El Espacio Iberoamericano del conocimiento

Segundo Foro Regional sobre Políticas de Ciencia, Tecnología e Innovación en
América Latina y el Caribe
Hacia un Nuevo Contrato Social de la Ciencia
La OEI en el
Espacio Iberoamericano del Conocimiento
El Espacio Iberoamericano del conocimiento
En la XV Cumbre Iberoamericana celebrada en Salamanca los días 14 y 15
de octubre de 2005 el Presidente del Gobierno español, José Luis
Rodríguez Zapatero, propuso avanzar en la creación de un Espacio
Iberoamericano del Conocimiento que estuviera apoyado sobre la
educación superior y articulado alrededor de los ejes de la investigación, el
desarrollo y la innovación.
El fin último de tal iniciativa sería posibilitar una mejor calidad y
accesibilidad a los bienes y servicios para los ciudadanos de los países
iberoamericanos, así como incrementar la competitividad internacional de la
región.
El EIC, la universidad, la ciencia y la innovación
El objetivo principal del EIC es el desarrollo de un espacio de colaboración
e interacción en materia de investigación y educación superior, entendidos
como impulsores de la generación de conocimiento científico y tecnológico.
Se propugna también una articulación con el desarrollo y la innovación.
Desde esta perspectiva, los pilares del EIC son la innovación y el desarrollo
tecnológico, por un lado, y la educación superior y la investigación
científica, por el otro.
El EIC permite que los países se pongan metas para impulsar la movilidad
de estudiantes e investigadores, la creación de redes universitarias de
postgrado y la colaboración de investigadores iberoamericanos que
trabajan fuera de la región.
Las Metas Educativas 2021
La OEI presentó a la XVIII Conferencia Iberoamericana de Ministros de
Educación la propuesta “Metas Educativas 2021: La educación que
queremos para la generación de los Bicentenarios”, que compromete un
conjunto de 11 metas generales.
La Cumbre incluyó en su Declaración de El Salvador el siguiente acuerdo:
“Fortalecer las políticas educativas y culturales, tendentes a asegurar el
derecho a la educación de calidad desde la primera infancia, la cobertura
universal y gratuita de la primaria y la secundaria y a mejorar las
condiciones de vida y las oportunidades reales de las y los jóvenes, que
permitan su crecimiento integral para lograr mayores niveles de inclusión y
desarrollo social en nuestros países y avanzar en la consolidación del
Espacio Iberoamericano, en el marco de las Metas Educativas 2021”.
En la Conferencia de Ministros de Educación celebrada en Lisboa el 20 de abril
de 2009 se acordaron las once metas principales.
Meta general décima:
Ampliar el espacio iberoamericano del conocimiento y
fortalecer la investigación científica
•
Meta específica: Apoyar la creación de redes universitarias para la oferta de
postgrados, la movilidad de estudiantes e investigadores y la colaboración de
investigadores iberoamericanos que trabajan fuera de la región.
Nivel de logro. Lograr en 2015 que las becas de movilidad de estudiantes e investigadores en
toda la región alcancen a 8.000 alumnos y en 2021 a 20.000 alumnos por año.
•
Meta específica: Reforzar la investigación científica y tecnológica y la
innovación en la región.
Nivel de logro. Conseguir para el 2015 que el número de investigadores en EJC se sitúe entre el
0,5% y el 3,5 % de la población económicamente activa y que en 2021 alcance entre el 0,7 y el
3,8 %.
Nivel de logro. Conseguir que en 2015 el porcentaje de inversión del PIB en I+D se sitúe entre
0,3% y el 1,4% del PIB (media de la región en 0,93%) y que en 2021 alcance entre el 0,4% al 1,6
% (media de la región en 1,05%).
La inversión necesaria
Como parte del objetivo de impulsar el debate y los acuerdos a nivel
iberoamericano en torno a las metas, OEI acordó con la CEPAL efectuar un
estudio que permitiera estimar los costos financieros de alcanzar las metas
de carácter cuantificable.
El estudio tuvo un doble objetivo:
Por un lado, establecer los costos de alcanzar progresivamente las metas tanto
al año 2015 (como hito de evaluación parcial, coincidente con el año establecido
para alcanzar los Objetivos de desarrollo del Milenio establecidos en la
Asamblea General de Naciones Unidas en año 2000) y luego al año 2021.
Por otro lado, debe calibrar los niveles de logro posibles de dichas metas, en
forma acorde con la realidad educativa de cada uno de los países de la región,
su capacidad para hacer esfuerzos financieros para movilizar recursos
adicionales provenientes de los propios ingresos fiscales, así como la posibilidad
y viabilidad de establecer mecanismos de financiamiento de carácter multilateral.
El costo de la I+D
•
La revisión de los costos de las Metas Educativas 2021 propone aumentar
la inversión en I+D en 0,2% del PIB hasta 2021, situándolo entre 0,13% y
1,31% del PIB de los países en 2015 (media de la región de 0,78% del
PIB), y en 2021 entre el 0,23% al 1,41% (media de la región en 0,88%),
llegando a una cifra de casi US$ 9.000 millones adicionales para la región
en el año 2021.
•
En este contexto, se podría incrementar significativamente el número de
investigadores, desde 670 por cada millón de habitantes a 902.
•
El documento firmado en Brasil fija como fecha para el acuerdo definitivo
de las metas septiembre de 2010, en la Conferencia de Ministros de
Educación que se celebrará en Argentina y, posteriormente, en la Cumbre
de Jefes de Estado y de Gobierno.
El Centro de Altos Estudios Universitarios
Este proyecto quiere aunar los esfuerzos de los países iberoamericanos
con motivo de la celebración de los bicentenarios de su independencia,
dando un impulso a las tasas de crecimiento de una serie de indicadores en
los próximos diez años.
El proyecto no sólo dedica una de las once metas propuestas a esta
dinamización, sino que también se propone incrementar sensiblemente las
vocaciones de la juventud iberoamericana hacia estudios en ciencias e
ingeniería.
Para ello y con el apoyo unánime de los ministros en la XVIII Conferencia
Iberoamericana de Educación se ha creado el Centro de Altos Estudios
Universitarios de la OEI, que coordina la labor en ciencia, tecnología y
universidad de la OEI y que actualmente gestiona el Programa de Movilidad
Académica Pablo Neruda.
Objetivos y actividades del CAEU
Objetivo general
EI objetivo general del Centro de Altos Estudios Universitarios es contribuir, desde la OEI, a la
construcción del Espacio Iberoamericano del Conocimiento y a fortalecer y mejorar la calidad de
los procesos de modernización de la educación, la ciencia y la cultura, a través de redes de
formación e investigación interinstitucionales.
Organización y actividades
Redes interuniversitarias de excelencia
El CAEU promoverá el establecimiento de redes interuniversitarias que coordinen sus
actuaciones en torno a los cursos que vayan a ser desarrollados.
Cada Red estará liderada por una universidad pública iberoamericana y coordinada por un
académico de esa universidad. En algunos casos, las redes podrán estar dirigidas desde
una universidad no pública siempre que corresponda a una entidad académica de
reconocido prestigio y larga trayectoria.
Todas las redes deberán tener asociados cursos de postgrado o programas de doctorado
acreditados como de excelencia por una entidad asociada a RIACES así como proyectos de
investigación de reconocido prestigio. Con ello se promoverá la formación de doctores en
Iberoamérica en las áreas prioritarias de conocimiento.
Objetivos y actividades del CAEU
Escuelas Especializadas
El CAEU tratará de vincular a los docentes e investigadores de las redes de
excelencia en el diseño y formulación a esta oferta formativa. Se crearán las
siguientes escuelas:
Escuela de Educación
Escuela de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación
Escuela de las Culturas
Escuela de la Cooperación.
Soporte tecnológico
A partir del acuerdo alcanzado con la Universidad Nacional de Educación a Distancia
de España, el CAEU dispondrá del equipamiento tecnológico adecuado para atender
los distintos cursos.
La plataforma permitirá la creación de redes y grupos de investigación, así como la
conformación de comunidades profesionales de ex participantes en las acciones
formativas.
El Observatorio Iberoamericano de
Ciencia, Tecnología y Sociedad
El Observatorio fue creado en 2008 con la misión de desarrollar un
Programa de Estudios Estratégicos en Ciencia, Tecnología y Sociedad.
Forma parte del Centro de Altos Estudios Universitarios.
Su objetivo principal es procesar información acerca de las
capacidades, los desafíos y las oportunidades de los países de
Iberoamérica en materia de ciencia y tecnología, así como de sus
aptitudes para el desarrollo de una cultura favorable a la práctica
científica y a la innovación.
Para el desarrollo de su programa, el Observatorio cuenta con el apoyo
de redes de excelencia en los países de Iberoamérica, que hacen
posible un enfoque interdisciplinario en la realización de sus estudios e
informes.
Los estudios CTS
Antecedente: Red Temática de Ciencia, Tecnología, Sociedad e Innovación
de la OEI (1999-2008).
Aquella red fue pionera en Iberoamérica. Tuvo muchos impactos; el más
destacado fue el impulso a los estudios de percepción pública de la ciencia
y la tecnología que se multiplicaron en todos los países.
También propició la enseñanza CTS en las carreras de grado y la escuela
secundaria.
La red también dio lugar al Programa de Postgrado Iberoamericano en el
campo científico de "Ciencia, Tecnología y Sociedad" (Programa CTS).
La ciencia y la sociedad como horizonte
El Observatorio no es un centro de prospectiva, pero trata de indagar
fronteras e intersecciones:
Fronteras de la ciencia y la tecnología.
Fronteras de las demandas sociales.
Trata de enfocarlas como fronteras comunes, como un cruce e caminos
entre la sociedad y la ciencia.
Interpreta que la ciencia es una práctica social y que sólo una sociedad
informada y consciente de lo que la ciencia implica podrá sostener la
práctica científica y la utilización responsable de los resultados de la
investigación.
La idea básica del planteo CTS
La idea básica es que la ciencia es una actividad social,
en un doble sentido:
Como actividad social y culturalmente determinada, que conlleva
valores.
Como instrumento de transformación económica y social.
La información y cultura científica se constituyen en
condición necesaria para la participación ciudadana y la
democratización de la toma de decisiones en ciencia y
tecnología.
El programa
El Programa consta de varios componentes, en el seno de los cuales se
desarrollan determinadas actividades en base a una programación anual.
1. Capacidades científicas y tecnológicas
2. Ciencia y demandas sociales
3. Recursos humanos de alta calificación
4. Percepción pública y participación ciudadana
5. Difusión del conocimiento
Componente 1: Capacidades
científicas y tecnológicas
•
El enfoque de capacidades aspira a determinar la magnitud de los recursos
de que disponen los países de Iberoamérica en ciencia y tecnología.
•
Incluye la trama de relaciones: ¿colaboran los científicos iberoamericanos
entre sí? ¿Hay una red informal que los vincula?
•
¿Cómo juega la identidad cultural en las relaciones entre los investigadores?
•
Con este enfoque se realizó un estudio (ya publicado) sobre la
nanotecnología en Iberoamérica. El estudio construyó un mapa de la
situación actual y tendencias en la I+D en nanotecnología, aplicando para
ello herramientas de inteligencia estratégica basadas la exploración de la
información disponible en las bases de datos bibliográficas y de patentes.
•
En 2009 se está realizando un estudio similar sobre la biotecnología.
Componente 2: Ciencia y demandas sociales
“Durante muchos siglos la ciencia interpeló a la sociedad; hoy la
sociedad interpela a la ciencia”.(Helga Nowotny)
Este componente está centrado sobre la pregunta ¿qué espera la
sociedad iberoamericana de la ciencia?
Se analiza la contribución de la ciencia y la tecnología a la solución de
problemas como la alimentación, la energía, la protección del ambiente y
la salud, entre otros.
Con este enfoque se está realizando un estudio sobre la investigación en
alimentos en Iberoamérica y se realizará un foro internacional sobre el
hambre.
Componente 3: Recursos humanos de alta calificación
•
Este componente está orientado a realizar estudios de la base científica y
tecnológica de los países iberoamericanos, entendida como la cantidad de
científicos, tecnólogos y profesionales en las áreas más críticas del
desarrollo científico y tecnológico, como así también en campos de la
cultura y la creatividad.
•
Se han realizado estudios están focalizados en la formación de posgrado
en varios países, con especial énfasis en los doctorados, e incluirán
aspectos como la movilidad y la migración internacional.
•
El objetivo de esta línea de trabajo es elaborar una primera estimación
regional de los resultados e impactos de estas políticas.
Componente 4. Percepción pública y
participación ciudadana
•
El componente incluye a la sociedad en la tarea de construir una imagen de
la ciencia y la tecnología. El componente se ocupa de observar la cultura
científica en Iberoamérica.
•
A través del trabajo de campo, este componente observa y replica las
distintas maneras en que la sociedad mira a la ciencia y a la tecnología.
•
De este modo, al buscarse respuestas en el exterior, lo que se conoce
desde el interior de estas disciplinas cobra nuevos sentidos y se expande
hacia direcciones antes desconocidas.
•
Bajo esa perspectiva se están realizando en varios países iberoamericanos
encuestas acerca de la percepción que tienen los estudiantes secundarios
de las carreras científicas.
Componente 5: difusión del conocimiento
Este componente se nutre de los enfoques CTS que constituyen
uno de los rasgos tradicionales de la actuación de la OEI en el
campo de la ciencia y la tecnología.
Comprende temas relativos a la difusión del conocimiento científico
y tecnológico en el tejido social.
La innovación da cuenta de los procesos de difusión del
conocimiento hacia el sector productivo. El componente toma nota
de la peculiaridad de los procesos de innovación y vinculación en el
contexto de los países iberoamericanos.
Se analiza también la vinculación de las universidades con su
entorno social.
Sociedad, educación y ciencia como utopía
“Ante esta realidad sobrecogedora que a través de todo el tiempo
humano debió de parecer una utopía, los inventores de fábulas que
todo lo creemos nos sentimos con el derecho de creer que todavía
no es demasiado tarde para emprender la creación de la utopía
contraria.
Una nueva y arrasadora utopía de la vida, donde nadie pueda
decidir por otros hasta la forma de morir, donde de veras sea cierto
el amor y sea posible la felicidad, y donde las estirpes condenadas
a cien años de soledad tengan por fin y para siempre una segunda
oportunidad sobre la tierra”.
Gabriel García Márquez. La soledad de América Latina