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50
Arte romántico en Francia
l). Arte y sociedad. El ¡omanticismo se
inició hacia 1830, pero los intelectuales ya
venían esbozando un cambio de ideas. desde
los inicios del reinado de Carlos X, v aquello
que comenzó como idea libertaria contra la
monarquía absoluta borbónica del hermano
de Luis XVIII, fue luego un verdadero progTama que con la bandera de la libertad impulsó a todas las artes.
f,a revolución de 1830 devolvió a ParÍs
a muchos exiiiados políticos ante la benigna
acogida de Luis Felipe. Este estüo aba¡có
hasta Ia revolución de 1848 para luego im.
ponerse la tendencia del reaüsmo y de los
primeros ismos.
Habíamos indicado que el arte neoclásico
fue esencialmente burgués, por consiguiente,
ante el ímpetu revolucionario lo adoptó también. En cambio, el romanticismo fue esencialmente de la clase media, ya que el propio
Luis Felipe se parangonaba con la burguesía.
Es curioso cómo el arte romántico está
íntimamente ligado a la literaturá y a la
música, formando casi un conjunto perfecto,
a tal grado. que muchos de estos artistas
practicaron varias facetas estéficas.
EI romanticismo tuvo una gran justifica
ción social, pues en esta etapa de la historia
el mundo se iba industri;rlizando y mecanizando a pasos agigantados, y ante los ideales
que se perdían por la imperiosa conquista
económica. reaccionaron estos idealistas buscando un ideal divirrc.
Los románticos pretendieron volver a la
naturaleza, revivir el pasado glorioso, especialmente la Edad Media, época de ideales
caballerescos y en parte también exaltar
la imaginación por lo exótico contra lo calculado y académico del neoclasicismo. El arte
debía estar fuera de toda regla aunque la
forma tenía que ser bella, imaginativa y el
fondo debía inspirar los más profundos
sentimientos. En el neoclásico las grisallas
se habían impuesto, por ello los románticos
le dieron al color suma importancia, hasta
tener casi un valor simbólico t¡acia lo in
fi¡ito.
Los artistas del romanticismo tendrán también dos motores que los impulsen a sus
conquistas estéticas, como el individualismo,
que era en sí una reacción contra la socialización, y la masa que por las reformas
sociales venían contra lo más íntimo del
hombre. Este individualismo se convirtió a
r¡eces en exhibicionismo, pues su personalidad pretendía sobresalir por encima de un
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conjunto anónimo social llegando a tal grado
el lentido libertario y nacionalista siendo
el segundo impulso, al que múltiples artistas
sacrificaron su posición social, en aras cle
la libertad. En este periodo del arte habrian
de separarse por primera vez Io estético. y
lo puramente construciivo, o sea, los conceP
tos modernos de arquitecto e ingeniero. Por
ello la arq uitec t ur a r om ánt ic a llam ada t am bién neogótica cs sólo aparente, pues el material usado será el hierro colado, mientras
quc la piedra serena y etema había sido
el material preferido del gótico medieval.
Esa industrialización a la que nos hemos
referido exigia un arte práctico y funcional
que fuera de acuerdo con las necesidades
econó¡nicas y sociales del momento, pero los
artistas huyendo de la realidad habrían de
crear una estética imaginativa; la propia liberalidad de Luis Felipe y de aigunos jefes
de Estado contemporáneos que comulgaban
con los intelectuales adoptaron finalmente
las tendencias románticas. El gótico triunfó
además porque era un símbolo de independencia económica; como €n el medioevo la
burguesía había triunfado, de igual forma
ocurria en esta nueva era de iiusión. Napr.rleón se había conve¡tido en el símbolo anúlibertario, pero también €n el protector del
neoclasicismo, por ello el estiio ojival
sirnbolizaba todo lo opuesto a lo renacentisia
y gXecorromano, y al fortalecerse la liturgi¿
pura del medioevo y al tomar incremento la
neoescolástica,tuvo esta nue!a tendencia una
magnífica aceptación para el escenaúo religioso en que había de desarrollarse.
Si la poesía medieva-l babla gozado de
espontaneidad y pureza y srrs ternas habían
sido religiosos o naturalistas, lógico es que
los estetas al ¡nirar hacia el pasado de la
Edad Media desearon volverse a inspirar en
esta naturaleza y nuevamente se pondrán
en contacto con ella haciendo bocetos en el
propio campo, que luego en el esfudio, y acompañado de la trraginación convertían en bellas ¡ealidades. El Oriente s€ puso en contacto con Europa, desde Marco Polo y ios
portugueses hasta el siglo xrx, pero a partir
de la mitad de la centuria cuando los occidentales se introdujeron plenamente en el
con tine nte a s iát ic o, as í c om o en es e nuev o
mundo árabe que se descubria a sus ojos,
muy diferente en civilizaciones, sociedades y
economías, con palpitaciones distintas a las
del hornbre occidental. Los románticos fueron grandes vJajeros y al regresar a la parria
traían bocetos de pagodas, mezquitas y harerles que habrían de ser motivo de nuevas
temáticas; si a ello añadimos los héroes como Rolando, Arturo, Sigfrido o el Cid completamos en forma casi total la idea de la
inspiración romántica fundiéndose lo imagi-
nativo del Oriente con la epopeya épica de
Ias gestas medievales.
En el roman
2). Características artlstica$
ticismo los estilos se confundieron, y aunque hemos dado como fecha final hasta
la revolución de 1848, verdad es. que en
algunos países esta tendencia artística continúa hasta bien entrado el siglo xx. En esencia. se inspiran en el arte medieval románico
y gótico, pero también algunas escuelas en
el Renacimiento y €n las artes de los siglos
xvrl y xvr¡r. Un elemento vital en toda la
arquitectura romántica será el hierro, y la
ornamentación será abundante. frero irá ligada a la construcción, aunque en algunos
casos como los pináculos que en el arte ojival del siglo xnr eran prolongación de los
sustentantes, ahora en eI arte romántico son
casi exclusivamente elementos decorativos.
La obra literaria que rnás influyó en esta
tendencia fue el célebre Diccionario de Viollet-Le-Duc, pero también la arqueología medieval tuvo glan alicient€ para estos arquitectos, por ello lo egipcio y lo bizantino tuüeron un revirir en el nuevo espíritu cristiano.
Algunos arquitectos darán más importancia
a lo constructivo que a lo decorativo, y ofros
seguirán Ia corriente inversa, parti¡án de la
teoria de que el arte mediev¿l era policromo;
por ello las formas nrulticolores, los dorados,
los már:nole; jaspeados, los metales relucienres y el vitral ocu¡rarán parte de la decoración. Esta arqultectura ya no sólo fue reli_
giosa, también se harán residencias v hasta
edificios de dcpartamentos con el nuevo sentir artístico, y aun se llega a lo i¡dustrial,
pucs fábricas o estaciones de ferrocarriles
parecen qu€rer erguirse como una catedral
rnedieval. El hierro puede cubrir gtandes
espacios, y el cemento armado transforma la
economía de las estructuras. Es esta época
aquella en la que decíamos que arquiteóto e
Íngeníero casi se confunden.
En Italia el mmanticismo fue una !.t¡elta
aI Renacimiento, mientras que en Inglaterra
y Francia será neogótico.
3). A¡quitectura romántica francesa y de
fin{e¡ del siglo .xrx Jacques lgnace Hi*orfÍ
( 1792-1867). Este arquitecto alemán des_
arrcUó su actividad en Francia, pero su
romanticismo estuvo enfocado hacia la anti_
güedad clásica y sostuvo que el arte grecorromano era policromoj por ello en sus edificios usó la poücromía, como en el Cir<-o db
uerano y eI Circo d.einuierno ( parís ): a veces
usó colores desvanecidos, fue un teórico ra_
cionalista y por ello empleó el hierro en
lámparas y estatuas de fuentes, como la de
la plaza de la Concordia de París. Una de sus
obras más cólebres es la reconstrucción de
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Iglesia de San Dionisio, obra de Eugenio
Manuel VioIIet-Le-Duc
la Estaciún del Norte; para la fachada se inspiró en Grecia, decorada con escultu¡as y pi
lastras jónicas; en su conjunto se observa
una perfecta mezcla de racionalismo y clasicismo. También es suya La iglesia d.e San
Yicente ile Paul en París.
4). Henri Labrouste (1801-1875). Estudió
en la escuela de Bellas Artes de París y sus
obras más célebres son la Biblioteca Nacional y la de Santa Genoveva; esta última se
caracteriza por la estructura metálica donde
las naves son separadas por delgadas co.
Iumnas. Napoleón III le encargó la Biblioteca Nacional que puede considerarse como
la primera obra de la arquitectura moderna:
no obstante, sus conjunios son realmente
eclécticos.
5). Eugenio Manuel Viollet-Le-Duc ( 1814
1879). Las obras literarias de Víctor Hugo
como la de Nuestra Señora de París, fueron
un verdadero impulso para los artistas romániicos que buscaban la espiritualidad medieval. Este maestro viajó por Italia y Francia
estudiando los orígenes del gótico. Su primera obra fte La restauración cle la Magdakna
de Yezelay que le encargó el inspector de monumentos históricos Próspero Merimée cuya
restauración produjo un verdadero escándalo,
pero continuó con sus restauraciones, así ¿a
abadía de Sar¡ Diottisio y la catedral de
N¿¿esfra Señora d,e París, de igual forma las
de Chartres g Reims, que habían quedado
semidestruidas con la Revolución Fraucesa y
las guerras napoleónicas. Este arquitecto
concebía el gótico como algo funcional y defendía la independencia entre lo constructivo y lo decorativo utilizando los nuevos
materiales; como racionalista decía que toda
nhK
\ aci.ona!
forma cuya razón no pueda ser explicada
no puede ser bella.
6). Héctor I¡tueI
( 1810-1881). Durante
eI Segundo Imperio, Francia construye edificios neogóticos, pero también clásicos, dentro de un marcado eclecticismo. Lefuel proyectó dentro de este estilo la unión de las
Tullerías con el f,ouvre y además añadía un
ático en los laterales del patio de Napoleón.
En este mismo Louvre decoró varios patr_
llones y, como defendía la unidad del estilo
artístico, destruyó algunos edificios del palacio para darle esta unidad.
7). Charles Garnier (1825-1898). Se ha
dicho que este arquitecto fue el creador del
estilo Napoleón III. Viajó por Italia, Grecia
y Próximo Oriente, lo que hizo de él un historiador ecléctico, aunque sus tendencias
serán barrocas pero el ornamento será empleado en los espacios apropiados.
Su obra cumbre es La ópera de parls,
abundantísima en la escultura y en la poli-
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La. Opra
d.e París, siglo xtx
cromía; también realizó el Casino ile Monkcarlo, FF-ro La Opera que es eI mayor teatro
del mundo tuvo influencia decisiva en todos
los arquitectos del siglo xrx.
8). Yictor Boltard (1805'1874). Este arquitecto tuvo verdadera obsesión por el material de hierro que supo arrnonizar p€rfectamente con la piedra. Su obra cumbre será
la iglesia tle San Agustín, que iuntamente
con la Estación del Norte de Hittorf dieron
lugar a una de las construcciones más insó
litás del siglo xrx: la Tone Eiffel, inaugurada
en 1969 para la gran exposición de Pais'
La Torre Eiffel, París
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Arquitectura romántica europea
en general
ARQUITECTTJR,A ROMANTICA
ALEMANA Y DE FINALES
DEL SIGLO XIX
1). Gottfried Semper ( 1803-1879). Estudió en Munich y en París fue discípulo de
llittorf; viajó por Grecia e Italia y al regresar
a Alemania aplicó sus principios estéticos a su
arquitectura. Uno de sus primeros edificios
será La Opera de Dresrle, donde almohadillados, pilastras y grupos escultóricos decoran
el conjunto monumental y pesado.
Con Ricardo Wagner interri¡o
en la revolución alemana de 1849, por lo que huvó
a Inglaterra y fue protegido del príncipe
consorte. En sus fratados Semper defendía
la importancia que en la forma tiene el
material, así como el funcionalismo de la
construcción. En Viena realizó los planos del
Burgtheater.
2). Gabriel Seidl. Durante el último tercio del siglo xrx el arte ecléctico se desarrolla
en 1a Baviera extraordinariamente cuando
Luis II ordena la consffucción de sus célebres
castillos; este triunfo se debe en gran parte
a Seidl aI rea-lizar el Museo Nacionol Báaaro
de l\lunich y donde se pretendió unir diferentes estilos, así una loogia prercenacentista, un solón rococó y una capillo romántica.
ARQUITECTURA ROMANTICA
INGLESA Y DE FINALES
DEL SIGLO XIX
3. James Wyatt ( 1746-1813). Este arquitecto se formó en Italia y su prestigio se debió
al Panteún de Ia Oxfmd Street (Londres),
restauró varias catedrales e hizo planos de
edificios neogóticos, entre ellos el Casüllo
de Fonthill AbL>eg, de gran exf,ravagancia
aunque hoy día de él sólo quedan ruinas.
4). Sir Charles Barry (1795-1860). La
mayoria de sus construcciones fueron realizadas en la ciudad de Londres, denno de la
tendencia ecléctica historicista, EI Parlamento en Weshninster es su obra más destacada, aunque en Birmingharn proyectó la
escuela del Rey Eduardo dentro del más
osado estilo Tudor, mienrras que el Parlamenfo cae en el estilo perpendicular.
5). Sir Gilbert Scott (1808-1878). Durante la era victoriana fue el arquitecto más
fanroso; llegó a restaurar y a construir más
de 700 edificios; entre sus obras hemos de
citar el l\fonumento conmemoratiuo de los
núrLíres en Oxford, el Monumento al PrínErlificio del Parlamento, Lond.res, de Charles
Barnl
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L a Sa g r a clo F a n tilia ,
o b r o de Gaurl í (B arcel ona)
cipe Alberto (Londres) y en especial el
Hotel de la estación de San Pantcracio en la
misr¡a capital, donde la exuberancia gótica
llega a su máxima expresión.
ARQUITECTURA ROMANTICA
ESPAÑOLA Y DE FINALES
DEL SIGLO XIX
6). Edr¡ardo Adaro y Fernando Arbos. Eu
España el arte romántico tuvo alg¡¡6s ¡spr€sentantes: así, Eduarclo Ada¡o construirá el
Banco Hispano-americano de Madrid. y el
Banco de Es¡tatia; .\, Fernando Arbos. denfro
del estilo bizantino k:r'antara la Basilica d.e
Atocha y la igiesia de San Manuel y Son
B enito ; to do s est os ec léc t ic os quedan c as i
opacad os a nte la f igur a de G audí .
7). Antonio Gaudi y Cornet (1852-1926).
La formación de este gran arquitecto tiene
sus orígenes en la escuela francesa de Nancy. Su arte será un neobarroco, aunque
dentro del espíritu medieval, pero con un
fondo simbólico y naturalista, Gaudí fue enemigo de .odo plagio, aunque admiraba lo
ojival por lo que tiene de espiritual. La
Sa¡¡rada Familia de Barcelona es un monumento a la fe católica dentro de un surrealismo. La obra se inició en 1883 y hasta l¿r
fecha no ha sido terminada: es un edificio
donde arquitectura y escultura se funden
y donde todo lo real se convielte en imaginativo; así, en la facbada danlnacimiento,
las cuatro torres en flecha, en una altura de
1O0 mctros se perforan como un panal que
quisiera recoger la miel de la fe del pueblo
de Catalu¡ia; sl¡s pórticos nos recuerdan a
Cc¿sa de Ba¡celona, cle Gaudí
497
Reims, pero vistos con otro prisma, y en un
barroco de est¿rlactitas.En la misma B¿rrcelona hemos dc rnencionar al parque Giiell
do¡rde sus edificios tienen volúmenes ondulad os. do nd e las c olum nas inc linadas es t á n
construidas mediante bloques ciclópeos. donde la decoración es extravagante por rnedio
de fragnrentos de azulejos aplicados al hormigón.
S u funci onal i smo
l o l l eva a cabo en l a
casa B otl l ó y en l a casa i ¡Ii l a, donde pretende además, pese a l os nuevos materi al es.
dar un l i ri smo a l a arqui tectura, por el l o se
que "Gaudí
ha di cho
es el úl ti mo
de l os
arqui tectos modernos".
S u obra más audaz
es l a cri pto de S anta C ol oma rl e C e¡ael l ó
con col umnas i ¡rcl i nadas y gran concepci ón
espaci al .
52
Esculturaromántica y de finales
del siglo XIX en Europa
FRANCTA
1). David D'Angers (1778-1856).
Denrro
de su arte se ven fundidas la tendencia neoclásica con la romántica, en especial en
los desnudos. Sus obras más célebres las
encontramos en la ciudad de París. así en
eI Panteón, las esculturas del frontó¿, En
el Louvre El niño con el racimo es una de
sus más destacadas creaciones y en el Museo
de Angers eL busto de Pagani.rui.
2). Franeois Rude (1784-1855). Estudió
en su ciudad natal de Dijon y posteriormente
en París con Cartellier. En Bruselas. al caer
el imperio napoleónico, funda un taller con
sus discípulos, donde imprimió una devoción
hacia la antigüedad. En esta capital realizará
una de sus obras más logradas y que es un
busto de Louis Davi.d; de regreso a la capital
francesa realiza en el Arco del Triunfo uno
de los cuatro relieves, La marcha d"e los aoluntarios (La Marsellesa)¡ ésta es una obra
clásica y realista, pero en el nuevo gusto
de la época; fue criticada por la excesiva
naturalidad. Otras obras son L¿ tumba Cauaignac concebida al estilo ojival (Mont_
martre); también hemos de mencionar la
escultura del mariscal NeA (plaza del ob
¡ervatorio) donde sobresale lo expresivo y el
movimiento. Bonaparte desprtando a la in_
mortalidad (Fixin. C6te-d'Or) se distingue
por el ¡ealismo, en especial el águila que
despierta contrasta con la figura del corso
que peca de cierta frialdad.
3). Antonio Luis Barye (1796-1857). Del
siglo xrx está considerado como el mejor escultor de animales y la técnica del bronce
no tuvo secretos para este artista. En el
Lourtre está el León aplastando una serpiente
donde ya se advierten ciertos rasgos que
tendrá luego el escultor Rodín. En el mismo
museo hay otros grupos como el d,e La paz g
Ia guerra y el Jaguar deaorando a una liebre:
sus temas, además de animalistas, son a veces
mitológicos, así el ?eseo combatiendo a MinotauÍo. Ejerció una gran influencia en el
arte decorativo de la mitad del siglo xrx.
4). Juan Bautista Carpeaux (1827-1875).
Se formó en Italia y.se sintió atraído por la
plástica de Miguel Angel. El Dante de la Di_
vina Comedia infltryó en su obra'(Jgoftrc1 g
sus hijos (Louvre). En Paús la princesa
Matilde, sobrina de Bonaparte, lo protegió
y el artista le hizo un busto donde lo barroco
está por encima de lo académico. Hizo otro
de Charles Garni.er donde ya se vislumbra
el arte de Rodin. La danza (fouwe)
es de
las obras más vigorosaS y sensuales del artista donde se manifiestan la alegría del vivir
y el equilibrio.
A. Jules Dalou (183&1902).
Los esculte
res ingleses tuviercn notable fuerza sobre este
maesrro. En el tnonutnento a Delacroix. de
los jardines de Luxemburgo de parís, triunfa
su naturalismo aunque su escultura tendrá
{ñf*¡á.-
{ra..
"-rÉr
El pensador, ertraordinaria escultura de
Rodin (l\lluseo Radin, París)
Busto de Ia baro¡tesa Sipiere, por Juan
B autist a Carpe au x, escultur a ( F r ancia)
una tendencia social y política, así en el
¡nonurn.ento a los trabajad.ores.
5). Augusto Bodin (1840-1917), La pro
ducción extraordinaria de este genio y sus
diferentes visiones artísticas hacen muy difícil clasificarlo dentro de una escuela, estilo
o tendencia. Por una parte, Rodin es naturalista, simbolista y experimentista; por otra,
tiene lirismo y monumentalidad. El realismo del rnaestro no irnpide que sea un romántico y a la vez eI iniciador de la estética escultórica del siglo xx.
Se inició en la escuela de artes decorativas
y aunque quiso ingresar en la Academia de
las Bellas Artes fue rechazado por la poca
calidad de su dibujo; también fue alumno de
la Manufactura Nacional de Sevres. dedicándose a la dccoración. Por la guerra de
l87O Rodin se estableció en Bruselas donde
colaboró en varias obras arquitectónicas en
compañía de Ca¡rier Belleuse, como lo Bolsa
y el Palacio de las Academias. En un .r'iaje
a Italia quedará impresionado por Miguel Angel y Donatello, así como la escultura del
medievo. Una de sus primeras obras será L¿
Edad del Bronce que provocará un verdade¡o
escándalo en los medios intelectuales. Posteriormente inició L¿ puertd. d.el inf íerno para
La donza, d.e luan
Bautista Carpeaux
501
el Museo de Artes Decorativas, de ellas sobresalen en la primera etapa Adán, El pensador,
Paolo g Francesca, que son figuras, aparte,
como bocetos del conjunto, del relieve; de
igual forma La lujuria o EI beso fueron
conservados primero en función de dicho
proyecto. La sociedad de autores literarios
le encargó su famoso Balzac, que por lo
audaz de su composición no fue aceptada por
los patrocinadores. Los ciudadanos de Calais,
le fue encomendada por el municipio de dicha
ciudad y el éxito de esta obra monumental
fue exrrao¡dinario. Rodin es un artista dramático opuesto al clasicismo y de movimientos atormentados. La muerte y la vida se
entretejen en su obra y la expresión de la
verdad humana alcanza casi un éxtasis en
el vigor de sus manos.
ESPAÑA
1). José Alvarez de Pereira (l?68-1827).
Este escultor osciló entre el neoclasicismo y
el romanticismoi no obstante. v por los temas
históricos que trató, está considerado como
un prerromántico. Su formación la obtuvo
en la Academia de San Fernando, aunque
a veces residió en París y Madrid y por una
estatua que hizo de tema mitológico, Ilamada
Ganimedes (Academia
de San Fernando,
Madrid), fue premiado por Napoleón El grupo de La defensa de Zaragoza que tiene influencia de Canova y que fue realizado en
mármol, goza de justa fama por el aliento
antiguo que le imprimió el artista. Otra obra
suya célebre es EI Apolino (Museo de Arte
Moderno, Madrid).
2 ). Po ncian o Po nz ano ( 1813- 1877) . Durante este siglo xrx la Academia de San
Fernando seguirá imponiendo sus principios,
pero los temas de algunos escultores como
Ponzano derivan hacia el ambiente medieval. El relieve histórico de este artista, que
se conserva en dicha academia, representa
il Reu Alfonso XI con el obispo de Avüa y
tiene grandes calidades narrativas,
3). Antonio Sola. Posiblemente nació a
principios del siglo en Cataluña y murió en
1861. La guerra de independencia española
fue un tema predilecto en los escultores
fieles a su causa nacional, y así, Sola esculpió en mármol el grupo de Daoíz y Velardc
de verdadero acento épico militar; también
dentro de la tradición hispánica, su preciosa escultura de L|íguel de Certtantes,(que hoy
se encuentra en la Plaza de las Cortes en
Madrid ).
4). Ricardo Bellver ( 184s'1924).
Nació
en Madrid, pero pertenecía a una familia de
escultores valencianos. Su primera formación
la recibió de su padre, qu€ era ingeniero.
Posteriormente estuvo e¡t Roma aiistándose
en la línea de los escultores realistas que
¡ecibieron influencias
de los relieves anti.
guos. En la iglesia de San Francisco eI Grande (Madrid) se cons€rva EI entier¡o dz Santa
Inés de gran patetismo realista. En el Parque
del Retiro está su famosa estatua EI ángel
caído y en Ia catedral de Sevilla el maravilloso sepulcro del card.enal Lastra g Cuesta.
5). Jerónimo Suñol (1840-1902), Es uno
de los más típicos románticos españoles y,
aunque comenzó su arte en Barcelona, se
integró su formación en Roma, donde labró
su famoso Dante de características totalmente
nedievales. En San Francisco el Grande tenemos las monumentales estatuas de Sc¿
Pedro g San Pablo y en las Salesas Reales
(Madúd) el monumento fúnebre al General O'Donnell.
6). Agustín Querol (1863-1909).
Es el
más importante escultor realista de España.
En Roma tuvo un éxito sin precedente y en
Madrid fue di¡ector del Museo de Arte Moderno. La técnica no tuvo secretos para él
y en el panteón de Nuestra Setlora de Atocha, labró el sepulcro de Antonio Cdnouas del
Castillo. También esculpió los relieves del
frontón de la Biblioteca Nacional, que carecen de categoría artística aunque en El
ntonuntento a QuetLedo demostró sus cualidades.
53
Pintura romántica y de finales
del sigloXIX en Europa
FRANCIA
l). Gcner¡lld¡des. Juntamente con la pintura neoclásica, se desarrolló en la primera
mitad de esta centuria la pintura romanttca
donde habrá gran colorido, contornos fluidos
y composiciones que aparentemente parecen
no tener orden ni concierto. Los temas serán
nacion alis tas, his tóricos y orien taler pref iriendose el mundo árabe.
2). Pedro Pablo Prud'Hon (1758-1823). Estudió en la Abadía de Cluny y años después estuvo en la Academia de Dijon, hasta
que se estableció en París donde obtuvo una
beca para poder estar tres años en ltalia,
donde estudió a Rafael, Cortegio y Leonardo.
En Roma fue discípulo de Cánova y se interesó por el arte antiguo, en especial el egipcio-romano que ÍnJluyó notablemente sobre
su personalidad. Huyendo de la época del
terror se refugió en Gray donde pintó el cuadro de Mme. AnthonA A sus hijos (Ltión)
que, por su sobriedad y ternura, compite con
los mejores neoclásicos de su época. En
París decoró el palacete de la reina Hortensia,
donde se advierte la influencia pompelana;
los temas son alegorlas a las estaciones, a
las horas, a la riqueza, etc. Con Napoleón
se convierte en un pintor oficial, siendo su
obra más importante el retrato de Ia emperatriz Josefina (Louvre). Este artista se distiguió como pintor de alegorías y en el Loul're se conservan dos: la de La Justicin g Ia
Venganza Ditina persiguiendo al crimen y
El rapto de Psique. En L8L2 era profesor de
dibujo de la emperatriz Ma. Luisa y fue
cuando pintó Venus g Adonis de marar¡illoso
claroscuro. Su arte fue sensual e idealista
y puede considerársele como el principal prerromántico francés, pues su pintura, más que
referente al estilo clásico, es aI estilo egfpcio
alejandrino.
3). Teodoro Gericault
(1791-182/L). Es
otro de los prerrománticos que trabajó en
pintura, dibujo y litografía. Se formó con
Ver¡tet y una de sus primeras obras sería
Oficial d.e cazad,ores a caballo (Louvre) donde ya se vislumbra la afición de este artista
por los equi¡os. Su vida fue terriblemente
inquieta y atormentada, lo que le obligó a
vivir en Italia, donde estudió apasionadamente a Miguel Angel y a Caravaggio. De
regreso a París, pinta su obra más famosa
La balsa de la Medusa (Louvre) que es una
composición emotiva y realista, de gran colorido y bello claroscuro. En Londres pintará
Derby de Epson (Louvre). Su última etapa
pictórica es netamente ¡ealista, con temas de
dementes que habrían de influir sobre la
pintura de Delacroü.
4). Eugenio Delacroix (1798-1863). Es el
más importante romántico francés y, según
parece, fue hijo natural del príncipe de
TalLegrand, lo que le proporcionó el ser
protegido durante toda su edstencia, lo que
lo llevó a una inconformidad. Una de sus
primeras obras será Dantc y Virgilio en los
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s i g l o x r x (h lu se o d e l L o u u r e )
tnfiernos, que es una composición imaginativa y dramática. Su naturalismo üevado al
más alto extremo lo expone en eI cuadro
Las matanzas de Scia. En Delacroix influyeron los literatos corno Dante en cuanto a la
tcmática. pero en cuanto a la técnica, por
su cromatismo, es un antecedente del impresionisrr^o y del expresionislno.
Obra célebre será La muerte de Sardanópalo (I-ouvre) de composición diagonal, mujeres exuberantes y precioso claroscuro al
estilo Caravaggio. En 1830, para conmemorar
la revolución ejecuta el óleo La libertqd dL
rigiendo al pueblo, donde la matrona portando la bandera de Francia guía a las
:lases sociales de la burguesía y pueblo
hacia de Ia democracia.
Posteriormente viajó por España y Marruecos y sus temas serán dirigidos hacia
este último país, como El rultán de Marruecos con su guardia (Toulouse) y Las mujeres
de Argel; estos dos cuadros son de gran
sensualidad y riqueza colorista. También se
distinguió como dibujante y pintor muralista, como las pinturas de la Biblioteca del
Palacio de Luxemburgo. En la técnica de la
cera pintó la Lucha de Jacob con eI dngel,
de carácter simbólico y que se halla en la
iglesia de San Sulpicio (París ).
5). Juan Bautista Corot (1796-1875). Estudió en Bellas Artes. y desde sus inicios
se inclinó por el naturalisrno, en cuando al
Dante y Virgilio, obra de Delacroix, siglo xrx (Museo clel Louare, París)
505
paisaje será el principal exponente del preirnpresionismo. En Roma re3lizó El faro !
eI col.iseo(Louvre) donde demuestra sus calidades espaciales. La lruida a Egipto es el
cuadro que le dio fama en la sociedad francesa y Ios contratos le abundaron confinuamente. En La toilette hay rasgos de arte neoclásico; en cambio, en La mujer de azul (l-ottvre) se aprecian ya ciertas libertades que
tendrán los pintores modernos.
El paisaje más famoso de este artista será
el Campattario de Douai que iuntamente con
la catedral de Chart¡es presentan nuevos
conceptos sobre la naturaleza, al ser envuelta
ésta en tonos plateados y ocres fugaces.
6). Teodoro Rousseau(1812-f867).
Su naturaleza lo presenta como uno de los an.
tecesores de lc¡s impresionistas. Pese a que
su formación fue neoclásica, su arte estará
inspirado en la naturaleza directa, por Io que
fue un viajero incansable de Francia. Uno
de gus primeros cuadros será L¿s casitas de
Granville donde hay casi monocromía por lcs
cielos ambari¡os. La pintura inglesa tuvo
importante influencia en todos los seguidores
del paisaje y Rousseau, que sería el creador
de la escuela d,e Barbizón, túma de la Gran
Bretaña ciertos matices cromáticos que no
van de acuerdo con el a-mbiente francés. así
el Pantano de Yendée, aunque una de sus
mejores obras será Ia ouenida d.¿ los castaños (Loul'J.e) de tonos ocres v maravillosas
luces. Después de la revol.róiór, d. t 848
pinta En la linde iIeI bosque ilc Fontainebleau (l-ouwe ) donde €n un ambiente de
humedad se observa una puesta del Sol, con
pequeílas pinceladas, en un paralso terrenel
y de vibraciones constantes.
7). Teodoro Chassériau (181$1856).
Fue
hijo del cónsul francés en Puerto Rico y de
una criolla y, aunque estudió en París, en s'u
imaginación quedó siempre presente la nostalgia de la isla. Fue discípulo de Ingres y
una de sus primeras pinturas será Szsan¿
en eI baño (Louwe), que ya lo presenta
como un maestro del cromatismo y de la sensualidad.
En LaYenus marina hay sentimiento, gracia y languidez corporal. Su obra cumbre
será Esther aneglándose para ser presentada a Asuero (Louwe ), figura de sonrisa
nostálgica, de bellas formas, de riquezas
cromáticas y carnes vibrantes. El retrato de
Dos her'¡nanas (Loulte)
tiene estilo por el
esplendor colorista y cualidades decorativas
y psicológicas. La influencia oriental la observamos en la pintura Alí-Hamed, califa de
Constantina (Versalles). En el retrato se le
considera como uno de los mejores del siglo
xrx como el que hizo de la Cabawas (Quirrr
per). El éxito que tuvo el Jel califa Alí. lo
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catednal de Chartres, pintad,a por Corot.
.siglo xrx
llevó a Argelia y ahí pudo realizar varios
bocetos que luego serían cuadros famosos
como: Mujer rnore o lnterior de un harén,
A Chassériau se le ha llamado el romántico
que idolatró la belleza femenina y así en el
museo de Avignon está La bañista dortnida,
de línea ondulosa como si el cuerpo de la
mujer ante su propia belleza estuviera sostenido en el aire. Es el máximo representante de la pintura nostálgica femenina,
realis8). Realismo francés. La pintura
ta francesa tuvo su principal desarrollo en
las décadas que van de 1848 a 1870; es una
especie de reacción contra el romanticismo
y los artistas abandonarán los temas antiguos
orientales y medievales, inspirándose en el
mundo de sus coetáneos con fuerza realista.
Estos pintores estudian con gran interés la
pintura barrrcca española que, co¡no Ribera
o Velázquez, habían sido grandes maestros
del realismo.
La política del Segundo Imperio napoleó
nico alejó a muchos artistas del arte oficial,
aunque habrá protegidos; los independientes
a partir de 1863 expondrán en el salón dcsRefuses, mientras que los pensionados seguirán presentando sus obras en el salón
oficial.
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Las dos hermanas,
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siglo xrx (Museo del Lotnre,
Porís)
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507
9). Honoró Daumier (1808-1879). Fue pintor, litógrafo y dibujante; huyó de la temática histórica y académica y su arte habría
de inspirarse en el mundo que Ie rodeaba. Su
naturalismo será puro, sin trabas legislativas, su dibujo se contorsiona llegando a veces a lo caricaturesco, a lo expresionista
Seis meses estuvo en la cárcel por publicar
una caricatura de Luis Felipe, con el rítulo
d.e Gargantú¿. El cuadro de La insurrección
(Washington) presenta a la problemática social e industrial de Francia, a los obreros de
izquierda que no se someten a la monarquía
burguesa.
l0). Ju¡n
Fr¡nclsco ltl.illet ( 18141875).
Su orlgen normando y campesino babla de
¡er decisivo en toda Ia temática de su producción pictórica, que er¡lazan magníficamente con la pintura de género del siglo
xv[r. Desde sus primeras obras caüsó sensación en la cítica y en los medios intelectuales, aungue en los medios burguesee habrá
cierta hosdlidad; con Bur cuadros Los espigadoras y EI Anlehrs (Louwe) s€ consagra
como artista definitivo que aunque los te
mas serán rústicos, hay nobleza en los per
sonajes. El hotnb¡e d.el ozad.o¡t (California)
tiene gtan fuena y mensaje social, es la revolución de la tierra como una alegoría al
tecnicismo agrícola del porvenlr. Años después se dedica al paisaje, asf La primaaera
(Rennes) que ya por su luz es imoreslo
nista.
Corno autor de retratos debemos lnencronar
el de Pauline One (Cherburgo), donde la luz
es diferente a la del periodo del paisaje.
l1). Gustavo Courbert (1819-1877). Deg
de su infancia tuvo obsesión por dibujar los
viñedos que sus padres poseían en Doubs.
En París tuvo gran amistad con españoles
expatriados que le mostrarán estampas y grabados de Ios grandes maestros ibéricos. A
la vez, se sintió atraído por la pintura de
Rembrandt, pero por motivos políticos tendrá
que expatriarse a Suiza. En sus primeras
pinruras hay fuertes tendencias al claroscuro,
como en EI entieno en Ornans (Louwe); en
cambio, en Las señoritas d,el pueblo (Nueva
York) eÉste el sensualismo y lo poético
típicos de su arte. Una de sus obr¿rs más famosas será El talLer, donde a la izquierda
se €ncuentra el pueblo sin fortuna, y a la
derecha los mecenas de artistas, mientras
que en el centro el pintor da unos toques a
un paisaje y tras él se ve una modelo desnuda. Su erotismo lo lleva a pintar Señoritas
a orillas del Sena (Pequeño Palacio de París) y Las durmicntes, donde queda expuesto
el tema sensual que los pintorcs posteriormente lleva¡án a su máxima expresión.
La lauandera, pintada por Daumier, siglo xrx
(úluseo d,e Lmtrtre. París)
El Encuent¡o, composiciótt
de Courbet
(Museo de Mountpellier)
508
2). William Hol-an Hunt (1827-19f 0). Estudió en la Real Academia de Londres y
en l84B fue de los fu¡rdadores de la hermandad prerrafaelista, aunque sus telnas son
históricos como Rier¿zi jura lograr justicia
por Ia mueÍte de su hermano ( Colección
Clark). Su pintura es en esencia naturalista;
en su arte notamos la influencia de los primitivos italianos y flamencos, así la famosísima pintura de La luz clel tnttrtclo (San
Pablo de Londres) donde presenta a Cristo
en las tinieblas de la noche iluminado por
un farol.
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Ofelia
L::
Muerta, de I. E. Millois, siglo xrx
(Galería Tate, Londres)
INGLI\TER.RA
1). Generalidades. I-os románticos ingleses se debaten con los llamados prerrafaelistas que surgieron en el segundo tercio del
siglo xrx. El teórico de esta ccrriente será el
célebre tratadista Ruskin que defendía los
convencionalismos de los pintores italianos
del siglo xvr, por lo que los temas reiigiosos
e históricos deben ser verdaderos dentro
de una técnica analítica y rninuciosa y presentando los hechos históricos taI y como
sucedieron. Estos artistas tienen un verdadero espÍriru nístico y en sus cuadros las
letras P. R. B. (Pre-Raphaelist Brothers) indican la sencillez y la unidad de sus vidas.
EI sueño de Dante, pintur& d.e D. Gabriel
Rossefti (Galería Tate. Londres)
3). John Everett Millais (1829-1896). En
la Real Academia conoció a Hunt siendo
partidario de los prerrafaelistas. En su primera etapa tiende al romanticismo con el
cuadro Pizarro caplurando ul inca del Perú
(Londres), pero luego su estilo se hace de
mayor delicadeza y de fornras mórbidas como
La muerte de Ofelia (Galería Nacional de
Londres) y Lorenzo e Isabela (Liverpool). Al
final de su vida su estilo pierde idealismo
y se inclina por los temas populares.
4). Dante Gabriel Rossetti (182&1882).
Fue hijo de un exiliado político napolitano y
juntamente con Hunt fundó la famosa cofradía. Las iniciales P. R. B. aparecieron por
primera vez en su cuadro La infancia de la
Virgen (Galeria Nacional, Londres). DuranRetroto de Elizabeth Siddal. de
Rosset¿i
madera e ilustró
Goethe.
alguna de Ias obras de
2). Gaspar David Friedrich (1774.1840).
Es el más típico romántico alemán en la
pintura del paisaje; aunque en sus obras habrá un idealismo melancólico. adoró los temas de ruinas, cementerios, tempestades y
mares en crepúsculos: todo ello está saturado
de gran simboüsmo. Su principal cualidad
es el sentimiento espacial, así como la simplicidad de las formas. Entre los cuadros más
famosos debemos mencionar La cruz soI¡re la montaña y en especial: Dos hombres
contemplando Ia Luna (Dresde).
3). Nfred Rcthel (1816-1859). Se formó
en la Academia de Düsseldorf y se distinguió como grabador y pintor; a él se deben
los proyectos de la Sala del Ayuntamiento
de Aquisgrán, donde narra Ia historia del
emperador Carlomagno. Ha pasado al arte
por sus grabados, en especial la serie de
xilografías sobre La danza de los muertos,
de la que sobresalen La nueua danza macabra y \a Muerte ftmiga..
dc Ia
dc
Ia Yirgen, de
La educacion
educacion
Rosseúú¿
te esta etapa la pintura de Botticelli ejerce
sobre él gran fuerza, aunque años después
se separa del grupo y su única preocupación
será pintar a la mujer, asi María Magdalena
en casa de Simón eI fariseo (Cambridge).
Rossetti fue un poeta del arte. aunque su
pintura es rígida debido a la obsesión que
tuvo por la última parte de la Edad Media.
Su amor por Dante lo convirtió en uno de
los mejores traductores; puede considerársele como un manifestante extraordinario
del romanticismo inglés. Su pintura no ha
sido muy entendida por el simbolismo que
encierra y las extrañas combinaciones de
color.
ALEMANIA
l). lüilhelm
Von Kaulbach ( 1805-1874).
Fue uno de los más prolíferos pintores a-lcmanes. En la Academia de Düsseldorf fue
protegido por Cornelius. La obra que lo llevó
a la fama fue un cartón para tapices titulado La botalla de los hunos; arios después
fue director de la Academia de Munich y
recibió la ayuda de Luis I. de Baviera. En
Ia escalera del Museo de Berlín realizó grandes frescos, así como en la nueva Pinacoteca,
de la misma ciudad, donde sobresale por su
tamaño la pintura de La destrucción d.e Ierusalén. Fue buen retratista y grabadcr en
Retrak¡ cle los padres de Runge, cuadro de
Philipp Otto Runge
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510
4). Max Klinger (1857-1920). En esta segunda mitad del siglo xrx persiste en Alemania la pintura idealista y Ia realista, siendo Klinger uno de los principales artistas
de esta segunda tendencia; además, se distinguió como grabador y escultor. La oscuridad en la que ha permanecido su producción se debe al impacto que causaron en su
época los impresionistas. En su paleta se
funden la mística religiosa y la naturaleza
dentro del simbolismo de Ia música, así Ia
Fantasía sobre Brahms de carácter mitológico
y EI juicio de Paris. Sus desnudos tienen calor, aunque no fueron de acuerdo con el espÍritu pictórico de su época.
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5). Adolfo Von Menzel (1815-1905). Como
grabador hizd una se¡ie de dibujos sobre la
historia de Federico II el Grande. Este realista, por su propia estatura, tuvo verdadera
obsesión por los cuadros de tamaño pequeño, así como por las escenas de interio¡es,
que en parte justifican su carácter huraño.
Pintó el mundo que le rodeaba y su técnica
muy frecuente fue el óleo sobre cartón o
aguada. El cuadro Dotningo en eI jardín ile
Ias TuIIeúas nos recuerda €l arte impresio
nista. A mediados del siglo se dedica a pintar personajes famosos de la época de Federico el Grande, como La comida en SansSozci (Berlln)
donde podemos obs€rvar retratos como el de Voltai"e. EI laminado¡
(Berlín) es un lienzo de tema social, aunque el detallismo lo hace caer en cierta frialdad.
6). Max Liebermann ( 1842f 935). Estudió en Berlín, aunque su formación se debe
también a las escuelas de París y Barbizón;
puede considerársele como un seguidor de
Menzel, aunque a él se debe la introducción
del naturalismo y el impresionismo en Alemania. Una de sus primeras obras es L¿s
desplumadoras de ocas (Berlín); esta pintura,
como otras muchas del artista, es de temas
populares, por lo que se le llamó El artista
ile lo feo, ya que los asilos de ancianos, los
orfanatorios y los mendigos fueron temas
comunes para é1.
Fue a finales del siglo cuando recibió la
influencia de los impresionistas y para entonces su pintura tendrá mayor movimiento
y luminosidad, como Los jugadores de polo
(Hamburgo). También su dibujo será más
nervioso y la composición más audaz.
7). Franz Von [,enbach (1836-1904).
Fue
un autodidacta de la pintura en sus inicios,
aunque después estudió en Roma con un
grupo de alemanes. También viajó por España y al regresar a Munich, Bismarck lo
nombró pintor oficial: su obra es copiosa,
pues se cuentan más de 8O retratos del can-
ciller que carecen de psicología, aunqu€ sf
hay en ellos ímpetu de colorido.
BELGICA
Inició
1). Gustavo Wappers (1803-1874).
la pintura romántica en Bélgica y su principal obra la encontramos en el Museo de
Bruselas, El episodio de la Reaoluciún Belga,
donde la tradición de los maestros de los
Países Bajos es patente. Su pintura inclinó
a otros artistas hacia los temas históricos.
2). Henry Leys (1815-1869). Se inició
como idealista, pero posteriormente crea el
realismo belga. AI Museo de Bruselas pertenece su cuadro La declaración, donde están asentados los principios de esta corriente artística.
3). Alfred Súevens (1823-1906).
Con él
triunfó plenamente el realismo y entre sus
obras maestras hemos de mencionar la del
Museo de Bruselas : Tous los Bonheurs.
4). James Ensor (186G1949).
Está considerado como uno de los precursores del
expresionismo. Durante su primera etapa
avanzó en la pintura como ningún otro contemporáneo belga, aunque a partir de este
siglo y en Ios años veintes se dedica a copiar de la naturaleza. Estudió en la Real
Academia de Bruselas, y en su pintura revive algunos aspectos grotescos de la pintura
flamenca. En La entrutda ile Cristo (BruseIas) quiere el artista ser sociólogo, pero consigue más fondo psicológico que social. En
La raga (Bruselas) hay más contenido humano a-l igual que en EI carnaa¡ (Amsterdam), donde las máscaras parecen moverse
como títeres de maúonetas, con personajes
deformes y caricaturescos. Como refratista
hemos de mencionar EL retrato de su pa.dre,
( Bruselas).
5). Henry Evenepool (1872-1899). Se fo¡mó en París, aunque su viaje a Argelia influyó en su concepción pictórica. Se sintió
atraído por Manet y en su pintura hay sentimiento y humanismo. Su cuadro más célebre es El español en París (Gante) de
gran contenido humano.
ITALIA
1). Generalidades. Hacia los años 30 del siglo pasado, los pintores alemanes residentes
en Roma, habían formado el llamado "Grupo
de los nazareno6", que, como los prerrafaelistas íngleses, querían inspirarse en los primifivos italianos anteriores a Sanzio. Estos
511
nazatenos que vivían en el convento de San
Isidoro agruparon a algunos italianos que
crearon el movimiento romántico de la Pe'
nínsula.
2). Francisco Hayez (1791-1882).
Intro
dujo en ltalia la pintura de tema histórico
basándose en los literatos roinánticos, aunque
en sus primeras obras, como L¿s aísperas
sicilianas (Roma), se advierten todavía elementos clasicistas; en cambio, en EL beso
(Milan) el romanticismo ha triunfado plenamente,
3). Giovaui Fattorl (182e19O8).
Este a¡tista es el principal representante del mc
vimiento de los Macchiaioli que en la Toscana se impuso en contra de toda regla neoclásica, creando la llamada pintura realista.
Fattori estudió en la Academia de Bellas Artes de Florencia, aunque luego su pi¡tura
esfuvo basada en Ia mancha colorista y no
en el dibujo que tiene cierto parecido con
los impresionistas franceses. Entre sus pinturas históricas es celebérrima El campo
italiano tras Ia batalla de Majenta que tiene
fuerza poética.
4). Telémaco srgnorini (1835-19O1). t)es.
pués de viajar por varios países de Europa,
fue en Florencia el principal r€presentante
de los Tachistas o Macchiaoli eseribiendo
varios tratados teóricos y con ofros compañe¡os formó parte de la escuela de Pergenrina. Entre sus obras mencionamos la plaza
de Settignano (Crémona) que tiene ciertas in.
fluencias de Degas por la atmósiera y la
composición.
5). Giovanni Segantini (185&1899).
Es
el principal representante de la corriente divisionista que hubo en Milán a finales de
siglo y que se derivaba del neoimpresionismo
francés. Este artista sob¡esalió en el arte
del paisaje, y las colinas de Brianza fueron
para él motivo de continua inspiración. En
su paleta hay colores claros y atmósfera luminosa, en sus obras L¿ aid.a, Ia natural'eza
y La mucrte (Saint Moritz) existe ya un
simbolismo pictórico alejado del neoimpresionismo inicial.
ESPAÑA
l). Generalidades. Al mori¡ Fernando VII,
muchos intelectuales vuelven a la península, son la mayoría emigrados de Francia y
de Malta que traen consigo toda la teoría
del romanficismo, llevando a sus cuadros los
temas populares no sólo de la España de la
pandereta, sino de la problemáLica social.
2). Antonio María Esquivel (1806-1857).
Este artista sevillano en la técnica del re-
Retrato de niña, pintado po¡ Esquiael
(Museo de las Bellas Artes de
Seuílla)
trato compuso el lienzo La lectura en casa
<IeI artista (Museo de Arte Moderno, Madrid),
rlonde pintó a los más distinguidos literatos
rle su época, aunque también ha pasado a
la historia de la pintura por sus variadas y
célebres escenas andaluzas, donde recogió el
alma popular del sur de España.
3). Federico de Madrazo (1815-1894). Su
producción estuvo inclinada hacia la pintura de historia y del retrato, fue director
del Museo del Prado, igual que su padre. En
París estudió con Ingres y en Roma pintó
Las santas rnujeres ¿n ¿l sepulcro, donde se
ve la enseñanza del maestro francés. Es
quízás uno de los más importantes rctratistas del siglo xrx como se ve en el retrato de
Ia condesa de Peña Ramiro.
4). Eduardo Cano (1823-1897). La pintura de historia cobró un gran impulso a
partir de 1856 cuando . se hizo la primera
exposición general de Bellas Artes. Cano pintará cuadros de gran extensión, de dramatismo y teatralidad como el de Crístóbal
Colón en Ia puerba del conaento de Ia Rábida (Museo de Arte Moderno) o el de Don
Alvaro ile Lunq entertado de limosna (del
mismo museo), en el que se advierte gran
sabor medieval.
s12
pletó su formación en ltalia y en sus cuadros
históricos hay verdadera sensibilidad como
El testa¡nento de Isabel la CatóIica (Museo
de Arte Moderno). En este mismo museo se
conserva un hermosísimo desnudo femenino.
( 1846-1921). Sc
7). Francisco Pradllla
formó en su ciudad natal de Zaragoza y posterionnente en San Fernando de Madrid. Dirigió el célebre Museo del Prado y el cuadro
que Io ller'ó a la fama fue el de Doña Juana
la Loca acompaítando el cadáter de su esposo (Museo de Arte Moderno); esta obra de
intenso dramatismo contrasta con la serenidad que supo imprimir al lienzo de La rendición d.e Granada (Palacio del Senado, Madrid ).
8). José Moreno Carbonero (186G1942).
Fue este malagueño otro representante de la
pintura histórica y gran retratista; entre sus
obr¿rs se destacan Ll caballero de la triste
f igura y La conaersión.d.el d.uque de Gandía.
Retrato cle la condesa dc Yilches, obra de
Federico de Madrazo (Museo del Prsdo,
Mad"rid)
5), Antonio Gisbert Es otro de
tores de tipo histórico, pero con un
colorista más moderno. Son célebres
zos l-os comurleros de Castilla en eI
y El fusíIamiento d.e Torrijos.
los pinsentido
sus lienpat.íbulo
6). Eduardo Rosales (1836-1873). Considerado como el principal pintor de historia
del siglo. x¡x. Estudió con Federico de Madrazo
en la Real Academia de San Fernando; comLa aicaría oe Fortong (siglo xtx,
España)
9). Mariano Fortuny (1838-1874), El realisrno pictórico se rnanifiesta en España en
los cuadros de costurnbres y el principal representante es el catalán Fortuny, que inició su can'era corl su abuelo que era escultor
de figuras de cera. Estudió en Barcelona y
después viajó a ltalia. Sus colores. su dibujo
y su Iuz están íntimamente ligados a la pintura del gran Goya. En sus primeras pinturas existe la influencia de ios nazarenos
romanosr como la tela de Ra¡¡¿ónBerenguer
III en el castillo de Foix, donde el sentido
medieval está plenament€ conseguido. Con
motivo de la guerra de Africa la pintura de
Fortuny cambia hacia los colores intensos y
las luces brillantes, como el cuadro La bataIIa de Tetutin (Museo de Arte Moderno de
Barcelona). La pintura del Prado influyó notablemente en el, p€ro en un segundo viaje
al norte de Africa Io exótico y Io pintoresco
del romanticismo se apoderan de su pincel
como en el cuadro Aral¡e nnrcrto. En Roma
vivió en la villa del papa Julio que convirtió
en un museo y después produjo su obra
curnbre La uicaría (Museo de Arte Moderno
de Barcelona). La técnica de esta pintura cs
impresionista y, pese a su tamaño pequeño,
está lleno de vida, pero con luces netamente
andaluzas.
10). Joaquín Sorolla (1863-1923).
Este
pintor valenciano tiene, como Fortuny, tendencias luministas que derivan directamente
de Goya. En los efectos luminosos fue un
maestro y en el paisaje uno de los mejores
pintores de finales del siglo xrx con gran
influencia francesa. Sorolla introdujo en España el impresionismo y en su pintura apreciamos a veces los aspectos sociales.
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Al principio fue pintor de cuadros histó
ricos como EI Palleter dando el qrito cle in
dependencia.
Las telas que le dieron fama fueron las
Cosiend.o Ia uela, PesirnpresionistaJ,
"orno, Niños en la playa y
cadoÍes talencianos,
SoI d.e Ia tcrde (Museo Sorolla, Madrid). No
fue tan afortunado en sus cuadros de temas
folklóricos.
(186f-193f).
11). Santiago Rusiñol
Se
distinguió en la literatura lo mismo que en
la pintura. En París convivió con los pintores de vanguardia de finales de siglo y en
Barcelona fue uno de los apóstoles del movimiento de la pintura moderna. Un üaje a
Andalucla cambió su temáfica pictórica, dedicándose a la pintura de jardines, como E¿
jardín de C*neralife (Museo de Arte Moderno, Barcelona) de rico colorido y contrastes
luminosos.
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Pintura d.e loaquín SoroIIa, siglo xx
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