sistema de interconexión eléctrica para la integración física de la

Anuncio
SISTEMA DE INTERCONEXIÓN ELÉCTRICA PARA LA INTEGRACIÓN
FÍSICA DE LA INFRAESTRUCTURA ENTRE CENTRO
Y SURAMÉRICA DENTRO DEL MARCO
IIRSA Y EL PPP
JOSE DAVID MORALES ANZOLA
PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA
FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y RELACIONES INTERNACIONALES
CARRERA DE CIENCIA POLÍTICA
BOGOTÁ, D.C.
2010
SISTEMA DE INTERCONEXIÓN ELÉCTRICA PARA LA INTEGRACIÓN
FÍSICA DE LA INFRAESTRUCTURA ENTRE CENTRO
Y SURAMÉRICA DENTRO DEL MARCO
IIRSA Y EL PPP
JOSE DAVID MORALES ANZOLA
Trabajo de Grado para optar al título de
Politólogo.
Director
JOSE ALBERTO PÉREZ TORO
Ingeniero Industrial
PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA
FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y RELACIONES INTERNACIONALES
CARRERA DE CIENCIA POLÍTICA
BOGOTÁ, D.C.
2010
Nota de Aceptación:
__________________________________
__________________________________
__________________________________
__________________________________
__________________________________
__________________________________
Firma del Presidente del Jurado
__________________________________
Firma del Jurado
__________________________________
Firma del Jurado
Bogotá, D.C., Noviembre de 2010
AGRADECIMIENTOS
No siempre la vida nos otorga la posibilidad de dar gracias a quienes nos brindan la
mano, por esta razón quiero dedicar este proyecto de monografía y mi carrera a las
personas que siempre me han apoyado y han querido lo mejor para mí:
Mi madre, Edith Anzola quien nunca ha desfallecido y guerrera de mil batallas,
Mi Tía Stella, el sol y la luna que me acompañan noche y día,
Ricardo, el hombre honorable, firme y digno,
Mi hermano Andrés el ejemplo de fortaleza y templanza,
Mi primo Carlos, noble y alegre amigo,
Mis primos Mónica y Camilo quienes son ejemplo de lucha y sacrifico,
Mis amigos y compañeros de la vida y la universidad.
Así mismo a la Doctora Patricia Muñoz por su atención y colaboración a lo largo de la
carrera y mi directo Jose Alberto Pérez Toro como a todos los profesores que me
brindaron su conocimiento y experiencia.
Por último quiero darle gracias a Dios quien me permite soñar y levantarme cada día
para forjar un futuro mejor lleno de restos.
Todas aquellas personas que hacen de mi vida un momento de alegría y comparten el
día a día, forman parte de esta dedicatoria.
Muchas Gracias.
CONTENIDO
Pág.
INTRODUCCIÓN
1.
1
CARACTERÍSTICAS E IMPEDIMENTOS POLÍTICOS EN LA
CONSTRUCCIÓN DE LA INTEGRACIÓN LATINOAMERICANA
10
1.1.
CONSTRUCCIÓN DE NUEVAS RELACIONES
10
1.1.1.
Soberanía: Concepciones generales latinas
11
1.1.2.
Integración regional en América Latina
12
1.1.3.
Interdependencia económica en la interconexión eléctrica
13
1.1.4.
Responsabilidad política para los dirigentes latinos
14
1.1.5.
La supranacionalidad como sistema jurídico e institucional para
la interconexión eléctrica
14
1.1.6.
Políticas y acciones comunes entre los Estados latinos
15
1.2.
LOS OBSTÁCULOS PARA LA INTEGRACIÓN DE AMÉRICA
LATINA
16
1.2.1.
La integración supranacional vs integración intergubernamental
17
1.2.2.
El exceso de retórica y nacionalismo extremo por parte de los
gobiernos latinos sin compromisos
18
1.2.3.
Tipo de integración que se pretende en América Latina
19
2.
DOS VISIONES DE INTEGRACIÓN ELÉCTRICA: EL PPP Y
LA REGIÓN ANDINA BAJO UN NUEVO MARCO REGULATORIO
20
2.1.
EL MARCO REGULATORIO DEL SECTOR ELÉCTRICO
20
2.2.
LA INTERCONEXIÓN ELÉCTRICA EN EL PLAN PUEBLA PANAMÁ
PPP
21
2.2.1.
Interconexión Panamá-Colombia ICP
22
2.2.2.
Sistema de interconexión eléctrica para América Central SIEPAC
23
2.3.
LA INICIATIVA PARA LA INTEGRACIÓN DE LA
2.3.1.
INFRAESTRUCTURA REGIONAL SURAMERICANA (IIRSA)
26
Interconexión Eléctrica en la Región Andina
27
3.
ESCENARIO PRÓXIMO PARA COLOMBIA COMO POTENCIA
ELÉCTRICA EN LA INTERCONEXIÓN ENTRE CENTRO Y
SURAMÉRICA
3.1.
30
ORIGEN Y CONSOLIDACIÓN DE LA ENERGÍA ELÉCTRICA
EN COLOMBIA
30
3.2.
LA DEMANDA DE ELECTRICIDAD EN COLOMBIA
34
3.2.1.
Demanda de Energía eléctrica en Centro América
34
3.2.2.
Demanda de Energía eléctrica en Ecuador y Venezuela
36
3.3.
OFERTE DE ELECTRICIDAD EN COLOMBIA
37
3.4.
SISTEMA INTERCONECTADO NACIONAL –SIN-
38
3.4.1.
Capacidad Efectiva Neta de Electricidad
38
3.5.
INTERCONEXIÓN ELÉCTRICA S.A. EMPRESAS DE
ELECTRICIDAD
3.5.1.
39
Expansión y crecimiento de la red Eléctrica a nivel nacional e
internacional de la Empresa ISA
39
3.5.2.
Colombia
40
3.5.3.
Perú
40
3.5.4.
Brasil
41
3.6.
ESCENARIO PRÓXIMO EN COLOMBIA
41
3.6.1.
Construcción de la hidroeléctrica Ituango S.A. E.S.P como nuevo
Escenario
43
3.6.2.
Localización de HIDROITUANGO S.A. E.S.P
44
3.7.
RESULTADOS DEL NUEVO ESCENARIO PARA COLOMBIA
44
CONCLUSIONES: “La Nueva Posición Geoestratégia de Colombia
a Nivel Eléctrico”
46
BIBLIOGRAFÍA
50
ANEXOS
60
Lista de Anexos
Anexo A: Mapa del Plan Puebla Panamá. Red Eléctrica y Países que los conforman.
Anexo B: Mapa de Interconexión Colombia Panamá ICP.
Anexo C: Mapa SIEPAC. Primer sistema de transmisión regional.
Anexo D: Empresas que hacen parte del SIEPAC.
Anexo E: “Decisión 539”.
Anexo F: Demanda de Energía en Colombia UPME Febrero de 2010.
Anexo G: Sistema Interconectado Nacional SIN a 2008.
Anexo H: Interconexiones internacionales Colombia-Ecuador; Colombia-Venezuela.
Anexo I: Capacidad Efectiva Neta.
Anexo J: Distribución porcentual de ISA en otros países.
Anexo K: Plan de Expansión de transmisión de Colombia.
Anexo L: Localización de Hidroituando.
INTRODUCCIÓN
En América Latina, los procesos de integración siempre han tomado un carácter
político, que dificultaron la organización e integración de las voluntades e intereses
políticos de los países latinoamericanos sin contar con una adecuada infraestructura
física para el desarrollo económico. Desde los años 50 se tomó en cuenta el proceso de
la Unión Europea como modelo a seguir en Latinoamérica, mientras se olvidaban las
características políticas, sociales y económicas de la región, dejando como resultado
algunos intentos para la integración regional han sido la Asociación Latinoamericana de
Libre Comercio (ALALC); la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI), y para
efectos subregionales la CAN y MERCOSUR, y por último, se ha creado la UNASUR.
Ahora bien, en cuanto a la infraestructura pertinente que debe poseer América Latina
para llevar a cabo un desarrollo económico con bajos costos de transporte entre los
centros de producción y las periferias, la integración política regional se ha
despreocupado por la integración física de estas. Las redes viales, telecomunicaciones,
puertos marítimos, vías férreas, comunicación entre fronteras por carreteras o vías
fluviales, son temas que no hacen parte prioritaria de la agenda política y económica de
los gobiernos actuales. Lo cual ha llevado a un desarrollo costoso de la integración de
los pueblos latinoamericanos. Por lo tanto, la Interconexión Eléctrica puede
considerarse como un instrumento de integración, aunque muchas veces “la
interconexión sea un viejo concepto que busca negocios sin integración” (Otero, 2009,
p. 178), nuestro análisis comprende acuerdos comerciales y conexión y construcción de
vías y redes de electricidad que brinda una nueva forma de comunicación física entre
los países.
La iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA) es
un proyecto que nace en Brasilia, en el 2000. Y se crea para establecer y promover el
desarrollo de la infraestructura física de Transporte, Energía y Comunicación entre las
naciones. La situación de Colombia se da al hacer parte del Eje Andino, donde puede
aprovechar el mercado eléctrico gracias su posición geográfica y puede interconectar
1
Centro y Suramérica. El proyecto Mesoamericano, antes denominado Plan Puebla
Panamá (PPP), constituye un desarrollo eléctrico para las naciones de Centro América
y el sur de México. Por medio de la interconexión Colombo-Panamá (ICP), la
integración eléctrica uniría a Centro y Suramérica, y crearía un mercado eléctrico
mayorista de economías de escala, disminuyendo los costos de la producción y
aumentando la capacidad productiva. Por medio de redes que articulan un sistema,
estos dos escenarios, Región Andina y PPP, forman una plataforma de interconexión
eléctrica que permite la integración de los pueblos.
En la realización de la investigación, se tiene en cuenta dos teorías para analizar la
integración internacional por medio de la electricidad: 1. La globalización, y 2. La
interdependencia hace parte de un proceso donde las naciones tienden a cooperar,
debido a la necesidad de enfrentar los nuevos desafíos en forma de bloque mediante un
mercado global. Por otro lado, se toma un enfoque neo-institucional, donde IIRSA y el
Proyecto Mesoamérica son instituciones que configuran un marco de normas
moldeando el comportamiento de los Estados hacia intereses comunes de integración.
Dentro de este enfoque, el institucionalismo histórico es un instrumento útil para
entender la pauta de dependencia historia en la formación de las instituciones
mencionadas y entender el proceso de interconexión eléctrica en Centro y Suramérica
hechos a través de la historia.
La electricidad hace parte de las energías limpias, donde el aprovechamiento del
recurso hídrico en abundancia en Colombia adquiera importancia para un desarrollo
económico y ambiental sostenible. Esta investigación busca facilitar la comprensión y
necesidad de una integración de la infraestructura regional a través de la interconexión
eléctrica entre naciones. As mismo, busca explicar por qué la geografía económica es
importante para reducir los costos de transporte en una infraestructura precaria y casi
inexistente en Centro y Suramérica.
Esta investigación tiene un carácter histórico desde la llegada de la electricidad a
Colombia, pero hace énfasis en los últimos 20 años, desde la creación de IIRSA en el
2000 y del Plan Puebla Panamá en el 2001 hasta la actualidad, donde los Estados y
empresas transnacionales se han aventurado en el desarrollo de fuentes de energía
renovables como la electricidad.
2
La investigación gira en un dificultad donde Latinoamérica no cuenta con una
infraestructura adecuada es el problema central para lograr un proceso de integración
económica para luego llegar a lo político, es decir, el sistema de transporte es precario,
lo cual obstaculiza el desarrollo económico y así mismo la integración de los mercados.
La interconexión eléctrica es una herramienta útil para mejorar las condiciones de la
infraestructura. La geografía también hace parte de esta problemática ya que los
espacios geográficos juegan un papel fundamental para la integración física. La
Geografía Económica propuesta por Krugman (1992, p. 7) en su libro Geografía y
Comercio es entendida como “la localización de la producción en el espacio, es decir la
rama de la economía que se preocupa de donde ocurren las cosas”. Por esta razón es
importante saber la localización y originen de la concentración de capitales que
determina los puntos de producción y comercialización, por lo tanto los costos de
transporte comienzan a incursionar relativamente con la distancia y la posición
geográfica. Debido a la diversidad geográfica y dificultades del terreno latino, los costos
en el transporte han sido elevados y más cuando no se cuenta con una infraestructura
apropiada para los intercambios económicos.
En los procesos de integración no se ha tenido en cuenta la geografía, por este motivo,
según Krugman (1992. p. 13), es importante considerar tres razones por las cuales es
necesario retomar la Geografía-Economía: 1. porque se puede determinar la
localización de la actividad económica en el interior de los países, es decir, la ubicación
de la producción en el plano espacial; 2. en este proceso las fronteras se convierten en
límites borrosos; y 3. se generan las condiciones para un laboratorio intelectual.
Sumado a ello, en el libro Geografía Economía, Paul Romer hace referencia a los
rendimientos crecientes, lo cuales “constituyen un crecimiento sostenido afectando la
geografía de manera directa”. El transporte mediante infraestructura integra los puntos
de producción con los puntos de distribución y costos bajos en transporte, lo cual se
transforma en rendimientos crecientes, ya que son fluidos y constantes.
Dentro de la integración física, el transporte es un elemento importante que se debe
tener en cuenta a la hora de medir los costos, ya que a medida que los costos de
transporte se incrementan por la deficiencia física en carreteras, vías férreas, transporte
fluvial, los costos del desplazamiento de la producción de un lugar a otro también
3
crecen. Por esta razón, el transporte adquiere relevancia: en cuanto a mayor
desplazamiento, mayor costo adquiere el producto, mientras representa demoras y
poca interacción de mercados en condiciones precarias de infraestructura, como las
actuales en Latinoamérica. El postulado económico de Krugman (1992) apunta a
maximizar los ingresos económicos y minimizar los costos de transporte, donde la
adecuada infraestructura hace ese hecho posible. Los ingresos económicos
correspondes a: economías de aglomeración, economías de escala, economías de
complementariedades y economía de externalidades, con lo cual se logra una
integración de los procesos de conexión entre las partes.
Según Krugman (1992), para minimizar los costos de transporte se elige una ubicación
que permita contar con una demanda relativamente grande para reducirlos, es decir, sí
la demanda es pequeña, los costos de transporte aumentan, pero sí existe una gran
cantidad de demanda, los procesos de producción aumentan. Se debe tener en cuenta
los desplazamientos y las distancias entre los puntos. Centro y Suramérica constituyen
un mercado mayorista de venta de energía, donde la demanda es directamente
proporcional con la población. Dentro de la nueva política económica se han olvidado
estos principios sobre la geografía, donde los costos en el transporte producen
obstáculos en la integración. Por lo tanto, es necesario que la producción tenga una
fuerte demanda para incrementar sus ingresos y mantener un ritmo acelerado de
producción. A continuación se explica cual es el modelo económico de Krugman para
entender el problema de los costos de transporte en la geografía latinoamericana y
entender la importancia de la geografía.
El modelo económico que presenta Krugman parte del modelo de Centro-periferia,
donde la integración de los mercados en el contexto globalizado y de interdependencia
hace posible su realización. Por esta razón, “la creación de un sistema donde uno de
los emplazamientos se configura como un centro industrial, mientras que el otro se ve
relegado a transformarse en una periferia, se basa en una combinación de grandes
economías de escala, costos de transporte bajos y gastos de inversión en los bienes
industriales” (1992, p. 122). En esta medida, “la concentración geográfica (población),
nace básicamente de la interacción de los rendimientos recientes, los costos de
transporte y la demanda” (1992, p. 20). El resultado de la interacción es la creación de
4
economías de escala. El modelo de Krugman tiene como principal objetivo crear
rendimientos crecientes, basándose en economías de escala, subiendo los ingresos en
la integración de mercados. Por ende, es conveniente definir unas variables:
K = TPO/2 [(1+P) T O-1 + (1-P) T -(O-1)] (Krugman 1992, p: 118. A. 15)
Según Krugman (1992), si K que es capital, es mayor que la unidad, será rentable
iniciar la producción; únicamente si k < 1 un equilibrio centro periferia será sostenible.
Por consiguiente K es un índice que depende de tres parámetros: P es el peso que
representan los bienes industriales en el gasto; T expresa la inversa de los costos de
transporte ya que depende de las condiciones de infraestructura; y O está relacionado
inversamente con las economías de escala en equilibrio. En este sentido crear un
mercado eléctrico donde el transporte no sea un costo elevado, los bienes industriales y
de inversión sean equilibrados representan rendimientos crecientes para las empresas.
Por ello la importancia del transporte, sí es un costo elevado altera la producción
eléctrica y desequilibra los precios del mercado.
Ahora bien, otro impedimento para la integración es la geografía, ya que por sus
diferentes relieves topográficos, los costos del transporte son altos, pero con la
integración de la infraestructura bajarían los costos del transporte. A lo largo de los
capítulos se desarrolla este modelo en la interconexión eléctrica teniendo la posición
geoestratégica de Colombia como la unificación de las redes de Centro y Suramérica.
Por lo tanto, la interconexión eléctrica es un instrumento útil para la integración entre
Centro y Sur América, mientras representa una nueva alternativa al estancamiento de
los procesos políticos de integración, donde se busca compartir una misma ideología o
afinidad política. En este caso, la electricidad es un proyecto apolítico de integración
física regional de necesidad. El mejoramiento de la infraestructura física contribuye a
dinamizar el intercambio de bienes y servicios a escala regional, lo cual otorga un papel
predominante a la construcción de redes eléctricas para generar procesos comerciales
de cooperación e interdependencia dentro del sistema internacional.
La interconexión eléctrica del Plan Puebla Panamá puede ser interconectada por
Colombia a través de la frontera con Panamá lo cual le daría un mercado eléctrico para
5
integrar el sistema centroamericano y colombiano. Así mismo, la Región Andino se
considerada como la puerta hacia la integración eléctrica con el Cono Sur a través de
Perú. Por medio de estos dos proyectos se promueve la interconexión eléctrica para
mejorar la infraestructura física avanzando hacia la integración, con el fin de articular un
sistema eléctrico sin fronteras como principal instrumento de la globalización. Por lo
tanto, las características geográficas y climáticas colombianas establecen un potencial
hídrico para la región así como su posición geográfica permita la construcción de un
escenario próximo en la exportación de energía eléctrica desde Colombia hacia el
mundo con una infraestructura física integrada. En este sentido, empezamos a utilizar la
teoría de la globalización y la interdependencia para estudiar nuestro caso.
Dentro de las relaciones internacionales, la interconexión eléctrica entre centro y
suramericana es analizada desde la globalización y la interdependencia para considerar
elementos importantes como los propuestos por Wolfgang H. Reinicke (1998, p. 11)
donde dice que “la globalización corresponde a su origen, en gran parte como un
proceso microeconómico lo cual contrasta con la interdependencia que es entendida y
conceptualizada en su mayoría en términos macroeconómicos”. En este sentido,
podemos decir que la integración eléctrica parte desde lo local hacia lo global, y por
ello, “la globalización instaura un nuevo paradigma en las operaciones transfronterizas o
empresas
transnacionales
dedicadas
a
organizar
su
desarrollo,
producción,
abastecimiento, comercialización y actividades de financiación” (OECD. 1996, p: 15). Lo
que pretende la globalización es poder transcender las fronteras entre Estados, por lo
cual, la interconexión eléctrica internacional hace parte de la expansión de redes
eléctricas globales que son impulsadas por operaciones financieras transfronterizas
para el desarrollo económico.
La globalización produce cambios en el modelo de sistema-mundo, donde aparecen
nuevos actores que modifican las relaciones entre
Estados. Las empresas
transnacionales, las organizaciones no gubernamentales y actores privados hacen de
las relaciones internacionales un complejo sistema de interacciones donde “la economía
internacional viene a ser en gran medida un caso especial de la geografía económica”
(Krugman, 1992, P. 7). En esta medida las empresas transnacionales de electricidad
forman parte del comercio internacional, gracias su presencia en diferentes países,
6
favorecen los acuerdos comerciales entre Estados y Empresas. En este sentido
utilizando el concepto de “spillover” “el cual es ocasionado por una lógica expansiva de
integración sectorial del desbordamiento de un sector a otro” (Vieira. 2008, p: 173),
puede incidir en la expansión de la interconexión eléctrica de un país a otro, es decir, la
interconexión eléctrica ayudará a mejorar la integración de infraestructura atravesando
fronteras.
Desde la globalización, el Estado-nación, empieza a ser demasiado pequeño para
abordar los grandes problemas y demasiado grande para los pequeños problemas de
la vida, por ello resulta importante la cooperación por qué permite hacer frente a los
desafíos tanto internos como externos de manera conjunta como la búsqueda de
energías limpias que no afecten el medio ambiente. Por ello, el papel de grandes
empresas transnacionales eléctricas empieza a tomar un mayor papel complementando
las funciones del Estado en materia económica. En esta visión, “el poder efectivo del
Estado-nación sufre una creciente erosión debido a un doble movimiento: la
supranacionalización para proveer marcos regulatorios para la globalización y la
descentralización para responder a las demandas de autonomía de las polis regionales
y locales” (Moncayo, 2003, p. 15). Así mismo, la globalización es uno de los motores de
cambio y aceleración de la nueva arquitectura interna y externa del Estado Nación, por
lo cual, a pesar de la geografía, América Latina debe hacer frente ante estas nuevas
circunstancias e ir mejorando su infraestructura por medio de los avances tecnológicos.
Si se deja a un lado la globalización, se puede analizar la Interdependencia y de
manera conceptual, las relaciones Latinoamericanas. Según a Robert Keohane y
Joseph Nye (1977, p: 8-9) definen la interdependencia en términos de interacciones o
transacciones que tienen efectos recíprocos costosos para ambas partes. Por ello la
importancia de formar relaciones que permitan otorgar beneficios para ambas partes
mediante la integración. Dentro de esta teoría existen dos dimensiones con las cuales
se pueden analizar los Estados: la sensibilidad y vulnerabilidad. La primera de ellas
hace referencia a la medida y costo de que un cambio en el marco concreto de la
política de un actor afecta a este, y el segundo, la medida y el costo, cuando un actor
puede ajustar su política a la nueva situación o soportar los costos impuesto por
terceros a las políticas. Ante este panorama de relaciones, aparece la interdependencia
7
compleja, la cual “significa que existen múltiples canales en las relaciones –
interestatales, transnacionales, transgubernamentales–, sin la existencia de jerarquía
entre ellos y con capacidad para discutir problemas tanto internos como externos sin la
utilización de la fuerza con gobiernos y problemas de la región” (Keohane y Nye, 1977,
p. 24-25). En este sentido, la interconexión eléctrica crea nuevas relaciones de
dependencia entre naciones, creando necesidades entre unos y otros para la
comercialización e intercambio de bienes. En relación con América Latina, las
negociaciones con terceros deben prestar más atención a la búsqueda de relaciones de
interdependencia compleja, donde la sensibilidad y vulnerabilidad tengan mayor
fortaleza, ya que no todos los países tienen el mismo soporte económico, político y
social para soportar los cambios que suscite en contexto.
Dentro de los objetivos generales de la investigación, vemos que Colombia posee
grandes recursos hidrográficos –lagunas, ciénagas, ríos, quebradas, arroyos–, que
mediante la construcción de hidroeléctricas, lo pueden catapultar como una potencia
media en exportador de energía eléctrica entre Centro y Sur América. Este hecho
brinda un desarrollo regional que facilita la integración físico-eléctrica y reduce las
diferencias políticas y económicas, puesto que no se habla de una integración política,
sino de integración física de la infraestructura, donde le necesidad energética y vías de
comunicación constituye un eje importante en la relaciones internacionales, con el fin de
reducir costos de transporte y crear economías de escala.
El objetivo general de la investigación es analizar cómo la interconexión eléctrica
permite generar procesos de integración física por medio de la red eléctrica de Centro y
Sur América, donde Colombia debe desarrollar su potencia hídrica mediante las
hidroeléctricas en el menor tiempo para un escenario próximo. La presente
investigación está dividida en tres capítulos y una conclusión. El primer capítulo habla
sobre las características e impedimentos políticos en la construcción de la integración
latinoamericana, con el fin de tener una perspectiva histórica, general y teórica de los
procesos de integración y la construcción de nuevas relaciones internacionales para
Latinoamérica. El segundo capítulo hace un análisis de cómo Colombia puede ser el
vínculo, por su posición geoestratégica, de los proyectos de interconexión eléctrica de
Centro y Sur América, tomando a IIRSA desde el Eje Andino o Región Andina y al
8
Proyecto Mesoamérica enmarcado en el Plan Puebla Panamá. Y el tercer capítulo
pretende construir un escenario próximo para Colombia, en relación con la venta de
energía eléctrica y su proyecto de construcción de la represa Pescadero-Ituango,
consolidándolo como uno de los mayores exportadores después de Brasil a escala
regional. Al final, las conclusiones extraídas del trabajo.
9
1. CARACTERÍSTICAS E IMPEDIMENTOS POLÍTICOS EN LA CONSTRUCCIÓN
DE LA INTEGRACIÓN LATINOAMERICANA
No solamente la geografía ha sido un obstáculo para la construcción de iniciativas en la
integración regional, las diferencias políticas e ideológicas y la voluntad de dirigentes
políticos para tomar acciones concretas que permitan la integración, han sido un
obstaculo a la integración. Partiendo desde la integración de la infraestructura física
como necesidad al comercio internacional, podemos establecer la interconexión
eléctrica como una solución a la disyuntiva de integración política. Por lo tanto en este
primer capítulo se pretende analizar algunas de las mayores dificultades que tienen los
Estados latinoamericanos para dar una respuesta a la integración política y económica.
1.1 Construcción de nuevas relaciones
La integración internacional es uno de los temas multidimensionales por el cual
atraviesa el Estado, mientras atienda a los cambios del contexto vigente en los modelos
de desarrollo y la globalización. Según Vieira (2010), debido a las características
heterogenias y políticas, este proceso se plantea de forma inequitativa para los
Estados, por lo cual, los procesos de integración adquieren alteraciones y retrocesos en
los comportamientos y en las relaciones entre países, desmotivando la voluntad política
de gestionar acuerdos multilaterales. Estas relaciones asimétricas son un impedimento
para la construcción de consensos a la hora de hablar de integración ya que los
gobiernos solo quieren imponer su modelo ideológico a los demás impidiendo
consolidar intereses comunes. Dentro de las nuevas relaciones, la construcción de un
sistema eléctrico y la modernización de la infraestructura varían según los intereses de
los actores. Por esta razón, la concepción histórico-política del Estado tiene nuevas
fuerzas como las Empresas Transnacionales, la economía y Sistema Financiero
Mundial, actores u organizaciones no gubernamentales e instituciones supranacionales
que atienden nuevas formas de interacción. En este sentido, la configuración del
sistema de interconexión eléctrica no solo se basa en las relaciones entre países, sino
que su nueva estructura modifica las relaciones entre las empresas y el Estado, donde
10
la integración es una construcción primero de carácter físico, y luego dará origen a una
integración económica que tenga como finalidad el aspecto político en cuanto a políticas
comunes economías, de seguridad y sociales. En este marco, el Estado sigue con
problemas hacia la construcción de relaciones como la soberanía, el regionalismo, la
interdependencia, la responsabilidad política, la supranacionalidad y la toma de
acciones concretas que se describen a continuación.
1.1.1 Soberanía: Concepciones generales latinas
En los últimos años, el Estado Nación se encuentra enmarcado por el origen de nuevos
procesos de integración, donde la lógica supranacional atiende a mecanismos más allá
de los intereses personalistas de un gobierno y al mismo tiempo, a problemas
domésticos (Medeiros, 2002, p. 183). Bajo esta línea de análisis se podría decir que el
sistema de interconexión eléctrica actual recurre a los espacios de integración
promovidos por empresas transnacionales a los largo de Centro y Sur América, a través
de la globalización para generar un mercado global. Según lo anterior, la integración no
solo hace parte de la voluntad política de los gobiernos, sino una necesidad para
interconectar y dinamizar los mercados latinoamericanos.
La soberanía en occidente está íntimamente ligada a la concepción de un Estado
moderno por está razón, los procesos actuales tienen una dependencia con la historia,
consiguiendo explicar las circunstancias por las que se dan los fenómenos sociales,
políticos y económicos dentro de un sistema de países que buscan la integración no
solo política, sino físico-económica. La concepción de Estado parte de un territorio
limitado por fronteras, lo cual se borra en la globalización con las transacciones
financieras y las empresas transnacionales. En Latinoamérica, la lógica supranacional
no ha tenido aplicación en los intentos de integración, porque los Estados temen perder
poder o soberanía si transfieren competencias a órganos superiores. Por esta razón se
dificulta la construcción de instituciones donde las normas y leyes solo recurren a un a
ámbito nacional obstaculizando la integración y formación de códigos de conducta que
comprometan los Estado a no formular reglas que vallan en contra de las normas
pactadas por las instituciones supranacionales.
11
1.1.2 Integración regional en América Latina
Dentro de la integración regional se encuentran múltiples dimensiones internacionales,
las cuales, según Medeiros (2002), pueden ser catalogadas en cuatro categorías:
información, comercio de mercancías, flujos financieros, y libre circulación de personas
e ideas. El objetivo de la integración regional es racionalizar la relación entre el Estado y
la sociedad para mejorar la acción pública, es decir, no solamente la integración
regional se refiere a los Estados, sino también a la categoría de integración social,
donde las decisiones que se tomen lleven un proceso que involucre a la sociedad, ya
que esta es quien sufre la implicaciones. Debido a ello, la integración regional se ha
desviado hacia los tratados bilaterales, perdiendo la capacidad de negociación en
bloque con terceros. De esta manera, América latina se fragmenta a nivel exterior sin
una política económica identificada ante el mundo. Por lo tanto, la interconexión
eléctrica tiene lugar en el comercio de mercancías, ya que es un servicio y como tal,
representa un mercado internacional de energía.
El regionalismo parte desde lo local hacia lo global, mientras diseña el camino hacia la
expansión del mercado. Es allí, donde el sistema de interconexión eléctrica permite a
las comunidades más apartadas de los centros de producción poder beneficiarse, tanto
en energía como en comunicación, entre otras sociedades, ya que se deben construir
vías de acceso para conectar las redes. La distribución efectiva, enfocada a mejorar las
condiciones de vida de los ciudadanos de la periferia, otorga un desarrollo equilibrado y
homogéneo que sirva para disminuir las diferencias entre los centros de producción y
los puntos periféricos en cuanto a servicios. El sistema eléctrico permite a Colombia
diversificar su producto de exportación, ya que no se casa con una sola producción,
sino que crea un nuevo mercado de economías con rendimientos crecientes que
benefician la integración. Los costos de transporte pueden disminuir mediante la
modernización y construcción de infraestructura, obteniendo mayores ingresos. Para
Colombia, el desarrollo económico implica un proceso de transformación, con una
economía basada en la agricultura, localizada en el campo, y una economía basada en
la industria, localizada en la ciudad (Moncayo, 2003, p. 32). Por lo tanto en Colombia, la
industrialización eléctrica permite desarrollar al país en los dos aspectos introduciendo
otro tipo de escenario no agrícola.
12
1.1.3 Interdependencia económica en la interconexión eléctrica
Dado la convergencia del proceso de globalización, regionalización y fragmentación,
dentro del sistema internacional, surge la necesidad de mejorar la capacidad de
adaptación de los Estados ante nuevos desafíos como la precaria infraestructura
Latinoamericana (Medeiros, 2002, p. 197). La interdependencia económica surge como
una lógica distributiva en pro de una estructura estable y coordinada, donde la
distribución va más allá de la transferencia de fondos, se busca delegar competencias y
responsabilidades recíprocas que tengan participación de toda la sociedad, en la
medida cómo las circunstancias lo permitan. El sistema de interconexión eléctrico
permite que las responsabilidades sean recibidas por las partes que lo componen, de
esta forma, los procesos no son entorpecidos por beneficios políticos, sino por una
necesidad en el uso de la electricidad. La distribución eléctrica le corresponde al
gobierno nacional, pero debido a que su aparato administrativo es demasiado grande,
las empresas como ISA que es una transnacional, donde el Estado es el socio
mayoritario, termina por adoptar el servicio de redes eléctricas. Así mismo extender las
redes representa una mayor oferta y así unos rendimientos crecientes que lleva a
economías de escala.
Con las economías de escala la interdependencia entre sectores productivos de
electricidad se vuelven competitivos dando nuevas relaciones cooperativas entre
diferentes empresas en cada país. La filial ISA, con presencia en diferentes países,
logra articular de forma adecuada y rápida la interconexión entre los diferentes países
por que su presencia en distintos lugares con acciones del Estado le permite conectar
las redes entre fronteras. Así mismo, se logra mantener unidos a los centros de
producción con otros centros, sin descuidar los puntos periféricos. Por lo tanto el
desarrollo económico local, va integrado al de la globalización, incorporando actores
locales y regionales para dar forma a nuevas tendencias para el crecimiento y
fortalecimiento del desarrollo territorial desde lo local a lo global. En este sentido, las
economías de escala contribuyen al crecimiento de territorios donde se localiza la
producción.
13
1.1.4 Responsabilidad política para los dirigentes latinos
En la construcción de integración de la Unión Europea se parte de una dimensión
económica y no política, con lo cual se pretende contar con una adecuada
infraestructura física que facilite el intercambio de bienes y servicios desde los centros
de producción a sus demandantes, de esta forma, hay una integración centro-periferia
como son los postulados de Krugman (1992). Dentro de esta estructura se encuentra la
responsabilidad política para realizar proyectos o programas que integren los sectores
de desarrollo con los menos desarrollados para equilibrar la economía. La adquisición
de responsabilidades compromete a los países hacia la búsqueda de objetivos e
intereses comunes a mediano y largo plazo, sin que el cambio de gobiernos afecte los
avances realizados. Aunque, América Latina se ha caracterizado por la falta o debilidad
para adquirir compromisos políticos fuertes que lleven a cabo un proceso de integración
sostenible, encaminados hacia un mismo fin. Los intereses individuales del gobierno
priman sobre la construcción de un compromiso político común, mientras ponen en
riesgo un proceso histórico económico de integración en América Latina. La noción de
una Soberanía compartida es realmente restringida y de poca confiabilidad política, y
por ende, atrasa cada vez más los compromisos en materia de integración.
La infraestructura latina frena el proceso de integración económica, ya que los costos
del transporte son elevados y las precarias redes viales no permiten un acercamiento
entre pueblos y mucho menos entre fronteras, como lo supone la globalización. Los
mandatarios latinoamericanos deben lograr avanzar en la reducción de los costos
operativos del transporte y mejorar la producción y distribución de servicios. Para llevar
a cabo estos procesos, la responsabilidad política debe ser un modelo transparente,
donde no solo el Estado otorgue las condiciones de nuevos mercados, sino las
empresas deben asumir los efectos positivos y negativos dentro de la integración.
1.1.5 La supranacionalidad como sistema jurídico e institucional para la
interconexión eléctrica.
Según Fernando Junquera (2009), la integración se basa en el derecho desde un marco
jurídico adscrito por los Estados, como es el caso europeo. Con ello, la mayor parte de
14
la actividad se encuentra sujeta a un derecho comunitario y así mismo, a un sistema
jurídico supranacional, donde las leyes otorgan procedimientos y conductas económicas
y no nacionales como es el caso de América Latina. Por consiguiente, el derecho
comunitario se caracteriza por dos caras: la primera, su primacía, donde ningún Estado
puede alterar los ordenamientos jurídicos a conveniencia de sus intereses nacionales, y
la segunda, la aplicabilidad directa garantiza un carácter vinculante sobre los países.
Con estas razones es necesario la creación de un ordenamiento jurídico supranacional,
convirtiéndose en un instrumento de integración para el cumplimiento y desarrollado de
los tratados firmados por los Estados.
En cuanto al mercado eléctrico mayorista existen unas normas jurídicas para su venta y
distribución nacional e internacional, que se complementan con otros países de la
región, con el fin de establecer reglas claras desde un principio. Estas normas
comunitarias aclaran el panorama de las empresas para incursionar en el mercado
eléctrico o en la bolsa de valores de cada uno de los países donde desarrollan los
procesos de interconexión. En estas normas, las instituciones pretenden establecer un
marco jurídico compartido para tomar decisiones de orden supranacional, con
transparencia y eficiencia entre los Estados. Así como se hace en las empresas.
En América Latina existe una concepción intergubernamental y no supranacional de la
integración, por lo tanto, constituye un débil Sistema Jurídico e institucional para la
integración política, ya que no se crean instituciones comunes ni existe un traspaso de
soberanía hacia ellas. Estas desventajas no se encuentran en la interconexión eléctrica,
por ello es importante su aplicación hoy en día. En América Latina predomina un
poderío presidencial, donde las decisiones obedecen a intereses personales y no
regionales. Por estas razones, en la integración política, el sistema jurídico presenta
demasiadas trabas para su desarrollo, y en la interconexión eléctrica, el marco jurídico
fue construido para mejorar el servicio.
1.1.6 Políticas y acciones comunes entre los Estados latinos.
En la integración las acciones concretas motivadas a reducir las diferencias internas en
referencia con la infraestructura externa con el fin de conectar los mercados nacionales
e internacionales mediante el sistema de infraestructura son una necesidad. Por lo
15
tanto, una de las mejores formas de comprender cómo funciona la economía
internacional consiste en empezar observando qué sucede en el interior de las naciones
(Krugman, 1992, P. 9). Por esta razón, las políticas y acciones comunes entre EstadosEstados o Estados-Privados, deben estar encaminadas a cumplir tres objetivos: 1.
liberalización económica, libre circulación de bienes, servicios, personas y capital en el
mercado regional. 2) Introducción de una moneda única, y 3) la cohesión interna
(Rueda-Junquera, 2009, p. 64). Con ello se puede avanzar en la integración partiendo
del mejoramiento de la infraestructura.
La integración se debe desarrollar en formación económica de carácter intra-regional
debe estar acompañada de políticas macroeconómicas y microeconómicas, donde se
articulen diversos sectores para el desarrollo económica de economías de escala,
constituyendo un buen manejo de las políticas en la integración. Pero en América
Latina, la debilidad y limitación de políticas y acciones comunes son un obstáculo hacia
la integración, debido a la precaria iniciativa y ejecución de proyectos que primen ante
el interés nacional de cada Estado. Por consiguiente, al no seguir las políticas comunes
y sin un buen monitoreo o seguimiento, se pierden tales acciones, mientras evidencian
acciones fragmentadas, que resultan en acciones bilaterales o tratados entre dos
partes. Por ello, la interconexión eléctrica busca acciones comunes y concretas,
encaminadas a una necesidad internacional de abastecimiento, donde lo económico
prime ante político.
La falta de voluntad política para efectuar acuerdos y poseer un carácter sostenible
sobre las políticas y acciones comunes se ven fragmentadas por la ausencia de un
sistema jurídico e institucional con carácter supranacional y no intergubernamental. Por
ello las empresas transnacionales establecen sus políticas comunes donde tienen
presencia, de lo contrario los acuerdos se desarrollan gracias a la cooperación. De esta
forma podemos eliminar el liderazgo presidencial de América Latina que no permite
llegar a resultados concretos y que favorecen solo los intereses personales.
1.2 Los obstáculos para la integración de América Latina
Las dificultades para la integración en América Latina han tenido diferentes efectos en
la consolidación regional y a su vez, en la culminación de la integración económica y
16
política. Uno de los inconvenientes es la variación topográfica que presenta
Latinoamérica –desierto, selva, montañas–, y demora la construcción de infraestructura
para la integración. En este sentido, se han visto favorecidas las relaciones bilaterales
antes que las multilaterales. Por ejemplo, los TLC, donde las normas pueden ir en
contra de un multilateralismo que desfavorece la armonización de políticas y normas
comunitarias. En este capítulo, se pretende analizar los mayores obstáculos en la
integración en América Latina.
1.2.1 La integración supranacional vs. integración intergubernamental
Una de las barreras que perjudica la integración Latinoamericana es la dificultad de
construir un escenario supranacional que supere el ámbito local y nacional. La
supranacionalidad tiene dos principios: aplicación directa y preeminencia sobre normas
internas que le sean contrarias. Este concepto tiene antecedentes en la noción de
integración de los pueblos y elementos que desbordan la actuación individual de los
Estados, mencionados por Vieira (2010), como fue “la visión del “idealismo Kantiano”,
opuesta a la visión “Hobbesiana” de conflicto y de confrontación entre los Estados. La
fallida Liga o Sociedad de las Naciones propugnada por el presidente Wilson fue un
claro ejemplo de buscar una supranacionalidad debido a la I y II Guerra Mundial. El
Funcionalismo de David Mitrany, es otra teoría que aparece después de la II Guerra
Mundial explicando la incapacidad del Estado ante un nuevo contexto para delegar
funciones a entidades supranacionales especializadas.
La Interconexión eléctrica surge con un carácter supranacional entre Centro y Sur
América con objetivos claros y comprometidos hacia la construcción de una red
compartida entre diferentes naciones con el fin de crear un mercado mayorista con
bajos costos. A esto podemos sumarle, que los Estados dentro de una integración
pueden disponer de una herramienta de gobernanza en diferentes niveles, locales,
regionales, nacionales y supranacionales impulsando de abajo hacia arriba un proceso
de participación e integración de la sociedad. Por lo cual, la negociación del mercado
eléctrico tiene como fin traspasar las fronteras para llevar un servicio donde las partes
se beneficien, los acuerdos bilaterales pueden ser conseguidos en una mejor amplitud
17
por acuerdo multilaterales y donde la capacidad de negociación en bloque mejora la
competitividad de las empresas.
1.2.2 El exceso de retórica y nacionalismo extremo por parte de los gobiernos
latinos sin compromisos
“Se trata de un exceso vinculado a aquello que se dio en llamar el «realismo mágico
latinoamericano». En esta línea se inscriben todas las esperanzas hasta ahora
frustradas, puestas en el gran impulso que el «giro a la izquierda» supuestamente iba a
dar a la integración regional” (Malamud, 2009, p. 101). A comienzos del siglo XXI,
América Latina se vuelca hacia un giro político-ideológico, donde los gobiernos de la
nueva izquierda iban a solucionar los obstáculos y dificultades de la integración. A pesar
de la supuesta integración, que ahora tenía ideologías comunes, se encuentran serios
problemas entre los mismos miembros de la denominada izquierda continental, como es
visto en el caso de Argentina y Uruguay, dado por la construcción de una fábrica de
pasta de celulosa que intentó justificarse con argumentos medioambientales.
Como se observa, este tipo de discusiones han entorpecido los adelantos en materia
económica y en la construcción de nuevos proyectos de infraestructura. Por ejemplo, el
ataque colombiano al campamento de las FARC en territorio ecuatoriano, donde se
encontraba Raúl Reyes, quien fue abatido en esa operación, produjo una crisis entre
estos dos países, y generó la suspensión de las relaciones diplomáticas. Con esta
situación se estancaron los procesos de inversión y desarrollo de infraestructura. Así
mismo, las diferencias con Venezuela truncaron los pocos acuerdos realizados en
materia eléctrica así como la CAN.
Para Malamud (2009), dentro del discurso nacionalista se articulan dos ideas
fundamentales: “La soberanía reside en el pueblo y en el territorio”. Para América Latina
se hace un profundo énfasis en el territorio como soberanía nacional más que popular.
La intervención del presidente Evo Morales, donde hace un llamado a consolidar una
gran nación sudamericana con soberanía y dignidad, así como la creación de una
moneda única para la región, son ejemplos a la hora de crear un nacionalismo extremo.
La consolidación de la moneda única es el último paso dentro de la integración, como
fue la experiencia en Europa. La moneda única se considera como la etapa final de un
18
proceso de consolidación y armonización de políticas macroeconómicas y de
convergencia monetaria. Paralelo a esto, los acuerdos alcanzados en materia eléctrica
han superado de cierta forma el carácter nacionalista y personalista de los gobiernos,
depositando la soberanía nacional en instituciones supranacionales o empresas
transnacionales como ISA, la cual tiene grandes capacidades para tomar decisiones y
ejecutar las medidas adoptadas en la integración, de lo contrario, se creará un círculo
vicioso.
1.2.3 Tipo de integración que se pretende en América Latina
En
todos
los
escenarios
internacionales
se
habla
sobre
integración,
pero
lamentablemente América Latina no tiene definido qué tipo de integración quiere
realizar; sí es de tipo económico, energético, político, con instituciones supranacionales
o de orden social. Así mismo, las características que tendría y los objetivos que se
plantearían en dicha integración no han sido definidos de forma clara y jerárquica. La
confusión es grande gracias a la falta de compromisos y entendimiento entres
gobiernos por lo tanto, se puede ver que la integración de la infraestructura física
permite mitigar los obstáculos de la geografía. En la integración, la construcción de
normativas jurídicas es vital para dar soporte a los acuerdos entre los Estados y
empresas con carácter obligatorio. De lo contrario, pueden presentarse inconformidades
y tomar decisiones arbitrarias para abandonar la integración. Como se puede ver en el
ejemplo de Venezuela y la CAN, situación que perjudicó los procesos desarrollados por
varios años.
El tipo de integración que se pretende realizar es de carácter físico-eléctrico, donde las
posiciones políticas e ideológicas no choquen con la interconexión de energía para
integrar los pueblos en Centro y Sur América mediante el posicionamiento
geoestratégico de Colombia. Así mismo, la modernización y construcción de la
infraestructura nacional eléctrica, para conectarla a IIRSA y al Plan Puebla Panamá,
son proyectos que deben ser ejecutados de forma inmediata para lograr una integración
física y consolidar la infraestructura física, como primera etapa, se pasa a la integración
política. En el capítulo 2, se analizan las dos visiones de interconexión eléctrica que
tiene Colombia para llevar a cabo un plan de expansión a futuro como es el Plan Puebla
Panamá y la Iniciativa de la Integración de la Infraestructura Suramericana IIRSA.
19
2.
DOS VISIONES DE INTEGRACIÓN ELÉCTRICA: EL PPP Y LA REGIÓN
ANDINA BAJO UN NUEVO MARCO REGULATORIO
Los proyectos de interconexión eléctrica son una propuesta antigua, desde los 60 se
han venido desarrollando de forma bilateral entre los gobiernos de Colombia-Ecuador,
Colombia-Venezuela y los países del MERCOSUR (Argentina, Brasil, Uruguay y
Paraguay). La nueva dinámica del siglo XXI apunta hacia una concepción global de
energía eléctrica ratificada en la Cumbre Energética de Suramérica, en el 2007, donde
UNASUR realizó negociaciones para la integración del sector energético. Ante esta
mirada, la iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana
(IIRSA) y el Plan Puebla Panamá, bajo la conducción del Proyecto Mesoamérica,
constituyen dos escenarios de integración física donde la electricidad es el vínculo entre
los pueblos. La evolución del sistema de regulación en los países ha cambiado acorde
con las necesidades y desafíos que presenta la región para la inserción al sistema
internacional. Las condiciones de la infraestructura hace evidente la necesidad de crear
nuevos escenarios de integración y de interconexión eléctrica.
2.1
El marco regulatorio del sector eléctrico
Durante los últimos años, el marco regulatorio para la venta de energía se ha
transformado para dar una mayor estabilidad al sector. Los cambios en el sistema
económico se han ido materializando por medio de la introducción de nuevas
modalidades en el funcionamiento macroeconómico.
Dentro de las reformas estructurales en América Latina y el Caribe podemos ver el cambio
de las relaciones entre el Estado y las empresas públicas del sector debido a la necesidad
de resolver los problemas fiscales y a la redefinición de las funciones del propio Estado.
Los procesos de privatización de empresas públicas en general se han incrementado
(CEPAL, 2003, p. 77).
Las funciones del Estado han disminuido como aparato hegemónico de la economía por
lo tanto, los cambios introducidos le dieron un nuevo rol al Estado, donde la
liberalización del mercado llevó al diseño de nuevas políticas macroeconómicas a hacer
frente a los desafíos globales para la implementación de políticas energéticas. El sector
20
privado comenzó a tomar mayor papel en la implementación de estrategias para el
comercio de energía eléctrica, lo cual lleva a las empresas estatales a convertirse en
transnacionales, y así acumular capital nacional y extranjero, que puede ser invertido en
diferentes proyectos para la conformación de un nuevo sistema de abastecimiento
eléctrico. Ahora el Estado se interesa en buscar empresas extranjeras para que
inviertan en su país y darle una inyección de capital a la economía local.
El sector eléctrico pasa por este fenómeno, donde los intereses nacionales están
relacionados con la diversificación de nuevos mercados y con la idea de posicionarse
en diferentes regiones, con el fin de incrementar sus ingresos y poder convertir
economías regionales en economías de escala. En esta corriente normativa, los
proyectos de interconexión eléctrica adquirieron mayor estabilidad nacional y regional
en la construcción de redes eléctricas para la integración del sector como lo es El Plan
Puebla Panamá en Centroamérica y la Integración Andina, bajo la iniciativa para la
integración de la infraestructura Suramericana IIRSA, son consideradas dos visiones de
interconexión eléctrica, donde Colombia tiene una posición privilegiada para conectar
Centro con Suramérica. Y así mismo, consolidarse como uno de los mayores
proveedores eléctricos para la región, brindando la oportunidad de incursionar en
nuevos mercados, reduciendo distancias y con ello costos de transporte. El marco
regulatorio promueve el desarrollo sostenible con energía renovable para América
Latina y el Caribe.
2.2
La interconexión eléctrica en el Plan Puebla Panamá PPP
La interconexión eléctrica entre los pueblos del sur de México con Centro América
forma un gran desarrollo eléctrico en Centroamérica. El Plan Puebla Panamá -PPP- fue
una iniciativa del gobierno mexicano de Vicente Fox, con el fin de mejorar las
condiciones de nueve Estados del sur de México, quienes contaban con una precaria
red eléctrica para los hogares y los siete países de Centroamérica (ver anexo A). De
esta forma, reunidos en el contexto del Mecanismo de Diálogo y Concertación de
Tuxtla, en junio de 2001, los presidentes de Centroamérica y México adoptaron la
Iniciativa Mesoamericana de Interconexión Eléctrica. Esta incluye la ejecución del Plan
Puebla Panamá, el cual, fue incorporado al Proyecto Mesoamérica como la primera
21
etapa de integración física, gracias a importantes avances en la construcción de
infraestructura eléctrica. El transporte y las telecomunicaciones son otro aporte en la
integración. Esta contribución ayudó a mejorar las condiciones sociales de la región
tanto así, que se avanzó en el mejoramiento de la infraestructura. Como segunda etapa,
se estipulan el campo social en las áreas de salud, medio ambiente, desastres
naturales y vivienda, bajo la cooperación de los gobiernos regionales, sin descuidar el
mantenimiento de las redes eléctricas y nuevos proyectos de interconexión.
Desde junio de 2006, Colombia hace parte del Plan como miembro en pleno derecho.
De esta manera, Colombia tiene como objetivo la construcción de un mercado regional
eléctrico que consiste en la integración de redes desde México, pasando por
Centroamérica, hasta llegar a Colombia. Debido a su posición geográfica, Colombia
puede utilizar este corredor para sus intereses con respeto a la unión entre Centro y
Suramérica, donde Colombia tiene una interconexión eléctrica con Panamá. “En esta
zona de frontera también existe es el paso del gaseoducto de Venezuela a Panamá y el
interés por la construcción, desde hace muchos años, de una carretera panamericana
para unir a Centro y Suramérica” (Otero, 2009, p. 173). Así mismo, “los programas
cuentan con la construcción de la Red Nacional de Autopistas Mesoamericanas de
8.977 km desde México hasta Panamá,” lo cual reduciría los costos de transporte en
bienes y servicios (Vieira, 2008, p. 378). Ante este panorama, gracias a su condición
geoestratégica, Colombia tiene un acceso al mercado caribeño, y se facilita el paso de
mercancía entre las regiones.
2.2.1 Interconexión Panamá-Colombia (ICP)
Colombia ha desarrollado políticas de mejoramiento de su infraestructura para competir
a escala regional con empresas de electricidad en un mercado mayorista. La
importancia radica en que Colombia pueda proveer electricidad a Centroamérica y parte
del sur de México desarrollando su potencial eléctrico. En marzo de 2009, los gobiernos
de Panamá y Colombia firmaron un acuerdo para el intercambio de energía eléctrica
bajo la operación de la empresa Interconexión Eléctrica Colombia-Panamá -ICP-, para
la construcción de la:
22
línea total de 614 km de longitud de los cuales 340 km corresponde al paso por territorito
colombiano, los restantes 274 al paso por territorio panameño con una capacidad de
intercambio de 300 mV ubicada entre las subestaciones Cerromatoso (Colombia) y
Panamá II (Panamá) con un voltaje de 250 400 kV con una inversión total de USD 207.2
millones (Otero, 2009, p. 188) (ver anexo B).
La interconexión tiene 55 km de tramo marino donde se minimizan los impactos medio
ambientales en Comarca Kuna Yala y la Serranía del Darién, base del Corredor
Ambiental Mesoamericano. Estas obras están destinadas a su culminación en 2011.
Por medio de este tramo de interconexión, Colombia puede integrarse al Plan Puebla
Panamá para la venta de energía electica, lo cual abre las puertas al mercado del
Caribe. Con esta interconexión eléctrica, Colombia se abre paso hacia la construcción
de la carretera panamericana y a nuevos proyectos de infraestructura que permiten la
salida por el Pacífico a Suramérica.
Mediante la interconexión eléctrica con Panamá, Colombia adquiere una conexión con
Centroamérica gracias al Plan Puebla Panamá, con ello, la red eléctrica bajaría los
costos en el suministro de energía para el Caribe, y posicionaría a Colombia como un
importante proveedor en la región. El mercado mexicano sería otra puerta hacia la
integración eléctrica entre Centro y Suramérica. Desde este punto de vista, la
geopolítica latinoamericana permite a Colombia poder articularse al sistema
internacional y salir del aislamiento que presenta por su infraestructura. Aparte de la
interconexión eléctrica con Panamá, Colombia puede integrarse al sistema de
interconexión eléctrica para América central, SIEPAC. En este sentido, las razones para
agilizar los proyectos de infraestructura eléctrica y de comunicaciones entre Panamá y
Colombia son importantes para la integración y la construcción de economías de
escalas en Centroamérica.
El siguiente capítulo establece un panorama en la integración del sistema SIEPAC con
Colombia, a través del Plan Puebla Panamá.
2.2.2 Sistema de interconexión eléctrica para América Central SIEPAC.
El Sistema de Interconexión Eléctrica para América Central (SIEPAC) tiene como
objetivo crear un “mercado eléctrico regional mayorista –MER– y la puesta en marcha
23
de un sistema eléctrico de alto voltaje que conecta todos los países de Centroamérica”
(Otero, 2009, p, 180). El sistema SIEPAC articula los países centroamericanos para el
suministro de energía eléctrica, mientras da un mayor cubrimiento a una mayor
demanda de electricidad. El Mercado Eléctrico Regional –MER– es la base normativa y
legal de la compraventa de energía eléctrica- Este asiento fue puesto en marcha en
1996 y entró en vigencia en 1999. De igual manera se conformó la Comisión Regional
de Interconexión Eléctrica –CRIE– como un órgano regulatorio entre los países que
conforman la red SIEPAC. De esta forma se llama la atención al capital extranjero para
tener una mayor inversión en los proyectos de generación eléctrica para uso regional y
expansión a otras regiones.
Gracias a la interconexión con Panamá, Colombia hace presencia y logra una
expansión del mercado eléctrico. La reducción de costos es consecuencia de los
procesos de interconexión, ya que satisface la demanda de millones de hogares y
promueve la competitividad en la región, por esta razón, mediante la interconexión
eléctrica baja los precios del transporte de energía. Los centros de producción como las
hidroeléctricas constituyen sectores industriales de desarrollo, que mediante la
articulación con otros centros favorecen el desarrollo equilibrado regional, es decir; no
solamente en electricidad, sino, como afirma Paul Samuelson (Krugman, 1992, p. 81), si
en cada país existiera una tendencia a desarrollar una serie de industrias características
por su concentración geográfica, cuyos productos serían exportados, importándose los
bienes no producidos por estas industrias, podría haber equilibrio. El mercado regional
puede llegar a una expansión por medios de acuerdo y cooperación en materia
energética, y de esta manera, dar un mayor campo de acción para nuevos proyectos.
Actualmente el Sistema de Interconexión Eléctrica para América Central consiste en el
diseño y la construcción de una línea de transmisión de 1.790 km, de 230 kV, con una
capacidad de transporte de energía hasta 300 mV (ver anexo C). La empresa ISA de
Colombia hace parte de las empresas que opera el sistema entre otras (ver anexo D).
Siguiendo los postulados de Krugman (1992), se evidencia que mediante estos
proyectos de interconexión eléctrica “las fronteras entre la economía internacional y la
economía regional están volviéndose borrosas” en algunos casos importantes como el
sector eléctrico.
24
Desde esta perspectiva, se puede ver que el aumento de las empresas transnacionales
agiliza los procesos de interconexión eléctrica, y facilita los acuerdos en materia de
integración, a través de las redes de electricidad. Estas economías de escala adquieren
rendimientos constantes y crecientes debido a su presencia en diferentes Estados, e
incrementan su capacidad productiva y estabilidad económica en la región, como es el
caso de ISA, ubicada en Suramérica y con presencia en Colombia, Perú, Bolivia y
Ecuador. Hay que mencionar que estas empresas con carácter estatal cubren
diferentes puntos geográficos, donde se evidencia la importancia de reducir costos a
través de la integración física. Por lo tanto, la geografía desempeña un papel importante
a la hora de conectar el comercio entre las fronteras.
Mediante la interconexión eléctrica de México-Guatemala, que consiste en una línea de
transmisión de103 km de 400 kV con el sistema SIEPAC, y a su vez con la
interconexión de Panamá-Colombia de 614 km, tiene un significativo avance en materia
de integración gracias a la construcción y modernización de la infraestructura, ya que
conecta todo el eje centroamericano con Colombia y a su vez con Suramérica. Por
ende, se disminuyen las distancias geográficas y los costos de transporte a través de
redes de comunicación, y se crean economías de escala para un desarrollo sostenible
en base a energías limpias. Colombia y Panamá se acercan a una nueva conexión de
red eléctrica entre el sistema SIEPAC y la red colombiana, la cual llega hasta la
estación de Panamá (Panamá II). Lo anterior, debido a que actualmente la red SIEPAC
llega hasta Veladero Panamá (ver anexo C), por lo tanto, conectar el sistema SIEPAC a
la interconexión eléctrica colombo-Panamá, constituiría una demanda de energía
eléctrica mayorista. Además desde el 2007, la empresa de energía eléctrica ISA es
accionista del sistema SIEPAC, lo cual ayudaría a una integración de los dos sistemas
para que Colombia entre en el mercado mayorista de energía en Centroamérica y poder
conectar las redes con Suramérica para la venta de energía (SIEPAC, [en línea]).
La interconexión del sistema SIEPAC y el Plan Puebla Panamá son dos escenarios de
desarrollo eléctrico para Colombia en Centroamérica. Ahora se analizará cómo se
puede articular el sistema centro con el suramericano, teniendo a Colombia como su
principal eje de conexión para la Región Andina en el marco de la Iniciativa para la
Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA).
25
2.3
LA INICIATIVA PARA LA INTEGRACIÓN DE LA INFRAESTRUCTURA
REGIONAL SURAMERICANA (IIRSA)
La Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA) es
un mecanismo institucional de coordinación de acciones intergubernamentales
compuesto por 12 países suramericanos, (Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Chile,
Ecuador, Guayan, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay, Venezuela). En este escenario,
Colombia tiene grandes proyectos para la modernización y construcción de la
infraestructura, con el fin de disminuir los altos costos de transporte en el intercambio de
mercancías. En cuanto a transportes, esta iniciativa tiene como principal objetivo
construir una agenda común para impulsar proyectos de integración de infraestructura
física, energía y comunicaciones (IIRSA. “Historia”, [en línea]). Ante esta nueva propuesta,
favorecer el desarrollo transfronterizo y la cooperación para garantizar la seguridad
entre los límites, son una nueva dinámica para abordar los desafíos en la región.
El 31 de agosto y 1 de septiembre del 2000, en Brasilia –Brasil–, tras la reunión de
presidentes de América del Sur, los dirigentes pactaron realizar acciones conjuntas
motivadas a impulsar el proceso de integración política, social y económica
suramericana. En esta reunión, con el fin de estimular la integración y desarrollo de la
región, se incluyó como prioridad la modernización de la infraestructura física regional.
Ahora bien, debido a los altos costos en el transporte de mercancías entre diferentes
países, y ver los desafíos globales para integración e intercambio de bienes y servicios,
se hizo evidente la precaria infraestructura física Latinoamérica para realizar una
integración. En este marco, IIRSA representa la construcción y modernización del
espacio geográfico para la interconexión y comunicación.
A lo largo del continente, la economía Latina atraviesa por altos costos en transporte de
mercancías, por esta razón, los precios se incrementan, no solo por la distancia de un
punto de producción a su distribución, sino por la inadecuada e inexistente vías de
comunicación terrestre, portuaria o férrea entre las naciones. Poseer una infraestructura
que permita minimizar los costos de transporte y reducir el tiempo entre dos puntos,
significa obtener el mismo producto a menor precio y tiempo, como lo afirma el
postulado de Krugman (1992, p. 118), el cual habla de la geografía y el comercio, donde
26
el transporte es un valor negativo y resta capital a las economías de escala. Para
conseguir economías regionales con ingresos constantes es necesario disminuir los
costos del transporte, y su solución obedece a una adecuada infraestructura para el
intercambio comercial.
La crítica que se le hace a IIRSA es que es un plan de megaproyectos de
infraestructura para servir a los intereses de las grandes compañías de construcción y
que no tienen un vínculo con el objetivo de reducir la pobreza y mejorar la calidad de
vida (Otero, 2009, p. 174). A pesar de esto, en un contexto globalizado de la economía
y la vinculación del capital privado en la industria de energía eléctrica, las empresas
multinacionales son las que lo promueven, y han permitido la creación de mercados a
escala nacional y como consecuencia, se están dando las condiciones para la creación
de mercados regionales de energía (CAF, 2000, p. 17). En la actualidad
Latinoamericana, la construcción de una mejor infraestructura física facilita el
intercambio de productos o servicios, los cuales representan altos costos de transporte.
Ante esta realidad, y sin establecer las condiciones necesarias para que el mercado
adquiera una mayor dinamización, ni esperar la voluntad política de los gobiernos para
actuar, los Estados se han enfocado en la armonización de políticas macroeconómicas.
Por ende es que la interconexión eléctrica representa una opción hacia el mejoramiento
de la infraestructura y facilita la integración física. La cual se verá a continuación.
2.3.1. Interconexión Eléctrica en la Región Andina
Dentro de los proyectos que conforman IIRSA, para Colombia, la Región Andina
representa un importante corredor eléctrico donde las condiciones en materia de
infraestructura en medios de transporte y comunicación es una de las mayores
preocupaciones respecto al desarrollo de políticas a escala regional. En el caso
colombiano, este aspecto constituye uno de los mayores limitantes para lograr una
mejor inserción internacional (Vieira, 2008, p. 349).
La Región Andina está conformada por Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela.
A lo largo de toda la región, la construcción de carretas es la principal fuente de
integración. Este proceso tiene como marco la CAN, donde se han llegado a acuerdos
27
de comercio y desarrollo transfronterizo. Venezuela ya no hace parte de la Comunidad,
pero si tiene proyectos en IIRSA para ser desarrollados con los demás países. El 26 de
mayo de 1969, con 5 países fundadores: Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Chile la
CAN surgió, con el Acuerdo de Cartagena, con el propósito de mejorar las condiciones
económicas y sociales de sus habitantes mediante la cooperación e integración.
Venezuela se adhirió en 1973 y tomó la decisión de retirarse en el 2006 por la
disparidad de sus políticas con las de la Comunidad Andina. En 1976, Chile se retiró,
debido a la Dictadura de Augusto Pinochet y porque las políticas no tenían una
escancia común entre sus dirigentes. Actualmente, la CAN solo cuenta con 4 miembros
Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú.
Dentro de la CAN existe la Alianza Energética Andina –AEA–, surgida en la reunión de
Concejo de Ministros de Energía, Electricidad, Hidrocarburos y Minas, realizada en
Quito el 30 de enero de 2004 (CAN, [en línea]). Esta alianza tiene como funciones
principales la interconexión eléctrica subregional así como gasífera, también prevé el
desarrollo de energías limpias o renovales. En el marco de aprobación de la Decisión
536 “Marco General para la Integración”, (ver anexo E) se han dando importantes
avances como la Interconexión eléctrica entre Colombia y Ecuador, inaugurada en el
2003, la cual representa importantes beneficios para ambos países. También existen
líneas de interconexión entre Colombia y Venezuela. Perú-Ecuador han firmado el
proyecto para la construcción de la interconexión eléctrica a 230 kV de circuito simple
entre San Ildefonso Ecuador y Zorritos en Perú en una primera etapa (Ministerio de minas
[en línea]).
De esta misma manera, el mercado actual andino de electricidad se encuentra en pleno
desarrollo en la construcción de nuevas redes eléctricas. Los proyectos y planes de
infraestructura de la CAN deben ir en un marco multilateral en concordancia con los
proyectos de IIRSA. Por ende, es importante la armonización de las políticas para que
no tenga resultados contradictores o pongan el riesgo una instancia u otra. El trabajo
conjunto entre IIRSA y la CAN en el mejoramiento de la infraestructura de redes
eléctricas debe ser guiado en forma paralela a las necesidades de cada región para
avanzar a un ritmo común y generar una integración. La interconexión territorial se hace
más factible sí en las fronteras existe un mínimo de interrelaciones económicas
28
comerciales, pero este no es el caso de los países andinos, puesto que algunas
regiones no se benefician de intercambios obtenidos, gracias a la apertura comercial de
la integración (Vieira, 2008, p. 414). Ante esta situación, vemos que los intercambios en
bienes y productos incrementan sus precios, debido a que no existe una frontera viva
para el desarrollo económico. Si a ello le sumamos que las condiciones de
infraestructura son precarias y toman mayor tiempo para ser entregados, los precios del
transporte incrementan los costos del producto y disminuye la demanda.
La construcción de un nuevo escenario para Colombia como sistema de interconexión
eléctrico en expansión, enlazando Centro y Suramérica, es el nuevo escenario
estratégico para la venta de energía renovales al continente. De esta forma, para que la
perspectiva energética tenga un papel fundamental en ver qué país desarrollo primero
ese potencial de recursos renovables, es necesario fortalecer la voluntad política y
económica de los gobiernos y del sector privado para enfrentar los nuevos desafíos en
materia energética como el cambio climático, según ellos.
A continuación, el nuevo escenario colombiano se construye a través de la
interconexión Colombia-Panamá-SIEPAC para llegar a México y Colombia-Región
Andina para llegar al Cono Sur estableciendo un proceso de integración física.
29
3. ESCENARIO PRÓXIMO PARA COLOMBIA COMO POTENCIA ELÉCTRICA EN LA
INTERCONEXIÓN ENTRE CENTRO Y SURAMÉRICA
En Colombia, en materia energética, los recursos renovables como la energía solar,
eólica, maremotriz, olas o geotérmica representan una gran base para el desarrollo
sostenible. En los últimos 10 años, el empleo de la hidroelectricidad ha sido el que más
se ha desarrollado con mayor intensidad y el que tiene un gran potencial, debido a su
geográfica tropical de lluvias a lo largo del año, sin descuidar las sequias o fenómenos
climáticos. “La hidroenergía constituye la tercera fuente de energía con un 12.2%,
después del petróleo 37.5% y el gas natural 21.9%, pero es la primera fuente de
energía renovable de mayor oferta” (Horta, 2005, p. 26). En cuanto a energía renovable,
la interconexión eléctrica ha sido una herramienta importante a la hora de ver el
desarrollo colombiano. Aunque estamos atrasados en el desarrollo de nuevas fuentes
de energía limpia, la construcción de embalses y represas para la generación de
electricidad, deben estar acompañadas de normas ambientales para garantizar un
desarrollo sostenible, y poder minimizar los impactos negativos en el ecosistema.
Dentro de este capítulo se analiza cómo ha sido la evolución y consolidación del
sistema eléctrico colombiano, con el fin de comprender cuál será el camino o nuevo
escenario eléctrico a mediano y corto plazo. Así mismo, en nuestro caso, describir
algunos proyectos de interconexión eléctrica ayudará a entender la geografía
económica implementada por Krugman. Por último, con proyecciones más extensas se
tratará de establecer un escenario próximo para Colombia, donde la represa
Pescadero-Ituango será la principal estrategia para posicionar a Colombia como uno de
los mayores exportadores de electricidad en Centro y Suramérica.
3.1. Origen y consolidación de la energía eléctrica en Colombia
“Desde la llegada de la electricidad a Colombia en 1890, ocho años después de
inaugurarse en Nueva York la primera central eléctrica del mundo” (Gutiérrez, 2002, p.
15), con el paso del tiempo, el sistema de interconexión eléctrica ha evolucionado de
30
forma lenta. Al principio, la electricidad se utilizó exclusivamente para el alumbrado
público y el comercio, luego se fue introduciendo en los hogares de los estratos más
altos de la sociedad y por último, a sectores populares. A comienzos del siglo XX, por
parte del Estado, la búsqueda de fuentes de energía fue la principal acción para el
desarrollo industrial, después de la recuperación económica dejada por la recesión de
1929. En esta época, Colombia contaba una capacidad de generación eléctrica de 45
MV para una población superior a 7 millones de habitantes, lo cual resaltaba el lento
desarrollo en materia energética. De esta manera, la infraestructura física colombiana
tenía grandes deficiencias en el sistema de carreteras y vías de acceso, condicionando
el desarrollo eléctrico. Por lo tanto, en 1936, bajo la reforma constitucional, el gobierno
impulsó la actividad eléctrica con la inversión estatal para la construcción de
hidroeléctricas, aprovechando la diversidad de ríos en el territorio. Bajo la ley 26 de
1938, se autorizó la construcción de centrales eléctricas en el Valle, Caldas, Santander
y Medellín.
Ante el crecimiento de la demanda de electricidad se comenzó a pensar en la
interconexión eléctrica bajo las empresas más grandes del país, como Empresas
Públicas de Medellín, Empresa de Energía Eléctrica de Bogotá y la Corporación
Autónoma Regional del Cauca, quienes ostentaban la producción eléctrica regional.
“Esta iniciativa fue elaborada por Gibbs and Hill y Electricité de France presentado a
finales de 1954 sobre la posibilidad y conveniencia de configurar un sistema eléctrico
nacional” (Manrique y Granada, 2004, p. 55). En 1966, gracias al presidente Carlos
Lleras Restrepo, este proyecto recibió un gran impulso para la consolidación del
sistema de la red eléctrica en Colombia. Los procesos de integración también hacían
presencia en las agendas del gobierno para la comercialización de mercancías, pero
debido a las incongruencias en materia de integración de la infraestructura, el
estancamiento de los mercados se hizo evidente. La demanda de electricidad empezó a
crecer proporcional con la población. En 1950, se pasó de una capacidad de generación
eléctrica de 280 MV, seis veces más que en 1930, a una capacidad de 922 MV, con una
población mayor de quince millones de habitantes para comienzos de 1960.
El surgimiento de “la empresa Interconexión eléctrica S.A. –ISA– fue posible en 1967,
como una empresa industrial y comercial del Estado, con el fin de interconectar los
31
sistemas eléctricos regionales para beneficiar al 90% de la población colombiana”
(Gutiérrez, 2002, p. 17). La construcción de líneas de bajo y alto voltaje tuvo demoras
debido a la geografía adversa para conectar la red, debido a que no existían vías que
facilitaran su acceso y comunicación. En esta medida, los costos del transporte de la
red eléctrica tenían costos elevados, y atrasaban el proceso de interconexión eléctrica,
donde otros países de Suramérica ya contaban con una red nacional unificada de
energía.
Durante los setenta y ochenta, debido al retraso en la construcción de hidroeléctrica, se
evidenció una crisis eléctrica causada por las dificultades financieras y el
endeudamiento del Estado, y produjo un racionamiento en el territorio nacional,
perjudicando a millones de personas. Esta situación se convirtió en la principal
preocupación del gobierno que no encontraba soluciones para mejorar y prevenir esta
emergencia. Se llega a los años noventa con esta problemática, donde la apertura
económica y la globalización hicieron una restauración del Estado, y redujeron sus
funciones para dar paso a capitales e inversiones privadas en la construcción de
nuevos proyectos eléctricos.
A pesar de las reformas y de la apertura económica, la crisis financiera por la que
atravesaba el Estado y la deuda, llevaron a la disminución presupuestal para la
ejecución de los proyectos de infraestructura eléctrica. “El sistema eléctrico se mostró
vulnerable, lo cual quedó evidencia con el fenómeno de “El Niño” a principios de los
noventa, que, aunado a los problemas antes descritos, provocó el más prolongado
apagón de la historia eléctrica colombiana durante 13 meses, entre el 2 de marzo de
1992 y el primero de abril de 1993” (Gutiérrez, 2002, p. 18). En base a esta gran
problemática se debían tomar acciones inmediatas para dar solución a la crisis del
sector eléctrico.
Según Gutiérrez (2002), el sistema eléctrico fue cambiando en torno a ISA y apoyado
con el modelo de desarrollo sectorial de la Comisión de Regulación de Energía y Gas –
CREG– creada en 1994 por las leyes 142 y 143. De esta forma se suministró una
normativa para la producción y distribución de energía previniendo nuevos riesgos para
Colombia. Así mismo, se entró en 1995 a un mercado de energía que permitió hacer
32
frente a las sequias y poder suministrar electricidad. También se entró en el mercado de
energía mayorista, lo cual le permitió al Estado liberarse de la carga y poder realizar
inversiones en la construcción de proyectos de generación de energía en el territorio
nacional. A finales de los noventa, Colombia pudo ver realizada la integración del
sistema eléctrico nacional, con el apoyo de ISA: todo esto fue mediante la construcción
de la infraestructura de generación, transmisión y distribución de energía en territorio
colombiano.
Los inconvenientes para la realización de la integración del sistema eléctrico dieron
como resultado altos costos en la comercialización de electricidad, así mismo, a escala
regional, fueron un impedimento para la consolidación de un mercado por medio de vías
de comunicación entre sus fronteras. Estos obstáculos fueron para Colombia una
barrera para la integración de la infraestructura física, tanto interna como externa. Ya
para comienzos del siglo XXI, Colombia empezó a restaurar su modelo de desarrollo
eléctrico con mayor capacidad de producción, gracias a las nuevas centrales
hidroeléctricas y a la implementación de planes de contingencia en relación con el
fenómeno del Niño.
La estructura institucional del Sector Eléctrico se encuentra de la siguiente forma
jerárquica: la dirección está a cargo del Ministerio de Minas y Energía, dentro de él se
encuentra la Unidad de Planeación Minero Energética UPME, a cargo de la planeación,
la regulación es ejercida por la Comisión de Regulación de Energía y Gas –CREG–, la
empresa Expertos en Mercado –XM– tiene a su cargo la operación del Sistema
Interconectado Nacional SIN y por último, el control y vigilancia lo ejerce la
Superintendencia de Servicios Públicos y la Superintendencia de Industria y Comercio.
Así está organizado el sector eléctrico, con el fin de dar una mejor interconexión
eléctrica en territorio nacional e internacional. También se cumple la condición de
regulación del mercado interno para dar una mejor inserción en campo internacional de
energía.
Los siguientes temas que se van a analizar son la demanda y la oferta de energía
eléctrica que ha tenido Colombia, con ello se puede dar un acercamiento de su
33
desarrollo y ver las tendencias que marcarán los próximos años en la venta de energía,
no solo en espacio nacional, sino internacional.
3.2. La demanda de electricidad en Colombia
La principal razón del incremento de la demanda obedece a un factor demográfico, que
a su vez tiene relación con el desarrollo económico y el incremento tecnológico que
facilita la generación y distribución de electricidad. Entre 1971 y 1980, la demanda de
electricidad tuvo un crecimiento de 10,2% promedio anual; entre 1981 y 1990,
disminuyó al 5,8% anual: y de ahí en adelante continuó descendiendo hasta llegar a un
crecimiento del 0,2% anual, en 1998. “Esta gran disminución de debió a la
desaceleración de la economía ya las políticas de racionalización tarifaria y el desmonte
de los subsidios” (Gutiérrez, 2002, p. 39). Esta grave situación evidenció la precaria
infraestructura eléctrica y los problemas del Estado para promover e impulsar el
desarrollo eléctrico a escala nacional. Para el 2001, la demanda de energía eléctrica del
sistema interconectado nacional –SIN– registró un incremento de 2,4%, superior al del
2000, que fue 1,4%. Una de las mayores demandas se registró en el 2007, con un 4%
según el informe de ISA presentado en el 2001. Durante el 2009, la demanda de
energía nacional fue de 54,679.1 GWh, donde creció el 1,8, en comparación con el
2008, cuando la demanda fue del 1,6%. La proyección para el 2010 es de 56,842
GWh (ver anexo F). Este crecimiento se debió en gran medida a los altos
consumos registrados en el mercado regulado, el cual atiende principalmente al
sector residencial, debido a las altas temperaturas alcanzadas en el país por la
presencia del fenómeno de El Niño (Descripción del Sistema Eléctrico colombiano”, [en
línea]).
3.2.1. Demanda de Energía eléctrica en Centro América
Mediante la interconexión de Colombia con Panamá, llegar al mercado mayorista de
Centroamérica constituye un gran mercado para Colombia, lo cual daría rendimientos
crecientes, no solo a Colombia, sino a las filiales o acciones de ISA en los países de
Centroamérica. Así mismo, las conexiones existentes entre Colombia y Ecuador
facilitan el desarrollo eléctrico y por esta razón, mantener, o en su posibilidad, disminuir
34
los costos del transporte entre las fronteras. Según la proyección de UPME (20102024), Costa Rica y Guatemala, con excepción de México, son los principales
consumidores futuros de energía eléctrica, seguido por Honduras, Panamá, El Salvador
y Nicaragua, como se observa en la siguiente tabla:
Año
Panamá
Costa
Nicaragua
Honduras
El Salvador
Guatemala
GWh
Rica
GWh
GWh
GWh
GWh
GWh
2009
6.838
10.043
3.350
7.354
5.840
8.898
2010
7.274
10.556
3.523
7.814
6.091
9.193
2011
7.625
11.096
3.683
8.253
6.359
9.752
2012
7.954
11.636
3.844
8.692
6.626
10.312
2013
8.369
12.218
4.016
9.160
6.911
10.878
2014
8.739
12.834
4.202
9.640
7.208
11.451
2015
9.150
13.485
4.397
10.130
7.518
12.013
2016
9.526
14.176
4.597
10.632
7.842
12.580
2017
9.909
14.909
4.810
11.144
8.178
13.169
2018
10.316
15.682
5.040
11.674
8.530
13.779
2019
10.716
16.500
5.275
12.217
8.897
14.415
2020
11.118
17.364
5.526
12.820
9.279
15.075
2021
11.492
18.277
5.788
13.456
9.678
15.808
2022
11.882
19.243
6.053
14.107
10.094
16.571
2023
12.366
20.265
6.330
14.645
10.528
17.370
Fuente: Unidad de Planeación Minero Energética-UPME. (2010) Plan de Expansión de Referencia 20102024.
35
3.2.2. Demanda de energía eléctrica en Ecuador y Venezuela
En este marco, el mercado eléctrico tiene una gran proyección para el desarrollo
sostenible de los próximos 15 años. Por el lado de Suramérica, la demanda de
electricidad de Ecuador alcanza un mercado para las
Ecuador Tabla 1
exportaciones colombianas, gracias a la construcción de la red
Año
GWh
de interconexión eléctrica que presenta hoy en día y a los
2009
17.085
nuevos proyectos. La demanda se puede apreciar en la
2010
18.396
siguiente Tabla I según la Unidad de Planeación Minero
2011
19.367
Energética-UPME. (2010) Plan de Expansión de Referencia
2012
20.380
2010-2024.
2013
21.398
2014
22.435
Según el Ministerio de Minas y Energía (Memorias al Congreso
2015
23.495
de la República 2008–2009), en 2008, las exportaciones de
2016
24.585
electricidad a Ecuador en GWh se redujeron en 41,8% al
2017
25.711
compararlo con 2007. De febrero a julio de 2008 se observan
2018
26.877
bajos valores de rentas de congestión, dado que en este
2019
28.084
periodo se presentaron las menores exportaciones a Ecuador
2020
29.333
en GWh. Las exportaciones a Venezuela se clasifican como
consumo de frontera comercial internacional y hace parte de
un acuerdo comercial bilateral. Durante septiembre de 2008 se reactivaron las
exportaciones de electricidad de Colombia a Venezuela, a través del circuito Corozo –
San Mateo– 230kV.
Con el aumento de la demanda de electricidad por parte de Centroamérica y los países
frontera de Colombia, se hace necesaria la construcción de nuevas centrales
hidroeléctricas para cubrir la demanda interna, creando excedentes que permiten la
distribución a otros puntos. Dependiendo de la rápida respuesta para la ejecución de los
proyectos electros es que depende posicionarse como una potencia eléctrica. También
es importante entender que sí los costos de transporte son altos, las exportaciones de
energía no serían un negocio para los países, ya que se empezarían a construir nuevos
proyectos internamente para desprenderse de los costos elevados. Por esta razón, la
36
interdependencia crea un escenario de relaciones reciprocas para que Colombia tenga
la ventaja en materia eléctrica y pueda seguir interconectado con las redes de Centro y
Suramérica. Todo esto en pro del desarrollo sostenible regional. Es evidente que el
combustible fósil, no solo tiene impactos negativos en el medio ambiente, sino que, su
característica de recursos no renovable, deja la puerta abierta para el desarrollo de
energías limpias como la hidroeléctrica.
3.3. Oferta de electricidad en Colombia
En Colombia, la oferta eléctrica ha sido un gran esfuerzo para cubrir la demanda. Esto
se hizo tratando de construir y mejorar las condiciones de las hidroeléctricas por las
empresas del sector de mayor producción como ISAGEN, EEPPM, EMGESA, Chivor y
la Empresa de Energía Eléctrica del Pacifico EPSA. En 1970, la capacidad instalada era
de 2.077 MV, los cuales eran siete veces mayor en comparación con la de hace veinte
años atrás. Una década después, se alcanzó 4.108 MW, y superó el doble de la
producción anterior, lo cual se repitió diez años más tarde con una capacidad de
generación de 8.312 MW, en 1990. Para 1999, gracias al desarrollo sostenido y
acelerado de la interconexión eléctrica del sector, la capacidad llegó a 11.595 MW. Con
ello se obtuvo una mayor cobertura para las zonas urbanas.
Como consecuencia de la crisis eléctrica en 1992, se abrió paso a la apertura del sector
eléctrico para la construcción de nuevos proyectos con capital privado y asesoría
logística y técnica de empresas internacionales como Francia y Alemania. De esta
forma comienza una nueva etapa para la construcción de nuevas hidroeléctricas, como
la central de Porce II, con una capacidad de 392 MW; la central Urrá I de 340 MW, y la
hidroeléctrica la Miel I de 375 MW. Estas plantas fueron puestas en operación entre
2000 y 2002, con lo que se dio una mayor oferta de electricidad nacional. Durante 2008,
los ríos asociados al Sistema Interconectado Nacional –SIN– contribuyeron con aportes
energéticos arriba de los promedios históricos, siendo abril el único mes deficitario, con
un acumulado al finalizar el año de 119,0% de la media, lo que en energía corresponde
a 57.389,4 GWh (Memorias al Congreso de la República 2008-2009).
37
3.4. Sistema Interconectado Nacional –Sin–
La empresa XM, Compañía de Expertos en Mercados, es una filial de Interconexión
Eléctrica S.A. ISA, que tiene a su cargo en Colombia la operación del Sistema
Interconectado Nacional –SIN–, la administración del Mercado de Energía Mayorista –
MEM– y la administración de las Transacciones Internacionales de Electricidad –TIE–
con Ecuador. Con la incursión en los mercados mayoristas, la competencia en el sector
eléctrico impulsa a las empresas a construir economías de escala para la acumulación
e inversión de capital en nuevos proyectos. Según la empresa XM, a 2009, en el caso
colombiano, el sistema SIN tiene un total de 24.135 líneas de transmisión eléctrica en el
terreno nacional.
A 2008, la demanda de energía eléctrica es de 53.870 GWh anual, con un crecimiento
de 1,93%. Este sistema está compuesto por 2.399 km de línea de transmisión de 500
kV, 11.674 km de transmisión de 220 y 230 kV y 10.095 km de línea a 110 y 115 kV. A
2008, el total de líneas nacionales de electricidad SIN es alrededor de 24.113 km; en el
2009, el total de líneas incrementó a 24.135 (ver anexo G). Así mismo, la interconexión
internacional tiene una importación colombiana de 250 MW y una exportación de 500
MW con Ecuador. En la frontera con Venezuela hay una importación por parte de
Colombia de 205 MW y de exportación de 336 MW (ANDESCO, 2010, ver anexo H).
3.4.1. Capacidad Efectiva Neta de Electricidad
Según el Ministerio de Minas y Energía, la Capacidad Efectiva es la máxima cantidad
de potencia neta que puede suministrar una unidad de generación en condiciones
normales de operación. Colombia tiene una oferta de electricidad conformada
principalmente por centrales hidráulicas y térmicas a gas y a carbón, pero la mayor
producción de electricidad, del 80%, es de las centrales hidroeléctricas. Por tanto, la
Capacidad Efectiva Neta para atender la demanda de energía del 2009 fue de 54,679.1
GWh y de potencia 9,290 MW, al 31 de diciembre de 2009. El SIN tenía una capacidad
efectiva neta instalada de 13,495.8 MW, lo que equivale a un incremento de 39.0 MW
frente a la capacidad efectiva del SIN en diciembre de 2008. (Para información
38
detallada ver anexo I). Con esto podemos ver que el sistema ha incrementado su
capacidad para: 1. cubrir mayor demanda y 2. para crear excedentes con el fin de
exportar.
3.5. Interconexión eléctrica S.A. Empresas de electricidad
Interconexión Eléctrica S.A, –ISA– es la mayor empresa estatal con participación
privada de transmisión de energía en Colombia, de igual forma, cuenta con presencia
en Perú, Bolivia, Brasil y Ecuador, a través de diferentes filiares en cada uno de los
países. De esta forma, el sistema de interconexión ISA cuenta con una red transmisión
eléctrica de alta tensión, aproximadamente de 38.551 km a lo largo de estos países,
según fuentes de ISA (2010), para el intercambio de energía y el funcionamiento del
mercado eléctrico (ver anexo J).
En Colombia, la empresa ISA ha sido la generadora de los procesos de unificación del
sistema para el mejoramiento del servicio. Desde su creación, la diversificación de su
presencia nacional e internacional ha tenido grandes impactos para el desarrollo de
interconexiones eléctricas en Centro y Suramérica, posicionándola como una empresa
Estatal con gran proyección. La parte accionista mayoritaria pertenece al Estado, y
brinda la oportunidad a capital particular de hacer parte de la empresa. La expansión de
la red eléctrica es uno de los mayores objetivos, por ello a continuación se describen
algunos proyecto para la interconexión eléctrica.
3.5.1. Expansión y crecimiento de la red Eléctrica en territorio nacional e internacional
de la Empresa ISA
A lo largo del 2009 se produjo un incremento de la red de transporte de energía
eléctrica ISA en 328 km de circuito y 195 MVA, (ISA, [en línea]) gracias a la entrada en
operación de nuevos proyectos de integración. Debido a la presencia de ISA en
Suramérica la participación en licitaciones ha sido posible a través de las filiales para la
adjudicación de contratos y proyectos del desarrollo eléctrico y la promoción de la
interconexión a escalas locales y regionales. Gracias al papel internacional, ISA se
posiciona en el mercado internacional en Latinoamérica como una empresa sólida y con
39
liderazgo, así mismo, los ingresos anuales pueden incrementar a un valor aproximado
de USD$ 87 millones. Algunos de los proyectos más significativos se presentan a
continuación según fuentes de ISA.
3.5.2. Colombia:
En el caso de Colombia, los planes de desarrollo eléctrico de ISA culminaron con el
proyecto de repotenciación (incremento del nivel de corto circuito) de las subestaciones
San Carlos y Chivor a 230 kV, las cuales estaban en 110 kV. De esta forma, se puede
llevar un mayor voltaje de energía en las líneas de transmisión. Dentro de otro proyecto,
la Unidad de Planeación Minero Energética –UPME– adjudicó a ISA la convocatoria
pública UPME 02–2008, abierta para diseñar, construir, operar y mantener la
subestación El Bosque a 220 kV, con sus líneas de transmisión asociadas. Se estima
que este proyecto genere ingresos anuales cercanos a los USD 2 millones. Con estos
proyectos se brinda mayor confiabilidad y seguridad al Sistema de Transmisión
Nacional.
3.5.3. Perú:
En Perú, las filiales de ISA, Trans-Mantaro, colocó en funcionamiento la línea PlatanalChilca con capacidad de 220 kV, de 107 km, la cual integra la central de generación, El
Platanal al Sistema Eléctrico Peruano (SEP). Y, la filial Red de Energía del Perú –REP–
incrementó en 175 MVA la capacidad instalada de transformación en las subestaciones
Ica, Marcona y Juliaca. En el 2009, ISA alcanzó su mayor grado de crecimiento, donde
se ganó dos grandes proyectos, por 30 años, para diseñar, financiar, construir, operar y
mantener las obras que estarán a cargo de la filial Trans-Mantaro. Uno de los proyectos
es el Segundo circuito de la línea Independencia-Ica a 220 kV (55 km) y ampliación de
las subestaciones asociadas. Como segundo, está la línea de transmisión TrujilloZapallal a 500 kV (543 km) y sus subestaciones asociadas. El proyecto generará
ingresos anuales estimados en USD 1.4 y USD 25.8 millones respectivamente, y así
permitir el abastecimiento oportuno y confiable de energía hacia el país. Aquí se ve
claramente que la expansión de la interconexión eléctrica desde Colombia hacia la
región Andina tiene un gran mercado. Por ello es vital la construcción de redes
eléctricas a mayor capacidad de transportación para reducir costos y llevar más energía
40
en corto tiempo. Si se hace la interconexión entre Colombia-Ecuador-Perú, las puertas
para la exportación de electricidad al Cono Sur estárán abiertas.
3.5.4. Brasil:
Ubicada entre la frontera de Brasil y Paragua, que comparte el rio Paraná, Brasil tiene la
central hidroeléctrica más grande de Latinoamérica, conocida como Itaipú. A pesar de
ello, la expansión brasileña sigue en curso, donde la subsidiaria Companhia de
Transmissão de Energia Elétrica Paulista –CTEEP– adicionó al sistema eléctrico
brasilero 41 km de líneas y 114 MVA de capacidad de transformación e incrementó sus
redes. Por otro lado, entró en operación comercial la empresa Interligação Elétrica de
Minas Gerais –IEMG–, inversión de ISA a través de CTEEP, luego de culminar la línea
de transmisión Neves 1-Mesquita a 500 kV (172 km), la cual está localizada en el
Estado de Minas Gerais. La Agência Nacional de Energia Elétrica –ANEEL– adjudicó a
CTEEP el diseño, construcción, operación y mantenimiento, por 30 años, de las
subestaciones Jandira y Salto a 440 kV, con lo cual se adicionan al Estado de São
Paulo 1,600 MVA, con esta capacidad de transformación. La ejecución de este proyecto
estará a cargo de la empresa subsidiaria de ISA, a través de CTEEP, Interligação
Elétrica Serra do Japi, y con su entrada en operación se generarán ingresos anuales
cercanos a los USD 10.5 millones.
Según fuentes de ISA 2010, los proyectos que se están ejecutando y las nuevas
adjudicaciones en Colombia, Perú, y Brasil, representan la construcción de 4.794 km de
circuito de alta tensión. Este escenario representa la posibilidad de seguir aumentando
las redes eléctricas por medio de las interconexiones existentes con Ecuador y
Venezuela. Así mismo, la interconexión dentro de Colombia tiene una gran inversión y
construcción de nuevas redes eléctricas. (Ver anexo K).
3.6. Escenario próximo en Colombia
Por la localización geográfica de Colombia, la cual se sitúa bajo la influencia de la zona
de Confluencia Intertropical (ZCIT), franja de bajas presiones a donde llegan las
corrientes de aire cálido y húmedo, provenientes de los grandes cinturones de alta
presión, ubicado en la zona subtropical de los hemisferios note y sur, dan el origen a la
41
formación de grandes masas nubosas y abundantes precipitaciones en el país
(Sánchez, 1999, p. 17). Por esta razón, Colombia cuenta con una posición privilegiada
que le permite tener lluvias durante todo el año, y esto sirve para el desarrollo del
potencial eléctrico. Esta herramienta debe ser aprovechada como una estrategia a
mediano y largo plazo, con el fin de generar mayor capacidad eléctrica y proyectarse
como una potencia en recursos renovables como la electricidad.
El escenario próximo está caracterizado por la utilización de energías renovables que
mitiguen los impactos negativos dejados por las energías fósiles. De esta manera,
Latinoamérica posee grandes recursos naturales que pueden ser aprovechados para el
desarrollo sostenible de la región. Mediante la interconexión eléctrica se han dado los
primeros pasos hacia la cooperación y al desarrollo de economías de escala, donde se
demuestra que los procesos de intercambio y comercialización de la electricidad en el
contexto global son una forma complementaria de interdependencia e integración en
Centro y Suramérica. Por estas razones, con el fin de incentivar el desarrollo exportador
de electricidad, la estrategia colombiana se centra en la construcción de nuevas
centrales hidroeléctricas, mientras cubre satisfactoriamente la demanda nacional de los
futuros años.
Según la Unidad de Planeación Minero-Energética (UPME 2006), este escenario
condiciona la expansión del sector eléctrico a la ocurrencia del Plan Visión Colombia
2019 y en tal sentido, los posibles Estados consistirían: disponibilidad ilimitada de gas,
precio de gas medio, ocurrencia de demanda de energía y potencia, teniendo como
base un escenario de PIB del 6% después del año 2014. A nivel de interconexiones, se
considera a Colombia interconectado con Ecuador, Perú, y el sistema SIEPAC. Bajo los
anteriores supuestos, se observa en la que el sistema de interconexión nacional
requiere la instalación de 2.193 MW y en tal sentido, se halla la necesidad de realizar
expansiones adicionales en plantas hidráulicas, en gas natural consistente, en cierres
de ciclo abiertos y en plantas a carbón mineral. Se realizaría la construcción de seis
centrales hidroeléctricas, con una capacidad de 9.410 MW; propuesta por la forma
Integral de Medellín para el desarrollo y regulación de la cuenca del Cauca Medio,
comenzando por la central de Ituango II con capacidad de producción eléctrica de 4.000
MW.
42
Este sistema permitiría recuperar las tierras del bajo Cauca, entre las cuales se
encuentra las de la Mojan, clasificada por las Naciones Unidas dentro de las cinco más
fértiles del planeta. Por lo demás, Ituango y las demás centrales del Cauca alimentarán
la propuesta de interconexión con Panamá, Centro América y México, con base en el
nuevo Plan Puebla Bogotá (De Greiff, 2009, p. 62). Ante la construcción de nuevas
hidroeléctricas Pescadero-Ituango, aparece como el proyecto de mayor importancia
eléctrica para Colombia en su historia. Por esta razón, a continuación se analiza este
proyecto de energía renovable, el más grande en Centroamérica y la Región Andina.
3.6.1. Construcción de la hidroeléctrica Ituango S.A. E.S.P como nuevo escenario
La interconexión eléctrica y el aumento de la demanda por el incremento poblacional
son necesidades que deben tener una pronta respuesta en materia energética. Por esta
razón, la construcción de la hidroeléctrica Pescadero-Ituango para 2018, obedece a una
necesidad para desarrollar energías renovables y tener una cobertura nacional en todo
aspecto, interconectando el sistema eléctrico en Centro y Suramérica con el fin de
expandir su venta de energía en Latinoamérica. Este proyecto crea un nuevo escenario,
donde la capacidad instalada es de 2.400 MV, con un embalse de tres mil ochocientas
hectáreas, setenta kilómetros de longitud y dos mil 720 millones de metros cúbicos de
volumen (caracol Noticias [en línea]) la cual pasaría a ser la más grande del país.
Los estudios de la hidroeléctrica Pescadero-Ituango fueron iniciados gracias a José
Tejada Sáenz en 1969, quien estudió Ingeniería Civil y de Minas en la Universidad
Nacional de Colombia, socio fundador y gerente General de Integral entre 1955-1981.
El proyecto tendrá un costo de USD 2.400 millones, donde la empresa Integral S.A. le
corresponde elaborar los diseños definitivos de la hidroeléctrica (Periódico El Colombiano,
[en línea]). Luego este proyecto pasará a manos de la sociedad promotora de la
Hidroeléctrica Pescadero S.A. encabezadas por el Instituto para el Desarrollo de
Antioquia (IDEA) y el Departamento de Antioquia, quienes tienen el 52,887,069% de las
acciones (Hidroituando [en línea]).
Uno de los impedimentos para entrar a ejecutar la obra, es que el sitio donde se
pretende construir la hidroeléctrica no cuenta con vías de exceso. Esta es la primera
43
etapa del proyecto donde se contemplan: el estudio de los diseños, la licencia ambiental
y de construcción, así como las vías de acceso. Por esta razón se debe hacer una
licitación para la construcción de carreteras que permita conectar la obra con el país. En
esta medida, las demoras en la construcción de carreteras o de infraestructura física
elevarán los precios en el transporte de implementos y maquinaria para la construcción
de la hidroeléctrica. Este aspecto negativo debe ser disminuido con la pronta ejecución
del proyecto, para de esta forma mitigar los costos si se sigue demorando la
construcción de carreteras. Es decir, a medida que se atrase el proyecto, los costos son
altos y no se avanza en el desarrollo de energías renovables, entonces Colombia podría
ser adelantada por otro país que no tenga impedimentos en infraestructura y pueda
ganar el mercado eléctrico mayorista.
3.6.2. Localización de HIDROITUANGO S.A. E.S.P.
Según las fuentes oficiales a cargo del proyecto Hidroituando, la localización de la
hidroeléctrica pretende aprovechar el caudal del rio Cauca en el tramo medio de la
cuenca, conocido como Cañón del Cauca. Allí se pretenden construir la presa, la casa
de maquinas y el vertedero, los cuales están sobre las dos orillas del rio cauca entre las
desembocaduras de los ríos San Andrés e Ituango, a unos 171 km al norte de
Antioquia. (Ver anexo L).
3.7. Resultados del nuevo escenario para Colombia
Debido a la relativa cercanía de la hidroeléctrica con la frontera de Panamá, la
interconexión eléctrica avanzaría hacia la comunicación del sistema de red eléctrica de
Colombia, con la red SIEPAC. De esta forma, el mercado centroamericano estaría en
los proyectos de integración física entre los dos hemisferios. La interconexión con
Centroamérica constituye una demanda para Colombia de 600MW (ICP. 2010), lo cual
necesita generar mayor capacidad eléctrica mediante la construcción de nuevas
centrales hidroeléctricas como Hidroituando. En esta perspectiva, poder acelerar la
construcción de las hidroeléctricas y de tener mayor capacidad en las redes, incrementa
el potencial eléctrico para la región mientras genera mercados de mayor demanda con
rendimientos crecientes que puedan ser reinvertidos.
44
El incremento en la población latina demandará a su vez mayor energía eléctrica, para
lo cual, los países, y en especial Colombia, deben estar preparados para asumir esa
carga. Además si pretende convertirse en una potencia eléctrica regional, no hay que
ahorrar esfuerzos en la construcción de nuevos proyectos generadores de mayor oferta
eléctrica. Con el desarrollo de energías renovables, como la hidroeléctrica, se comienza
un camino hacia el desapego de las energías fósiles, que tarde o temprano serán
demasiadas escasas y sus precios estarán por las nubes. Teniendo un camino
adelantado en cuanto a la construcción e implementación de energías limpias, se puede
construir un desarrollo sostenible y dar el primer paso dentro de los países de la región.
Esto le dará la oportunidad a Colombia de surgir en un nuevo mercado mayorista de
electricidad.
45
CONCLUSIONES
“LA NUEVA POSICIÓN GEOESTRATÉGIA DE COLOMBIA EN EL SECTOR
ELÉCTRICO”
Debido al posicionamiento geográfico de Colombia entre los proyectos de interconexión
eléctrica para centro y Suramérica se llegaron a las siguientes conclusiones después de
analizar la integración desde una perspectiva eléctrica para fomentar el desarrollo
sostenible. Por lo tanto siguientes conclusiones obedecen a los resultados de la
investigación:
1. A medida que se va desarrollando la interconexión eléctrica, se van transformando
las relaciones comerciales y políticas con los vecinos, creando procesos de
integración y partiendo desde lo subregional hacia lo internacional en un contexto
globalizado. Por esta razón, la construcción de redes eléctricas moviliza las fuerzas
de producción hacia los puntos de concentración para su distribución en los puntos
periféricos, y así generar economías de escala. De esta forma, la geografía puede
ser integrada gracias al desarrollo eléctrico de los países, para aprovechar la
posición geoestratégica de Colombia.
2. En Colombia, el desarrollo del potencial hidroeléctrico modifica las relaciones
geopolíticas con los países de UNASUR, ya que al constituirse como una potencia
media eléctrica, gracias a la expansión del sistema integrado de redes, se comienza
a generar un proceso de interdependencia eléctrica, donde la integración física de
infraestructura permite aumentar los rendimientos constantes, disminuyendo los
costos del transporte. En este sentido, Colombia tiene una herramienta importante a
la hora de negociar con terceros.
3. A su vez, las relaciones de integración con Centroamérica permiten mejorar las
condiciones comerciales y físicas entre el G-2 (antes conocido como G-3, cuando
Venezuela hacia parte del grupo junto con México y Colombia). Por este motivo, es
importante la interconexión eléctrica entre Colombia, el Plan Puebla Panamá y el
46
sistema SIEPAC, con el fin de establecer economías de escala con diferentes
puntos industriales que permitan la movilización sin costos elevados, gracias al
sistema integrado de la infraestructura.
4. Gracias a sus recursos naturales, tales como la abundancia del agua, debido a su
posición en la Zona de Confluencia en el trópico, la nueva posición geoestratégica
permite a Colombia tener una mejor proyección frente a los competidores de materia
eléctrica y de energías renovables. De esta forma, la exportación de bienes tiende a
diversificarse, logrando una producción industrial, ya que,
un país que no posee industria de equipos no puede desarrollar sus actividades
industriales y agrícolas más que recurrir a las industrias de equipos de otros países, pero
las llamadas empresas ligeras permiten los procesos acelerados de construcción de
capital. La industria ligera tiene por objeto la transformación de materias primas en bruto,
para nuestro caso el agua en electricidad, en productos que se venden para ser
empleados o consumidos (George, 1984, p63).
5. Las dificultades geográficas que presenta Latinoamérica han sido uno de los
mayores obstáculos en la integración de la infraestructura. También los contextos
sociales, políticos y económicos que presenta cada país, han sido entendidos como
barreras para el desarrollo armónico de las redes de comunicación, entre ellas las
férreas, marítimas y terrestres. En el contexto latino (latinoamericano), la geografía
económica propuesta por Krugman en 1992 adquiere gran relevancia, ya que si no
se articulan los puntos de producción con la periferia, los costos del transporte son
elevados por el desplazamiento, puesto que el tiempo es un factor negativo al
momento de tomar mayor o menor distancia. La fragmentada geografía causada por
los ríos, valles, montañas, desiertos, selva, e impenetrables zonas andinas,
muestran la condiciones precarias por las cuales tiene que atravesar el mercado
para llevar a cabo los intercambios comerciales entre países. Aún más evidente es
la incapacidad política por parte de los Estados para dar respuesta a los desafíos
presentados por topografía.
6. Siguiendo con el modelo de Krugman, el principal objetivo del desarrollo eléctrico es
la creación de rendimientos crecientes, en base con en economías de escala,
47
subiendo los ingresos en la integración de mercados en la venta de energía
eléctrica. Por esta razón, la interconexión eléctrica permite disminuir los costos de
transporte para que exista un equilibrio entre la demanda y oferta. De este modo, el
mercado fija los precios de la electricidad, y si se tienen costos bajos, los ingresos
son mayores, por ende, hay rendimientos crecientes por que la demanda de energía
aumenta. Por esto es importante el transporte, ya que sí es un costo elevado, se
altera la producción eléctrica y se desequilibran los precios del mercado.
K = TPO/2 [(1+P) T O-1 + (1-P) T -(O-1)] (Krugman 1992, p: 118. A. 15)
7. La Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Suramericana IIRSA tiene
grandes y productivos proyectos de desarrollo en transporte, comunicaciones y
energías. Gracias a la disminución de las distancias entre un punto de producción y
su distribución, la construcción y mejoramiento de la infraestructura permite al
mercado poder tener un mayor desarrollo. La infraestructura constituye una
necesidad para los países, con la idea de dinamizar el comercio y poder entrelazar
las zonas industriales entre estas, y también con los otros puntos de distribución a
escala subregional, nacional o internacional. Para Centro y Suramérica, La inserción
en la economía internacional depende del grado de evolución de su sistema de
infraestructura, tanto interno como externo.
8. El Plan Puebla Panamá PPP, que en la actualidad es considerado por Colombia
como el Plan Puebla Bogotá, muestra que el mercado eléctrico para los países de
Centroamérica merece la atención de Colombia como principal socio del hemisferio
sur. Todo esto, debido a que la geografía de Centroamérica no cuenta con la
diversidad topográfica de Suramérica, por ejemplo, la variedad de ríos y nacimientos
de caudales. Esta puede ser una ventaja para consolidarse como un exportador
hacia los países de Centroamérica, mediante la interconexión eléctrica entre
Panamá y Colombia que está en marcha.
48
9. La integración eléctrica es una herramienta que permite la cooperación y la
interdependencia de mercado para dar mayor y mejor calidad en la cobertura
eléctrica. Podemos decir que lo que se evidencia con la presente investigación sobre
la interconexión entre Centro y Suramérica, y tomando a Manuel Castell (1999),
donde denomina una “sociedad en red”, es que la interconexión eléctrica crea un
sistema red de electricidad interconectado con diferentes puntos de producción y
comercialización que se retroalimentan.
10. La nueva especialización productiva en electricidad vuelca a Colombia como un
socio comercial estratégico para las exportaciones de energía que “cuanto más
barato resulte una fuente de energía, o una materia prima, y más elevados sean los
tonelajes consumidos, más sensible será la incidencia de los costos de transporte
sobre los precios de la venta” (George, 1984, p 77). Por esta razón, resulta
indispensable acelerar los procesos de construcción de hidroeléctricas y desarrollar
el potencial hídrico de Colombia, para poder convertirse en una potencia media en
escala regional; todo esto, con la venta de energía eléctrica entre centro y sur
América.
49
BIBLIOGRAFÍA
Agencia Internacional de la Energía. (2006). World Energy Outlook. International Energy
Agency Head of Publications Service. Paris, France.
Arguello, G. (2008). III Foro de Integración Energética Regional FIER. Integración e
interconexión energética de los países andinos. Buenos Aires. Recuperado el 20
de Oct. de 2010, de http://www.olade.org/fier2008/Documents/presentaciones/día
1/PANEL%202/15-30%20Arguello.pdf
Altomonte, H. (2008). III Foro de Integración Energética Regional FIER. Importancia de
la integración energética para las economías de los países de América Latina y el
Caribe: crisis y oportunidades Buenos Aires. Recuperado el 20 de Oct. de 2010,
dehttp://www.olade.org/fier2008/Documents/presentaciones/dia2/SESION
%20PLENARIA%202.%20Jueves%20de%2016.10%20a%2017.50/16.50%20Alto
monte.pdf
BID. (2010). Mesoamérica renueva su ímpetu hacia su integración. Recuperado el 20
de Oct. de 2010, de http://www.iadb.org/articulos/2010-10/spanish/mesoamericarenueva-su-impetu-hacia-su-integraci0n--8234.html
Botero, S., Chejne F. & Rodríguez, J. (2005). Fuentes no convencionales de generación de
electricidad. Bogotá: ISAGEN S.A.
Bull, H. (1997). The anarchical Society. A study or order in world politics. London:
Macmillan.
Cárdenas, M. Coor. (2004). El futuro de la integración andina. (1ª ed.) Bogotá: CEREC,
FESCOL.
Cardona, D. (1992). Colombia y la integración Americana. Bogotá: FESCOL.
Caro, R. (2007). División de Recursos Naturales e Infraestructura. “La seguridad
energética de América Latina y el Caribe en el contexto mundial”. Santiago de
Chile: CEPAL.
CEPAL. (2003). Informe sobre Inversión extranjera en América Latina y Caribe.
Recuperado
el
11
de
Sep.
de
2010,
de
http://www.eclac.org/cgi-
bin/getProd.asp?xml=/ddpe/agrupadores_xml/aes253.xml&xsl=/agrupadores_xml
/agrupa_listado.xsl
Cerdas, R. (2005). Las instituciones de integración en Centroamérica. De la retórica a la
descomposición. San José: Editorial UNED.
CIER. (2008). III Foro de Integración Energética Regional FIER. Integración Energética
Eléctrica en América Latina y el Caribe. Buenos Aires. Recuperado el 20 de Oct.
de
2010,
de
ttp://www.olade.org/fier2008/Documents/presentaciones/dia2/
SESION%20PLENARIA%202.%20Jueves%20de%2016.10%20a%2017.50/1610-Arguello.pdf
Combes, Pierre-Philippe. (2008). Economic geography: the integration of regions and
nations. Princeton: University Press.
Comisión de Regulación de Energía y Gas-CREG. (2010). Proyecto de inversión:
estudios para la armonización de marcos regulatorios para los intercambios de
energía eléctrica nacional.
Recuperado el 18 de Sep.
de 2010, de
http://spi.dnp.gov.co/App_Themes/SeguimientoProyectos/ResumenEjecutivo/120
4000100000.pdf
Coviello, M. (2007). Fuentes renovables de energía en América Latina y el Caribe: dos
años después de la Conferencia de Bonn. Santiago de Chile: CEPAL-GTZ.
Coviello, M. Altomonte H. (2004). Fuentes renovables de energía en América Latina y el
Caribe: situación y propuestas de políticas. Santiago de Chile: CEPAL.
Coviello, M. (2003). Entorno internacional y oportunidades para el desarrollo de las fuentes
renovables de energía en los países de América Latina y el Caribe. Santiago de
Chile. Organización de las Naciones Unidas. CEPAL.
Coviello, M. (2000). Estudio para la Evaluación del Entorno del Proyecto Geotérmico
Binacional
Recuperado
“Tufiño-Chiles-Cerro
el
15
Negro.
de
Proyecto
Sep.
OLADE/CEPAL/GTZ.
de
2010,
de
http://www.eclac.org/publicaciones/xml/6/5696/LCR1995-E.pdf
Coviello, M. & Altomonte, H. (2003). Sostenibilidad energética en América Latina y el
Caribe: el aporte de las energías renovables. Santiago de Chile: CEPAL.GTZ.
Deutsch W. K. (1990). El Análisis de las Relaciones Internacionales. México: Gernika.
De la Ossa, A. (1994). El sistema de Integración Centroamericana. Critica de la visión
oficial. San Jose: Fundación Friedrich Ebert.
Dehesa Romero, G. (2000). Comprender la globalización. (1ª ed.) Madrid: Alianza.
EL Plan Puebla Panamá y los objetivos de desarrollo del milenio. (2007). Revista
Informativa PPP, Vol. XXIII. Recuperado el 20 de Oct. de 2010, de
http://participacionsocial.sre.gob.mx/docs/incidencia_social_ambito_regional_m
ultilateral/relaciones_internacionales_de_mexico/ppp/odm_ppp_marzo2007.pdf
Evans, P. (2007). Instituciones y desarrollo en la era de la globalización neoliberal.
Bogotá: Instituto Latinoamericano de Servicios Legales Alternativos ILSA.
Evans, P. & Rauch, J. (1999). La Burocracia y el crecimiento: un análisis transversal
entre naciones de los efectos de las estructuras estatales (weberianas) en el
crecimiento económico. American Sociological Review, vol. 64, no.5, Oct.
Recuperado
el
día
20
de
Ago.
de
2010,
de
http://ilsa.org.co:81/biblioteca/dwnlds/eclvs/eclvs11/Eclvs11-01-02.pdf
Fuentes, A. Villanueva, J. (1989). Economía Mundial e Integración de América Latina.
Buenos Aires, Argentina: Editorial Tesis.
Rivero, P. (2008). FORO DE INTEGRACIÓN ENERGÉTICA REGIONAL -FIER III-.
Situación y panorama de la industria eléctrica global y de América Latina. Buenos
Aires.
Recuperado
el
29
de
Oct.
de
2010,
de
http://www.olade.org/fier2008/presentaciones.php?lang=es&pag=5
George, P. (1984). Geografía económica. Barcelona: Editorial Ariel.
Gutiérrez, J. Ed. (2002). El sector eléctrico colombiano orígenes, evolución y retos: un siglo
de desarrollo [1882-1999]. Bogotá: Interconexión Eléctrica S.A.
Harris, R. (2008). Alternativas Latinoamericanas frente a la globalización y el
capitalismo. Revista Nueva Sociedad, no 214 marzo-abril. Recuperado el día 14
de Ago. de 2010, de http://www.nuso.org/upload/articulos/3506_1.pdf
Held, D. (2003). The global transformations reader an introduction to the globalization debate.
Cambridge, UK: Polity Press Malden, Massachusetts.
Hernandez, R. (2010). Metodología de la investigación. (5a ed.) México Bogotá: Mac
Graw Hill Interamericana Editores.
Horta, L. (2005). Perspectiva de sostenibilidad energética en los países de la
Comunidad Andina. Santiago de Chile. CEPAL.
Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana. (s.f.). Sección
Institucional. Comunicado de Brasilia. Recuperado el 15 de Sep. de 2010, de
http://www.iirsa.org/BancoConocimiento/C/comunicado_de_brasilia_final/comun
icado_de_brasilia_final.asp?CodIdioma=ESP
ISA. (2001). Informe mercado de energía mayorista. Colombia: Interconexión Eléctrica S.A.
ISA. (2009). Informe de Responsabilidad Social Empresarial. RSE. Colombia:
Interconexión Eléctrica S.A.
ISA-ETESA. (2010). Interconexión Eléctrica Colombia-Panamá ICP. Marco general de
desarrollo y estado de avance de las actividades requeridas para la viabilización
del proyecto. Colombia: Interconexión Eléctrica S.A.
Jaramillo, L. (2006). Análisis del plan integrado de desarrollo social andino en el marco
del programa subregional andino de la CAN para la prevención y erradicación
del trabajo infantil. Bogotá: Editorial Javeriana.
Jessop, B. (1999). Crisis del estado de bienestar: hacia una nueva teoría del Estado y
sus consecuencias sociales. Bogotá: Siglo del Hombre; Universidad Nacional
de Colombia.
Jessop, B. (2003). The future of the State in an Era of Globalization. IPG Vol. 3. p. 3046.
Keohane R. & Nye, J. (1977). Power and interdependence: world politics in transition.
Boston: Little Brown.
Krugman, P. (1992). Geografía y Comercio. Barcelona: Antonio Bosch Editor.
Krugman, P. (1996). La organización espontánea de la economía. Barcelona: Antonio
Bosch Editor.
Krugman, P. (1995). Desarrollo, geografía y teoría económica. Barcelona: Antonio
Bosch Editor.
Krugman, P. (1999). Economía internacional teoría y política. (4a ed.) Madrid; Buenos
Aires: McGraw-Hill Interamericana.
Malamud, C. (2009). La Crisis De La Integración Se Juega En Casa. Revista Nueva
Sociedad Nº 219. Enero-Febrero. Recuperado en 10 de Mayo de 2010, de
http://www.nuso.org/upload/articulos/3585_1.pdf
Matul, D. (s.f.). La integración centroamericana: una mirada desde Costa Rica.
Recuperado
el
15
de
Ago.
de
2010,
http://unpan1.un.org/intradoc/groups/public/documents/icap/unpan028033.pdf
de
Manrique, O & Granada, C. (2004). Introducción a las relaciones energía-desarrollo un
análisis de la reestructuración del sector eléctrico colombiano desde la energía.
Medellín: Universidad Nacional de Colombia.
Marini, M (2008). América Latina, dependencia y globalización. Bogotá. Siglo del Hombre
Editores CLACSO.
Marini, M. (1993). Dos momentos en la integración Latinoamericana. Texto para El Día
Latinoamericano y Canadá. Recuperado el 10 de Ago. de 2010, de
http://www.marini-escritos.unam.mx/021_integracion_es.htm#3
Medeiros,
M.
“Prerrogativas
(2002).
estatales
e
integración
regional:
la
supranacionalidad como condición necesaria de la lógica distributiva”. En Jose
Briseño J. y Bustamante A. (Coord). La Integración latinoamericana. Entre el
regionalismo abierto y la globalización. (pp. 181-198) Mérida, Universidad de los
Andes. Grupo CEFI_ULA.
Méndez, R. (1997). Geografía económica. La lógica espacial del capitalismo global.
Barcelona: Editorial Ariel.
Mitrany, D. (1966). A working peace system. An argument for the functional
development of international organization. Chicago: Quadrangle Books.
Ministerio de Minas y Energía. (2008-2009). Memorias al Congreso de la República.
Sector de Energía Eléctrica. Bogotá. Recuperado el 10 de Ago. de 2010, de
http://www.minminas.gov.co/minminas/downloads/UserFiles/File/Memorias/Mem
orias%202009/C_Memorias_ENERGIA1.pdf
Ministerio de Minas y Energía. (1982). Estudio nacional de energía. Informe final.
Bogotá: Gráfica Ltda.
Moncayo, E. (2003). Geografía económica de la comunidad Andina: regiones: nuevos
actores de la integración. Lima. Comunidad Andina.
Moreno, F. (2010). Como escribir textos académicos según normas internacionales. (1ª
ed.) APA, IEEE, MLA, VANCOUVER, e ICONTEC. Barranquilla: Ediciones
UNINORTE.
Markku Nurmi. (2008). Alianza en Energía y Ambiente con Centroamérica, AEA.
Recuperado
el
20
de
Oct.
de
2010,
de
http://www.olade.org/fier2008/Documents/presentaciones/dia1/panel1/11.15.Mark
ku%20Nurmi%201.pdf
Organization for economic cooperation and development (OECD) - (1996), Globalization
of industry: Overview and Sector Report. Paris.
OLADE, Sistema de Información Económica Energética. (2007). “Energía en Cifras”.
Versión # 18. Quito.
Otero, D. (2007). “La integración energética latinoamericana: dos visiones”. En Vieira, E.
Editor. Tendencias mundiales y Latinoamericanas en el uso de recursos
energéticos. (p: 167-205). Bogotá. Editorial Javeriana.
Otero, D. (1991). El sector eléctrico ¿un sector de oferta o de demanda? Revista
Javeriana Vol. 115 no. 572 (ene.-feb.), p. 104-108.
Pastrana, E. (2005). Extinción o reinvención del estado-nación frente a los desafíos
globales. Relaciones Internacionales. Deafens, Bogotá .12. 266-282.
Perea, J. Ed. (2000). Energía sin fronteras integración eléctrica suramericana interconexión de
mercados mayoristas. Bogotá. CAF.
Pistonesi, H. (2003). Energía y desarrollo sustentable en América Latina y el Caribe guía para
la formulación de políticas energéticas. Santiago de Chile. CEPAL.
Reinicke, W. (1998). Global public policy. Washington. The Brookings Institution Press.
Realpozo, P. (2006). Foro de Integración Energética Regional. Perspectivas de
Interconexión.
México–Centroamérica––Colombia.
México
D.F.
División
Internacional CFE.
Rieznik, R. (2008). III Foro de Integración Energética Regional FIER. Sistema de
Interconexión Eléctrica para los Países de América Central. El desafío de la
Integración Energética Regional. Buenos Aires. Recuperado el 20 de Oct. de
2010,
de
http://www.olade.org/fier2008/Documents/presentaciones/dia2/PANEL%204%20J
ueves%20de%208.30%20a%209.50%20hs/8.50%20Rieznik%20Kornblithtt.pdf
Rueda-Junquera, F. (2009) La integración económica de Europa y América Latina
perspectiva comparada. Revista Nueva Sociedad no. 219, Enero-Febrero.
Recuperado
el
15
de
Marzo
http://www.nuso.org/upload/articulos/3583_1.pdf
de
2010,
de
Sánchez, G. (1989). Crisis, deuda externa e integración de nuestra América. La
Habana: Pueblo y Educación.
Sánchez, H. (1999). Estudio sobre la cuenca hidrográfica del Rio Susagua. Bogotá. CAR.
Sandoval, F. & Salazar, R. Coor. (2004). Lectura crítica del Plan Puebla Panamá. Panamá.
Libros en red.
Solís, G., & Rojas, F. Coor. (s.f.). La integración Latinoamericana. Visiones regionales y
subregionales. Costa Rica: Editorial JURICENTRO. Recuperado el 5 de Sep. de
2010,
de
http://unpan1.un.org/intradoc/groups/public/documents/icap/unpan028031.pdf
Solís, G., Torres, C. & Segura, D. Procesos de integración regional. (s.f.). La
participación de los entes sub-estatales en el i-proceso de integración
centroamericana. Recuperado el 10 de Sep. de 2010, de http://www.observocd.org/temp/libreria-30_2.pdf
UPME. (2002). Plan de Expiación de Referencia: Generación y transmisión. 2002-2011.
Bogotá.
UPME. (2006). Plan de Expiación de Referencia: Generación y transmisión. 2006-2020
(Preliminar). Bogotá.
UPME. (2010). Plan de Expiación de Referencia: Generación y transmisión. 2010-2024.
Bogotá.
Valencia, F. (2006). Presentación de Colombia en el Plan Puebla Panamá. Recuperado
el
20
de
Sep.
de
2010,
de
http://regiones.presidencia.gov.co/Es/PMA/Documents/comisionado_presidencial/
colombia_planp.pdf
Vieira, E. (2010). “Los obstáculos y costos de la no integración de América latina”. En
KAS Paper Nº 8, Marzo.
Vieira, E. (2008). La formación de espacios regionales en la integración de América
Latina. Bogotá. Convenio Andrés Bello y Pontificia Universidad Javeriana.
Vieira, E. Ed. (2009). Tendencias mundiales y Latinoamericanas en el uso de recursos
energéticos. Bogotá. Editorial Javeriana.
Anexo A
Mapa del Plan Puebla Panamá.
Red Eléctrica y Países que los conforman.
Fuente: Plan Puebla Panamá. Recuperado el 15 de Ago. de 2010, de
http://mensual.prensa.com/mensual/contenido/2003/03/23/hoy/negocios/negociosb.htm
Anexo B
Mapa de Interconexión Colombia Panamá ICP
Fuente: Presentación interconexión Panamá-Colombia. Andrés Villegas Ramelli en
Platts 2005.
Realpozo, P. (2006). Foro de Integración Energética Regional. Perspectivas de
Interconexión. México–Centroamérica––Colombia. México D.F. División Internacional
CFE.
Anexo C
Mapa SIEPAC
PRIMER SISTEMA DE TRANSMISIÓN REGIONAL
País
Tramo
Aguacapa – Frontera El
Salvador
Guate Norte - Panaluya
Panaluya – Frontera Honduras
El
Frontera Guatemala –
Salvador
Ahuachapán
Ahuachapán – Nejapa. Doble
Circuito (1)
Nejapa – 15 Septiembre.
Doble Circuito (1)
15 Septiembre - Frontera
Honduras
Frontera El Salvador – Agua
Honduras
Caliente
Agua Caliente – Frontera
Nicaragua
Torre “T” - Río Lindo. Doble
Circuito (2)
Río Lindo – Frontera
Guatemala
Nicaragua Frontera Honduras – Sandino
Sandino – Ticuantepe
Ticuantepe – Frontera Costa
Rica
Costa Rica Frontera Nicaragua – Cañas
Cañas – Parrita
Parrita – Palmar Norte
Palmar Norte – Río Claro
Río Claro – Frontera Panamá
Frontera Costa Rica Panamá
Veladero
TOTAL
Guatemala
Longitud
aproximada
(km)
Longitud
aproximada
por país
(km)
96
106
74
281
19
89
286
85
93
54
61
270
14
141
122
63
310
125
130
159
130
51
23
493
150
150
1,790
Fuente: SIEPAC. Líneas de transmisión. Recuperado el 20 de Ago. de 2010, de
http://www.eprsiepac.com/ruta_siepac_transmision_costa_rica.htm
Anexo D
Empresas que hacen parte del SIEPAC
La ejecución del proyecto está en marcha bajo la responsabilidad de la Empresa
propietaria de la Red (EPR) conformada por el Instituto Nacional de Electrificación
(INDE) Guatemala, la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL) de El
Salvador, Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENNE) de Honduras, Empresa
Nacional de Transmisión Eléctrica (ENATREL) de Nicaragua, Instituto Costarricense de
Electricidad (ICE) de Costa Rica, Empresa de Transmisión Eléctrica S.A. (ETESA) de
Panamá, Interconexión Eléctrica S.A. (ISA) de Colombia, Empresa Energética Española
(ENDESA) de España, Comisión Federal de Electricidad (CFE) de México, según las
fuentes consultadas en la página web del proyecto Mesoamérica.
Anexo E
“Decisión 539”
Bases de la Alianza Energética Andina
La Interconexión eléctrica
En diciembre de 2002 se aprobó la Decisión 536 “Marco General para la
interconexión subregional de sistemas eléctricos e intercambio intracomunitario de
electricidad”, que brindó el marco jurídico comunitario para impulsar el desarrollo del
tema eléctrico entre los Países Miembros.
Producto de esta Decisión iniciaron sus trabajos el Comité Andino de Organismos
Normativos y Organismos Reguladores de Servicios de Electricidad (CANREL), así
como sus Grupos Técnicos: i) Grupo de Trabajo de Organismos Reguladores de
Servicios de Electricidad (GTOR), creado en junio de 2003, encargado de formular
propuestas conducentes al avance del proceso de armonización de los marcos
normativos necesarios para la plena implementación de la interconexión subregional
de sistemas eléctricos e intercambio intracomunitario de electricidad; y ii) Grupo de
Trabajo de Organismos Planificadores de Servicios de Electricidad (GOPLAN),
creado en enero de 2004, encargado de elaborar propuestas, realizar acciones de
coordinación con las entidades energéticas y eléctricas de los países andinos y
lograr acuerdos para que se cumplan los aspectos de acceso a la información y
planificación coordinada de proyectos, con visión de integración regional.
En el marco de esta Decisión, en marzo de 2003 se inauguró la interconexión
eléctrica Colombia – Ecuador, con importantes beneficios para ambos Países
Miembros.
Actualmente, el mercado andino de electricidad se encuentra en un primer nivel de
integración, dada la existencia y pleno funcionamiento de la interconexión eléctrica
Colombia-Ecuador, la existencia de líneas de interconexión entre Colombia y
Venezuela, y la próxima interconexión Perú - Ecuador. Todo ello en el marco de la
vigencia de la Decisión 536 “Marco General para la interconexión subregional de
sistemas eléctricos e intercambio intracomunitario de electricidad”. Cabe indicar que
en julio de 2005, Bolivia anunció su decisión de adherirse a dicha norma
comunitaria.
Fuente: CAN. Decisión 539. Recuperado el 13
http://www.comunidadandina.org/energia/alianza.htm
de
Sep.
de
2010,
de
Anexo F
Demanda de Energía en Colombia UPME
Febrero de 2010
Año
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
2015
2016
2017
2018
2019
2020
2021
2022
2023
2024
2025
2026
2027
2028
2029
2030
2031
Demanda Energía Eléctrica [GWh /
mes]
Tasa de Crecimiento
Esc. Alto Esc. Medio Esc. Bajo Esc. Alto Esc. Medio Esc. Bajo
53,870
53,870
53,870
54,676
54,613
54,550
1.50%
1.40%
1.30%
56,842
56,201
55,560
4.00%
2.90%
1.90%
59,019
57,947
56,876
3.80%
3.10%
2.40%
61,625
59,907
58,211
4.40%
3.40%
2.30%
64,169
61,736
59,462
4.10%
3.10%
2.10%
66,973
63,758
60,860
4.40%
3.30%
2.40%
70,313
66,229
62,579
5.00%
3.90%
2.80%
73,481
68,460
63,966
4.50%
3.40%
2.20%
76,855
70,787
65,422
4.60%
3.40%
2.30%
80,494
73,280
66,865
4.70%
3.50%
2.20%
84,098
75,669
68,162
4.50%
3.30%
1.90%
88,330
78,540
69,874
5.00%
3.80%
2.50%
92,750
81,474
71,558
5.00%
3.70%
2.40%
96,484
83,932
72,953
4.00%
3.00%
1.90%
100,278
86,600
74,463
3.90%
3.20%
2.10%
104,170
89,324
75,981
3.90%
3.10%
2.00%
107,682
91,701
77,416
3.40%
2.70%
1.90%
111,832
94,575
79,230
3.90%
3.10%
2.30%
116,175
97,563
81,099
3.90%
3.20%
2.40%
120,682
100,631
82,984
3.90%
3.10%
2.30%
124,816
103,332
84,520
3.40%
2.70%
1.90%
129,669
106,570
86,448
3.90%
3.10%
2.30%
134,738
109,926
88,421
3.90%
3.10%
2.30%
Fuente: Demanda de energía en Colombia. Recuperado el 16 de Sep. de 2010, de
http://www.siel.gov.co/siel/documentos/documentacion/Demanda/proyeccion_demanda
_ee_nov_2009.pdf
Anexo G
Sistema Interconectado Nacional SIN a 2008
Fuente: ANDESCO 2010. Sector Eléctrico en Colombia: Mercado y Regulación
ANDESCO. Bogotá, Febrero de 2010. UPME.
Anexo H
Interconexiones internacionales Colombia-Ecuador; Colombia-Venezuela
Infraestructura existente
1
2
3
Cuestecita (Co)- Cuatricentenario (Ve)
230 kV
Tibú (Co) – La Fría (Ve)
115 kV
San Mateo (Co) – Corozo (Ve)
230 kV
Ipiales (Co) – Tulcan (Ec)
138 kV
Pto Carreño (Co) – Pto Páez (Ve) 34.5 kV
Jamondino (Co) – Pomasqui (Ec) (1º)
230 kV
4
1
2
Panam
á
8
3
5
5
Colombi
a
6
Proyectos Recientes
7
Jamodino (Co) – Pomasqui (Ec) (2º)
En operación (Co):
nov/2007
En operación (Co-Ec): nov/2008
230 kV
4
7
6
Ecuado
r
Proyectos Futuros
8
Cerromatoso (Co) – Panamá (Pan) 450 kV (DC)
Entrada en operación: 2014
La UPME emitió concepto de conexión
F
:
Fuente: ANDESCO 2010. Sector Eléctrico en Colombia: Mercado y Regulación
ANDESCO. Bogotá, Febrero de 2010.
Anexo I
Capacidad Efectiva Neta
Fuente: ISA. Descripción del Sistema Eléctrico colombiano. Recuperado el 20 de Sep.
de
2010,
de
http://www.xm.com.co/Pages/DescripciondelSistemaElectricoColombiano.aspx
Anexo J
Distribución porcentual de ISA en otros países
País
Colombia
Perú
Bolivi
a
Brasil
81
77
34
16
Participación
de
ingresos por
país
(%)
Empresa
Transmisión
(km de
circuito)
Transformaci
ón
(MVA)
Total
ISA
ISA TRANSEL REP TRANSMANTARO ISA P
CTEEP IE
BOLIVI
CA
ERU
MG
A
10,007
39
1,5 5,837
12,672
03
2,8
1,878
1,328
393
300
235
588
18,687
2
17 38,55
1
370
43,223
61,48
1
Fuente: ISA. Distribución porcentual de ISA en otros países. Recuperado el 25 de Sep.
de 2010, de
http://www1.isa.com.co/irj/portal/anonymous?NavigationTarget=navurl://bd8d927dfca31
08a6e8b86f0ba2e582e
Anexo K
Plan de Expansión de transmisión de Colombia
ITEM
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
Nuevos Proyectos de Transmisión del STN
FECHA ESPERADA
PROYECTO
DE ENTRADA EN
OPERACIÓN
ISA - Caño Limón 230 kV Independización bahías
transformadores 1 y 2 50 MVA 230/34.5/13.8 kV
ISA - UPME 01 de 2007 Subestación Porce III Secciona el
circuito San Carlos - Cerromatoso 500 kV
EEPPM - Porce III Circuitos de Conexión
Entrada Casa de Máquinas - Porce III 500 kV 6.3 km
UPME - Subestación Santa Marta 230 kV
Cambio
de configuración de anillo a interruptor y medio
ISA - UPME 02 de 2008 Subestación Bosque 220 kV
Secciona la línea Bolívar - Ternera 220 kV
UPME - Subestación Nueva Esperanza 500 / 230 kV
Línea Bacatá - Nueva Esperanza 500 kV
Transformador 450 MVA 500 / 230 kV
Línea Nueva Esperanza - Guavio 23
UPME - Subestación Armenía 220 kV
Secciona la línea Hermosa - Virginia 230 kV
UPME - Subestación Miel II 230 kV
Secciona la
línea Miel - San Felipe 230 kV
UPME - Subestación Sogamoso 500/230 kV Secciona la
línea Primavera - Ocaña 500 kV
Reactores de línea en Sogamoso hacia Primavera 500 kV y
hacia Ocaña 500 kV
Transformador
450 MVA 500/230 kV
Línea Sogamoso - Guatiguar
UPME - Subestación Quimbo 230 kV
Líneas
Quimbo - Altamira 230 kV y Quimbo - SE en Valle o Cauca
230 kV (Paez o Juanchito o Pance)
Secciona la línea Betania - Jamond
ESTADO
Marzo de 2010
En ejecución
Junio 30 de 2010
En ejecución
Octubre de 2010
En ejecución
Noviembre de 2010
Plan de expansión
Upme 2009 -2023
Mayo 20 de 2011
En ejecución
Junio de 2012
(Fecha estimada)*
Convocatoria UPME 01
de 2008
Noviembre de 2011
Octubre 01 de 2012
Plan de expansión
Upme 2009 -2023
Plan de expansión
Upme 2009 -2023
Septiembre de 2013
Plan de expansión
Upme 2009 -2023
Octubre 31 de 2013
Plan de expansión
Upme 2009 -2023
EEPPM - Subestación Guayabal 220/110/44 kV
2015
En estudio
Linea Bello - Guayabal - Ancon Sur 220 kV
Transformador 180 MVA 220/110/44 kV
UPME - Subestación Altamira 230 kV, Mocoa 230 kV y San
Plan de expansión
12 Bernardino 230 kV
Sin Definir
Reactores
Upme 2009 -2023
maniobrables de 25 Mvar C/U
* Para la subestación Nueva Esperanza se estima un atraso de ocho (8) meses, el cual ya está considerado en esta
tabla.
11
Fuente UPME (Proyectos que impactan la red actual considerados en el SDDP)
Anexo L
Localización de Hidroituando
Fuente: Hidroeléctrica Ituango. Localización. Recuperado el 25 15 de Oct. De 2010, de
www.hidroituango.com.co
Descargar