo que (Iesarro’llan las distintas Secciones (101 Charte’l General (le Operaciones. En cubierta, aparte los, equipos de man tenimiento, seguridad y abastecimiento., nos llama. la atención stis dos pistas de vuelo: una., qtie sigue’ el eje’ longitu.dina.l del navío, y otra, oilicua, que sobresale por el costado DE AERONAUTIOA Y ASTRO2’ZAUTICA 491 REVISTA DE AERONATJTICA Número Y ASTRONAUTCA ciona los datos necesarios a los fines opera tivos y centraliza los enlaces con otras de pendencias y servicios del barco y del resto (le las Unidades de la Flota. Aquí existen teléfonos., teletipos, radioteletipos, etc., etcé tera, y tin gran mapa del Mediterráneo, so bre un panel traslúcido, en el que basta apre ta.r tin botón para conocer la situación del portaviones, que aparecerá con su silueta iti minosa en el punto correspondiente al lugar que o’cupa en el mar. En la Sala. del Control propiamente dicho se sigue con detalle’ la maniobra (le todos los aviones. E.n tinos tableros (le progresión (le vtielo figuran las fichas (le los aparatos que están en el aire, y que se’ cambian (le posi ción según el movimiento (le aquéllos. Los controladores mantienen comunicación ra diotelefónica. co’n los pilotos y siguen sus evoluciones en las pantallas de’ radar. El pu pitre’ que’ dirige los aterrizajes es, en reali ([ad, un GCA., aunque’ aquí se le conoce por CCA (Control Carrier Apro’ach) ; es decir, control de Aproximación al Portaviones. Tiene doble’ pantalla: en la superior se ve el perfil del barco’ y marcado’ a. popa, sobre la horizontal, el ángulo (le planeo; en la (le ahajo’ está el plano de cubierta y tina línea que’ indica el rumbo de’ entrada. Ambas lle van tinas cuadrículas que representan, a es cala, la distancia en millas a la popa (lel navío. Los. aviones aparecen como’ puntos luminosos qtie el controlador, mediante sen cillas instrucciones (arriba, ahajo’, derecha, izqtue’rda, etc.) se encarga (le llevar po’r buen camino, como si fuera un lazarillo, hasta qtie el piloto’, tomando contacto visual con la pista, abandona la radio-ayuda, para apo yarse en la cruz luminosa qtie’ ya. conocemos. Caso de’ fallar la maniobra ptieden ocu rrir (los cosas: que el piloto’ intente de nue vo’ la operación, metiéndose en el lugar qtie pueda del carrtise’l de entrada, o’ bien, como ya se’ habrá adivinado, se’ produce el re mojón. No’ hay que’ p’reo’ctiparse; to’do está pre visto’. El barco’ no detiene su marcha, los aparatos siguen entrando’ a razón de tino cada medio’ minuto’, y los helicópteros de sal vamento que vuelan alrededor del po’rtavio ne’s acuden al lugar del accidente y se de (lican a. pe’scar al “curri”. Desde cubierta presenciamos el simulacro’ (le’ bombardeo’ del “Indep’endence”. 320 Julio - 1967 Unos aviones, volando a contra-luz y des de una altura qtie no rebasaría los 3.000 me’ tros, iniciaro’n un suave picado, cogiendo el barco de’ frente’, por ‘la a.mura de babor, con rumbo de tinos Las bombas., que pudi mos seguir de’sde el momento (le’ (lespren derse de los ap’arato’s, picaron a 500 metros (le nosotros, por popa. Las siguientes pasa das se repitieron con las mismas caracterís ticas y resultados. No’ hubo’ defensa ni por parte de la aviación embarcada ni co’n armas (le’ stiperficie. El ejercicio era, tan sólo’, de puntería sobre’ blanco móvil. El Centro (le Operaciones, conocido tam bién por las siglas 1. 0. 1. C., que quiere (lecir algo’ así como Centro (le Inteligencia e Información Operativa, es, por suptiesto, “top se’cret”. A la entrada tina fuerte’ guar (ha. vigila la puerta. De’ntro’, pequeñas cabi nas o apartamientos tienen distinta activi (la( 1. Vimos tin cartel con unos. róttilo’s en inglés que traducinios así : Qtié hace usted aquí? Qué mira? ; Oué oye... ? Pues, váyase’!” Como’ disfrutamos (le cortés inmunidad, en tendemos qtie el aviso no va por nosotros, y se’gtumo’s ctirioseando’. El oficial que flOS acompaña indica .qtie pasemos a o’tra habi tación. Esa es “very higth se’cret”. Yo’ nc me atrevo’ ya’ ni a moverme’, pensando’ que’ a lo’ mejor paso’ por delante .de una célula fotoeléctrica y puede ponerse en actividad un dispositivo’ (le alarma, con el co’nsigtiiente escándalo’ (le timbres y descargas (le fusile ría, o’ tal vez se abra bajo mis pies tina tram pilla y vaya a. parar a la s.entina, donde unos ambrientos cocodrilos se encargtien (le’lo’ de’más. Afortunadamente mis temores no’ se confirman; lo único’ que sentimos en el ntie yo’ local es frío. Nos explican que es la tem peratura necesaria para mantener en correc to funcionamiento’ los equipos electrónicos allí instalados. Porque, efectivamente’, aque llo es el cerebro’ d.c la información. Unos teleimpresores registran en banda. magnética los datos que procede conservar. Llegado el momento’ se pasan las cintas po’r uno’s lec tores y se traduce su co’ntenido’ en forma. (le rótulos luminosos. Ya tenían preparado’ un mensaje de amable salutación en español, y ctiando estábamos contemplando’ el panel ele lamparitas neón nue confecciona dichos tex tos, el oficial accionó un interruptor y pu (limos, leer, con grata. sorpresa, una especie de telegrama que’ desfilaba ante nosotros “Bienvenidos al “Independence”. Están us 492 450• “ REVISTA Nibnero 320 .Tulio 1967 - DE AER’ONAUTICA Y ASTRONAUTICA tedes en el Centro (le Información e Inteli gencia Operativa..., etc.” Me sorprendió el final, acostumbrado a la televisión. El sa ludo acabó con ‘la.consabida palabra “stop”, y no hubo firma comercial que lo patroci nase. Visitamos también las Secciones de’ Car tografía y Fotografía. Esta. última, mag níficamente equipada., no sólo con aparatos de gran precisión y potencia, sino con un moderno utillaje de laboratorio que permite en pocos minutos obtener el revelado y po sitivado de las películas, así como copias de las mismas para. su explotación inmediata por los Servicios de Información y Opera ciones. El principal proveedor (le la. Sección de Fotografía es el Escuadrón (le Recono cimiento y Ataque núm. 1 de aviones North American “Vigilante”, que lleva cámaras de todos los tipos y modelos., pudiendo hacer fotografías en condiciones de visibilidad muy adversas. La. técnica empleada es amplísi ma en procedimientos y recursos : fotos ver ticales, oblicuas, mosaicos, esteroscópicas, di rectas y por radar, en blanco y negro o color, con filtros, util izando emulsiones. sensibles a las radiaciones extra espectrales, etc., etc. Un proyector fíjo, con dispositivos, de centrado y ampliación de imagen hasta vein te veces, nos permitió examinar la vista aérea. de unas instalaciones petrolíferas, co mo si estuviéramos en la propia factoría.. Por el conocimiento’ (Ile las condiciones. en que se tomaron las fotos, se determina auto matica.mente las características ‘de’los obje tos que en ellas aparecen. Para no’ cansarles, terminemos subiendo a.l Puente de Mando. Se llega, a él pasando por varias sala.s donde los puestos de ope rador rada.r abundan tanto como las urba nizaciones turísticas en cualquier p.laya so leada. Hay dos. Puentes de Mando: uno, de go bierno del barco’, y otro’, de Vuelo. Este’ es una galería cerra.da, a 30 metros de altura sobre las aguas, que’ domina per fectamente la cubierta del portaviones. Desde allí contemplamos ‘el maravilloso’ espectáculo (le las. maniobras nocturna.s. El “Independen ce” navegaba a 15 nudo’s contra el viento, para conseguir la velocidad relativa de 35 a 40 millas por hora, conveniente al des.pegue y aterrizaje de los aparatos. Todo’ estaba en penumbra, por razones de la fingida opera.- ción militar que se desarrollaba. En los. grue’ sos cristales de nuestro mirador se reflejan, débiles, las. pequeñas. lámparas interiores, .de color azul, que alumbraban suavemente ci local. Fuera., las. pistas, eran un infierno de ruido’ y de’ fuego cada vez que un reactor tornaba tierra y cuando’ las. catapultas lan zaban al aire a ios poderosos. Phantoms o al gigantesco. Vigilante, con la doble y larga llamarada de sus turbinas, que requieren en la salida el esfuerzo adicional de la postcombustión. Por encima del puente’, una teoría (le más tiles y antenas. me recordaba que en lo’s.Cen tros de Control e’ Información Aeronáutica unos hombres. enviaban mensajes de guerra, seguridad y confianza a los, que’ salieron en busca del supuesto’ enemigo. Más. arriba, to da.vía, como un sueño de modernos quijotes, con el amor imposible de rubias dulcineas de Califo.rnia y Manhattan, los molinos del radar, incansables, fabricaban harina de es. tre’lla.s y de luna... Cuatrocientos kilómetros. al sur cubría flanco el Segundo Grupo de’ la Sexta Divi sión de Po.rtaviones, capitaneado por el “Shangri-la”. Las maniobras alcanzaban el simbolismo de su más amplia dimensión por la presencia de’ cruceros. y destructores. que, a distancia., amparaban nuestra derrota. En la instrucción participaban todos. los escalones. del Mando. y Servicios de a bordo, desde el Almirante’ y su Estado Mayor, has ta los cocineros., pasando. por el personal de mantenimiento, médicos, operadores de ra dar y comunicaciones, encargado’s del com bustible, señaleros., ascensoristas de cubier ta, fotógrafos, etc., etc., incluso’ los, propios oficiales. de Relaciones Públicas, que nos acompañaban. Para nosotros., las. maniobras, salvando’ el detalle de la precisión, seguridad y rapidez que se apreciaba en todos. los movimientos del persona.l y en las. .entradas y salidas, del material volante’, fueron una demostración de la preponderancia ganada por ‘el Poder Aéreo. La VI Flota actuaba en apoyo’ y ga rantía de’ la libertad .de’acción ‘de la Fuerza de Ataque de’ Portaviones., conocida como Tas.k Fo’rce’-60. 493 Despedida. No’ quisiera terminar estas. crónicas sin despedirme’ del Almirante’ Koch y de los REVISTA DE AER0IjA UTICA Número Y ASTRONAUTICA hombres que con él hicieron posible, grata y por mucho tiempo inolvidable, nuestra visita al “Independence”. En la recepción y cena con que nos obsequió el Jefe (le la Sexta División de Portaviones, se manifestaron testimonios de cortesía y amabilidades recí procas. Con algunos recuerdos del “Inde pendence” recibimos el título (le miembro honorario (le su tripulación. En modesta co rrespondencia, y por afortunada previsión, nuestra estancia a bordo quedó refrendada, en el idioma universal (le la, música, con el presente (le unas grabaciones de Alhéniz, Granados y Falla. He sahido más tarde que al Almirante Koch lo han destinado a un pnesto en el Caribe. Quiero aprovechar estas líneas para recordarle que en su nuevo destino, más cerca de su casa y de su tierra, muchas co sas verá cambiadas el olivo’ y la almendra de Mallorca serán allí, por el milagro ca liente (le los trópicos, dormidos platanares; en el mapa del cielo, donde buscan sus rutas los marinos, verá las nuevas constelaciones iue marcan la vertiginosa amenaza de los tornados en lugar del eterno Camino a Com postela, s en las aguas profundas donde mueren los ríos que llegan del Terciario cuentan a los peces fantásticas leyendas de 320 Julio 1967 - bosques y reptiles, ya no fondeará sus anclas junto a doradas ánforas romanas, porque en aquellos mares la Historia se conserva, he cha mensajes de fe y ejemplos de valor, en los trozos de roble cubiertos de algas y co rales de alguna frágil y antigua carabela desde (londe un viejo Almirante (le Castilla, con su saludo inmóvil, tal vez le dé la bien venida. Sí, muchas cosas habrán cambiado en su nuevo destino, Almirante Koch, pero otras, las que no dependen (le la geografía, ni saben (le’ latitudes ni (le estrellas, porque nacieron del conocimiento y (le la buena vo luntad (le los ‘hombres, esas, seguirán inva— ri ahIes. Tales, el ofrecimiento (le ini amistad y el testimonio (le sincera gratitud que le mani festé por el trato’ que nos dis.pensó al reci bimos en su casa. A toda la tripulación del “Independence” en su Comandante, el Capitán de Navío Jhon P. Fox, y en especial a los oficiales que nos acompañaron, vivo ejemplo’ (le la tradición hospitalaria de la Marina, a todos, también, gracias. A ustedes, nns queridos lectores, si han podido so’portarme hasta el final, les (leseo un pronto’ y total restablecimiento. 494 Ndmero REVISTA 320 Julio 1967 - DE AERONAUTICA Y ASTRONAVTICA DISUASION Y PROLIFERACION NUCLEAR «La historia sdlo condena a los pueblos aue renuncian a defenderse.» General Por FERiVANDO FERNANDEZ-MONZON DE ALTOLAGUiRRE y FRANCISCO JAVIER I’ASQUAL DEL POIIIL Capitanes 1.—Estrategia de disuasu5n. nuevos conceptos (le la estrategia de disuasión reemplazan con dificultad, en los espíritus militares, a los principios básicos tradicionales» (1). No obstante, este nuevo concepto de estrategia impo ne implacablemente su ley en los medios políticos y militares. Desde 1776, ao• (le la Tndependencia americana, la política internacional de los Estados Unidos se ha basado en la Doc trina de Monroe, ideada para la defensa nacional, y, en consecuencia, una de sus premisas fundamentales ha sido rechazar la introducción (le la política del «equili brio de poder» en el continente america no, pretendiendo aislarse de la influencia europea. Pero es indudable que los pro cesos históricos no se pueden cambiar radicalmente y ciue los problemas de po lítica internacional quizá sufran variacio (1) «Forces Aeriennes BEAUFRC. Françaises», lulio 1966. (le Aviación (S. 7.) nes en sus protagonistas, pero no experi mentan cambios esenciales. Al caer el telón que puso fin al drama (le la segunda guerra mundial, las viejas naciones europeas se ven priv2tdas de su protagonismo histórico. Después (le Hiro sima, los Estados Unidos se encuentran en posesión de un instrumento bélico (le potencia inigualable, que les permitirá aniquilar a ctialquier enemigo en el instante en que éste se convierta en una amenaza directa. Sin embargo, y contra todo pro nóstico, la URSS hace explotar, con éxito, su primera bomba «A» en 1949, y con ello comienza una política internacional (le «bipolaridad», que, en definitiva, no es otra cosa que un intento (le establecer un equilibrio político, fundado en que tanto los Estados Unidos como la URSS po seían la potencia suficiente para aniquilar al enemigo, sin darle ocasión de respon (ler al ataque. La situación internacional es crítica. Cualquier roce o falsa maniobra puede hacer saltar por los aires esa endeble paz, 495 REVISTA DE AEP./JN.AUTICA Número 320 Julio 1967 - Y A5TROflAUTZCA conseguida a tan elevado precio, cuando los nuevos adelantos de la técnica ponen fin a este esuilibrio inestable al propor cionar la posibilidad de proteger del ata que enemigo a una gran parte de la fuer za nuclear propia, y con ello, la posibili dad de respuesta. Este momento marca el comienzo de la estrategia de disuasión, ya que todo acto de agresión nuclear implicaría una respuesta automática de la misma enver gadura. Este riesgo de respuesta estabili za la situación internacional entre los dos grandes antagonistas, disminuyendo la probabilidad del empleo por uno de ellos del armamento nuclear, ya que significa ría el suicidio del agresor. La política de disuasión bilateral ha de mostrado su eficacia en los últimos años, al evitar que se produzca un conflicto mundial, reduciéndose las manifestaciones de antagonismo a choques locales en paí ses intermedios. Pero esta estabilidad de la paz por el terror se puede ver en peligro en cual quier momento, al intervenir nuevos fac tores. Los continuos avances de la técni ca podrían poner en manos de uno de los dos grandes antagonistas un medio de anular la capacidad de respuesta del otro, lo que le colocaría en disposición de des encadenar una agresión impunemente. El mismo peligro entrañan las alianzas de las actuales potencias nucleares y la pro liferación de naciones que, en el futuro, puedan tener acceso al poder nuclear. rompiendo el actual equilibrio. Esto últi mo constituye una de las más graves pre ocupaciones del mundo actuaL 2.—Disruaçiónbilateral. • • Se ha definido la disuasión como el arte de la paz basada en el empleo, o ame naza de empleo, de la fuerza. Son muy variadas las formas en cjue se puede ejer cer, desde la simple presión política o eco nómica, hasta la destrucción total con medios nucleares. La oposición potencial entraña unos efectos recíprocos en los distintos niveles de acción (nivel nuclear, clásico o de guerra fría). Según sea el valor relativo entre riesgos y ganancias, se decidirá a actuar o no, para lo cual de- berá hacerse una evaluación de la capaci dad disuasiva, tanto en sus componentes materiales como en los psicológicos. Por lo site se refiere a los primtros, se puede realizar valorando la potencia destructiva de los medios de un adversario sobre los recursos del otro (capacidad contra re cursos»). La destruccion se mide en por centaje de recursos aniquilados, conside rando que actúan todas las armas de una nación y contando con los errores propios y con las medidas de protección o defen sa del enemigo. Pero la verdadera valo ración del poder disuasivo está expresada por la capacidad «contra fuerzas», es de cir, la medida en que una primera anda nada nuclear destruye las armas nuclea res del enemigo y, por tanto, su capa cidad de respuesta». En cuanto a los factores psicológicos hay que tomar en consideración la gran importancia que esta componente juega en la disuasión nuclear y cuyos principa les aspectos son: Sembrar la duda e incertidumbre acerca del valor real de la fuerza pro pia y la resolución de utilizarla. Fomentar el temor a la guerra con terroríficas descripciones de lo que sería un conflicto futuro. Aumentar al máximo el temor a una conducta irracional de los pue blos provocada por una grave ame naza a su segundad. Hacer «creíble» al máximo la reso lución de emplear armas nucleares por medio de propaganda de medios superpotentes y de las medidas de protección civil, lo que demostraría que se ha considerado seriamente la hipótesis de un conflicto nuclear. Dado que en la realidad casi nunca es posible conocer exactamente los efectivos y la eficacia del armamento nuclear ene migo, tanto desde el punto de vista de sus características como de la eficacia ofensiva y defensiva del propio, la mani obra psicológica nuclear puede influir has ta el punto de invertir la relación de fuerzas materiales. Es evidente que la disuasión nuclear bilateral tiende a ser estable, a la neutra lización recíproca de ambos adversarios. El problema estratégico es, por tanto, no 496 — — — — REVISTA DE AERD34AUTICA Número 320 Jidio 1967 - Y A5VROflAUVCA la eliminación de la amenaza, sino el man tener al adversario en la incertidumbre, para que la «parálisis atómica» no anule el efecto de la disuasión y haga nueva mente posibles los grandes conflittos clá sicos. El arma nuclear conservará su po der pacificador en tanto que el sistema sea capaz de mantener el suficiente gra do de inestabilidad, haciendo creíble el empleo del armamento nuclear por parte de la potencia, que, poseyéndolo, viese afectados sus intereses vitales. 3.—Condiciones y motivos que favorecen la Proliferación nuclear. El país que desee iniciar el proceso de fabricación de una bomba «A» deberá recorrer dos etapas: Desarrollo de un programa de apli cación pacífica del átomo que ha de culminar con la producción del ma terial fisible. Desenvolvimiento de un plan pura mente militar, que terminará con la experimentación del artefacto. Para desarrollar el programa de utili ación pacífica del átomo es preciso dis poner de uranio y de la potencialidad la dustrial necesaria para su. obtención a partir de minerales, generalmente, muy pobres, así como dominar la tecnología de los reactores nucleares productores de plutonio y disponer de un laboratorio para el tratamiento de los productos irradiados, que permita aislar el plutonio de las ba tas de uranio que alimentan el reactor nuclear. Por lo que se refiere al programa mi litar, implica la•fabricación y experimen tación de la bomba y su militarización, haciéndola transportable por un avión o un misil, todo lo cual implica un elevado nivel de formación científica y de tecno logía industrial. Según datos estadísticos •de Estados Unidos, para podei fabricar armas nucleares es necesario invertir unos 200 millones de dólares anuales, lo que entraña una potencia financiera nada co rriente. Debe tenerse en cuenta, sin em bargo, que aquellos países que dispongan de instalaciones nucleares para uso pacífi co, pueden ver reducida la cifra anterior — — en un 25 por 100, además del avance tec nológico adquirido. Así, pues, tomando como medida gene ral de la posibilidad de transformarse en potencia nuclear, el hecho de que cinco años después de la puesta en marcha de una central eléctrica nuclear un país esté en condiciones de fabricar algunas bom has «A», en 1980 pueden ser potencias nucleares las siguientes naciones ordena das de mayor a menor posibilidad: Cana dá, República Federal de Alemania, In dia (con enormes yacimientos de torio), Israel, Italia, Japón, Suecia (recursos pro digiosos de uranio), Suiza y Africa del Sur; naciones que están ya utilizando el átomo para fines pacíficos, o que han con siderado seriamente el hecho de cons truir armas atómicas para reforzar su de fensa, como es el caso de la India e Israel. Les siguen en orden de probabilidad Ar gentina, Australia, Checoslovaquia y la República Arabe Unida. Y, por último, las potencias del Tercer Mundo, que pue den convertirse en aliados de la China Comunista, quien podría proporcionarles armas atómicas, como estuvo a punto de ocurrir con Indonesia. Dos son los motivos principales 4ue impulsan a las naciones a la consecución de armas nucleares: el deseo de prestigio y la preocupación por su seguridad. La influencia del deseo de prestigio no pue de ponerse en duda, pues las diferencias entre las jerarquías de las naciones, tanto en el bloque Occidental como en el Orien tal, no dependen tan sólo de su desarro llo económico, sino también de las armas que posea. Sin embargo, no se puede dar una importancia decisiva a este factor, ya que no es suficiente para que un país acepte cargas económicas tan pesadas, si no se siente gravemente amenazado. No parece, por tanto, probable ni racional una «proliferación en cadena» basada en un sentimiento subjetivo de prestigio. Por el contrario, sí es motivo suficiente para incitar a la posesión de armas nucleares la amenaza contra la seguridad nacional. Las potencias atómicas, aun cuando sean de segundo orden, se sienten autoprotegi das, respaldadas por la incertidumbre (factor esencial de la disuasión), de la po sibilidad de empleo de su armamento nuclear. 497 kEVISTA DÉ AERONA UTICA Y Número ASTRONAUTICA Mientras la URSS careció de ingenios nucleares capaces de alcanzar el corazón de los Estados Unidos, ejerció sobre este país una disuasión indirecta, en beneficio propio y (le 5U5 satélites, a través (le la amenaza ciue representaba para los países (le la OTAN la fuerza nuclear soviética (le alcance intermedio. Las naciones del tratado (lel Atlántico Norte se considerahan protegidas ante la certeza de que los Estados Unidos, poseedores (le una enor me capacidad (le represalia sobre la URSS, no dudarían en emplear sus armas nuclea res, ya que la «respuesta» soviética sobre su territorio nacional sería casi nula. En esta situación, los aliados (le los (los gran(les nucleares consideraban aceptable y su ficiente la «cobertura» americana o sovié tica y únicamente el deseo de prestigio los motivaba a poseer armas nucleares. Pero la aparición de la fuerza intercon tinental (le la URSS y el alto grado (le invulnerabilidad alcanzado por las armas nucleares, ha creado un equilibrio de fuerzas tan estable entre los dos grandes, que se ha perdido la certeza (le la inter vención (le cualquiera (le los dos para «cu brir» a un aliado, pensando solamente que dicha intervención podría ser posible. Co mo consecuencia de este nuevo estado (le cosas, los aliados de las dos primeras po tencias sienten la necesidad de disponer (le armas nucleares nacionales para el caso (le que la «cobertura» no se produzca. Y así lo han hecho los que han tenido po sibilidad (le realizarlo, entrando en el te rreno (le lo previsible que, en un futuro no lejano, la proliferación se haga más intensa. 320 Julio 1967 - elevado sea el número (le potencias nu c lea res. Para analizar esta teoría hay (IUC con siderar la influencia que l)odrían ejercer en la actual estabilidad (lisuasiva entre las grandes potencias nucleares las naciones que en el futuro tengan acceso al «Club Nuclear», Influencia que, pait una deter— minada nación, será proporcional al pro ducto (le su potencial atóniico por el nú mero (le orden (le entrada en la lista (le potencias nucleares. Por otra parte, todas las potencias nu cleares, lo mismo actuales que futuras, pueden clasificarse en estables e inesta bles. Las primeras serán aquellas que, por lo avanzado de sus estructuras y nivel (le civilización, no inspiran temores acerca de su prudencia en el empleo (le armas nu cleares. Por el contrario1, se clasificarán como inestables aquellas que, juzgando su comportamiento pasado, no demuestran una ponderación suficiente como para ex cluir el recurso de las armas atómicas, tanto si ya las poseen como si llegan a conseguirlas alguna vez. Dado el absoluto equilibrio bilateral existente entre los dos grandes, es muy difícil que uno de ellos se decida a inter venir nuclearmente en caso de crisis, co mo no sea para responder a un ataque directo a su territorio nacional, o que el conflicto se produzca en una zona de in terés vital. Ahora bien, en un determina do lugar, los intereses de la URSS y Es tados Unidos pueden ser marginales, pero de entidad desigual para uno y otro y el que tenga intereses de mayor valor puede caer en la tentación de provocar una cri sis en dicha zona, en la cual una potencia 4.—Posible influencia de la pro liferación atómica de segundo orden, aliada del otro, nuclear en la estabilidad de la disuasión es posible que tenga intereses vitales que, al ser amenazados gravemente, provo bilateral. quen su reacción nuclear, pese a que la amenaza o la agresión se hayan desarro Acerca de la influencia que sobre la es liado con medios clásicos. Si esta situa tabilidad de la disuasión bilateral puede ción se produce, el grande agresor respon ejercer la proliferación (le potencias nu cleares, existe una teoría, según la cual derá también con medios nucleares, ani quilando a su oponente. el conflicto entre dos potencias atómicas (le segundo orden entraña el peligro de Si en este caso, el grande abandona a su extensión, involucrando en él a los su aliado, pone de manifiesto ante las de «grandes» nucleares y deduce, como con más naciones (le su bloque su neutraliza— secuencia, que el riesgo del empleo (le ar ción por el otro grande, con la consecuen mas atómicas es tanto mayor cuanto más cia inmediata (le cine sus aliados perde— 498 REViSTA Número 320 JuUo 1967 - DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA rán toda su confianza en él. El grande nuclear agresor obtendrá así al bajo costo (le unas pérdiclts limitadas (no olvidemos que se enfrenta a una potencia nuclear (le segunda fila) una gran victoria polí tica sobre su gran oponente, y para evi tar esto, el grande aliado se vería obli gado a intervenir. Esta casi certeza de in tervención prolonga la zona de «conge lamiento nuclear» a territorios de interés marginal para los dos grandes nucleares. De todo ello se deduce que la influen cia de un aliado nuclear de segundo orden (la lugar a que los grandes consideren co mo propios los intereses vitales de sus aliados y que por esta causa se extienda la zona de «congelamiento» nuclear, ha ciendo que sea preciso el prevenir, con un margen más o menos grande (le ifl certidumbre (factor esencial de la disua sión), la reacción de varios centros de decisión nuclear. En consecuencia, la exis tencia (le fuerzas nucleares nacionales con tribuye a restituir el crédito a la disua sión entre los dos grandes, sin lo cual el efecto disuasivo desaparecería por un ex ceso de equilibrio. Otro es el caso cuando se trata de una potencia «estable» y tradicional o políti— camente neutral, aun cuando presente si militudes con el problema que plantean los aliados nucleares de los dos grandes. Es necesario, para que se produzca este tipo de conflicto, que se vea seriamente ame nazada la seguridad del país neutral, en cuyo caso, si no es potencia atómica, co rre el riesgo de verse convertida en cam po de batalla, y, por el contrario, si posee su propia bomba «A», ejerce idéntico po cler disuasivo que un aliado nuclear de cualquiera (le los grandes, pues ninguno de los dos polos de atracción puede per mitir que el neutral ceda al chantaje nu clear, cayendo en la órbita del adversario. En consecuencia, que en el caso de po tencias neutrales, cada uno de los grandes tiene la misma ganancia, en lo que a di suasión defensiva se refiere, que si se tratase (le un aliado nuclear, limitándose a un área geográfica más restringida la disuasión ofensiva, ya que los neutra les nucleares escapan a todo chantaje atómico. Pero la causa principal del temor a la proliferación nuclear es el acceso al po der atómico a las potencias catalogadas como «inestables», ptlesto que en estas naciones la componente psicológica (le la disuasión adquiere valores anormales, pu diendo reaccionar racionalmente ante unos adversarios y bajo un efecto pasional frente a otros. En el caso (le que dos potencias de este tipo dispusieran de fuerzas nucleares (le alcance suficiente para «golpearse», pero no para alcanzar el territorio de uno de los grandes o zonas de influencia, podrían utilizarlas en último extremo, sin miedo a una «respuesta» exterior, si ninguna de las grandes potencias estables toma partido por una de ellas y la radioactivi dad resultante no es posible que alcance a los vecinos no comprometidos en el conflicto. Y, por último, en este análisis de la in fluencia que puede tener la proliferación nuclear sobre la estabilidad de la estrate gia (le disuasión, es preciso considerar dos casos, a fin de que sea exhaustivo. El pri mero, que una potencia nuclear de segun do orden utilizase su armamento atómíco contra una nación que no dispusiera de él. No es improbable, si se cuenta (le ante mano con la abstención de los dos gran (les, que se le aplique un «castigo atómi co», por parte de una o varias potencias nucleares, de acuerdo con la opinión pú blica mundial. Existe, pues, un cierto efecto disuasivo desde la zona exterior al conflicto. El segundo sería que la potencia que decida correr la «aventura atómica» fuera uno de los polos mundiales, en cuyo caso las potencias nucleares menores podrían tener una importante influencia en la es tabilidad de un sistema disuasivo bipolar. Un ejemplo de este caso es la estabilidad o inestabilidad relativa que puede estable cerse en el futuro entre China y Estados Unidos, la cual podría verse afectada en forma importante por la existencia de po tencias inestables dependientes de China, en mayor o menor grado. Para terminar, hay que tomar en consi deración un factor desestabilizador tan importante como sería la introducción de un ingenio nuclear en una zona en que se desarrolla una lucha subversiva, puesto 499 REVISTA DE AERONAUTICA Número 320 Julio 1967 - Y ASTRONAUTICA que los efectos psicológicos por el hecho de que la amenaza no tiene «parada» por estar el artefacto atómico dentro de la po blación amenazada, podrían ser decisivos en el resultado de la lucha. «estables», al incrementar la disuasión de fensiva limitar geográficamente la ofen siva. Un conflicto nuclear entre potencias atómicas neutrales de segundo orden no desembocará, pro1ibleneiite, en una lu cha abierta entre los dos grandes, sieni 5 —En conclusión. pre que el alcance (le sus arruas impida que les afecte directamente. Oue cualquier conflicto tiende a con— Por otra parte, los progresos técnicos vertirse en una oposición bipolar, va que en el campo (le la intercCpt(cióJ1 pieden cuando existen conflictos multipolares, el conducir a la anulación (le las fuerzas nu más aguclo tiende a sobreponerse a los cleares (le segundo orden, salvo en el cas demás. Se puede suponer, pues, con una (le que llegaran, pese al artículo VI (Id cierta lógica, que la oposición (lominante Tratado para la Utilización Pacífica (IdI seguirá siendo la de Bloque Occidental Espacio, a disponer (le la bomba orbital, Blociue Comunista, encabezados por Esta- lo que elevaría la entidad (le dichas fuer(los [Jnidos y la URRS, cuyo equilibrio zas muy por encima (le sus posibilidades disuasivo es muy estable, quizá demasia— económicas. do, para conservar su poder pacificador. Un importante factor (le desestabiliza Hecho este demostrado lor las últimas ción lo constituiría el tráfico clandestino doctrinas al uso, encaminadas a mantener (le armas atómicas, si éstas llegaran a mi un mínimo (le credulidad en la disuasión niaturizarse lo suficiente. (capacidad «contra fuerzas» y respuesta limitada de McNamara, decisión irracio— En (lefinitiva, creemos que la explota rial de (lesencadenar tina acción nuclear, ción del estrecho margen (le libertad (le aun a riesgo (le atraerse una «respuesta acción que permite la clisuasión atómica mortal», de la URSS y Francia, etc.). sólo consiente en un futuro próximo el La estrategia (le disuasióh nuclear se empleo (le la llamada estrategia indirecta. única cjue permite verda(leras poSibili(la— refuerza, por tanto, con la proliferación nuclear entre los aliados (le los dIos gran— (les operativas. cIes y de los neutrales clasificados como ¡Y que Dios nos coja confesados 500 REViSTA Número 320 Julio 1967 - DE AERONA UTICA Y ASTKONAUT1CA LALIBERTAD RELIGIOSA ENLAS FUERZAS ARMAD I’or ADRIAN PECES Y MARTIN DE VIDALES Teniente Vicario de 1.c (R.) La Declaración Conciliar. Con fecha 7 de diciembre de 1965, Pa1)10 VI firmó y publicó la Declaración so bre Libertad Religiosa, votada por los Padres Conciliares. No fué fácil, ni corto, el camino hasta este filIal resultado. Tuvo el Concilio cua tro sesiones generales, desde 1962 a 1965. En la etapa preparatoria (1962) se distribuyó a los Padres la primera Redac ción, que constituía el capítulo IX. del es— otienm de la «Iglesia» ; pero nunca fué discutido en la sala conciliar ; antes al contrario, en 1 de diciembre, tres Carde nales : Koening (Austria), Alfink (Ho landa) y Ritter (Estados Unidos’) pidie ron se tratase directa y separadamente sobre la libertad religiosa. Ya muy avanzada la segunda sesión conciliar, el 13 (le noviembre (le 1963, monseñor Felici, Secretario del Concilio, anunció que el texto, trabajosamente ela— horado desde junio de 1962 por el Secre tariado para la Unión de los Cristianos, sería distrihuído como capítulo V del es quema sobre «Ecumenismo». Así lo fué, en efecto, el 19 y defendido profusamente por monsebor Smedt. Pero el Cardenal Leger ( Canadá), con otros Padres, expresaron la conveniencia (le que este tema se desglosara del Ecume nismo y fuera discutido aparte. como «Declaración sobre Libertad Religiosa». No fué discutido oficialmente pero las observaciones y reparos presentados a la mesa del Concilio obligaron al Secretaria do a elaborar tui nuevo texto, oreselitaclo en septiembre de 1964, como Declaración, por Srnedt y discutido amplísimamente. El 10 (le octubre corrió por toda Roma el rumor (divulgado sensacionalistarnen— te por la Prensa el 12) de que Felici, Se cretario del Concilio, bahía enviado el 9 una carta al Cardenal Bea, Presiclente del Secretariado para la Unión de los Cristia nos, en la que «por decisión superior», esta Declaración sobre la Libertad Reli giosa debía pasar a una Comisión Mixta de dicho Secretariado y de la Comisión Teológica para sufrir tina nueva redac ción. Esto motivó la reunión, el día 11, de un grupo de Cardenales, de los llamados progresistas, quienes redactaron una car ta, entregada personalmente al Papa poi el Carclenal Frings, en la que pedían que la redacción del texto volviera a la com petencia exclusiva del Secretariado. Así se hizo y el 24 (le octubre terminaba su nueva redaccion. En ella, fruto de la (liscusion conciliar, se habla de la noción jurídica (le la liber tad religiosa y no de la (loctn nal teológi ca: se especifica que se trata «del derecho civil a la libertad religicsa», excluyendo el indiferentismo religioso, el laicismo y el relativismo doctrinal. El texto fué distrihuído el 17, acoinpa— nado de un aviso del Secretario del Concilio, Monsefior Felici, (le que no se vo taría hasta el 19. Se estaba en la última semana conciliar, y a pesar de las presio nes de determinados grupos impacientes, no era posible que en dos (lías que resta ban se procediese a estuchar las eiimicn— (las y votar el texto en bloque pa sti pro m u 1g-ació u. Por eso, el 19, el Cardenal Tisserant, Presidente del Consejo de la Presidencia, anuncia que «en atención a que muchos Padres objetaron que no se les había dado tiempo suficiente estudiar el texto, de nueva estructura y nuevas enunciacio nes...» no procedía votar el esquema en aquella sesión coilciliar, pudiendo presen tarse observaciones escritas hasta el 31 (le enero de 1965. Terminado el anuncio, se formaron co rrillos en el atila conciliar y corrió (le ma— nO en mano un escrito al Papa pidiéndole 501 REVISTA DE AERONA UTICA Y Número ASTRONAUTICA 320 Julio 1967 - «instanter, instantius, instantissime» la con 74 votos en contra y 8 nulos de 2.386 votación del esquema antes del final de votantes. Es decir, que el texto final era la sesión conciliar. En efecto, tres Carde la sexta relación presentada, y aproxima nales, Meyer, Ritter y Leger, saltando el (lamente la veinticuatro redactada en el protocolo, llevaron al Papa esta apelación, Secretariado para la Uniói (le los Cris firmada por 441 Padres, no por 1.400,tianos. como se fantaseaba por algunos. Por su parte, cierta Prensa se apresuró La Ley votada por las Cortes Españolas. a orquestar el caso con los registros más sonoros. «La Croix», por ojos de su co Era necesario hacer historia (le la (lis— rresponsal, vió al Cardenal Meyer «per cusión conciliar, como antecedente (le la der su sangre fría; palideció como si le discusión española en la Comisión respec faltase el suelo bajo los pies ; se impa tiva, P2ti que todos nos demos cuenta (le esta «dificultosísima cuestión», como la cientó dando con el puño en la mesa» llamó Smeclt, y a nadie extrañe que nues El pastor Mollard escribía: «La Iglesia católica se ha descalificado para siempre tros pi’ocuradores, en cumplimiento de su hayan presentado numerosas para hablar (le la libertad religiosa.» «La obligación, Tribune (le Géneve» anunciaba : «Ha apa— enmiendas al proyecto (le Ley del Go reciclo el absolutismo papal», y que todo bierno para adaptar a la sociedad espa ello era una maniobra española (le zapa ñola la Declaración conciliar, sin por ello y obstrucción cuando (le los 250 que PC— merecer la frase inaplicable (le «ser más (lían el aplazamiento sólo 25 eran espa papistas que el Papa y niás católicos (ltiC ñoles. la Iglesia». El Papa recibió y escuchó tranquilo a Yo es una definición (logmática. (le la los solicitantes, y resolvió «que el asunto que nadie puede disentir ni un ápice ; es simplemente una Declaración (le princi ftiese sometido al Tribunal adlministrati— yo». Al día siguiente. el Cardenal Tis— pios generales, que no agotan la materia, serant declaró «que el aplazamiento era sino que sirven (le pauta y norma a apli ne exigido por el respeto a la libertad (le los car en cada nación con las variantes Padres conciliares, que desean examinar cesarias. En el priiicipio negativo (le la profundamente un esquema de tanta ini— libertad, todos estamos conformes ; en el positivo, o sea del ejercicio y límites (le portancia». la misma, se admiten diferencias pácti— ras la marca suscitada, las aguas vol cas y circunstanciales, ¿Cree nadie que el vieron a su cauce, y los mismos discon texto conciliar no es perfectible y no será formes reconocieron el acierto papal. perfeccionado ante circunstancias de tiem EJ 14 de septiembre de 1965 se inaugu po y lugar variantes ? raba la cuarta sesión conciliar y hasta El mismo Concilio declara: «El dere el 22 fué amplísimamente (liscutida la cho a la libertad religiosa se ejerce en la nueva relación, en la ctial, frente a la mi sociedad humana, y por ello su u so está noría favorable norteamericana, argunlen— supe(iitado a ciertas normas rectoras. » Y tó brillantísimarnen te la «minoría llamada gloriosa» por Monseñor Velasco. Desde es a la autoridad civil a la que compete tiar estas normas rectoras, p2tra que cada el 27 hasta el 22 de octubre, el Secreta tillo (le los hombres y grnpos sociales riado revisó el texto, conforme a las in cumplan la oblig’ación moral de tener en tervenciones habidas, y el 25 fué presen cuenta los (lerechos (le los otros y los pro tado por Smedt, y votado en once escru tinios los días 26 y 27, y desde esa fecha pios deberes para con los demás, y el bien hasta el 16 de noviembre. los peritos y común (le todos.» «Además, ciado que la sociedad civil tiene derecho a protegerse consultores, bajo la dirección de Smedt, contra los abusos que puedan darse, so redactaron el texto definitivo, que había de libertad religiosa, correspon (le ser votado el 19 de noviembre con 249 pretexto de principalmente a la autoridad civil votos en contra, o sea el 11,5 por 100 de ires tar esta protección. Sin embargo, los Padres votantes. Por último, el 4 de diciembre se distribuyó el texto final, que no debe hacerse de forma arbitraria.» fué votado el 7, corno dijimos al principio, Y la Declaración del Episcopado Es.. 502 REVISTA Número 320 Julio 1967 - DE AERONAUT1CA Y ASrRONAUTICA pañol, el mismo día de la terminación del Concilio, dice : «Dichas limitaciones de la libertad religiosa pueden ser diversas, se gún las diferentes circunstancias socioló gicas de los distintos países.» Justamente, pues, las soberanas Cortes Españolas han discutido y aprobado una «Ley sobre el derecho civil a la libertad religiosa», que no contraviene, sino cine adapta a España la Declaración conciliar. No es mi propósito comentarla amplia mente ; me restringiré cuanto pueda, glo sando sus artículos respecto a las Fuerzas Armadas. La Ley y el Régimen interior de los Cuerpos. Aunque innecesario, quiero advertir que mis afirmaciones son simples sugeren cias (de un ex Capellán de las Fuer zas Armadas, en sus tres Ministerios, du rante cuarenta años) a las resoluciones obligatorias del Alto Estado Mayor. No cabe duda que la Ley afecta a la vigencia (le apartados (le nuestras sabias Ordenanzas y a los reglamentos de las Unidades regimentales, Academias y Es cuelas Militares. Su segunda (lisposición final dice : «Que— clan (lerogadas cuantas leyes o disposicio nes se opongan a lo establecido en la pre sente Ley.» Veamos cii qué difieren con respecto a nuestra legislación castrense. Como dijo el Presidente de la Comisión, señor Beau, en el discurso preliminar «Nuestra Pa tria sigue siendo la primera en obeclien cia y aun en defensa de las normas de la Santa Sede.» Por eso, el artículo 1. de la Ley es reproducción exacta del nú mero 2 de la Declaración Conciliar. Y si éste ftié ampliamente debatido por los procuradores hasta conseguir su reclac ción, no lo fué menos en e Concilio, pues constituyó el caballo (le batalla de tres años de deliberaciones. En el mismo se declara la naturaleza de la libertad religiosa ; que no es liber— taci moral en el individuo o en la socie dad para ser religioso o no; para abrazar o rechazar alegremente los deberes para con Dios, sino que es «inmunidad de coac ción para creer y obrar conforme al dic tacio de la conciencia». Este aspecto negativo de la libertad es tan antiguo como nuestra Religión. Citaré sólo el 1V Concilio Toledano, del año 633, presidido por San isidoro, que reprueba la conducta del rey Sisebuto, estableciendo «que a nadie se hiciera creer por la fuerza». Si luego en la prác tica, no siempre, ni en Espaa, ni en el resto (le Europa, se ha obrado conforme a este pri1c1pio natural, lamentémoslo todos; pero que nadie se rasgue las ves tiduras hipócritamente, ni se crea con de recho a tirar la primera piedra. Que no sólo en los países católicos se encendieron hogueras. Si España expulsó a los judíos en 1492, Inglaterra lo hbí hecho en 1290. Si con (los autos de fe, en Valladolid. y Sevilla, «se deshizo, en frase de Menéndez Pe layo, aquella nube de verano, con menor efusión de sangre que la que en nuestros cijas emplea cualquier Gobierno liberal cii reprimir una conspiración o niotíu de lila— zuda», también en Ginebra, Miguel Ser— vet, por escribir un libro contra la Santí sima Trinidad, fué quemado vivo durante (los horas por Calvino, con aplauso (le la Reforma, pues como reconoció el pastor Tollini, «es todo el protestantismo; es un fruto natural e inevitable del protestan tismo de entonces. No es Calvino el cul pable; es toda la Reforma». Reconozca mos citie en el match de la intolerancia religiosa, todos los púgiles han c1uedado empatados a puntos, y felicitémosnos (le las atiras de comprensión que irecen so— plai en la Humanidad. La libertad y sus límites. La causa de los debates apasionados que hemos relatado anteriormente, se de ben a la parte positiva, o ejercicio (le la libertad religiosa, con sus naturales diver gencias en la diversidad de ambientes. La Declaración conciliar no podía ser igual a la formulada por la ONU sobre los De rechos Humanos en 1948, pues ésta es una sociedad laica, cuyos objetivos son puramente terrenos e inspirada por un in ciiferentismo religioso absoluto. La Iglesia Católica, poseedora de la única verdad religiosa revelada, no puede 503 REVISTA DE AERO7(AUTQA Número 320 Julio 1967 - Y AflOXAUflCA iii indirectamente desentendersede las obligaciones del hombre resp;cto de Dios. Estas son sus palabras: «La libertad re ligiosa... deja íntegra la doctrina católica sobre la obligación moral de los hombres y de la sociedad para con la verdadera religión y la única Iglesia de Cristo.» Naturalmente, el ejercicio y limites le ples de la libertad religiosa no puede ser ipal en una nación de pluralidad confe sional, aun dentro de cada familia, y en aquella que, como España, goza de una mayoría católica del 97 por 100. Más aún, ha de haber normas rectoras distintas (no digo contrarias) en las Fuerzas Armadas y en la vida civil, salvaguardando, sin embargo, «el reconocimiento y respeto del derecho a la libertad en materia reli giosa a todos los ciudadanos». Estas normas rectoras de que habla el Concilio constituyen el articulado de la Ley española, que glosaremos en lo que atañen a las Fuerzas Armadas. * * * Vamos por directo al artículo 5.°, pá rrafo 2, que atañe directamente a las Fuerzas Armadas. Dice así: «En las Fuer zas Armadas no se impondrá la asistencia a los actos del culto, salvo que se trate de actos de servicio, a quienes hagan cons tar su acatolicidad al ingresar en aquéllas.» Vayamos despacio, porque la exégesis y práctica de lo en él establecido encierra más dificultades de las que a primera vista se ofrecen. Los actos religiosos en los Ejércitos (que no son lo mismo exactamente que los actos del culto, litúrgicamente hablan do) son por lo común la Santa Misa en días de precepto y en los feriados, las conferencias religiosas y morales semana les, las clases de Religión en Academias y Escuelas especiales y algunos otros actos, como rezo del Rosario, devoción de los primeros viernes, etc., que a raíz de nuestra Cruzada ha implantado el celo de los capellanes. Antes de la República, las Ordenanzas prescribían como obligatoria la asistencia a la Santa Misa y a las conferencias cua resmales, únicos actos que realmente se realizaban. La República primero obstaculizó cuan to pudo y después suprimió el culto reli giosó. Durante nuestra Cruzada se volvió a la formación rigurosa antigua; pero la Subsecretaría de Marina dió una circular dejando libre la asistencia a Misa para sus dotaciones voluntarias, y esto fué el comienzo de que se suavizara, con con tentamiento de los Capellanes, la forma ción militar sin armas ante el Sacrificio. He creído conveniente hacer este suma rísimo repaso antes de glosar el artícu lo 5 de la Ley. Establece: 1.0 La no asistencia obligatorio de los acatólicos.—Dispoeiciénnaturalísima que a todos nos ha de parecer conforme al es píritu de nuestra Religión, como señala itios al principio. Pero que hemos de re saltar no es una novedad impuesta ahora. I)esde que aparecieron algunos seguido res de otras confesiones en filas, nuestros Jefes y Oficiales, modelo de circunspec ción, dispensaron de la asistencia a los actos del culto a dichos soldados. Mu chos ejemplos podría citar. Siendo Capellán del primer Regimiento de Infantería de Marina en 1926, me con sultó el Mayor qué se haría con dos re clutas voluntarios hebreos, los que ponían dificultades en besar la cruz formada por la bandera y el sable en la Jura. «Pues que no la besen—contesté——, y si no quie ren asistir a la Misa, que se incorporen después.» Así se zanjó la dificultad. Jamás en nuestras campañas africanas surgió el más pequeño incidente con los soldados musulmanes. Y de seminarista en Toledo, recuerdo al alumno Mizziam, con su tarbus, en vez de la gorra de plato, quien, según mis noticias, tenía cocinero especial para sus comidas, y que alcanzó el grado sumo, desempeñando la Jefa tura de Capitanías Generales en España. En REvIsTA DE AERONÁUTICA Y AsTRO xÁtrncA de enero de 1954 escribíun artícu lo. «Mirando al cielo», en el que decía: «Porque, naturalmente, si en la filiación de un recluta, o por declaración suya, aparece seguidor de un culto disidente, nadie intentará obliprle en contra de sus creencias.» Porque en España la toleran cia de nuestra legislación se convertía, en la práctica, en verdadera libertad. 504 JTúmero 320 Julio 1967 REVISTA - DE AERONA UTICA Y ASTRONAUTICA El texto salido de las Cortes es idénti co al presentado por el Gobierno cii este aspecto. Lamentablemente, la ponencia proponía la libertad de asistencia también para los católicos. Decía yo en mi menta— do artículo : «Pero respecto de los cató licos, ¿clué injuria se hace a sus creencias no permitiéndoles cine durante la Misa estén durmiendo o zascandileando por e) cuartel? No hay que olvidar ciue el tiem po del servicio en filas es período de for mación, ecitiiparahle a los de colegios de segunda ensefíanza. ¿Qué educación resul tará eficaz, si se deja opción al educando ?» El artículo 2., que señala las limitacio nes en el ejercicio de la in)ertad religiosa, en su párrafo 1. deternLe:a en el 2. co— mo «actos específicamente sivos» varios. y termina «y cualquier otra forma ilegíti ma (le persuasión con el fin de gai adeptos para una determinada creencia confesión o (lesviarlos de otra». Se trata del proselitismo religioso, censurado por el Concilio. Hemos conocido numerosos casos entre nuestros soldados. Pues es curioso qtie mientras en las naciones (le Pluralismo religioso han llegado a un acuerdo de no entre ellos, alecciona «Si en el aspecto sanitario hay Unida— hacer proselitismo dos por el desastre de sus guerras reli des en las que es obligatorio, al saltar a giosas, se dedican «celosamente» a evan tierra, aceptar un preventivo, atinqtie na gelizar a nuestros suburbios con dádivas, die recomiende ponerse en ocasión de socorros y toda clase (le captaciones. Co usarlo, ¿clué clase de escrúpulos pueden mo remedio práçtico, he aconsejado a mis asaltar a nadie en esta materia?». soldados que contesten simplemente con 2. ¿Quiénes deben ser considerados esta frase «Estoy bautizado, creo en Je acatólicos.?—Quienes lo hagan constar ai su sucristo Redentor. Por tanto, me salvaré, ingreso en filas. Bien claro está. No hay según la (loctrina (le usted. Váyase a duda. Así se viene haciendo hace muchos evangelizar a la India o al Congo.» aíios, pues se pregunta a cada recluta Creo, pues, cine debe mantenerse y aun cuál es su religión. Y en verdad que los reforzarse la prohibición de discusiones y adscritos a confesiones protestantes vie proselitismo en filas, sefíalanclo penas a nen bien asesorados, y contestan en voz los infractores, porque la Milicia es ún i— alta su acatolicismo, sin ser molestados camente el brazo armado (le la Patria, por ello lo más mínimo. unido, disciplinado 110 patlenque (le (liscu— siones, o patio (le i onipodio. 3.° Se 75receptíía la: asistencia indiscrími nada a los actos de culto, “cuando se traite * * * de actos de servicio”. ¿Qué se entiende por acto de servicio? ¿Oué actos del culto Al establecer el artículo 3. «que las pueden implicar actos de servicio ? La J ura de Bandera con Precedente Misa, creencias religiosas no constituyen moti desfile con armas con asistencia de la vo de desigualdad (le los espaúoles ante fuerza al Santo Sacrificio, picuete arma la ley», y el artículo 4•Q «que todos los do para rendir honores al Santísimo, pro espafioles, con independencia de stis creen cesiones, como las (le Viernes Santo o cias religiosas, tienen derecho al ejercicio Corpus Christi, son actos de servicio? de cualquier trabajo o actividad», juzgo Hasta ahora, la circunspección del Man— que ha de estudiarse si estas cláusulas son (le aplicación en el ingreso a Academias do, previa1ne1te informado, ha orillado estos escollos, sin necesidad de esta ley. o Escuelas militares, si bien se ha de cum Conocernos, sin embargo, algún caso en plir lo mandado en el artículo 79, Párm— fo 4.b sobre ensefianza católica. el ciue el acatólico difirió intencionada Por último, el artículo 27, párrafo 2., mente su declaración de tal hasta el mo obliga al servicio en filas a los ministros mento solemne de alzar la Hostia, para acatólicos. no obedecer la orden del cornetín de ren dir armas. Estos incidentes, cine ptidieran Con el mismo interés por las cosas cas multiplicarse, han (le ser prevenidos, acla trenses que cuando ingresé ei 1923, he rando el concepto y amplitud del acto de expuesto estas sugerencias al Man(lo, servicio. quien resolverá lo más conveniente. 505 REViSTA DE AERONA UTICA Número 320 Julio 1967 - Y ASTRONAUT1CA OTRASCONSIDERACIONES SOBRE ESCALA i’or JESUS SALAS LARRAZABAL Cornanduzte Ingeniero Aeronáutico. el número de marzo de la REVISTA DE AERoNÁUTIcA AsTR0NÁU’rIcA ha apare recido un artículo sobre este tema, que en líneas generales considero acertado, pero creo necesita algunas aclaraciones y recti ficacio nes para impedir cause confusión en los lec tores que no hayan meditado sobre el tema. La primera conclusión del artículo era que la edad media de todos los empleos, excepto el Generalato, iba gradualmente aumentan (lo entre 1962 y 1972, y que este aumento era desorbitado en el empleo de Teniente Coro nel. Este hecho es incontrovertible. Ahora bien, del texto del artículo podría deducirse que la causa de este envejecimiento es el pro cedimiento de ascenso, cuando en realidad la causa directa fué la entrada simultánea de’ gran número de’oficiales como consecuen cia de la Guerra (le Liberación. Estos oficia les fueron clasificados en tres promociones: la de los oficiales que actuaron en Aviación durante la guerra, la de’ los convocados para Aviación, pero que no acabaron el curso has ta después de la guerra, y la de los que’ pro venían (lel Ejército de’ Tierra. La edad media (le’estos oficiales, hoy Co roneles o’ Teniente Coroneles, e’s de’ cincuen ta y un años, si bien ‘los más jóvenes sólo tienen cuarenta y cinco. Como’ entre 1962 y 1967 todos los Teniente Coroneles eran (le’ esta procedencia, el envejecimiento me dio ha sido’ exactamente cinco años. Entre 1967 y 1972 la edad media de los Tenientes Coroneles sólo aumentará en cuatro años, ya que están aho’ra ascendiendo’ los de la 4J promoción de’ León (posteriores a la gue rra), y a partir de 1968 empezarán a alcan zar este empleo’los componentes de’ la 1. pro moción de la. Academia General. La edad media de los. Coroneles no’ ha aumentado entre 1962 y 1967, ya que en estos años han ascendido o causado baja los últimos oficiale’s. anteriores a 1936. El envejecimiento’ se’ ‘roducirá a p’artir de 1967, cuando todos los Coroneles se’an proceden tes de oficiales provisionales durante’ la guerra. Conocida la causa del envejecimiento ac tual, puede predecirse co’n bastante’ exactittal hasta cuándo durará, si no’ se actúa sobre’ los mecanismos de ascenso. La 1J promoción de’ la Academia General empezará a ascen (ler a Coronel en 1978, a General de Briga (la en 1981, a General (le D’ivisión en 1983 y a Tenie’nte’ General en 1985. Esta cuenta es bastante simple’, ya que’, por haber naci do en 1921 los jefes. más jóvenes anteriores a la General, causan baja en estos empleos en 1981, 1983, 1985 y 1987. Los miembros (le la 1. promoción (le la General han naci (lo’ entre 1921 1928, de forma que los más jóvenes de entre’ ello’s pueden ascender a los citados empleos a los cincuenta, cincuenta tres, cincuenta y cinco y cinctienta y siete años, o sea un po’co’viejos a Coronel, pero jóvenes a los diverso’s grados del Generalato’. El problema ha quedado’, pues, centrado en el siguiente: En ‘el empleo’ d’e Teniente Coronel habrá un atasco’ entre 1967 y 1974, y en el e’mp’le’o de’ Goronel entre 1967 y 1976, 506 REVISTA Número 320 Julio 1967 - Y atasco que afectará fundamentalmente a los miembros de la 3•5 promoción de León, que hoy ocupa la zona intermedia del empleo (le Teniente coronel. En líneas generales puede decirse que tie nen posibilidad de ascender a General los Teniente Coroneles nacidos a partir de 1917, si están en la cabeza (le su escala o de 1920 si están en la cola.. Estos últimos podrán ascender a Coronel si han nacido’ en 1919. Los comandantes de las promociones 5•5 y 6. de Iieon, colocadas detrás de las 13 y 2. de la Academia General, no tienen opción de llegar a Coronel. Parece conveniente, pues, actuar de algu na manera que permita. redticir algo’ este atas co y devolver la fluidez necesaria a. las esca las, pero sin perder (le vista, que debe cvi tarse tm vacío prematuro en el Generalato, co’n objeto de dar tiempo suficiente a los componentes (le la 13 promoción tic la Aca demia General para habituarse a cargos de responsabilidad antes de su ascenso a Ge neral. Creo que ambas cosas pueden lograrse apli cando al Ejército del Aire tina norma que ya. rige en las Líneas Aéreas, la de perder la aptitud de vuelo a los cincuenta y cinco años, a no’ ser que’ se’ demuestre’ que se es areedor a. la continuación por co’ndicio’nes físicas y horas de vuelo acumuladas. La aptitud de vuelo’ debiera. perders’e definiti vamente a los sesenta. años en los empleos de Coronel y General de’ Brigada, y a. los sesenta y (los años en los de Genera.l de Di visión y Teniente General. Co’n estas premisas puede preverse un régimen estable de ascensos, ajustado en lí neas. generales. a las. piantilla.s citadas en el artículo’ comentado, de acuerdo con el si guiente cuadro’: E M i 1. p Teniente Capitán Comandante Teniente Coronel Coronel General de Brigada General d:e División 58 Teniente General 60 DE AERONAUTICA Edad inedia al ascender 23 29 37 44 50 55 ASTROJ 1AUTICA Si hicieran falta más. tenientes, cuya esca sez es. hoy en día un grave’ problema del Ejército del Aire, podrían cubrirse sus pues.tos con oficiales. de complemento. Los Tenientes. Generales ascenderían con ap.titud de vuelo, pero la perderían después, ya que’ para muchos. de sus cargos no parece imprescindible’, pero sí el hab’er co’nservado mentalidad aeronáutica hasta último’ mo mento. No estimo conveniente’ reducir la edad de retiro’ por debajo de ‘los sesenta y seis años, si no’ lo hacen igualmente’ los Ejér citos de Tierra y Mar, ya que’a la larga cier tos puestos de Teniente General podrían ser comunes a los tre’s. Ejército’s. Los. Generales de’ División y Brigada, que’ no’ asci’endan antes de’ cumplir lo’s sesenta y dos. años y sesenta, respectivamente’, perderían la aptitud de vue lo, pero’ podrían continuar en puestos. en que esta aptitud no’ fuera n’ece’saria, hasta los se’senta y cuatro y sesenta y dos años. La. selección de’ los ‘empleos intermedios se haría imponiendo como’ condición p’ara poder a.sce’nder a Cap’itán, Co’mandante, Te’ niente o’ronel y Coronel el hab’e’r acumula. do’ 1.000, 2.000, 2.500 y 3.000 hora.s (le vuelo respectivamente’, y con algún sistema de’ puntuación, si se’ considera conveniente’. Con el esquema oropue’sto’, la edad sola no es causa d’e eliminación p’ara e’l ascenso a General, ya que podría ascender un coronel de’ cincuenta y siete años que’ hub’ie’ra man tenido su aptitud y fuera elegido’, aunque’ la mayor fa de sus compañeros hubieran sido descalificados a los cincuenta y cinco años. Todo’ a.quel que se mantuviera en forma po (iría a.sp’irar al Generalato, aunque e’ste ho nor queda reservado’ al 7,5 por 100 de’ los que salieron (le la Academia. En un próximo’ artículo continuaremos este’ estudio’ e’n lo cine’resp’e’cta a o’tras Armas y Cuerpos.. Margen edad al ascender Obtienen 21-25 27-31 35-39 42-46 48-52 53-57 56.59 59-61 40 37 27 19 13 3 2 1 507 el empleo , Ascienden al causan baja empleo superior 3 10 8 6 10 1 1 1 37 27 19 13 3 1 1 0 REVISTA DE AERONAUTICA Número Y ASTRONAIJTICA 320 Julio 1967 - la’usutcM&tliaci»usl DECLARACIONES DEL EXCMO. SR. MINISTRO DEL AIRE A LA REVISTA ((DESARROLLO» La revista “Desarro llo”, en su número del 2 de julio, dedica un ex traordinario al Trans porte Aéreo. Este núme ro publica unas declara ciones del Excelentísimo Señor Ministro del Aire, Teniente General don Jo sé Laca.lle Larraga, que por su interés reproduci mos a continuación: —Seor Ministro, ¿ qué planes tiene la Adminis tración en relación con la infraestructura de los ae ropuertos—edificios ter minales, pistas, etc—, (le cara a los nuevos aviones (le gran capacidad? —La adaptación de las infraestrticturas (le los aeropuertos a los nuevos tipos de aviones de gran capacidad, así como a los supersónicos que se anuncian para la misma fecha. de’ entrada en servi cio (1970-72), es cosa que no causa sor presa por estar acostumbrados al progreso (le las características de las aeronaves, con el consiguiente a.uniento de velocidad y to nelaje. Los fabricantes de aviones se preocu pa.n (le que los nuevos tipos puedan utilizar los aeropuertos. actuales, haciendo que las características de las aeronaves evolucionen (le tal modo que haya tiempo (le adaptarse a las nuevas necesidades. En esta línea, puede decirse (Inc los aviones (le gran capacidad se anuncian c.on trenes (le aterrizaje más amplios, para que no se supe ren las cargas por rueda. que soportan los pavimentos actuales. Otro tanto ocurre con las’ longitudes de pistas y únicamente’ se pre vén algunas reformas en las zonas de circu lación, por la necesidad de mayores radios de’giro y (le protecciones latera les (le’ los pavimentos al sobresalir los motores ex teriores (le las pistas (le rodaje. El impacto’ sobre’ las estaciones terminales (le los aviones (le casi qui nientos pasajeros está cu bierto’ en nuestros prin cipales. aeropuertos por la magnitud y (lispo’sición (le lo’s diferentes elemen tos que’ actualmente’ se encuentran en fase (le terminación. En los aero puertos orientados al tu— risnio, (le’ mucha menor dimensión que los ante— riores, se ha tenido en cuenta esta posible nece sidad de ampliación, adoptando tipos fun cionales y (le élenientos estructurales unifor loes prefabricados, con lo’ que’ las amplia ciones necesarias podrán realizarse económi camente y en breve plazo. —Parece ser que actualmente los termina les flO están acondicionados para carga. Oué mentalidad tiene la Administración sobre este aspecto? —En efecto, en la actualidad los termi nales no’ están acondicionados para recibir y despachar las mercancías, que en volumen notable comienzan a llegar a algunos aero puertos. La razón se debe a que cuando se Drogramó el actual Plan de Aeropuertos y Rutas Aéreas, al igual que en el resto (lel mundo, no se preveía e1 enorme aumento (le los tres últimos ados.. Si antes se transporta han po’r aire únicamente mercancías interna cionales de alto’ costo y poco’ volumen, nos 508 Número 320 Julio - REVÍSTA 1967 Y ASTRONAUTICA encontramos hoy con que el transporte de mercancías se hace en parte sensible por avión, cosa que no se podía esperar. La construcción (le las estaciones de mer cancías necesarias en algunos aeropuertos españoles está prevista p.a.ra comenzar con el nuevo Plan (le Desarrollo, creyendo que será escaso por ahora el número de los aero puertos en los que tengan importancia estas estaciones. —Existe alguna planificación para el fu turo sobre reclutamiento (le pilotos con des tino a la aviación comercial? —Las escuelas de pilotaje de po’limotores y de vuelo instrumental del Ministerio del Aire han estado siempre abiertas a. la forma ción de pilotos para la. aviación comercial. Ya. en el año 1940, y al mismo curso de vuelo sin visibilidad en avión polimotor que se hizo, concurrió algún piloto civil, por cuenta de iberia. Pero como’ la formación (le un piloto para el transporte comercial es costosa, práctica mente no está al alcance del particular que (lesee dedicars.e a tal profesión y las compa ñía.s comerciales, en tanto, ven la posibilidad (le nutrir sus cuadros con personal proceden te del Ejército del Aire, qtie puede ser atraído por las ventajas económicas que ofrezcan las compañías. Y como al Ejército del Aire le conviene nutrir en parte sus filas con pilotos de com plemento, que sólo por espacio limitado de, tiempo, ocho a. doce años, permanezcan en filas, ambas circunstancias se complementan, por lo que los planes para. el futuro inmediato están orientados a la formación del número conveniente .de estos pilotos, que tras presta.r servicios militares, pueden tener un porvenir halagueño en la vida civil, a la vez que llena.n una necesidad (le las compañías comerciales de aviación, sin perjuicio (le que a éstas pue (la. concurrir algún profesional del Ejército del Aire. En todo. caso, éste no puede dejar de con siderar que’ los pilotos de la aviación comer cial (le transporte son una. reserva, con que cuenta en caso de’ movilización, reserva en extremo eficiente en técnica aeronáutica., la cual es conveniente tenga. una. formación militar. Cómo co.ntempla la Administración el “charter” trasatlántico? — DE AERONA UTICA —La decisión unilateral tomada. por parte de las autoridades aeronáuticas. norteameri canas de conceder permiso p.ara explotar vuelos transatlánticos. a seis. compañías. aéreas (le aquella nación en vuelos a la demanda., aparte de la.s compañías regulares Pan Ame rican y T. W. A., encontró una oposición unánime (le todas las autoridades aeronáu tica.s europeas, que veían que esta medida podría hacer peligrar el normail desenvolvi miento de sus respectivas compañías aéreas. El criterio (le las autoridades aeronáuticas españolas. coincide con el de la.s restantes europeas, si bien nuestra reglamentación, con la vista puesta. en los intereses turísticos del país, permite libremente un vuelo men sual tipo “charter” a estas compañías; no obstante la autorización de grandes. series ha (le estar condicionada. ai que exista una. par ticipación sustancial en el transporte por parte (le la compañía española, y de que la desviación de tráfico que pueda realizarse en los vuelos regulares trasatlánticos no lIc gue a. p.roducir un quebranto’ económico a la compañía española, que fuese de mayor enti dad que la aportación qtie recibía el país. por la permanencia de esos turistas, dado que este tipo (le vuelos “charter” produce un importe del transporte aéreo que es. notable’mente más alto’ que los ga.stos (le estancia, la cual suele limitarse a siete o diez días. Po.r otra parte, desde el 1 de abril del año actual han entrado’ en vigor unas tarifas de grupo para vuelos, a través de las líneas que hacen, en gran parte, innecesarios los vuelos “charter”, pues mediante la. aplicación (le estas tarifas se pueden encaminar grupos turísticos. en los vuelos de las líneas regula res y con la acomodación habitual de es.te tipo. (le vuelos, a tarifas tan bajas como la de 225 dólares. pa.ra. el trayecto’ ‘de’ida. y vuel ta a o desde Nueva York. Cuál será, hasta donde’ sea previsible, la participa.ció.n de las compañías españolas en el “charter” intereuropeo? —Hasta. la fecha., la participación de las compañías españolas en el “charter” inter europeo ha siclo muy limitada, en parte (le’— bido’ a la liberalidad con que se’ ha aplicado en España el Convenio Multilateral europeo de’ tráfico aéreo no regular, que’ ha permi ti(lO a las. compañías extranjeras. desarrollar ampliamente sus actividades en relación con nuestro’ país.; y en parte también, a no’ con- 509 — REVISTA DE AERONA UTICA Nionero 320 JuUo 1967 - Y ASTRONAUTICA tar en España con compañías de vuelos “charter” adecuadamente equipadas para concurrir de una manera efectiva a este tipo (le vuelos. El desarrollo de las compañías anterior mente existentes y la creación de otras nue vas ha llevado a que en la actualidad se cuente con cinco compañías equipadas con f:lotas compuestas por aviones plenamente competitivos en los mercados. europeos, lo que hará que, indudablemente, la participa ción de’ las compañías españolas dentro del mercado de “charter” intraeurop’eo vaya aumentando. progresivamente’. —Dada nuestra orografía y la disposición radial de nuestra red principal de carreteras, ¿ qué porvenir se puede augura.r para el taxi aéreo? —El taxi aéreo en España ha dejado de se’r una promesa para ser ya una realidad. En España se cuenta acttialmente con dos compañías. dedicadas a taxis aéreos, equipa das con material modernísimo y a.dectiado para este tipo de’ vuelos, y, a pe’s.a.rdel corto plazo de’ tiempo que llevan desarrollando su actividad, el número de vuelos que están rea lizando estas compañías está aumentando a un ritmo que permite’ hacer previsiones opti mistas.. Hay que señalar que’ gra.n parte de los servicios contratados. co’n estas compañías lo son por extranjeros que visitan nuestro país, bien por motivos de negocios o de turismo’, y cada vez va incrementándose el número’ de vuelos que se efectúan por estos ta.xis aéreos, no sólo entre aero’puertos españoles, sino muy frecuentemente de enlace’ entre otros aeropuertos europeos. y de los países norte africanos vecinos. —Según nuestras. noticias, ya funcionan los, aeropuertos d’e Alicante y de Gerona. ¿ En este orden, en qué fase se encuentran los resta.ntes previstos y cuáles son? —Terminados en su primera fase los aero puertos de’ Gerona y Alicante, el resto de los nuevos aeropuertos que se construyen se en cuentran en fase avanzada, y as.í, por ejem plo, se espera que, aunque con limitaciones., pueda abrirse al tráfico e’ste verano e’l aero puerto. .de Almería; a fin de año el de Fuer teventura, y en no mucho más plazo ‘el de A sturi as. En cuanto a las mejoras programadas en los antiguos ae’ropue’rtos, se’ prevé quedarán finalizadas dentro del año. Quiere V. E. decirnos, algo sobre’ los aeropuertos insulares? —Que por su carácter se les da prioridad. Tratamos de’ que en el año 1968 entren en servicio los nuevos aeropuertos de las islas de Menorca y La Palma, y se quiere impri mir la mayor celeridad a los expedientes (le los ‘(le’Gomera y Hierro’. —Lo’s helipuertos son tema de actualidad y de gran atención en las gentes. Sobre el particular, ¿ qué planes existen? —En el Plan de Aeropuertos y Rutas Aéreas se prevé el futuro’ desarrollo de la red de’ helipuertos, hasta tal punto. que en ‘el vi gente’ Plan (le Ordenación Urbana de Ma drid están fijado’s los, cuatro emplazamientos principales. (le’ la capital. De to’das maneras, su re’a.lización deberá supeditarse a las exi gencias ‘del tráfico, que’ en este tipo’ de trans porte es muy eccaso, porque su elevado costo llega a s.er cuatro’ veces, superior al del avión. — —Señor Ministro: ¿ Considera interesa.nte exponer ptlnto’s. de vista sobre las ta.rifas na cio’nales y política que’ se aplica a ellas? —Refiriéndome a las tarifas, en líneas aéreas regulare’s., cabe’ decir que’, aparte (le las internacionales que’ vienen siendo’ ‘estable cidas por acuerdo’ de la 1. A. T. A. para todas las compañías, las de las líneas. interio’re’s, para las que’ se fijó el precio por kilómetro de re’co’rrido’ a comienzos de 1962, no han sufrido variación en el tiempo transcurrido desde entonces., durante’ e’l cual creo que todas las tarifas de’ transporte de’ superficie han tenido subidas, sin variación d’e recorridos. D’e igual manera han sido objeto de eleva ción las tarifas kilométricas de’ las. líneas aéreas interiores de’ otros países europeos, ya ante’s. mis. altas que’ las españolas, y que hoy lo’ son en la proporción de’ un treinta y tantos po’r ciento más. Aunque ‘los facto’res que han obligado’ a la elevación de tarifas de transporte de’ super ficie no dejan de re’pe’rcutir en el transpo’rte aéreo’, ‘en éste continúan sin variación los precios por kilómetro reco’rrido establecidos, y si bien sí han sufrido modificaciones. en alza, el importe de’ lo’sbilletes entre aeropuer tos (no’ en todos los casos), ello’ es consecuen cia del aumento de re’corrido’s impuesto a los 510 Nimero REVISTA 320 Jido 1967 - DE AER’OAUTICA Y ASTRO2’AUTICA aviones por necesidad de seguridad en la circulación aérea. Imponer mayores recorridos con el consi guiente aumento de costo por consumo de combustible y amortización de material, sin contrapartida, supondría imponer una rebaj a (le tarifa—fijada en pesetas/kilómetro—, que es lo contrario de ‘lo ocurrido con los —Quizá el más. grave problema lo produz ca la mayor intensidad de’ tráfico que origi nará el movimiento de aviones, lo que obliga a la automatización del control de’circulación aérea y a una mejora sustancial de ayuda a la. navegación y de la red de telecomuni caciones, al tener que conseguir tiempos (le tránsito más reducidos. Para esta automati zación a realizar en el II Plan de Desarrollo demás medios de transporte. —Por último, ¿desea V. E. comentar al Económico y Social está prevista la instala gunos otros aspectos no comprendidos en el ción de’ redes de radar, radiofaros, mejora.s temario anterior o bien añadir cualquier otro de telecomunicaciones, y adaptación y mejora en pronósticos meteorológicos. concepto de carácter general? VISITA DEL JEFE DE.L ESTADO MAYOR DEL AIRE, TENIENTE GENERAL NAVARRO GARNICA Invitado por las Fuerzas Aéreas de la República Federal alemana, el Teniente’ Ge’ neral Navarro Garnica, Jefe del Estado Ma yor del Aire, ha errnane’cido varios días. en Alemania visitando diversos, centros e ms- tala.cionese aeronáuticas. Durante su es tancia en la República Federal se trasla. dó durante tres días a Berlín occidental, es pecialmente’ invitado por ‘el Senado de Ber lín. TOMA DE POSESION EN EL MINISTERIO En el salón de actos del Ministerio del Aire’ se celebró, el 15 de julio’, la ceremonia de’ toma de posesión del nuevo Secretario General Técnico’ (le Aviación Civil y de Transporte Aéreo’, o’rone’l del Arma de Aviación, Servicio de Vuelo, don Emilio O’Conno’r Valdivieso’. Presiclió el Ministro (lel Aire Teniente General Lacalle’. VISITA DE LA ACADEMIA DEL AIRE Leída e’l acta de nombramiento, el Coro nel O’Co’nnor pronunció el juramento’ de su cargo y de fidelidad al Movimiento’ Nacio nal. Después., el Teniente’ General L.acalle resaltó la labo’r realizada por el Secretario General Técnico saliente, General don Fran cisco Pina Alduini, y la personalidad del Có ron el O’ Co’nno’r. GENERAL DEL AIRE A LA, ARGENTINA El último’ curso’ de la Academia General del Aire’ ha realizado’ en el mes de’ julio un viaje’ de’ estudio’; a la República Argentina. La expedición ha. sido presidida po.r el Di rector de la Academia, Coronel don Emi liano’ Alfaro’ Arregui. Durante’ su estancia en el país hermano, los cade’tes. visitaron diversos, centros e ms talacio’nees aeronáuticas. y participaron en la parada militar del CLI Aniversario’ de’ la independencia argentina, desfilando en ca beza de las Fuerzas de la Aeronáutica. ar ge’ntina, ante’ el Presidente’ de’ la Repúbli ca, Teniente General don Juan Carlos Qn ganía. Según palabras del Director de la Acade’ mia, Coronel Alfaro: “La visita de los, avia dores. españoles ha constituido una exterio rización magnífica de hermandad hispano argentina.” 511 REVISTA DE AERONAUTIC’A Número Y ASTRONAUTIcA ENTREGA 320 Julio .1967 - DE DESPACHOS En la mañana del cha, 15 (le JUIjO se cele bró en la Academia. General (id Aire el acto de la entrega (le despachos (le Teniente a. los alumnos .de la XIX Promoción que han terminado sus estudios en aqtiel centro. Está comptiesta dicha promoción por no venta. y siete Tenientes del Arma (le Aviación y cinco del Cuerpo (le Intendencia del Aire. El brillante acto fué presidido por el Te niente General Jefe (le la. Región Aérea. (le Levante, con asistencia de otras autorida (les. Tras la entrega de despachos., los Ca (letes y nuevos Oficiales del Ejército. del Aire desfilaron ante las mismas. JURA DE BANDER A EN VILLAFRIA El pasado (lía 15 (le julio tuvo lugar, en el aeródromo escuela (le Villafría, la parada militar, en la que prestaron juramento (le fidelidad a la Bandera lo.s 189 Caballeros Alumnos que integran la XIX Promoción de la Milicia Aérea Universitaria, acto que estuvo presidido por el Capitán General che la Sexta Región Militar, don Antonio Cores Fernández (le Cañete. El Escuadrón (le alumnos formaba con Bandera, Lscuadra y Banda en el patio (le PRESENTACION armas, donde fué revistado por las autori dades militares, asistiendo a. la ceremonia familiares, y numerosos invitados. Después de la misa de campaña tomó juramento (le fidelidad a. la Bandera el Comandante Jefe del Escuaclrón de Servicios y el Capellán (Id Aeródromo. El Coronel Director (le la Milicia Aérea Universitaria, (ion Antonio Casteleiro Na veiras., dirigió una alocución patriótica a los alumnos. DE HELICOPTEROS En el campo (le vuelo del Real Aero Club (le España en Cuatro Vientos la firma 11erisa ha exhibido (los modelos (le helicópte ros (le la casa Bell, ci 209 “T-Iuevcobra” y el 206 “Jet Ranger”. Se trata, el primero (le ellos, (le un helicóptero militar (le caracte rísticas impresionantes que’ está siendo uti lizado por los Estados Unidos en la guerra (le Vietnam para el apoyo directo, ya que su velocidad, estabilidad y capacidad de ma niobra le convierten en una. excelente pla taforma (le tiro. Puede ir dotado con varias combinaciones de Armamento, ametrallado ras y cohetes, y es especialmente apto. para la lucha anti-guerrillas. El modelo Agusta-BelI 206 “Jet Cobra” es un helicóptero de bellas líneas, (le lujoso y confortable interior, apto para empresas. hombres (le negocios, servicio (le taxis-aéreos. ctcétera. Alcanza una velocidad máxima (le 225 ki lómetros/hora, un radio de acción normal (le 640 Km. y capacidad para cinco personas con más (le’ 100 Kg. (le equipajes. 512 REVISTA Número 320 Julio 1967 - DE AERONA UTICA Y ASTRO?ZAUTICA 1,suci6,tcidExt’icutetc AVIACION MILITAR El F-1i1 se encuentra por primera vez en Inglaterra. En la pist de aeropuerto de Watherfield le vemos con las alas desplegadas para el despegue. ARGELIA Evacuación de bases francesas. La evacuación de las bases francesas que servían para ex perimentos atómicos y espacia les en el Sahara argelino debe estar terminada para el 30 de junio. Se trata del complejo Colomb Bechar-Hammaguir. Las bases habían sido implan tadas por el Ejército francés en 1949. Pero hay que subrayar que, desde entonces, la mayor parte de los disparos efectuados en ellas tenían carácter cientí fico. El último experimento fué el lanzamiento de un cohete y s produjo hace poco más de dos meses en Hammagui.r. Antes del primero de julio pró ximo todo el personal y el ma terial deberán estar evacuados. Francia mantenía en esas bases unos seis mil militares. Con sus familias formaban un núcleo de unas quince mil personas. Los franceses han tenido que emba lar unas diez toneladas de ma terial, principalmente científi co. Para ello ha sido necesario establecer un puente aéreo en tre París y Colomb-Bechar. Pero la mayor parte del material ha seguido la vía marítima, por el puerto de Orán. Las últimas unidades evacuadas serán los grupos de la Legión Extranjera. Sin embargo, estas fuerzas no saldrán de Argelia, como se ha bía creído. 513 Serán trasladadas a la gran base aeronaval de Mazalquivir, cerca de Orán, que seguirá en posesión del Ejército francés du rante unos años. Hace unos días, un represen tante del Ministerio francés de la Defensa, el General Fourquet, presidié en Colomb-Bechar la ceremonia de clausura del Cen tro Interarmas de Experimen tos, con aparatos especiales. Ello consagraba el cierre oficial, pre visto en los acuerdos de Evian, de esa base y de la de Hamma guir. El director del Centro re cordó durante la ceremonia que «la política d e 1 General De Gaulle hacia el tercer mundo, en la que Argelia ocupa lugar preferente, es garantía de que REVISTA DE AERONA UTICA Nrnero Y ASTRONALTTICA 320 Julio 1967 - ya los porrnenores y detalles de un nuevo tipo de avión que será capaz de alcanzar 5.600 kilóme tros por hora, cubriendo la dis tancia (le Nueva York a Ma drid en uro hora exacta. Conviene señalar que estos aviones no están destinados al ((50 c’omcrcial , sino a las Fuer zas Aéreas Norteamericanas, p01’ OIIVS. iniciativa se trabaj a en el proyecto. El contrato para el desarrollo del nuevo modelo ha sido firmado por el mando aéreo con la División de Siste mas Aeronáuticos (le la Lock heecl Cornpanv, (le California la North American Aviation, de Los Angeles, y la Mel)onnell Aircrsft Corporation, (le San Luis. El importe total de este contrato asciende a 000.00(1 dó lares. Esta foto ç’rafía (le Ufl Hércules KC-130 repostando a un Silor.v liv C’H-3, es la nielor demostración (le las posibi lidwles de repostado en vuelo entre helicópteros ‘y aviones turbohélices. continuarán las relaciones fruc tuosas entre nuestros dos paí ses». Por su parte, el General Fourquet (lijo que «no dejarnos estas tierras sin pesar y desea rnos a Argelia que continúe sus éxitos». El Ejército Nacional Popular argelino, que ha tornado pose sión (le Harnmaguir, instalará en Colomb-Bechar una Escuela %Iilitar. En la Prensa mogrebí la eva cuación y la ceremonia de cierre ha tenido escaso eco. ESTADOS Nueva UNIDOS York-Madrid en una hora El (lesarroli,) le los modelos aéreos no parece tener fin. Hasta fecha nuiv reciente, he mos oído h 51)1 a :‘ (le n uevos avi o— nes supersónicos (le pasaj eros, que serán capaces de realizar el viaj e entre l adrid y Nueva York en sinos tres horas. Piles bien, cuando los referidos modeJos todavía se encuentran en proceso (le fabricación, una cus— presa nortea ¡00 )‘10’ no estudio 514 El nuevo modelo (le avion MlpeT’sórnco dispondrá de moto— (‘es «ramjet». En estos ¡untores, el aire entra en ls cámara (le combustión a una velocidad supersónica y ahí se combina con el combustible para p(‘(((1(1— cii’ el empuje necesario para el avance del avión. La (‘ombustion (le la mezcla se efectúa tani bién a velocidades su1persónicas, siendo esto lo que da al avión su enorme velocidad. La altura que podl’á alcanzar será próxi— ma a los 40,000 metros. El nuevo contrato facilitado por las Fuerzas Aéreas a ia.s tres empresas que acabamos (le mencionar ha despertado un gran interés en el país, porque se espera que sirva (le base a nuevos avances en el campo (le la aviación. JORDANIA Retirada oportuna. Cuarenta y ocho horas antes de que comenzaran las hostili dades en el Medio Oriente, el 5 del pasado mes (le junio, los kEVISTA bÉ ÁEkc»ÁÚTIÓÁ Número 32Ú Julio 1967 - F-104 que, al parecer, se halla ban ya en servicio en las Reales Fuerzas Aéreas Jordanas fueron retirados a una base norteame ricana en Turquía y no se ha hecho referencia a ellos en las fuentes de información jordana. En los Estados Unidos expli can que este pequeño número de «Starfighters» (dos monopla zas A y tres biplazas B) eran propiedad norteamericana y se hallaban bajo el control del Em bajador de los Estados Unidos, aunque ostentaran los emblemas de la Aviación jordana. Habían llegado hacía varios meses, y su propósito era entrenar a los pi lotos jordanos en el F-104 A, ya Y ASTKONAUTICA que se iban a suministrar 36 do estos aviones, según acuerdo f ir mado antes de la guerra y que no preveía su entrega hacia fi nales de año. Estos sí iban a ser de propiedad jordana. Los aviones retirados estaban servidos por un equipo, de los Estados Unidos, de unos 100 hombres, que fueron evacuados al marchar los aviones, de la base de Mafraq, que es donde efectuaban los entrenamientos. La base de Mafraq fué bombar deada por las Fuerzas Aéreas Israelíes el 5 de junio. El acuerdo sobre la entrega de los F-104 sigue vigente, pero es difícil hacer cábalas sobre su evolución, después de la guerra relámpago, en la que las Reales Fuerzas Aéreas Jordanas han dejado prácticamente de existir. La confusión de la postguerra es grande y el Gobierno se en frenta con problemas mucho nás perentorios, como el de los re fugiados y la pérdida del turis mo. En fuentes de información bri tánicas puede leerse—no sabe mos si con un cierto tinte de ironía—que la retirada del per sonal y de los cinco aviones nor teamericanos es un tanto que dice mucho a favor del Servicio de Información de los Estados Unidos. El AH-56 A, del Ejército norteamericano es!una mezcla de avión y helicóptero, con planos sustentadores, motor de turbina a reacción y rotor rígido de empuje vertical, ca paz de volar dos veces más rápido’ que el más veloz de! los helicópteros que actúan en Vietnarm. 515 REVISTA DE AERONA UTICA Número 320 Julio - 1967 Y ASTRONÁUTICA ASTRONAUTICA Misiles balísticos lanzables ESTADOS Seis nuevos UNIDOS satélites militares. Desde Cabo Kennedy (Flori da) hao sido lanzados seis sa télites impulsados por un pro— yectil-eolieto «Titán 30». que so unirán al nuevo sistema de sa télites de coni unieaciones mili— taros para enlazar Wáshington con el Vietnam. En total, cuando los nuovos satélites se hallen en órbita ha brá 21 satélites en el espacio para fines (le comunicaciones mi litares. Uno (le los satélites que aca ban de lanzarse hoy servirá de enlace por radio con las tropas de primera línea y otro para el envío de fotografías. El programa de los satélites de eonulnicnciones militares se ini— Y MISILES desde plataformas móviles desfilan en Moscú ante el Mariscal GrecO/ea. ció hace un año, y los Estados [nidos cuentan cois centros de seguimiento en el Vietnam, Ha vai, Filipinas, Etiopía, Alema nia occidental y en algunos Es tados de la Unión en el territo rio continental. INGLATERRA El «U K 3», primer satélite británico. El Consejo de Investigación Científica del Reino Unido ha mostrado, en una conferencia de Prensa muy concurrida, un mo delo de tamaño natural del sa télite espacial «U 1K 3», el pri mero totalmente construido en este país, que va a realizar una serie de estudios atmosféricos, mneteorolégieos vastronómieos durante el amio que dmará su 516 permanencia en torno a la Tie rra. Hasta ahora, la labor científi ca de Gran Bretaña en este cam po se había limitado a la prápa ración de equipos de precisión destinados a su instalación en cápsulas fabricadas en Nortea mérica, como ocurrió con los sa télites «Ariel 1» y Ariel 2». Dejando a los Estados Unidos la preocupacién por la conquis ta de la Luna, Inglaterra, con un sentido más práctico y mo desto, trata de conseguir con su satélite «U 1K 3» un minucioso estudio del oxígeno molecular que se encuentra en los estratos más elevados de la atmósfera, es de cir, donde no llegan ya los gb bos senda ni otros artefactos me teorológicos y que parece tener una importancia decisiva para Número REVISTA 320 Julio 1967 - los pronósticos del tiempo. Tam bión estudiará el «U K 3» los llamados «ruidos» de frecuencias extremas que proceden de la ionosfera y que pueden tener un papel determinante en el diseño de nuevos circuitos de comuni cación. Beneficio adicional del Orbiter. El Orbiter lunar, conocido por sus notables fotografías de la superficie de la Luna, ha dado un rendimiento científico adi cional. El Laboratorio de Propulsión a Chorro comunica que estos vehículos espaciales han permi tido calcular la distancia entre la Tierra y la Luna. «La distancia es ahora conoci da con un error de menos de 15 metros, mientras que antes el margen de error era de unos 1.600 m.», dice el Laboratorio. La distancia entre la Tierra y la Luna, de unos 400.000 kiló metros, varía durante el mes en 32.800 kilómetros. El nuevo cálculo os importante para los astrónomos y de valor práctico para determinar la tra yectoria de los vehículos espa ciales, tripulados o no, que han de aterrizar en la Luna. La nueva información ha sido utilizada para revisar una tabla de los movimientos de la Luna en un período -de 50 años, de 1950 a 2000. rador». Se sabe que las tres pri meras fases del cohete se sepa raron del satélite inorced a las señales llegadas a las estaciones de rastreo de la tierra, pero paiee ser que durante la ter cera, la ignición no fué total y perfecta. 140 que dió lugar a unas averías que impidieron la ignición de la cuarta y última fase. Las autoridades de la baso (le las fuerzas aéreas de Van ilenberg iniciarán Tina investI gación para detorminar las cau sas del fracaso. Las siglas «Esro» correspon den a la «European Space Re- DE AERONA UTiCA Y ASTRONAUTICA search Organization» (Organi zación Europea de Investiga ción Espacial) y porta banderas de España, Bélgica, 1)inamar— ca, Francia, Alemania occiden tal, Italia, Holanda, Suecia, Suiza y Cran Bretaña, siete de las cuales contribuyeron a su fi nanciaci 6a. Cooperación americo-nipona en satélites. La Nipon Electric Company (NEC) y Hughes Aircraft Co., de la ciudad de Culver (Califor nia, Estados Unidos), han for mado una nueva empresa mixta llamada Satellite Telecommuni INTERNACIONAL Fracasa el satélite europeo. El «Esro II» ha sido lanza do hacia una órbita polar des de la base de las fuerzas aóroas de Taadenberg, Calif cnia, se gún estaba previsto. El satélite europeo, con el que se proyectaba llevar a cabo el estudio de las radiaciones cósmicas y solares para recoger datos con vistas a futuros vue los espaciales tripulados, ha fracasado al no haber entrado en ignición la cuarta fase del cohete impulsor «U. 5. Explo El misil balístico “Polasis”, a la izquierda de la fotogra;fía aúarece junto al “Poseidón”, que es ocho veces más cf icaz que el ri-mero. Cada submarino nuclear l,uede llevar 16 de estos misiles. 517 REVISTA DE AERO7AUTIcA Número Y ASTRONALJTICA cations Company (SALTECO) para la explotación comercial y construcción en todo el mundo de estaciones y equipos terrestres para las comunicaciones por sa télites. El anuncio se hizo después de registrar la constitución de la sociedad en el Estado de Dela vare. La oficina de la nueva compañía en Tokio está en la oficina central de NEC. Además de la promoción de ventas y comercialización, las actividades de la nueva compa ñía incluirán la ingeniería y apli cación de sistemas, estudios so bre el terreno, instalaciones para pruebas, mantenimiento, sumi nistro de repuestos, construcción, operación de estaciones termi nales bajo contratos y otras fun ciones de servicio y ayuda en el sitio. Una parte considerable de la fabricación actual de estaciones terrestres y equipos correspon derá a las compañías matrices. La bien conocida y claramente demostrada competencia de NEC cn el campo de las comunicacio nes terrestres complementará la experiencia y esfuerzos precuso res de Hughes en las comunica ciones espaciales. NEC suministró todo el equipo de comunicaciones por satélite para la estación terrestre de Kashima cerca de Tokio que transmitió en directo el repor taje televisado de los Juegos Olímpicos de Tokio en 1964 a través del Pacífico, mediante el Syncom III, satélite estacionario construído por Hughes para la Administración Aeronáutica y Espacial Nacional de los Esta dos Unidos. NEC tiene un contrato con la Unión Internacional de Tele comunicaciones (UIT) para una estación terrestre experimental de comunicaciones por satélite que se construirá en Ahmedabad, India, con fondos de las Naciones Unidas. NEC ganó también un con- trato para el suministro de equipos multiplex a la Com munications Satellite Corpora tion (COMSAT) para dos termi nales terrestres en Brewster Flat, Wáshington, y Paumalu, Hawaii. Hughes, constructora del Pája ro Madrugador (Intelsat 1), el primer satélite de comunica ciones comerciales del mundo, diseñó también y construyó el vehículo espacial Surveyor, de gran éxito que recientemente tomó más de 10.000 fotografías de la superficie de la Luna. 320 Julio 1967 - La asociación entre NEC y Hughes data del año 1960 cuando ambas firmas formaron la em presa mixta Nippon Aviotronics Co., Ltd. y en 1961 inauguraron una fábrica en Yokohama, prin cipalmente para el mantenimien te y revisión del radar y sistemas para controlar el armamente de los aviones. Además, colectiva mente las des compañías han instalado una estación para la investigación de las comunica ciones por satélite ca Hot. Springs, Arkansas, Estados Unidos. Fotografía de la costa oriental de! Africa! e islas de Zanzíbar, tomada por un satébite “Cosmos” soviético. 518 REViSTA Número 320 Julio 1967 - DE AERONAUTICA Y ASTRQNAUTICA MATERIAL AEREO El gigantesco TF-39, de cerca de seis metros (le longitud, es el motor del aiAón de transporte de la U. Y A. F. U-SA. ESTADOS UNIDOS El mayor hangar del mundo. En Atlanta se está constru yendo un hangar que se consi dera como el mayor del mundo, y que servirá de albergue a los aviones de transporte de las Fuerzas Aéreas C-5A. La nueva estructura, que se epera sté terminada en el pró ximo mes de diciembre, ocupará un espacio superior al de un edi ficio de cinco pisos de altura. La superficie cubierta por el hangar seró similar al de un campo de futbol, y en el mismo podrán acoplarse d o s aviones completos O-SA ‘ todos los equi pos necesarios para efectuar las correspondientes pruebas (le f a tiga. En el centro de la estructura estarán las dependencias desti nadas a oficinas, laboratorios y departamentos administrativos. Fl local servirá de sede a Loclc hecd para efectuar sus 1uocbas (le vuelo con estos nuevos avio nes, que se espera que entren en funcionamiento en 3 u n i o de 1968. Las paredes, y también las puertas del hangar, estarán re cubiertas de paneles de acero y de un material aislante, forman do una especie de sandwiches. si 9 Programa SST. El presidente J olirison ha pc— dido al Congreso un crédito de 200 millones de dólares, que sutoados a los 200 ya otorgados para el año fiscal 967, se a1dicarán al programa SST. La participación (le las Com pañías americanas en la finan ciación del programa asciende a otros 52 millones de dólares. El Gobierno estadounidense percibirá un 6 por 100 del pre cio de venta del 88T, lo que significa la amortización del crédito por la venta prevista (le 500 unidades del Boeing 2707. Los cálculos del mercado poten REVISTA DE AERONAUTICA Número Y ASTRONA[JTICA 320 Julio - 1967 cial señalan que en el perío do 1975-1990 se pedirán de 300 a 1.200 unidades. El Secretario de Transporte ¿e Estados Unidos declaró que el Boeing 2707 podrá efectuar su primer vuelo en el curso de 1970, para ser puesto en servicio a partir de 1975. En el siguiente cuadro se re cogen las informaciones sobre f e e h a s y características del Boeing 2707: Primer vuelo: Fin de 1970. Entrada en servicio: A par tir de 1975. Velocidad: 2.800 Km/h. Radio de acción: 0.400 kiló metros. Pasajeros: 250-350. Peso máximo: 300.000 Kg. Costo de puesta a punto: 1.400 millones de dólares. Aterrizaje con visibilidad nula. Las Fuerzas Adreas norteame ricanas están desarrollando un nuevo sistema de aterrizaje, que se acerca a la mcta de aterrizaje de aeronaves con techo nulo y visibilidad nula. El primer paso es obtener el certificado del Organo Federal de Aviación de segunda Cate goría, con el gran avión de reac ción «fanjet» de 44 metros de longitud y 144.240 kilogramos de empuje, C-141 Starlifter, de las Fuerzas Aóreas, aterrizando en condiciones meteorológicas en que el techo es de 30 metros y la longitud visual de la pista es de 366 metros. Esto constituye la mitad de los requisitos de techo y visibilidad de la primera Categoría, bajo la que la ma yoría de los aviones de líneas regulares vuelan actualmente. Se espera que el sistema de ate rrizaje en todo tiempo con el C-141 obtenga el certificado de segunda Categoría en el mes de junio, a continuación de unas demostraciones en las instala ciones de pruebas del Organo Torre de pruebas de rotores de la Loe Jíheed, en California, dotada de un motor eléctrico de 15.000 HP. de potencia que, a su vez, alimenta varios motores de 850 HP. pan la simulación de vuelo de helicóptero. Federal Atlantic de Aviación, cerca City, New Jersey. de De mucha más importancia para el futuro de la aviación, es sin embargo, el hecho de que el nuevo sistema está casi sal tando la segunda Categoría y corre hacia su principal objetivo de desarrollar criterios para la tercera Categoría del Organo Federal de Aviación. Bajo la tercera Categoría, el techo sería cero, y el alcance visual de pista iría decreciendo progresi vamente a 213 metros, a 45 me tros y finalmente a cero. En las pruebas de las Fuerzas Aéreas, un C-141 equipado con 520 el nuevo sistema. AWLS Ita si mulado más de 200 aterriaajes en condiciones cero - como en la Base Aórea de Dobbins, Ceorgia, cerca de la ciudad de Atlanta. La demostración de aterriza jes con los requisitos de la se gunda Categoría del Organo Federal de Aviación (techo de 30 metros y visibilidad de 360 metros) no representó ninguna dificultad —dijo II. B. _kt.m tage, piloto de pruebas de téc nicas do vitelo de Lockheed—. No nos molestarnos en volver a tomar el mando del avión citan do descendía hasta una altura de 30 metros. Dejamos al siste Número REVISTA 320 Julio 1967 ma de aterrizaje - en «todo tiein po» que gobernase el avión hasta posarse en tierra automática ticamente. Efectuó aterrizajes de gran precisión, total!nente automáti cos, y se ajustó a limites de dis persión lateral y longitudinal mucho más estrictos que los exigidos para el certificado de segunda Categoría, manifestó el piloto. El avión C—141 con sistema AWLS aterrizó autornáticamen te en un espacio de 3,6 metros, más o menos, de la línea central de la pista durante las pruebas. Aterrizó a unos 91 metros, más o menos, de la distancia de la pista desde el punto de toma de contacto normal. Voló a la velocidad de aproximación re- DE AEPcONAUTIOA Y ASTRONAUTICA comendada por el Organo Fe deral de Aviación y que oscila entre 125 y 155 millas por hora. Su velocidad de descenso inicial fuó de 213 metros por inmuto que fué reduciéndose hasta 61 metros por minuto en la toma de contacto. Al objeto de que la visibilidad sea absolutamente cero, el pa rabrisas del avión se encuentra tapado con un paño negro. El piloto, mientras se efectúa la maniobra, retira totalmente sus manos de los controles, dejando que el sistema de aterrizaje des arrollado por los técnicos de Lockheed en colaboración con las Fuerzas Aéreas Norteameri canas, lleve el control del avión. Este nuevo sistema se espera que sea adoptado por todos los aviones C-141 de las Fuerzas Aéreas Norteamericanas, cuan do las pruebas que actualmente se realizan hayan concluido y so extienda el correspondiente certificado do seguridad. Durante los últimos años, son varios los países que luchan por el perfeccionamiento de un siste ma automático de aterrizaje, que permita posarse sobre la pista a los aviones aunque la visibilidad sea absolutamente cero. Entre estos países figuran Inglaterra y Francia, además de los Estados Unidos. De acuerdo con las pruebas efectuadas hasta la fecha, pa rece ser que el sistema que ac tualmente se está ensayando reúne las características exigidas para esta clase de equipos. En el tablero de instrumentos del helicóptero gigante ruso MI-lO vemos la pantalla de televisión de un circuito cerrado paru el control de la! carga que lleva’ junto al tren de aterrizaje. 521 REVISTA DE AERONAUTICA Número Y ASTRONAUTICA AVIACION 320 Julio 1967 - CIVIL - Para avuda- a descongestionar las y Astronáutica ha rouesto aviones a/erece en el dise;To, capaz para 70 zando verticalmente, enlazará INTERNACIONAL El transporte aéreo en 1966. 1966 fué el primer año en el que los ingresos totales de las líneas aéreas regulares del mun do excedieron de 10.000 millones de dólares, y el año en el que estas líneas aéreas obtuvieron las ms grandes ganancias de explotación. Las cifras prelimi nares dadas a conocer por el Con sejo de la Organización de Avia ción Civil Internacional indican una ganancia de explotación de carreteras, ci Instituto Americano de Aeronáutica mixtos (le ala fija helicópteros, como el (7UC pasa/eros u -/80 Jim/h. que, despegando y aterri los aeropuertos con los helipuertos urbanos. ‘ 932 millones (le dólares respeeto a las líneas aéreas regulares (le los 113 Estados miembros de la OACI en relación con los in greses totales de 10.600 millo nes de dólares, comparados con los 900 millones de dólares de ga nancia de explotación respecto a los ingresos de 9.400 millones de dólares en 1965 y 612 millones en relación con los ingresos de S.100 millones de dólares en 1964. El informe anual del Consejo a la Asamblea, que describe el progreso de la Aviación civil en 1966, al mismo tiempo que 522 Illenciona el trabajo realizado por la OACI, muestra, sin eniba.r go, que 1966 fué sólo el tercer año mejor desde el punto de vis ta de la seguridad aérea. La ten dencia a largo plazo hacia la mejora de la seguridad de los servicios regulares de transporte aéreo mundiales (internacionales e interiores) cambió de signo en 1966, por primera vez des(le 1960. El índice de accidentes 100 millones de pasajeroskilómetros pasó de 0,35 en 1965 a 0,40 en 1966, y el número de víctimas de 684 a 908. Parece por Nimero - evidente, sin embarge, que este empeoramiento de les índices de accidentes puede considerarse co mo temporal, por deberse a la concurrencia fortuita de diver sos accidentes graves sufridos en aeronaves relativamente grandes con factores de carga especial mente altos. Convenio REVISTA 320 Julio 1967 SAS-New York Airways. Líneas Aéreas Escandinavas y New York Airways han llegado a un acuerdo para proporcionar servicio de helicópteros a los pa sajeros de SAS entre el aero puerto internacional John F. Kennedy y la zona más dcnsa de Nueva York. El servicio de helicópteros, que ofrece el viaje tanto en un solo sentido como el de ida y vuelta, a precios reducidos, en- DE AERONA UTICA Y ASTRONAUTICA lazará el aeropuerto de entrada John F. Kennedy con el heli puerto de Pan Am, en la parte baja de Nueva York, el heli puerto de Wall Street, Y/hite Plains, en Nueva York, y Te bertoro, en Nueva Jersey, con los vuelos transatlánticos de SAS. Las tarifas establecidas son de 5 dólares entre John F. ICen nedy y Wall Street; 5,50 entre John F. Kennedy y el helipuerto de Pan Am o Tebertoro, y 9 dó lares entre John F. Kennedy y Y/hite Plains. Ida y vuelta cues ta doble. SAS es una de las primeras eompanías internacionales q u e logra este contrato de transpor te con New York Airways. Aviones comerciales en 1966 Durante el año se entregaron 354 aviones de reacción, lo que supone un considerable aumento con respecto a los años ante riores. De este total, correspon dían 129 a los bimotores «BAC111», cDC-O» y «Caravelle», y 116 a los trimotores, especial mente el «Boeing 727», lo que significa que casi el 70 por ciento de las entregas estuvieron eons tituídas por transportes de pa sajeros de corto y medio radio de acción. Además de estos 354 reactores, fueron entrega dos 144 de turbohélice, consti tuidos por bimotores de corto radio de acción (excepto 11 aviones do e a r g a «Lockheed i-3S2»). El nñmero do aviones do reacción encargados en 1966 ascendió a 649 algo menos que el número de los encargados en 1965, aunque varias veces más que los encargados en cual— qsuera de los añosanterioos. Casi la mitad do estos pedidos El “T/FW-H-3” es un nuevo helicóptero fabricado en Bremen, en la República Federal Alemana. 523 REVISTA DE AERONAUTICA Número Y ASTRONÁUTICA estuvieron integrados por bimo toros y trimotores, pero el mayor p o d i d o correspondió a los «DC-9» y a los «Boeing 727». A d 0 01 á 5 so encargaron 81 «Boeing 747» y 61 aparatos «DC-8» en su versión ampliada, do la serie DC-8-60». Los pedi dos do turbohélices ascendieron ónicamonto a 74. Al terminar 1966 el total do aviones do reacción entregados a las compañías de los Estados miembros do la OACI ascondió a 1.712, do los cuales algo más del 50 por ciento frieron cuatri motores do pasajeros do gran radio do acción, el 42 por ciento trimotores y bimotores do radio corto y modio, y el resto avio nes de carga. Tina voz servidos los 1.160 podidos pendientes al terminar 1966, el número rio reactores entregados ascondoró a 2.872, do los cuales el 40 por cionto estará constituído por tetramotoros, el 29 por ciento por bimotores, el 18 por ciento por trimotores y el 13 por ciento restante por aviones do carga. Puedo también obsorvarso que del total do 2.872 aviones do reacción, el 52 por ciento serán «Boeing», ol 28 por ciento «Dou glas» y el restante 20 por ciento do la «Sod-Aviation», «British Aircraft Corporation, «Hauko r Siddoloy» y «Convair». Respecto a la composición do la flota total actualmente ox plotada por los Estados las compañías miembros do dc la 320 Julio - 1967 OACI, puedo obsorvarso que al terminar 1965 se encontraban on sor’icio cerca do 5.900 avio nes de transporte do todos los tipos, con un poso mnáxuno do riospogue superior a los 9.000 kilogramos. Cerca del 28 por ciento de estas unidades oran roactoros, el 20 por ciento t.urbobólico y el 52 por cionto aviones (‘un motor do émbolo. Es interesante observar que los bimotores con motor do émbolo constituyo to davía un tercio do la flota (cerca do la mitad son «DC—3»). Sin embargo, el número rio avio nes con motor do émbolo, qrio os algo suporior a 3.000, repre sentan únicamonto el 9 por cion to do la capacidad ofrecida. 1, 2 - 2 A 1 El avión para. hombres (le negocios “Sabreliner”, capaz Para diez pasajeros, (iesega en. Los Angeles. 524 REVÍSTA DE AEROIAUTZCA Ni.mero 320 Julio 1967 - LA Y ASTRONA[]TJCA BOMBA QUE GANO UNA GUERRA Por ROBERT R. ROPWELI (De Tiight International.) Se divulga la noticia referente a la bomba perforadora de hormigón armado usada. por Israel. Ei arma clave utilizada por Israel en la absoluta y fulminante derrota que infligió a sus vecinos árabes este mes fué tina bomba de poco peso, de diseño revolucionario, con cebida y fabricada po.r las industrias milita res, de Israel, que fué utilizada con eficacia insuperable’ para dejar en el stielo a la Fuer za Aérea egipcia durante las tres primeras horas de la guerra. Concebida para ser lan zada con extraordinaria precisión, desde aviones que’ realizan una sola pasada. a velo cidades de’ alrededor 0.85 ó 0.9 de Mach, y a una altura de’ tan sólo’ 200 pie’s, el arma está he’c’ha especialmente’ para perforar sec ciones de las largas pistas de’ vuelo’ que nece sitan los cazas de elevadas características e’n el cálido Oriente’ Medio’. Cdn ella obligaron a los, aviones árab’es a permanecer en tierr’a, co’nvirtién’do’los en fácil presa de los pilotos israelitas., que’ después los atacaron con fue go (le’ cañón y cohetes. Esta bomba, que’ se’ cree’ tiene uno’s 8 pies de’ largo y poco más (le un p’ie de’ diámetro máximo, tiene’ retro-cohetes para anular su velocida.d de avance en el momento de sol tarla, Otra versión, utilizada también e’ste mes, po’see’ un p’aracaídas. de’ re’sistencia al avance, proyectado’ y construí’do’ por Irving en Letch’worth, He’rts, para co’nseguir el mis mo resultado’. Frenada rápidamente’ hasta anular la velocidad hacia adelante, la bomba se’ inclina ento’nces p’ara ap’untar verticalmen te hacia a.b’ajo’,y se’ dirige a tierra como un dardo por medio’ (le un cohete que’ se’ en ciende’ cuando ha alcanzado la posición ver tical. Es cierto que’ sólo’ hace’ falta., en todo caso’, una. pequeña carga explosiva p’ara con seguir los resultados de’se’ados (que consis ten en baches relativamente pequeños. qtie’, situados acertadamente’, impiden a los avio— ne’s. de’spegar). Se cree que’ el arma pesa poco (le 500 libras. Después de nueve (lías. (le’estar indagando en busca (le información en Israel, luego (le haber llegado’ a Tel-Aviv’ el 8 de’ junio’, p’ude’ sacar la consecuencia. (le que lo que’ pre paró’ el camino p.a.ra el gran triunfo’ (le’Israel fue’ron los ata.que’s iniciales, simultáneos con tra las pistas. (le’ vuelo’ y las. instalaciones. (le radar árabes, porque para la, Fuerza Aérea Israelita fué tina cuestión relativamente’ fá El dibu’o muestra la forma de’ lanza miento d’e la bomba desarrollada’ y fa bricada por la. in dustria militar is raelí u empleada. con éxito contra sus RETRO CHARGES adversarios 525 árabes. REVISTA DE AEROAUTICA Número Y ASTR02’AVT1CA cii destruir en ataques posteriores centenares (le aviones árabes importantes en sus esta cionamientos. Sin protección ni apoyo aéreo ninguno, las fuerzas (le tierra árabes pronto se derrumbaron. Muchas de las conjeturas que los periodis tas y otras gentes se pasaban unos a otros en Tel-Aviv para explicar la instantánea ani (luilación (le las Fuerzas Aérea.s árabes eran indudablemente ingeniosas. Eran resultado lógico de las rigurosas me didas de seguridad que’ rodea a la aviación militar de’ Israel. A pesar de las veces que durante’ mi estancia intenté ver algo direc tamente de la Fuerza Aérea, de hablar con los pilotos y oficiales de Estado Mayor que desempeáaron su papel en el ataque victo rio’so, no pude obtener ninguna facilidad por parte’ de’ los israelitas, salvo tina corta visita a un aeródromo egipcio capturado. Me vi obligado a levantar el campo’ y regresar el pasado sábado. Esto estaba en marcado con traste con los esfuerzos hechos por los Servi cios de Información oficial para mostrar a los corresponsales extranjeros aspectos (le la guerra terrestre y, después, la administración (le los territorios recientemente ocupados.. Sometido a la estrecha censura impuesta, no pude ni siquiera aludir, en el despacho que se publicó en Flight de la semana pasada, a la existencia’ (le la bomba “perforadora (le hormigón”, como llaman en hebreo’ a. esta bomba. Una referencia que se hacía a que las pistas de vuelo habían sido los objetivos de los primeros ataques fué borrada categóri caniente, y tuve que cambiarlo, con el cen sor por el eufemismo “instalaciones y servi cio’s en tierra”. Recapitulando el informe’ .de la semana pa sada: 16 aeródromos egipcios fueron alcan zados en las dos primeras oleadas de’ ataques israelitas, durante las tres horas primeras que comenzaron a las 0745 del (lía 5 de junio. Los primeros en ser atacados fueron los aeródromos de los bombarderos, seguidos ror las bases (le los cazas, y habla mucho’ en favor de la pericia israelí el que pudieran destruir la.s distintas bases de bombarderos situadas en Luxor y Ras Banas, desde don de se habían montado muchos 3e los, ataques. egipcios de bombardeo en el Yemen. Estos aeródromos fueron alcanzados por Vautours que o’pe’raban desde Harzerim. Aun llevando cargas mínimas, pero eficaces, y el máximo 320 Julio 1967 - (le combustible p’ara cubrir la distancia, los Vautotir se vieron obligados a volar a tina altura óptima (con un solo motor) (le unos 23.000 a 26.000 pies, hicieron un descenso planeado para efectuar ataques a gran velo’ cidad y baja altura, y subieron de nuevo para hacer el vuelo en crucero con un solo’ motor, (lescendiendo’ después planeando hasta llegar a Hatzerim. Desde el ptinto de vista israelí, el valor de la.s bombas perforadoras de hor migón es qtie evita la necesidad del bombar deo en picado para colocar las bombas con precisión. Das bombas de tipo’ clásico que se arrojan a baja altura, en pasadas rápidas tienden, naturalmente, a rebotar y salirse de las pistas, y por eso su precisión es escasa. Pudiendo acercarse los aviones israelitas, desde muy grande altura a las llanuras (101 desierto sin ser sorprendidos y efectuar el ataque a gran velocidad y escasa. altura., los antiaéreos egipcios nunca tuvieron ocasión (le causarles graves dlafio’s. Parece que todo el inundo está de’ acuer (lo’ en qti.e muchos (le los aeródromos egipcios, especialmente los que estaban situados en torno al Nilo inferior, fueron atacados desde el noroeste, manteniéndose los aviones. (le la Fuerza Aérea israelí a baja altura después (le! a.taque y volaron describiendo una larga curva sobre el Mediterráneo. antes de ata.car a los egipcios desde atrás. Esta táctica bien puo (lar lugar a que el Rey Hussein creyera al principio que’ se habían empleado aviones ingleses y norteamericanos desde’ portavio nes, porque los aviones., que se’ mantuvieron muy bajos después de’ partir de la serie (le aeródromos del centro de Israel (Hatzor, Ekron, Lod y Ramar David), permanece rían protegidos por ‘la “sombra” de radar (le las montafias de Judea, después del (les pegue, sin que la, estación de’ radar (le vigi lancia jordana Marconi 547, establecida en Ajlun, pudiera registrarlos. Después apare cerían en las pantalla.s de radar de Ajluni volando con dirección a Egipto, procedentes del noroeste, y el suponer que procedían de Chipre o de portaviones situados en el Me diterráneo. pudo’ parece’r razonable’ en aquel momento. De’ todos modos, la estación de Ajiun fué destruída cuando los israelitas. di rigieron su atención a Jordania, y Siria más tarde, el lunes 5 de junio. Se cree’ que’ ci Aeropuerto de’ Amman fué atacado’ po.r (los oleadas de ocho Mystére’, y esto’ fué suficien te para dejarlo’ sin 200 yardas continuas (le 526 REVISTA Número 3O Julio 1967 - DE AERONAUTIOA Y ASTRONAUTICA hormigón en buen estado. A pesar del in algunos trucos hábiles, aparte de su bomba tenso castigo infligido a. la Fuerza Aérea única, en este’ gran ataque preventivo’. No jornada, con la destrucción de 21 I-Innters faltan pilotos que’ hablen árabe’ en las Fuer (sti únito tipo ofensivo), ésta nostró cierto zas Aéreas israelíes, que’ tal ve’z sembraran la confusión en las frecuencias utilizadas por (leseo de luciar, realizando cortas incursio nes, atacando y retirándose, en Israel, lo que los e’gipcio’s, especialmente ‘después de que fueron de’struídas las instalaciones de’ radar. fué más que lo que los egipcios consiguieron hacer. Otra explicación para la total falta de’ pre Parece probable que los aeródromos de paración de la Fuerza Aérea egipcia, que se Sinaí fueron atacados por aviones que vo comentaba en Tel-Aviv, y que pare’ce tene’r laran en rutas directamente desde Israel, y cierta consistencia. es que’ gran parte de ella la Fuerza Aérea israelita acepto un riesgo había volado’ anteriormente’ en una operación calculado, dejando intacto el aeródromo de (le prácticas al amanecer del 5 de junio’, y El Aris:h, a tan sólo seis minutos de vuelo cuando’ la Fuerza, Aérea israelí atacó sus en reactor de Tel-Aviv, aunque destruyó los aviones estaban siendo repostados y sus tri pulaciones desayunando’. seis Mig-17 que allí había estacionados. Los No fué esta la suerte’ de do’s pilotos egip israelitas querían El Arisih como base de’van cios que’ estaban prestando servicio’ ‘de alerta guardia p’ara lanzamientos de suministros (le los Noratlas y los C-47, y cayó en seguida rápida en dos Mig-17, destrozados en Jebel ante la más• septentrional (le las acometidas Libne’, el aeródromo’ egip’cio capturado’ que blindadas israelitas en Sinaí. Esta fuerza, yo visité. Jabel Libne había sido la base’ de mandada. por el General de Brigada 1, ‘Tal, 15 Mig-17 y 19, y los israelitas lo habían cruzó a través del extremo meridional de la bombardeado para dejor, por lo menos, 1.100 franja de’ Gaza desde’ Negev, para separarla metros, de sus 2.800 metros de’ pistas de de Egipto, se dirigió hacia occidente y avan vuelo, intactos para que sus propios No’ratlas zó a lo larigo’ de’ la costa. Se’ dice que en Tel- y C-47 (aviones de transpo’rte) pudieran uti lizarlas. Hacia la mitad de la pista, ésta esta Aviv, sin que’ se’ confirme ni niegue categó ricamente, por ‘parte’ de’ los funcionarios, que b’a llena de baches que, al tener sólo unos seis Mig 21 argelinos que’ llegaron sobre’ El pocos pies de diámetro y no una gran pro Arish mucho’ de’sp’ués de’ que se ‘hallara en fundidad, parecían ser fáciles de’ rep’arar. La manos de israelitas, fueron enganados por Fuerza Aérea israelí evitó e’sta posibilidad operadores (le la Fue’rza Aérea Israelí, que cuando, al atardecer del 5 de’ junio, reto’rnó hablaban árabe’, para que’ tomaran tierra, a todos los aeródromos que habían sido ata y fueron capturados intacto’s. cados por la mañana y los. sembró’ con bom Hay ciertos principios fundamentales que bas de acción re’tardada, dispuestas par subrayan la estrate’gia ‘de Israel. Uno es que explotar a todas las horas de la noche, di nada es más vital que iniciar e’l primer golpe, suadiendo de e’ste modo al enemigo de em y otro es la decidida dedicación a lo ine’sp’e’ prender su reparación. Para el martes por la rado y fuera de lo habitual. En e’fe’cto, se noche, cuando’ las pérdidas de aviones árab’e’s ha o’ído decir a un miembro del Alto Mando habían llegado’ a la cifra de 427, ya no era israelí que los, manuales militares corrientes necesario tomar esa precaución. El miérco les, día 27 de junio’, virtualmente todo’ el sólo sirven para fines sanitarios. Por el con trario, con su estacionamiento de’ aviones p:eso del esfuerzo israelí se orientó hacia el hecho con pre’cisión, como si de una exposi Apoyo Dire’cto y a la destrucción de’ vario’s centenares de tanques egipcios que estaban ción en tierra se tratara, con sus inflexibles ideas tipo’ línea Maginot, representadas por embotellados en el Sinaí por el cerco israelí, sus largas líneas fo’rtificadas de tanques que’ había capturado los pasos de las mon tañas detrás de ellos. Ocupada en una labor atrincherados, los egipcios siguieron dema siado’ rígidamente las tra.dicionales do’ctrinas de’ apo’yo’inmediato’, desde’ el mismo’ comien militares, mientras que día y noche las aco zo, estaba ‘la flota ‘de avio’nes escuela, Fouga metidas israelías blindadas les desbordaban Magiste’r, de’ construcción local, en manos ‘de’ y destruían desde’ detrás. En e’ste’co’ntexto pilotos de la reserva, principalmente’, que’ ha (‘brillantes e’xcéntricos que’ atacaban a los bían combatido muy intensamente’ atacando conformistas ‘de lo’s libros de texto) parece las posiciones jordanas en la lucha en torno seguro que’ la Fuerza Aérea israelí utilizara a Jerusalén. Los Magiste’r mantuvieron estos 527 PVISTA DE AERONAUTJQA Nqjm,ero 320 Julio 19ó7 - Y ASTRONAUTICA ataques durante las horas nocturnas, atacan Aérea israelí haya utilizaco. otra cosa que el (lo objetivos iluminados por reflectores si fuego’ (le cañón y cohetes. (le’tipo clásico’ para tuados en las alttiras israelíes e inclinados destruir los aviones, aunque’ es posible que (le modo que proyectaran su luz a través del en esto.s. ataques se haya usado una versión valle sobre las posiciones jordanas. La arti (le’ fragmentación de ‘la bomba perforadora llería pesada jordana, enterrada detrás (le de’ hormigón. Las pruebas fotográficas de’una ‘loma, fué atacada intensamente por los muestran que los egipcios, en muchos casos, aviones ligeros atacantes. facilitaron la tarea (le los israelitas al dispo El oficial en jefe israelita que ocupó el ner largas filas de aviones aparcados unos aeródromo de Jebel Libne, que (lespués ha junto’ a otros., ca.rgados de’ combustible Y (le bombas, .dispue’stos a explotar con un solo sido bautizado con el nombre de Estación Uivnat, cTe la Fuerza Aérea. israelí, (lijo que impacto. Hubo casos en que los pilotos israe litas resultaron muertos por las explosiones se había capturado gran cantidad de mate rial, y ciertamente, no ftié por falta (le ma (ltiC ellos produjeron. teria.l por lo que los egipcio.s fueron •derrc Nada se’ dijo en Tel-Aviv acerca (le los tados. (Muchos (le los cohetes (le 80 mm. (lis misiles balísticos (le que Nasser alardeaba parados por los Fouga Magis.ter en la. guerra tanto, pero. en los que a.penas si se creía, que procedían directamente (le las. existencias que habían siclo revistados (le cuando en cuan había en El Arish). La. mayor parte (le los (lo en El Cairo’. I-Ielwan, el lugar donde es ‘locales, habitables eran subterráneos, y ha taba situada, la fábrica nacional egipcia (le bía. pocos edificios aparte’ de las tiendas israe aviones, fué uno (le los aeródromos. atacados, líes. y los muros de contención (le adobes que pero. no se sabe si la propia fábrica fué al aliviara la pétrea aridez del panorama (le canzada o no. Otro objetivo probable’, no Jebe’l Libne’. Inspeccionamos uno de los dos mencionado en las declaraciones israelitas, Mig—17 que habían siclo. capturados, Ocupa— es el conjunto’ de’ montaje y pruebas de mi ilo’s, según parece, y con los cables (le la siles balísticos, al noroeste de’ El Cairo’, que puesta en marcha enganchados, enfrente (le es posible que’ quedara ftie’ra cíe combate en lo’s dos co’bertizo’s QRA que flaqueaban el el primer ataque. umbral de la pista. cíe vuelo. Otros. Mig ciesA pesar de la escala catastrófica. de la de trozados yacían por allá; los que habían sido rrota de Egipto. (ver desde el aire el Desfi cogidos con sus revestimientos, a.parte (le ladero de Mida, (lo’nde tuvo lugar la mayor estar algo chamuscados se hallaban indem destrucción (le tanques, e’s. ver un estrecho nes. También lo estaba.n varios Mig-1 7 (le desfiladero lleno, durante’ cuatro o’ cinco mi madera que habían sido montados por la llas o’ más, de negro’s cascos arrumbados (le Fuerza Aérea egipcia, y que, según el Ofi tanques y camiones ennegrecidos, unidos cial en Jefe, había considerado que’ no valía tino tras otro’, en filas de tre’s y cuatro’ (le la. pena de gastar un co’hete en ellos. frente’, e incluso apilados unos sobre otros) El no haber disparado contra los aviones sería erróneo sacar la co’nclusión de que los simulados .de’ madera y la atinada precisión egipcios no’ mostraron deseo. cíe luchar. lograda contra los verdaderos aviones (lió El General de Brigada S. Gavish, Jefe (le’l lugar a que’ se hicieran conjeturas entre los frente meridional de’ Israel, dijo que los egip periodistas .diciendo que los, israelitas poseen cios habían luchado’ más vigorosamente que un arma “que se’ orienta hacia los metales”. lo’ hicieron en 1956; que’ e’l soldado’ egipcio Francamente creo que los Mig de’ ‘madera luc’hó bien, pero fué abandonado, como ante’s., no’ hubieran engañado a ningún piloto entre por sus oficiales y, so’b’re’todo, por sti espan nado’ que los viera a. 400 yardas tado’ Generalato.. Tenían colocada ‘la cola demasiado baja, La Fuerza Aérea egipcia fué víctima (le’, un diedro’ exagerado, y lo más notable es tal vez, el ataque aéreo más decisivo de’ la que los habían dejado en posiciones dema historia: una combinación (le la sorpresa siaclo tentadoras, pero’ irreales (precisamente israelí y la pericia técnica, así como’ (le SU al hocde’ de las pistas, estando los aviones increíble falta de preparación. Sin embar reales mucho más le’jos, en torno, a la.s pistas go’, e’n las últimas horas cíe’ la. batalla del de’ rodaje y en lugares protegidos. Hay poco Sinaí, cuando la situación (le las fuerzas fundamento para suponer que la Fuerza egipcias se hizo’ desesperada, mientras tra 528 Número REVISTA 320 Julio 1967 - tahan de abrirse paso hacia occidente camino del canal (le Suez, y buscando su refugio, lo que quedaba de cazabombarderos de la Fuer za Aérea egipcia se ordenó que volaran, despegando desde bases. muy tierra aden tro de Egipto y atacaron a los israelitas en carnizadamente. El General Ga.vish me dijo aue estos ataques, realizados con ahinco, fueron precisos y afectaron duramente a los israelitas. Del mismo modo, algunas de las armas antiaéreas móviles que trataron (le defender a los tanques ctiando los israelitas gazaban de la superioridad aérea, fueron muy terribles. No se ha (lado’a conocer por parte’ (le la Fuerza. Aérea israelí el número (le salidas realizadas, pero un cálculo razonable es que fueron más de’ 1.000las necesarias para cau sar tal destrucción en las Fuerzas Aéreas árabes en los primeros días. Si no’ son exageradas., reflejan tanto mé rito por parte del personal que atiende los aviones de la Fuerza Aérea israelita como par parte de los pilotos que, gracias a ellos, pudieron disponer de los aviones en todo moni ento. Del material militar capturado, probable’mente’ la mayor preocupación y problema que plantea es el de cómo llevarlo a Israel. Los 70 tanques Patton jordanos que fueron cap turados intactos en el frente oriental fueron trasladados, sin complicaciones, al norte (os tentando todavía las insignias árabes), como reservas p.a.ra el avance’ israelí dentro de Si ria, el sábado, día 10 de junio. Personal mente me crucé con una docena, más o’ me nos, que e’ran conducidos por risuena.s tri pulaciones israelitas, y que’ se dirigían aquel día al frente septentrional. Técnicamente’, el premio’ mayor parece ser e’l asentamiento de misiles superficie-aire SA-2 “Guideline”, a algunas millas al este de Suez. Los no’rteame ricanos, que se han visto enfrentados con los “Guideline” durante muchos meses (le incursiones ofensivas sobre Vietnam del Nor te, seguramente que’ están deseando obser varlo detenidamente. Los vi, desde el aire, brevemente, durante’ un vuelo sobre el Sinaí, y ahajo en Sharm-el She’ik, y parecían estar intactos. Mi impresión se vió confirmada en Tel-Aviv por un grupo de fotógrafos de bombarderos (NBC) que había volado por allá. Sólo había sido disparado un misil, se’ gún dijeron. Había, por lo menos., nueve o diez en los lanzadores, y en la. carretera que DE AEROA UTICA Y ASTRONALTTICA conduce a Suez había varios más, intactos, en los remolques, que habían sido abando’ na(los durante la huida de los egpcio.s. Como’ informé la semana pasada, los Mi rages III C, de Israel, no dispararon ningún misil aire-aire Matro R. 530 en los combates aéreos que tuvieron lugar, confiando total mente en sus dos cañones de 30 mm. Es significativo’ que’ de’ los 11 avione’s árabes derribados en escaramuzas aéreas durante el año anterior a la guerra (un Hunter jor (lano, dos Migs 1. egipcios, y ocho Migs 21 sirios, más otro’ derribado’ por una patrulla naval sobre’ el Mar de’ Galilea), sólo uno’ lo fuera mediante un R. 530. Este arma ado— le’ce., al perecer, de’ las mismas desventajas apreciadas po’r los pilotos norteamericanos en los misiles aire-aire’ utilizados en comba tes aéreos sobre Vietnam del Norte: ha de ser lanzada. a distancia demasiado grande del objetivo’ (2.000 yardas), y es inofensiva cuando se’ combate de ce’rca. Es posible que ‘la Fuerza Aérea israelí po•se’a ahora un co— nociniiento muy detallado’ del Mig-21, pues recib’ió’ uno como regalo’ de’ un piloto iraquí que’ desertó a primeros de año’. Existe’ cierta incertidumbre’ en cuanto’ a la utilización que los israelíes hiciero’n de’ los paracaidistas. La pista de aterrizaje’ de pie’dra y arena de’ Sharrn-e’l-She’ik, en el extre’ mo sur de la Península del Sinaí, y cerca de los cañones de’ 200 mm.. de Ras Nasrani —con que’ el p’re’si’dente’Nasser intentaba asegurar el bloqueo del Estrecho de Tirán— era, al p’arecer, el objetivo de un proyectado asalto’ paracaidista. El caso e’s que la pista estaba asegurada por una pequeña fuerza trasladada en ‘helicópteros de’sde Elait, en un recorrido de’ 175 kilómetros. Los .he’licóp’te’ ros utilizados .eran, probablemente, los. Sud Sup’e’r Freions, reciente’mente’ adquiridos, por Israel. El enemigo’ no ofreció resistencia, p.u.e’s‘la guarnición egipcia ‘huía hacia el norte p’a.ra evitar s.er cercada por .el avance israelí a través. del norte’ del Sinaí. Lo’s transportes No’ratlas, cargado’s de’ tropas, pudieron, pues, aterrizar. Fueron lanzados paracaidistas p.ara asegurar el Paso’ de’ Mitia, sólo unos minu to’s. ante’s de que las. prime’ras. fuerzas acora zada.s egipcias. que’ se retiraban alcanzasen el paso’. También se cree que’ fueron lanzados pa.racaidistas para atacar por detrás. las ex tremadamente potentes fortificaciones sirias a lo’ largo’ de’ los, escarpados sobre el Valle (le Hula, al no’rte’ del Mar de’ Galilea, en la 29 EVISTA DE AERONA UTICA Número Y ASTRONAVTICA lucha sostenida a finales de semana. Pero el sábado, 10 de junio, en una descripción so bre el terreno, se nos dijo—sencillamente-— que se había llevado a cabo un asalto f ron ta.l al escarpado, mediante fuerzas acoraza (las e infantería mecanizada. Cuando, a últi ma hora del día, fuimos a Siria y nos acer camos al combate que había de cesar aquella noche, pudimos echar una mirada desde las fortificaciones sirias emplazadas en los es carpados. Estas fortificaciones habían sido reforzadas constantemente a lo largo de casi veinte años, durante los cuales los sirios bombardearon intermitentement e los “k ib butzirn” israelíes. Otros corresponsales com partían mi convicción de que un asalto f rontal como el descrito, sobre laderas sembra cIas de minas, habría sido totalmente suicida para los israelíes (que admitieron haber te nido fuertes bajas en esta fase), al quedar totalmente expuestos al fuego sirio. Parecía imposible queestas fortificaciones se hu bieran podido tomar sin haber lanzado fuer zas paracaidistas detrás de ellas, o, por lo menos, sin infiltrar furtivamente, de noche, tropas de comandos con el rostro pintado de negro y armados de cuchillos. Ciertamente, en esta fase final de la guerra total los israe líes contaron con un gran apoyo aéreo, y yo vi, desde lejos, los Mystéres. y Ouragons que bombardeaban fortificaciones a lo largo de las alturas:, el 10 de junio, obligando al enemigo a retirars.e. Durante esta fase se vió a los aviones tácticos israelíes lanzar bombas de napalm, mientras que algunos co rresponsales, obligados con malas maneras a retirarse de un montón de cadáveres—que al parecer no mostraban heridas—, manif es taron la sospecha de que se habían empleado bombas de gas. Evidentemente, los israelíes, enfrentados como se han hallado, desde la creación de su Estado, con los belicosos vecinos árabes que amenazaban con echarlos al mar, (lisponían de una brillante planificación, y ptie cIen organizar una asombrosa y efectiva cam paña en, como quien dice, veinte segundos justos. No obstante’, excepto los planes ya establecidos, parece que esta asombrosa cam paña no fué premeditada durante mucho tiempo’, si es que llegó a serlo, pues a me diados de mayo los cuatro primeros pilotos del 1. A. F. que habían de adaptarse a los Douglas A-4 Skyhawks fueron enviados a 320 Julio 1967 - los Estados. Unidos. para empezar su instruc ción. Fueron llamados posteriormente al em peorar la crisis, teniendo ‘lugar una ino’vili zación to’tal. La entrega del primero de ‘los 48 Skyhawks •que ha de recibir Israel está prevista para el mes. de septiembre. Pare’ce aho’ra menos segura la probabilidad de que Dassault vendiera a la Fuerza Aérea israelí el Mirage 5 (el Mirage IIIC, desarrollado como’ avión táctico), operación que’ antes de la guerra parecía e’star totalmente acordada y sólo a falta. de la firma del contrato. Es casi seguro que Israel habrá tomado muy a mal ‘la política de desentendimiento del pre sidente’ de Gaulle’ en la reciente’ crisis, tan patentemente contrapuesta a la mayoría de la opinión pública francesa. Israel ha sen tido enormemente’ el que’ su más fiel amiga la abando’nara (aunque le enviase’ en Boe ings 707 cinco’ cargamentos de piezas de repuesto’ de Dassault, desde’ Bordeaux-Me rignac, justamente antes de’ que’ empezara la guerra), y son muchos los israelíes que po nen en duda la conveniencia de’ que se con fíe en Francia en el futuro como principal abastecedora de armas. Mucho más podría decirse’ del gran ata que aéreo israelí y de su campaña de’ seis días (que dejó fuera de combate a ‘los egip cios en noventa y una horas), y que’ estudia rán como clásica los e’strategas de los siglos futuros. Un eminente comentarista la ha des crito como el revés ‘militar más absoluto y decisivo desde’ el de la Armada Invencible española; más prosaicamente, un correspon sal que, a pe’sar de actuar rápidamente:, llegó cuando la guerra había acabado, dijo en Tel Aviv ‘la semana pasada que aquella gue rra “había sido demasiado rápida para la Prensa”. Es muy dudoso que’ los israelíes revelen mucho’ más acerca de esta campaña. Por la forma en que’ me informaron la semana pa sada, mi opinión es que aun en el desbor dante júbilo’ que’ sigue’ a la victoria total, mantendrán en secreto los datos sobre la actuación de sus Fue’rzas Aéreas. La segu ridad militar no es una frase hueca en Israel, ni algo que’ pue’da criticars.e o ridiculizarse’; es un medio de vida rigurosamente’ practi cado por todo el mundo. Pero cuando se’ sepa la historia co’mp’leta, si es que llega a sa berse, será digna de estudio, pues ha siclo, en verdad, un hecho (le arma.s fantástico’. 530 Nnnero .‘2Ú Jut’io 1967 REVISTA - DR AERO7A UTICA Y ASTROAUTICA CONTROL Y MANIOBRA 013 LAS CRISIS (De Strctegie.) En arma nuestra época, en que, gracias al nuclear, la disuasión ha adquirido una importancia determinante, el control de las crisis se ha convertido en un asunto capital. Sin embargo, se trata de un con cepto lo bastante nuevo como para que haya necesidad de aclarar muchos de sus aspectos. Sin pretender hacer un estudio exhaus tivo, el presente artículo se dirige a pre cisar algunas nociones resultantes de un primer intento de análisis. Tratará, en primer lugar, del problema teórico, que será ilustrado a continuación con el ejem plo de Cuba. En una tercera parte será analizada la dirección de la maniobra de las crisis. El estudio abordará, finalmente, la cuestión de la prevención de las crisis. 1.—El problema teórico. limitar el conflicto, lo cjueobligaa la di suasión defensiva a los niveles nuclear y clásico; de otra parte, la obligación de detener la acción adversaria, lo que pone en juego la disuasión defensiva al nivel de guerra fría. En este doble aspecto, lo que hace (le la maniobra de las crisis un problema muy difícil y muy diferente de aquel que fué inicialmente resuelto por la NATO. La disuasión de la organizacióndel pacto Atlántico no tratabamás que de impedir la guerra o la opresión.Era, por tanto, una disuasiónlimitadaa los nivelesde empleo de las fuerzas militares. La rna niobra de las crisissupone el llevara cabo una disuasión, si no total, al menos mucho más extensa. De estos dos objetivos se deducen (lOS consecuencias importantes. 1. La disuasión limitada a las fuerzas Un análisis del problema teórico per militares es bien conocida y relativamen mite descubrir mejor los factores que en te fácil de llevar a cabo desde que existen tran en juego en el control de las crisis. Por lo pronto, es necesario definir lo las armas nucleares. Pero para que la di la amenaza nuclear que se entiende por crisis. Constituye un suasión sea efectiva, estado de tensión, en el curso del cual se debe ser creíble. Dar una credulidad a la amenaza nuclear constituye el primer ele corre un riesgo máximo de escalada hacia un conflicto armado y en el que se trata mento de la maniobra, que será tratado de impedir que el adversarioadquiera más adelante. cualquier tipo de ventaja política o mili 2. La disuasión al nivel de la guerra tar. E.sta ventaja representa lo que se fría es de una naturaleza muy diferente juega en la crisis; por tanto, representa a lasdisuasiones nucleary clásica. A este el mínimo riesgo para el defensor. nivel, la disuasión no puede tratar de pre Esta definición lleva a reconocer dos venir las crisis, sino solamente (le impe objetivos : de una parte, la necesidad de dir su desarrollo en la lucha permanente 53 kEVISTA DE AEROJAUTICA Y Niímero 320 Julio 1967 - ASTRONAUTICA en cine se enfrentan dos potencias. A una acción preventiva reemplaza una acción curativa. A la disuasión apropiada al ni vel de la guerra fría debe, por tanto, aiia íhrse una verdadera «estrategia (le la ac— Ci óti ». Si se acepta esta idea de estrategia, ci problema se hace más claro : al nivel (le la gtlerra fría, se trata (le luchar con vis tas al éxito. Para esto, como en toda lu cha, cada protagonista debe privar a su adversario de su libertad (le acción, con servando siempre y, si es posible, aumen tando la suya propia. Es preciso, por tanto, determinar cuál es la esencia de la libertad de acción en la guerra fría. En esta forma de lucha donde la fuerza es siempre velada o in sidiosa, todos los acto que se sitúan por debajo de un cierto grado de violencia, desde el punto de vista de nuestras propias fuerzas, son materialmente posibles, y por esto la disuasión toma una forma diferen te. Se trata de paralizar las iniciativas ad versarias por un conjunto de considera ciones que entrañan su inhibición. Exis ten claros ejemplos (le esto último: el de Suez en 1956 contra Francia y la Gran Bretaña; el que sufrió Francia en 1957 cuando el bombardeo de Sakiet Sidi Yous set; el que ha limitado hoy día los bom bardeos- americanos en el Vietnam. En todos estos casos, es sobi-e todo el am biente psicológico creado por la opinión internacional o la opinión nacional el que influye sobre la libertad de acción, lo cual supone una acción muy activa sobre el plan psicológico, por parte (le los dos ad versarios. Esta primera forma de acción es absolutamente esencial. Una segunda forma de acción consiste en amenazar con llevar a cabo una ope ración ofensiva de guerra fría que el ad versario no podría impedir y que le haría correr un riesgo por lo menos igual a los beneficios que espera obtener de la ac ción emprendida. Para esto es preciso dis poner de objetivos adecuados, suscepti bles de ser alcanzados por los medios de la guerra fría. Krouchtchev utilizó du rante cierto tiempo un procedimiento pa recido, su amenaza de firmar un pacto con Alemania del Este, hizo pasar auto máticamente a un segundo lugar el asun to de los accesos a Berlín. Si estas dos formas (le acción no bas tasen, es posible recurrir a un tercer pro cedimiento mucho más arriesgado, que consiste e llevar el nivel de la guerra fría a los niveles clásicos y nuclear. T)e hecho, se trata menos (le declarar que se amenaza con la guerra si el adversario no cede, que de probarle con los actos que corre el riesgo (le un conflicto mili tar si persiste en su acción. Es este el procedimiento cjue se aplicaría, por ejem plo, en Berlín, si una (le las partes mos trase su determinación (le abrirse un ca mino (le acceso al mismo por las armas. Ha sido también este método el que se empleó durante la crisis de Cuba, cuando los americanos declararon el bloqueo par cial de la isla. Esta forma (le acción per mite transferir al nivel de la guerra fría la disuasión existente en los niveles clási co y nuclear. 11.—El ejemplo de Cuba. El análisis precedente muestra el carác ter particularísirno de la maniobra (le las crisis.El ejemplo de Cuba constituye la primera aplicación consciente de estos principios. Los americanos querían obligar a los soviéticos, en lo posible sin guerra, a reti rar los misiles nucleares que habían bistalado en Cuba. La aplicación del análisis anterior a las acciones llevadas a cabo por la Casa Blanca desemboca en el siguiente esquema 1 .° Ase gurarse del efecto de disuasión un clear haciendo la amenaza creíble. Para ello se tomaron dos tipos de me didas : de una parte, las declaraciones muy firmes del Presidente Kennedy; (le otra parte, la orden de alerta a las fuerzas nu cleares americanas. Estas medidas se re velan allí corno insuficientes, ya que los soviéticos continuaron envian(lo armas nu cleares a Cuba. 532 Número REVISTA 320 Julio 1967 - DE AERO2A UTICA Y AsTROuAuTIcA con precaución, 110 los soviéticos su eventual recurso al «todo», aunque ello El Presidente Kennedy hace otras de suponía un gran riesgo de (lar lugar a in claraciones para probar, apoyándose cidentes muy graves en caso de combate cipalmente en documentos fotogTáficos, que hace publicar, que los soviéticos han entre buques americanos y soviéticos. De bido a esto, el nivel de la guerra fría se hace instalado misiles nucleares en Cuba, aun estrechamente solidario a los niveles de que ellos niegan el hecho. la guerra militar. Pero, sobre todo, se ha bía establecido completamente la creduli 3•0 Amenazar con efectuar una acción ofen dad de recurso a la amenaza nuclear: el siva de guerra fría:. que los americanos aceptasen este riesgo mostraba a los soviéticos que la guerra Los americanos no hacen nada de esto, nuclear podía estallar a causa de Cuba. faltos sin duda (le objetivos convenientes. Khrouchtchev tuvo miedo y, después de Sin embargo, es posible que los soviéti algunas peripecias, se llegó a un arreglo, cos recurrieran a este procedimiento al que no era más que un compromiso. instalar los cohetes en Cuba, ya sea para Este ejemplo muestra que la maniobra obligar a los americanos a ceder en el de las crisis obliga a tomar una serie de asunto de Berlín, ya sea para obtener una medidas destinadas a probar al adversario posición de fuerza con vistas a una posi que se está dispuesto a aceptar los even ble reunión en la cumbre. Pero esa acción tuales fuegos antes (le ceder. Se trata no les sirvió (le nada, a causa de SU fra aquí de una maniobra esencialmente psi caso en la acción que vamos a examinar. cológica en la que cada una de las ope raciones debe ser calculada cuidadosamen 4.° Llevar el nivel de guerra fría: a coincidir te pa hacer perder al adversario su li con los niveles de la guerra militar. bertad (le acción, todo ello evitando las escaladas (lemasiado peligrosas. Una (le Parece que este es el procedimiento que las condiciones esenciales de esta ma los soviéticos trataron de utilizar al ins niobra es la de calcular cada operación talar los cohetes nucleares en Cuba. Con de manera que se deje al adversario la ese hecho, esperaban poder ejercer más elección entre la escalada o una retirada presión decisiva sobre los americanos. El aceptable. Es absolutamente preciso evi inconveniente estaba en que, al hacerlo, tar colocarse entre la espada y la pared. se colocaban en la alternativa del «todo Este pricil)io parece que no ha sido bien o nada», el «todo» conducía a la URSS a comprendido en el Vietnam por los (los una guerra nuclear devastadora y el «na campos opuestos. da» la dejaba sin acción. Del lado ame ricano, por el contrario, la presión hacia 111.—La dirección de la maniobra. la posible escalada a la guerra militar se realizó mediante una gama de medidas A lo largo (le la crisis (le Cuba, la ma limitadas : movilización de 150.000 reser niobra se dirigió desde Wáshington me vistas, preparación de una fuerza de des diante decisiones inspiradas en las conclu embarco en Cuba. La Casa Blanca ma siones extraídas (le un cierto número (le terializaba así una amenaza que colocaba ejercicios, parte (le los cuales se realiza a los soviéticos ante la opción todo o na da, reduciendo así casi totalmente la Ii ron durante la crisis. Fué, sin duda, debi— bertad de acción de estos últimos. Mas do a este método el que las decisiones tan exactamente adaptadas al la decisión de desembarcar hubiese sido, estuvieran problema. sin embargo, bastante arriesgada. La me De la crisis de Cuba, los americanos de dida decisiva fué la del bloqueo aeronaval dujeron, en primer lugar, la enseñanza de de Cuba, limitado a los buques transpor que la maniobra de las crisis no podía dites de armas. Esta medida, que, por otra 2.° Conciliarse con la opinión mundial. parte, permitía ‘- 533 fué aplicada justificar a REVISTA DE AEROJ’A UTICA Número Y ASTRONÁUTICA rigirse más que por un mando único, de hecho por el Presidente de los Estados Unidos. A fin de alcanzar este objetivo, juzgado técnicamente necesario, ejercie ron sobre sus aliados (le la NATO una presión muy marcada para obtener esta centralización bajo el pretexto de la inte gración de las fuerzas nucleares. 320 JuUo 1967 - todo del esquema, aun previendo las va l-jan t es. Además, es preciso adoptar un método diferente. Se trata menos (le establecer un esquema de maniobra que (le preparar las decisiones qtie se tomarán por los di ferentes Estados en el momento de la cri sis. Esta preparación debe comportar, en Además, para los europeos no era pen primer lugar, el establecimiento (le una sable que, en la dirección de una crisis lista completa de las posibles medidas y en Europa, en la cual podrían estar ini— una apreciación muy exacta de las con plicados los miembros de la NATO, no secuencias que estas medidas pueden te se tuviesen en cuenta los puntos (le vista ner sobre la opinión mundial y sobre el de las naciones europeas. En efecto, es adversario. Esta primera exploración, (lifícil concebir qtie, en una crisis a pro efectuada en común y vivificada por nu pósito de Berlín o (le Alemania del Este, merosos ejercicios simulados, deberá per Alemania Federal, Francia y la Gran Bre mitir a cada actor el tener conciencia (le taña, no participen en la elaboración (le las posibilidades y de los riesgos, mcclii— las y llegar a un esbozo de concepción las decisiones. Los americanos pensaron sobre las reacciones, positivas o negati entonces salvar esta dificultad ofreciendo vas, que producen en los demás asocia un sistema de planificación de las crisis (lOS. Se dispondría así de una especie de qtie terminase por establecer, (le común «carta» Cli la que cada tino (le los platos acuerdo, un esquema (le maniobra única sería perfectamente conocido. cuya ejectición se realizaría en la hipóte Quedaría entonces por asegurar la me sis considerada. Esta concepción, que se jor coordinación posible (le las (lecisioli es parece mucho a los planes militares con nacionales cine deberían tomarse muy rá vistas a una guerra, no resiste un examen pidamente en el momento crucial. Entre por ilumerosas razones. En primer lugar, las diversas soluciones Posibles para al porque es casi imposible que el esquema canzar este objetivo, la mejor parece que único sea aprobado por las quince nacio consistiría en organizar una «red de aler nes de la NATO, a menos que sea extre ta» especializada que permitiese la inteimadamente inofensivo : Por ejemplo, nun comunicación instantánea entre los jefes ca Dinamarca ni Islandia se asociarían al de Gobierno y los jefes (lel Estado Ma bloqueo de Cuba. También porque, cua yor, utilizando, si es preciso, satélites de lesquiera que sean las hipótesis que se comunicaciones. Cada Gobierno, conocien preparen, es muy improbable qtie las crisis do las diversas medidas posibles, podría correspondan exactamente a las hipótesis entonces asociarse o no a las operaciones emprendidas por los otros jefes de Esta previstas. E.l plan Prcpara(io corre el ries go de no ser aplicable. Además, es (lifícil (lo. Entonces se realizaría la máxima co sin iocier impedir por com evaluar (le antemano la reacción (le la ordinación, opinión pública en el momento de la cri pleto las inevitables divergencias. Esta solución parece ser la única que responde sis: Un país que mostrase muy reticente durante la concepción del esquema Niede a la realidad. Además, los gastos reque ver a su opinión pública stihlevacla por ridos para una tal «red de alerta políti tina ola (le indignación, como la que tuvo ca» estarían al menos tan justificados co lugar en los Estados Unidos cuando la mo acuellos—consiclerables—-——que exigen militares, crisis (le Cuba. Por el contrario, otro país los sistemas de transmisiones como, por ejemplo, la red de alerta aérea. que hubiese (lacio prueba de firmeza en Antes de intentar ganar la guerra, es pre el curso del establecimiento del plan, pue ciso crear un sistema destinado a evitarla. de ser obligado por su opinión a una ac Si tal red hubiese existido en 1914, la Pri titud mucho más prudente. Por todas es mera Guerra Mundial no hubiese tenido tas razones, no parece realizable el mé lugar. 534 REVISTA Winwro 320 Julio 1967 - DE ÁERONAUTICA Y ASTROAUTICA Conclusiones. IV.—La. p’revea-iciónde las crisis. En una Europa donde las tensiones pa rece que se han reducido, y donde no pa recen existir intenciones belicosas, al me nos por el momento, lo esencial de la es trategi.a está constituido no por la prepa ración de la guerra, sino por la prevención de los conflictos. Esta preocupación co rresponcle a una situación en la cual las crisis parecen que, o bien no son inten cionales y, por tanto, resultantes de un encadenamiento de circunstancias más o menos fortuitas, o bien, en el caso con trario, son el resultado de una aprecia ción errónea de las reacciones adversarias. Dentro de esta línea de pensamiento, aparecen dos ideas nuevas. La primera, POCO concebible a lo largo de los dos últi mos decenios, es la de procurar extender la red de alerta política hasta el adver sario eventual, como se hizo después de la crisis de Cuba al establecer el «teléfono rojo» entre Moscú y Wáshington. Si, de una y otra parte, las intenciones son pa cíficas, tin sistema de comunicaciones con el campo adversario puede desernpear un papel esencial para evitar malenten didos graves, así como para asegurar que los diversos mensajes políticos represen tados por las medidas tomadas sean bien comprendidos. La segunda idea consiste en tratar las crisis como se hace con la guerra, dán dole tódavía más importancia a la pre visión ; es decir, haciendo preceder a la fase de prevención de la guerra por una fase de prevención (le las crisis. Es mejor evitar las crisis que tener que resolverlas. El problema (le la prevención de las crisis reposa sobre los mismos principios que los de su resolución : Es preciso es tudiar las hipótesis y determinar los ín dices posibles de crisis, y, después de la aparición de estos últimos, aplicar las me— didas susceptibles (le impedir el desarro llo (le la crisis. Se aborda aquí un aspecto esencial del problema del mantenimiento de la paz, menos basado en lo sucesivo sobre sistemas jurídicos a base de trata dos que sobre una maniobra de medidas apropiadas. En esta fase de prevención, todavía más que en la de la maniobra de las crisis se impone la comunicación con el adversario eventual. Un estudio sobre tal problema hubiera parecido utópico e incluso peligroso hace algunos años. La cuestión está en saber por qué hoy día tal cuestión es (le apa riencia más razonable. En principio, hay que tener plena con ciencia de que el clima internacional con temporáneo ha sido creado por el carác ter desmedido de la amenaza constituída por el arma nuclear. Nadie desea un con flicto. De esta repulsa surge una estabili dad nueva que no se debe al carácter ra zonable de los hombres, sino a la conducta racional que impone el peligro. E.s tam bién esto lo que da una importancia con siderable a la disuasión nuclear, la cual es preciso mantener, ya que, gracias a ella en parte, es como el jtiego de la maniobra y diC la prevención de las crisis puede evitar el verdadero conflicto militar. Hay que mencionar otra consideración En esta maniobra (le las crisis, la exis tencia (le varios centros de decisión nu clear en el seno (le una alianza favorece el manejo (le la (lisuasión, permitiendo diferenciar las decisiones según la política de los diversos aliados y aumentar con— si(lerablemente la incertidumbre del ad versario sobre las eventuales reacciones. Desde este punto (le vista, la política nu clear francesa se adapta mejor a uiia ver(ladera estrategia (le disuasión, mientras qtie la mayor parte de las críticas hechas a esta política corresl)on(iCfl a una estra tegia (le empleo. Esta es una distinción fundamental. Por último. y sobre todo, es indispen sable comprender que el gran cambio que ha traído consigo el arma atómica es que la preparación para la guerra, auiid[tle todavía necesaria como seguridad última, cede el paso a la búsqueda (le una con ducta racional durante la fase que la pre cede. Por eso, la maniobra de las crisis y, todavíamejor, la maniobra de preven ción de las crisis, se hacen absolutamente indispensables. El riesgo de la guerra mo derna se ha hecho demasiado grande para ser aceptada. Al conocer las nuevas reglas (le las prevención de las guerras, el niun do habrá hecho un progreso capital. 535 REVISTA DE AERONAUTICA Número 320 Julio 1967 - Y ASTRONA(JTICA ji LAS iIRFT FUERZAS AEREAS; PARADOJA DEL VIETNAM Por ROLLEN Mayor H. ANJ’HIS General de la. U. S. A. E. (De Air Force.) Las misiones tralicionales (le las Fuerzas Aéreas: Batalla por la superioridad aérea, interdicción, apoyo directo, reconocimiento, transporte y bombardeo estratégico pueden apiicars.e a las guerras. que se libran según la tradición clásica, pero no a las guerras de guerrillas, de liberación nacional o contra rrevolucionarias. Eso es lo que se dice. En estos tipos de guerra—como Vietnam—las Fuerzas Aéreas presentan una porción de desventajas obvias, dicen. La moderna po tencia aérea es un monstruo tecnológico. De masiado compleja y complicada. Depende demasiado del equipo electrónico, que no siempre funciona. Tiene servidumbres y es ineficaz con mal tiempo. Exige una gran precisión para poder identificar y atacar los objetivos. No puede ocupar el terreno. Por todas estas razones;, la potencia aérea es ineficaz en la guerra de guerrillas, mtiy es pecialmente cuando éstas tienen lugar en la jungla. Eso es lo que se dice. Por supuesto que ninguno de estos pensa mientos es mío. Pero fueron muchos los que se los creyeron cuando las. Fuerzas Aéreas entraron inicialmente en acción, en Vietnam, y son muchos. los que todavía creen en ellos. En los primeros días la Prensa, como con secuencia de las antedichas afirmaciones, estaba repleta de historias, en. las. que se’ me nospreciaba la tarea de las Fuerzas. Aéreas en Vietnam. Más recientemente’, el primer 536 Número 320 Julf o - REVISTA 1967 DE AERONAUTICA Y ASTRONATJTICA bombardeo con aviones B-52, por ejemplo, fué denominado “un costoso medio de de rribar árboles”. Las operaciones de interdic ción y de apoyo directo se tildaron de in tento de la.Fuerza Aérea para tratar de adap tar un concepto complejo a una necesidad muy poco compleja. Todo el equipo’ de las Fuerzas Aéreas fué también criticado y calificado de inadecua (lo para la guerra de guerrillas en la jungla: Este tipo de guerras eran, por esencia, gue rras de superficie. Mas condenatoria aún fué la alegación de que las operaciones de gue rra aérea eran “contraproducentes”. Este cargo se basaba en la apreciación, más que simplista, de que las Fuerzas Aé reas no discriminaban, no podían diferen ciar el amigo’ del adversario y, a veces, lle vaban al amigo a manos del enemigo, bus cando protección contra ellas. Esta afirma ción adquirió tales proporciones, que hubo un momento en que se habló de suprimir drás ticamente todas las operaciones de guerra aérea en Vietnam del Sur. Se pusieron en entredicho los; conceptos básicos de las Fuer zas Aéreas, su aplicación y su efectividad. A menos que se deniostrara lo contrario’, la conclusión lógica era abandonar para siem pre conceptos. tales como la interdicción y el apoyo directo, en todas las guerras. de liberación que, por su propia. naturaleza, mez claban el amigo con el adversario. Recuerdo, retrosp’ectivamente, que incluso personas. que coincidían con los. puntos. de vista de las. Fuerzas Aéreas, se hallaban inse’ guras sobre el papel de las mismas. en Viet nam. Baso esta apreciación en el análisis de muchos artículos aparecidos en publica ciones relacionadas con las Fuerzas Aéreas. El tono de los artículos era más b.ien def en sivo’, como si los hechos fueran en realidad dudosos, pero no justificaban las conclusio nes que se sacaba de ellos.. L forma más ustial de justificar la potencia aérea consis tía en solicitar su elogio a uno de los jefes. (le las fuerzas de tierra. Pero, muy a menu do, dicho elogio sonaba a hueco a causa del tono’ defensivo del artículo. Como Jefe de la 2. División del Aire (que luego cambiaría su nombre por el de Sép tima Fuerza Aérea) yo’ estaba perfectamente enterado de que las alabanzas. no podían ser más merecidas; el mejor va’ledor de las Fuer zas Aéreas en Vietnam era su propio mere cimiento; las Fuerzas Aéreas habían triun fado’ en forma tal, que contradijeron los cálculos y estimaciones que se’ habían hecho sobre ellas, por optimistas que fueran. L.a valía de la potencia aérea en el Vietnam ha progresado, según sus analistas., en tres. cli ferentes. etapas. En los primeros días de la guerra, la potencia aérea. era “útil, pero quizá no necesaria para las operaciones”; más tar de pasó a ser “esencial en el conbate”. l.e cientemente, por último, se la reconoce como el “elemento primordial del combate”. ¡ Esta es. la paradoja del Vietnam! L.as Fuerzas Aéreas, que inicialmente fueron con sideradas como inadecuadas o, a lo sumo, como algo auxiliar, se han convertido aho’ra en algo decisivo. La paradoja ha constituído una sorpresa en muchos. ambientes autorizados, de los Es tado’s Unidos. Ha constituido’ bastante más que una sorpresa, y bien dolorosa., pa.ra el Vietcong, los norvietnamitas, Mao Tse Ttmg y su doctrina de expansión comunista por medio de guerras de liberación nacional. Los. comunistas no eligieron libremente las. guerras; de liberación como. su táctica predilecta. Hasta un cierto punto, fueron los Estados Unidos los que’ les. forzaron a ello. Les forzamos. por nuestra superioridad nuclear y por nuestra superioridad tecnoló gica, que no les permiten entablar ningún conflicto de nivel más elevado, en la escala de la guerra. Tanto Mao Tse Tung como Ho Chi Minh, o el General Giap, tra.ta.ron de evitar el enfrentamiento directo co’n esta superioridad técnica. Sus guerras. de libera ción nacional, utilizando’ tácticas de guerri llas en el escenario de la jungla, convertirían en ineficaces nuestras armas. modernas. Muy especialmente serían anuladas las Fuerzas Aéreas, o sea el elemento en que los Estados Unidos ostentaban tan aplastante’ superio ridad. Pero Mao Tse Tung, Ho Chi Minh y el General Giap se equivocaron. Las gtierras de guerrillas, no triunfan y la penosa para(loja para Mao’, Ho’ y Giap estriba en que es precisamente la potencia aérea la que les impide triunfar. No resulta difícil comprender por qué las Ftierzas Aéreas han obtenido un éxito’ tan rotundo en Vietnam, si consideramos los rasgos. geográficos. característicos del país, junto con ‘la técnica y las tácticas de la gue rra de guerrillas. El Sudeste Asiático no es tin diminuto rincón del globo. La zona geográfica que, 537 REVISTA DE AERONAUTlc’A Número Y ASTRONAUTICA directa o indirectamente, está implicada en el conflicto (Vietnam del Norte y del Sur, y una parte de Laos), abarca. 207.000 millas cuadradas de territorio, qtie supone muy poco menos de las 219.000 en que lucharon las fuerzas de los Estados Unidos desde Nor mandía hasta Berlín, que comprendía el nor te de Francia, Bélgica, Holanda, Dinamarca, Luxembtirgo, Inglaterra y Alemania occid en tal. Da distancia desde Omaha Beach a Ber lín fué (le 675 millas, algo menos (le las 706 que se extienden desde Saigón a Hanoi. La playa de Anzio dista de Innsbruck, al norte del paso (le Brennero, en los Alpes, 490 mi llas, poco niás de las 409 qtie separan Saigón de Hue. La Zona D, fortaleza en la jtrngla que utiliza el Vietcong, tiene un área (le al rededor (le 500 millas cuadradas, aproxima (lamente la misma superficie que la. mitad del Estado de Luxemhttrgo. Estas comparaciones geográficas resaltan. por sí solas, la necesidad de contar con el poder aéreo en el Asia del Sudeste. Pero también conviene tener en cuenta que, al contrario de lo que ocurre con Europa, toda esta zona del sudeste asiático está tremen(lamente subdesarrollada Inmensas exten siones se encuentran cubiertas por la jungla, sin otro acceso a su través que el que uno mismo pueda abrirse a golpes (le machete. Otras muchas zonas están formadas por ma rismas, en las que el único medio de trans porte de superficie es el más primitivo que pudiera utilizarse por la superficie del agua. La red de ferrocarriles. y de carreteras dejan mucho que desear, y resultan muy anticua (las para poder enlazar la capital con las provincias, proveer a la distribución de mer cancías y explotar la ventaja que podrían te ner las fuerzas aliadas respecto al Vietcong. en movilidad táctica. La naturaleza del terreno se presta, en tina palabra, a desalentar, oistaculizar, ini— pedir o bloc uear completamente todo movi— miento en superficie. Esto hace que el aire sea el único medio que permite la libertad (le movimientos. La movilidad inherente a las Fuerzas Aéreas. no ha disminuíclo; su fle xibilidad no se ha aminorado; no ha sido f renada su rapidez de reacción; su precisión para colocar sus fuegos sobre los objetivos no se ha alterado; su capacidad para trans portar hombres y material no se ha reducido lo más mínimo. La eficacia de las Fuerzas Aéreas no ha encontrado, por tanto, la me nor cortapisa, como les ha ocurrido, por el 320 Julio - 1967 contrario, a las fuerzas de superficie, que han yisto, por ejemplo, cómo quedaba res tringida la movilidad y posibilidades de sus carros. Cbnsectientemente, las fuerzas de tierra han tenido que orientarse hacia los vehículos aéreos: suyos propios—como en el caso de los helicópteros—o de la Fuerza Aérea, para los transportes. De esta forma han conseguido alcanzar, en el aire, la f le xibilidad y movilidad que la selva y los pan tanos les habían negado en tierra. Vamos a considerar ahora las tácticas de la guerra de guerrillas, a través de la cual el General Giap pensaba obtener grandes beneficios, a despecho de las Fuerzas Aéreas (le los Estados Unidos. l. “La ocultación es esencial. Permane ced escondidos hasta que llegue el momento del ataque.” ¿ Cómo contrarrestamos esto? Las Fuer zas Aéreas son. el medio de sobrevolar y es— ¡Iorar en las vastas áreas inaccesibles, en las (/ItC podria estar escondido el Vietcong. 2. “Ataca al enemigo donde menos se lo espere; sorpréndeie con emboscadas.” ¿ Cuál es nuestra respuesta? Las Fuerzas A áreas y las tropas del Ejército de Tierra lic iitraizsportadas son las únicas con. capaci dad de reacción lo suficientemente rápida para proporcionar potencia de fuego y tro pos aerotransportadas, de forma que sor ren dan al que intentaba sorprender y tien dan la emboscada al que pretendía tenderla:. 3. “Ataca los pueblecillos aislados que estén alejados de todo posible auxilio.” ¿Res puesta? Las Fuerzas Aéreas roporcionan ci único medio de auxiliar rápidamente a los asediados o evacuar a. los sitiados. 4J “Ataca durante la noche; evita, la lucha a la luz del día.” ¿ Respuesta.? Las Fuerzas Aéreas lanzan las bengalas que con vierten la noche en día.. 5. “Destrozad el sistema de transporte; aislad al pueblo. de su Gobierno; impedid la distribución de las mercancías; arruinad su economía..” ¿ Respuesta? Las Fuerzas Aéreas pueden mantener los enlaces necesa rios, políticos y económicos, a través de todo el territorio; pueden distribuir alimentos, armas, equ.io; evacuar los enfermos y los heridos. Trasladar las fuerzas de superficie sobre selvas imp ene trables, campos inun da dos y carreteras impracticables: ofrecer a. la gen te leal, de los villorrios alejados, una rue 538 Número REVISTA 320 Julio 1967 - DE AERONAtJTICA Y ASTRONAUTICA ba tangible de que el Gobierno se’ preocupa’ pia esco’lta no ftiera víctima de una embos por su seguridad, de que no han sido olvi cada. Decidirnos, en consecuencia, cabalgar con escopeta, por el aire. La escolta escope dados. tera consistía en un pequeno. avión L-19 y un cierto número de aviones de combate, en alerta en el aire, con el convoy. Muy a me nudo no era necesario llamar a los, aviones de’ combate, pues el Vietcong rehuía entablar en cuanto sabía de la existencia (le reas mantienen a las guerrillas baLjo’un ata combates aviones. que continuo, les niegan el sueño, les man El proce’dimientd’ normal entonces., como tienen. permm’ien.tem.entebajo la presa del miedo y haeen.abortar sus pianes al tenerles ahora, consiste’ en uno o dos aviones (le en preocupados por su ro pialsupervivencia. lace que’ vuelan sobre el convoy, reconocien La primera y más importante lección que do la carretera, bien a vanguardia del mis ha enseñado la. guerra de Vietnam es, por mo. La e’scoita de cazas. se encuentra tam tanto, el concepto tradicional del empleo de bién en el aire’ y nunca a más de’ cinco mi llas. del convoy. Si el piloto del Li-19 observa las Fuerzas. Aéreas: lucha por la superiori algún obstáculo’ o movimiento sospechoso, dad aérea, apoyo directo, interdicción, reco nocimiento, transporte aéreo y bombardeo ordena al convoy hacer alto e investigar. A los cazas se les comunica que adopten posi estratégico, es aplicable en toda su exten ciones de ataque. Sión a la guerra de guerrillas. Naturalmente, E.n el caso de qtie se produzca realmente las técnicas, varían de las que se utilizan en las guerras clásicas, pero las técnicas. siem tina emboscada., los aviones de ataque ef cc tuarán el apoyo directo co’ntra los, objetivos pre varían, ya que dependen del medio-am biente geofísico y de la atmósfera política que’ les seEale el L-19. Si la enihosca.la fuera en que se desarrolla tina guerra determina detectada antes. de oue el convoy entre en la trampa, el enemigo puede’ ser neutralizado da, O sea, que lo que voy a decir, concer ds.de e’l aire. Después de la emboscada, los niente a las técnicas que nosotros utilizába mos. en Vietnam, no tiene por qué ser apli aviones de’ combate’ pueden castigar severa mente a las guerrillas, en retirada., haciendo cable necesariamente en un escenario de tie rras áridas, y desérticas, o’ en una guerra en que el enemigo se pregunte seriamente si la que difieran los objetivos políticos. los, resultados de la emboscada permiten que No soy demasiado aficionado a utilizar se considere a. ésta corno’ una táctica renta ble. E.s. interesante’ hacer notar que durante analogías, para describir las táctica.s y técni el tiempo’ que yo estuve’ en Vietnam ningún ca.s utilizadas en la guerra. Sin embargo, convoy con esco’lta armada en el a.ire fué creo que la tarea que llevaron a cabo las víctima de una emboscada victoriosa. No fuerzas. militares en la conquista del Oeste he investigado’ los últimos datos, pero’ creo americano; sus descubiertas sobre territorios inexplorados; las luchas. contra los Siux y que ese sigue siendo el caso. Nuestra respuesta a los ataques. contra los Apaches; la seguridad que se proporcio naba a los vagones (le los trenes y demás. pueblecitos aislados también han sido sacaactividades son comparables. a las que las (los del viejo Oeste’. Las. exigencias. son las Fuerzas Aéreas están haciendo hoy en. día mismas. Es preciso’ que “los. buenos.” lleguen en Vietnam. Al principio de la guerra, por antes de que se acabe el día... o la noche. ejeiplo, nos dimos cuenta de la necesidad Las exigencias. durante la noche so’n particu de proteger los trenes. y los ocnvoyes de ca larmente gravosas, ya que implican que’ el miones, militares y civiles. Tomamos como apoyo directo se lleve a efecto en el momen ejemplo unas páginas de la historia de la to en que’ resulta más difícil localizar al frontera del Oeste y adoptamos. la decisión enemigo desde el aire. El problema fué re’de utilizar un medio económico, pero efec suelto’ por medio’ de un esfuerzo’ coordinado tivo, de cabalgar con escopeta. Una. escolta en el que participan: primero’, un avión que armada en tierra era arduo de ej ecuta.r y ‘lanza bengalas desde el aire, para iluminar el campo de’ batalla; en segundo’ lugar, se’ colo: costoso en hombres que eran necesitados aprerniántemente’ por todas. p.artes. Por otra ca en la aldea atacada, una flecha llameante parte, no existía seguridad de que la pro- que apunte’ en la dirección de la fuerza ata6. “Cuando la batalla se haya termina (lo, retiraos rápidamente’, a refugios, en la fortaleza inexpugnable de la jungla, para reagruparos, descansar y preparar el próxi mo ataque.” ¿ Respuesta? Las Fuerzas A é 539 REVISTA DE AERONAUTICA Núniero 320 Julio 1967 - Y ASTRONAUTICA cante, y en tercer lugar, llegan “los bue nos”, con sus sombreros blancos, volando en aviones de combate, sobrevuelan la aldea a los pocos minutos y se lanzan al ataque en la dirección que señala la flecha de llamas. Podría citar otras analogías entre las ope raciones que tienen lugar en Vietnam y las que se llevaban a cabo hace ya mucho tiem po, en el lejano Oeste. Voy a limitarme a’ señalar una de ellas. Se refiere a las opera ciones con aviones B-52. Nuestro Ejército nunca obtuvo tina vic toria compieta contra los indios en las lla nuras norteñas hasta que asumió el mando el General Nelson Miles. No es que el Ge neral inventase nuevos métodos (le guerra; lo que hizo, simplemente, fué aplicar los mé todos tradicionales, pero intensivamente y en forma continuada. Hasta entonces, las campañas contra los indios tenían lugar al comenzar la primavera, en el verano o al principio del otoño. Durante el invierno, se les permitía a las tribus guarecerse, sanar sus heridas y prepararse para el próximo ((ylpe. El General Miles cambió todo esto. Peleó implacahiemente, en primavera, du rante el verano, en otoño y, muy principal mente, en el invierno, cuando la vida en sí misma, con los grandes fríos, era ya tina lucha. No concedió descanso a los indios, no les permitió oportunidad de recuperarse nla.near la nueva campaña. En Vietnam. las Fuerzas Aéreas, especialmente los ataques con los B-52, contra los puntos fuertes como la zona D, están haciendo con el Vietcong lo cine el General Miles hizo con los Siux. Las (ludas que existieron al principio de la guerra sobre la efectividad (le las opera ciones aéreas nunca se extendieron al reco nocimiento aéreo ni a las operaciones de anovo con fuerzas aerotransportadas. La necesidad (le ambas era obvia y los resulta(los bien conocidos. No obstante, me gusta ría subrayar una actuación única del trans norte aéreo. Al urincipio de la guerra, el control de las provincias alejadas, por el Gobierno central de Saigón. se encontraba extremadamente en precario. Existían mu chas zonas que no tenían un contacto efec tivo con Saigón porque el Vietcong contro laba las carreteras, los ferrocarriles y la red telefónica. El único medio de contacto y de control del Gobierno era por el aire. Se pen só en organizar una unidad aérea hetero génea para proteger las comunicaciones aéreas civiles y militares en las zonas que necesitaban fortalecer su enlace con el Go bierno central. Este proyecto nunca llegó a asumir la forma de una unidad especiali za.da, como se pensó. Sin embargo, el Go bierno de Saigón hizo realmente un extraor dinario esfuerzo para asegurarse (le que las zonas aisladas eran visitadas regular y con tinuadamente por aviones de transporte qtie les llevaban las mercancías que necesitaban y ofrecían, con su presencia, una prueba tan gible de que el Gobierno estaba interesado en el bienestar y en la seguridad de sti pue blo. Está comprobado que muchas de estas zonas aisladas no habrían permanecido lea les al Gobierno de Saigón si no hubiera sido por estas pruebas tangibles del interés (le 5115 dirigentes. En este sentido creo que podemos afirmar, con orgullo, que las Fuerzas Aéreas son capaces (le ocupar y conservar el te rreno. Uno (le los principales axiomas tácticos que ha vuelto a verse confirmado en Viet nam es el que afirma que el mando (le las operaciones aéreas debe estar centralizado y su ejecución descentralizada. En tina gue rra en la que la línea (lel frente separe níti damente el amigo del enemigo puede rda jarse un poco la aplicación de este axioma, sin que se registren consecuencias graves. En la guerra (le guerrillas no puede ser to lerada la menor relajación del mismo. El sistema ideal para el mando y control cen cralizado consistiría en un inmenso radar si tuado en el centro geográfico, con alcance suficiente para cubrir todo el país o el área en que puedan tener lugar las operaciones. Todos los vehículos aéreos estarían también en bases centrales y tendrían el alcance y E velocidad suficientes para ejecutar las ta reas que se les asignara dentro del área cu bierta nor el radar. Sin embargo, los proble mas técnicos, las. exigencias de seguri(lad, el número (le bases a.éreas disponibles y las posibilidades en alcance de los aviones ini niden el establecimiento del sistema ideal en Vietnam. El sistema que ha sido’ organizado’ (Sis tema de Cdutrol Aero’táctico o TACS) tar dó mucho en empezar a ser efectivo, princi palmente porqte los vietnamitas del Sur no estaban familiarizados con las operacio nes aerotácticas. Los jefes de tierra y aire no habían ejecutado nunca operaciones aire’ tierra, verdaderamente coordinadas. Por otra parte, no veían con claridad la necesidad del 540 REVISTA Nirnero 320 Julio 1967 - DE AERONAUTZC’A Y mando centralizado, y la consecuencia fué que muchos aviones de combate permanecie ron, a menudo, en. tierra, en una región, cuando eran apremiantement’e necesitados p.ara misiones de apoyo directo en otra. Ade más, pocos jefes apreciaban el verdadero valor de las. Fuerza.s Aéreas. en las operacio’ nes de apoyo directo y, en consecuencia, era.n pocos los, que estaban dispuestos a solicitar el apoyo aéreo. Hoy día el sistema TAC ha me’joTado: mucho. No debido a progresos técnicos, sino más bien debido a. que existe una conscien cia, mayor cada (lía., sobre la valía de’ las F’uerzas. Aéreas y una mejor apreciación (le las caus.as que hacen que las. Fuerzas Aéreas insistan en el mando centralizado y las. ope raciones descentralizadas. Esta es la lec ción que debernos siempre’ reco’rdar y res petar. Otra lección que merece la pena ser recor (lada es. la que se refiere a las dificultades experimentadas, al tratar de organiza.r unas Fuerzas Aéreas. Vietnamitas. El MAAG (o sea nuestro “Grupo Asesor de Ayuda Mili tar”) es un sistema eficiente cuando se está en tiempo de paz. Pero’, en el caso de’ Viet nam, todo tiene que ace’lerarse y conse’guirse mientras. se desarrollan operaciones reales. Esto’ crea un problema., ya que’ la condición (le’ asesor no permite la p.ai-ticip.ación en operaciones bélicas, y la Fue’rza Aérea Sudvietnamita necesitaba imperiosamente el ase so’ramiento, pero empeñada como estaba en operaciones .de’combate’, no’ disponía de’ tiem po libre p’ara conseguirlo. Este dilem.a o’casionó el nacimiento de un grupo de pilotos de los Estados Unidos, co nocidos. como lo’s “Dirty Thirty”) (los trein ta sucios). El grupo estaba compuesto por tre’inta pilotos, con ‘las graduacio’nes de ca. p.itán o comandante, cada uno’ de los cuales tenía acre’ditada s.u pericia aeronáutica y es taba en posesión de una larga experiencia. Estos. pilotos fueron, realmente, colocados bajo el mando operativo, de la Fuerza Aérea Vietnamita; p’ara ellos, su Jef e superior e’ra el ‘Teniente Coronel—hoy primer Ministro— Nguyen Cao Ky. Que yo sepa, nunca se’ ha bía. hecho na.da parecido, desde que’ pilotos americanos estuvieron bajo’ el mando fran cés en la Escuadrilla Lafayette. Cada uno’ de los “D’irty Thirty” se con virtió’ en miembro de una tripulación de’C-47, en la que el resto’ (le’SUS miembros. eran viet- ASTRONAUTICA namitas;. El miembro’ norteamericano hacía todo’ ‘lo que’ hiciese’ la. tripulación. Volaba con ellos; comía co’n ellos; dormía en la misma tienda, cuando las operaciones se desarrollaban en áreas. alejadas y, lo más importante de’ todo’, les aseso’ra.ba discreta mente’ y les alentaba. Les dab’a una visión s.obre’ las posibilidades de las Fue’rzas Aé reas. Les enseñaba a no temer al vuelo’ no’c tur’no o con instrumentos.. Hacía que’ se sin tie’ran importantes y orgullosos de’ sí mismos y (le SU pa.ís. Lo’s “Dirty Thirty” fueron magníficos. D’ura.nte’ la noche arro’jaban bengalas. Du rante el (lía trans.p’o’rtaban soldados. Lanza han octavillas. Llevaban alimentos a las al de’as aisladas, tomando tie’rra., si e’l te’rreno lo’ permitía., o’ lanzando’ los alimentos (in cluído’s. animales vivos) por medio de’ pa racaídas. L.e llamaban “sucio” al grupo’, a catisa de su prolongada ausencia de’ los lugares con fo’rtables.. El apodo’, sin embargo’, entrará (le lleno’ en la histo’ria (le la Fuerzas Aére’as (le’ los. Estados Unidos.. Junto’ a la entrada del Museo’ de’ las F’ue’rzas Aére’as. de’ Wright Pa.tterson, en Ohío’, e’xiste’ una placa., una fotografía del Grupo y un resumen ‘de’ su historial. Ce’rca se exhib’e’ el estandarte’ del Grupo’. Este’ tributo’ lo tiene bien merecido, no’ sólo como recordatorio de’ sus a.cciones en Vietnam, sino’ también porque e’l Grupo enseñó a las Fuerzas Aéreas una lección que nos será de mucha utilida.d en otros momen tos y otros lugares. Hasta ahora me he limitado’ a considerar las. operaciones aéreas en Vietnam ‘del Sur. La campaña. aérea en Vietnam del Norte constituye, asimismo’, un gran esfuerzo’ p’ara entorpecer el apoyo logístico que se’ presta a las. tropas. enemigas infiltradas, en Vietnam del Sur, y al mismo tiempo como medida de coacción contra Vietnam del Norte’. Esta coacción tra.ta de’ inducir a los. no’rvie’tnarni tas a interrumpir su apoyo’ a la rebelión en el Sur, pues ‘(le’lo contrario las. consecuen cias de dicho’ apoyo’ acabarían resultándo’le’s in so’po’rtahiles La campaña aérea empezó en febrero de’ 1965 co’n unos cuantos ataque’s. contra un pequeño número’ (le objetivos militares fijo’s, seleccionados en el extremo n’leri(lio nal de’ Vietnam del No’rte. Pronto fueron seguidos de operaciones de “Reconocimiento armado”, en los que se’ le’s.permitía., a los 541 RVZSA b ARONAUTiA Y .Wúmcro .2O Jutio 1967 - ASTRONAVTICA aviones de combate, el atacar a todo obj e tivo militar que encontraran dentro de una zona determinada. Posteriormente, la zona de operaciones fué trasladándose hacia el norte y hacia el nordeste, en fases stice sivas. Los ataques, sin embargo, rehuían la zona densamente poblada, del nordeste, en que se encuentran Hanoi y Haiphong. Des pués de la tregua de diciembre de 1965, el se encuentra ahora, principalmente, en ma nos de’ las fuerzas aliadas y que la finalidad de Vietnam del Sur, de los Estados Unidos y de sus aliados de derrotar la subversión en Vietnam será conseguida. Más impor tante que nada, los Estados Unidos hab.rán convencido a los vietnamitas del Norte y a todos los posibles agresores en potencia, (le que no permitirán que triunfe la agresión área fué ampliada, incluyendo en ella zonas en ninguna de sus formas, por pequeña y costeras. específicas, determinadas carreteras enmascarada que parezca. Esto es lo que ver y tramos del ferrocarril, en la región nordes daderamente le importa al mundo libre en te (le Vienam del Norte. sus esfuerzos. por evitar la propagación del COmunismo, Al principio de la campa.ña se efectuaban alrededor de 600 misiones mensuales; hoy Los Estados Unidos no deben ser derro día la cadencia de ios servicios es de varias tados en Vietnam. Si así ocurriera, equival veces dicha cifra. Mucha gente arguye que dría a estampar el marchamo del éxito a las el esfuerzo aéreo en Vietnam del Norte no tácticas comunistas de guerras de liberación es productivo, porque los objetivos que se nacional. El General Giap, que es el princi seleccionan no son rentables. En mi opinión, pal estratega comunista del Vietnam del creo que están equivocados. El error de estas Norte, predice con exactitud el futuro, en personas estriba en confundir la magnitud el caso de una derrota nuestra en Vietnam. del objetivo, en términos del tamaño, cali Estas son sus palabras: dad, etc., con su significación. Por supuesto “Si en la guerra especial que los imperia que los objetivos atacados en Vietnam no listas de los Estados Unidos están ensayan pueden compararse, en tamaño y compleji do en Vietnam del Sur, fueran derrotados, dad, con los que atacábamos en la segunda entonces podrían ser vencidos en cualquier guerra mundial o, incluso, en la misma gue otro lugar del mundo.” rra de Corea. Pero puedo asegurarles que en relación con la significación que tienen Lo que quiere decir es lo siguiente: Si la para las operaciones de los vietnamitas son forma especial de guerra que está librando igual de importantes. el General Giap triunfa, y los Estados UníExisten indicios de que las. operaciones de (los salen derrotados, quedará confirmada, para el futuro, la eficacia de los planes co los Estados Unidos y de los sudvietnami tas, tanto en Vietnam del Norte como del munistas y de los programas para desenca Sur, están empezando a p.roducir dividen- denar agresiones similares, en otros lugares, dos. La ocupación de Vietnam del Sur por en cualquier otro momento. fuerzas militares únicamente ya no es posi Vietnam, en mi opinión, quizá no sea la ble. Los bombardeos aéreos mantienen al última guerra contra-revolucionaria en que Vietcong desperdigado. Los ataques aéreos se vean envueltos los Estados Unidos, pero a Vietnam del Norte afectan adversamente los posibles conflictos del futuro es.tarán con las actividades, diarias del régimen de Hanoi, siderablemente reducidos, no sólo por la f irde su pueblo y de sus esfuerzos por continuar meza que han mostrado los Estados Unidos, su agresión en el Sur. jJas perspectivas que sino también porque el Vietnam habrá cons se le ofrecen al Vietcong no son de color tituído una lección para cualquier presunto (le rosa. En su desesperación se han lanzado agresor. Ahora ya saben que no se puede a más y mayores actos de terrorismo para esquivar la acción de as Fuerzas Aéreas. atemorizar al pueblo. Pero el resultado ha Debe quedar bien claro que esto es así, con sido engendrar un profundo rencor en la independencia del medio en el que el con gente que ellos, en un principio, decían que flicto tenga lugar, o de su amplitud e inten venían a “ayudar”. sidad. La convicción de tener que’ enfrentarAunque el momento exacto del fin del se con las posibilidades de las Fuerzas Aé reas, tan terro’ríficamente desplegadas en conflicto no puede ser precisado con exacti tud en el instante en que se escriben estas Vietnam, disuadirá con toda. probabilidad, líneas, sí podemos asegurar que la iniciativa incluso al más insensato de los aventureros. 542 ÉEVIsTA Número 320 JuUo 1967 - DE AERO2’4AUTICA Y ASTRONAUTICA B ¿ Es1 ¿ cg t ¡ a La LIBROS PROCESO A LOS PADRES, Enrieo Altavilla. Un vo lumen de 200 páginas, de 14 por 22 centimetros. Editorial MaGín. Calle San Gervasio, número 84. Barcelona (6). por Nunca se ha escrito tanto so bre la educación de los hijos y la trascendencia que tiene para su futuro de hombres. Tampoco creo que haya habido otra épo ca en que la juventud, en tanta proporción, se haya presentado como problema. Padres y ma dres se documentan eruditamen te sobre el tema y luego fraca san, al parecer, cuando se trata de aplicar las teorías. Claro que este no es el caso de todos los padres; la mayoría no sienten gran inquietud por ollo y, desde luego, no experi mentan la menor duda respec to a sus métodos educativos. En el mejor de los casos, si el niño goza de buena salud física, asis te a colegio de pago y dispone de buenos juguetes; se tiene la conciencia tranquila. Sin embargo, hoy está fuern de toda duda que los primeros años de la vida del niño, incluída la etapa pre-natal, son deci sivos para su futuro equilibrio psíquico. Los psicólogos han de mostrado que a los siete años el carácter de un niño está ya definido. A esta edad su destino de hombre normal, dispuesto a enfrentarse con la vida, o su destino do psicópata, do hombro frustrado, está dofinitivameo tc marcado. Sentada esta premisa, se prosonta la dificultad de encontrar solución para el problema de la educación. Este problema no es de hoy, naturalmente; es un problema tan antiguo como la humanidad. Lo que ocurre es que ahora se presenta agravado por el ambiente en que vivimos y, por consiguiente, en que se desenvuelve la vida del niño. Por una parte, la familia ha sufrido directamente el impacto de las condiciones de vida mo derna. La doctrina económica, materialista del nivel de vida mantiene al padre, y frecuente mente también a la madre, fue ra del hogar. Las relaciones en tre los cónyuges se atienen con frecuencia a las reglas de la guerra fría. La actitud de éstos ante los hijos está informada por el egoísmo de conseguir tran quilidad a todo trance y sin roparar en gastos para evitar mo 1 ostias. Por otra parte, la artificiosi dad de la vida moderna, con sus faltas de espacios donde los ni: ños puedan actuar con cierta libertad, las viviendas pequeñas y poco higiénicas; al abuso do la radio y televisión, que ponen al niño en contacto con proble mas que no son de su mundo; el esfuerzo desproporcionado a quo les obligan los planes do ostudios, son factores que con tribuyan a enrarecer año más 543 ose ambiento en que so forma al niño de hoy. Resulta, pues, que el problema de la educación es uno más do los múltiples que planten la cri sis actual del mundo. Ha habi do naciones que, como Estados IJnidos y Suecia, han intentado resolverlo basándose en moder nas teorías psicológicas, i lo han conseguido? Los resultados alcanzados permiten dudar de ello, aun reconociendo sus mu chos aspectos positivos. La realidad es que el proble ma es de más fondo; es la cri sis total del mundo, provocada el desfase existente entre el vertiginoso avance técnico y el retroceso espiritual que padece mos la que requiere urgente so lución. Encontrada ésta, todos los aspectos parciales del pro blema se beneficiarían, y entro ellos el de la educación. Entretanto, los libros como esto de Enrieo Altavilla, «Pro ceso a los padres», pueden ser útiles. El autor trata de seña lar los errores que más frecuen temente se cometen en la cdii camón de los niños; llama la atención sobre la responsabili dad do los padres y aporta con sejos positivos. Sin tener una gran profundidad, y pese a man tenerse en buena parte a nivel superficial, puede despertar in quietudes en sus lectoras y ayu darles a hacer un examen de conciencia sobre su conducta co mo padres. p01 REVISTA DE AERONAUTICA Áf6mero 320 Julio 1967 - Y ASTRONA UTICA R ESPAÑA Africa, núm. 305, mayo de 1967.— La obra africana sic España, en cifras.— El miniatro de lnfarssaci dn y Turiaeso ca Melilla—Visita a Melilla del señor Fraga Iribarne—Viviendo la Melilla española.— Historia y presencia de las casaciones es pañolas en la nación paleatinesa del Jor dán—Comité técnico Alr:caniata de Pla tas y Provincias Africanaa.—La abra pie’ tdrica del príncipe Naol, de Jordania.---Noticiario—El puesto de Melilla en el Plan de Desarrollo 1064-1967. — Ceetar Noticiario—Melilla: Noticiario—La Gui’ nea Ecuatorial en pleno desarrolln.—Nosi ciario.—ífni: Fallecimiento del gobernadori general don Marino Trovo Larraaroiro.— Noticiario—Sahara: Paa, bienestar y des’ arrollo en esta provincia—Regreso de los peregrinos de La Meca—Noticiario—In formación africana: Desconcierto co Africa Inquietad en el Magreb—Sobre el «cuer no de Africaa.—lnrranquilidsd en el Oeste africano.—Panarama político en el Sur de Africa—Historia de 30 días—Mondo is lámico: El Oriente árabe ante el inci dente bélico sirio’iaraelí.—Fracaso de la O. N. U. en Aden.—Historia de 33 días. China no renuncia a Africa—Tercer Con greso del Partido Comunista Marroquí.— Noticiario económics.—--El desarrsllo eco’ aórtico alr:cano. —— Revista de Prensa. — Psbl icaciones.—Legislaeién, Ar:éss, abril de 1967.—Carta abierta a José Antonio Elsla.—XXII Conferencia de la 1. D. A. L. P. A.—V reunión Aérea Turística. — El V. 5. M. Catión. — HFB-320 eHansa.Jers.—Doroier eñisyser yanta. — B. O. del R. A. C. E. — CASA-212.— Noticiero gráfico.— Velero «SI iisgabya T5 3 .—Sie:::ls:lores dcv liria para Iberia—Noticiarios. E y i S T A Recists Grrseral de Mur:na, tomo 172, mayo de 1967.—Memorias de un agregado naval. — Sobre las primeras instrucciones cine toro la Real Csaspañía de Guardias Mat mas—Más vnbre la isla de Goanaha’ ni—El médico de la Armada ante el convenio de Ginebra—Sobre la alimenta ción del asarinero. — El telorómerrs. — Contrabando por mar—Francia—Estados Unidos—Santa Sede—Sellos de Marina y sellos de huérfanas.—Hiatsrias de la mar. Cuentos mariaeros.—Misceláaea.——Inforrna’ nones diversas—Llamamiento de Pablo VI para el desarrollo del hambre y de la humanidad—El voluntario de Marina en la Guerra de Liberación—El Llibre del Consolae de asar—Noticiario—Libros y revistas, ESTADOS UNIDOS Air Parre, vol. 30, nóss. 5, mayo de 1967.—Decisiones psiíricas para 196768 de lo AFA.—Eaamcn de la potencia aérea en Vietnam y en todas parres.— Un año fructífero1 nos consención elirag. Lo que las Puercas Aéreas están apren diendo en Vietnam—-Nuestros aviadores en Vieream.—Un equipo profesional.— Noche de gala de la Puerca Aérea.—Cónso hacer frente al reto—Innovación tecnoló’ gica.—lnterdicción limitada pero efectiva. iPor qué no mayor nóssero de objetivos en el NorteS—Sistema de Defensa Aérea Nordviernassiga.—Porencial esilirar huasano. Problema sin resolver—Octavo almanaque anual de misiles y del espacio—Bajo ci ojo del espacio: no hay escandire.—Por qué estassos en el espacio—Relación de e:isiles y armas espaciales. 5 El sistema de coasonicacionea R. A. D. A. Situación de la China—Las condiciones de un desarme—Expectativa en Francia. La tracción automóvil por baterías de acomuladares. — lnccrtidoambrcs en Asia Central .—Doo silesios y un fr:sil - INGLATERRA FisgO. Núm. 3027 del 16 de asusto de 1967.—Decisión sobre el aerobós.— Compensaciaoes para la BEA.—Deeisio nes de la BEA sobre el nueva equipo.— El aeroespaeia y el piloto privada.—3For qoé no un helieóprero?—Los aviones li geras en 1967.—La instrucción de vuelo bajo las focas—Los aeropuertos y el pi loto privada.— Cambio de las asientas langables del F-l04 O alemán—El Con trolador Aérea Avangado británica pre parada para la guerra—Revisión del des arrollo en vuelo del F-IlI.—Ojeada a la exhibición aeronáutica de París. — La NASA planea estaciones espaciales de aplicaciones varias. Flighr. Núm. 3028, del 23 de «sargo de 1967.—Alemania vuelve la vista hacia Europa—Ofertas a los mercados occiden’ gales—Un visraga a la reunión de la IFALPA.—Inscruceióa de plaoeadares..., en aviones can matar—El CESSNA T-210 O sCencnriónis.—Vehicolo de col chón de aire—Panca de vista del Gobier no sobre el aerodesligador—gQoé es e1 Hythel—Sopladores para las arrodesligu dores de fabricación doméstica—El BELL X-22 A,—Una flota histórica en la Simyfame.—La industria: Brillante peropec giva.—Los planes de la RAF en detalle.— Noticias del espacio. FRANCIA Ejérrita, núm. 328, mayo de 1967.— Patria, mondo y juventud—Para una bis’ turia de la Guerra de Liberación—Los soceaos de asayo (Earcelooa, 1937) (II). El factor humano en la batalla (Análisis de un hecho histórico) .—La Lagística en la División—La subversión comunista.— Un objetivo. Las Puercas Armadas (II). (Análisis de la manisbra general). La ficha de clasificación para tropa—España de hoy y de mañana—La Sanidad Militar en la Brigada y en la División—Apun tes para la hisroria de la Escuela de Es tado Mayor—Información e Ideas y Re’ flexiones—Desarrollo de la actividad es’ pañola, Energía Nacleas, núm. 46, margo-abril ile 1967.—Estudios previos de lisiviación estática de los lignitos uraníferos de la región de Calaf.—Eurasoa: acaba de cum plir dirg años—La estimación de los da’ ños por radiación en el aeálisis de los riesgsa de las instalaciones nucleares.— Métodos electroanslíricos en Energía Ns: clear.—€ucado de un gas en ciclo cerrado. Vocabulario cientifico.—-Noticiero.—Arriyi’ dades editoriales. Flsps, nóm. 89—-Noticiario—El avión compite ventajosamente con otros medios de transporte—El rolsao alado IL-62.—-Algo más sobre el eCorsair lis. — La L:ilrwaffe.—Albom de fichas.—Asrroná:i’ tira—Los hombres de los sVnsjodsa.— Motores.— Misiles.— Equipos.— Aeroe:o slelianso. — La fuerga aérea aotodefensiva del Japón—Biblioteca aeronái:tica. Air & Casinas, núm. 198, del 5 de mayo de 1967.—La eansrrueción del aero bós.—Mañana el espacia.—Sorveyar 3.— Cuarto Lunar Orbirer langada esra ae:na na.—El satélite «Arhosa.—El «San Mar’ cas 2a.—El UIC-3, tercer sarélise británi’ co—La industria electrónica y los equipos de Oceanografía —Se langa definitivamente el avión de transporte supersónica norte’ americano, — El Westland VG- 13 volará en 1969.—El proyecto A-300 de aerobós. Sexta Conferencia dg IFACTA.—La pri mesa loa anri-colisión.—Rejsveeecirsienro de las fuergas tácticas de los Estados Uni dos.—Aterrigajes automáticos—Las las’ cructares de vuelo sin motar en des::rcerdo con su Federacióa. Ferces Arsieaaes Frsaçuises, nóas. 237, jonio de 1967.—Las actividades espaciales francesas—Las aceras condiciones de la política de armamentos—El sjag:mara.-— Aspectos módicoo de los v::elom «Géminis y del accidente del «Apolos.—La Escuela Superior de Aeroná:i:ica jSup’Aero) en 1967. — gAbre la geonserría variable lo puerta a la polivalencia? Recae de Defermse Nstisssale, mayo de 1967.—La política de armamento a largo plago.—Orgaaigación del transporte aéreo francés—La Gran Bretaña al cEsce de Suega.—Einanciaeión de las inversio nes industriales y comerciales—Africa se busca sus dioses—Reciente evolución en el control de los ejércitos—El Kansomol. 544 Plight. Nóm. 3029 del 30 de caarco de 1967,—La RAF, el F-1IIK y el aero bós.—Neeesidad urgente del avión 211 para la BEA.—Confereneia sobre sistema de eonrral de eráfica aéreo—Ulrima Ii teratnra aeronántica, — Constroerión del RF-4.—El P-11IK en vísperas del gran ti rular—Informe sobre las progresos del slolandera,—Sistema de osígena.—Cohe ces nucleares para las vuelos espaciales. Flighr. Nóm. 3030 del 6 de abril de 1967.—El asunto de la Bristol Sid deley—Bl programa del sTrideac 3a.— Crítica de la palíties de transporte de trspa.—Más eampereneia en Canadá.— Informe desde Madrid (la 22 Conferen cia de IFALPA) —Dispersión del tráfico aérea londinense—La Baeiag en las rutas de Africa del Sur—La aviación y las instalaciones eléctricas—La gran ofensiva del petróleo—Cohetes nucleares para los vuelos espaciales. Flighr. Nóm. 3031 deI II de abril de 1967.—Política y beneficias de la ISOAG.—Perspeccivas para el «Concordes. El asunto de la Brisrol Siddeley.—Lissi taeianes en el tiempo de vnela.—Aers puertas del foturo.—La vida con el eBsmbaram—EI trueno nórdics.—Revisca de las compañías aéreas mundiales (lista de cadas las líneas aéreas del asncdo) -— Orden de construcción del «Black Arnsws. Cohetes espaciales soviéticas—-El «Sur veyor la vista por el «Orbiter 3a.— Problemas del avión franea-brieóm:ico ile geometría variable,