Las Senadoras: Ivonne Liliana Álvarez García, Angélica Araujo Lara, Lisbeth Hernández Lecona, Margarita Flores Sánchez, María del Rocío Pineda Gochi, y Mely Romero Celis, del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, con fundamento en los artículos 72, numeral 1, fracción XVI, 76 numeral 1, fracción XI y 87 numeral 3 del Reglamento del Senado de la República, para la programación de la Efeméride con motivo 191 aniversario de la instalación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación el pasado 25 de marzo. En México el Supremo Poder de la Federación se divide para su ejercicio en Legislativo, Ejecutivo y Judicial, situación que no solo forma parte de las decisiones políticas fundamentales del constitucionalismo mexicano, sino que además, es percibido como algo cotidiano dentro de nuestro desarrollo como sociedad. La plena integración de los tres Poderes de la Unión se dio con la instalación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la cual comenzó sus labores el 25 marzo de 1825 y surgió con el firme propósito de salvaguardar las libertades, la democracia, el respeto, la paz y sobre todo el impartir justicia. A 191 años de aquel acontecimiento, desde el Senado de la República y como integrante de uno de los Poderes de la Unión, el Legislativo, considero vital mirar hacia el pasado para poder ponderar en sus justas dimensiones este suceso. En principio, es importante tener en cuenta que de la misma forma que el Poder Judicial de la Federación, la Suprema Corte de Justicia de la Nación encuentra su origen en el Supremo Tribunal de Justicia para la América Mexicana, instalado el 7 de marzo de 1815, en la ciudad de Ario, Intendencia de Valladolid (actual territorio de Ario de Rosales, Michoacán). La creación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación se remonta a tiempos de Don Miguel Hidalgo y Costilla y el Generalísimo José María Morelos y Pavón. Al respecto, el primero fue quien impulsó la convocatoria de un Congreso representativo de la Nación y el último es reconocido por ser quien plasmó dicha ideología en sus célebres Sentimientos de la Nación. Posteriormente, en el seno del Congreso de Chilpancingo, el 22 de octubre de 1814, se promulgó el Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana, del que derivó la instauración del primer Supremo Tribunal de Justicia en la población de Ario, Michoacán, el 7 de marzo de 1815. De esta manera, años más tarde, en la Constitución de 1824, se estableció la forma de gobierno republicana, representativa, popular y federal para nuestro país, así como el principio de la división de poderes en Legislativo, Ejecutivo y Judicial, depositando el ejercicio de éste último en “una Corte Suprema de Justicia, en los Tribunales de Circuito, y en los Juzgados de Distrito”. Al respecto, en términos del artículo 94 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, el ejercicio del Poder Judicial de la Federación se deposita en una Suprema Corte de Justicia, en un Tribunal Electoral, en Tribunales Colegiados y Unitarios de Circuito y en Juzgados de Distrito. Como Máximo Tribunal Constitucional, la Suprema Corte de Justicia de la Nación es la encargada de resolver de forma definitiva cuestiones trascendentes para la sociedad mexicana. Para ponderar la trascendencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, cabe mencionar que entre los asuntos cuyo análisis y resolución le corresponden están los llamados Medios de Control de la Constitucionalidad, en los casos que a continuación se señalan: juicio de amparo, controversias constitucionales, acciones de inconstitucionalidad y las determinaciones de constitucionalidad sobre la materia de consultas populares. En el marco del 191 aniversario de la instalación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, reconozco que actualmente tenemos un Tribunal profesional, objetivo, responsable, eficaz y eficiente. No obstante, si bien es cierto que los avances sociales y políticos de nuestra nación son asombrosos, éstos siguen siendo insuficientes, por ello es fundamental seguir trabajando en la construcción de la democracia mexicana, siempre bajo el principio de legalidad. Dado en el Salón del Pleno a los 29 días del mes de marzo de 2016. Atentamente SENADORAS Ivonne Liliana Álvarez García Lisbeth Hernández Lecona Angélica Araujo Lara Margarita Flores Sánchez María del Rocío Pineda Gochi Mely Romero Celis.