REPÚBLICA DE COLOMBIA SUPERINTENDENCIA DE INDUSTRIA Y COMERCIO Resolución N° 754 del 2011 (Enero 21) Ref. Expediente N° 06 - 26838 Por la cual se resuelve un recurso de apelación EL SUPERINTENDENTE DELEGADO PARA LA PROPIEDAD INDUSTRIAL en ejercicio de las facultades que le confiere el artículo 11 N° 7 del Decreto 3523 de 2009, CONSIDERANDO PRIMERO: Que mediante Resolución Nº 23939 de 14 de mayo de 2009, la Dirección de Signos Distintivos negó el registro de la marca mixta TELECOM solicitada por la sociedad COLOMBIA TELECOMUNICACIONES S.A. E.S.P., para distinguir servicios comprendidos en la Clase 38ª de la Clasificación Internacional de Niza, por considerarla incursa en la causal de irregistrabilidad contemplada en el literal a) del artículo 136 de la Decisión 486. SEGUNDO: Que mediante escrito presentado dentro del término y con el lleno de los requisitos legales, la doctora LUZ HELENA VILLAMIL JIMÉNEZ, actuando en calidad de apoderada de la sociedad solicitante, interpuso recurso de reposición y en subsidio de apelación contra la resolución indicada en el considerando anterior, con fundamento en los siguientes argumentos: “(…) Sea lo primero dejar establecido que en efecto, la marca que se solicita en este expediente es la marca TELECOM idéntica en su porción nominativa a la marca TELECOM registrada por le Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom-En Liquidación, y que ello se hizo de esta forma en cumplimiento de las disposiciones legales aplicables y estando mi representada debidamente facultada para hacerlo, por la razones que se exponen a continuación: i-La empresa piones en la prestación de los servicios de telecomunicaciones en Colombia fue precisamente la Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom-En Liquidación, empresa que se creó y organizó de acuerdo con las Leyes 6ª de 1943 y 83 de 1945 y los Decretos 1684 de 1947, 1233 de 1950, 1184 de 1954, 1635 de 1960 y 3267 de 1963 y se reestructuró mediante Decreto 2113 de 1992. ii- La Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom-En liquidación prestó los servicios de telecomunicaciones por muchísimos años desde 1943. No obstante, en el año 2002 se examinó la viabilidad global de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones-Telecom y se concluyó que lamentablemente esta empresa no era viable ni solvente, y que a pesar de los esfuerzos gubernamentales no había ninguna mejoría en la viabilidad financiera, comprometiendo la garantía en la prestación del servicios y generando una mayor pérdida en el valor patrimonial de la Nación; la empresa enfrentaba problemas estructurales tales como el elevado pasivo pensional que hacían incierta su sostenibilidad, y las inflexibilidades administrativas que enfrentaba, tanto a nivel interno como externo, impedirían una necesaria reestructuración. iii- Atendiendo las anteriores consideraciones, entre otras muchas, en el año 2003 el Presidente de la República expidió el Decreto 1615 por medio del cual Sede Centro: Carrera 13 No. 27-00 Pisos 2, 5 , 7 y 10 Sede CAN: Tr. 40A No. 38-50 PBX: 5870000 Linea Gratuita Nacional 018000-910165 Call Center 6513240 Bogotá D.C. Web: www.sic.gov.co e-mail: [email protected] Bogotá D.C. - Colombia Resolución Nº Ref. 06 - 26838 ordenó la supresión y liquidación de Telecomunicaciones Telecom-En Liquidación. la Empresa Nacional de iv-Ahora bien, como era –y continua siendo- absolutamente indispensable garantizar la continuidad de la prestación de los servicios que anteriormente prestaba la Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom-En liquidación el propio Decreto 1615 determinó lo siguiente en su artículo 4°: ARTÍCULO 4°. Garantía de la continuidad en la prestación de los servicios de telecomunicaciones. Con el fin de que la Nación pueda cumplir con el mandato constitucional y legal de garantizar la continuidad en la prestación de los servicios, la Empresa Nacional de Telecomunicaciones - Telecom en liquidación deberá: 4.1 Garantizar que los bienes, activos y derechos de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones - Telecom en liquidación destinados a la prestación del servicio de telecomunicaciones, incluyendo el nombre comercial -Telecom- y los demás nombres comerciales, las enseñas comerciales, las marcas, los logotipos, los símbolos y, en general, todos los derechos de propiedad intelectual de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones - Telecom, en especial todos aquellos que recaigan sobre los signos distintivos que incluyan o hagan referencia a la palabra Telecom se mantengan afectos a la prestación del servicio de telecomunicaciones;” “(…) vi- Ahora bien, como precisamente la empresa titular del nombre comercial y de las marcas se estaba liquidando, había que establecer la manera de hacer que el nombre comercial y las marcas continuaran siendo empleadas en relación con los servicios de telecomunicaciones por parte de una empresa que continuara usando, protegiendo y actualizando las marcas de propiedad de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom-En liquidación. Para tal fin, nuevamente el Gobierno nacional expidió un Decreto en el año 2003, que fue el Decreto No. 1616, por el cual creó la empresa de servicios públicos domiciliarios COLOMBIA TELECOMUNICACIONES S.A. ESP.” “(…) Para concretar el uso y la protección de los activos de propiedad de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom-En liquidación, se celebró un contrato de explotación entre la empresa en liquidación y mi representada, Colombia Telecomunicaciones S.A. ESP, con facultades no solamente para usar la marcas sino para registrar nuevas marcas iguales o similares a las registradas para asegurar su debida protección.” “(…) vii- Y precisamente para efectos de habilitar a Colombia Telecomunicaciones S.A. E.S.P el uso de los activos de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom-En liquidación, el Decreto 1616 estableció. “ARTÍCULO 18. CELEBRACIÓN DE UN CONTRATO DE EXPLOTACIÓN. Con el propósito de garantizar la continuidad en la prestación del servicio de telecomunicaciones Colombia Telecomunicaciones S. A. E.S.P. celebrará, entre otros, y en forma directa con la Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom en liquidación y con las Teleasociadas en liquidación, un Contrato de Explotación para el uso y goce de los bienes, activos y derechos requeridos para la prestación del servicio de telecomunicaciones, en los términos del artículo 39 numeral 3 de la Ley 142 de 1994.” “(…) Por último, y para abundar en argumentos si bien todo lo anteriormente expuesto sustenta de manera incuestionable las razones por las cuales el registro de la marca solicitada en este expediente no solamente es perfectamente viable sino que las misma ley ha ordenado a Colombia Telecomunicaciones solicitarlo, es forzoso informar al Despacho que la Superintendencia de Industria y Comercio 2 Resolución Nº Ref. 06 - 26838 ya conoce la información que estoy suministrando en este expediente, y en virtud de ella ya ha concedido a Colombia Telecomunicaciones el registro de varias clases de marcas que contienen la marca registrada TELECOM.” TERCERO: Que mediante Resolución Nº 55717 de 29 de octubre de 2009, la Dirección de Signos Distintivos resolvió el recurso de reposición interpuesto contra la Resolución Nº 23939 de 14 de mayo de 2009, confirmándola y concediendo el recurso de apelación presentado. CUARTO: Que para resolver el recurso de apelación interpuesto, según el artículo 59 inciso 2º del Código Contencioso Administrativo, es preciso resolver todas las cuestiones que hayan sido planteadas y las que aparezcan con motivo del recurso. 1. RELACIÓN ENTRE LA NORMA SUPRANACIONAL Y LA NORMA NACIONAL. La Decisión 486 de la Comisión de la Comunidad Andina contiene el régimen común de Propiedad Industrial. Por tratarse de una norma supranacional su aplicación e interpretación está irradiada por los siguientes principios: 1.1 Principio de aplicación inmediata supranacional. y efecto directo de la norma Según este principio las normas del ordenamiento supranacional no derivan su obligatoriedad de su adopción por normas internas, ni de la autorización de alguna autoridad nacional; sino que son aplicables en virtud de las competencias otorgadas a los organismos supranacionales, quienes promulgan normas obligatorias en todos los países de la comunidad. La Comisión del Acuerdo de Cartagena en pronunciamiento aprobado en el vigésimo noveno período de sesiones ordinarias, celebrado en Lima (29 de mayo a 5 de junio de 1980), declaró que el ordenamiento jurídico del Acuerdo de Cartagena, tiene identidad y autonomía propias, y prevalece sobre las normas nacionales. 1.2 Principio de primacía o preeminencia de la norma supranacional. De conformidad con este principio el caso de una contradicción explícita o implícita entre una norma interna de un país miembro, y la norma andina esta última se aplica suspendiendo los efectos de la norma nacional que le es opuesta1. 1.3 Principio del complemento indispensable. El principio del complemento indispensable se refiere al evento en que la norma interna no contradice sino que complementa la norma supranacional, de una manera necesaria, en el sentido que permite su aplicación coherente y adecuada. Así, como quiera que pueden ser encontrados vacíos en la norma supranacional, es posible que sea necesario acudir a normas internas que complementen lo regulado adecuadamente, siempre y cuando estas disposiciones no le sean contrarias. 1 Acertadamente el Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina ha señalado: “SÉPTIMO: La primacía del Ordenamiento Jurídico Comunitario implica que las normas comunitarias, cualquiera sea su fuente o jerarquía, por su especialidad, se imponen y prevalecen sobre las normas internas de los Estados Miembros y consecuentemente sobre los Tratados que éstos hayan suscrito y que tengan relación con el ámbito del proceso de integración andina.” Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina, Proceso 112-IP-2003, marca PLOP, 10 de diciembre de 2003. 3 Resolución Nº Ref. 06 - 26838 En este sentido, el artículo 276 de la Decisión 486 establece que “Los asuntos sobre Propiedad Industrial no comprendidos en la presente Decisión, serán regulados por las normas internas de los Países Miembros”, pero en el entendido que la aplicación de dichas norma internas no podrán derivar limitaciones o restricciones para la norma comunitaria, o, establecer otros derechos u obligaciones a los previstos en ella, o modificar los contemplados por la misma. En conclusión, el principio del complemento indispensable tiene lugar cuando exista un vacío en la norma comunitaria susceptible de ser regulado por la norma interna, en tanto su aplicación no sea susceptible de limitar o restringir la norma supranacional. 1.4 caso concreto. En primer lugar, es preciso indicar que una correcta aplicación de los principios antes expuestos permite concluir que los Decretos 1615 y 1616 no pueden limitar, desconocer o modificar las disposiciones relativas a los derechos de propiedad industrial contemplados en la Decisión 486 de la Comisión de la Comunidad Andina, como norma supranacional de aplicación inmediata y preferente, incluyendo el título y modo de adquirir los derechos de propiedad industrial y las limitaciones a su acceso o registrabilidad. En segundo lugar, nótese que dichos Decretos no autorizan a la sociedad Colombia Telecomunicaciones S.A. E.S.P. a solicitar el registro de marcas susceptibles de acarrear riesgo de confusión con las marcas registradas bajo titularidad de la sociedad Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom-en Liquidación. En efecto, las disposiciones contenidas en los mismos únicamente se refieren a la obligación que tiene la sociedad Colombia telecomunicaciones S.A. E.S.P. de continuar con la prestación del servicio que venía ofreciendo la sociedad Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom-en Liquidación, debiendo para tal fin celebrarse un contrato entre las mismas “para el uso y goce de los bienes, activos y derechos requeridos para la prestación del servicio de telecomunicaciones” (subraya fuera de texto). Así, los decretos mencionados no previeron la posibilidad de un titular diferente de las marcas o la transferencia de las mismas a la nueva sociedad, sino simplemente el uso y goce sobre dichos activos. En conclusión, no sólo los decretos mencionados no contradicen o restringen las disposiciones contempladas en la Decisión 486, sino que aun si se aceptase que los mismos pretenden autorizar a la sociedad Colombia Telecomunicaciones S.A. E.S.P. a registrar marcas idénticas o similares a unas previamente registradas por la Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom-en Liquidación, no serían dichas disposiciones aplicables, siguiendo los principios antes señalados, al tener aplicación inmediata y preferente la norma supranacional que impide el registro de este tipo de signos. 2. DE LA TRANSFERENCIA DEL REGISTRO Y DEL CONTRATO DE LICENCIA. 2.1 Artículo 161 de la Decisión 486. “Un registro de marca concedido o en trámite de registro podrá ser transferido por acto entre vivos o por vía sucesoria, con o sin la empresa a la cual pertenece. 4 Resolución Nº Ref. 06 - 26838 Deberá registrarse ante la oficina nacional competente toda transferencia del registro de marca. La falta de registro ocasionará que la transferencia no surta efectos frente a terceros. A efectos del registro, la transferencia deberá constar por escrito. Cualquier persona interesada podrá solicitar el registro de una transferencia. No obstante, la oficina nacional competente podrá denegar dicho registro, si la transferencia acarreara riesgo de confusión. 2.2 Artículo 162 de la Decisión 486. “El titular de una marca registrada o en trámite de registro podrá dar licencia a uno o más terceros para la explotación de la marca respectiva. Deberá registrarse ante la oficina nacional competente toda licencia de uso de la marca. La falta de registro ocasionará que la licencia no surta efectos frente a terceros. A efectos del registro, la licencia deberá constar por escrito. Cualquier persona interesada podrá solicitar el registro de una licencia.” 2.3 Concepto El registro de una marca ante la Oficina Nacional Competente implica para su titular dos facultades derivadas de su exclusividad, la primera, conocida como “positiva”, se refiere a la posibilidad que el titular del registro tiene para usar, ceder y conceder licencias sobre el signo; y la segunda, llamada “negativa”, se refiere a la posibilidad que el titular del registro tiene para prohibir que terceros no autorizados hagan uso del signo, así como de oponerse al registro de conjuntos marcarios idénticos o similares. Dentro de la facultad positiva se encuentra el derecho de uso, goce y disfrute de la marca, el cual permite al titular obtener una retribución económica por la utilización que del signo efectúen terceros por él autorizados. Así, la licencia es el negocio jurídico mediante el cual el titular de un registro marcario (licenciante) autoriza a un tercero (licenciatario) a utilizar el signo, sin transferir la titularidad de la marca, ya que el titular del registro se reserva la propiedad sobre el mismo. Por su parte, la transferencia es la cesión de la titularidad del registro, quedando la misma perfeccionada mediante la inscripción de la afectación ante la Oficina nacional competente, ocupando el cesionario el lugar de titular del registro marcario, no siendo necesario entonces para hacer uso de la marca una autorización o licencia del titular anterior, toda vez que este último pierde los derechos sobre la marca. En conclusión, la licencia, a diferencia de la transferencia, se limita a la autorización de uso de la marca, reservándose el titular del registro los demás derechos que derivan del mismo, por lo cual, el licenciatario no se entiende autorizado para solicitar y obtener el registro de signos idénticos o similares a la marca licenciada, pues ello implicaría un desconocimiento de la naturaleza del contrato de licencia al pretender prescindirse, mediante la solicitud de un nuevo registro, de la autorización de uso que el licenciante otorga como titular exclusivo de la marca. 2.4 Caso concreto. 5 Resolución Nº Ref. 06 - 26838 Una vez revisada la base de datos de la entidad se constató que sobre la marca fundamento de la negación TELECOM, Certificado de Registro No. 160241, bajo titularidad de la sociedad EMPRESA NACIONAL DE TELECOMUNICACIONES TELECOM EN LIQUIDACIÓN, se encuentra inscrita una licencia de uso a favor de la sociedad COLOMBIA TELECOMUNICACIONES S.A. E.S.P., aquí solicitante. Ahora bien, según los parámetros antes establecidos, la autorización de uso sobre el signo mencionado no implica una cesión de la titularidad del mismo. En efecto, es sobre la Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom en Liquidación sobre quien recae el derecho de disposición del registro marcario, así como los deberes que el mismo conlleva, aunque dicha empresa se encuentre actualmente en estado de liquidación, pues se entiende que aún conserva su personería jurídica y debe disponer de sus activos de conformidad con el propósito de su situación jurídica actual. Así, aunque la sociedad COLOMBIA TELECOMUNICACIONES S.A. E.S.P. se encuentre autorizada legal y contractualmente para utilizar el signo en cuestión, y los demás registros marcarios de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones Telecom en Liquidación, ello no la habilita legalmente para solicitar y obtener a su nombre el registro de signos distintivos que se encuentren incursos en una causal de irregistrabilidad. En efecto, la licencia de uso no es la transferencia de la titularidad del signo de suerte que de ella se derive una nueva titularidad sobre la marca. Por ende, aun cuando exista un contrato de licencia de uso suscrito entre las sociedades antes mencionadas, el mismo no le confiere derechos a la sociedad licenciataria para obtener el registro de marcas que sean iguales o semejantes a las de la sociedad licenciante y susceptibles de acarrear frente a las mismas riesgo de confusión. 3. Acuerdos de Coexistencia. 3.1 Artículo 159 de la Decisión 486. “Cuando en la Subregión existan registros sobre una marca idéntica o similar a nombre de titulares diferentes, para distinguir los mismos productos o servicios, se prohíbe la comercialización de las mercancías o servicios identificados con esa marca en el territorio del respectivo País Miembro, salvo que los titulares de dichas marcas suscriban acuerdos que permitan dicha comercialización. En caso de llegarse a tales acuerdos, las partes deberán adoptar las previsiones necesarias para evitar la confusión del público respecto del origen de las mercancías o servicios de que se trate, incluyendo lo relativo a la identificación del origen de los productos o servicios en cuestión con caracteres destacados y proporcionales a los mismos para la debida información al público consumidor. Esos acuerdos deberán inscribirse en las oficinas nacionales competentes y respetar las normas sobre prácticas comerciales y promoción de la competencia. En cualquier caso, no se prohibirá la importación de un producto o servicio que se encuentre en la situación descrita en el primer párrafo de este artículo, cuando la marca no esté siendo utilizada en el territorio del país importador, según lo dispuesto en el primer párrafo del artículo 166, salvo que el titular de dicha marca demuestre ante la oficina nacional competente, que la no utilización de la marca obedece a causas justificadas.” 6 Resolución Nº Ref. 06 - 26838 3.2 Concepto. Los acuerdos de coexistencia a los que hace referencia el artículo 159 de la Decisión 486 implican la concurrencia de las siguientes circunstancias de hecho: Existencia en la Subregión de registros de marcas idénticas o similares, para los mismos productos o servicios, a nombre de titulares diferentes. Intención de comercializar los productos o servicios de uno de los titulares en el territorio en que se predica al monopolio marcario del otro titular, identificándolos bajo el signo en cuestión. Existencia de un acuerdo de comercialización entre los titulares donde se establezcan métodos o procedimientos tendientes a evitar el riesgo de confusión o asociación al que se vería expuesto el consumidor, que incluyan aspectos relativos a la identificación del origen empresarial de los productos o servicios. Inscripción del acuerdo ante la oficina nacional competente. De esta manera, la norma supranacional permite la comercialización, bajo marcas idénticas o similares, de los mismos productos o servicios, con orígenes empresariales diferentes, únicamente si se cumplen los específicos supuestos de hecho antes mencionados. Ahora bien, la Decisión 486 no contiene mención expresa relativa a la aceptación de acuerdos de coexistencia celebrados entre particulares, tendientes a obtener el registro de signos idénticos o similares para productos o servicios respecto de los cuales el uso del segundo signo sea susceptible de causar riesgo de confusión o asociación, siendo inviable proceder a la aplicación analógica en este supuesto del artículo 159 antes citado, al ser una norma especial referida exclusivamente a los acuerdos de comercialización derivados de la existencia en la subregión de marcas idénticas o similares a nombre de diferentes titulares. De esta forma la celebración de este tipo de acuerdos no implica para la oficinal nacional la obligación de conceder el registro del signo solicitado si el mismo es susceptible de causar riesgo de confusión con un signo previamente registrado. En efecto, es pertinente recordar que el propósito de la legislación marcaria no es únicamente proteger el interés particular relativo a los derechos conferidos mediante el registro de una marca, sino el interés general de los consumidores. Así, el riesgo de confusión no sólo implica la afectación de un derecho particular, sino que involucra también la defensa del consumidor, quien puede confundir el origen empresarial de un producto o servicio, afectando su libre elección. 4. Coexistencia actual en el registro. Es preciso mencionar que la coexistencia en el registro de marcas no determina per se la exclusión del riesgo de confusión en el mercado, en realidad, el riesgo de confusión tiene lugar en el comercio de manera independiente a lo consignado en el sistema de registro marcario y, aunque la situación ideal es que este último esté 7 Resolución Nº Ref. 06 - 26838 acorde a las situaciones existentes en el ámbito comercial no es menos cierto que, debido a distintas circunstancias, ello no siempre es factible. Así, aunque la sociedad solicitante sea titular de registros marcarios que contengan la palabra TELECOM en distintas clases internacionales (16ª,18ª, 38ª y 41ª), ello no implica una evidente inexistencia de riesgo de confusión entre los signos, y menos aún una atenuación de la obligación de esta Oficina relativa al examen de registrabilidad de marcas de acuerdo a las disposiciones de la Decisión 486 de la Comisión de la Comunidad Andina En efecto, el criterio esgrimido en un caso, no compromete u obliga a la oficina para pronunciarse siempre en el mismo sentido, sin que esto signifique inseguridad jurídica, o la vulneración del derecho a la igualdad de los administrados. En ese sentido, la jurisprudencia indica que aun cuando la Superintendencia de Industria y Comercio pueda haber registrado marcas que no deberían haberlo sido, no implica que deba continuar haciéndolo, siendo su deber velar por que se dé cumplimiento a las normas comunitarias, las cuales establecen las causales de irregistrabilidad de signos distintivos2. Aunado a ello es preciso tener en cuenta el pronunciamiento emitido por la sección primera del Consejo de Estado el 28 de octubre de 2010, M.P. Marco Antonio Velilla Moreno, donde se sostuvo: “La marca “TELECOM” al no definir el servicio de la clase 38 ni tener alguna relación con los productos de la clase 9, no puede considerarse genérica, como lo pretende dar a entender el tercero interesado en las resultas del proceso. Esta marca es de aquellas que la doctrina denomina “evocativa”, pues evoca en la mente del consumidor algunos de los productos y servicios que distingue, sin que los describa directamente al no definirlos, ni referirse propiamente a alguna de sus características o propiedades; en otras palabras, se encuentra en los límites de las marcas evocativas frente a aquellas que son descriptivas (…)” En mérito de lo expuesto, RESUELVE: ARTÍCULO PRIMERO. Confirmar la decisión contenida en la Resolución Nº 23939 de 14 de mayo de 2009, proferida por la Directora de Signos Distintivos. ARTÍCULO SEGUNDO. Notificar personalmente a la doctora LUZ HELENA VILLAMIL JIMÉNEZ, apoderada de la sociedad solicitante, el contenido de la presente resolución, entregándole copia de la misma y advirtiéndole que contra ella no procede recurso alguno por haberse agotado la vía gubernativa. Notifíquese y Cúmplase Dado en Bogotá D.C., a los El Superintendente Delegado para la Propiedad Industrial, 2 Consejo de Estado, Sentencia de 13 de febrero de 2003, expediente 6240, marca ICOLTRANS: “En oportunidades anteriores la Sala ha desestimado este razonamiento advirtiendo que el hecho de que la Superintendencia de Industria y Comercio hubiese registrado como marcas expresiones o emblemas que no debieron serlo, no significa que deba continuar haciéndolo. Por el contrario, es su deber velar por que se de cumplimiento a las normas comunitarias que consagran las causales de irregistrabilidad”. (Subrayado fuera de texto). 8 Resolución Nº Ref. 06 - 26838 JOSÉ LUIS LONDOÑO FERNÁNDEZ CCM 9