[Lffi\ ~ffi\~(Q) ~~\\i~~~[B3[L[E • del universo La energía oscura no se limita a acelerar la expansión del universo. Influye en el distanciamiento entre las galaxias y en su conformación CHRISTOPHER J. CONSElICE INVESTI GACi ÓN y CIENCIA, abril, 2007 •QU é ¿ nos ha llevado tan to tiempo? Hasta 1998 no se de scubrió que nos hab íamos estado pe rdiendo tres cu artas partes del contenido del universo, la energía obscura . Una forma des conocida de energí a que nos rodea y nos arrastra con suavidad. De la energía obscura depend e el destino de l cosmos . Y ni lo sabíamos. En hon or a la verdad, algunos sí habían anticipado su existenc ia. Pero inclu so ellos nos dirían que su detecci ón se encuentra entre los des cubrimientos más revolucionarios de la cosmología del siglo xx. No sólo parece que la energía oscur a constituye la mayor par te del universo, sino que, además, su presenc ia, de resistir la prueba del tie mpo , exigirá el de sarroll o de nuevas teorías físic as. Apenas se ha iniciado el largo camino que cond uce al conoc imien to de la natura leza de la energía oscura y de sus consecuencias . Nos hemos percatado de que la energía osc ura - descubierta por el efecto que ejerce so bre el universo en su globa lidad- podría mo ldear la evolució n de estre llas , galaxias y cúm ulos de galaxi as. Los astrónomos han estado observando su ob ra duran te docenas de año s sin caer en la cuenta. Curiosa mente, la pr opia om niprese ncia de la energía oscura nos la tuvo oculta. A diferencia de la materia, esa energía no se acu mula en unos lugares más que en otros. Dada su naturaleza, se extiende por doquier. En cua lquie r luga r - sea la cocina o el espacio intergaláctic o- presenta siempre la misma densid ad, unos 10- 26 kilogramos por metro cúbico , equ ivalen te a un puñado de átomos de hidrógeno por metro cúbico . Toda la energía oscura del sistema solar apenas suma la masa de un peq ueño asteroide ; por eso , no condiciona el movimien to de los planetas . Sus efectos se perc iben en las dista ncias e inte rvalos temporales más vastos. Desde los días de Edwi n Hubble, se sabe que todas las galaxias, excepto las más cercanas, se alejan de nosotr os a un ritmo veloz, proporcional a la distancia : cuanto más lejana se halle la galax ia, co n mayor celeridad se alej ará. Las galaxias no se mueven por el espacio en el se ntido corriente de la palabra; las arrastra el espacio en su expans ión [véase "Las paradojas de la gran exp losión", por Charles H. Lineweaver y Tamar a M. Davi s; I NVESTI GACIÓN y CIENCIA, mayo 2005]. Du rant e dece nios, se ha intentad o responder a la pregunta obvia que se desprend e de esta idea: ¿cómo cambia el ritmo de expansión con el tiempo? Se creía que la expansión de bería frena rse, puesto que la atracció n gravitatori a ejercida entre sí por las galaxias co ntrarres taría la expans ión. El prim er dato observacio nal inequí voco de los cam bios en el ritmo de expansión lo proporcionaron las supernovas remotas , exp losiones de grandes estrellas que sirven de hitos de la expansión cósmica , a la ma- 7 nera en que un tro nco a la der iva nos permite med ir la veloc idad de la co rr iente del río . Estas obse rvaciones revel aron que la expansión era más lenta en el pasado qu e hoy; por tan to, se está acelerando. Mej or dicho: se hab ía es tado fren and o, pero a partir de cie rto momento se ace leró [véase "Exploración del espa cio- tiem po medi ante sup ern ovas", por Craig J. Hogan , Rob ert P. Kirshner y Nich ol as B. Suntzeff; INVESTIGACIÓN y CIENCIA, mar zo 1999, y "Cuando la aceleració n ca mbió de sig no", por Ada m G. Riess y Mi cha el S . Turner; INVESTIGACIÓN y CIENCIA, abril 2004]. Difere ntes estud ios del fond o cósmi co de microond as han co nfirmado de sde entonces est e sorprendente resultado, entre ellos el efectuado por la so nda Wilkinson de las Ani sotr opías en Microondas (W MAP). Una posibl e exp licación sería que las leyes gravi tatorias en las escalas supergalácticas difieran de las que rig en en escalas inferiores, de modo que la graved ad de las galaxias no op on ga resistenci a a la expansión. Pero la hipótesis genera l más aceptada manti en e la un iversal idad de las leyes gravitatorias , por lo que se pres upone la exi stencia de algun a forma de energía, totalmente de sconocid a, que se opo ne a la atracción mutua entre las galaxias y la vence; ello conlleva la separació n ace lerada entre ga lax ias . Au nq ue la e nergía osc ura no presenta co nsecuenc ias dent ro de nu estra galaxia (y menos en nuestra cocina), en total constitu ye la fuerz a más poder osa del cosmos . Escultora cósmica A med ida qu e se explora es te nue vo fenóm eno, se va des cubriendo qu e la energía osc ura , además de fijar el ritmo de expansión glo bal del uni verso, tiene co nsecuencias a largo plazo en las esc alas pequeñas. En una v ista ge neral de l un iver so ob ser vabl e, vemo s en primer lugar qu e la materia se dis tri buye a escala có smi ca a lo lar go • Se conoce a la energ ía oscura por acelerar la expansión cósmica. Esta "sustancia" sin identificar ejerce una fuerza antigravitatoria sobre el universo cons ide rado en su conjunto. • Es menos sabido que ejerce efectos secundarios sob re la materia del universo. Intervino en la creación de la estructura filamentosa característica de la materia a gran escala. A menor escala, parece haber frenado el crec imiento de los cúmulos de gala xias, hace unos seis mil millones de años. • A escalas aún menores, ha reducido el ritmo con el que las gala xias se aproximan entre sí , colisionan y se fusionan . Estas interacciones dan su forma a las galaxias. De haber sido más débil o más intensa, la Vía Láctea quizás habría experimentado un menor ritmo de formación estelar. Los elementos pesados de que está hecho nuestro planeta podrían no haberse sintetizado nunca. B de una estructura de tel araña , una filigrana de filamentos de decenas de millo ne s de añ os-luz de largo separados po r vacíos de tamaño similar. Las simulaciones demuestran que par a exp licar dicha co nfig uració n se requi eren tant o la mater ia co mo la energía oscura. El hall azgo no res ulta sorprendente , a la postre. Los filamentos y los vacíos no son cuerpos con sistentes, como los planetas. No se han apartado de la ex pa nsió n cós mica globa l; no han establec ido su equilibrio interno de fuerzas. Co nstituye n el res ultado de la com pe tenc ia entre la ex pa nsión cósmica (y cua lquier otr o fenó meno con el mismo efecto) y su prop ia gravedad. En el universo act ua l, en la puj a de ambas fuerzas ninguna se impo ne ab ruma dora me nte a la otra. Si la e nergía osc ura hu biese sido más poderosa, la expa nsión ha bría vencido; la materia se habr ía esp arcido antes de qu e se concentrara en filamentos. Si hubi ese sido má s débil, la materia es taría má s co ncentrada qu e aho ra . La situación se co mplica si red ucim os la escala de la vista hasta la co rres po ndien te a las galaxias y cúm ulos de galaxias . Las gala xias, entre ell as la Vía Láctea, no se expanden. Su tamaño viene fijado por e l equilibrio entre la gravedad y el momento angular de las es tre llas, e l gas y e l resto del mater ial de que se co mpo nen; crecen só lo medi ant e la agregació n de mat eri a del espac io interga lác tico o po r la fus ión con otras ga laxias. La expansió n cósmica tie ne un efe ct o insignificante sobre ellas. Por tan to, no res ulta evid en te que la energía oscura pued a haber int erven ido en la formació n de las ga laxias. Lo mism o vale para los cúmulos de galaxias, los cuerpos cohesionados de mayor tamaño del universo, que en samblan miles de gal axias, sumergidas en una inmensa nube de gas ca liente y ligada s por la graveda d. Empieza a intuirse , sin embargo, que la ene rgía os cura represen ta el nexo clave entre varios aspectos de la form ación de las ga laxias y de los cúmulos de galaxias qu e hasta hace poco parecían desvinculado s. La for mació n y la evolución de estos sis tem as se hall an parcialme nte supedi tadas a las interacciones y fusiones entre ga laxias, que a su vez podr ían ha ber es tado bajo el contro l estricto de la energía oscur a . Para establ ecer la int ervención de la energía osc ura e n la for mación de ga laxias, empecem os por abordar el es tado ac tua l de la cuestión so bre génesis ga lác tica . Las teorías e n boga se basan en la exis tenci a de dos for mas básicas de ma teria: mate ria barión ica y materia osc ur a. La barióni ca es la mat eri a común, cuyas partículas inte raccionan fácilmente unas co n otr as, y, si es tán cargadas eléc tricame nte, co n la radiac ión e lec tro mag nética . De be el apel ativo de " bari ónica" a su co nstituy ente pri nci pal, los bari one s (protón y neutrón). La materia oscura, disti nta de la energía oscura, rep re senta hast a el 85 por cien to de tod a mate ria. Su propiedad más dest acable es que las partícul as qu e la co mpo nen no interactúan con la ra diación. Desde el punto de vis ta gra vitatorio, la materia osc ura se comporta igu al que la materia co mún . INVESTIGACiÓ N y CIENCIA, abril. 2007 De ac uerdo co n los mode los , la mat eri a oscura empezó a agru pa rse inmed ia tame nte des pués de la g ran explosión. Se crearon así bur buja s esféricas , o " halos" . Los barion es, por el contr ari o, no se aglomeraron en un inicio; lo im pedían sus interac cio nes co n la radiació n. Perm anecieron en una fase caliente y ga se osa. A medida q ue e l universo se expa ndía, e l gas fue enfrián dose . Los bariones pu dieron agruparse. La s primer as es trellas y galaxias surgieron de ese gas enfriado un os cie ntos de millones de años tras la gran explosión. No se mate rializa ron en c ualquier lugar, s ino en los centros de los halos de materia oscura que ya hab ían adquiri do forma . Desde los años oche nta de l pasado siglo, un número de teóricos ha realizado sim ulaci one s det all ada s por orde nado r de este pro ceso ; entre ellos se cu entan los grupo s diri gidos por Simon D. M . White, del Inst ituto Max Pl anc k de Astrofísica en Garching , y por Carlos S. Frenk , de la Un iversidad de Durham . Seg ún sus cálc ulos, la mayoría de las primeras estructur as fueron halo s de materia oscura pequeñ os y co n poca masa. Co nside rada la alt a densidad del univ ers o pri mitivo, los halos (y las ga laxias qu e co ntenía n) se fusion aron par a crear sistemas de mayor masa. La con stru cción de una gal axia, pues, procederí a de abajo arri ba , co mo en las construcc iones po r piezas Lego. (En un proce so de arr iba abajo se edificaría la casa y se la destruiría para hacer ladrill os.) Mi s colega s y yo hemos co ntrasta do es tos res ultados con nue stras observacio ne s de gal axias lejanas y de sus fusiones a lo largo del tiem po cós mico. PRUEBAS DE LA EXISTENCIA DE LA ENERGIA OSCURA EXPLOSION ES DE SUPERNOVA En un universo en expansión, las galaxias se alejan unas de otras a una velocidad que depende de la distancia mutua. Las supernovas ofrecen otro parámetro para medir el mismo efecto: su corrimiento espectroscópico al rojo revela la velocidad de las galaxias a las que pertenecen; su brillo, la distancia. Resulta que las galaxias de hace miles de millones de años se movían más despacio de lo que predice una simple extrapolación lineal del ritmo actual de expansión. El ritmo de expansión ha tenido que aumentar desde entonces. Esa es la señal distintiva de la energía oscura. RADIACION DEL FONDO COSMICO DE MICROONDAS La formación de galaxias se debilita De acuerdo con el de sarrollo de la investigación astro nómi ca, un a ga laxia pierde su form a cua ndo se fusiona co n otra . Las gal axias más pri mitivas qu e alcanzam os a ver exis tían cuando el uni verso ten ía un os mil mill on es de años. Mu cha s de ell as, sin dud a, par ecen estar en un pr oceso de fusión. Con el paso del tiempo , la fusión de galaxia s de masa importante parec e men os frecuente. Ent re los do s mil y los seis mil millones de años despu és de la gran explosión - esto es , a lo largo de la primera mit ad de la historia cós mic a- , la fra cción de galax ias gra nde s en proceso de fusió n cayó desde la mitad a ca si cero. Desd e entonces , la distribu ción de las siluetas ga lác ticas se ha conge lado ; choq ues y fusiones son poco frec uentes . El 98 por ciento de las ac tuales galax ias dotadas de masa notable son elíp ticas o espirale s, con es truc turas que habrían de saparecido en un a coli sión . Est as galax ias, q ue pres e ntan una alta es tabilidad, se co mponen, sobre todo, de estrella s viej as , pru eb a de que se generar on muy pron to y han man ten ido una morfología reg ular durante largo tiempo . En el presente, sól o una s poc as gal axias están en co lis ión, aunque de mas a irrel evan te. El ces e virt ual de las fusione s galácti cas no es la única manifestación del descens o de activ ida d del uni verso de sde que tenía la mitad de la ed ad actual. Ha mer mado la fo rm aci ón estel ar. La mayoría de las estrella s que hoy ve mos nacieron en la primer a mit ad de la hi stori a cós mica, segú n demo straron varios equ ipos en los años noventa; en tre ellos , los di rigid os por Si mo n J. Lill y, entonces en la Un iver sidad de Tar anta, Piero Mad au , a la sazó n en el In stituto de Ciencias del Tel escopi o Es - INVESTIGACiÓN y CIENCI A, abril, 2007 Las imágenes de la radiación de fondo presentan irregularidades cuyos tamaños reflejan la geometría global del espacio y, por tanto, la densidad del universo, que excede del monto de materia (tanto de la común como de la exótica): una componente desconocida -la energía oscura- debe poner la diferencia. Es más, la radiación de fondo ha sido modificada por los campos gravitatorios de las estructuras cósmicas. La magnitud de la modificación depende de cómo haya cambiado el ritmo de expansión con el tiempo. Concuerda con el efecto de la energía oscura. CONFIGURACION GALACTICA Las galaxias no se distribuyen aleatoriamente por los cielos. Se disponen según ciertos patrones, y uno de ellos se parece a las manchas del fondo de microondas. Sirve para medir la masa total del universo y confirma la necesidad de la energía oscura. LENTES GRAVITATORIAS Un objeto de mucha masa puede actuar como una lente porque su gravedad dobla la luz. La lente produce imágenes múltiples, como en una casa de espejos, si la fuente de luz se encuentra directamente detrás; un alineamiento tal es más probable cuanto mayor sea el universo, lo que a su vez depende de la cantidad de energía oscura. Una lente débil doblará la luz con un ángulo pequeño, que dependerá de la masa de la lente. El estudio de este proceso ha determinado la manera en que las aglomeraciones de materia han crecido con el tiempo. En el resultado se percibe la huella de la energía oscura. CUMULOS DE GALAXIAS Las observaciones en rayos X trazan la evolución de la masa de los cúmulos galácticos. Se necesita a la energía oscura para explicar cuándo y cómo se formaron. Laenergía oscura toma las riendas A pesar de su rápido comienzo tras la gran explosión , la construcción del universo se frenó pronto. Al principio, las galaxias se fusionaban unas con otras, cambiaban de forma y creaban estrellas a un ritmo vivaz, pero esta actividad ha declinado desde que la fuerza de la energía oscura vino a ser equipa rable a la fuerza de la materia (área marrón en las gráficas). ¿Coincidencia? Tiempo desde la gran explosión (miles de millones de años) LAS GALAXIAS DEJARON DE FUSIONARSE Las galaxias más brillantes dejaron de colisionar y fusionarse a la edad cósmica de seis mil millones de años. Las galaxias menos luminosas pueden todavía converger, pero ahora es mucho menos probable que lo hagan. O . 6 12 ( f) <1l () U ' <1l roOl (f) (]) e o '00 .2 (]) "O o .§ OC Galaxias NGC 4676, que se están fusionando LAS GALAXIAS ADOPTARON FORMAS REGULARES En un principio, la mayoría de las galaxias tenían conformaciones peculiares, signo de que estaban colisionando entre ellas. Cuando las fusiones se hicieron menos frecuentes, pasaron a prevalecer las configuraciones espirales y elípticas. 80 Q) 'ro e (]) ~ 60 o ~ (f) <1l .~ 40 roOl (]) "O e 'o '0 20 () ~ Grupo compacto de galaxias Hickson87 O DISMINUYO LA FORMACION ESTELAR . El universo primitivo era una caldera de formación de estrellas, pero el ritmo de formación estelar tuvo su máximo muy pronto y comenzó a decaer. Nunca ha sido menor que hoy. W cri tí (]) e 'o '0 0,1 <1l § .2 (]) "O o .§ oc LA ENERGIA OSCURA ADQUIRIO PREEMINENCIA Todas estas tendencias observadas pueden guardar relación con un mismo hecho: la expansión del universo enrarece la materia; a medida que su densidad se aproxima a la de la energía oscura (que se presupone constante en los modelos más sencillos), el ritmo de expansión pasa de decelerado a acelerado. Las galaxias se separaron desde entonces cada vez más deprisa, por lo que es menos probable que choquen unas con otras o barran gas con el que puedan iniciar la formación estelar. 0,01 Nuevas estrellas en el cúmulo delTrapecio 10-23 M' E o e oen o '6 (]) E 10eo- 25 "O <1l "O '00 e (]) Energía oscura O 10-27 Simulación de la distribución de materia pacial , y Charles C. Ste idel , del Instituto Tecnol ógico de Ca lifo rnia. En fecha más reci ente se ha dad o co n la razón de dicha tend encia. La form ación de estrell as acab ó muy pronto en las galaxias gra ndes. Desde que el universo tenía la mitad de la edad ac tual, sólo los sis temas ligeros han continuado creando es trellas a un ritm o apre ciable. A semejante despl azam ient o en la locali zación de la produc ción de estrellas se le den omina "reducció n galáctica" [véase "El universo maduro" , por A my J. Barger; INVESTIGACI ÓN y CIENCIA, marzo 2005]. Co n ella nos enfrentamos a una paradoja. La teoría de la formación de galaxias predi ce que las más pequeñas se con forman antes y que, a medid a que se fusion an, surgen las galaxias grandes. La historia de la for mació n estela r muestra lo con trario: en un comienzo , los principale s viveros de estrellas so n las galaxias mayores; las pequeñas toman más tarde el relevo. Llama asimismo la aten ción que el crecimiento de los agujeros negros supermasivos, situ ados en los centros de las galaxias, se haya fren ado de manera notable. Estos agujeros abastece n a los cuásares y demás tipo s de galaxias activ as, ba stante rar as en el universo moderno; los aguj eros negro s de nue stra galaxia y de otras galax ias se hallan quiesce ntes. ¿Gu ardan relación entre sí esta s tendencias de la evolución galáctica ? ¿No será la energía osc ura la razón de fondo de ambas ? El constante influjo de la energía oscura Algunos astrónomos han propues to que los procesos interno s de las galaxias, co mo la liber ación de energía por los agujeros negros y las supernovas, acabaro n con la actividad galác tica y la formación estel ar. Pero ahora parece que la energía osc ura podrí a ser una causa más profunda, la que lo lig aría tod o. La pru eba principal estriba en la coin cidenci a aproxima da en el tiemp o entre el final de la formac ión de galaxias y cúmulos de gala xias y el prin cipio del domino de la energía osc ura. Final y co mienzo que oc urriero n cuando el uni verso apenas co ntaba co n la mitad más o menos de su edad presente. Hasta ese mom ento de la historia cósmica, la densidad de materia era tan alta, qu e las fuerz as gravitatorias entre las galaxias se imponían a los efectos de la energía oscura. Las gala xias se roz aban, interaccionab an unas co n otras y, a menud o, se fusio naban. Las co lisiones de nubes de gas galácticas que así se producían engendraban estrellas y los agujeros negros cre cían a medida que se conducía gas hacia el ce ntro de los sistemas. Con el transcu rso del tiempo y la exp ansión del espacio, la materia se enrareció, lo que debilitó su gravedad; en cambio , la fuerza de la energía oscura perm aneció co nstante (o casi co nstan te) . El consigu iente desplaza miento del punto de equ ilibrio entre esas dos fuerzas prov ocó qu e el ritmo de la expa nsión pasara de una dece leración a una aceleración. Las ga laxias se separa ron; disminuy ó el rit mo de las fusi ones gal ácticas. INVESTIGACiÓN y CIENCIA, abril, 2007 Desprovi stos de combustible, los ag ujeros negros se torna ron quiescentes . Esta secuencia expli caría tambi én la "reducción galáctica". Las agrupacion es más intensas corr esponden a los halos de materia oscura de masa mayor y a las galaxias que co ntienen. Halos que residen en estrec ha veci ndad de otros halo s masivo s. Los primero s tropezarán, pues, con los vecinos antes que con sistema s de menor ma sa. Cuando sufren una de esas colisi ones, expe rimentan un brote de formación estelar. Las estrellas recién for madas brillan intensa mente y estallan; calientan entonces el gas e impiden su colapso gravitatorio, que engendraría nuevas estrellas . De esta man era, la for mación estelar se ahoga a sí misma: cuando las estrellas calientan el gas del que emergen evitan el nacimiento de más estrell as. El ag ujero negro del centro de tal galax ia actúa com o otro inhibidor de la for mación estel ar. Una fusión de galax ias proporciona gas al agujero negr o, que expulsa enton ces uno s chorros que cali ent an el gas del sistema y no deja n que se enfríe para constituir nueva s estrellas. A tenor de los ind icios, una vez que la formación estelar ha cesado no vuelve a comenzar ; es probable que el gas de esto s sistemas se haya agot ado o que se hay a calentado dem asiad o y no pueda enfri arse rápid amente. Aun así , esta s galaxias gra ndes re tienen la capaci dad de fusionarse con otras, pero surgi rán poc as estrellas nuevas, un proceso que nece sita gas frío . Mientras las galaxias masivas se estancan, las pequeñas siguen int eractuando y creando estrellas. El resultado final es que las galaxias mayores adoptan su conform ación antes que las galaxias men ores, tal y como se observa. Entra dent ro de lo veros ímil que la ener gía oscura modul ara el proceso al determinar el grado de rea grupamiento galáctico y la cadencia de las fusiones ga lác ticas. La energía oscura pod ría explicar la evolu ción de los cúmulos de galax ias. Los cúmulos antiguos, establecidos cuando el universo tenía menos de la mitad de su edad actual, comprendían tant a masa como los actuales. Es decir, los cúmulos de galaxias apenas han crecid o durant e los últ imo s seis mil u ocho mil millone s de años. Estan camiento en su tamaño que refleja que la entrada de gal axias en los cúm ulos se reduj o desde que el un iverso alcanzó la mitad de su edad presente, pru eba dire cta de qu e la energía oscur a afect a a la intera cció n de las galaxias a grand es escalas. Desde mediados de los años noventa se sabía que los cúmulos de galaxias apenas habían aumentado durante los últimos ocho mil millones de años . Se atribuyó a den sidades de mat eria mucho menores de lo que predicen los argumentos teóricos. El descub rimi ent o de la energía oscura po ne fin a esta tensión entre las observacio nes y la teoría. Una muestra de que la energía oscura cambia la histori a de los cúmulos galác ticos la enco ntramos en el destin o del Grupo Local, las galaxias de nuestro entorno más inmed iato. Hasta hac e unos pocos años, se admitía que la Vía Láctea y And rómed a, su veci na más próxima, así como sus séquitos de galaxias satélites , caerían en 11 Situaciones hipotéticas Si el universo dispusiera de más energía oscura ofrecería otro aspecto radicalmente diferente. La aceleración cósmica habría empezado antes, habría separado la materia más deprisa y habría abortado la generación de macroestructuras. Ocurriría justo lo contrario si el universo tuviera menos energía oscura. Cada recuadro inferior muestra una región con un diámetro MAS ENERGIA OSCURA ºA= 0,99 CANTIDAD OBSERVADA DE ENERGIA OSCURA MAS ENERGIA OSCURA ºA= 0,75 ºA=° EL UNIVERSO PRIMITIVO: Cuando el tamaño del universo era un sexto del actual, la materia se distribuía por igual en las tres hipótesis. La energía oscura no había ejercido aún su influencia. 12 actual de mil millones de años-luz y 27 millones de partículas, cada una de ellas correspond iente a una galaxia. Estas simulaciones presuponen que la densidad de energía oscura es constante en el espacio y en el tiempo. La cantidad nA es el parámetro cosmológico dominante; representa la densidad de energía oscura hoy día. PERIODO DE TRANSICION: cuando el universo alcanzó el 75 por ciento de su tamaño actual, los efectos de la energía oscura eran ya patentes. En la hipótesis de una de mayor cantidad de energía oscura (arriba), el universo se presenta amorfo. En las otras dos, la formación de estructuras continúa y genera una telaraña cósmica. HOY: en un universo con la densidad observada de energía oscura (centro), la formación de estructuras de gran escala ha terminado; la telaraña se ha congelado. Sin energía oscura (abajo), la telaraña sigue evolucionando. INVESTIGACiÓN y CIENCIA, abril, 2007 el cercan o cúmulo de Virgo . Ahor a todo indica que escaparemos a ese sino y nunca formaremos parte de un cúmulo ma yor de gal axias. La energía oscura hará que la distancia entre Virgo y nosotros aumente más deprisa de lo que el Grupo Loc al puede avanzar. Al controlar el desarrollo de los cúmulos, la energía oscura regul a la construcción de galaxias de su interior, El entorno del cúmulo faci lita la formación de una ampli a diversidad de galaxias: lenticulares, gigantes elípticas, enanas elípticas. Pue sto que la energía oscura regul a la incorporación de galaxias a los cúmulos, dicta de paso la abundancia relativa de esos tipos galácticos. Parece ver osímil , pero ¿es cierto? La fusión de galaxias, la act ividad de los agujeros negros y la form ación estelar han decaíd o co n el tiempo; es muy probabl e que los tre s hech os gua rden relaci ón . No se conoce toda vía la sec ue ncia co rrec ta de los aconteci mientos. Gra cia s a los rastreos en marcha del Tele scopi o Espacial Hubble y del Observatorio Chandra de rayos X, y los efe ctu ados con técnica s de imagen y espectroscopía terrestres muy sensibles , se profundizará en la posibl e conexión dur ant e los próximos años. Una man era de realizar este estud io co nsiste en obtener un buen ce nso de galaxi as activas lejanas y determinar el momento en que experimentaron la última fusión. Para el análisis habrá que desarroll ar herramientas teóricas noved osas en los próximos años . Un nuevo equilibrio Un universo en acelerac ión dominado por la energía oscura expli ca de un mod o coherente los cambi os observados en la pobl ación de galaxias; es decir, el cese de las fusion es y sus muchos corolarios, como la pérdida de una formación estela r vigo rosa y el final de las metamorfosis galácticas . Si la energía oscura no hubiera existido , las colisiones de gala xias habr ían co ntinuado durante más tiemp o y el univer so contendría hoy día muchas más ga lax ias de gran masa con poblaci ones estelares viej as. Contend ría, por ello mismo, menos sistemas de masa irrelevante; las galaxias espirales como la Vía Láctea sería n escasas (ya que las espirales no pueden sobrevivir a las fusiones). Las macroestructuras galácticas manten drían una cohesión más firme. Cabría, pues, esperar un núme ro mayor de fusiones y crecimiento de estructuras. Por el contrari o, si la energía oscura hubiera sido más intensa de lo que es, el universo habría experim entado menos fusiones ; habr ía meno s galaxias grandes y cúmulos ga lácticos . Las galaxias espirales y las enanas de masa esca sa menud ear ían, porque no habr ía habido en el tiemp o tant as co lisio nes entre galaxias, al encerrar los cúmul os galácticos mucha meno s masa . Hast a podría no haber cúmulos . También habría sido posibl e que se formaran menos estrellas y que una fracción mayor de la materia bariónica del universo permaneciera en estado gaseoso. INVESTIGACiÓN y CIENC IA, abril, 2007 Aunqu e dé la impresión de que estos proces os nos caen muy lejos, la manera en que se form an las gala xias influye en nue stra existencia. Se necesitan estrellas donde se generen elementos más pesados que el litio , de los que están hechos los planetas terre stres y la vida. Con ritm os de formación estelar menores, el universo contendría menos planetas; la vida quizá no hub iese aparecido nunca . La energía oscura pudo haber ejerc ido un efecto determinante en numerosos aspectos del universo, en la epidermis sin relación entre sí; pud o incluso haber dejado su sello en la historia de nuestro planet a. La energía oscura no ha concluido su trabajo. Quizá beneficie a la vida: la aceleración imp ide el colapso tan temid o hasta ayer por los astrónom os. Pero la energía osc ura comporta otros riesgos. Hace que las galaxias más distante s retrocedan tan deprisa, que las perdemos de vista para siempre. El espacio se está vaciando. Nuestra galaxia y sus vecinas más cercanas serán una isla cada vez más solitaria. Los cúmulos galácticos, las galaxias e inclu so las estrellas que vagan por el es pac io intergaláctico contarán con esferas de influencia gravitatoria no mucho mayore s que sus propios tamaños. Aún peor, la energía oscur a podría estar evolucionando. Algunos modelos predicen que, si la ener gía oscura se vuelve predominante con el tiemp o, romp erá los objetos ligados por gravedad. Disgregará cúmulos galácticos y galaxias. Más tarde, la Tierra será arrancada del Sol y se disgregará también, al igu al que los demás planetas. Incluso los átomos serán dest ruidos. La energía osc ura, una vez ensombrecida por la materia, tendrá su venganza final. El autor Christopher J. Conselice enseña en la Un iversidad de Nottingham, adonde se ha trasladado rec ientemente desde el Instituto de Tecnologia de California. Se ha especializado en la formación de galaxias y dirige varios programas de observación en luz infrarroja y visible con telescopios tanto de superficie como espaciales. Bibliografía complementaria A OIRECT MEASUREMENT OF MAJOR GALA XY MERGERS AT z:::; 3. Christopher J. Conselice, Matthew A. Bershady, Mark Oickinson y Casey Papovich en Astronomical Joumsl, vol. 126, n." 3, págs. 1183-1207; septiembre 2003. DARK ENERGY. Robert R. Caldwell en Physics Wor/d, vol. 17, n.? 5, págs. 37-42; mayo 2004. THE EXTRAVAGANT UNIVERSE: EXPlOOlNG STARS, DARK ENERGY, ANO THE ACCElERATING COSMO S. Robert P. Kirshner. Princeton University Press, 2004. THE INFINITE COSMOS: QUESTIONS FROM THE fRO NTIERS OF COSMOlOGY. Joseph Silk. Oxford University Press, 2006. 13