1 103-2008 Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de

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103-2008
Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia: San Salvador, a las doce
horas treinta y cinco minutos del día trece de octubre de dos mil nueve.
El presente proceso constitucional de hábeas corpus ha sido iniciado a su favor por
el señor Pablo Antonio Sánchez Muñoz, quien fue condenado en el Tribunal Quinto de
Sentencia de San Salvador, por el delito de Falsedad Ideológica.
Analizados los hechos y considerando:
I.- El peticionario expone en su pretensión, que el Tribunal Quinto de Sentencia de
esta ciudad, emitió sentencia condenatoria en su contra por el delito de Falsedad Ideológica,
pero es el caso que fue procesado por los mismos hechos en el Juzgado Cuarto de Paz de
esta ciudad, donde se “dejó sin responsabilidad”; sin embargo, en el Juzgado Cuarto de
Instrucción de San Salvador, se le imputó el delito de Estafa Agravada; en razón de ello
arguye “no he sido juzgado de acuerdo a la ley”
Por consiguiente, considera violentados los siguientes derechos: a la seguridad
jurídica, de audiencia, del debido proceso y al principio de inocencia.
II.- Como lo establece la Ley de Procedimientos Constitucionales, se nombró Juez
Ejecutor, quien informó luego de estudiar el expediente, haber observado que el Juez
Cuarto de Paz de San Salvador, en audiencia inicial sobreseyó definitivamente al señor
Sánchez Muñoz por el delito de Simulación de Delito, empero, continuo procesado por el
delito de Falsedad Ideológica, sin embargo, en la etapa de instrucción el juzgador modificó
la calificación del delito a Estafa Agravada y a su vez el Tribunal Quinto de Sentencia de
San Salvador al emitir sentencia condenatoria calificó definitivamente la conducta ilícita
como Falsedad Ideológica; por tanto, afirma, ninguno de los derechos constitucionales del
beneficiario han sido vulnerados.
III.- En el caso sub-iúdice el impetrante alega, que en el Juzgado Cuarto de Paz, se
le declaró “sin responsabilidad” por los mismos hechos que en el Juzgado Cuarto de
Instrucción, se calificaron como delito de Estafa, emitiéndose sentencia condenatoria en el
Tribunal Quinto de Sentencia –todos de San Salvador- por el delito de Falsedad Ideológica;
del reclamo así efectuado, podría inferirse que la restricción de libertad que adolece el
favorecido fue emitida en contravención al principio “ne bis in idem”.
Empero, este Tribunal advierte de la certificación del proceso penal con referencia
número 718-CAS-2007, instruido contra el señor Pablo Antonio Sánchez, por el delito de
Falsedad Ideológica, que del folio 842 al 859 consta interposición de recurso de Casación
con fecha veintidós de noviembre del año dos mil siete, alegándose como sexto motivo:
“errónea aplicación del principio de única persecución contenido en el Art. 7 del Código
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Procesal Penal”, ello sobre la base de sostener que por los mismos hechos que se le
sobreseyó a su representado, posteriormente fue condenado.
De lo anterior se advierte, que previó a solicitarse el presente hábeas corpus, se
interpuso ante la Sala de lo Penal de esta Corte recurso de Casación por el mismo reclamo,
ello significa que se han ejercido simultáneamente dos procesos distintos –uno penal y el
presente constitucional- para aquejar igual agravio, al respecto es dable traer a colación lo
dispuesto en la jurisprudencia constitucional salvadoreña: “De lo anterior, este Tribunal
advierte que en el caso en estudio la peticionaria ha realizado una invocación de los
mismos derechos cuya tutela ha solicitado en el recurso de casación -incoado ante la Sala
de lo Penal-, lo que impide a esta Sala realizar un análisis y determinación de las
infracciones alegadas como justificativos de la lesión al derecho de libertad física de los
favorecidos, y pronunciarse en el proceso de hábeas corpus planteado ante este Tribunal.
En efecto, ante la identidad de las situaciones procesales sometidas a control en este
proceso de hábeas corpus y el recurso de casación respectivo, esta Sala se encuentra
imposibilitada, al presente, de realizar el estudio del fondo del asunto debatido, pues los
hechos que motivan la queja constitucional han sido planteados en un tribunal ordinario, y
debe por tanto agotarse la vía procesal seleccionada, pues lo contrario supondría
desconocer la posibilidad de que se satisfaga el reclamo del interesado dentro del ámbito
del proceso ordinario (…) Si bien es cierto, que el recurso de casación se limita al control
técnico- jurídico de la decisión cuestionada, también lo es que al momento de ejercer dicho
control y advertir la existencia de vulneraciones constitucionales, la Sala de lo Penal está
en la obligación de proteger y restablecer el derecho o derechos lesionados, en virtud de
sujetarse su decisión a lo establecido en el ordenamiento jurídico entero, en cuya cúspide
se ubica desde luego la normativa constitucional. Por lo antes expresado y dado que aún
está siendo tramitado el recurso de casación interpuesto por el defensor técnico de la
ahora favorecida, esta Sala se abstendrá de emitir una decisión definitiva sobre el fondo
del asunto traído a su conocimiento, a fin de evitar sentencias contradictorias acerca de la
misma cuestión controvertida, por lo que resulta procedente sobreseer en el presente
proceso constitucional” (sentencia de hábeas corpus con referencia número 87-2002 de
fecha 27/XI/2002).
Asimismo, en la sentencia de hábeas corpus con referencia número 163-2008 de
fecha 23/02/2009 se admitió: “la posibilidad de aplicar un principio de subsidiariedad
para abstenerse de conocer de un proceso de hábeas corpus cuando se diera cualquiera de
las siguientes situaciones: (1) que existe un proceso previo –de igual naturaleza- sobre el
mismo asunto, y (2) que exista la posibilidad real y efectiva de tutelar los derechos cuya
vulneración se alega en esta sede jurisdiccional en un proceso de naturaleza diferente que
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se éste tramitando al momento de solicitarse la actuación de la jurisdicción
constitucional”.
Precisamente, la última situación apuntada es la aplicable al presente caso, pues no
obstante se han dispuesto diversas vías de protección de derechos, una constitucional el
Hábeas Corpus, y las otras de índole legal, v.gr. Casación, en concordancia a nuestro
sistema jurídico, todo juez ineludiblemente debe aplicar en sus fallos preferentemente la
Constitución; es decir que todo Tribunal -incluidas las restantes Salas de ésta Corte- tienen
la obligación de tener como parámetro de decisión no sólo la ley secundaria, sino también y
de manera primordial la normativa constitucional, situación que permite la protección de
los derechos constitucionales por vía indirecta –utilizando el proceso ordinario para cumplir
tal finalidad- es decir, en el mismo proceso ordinario el justiciable válidamente puede
requerir la tutela de sus derechos consagrados en la Constitución, siendo obligación del
Juez o Magistrado que conoce pronunciarse respecto a ello.
Por consiguiente, ante la identidad del argumento sometido a control en este proceso
de Hábeas Corpus y el recurso de Casación antes mencionado, esta Sala se encuentra
imposibilitada para realizar estudio de fondo del asunto debatido, decisión que atiende a lo
establecido en el artículo 64 numeral 1 de la Ley de Procedimientos Constitucionales, el
cual no obstante, regula tal supuesto para el Juez Ejecutor, es aplicable al caso que nos
ocupa mediante una interpretación extensiva; pues los hechos que motivan la queja
constitucional fueron planteados en primer orden ante la Sala de lo Penal de esta Corte, y
debe por tanto agotarse la vía procesal seleccionada, pues de lo contrario supondría
desconocer la posibilidad de que se satisfaga el reclamo del interesado vía Casación por la
Sala de lo Penal de esta Corte.
Por tanto, a fin de evitar sentencias contradictorias acerca de la misma cuestión
controvertida, resulta procedente sobreseer en el presente proceso constitucional.
Debe quedar claro, que la decisión que se proveerá en este caso no obsta para que
con posterioridad a la decisión que haya dado lugar a la finalización del recurso de
Casación, el cual al momento de plantear este hábeas corpus se encontraba en trámite, se
pueda promover un nuevo proceso de hábeas corpus, siempre y cuando el peticionario
estime mantenerse la violación constitucional alegada.
Es importante mencionar, que el sobreseimiento emitido por este Tribunal, no tiene
incidencia alguna en el proceso penal, más bien establece que en el presente proceso no
concurrieron los presupuestos necesarios para pronunciar una resolución sobre el fondo de
lo cuestionado, es decir que esta Sala ha tenido un motivo inhibitorio para llegar a emitir
una decisión definitiva.
Por las razones expuestas, esta Sala RESUELVE: a) sobreséese el presente proceso
de hábeas corpus a favor del señor Pablo Antonio Sánchez Muñoz; b) certifíquese la
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presente resolución y remítase al Tribunal de procedencia junto con la certificación del
proceso penal; c) notifíquese y d) archívese.
---J. B. JAIME---F. MELÉNDEZ---J. N. CASTANEDA S.---E. S. BLANCO R.--- G.A.
ALVAREZ ---PRONUNCIADO POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LO
SUSCRIBEN---E. SOCORRO C.---RUBRICADAS.
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