IMPRIMIR IMPRIMIR ARTICULO EDICIÓN IMPRESA ECONOMÍA La jubilación parcial a los 60 años requerirá un sustituto con contrato fijo a jornada completa Es la única excepción al retraso de la jubilación parcial de los 60 a los 6 años que recoge la reforma de pensiones ELISA GARCÍA/ MADRID. La reciente reforma de pensiones pactada entre Gobierno, empresarios y sindicatos, retrasa de los 60 a los 61 años la jubilación parcial. El objetivo perseguido es paliar el coste que esta modalidad de retiro supone para el sistema de la Seguridad Social. No obstante, el acuerdo mantiene una excepción. Publicidad Los trabajadores con una antigüedad en la empresa de seis años y 30 cotizados podrán acceder a la jubilación parcial a los 60 años siempre que el empleado que les sustituya disfrute de un contrato fijo a jornada completa. La jubilación parcial fue una de las figuras más tratada en la mesa de negociación. Para los trabajadores supone un retiro adelantado sin penalizaciones y para los empresarios un sustancioso ahorro en costes laborales. La experiencia demuestra que los empleados que solicitan la jubilación parcial disfrutan de salarios elevados y, por lo tanto, sus cotizaciones también son altas; mientras que los que entran para compartir el puesto de trabajo cobran menos de la empresa y las aportaciones al sistema igualmente son más bajas. Afectados La posibilidad de acogerse a la jubilación parcial data del acuerdo de 2001, suscrito entre Gobierno CEOE/Cepyme y CC OO. Aquellos cambios entraron en vigor el 1 de enero de 2002, con el rechazo de UGT. Este tipo de salida de la empresa se aplica en la actualidad a partir de los 60 años; y afecta a dos colectivos de manera diferente. Por un lado, a los menores de 65 años y, por otro, a los mayores de esa edad. En el primero de los supuestos, la jubilación parcial queda vinculada a que su titular suscriba un contrato con jornada reducida y a la existencia de otro de relevo a cubrir por un parado o por un empleado temporal. La fórmula compagina salario y pensión con lo que aumenta el gasto de la Seguridad Social que tiene que adelantar parte de la prestación. Cuando son los mayores de 65 años quienes optan por ella no es necesario el contrato de relevo. Fomento del empleo En noviembre de 2005, el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, dijo que cada jubilado parcial menor de 65 años cuesta a su Departamento una media de 100.000 euros adicionales. Los sindicatos plantearon que este gasto saliera de los Presupuestos Generales, al tratarse de una medida de fomento del empleo, en lugar de las arcas de la Seguridad Social, pero no prosperó. El retraso de los 60 a los 61 años, recogido en la reforma, se llevará a cabo de manera gradual en seis años. El incremento se hará a razón de dos meses por cada ejercicio. Otros cambios introducido en el nuevo documento se refieren a que se exigirá una antigüedad de seis años en la empresa al trabajador relevado; 30 años de cotización y la reducción máxima y mínima de la jornada habitual de trabajo del jubilado parcial. Todas estas variaciones se aplicarán también gradualmente. COLPISA Subir