Genaro Vásquez Santana IN MEMORIAM

GENARO VÁZQUEZ SANTANA
In memoriam 1
Gabriel Buendía Arriaga
Cronista del Plantel Nezahualcóyotl
La comunidad del Plantel Nezahualcóyotl se consterna por el deceso del
maestro Genaro Vázquez Santana, quien gozaba de una alta estimación entre
alumnos y maestros.
Nació el 13 de octubre de 1942, en Chilapa, estado de Guerrero; fue hijo
de Lauro Vázquez Lara y de Margarita Santana Camargo. Realizó sus estudios
preescolares en su lugar de origen, y más tarde se trasladó a Iguala, Guerrero,
para estudiar la primaria.
En 1968 llegó a la ciudad de Toluca, y un año después contrajo matrimonio
con la profesora Aniceta Carranza Adame. Simultáneamente, ingresó a la Escuela
Normal Superior del Estado de México, donde concluyó la licenciatura en
educación media, en el área de lengua y literatura. En 1972 ingresó a la Facultad
de Humanidades de la UAEM, donde cursó la carrera en filosofía. Al mismo tiempo,
trabajaba como profesor de grupo en educación primaria y de asignatura en el
nivel secundaria. Más tarde, ocupó cargos directivos en planteles educativos
dependientes de la Secretaría de Educación Pública, donde finalmente se jubiló
en 1999, siendo jefe del Departamento de Telesecundaria.
En 1975 ingresó a la UAEM como catedrático en la Facultad de
Humanidades, en la asignatura de curso de redacción; al mismo tiempo comenzó
a publicar sus ensayos literarios y filosóficos en revistas y periódicos locales, tales
como la revista Tribuna del Estado de México, y en el diario 8 Columnas, de
Toluca; en los cuadernos Sugerencias y ocurrencias, de la Facultad de
Humanidades de la UAEM; en el suplemento dominical "Vitral" del diario El Rumbo,
entre otros. Además, comenzó a ofrecer y promover un ciclo de conferencias con
temas filosóficos, retomando las tesis de Federico Nietzche y Francis Bacon; con
temas antropológicos, de redacción y de literatura; todo esto en espacios
académicos de la UAEM, así como en dependencias y planteles de la SEP en el
Distrito Federal. En este ciclo, que se hizo en todo el país, participaron los 32
estados de la república y se incluyeron temas referentes a diversas disciplinas,
como pintura, oratoria, ajedrez, danza y canto por grupo e individual; con el
interés de motivar a los profesores y alumnos de telesecundaria, en primer lugar, y
a la población de las diferentes partes de la república donde se dio este ciclo.
Fue en 1983 cuando ingresó al Plantel Nezahualcóyotl de la Escuela
Preparatoria de la UAEM, donde impartió la asignatura de taller de redacción; en
ese entonces, estaba como director del plantel el M.C. Guillermo González
Garduño. A partir de esto, el maestro Genaro amplió su labor docente a otros
espacios académicos de la UAEM, tales como la Facultad de Enfermería, con la
UAEM. Sucesivas Aproximaciones de Nuestra Historia. Crónicas de la Universidad Autónoma del
Estado de México. Tomo III. Toluca, México, 2002, pág. 151-153
1
asignatura de taller de lectura y redacción; en el Plantel Dr. Ángel Ma. Garibay
Kintana, con las asignaturas de lógica y corrientes filosóficas.
Por otro lado, su espíritu de superación lo llevó a realizar estudios de
posgrado, los cuales culminaron al obtener el grado de maestro en estudios
literarios, en 1995, en la Facultad de Humanidades de la UAEM. Dentro de la
variedad de intereses, la investigación para realizar su trabajo de titulación
recayó en dos temas que intertextualizaban su labor dentro de la filosofía y la
literatura. Genaro Vázquez utilizó los elementos de la literatura fantástica en uno
de los autores clásicos del género de la literatura del terror: H. P. Lovecraft; y por
otra parte, las cuestiones literarias vistas desde una perspectiva de la estética,
como disciplina crítica y como materia propia de lo filosófico. Finalmente, el
grado de maestría lo obtuvo con el ensayo titulado H. P. Lovecraft, la estética en
la literatura del horror.
Cabe destacar que el pensamiento literario, filosófico y político quedó
plasmado, además de lo escrito en periódicos y revistas, en dos obras: la primera,
De leer y escribir; y la segunda publicada en 1986, Antropología filosófica, que
lleva por subtítulo: "Mito de la raíz del hombre". En esta última, Genaro Vázquez
Santana plantea interrogantes como: ¿Es posible preguntarse sobre el
conocimiento del hombre, sin antes saber qué es el ser? ¿Cuál es la filiación del
hombre en el universo? ¿Por qué la ciencia, el arte, la religión y la filosofía
regatean el sentido y el significado del hombre? En estos cuestionamientos, el
autor trata de aclarar con planeamientos sencillos y con el apoyo de una
selección de textos de autores relevantes en el tema, siguiendo la línea de su
maestro, el filósofo español y también catedrático de la Facultad de
Humanidades, José Blanco Regueira, lo referente a esa filosofía antropológica.
En suma, la obra —palabra y acción, o praxis, como solía decir— del
maestro Genaro Vázquez Santana es vasta. De ello dejó huella dondequiera que
estuvo: en el aula de todos los niveles en los que participó, desde el salón de
clases de educación primaria hasta la de la facultad; en corredores, pasillos y
patios de los diferentes planteles, hasta en los auditorios, salones de juntas y aún el
aula magna y otros recintos universitarios; desde la sencilla clase de una humilde
escuela hasta una magistral conferencia en imponentes auditorios; desde una
nota periodística, un breve apunte, hasta en los libros que escribió y publicó,
Genaro siempre mostró su humanismo, su compañerismo y su alto espíritu de
colaboración y participación en actividades académicas, y en la toma de
decisiones de esto, alumnos, maestros y autoridades fueron testigos.
Es por eso que hoy, a través de este pequeño espacio, los integrantes de la
comunidad del Plantel Nezahualcóyotl expresamos nuestro más alto
reconocimiento a la labor cumplida del maestro Genaro Vázquez Santana, como
miembro del honorable consejo académico, como profesor frente a un grupo,
como compañero de trabajo y, sobre todo, como amigo.
El maestro Genaro falleció el 21 de octubre de 2000; sin embargo, durante mucho
tiempo permanecerá con nosotros, gracias a esa generosidad con la que se
manifestó como humanista y universitario.