fortalecimiento de la industria de rumiantes menores

FORTALECIMIENTO DE LA INDUSTRIA DE RUMIANTES
MENORES PARA LA COMERCIALIZACIÓN Y EL
DESARROLLO RURAL EN COLOMBIA CON
PARTICULAR ÉNFASIS EN ASPECTOS SANITARIOS
Este proyecto recientemente aprobado por el Ministerio de
Relaciones Exteriores, Comercio y Desarrollo de Canadá
(DFATD) y el Conference Board of Canada (CBoC); es una iniciativa que hace parte del
programa de Asistencia Técnica Relacionada con el Comercio de Canadá y las
Américas (CATRTA). Dicho proyecto será ejecutado por Cannexion en colaboración
con la Dirección de Cadenas Pecuarias, Pesqueras y Acuícolas del Ministerio de
Agricultura y Desarrollo Rural de Colombia.
Es un proyecto de transferencia de tecnología, cuya idea central es colaborar con el
fortalecimiento de la producción de carne de cordero y derivados lácteos de cabra con
miras a la exportación hacia el mercado Canadiense. Para ello, se prestara
acompañamiento técnico en aspectos como:
 Nutrición (evaluación de los recursos forrajeros y alimentos balanceados con los
cuales se cuenta en Colombia y compartir las experiencias exitosas que tiene
Canadá en esta materia).
 Manejo integrado en granjas (compartir las actividades exitosas que desarrollan
los productores canadienses y validarlas y ajustarlas a las condiciones de
Colombia)
 Reproducción (impartir un curso completo de técnicas de reproducción para
capacitar capacitadores, que lo puedan replicar en sus respectivas zonas de
producción).
 Aspectos sanitarios (como cumplir con las exigencias de las autoridades de
inspección de alimentos en Canadá y fijar un plan de ruta para garantizar el
acceso de los productos colombianos al mercado canadiense).
Canadá importa cerca del 60% del cordero que consume, desde países como Australia
y Nueva Zelanda. Canadá importo en el año 97 cerca de 12,000 toneladas de cordero,
y para el año 2009 cerca de 24,000 toneladas. Este crecimiento se debe en parte a
que la población canadiense está altamente conformada por grupos de inmigrantes
como judíos, griegos, italianos y musulmanes, grandes consumidores de esta proteína
animal.
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