TECNICAS DE MUESTREO DE SUELO PARA ANALISIS DE FERTILIDAD René Bernier Villarroel, Ing. Agrónomo M.Sc. Centro Regional de Investigación Remehue, Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA E-mail: [email protected] INTRODUCCION La cantidad de fertilizante que se debe aplicar a un cultivo o pradera es una de las principales decisiones que tiene que tomar un productor antes de establecer un cultivo en el campo o aplicar la fertilización de mantención a una pradera establecida. La decisión que se tome debe asegurar que el cultivo o pradera tenga un resultado exitoso y económicamente rentable. La inversión en fertilizantes representa una parte importante de los costos de producción. Por esto, una fertilización lo más próxima a las necesidades reales de las plantas, contribuirá, por una parte, a que éstas no se vean restringidas en su crecimiento por limitaciones de nutrientes, y por otra, que la inversión en fertilizantes sea sólo la necesaria para obtener un retorno adecuado. Otra ventaja que se presenta, es que la dosis adecuada de fertilizantes asegura la estabilidad del recurso productivo sin provocar efectos no deseados en el medio ambiente. El suelo es un medio natural de donde las plantas obtienen todos los elementos minerales (elementos esenciales) que requieren para su nutrición. Sin embargo, ocurre que por razones naturales, derivadas de la calidad de los materiales originales que dieron formación al suelo, o a situaciones inducidas, como son la extracción por los cultivos o praderas (sin la reposición correspondiente) y las pérdidas por erosión o mal manejo del recurso, éste no puede suministrar los elementos nutricionales en la cantidad adecuada. La explotación agrícola de los suelos ha producido con el tiempo un desbalance entre las entradas y las salidas de algunos nutrientes esenciales para el crecimiento de las plantas. Como consecuencia de esto, se ha producido un déficit en el aporte de los elementos que es necesario suplir mediante la fertilización. Este desbalance es posible evaluarlo, con cierta precisión, a través del análisis químico de suelo. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 MUESTREO DE SUELOS El valor tecnológico del análisis de suelo depende de la exactitud de cada una de las siguientes fases : n Toma de muestras n Extracción y determinación de los nutrientes disponibles n Interpretación de los resultados del análisis n Recomendación de fertilizantes y enmiendas Fig. 1 Muestreo de suelo En cada una de estas fases pueden ocurrir errores, afectando el resultado del análisis y por consiguiente la recomendación de fertilizantes y/o enmiendas a aplicar. Los errores debidos a muestras mal tomadas, son generalmente los más significativos, porque no se pueden corregir en las fases subsecuentes. Una muestra mal tomada puede causar errores de un 50% o más en el diagnóstico de la fertilidad de un suelo. La colección de una muestra representativa es esencial para una correcta recomendación de fertilizantes y/o enmiendas y posibilita la obtención de rendimientos económicos. El muestreo es la fase más crítica de un programa de fertilización en base al análisis de suelo, por los siguientes motivos : Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 n el suelo es un cuerpo heterogéneo en sus propiedades químicas, n la heterogeneidad química del suelo es acentuada por las prácticas de fertilización, encalado y por los cultivos, n desconocimiento de los principios del muestreo de las personas que lo realizan, n insuficiente información complementaria para la interpretación de los análisis, como : fertilización anterior, encalado, rendimiento de los cultivos anteriores, topografía, etc. MUESTRA REPRESENTATIVA Muestra de suelo se define como aquella cantidad de tierra compuesta por varias porciones de igual tamaño (submuestras), obtenidas de diversos puntos del área que se desea analizar y mezcladas en forma homogénea. Se conoce que los suelos son cuerpos heterogéneos, debido a que sus factores de formación varían de sitio en sitio, y dentro de cada sitio, imprimiéndoles características diferentes, que deben ser consideradas en el muestreo. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 EQUIPO DE MUESTREO El equipo básico de muestreo incluye un balde limpio, bolsas plásticas, barreno de tubo, barreno de fertilidad o pala ( jardinera, recta ). Para la selección de las herramientas que se utilizarán debe considerarse la textura del suelo, ya que algunas de las herramientas señaladas no pueden ser empleadas, por ejemplo en suelos muy arenosos o muy arcillosos. Para texturas medias es más aconsejable el uso del barreno de fertilidad, pudiendo ser reemplazado por el barreno de tubo o el barreno holandés, que cuentan con cuchillas cortantes, especiales para texturas finas. La pala jardinera tiene un amplio rango de texturas en las cuales puede ser utilizada, pero tiene el inconveniente de hacer más lento el muestreo al realizar una excavación para cada submuestra. Fig. 2 Elementos de muestreo Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 TOMA DE UNA MUESTRA REPRESENTATIVA Una muestra representativa es aquella que mejor refleja las condiciones de fertilidad de esa área específica. Para que exista representatividad, la muestra de suelo debe ser compuesta de varias submuestras de igual tamaño. El número de submuestras por muestra está dado por la variabilidad que presenta el nutriente más móvil dentro de los que se desea analizar. Estudios realizados en la Décima Región, señalan que dicha variabilidad se compensa con 20 a 25 submuestras por unidad de muestreo. El primer paso para proceder al muestreo es subdividir el área en unidades de suelos homogéneos (cartografía). En esta subdivisión se debe considerar el tipo de suelo, topografía, vegetación e historia del manejo previo. Los suelos se pueden diferenciar por su color, textura, profundidad, topografía y otros factores. Si todos estos factores fueren homogéneos, pero existe una parte del área que ha sido fertilizada, ésta última debe ser muestreada por separado. Las unidades de muestreo deben separarse y representarse mediante un croquis de ubicación del predio, teniendo en cuenta características tales como pendiente, cultivos o manejo anteriores, textura, laboreo, antecedentes históricos, características del drenaje, etc. 4 3 2 1 Fig. 3 Separación de unidades de muestreo Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 La unidad de muestreo debe tener una superficie no mayor de 20 ha, dependiendo de las características de homogeneidad presentes. En los suelos de la Décima Región, que presentan una marcada variabilidad espacial, topográfica y de fisiografía hacen recomendable reducir el tamaño de la unidad de muestreo a no más de 10 ha. para asegurar una adecuada representatividad. Por cada unidad de muestreo existirá una muestra compuesta. Una vez establecida la unidad de muestreo, se procede a recolectar las submuestras recorriendo la unidad establecida en zig zag o en cualquiera otra forma sistemática cada cierta distancia. Fig. 4 Muestreo en “X” y en Zig Zag. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 La cantidad de suelo a ser utilizada en el análisis es de apenas 5 a 10 gramos, de acuerdo al esquema que se presenta, por lo tanto es necesario seguir rigurosamente todas las instrucciones para obtener muestras representativas. Peso promedio de la capa arable de una hectárea : 2.000.000 kg. v Peso de la muestra enviada al laboratorio : 0,5 kg. v Peso de la muestra analizada en el laboratorio : 0,005 - 0,01 kg. Considerando que normalmente una muestra de suelo compuesta corresponde de 10 a 20 ha. la representatividad de la muestra enviada al laboratorio se torna en un factor de suma importancia para una correcta recomendación de fertilizantes y/o enmiendas. Para iniciar el proceso de muestreo se debe eliminar la vegetación superficial en todos los casos, independiente de la herramienta que se utilice. En el muestreo con pala se debe efectuar una excavación en forma de “ V “, de 15 a 20 cm. de profundidad, impidiendo que el suelo se desmorone. Se saca una tajada de 3 cm de espesor. Se corta un trozo de aproximadamente 3 cm de ancho por todo el largo de la tajada, en el sector central de la pala, eliminando los bordes laterales mediante una espátula o cuchillo. Posteriormente se deposita dentro del balde para ser mezclada con las otras submuestras. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Fig. 5 Muestreo con pala recta Al utilizar la pala es importante que la cantidad de tierra obtenida en cada punto sea similar de modo de que todos los sectores del área muestreada queden igualmente representados. Fig. 6 Muestreo con taladro y pala recta. Unas vez colectadas todas las submuestras, éstas se mezclan en el balde (o saco limpio). Después de homogeneizar la muestra de suelo, se extrae una pequeña cantidad de tierra y se introduce en una bolsa plástica nueva, que debe tener una capacidad de al menos medio litro, para su posterior envío al laboratorio. En los potreros existen sectores que no se deben muestrear por no corresponder a la generalidad de la unidad de muestreo, evitando así afectar la representatividad de la muestra. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Fig. 7 Lugares donde no se debe tomar muestras de suelo. Se debe tener especial cuidado de no muestrear cerca de acequias, drenes o sectores inundados, cerca de la entrada de potreros o de construcciones, sectores en que se han acumulado residuos vegetales, tales como silos, parvas, etc. No colectar muestras sobre fecas o manchas de orina. Es recomendable distanciarse unos 10 metros de cercos vivos, árboles u otras barreras. EPOCA DE MUESTREO En general, las muestras de suelo pueden ser colectadas en cualquier tiempo. Sin embargo, por razones prácticas es recomendable tomar las muestras 1 ó 2 meses antes de la siembra de cultivos anuales. En cambio, para praderas es aconsejable colectarlas, por lo menos, 1 mes antes de la fertilización de otoño o primavera. Es necesario tener en cuenta que el proceso de tratamiento de la muestra de suelo en el laboratorio, desde que es recepcionada hasta que se emite el informe y la recomendación, puede tardar hasta 15 días. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 PROFUNDIDAD DE MUESTREO Las muestras de suelo para cultivos anuales se obtienen a una profundidad de 0 a 15 ó de 0 a 20 cm, es decir, explorando la fertilidad de la capa arable. Para praderas, la profundidad de la zona de muestreo debe ser, como máximo, de 0 a 10 cm, puesto que a esa profundidad se registra la mayor densidad y actividad de raíces. Fig. 8 Diferentes profundidades de muestreo. ENVASADO Y ALMACENAJE DE LA MUESTRA DE SUELO Una vez mezclada y homogeneizada, la muestra de suelo debe ser envasada en una bolsa de polietileno nueva, con el objeto de evitar la contaminación de la misma. Cualquier elemento extraño a la muestra de tierra puede inducir a errores en el análisis químico, con la consecuente falla en su interpretación. La muestra envasada (claramente identificada) debe ser remitida con prontitud al laboratorio para ser estabilizada y procesada. El almacenaje de la muestra en condiciones de temperatura ambiente o superior y con la humedad que contiene, puede inducir el proceso de incubación, lo que provoca importantes transformaciones en la composición química de la muestra. La materia orgánica presente en los suelos, en especial en la Décima Región, en condiciones de humedad y temperatura determinadas, es atacada por microorganismos provocando los procesos señalados. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 IDENTIFICACIÓN DE LA MUESTRA Cada muestra compuesta debe ser perfectamente identificada, en términos de su procedencia, fecha de colecta, profundidad a la cual fue colectada, potrero, sector y superficie que representa. La muestra debe ir acompañada por la hoja de identificación, cuya información ayudará a la interpretación y recomendación producto del análisis químico. CONSIDERACIONES FINALES El análisis químico que se realiza a la muestra de tierra con fines de diagnóstico de la fertilidad está basado en métodos convencionales que han sido probados y aceptados por los laboratorios de nutrición vegetal. Dichos métodos, en general, consisten en el uso de un reactivo químico que simula la extracción que hacen las plantas de un determinado nutriente. Por tratarse de la simulación de la realidad, el resultado analítico es sólo un índice de la “ disponibilidad “ de un nutriente, por lo tanto no refleja exactamente el estado de éste en el suelo. Dichos índices se agrupan en categorías o rangos , yendo de muy bajos a muy altos, dependiendo del valor del análisis. Según el extractante que se utilice, la determinación analítica arrojará diferentes valores, los que deberán ser calibrados con la respuesta de los cultivos o praderas, en condiciones de campo. Como el análisis de suelo se utiliza para conocer el estado de la fertilidad de un sector o potrero para determinar la cantidad de fertilizante que se va a aplicar (y comprar), lo que significa un costo muy importante para el cultivo, se deberá seguir cabalmente las instrucción para obtener una muestra representativa. Las demás fases del proceso dependerán de la eficiencia de los laboratorios de diagnóstico nutricional. Hay que tener en cuenta que los análisis no corrigen los errores que se han cometido durante la colecta o acondicionamiento de las muestras. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 BIBLIOGRAFÍA Bernier, R.L. 1979. Muestreo de suelos para análisis químico. Boletín Técnico N° 28 (17 Re). Estación Experimental Remehue. INIA. 12 p. Bernier, R :L . 1980. Muestreo de suelos con pradera para análisis químico. XXXI Jornadas de la Sociedad Agronómica de Chile. Facultad de Agronomía, Pontificia Universidad Católica de Chile, Santiago, Julio - Agosto 1980. Bernier, R :L : 1982. Profundidad de muestreo de suelos para determinación de la fertilidad actual en praderas permanentes. VII Reunión Anual de la Sociedad Chilena de Producción Animal. Facultad de Ciencias Agrarias, Universidad Austral de Chile, Valdivia, Noviembre 1982. Bernier, R:L : y N.G.Teuber. 1986. Relaciones entre tipos de praderas y fertilidad de suelos en la Décima Región. XI Reunión Anual de la Sociedad Chilena de Producción Animal. Facultad de Agronomía, Universidad de Concepción, Chillán, Octubre 1986. Etchevers, J.D. 1991. La función del Laboratorio de Diagnóstico de las necesidades de fertilizantes. Enfoques tradicionales y modernos del análisis químico de suelos. Adijal XIV (44) : 21 - 27 p. López Ritas, J. Y J. López Melida. 1990. El diagnóstico de suelos y plantas. Mundi-Prensa, Madrid, España. 363 p. Peck, T :R : & W. Melsted. 1973. Field sampling for soil testing. p 67 - 75. In : Walsh, L. M. and J.D. Beaton (ed). Soil testing and plant analysis. Soil Science Society of America. Madison, Wisconsin, USA. Rojas, C. y N. Rodríguez. 1997. Manual de muestreo de suelos para análisis de fertilidad. Departamento de Protección de los Recursos Naturales Renovables, Servicio Agrícola y Ganadero. Ministerio de Agricultura. Santiago, Chile. 23 p. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 FORMULARIO DE ANTECEDENTES ANALISIS DE SUELO A. IDENTIFICACIÓN IDENTIFICACIÓN AGRICULTOR Nombre : Dirección : Comuna : Nº LABORATORIO _____________ R.U.T. Fono : Fax : Casilla : e-mail : IDENTIFICACIÓN DE LA MUESTRA Potreros : Prof. de muestreo : Superficie de muestreo : cm. Hás. B. ANTECEDENTES AGRONÓMICOS TIPO SUELO TOPOGRAFÍA Trumao [__] Plano [__] Rojo Arcilloso [__] Transición [__] Ñadi [__] Terraza o Vega [__] Predio : Localidad : Comuna : Provincia : Fecha Muestreo : __ / __ / __ Fecha Recepción : __ / __ / __ Envío Resultado : [__] Correo [__] Bus [__] Fax [__] Retira personalmente PROF. DEL SUELO Menos de 60 cm. [__] Bueno DRENAJE [__] Loma Suave [__] Entre 60 y 100 cm. [__] Regular [__] Loma Fuerte [__] Más de 100 cm. [__] Malo [__] C. INFORMACIÓN DE SIEMBRAS CULTIVO ANTERIOR Cultivo : Rendimiento : CULTIVO PROXIMO Cultivo : FORMA DE SIEMBRA: [__] Establecimiento Rendimiento Esperado : [__] Regeneración Fecha de siembra : Especies: Fecha Establecim : D. INFORMACIÓN DE PRADERAS TIPO PRADERA [__] Pradera Naturalizada [__] Pradera Mixta [__] Alfalfa Establecida ( ___ años) E. ANALISIS REQUERIDOS [__] FERTILIDAD DE RUTINA Fósforo Olsen, Potasio int., Mat. Orgánica, pH agua, pH cloruto de calcio. ESTABL/REGENERACIÓN PRADERAS MANEJO PRADERA Fertilización de Mantención: [__] Si [__] No [__] Solo Año Anterior [__] Dos Ultimos Años [__] Tres o Más Años [__] COMPLETO Fertilidad de rutina + Calcio, Magnesio, Sodio y Aluminio Intercambiables, Suma de Bases, Saturación Aluminio Azufre [__] COMPLETO + MICROELEMENTOS Completo + Boro, Hierro, Manganeso, Cobre, Zinc. [__] INDIVIDUALES _ P-Olsen _ M.O. _ N min _ K int. _ Ca int. _ Mg int. _ Na int. _ Al int. _ pH agua _ pH CaCl2 _ S-SO4 _ Boro _ Cu _ Zn _ Mn _ Fe F. OBSERVACIONES : Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 ANALISIS DE SUELO METODOLOGIA E INTERPRETACION René Bernier Villarroel, Ing. Agrónomo M.Sc. Centro Regional de Investigación Remehue, Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA E-mail:[email protected] INTRODUCCION La actividad agrícola, en la actualidad, ha pasado de ser una forma de vida a una actividad de carácter empresarial y comercial, lo que ha provocado un serio deterioro del recurso suelo, y particularmente de su fertilidad, a través de una degradación de las propiedades físicas, q uímicas y biológicas de éste. Como una forma de contrarrestar la pérdida de capacidad de suministro de nutrientes esenciales para el crecimiento y desarrollo de las plantas, por degradación de la capa superficial de los suelos, ha sido necesario recurrir a la aplicación de productos orgánicos e inorgánicos portadores de dichos nutrientes. Cabe destacar que junto a los beneficios derivados de esta práctica, en algunos casos se ha abusado de ella, lo que ha traído como consecuencia algunos problemas de contaminación del medio, particularmente de cuerpos naturales de agua. Sin embargo, para producir las cantidades de alimentos que la humanidad reclama no se puede dejar de utilizar los fertilizantes, lo que debe hacerse en forma racional, observando con atención los factores económicos que están involucrados. Todas las plantas requieren de elementos nutritivos para completar su desarrollo normal. Estos elementos se denominan esenciales, y deben estar disponibles para los cultivos cuando éstos los requieran. En general, se estima que el nitrógeno (N), el fósforo (P) y el potasio (K) representan probablemente el 90% de los problemas nutricionales del mundo, apareciendo con menos frecuencia condiciones deficitarias de los otros nutrientes. Antes de decidir si es necesario aplicar un fertilizante y cuánto hay que aplicar, en caso que haya que hacerlo, es preciso demostrar que el suelo no es capaz de proporcionar un determinado nutriente en cantidad suficiente para alcanzar un rendimiento cercano al máximo posible en un agrosistema dado. La función que debe desempeñar el profesional o técnico de terreno es diagnosticar la condición de suministro de los elementos esenciales del suelo y establecer las Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 estrategias y soluciones para que el nivel de dichos nutrientes sea suficiente para el crecimiento óptimo de los cultivos. Para cumplir con el diagnóstico se puede recurrir a diferentes métodos, entre los que destacan el análisis foliar, ensayos biológicos y el análisis de suelo. ANALISIS QUIMICO DE SUELOS El análisis químico de suelos consiste en extraer, mediante una solución química, una fracción del total del elemento esencial para el crecimiento de las plantas y luego medir la cantidad solubilizada con procedimientos químicos adecuados. Para que esta fracción tenga un significado agronómico, es preciso que represente una proporción de lo que la planta requiere. No todos los extractantes existentes para evaluar un nutriente cumplen con esta condición. Lo adecuado de uno u otro depende de la forma en que el nutriente se encuentre en el suelo, de la forma en que se haga el análisis y del cultivo con que se trabaje. El método para seleccionar un determinado extractante se denomina CORRELACION, debido a que originalmente se utilizó esta técnica estadística para relacionar la cantidad extraída en el laboratorio de un nutriente determinado, con la cantidad del mismo absorbida por la planta o con algún parámetro de crecimiento. La interpretación agronómica del resultado de un análisis químico utilizado con fines de diagnóstico de la disponibilidad de nutrientes para las plantas, requiere de otras informaciones adicionales, como la relación entre el resultado analítico y el porcentaje del rendimiento máximo que es posible alcanzar con ese nivel de disponibilidad, y la respuesta que se puede esperar al aplicar un fertilizante que contenga el elemento analizado. Este procedimiento se denomina CALIBRACION y está fundamentado en numerosos experimentos de campo, sobre diferentes suelos, para diferentes elementos nutritivos y para diferentes cultivos. A raíz de la puesta en marcha del Programa de Recuperación de Suelos Degradados, por el Ministerio de Agricultura, que dentro de su reglamentación establece el uso del análisis de suelos para postular a algunos subprogramas, fue necesario normalizar las metodologías analíticas utilizadas por los laboratorios de suelos del país y establecer un sistema de evaluación y posterior acreditación de los mismos. Como resultado de dicho proceso se acreditaron 17 laboratorios de suelos en todo el país, de los cuales 4 corresponden a la Décima Región. El sentido de la acreditación es que todos los laboratorios registrados bajo esta norma ofrecen la misma confiabilidad en sus resultados, por lo que resulta indiferente la utilización de uno u otro servicio de análisis. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 En el Laboratorio de Servicio de Análisis de Suelos de INIA Remehue (Osorno), acreditado para el Programa de Recuperación de Suelos Degradados, se deben cumplir la siguientes etapas: - Recepción de la muestra de suelo. Secado al aire. Tamizado a través de un tamiz de 2 mm. Análisis químico propiamente tal. Recepción de la muestra. La muestra de suelo que será sometida a análisis químico con fines de diagnóstico de la fertilidad debe ser colectada de acuerdo a las estrictas normas detalladas en el capítulo anterior, observando cuidadosamente todas las etapas. Un vez cumplida la etapa el muestreo, la muestra de suelo es enviada al laboratorio respectivo en donde es recepcionada y registrada cuidadosamente, anotando todos antecedentes que describen el sitio de muestreo y su entorno, datos muy importantes al momento de la interpretación y posterior recomendación de fertilizantes. Cada muestra debe ir acompañada de un formulario debidamente llenado con los antecedentes que se solicitan en él. Secado al aire. Debido a que el suelo es un complejo de factores químicos, físicos y biológicos que interactúan en forma muy dinámica, es necesario estabilizar la muestra de suelo recepcionada, de modo de que no se produzcan transformaciones indeseables, alterando la composición original de dicha muestra. Para ésto se somete al secado (se debe moler si es necesario) al aire ambiente, forzándolo levemente para acelerar el proceso. De acuerdo a la humedad de la muestra, esta etapa puede durar hasta tres días. Tamizado de la muestra Los métodos convencionales de análisis de suelo establecen que la extracción de los nutrientes se debe realizar poniendo en contacto la tierra, cuyas partículas deben ser de un tamaño inferior a 2 mm, con la solución química correspondiente. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Análisis químico El reglamento que regula el Programa de Recuperación de Suelos Degradados establece que para la aplicación del subprograma de fertilización fosfatada se requiere del análisis de suelo que establece el nivel de disponibilidad de dicho nutriente. En cambio, para aplicar el subprograma de enmiendas calcáreas, se requiere conocer la acidez del suelo a través del pH al agua y/o el porcentaje de saturación de aluminio, para lo cual es necesario determinar el pH, los contenidos de bases de intercambio (calcio, magnesio, potasio y sodio) y el contenido de aluminio intercambiable. Con estos parámetros de establece el grado de acidez actual del suelo. INTERPRETACION DEL ANALISIS DE SUELO El dato que surge del análisis químico de un suelo no tiene sentido agronómico por si mismo, porque su magnitud está asociada directamente con la solución extractante utilizada y no necesariamente con los contenidos reales de elementos esenciales en el suelo. Es por esto que es necesario contar con información adicional del entorno, del clima, del cultivo, etc. Esta información se obtiene a través del procedimiento de la CALIBRACION realizada en terreno. La calibración se realiza fundamentalmente en tres etapas diferentes, en las cuales se van relacionando los análisis de suelo con los rendimientos y con las dosis de nutriente aplicadas. Rendimiento relacionado con el análisis de suelo. El resultado analítico va a tener diferente significado agronómico si se trata de un cultivo de cereal, de un cultivo de chacra o de un cultivo industrial. Esto se debe a que las plantas difieren en sus requerimientos nutricionales, por lo tanto cada especie tiene diferente demanda de un determinado elemento para completar su normal desarrollo. Así un mismo resultado analítico puede tener distinta interpretación agronómica. Lo mismo puede ocurrir entre diferentes suelos, toda vez que éstos presentan características químicas y físicas propias que hacen que la dinámica de los nutrientes en ellos sea particular, en términos de capacidad de suministro, de intensidad, de fijación o retención, etc. En la primera etapa del estudio se deben seleccionar sitios (del mismo tipo de suelos) con diferentes niveles de disponibilidad del nutriente en cuestión, en los cuales se establecerá el cultivo cuya respuesta se quiere conocer. (Figura 1). Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 FIGURA 1 Como se muestra en la figura 1, la respuesta del “cultivo” graficada a través de una curva, está representada en términos del rendimiento relativo obtenido en los diferentes sitios, con diferente nivel en el suelo. Se observa que va siendo creciente en la medida de que el nivel del nutriente en estudio es mayor. Haciendo la relación entre el rendimiento relativo obtenido (siendo 100 el rendimiento en el sitio con mayor valor analítico) con el análisis de suelo se puede establecer cuándo un nivel es bajo, medio o alto. Será bajo cuando el rendimiento relativo es bajo y alto cuando es rendimiento es alto. Cabe mencionar que en esta etapa no se aplica el nutriente en estudio, por lo que la producción del cultivo con respecto del nutriente está basada en el suministro natural del suelo. Rendimiento relacionado a dosis de fertilizante. En los sitios calificados como de bajo, medio y alto contenido del nutriente en estudio, se establecen los experimentos que permitirán determinar la respuesta del cultivo a dosis crecientes del elemento. (Figura 2). Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 FIGURA 2 En la figura 2, se aprecia que a medida que las dosis del nutriente son crecientes, los rendimientos relativos son mayores a cualquier nivel del nutriente en el suelo. Sin embargo, las respuestas en los sitios experimentales son diferentes, siendo mayor en el sitio de menor disponibilidad del nutriente y menor en el de mayor disponibilidad. Esto significa que en la medida de que el suelo esté más provisto de un nutriente determinado se requerirá una dosis menor para alcanzar un alto rendimiento. Es decir, a nivel bajo mayor respuesta y menor respuesta a nivel alto de disponibilidad. Dosis de fertilizante relacionada con análisis de suelo. Para cada sitio (y cada nivel de disponibilidad) se obtendrá una curva de respuesta del cultivo en estudio, a dosis crecientes del nutriente. De este modo se establece a qué dosis de nutriente (o fertilizante) se obtiene un rendimiento óptimo. Este óptimo puede ser biológico o económico dependiendo de la forma del análisis de los datos.(Figura 3). Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 FIGURA 3 Categorías de disponibilidad de nutrientes. De acuerdo a las normas que regulan el Programa de Recuperación de Suelos Degradados, los parámetros de suelo que se deben determinar son los siguientes: - pH en agua fósforo extractable calcio intercambiable magnesio intercambiable potasio intercambiable sodio intercambiable aluminio intercambiable Además, se deben calcular la suma de bases, capacidad de intercambio catiónico efectiva (CICE) y porcentaje de saturación de aluminio. El proceso de calibración que se ha desarrollado en INIA Remehue y sobre el cual se basa el Servicio de Análisis de Suelo ha incluído nitrógeno, fósforo y potasio en las serie de suelos más importantes de la Décima Región y a los cultivos de cereales y Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 papa, además de praderas permanentes. Las categorías de disponibilidad (o índices de fertilidad) de los restantes nutrientes y cultivos se han determinado en base a experiencias puntuales y antecedentes de suelos similares de otros países. Toda la metodología utilizada en los análisis de suelos requeridos para los diferentes subprogramas del Programa de Recuperación de Suelos Degradados, ha sido definida por una comisión ad hoc nombrada por la Sociedad Chilena de las Ciencias del Suelo a petición del Ministerio de Agricultura. Determinación de pH. El pH del suelo se determina en agua, en una relación 1: 2,5 suelo:agua de acuerdo a la metodología convencional. Los índices o categorías de pH se señalan a continuación: pH en Agua Rango ≤ 4.5 4.6 – 5.0 5.1 – 5.5 5.6 – 6.0 6.1 – 6.5 Categoría Extremadamente ácido Muy fuertemente ácido Fuertemente ácido Moderadamente ácido Débilmente ácido Las categorías señaladas corresponden a los valores posibles de encontrar en suelos de la Décima Región, por lo tanto no se incluyen categorías del sector alcalino de la escala. Determinación de fósforo (P). El fósforo extractable se determina por el método de Olsen, utilizando bicarbonato de sodio, 1 M , a pH 8,5. Las categorías de disponibilidad corresponden a rangos expresados en partes por millón (ppm). Fósforo Olsen ppm (mg/kg) Rango ≤ 5.0 5.1 – 10.0 10.1– 20.0 20.1– 30.0 ≥ 30.1 Categoría Muy Bajo Bajo Medio Adecuado Alto Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Determinación de bases de intercambio (Ca, Mg, K y Na). De acuerdo a los métodos convencionales, las bases de intercambio se determinan por extracción con acetato de amonio y analizadas por absorción atómica. Las diferentes categorías de disponibilidad se señalan a continuación: Calcio intercambiable Cmol (+)/kg Magnesio intercambiable Cmol (+)/kg Potasio intercambiable Cmol(+)/kg Sodio intercambiable Cmol (+)/kg Suma bases intercamb. Cmol (+)/kg Rango Categoría ≤ 2.0 2.01 – 5.00 5.01– 9.00 9.01 – 15.00 ≥ 15.01 Muy Bajo Bajo Medio Adecuado Alto ≤ 0.25 0.26 – 0.50 0.51– 1.00 1.01-2.00 ≥ 2.01 ≤ 0.12 0.13 – 0.25 0.26 – 0.51 0.52 – 0.64 ≥ 0.65 ≤ 0.15 0.16 – 0.20 0.21 – 0.30 0.31 – 0.40 0.41 – 0.51 ≥ 0.51 ≤ 3.00 3.01– 6.00 6.01 – 11.00 11.01 – 15.00 ≥ 15.01 Muy Bajo Bajo Medio Adecuado Alto Muy Bajo Bajo Medio Adecuado Alto Muy Bajo Bajo Medio Adecuado Alto Muy Alto Muy Bajo Bajo Medio Adecuado Alto Cada catión (intercambiable) debe encontrarse en el complejo de intercambio entre ciertos límites porcentuales, que son los siguientes: Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Calcio (Ca) Magnesio (Mg) Potasio (K) Sodio (Na) 60 a 80 % de la CIC 10 a 20 % de la CIC 2 a 6 % de la CIC 0 a 3 % de la CIC Cabe mencionar, .además, que estos cationes deben encontrarse en determinadas relaciones, como las que se indican a continuación. Relación calcio: magnesio (Ca / Mg). Un exceso de calcio (Ca) intercambiable puede interferir la absorción del magnesio (Mg) y del potasio (K). Si la relación Ca/Mg, expresados ambos en cmol(+)/kg, es mayor de 10, es posible que se produzca una deficiencia de magnesio. La relación óptima Ca/Mg es alrededor de 5. Relación potasio: magnesio (K/Mg). La relación K/Mg debe estar comprendida entre 0,2 y 0,3. Si esta relación es mayor de 0,5 pueden producirse deficiencias de magnesio por efecto antagónico de potasio. En cambio, si la relación es de alrededor 0,1, se puede producir una deficiencia de potasio inducida por el magnesio. Exceso de sodio (Na). Un exceso de sodio produce deficiencias de calcio y de magnesio. Cuando el sodio está en una proporción mayor al 10% de la CIC pueden existir problemas de salinidad de tipo sódico. Determinación de aluminio de intercambio (Al). El Al de intercambio se determina por extracción con cloruro de potasio (KCl) y análisis por espectrofotometría de absorción atómica. Las categorías de disponibilidad y de porcentaje de saturación de aluminio, por tratarse de elementos agronómicamente negativos, deben considerarse en forma inversa a la de los cationes de intercambio. Es decir, los valores bajos son más deseables que los altos. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 El porcentaje de saturación de aluminio se calcula determinando la proporción de Al de intercambio que se encuentra en la CICE, siendo la CICE la suma de los cationes de intercambio más el Al intercambiable. Rango Aluminio intercambiable ≤ 0.10 cmol (+)/kg 0.11 – 0.25 0.26 – 0.50 0.51 – 0.80 ≥ 0.81 Saturación Aluminio % ≤ 1.09 1.10 – 3.09 3.10 – 6.09 6.10 – 12.09 ≥ 12.10 Categoría Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 BIBLIOGRAFIA Etchevers B., J. P. Anzastiga, V. Volke y G. Etchevers. 1986. Correlación y calibración de métodos químicos para la determinación de fósforo disponible en suelos del Estado de Puebla. Agrociencia 65: 161 – 178. Etchevers B. , J. 1991. La función del laboratorio en el diagnóstico de la necesidad de fertilizantes. Enfoques tradicionales y modernos del análisis químico de suelos. ADIFAL marzo – abril: 21 – 27. Etchevers B,. J. J. Rodríguez y A. Galvis. 1991. Generación de recomendaciones de fertilización mediante el enfoque sistémico racional. Terra 9: 3 – 10. Guerrero, G., Andrés. 1996. El suelo, los abonos y la fertilización de los cultivos. Ediciones Mundi – Prensa. Madrid, España. 206 p. López R., J. Y López M., J. 1990. El diagnóstico de suelos y plantas (Métodos de campo y laboratorio). Ediciones Mundi – Prensa. Madrid, España. 363 p. Rodríguez S., José. 1993. Manual de fertilización. Colección en Agricultura. Facultad de Agronomía. Pontificia Universidad Católica de Chile. Santiago, Chile, 362 p. Rouse R. D. 1968. Soil test theory and calibration for cotton, corn, soybeans and coastal bermudagrass. Agricultural Experiment Station. Auburn University. Auburn, Alabama, U.S.A. Bulletin 375, 67 p. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 RECOMENDACIONES DE FERTILIZACION Pablo Undurraga Díaz, Ing. Agrónomo Centro Regional de Investigación Remehue, Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA E-mail: [email protected] INTRODUCCION A medida que la práctica de la agricultura ha pasado de ser una forma de vida a un sistema donde se debe considerar el aspecto técnico y económico en las decisiones de producción, con la incorporación de insumos que permitan obtener rendimientos altos por unidad de superficie, se ha hecho necesaria la dosificación adecuada de los fertilizantes, de manera de no causar daños en los ecosistemas y que se puedan utilizar en la forma y dosis precisa que requieren los cultivos y el suelo. Se han desarrollado diversas formas para calcular las dosis de los fertilizantes y las enmiendas de acuerdo a las necesidades de los cultivos y del suelo. Pasando por la utilización de recomendaciones generales para una región determinada según el cultivo y llegando a modelos más afinados de cálculo de dosis como es el desarrollado por Rodríguez, 1990. En los últimos cincuenta años se ha avanzado en el área del conocimiento de la fertilidad de los suelos y la nutrición de las plantas. Ya que antes se mantenían los conceptos originados a principios de siglo con la Ley del mínimo de Liebig, la de los rendimientos decrecientes de Mitscherlich, que prevalecieron por mucho tiempo. Luego vinieron los primeros acercamientos para considerar un ordenamiento en el tema y establecer a través de resultados una explicación a la respuesta de los cultivos a la fertilización, desarrollándose los modelos “Decide” por los australianos y el de Confort y Sinclair de Nueva Zelandia. Todos estos van incorporando mayor información para lograr una decisión más precisa en la dosificación de la fertilización. Esto implica que, de no tener la información que estos modelos requieren en forma detallada, pueden arrojar resultados poco adecuados. En nuestro país se han desarrollado diferentes experiencias para obtener formas de recomendación de fertilización adecuadas a la realidad nacional, entre éstos se destacan: § Método del Balance (Rodríguez, 1990) Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Se basa en un balance entre la demanda de nutrientes del cultivo y la oferta de nutrientes desde el suelo, medida a través de análisis químico, considerándose la eficiencia de uso del nutriente. Matemáticamente se expresa de la siguiente forma: Dosis = (demanda-oferta)/eficiencia Donde Demanda: extracción del nutriente para un rendimiento dado en Kg/ha oferta: disponibilidad del nutriente en el suelo en Kg/ha eficiencia: proporción del nutriente absorbido por el cultivo por cada Kg aplicado. § Método de la Calibración Este método relaciona la respuesta del cultivo a la fertilización y el nivel de fertilidad del suelo. Los aportes del suelos son clasificados en categorías de fertilidad y la recomendación de fertilizantes se realiza según la categoría de disponibilidad del nutriente. Sobre un nivel de suficiencia no se recomienda la aplicación de fertilizante, o es mínima de acuerdo al rendimiento. En Chile, el INIA ha usado preferentemente este método, cuya principal desventaja es el costo para obtener la información para cada zona y tipo de suelo, puesto que requiere de mucha experimentación de terreno para realizar la calibración, la que se ha elaborado para los diferentes tipos de suelos y áreas edafoclimáticas por los distintos centros de Investigación que se distribuyen a los largo del país. La base de este método consiste en la realización de numerosos ensayos de terreno en suelos con diferente nivel de disponibilidad del nutriente que se está investigando. Con esto se determina el índice de disponibilidad del nutriente de acuerdo al rendimiento del cultivo. Esta asociación permitirá tener un índice de nutrientes disponibles bajo el cual los rendimientos disminuyen y sobre el cual están cercanos al rendimiento máximo, teniendo un nivel crítico de disponibilidad de nutrientes, bajo el cual se produce una caída en los rendimientos. Basándose en el trabajo realizado durante muchos años de investigación en INIA Remehue, se tienen tablas de dosis de nutrientes para praderas y cultivos de la Xª Región, según el tipo de suelo (Trumaos, Rojo arcillosos, Ñadis y Transición) para obtener rendimientos altos según el nivel de disponibilidad de nutrientes del suelo medidos por análisis de suelos (categorías de disponiblidad). Con esta información se pueden obtener recomendaciones de fertilización con una adecuada aproximación y se basan en la información que utilizan actualmente el Laboratorio de Análisis de Suelos de INIA -Remehue, para entregar orientación a los profesionales y agricultores que demandan el servicio. Éstas deben ser adaptadas de acuerdo al nivel de rendimiento y a las condiciones particulares de cada caso. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 DOSIS DE FERTILIZACIÓN Para lograr una recomendación de fertilización adecuada a las condiciones de los agricultores, se utilizará n tres tablas que se enumeran a continuación, que nos ayudarán a determinar la dosis. Posteriormente, debemos adecuar la dosis de acuerdo al nivel tecnológico del agricultor, que estará determinado por el nivel de rendimiento y la tecnología de aplicación de la fertilización. Para utilizar las tablas de recomendación se requiere tener en cuenta los siguientes parámetros: 1. 2. 3. 4. El cultivo Tipo de Suelo El nutriente para el cual se determinará la dosis. Nivel del Nutriente en el suelo, según análisis (Categorías de disponibilidad), de la Tabla 1. Con estos antecedentes se ingresa a la Tabla 3, donde se obtiene una recomendación de nutrientes y encalado para un rendimiento alto, según los expresados en la tabla 2. 5. Se ajusta la recomendación según el nivel de rendimiento esperado, considerando los de la tabla 2. Si el rendimiento considerado es un 60% del expresado en la Tabla 2, la recomendación final será el 60% de la obtenida de la Tabla 3. El nivel de disponibilidad de nutrientes, según análisis de suelos se presenta en la Tabla 1, de acuerdo al método de análisis utilizado. Las categorías que se presentan están ajustadas a la disponibilidad de nutrientes de los suelos de la décima región a través de años de investigación de las condiciones de la zona sur del país. Esta tabla se utlizará para determinar la categoría de disponibilidad de nutrientes y el nivel de acidez del suelo expresado a través de la saturación de aluminio. En la tabla 2, se presentan los rendimientos y los cultivos para los que se han calibrado las recomendaciones de fertilización, con ensayos realizados en INIA Remehue y servirá para ajustar la fertilización según el rendimiento esperado. En la tabla 3, se condensa la información de dosis de nutrientes de acuerdo a los cultivos, tipo de suelo y categoría de disponibilidad de nutrientes o dosis de carbonato de calcio de acuerdo al nivel de saturación de aluminio. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Tabla 1: Categoría de disponibilidad de Nutrientes según Análisis de Suelos. Nutriente Rango Categoría pH en Agua suspensión 1:2.5 y determinación potenciométrica. ≤ 4.5 4.6 – 5.0 5.1 – 5.5 5.6 – 5.9 6.0 – 6.9 Extremadamente ácido Muy fuertemente ácido Fuertemente ácido Moderadamente ácido Ligeramente ácido pH en CaCl 2 suspensión 1:2.5 y determinación potenciométrica. ≤ 3.8 3.9 – 4.3 4.4 – 4.8 4.9 – 5.2 ≥5.3 Sin categorías Extremadamente ácido Muy fuertemente ácido Fuertemente ácido Moderadamente ácido Ligeramente ácido Materia Orgánica (%) Combustión húmeda y titulación. Fósforo Olsen ppm (mg/Kg) Extracción con bicarbonato de sodio 0,5M pH 8,5 Azufre extractable ppm Dihidrógeno fosfato de calcio 0,01M y determin. turbidimétrica Calcio intercambiable cmol (+)/Kg Acetato de amonio 1,0 M determinación EAA Magnesio intercambiable cmol (+)/Kg Acetato de amonio 1,0 M determinación EAA Potasio intercambiable cmol(+)/Kg Acetato de amonio 1,0 M determinación EEA Sodio intercambiable cmol (+)/Kg Acetato de amonio 1,0 M determinación EEA ≤ 5.0 5.1 – 10.0 10.1– 20.0 20.1– 30.0 ≥ 30.1 ≤ 6.0 6.1 – 12.0 12.1– 20.0 20.1– 30.0 ≥ 30.1 ≤ 2.0 2.01 – 5.00 5.01– 9.00 9.01 – 15.00 ≥ 15.01 ≤ 0.25 0.26 – 0.50 0.51– 1.00 1.01-2.00 ≥ 2.01 ≤ 0.12 0.13 – 0.25 0.26 – 0.51 0.52 – 0.64 ≥ 0.65 ≤ 0.15 0.16 – 0.20 0.21 – 0.30 0.31 – 0.40 ≥ 0.41 Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Continuación Tabla 1 Nutriente Rango Suma bases intercambio cmol (+)/Kg (Suma de Ca+Mg+K+Na) ≤ 3.00 3.01– 6.00 6.01 – 11.00 11.01 – 15.00 ≥ 15.01 ≤ 0.10 0.11 – 0.25 0.26 – 0.50 0.51 – 0.80 ≥ 0.81 ≤ 1.09 1.1 – 3.09 3.1 – 6.09 6.1 – 12.09 ≥ 12.1 < 0.1 0.1 – 0.3 0.3– 0.5 > 0.5 < 0.25 0.25 – 0.50 0.50 – 1.00 > 1.01 < 0.2 0.2 – 0.5 0.5–1.0 > 1.0 < 0.05 0.05 – 0.10 0.11–0.20 > 0.20 < 2.5 2.5 – 4.5 > 4.5 Aluminio intercambiable cmol (+)/Kg Extrac. Con KCl 1M, determ por EAA Saturación Aluminio % (Al int/Suma de bases +Al int) * 100 Cobre ppm Extrac con DPTA a pH 7 determinación EAA Cinc ppm Extrac con DPTA a pH 7 determinación EAA Boro ppm Extrac con CaCl2 determ. Colorimétrica Molibdeno ppm Extrac con DPTA a pH 7 determinación EAA Hierro ppm Extrac con DPTA a pH 7 determinación EAA Categoría Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Muy Bajo Bajo Medio Alto Bajo Medio Alto Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Tabla 2: Nivel de rendimiento para el que se recomendaron las fertilizaciones de la tabla 3. CULTIVO UNIDAD RENDIMIENTO CANTIDAD /HA Alfalfa Ton. Materia Seca 18 Avena Quintales métricos 60 Avena – Ballica Rot. – Tr. Rosado. Ton. Materia Seca 16 Ballica Rotación Corta Ton. Materia Seca 14 Ballica Per. – Tr. Blanco Ton. Materia Seca 12 Maíz Silo Ton. Materia Seca 18 Papas Toneladas 50 Remolacha Toneladas 65 Trigo Quintales métricos 80 Triticale Quintales métricos 90 Pradera Mixta Pastoreo Ton. Materia Seca 12 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 En la figura 1, se muestra cómo se utiliza la tabla 3 y los pasos a seguir según el orden numérico. Según el ejemplo que se presenta, se busca la recomendación para un cultivo (1) de Alfalfa que será establecida en un predio con suelos (2) de tipo Rojo arcilloso. Estimaremos la cantidad de fertilización fosfatada (3) que según el análisis de suelos tiene 15 ppm de P- Olsen, que corresponde a un nivel medio o categoría (4) de disponibilidad media. Con esto obtenemos una dosis recomendada (5) de 225 a 255 Kg de P2O5 por hectárea; según la tabla 2, la dosis es para un rendimiento de 18 ton/ha de materia seca. Pero consideremos una producción de 12 ton/ha, esto significa que nuestro rendimiento esperado es de un 67% del mencionado en la Tabla 2, por tanto, la recomendación deberá ser un 67% de la obtenida en la tabla 3, es decir 150 a 170 Kg/ha de P 2O5 los que deberán ser convertidos a fertilizante comercial, si consideramos utilizar Superfosfato Triple la dosis por hectárea será de 330 a 370 Kg. Las recomendaciones de enmienda calcárea (CaCO3) se realizan de acuerdo al nivel de saturación de aluminio del suelo para cada categoría, obteniéndose por tanto dosis mayores, mientras más alta es la categoría en que se encuentre el suelo. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Figura 1: Pasos a seguir para utilizar las tablas de recomendaciones obtenidas por el método de calibración para la Xª Región. (4) La Categoría según el análisis de suelos (1) Seleccionar el cultivo Nivel de Nutriente según Analisis Muy Bajo CULTIVO/TIPO SUELO Rend NUTRIENTE Rango (Kg/ha) ALFALFA ÑADI ROJO ARCILLOSO (2) El Tipo de Suelo K2O MgO P2O 5 S CaCO3 K2O MgO P2O 5 S CaCO3 190 65 320 80 500 210 75 300 85 400 220 75 340 90 650 240 80 340 95 500 (3) El Nutriente Bajo Rango (Kg/ha) 162 55 282 70 900 179 64 264 75 720 187 64 299 79 1170 204 68 299 84 900 Medio Rango (Kg/ha) 133 46 240 60 1800 147 53 225 64 1440 154 53 255 68 2243 168 56 255 71 1725 (5) Finalmente con los pasos 1 – 2 – 3 y 4 se obtiene la dosis para un Rendimiento alto Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Tabla 3: Recomendaciones de Fertilización, según cultivo, tipo de suelo y nivel de nutriente. Nivel de Nutriente según Analisis Muy Bajo CULTIVO/TIPO SUELO NUTRIENTE Rango (Kg/ha) ALFALFA ÑADI ROJO ARCILLOSO TRUMAO AVENA ÑADI ROJO ARCILLOSO TRUMAO AV-BALL-TR. ROS ÑADI ROJO ARCILLOSO TRUMAO BALLICA BI ANUAL ÑADI ROJO ARCILLOSO TRUMAO Bajo Rango (Kg/ha) Medio Rango (Kg/ha) Alto Rango (Kg/ha) Muy Alto Rango (Kg/ha) K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 190 65 320 80 500 210 75 300 85 400 180 75 300 75 450 220 75 340 90 650 240 80 340 95 500 210 80 340 80 550 162 55 282 70 900 179 64 264 75 720 153 64 264 66 810 187 64 299 79 1170 204 68 299 84 900 179 68 299 70 990 133 46 240 60 1800 147 53 225 64 1440 126 53 225 56 1620 154 53 255 68 2243 168 56 255 71 1725 147 56 255 60 1898 95 33 189 40 3100 105 38 177 43 2480 90 38 177 38 2790 110 38 201 45 3244 120 40 201 48 2495 105 40 201 40 2745 57 20 128 24 3700 63 23 120 26 2960 54 23 120 23 3330 66 23 136 27 4472 72 24 136 29 3440 63 24 136 24 3784 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 110 50 140 50 0 80 50 140 60 0 80 50 160 50 0 130 60 150 60 200 90 60 150 65 200 100 60 180 60 200 90 40 140 44 400 70 40 120 53 400 70 40 130 44 400 100 50 150 53 500 80 50 130 57 500 80 50 140 53 500 60 30 120 38 800 50 30 110 45 800 50 30 110 38 800 80 40 140 45 1000 60 40 120 49 1000 60 40 120 45 1000 40 20 100 25 1800 40 20 90 30 1800 40 20 80 25 1800 50 30 120 30 2000 50 30 100 33 2000 50 30 90 30 2000 0 0 90 0 3000 25 10 45 0 3000 20 0 50 0 3000 20 15 100 20 3500 35 20 60 20 3500 40 10 60 15 3500 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 130 50 140 60 400 80 50 150 65 400 80 50 160 60 400 150 60 150 65 600 100 60 160 75 600 100 60 180 65 600 100 40 140 53 600 70 40 140 57 600 70 40 140 53 600 120 50 150 57 1000 80 50 150 66 1000 80 50 150 57 1000 40 30 120 45 1000 50 30 120 49 1000 50 30 120 45 1000 70 40 140 49 1600 60 40 140 56 1600 60 40 140 49 1600 30 20 100 30 1600 40 20 100 33 1600 40 20 100 30 1600 40 30 120 33 2000 50 30 120 38 2000 50 30 120 33 2000 15 10 90 0 2000 20 0 90 0 2000 20 10 90 0 2000 20 20 100 20 2400 40 15 100 23 2400 40 20 100 20 2400 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 130 50 140 55 400 130 50 160 60 400 140 50 160 55 400 150 60 150 65 600 150 60 180 70 600 160 60 180 65 600 100 40 140 48 600 100 40 120 53 600 120 40 130 48 600 120 50 150 57 1000 120 50 150 62 1000 140 50 140 57 1000 40 30 120 41 1000 80 30 100 45 1000 80 30 110 41 1000 70 40 140 49 1600 90 40 120 53 1600 100 40 120 49 1600 30 20 100 28 1600 60 20 80 30 1600 70 20 90 28 1600 40 30 120 33 2000 70 30 100 35 2000 80 30 110 33 2000 15 10 90 0 2000 40 10 60 0 2000 60 0 70 0 2000 20 20 100 20 2400 50 20 80 21 2400 70 15 90 20 2400 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Continuación Tabla 3: Nivel de Nutriente según Analisis Muy Bajo CULTIVO/TIPO SUELO NUTRIENTE Rango (Kg/ha) BALLICA-TR. BLANCO ÑADI K2O MgO P2O5 S CaCO3 ROJO ARCILLOSO K2O MgO P2O5 S CaCO3 TRUMAO K2O MgO P2O5 S CaCO3 MAIZ SILO ÑADI ROJO ARCILLOSO TRUMAO PAPAS ÑADI ROJO ARCILLOSO TRUMAO REMOLACHA ÑADI ROJO ARCILLOSO TRUMAO Bajo Rango (Kg/ha) Medio Rango (Kg/ha) Alto Rango (Kg/ha) Muy Alto Rango (Kg/ha) 130 50 180 55 400 130 65 160 65 400 130 65 180 55 400 150 60 200 65 600 150 70 180 70 600 150 70 200 65 600 100 40 160 48 600 100 55 120 57 600 100 55 160 48 600 120 50 180 57 1000 120 60 150 62 1000 120 60 180 57 1000 40 30 120 41 1000 80 45 100 49 1000 80 45 120 41 1000 70 40 140 49 1600 90 50 120 53 1600 90 50 140 49 1600 30 20 110 28 1600 60 35 80 33 1600 60 35 100 28 2000 40 30 120 33 2000 70 40 100 35 2000 70 40 120 33 3000 15 10 80 0 2500 40 20 60 0 2000 40 20 80 0 3000 20 20 100 20 3500 50 30 80 25 2400 50 30 100 20 4000 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 130 50 140 70 400 130 65 160 80 400 130 65 180 70 400 150 60 150 80 600 150 70 180 90 600 150 70 200 80 600 100 40 140 62 600 100 55 140 70 600 100 55 160 62 600 120 50 150 70 1000 120 60 160 79 1000 120 60 180 70 1000 40 30 120 53 1000 80 45 120 60 1000 80 45 120 53 1000 70 40 140 60 1600 90 50 140 68 1600 90 50 140 60 1600 30 20 100 35 2000 60 35 90 40 1600 60 35 100 35 2000 40 30 120 40 3000 70 40 110 45 2000 70 40 120 40 3000 15 10 90 0 3000 40 20 60 0 2000 40 20 90 21 3000 20 20 100 24 4000 50 30 80 27 2400 50 30 100 24 4000 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 130 50 140 68 0 360 50 360 75 0 360 50 450 65 0 150 60 150 75 200 400 60 400 80 200 400 60 500 70 200 100 40 140 60 200 250 40 300 66 200 250 40 370 57 200 120 50 150 66 400 320 50 350 70 400 320 50 420 62 400 40 30 120 51 400 160 30 220 56 400 160 30 280 49 400 70 40 140 56 600 220 40 280 60 600 220 40 350 53 600 30 20 100 34 1000 110 20 150 38 1000 110 20 180 33 1000 40 30 120 38 1500 150 30 210 40 1500 150 30 250 35 1500 15 10 90 0 2000 80 10 90 0 2000 80 10 100 0 2000 20 20 100 25 3000 100 20 140 24 3000 100 20 140 25 3000 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 K2O MgO P2O5 S CaCO3 130 50 140 80 400 300 150 380 85 0 380 150 500 80 0 150 60 150 85 600 320 180 410 90 300 400 180 600 85 300 100 40 140 70 600 260 100 360 75 800 340 100 450 70 800 120 50 150 75 1000 280 120 380 79 1000 360 120 500 75 1000 40 30 120 60 1000 180 70 320 64 1800 220 70 320 60 1800 70 40 140 64 1600 200 80 360 68 2000 250 80 400 64 2000 30 20 100 40 1600 65 40 280 43 2500 80 40 280 40 2500 40 30 120 43 2000 75 50 300 45 3000 100 50 300 43 3000 15 10 90 0 2000 35 0 240 0 3200 30 0 200 0 3200 20 20 100 26 2400 45 20 280 30 3600 40 20 260 26 3500 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Continuación Tabla 3: Nivel de Nutriente según Analisis Muy Bajo CULTIVO/TIPO SUELO NUTRIENTE Rango (Kg/ha) TRIGO / TRITICALE ÑADI K2O 130 150 MgO 50 60 P2O5 140 150 S 40 50 CaCO3 0 200 ROJO ARCILLOSO K2O 140 150 MgO 120 140 P2O5 160 170 S 50 60 CaCO3 0 200 TRUMAO K2O 140 160 MgO 120 140 P2O5 200 220 S 40 50 CaCO3 0 200 PRAD. MIX. PAST. ÑADI K2O 130 150 N 40 50 MgO 50 60 P2O5 140 150 S 40 45 CaCO3 400 600 ROJO ARCILLOSO K2O 130 150 N 50 60 MgO 50 60 P2O5 140 150 S 50 60 CaCO3 400 600 TRUMAO K2O 130 150 MgO 50 60 P2O5 150 170 S 40 45 CaCO3 400 600 TRANSICION K2O 130 150 N 40 50 MgO 50 60 P2O5 140 150 S 50 55 CaCO3 400 600 Bajo Rango (Kg/ha) Medio Rango (Kg/ha) Alto Rango (Kg/ha) Muy Alto Rango (Kg/ha) 100 40 140 35 400 120 80 130 44 400 110 80 160 35 400 120 50 150 44 500 130 100 140 53 500 130 100 180 44 500 40 30 120 30 800 80 50 110 38 800 70 50 130 30 800 70 40 140 38 1000 90 60 120 45 1000 90 60 150 38 1000 30 20 100 20 1800 60 30 100 25 1800 50 30 90 20 1800 40 30 120 25 2000 70 40 110 30 2000 60 40 120 25 2000 15 10 90 0 3000 30 0 80 0 3000 30 0 80 0 3000 20 20 100 15 3500 40 20 90 20 3500 40 20 90 15 3500 100 40 40 140 35 600 100 50 40 120 44 600 100 40 140 35 600 100 40 40 140 44 600 120 50 50 150 40 1000 120 60 50 140 53 1000 120 50 150 40 1000 120 50 50 150 48 1000 40 40 30 120 30 1000 40 50 30 100 38 1000 40 30 120 30 1000 40 40 30 120 38 1000 70 50 40 140 34 1600 70 60 40 120 45 1600 70 40 140 34 1600 70 50 40 140 41 1600 30 40 20 100 20 1600 30 50 20 80 25 1600 30 20 100 20 1600 30 40 20 100 25 1600 40 50 30 120 23 2000 40 60 30 100 30 2000 40 30 120 23 2000 40 50 30 120 28 2000 15 40 10 90 0 2000 15 50 0 70 0 2000 15 0 90 0 2000 15 40 10 90 0 2000 20 50 20 100 14 2400 20 60 15 80 18 2400 20 15 100 14 2400 20 50 20 100 17 2400 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 CONCEPTOS DE FERTILIDAD FOSFATADA EN SUELOS VOLCANICOS Pablo Undurraga Díaz, Ing. Agrónomo Centro Regional de Investigación Remehue, Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA E-mail: [email protected] INTRODUCCION En los suelos volcánicos del sur del país el fósforo (P) es uno de los elementos más deficitarios para una adecuada productividad de los cultivos y praderas, dado que por el origen de estos suelos, este elemento es retenido en gran parte, sin estar disponible para las plantas. Las formas de asimilación por parte de la planta son el fosfato monobásico (PO4H2-) y el dibásico (PO4H=); el primero es de mayor utilización que el segundo. A medida que va siendo extraído por las plantas el complejo del suelo lo va restituyendo a la solución. Estas formas de fosfatos se encuentran en una baja proporción en el suelo pero la restitución es constante (en un ciclo normal de un cultivo la reposición del fósforo en dicha solución alcanza el número de 100 a 500 veces para cubrir las necesidades básicas del elemento), (Rodríguez, 1989). El pH del suelo determina la disponibilidad de fosfatos asimilables por la planta. A medida que aumenta el pH la proporción de los fosfatos (pH>7, es decir alcalinidad) crece la proporción de fosfatos dibásicos y tribásicos. El paso del fósforo asimilable a sus formas insolubles y no asimilables se conoce como "Fijación de fósforo" o sea su inmovilidad como nutriente vegetal. Esta inmovilidad la determinan las distintas reacciones químicas que se producen según el pH del suelo. En suelos ácidos los fosfatos asimilables (monobásico y dibásico se combinan con el hierro (Fe++) y el aluminio (Al+++) y con los distintos hidróxidos (de Fe, Al, etc), formándose sales y complejos químicos insolubles. En los suelos alcalinos se combinan principalmente con el calcio y el magnesio y se forman sales insolubles como el fosfato tricálcico. [(PO4)2Ca3] Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 COMPORTAMIENTO DEL FOSFORO EN EL SUELO. El fósforo en el suelo, funcionalmente se presenta como tres fracciones. La fracción en solución, la cual es inmediatamente disponible para la absorción de las plantas y resultante del equilibrio entre los distintos componentes y mecanismos que dominan la fracción lábil. La fracción lábil, la que representa la cantidad de P que puede pasar a la solución en una temporada de cultivo y la fracción no lábil que representa todos aquellos compuestos fosforados en el suelo que no salen a la solución del suelo durante la temporada del cultivo. Tres mecanismos de reacción del P en el suelo dominarían los componentes de las fracciones lábiles y no lábiles: el mecanismo de adsorción-desorción a través de las reacciones del fosfato con las arcillas del suelo, el mecanismo de precipitación disolución en la formación de compuestos fosforados en el suelo, dependiente del pH del suelo y de la concentración de iones en la solución del suelo, y el tercer mecanismo es el de mineralización - inmovilización del P ligado a la materia orgánica del suelo. De esta forma, las fracciones lábiles y no lábiles estarían constituidas por P que ha reaccionado en el suelo a través de estos mecanismos y que constituyen los componentes de P adsorbido, P precipitado y P orgánico, tanto en fracciones lábiles como no lábiles. Además, se supone que el contenido de P en la solución resulta de un equilibrio rápido entre la cantidad de P presente en la fracción lábil y los mecanismos que determinan la labilidad del P. Es decir, para que exista P en solución es necesaria una cierta cantidad de P en la fracción lábil, que variaría de acuerdo a la intensidad conque los mecanismos de reacción actúan en el suelo. Existe la hipótesis de que, a través de los mecanismos de reacción un equilibrio lento existe entre la fracción lábil y la fracción no lábil del P del suelo, de tal forma de que un crecimiento en las componentes lábiles induce a un crecimiento en los componentes no lábiles del suelo y que un decrecimiento en la fracción de P lábil induce un lento decrecimiento en la fracción de P no lábil del suelo. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Figura 1: Esquema de fósforo en el suelo. DISPONIBILIDAD DEL FOSFORO EN EL SUELO La disponibilidad de fósforo en el suelo, corresponde a una pequeña fracción del fósforo total contenido en el suelo, reflejando parte del fósforo de la solución suelo y aquélla que se encuentra en la fase sólida, susceptible de ser asimilada por las plantas. El fósforo forma compuestos débilmente solubles con cationes bivalentes y monovalentes. Por esta razón, la cantidad de fósforo de la solución suelo es muy pequeña. Las plantas que crecen en el suelo, absorben esta pequeña cantidad de la solución suelo, que a su vez se encuentra en equilibrio con el fósforo de la fase sólida. Así, cada una de las formas químicas del suelo contribuye de manera distinta a enriquecer el fósforo disponible para el cultivo. La cantidad de fósforo disponible en el suelo, no es un valor único y constante, ya que varía de acuerdo a las condiciones ambientales que a su vez influyen sobre el suelo y el desarrollo de las plantas. El análisis de suelo proporciona sólo un índice del fósforo disponible en el suelo para las plantas, o sea, este valor corresponde a un reflejo del suministro natural del suelo, lo que por diferencia con los requerimientos de fósforo de la especie, permiten estimar las necesidades de fertilización. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 FACTORES QUE INFLUENCIAN LA DISPONIBILIDAD DE FÓSFORO El contenido de fósforo disponible en el suelo es una variable dinámica, fuertemente influenciada por las propiedades del suelo, la planta y las condiciones ambientales. Cualquier cambio en las propiedades del suelo se encuentra relacionada con la concentración de fósforo en solución (intensidad); la magnitud del fósforo de la fase sólida del suelo susceptible de pasar a la solución o fósforo lábil (cantidad); la capacidad del suelo de restablecer el fósforo de la solución (capacidad o poder tampón del fósforo) y las características del suelo que permiten el paso de iones fosfato desde las zonas de alta concentración a la superficie de las raíces (difusión), explican los cambios producidos en la cantidad de fósforo disponible. Las plantas también influencian la disponibilidad de fósforo. Los vegetales poseen sistemas radicales característicos de cada especie, diferenciándose por la longitud y densidad de los pelos radiculares, así como a la morfología de su sistema radicular, lo que afecta sensiblemente la capacidad de extracción de fósforo por las raíces de las plantas. En general, se puede afirmar que menos de un 1 % del volumen total de suelo está ocupado por las raíces. Otra de las características de la planta que afectan la capacidad de remoción del Fósforo disponible, se refiere a la capacidad individual de las especies de absorber este elemento por cm2 de raíz o poder de absorción de fósforo. Además, ciertas condiciones ambientales afectan la capacidad específica de absorción de fósforo por las raíces, tales como la asociación con micorrizas activas (hongos del suelo), altas densidades de siembra, y otros. Otros Factores que afectan la disponibilidad de Fósforo Existen factores que afectan la disponibilidad de Fósforo relacionados al suelo, que pueden ser numerosos y se consideran de tipo ambientales, que modifican la disponibilidad del fósforo. Entre éstos, los más importantes son: § Acidez del suelo: el óptimo rango de pH del suelo dentro del cual se observa la máxima disponibilidad de fósforo se encuentra entre 6,5 y 7,5. Las causas de este comportamiento se asocian fundamentalmente a que en este rango ocurre la máxima solubilidad de las formas de fósforo inorgánico del suelo. Así, en rangos de pH ácido hasta 6,5, se reduce la solubilidad de fosfatos de hierro y aluminio y aumenta la solubilidad de las formas ligadas al calcio. Pasado cierto nivel de pH alcalino (sobre 7,5) comienza a precipitar ciertas formas de fosfatos de calcio y nuevamente se reduce la disponibilidad del fósforo. § Contenido de Materia orgánica: la materia orgánica del suelo, presenta dominantemente cargas negativas, por lo que los ácidos orgánicos forman con cationes hidroxilados tales como Fe(OH)2 y Al(OH)2, combinaciones complejas que Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 inmovilizan estos iones, dejando en libertad los iones fosfatos. Por esta razón, la agregación de estiércol y otros compuestos orgánicos favorecen la disponibilidad del fósforo de los suelos. § Relación Sílice/Sesquióxidos: Según la naturaleza mineralógica de los suelos, éstos varían en su contenido de Silicio, Hierro y Aluminio. Los suelos que contienen una más baja relación Sílice (SiO2); Sesquióxidos (Fe2O3+Al2O3), están generalmente más intemperizados y por lo tanto contienen más hierro y aluminio libres que pueden inmovilizar a los fosfatos; en cambio, una más alta eficiencia en el uso de fertilizantes fosfóricos se logra con una alta relación sílice/sesquióxidos incrementando rápidamente el P-disponible. Esta relación, se puede afectar con el uso de la cal inmovilizando los sesquióxidos, lo que tiende a incrementar la disponibilidad del fósforo. § Relación con la humedad del suelo: el aumento de agua en el suelo induce a un incremento de iones fosfato en solución, lo que ocurre después de las lluvias o por el efecto del riego. Esto está ligado a las características de las formas inorgánicas de fósforo presentes en el suelo (P-Ca, P-Fe y P-Al) cuya naturaleza cristalina relativamente insoluble, tiene en realidad variables constantes de productos de solubilidad. Así, sólo una cierta cantidad del compuesto se disuelve alrededor de las partículas cristalinas, sin embargo, aunque la concentración se mantiene relativamente constante, la cantidad de iones fosfato solubles aumenta si se incrementa la cantidad de agua en la solución. La cantidad de fósforo absorbido por especies desarrolladas en condiciones de secano, es menor en condiciones de sequía que en años lluviosos. § Fertilizantes fosfatados: Uno de los mayores efectos sobre el incremento del Pdisponible, se ha logrado con la adición de fertilizantes fosfatados. La fijación del fósforo soluble ocurre rápidamente después de la aplicación de un fertilizante fosfatado, especialmente si el fertilizante se ha mezclado con el suelo. Después de varios días desde su aplicación en un cultivo, cualquier aplicación posterior de fosfatos probablemente originaría cambios mínimos debido al equilibrio alcanzado entre fosfatos solubles y el fósforo fijado. A través del tiempo, sin embargo, la disponibilidad del fósforo se ha incrementado debido a que la adición de fósforo fertilizante y la remoción de fósforo de la solución efectuada por las plantas, es reemplazada rápidamente por el fósforo fertilizante. La aplicación de fósforo fertilizante al suelo origina una reacción rápida en la superficie de los minerales arcillosos, donde el fenómeno dominante es la adsorción, luego una reacción lenta de difusión de fósforo predomina hacia el interior de las partículas, generándose la fijación. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Esta última etapa define qué cantidad de P agregado permanece en el pool lábil sobre las partículas del suelo y este valor estima la efectividad residual del fósforo lábil. FORMAS DE FÓSFORO EN LOS SUELOS Aunque se reconoce que el fósforo es retenido a la forma de aniones intercambiables por las arcillas, se cree que estas formas no son importantes para la nutrición directa de las plantas. En otras palabras, las plantas obtienen directamente los aniones fosfatos de la solución suelo más bien que aquellos adsorbidos por los coloides. En realidad, la cantidad de fosfato en la solución del suelo no es tan importante como la tasa en que este fosfato se disuelve o pasa a la solución. Las plantas pueden crecer en forma satisfactoria con una pequeña concentración de fosfato en la solución a medida que esta concentración se puede mantener. Deben producirse condiciones que favorezcan la rápida liberación de fosfatos desde las formas orgánicas y/o de las formas inorgánicas de modo de mantener un adecuado suministro de formas disponibles (Figura 2). HUMUS P ESTABLE ORGANISMOS VIVOS P P ORGANICO LABIL P LABIL ADSORVIDO SOLUCION P INSOLUBLE P FIJADO O BLOQUEADO Figura 2: Transformaciones del fósforo en el suelo. La pérdida del fósforo soluble de la solución suelo es un proceso continuo, por las raíces de las plantas, por los microorganismos y por mecanismos de adsorción y/o precipitación en la superficie de los coloides, quedando como fósforo insoluble. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Las formas de fósforo orgánico denominadas lábiles son aquéllas que se pasan a la solución suelo a través de la mineralización del fósforo orgánico; las formas más refractadas a la mineralización son las provenientes del humus y sólo se relacionan en el equilibrio con el fósforo orgánico lábil. ADSORCION DE FOSFORO En la medida que se agite una cierta cantidad de fósforo soluble en contacto con el suelo, rápidamente una proporción importante de este fósforo soluble desaparece de la solución, debido a que queda retenido en la fase sólida, fenómeno que se conoce con el nombre de fijación. Una proporción importante de este fósforo evoluciona a formas insolubles, por lo que vuelve con gran dificultad a la solución y otra fracción queda retenida casi irreversiblemente con gran energía, lo que se considera prácticamente una pérdida de fósforo del suelo y se conoce también con el nombre de fósforo ocluido. Existen diferentes mecanismos que explican la adsorción del fósforo en el suelo, tales como: § Reacciones de superficie no específica (intercambio de aniones), § Fenómeno de oclusión o captura física de fosfatos como un todo dentro de las partículas sólidas, y § Reacciones de ligado, formando complejos, tales como el complejo humus-Aluminio característico de suelos Andisoles. En suelos calcáreos de la Zona Central, la fijación ocurre fundamentalmente sobre los carbonatos minerales que tienen una importante superficie específica. La precipitación de fósforo como fosfato de calcio es la principal causa de fijación de fósforo en este tipo de suelos. Las reacciones de fijación de fósforo en los suelos Andisoles en cambio, son mucho más enérgicas y éstos adsorben apreciables cantidades a través del tiempo. Éstas alcanzan al 80 a 90% como 'fósforo fijado" del total del fósforo aplicado como fertilizante. La fijación de fósforo ocurre en la superficie de algunos minerales tales como el alofán, la imogolita y complejos humus-Aluminio, especialmente en la estrata arable de los suelos En los complejos humus-Aluminio, el Aluminio se encuentra a la forma de quelato sobre la superficie de las moléculas de humus, manteniendo cierta afinidad con el fósforo inmovilizándolo con gran energía. En general, los iones fosfatos tienen alta afinidad por el Aluminio, Hierro y Calcio, elementos con que forman precipitados insolubles dependiendo de la acidez del suelo. Al respecto, en suelos con presencia de arcillas expansibles, al incrementarse el pH de la solución se produce la ruptura de las estructuras cristalinas y la liberación del Aluminio que se puede combinar con iones fosfatos y formar compuestos insolubles. En estos suelos, Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 el encalado favorece el incremento de la disponibilidad del fósforo por la precipitación del Aluminio. En los suelos derivados de cenizas antiguas (suelos rojo arcillosos) de la Zona Sur sometidos a procesos intensos de meteorización y condiciones de lavado de bases (alta pluviometría) clasificados como Ultisoles, las arcillas dominantes son los óxidos e hidróxidos de hierro y aluminio. Estas arcillas son estables hasta valores de pH tan bajos como 5, y en ellas la principal forma de pérdida de fósforo ocurre por adsorción sobre la superficie de los coloides. CAPACIDAD TAMPON DE FOSFORO La capacidad tampón del suelo o CP corresponde a la resistencia de un suelo particular a elevar sus contenidos de P-disponible al incrementar la aplicación de P-fertilizante. En otras palabras, es la cantidad de P-fertilizante que es necesario agregar para elevar el Fósforo disponible en 1 mg/Kg o ppm de fosfato por Kg de fósforo aplicado. El CP es una característica química del suelo, que se refiere a la relación entre el P-disponible que éste es susceptible de mantener en equilibrio en la solución suelo por cada Kg de fósforo agregado como fertilizante soluble al agua, tal como el Superfosfato Triple. Se ha observado que los suelos en general, muestran diferente efectividad inicial frente al fósforo aplicado como fertilizante, así los suelos de acuerdo a esta característica, pueden dividirse en reactivos y poco reactivos. En un suelo poco reactivo, una mayor proporción del fósforo aplicado permanece lábil y en un suelo de alta reactividad, se requiere agregar una mayor cantidad de fósforo para lograr el mismo contenido de P lábil, el que puede expresarse por ejemplo en ppm de P-Olsen por Kg de P-fertilizante aplicado. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Cuadro 1: Capacidad Tampón (CP) de las agrupaciones de suelos de la Xª Región, según la profundidad (Kg de P para subir 1 ppm Olsen). Para 10 cm Prof. •Trumaos •Trumao Chiloé •Rojo Arcilloso •Transición •Ñadis 14-16 15-18 10-12 11-13 15-17 Para 20 cm Prof. •Trumaos •Trumao Chiloé •Rojo Arcilloso •Transición •Ñadis 24-26 25-28 17-20 19-22 25-27 El CP permite predecir cuánto fósforo, en Kg por hectárea, es necesario aplicar a un suelo para subir el P-disponible desde un nivel inicial a un nivel esperado. Para estimar este valor, debe considerarse la tasa de reducción en el largo plazo (paso de P lábil a no lábil) y la extracción individual de los cultivos en la rotación. De este modo, la cantidad de fósforo que permanece lábil en el suelo depende fundamentalmente de la cantidad de fósforo agregado, de la capacidad tampón de P del suelo y de la extracción efectuada por los cultivos. Fertilización de corrección y mantención En la planificación de la fertilización fosfatada en los agro sistemas, debe considerarse las características de fijación de fósforo del suelo o su reactividad, una estimación de la extracción efectuada por los cultivos, los contenidos de Pdisponible del suelo y los antecedentes disponibles relativos al historial de fertilización tales como fuentes fertilizantes empleadas, formas y épocas de aplicación de fósforo. En el caso de considerar un criterio de fertilización de mantención, se aplica una dosis equivalente a la Dosis Óptima Económica, que permite suplir los requerimientos del cultivo o pradera para lograr un rendimiento esperado rentable. Con este criterio de fertilización se apunta a cubrir la cantidad de fósforo necesaria para corregir el déficit nutricional o diferencia entre los requerimientos del cultivo y el suministro de P disponible. En cambio, la aplicación de un criterio conservacionista considera la aplicación de fósforo sobre los requerimientos del cultivo en dosis superiores a la dosis óptima económica, de modo de incrementar paulatinamente los contenidos de Pdisponible del suelo y supliendo las necesidades del mismo suelo mediante la saturación de los sitios de más alta energía de retención hacia aquellos más lábiles. En este caso, la relación entre la efectividad residual de la fertilización y el Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 fósforo extraído por los sistemas de cultivo de la rotación, van a permitir obtener un balance positivo de acumulación de fósforo en el tiempo. Un criterio conservacionista estratégico, podría basarse en el empleo de una dosis de corrección basal, o sea la cantidad de fertilizante fosfatado necesaria para subir los contenidos de P-disponible presente en el suelo hasta un nivel determinado, más la dosis de producción, que será la cantidad total de fósforo necesaria para suplir los requerimientos del cultivo o pradera que dependerá del rendimiento esperado de la especie. Luego de lograr estos objetivos, se podrá después de un cierto tiempo retornar al empleo de la dosis óptima económica. Para cualquier alternativa que se elija, es necesario conocer los valores de disponibilidad de otros nutrientes, ya que la corrección de otras deficiencias favorecerá el aprovechamiento del fósforo por el cultivo alcanzando un mayor rendimiento. Ejemplos de cálculo utilizando los CP La fertilización de corrección de fósforo para un suelo trumao que tiene 4 ppm de P-Olsen, el cual está con pradera y se ha medido el Fósforo en una muestra tomada a 10 cm de profundidad. Se quiere llegar a las 15 ppm, utilizando dos estrategias, primero se considera realizar la corrección en un año y en segundo lugar se quiere realizar la corrección en tres años, de acuerdo a los criterios que permite aplicar el reglamento del PRSD. Cuadro 2: Ejemplo de Calculo de Dosis de Corrección P Dosis de P 2O5 = ( ppm a Alcanzar – ppm Inicial) * CP * 2.29 P inicial = 4 ppm Corrección en 1 año: P a Alcanzar = 15 ppm CP = 16 Kg de P /ppm Dosis = (15 – 4) * 16 * 2.29 = 403 Kg P2O5/ha (876 Kg SFT) Corrección en 3 años: (se consideran disminuciones entre cada año) 8 ppm Dosis = (8-4)*16*2.29= 147 Kg P2O5 12 ppm Dosis = (12-6.5)*16*2.29 = 202 “ 15 ppm Dosis = (15-10)*16*2.29= 183 “ Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 532Kg Al considerar la fertilización en un año, la dosis para alcanzar el nivel de 15 ppm es de 403 Kg/ha de P2O5, de acuerdo al ejemplo. Ahora si consideramos parcializar la corrección en un periodo de tres temporadas, debemos considerar que el suelo subirá en una primera etapa de 4 a 8 ppm, pero en el periodo las 8 ppm que estimamos llegar, disminuirán por efecto de la reactividad particular del tipo de suelo y para calcular la dosis de la temporada siguiente, nuestro nuevo nivel inicial no serán 8 ppm sino que será menos. En este ejemplo consideramos una pérdida de 1.5 ppm, es decir, nuestro nuevo nivel inicial ahora es de 6,5 ppm y el final 12 ppm. Al seguir el procedimiento anterior obtenemos que debemos aplicar 147 Kg/ha el primer año, 202 Kg/ha el segundo año y 183 Kg/ha el tercer año, lo que nos da un total de 532 Kg/ha de P2O5, repartido en tres años. Superior a la corrección realizada en una sola temporada. Este comportamiento está graficado en la figura 3, de acuerdo a lo presentado por Pinochet (1996). Figura 3: Efecto de la fertilización parcializada en el P-Olsen a través del tiempo. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 ACIDEZ DE SUELO René Bernier Villarroel, Ing. Agrónomo M.Sc. Centro Regional de Investigación Remehue, Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA E-mail:[email protected] En la Décima Región de Los Lagos, debido a las características climáticas y a su material original, los suelos agrícolas presentan variadas condiciones de acidez, como se aprecia en la figura 1. Distribución de frecuencia de muestras provenientes de cuatro agrupaciones de suelos según su pH. 80 Ñadi Trumao Transición Rojo-Arcilloso 60 40 20 0 4,6 - 5,0 Figura 1. 5,1 - 5,5 5,6 - 6,0 6,1 - 6,5 Distribución de frecuencia de muestras agrupaciones de suelos según su pH pH provenientes Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 de cuatro Aspectos conceptuales. La acidificación de los suelos es un problema que afecta amplias zonas de Chile, lo que se ve acentuado desde la VIII a la X Regiones. En rigor, la acidez corresponde más a un problema de los cultivos que de los suelos. Siempre existirá alg ún vegetal con tolerancia a determinado grado de acidez. Cuando ésta es superada, se produce el problema. Las diferentes especies vegetales tienen diferentes requerimientos de acidez de suelo (Cuadro 1). Cuadro 1. Valores de pH críticos y suficientes para algunos cultivos y praderas de la X Región. Especies Papa Ballica Avena Trigo Trébol blanco Pradera mixta Raps Cebada Trébol rosado Remolacha Alfalfa pH crítico 5,0 5,5 5,5 5,5 5,6 5,6 5,7 5,8 5,8 6,0 6,2 pH suficiente 5,5 5,7 5,7 5,8 5,8 5,8 5,9 6,0 6,0 6,4 6,6 Origen del problema. Existen procesos naturales que provocan la acidificación de los suelos. Estos procesos pueden ser acelerados o retardados por acción del hombre, a través de las prácticas de manejo. El proceso natural de mayor incidencia en la acidificación de los suelos es la lixiviación de los cationes básicos. La magnitud de esta pérdida y la aparición del Al3+ (tóxico), es debido a la cantidad e intensidad de las lluvias. En zonas áridas los pH son altos (alcalinos) y en zonas húmedas los pH son bajos (ácidos). (Figura 2). Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 H20 S Ca U Mg Mg L K K O Ca ++ OH – OH H+ Ca Ca E S Ca H U H + OH - H + Mg++ OH - H Al E Ca++ H+ OH K+ H Ca Ca L H + H + OH- Mg K O Na Ca++ OHOH- Mg+ + OH- OH K + OH- Figura 2. Esquema de la lixiviación de los cationes de intercambio. El laboreo intenso del suelo y el uso de fertilizantes de reacción ácida constituyen los factores principales de acidificación por acción del hombre. Actualmente, en el mercado de los fertilizantes se ofrecen productos que contienen nitrógeno en forma amoniacal (fertilizantes, nitroamoniacales o amoniacales) o amidada (urea). Estas formas de nitrógeno (amoniacal o amidada) pueden ser oxidadas a nitrito o nitrato, a través de la acción de microorganismos del suelo. Esta transformación es producto de una reacción que libera iones hidrógeno (H+), produciéndose la acidificación de la solución del suelo. En el Cuadro 2, se señalan algunos fertilizantes ofrecidos en el mercado, incluyendo los que pueden presentar riesgos de acidificación. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Cuadro 2. Alternativas para la fertilización nitrogenada en suelos con riesgos de acidificación. Productos Salitre Na Nitrocal Supernitro Mg (25% N 4%MgO) *Urea + Cal (3,6 kg CaCO3/kg N) Nitroplus (22%N, 7,5% MgO, 12%CaO) *Urea + Cal (1,8 kg CaCO3/kg N) Supernitro (25%N) Nitromag (27%N.5%MgO, 7%CaO) Urea (46%N) CaCO3 equivalente en exceso (E) o déficit (D) Kg CaCO 3/kg N 1,80 (E) 1,57 (E) 0,17 (E) Kg CaCO 3/100 kg fertilizante 28,80 (E) 24,30 (E) 4,20 (E) 1,80 (E) 82,80 (E) 0(neutro) 0 (neutro) 0(neutro) 0 (neutro) 0,14 (D) 3,50 (D) 0,87 (D) 23,60 (D) 1,80 (D) 82,80 (D) En el cuadro 2, se presenta los índices de acidez o basicidad que tienen los diferentes fertilizantes nitrogenados, expresados en kilogramos de carbonato de calcio puro por kilogramo de nitrógeno aportado por el fertilizante y cantidad de carbonato de calcio por 100 kilogramos de fertilizante. Ambas columnas son equivalentes. Por razones prácticas y debido a las diferentes solubilidades de los productos, se recomienda duplicar o triplicar las cantidades de carbonato de calcio indicadas en el cuadro 2. Acidez y productividad. A medida de que los suelos se acidifican, se solubilizan minerales que liberan Al a la solución del suelo. Este Al puede alcanzar niveles tóxicos dependiendo de la sensibilidad o tolerancia de los cultivos o forrajeras. El Al es liberado por el complejo de intercambio, debido a la disminución de las bases y al aumento de iones hidrógeno. En el intercambio el Al pasa a formar parte de las bases, y sumado al Ca, K, Mg y Na, constituyen la capacidad de intercambio efectiva (CICE). Sin embargo, el índice de saturación de Al (% sat. Al), es más ilustrativo para dimensionar el problema, porque da cuenta de la proporción que este elemento ocupa en la CICE. Cuando el índice de saturación de Al es mayor a 10, se espera que se produzcan síntomas de toxicidad. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Otro aspecto importante que se afecta por la presencia de Al es la actividad microbiológica. Cuando los niveles de Al son altos, esta actividad disminuye, lo que limita o restringe la mineralización y la fijación biológica del N, la mineralización del S y la del P. Además, cuando el pH del suelo disminuye, la capacidad de retención de fósforo aumenta. Esto se debe a la presencia de iones H y de Al en la solución del suelo. Grados de acidez. El pH del suelo es el indicador más generalizado de su grado de acidez. Estrictamente mide la concentración de los iones H presentes en la solución del suelo. El pH de la solución medido en agua no es un indicador demasiado riguroso del nivel de la toxicidad de Al, siendo más adecuado utilizar el % de saturación de Al, o también el pH del suelo medido en CaCl2.. Corrección de la acidez. Una de las formas de corregir la acidez de los suelos es a través de la aplicación de enmiendas calcáreas, existiendo diferentes materiales de origen mineral que son eficaces para producir este efecto. Entre las enmiendas calcáreas de uso agrícola se conocen las indicadas en el Cuadro 3. En éste se expresa el valor neutralizante de cada enmienda en relación a un valor de referencia del carbonato de calcio. Cuadro 3. Enmiendas calcáreas con diferente valor neutralizante. Material valor neutralizante ___________________________________________________ n carbonato de calcio 100 n carbonato de magnesio 119 n óxido de calcio (cal viva) 178 n óxido de magnesio 250 n hidróxido de calcio (cal apagada) 135 n hidróxido de magnesio 172 n dolomita (carbonato de Ca y de Mg) 108 n hidróxido de dolomita 175 La elección de la enmienda más adecuada depende de dos factores determinantes: n calidad de la enmienda n costo de la enmienda. La calidad de la enmienda se mide en base a : Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 n su poder de neutralización n tamaño de partículas (grado de finura) n contenido de magnesio. Como son productos de lenta solubilidad, el tamaño de las partículas adquiere gran importancia. A mayor finura hay mayor contacto entre la enmienda y las partículas de suelo. Reacciones de neutralización. En general, todas las enmiendas tienen reacciones similares en el suelo. Para ilustrar el proceso de neutralización se considerará al carbonato de calcio, por ser la enmienda más utilizada en el medio : n Hidrólisis del carbonato de calcio (CaCO3) CaCO3 - + H2O ===== Ca2+ + HCO3- + (OH)- Captura de factores ácidos ( H + ) mat.org. -H + 2 HCO3- ==== -H arcilla m.org. arcilla + 2 H2CO3 - El ión bicarbonato (HCO3-) captura 2 H+ que están en el coloide y producen acidez, dejando dos sitios vacíos (momentáneamente). n Disociación del ácido carbónico (H 2CO3) H2CO3 ===== H2O + CO2 (gas) n Ocupación de los sitios vacíos (por los iones Ca). Mat.org. o arcilla + Ca2- ======= mat.org. o arcilla Ca n Neutralización del Al Al3+ + 3 (OH)- ===== Al (OH)3 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 El ión Al activo es neutralizado por iones (OH)- provenientes de la hidrólisis del carbonato de calcio, formando un producto estable y fisico-químicamente neutro. Normas técnicas del uso de la cal. Tiempo de incubación Es el tiempo que la enmienda debe estar en contacto con el suelo, previo a una siembra. Este proceso se activa con la incorporación y mezcla del material con el suelo. Según las condiciones de temperatura y humedad, el tiempo de incubación puede variar de uno a varios meses. Material encalante. En el país no existe gran diversidad de materiales que se puedan utilizar para neutralizar la acidez del suelo. En la actualidad se pueden encontrar las enmiendas que se presentan en el Cuadro 4. Cuadro 4. Contenido de carbonato de calcio equivalente y otras características relevantes de algunas cales comerciales. Producto comercial % CaCO3 Equivalente 40 Fango IANSA 58 Cal IANSA 98 Magnecal 90 Soprocal 95 Otras características Alta humedad, produc to difícil de aplicar, heterogéneo, compactado. 30% de humedad, presenta algunos terrones. Contiene N, P y otros elementos. Contiene Mg (15 a 16% de MgO). Producto seco de alta finura. 0,6 a 1,2%de Ca (OH)2 (más rápido). 0,6 a 1,2% de MgO. Seco de alta finura. Varios orígenes y características. Conchas Molidas Fuente: Suárez, 1994. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 n Dosis de cal La dosis de cal depende fundamentalmente de los siguientes factores : n n n n n acidez actual del suelo (pH y % de saturación de Al) contenido de materia orgánica del suelo tipo de suelo (contenido y calidad de arcilla) poder neutralizante del material mallaje o grado de finura del material encalante El efecto del grado de finura del material se observa en el resultado experimental que se presenta en el cuadro 5. Cuadro 5. Efectividad de la calcita según el grado de finura. Tamaño Partículas Efectividad % > 2 mm inefectiva 0,25 a 2 mm 50 % < 0,25 mm 100 % R. Campillo, 1996. Dentro de las enmiendas calcáreas se incluye el sulfato de calcio o yeso. Este material se utiliza como enmienda en suelos salinos sódicos pero no tiene un efecto neutralizador de la acidez de los suelos, como se muestra en el siguiente experimento (Cuadro 6). Cuadro 6. Yeso Ton/ha 0 1,7 3,4 6,8 Efecto del carbonato de calcio (yeso) sobre las características químicas de un suelo Osorno después de un año aplicación (profundidad de 0 a 20 cm). Ca Int. Cmol+/kg 3,71 4,21 4,72 5,43 pH agua pH CaCl2 Al int. 5,50 5,50 5,40 5,40 4,80 4,80 4,80 4,80 0,34 0,24 0,33 0,30 Fuente: R. Campillo, 1996. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Como se aprecia en el cuadro 6, las dosis crecientes de sulfato de calcio (yeso agrícola) producen un incremento en los niveles de calcio intercambiable del suelo, pero no tiene efecto sobre el pH ni sobre el aluminio de intercambio. BIBLIOGRAFIA CAMPILLO, R. 1994. Diagnóstico de la fertilidad de los suelos de la Décima Región. En: Campillo y Bortolameolli (ed). Corrección de la fertilidad y uso de enmiendas en praderas y cultivos forrajeros. Serie Remehue Nº 53. 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Producción Animal. Universidad Austral de Chile, Facultad de Ciencias Agrarias, Instituto de Producción Animal, Valdivia (Chile), Serie B-18, p: 39 – 65. SUAREZ, DOMINGO. 1996. Acidificación de suelos y uso de fertilizantes nitrogenados. En.: Latrille, L. (ed). Producción Animal. Universidad Austral de Chile, Facultad de Ciencias Agrarias, Instituto de Producción Animal, Valdivia (Chile), Serie B – 20, p: 145 – 161. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 DOSIS DE CORRECCION DE FOSFORO, Y DE ENMIENDAS CALCAREAS Pablo Undurraga Díaz, Ing. Agrónomo Centro Regional de Investigación Remehue, Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA E-mail: [email protected] INTRODUCCION Los conceptos teóricos del fósforo y acidez del suelo se describieron en capítulos anteriores, en éste veremos cómo realizar las recomendaciones de P y Cal para los Planes de Manejo de los subprogramas de Fertilidad Fosfatada y enmiendas calcáreas para el Programa Recuperación de Suelos Degradados (PRSD). Para recomendaciones de estos subprogramas, se han generado tablas para los diferentes grupos de suelos de la Región, las que deben ser aplicadas previo análisis químico de suelos de los potreros a intervenir, de donde se obtiene el nivel de fósforo inicial, que debe ser menor a 15 ppm y la saturación de aluminio mayor a 5% o pH menor a 5,8. En el caso de no contar con análisis de suelos, se utilizan las recomendaciones del Estudio de Fertilidad de las Microrregiones de la Xª Región, el que trabaja con valores promedio de análisis y sus recomendaciones correspondientes dependiendo del tipo de suelo presente. En este caso, las dosis están dadas y se debe considerar la aplicación de la desviación estándar o usar las dosis medias, de acuerdo al criterio del operador y a la realidad del sitio en cuestión. ESTUDIO DE FERTILIDAD MICRORREGIONES Xª REGION Para la aplicación del Programa de recuperación de suelos degradados, en el caso de los subprogramas de Fertilización Fosfatada y Enmiendas Calcáreas, el reglamento para su aplicación exige contar con un análisis químico de suelos, del o los potreros que se quieren incorporar a estos subprogramas, para verificar los niveles iniciales, y con éstos calcular las dosis necesarias de Fertilización Fosfatada y enmienda calcárea. En la Región se han definido con anterioridad microrregiones, por CIREN para la Estrategia de Desarrollo Agrícola de las Áreas de INDAP Xª Región (EDAA) en 1994. Para estas mismas se realizó un estudio de fertilidad, el que servirá para reemplazar el análisis de suelos individual, en la aplicación del PRSD, en esta región. Con el estudio de fertilidad se elaboraron tablas de corrección de Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 fertilización fosfatada, en base al nivel de fósforo y de neutralización de la acidez, con los valores de porcentaje de saturación de aluminio y/o valores de pH del suelo. El estudio consideró la toma de muestras de suelos de 29 microrregiones, donde se concentra el mayor número de pequeños agricultores y potenciales usuarios del Programa, para definir el nivel de fertilidad, realizándose análisis de fósforo extractable, pH al agua, bases de intercambio, aluminio intercambiable y porcentaje de saturación de aluminio. Con la información analítica obtenida se realizó un estudio de la variabilidad de los datos, con el objeto de definir los estadígrafos adecuados que permiten una aproximación más cercana a la realidad de cada microrregión. Con los resultados ajustados estadísticamente se establecieron las recomendaciones de fertilización de corrección de fósforo en base a la mediana de los datos. En este caso, no se usó la media o promedio, ya que por el reducido número de muestras, es más representativa la mediana. Además, se calculó la variabilidad de los datos obteniéndose la desviación estándar, que da un rango (mayor o menor) de operación que permitirá ajustar las recomendaciones de dosis, de acuerdo a la observación de los técnicos de terreno y a las condiciones del sitio. La opción de aplicar la desviación estándar permite ajustar mejor la recomendación, con valores superiores o inferiores al valor de referencia. Las variables que se consideraron en el estudio corresponden a fósforo extractable, pH en agua, contenidos de calcio, magnesio, potasio y sodio intercambiables, además del aluminio de intercambio, saturación de aluminio, suma de bases y capacidad de intercambio catiónico efectiva (CICE). Con el objeto de realizar un análisis detallado de cada microrregión, se han establecido diferentes estadígrafos como la mediana, la media y desviación estándar de la población de datos analíticos recogidos, además de los valores extremos (mínimos y máximos) y el coeficiente de variación existente entre los valores muestreados en cada microrregión. En la mayoría de las microrregiones se ha observado que existe gran variabilidad en los análisis de suelos obtenidos de muestras provenientes de diferentes agricultores de la misma microrregión, como se señala en los cuadros y gráficos siguientes. El estudio consiste básicamente en una descripción de cada una de las microrregiones y las dosis de fertilización de corrección de fósforo y de enmiendas calcáreas. Cada microrregión se describe en tres páginas, de acuerdo al ejemplo que se adjunta de la Microrregión 1005, que consisten en lo siguiente: Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Primera Pág.: Contiene una descripción de la Unidad geomorfológica donde se ubica y la capacidad de uso de los suelos principales, con la caracterización de la fertilidad de acuerdo a los análisis químicos efectuados. Segunda Pág.: Contiene la distribución gráfica de los análisis de Fósforo y Saturación de Aluminio, donde se descomponen en rangos para verificar el acercamiento de los datos a una distribución normal. Cuando la distribución real de los valores se diferencia ampliamente de la normal, se hace necesario ajustar la información eliminando uno o dos valores que distorsionen la representatividad de las muestras. De este modo y en base a la información ajustada se diseñan las tablas de recomendación. Un cuadro donde aparecen los diferentes parámetros de fertilidad de suelos que han sido analizados en el laboratorio que considera todos los estadígrafos de las determinaciones análisticas realizadas, con las muestras de suelos tomadas a 10 cm de profundidad. Incluye la mediana, media, desviación estándar, mínima, máxima, número de casos y coeficiente de variación. Al final de esta página se muestra un cuadro con los estadígrafos ajustados para lograr una distribución normal de los análisis de fósforo Olsen, pH en agua y saturación de aluminio. Tercera Pág.: Se presentan las recomendaciones de fertilización de corrección de fósforo y dosis de cal según análisis de suelos. Donde el primer cuadro contiene los valores ajustados de los parámetros de fertilidad y la desviación estándar a 10 y a 20 cm de profundidad, según se requiera para recomendaciones de fertilización de praderas y/o cultivos respectivamente. El cuadro 2 de esta página contiene las dosis de P2O5 de corrección y de carbonato de calcio para praderas y cultivos, en aplicaciones a 1, 2 ó 3 años, según sean las necesidades de parcialización que requiera cada agricultor en particular. Además, se indica la cantidad necesaria de fósforo o de carbonato de calcio que se suma o resta, por la desviación estándar de los análisis de suelos ajustados para la microrregión en particular. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Microrregión : 1005 Descripción : Se desarrolla como una banda de conos proglaciarios, por delante de las áreas morrénico lacustres de los lagos Panguipulli y Riñihue. Unidad Geomorfológica : Depósitos morrénicos y conos proglaciarios Capacidad Uso de Suelos : Clase IV, V y VI. Los niveles de fertilidad de suelos que se observan en esta microrregión son bajos, en general. La suma de bases acusa bajos tenores de calcio, magnesio y potasio. Por esto, a pesar de que el contenido de Al de intercambio también es bajo, el porcentaje de saturación de Al es ligeramente alto, con una media de 10,12% y una mediana de 8,11%. La solución del suelo presenta un pH promedio de 5,60 al igual que la mediana, correspondiente a la categoría de ligeramente ácido. Los niveles de fósforo son muy bajos (<5 ppm) en la mayoría de los sitios muestreados, anotándose un caso con un valor de 8,40 ppm P. En general se aprecia una marcada variabilidad en lo datos analíticos, producto de la variabilidad natural que presentan los suelos cuando han sido sometidos a diferentes manejos. Este hecho se manifiesta en todos los parámetros analizados, a excepción del pH Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 MICRORREGION 1005 DISTRIBUCION Y ESTADISTICAS DE ANALISIS DE SUELOS A 10 cm. FOSFORO OLSEN ppm SATURACION DE ALUMINIO % Distribución Normal 13 12 13 12 11 10 9 11 10 9 Nº OBSERVACIONES Nº OBSERVACIONES Distribución Normal 8 7 6 5 4 3 2 1 0 8 7 6 5 4 3 2 1 0 0 1.9 3.8 5.7 7.6 9.5 11.4 ESPERADA CATEGORIAS Estadígrafos 3,50 3,68 1,67 0,90 8,40 23,00 45,28 5 15 Sodio Aluminio Int. cmol/Kg(+) 5,60 5,60 0,15 5,30 5,90 23,00 2,72 1,45 2,00 1,07 1,03 4,69 23,00 53,50 0,31 0,41 0,21 0,25 1,06 23,00 51,62 25 35 CATEGORIAS Fósforo pH agua Calcio Magnesio Potasio ppm Mediana Media Desv. Estándar Mínima Máxima Nº Casos Coef. Var. % -5 0,22 0,25 0,09 0,15 0,47 23,00 35,95 0,12 0,13 0,05 0,06 0,31 23,00 38,20 0,19 0,27 0,24 0,07 1,06 23,00 86,41 45 55 ESPERADAS Suma Bases Saturación CICE Al % cmol/Kg(+ ) 2,13 8,11 2,63 2,79 10,12 3,06 1,34 8,66 1,32 1,73 1,15 1,93 6,34 37,58 6,90 23,00 23,00 23,00 48,11 85,57 43,06 ESTADIGRAFOS AJUSTADOS Estadígrafos Mediana Media Desv. Estándar Mínima Máxima Nº Casos Coef. Var. % Fósforo ppm pH agua 3,50 3,59 1,24 1,20 5,80 21,00 34,62 Saturación Al % 5,60 5,60 0,15 5,30 5,90 23,00 2,72 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 8,11 8,76 5,20 2,33 21,22 19,00 59,33 MICRORREGION 1005 RECOMENDACIONES DE FERTILIZACION DE CORRECCION DE FÓSFORO DOSIS DE CAL SEGÚN ANÁLISIS DE SUELO. Y 1. Valores ajustados de los parámetros de fertilidad y desviación estándar a dos profundidades de suelo (10 y 20 cm.) Prof. P Olsen cm. (ppm) 3,5 1,2 1,6 0,6 10 20 D.S. D.S. pH agua 5,6 0,2 5,6 0,2 Ca int 1,45 1,07 0,81 0,59 Mg int 0,31 0,21 0,18 0,12 Na int Al int Suma de Bases cmol(+)/Kg 1 0,22 0,12 0,09 0,05 0,15 0,07 0,06 0,03 0,19 0,24 0,19 0,24 2,1 1,3 1,2 0,8 K int Sat. Al 3 CICE 2 (%) 8,1 5,2 13,4 7,8 cmol(+)/Kg 2,6 1,3 1,6 0,8 1 cmol(+)/Kg; reemplaza a meq/100g de suelo en igual magnitud y corresponde a centésimo de mol de cargas + por kg de suelo (cationes). 2 Sat. Al; Proporción de aluminio de Intercambio de la CICE. Se calcula: (Al int./CICE) *100. 3 CICE : Capacidad de intercambio catiónico efectiva, corresponde a la suma de bases (Ca+Mg+K+Na) + Al intercambio. D.S Desviación estándar. 2. Dosis de P 2O5 de corrección y de carbonato de calcio para praderas y cultivos en aplicaciones de 1, 2 ó 3 años. Pradera Cultivo 1 año 4 2 años 3 años 1 año 2 años 3 años P2O5 5 P2O5 (+/-) 6 400 464 496 773 897 959 44 51 55 36 42 45 CaCO 3 7 Kg /ha 904 3.312 3.478 3.577 CaCO 3 (-) 8 CaCO 3 (+) 904 905 3.002 3.152 3.310 1.543 1.620 1.701 9 4 Aplicación en 1, 2 ó 3 años. 5 Dosis total de P 2O5 en kg/ha para 1 , 2 ó 3 años de aplicación. Para aplicación en 2 años fraccionar un 60% al año 1 y 40 % al año 2; y aplicación a 3 años fraccionar en 40% al año 1 y 30% a los años 2 y 3 respectivamente. 6 Ajuste de dosis de acuerdo a desviación estándar. Se sumará o restará de la dosis total de P 2O5, de acuerdo a las condiciones propias del sitio. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 7 Dosis total de CaCO3 en kg/ha para 1, 2 ó 3 años de aplicación. Para aplicación en 2 años fraccionar un 60% al año 1 y 40 % al año 2; y aplicación a 3 años fraccionar en 40% al año 1 y 30% a los años 2 y 3 respectivamente. 8 Ajuste de dosis de acuerdo a desviación estándar. Se restará de la dosis total de CaCO3, de acuerdo a las condiciones propias del sitio. 9 Ajuste de dosis de acuerdo a desviación estándar. Se sumará de la dosis total de CaCO3, de acuerdo a las condiciones propias del sitio. 1. Recomendaciones de corrección de fósforo cuando se cuenta con el análisis de suelo. En este caso, se utilizan las tablas de los cuadros 1 y 2 (estudio de micorregiones), que presentan las recomendaciones de corrección de fósforo para diferentes niveles iniciales y con parcialización hasta tres años. El cuadro 1, tiene las dosis de P2O5 para aplicaciones en cobertera, que se utilizarán para praderas establecidas previamente, donde el muestreo de suelos fue realizado a una profundidad de 0 a 10 cm. El cuadro 2, muestra la tabla de dosis de P2O5 para cultivos o aplicaciones incorporadas, para diferentes niveles iniciales y tipos de suelos. La utilización de estas tablas se explica gráficamente en la figura 1, donde se detalla la secuencia de entrada a la tabla y la forma de obtener la dosis de corrección de acuerdo al nivel inicial del P en el análisis de suelos. En el caso de valores de ppm intermedios se debe realizar el procedimiento de interpolación que está ejemplarizado en la figura 2. La forma de proceder es la siguiente: § Primero se debe verificar en el análisis de suelo el contenido de fósforo inicial, posteriormente se va a la tabla de corrección de fósforo para alcanzar 15 ppm y se trabaja con la profundidad según corresponda (10 cm fertilización de pradera y 20 cm para cultivos). Después se debe seleccionar el tipo de suelo y finalmente se utilizará la dosis recomendada que corresponda según el número de años en que se realice la corrección (parcialización). § Cuando el análisis de suelo indique el contenido de fósforo con un decimal (P 2O5 3.5 ppm) se deberá realizar una Interpolación, de acuerdo al ejemplo de la figura 2. Luego de obtener la dosis de fósforo de corrección se debe traspasar al plan de manejo y agregar la “dosis de producción”. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Profundidad para fertilización de pradera Fósforo Inicial Tipo de suelo Nº años Plan Dosis recomendada Dosis de P2O5 de correción para 10cm prof. P inicial (ppm) Trumao CP (Kg P/ppm) P2O5 Kg/ha (1año) P2O5 Kg/ha (2año) P2O5 Kg/ha (3año) 1 2 3 4 (Osorno, Valdivia, Llanquihue, Palena) 16 16 16 16 492 455 418 381 285 264 242 221 203 188 173 157 Trumao CP (Kg P/ppm) P2O5 Kg/ha (1año) P2O5 Kg/ha (2año) P2O5 Kg/ha (3año) (Chiloé) 18 18 531 491 308 285 220 203 18 450 261 186 18 410 238 170 Rojo arcilloso CP (Kg P/ppm) P2O5 Kg/ha (1año) P2O5 Kg/ha (2año) P2O5 Kg/ha (3año) (Región) 12 12 370 342 215 198 153 141 12 314 182 130 12 286 166 118 Figura 1: Utilización de las tablas de dosis de corrección de P. Ejemplo interpolación 3.5 ppm P inicial en analisis P inicial (tabla): Dosis (tabla) : Procedimiento: 3.0 ppm 4.0 ppm 418 381 418 – 381 = 37 3,7 Kg/0,1 3,7 * 5 = 18,5 Dosis final 418 – 18,5 = 399,5 Kg/ha P 2 5 O Figura 2: Ejemplo de interpolación para calcular la dosis de P. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 (Kg/ha) Cuadro 1: Tabla de recomendaciones de fósforo de corrección para aplicaciones en cobertera (praderas), según análisis de suelos a 10 cm de profundidad. Dosis de P2O5 de correción para P inicial (ppm) 1 Suelo Trumao (Osorno, Valdivia, Llanquihue, Palena) CP (Kg P/ppm) 16 P2O5 Kg/ha (1año) 492 P2O5 Kg/ha (2año) 285 P2O5 Kg/ha (3año) 203 Suelo Trumao (Chiloé) CP (Kg P/ppm) 18 P2O5 Kg/ha (1 año) 531 P2O5 Kg/ha (2 años) 308 P2O5 Kg/ha (3 años) 220 Suelo Rojo arcilloso (Región) CP (Kg P/ppm) 12 P2O5 Kg/ha (1año) 370 P2O5 Kg/ha (2año) 215 P2O5 Kg/ha (3año) 153 Suelo Transición Región CP (Kg P/ppm) 13 P2O5 Kg/ha (1año) 406 P2O5 Kg/ha (2año) 235 P2O5 Kg/ha (3año) 168 Suelo Ñadi Region CP (Kg P/ppm) 17 P2O5 Kg/ha (1año) 521 P2O5 Kg/ha (2año) 302 P2O5 Kg/ha (3año) 215 10 cm de profundidad 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 16 455 264 188 16 418 242 173 16 381 221 157 16 344 199 142 16 306 178 127 16 16 16 14 14 14 14 14 269 232 195 158 126 95 63 32 156 135 113 111 18 491 285 203 18 450 261 186 18 410 238 170 18 370 215 153 18 330 191 136 18 289 168 120 12 342 198 141 12 314 182 130 12 286 166 118 12 12 12 12 12 10 10 258 229 201 173 145 117 93 149 133 117 100 106 13 375 217 155 13 344 200 142 13 314 182 130 13 283 164 117 13 13 13 13 11 11 11 11 11 252 221 191 160 129 104 78 52 26 146 128 111 104 17 482 279 199 17 442 257 183 17 403 234 167 17 364 211 150 17 324 188 134 17 285 165 118 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 18 18 15 15 15 15 15 249 209 168 135 101 67 34 144 121 103 10 10 10 70 47 23 17 17 15 15 15 15 15 246 206 167 134 100 67 33 143 120 102 Cuadro 2: Tabla de recomendaciones de fósforo de corrección para aplicaciones incorporadas (cultivos), según análisis de suelos a 20 cm de profundidad. Dosis de P2O5 de correción para 20 cm de profundidad P inicial (ppm) 1 2 3 4 5 6 7 Suelo: Trumao (Osorno, Valdivia, Llanquihue, Palena) CP (Kg P/ppm) 26 26 26 26 26 26 26 P2O5 Kg/ha (1año) 809 749 689 629 569 509 449 P2O5 Kg/ha (2 años) 453 419 386 352 319 285 251 P2O5 Kg/ha (3 años) 318 295 271 247 224 200 177 Suelo: Trumao (Chiloé) CP (Kg P/ppm) 28 28 28 28 28 28 28 P2O5 Kg/ha (1año) 870 806 741 677 613 548 484 P2O5 Kg/ha (2 años) 487 451 415 379 343 307 271 P2O5 Kg/ha (3 años) 342 317 292 266 241 216 190 Suelo: Rojo arcilloso (Región) CP (Kg P/ppm) 20 20 20 20 20 20 20 P2O5 Kg/ha (1año) 616 569 523 477 431 384 338 P2O5 Kg/ha (2 años) 345 319 293 267 241 215 189 P2O5 Kg/ha (3 años) 242 224 206 188 169 151 133 Suelo: Transición Región CP (Kg P/ppm) 22 22 22 22 22 22 22 P2O5 Kg/ha (1año) 681 630 578 527 476 425 374 P2O5 Kg/ha (2 años) 381 353 324 295 267 238 210 P2O5 Kg/ha (3 años) 268 248 228 207 187 167 147 Suelo: Ñadi Region CP (Kg P/ppm) 27 27 27 27 27 27 27 P2O5 Kg/ha (1año) 847 785 722 660 598 535 473 P2O5 Kg/ha (2 años) 474 439 404 370 335 300 265 P2O5 Kg/ha (3 años) 333 309 284 260 235 211 186 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 8 9 10 11 12 13 14 26 389 218 153 26 24 24 24 24 24 329 269 215 161 108 54 184 151 121 129 28 420 235 165 28 25 25 25 25 25 355 291 233 174 116 58 199 163 130 140 20 20 17 17 17 17 17 292 245 199 159 120 80 40 163 137 22 22 19 19 19 19 19 323 272 221 177 133 88 44 181 152 124 127 27 411 230 162 27 25 25 25 25 25 349 286 229 172 115 57 195 160 128 137 2. Recomendación de fósforo utilizando las tablas del Estudio de Fertilidad de las Microrregiones. En este caso las dosis de corrección están calculadas, de acuerdo al análisis de suelos promedio (cuadro 3) y para ello se deberá indicar el valor de P inicial del análisis de suelo de la microrregión en el plan y si el operador lo estima conveniente ajustará los valores del fósforo inicial utilizando la desviación estándar. Cuadro 3. Ejemplo de resultados de análisis de suelo de la microrregión. Prof. P Olsen cm. (ppm) 10 20 D.S. D.S. 3,5 1,2 1,6 0,6 pH agua Ca int Mg int K int Na int Al int Suma de Bases cmol(+)/Kg 5,6 0,2 5,6 0,2 1,45 1,07 0,81 0,59 0,31 0,21 0,18 0,12 0,22 0,09 0,15 0,06 0,12 0,05 0,07 0,03 0,19 0,24 0,19 0,24 2,1 1,3 1,2 0,8 Sat. Al CICE (%) cmol(+)/Kg 8,1 5,2 13,4 7,8 2,6 1,3 1,6 0,8 D.S Desviación estándar. En el cuadro 4, se encuentran las dosis recomendadas de corrección de P para ser utilizadas en el Plan de Manejo. Cuadro 4. Ejemplo de Dosis de P2O5 de corrección y de carbonato de calcio para praderas y culti vos en aplicaciones de 1, 2 ó 3 años para una microrregión. P2 O5 Pradera Cultivo 1 año 2 años 3 años 1 año 2 años 3 años 400 464 496 773 897 959 P2 O5 (+/-) 44 51 55 36 42 45 CaCO3 Kg /ha 904 3.312 3.478 3.577 CaCO3 (-) CaCO3 (+) 904 905 3.002 3.152 3.310 1.543 1.620 1.701 Las tablas de resultado de análisis de suelo y de dosis se utilizan de la siguiente forma, considerando la utilización de la desviación estándar, donde el operador deberá sumar o restar según corresponda: § En el caso de sumar la D.S. del resultado del análisis se deberá restar el valor correspondiente en la dosis de corrección (Ejemplo 1) cuando el operador considere que el suelo presenta un mayor contenido de P Inicial por el manejo que ha tenido ese suelo. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 § En el caso de restar la D.S. del reultado del análisis se deberá sumar el valor correspondiente en la dosis de corrección (Ejemplo 2) cuando el operador considere que el suelo presenta un menor contenido de P Inicial. Ejemplo 1: Se realizará un plan de corrección de P, en el cultivo de papa a un año. Por los manejos anteriores del potrero se considera que el nivel de P inicial es mayor al de la microrregión, por tanto, se utilizará la D.S para ajustar los valores sumando este estadígrafo. Al subir el nivel de P inicial, la dosis de corrección deberá ajustarse. Para ello se restará de la dosis indicada el valor de la D.S. Cultivo papa (20 cm) Prof. P Olsen cm. (ppm) 10 3,5 1,2 1,6 0,6 D.S. 1,6 + 0,6 = 2,2 P Olsen (ppm) P + D.S = P inicial 20 D.S. P2 O 5 Dosis de Corrección en 1 año 773 – 36 = 737 Kg/ha Pradera Cultivo 1 año 2 años 3 años 1 año 2 años 3 años 400 464 496 773 897 959 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 P2 O 5 (+/-) Kg /ha 44 51 55 36 42 45 Ejemplo 2: Se realizará un plan de corrección de P, en fertilización de pradera a dos años. Por la condición de la pradera se considera que el nivel de P inicial es menor al del promedio de la microrregión, por tanto, ajustarán los valores restando la D.S. Al bajar el nivel de P inicial la dosis de corrección deberá ajustarse, para ello se sumará a la dosis indicada el valor de la D.S. Fertilización pradera 3,5 – 1,2 = 2,3 P Olsen (ppm) P 1 + D.S = P inicial Prof. P Olsen cm. (ppm) 10 3,5 1,2 1,6 0,6 D.S. 20 D.S. P2O 5 Dosis de Corrección en 2 años Pradera 464 + 51 = 515 Kg/ha Cultivo 1 año 4 2 años 3 años 1 año 2 años 3 años 400 464 496 773 897 959 5 P2 O 5 (+/-) Kg /ha 44 51 55 36 42 45 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 3. Dosis de fósforo de producción: Luego de obtener la dosis de corrección se debe estimar la “dosis de producción”, que será la cantidad necesaria a aplicar que requiere el cultivo o pradera de acuerdo al nivel de rendimiento esperado. En el capítulo de recomendaciones de fertilización según análisis de suelos, se encuentran las instrucciones para estimar la dosis de producción de P2O5. La precaución que se debe tener es que el nivel inicial de P del análisis se debe agregar las ppm con que quedará el suelo después de aplicar la dosis de corrección. Para facilitar el cálculo de las dosis de producción se han diseñado las tablas que se presentan a continuación en los cuadros 5 y 6, para praderas y cultivos, de acuerdo a un amplio rango de rendimientos esperados. Las dosis presentadas corresponden a suelos donde se ha alcanzado el nivel de 15 ppm, ya que se considera que se aplicarán conjuntamente la “dosis de corrección” de P y la “dosis de producción”. Cuadro 5: Dosis de de P 2O5 de producción para cultivos. Papas Rendimiento Dosis de esperado Producción Ton/ha Kg P2O5/ha 15 34 20 46 30 69 35 80 40 92 45 103 50 115 55 126 Trigo Rendimiento Dosis de esperado Producción qq/ha Kg P2O5/ha 25 29 30 35 40 46 50 58 60 69 70 81 80 92 90 104 Avena Rendimiento Dosis de esperado Producción qq/ha Kg P2O5/ha 15 16 25 27 35 37 45 48 55 59 65 70 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Cuadro 6: Dosis de P 2O5 de producción para praderas. Pastoreo Rendimiento Dosis Producción esperado Kg MS/ha Kg P2O5/ha 1500 11 2000 14 3000 21 4000 28 5000 35 6000 42 7500 53 8500 60 10000 70 3. Corte y Pastoreo Rendimiento Dosis Producción esperado Kg MS/ha Kg P2O5/ha 2000 18 3000 27 4000 36 5000 45 6000 54 7000 63 8000 72 9000 81 10000 90 Dosis de enmiendas calcáreas utilizando las tablas de la microrregión. En este caso, las recomendaciones están formuladas y para ello se deberá indicar el valor de la saturación de aluminio inicial del análisis de suelo de la microrregión en el plan y si el operador lo estima conveniente ajustará los valores de la saturación de aluminio inicial utilizando la desviación estándar. En el cuadro 3 (estudio de microrregiones), se encuentran las dosis recomendadas para bajar la saturación de Al a 5% y/o para llegar a pH 5,8 cuando la saturación de aluminio es menor o igual a 5%, para praderas y cultivos y de acuerdo a los años que se desee parcializar (hasta tres años). Para el caso de aplicar la desviación estándar se procede de forma similar a la metodología explicada para la corrección de P. Ejemplo 3: De acuerdo al ejemplo de microrregión del cuadro 3, el suelo tiene una saturación de aluminio de 8,1%, con una desviación estándar de +- 5,2% para el análisis promedio a 10 cm de profundidad de suelo. Es decir, si se le resta este valor, el suelo no requiere de aplicación de enmienda cálcarera (8.1 – 5.2 = 2.9), al restar la dosis del cuadro 4 de la columna “CaCO3(-)”, por tanto, la dosis será 0 (904– 904 kg/ha de CaCO3). En el caso de sumar la D.S. (8.1 + 5.2) se obtiene una saturación de aluminio inicial de 13,3%, es decir, se debe sumar a la dosis promedio de 904 kg la dosis de la columna “CaCO3(+)” que es de 905 (904 + 905) es decir la dosis será de 1809 kg/ha de CaCO3. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 4. Dosis de enmiendas calcáreas utilizando análisis de suelo. Para estimar la dosis de CaCO3 necesaria para bajar la saturación de aluminio a 5%, se utilizarán las tablas de los cuadros 7 y 8 (estudio de microrregiones), para cultivos y praderas respectivamente. Estos cuadros tienen las dosis de CaCO3 para niveles iniciales de saturación de aluminio desde 50% hasta 5%, para tres grupos de suelos representativos de la región (Trumaos, Rojos Arcillosos y Transición). El cuadro 7, muestra la tabla de dosis de carbonato de calcio para cultivos o aplicaciones incorporadas y el cuadro 8 para aplicaciones en praderas establecidas o en cobertera para diferentes niveles iniciales de saturación de aluminio y tipos de suelos. El cuadro 9, tiene las dosis de CaCO3 para aplicar el criterio del pH. Se utiliza solamente cuando la saturación de aluminio es menor o igual a 5% y el pH menor a 5,8. El cuadro presenta dosis de CaCO3, para alcanzar un pH de 5.8 de acuerdo al tipo de suelo y según la profundidad de 10 cm para aplicaciones en cobertera y 20 cm para aplicaciones incorporadas para los suelos de la Xª región (Trumaos, Ñadis, Rojo y Transición). La utilización de estas tablas se explica gráficamente en la figura 3, donde se detalla la secuencia de entrada a la tabla y la forma de obtener la dosis de enmienda de acuerdo al nivel inicial de saturación de aluminio del suelo. La forma de proceder es la siguiente: § Primero se debe verificar en el análisis de suelo el nivel inicial de saturación de aluminio (ej.: 20%), posteriormente se va a la tabla de corrección de saturación de aluminio 5% y se trabaja con la profundidad según corresponda (10 cm fertilización de pradera y 20 cm para cultivos). Después se debe seleccionar el tipo de suelo y finalmente se utilizará la dosis recomendada que corresponda según el número de años en que se realice la corrección (parcialización). La cantidad de CaCO3 para aplicaciones 2 años y 3 años debe dividirse en 2 o 3 aplicaciones según corresponda aplicando una mayor dosis el primer año. En aplicaciones a 2 años, como criterio se puede usar el 60% de la dosis el primer año y el 40% el segundo año. En aplicaciones a tres años usar el 40% el primer año, el 30% el segundo año y el 30% restante al tercer año. La dosis de CaCO3 no debe exceder los 3.500 Kg/ha año en cobertera y 4.700 Kg/ha año incorporado, para evitar desbalances de bases en el suelo. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Profundidad de muestra (fertilización de pradera) Tipo de suelo Nº años Plan Sat. Al Inicial Dosis recomendada Sat Al(%) inic. 25 24 23 22 21 20 19 18 17 16 15 14 13 12 11 Dosis en Kg/ha de CaCO3 Trumao 1año 3.019 2.942 2.862 2.779 2.692 2.600 2.504 2.402 2.295 2.182 2.060 1.931 1.792 1.642 1.479 2año 3.169 3.089 3.005 2.918 2.826 2.730 2.629 2.523 2.410 2.291 2.184 2.047 1.900 1.740 1.568 para 10 cm Rojo 3año 3.260 3.177 3.091 3.001 2.907 2.808 2.704 2.595 2.479 2.356 2.246 2.105 1.953 1.790 1.612 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 1año 2.083 2.030 1.975 1.917 1.857 1.794 1.728 1.658 1.584 1.505 1.422 1.332 1.237 1.133 1.020 2año 2.187 2.131 2.074 2.013 1.950 1.884 1.814 1.741 1.663 1.581 1.507 1.412 1.311 1.201 1.082 Cuadro 7: cultivos. Dosis de carbonato de calcio para bajar saturación de aluminio al 5% en Dosis en Kg/ha de CaCO3 para 20 cm Sat Al(%) inic. 50 49 48 47 46 45 44 43 42 41 40 39 38 37 36 35 34 33 32 31 30 29 28 27 26 25 24 23 22 21 20 19 18 17 16 15 14 13 12 11 10 9 8 7 6 1año 4.660 4.487 4.306 4.114 3.910 3.693 3.461 3.212 2.943 2.650 2.330 1.976 1.580 1.131 613 Trumao 2año * 8.049 7.979 7.907 7.833 7.758 7.681 7.602 7.522 7.440 7.356 7.269 7.181 7.090 6.997 6.901 6.803 6.701 6.597 6.489 6.378 6.324 6.204 6.080 5.952 5.819 5.680 5.536 5.386 5.229 5.065 4.893 4.712 4.521 4.319 4.105 3.914 3.669 3.405 3.119 2.809 2.470 2.094 1.675 3año * 8.282 8.209 8.135 8.059 7.982 7.903 7.822 7.739 7.654 7.568 7.479 7.388 7.295 7.199 7.100 6.999 6.894 6.787 6.676 6.562 6.505 6.381 6.254 6.122 5.985 5.843 5.694 5.540 5.379 5.210 5.033 4.846 4.650 4.443 4.223 4.025 3.772 3.501 3.208 2.889 2.540 1año 4.709 4.645 4.579 4.510 4.440 4.368 4.293 4.216 4.136 4.054 3.968 3.879 3.787 3.691 3.591 3.486 3.377 3.262 3.141 3.014 2.879 2.737 2.585 2.423 2.248 2.060 1.855 1.631 1.383 1.106 792 429 Rojo 2año * 5.635 5.585 5.535 5.483 5.431 5.377 5.322 5.265 5.208 5.149 5.089 5.027 4.963 4.898 4.831 4.762 4.691 4.618 4.542 4.465 4.427 4.343 4.256 4.166 4.073 3.976 3.875 3.770 3.660 3.546 3.425 3.298 3.165 3.023 2.874 2.740 2.568 2.383 2.184 1.967 1.729 3año * 5.797 5.746 5.694 5.641 5.587 5.532 5.475 5.417 5.358 5.297 5.235 5.172 5.106 5.039 4.970 4.899 4.826 4.751 4.674 4.594 4.553 4.467 4.378 4.285 4.190 4.090 3.986 3.878 3.765 3.647 3.523 3.392 3.255 3.110 2.956 2.818 2.641 2.451 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 1año 4.684 4.596 4.504 4.409 4.310 4.208 4.101 3.990 3.873 3.752 3.624 3.490 3.349 3.199 3.041 2.872 2.692 2.498 2.289 2.061 1.812 1.537 1.229 880 477 Transición 2año * 3año * 6.261 6.441 6.206 6.385 6.150 6.327 6.092 6.268 6.034 6.208 5.974 6.146 5.913 6.084 5.851 6.019 5.787 5.953 5.721 5.886 5.654 5.817 5.585 5.746 5.514 5.674 5.442 5.599 5.367 5.522 5.291 5.443 5.212 5.362 5.131 5.279 5.047 5.193 4.961 5.104 4.919 5.059 4.825 4.963 4.729 4.864 4.629 4.762 4.526 4.655 4.418 4.544 4.306 4.429 4.189 4.309 4.067 4.183 3.939 4.052 3.806 3.914 3.665 3.769 3.516 3.617 3.359 3.455 3.193 3.284 3.045 3.131 2.853 2.934 2.648 2.723 2.426 2.495 2.185 1.921 1.629 Cuadro 8. Dosis de carbonato de calcio para bajar saturación de aluminio al 5% en praderas. Sat Al(%) inic. 50 49 48 47 46 45 44 43 42 41 40 39 38 37 36 35 34 33 32 31 30 29 28 27 26 25 24 23 22 21 20 19 18 17 16 15 14 13 12 11 10 9 8 7 6 1año 3.482 3.422 3.361 3.297 3.231 3.163 3.092 3.019 2.942 2.862 2.779 2.692 2.600 2.504 2.402 2.295 2.182 2.060 1.931 1.792 1.642 1.479 1.300 1.102 882 631 342 Trumao 2año * 4.491 4.452 4.412 4.371 4.329 4.286 4.242 4.197 4.151 4.104 4.056 4.007 3.956 3.904 3.851 3.796 3.739 3.681 3.621 3.559 3.529 3.462 3.393 3.321 3.247 3.169 3.089 3.005 2.918 2.826 2.730 2.629 2.523 2.410 2.291 2.184 2.047 1.900 1.740 1.568 1.378 1.169 Dosis en Kg/ha de CaCO3 para 10 cm Rojo Transición 3año * 1año 2año * 3año * 1año 2año * 3año * 4.621 2.980 3.099 3.188 3.311 3.443 3.543 4.580 2.954 3.072 3.160 3.282 3.413 3.512 4.539 2.927 3.044 3.132 3.252 3.382 3.480 4.497 2.900 3.016 3.103 3.222 3.351 3.447 4.454 2.872 2.987 3.073 3.191 3.319 3.414 4.409 2.843 2.957 3.043 3.159 3.286 3.381 4.364 2.814 2.927 3.011 3.127 3.252 3.346 4.318 2.785 2.896 2.980 3.094 3.218 3.311 4.271 2.754 2.864 2.947 3.060 3.183 3.274 4.223 2.723 2.832 2.914 3.026 3.147 3.237 4.173 2.691 2.799 2.879 2.990 3.110 3.199 4.122 2.658 2.765 2.844 2.954 3.072 3.160 4.070 2.625 2.730 2.808 2.916 3.033 3.120 4.017 2.590 2.694 2.771 2.878 2.993 3.079 3.962 2.555 2.657 2.734 2.839 2.952 3.037 3.905 2.518 2.619 2.695 2.798 2.910 2.994 3.847 2.481 2.580 2.654 2.756 2.867 2.949 3.787 2.442 2.540 2.613 2.713 2.822 2.903 3.725 2.402 2.498 2.570 2.669 2.776 2.856 3.662 2.361 2.456 2.526 2.624 2.728 2.807 3.629 2.319 2.435 2.504 2.576 2.705 2.782 3.561 2.275 2.389 2.457 2.528 2.654 2.730 3.490 2.229 2.341 2.408 2.477 2.601 2.675 3.416 2.182 2.292 2.357 2.425 2.546 2.619 3.339 2.134 2.240 2.304 2.371 2.489 2.560 3.260 2.083 2.187 2.249 2.314 2.430 2.499 3.177 2.030 2.131 2.192 2.256 2.368 2.436 3.091 1.975 2.074 2.133 2.194 2.304 2.370 3.001 1.917 2.013 2.071 2.130 2.237 2.301 2.907 1.857 1.950 2.006 2.064 2.167 2.229 2.808 1.794 1.884 1.938 1.993 2.093 2.153 2.704 1.728 1.814 1.866 1.920 2.016 2.073 2.595 1.658 1.741 1.790 1.842 1.934 1.989 2.479 1.584 1.663 1.710 1.760 1.848 1.900 2.356 1.505 1.581 1.626 1.673 1.756 1.806 2.246 1.422 1.507 1.550 1.580 1.674 1.722 2.105 1.332 1.412 1.480 1.569 1.614 1.953 1.237 1.311 1.374 1.456 1.790 1.133 1.201 1.259 1.334 1.612 1.020 1.082 1.134 1.202 897 997 1.056 761 845 608 676 435 484 236 262 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Cuadro 9. Dosis de carbonato de calcio para subir el pH hasta 5,8 para praderas (10 cm) y para cultivos (20 cm). pH inicial 5,0 5,1 5,2 5,3 5,4 5,5 5,6 5,7 5,8 Trumao Transición Rojo Ñadi 10 cm 20 cm 10 cm 20 cm 10 cm 20 cm 10 cm 20 cm 4.145 7.273 3.800 6.667 3.040 5.333 4.750 8.333 3.627 6.364 3.325 5.833 2.660 4.667 4.156 7.292 3.109 5.455 2.850 5.000 2.280 4.000 3.563 6.250 2.591 4.545 2.375 4.167 1.900 3.333 2.969 5.208 2.073 3.636 1.900 3.333 1.520 2.667 2.375 4.167 1.555 2.727 1.425 2.500 1.140 2.000 1.781 3.125 1.036 1.818 950 1.667 760 1.333 1.188 2.083 518 909 475 833 380 667 594 1.042 0 0 0 0 0 0 0 0 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 ESTABLECIMIENTO Y REGENERACION DE PRADERAS PERMANENTES Nolberto Teuber Kuschel, Ing. Agrónomo, Ph.D. Centro Regional de Investigación Remehue, Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA E-mail.: [email protected] INTRODUCCION En la Décima Región se encuentra el 11% de la superficie de las praderas de Chile, por lo que esta región tiene la mayor importancia del país en lo referente a praderas y consecuentemente en la implementación de sistemas de producción animal basados en su utilización a pastoreo. Según Paladines y Muñoz (1982), en la Región de Los Lagos (Décima Región), existen alrededor de 1,48 millones de hectáreas. Aproximadamente el 11% de ese total corresponden a praderas sembradas, el 33% se agrupa en las praderas mejoradas, lo que se ha logrado a través de diferentes vías y el restante 56% de la superficie regional incluye a las praderas naturalizadas. Esto significa que disponemos de 800 mil hectáreas catalogadas como praderas naturalizadas de baja calidad y productividad, a pesar de que en la mayoría de los casos ellas se ubican en suelos de buen potencial productivo. Las praderas naturalizadas se caracterizan por la presencia de especies de bajo valor forrajero, tienen bajo rendimiento de materia seca y son muy estacionales en su crecimiento. En cambio el 44% que involucra a las praderas mejoradas y las sembradas, presentan mejores especies botánicas y consecuentemente mayor rendimiento y calidad nutritiva. Se supone que el porcentaje de las distintas categorías de praderas (sembradas, mejoradas y naturalizadas) es relativamente constante en el tiempo, porque existe un proceso de cambio en permanente dinámica entre los distintos tipos en el sur de Chile. Esto principalmente se debe a diferentes procesos de degradación por manejos no adecuados como una baja o nula fertilización de mantención, sobre o subutilización del forraje producido, efectos de sequía, rezagos prolongados, etc.; además de los aspectos climáticos que limitan el crecimiento vegetal y su persistencia en las distintas zonas agroecológicas. En el Cuadro 1 se indica la duración del déficit hídrico estival y las condiciones de exceso de humedad y bajas temperaturas en invierno en las distintas condiciones agroecológicas. Se observa un déficit hídrico de 3 a 4 meses en la costa, un periodo intermedio en el llano longitudinal y 1 a .2 meses en la precordillera andina. Igualmente las bajas temperaturas de invierno son 3 a 4 meses en la costa y 4 a 5 meses en la precordillera andina, lo que se traduce en un LECE (Largo de la Estación de Crecimiento Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Efectivo) de tan sólo 5 meses en la costa y 6 a 7 meses en las restantes áreas edafoclimáticas. Cuadro 1. Aspectos del clima que limitan el crecimiento vegetal en diferentes zonas. ZONAS AGROECOLOGICAS Precordillera Costa : Norte : Sur Llano Longitudinal : Norte : Intermedio : Sur Precordillera Andes : Norte : Sur Chiloé insular Fuente: Adaptado de Sierra (1989). VERANO INVIERNO Déficit hídrico Exceso humedad Baja temper. LECE* (meses) (meses) (meses) (meses) 4 2a3 3 5 3 3 4 5 3 2a3 3 6 3 1a2 3 6 1 3a4 4 7 2 2a3 3 7 1 3a4 4a5 6a7 1a2 3a4 3a4 7 *LECE=Largo Estación Crecimiento Efectivo. Las características del clima indicadas en el Cuadro 1, se traducen en que praderas permanentes establecidas en siembra directa en un suelo con buen nivel de fertilidad inicien un proceso de degradación paulatino después del primer año, pasando a la categoría de praderas mejoradas o incluso naturalizarse antes de los cinco años desde su establecimiento. De igual modo, una proporción de las praderas naturalizadas están en un plan de mejoramiento vía fertilización, a la vez que otra proporción de praderas mejoradas pueden incrementar su condición botánica y productiva a través del uso de fertilizantes y/o regeneración o simplemente degradarse a la condición de pradera naturalizada. Se sabe que la aplicación de fertilizantes en la cantidad y en un balance adecuado entre los macro y micronutrientes, posibilita la recuperación de una pradera degradada en el tiempo. Esta norma de manejo puede mantener o incluso mejorar la calidad y el rendimiento de los distintos tipos o condiciones de praderas en el sur del país. Como se indicó en otros capítulos, el Programa de Recuperación de Suelos Degradados (PRSD) del Ministerio de Agricultura pretende aumentar el nivel de fósforo disponible en el suelo de praderas y cultivos, además de anular el efecto tóxico del aluminio a través del uso de enmiendas. Este Programa propone una alternativa tecnológica que está a disposición de los productores para incrementar el nivel productivo de sus suelos y consecuentemente el de sus respectivos sistemas productivos. El establecimiento directo de una pradera permanente en un suelo de alta fertilidad es una inversión biológica y económicamente rentable. En la misma dirección se plantea la regeneración, como una tecnología disponible que permite incrementar la productividad y calidad de las praderas. Por los antecedentes expuestos, el objetivo de esta presentación es tener la oportunidad de discutir los aspectos técnicos más relevantes en el establecimiento directo y en la regeneración de praderas permanentes en las áreas ganaderas de la Xa. Región de Chile. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 ESTABLECIMIENTO DE PRADERAS PERMANENTES. La etapa de establecimiento de una pradera permanente es el período comprendido entre la siembra y el primer pastoreo, posteriormente se considera que la pradera está establecida. El éxito en el establecimiento directo de una pradera permanente debe considerar la atención, la supervisión, la ejecución y el control por parte del propietario o administrador del predio de los diferentes aspectos técnicos involucrados en el proceso. A continuación se detallan los aspectos más importantes a considerar para tener éxito en el proceso de establecimiento de praderas. • Areas agroecológicas. Existen diferentes zonas que tienen características de suelo y clima particulares, las que deben ser cuidadosamente analizadas y consideradas al decidir el establecimiento directo y/o la regeneración de praderas. Desde el punto de vista climático en la Décima Región se distinguen las tres zonas indicadas en el Cuadro 1, donde además se menciona a Chiloé insular por presentar características algo distintas a las restantes áreas. Las características físicas del suelo como textura, estructura, profundidad efectiva, pendiente, drenaje interno y externo, capacidad de retención de humedad, además de las características químicas como acidez, nivel de fósforo, aluminio disponible y suma de bases, deben tenerse en cuenta para elegir las especies forrajeras mas adecuadas a cada condición. • Nivel de fertilidad del suelo. Las principales limitaciones químicas de los suelos derivados de cenizas volcánicas del sur del país es el bajo nivel de fósforo disponible, alta acidez, bajo contenido de calcio, reducida suma de bases y alto aluminio disponible. En el Cuadro 2 se indica el nivel de fertilidad de los suelos de la Décima Región en muestras obtenidas entre 0 y 15 cm de profundidad para el establecimiento directo de las praderas. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Cuadro 2. Nivel de fertilidad normal y recomendable en suelos volcánicos. Fósforo (ppm) PH (al agua) Calcio (cmol (+)/kg.) Potasio (cmol (+)/kg.) Magnesio (cmol (+)/kg.) Suma de bases (cmol (+)/kg.) Aluminio de intercambio (cmol (+)/kg.) Saturación de aluminio (%) Normal 4 5,4 2 0,3 0,5 3 0,6 17 Recomendable Sobre 20 5,8 Sobre 9 0,5 Sobre 1 Sobre 11 Menor a 0,2 Menor a 3 Fuente : Adaptado de Campillo (1994). El nivel indicado como “normal” de fertilidad (Cuadro 2), corresponde al promedio de las muestras recepcionadas en el Laboratorio de Suelos del CRI Remehue hasta el año 1993 (Campillo, 1994), cifras que deben corregirse para alcanzar o superar el nivel “recomendable” de fertilidad, lo cual puede lograrse a través de uno o más cultivos antes de establecer la pradera definitiva (denominada “vía rápida”) o iniciar un plan de mejoramiento de la pradera establecida a través de diferentes normas de manejo y de fertilización (“vía lenta”). Un detalle esquemático de la “vía rápida” y “lenta” de mejoramiento de la condición del suelo y de las praderas se indica en el Anexo 1 del presente Capítulo. • Cultivos de rotación o manejo precedente La recuperación de la fertilidad del suelo es una tarea que requiere alta inversión en fertilizantes, servicio de maquinarias y otros insumos, por lo que debe enfrentarse mediante un plan integral de desarrollo técnico. Una forma de incrementar dicho nivel de fertilidad es a través de diferentes cultivos en un plan de rotación, con el objeto de lograr al menos dos cosas : 1. aumentar la disponibilidad de nutrientes en el suelo y 2. recuperar la inversión con la venta del producto de los cultivos. Como ejemplo, la recuperación de un suelo degradado por medio de cultivos en rotación, podría iniciarse con un cultivo de papa, seguir con un cereal y terminar la rotación con una pradera anual (ballica anual con avena) y/o una pradera de rotación corta, para finalmente establecer la pradera permanente definitiva en un suelo de alta fertilidad. Es pertinente considerar otros cultivos y secuencias de rotaciones que sean más adecuadas a cada situación particular (Anexo 1). El número de cultivos precedentes a la pradera definitiva, dependerá del nivel de fertilidad inicial del suelo y del incremento en la disponibilidad de nutrientes que se obtenga con los distintos cultivos. El mejoramiento obtenido dentro de la rotación de cultivos puede ser conocido sólo mediante el análisis de suelo realizado periódicamente en el sector a mejorar. • Preparación de la cama de semillas. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 La preparación de la cama de semillas para una siembra de praderas debe ser mullida, firme y libre de terrones, con el fin de permitir un íntimo contacto entre el suelo y las semillas forrajeras, evitando la posibilidad de que semillas queden ubicadas en espacios de aire en el suelo. Esto se logra compactando con un rodillo antes y después de la siembra, de tal forma que al caminar en el barbecho el zapato no se entierre más allá de su taco y suela. Un suelo idealmente preparado se observa en el Anexo 2. Una buena cama de semillas, además debe contemplar la reparación de imperfecciones en el microrelieve del potrero. Esta labor es sencilla, pudiéndose usar un “cuartón” de madera (alrededor de 8x8 pulgadas) lo suficientemente pesado y largo, aplicado casi perpendicularmente a la línea de avance de la tracción (animal o tractor). • Tamaño de semillas. En general se puede enfatizar que las semillas forrajeras son de tamaño muy pequeño, si se las compara con las semillas de los cereales. En el Cuadro 3 se indica el peso, tamaño y número de semillas de las principales especies forrajeras (leguminosas y gramíneas), comparándolas con algunos cereales. Cuadro 3. Peso, tamaño y cantidad de semillas en diferentes especies forrajeras y cereales. Especies Leguminosas: Trébol blanco Trébol rosado diploide Trébol rosado tetraploide Alfalfa Lotera diploide Lotera tetraploide Trébol subterráneo Gramíneas: Ballica perenne Ballica anual diploide Ballica anual tetraploide Ballica híbrida diploide Ballica híbrida tetraploide Pasto ovillo Festuca Cereales: Cebada Trigo Avena Peso de 1.000 semillas (mg) Tamaño de semillas Ancho x largo (mm) Cantidad de semillas (N°/kg.) 710 1.900 3.400 2.000 500 800 6.700 1x2 1x2,5 1,1x2,5 0,5x0,6 - 1.500.000 500.000 295.000 500.000 2.000.000 1.200.000 150.000 2.000 2.000 4.000 2.000 3.900 900 2.600 1x5 1,3x6 1x4 1x6 500.000 500.000 250.000 500.000 255.000 1.000.000 400.000 51.000 48.000 41.000 3x9 3x5 3x10 20.000 21.000 24.000 El tamaño tan pequeño de las semillas forrajeras exige un especial cuidado en la preparación de la cama de semillas y en la profundidad de siembra. Debe tenerse igual o mayor preocupación que en una siembra de cereales. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Como referencia se debería tener en cuenta que una semilla de trigo es casi 70 veces más pesada que una semilla de trébol blanco o 24 veces más pesada que una semilla de ballica perenne. • Especies y cultivares. Las gramíneas y las leguminosas forrajeras son los dos grupos de especies más importantes en la producción animal en el sur de Chile y en el mundo. Las gramíneas forrajeras más comúnmente usadas son las ballicas (perennes o inglesas, bianuales o de rotación corta y anuales o italianas), el pasto ovillo y la festuca, siendo la ballica la especie de mayor importancia comercial. Entre las leguminosas forrajeras el trébol blanco, el trébol rosado y la alfalfa son las especies de mayor trascendencia productiva y comercial. En el Cuadro 4 se indican las características morfológicas de las principales gramíneas forrajeras sembradas y naturalizadas. Cuadro 4. Características morfológicas de gramíneas forrajeras en estado vegetativo. Características Duración Pelos Tipo raíz Arraigamiento Toler. Sequía Yema foliar Vaina Aurícula Lígula B. perenne Ballica anual Perenne Anual Sin Sin Fibrosa Fibrosa Superficial Superficial Baja Baja Doblada Enrollada Comprimida No comprimida Tipo garra Tipo garra Membranosa, Membranosa, aguda, aguda, muescada entera Pasto ovillo Perenne Sin Fibrosa Medio Media-alta Doblada Comprimida Ausente Membranosa truncada, lacerada Festuca Perenne Sin Fibrosa Profundo Alta Enrollada No comprimida Redondeada Membranosa, truncada, lacerada Cuello Angosto Ancho Lámina Cara superior Plana Opaca Plana Opaca Cara inferior Brillante Brillante Ancho lámina 2 a 6 mm 4 a 7 mm Ancho, dividido Angosto por nervio medio En “v” Plana Opaca, Opaca, Áspera áspera Opaca, Brillante Áspera 5 a 12 mm 3 a 8 mm Pasto miel Perenne Con Fibrosa Medio Media Enrollada No comprimida Ausente Membranosa, redondeada, lacerada,con vellos al dorso Angosto, dividido Chépica Perenne Sin Fibrosa Profundo Alta Enrollada No comprimida Ausente Membranosa, truncada, entera,con vellos al dorso Angosto Plana Opaca, con pelos Opaca, con pelos 3 a 7 mm Enrollada Opaca Brillante 1,5 a 3,5 mm La lígula y las aurículas son las principales estructuras morfológicas de una planta gramínea. Un esquema detallado de las diferentes estructuras de una planta en estado vegetativo se indica en el Anexo 3 (acercamiento de lámina, lígula, aurículas y vaina) y Anexo 4 (detalle de estructuras morfológicas en distintas especies gramíneas). Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 No es necesario realizar una clasificación similar a la del Cuadro 4 para las leguminosas forrajeras, ya que son especies totalmente diferentes en sus características morfológicas. Es muy fácil diferenciar entre una planta de trébol blanco, trébol rosado, alfalfa y lotera o alfalfa chilota en estado vegetativo. Los cultivares de gramíneas y de leguminosas de mayor importancia comercial en el presente en las regiones ganaderas del sur del país, se indican en el listado siguiente: Gramíneas: Ballica perenne : Aries, Anita, Ellet(I), Embassy(P), Marathon(I), Nui(I), Samson(I), Yatsyn(I), Impact(T), Vedette(P), Revital 100, Napoleón, Jumbo. Ballica híbrida : Galaxy, Geyser, Greenstone. Ballica bianual : Concord, Conker, Montblanc, Tetraflorum, Flankers, Forranet 100, Ajax, Dominó, Sikem. Ballica anual : Tama, Barspectra. Pasto ovillo : Apanui, Kara, Potomac, Tekapo, Wana. Festuca : Advance, Fuego, K-31, Manade. (P):precoz, (I) : intermedia precocidad, (T):tardía. Trébol blanco : Aran(HG), Huia, Kopu(HG), Lebons, Pitau, Prestige, Prop(HP), Sustain Tahora(HP), Will. Trébol rosado . Quiñequeli. Alfalfa : Agressiva, WL318, WL320, WL323, WL457, Pionner5472. Lotera : Maku. Leguminosas: En el trébol blanco hay tres grupos que se diferencian por el tamaño de sus folíolos: tipos de hojas grandes (HG), de hojas pequeñas (HP) e intermedios. Es necesario resaltar que la lista anterior debería permanecer en constante cambio, ya que el comercio de semillas certificadas de especies forrajeras es muy ágil y dinámico. Lo anterior significa que los cultivares que se indican en la lista anterior, no necesariamente serán los mismos el próximo año. • Tolerancia a la sequía. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Entre las especies forrajeras de gramíneas y de leguminosas antes indicadas, existen diferencias en cuanto a la tolerancia a condiciones de déficit hídrico o a la sequía. Dentro de las gramíneas el pasto ovillo y la festuca toleran mejor que las ballicas una condición de estrés hídrico, mientras que entre las leguminosas se destacan la alfalfa y el trébol rosado. • Calidad de semillas. Los cultivares de semillas forrajeras certificadas deben comercializarse con al menos un 85% de germinación y sobre un 95% de semillas puras, certificado o antecedentes que el cliente debe exigir al momento de su adquisición en las casas comerciales. • Mezclas de especies forrajeras. Normalmente las especies forrajeras se siembran en mezcla entre gramíneas y leguminosas. También existe la posibilidad de mezclar más de un cultivar dentro de cada especie. En una mezcla forrajera la especie leguminosa proporciona la calidad proteica de la dieta, mientras que la gramínea provee el volumen de forraje. Hoy día es bastante común sembrar praderas permanentes empleando dos cultivares de gramíneas y dos cultivares de leguminosas. Ejemplo: ballica perenne (cultivar Nui y Samson) en mezcla con trébol blanco (cultivar Pitau y Kopu). Las diferentes modalidades de configurar una mezcla dependerán de los objetivos del productor, es decir si la pradera se utilizará exclusivamente en pastoreo o eventualmente se cortará para su conservación como ensilaje. Si se realiza esta última alternativa, nunca rezagar por un período mayor a 60 días, porque períodos de rezago muy largos degradan el rebrote y la calidad de la pradera permanente (Teuber et al., 1994). • Siembras asociadas a cereales. El establecimiento de una mezcla forrajera con especies perennes, nunca debe realizarse asociada a cereales. Los cereales son especies anuales de rápido crecimiento y por lo tanto muy competitivos con las forrajeras pratenses. Las siembras asociadas entre cereales y especies forrajeras siempre resultan en inadecuado rendimiento, tanto para el cereal como para las especies forrajeras. Según los resultados obtenidos por Teuber (1981), el rendimiento de materia seca de la pradera permanente asociada a trigo de invierno fue un 40% y la pradera en asociación a trigo de primavera fue tan sólo un 20%, en relación a la siembra directa de la pradera (ver histograma en Anexo 5). Además de afectar el rendimiento de ambos componentes, la siembra asociada a trigo posterga la utilización de la pradera hasta después de la cosecha del grano. • Época de siembra. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Las épocas tradicionales de siembra de forrajeras son al final de verano (febrero a marzo) y al final del invierno (agosto a septiembre), épocas que comúnmente se conocen como siembra de otoño y de primavera, respectivamente. El establecimiento de las especies forrajeras perennes es mejor en siembra de otoño que en la siembra de primavera. Sin embargo, ambas épocas tienen ventajas y desventajas: La ventaja de una siembra de otoño es la existencia de temperaturas adecuadas para la germinación de las semillas y el crecimiento de las plántulas. Además hay menor competencia de malezas. La siembra de otoño tiene la desventaja de que bajo una condición de verano y otoño secos, no hay suficiente humedad disponible en el suelo para la germinación. Además la siembra tardía en otoño (abril) podría ocasionar descalce, especialmente en las leguminosas como consecuencia de las heladas al comienzo de otoño e invierno. La ventaja de la siembra de primavera es que en esa época existe suficiente humedad disponible en el suelo para la germinación de las semillas. Además la temperatura comienza a incrementarse, favoreciéndose el proceso de germinación de las semillas y la emergencia de las plántulas. Las desventajas de una siembra de primavera es la mayor incidencia de malezas, se posterga la primera utilización de la pradera en la temporada de crecimiento. Además en una siembra muy tardía de primavera podría existir baja disponibilidad de humedad en el suelo para la germinación, reduciéndose la población de plantas de las especies sembradas. • Método y profundidad de siembra. En nuestro medio existen dos métodos o sistemas de siembra: “al voleo” y en líneas (o hileras) separadas a 18 o 20cm de distancia según se use una máquina regeneradora o cerealera, respectivamente. La siembra al voleo permite una distribución al azar de las semillas en el suelo. Si el nivel de fertilidad del suelo es alto, la siembra al voleo es una excelente alternativa ya que ofrece la opción de similar competencia entre las especies gramíneas y leguminosas. Para una óptima siembra al voleo la máquina sembradora Brillion (Anexo 2), consistente en dos cuerpos de rodillos corrugados es ideal, ya que además de distribuir uniformemente las semillas en el suelo las ubica a una profundidad uniforme, como se indica en el esquema del Anexo 6. Antecedentes del efecto de la profundidad de siembra sobre el establecimiento de diferentes especies forrajeras son entregados por Cullen (1966), indicándose en el cuadro siguiente. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Cuadro 5. Efecto de diferente profundidad de siembra en el porcentaje de establecimiento de gramíneas y leguminosas forrajeras. Profundidad de siembra (cm) 0,6 1,3 2,5 3,8 Ballica perenne 81 81 76 65 Trébol blanco Pasto ovillo Trébol subterráneo 94 91 83 72 33 25 19 7 79 96 96 96 En relación a la profundidad de siembra, Langer (1981) recomienda profundidades de 1 a 1,5cm para las semillas más pequeñas y entre 1,5 a 2,5cm para las especies leguminosas y gramíneas forrajeras que tienen semillas de mayor tamaño. Otra posibilidad es la sembradora portátil tipo “ciclón” de muy bajo costo y de gran utilidad para distribuir las pequeñas semillas de leguminosas forrajeras. Esta siembra también exige un suelo fértil y el tapado de las semillas con una rastra de sacos, de ramas y/o cadenas para lograr una localización de las semillas no mayor a 2,0cm. de profundidad, de lo contrario se deteriora la población de gramíneas como se indica en el Cuadro 5. La siembra en líneas es el método más común en el sur de Chile, ya que se realiza con la máquina cerealera con o sin cajón anexo para semillas forrajeras, equipo que existe en muchos predios. También se utilizan las máquinas regeneradoras de discos (Semeato, Connor Shea), la de zapatas vibratorias (Aitchison) o la regeneradora con pequeños cuchillos rotativos (John Deere 1550), entre las más conocidas y empleadas en el sur del país. • Dosis de semillas. Para definir la dosis de semillas a sembrar es necesario tener en cuenta el tamaño de las semillas y el número de semillas contenidas en un kilogramo, como se indicó en el Cuadro 3. Esto permite estimar el número de plántulas que potencialmente se podrían lograr al sembrar una cantidad conocida de semillas por unidad de superficie. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Cuadro 6. Dosis de semillas y población de plántulas. Población de plántulas (Nº/m2) Dosis (kg/ha) Potencial A los 60 días Ballica perenne Pasto ovillo Festuca Trébol blanco Trébol rosado Especies 15 a 20 10 a 12 20 a 25 3a4 8 a 10 675 a 900 800 a 960 680 a 850 405 a 540 360 a 450 400 360 310 110 150 Alfalfa 20 a 25 900 a 1125 200 La dosis de semillas indicada en el Cuadro 6, se presenta en un rango cuyo valor más alto debería considerarse cuando la preparación de la cama de semillas, sistema de siembra u otros factores inherentes a la siembra no son ideales para la germinación de las pequeñas semillas forrajeras. Es posible que en algunos casos sea conveniente sobrepasar la dosis mayor indicada en el cuadro anterior, por ejemplo cuando la siembra se realiza “al voleo”. La población potencial de plántulas se calculó en base a semillas certificadas con un 90% de germinación en ballica perenne, trébol blanco, trébol rosado y alfalfa; con un 85% en festuca y con un 80% en pasto ovillo. La población de plántulas a los 60 días posterior a la fecha de siembra (Cuadro 6), corresponden a resultados promedios obtenidos en los jardines de introducción de especies y cultivares forrajeros evaluados en el CRI Remehue, bajo óptimas condiciones agronómicas. El trébol rosado no se recomienda sembrarlo con especies gramíneas perennes. Es más pertinente mezclarlo con 25 a 30 kg/ha de ballicas de rotación corta, para lograr un excelente volumen y calidad de forraje. La alfalfa siempre se establece como especie pura en siembra directa, en cambio las gramíneas forrajeras perennes tienen mayor afinidad con el trébol blanco. En el Cuadro 6, además, se observa el gran deterioro que ocurre entre el potencial de semillas depositadas en el suelo y la población de plantas que finalmente se logran. Exceptuando a la ballica perenne, la población de plantas a los 60 días en las restantes especies gramíneas están alrededor del 40% de las semillas potencialmente viables. La situación anterior difícilmente se logra en las siembras comerciales de los productores, por lo tanto se espera que la población obtenida a nivel comercial sea un 20 a 30% menor a la indicada en el Cuadro 6, a los 60 días de la siembra. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Inoculación y peletización de leguminosas. El trébol blanco y rosado se inoculan con una bacteria específica llamada rizobio (Rhizobium trifolii) y la alfalfa se inocula con otra bacteria específica (Rhizobium meliloti). Estas bacterias fijadoras de nitrógeno se comercializan bajo el nombre genérico de “inoculante” para trébol o alfalfa, respectivamente. La inoculación o incorporación de bacterias junto a las semillas de leguminosas es una práctica necesaria en toda siembra de praderas mixtas o de alfalfa, especialmente en sitios donde nunca se ha incluido inoculantes en siembras anteriores. Es una labor fácil de realizar y de bajo costo. La peletización consiste en cubrir la semilla inoculada, con el fin de proporcionar el mejor ambiente para la sobrevivencia de los rizobios y establecer la simbiosis entre el microorganismo y la planta. Cuadro 7. Ingredientes en inoculación y peletización de semillas de trébol . Ingredientes Semillas (kg) Cal (kg) Trébol blanco 10 4 Trébol rosado 20 8 Adherentes posibles: - Tylose (g) - Agua azucarada (%) - Goma arábiga (%) Agua (litro) Inoculante 24 40 40 40 20 20 1,2 2 Aplicar el doble de la dosis indicada por ell fabricante Las cantidades de semillas a inocular y peletizar pueden variar en forma proporcional a las indicadas en el Cuadro 7. Además se recomienda una dosis mayor de inoculante debido al deterioro o pérdida de efectividad del inoculante por almacenaje prolongado y/o en malas condiciones ambientales para la sobrevivencia de los rizobios. Las semillas recién inoculadas y peletizadas deben secarse a la sombra durante un mínimo de 12 horas, para lo cual se extiende una delgada capa sobre una superficie plana, limpia y seca. Antecedentes del procedimiento de inoculación y peletización se indican en Torres (1993). • Fertilización. Este tema ha sido desarrollado en detalle en otros Capítulos de este Curso, por lo que solamente se recuerda la vital importancia de los fertilizantes (macro y micronutrientes), tanto en el establecimiento como en la persistencia de las especies forrajeras. Se recuerda que un exitoso establecimiento de praderas debe considerar adecuados niveles de nitrógeno, fósforo, potasio, azufre, calcio y microelementos. Además de baja Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 acidez (pH) y bajo aluminio disponible en el suelo. Mayores antecedentes son entregados por Ruz y Campillo (1996). • Temperatura del suelo. La germinación y el establecimiento de las especies forrajeras gramíneas es sensible a la temperatura del suelo. Aún cuando los nuevos cultivares han mejorado su vigor de plántula, la germinación de las semillas y su establecimiento es mas exitoso en suelos con adecuada temperatura (sobre 10ºC), como en el Cuadro 8 lo indican Charlton et al., (1986). Cuadro 8. Capacidad de germinación de tres especies de gramíneas forrajeras a diferentes temperaturas del suelo. Especies Festuca Pasto ovillo Ballicas 5 a 10ºC (Días) 29 26 13 Temperatura del suelo 10ºC 15ºC (Días) (Días) 13 10 24 14 11 6 Los resultados indicados en el Cuadro 8, corresponden a los días posterior a la siembra para alcanzar el 75% de germinación de las semillas. Temperaturas del suelo menor a 10ºC retardan la germinación de las semillas forrajeras, especialmente en festuca y pasto ovillo, lo que facilita la aparición de plantas de malezas o indeseables. Esta razón práctica obliga a que las especies forrajeras de lento establecimiento sean sembradas en otoño. • Control de malezas. En relación a las malezas, se debe tener especial preocupación con el objeto que antes y durante la labor de siembra se deben considerar algunas prácticas tendientes a reducir el enmalezamiento y en lo posible evitar el uso posterior de productos químicos. Previo a la siembra de la pradera definitiva, la rotación de cultivos es un manejo que permite el control de una gran gama de malezas que presentan fuerte competencia a las especies pratenses. El uso de semillas puras o libres de malezas es otra medida que evita la competencia innecesaria de plantas no deseables. Durante la labor de siembra es necesario estar permanentemente atento al funcionamiento de la máquina sembradora evitando cualquier anomalía, tanto en la dosificación de las semillas como de los fertilizantes. En la etapa de establecimiento existen tres formas de controlar las malezas: Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Animales : El pastoreo con animales livianos (terneros) es una práctica recomendable, siempre y cuando no se produzca daño por pisoteo en la pradera y/o las plantas sean arrancadas durante su utilización. Mecánico : Mediante el uso de una barra segadora o rana. Cualquier equipo podría utilizarse luego del primer pastoreo, con el objeto de controlar las especies indeseables y consecuentemente eliminar la vegetación no consumida por los animales, además de desparramar parte de las bostas . Químico : Como se sabe, este tipo de control debería evitarse hasta donde sea posible por el conocido deterioro ambiental que ocasionan los herbicidas y en general los pesticidas. • Control de plagas y enfermedades. Durante el período de establecimiento de la pradera no deberían presentarse problemas de plagas, debido a que un alto control de la población insectil ocurre con el laboreo del suelo, tanto en los cultivos previos a la siembra de la pradera como en la preparación del suelo para el establecimiento de la pradera permanente. En ambas circunstancias las aves silvestres producen alto consumo de larvas y adultos de insectos. Una vez que la pradera se ha establecido y especialmente en su segundo año, es necesario revisar en forma periódica y oportuna el número y tamaño de las larvas de los distintos insectos plagas de las praderas, especialmente en lo referente a gusanos blancos y cuncunillas negras. Cisternas (1987 y 1992) publica antecedentes de muestreo, identificación y control de cuncunilla negra y otras plagas de praderas. • Drenaje y riego. A nivel predial es bastante común encontrarse con problemas de diferente magnitud en cuanto al drenaje, incluso dentro de un predio hay potreros con distinto grado de mal drenaje. Al decidir el establecimiento de una pradera permanente es necesario solucionar tales problemas, mejorando las vías de drenaje, limpiando los canales, aplicando el arado topo, mejorando el microrelieve del terreno, etc., especialmente en una región donde en promedio precipitan más de 1.200 mm al año y con alta concentración de lluvias entre mayo y agosto, con un incremento significativo de norte a sur, al tiempo que ocurren déficit hídricos o períodos muy secos en otras épocas del año. El riego es una alternativa para solucionar una eventual falta de humedad disponible en el suelo. El riego por aspersión es la alternativa de mayor aplicación en el sur de Chile. Sin embargo, es una tecnología de alto costo para ser usada en praderas a pesar de jugar un papel muy importante en el rendimiento, composición botánica y persistencia de las praderas, como lo indican en el Cuadro 9 los resultados entregados por Ortega (1992). Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Cuadro 9. Efecto del riego en el rendimiento y composición botánica de una pradera permanente. Riego Rendimiento anual (ton ms/ha) Composición botánica (%bps) Ballica perenne Trébol blanco Otras gramíneas Material muerto Sin 7,8 Con 11,5 Incremento por riego (%) 47 1 10 63 17 26 34 33 4 2.600 340 - 48 - 76 El riego tiene un gran efecto en la persistencia de las especies forrajeras sembradas. En el Cuadro 9 se aprecia el fuerte incremento en el aporte de ballica perenne y de trébol blanco en la pradera, además de un aumento cercano al 50% en el rendimiento de materia seca, el que por efecto del riego se produce preferentemente en los meses estivales. REGENERACION DE PRADERAS. La regeneración de praderas es un manejo que permite incorporar fertilizantes y semillas forrajeras de mejores características productivas y nutritivas en una comunidad vegetal existente, con mínima alteración del suelo. El establecimiento exitoso de especies forrajeras vía regeneración exige un suelo sin limitaciones de fertilidad, principalmente en macronutrientes, acidez y toxicidad de aluminio. • Características de regeneración y siembra directa. En el Cuadro 10 se indican algunas características cualitativas y comparativas de la regeneración en relación a la siembra directa o establecimiento convencional. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Cuadro 10. Principales características de la regeneración y de la siembra directa. Costo Labor Posibilidad de erosión Población de plantas establecidas Ataque de plagas Posibilidad de descalce Suelos Posibilidad de éxito en el establecimiento Regeneración Menor Rápida Siembra directa Mayor Lenta Menor Menor Mayor Menor Arables y no arables Menor Mayor Mayor Menor Mayor Sólo arables Mayor • Métodos de regeneración. Balocchi y Cuevas (1982) indican cuatro métodos de regeneración de praderas: Al voleo. Las semillas y el fertilizante se esparcen lo más homogéneamente posible en el suelo. Puede realizarse a mano o con una máquina manual tipo ciclón. Potrero de sacrificio : Contempla la destrucción de la vegetación existente por pisoteo animal intenso en el invierno, lo que se produce al suministrar alimentos en sitios o potreros reducidos y alta concentración de animales. Esta práctica incrementa la fertilidad del suelo y hacia el final del invierno el suelo se empareja con rastrajes y rodillo, para incorporar las semillas y los fertilizantes con máquina (cerealera o regeneradora) o al voleo. A través del animal : Consiste en incluir semillas en el alimento de los animales, quienes las ingieren y eliminan en las fecas por lo que es conveniente desparramar las bostas. Tiene mejor respuesta en leguminosas que en gramíneas. Con máquina : Deja las semillas y el fertilizante localizado en líneas. Con máquina las semillas quedan cubiertas, hay menor consumo de semillas por aves silvestres, se obtiene una germinación más homogénea, se puede disminuir la dosis de semillas y se logra mayor eficiencia en el uso de los fertilizantes. • Tipos de máquinas regeneradoras. Las máquinas regeneradoras se diferencian por las características del implemento que realiza la labor. Existen diferentes tipos: Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 De cincel : Posee un cultivador que forma un surco más ancho subsuperficialmente, donde se localizan las semillas y el fertilizante. Hay poca pérdida de humedad y las semillas quedan cubiertas por la champa que se mantiene casi sin alteración. Su empleo es recomendable en suelos con baja capacidad de retención de humedad. De zapata : Contiene un implemento que abre un surco de unos 7 cm de ancho y las semillas se localizan más superficialmente que los fertilizantes. Sobre cada surco se arrastra una cadena que remueve el suelo y semillas. De discos : Tiene discos independientes que cortan la champa y abren una ranura donde caen las semillas y los fertilizantes. Cuando la ranura queda muy abierta, hay muchas semillas expuestas a las aves y deshidratación. Esta máquina requiere baja fuerza de tracción. De disco rotativo : Dispone de un pequeño disco rotativo que prepara una angosta franja de suelo (alrededor de 5 cm de ancho), donde caen las semillas y el fertilizante, que son tapados por un rodillo liso individual para cada surco. De disco triple : Tiene un disco frontal que corta la champa. Posteriormente hay un cuerpo con dos discos juntos que abren el surco en forma de “V”, donde caen las semillas y el fertilizante. Esta máquina compacta el surco, quedando mucha semilla descubierta. • Suelo y topografía. En la regeneración de praderas, al igual que en una siembra directa hay que tener en cuenta las características físicas del suelo, principalmente que tengan buen drenaje y buena capacidad de retención de humedad. En un suelo muy liviano existe el peligro de perder humedad fácilmente y ocasionar problemas en la germinación de las semillas. La labor de regeneración es factible de ejecutar en suelos de fuertes pendientes, incluso en lugares inaccesibles para una máquina a tracción mecánica, donde es aplicable la siembra al voleo (a mano o con el tipo ciclón). El límite topográfico o pendiente para realizar una faena de regeneración con una máquina a tracción mecánica está definido por el punto en que la inclinación del terreno no ponga en riesgo la estabilidad del tractor. • Época de regeneración. La época en que se realiza esta labor es de gran importancia, ya que la humedad y la temperatura son los dos factores que definen el proceso de germinación de las semillas. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 En otoño (marzo en la Xa Región) es la mejor época para regenerar praderas, incluso es posible realizar la labor en un suelo seco (siembra en polvo), teniendo la seguridad de que hacia el final de marzo comienzan las precipitaciones efectivas y la temperatura aún es adecuada para estimular el proceso de germinación y emergencia de las plántulas. En situaciones especiales es pertinente la regeneración en primavera (agosto a septiembre). Por ejemplo, al sembrar con especies agresivas o de rápida emergencia y desarrollo como son las ballicas anuales y bianuales, que compiten bien con la pradera residente durante el crecimiento primaveral, o cuando existe la posibilidad de anegamiento prolongado durante el invierno (suelos de vegas o Ñadi), circunstancia en que una siembra de otoño podría tener alto riesgo de perderse. • Especies y cultivares. En general se puede indicar que las especies y cultivares de las forrajeras a emplear en una regeneración deben ser agresivas y con buen vigor de plántulas para lograr un rápido desarrollo y puedan competir en buena forma con la vegetación residente. Entre las gramíneas, las ballicas anuales y las de rotación corta o bianuales cumplen con las características anteriores. Sin embargo, con las ballicas perennes también es posible lograr un buen resultado, pero no con pasto ovillo y festucas que son especies de establecimiento más lento. Generalmente, las leguminosas forrajeras no son tan exitosas para establecerse en siembras a través de la regeneración. A pesar de ello, casi siempre son incluidas en mezcla con las gramíneas. • Inoculación y peletización. Al igual que en la siembra directa de praderas, la inoculación y peletización de las semillas leguminosas es una práctica recomendable, útil y de bajo costo. Los ingredientes y cantidades a utilizar en la inoculación y peletización son los mismos que se usan en la siembra directa (Cuadro 7). Torres (1993), indica el procedimiento para inocular y peletizar semillas de leguminosas. • Fertilidad y fertilizantes. El éxito de una regeneración es directamente dependiente de la cantidad de nutrientes disponibles en el suelo. Al igual que en una siembra directa se debe conocer el nivel inicial del suelo y corregir los problemas existentes, especialmente en relación a macronutrientes, acidez y toxicidad del aluminio. Al regenerar en un suelo de baja fertilidad es posible obtener buen establecimiento, pero seguramente menor persistencia de las especies introducidas, aún aplicando suficiente cantidad de fertilizantes al momento de la siembra. • Profundidad de siembra. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 La profundidad a la que se localizan las semillas es un problema en la regeneración. Normalmente los potreros presentan irregularidades en su superficie (microrelieve irregular), lo que se traduce en sectores del potrero donde las semillas quedan muy profundas y otros con semillas descubiertas. Esto es especialmente válido al utilizar máquinas de zapatas o de discos fijos, las cuales no siguen el microrelieve del potrero. • Velocidad de trabajo. La velocidad de trabajo debe estar entre 3 y 10 km/h (o entre 50 y 160 m por minuto), con lo que se obtiene un flujo uniforme de semillas y fertilizantes. Velocidades mayores dejan muchas semillas descubiertas y desparramadas en las entre hileras. • Manejo previo a la regeneración. La pradera existente debe tener un mínimo residuo antes de efectuar la regeneración, en lo posible menor a 3 cm. lo que se logra al pastorear con ovinos y/o caballos, de lo contrario utilizar alta presión de pastoreo con bovinos. El uso del cerco eléctrico es una herramienta de gran utilidad para obtener el residuo que se desea para ejecutar una buena labor de regeneración y en general, para mejorar la utilización de las praderas. Otra alternativa es el uso de herbicidas que queman la vegetación existente, ejerciendo un efecto prolongado sobre la vegetación residente y evitando de este modo su competencia con las nuevas plantas forrajeras introducidas. • Manejo posterior a la regeneración. El manejo de la pradera posterior a la siembra es otra etapa decisiva en el éxito de la regeneración. Es necesario controlar la altura de la pradera residente para reducir la competencia, lo que se logra a través de un pastoreo controlado, esto es, sacar los animales del potrero si las nuevas plantas son arrancadas. La utilización con animales debe realizarse con alta presión de pastoreo para evitar la selección del forraje. Similar manejo debe aplicarse al menos durante el primer año. • Población de plantas. En un establecimiento de praderas mediante regeneración con máquina se espera que a los 20 o 30 días posteriores a la siembra, se observen las hileras de siembra con nitidez. Se estima que alrededor de 150 a 200 plantas/m2 sería recomendable en una regeneración con gramíneas forrajeras. Lo anterior significa obtener como promedio de 30 a 40 plantas por metro lineal (sobre la hilera) o una planta cada 3 cm de distancia sobre la hilera. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 EJEMPLOS Y ANTECEDENTES COMPLEMENTARIOS 1. Reconocimiento de especies gramíneas y leguminosas forrajeras. Se dispone de las especies forrajeras más comunes utilizadas en nuestro medio, las que se mostraron en maceteros especialmente preparados para la ocasión. Las especies forrajeras son reconocidas por las estructuras morfológicas presentes en plantas en estado vegetativo. Las especies analizadas correspondieron a: ballica perenne, ballica anual, pasto ovillo, festuca y pasto miel entre las gramíneas. Entre las leguminosas se mostró: trébol blanco, trébol rosado, alfalfa y lotera o alfalfa chilota. Este trabajo se realizó en la mayoría de los Cursos, luego de haber presentado y discutido el tema. 2. Cálculo de dosis de siembra. Ejemplo 2.1. Cálculo de la dosis de siembra en una mezcla de B. perenne y trébol blanco. Dosis de semillas (kg/ha) Germinación exigida (%) Semillas viables (kg/ha) Cantidad de semillas (Nº/kg) Semillas totales (Nº/ha) Semillas totales (Nº/m2) Semillas totales viables (Nº/m2) Relación de semillas BP/TB Plantas a los 60 días (Nº/m2) * Relación de plantas Ballica/Trébol Eficiencia de establecimiento (%) B. perenne 15 90 13,5 5 x 105 7.500.000 750 675 1,7 400 3,6 53 *: Información del CRI Remehue. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 T. blanco 3 90 2,7 1,5 x 106 4.500.000 450 405 1 110 1 24 Ejemplo 2.2. Establecimiento directo de una mezcla simple de pasto ovillo y trébol blanco. Dosis de semillas (kg/ha) Germinación (%) Semillas viables (kg/ha) Cantidad de semillas (Nº/kg) Semillas totales (Nº/ha) Semillas totales (Nº/m2) Semillas totales viables (Nº/m2) Relación de semillas PO/TB Plantas a los 60 días (Nº/m2) * Relación de plantas P. ovillo/Trébol Eficiencia de establecimiento (%) *: Información del CRI Remehue. Pasto ovillo 10 80 8 1,0 x 106 10.000.000 1.000 800 2 360 3,3 36 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 T. blanco 3 90 2,7 1,5 x 106 4.500.000 450 405 1 110 1 24 Mejoramiento de la PRADERA NATURALIZADA (2 ppm P y >20% Sat. Al.) VIA RAPIDA VIA LENTA ROTACION DE CULTIVOS (Raps y trigo, papa y trigo...) MANEJO DE LA VEGETACION EXISTENTE CULTIVO SUPLEMENTARIO (Avena + B. Anual Tama...) -USO DEL CERCO ELECTRICO ALTA PRESION DE PASTOREO MAXIMIZAR LA UTILIZACION CORTAR VEGETACION RESIDUAL FERTILIZAR CON FOSFORO y/o PRADERA DE ROTACION (Ballica bianual + T. Rosado) y/o FOSFORO + NITROGENO -APLICAR ENMIENDAS SIEMBRA DE LA PRADERA PERMANENTE (Mínima labranza o directa) FERTILIDAD DEL SUELO (>20 ppm P y <3% Sat. Al.) MEJORAR LA FERTILIDAD (>12 ppm P y <10% Sat. Al.) REGENERAR CON ESPECIES MEJORADAS (>15%ppm P y <3% Sat. Al.) MANTENER y/o AUMENTAR FERTILIDAD y RENDIMIENTO AUMENTAR FERTILIDAD y RENDIMIENTO Figura 1. Estrategias de establecimiento de praderas permanentes. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Figura 2. Cama de semillas y siembra de forrajeras Figura 3. Estructuras de una gramínea. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Figura 4. Estructura morfológica en distintas especies gramíneas. 100 80 60 % 40 20 0 S o la A s o c iad a S o la Trigo invierno A s o c iad a Trigo primavera Figura 5. Rendimiento relativo de la pradera en siembra sola y asociada a trigo. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Figuras 6 y 7. Acercamiento de la faena de siembra con máquina Brillion (foto superior) y profundidad de ubicación de las semillas en el suelo (foto inferior). Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 BIBLIOGRAFIA. CAMPILLO, R. 1994. Diagnóstico de la fertilidad de los suelos de la Décima Región. En: Seminario “Corrección de la fertilidad y uso de enmiendas en praderas y cultivos forrajeros“. Serie, Remehue N 53, Estación Experimental Remehue (INIA), Osorno, Chile, p.23-40. CHARLTON, J.F.L.; HAMPTON, J.G. y SCOTT, D.J. 1986. Temperature effects on germination of new Zealand herbage grasses. Proceedings of the New Zealand grassland Association, 47: 165-172. CISTERNAS, E. 1987. Biología, hábitos, ciclo y control de cuncunilla negra. 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CONTRATO PARA LA RECUPERACION DE LOS SUELOS DEGRADADOS PARA USUARIOS QUE REQUIEREN ANTICIPOS DEL INCENTIVO En____________a____de__________de______, comparece el Instituto de Desarrollo Agropecuario, representado por el Jefe de Area de____________________, Sr. (a)___________________________________con domicilio en la ciudad de ________________________, calle,__________________________ en adelante INDAP; y por la otra el Sr.(a)____________________________, RUT _____________________-__, mayor de edad, con domicilio en____________________,quién cumple con los requisitos para ser usuario del INDAP, en adelante el agricultor, vienen en celebrar el siguiente Contrato para la Recuperación de los Suelos Degradados. 1. El agricultor trabaja en calidad de_______________,el predio denominado____________________, cuyo Rol de Bienes Raíces del S. I. I. es ___________, ubicado en la Comuna de___________________, sector_____________, y con una superficie de ________hectáreas físicas, equivalentes a ______ H. R. B. 2. El agricultor solicita el incentivo para la Recuperación de Suelos Degradados, comprometiéndose a cumplir íntegramente la programación que se indica en el Plan de Manejo que se adjunta, y que se considera como parte integrante de este Contrato.. 3. El incentivo corresponderá a un porcentaje (%) del valor de los insumos y gastos efectuados, de acuerdo a los porcentajes establecidos en Decreto Nº 466 de 19 de diciembre de 1997 del Ministerio de Agricultura. Para tal efecto, el agricultor que suscribe declara conocer dicho reglamento y las normas que rigen el otorgamiento del incentivo estatal del Programa para la Recuperación de Suelos Degradados, las que se compromente a respetar y acepta desde ya. 4. Para poder financiar la ejecución de las labores que serán bonificadas, el usuario solicita le sea otorgado un adelanto, con cargo al incentivo a recibir, de $………..........…………..(…..........……………pesos), suma que declara recibir en Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 este acto, de parte de INDAP, a su entera satisfacción. 5. 6. Una vez realizadas las labores especificadas en este Contrato, el agricultor se compromete a proceder de la siguiente forma y según corresponda para cada caso que se indica: a) Agricultores que financian total o parcialmente la inversión con crédito de INDAP, o que siendo usuarios de algunos de sus servicios, financian su inversión con recursos propios. Terminada la ejecución de las labores, el agricultor presentará al Jefe de Area de INDAP una declaración jurada simple, donde deje constancia que las actividades afectas al incentivo han sido efectivamente realizadas de acuerdo a lo establecido en el presente Contrato. Tendrá la obligación de demostrar los gastos y costos en que haya incurrido para la ejecución de las labores afectas al incentivo, para este efecto INDAP podrá solicitar copia de las facturas, boletas, documentos o recibos de todos aquellos insumos y servicios que el usuario ha debido adquirir para la correcta ejecución de las labores especificadas en el correspondiente Plan de Manejo. Recibida a satisfacción de INDAP la declaración jurada simple y las copias de las facturas, boletas, documentos o recibos de gastos que sean pertinentes se dará por terminado el proceso y en caso que exista saldo a favor del agricultor, se procederá al pago que corresponda. b) Agricultores que financian la inversión con recursos propios o de otras fuentes diferentes de INDAP y que no participan en algún servicio del INDAP. El proceso terminará con la presentación ante INDAP del Certificado de Verificación emitido por el SAG , a satisfacción del Jefe de Area correspondiente. En caso que exista saldo a favor del agricultor, se procederá al pago que corresponda. El agricultor será responsable de lo siguiente: a) Si por razones de fuerza mayor, el agricultor no cumpliera con las fechas programadas y estipuladas en el Plan de Manejo adjunto, que se considera parte de este contrato, deberá dar aviso a la Oficina de Area de INDAP (en los casos estipulados en el punto 5.a), o a la Oficina de sector del SAG (en los casos estipulados en el punto 5.b), a fin de que la visita predial de fiscalización sea debidamente postergada. b) Deberá conservar en su poder las copias de facturas, boletas, documentos o recibos correspondientes a los insumos o gastos efectuados, para poder presentarlas a los inspectores del SAG o INDAP, en caso de que éstos se las requieran; documentación Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 c) imprescindible para el pago del incentivo. Deberá dar todas las facilidades necesarias para que los inspectores del SAG o del INDAP ingresen al predio a realizar la fiscalización de las prácticas programadas afectas a incentivo, materia de este contrato 7. En el evento que el agricultor, habiendo recibido el anticipo de la incentivo pagada por INDAP, no hubiese dado cumplimiento a las obligaciones que emanan de este contrato, o falseado los antecedentes presentados, deberá hacer devolución de los valores recibidos con los reajustes e intereses correspondientes, calculados desde el momento de la entrega de las bonificaciones hasta la fecha de su devolución efectiva, sin perjuicio de las acciones legales que INDAP resuelva emprender contra el agricultor por incumplimiento de Contrato. 8. Este Contrato será firmado en duplicado, quedando el original en poder de INDAP y la copia para el agricultor. FIRMA AGRICULTOR JEFE DE AREA INDAP Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Nº......................................... CONTRATO PARA LA RECUPERACION DE LOS SUELOS DEGRADADOS PARA USUARIOS QUE NO REQUIEREN ANTICIPO DEL INCENTIVO En____________a____de__________de______, comparece el Instituto de Desarrollo Agropecuario, representado por el Jefe de Area de_______________________, Sr. (a)________________________________con domicilio en la ciudad de _______________________, calle,__________________________en adelante INDAP; y por la otra el Sr.(a)_____________________________, RUT______________________, mayor de edad, con domicilio en____________________,quién cumple con los requisitos para ser usuario del INDAP, en adelante el agricultor, vienen en celebrar el siguiente Contrato para la Recuperación de los Suelos Degradados: 1. El agricultor trabaja en calidad de_______________,el predio denominado____________________, cuyo Rol de Bienes Raíces del S. I. I. es ___________, ubicado en la Comuna de___________________, sector_____________, y con una superficie de ________hectáreas físicas, equivalentes a ______ H. R. B. 2. El agricultor solicita el incentivo para la Recuperación de Suelos Degradados, comprometiéndose a cumplir íntegramente la programación que se indica en el Plan de Manejo que se adjunta, y que se considera como parte integrante de este Contrato. 3. El incentivo corresponderá a un porcentaje (%) del valor de los insumos y gastos efectuados, de acuerdo a los porcentajes establecidos en Decreto Nº 466 de 19 de diciembre de 1997 del Ministerio de Agricultura. Para tal efecto, el agricultor que suscribe declara conocer dicho reglamento y las normas que rigen el otorgamiento del incentivo estatal del Programa para la Recuperación de Suelos Degradados, las que se compromente a respetar y acepta desde ya. 4. El incentivo será cancelado de la siguiente forma y según corresponda para cada caso que se indica: a) Agricultores que financian total o parcialmente la inversión con crédito de INDAP, o que siendo usuarios de algunos de sus servicios, financian su inversión con recursos propios. Una vez realizadas las labores especificadas en este contrato, el agricultor presentará al Jefe de Area de INDAP una declaración jurada simple, donde deje constancia que las actividades afectas al incentivo han sido efectivamente realizadas de acuerdo a lo establecido en el presente Contrato. Tendrá la obligación de demostrar los gastos y costos en que haya Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 incurrido para la ejecución de las labores afectas al incentivo , para este efecto INDAP podrá solicitar copia de las facturas, boletas, documentos o recibos de todos aquellos insumos y servicios que el usuario ha debido adquirir para la correcta ejecución de las labores especificadas en el correspondiente Plan de Manejo. Recibida a satisfacción de INDAP la declaración jurada simple y las copias de las facturas, boletas, documentos o recibos de gastos que sean pertinentes, se procederá al pago que corresponda. b) Agricultores que financian la inversión con recursos propios o de otras fuentes diferentes de INDAP y que no participan en algún servicio del INDAP. El incentivo será cancelado directamente al agricultor, una vez que éste presente ante INDAP el Certificado de Verificación emitido por el SAG y sea recibido a satisfacción del Jefe de Area correspondiente. 5. El agricultor será responsable de lo siguiente: a) Si por razones de fuerza mayor, el agricultor no cumpliera con las fechas programadas y estipuladas en el Plan de Manejo adjunto, que se considera parte de este contrato, deberá dar aviso a la Oficina de Area de INDAP (en los casos estipulados en el punto 4.a), o a la Oficina de sector del SAG (en los casos estipulados en el punto 4.b), a fin de que la visita predial de fiscalización sea debidamente postergada. b) Deberá conservar en su poder las copias de facturas, boletas, documentos o recibos correspondientes a los insumos o gastos efectuados, para poder presentarlas a los inspectores del SAG o INDAP, en caso de que éstos se las requieran; documentación imprescindible para el pago del incentivo. c) Deberá dar todas las facilidades necesarias para que los inspectores del SAG o del INDAP ingresen al predio a realizar la fiscalización de las prácticas programadas afectas a incentivo, materia de este contrato 6. Si el agricultor no cumple con lo establecido en el presente contrato, no tendrá derecho al incentivo establecido para estos fines. En el evento que el incentivo haya sido pagado por INDAP, y el agricultor no hubiese dado cumplimiento a las obligaciones que emanan de este contrato, o falseado los antecedentes presentados, deberá hacer devolución de los valores recibidos con los reajustes correspondientes, calculados desde el momento de la entrega de las bonificaciones hasta la fecha de su devolución efectiva. Este Contrato será firmado en duplicado, quedando el original en poder de INDAP y la copia para el agricultor. 7. 8. FIRMA AGRICULTOR JEFE DE AREA INDAP Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 PLAN DE MANEJO Nº DE CONTRATO................................… SUBPROGRAMA FERTILIZACION FOSFATADA ROL DE AVALUO .................................... MICROREGION Nº……………………….. Nivel inicial Fósforo (ppm) Nivel a alcanzar (ppm) Has totales a Bonificar Nombre/Número del Potrero FERTILIZACION DE CORRECCION AÑO …….. Fecha de la Fertilización Solicita crédito SI Kg P2O5 Requerido Has. a corregir NO Fertilizante Recomendado Nivel de ppm. a alcanzar en el año Si lo solicita, indicar monto $ Dosis/Ha kg P2O5 kg Fertiliz. Costo/Kg. sin IVA kg P2O5 kg Prod. Com. Costo Neto Total $ FERTILIZACION DE PRODUCCION AÑO ….… Cultivo Tipo Rend. Esperado Dosis Kg./Ha. AÑO 1 de Fertilizante FERTILIZANTE N P205 K20 MgO S Unidades Kg Prod Comercial Cantidad Total Requerida Unidades Kg Prod. Comercial FERTILIZACION DE CORRECCION AÑO …….. Fecha de la Fertilización Solicita crédito Kg P2O5 Requerido SI Has. a corregir Nivel de ppm. a alcanzar en el año NO Fertilizante Recomendado Si lo solicita, indicar monto $ Dosis/Ha kg P2O5 kg Fertiliz. Costo/Kg. sin IVA kg P2O5 kg Prod. Com. Costo Neto Total $ FERTILIZACION DE PRODUCCION AÑO ….… Tipo AÑO 2 de Fertilizante FERTILIZANTE N P205 K20 MgO S Cultivo Rend. Esperado Dosis Kg./Ha. Unidades Kg Prod Comercial Cantidad Total Requerida Unidades Kg Prod. Comercial (Nombre) ...........................................……………………………(Nombre)................................................................................. (Firma) ...................................................…………………………(Firma)................................................................................... EL AGRICULTOR RUT:............................................... Nº Reg. Cons. PRSD:..............……. EL CONSULTOR FECHA........................................................ Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 PLAN DE MANEJO Nº DE CONTRATO......................................... SUBPROGRANA ENMIENDAS ROL DE AVALUO ............................................ MICROREGION Nº……………………….. Nivel inicial pH / % Sat. Al Nivel a alcanzar pH-% Sat. Al Has totales a Bonificar Nombre/Número del Potrero APLICACIÓN DE ENMIENDAS AÑO …….. Fecha Aplic. Enmienda Solicita crédito Has. a corregir SI Nivel pH / % Sat. Al a alcanzar en el año NO Kg CaCO 3 requerido Si lo solicita, indicar monto $ Enmienda a usar Kg CaCO 3 Dosis/ha. Costo/Kg. Kg Prod Com. Kg CaCO 3 Kg Prod Com. Costo Neto Total $ FERTILIZACION DE PRODUCCION AÑO … … … Cultivo Tipo de Fertilizante AÑO 1 FERTILIZANTE Unidades Rend. Esperado Dosis Kg./Ha. Kg Prod. Comercial Cantidad Total Requerida Unidades Kg Prod. Comercial N P2 0 5 K 20 MgO S APLICACIÓN DE ENMIENDAS AÑO …….. Fecha Aplic. Enmienda Solicita crédito Has. a corregir SI CaCO 3 Kg requerido Nivel pH / % Sat. Al a alcanzar en el año NO Enmienda a usar Si lo solicita, indicar monto $ Kg CaCO 3 Dosis/ha. Costo/Kg. Kg Prod Com. Kg CaCO 3 Kg Prod Com. Costo Neto Total $ FERTILIZACION DE PRODUCCION AÑO … … … Cultivo Tipo de Fertilizante AÑO 2 FERTILIZANTE Unidades Rend. Esperado Dosis Kg./Ha. Kg Prod. Comercial Cantidad Total Requerida Unidades Kg Prod. Comercial N P2 0 5 K 20 MgO S ( Nombre) ...........................................……………………………(Nombre).......................................................................…….... (Firma) ......................................................………………………(Firma).....................................................................…….......... EL AGRICULTOR RUT:................................................. Nº Reg. Cons. PRSD:.................. EL CONSULTOR FECHA.......................................................... Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 PLAN DE MANEJO Nº DE CONTRATO ................................… SUBPROGRAMA FERTILIZACION FOSFATADA ROL DE AVALUO .................................... MICROREGION Nº……………………….. Nivel inicial Fósforo (ppm) Nivel a alcanzar (ppm) Has totales a Bonificar Nombre/Número del Potrero FERTILIZACION DE CORRECCION AÑO …….. Fecha de la Fertilización Solicita crédito SI Kg P 2 O5 Requerido Has. a corregir NO Fertilizante Recomendado Nivel de ppm. a alcanzar en el año Si lo solicita, indicar monto $ Dosis/Ha kg P 2O 5 kg Fertiliz. Costo/Kg. sin IVA kg P2 O 5 kg Prod. Com. Costo Neto Total $ FERTILIZACION DE PRODUCCION AÑO ….… Cultivo Tipo Rend. Esperado Dosis Kg./Ha. AÑO 1 de Fertilizante FERTILIZANTE N P 20 5 K 20 MgO S Unidades Kg Prod Comercial Cantidad Total Requerida Unidades Kg Prod. Comercial FERTILIZACION DE CORRECCION AÑO …….. Fecha de la Fertilización Solicita crédito Kg P 2 O5 Requerido SI Has. a corregir Nivel de ppm. a alcanzar en el año NO Fertilizante Recomendado Si lo solicita, indicar monto $ Dosis/Ha kg P 2O 5 kg Fertiliz. Costo/Kg. sin IVA kg P2 O 5 kg Prod. Com. Costo Neto Total $ FERTILIZACION DE PRODUCCION AÑO ….… Tipo AÑO 2 de Fertilizante FERTILIZANTE N P 20 5 K 20 MgO S Cultivo Rend. Esperado Dosis Kg./Ha. Unidades Kg Prod Comercial Cantidad Total Requerida Unidades Kg Prod. Comercial ( Nombre) ...........................................……………………………(Nombre)................................................................................. (Firma) ...................................................…………………………(Firma)................................................................................... EL AGRICULTOR RUT:............................................... Nº Reg. Cons. PRSD:..............……. EL CONSULTOR FECHA........................................................ Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 PLAN DE MANEJO Nº DE CONTRATO......................................... SUBPROGRAMA PRADERAS ROL DE AVALUO.............................................. MICROREGION Nº ………………………... AÑO ………… Establecimiento Regeneración Has totales a Bonificar Fecha de ejecución del Establecim./Regeneración Solicita crédito SI NO Dispone de Riego permanente NO Si lo solicita, indicar monto $ Denominación Semilla/Insumo Dosis/Ha. AÑO 1 SEMILLAS FERTILIZANTES SI Cantidad Total PrecioNeto Requerida por kg Valor Neto Total N P2 05 K20 Mg0 S CaC03 LABORES PREPARACION SUELOS (Tipo y Fecha de Ejecución) VALOR NETO TOTAL $ ______________ AÑO ………… Establecimiento Regeneración Has totales a Bonificar Fecha de ejecución del Establecim./Regeneración Solicita crédito SI NO Dispone de Riego permanente NO Si lo solicita, indicar monto $ Denominación Semilla/Insumo AÑO 2 SEMILLAS FERTILIZANTES SI Dosis/Ha. Cantidad Total Precio Neto Requerida por kg Valor Neto total N P2 05 K20 Mg0 S CaC03 LABORES PREPARACION SUELOS (Tipo y Fecha de Ejecución) VALOR NETO TOTAL $ ______________ (Nombre) ..........................................…………………………(Nombre)......................................................................... (Firma)..............................................…………………………(Firma).............................................................................. EL AGRICULTOR RUT: ............................................ Nº.Reg. Cons .PRSD.: ........... EL CONSULTOR FECHA............................................................. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 PLAN DE MANEJO SUBPROGRAMA REHABILITACION DE SUELOS A) AÑO Nº DE CONTRATO ............................................. ROL DE AVALUO ................................................ ……. Naturaleza del Material a eliminar Nombre/Nº Potrero(s) Número de Hectáreas Solicita crédito SI NO Monto del crédito $ Fecha ejecución de las labores LABORES A REALIZAR EN LA EJECUCION DE LA PRACTICA Labor B) AÑO Fecha de Ejecución ……. Naturaleza del Material a eliminar Nombre/Nº Potrero(s) Número de Hectáreas Solicita crédito SI NO Monto del crédito $ Fecha ejecución de las labores/Fertilización LABORES A REALIZAR EN LA EJECUCION DE LA PRACTICA Labor Fecha de Ejecución ( Nombre)..............................................................................………....... Nombre) ....................…...........................................………....... (Firma) ................................................................................… EL AGRICULTOR (Firma) .............................................................................……….. RUT:...................................................... Nº Reg. Cons. PRSD........…........... EL CONSULTOR FECHA........................................................... Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 CROQUIS DEL PREDIO Ubicar el predio con respecto al camino principal y ciudad más próxima, indicando el potrero o superficie que será afecta al incentivo. Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 DECLARACION JURADA SIMPLE Elabajo firmante, Sr. (a) .......................................................RUT.........................................declaro bajo juramento que he ejecutado todas las labores comprometidas en el Plan de Manejo que forma parte integrante del Contrato para la Recuperación de los Suelos Degradados Nº________/_______/_______/ del................................establecido entre el suscrito e INDAP. En virtud de lo anterior, solicito a INDAP el pago de la bonificación que me corresponde, de acuerdo al siguiente detalle : Sup. A bonificar ( Hás. ) Subprograma Monto Total del Gasto ( en pesos ) Monto Total del Monto de la Costo del Servicio de Subsidio solicitado ( en pesos ) Inversión Apoyo Técnico Fertilización Fosfatada Enmiendas Praderas Conservación suelos de Rehabilitación suelos de Nombre....................................................................................................Firma................................. Domicilio.....................................................................................Fecha.............................................. ........................................................................................................................................................... (USO EXCLUSIVO DE INDAP) Subprograma Monto del Solicitado ($) Subsidio Monto del pagado ($) Fertilizacion Fosfatada Enmiendas Praderas Rehabilitación de Suelos Conservación de Suelos Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue Serie Actas N° 2 Subsidio