El útero - amabizia

Anuncio
1
Nuestro útero
Documentación para el Encuentro II El útero El útero forma parte del sistema reproductor femenino. Es un espacio vacío rodeado de tejido muscular. Cada mes, las paredes del útero se preparan para albergar una posible vida. Si el óvulo es fecundado, ese tejido permite el entorno adecuado para que la multiplicación de las células de lugar a otro ser humano; si, por el contrario, el óvulo no es fecundado, éste tejido (que ya no cumple ninguna función) sale del cuerpo. Es lo que conocemos como la menstruación. Parece increíble que a pesar de que cada mes, las mujeres vivamos la menstruación, nos hallemos emocional y cognitivamente tan alejadas de nuestro útero. Desconocemos su aspecto, la naturaleza de su tejido, por qué nos duele la regla… Te invito a ver imágenes del útero http://estudiosobreelutero.blogspot.com Venus de Willendorf. Aprox. 20.000 a de JC. Figurilla con atributos femeninos dedicados a la Gran Madre. en el blog: Así podrás ir creando una imagen mental del útero que te ayudará a conectar con él y a conocer mejor su función dentro de tu cuerpo. El útero es clave en la generación de energía dentro del cuerpo de la mujer por lo que relajarlo y conectarse con él es un trabajo que va más allá del sistema reproductor femenino. Lorem Ipsum Dolor [Asunto] :: [Fecha] Localización del útero Es importante que puedas visualizar mentalmente tu útero. Así podrás relajarlo y hacer ejercicios con él. Dado que el útero está formado por tejido muscular Puedes intentar contactar con él a través de diferentes técnicas. Por ejemplo, coloca tus manos como aparece en la fotografía siguiente. Detrás de la piel que recubre tu vientre está el útero y, a los lados, los ovarios. Puedes enviar calor con tus manos a tu útero. Frota las manos una contra otra hasta que sientas calor y después colócalas como en la fotografía. Otra de las formas de poder llegar a sentir el útero es ir contrayendo los músculos, desde los labios menores, subiendo por la vagina y hasta llegar al cuello del útero. Notarás que has llegado porque la contracción mete la parte inferior de tu vientre hacia dentro. Y la contracción se dirige hacia delante. Puedes repetir varias veces hasta situar el órgano en tu interior. 2 Localizar el útero y sentirlo en nuestro cuerpo es el primer paso. Lorem Ipsum Dolor Issue [#] :: [Fecha] La mujer en el tao Para el taoísmo, las mujeres somos interiormente yang (lo masculino, lo fuerte, lo duro) y exteriormente yin (lo femenino, lo débil, lo blando); exactamente lo contrario que los hombres, quienes interiormente son yin (lo femenino, lo débil, lo blando) y exteriormente yang (lo masculino, lo fuerte, lo duro). La salud El cuerpo, la mente, las emociones y el alma forman un
todo: yo misma. La Organización Mundial de la Salud define la salud como el estado total de bienestar corporal, espiritual, anímico y social. A pesar de esta definición amplia, la medicina y la ciencia occidental sigue centrando sus esfuerzos en un concepto totalmente diferente. En occidente nos ocupamos más de la enfermedad que de la salud. Pero salud también es encontrar el equilibro correcto ante una situación vital concreta. La salud es una cuestión individual. No hay terapias adecuadas para todas; cada una debe escoger aquello que le funcione. Es tu responsabilidad conocerte de manera que puedas utilizar las herramientas adecuadas que te ayuden a alcanzar la armonía que necesitas. Mantak Chia ¿Qué cosas nos debilita a las mujeres? Por ejemplo, asumir el papel de víctima. Parece que la vida nos pasa al margen de nuestra voluntad, nos llega sin que podamos hacer nada al respecto. Y eso nos deja sin fuerzas ni voluntad para vivir aquello que sentimos deberíamos vivir o merecemos. Otra situación que nos debilita es vivir permanentemente atenta a la aceptación exterior. Esperar que todo lo que hagamos o decimos deba de ser aplaudido por todos es, no solo imposible, si no agotador. Elegimos dejar de ser como somos, renunciar a nuestra naturaleza real para contentar a nuestros padres, jefes, compañeros, amigas, hijos… No conocer, ni reconocer la dignidad que todas traemos como seres humanos por el hecho de nacimiento, es abocarnos a sufrir interiormente en un vacío existencial. Las mujeres, como los hombres, estamos investidos de dignidad y grandeza y reconocerlo es fundamental para la armonía psicofísica. La inseguridad interior es causa de dependencias y parálisis. Nos aferramos a aquellas cosas o personas que nos proporcionan lo que necesitamos, dejando así sin desarrollar nuestra propia fuerza interior. Nos aferramos a terapeutas, parejas, hijos, profesiones, estatus, dinero… La desorientación vital que muchas de nosotras padecemos también nos predispone a sufrir enfermedades. No saber qué rumbo tomar en la vida, qué es lo que deseo, cuál es el objetivo que me he propuesto me aboca a la inmovilización, a la pérdida de energía, a no asumir la responsabilidad de nuestra vida y a una insatisfacción personal que puede provocarnos un fuerte desequilibrio interno. 3 2
Lorem Ipsum Dolor [Asunto] :: [Fecha] Ser Mujer Ser plenamente mujer significa no desconectar, reprimir ni disociar las diferentes funciones de nuestro ser: -­‐ Conciencia. -­‐ Pensamiento. -­‐ Sentimiento. -­‐ Emociones. -­‐ Sensualidad. -­‐ Corporeidad. -­‐ Sexualidad. Así que te propongo un ejercicio. Descubramos, como un detective, cómo separamos esta unidad que somos. Por ejemplo, sentimos una intensa emoción y somos incapaces de estar también de forma consciente viviendo esta emoción. O podemos estar en la misma habitación con nuestros hijos o pareja y, sin embargo, mentalmente hallarnos profundamente alejadas de ellos. O podemos estar recibiendo un masaje muy gratificante y, de repente, desconectar de la sensualidad y dejar de recibir el placer que las caricias nos proporcionan ¿a dónde fuimos? ¿en qué pensamos? Cuando hemos vivido situaciones muy duras en la infancia, tendemos a cerrarnos ante las emociones y los sentimientos dolorosos. Lo que hace que queden bloqueados en nuestro interior. Para evitar que emerjan, luchamos durante toda la vida en un pulso invisible que nos agota y debilita. Los profesionales con un enorme estress laboral, terminan disociando sus sentimientos, y ponen toda su energía en el logro laboral. Y los deportistas de élite pueden disociar la necesidad de descanso de su cuerpo de la mente y obligarse así a logros que están más allá de lo físicamente recomendable. Un buen ejercicio para descubrir este mecanismo, es tomar conciencia de cuando se está produciendo la disociación. En una libreta escribe cuándo, cómo y qué partes de ti misma disocias en tu día a día. 4 Non leo:
El útero en el tao El taoísmo describe tres núcleos energéticos en el cuerpo femenino: -­‐ Tan T´ien inferior: útero. Ching Chi: esencia. -­‐ Tan T´ien central: timo o corazón. Chi: vitalidad. -­‐ Tan T´ien superio: cerebro. Shen: conciencia. El Ching Chi es una energía basta y densa que hay que refinar primero para que pueda ser elevada hasta el Chi. La salud y la longevidad son resultado de este proceso. Cuando la energía Ching Chi se refina, se convierte en Chi de manera que recarga y revitaliza todo el cuerpo. Se puede trabajar la limpieza y depuración del útero de forma que pueda ser acumulada energía en su interior. Lorem Ipsum Dolor Issue [#] :: [Fecha] Ejercicios de limpieza del útero Ejercicio 1 Sentada o acostada, cierra los ojos. Coloca las manos sobre el útero. Respira suave y profundamente. Ahora lleva toda tu atención al útero, imagina que puedes estar dentro de tu útero, sentirlo y verlo desde el interior. ¿Cómo está tu útero? Escucha abierta al útero y después e haber recibido la respuesta, dibuja una ligera y amorosa sonrisa en tu rostro. Dirige la sonrisa hacia el útero. Al inspirar ve llenando de luz el útero. Al inspirar introduces luz blanca en el cuerpo, al expirar llevas la luz blanca al útero. Cuando sientas que hay suficiente energía, visualiza dos columnas de energía en las piernas que conectan el útero con el suelo. Descarga a través de las piernas, las energías densas, las tensiones y dolores de tu útero. Ejercicio 2 De pie con los ojos cerrados. Respira suave y profundamente. Toma conciencia de ti misma y tu interior. Frota las manos a la altura del pecho hasta que sientas calor en las palmas de las manos. Después, colócalas sobre el útero. Deja que el calor llene el útero. Respira y observa la reacción del útero. Ejercicio 3 En muchas tradiciones, el cuerpo sutil está formado por chacras o centros de energía. El segundo chacra, llamado Swadhistanha (el chacra sexual) y el quinto chacra o chacra de la garganta llamado Vishuda (chacra de la creación y del poder personal y la auto-­‐afirmación en la sociedad) están unidos. No en vano ambos son centros de creación. De creación de vida en el segundo chacra, de creación de nuestros propósitos, necesidades, soluciones... en el caso del quinto. 1.-­‐ Toma conciencia de la tensión en la barbilla y la mandíbula. 2.-­‐ Relaja conscientemente estos músculos. Si notas que no es posible puedes darte un masaje con los dedos mientras aflojas conscientemente la mandíbula y la barbilla. 3.-­‐ Respira conscientemente mientras observas los cambios operados en tu cuerpo, sobre todo, en la zona del útero. 5 ``` La relajación del útero Practica estos ejercicios con asiduidad, junto con la relajación del útero, y podrás comprobar los efectos beneficiosos que se obtienen. Entre otros: -­‐
Menstruación sin dolor. -­‐
Partos naturales sin dolor u orgásmicos. -­‐
Incremento del placer sexual y orgasmos uterinos. -­‐
Incremento de la energía y vitalidad. -­‐
Mayor fuerza interior. -­‐
Más seguridad personal. -­‐
Mayor creatividad. -­‐
Mayor autoconocimiento. Encuentro de mujeres http://estudiosobreelutero.blogspot.com Si deseas contactar con la autora, puedes hacerlo en: [email protected] Bibliografía: -­‐ PINKOLA Estes, Clarissa. Mujeres que corren con lobos. Barcelona, Ediciones B, 2007. -­‐ RODRIGUAÑEZ, Casilda. La represión del deseo materno y la génesis del estado de sumisión inconsciente. Murcia, S.L., Ediciones Crimentales, 2008. -­‐ PIONTEK, Maitreyi. El tao de la mujer. Barcelona, Ediciones Luciérnaga, 2004. -­‐ GRAY, Miranda. Luna Roja. Madrid, Ediciones Gaia, 1999. 
Descargar