MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL José Felix Cataño INTRODUCCiÓN El nacimiento de la reflexión económica parece surgir de una doble preocupación. En primer lugar, como han mostra­ do Dumont (1977), Hirschman (1977) y Rossanvallon,(1979), surge de un debate realizado en la filosofía política del siglo XVIII donde algunos buscaban la demostración de que es posible una sociedad independientemente de la religión, del soberano, de la política y de la moral, es decir, fruto de una ideología liberal que, para luchar contra la autocracia, de­ sea concebir y constituir la sociedad a partir del individuo y no de consideraciones holistas o institucionales. En segun­ do lugar de un interés científico, tal como lo enuncia Cartelier (1985): La economía política moderna nació de la necesidad sen­ tida por muchas inteligencias a partir del siglo XVII de tener una representación racional de una sociedad donde los la­ zos personales ya no son los dominantes y donde se ha • Profesor Universidad Nacional de Colombia. Correo electrónico [email protected] MARX Y LA rEORIA ECONOMICA ACTUAL dejado lugar a relaciones que toman la forma objetiva y cuan­ tificada de la circulación monetaria, susceptible de ser des­ crita en una contabilidad. (ibíd) En ese orden de ideas la economía política se propone responder al misterio del funcionamiento de una sociedad donde el mecanismo de su existencia y de su orden no son evidentes dada la ausencia de un ente centralizador (o "mano visible") que garantice de inmediato la convivencia entre los individuos. La respuesta a esta pregunta fundamental cons­ tituye el núcleo central de toda teoría general propuesta por los economistas y para algunos, la contribu~ión intele~­ tual más importante que ha aportado el pensamIento econo­ mico al entendimiento de los procesos sociales. (Arrow y Hahn,1977) Actualmente la mayoría de los economistas han acepta­ do que el mejor modelo sobre este problema esencial es el obtenido por Kenneth Arrow y Gérard Debreu en la década de los años 50. Bajo ciertas condiciones precisas, en este modelo no existen demandas u ofertas insatisfechas y los individuos obtendrían un estado de armonía que, en algu­ nos casos (reuniendo condiciones más estrictas que para la existencia del equilibrio mismo) será única y óptima de acuer­ do a los criterios de Pareto. Se habla, entonces, de la exis­ tencia de un equilibrio general de los mercados con las pro­ piedades de eficiencia. 1 A pesar de su evidente falta de realismo, esta teoría :e enseña como la representación del mercado perfecto, Sin fallas. La utilidad de tal construcción no es evidentemente representar una realidad sino más bien la de servir de refe­ rencia teórica para construir una forma de pensar de los economistas, un enfoque construido por medio de la "ex­ tensión" de la teoría central, con el fin de dar cuenta o de representar situaciones designadas no óptimas o ineficientes, es decir, aquellas que no reúnen todas las con­ diciones del modelo de referencia. Es por ello que los múlti­ ples modelos de fallas de mercado o de Equilibrios subóptimos proliferan: la nueva microeconomía de contra­ tos, riesgo moral, principal y agente, asimetría de informa­ ción, el estudio de costos de transacción, etc). De esta ma­ nera, el tener una norma que representa un óptimo sirve para discutir los remedios que deberían desarrollarse para modificar las situaciones económicas y acercarlas a la si­ tuación eficiente. Es evidente la utilidad de este método para el discurso de la política económica. 2 A pesar del éxito académico innegable la teoría walrasiana general sufre de deficiencias internas graves respecto a su objetivo de representar un mercado perfecto y que hacen dudar que se trate del enfoque adecuado para pensar el mundo económico. Tres son las fallas principales: 1) Aún estando en el mismo equilibrio general los agentes no pue­ den hacer efectivas sus transacciones comerciales que les van a conducir a disfrutar de sus decisiones porque el mo­ delo no admite un medio de cambio. 2) No se pudo demos­ trar que existiera en esas condiciones un ajuste de las situa­ ciones por fuera del equilibrio hacia el equilibrio y, 3) es im­ posible allí dar cuenta de la formación de precios por la acción de la oferta y demanda por carecer de un mecanismo de formación de precios descentralizado. Estas deficiencias han conducido a que en el modelo se proceda a introducir la figura artificial del subastador y eventualmente una oficina central de compensaciones entre ofertas y demandas que convierten el modelo en una representación de una socie­ dad centralizada, traicionando el objetivo inicial. 3 Si tal es el estado actual del paradigma central de la teoría económica en este artículo nos proponemos cómo se ENSAYOS DE ECONOMíA MARX Y LA TE ORlA ECONOMICA ACTUAL representar situaciones designadas no óptimas o ineficientes, es decir, aquellas que no reúnen todas las con­ diciones del modelo de referencia. Es por ello que los múlti­ ples modelos de fallas de mercado o de Equilibrios subóptimos proliferan: la nueva microeconomía de contra­ tos, riesgo moral, principal y agente, asimetría de informa­ ción, el estudio de costos de transacción, etc). De esta ma­ nera, el tener una norma que representa un óptimo sirve para discutir los remedios que deberían desarrollarse para modificar las situaciones económicas y acercarlas a la si­ tuación eficiente. Es evidente la utilidad de este método para el discurso de la política económica. 2 A pesar del éxito académico innegable la teoría walrasiana general sufre de deficiencias internas graves respecto a su objetivo de representar un mercado perfecto y que hacen dudar que se trate del enfoque adecuado para pensar el mundo económico. Tres son las fallas principales: 1) Aún estando en el mismo equilibrio general los agentes no pue­ den hacer efectivas sus transacciones comerciales que les van a conducir a disfrutar de sus decisiones porque el mo­ delo no admite un medio de cambio. 2) No se pudo demos­ trar que existiera en esas condiciones un ajuste de las situa­ ciones por fuera del equilibrio hacia el equilibrio y, 3) es im­ posible allí dar cuenta de la formación de precios por la acción de la oferta y demanda por carecer de un mecanismo de formación de precios descentralizado. Estas deficiencias han conducido a que en el modelo se proceda a introducir la figura artificial del subastador y eventualmente una oficina central de compensaciones entre ofertas y demandas que convierten el modelo en una representación de una socie­ dad centralizada, traicionando el objetivo inicial. 3 Si tal es el estado actual del paradigma central de la teoría económica en este artículo nos proponemos cómo se MARX Y LA TEORIA ECONOMICA ACTUAL te roblema y terminaremos sitúa el marxismo frente a ~s mtnetaria puede ser una sa­ mostrando que la propues a alíticos tanto de la ortodoxa lida exitosa a los proble~~s an como del marxismo tradicional. 1. MARXISMO y LA CIENCIA ECONOMICA. ne un trabajo de crítica de la Es evidente que Marx propo 'tud considerable. No es el economía política de una, magm nce de toda esta reflexión. momento de evaluar aqul el alca los temas de la coordi­ i nos atenemos a d De todos mo os, s . er crítico de la manera en nación mercantil, M,ar~ es e~ ~rr~e en su momento desarro­ que la ciencia economlca eXls en lIa el problema. Ricardo afirma que hablando del "valorde cambio" élapunta siempre al "precio natural" y que él aparta los accidentes de la competencia que él designa "como causas momentáneas y accidentales': Para dar más de consistencia y preciSión a sus leyes, la economía poIínea debe suponer la realidad como acci­ dental y la abstracción como real. Say subraya alrespecto que "el precío natural... parece quimérico': No hay sino precios co­ rrientes en economía política" (11, p.tOJ. Estas declaraciones tienden a mostrar que los precios del mercado son esenciales en cuanto el/os son el resultado normal de la acción del mercado y que el funcionamiento del mercado es la base de generación de los precios de equili­ brio. 1. Primero que todo, Marx aceptó que ese era el problema central: . 2.2 Las observaciones y criticas que Marx da a la teoría del valor de Ricardo. d este sistema residen precisa· La belleza y la grande::a ematerial y espiritual, en esta Marx se refirió a la teoría del valor de Ricardo tanto con mente en este metabOItSm~ te en forma independiente admiración como con crítica. En primer lugar le extendió Un conexión que se crea natura ~:; individuos, y que presupo­ reconocimiento: la teoría del valor de cambio de acuerdo al del saber y de la volu?ta<! de. su independencia recl­ ne precisamente su mdlferencla y trabajo es el fundamento de la ciencia económica. procas (p.89).' . ntó varias críticas a la teona 2. En segundo lugar, prese dividir en dos partes, geneclásica del mercado se pueden. eras se puede enumerar: rales y particulares. Entre las pnm 2.1 Crítica a la teoría de la gravl'taCI'ón de precios. . e refirió a la idea Smithiana de En pocas ocaslone~ Ma~x~. de manera muy somera y, la gravitación de prec~os y o ,~~o Por ejemplo, sobre la en verdad, sin intenCiones cn Icas. 't' idea en Ricardo, afirmó en un manuscn o. ----:-::-:-:;-:----- -ENSAYOS DE ECONOMíA ---L:]D-----­ º1u ent ;;1 funda'!1 r¡:mto de partida de la fisiologra del sil'!:. tema economlco ro s la t rmm Clon del va! r or !ti tiempo de trabajQ. De esto parte Ricardo, obligando a la ciencia a abandonar Su pacotilla anteriory a rendir cuentas de cómo y hasta qué punto las demás categonas desarrolla­ das... corresponden a este fundamento ... sobre el que des­ cansa la concatenación intema ..~ Tal es. en efecto, la gran i rt. ncia histÓrica de Ricardo ara la cien ¡a. (Teorías Sobre la plusvalía F. E. Tomo 11, p. 145, énfasis nuestro). e De acuerdo con esta Posición, una teoría del valor debe ser el fundamento de la teoría económica científica, la cual - - - - - - - - - - --C:JlD---~~ MARx Y LA rEORIA ECONÓMICA ACTUAL Ricardo afirma que hablando del "valor de cambio" él apunta siempre al "precio natural" y que él aparta los accidentes de la competencia que él designa "como causas momentáneas y accidentales". Para dar más de consistencia y precisión a sus leyes, la economía política debe suponer la realidad como acci­ dental y la abstracción como real. Say subraya al respecto que "el precio natural... parece quimérico". No hay sino precios co­ rrientes en economía política" (11, p.10,. Estas declaraciones tienden a mostrar que los precios del mercado son esenciales en cuanto ellos son el resultado normal de la acción del mercado y que el funcionamiento del mercado es la base de generación de los precios de equili­ brio. 2.2 Las observaciones y críticas que Marx da a la teoría del valor de Ricardo. Marx se refirió a la teoría del valor de Ricardo tanto con admiración como con crítica. En primer lugar le extendió un reconocimiento: la teoría del valor de cambio de acuerdo al trabajo es el fundamento de la ciencia económica. El fundamento. el punto de partida de la fisiología del sis­ tema económico burgués es la determinación del valor por el tiempo de trabajo. De esto parte Ricardo, obligando a la ciencia a abandonar su pacotilla anterior ya rendir cuentas de cómo y hasta qué punto las demás categorías desarrolla­ das... corresponden a este fundamento ... sobre el que des­ cansa la concatenación interna ... Tal es. en efecto. la gran importancia histórica de Ricardo para la ciencia. (Teorías sobre la plusvalía F.e E. Tomo 11, p.145, énfasis nuestro). De acuerdo con esta posición, una teoría del valor debe ser el fundamento de la teoría económica científica, la cual MARX Y LA rEORIA ECONÓMICA ACTUAL ,. debe también ser coherente con este punto de partida. Exis­ te una visión común de los grandes economistas: Smith, Ri­ cardo, Marx y los walrasianos. En segundo lugar, Marx menciona las insuficiencias del análisis del economista inglés. Ellas son tres: • No distinguir correctamente entre el trabajo concreto y el trabajo abstracto. se trata de la magnitud del valor" (Marx, Teorías de la Plusvalía, Tomo 11, p.144) Aquí vemos que Marx no está de acuerdo con un trata­ miento del dinero como algo exterior al precio porque hace pensar que el trabajo abstracto puede separarse de la forma monetaria. • La relación inicial de las mercancías con el dinero no es la relación entre mercancías ni la representación de un in­ tercambio. En lo que se refiere al valor en general la economía políti­ ca clásica en ningún lugar distingue explícitamente y con clara consciencia entre el trabajo, tal como se representa en el valor, y ese mismo trabajo, tal como se representa en el valor de uso de su producto. En realidad, utiliza esa distin­ ción de manera natural, ya que en un momento dado consi­ dera el trabajo desde el punto de vista cuantitativo, en otro cualitativamente. Pero no tiene idea de que la simple dife­ rencia cuantitativa de los trabajos presupone su unidad o igualdad cualitativa y por tanto, su reducción a trabajo abstractamente humano (El Capital, nota 31, p.97).6 En síntesis, Marx, a pesar de estar de acuerdo con la idea de que el precio y el intercambio se deben explicar a partir del vector de trabajos, acusa a Ricardo de no haber entendido: • La ausencia de la conexión inmanente entre valor y dine­ ro. • La distinción entre los trabajos privados y los trabajos so­ ciales Ricardo no entra a investigar la forma - el carácter de ese trabajo, la especial determinación del trabajo como creador de valor de cambio o como algo que se plasma en los valores de cambio. Esto hace que no comprenda la conexión entre este trabajo v el dinero, la necesidad que se manifieste como dinero. No comprende por tanto, en absoluto, la concatenación entre la determinación del va­ lor de cambio de las mercancías por el tiempo de trabajo y la necesidad de las mercancías de avanzar a la creación del dinero. De ahí su falsa teoría monetaria. Para él solo • La necesaria expresión del trabajo social en dinero. JI- ENSAYOS DE ECONOMIA .. Ricardo pasa por alto esta circunstancia: la necesidad de representar como trabajo social igual, es decir, como dinero, el trabajo contenido en ellas. (Teorías de la Historia de la plusvalía, tomo 11/, p 116, subrayados nuestros). • El estatuto especial del dinero respecto a las mercancías. Las críticas de Marx a la teoría del valor de Ricardo nos muestran hacia donde apunta su programa de investigación: una teoría del valor o de los precios que sea la representación de una socieda.d descentralizada (los agentes actúan separa­ dos de la colectividad), donde los individuos se relacionan por medio del dinero (y no de las cosas) y donde los resultados del proceso están por fuera del control inmediato de los sujetos. MARX Y LA TEORIA ECONOMICA ACTUAL se trata de la magnitud del valor" (Marx, Teorías de la Plusvalíª, Tomo 11, P.144) Aquí vemos que Marx no está de acuerdo con un trata­ miento del dinero como algo exterior al precio porque hace pensar que el trabajo abstracto puede separarse de la forma monetaria. • La relación inicial de las mercancías con el dinero no es la relación entre mercancías ni la representación de un in­ tercambio. Ricardo pasa por alto esta circunstancia: la necesidad de representar como trabajo social igual, es decir, como dinero, el trabajo contenido en ellas. (Teorías de la Historia de la plusvalía, tomo 1/1, p 116, subrayados nuestros). En síntesis, Marx, a pesar de estar de acuerdo con la idea de que el precio y el intercambio se deben explicar a partir del vector de trabajos, acusa a Ricardo de no haber entendido: • La distinción entre los trabajos privados y los trabajos so­ ciales • La necesaria expresión del trabajo social en dinero. • El estatuto especial del dinero respecto a las mercancías. Las críticas de Marx a la teoría del valor de Ricardo nos muestran hacia donde apunta su programa de investigación: una teoría del valor o de los precios que sea la representación de una sociedad descentralizada (los agentes actúan separa­ dos de la colectividad), donde los individuos se relacionan por medio del dinero (y no de las cosas) y donde los resultados del proceso están por fuera del control inmediato de los sujetos. MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL .,. En este sentido, es evidente que Marx comparte la gran problemática propuesta por los economistas desde Adam Smith: la economía como ciencia social debe comenzar por explicar el funcionamiento de una sociedad e,n la que,la ini­ ciativa y las acciones provienen de agentes privados sin una coordinación central. 11. BREVE RESEÑA DEL ESTADO ACTUAL DE LA TEORIA MARXISTA. Actualmente la teoría económica marxista no presenta una formulación única y más bien se debate en múltiples posibilidades. La causa principal de este resultado, además del avance de la teoría económica en este siglo, es el hecho de que Marx no logró ofrecer una teoría suficientemente or­ ganizada y coherente del valor y de los precios. Resuma­ mos las dificultades: 1. La teoría del valor trabajo se entendió como una teo­ ría que tomaba los elementos de la producció~ como ~ir­ cunstancias claves y determinantes y que deberla evolucIo­ nar a convertirse en una teoría de los precios de producción. La teoría de Marx se colocó, entonces, como un desarrollo en contra de la teoría del valor utilidad de los marginalistas del siglo XIX y no como una reflexión contra Ricardo. E~to hizo que la distancia con el autor de Principios se oscurecie­ ra y se crearan las condiciones para afirmar que la teoría de los precios de Marx ora era un paso previo a los precios de producción (la problemática de "la transformación de valo­ res en precios con tasa de beneficio igual) ora los valores o precios se revelaban como dos teorías sep~rables e .inde­ pendientes. 7 , En cualquiera de estas alternativas, ,las I~eas de Marx se convierten en una parte del enfoque ncardlano que determina desde la información. de la produ~ción ~os precios de equilibrio de las mercanclas. Ahora bien, SI la propuesta de Sraffa decantaba la discusión al ofrecer el modelo más coherente de precios de producción, este re­ sultado viene a darle razón a' Ricardo y no a Marx. 2. La Teoría del dinero va a olvidarse dado que se perci­ be que ella también se desarrolla separada de la del valor y que se inhabilita por sostener la tesis del dinero mercancía. 3. La teoría de la plusvalía va a sufrir del paulatino re­ pliegue del valor hacia la visión ricardiana. Steedman (1977) resume perfectamente esta evolución: A partir de las condiciones físicas de la producción y del salario real, podemos derivar los valores y la plusvalía mos­ trando como los va/ores de las mercancías y la fuerza de trabajo dependen sólo de las condiciones físicas de la pro­ ducción f. ..] También podemos derivar de la descripción físi­ ca de la economía una teoría coherente de las ganancias y de los precios. Pero a/ hacerlo así descubrimos que en ge­ neral, las ganancias y los precios no pueden derivarse de los esquemas de valor ordinarios f. ..] Así pues. no sólo 00­ demos construir la teoría de las ganancias y los "ricios a¡';­ dedor de los esquemas físicos. no de los esquemas de va­ lor. sino que nos vemos obligado a hacerlo [p. 49]. Por tal motivo la plusvalía marxista será vista como un caso particUlar y sin importancia real de la teoría general del excedente en donde la distribución de un sobreproducto físi­ co permite evaluar en precios relativos los distintos bienes que la componen y donde finalmente el trabajo no es una magnitud significativa. a Todas estos reformulaciones permitieron que El Capital sea visto tras los años 80 por la mayoría de comentaristas como un libro teóricamente superado en su pretensión de ENSAYOS DE ECONOMIA MARX Y LA TEORIA ECONOMICA ACTUAL propuesta de Sraffa decantaba la discusión al ofrecer el modelo más coherente de precios de producción, este re­ sultado viene a darle razón a Ricardo y no a Marx. 2. La Teoría del dinero va a olvidarse dado que se perci­ be que ella también se desarrolla separada de la del valor y que se inhabilita por sostener la tesis del dinero mercancía. 3. La teoría de la plusvalía va a sufrir del paulatino re­ pliegue del valor hacia la visión ricardiana. Steedman (1977) resume perfectamente esta evolución: A partir de las condiciones físicas de la producción y del salario real, podemos derivar los valores y la plusva/{a mos­ trando como los valores de las mercancías y la fuerza de trabajo dependen sólo de las condiciones físicas de la pro­ ducción f. ..JTambién podemos derivar de la descripción físi­ ca de la economía una teoría coherente de las ganancias y de los precios. Pero al hacerlo así descubrimos que en ge­ neral, las ganancias y los precios no pueden derivarse de los esquemas de valor ordinarios [ ...JAsl pues. no sólo po­ demos construir la teoría de las ganancias y los precios alre­ dedor de los esquemas físicos. no de los esquemas de va­ lor, sino que nos vemos obligado a hacerlo [p. 49J. Por tal motivo la plusvalía marxista será vista como un caso particular y sin importancia real de la teoría general del excedente en donde la distribución de un sobreproducto físi­ co permite evaluar en precios relativos los distintos bienes que la componen y donde finalmente el trabajo no es una magnitud significativa. 8 Todas estos reformulaciones permitieron que El Capital sea visto tras los años 80 por la mayoría de comentaristas como un libro teóricamente superado en su pretensión de MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL forjar una verdadera alternativa a los paradigma~ ortodoxos y que el marxismo paulatinamente fuese margmado de la discusión central de la ciencia económica. No es difícil notar que la evolución antes descrita se hace sin darle valor a las críticas mismas que Marx le hizo a Ri­ cardo, especialmente en la concepción de la forma moneta­ ria de las mercancías y la ausencia de la diferenciación en­ tre trabajo privado y trabajo social en la concepción del, in­ tercambio mercantil. Esto ocurre en paralelo a la paulatina puesta al día de la esterilidad explicativa del pensamient? neoclásico principalmente en lo que tiene que ver con el di­ nero, el ajuste y los intercambios9 . Esto muestra qu~ existe unas ideas originarias de Marx que se han deSCUidado y que apuntan a dar cuenta de algunos problemas gra.ves de la teoría de Ricardo y también de la actualmente dominante. En este orden de ideas, el rescate de esas ideas no sola­ mente es interesante para mostrar la complejidad e interés actual de las ideas económicas de Marx sino también que su rescate puede ofrecer pistas para la solución de los pro­ blemas sentidos en la teoría económica contemporánea. 111. IDEAS VALIOSAS PARA UNA RENOVACiÓN DEL MAR­ XISMO. Si el marxismo ha sido paulatinamente dominado por el ricardianismo, existe ideas que permiten su evolución por enfoques diferente. Veamos algunas: El dinero procede de una acción social de los individuos. ¡En su perplejidad --nuestros poseedores de mercancías piensan como Fausto! En el pr¡nc~Qio era la acción. De ahí que hayan actuado antes de haber pensado. Las leyes de la naturaleza inherente a las mercancías se confirman en el instinto natural de sus poseedores. Sólo pueden relacionar entre sí sus mercancías en cuanto valores, y por tanto tan sólo en cuanto mercancías, a(relaclonarlas antitéticamente con otra mercancía cualquiera que haga las veces de equi­ valente general. Pero sólo un acto social Duede convertir una mercancía determinada en equivalente general. Por eso la acción social de todas las demás mercancías aparta de las mismas una mercancía determinada. en la cual todas ellas representan sus valores. (. .. ) Es de este modo como se convierte en dinero. (ibíd p. 106). . Esto indica que el dinero no procede de las decisiones individuales sino que a los agentes se impone como una regla de juego. Esto permite pensar el dinero como una institución previa a los individuos productores, capitalistas y asalariados. 2. El intercambio es un proceso de sanción de los traba­ jos privados en trabajos sociales. Es la idea del salto mortal de las mercancías: El salto que el valor mercantil da desde el cuerpo de la mercancía al del oro [dinero], es el "salto mortale" de la mer­ cancía. Si fracasa, lo que se verá chasqueada (frustrada) no será la mercancía sino su poseedor. La división social del trabajo hace que el trabajo del poseedor sea tan unilateral como multilaterales sean sus necesidades. (.... ) La mercan­ cía es quizás el producto de una nueva modalidad de traba­ jo, la cual pretende satisfacer una necesidad recién surgida o crear, por su propia iniciativa, una nueva ... Hoy el produc­ to satisface una necesidad social. Tal vez mañana lo des­ place, total o parcialmente, un tipo similar de producto. Aun­ que el trabajo es también, como el de nuestro tejedor, un eslabón patentado de la división social de trabajo, ello en modo alguno basta para garantizar el valor de uso precisa- ENSAYOS DE ECONOMíA MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL instinto natural de sus poseedores. Sólo pueden relacionar entre sí sus mercancías en cuanto valores, y por tanto tan sólo en cuanto mercancías, al relacionarlas antitéticamente con otra mercancía cualquiera que haga las veces de equi­ valente general. Pero sólo un acto social puede convertir una mercancía determinada en equivalente general. Por eso la acción social de todas las demás mercancías aparta de las mismas una mercancía determinada. en la cual todas ellas representan sus valores. (. .. ) Es de este modo como se convierte en dinero. (ibíd p. 106). Esto indica que el dinero no procede de las decisiones individuales sino que a los agentes se impone como una regla de juego. Esto permite pensar el dinero como una institución prevía a los individuos productores, capitalistas y asalariados. 2. El intercambio es un proceso de sanción de los traba­ jos privados en trabajos sociales. Es la idea del salto mortal de las mercancías: El salto que el valor mercantil da desde el cuerpo de la mercancía al del oro [dinero], es el "salto mortale" de la mer­ cancía. Si fracasa, lo que se verá chasqueada (frustrada) no será la mercancía sino su poseedor. La división social del trabajo hace que el trabajo del poseedor sea tan unilateral como multilaterales sean sus necesidades. (.... ) La mercan­ cía es quizás el producto de una nueva modalidad de traba­ jo, la cual pretende satisfacer una necesidad recién surgida o crear, por su propia iniciativa, una nueva ... Hoy el produc­ to satisface una necesidad social. Tal vez mañana lo des­ place, total o parcialmente, un tipo similar de producto. Aun­ que el trabajo es también, como el de nuestro tejedor, un eslabón patentado de la división social de trabajo, ello en modo alguno basta para garantizar el valor de uso precisa- MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL ,. mente de sus 20 varas de lienzo. Si los tejedores compiten con él ya han saturado las necesidad social de lienzo --que como todo lo demás tiene su medida - el producto de nues­ tro amigo se volverá excesivo, superfluo y por tanto inútil (p.129) [En el intercambio] no se parte del trabajo de los indivi­ duos en calidad de trabajo comunitario, sino, a la inversa, de trabajos particulares de individuos privados, los cuales en el proceso de intercambio, y por supresión de su carácter ori­ ginario, se revelan como trabajo social general. De ahí que el trabajo social no sea una premisa acabada, sino un resul­ tado en devenir. Y de esta suerte surge una nueva dificul­ tad, la de que las mercancías, por una parte. deben entrar en el proceso de intercambio como tiempo de trabajo gene­ ral materializado. mientras que la otra. la materialización del tiempo de trabajo de los individuos en cuanto general, es. a su vez. sólo producto del proceso de intercambio. (Marx. 1980, p 29) 3. La diferenciación entre trabajo privado y trabajo so­ cial hace que la forma monetaria sea esencial en las relacio­ nes mercantiles. El trabajo es trabajo del individuo privado, representado en un determinado producto. Sin embargo en cuanto valor, el producto tiene que ser materialización del trabajo social y, como tal, directamente convertible de un valor de uso en cualquier otro. Por tanto, el trabajo privado debe represen­ tarse directamente como lo contrarío a él. (...) Solamente mediante su enajenación se representa realmente el trabajo individual como lo contrario de él. Pero la mercancía tiene que poseer esta expresión general antes de ser enajenada. Esta necesidad de que el trabajo individual se represente como trabajo general es la necesidad de representar la ENSAYOS DE ECONOMíA mercancía como dinero. Mientras este dinero sirve de medida y de expresión del valor de la mercancía en el precio, obtiene la mercancía ·esta representación. Sola­ mente por medio de la conversión real en dinero, por me­ dio de la venta, adquiere la mercancía esta su expresión adecuada en cuanto valor de cambio. La primera transmutación es un proceso meramente teórico, la se­ gunda es el proceso real. (P. 120) Son estas ideas las que separan efectivamente Marx de las ideas de Ricardo y pero que necesitan una formulación científica comparable a la que el ricardianismo logró de la idea de precios de producción y de la teoría del beneficio. Esta labor la han hecho Benetti y Cartelier en una serie de artículos que aquí resumimos IV. REFORMULACION "HETERODOXA" DE LA TEORíA MAR­ XISTA DEL INTERCAMBIO SIMPLE: EL MODELO DE BENETTI Y CARTELlER. C. Benetti y J. Cartelíer han propuesto un modelo que permita racionalizar estas ideas por medio de una teoría que acepte el dinero como elemento esencial para la socializa­ ción de los trabajos privados. Dado su distancia respecto a la versión ricardiana de Marx y las posiciones tradicionales de los marxistas, esta formulación se ha denominado "heterodoxa". Presentaremos los puntos esenciales de esta formulación 10 • 1. HIPÓTESIS GENERALES 1.1 Se considera una sociedad mercantil simple (no capi­ talista) compuesta de una pluralidad de productores de bie­ nes descentralizados, o sea, que deciden acciones econó­ micas con vista a participar en el mercado. Esta es la hipóte- MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL mercancía como dinero. Mientras este dinero sirve de medida y de expresión del valor de la mercancía en el precio, obtiene la mercancía esta representación. Sola­ mente por medio de la conversión real en dinero, por me­ dio de la venta, adquiere la mercancía esta su expresión adecuada en cuanto valor de cambio. La primera transmutación es un proceso meramente teórico, la se­ gunda es el proceso real. (P. 120) Son estas ideas las que separan efectivamente Marx de las ideas de Ricardo y pero que necesitan una formulación científica comparable a la que el ricardianismo logró de la idea de precios de producción y de la teoría del beneficio. Esta labor la han hecho Benetti y Cartelier en una serie de artículos que aquí resumimos IV. REFORMULACION "HETERODOXA" DE LA TEORíA MAR­ XISTA DEL INTERCAMBIO SIMPLE: EL MODELO DE BENETTI Y CARTELlER. C. Benetti y J. Cartelier han propuesto un modelo que permita racionalizar estas ideas por medio de una teoría que acepte el dinero como elemento esencial para la socializa­ ción de los trabajos privados. Dado su distancia respecto a la versión ricardiana de Marx y las posiciones tradicionales de los marxistas, esta formulación se ha denominado "heterodoxa". Presentaremos los puntos esenciales de esta formulación 10. 1. HIPÓTESIS GENERALES 1.1 Se considera una sociedad mercantil simple (no capi­ talista) compuesta de una pluralidad de productores de bie­ nes descentralizados, o sea, que deciden acciones econó­ micas con vista a participar en el mercado. Esta es la hipóte- MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL r sis que indica que la sociedad funciona a partir de una divi­ sión del trabajo descentralizada donde los efectos globales de las acciones individuales no pueden ser calculadas por los individuos. 1.2. El dinero es un lenguaje que se establece por medio de una relación social especial, una institución, que instituye al mismo tiempo una unidad de cuenta nominal y un siste­ ma de pagos que se presenta para todos los agentes como condición colectiva previa a la actividad comercial. La uni­ dad de cuenta puede estar instituida por una autoridad como una unidad físicamente definida (por ejemplo, una libra es­ terlina es un gramo de oro acuñado) o, simplemente, como dinero fiduciario (una libra esterlina es una libra esterlina). En esta forma se descarta que el dinero sea una cosa (o una mercancía) que tiene que poseer un precio positivo dado por una ley del valor para existir como un componente del sistema económico. En efecto, La aceptación del dinero no se rige por los mismos principios que explican la demanda de bienes. En un sistema donde el circulan­ te es oro, son las monedas de oro, y no el oro mismo. el medio de pago generalmente aceptado. Cuando la acuñación y la emisión no son libres esto plantea una gran diferencia. No es necesario que la unidad de cuenta sea físicamente definida. Un dólar es un dólar. La unidad de cuenta es un lenguaje. ellenauaie usado en el mercado. (B Y e, 1995B, subrayados nuestros). De esta manera no se confunde la naturaleza del dinero y los tipos de circulación monetaria (moneda metálica y mo­ neda fiduciaria apoyada en un sistema de bancos) usados en determinados contextos históricos. 1.3 El dinero no es solo unidad de cuenta sino también un medio de cambio Que los individuos utilizan o ponen en acción. Sin un medio de cambio en poder de los agentes mismos nadie podría realmente vender sus productos ni ENSAYOS DE ECONOMíA tampoco podría producirlos. Por este motivo, la posesión de mercancías no puede preceder la posesión de dinero pues es necesario que los agentes lo utilicen para produ­ cir. En resumen, los agentes productores deben concebir­ se como poseedores tanto de dinero como de mercan­ cías. En esta forma los autores rescatan la idea del dinero como esencialmente un medio de circulación y le agregan la idea marxista de los precios ideales de las mercan­ cías 11 El proceso de emisión es el proceso por medio del cual los agentes obtienen medios de pago de manera que pue­ dan actuar libremente en el mercado, por ejemplo, para producir bienes con la intención de venderlos (B y e, ibíd p.7). 1.4 Explicar el mercado implica mostrar la unidad entre producción y circulación. Es claro que si los individuos son productores privados, éstos deben comprar medios de producción y de consumo en el mercado (producidos por otros) y, también, vender sus propios productos (medios de producción y de consumo para otros). La producción no precede a la circulación. La pro­ ducción no es lógicamente anterior a la venta. La produc­ ción y el consumo son un proceso único. 2. DESCRIPCiÓN DEL PROCESO DE MERCADO. Con las anteriores premisas el proceso completo se des­ cribe reuniendo las siguientes fases: 2.1 Los sujetos productores privados se pueden definir frente al mercado como poseedores a.1 mismo tiempo de un bien y de una cantidad de dinero. Para lograrlo, el agente MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL tampoco podría producirlos. Por este motivo, la posesión de mercancías no puede preceder la posesión de dinero pues es necesario que los agentes lo utilicen para produ­ cir. En resumen, los agentes productores deben concebir­ se como poseedores tanto de dinero como de mercan­ ~ En esta forma los autores rescatan la idea del dinero como esencialmente un medio de circulación y le agregan la idea marxista de los precios ideales de las mercan­ cías 11 El proceso de emisión es el proceso por medio del cual los agentes obtienen medios de pago de manera que pue­ dan actuar libremente en el mercado, por ejemplo, para producir bienes con la intención de venderlos (B y C, ibíd p.?). 1.4 Explicar el mercado implica mostrar la unidad entre producción y circulación. Es claro que si los individuos son productores privados, éstos deben comprar medios de producción y de consumo en el mercado (producidos por otros) y, también, vender sus propios productos (medios de producción y de consumo para otros). La producción no precede a la circulación. La pro­ ducción no es lógicamente anterior a la venta. La produc­ ción y el consumo son un proceso único. 2. DESCRIPCiÓN DEL PROCESO DE MERCADO. Con las anteriores premisas el proceso completo se des­ cribe reuniendo las siguientes fases: 2.1 Los sujetos productores privados se pueden definir frente al mercado como poseedores al mismo tiempo de un bien y de una cantidad de dinero. Para lograrlo, el agente MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL autónomo decide una producción de acuerdo a sus cálculos personales respecto al precio eventual al cual puede vender las unidades producibles y la cantidad de ellas. Es este cál­ culo de producción lo que le implicará un gasto de dinero (compras) para obtener los insumas y los medios de consu­ mo necesarios. En este sentido, el gasto o circulación del dinero es la condición de la producción. Individuo El dinero procede del sistema monetario por medio de la 'financiación, de acuerdo a reglas supuestamente conocidas y válidas para todos los agentes, las evaluaciones de los proyectos de producción. Tal como lo afirma Benetti (1990a), H Los n productores evalúan en unidades de cuenta el producto de su actividad, o sea, como diría Marx, el trabajo privado efectuado. Obtenemos así algo comparable a lo que Marx llama el "precio ideal" {un precio monetario para la presentación social de las mercancías} puesto por los individuos. Estas evaluaciones son a la vez conmensurables e incompatibles. En razón de la [conmensurabilidad], pueden existir ahora relaciones entre pro­ ductores. Para analizarlas, sería necesario establecer las reglas relativas a la obtención de las unidades de cuenta o amonedación que... cambian según el régimen monetario considerado, ya sea moneda metálica o fiduciaria. 2.2 Al poseer dinero, los agentes simultáneamente pue­ den gastar dinero (comprar) y recibirlo (vender), es decir, existen transacciones que hacen circular el dinero y los bie­ nes aceptados por los consumidores. 2.3 Una vez el mercado se ha realizado, cada uno de los individuos puede representarse como una cuenta donde por un lado se registra sus gastos (el dinero que introdujo en el mercado) y las ventas (los ingresos que recibió de los otros). Por su parte, la economía entera se registra como un cua­ dro o matriz de pagos e ingresos monetarios. ENSAYOS DE ECONOMíA 1 1 2 H Gastos d 12 " 2 Ingresos c En ese cuadro, cada cifra tiene un sentido doble: las filas cont~mpla.n los diversos gastos de los individuos (que son; al mIsmo tiempo, entradas para los otros). Por su parte, las columnas contemplan entonces los ingresos de las ventas. En tal circunstancia, al conocerse las estructuras de gastos se conoce de inmediato la de los ingresos. 2.4. La cantidad de dinero recibida por cada uno de los productores es la señal económica de la evaluación social del trabajo privado ofrecida por cada uno de los producto­ res: El punto esencial es que, a través de relaciones recíprocas - que son simultáneamente de compra y de venta~se determina la evaluación s~cial de la actividad de cada productor, es decir, lo que Marx designa como cantidad de trabajo socialmente necesa­ riO. En efecto. ¿ qué es la evaluación social del trabaio de unpo­ ductor sino el conjunto de los gastos que los demás iteéiJin para comprar su producción? (jbid. p. 168) 2.5. Varios precios intervienen en esta descripción del mercado. En primer lugar, existe una recuperación de la idea de precio ideal o precio inicial de las mercancías , el cual es . antenor al mercado y que revela el cálculo individual de cada productor. La determinación de este precio ofrece varias MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL Individuo 1 1 d 11 2 H Gastos d1 2 H Ingresos c En ese cuadro, cada cifra tiene un sentido doble: las filas contemplan los diversos gastos de los individuos (que son; al mismo tiempo, entradas para los otros). Por su parte, las columnas contemplan entonces los ingresos de las ventas. En tal circunstancia, al conocerse las estructuras de gastos se conoce de inmediato la de los ingresos. 2.4. La cantidad de dinero recibida por cada uno de los productores es la señal económica de la evaluación social del trabajo privado ofrecida por cada uno de los producto­ res: El punto esencial es que, a través de relaciones recíprocas - que son simultáneamente de compra y de venta-se determina la evaluación social de la actividad de cada productor, es decir, lo que Marx designa como cantidad de trabajo socia/mente necesa­ rio..En efecto. ¿ qué es la evaluación social del trabaja de un pro­ ductor sino el conjunto de los gastos que los demás efectúan para comprar su producción? ljbid.p.168) 2.5. Varios precios intervienen en esta descripción del mercado. En primer lugar, existe una recuperación de la idea de precio ideal o precio inicial de las mercancías, el cual es anterior al mercado y que revela el cálculo individual de cada productor. La determinación de este precio ofrece varias MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL ------------........­ posibilidades, entre ellas, suponer que los agentes toman el precio de mercado de la vigencia anterior como guía para sus decisiones en el periodo presente. En segundo lugar. existe un precio que forma el mercado mismo y al cual se van a realizar las transacciones efectivas entre comprado­ res y vendedores, es decir, el precio de mercado. Por tal motivo es necesario incorporar un mecanismo que haga posible el cálculo de este precio de mercado en cada etapa. Un mecanismo de precio es un algoritmo que permite cal­ cular los precios y las asignaciones que resultan de un con­ junto de acciones individuales. En una economía competiti­ va estas acciones se refieren a las cantidades y no a los precios. Estos últimos se suponen están determinadas por la competencia anónima en el mercado (Benetti y Cartelier, 1995b, p 2). Como Marx no propuso nada en este tema, Benetti y Cartelier (1995) recuperan una idea de los primeros pensa­ dores del mercado en el siglo XVIII, es decir, de Richard Cantillo n y Adam Smith. En efecto, Para completar (la descripción del mercado) debemos especifi­ car a un mecanismo del precio de mercado. Podemos adoptar lo que puede llamarse la regla de Cantillon-Smith. Esta regla postu­ la que el precio de mercado se determina como la proporción entre una cantidad de dinero gastada en una mercancía y la can­ tidad producida y traída al mercado. (p. 10, subrayados nuestros)12. El seguir esta regla implica: los agentes colocan, por un lado su dinero sobre cada uno de los mercados donde de­ sean comprar (sea de medios de producción o de consu­ mo), yen segundo lugar, colocan los bienes que ofrecen en sus respectivos mercados. La regla de Cantillon Smith se reduce a aceptar el cociente entre una masa de dinero y a una cantidad de bienes. Este cociente es un precio indepen- diente de la voluntad de los individuos dado por "las fuerzas presentes en ~I ~:~:a~~:s~ q,ue es ~:~~s:~~~~ss~~~r~~r~~~~~~~C~~~~::~~~n ta~tos~~~~~ :entas y a los requerimientos técnicos) como ~~~~~~s~~~: orma en que el valor anticipado se gasta. za 2.6. La formación de un precio en el mercado no garanti­ Al :~t~' ~es~t~do sea u~ equilibrio mercantil del individuo13. . ano, a o el caracter descentralizado de la econo '. ­ mla, en general, los gastos de un individ uo no COinCiden con los ingresos recibidos Los indi 'd en situa ., d : . VI uos se pueden encontrar ~Ion e superavlt monetario (mayor dinero recibido ~C~b~~~I~~~Oe~~~tadO) o en estado deficitario (menor dinero de la acción del ~:~~~~astadO).' esto es, ~l primer resultado d,es~quilibrjos monetari~Se:n~!~g~~~~~!sb~een~~~ est~blecEer termlnos de Marx esto si nifica ., gen es. n Q evaluación privada de ;ada trateJ·~~Ox:~esl.~n monetariª r si'n ' -.-lnCI e con la exQajQ. m n na e la eval ación s cíal d ese mi mo r _ 2.7. Dado el carácter circulatorio del d' desequilibrios monetarios plantean la necesida,~~ro, e~tos ::c~~~~t~:O!:terior al mercado. Esto significa q~~~¿~:~ final de la activid~~:~ovneó~~ nOdP~ed~n ~~r las únicas ni el tes. Otras relaciones c~ e os IndiVIduos comercian­ glar los efectos de la;r~%:~:~~ssd;:en realizarse para arre­ más t a r d ' compra y venta. Como nanciera ~ ~~ ~~~~~~~~~ operaciones son de naturaleza fi­ 2.8. El proceso de formación de . rias estructuras de prec' d precIos podrá crear va­ tro en el mercado de c~~s b~ mercado a ~artir del encuen­ a len con los diversos flujos de ENSAYOS DE ECONOMiA MARX Y LA TEORIA ECON':)M/CA ACTUAL diente de la voluntad de los individuos, y es por eso que es dado por "las fuerzas presentes en el mercado". Así, con esta regla se logra que los precios dependan tanto de las decisiones sobre la producción (de acuerdo a las posibles ventas ya los requerimientos técnicos) como también de la forma en que el valor anticipado se gasta. 2.6. La formación de un precio en el mercado no garanti­ za que el resultado sea un equilibrio mercantil del individu0 13 . Al contrario, dado el carácter descentralizado de la econo­ mía, en general, los gastos de un individuo no coinciden con los ingresos recibidos. Los individuos se pueden encontrar en situación de superávit monetario (mayor dinero recibido que el dinero gastado) o en estado deficitario (menor dinero recibido que el dinero gastado), esto es, el primer resultado de la acción del mercado es asignar los bienes y establecer desequilibrios monetarios en las cuentas de los agentes. En términos de Marx esto significa que la expresión monetaria o evaluación privada de cada trabajo no coincide con la ex­ presión monetaria de la evaluación social de ese mismo tra­ bajo. 2.7. Dado el carácter circulatorio del dinero, estos desequilibrios monetarios plantean la necesidad de un ajus­ te monetario posterior al mercado. Esto significa que las re­ laciones de compra y venta no pueden ser las únicas ni el final de la actividad económica de los individuos comercian­ tes. Otras relaciones monetarias deben realizarse para arre­ glar los efectos de las relaciones de compra y venta. Como más tarde se verá, estas operaciones son de naturaleza fi­ nanciera y no comercial. 2.8. El proceso de formación de precios podrá crear va­ rias estructuras de precios de mercado a partir del encuen­ tro en el mercado de cada bien con los diversos flujos de ---~ MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL ro dinero que allí convergen con las cantidades del bien en cuestión. Unas veces se podrá tener agentes que no son capaces de reproducir su nivel inicial de producción o de consumo (sus ingresos no fueron suficientes para reprodu­ cir el proceso en la escala planeada) y otros que pueden tener la posibilidad de ir más allá aunque el mercado no fue capaz de satisfacerlos materialmente. Pero también, es po­ sible que por azar se creen precios que garanticen que no existan desajustes monetarios (los saldos finales son nulos) y que simultáneamente permitan la reproducción física de las condiciones de producción para cada artículo. Se encon­ traría aquí una situación donde la situación económica coin­ cide con la compatibilidad física, es decir, un requisito que la vieja teoría clásica exigía de los "precios naturales". Se tie­ ne entonces varios conjuntos posibles de precios de merca­ do donde algunas de ellas pueden ofrecer condiciones de reproducción material o monetaria especiales, que se pue­ den llamar, siguiendo la tradición, precios de equilibrio, aun­ que la mayoría va a presentar desajustes monetarios o físi­ cos. 2.9 El proceso económico puede ahora establecerse como la articulación de una serie de ciclos monetarios com­ puestos cada uno de ellos de la realización del mercado, la creación de los desajustes en la situación de los agentes, y por ende, el cambio de conducta en el periodo siguiente, que a su vez vuelve a crear una situación novedosa. 111. CONSECUENCIAS DEL MODELO DE BENETTI Y CARTELlER. Las consecuencias de este modelo son complejas por­ que a la vez se distingue tanto de las visiones ortodoxas del mercado y de los precios como de las interpretaciones tradi­ cionales sobre la teoría del valor de Marx. ENSAYOS DE ECONOMíA 1. PARTICULARIDADES RESPECTO A LAS VERSIONES ORTODOXAS DEL MERCADO. El modelo de Benetti y Cartelier se distancia de los mode­ los ortodoxos sobre los precios y el mercado en los siguien­ tes puntos esenciales: 1.1 Se tiene un modelo de formación de precios de natu­ raleza monetaria, es decir, ahora el valor es desde el princi­ pio una magnitud de dinero. El dinero es simultáneamente unidad de cuenta y medio de cambio. En este marco, los agentes no se definen como meros portadores de intereses (una racionalidad), de bienes o de trabajo, sino que ahora su definición económica incluye una relación con la institu­ ción monetaria. No existe la exterioridad del dinero respecto a la existencia ni al desarrollo del proceso dado que sin di­ nero no hay precios, no hay acciones mercantiles, no hay ingresos de los agentes. También, el dinero es irreductible a los individuos (no proviene de una elección) o a las mer­ cancías (no es un bien) pues se trata de una institución con unas reglas de emisión y de pago que, a pesar de que pue­ den ejercer un control (esto hace parte de la no - neutrali­ dad), sin embargo, no centraliza a los sujetos. 1.2 La realidad económica es, entonces, concebible de manera distinta a la tradicional, es decir, ahora es el conjun­ to de relaciones y mecanismos que conectan a los agentes de acuerdo a reglas monetarias dadas, y que permiten de­ terminar sus riquezas económicas como resultado de una red de flujos en dinero. Es de esta manera que queda exclui­ da una perspectiva que introduzca una dicotomía entre eco­ nomía real (relaciones regidas por el trabajo general o por la oferta y demanda) y economía monetaria, donde esta última sería exterior de esa realidad "más profunda". Aparece que el mercado no es en realidad un mecanismo de "circulación" MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL 1. PARTICULARIDADES RESPECTO A LAS VERSIONES ORTODOXAS DEL MERCADO. El modelo de Benetti y Cartelier se distancia de los mode­ los ortodoxos sobre los precios y el mercado en los siguien­ tes puntos esenciales: 1.1 Se tiene un modelo de formación de precios de natu­ raleza monetaria, es decir, ahora el valor es desde el princi­ pio una magnitud de dinero. El dinero es simultáneamente unidad de cuenta y medio de cambio. En este marco, los agentes no se definen como meros portadores de intereses (una racionalidad), de bienes o de trabajo, sino que ahora su definición económica incluye una relación con la institu­ ción monetaria. No existe la exterioridad del dinero respecto a la existencia ni al desarrollo del proceso dado que sin di­ nero no hay precios, no hay acciones mercantiles, no hay ingresos de los agentes. También, el dinero es irreductible a los individuos (no proviene de una elección) o a las mer­ cancías (no es un bien) pues se trata de una institución con unas reglas de emisión y de pago que, a pesar de que pue­ den ejercer un control (esto hace parte de la no - neutrali­ dad), sin embargo, no centraliza a los sujetos. 1.2 La realidad económica es, entonces, concebible de manera distinta a la tradicional, es decir, ahora es el conjun­ to de relaciones y mecanismos que conectan a los agentes de acuerdo a reglas monetarias dadas, y que permiten de­ terminar sus riquezas económicas como resultado de una red de flujos en dinero. Es de esta manera que queda exclui­ da una perspectiva que introduzca una dicotomía entre eco­ nomía real (relaciones regidas por el trabajo generala por la oferta y demanda) y economía monetaria, donde esta última sería exterior de esa realidad "más profunda", Aparece que el mercado no es en realidad un mecanismo de "circulación" MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL r de bienes pues ellos no describen un "círculo", sino una cir­ culación de dinero a través de la articulación de múltiples decisiones y relaciones entre los individuos (activos y pasi­ vos). Esta articulación permite la validación social de gastos por medio de la formación de precios, de los ingresos y de los mismos bienes 14 • 1.3 Dada la definición del dinero y del agente se deduce que el proceso comercial ya no puede seguirse represen­ tando como un simple conjunto de ventas y compras comer­ ciales, tal como proponía Marx, es decir, M - D - M, mercan­ cía -dinero- mercancía. Aquí el dinero no aparecía como aquel elemento que abre el proceso sino como algo secundario que sirve de puente entre las compras y las ventas. El ver­ dadero esquema del proceso es D - M - D, es decir, un es­ quema de relaciones monetarias mediadas por las ventas y compras de mercancías. De esta forma la teoría del valor de Marx no puede confundirse con alguna formulación "real" de los valores o precios. Por eso los autores concluyen: En contraste con M -D- M, D- M- D nos permite dar pleno signi­ ficado a la posición crítica que adopta Marx contra la econo­ mía ricardiana. Si se toma en serio, la cuestión de la forma del valor conduce a un análisis crítico de la teoría moderna del equilibrio general pero también sobre algunas de las pro­ posiciones hechas por el mismo Marx. El dinero no puede ser derivado del intercambio entre las mercancías. El dinero no tiene que ser "integrado" en una teoría del valor construi­ da por fuera de él. La teoría del valor sin dinero no puede determinar valores relevantes para una economía mercan­ til. Esto es cierto para el marxismo moderno como para los modelos de equilibrio general. El dinero es lógicamente an­ terior al valor.v no lo inverso. El dinero es otra expresión de la división mercantil del trabajo. Marx nos recuerda que la división mercantil del trabajo no es una hipótesis técnica. Introducir el dinero en la misma base que la división mer- cantil del trabajo es el enfoque relevante. Es también la úni­ ca manera de acogerse al principio de Marx respecto a la unidad de la producción y la o;rculación, y determinar los valores de acuerdo a ello. (B y e, 1995A, p 14) 1.4 Los precios relativos solo se pueden obtener a partir de los precios monetarios. En las tradicionales teorías del valor se determinaban unos precios relativos por medio de la utilización de un numerario o mercancía que hace el pa­ pel de mercancía patrón (a voluntad del analista) y, poste­ riormente, estudiaba las condiciones de su monetización. Ahora, los precios de las n mercancías se establecen en dinero y sólo con este resultado es posible saber los pre­ cios relativos entre los bienes de un sistema económico. Es importante notar entonces que la vieja discusión sobre el patrón de los precios y el numerario queda de inmediato eli­ minada, tal como Marx lo sugería, cuando se asume el di­ nero como normal elemento de expresión del valor 15 • 1.5 En lugar de que el mercado se represente como un inmenso trueque (donde el agente productor del bien A deba buscar con el productor de lo que él desea, es decir, donde el productor de cerveza debe ponerse en contacto con el productor de pan y posteriormente visitar el mercado donde le venden vestidos por el bien A) ahora el productor de cer­ veza solo debe buscar el dinero intermediario en el mercado de la cerveza sin tener que acudir a un sinnúmero de merca­ dos para realizar los eventuales trueques bien a bien. Es decir, mientras que una economía de trueque y de n bienes hace aparecer n(n-1 )/2 mercados, una economía monetaria de n bienes sólo posee n mercados. 16 1.6 El proceso mercantil no se entiende como el ajuste de la competencia sobre una situación de equilibrio econó­ mico fijada por fuera del proceso mismo. Ahora es el propio Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL ENSAYOS DE ECONOMíA cantil del trabajo es el enfoque relevante. Es también la úni­ ca manera de acogerse al principio de Marx respecto a la unidad de la producción y la circulación, y determinar los valores de acuerdo a ello. (B y e, 1995A, p 14) 1.4 Los precios relativos solo se pueden obtener a partir de los precios monetarios. En las tradicionales teorías del valor se determinaban unos precios relativos por medio de la utilización de un numerario o mercancía que hace el pa­ pel de mercancía patrón (a voluntad del analista) y, poste­ riormente, estudiaba las condiciones de su monetización. Ahora, los precios de las n mercancías se establecen en dinero y sólo con este resultado es posible saber los pre­ cios relativos entre los bienes de un sistema económico. Es importante notar entonces que la vieja discusión sobre el patrón de los precios y el numerario queda de inmediato eli­ minada, tal como Marx lo sugería, cuando se asume el di­ nero como normal elemento de expresión del valor 15 • 1.5 En lugar de que el mercado se represente como un inmenso trueque (donde el agente productor del bien A deba buscar con el productor de lo que él desea, es decir, donde el productor de cerveza debe ponerse en contacto con el productor de pan y posteriormente visitar el mercado donde le venden vestidos por el bien A) ahora el productor de cer­ veza solo debe buscar el dinero intermediario en el mercado de la cerveza sin tener que acudir a un sinnúmero de merca­ dos para realizar los eventuales trueques bien a bien. Es decir, mientras que una economía de trueque y de n bienes hace aparecer n(n-1 )/2 mercados, una economía monetaria de n bienes sólo posee n mercados. 16 1.6 El proceso mercantil no se entiende como el ajuste de la competencia sobre una situación de equilibrio econó­ mico fijada por fuera del proceso mismo. Ahora es el propio y LA TE ORlA ECONÓMICA ACTUAL , proceso el que crea la trayectoria responsable de su resulta­ do, bajo la restricción de que los agentes deben aparecer igualando sus gastos e ingresos a posteriori, o sea tras las desigualdades creadas en los intercambios. precios: la regla de Cantillon-Smith. Es la comunicación mercantil (monetaria) entre los agentes, con la mediación del mecanismo de precios, ló que forma las magnitudes económicas y no una entidad artificial. 1.7 Los individuos productores no están sometidos al equi­ librio general de sus cuentas (gastos e ingresos) para poder actuar porque el resultado no se puede separar de las ac­ ciones mercantiles. Esta cualidad es la manifestación de su libertad económica: los individuos actúan en sociedad sin estar controlados por una restricción de presupuesto rígida y previamente dada (lo que significaría que los individuos deberían solo actuar cuando la colectividad se los permite. La naturaleza de la sociedad comercial impide que la equi­ valencia entre ingresos y gastos sea el punto de partida y aunque sea efectivamente la situación final. Se logra así una característica importante como lo expresa Cartelier (1995): Para un economista formado en la teoría del valor, la carac­ terística más sorprendente de la organización monetaria de los mercados es probablemente la asociación de una inde­ pendencia en la realización de las transacciones en el mer­ cado y de una interdependencia de las transacciones de­ seadas por los individuos. Lo que se designa por esta ex­ presión es esencialmente la descentralización mercantil de los encuentros entre los individuales, asociados a la racionalidad de los cálculos individuales. Cada actor posee un plan de acción coherente en el conjunto de los mercados pero la ejecución de ese plan está dividido por la diversidad de ellos y el grado de éxito en esos diferentes espacios es más o menos aleatorio (p.243). 1.9 En este modelo, la manifestación económica de la autonomía o libertad de los agentes es la capacidad de anti­ cipar los gastos y obtener la financiación correspondiente. De esta manera, es el dinero el que permite solucionar las dos dificultades enunciadas por Marx en la Contribución. En primer lugar, los valores de uso portan el valor de cambio desde el principio aunque tampoco lo sean efectivamente; y en segundo lugar, los trabajos privados llegan al mercado como trabajos generales gracias a la forma monetaria, sin que realmente lo sean. 1.8 En lugar de la obligada e inaceptable presencia del subastador walrasiano (que en el modelo neoclásico permi­ te la comunicación entre los agentes y forma siempre el pre­ cio) ahora existe un mecanismo impersonal de formación de ENSAYOS DE ECONOMíA 1. 10 La actuación de los agentes no depende de una res­ tricción de presupuesto que el mercado les impone tal como la encontramos en el análisis del mercado neoclásico. Antes del mercado los sujetos no pueden conocer su restricción pues esta solo se conoce una vez el mercado se ha realiza­ do. Los individuos actúan a partir de sus cálculos sobre la posibilidad de su éxito comercial y no por una certeza dada por la información completa. 1.11 El gasto privado inicial, o sea, la evaluación privada de los productores de mercancías, no determina su verda­ dero poder comercial o poder de compra. Si esto ocurriera, volveríamos a encontrar el error de contenido en la idea del marxismo tradicional según la cual el trabajo privado es in­ mediatamente social. Lo que aparece ahora es que lo priva­ do puede expresarse socialmente en dinero, sin dejar de ser privado o concreto. En efecto, no es el dinero ni las dotacio­ nes los que crean el verdadero poder de compra sino las relaciones económicas entre los sujetos. Por eso, Benetti y MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL precios: la regla de Cantillon-Smith. Es la comunicación mercantil (monetaria) entre los agentes, con la mediación del mecanismo de precios, lo que forma las magnitudes económicas y no una entidad artificial. 1.9 En este modelo, la manifestación económica de la autonomía o libertad de los agentes es la capacidad de anti­ cipar los gastos y obtener la financiación correspondiente. De esta manera, es el dinero el que permite solucionar las dos dificultades enunciadas por Marx en la Contribución. En primer lugar, los valores de uso portan el valor de cambio desde el principio aunque tampoco lo sean efectivamente; y en segundo lugar, los trabajos privados llegan al mercado como trabajos generales gracias a la forma monetaria, sin que realmente lo sean. 1. 10 La actuación de los agentes no depende de una res­ tricción de presupuesto que el mercado les impone tal como la encontramos en el análisis del mercado neoclásico. Antes del mercado los sujetos no pueden conocer su restricción pues esta solo se conoce una vez el mercado se ha realiza­ do. Los individuos actúan a partir de sus cálculos sobre la posibilidad de su éxito comercial y no por una certeza dada por la información completa. 1.11 El gasto privado inicial, o sea, la evaluación privada de los productores de mercancías, no determina su verda­ dero poder comercial o poder de compra. Si esto ocurriera, volveríamos a encontrar el error de contenido en la idea del marxismo tradicional según la cual el trabajo privado es in­ mediatamente social. Lo que aparece ahora es que lo priva­ do puede expresarse socialmente en dinero, sin dejar de ser privado o concreto. En efecto, no es el dinero ni las dotacio­ nes los Que crean el verdadero poder de compra sino las relaciones económicas entre los sujetos. Por eso, Benetti y MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL Cartelier lo enfatizan: El valor de las mercancías sólo existe como una magnitud monetaria resultante de la red completa de circulación (p.14). No es, entonces, la relación con una cosa (la posesión o la producción de bienes) lo que permite explicar el poder económico del agente como lo pretende el pensamiento económico ortodoxo desde Adam Smith, sino que, por el contrario, ese poder se deriva de dos factores: 1) La solvencia monetaria del individuo (de acuerdo a las re­ gias de emisión vigentes) con lo cual emprende una activi­ dad, una producción, por ejemplo), y 2) el balance final re­ sultante de la red de relaciones económicas que ejecute, las que a su vez dependen del gasto o solvencia de los otros sujetos. Lo anterior indica que es necesario definir los suje­ tos inicialmente en relación con el dinero. 1.12 En el mercado el gasto privado debe ser sancionado por los otros sujetos por medio de la respuesta económica (las compras) que se le otorgue a su actividad productiva. El mercado no es, ni un sistema de gravitación respecto a una situación fijada anteriormente (visión clásica), ni un sistema de coordinación conducida por un subastador (visión neoclásica). En realidad, se trata de un mecanismo de va­ lidación (o negación) social de las actividades privadas por medio del sistema de pagos. Hemos visto que esta validación se opera por medio de la formación de los precios de mercado y la subsiguiente creación de los balances mo­ netarios de los agentes. 1.13 Como es necesario la existencia de mecanismos para subsanar los saldos en déficit o en superávit que registran los agentes, se hace evidente que una sociedad monetaria simple no es sólo una red de intercambios comerciales sino que debe poseer la oportunidad de unas relaciones espe­ ciales adicionales. 17 2. PARTICULARIDADES RESPECTO A LAS INTERPRETA­ CIONES TRADICIONALES DELA TEORIA DEL VALOR DE MARX. El marxismo tradicional en su mayoría asume un enfo­ que sobre el valor y el dinero diferente al propuesto en la formulación heterodoxa. Los puntos siguientes muestran las grandes divergencias: 2. 1 Es ahora imposible separar la determinación del va­ lor del dinero y del mercado, tal como ha sido la línea de interpretación tradicional de la teoría del valor de Marx. Pre­ cisamente, el hecho de plantear que las cantidades de trabajo socialmente necesario dependen del mercado hace imposible asimilar la teoría del valor de Marx a un caso de la teoría ricardiana. En efecto, Senetti y Cartelier (1995A) en contra de las interpretaciones ricardianas de Marx, son cla­ ros: Al asumir t (el vector de cantidades de trabajo) como dado desde afuera, como es tradicional hacerlo por los mar­ xistas, equivale a afirmar que t es independiente de q (el vector de las cantidades producidas). Así la teoría marxista del valor se convierte en un caso especial de la teoría ricardiana de los precios (como Samuelson lo estableció hace algunas décadas). En realidad, el vector de valores netos sólo puede encontrarse en el mercado (p 14). 2.2 La producción sin mercado no tiene sentido en esta nueva formulación, y por lo tanto, es posible denominar mag­ nitud del trabajo general al vector de la evaluación social de las actividades privadas de acuerdo al dinero recibido en las ventas. Recordemos que el papel que se le quería asignar al concepto de trabajo general era el de ser la magnitud que explique el poder de compra (o de intervención en los mercados), es decir, el mismo que ahora posee la magnitud monetaria final, o sea, la riqueza económica de los indivi- ENSAYOS DE ECONOMíA MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA AC ruAL 2. PARTICULARIDADES RESPECTO A LAS INTERPRETA­ CIONES TRADICIONALES DE LA TEORIA DEL VALOR DE MARX. El marxismo tradicional en su mayoría asume un enfo­ que sobre el valor y el dinero diferente al propuesto en la formulación heterodoxa. Los puntos siguientes muestran las grandes divergencias: 2. 1 Es ahora imposible separar la determinación del va­ lor del dinero y del mercado, tal como ha sido la línea de interpretación tradicional de la teoría del valor de Marx. Pre­ cisamente, el hecho de plantear que las cantidades de trabajo socialmente necesario dependen del mercado hace imposible asimilar la teoría del valor de Marx a un caso de la teoría ricardiana. En efecto, Benetti y Cartelier (1995A) en contra de las interpretaciones ricardianas de Marx, son cla­ ros: Al asumir t (el vector de cantidades de trabajo) como dado desde afuera, como es tradicional hacerlo por los mar­ xistas, equivale a afirmar que t es independiente de q (el vector de las cantidades producidas). Así la teoría marxista del valor se convierte en un caso especial de la teoría ricardiana de los precios (como Samuelson lo estableció hace algunas décadas). En realidad, el vector de valores netos sólo puede encontrarse en el mercado (p 14). 2.2 La producción sin mercado no tiene sentido en esta nueva formulación, y por lo tanto, es posible denominar mag­ nitud del trabajo general al vector de la evaluación social de las actividades privadas de acuerdo al dinero recibido en las ventas. Recordemos que el papel que se le quería asignar al concepto de trabajo general era el de ser la magnitud que explique el poder de compra (o de intervención en los mercados), es decir, el mismo que ahora posee la magnitud monetaria final, o sea, la riqueza económica de los indivi­ tJARX y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL duos surgida del balance monetario logrado en las relacio­ nes de intercambio. Esto viene a confirmar lo que en el 111 tomo de El Capital leemos: Para que cada mercancía se venda a su valor de mercado, es decir, en relación con el trabajo socialmente necesario contenido en ella, la cantidad global de trabajo social que se emplea para la masa gl?bal de ese tipo de mercancía, debe corresponder a la cantidad de las necesidades sociales, es decir a las necesidades so­ ciales solventes. (111, p.243). De esta manera encontramos que el proceso social "a espaldas de los productores" que crea el trabajo homogéneo es el conjunto de las relaciones de intercambio y que ellas son, entonces, las verdaderas generadoras del valor atribuido a los individuos, tal como Marx sugería que el trabajo abstracto (la "sustancia" del va­ lor) se generaba por medio del intercambio mism0 18 • 2.3 Marx insistió frecuentemente que la equivalencia de valores era característica del intercambio. Tal característica ahora no se cumple a menos de entenderla en el sentido de que es propio de la sociedad mercantil la regla de la equiva­ lencia monetaria de los agentes en su posición final, pero sabiendo que ella no surge directamente de la relación de intercambio sino del ajuste posterior de la situación de défi­ cit o de superávit creada por el mercado. 2.4 "La reducción" o conversión del trabajo privado a tra­ bajo social" puede interpretarse ahora como el proceso de conciliación entre la solvencia inicial para efectuar los gas­ tos (o el precio ideal) y el reconocimiento monetario hecho efectivo por los compradores concretizada en la formación del precio de mercado. Se tiene aquí la formulación moneta­ ria de aquello que Marx designaba como "salto mortal" de la mercancía que ahora se describe como el paso de la eva­ luación privada a la evaluación social, magnitudes que por efecto de la descentralización son normalmente diferentes. 2.5 Esta teorí~ de la "circulación mercantil simple" permi­ te ~er que es el. dinero lo que ~<?nstituye la verdadera y única unidad o magnitud económica del sistema mercantil. Los tra­ ?~j~s privados permiten plantear los avances monetarios Inlclale~ ~y de esta manera la producción tiene un papel en la creaClon del valor) y así el trabajo general resulta ser una realidad imposible de pensar por fuera del dinero pues son los saldos monetarios finales las que socializan o riiegan las actividades privadas 19 • . yemos, entonces, que con base a esta nueva interpreta­ Clon, las preguntas que Marx quiso contestar utilizando una ambigua idea trabajo incorporado y de dinero mercancía pueden obtener respuestas más adecuadas si se utiliza u~ enfoque cuyo punto de partida es la institución monetaria , ' se Incorpora un mecanismo de formación de precios de mercado y de aj~ste de los saldos monetarios de los agen­ t~~. Una prue?a ,Importante de esta eficacia es la incorpora­ clon en esta optlca de la teoría del plusvalor y por ende del proceso capitalista. Los lectores pueden encontrar esta formulación en Cartelier (1991) o Cataño (1994). REFERENCIAS Arrow. ~eneth J y Hahn F~H,(1977). Análisis general competitivo, Fondo de Cultura Económica, PrefacIo y CapItulo 1. Introducclon H,stórica". Benetti, C~,rlo: "Economía monetaria economía de trueque: la cuestión de la unidad de cuenta comun . Lecturas de economía, U. de A Enero abri! 1990, No 31 ------------ Moneda y teoría del valor, MéxlL'o F. C. E.1990 Benetti, ?arlo (1997) El método normativo de la teoría económica positiva. Cuadernos de eco­ nomla, No 26, JunIo de 1977 Benettí, Cario y Cartelier, ~,ean (1995A) "L' óconomie comme sClence: la permanence d'une convlctlOI1 mal partagee en Carteli8r y O'Aulume ( Eds) , Beneltí, Carla y Cartelíer, Jean. (1980) Marchands, salariat et capitalistas. Maspero. París. 1980. ENSAYOS DE ECONOMíA MAflX y L" rEORIA ECONÓMIC" ACTUAL 2.5 Esta teoría de la "circulación mercantil simple" permi­ te ver que es el dinero lo que constituye la verdadera y única unidad o magnitud económica del sistema mercantil. Los tra­ bajos privados permiten plantear los avances monetarios iniciales (y de esta manera la producción tiene un papel en la creación del valor) y así el trabajo general resulta ser una realidad imposible de pensar por fuera del dinero pues son los saldos monetarios finales las que socializan o niegan las actividades privadas 19 . Vemos, entonces, que con base a esta nueva interpreta­ ción, las preguntas que Marx quiso contestar utilizando una ambigua idea trabajo incorporado y de dinero mercancía, pueden obtener respuestas más adecuadas si se utiliza un enfoque cuyo punto de partida es la institución monetaria, se incorpora un mecanismo de formación de precios de mercado y de ajuste de los saldos monetarios de los agen­ tes. Una prueba importante de esta eficacia es la incorpora­ ción en esta óptica de la teoría del plusvalor y por ende del proceso capitalista. Los lectores pueden encontrar esta formulación en Cartelier (1991) o Cataño (1994). REFERENCIAS Arrow, Kenettl J y Hahn F.H.(1977), Análísis general competitivo, Fondo de Cultura Económica. Prefacio y Capítulo 1."lntroducción Histórica". Benetti, Carla: "Economía monetaria .. economía de trueque: la cuestión de la unidad de cuenta común". Lecturas de econorl1ía, U. de A. Enero· abril 1990, No 31. -.•-.------- Moneda y leoría del valor, México F. C. E.1990 Benelti, Cario (1997) El método normativo de la teoria económica positiva, Cuadernos de eco­ nomía, No 26, junio de 1977 Benetti, Carla y Cartelier, Jean (1995A) "L' éconornie comme science: la permanence d'une convíction mal partagée" en Cartelier y D'Autume ( Eds) . Benettí, Carla y Cartelíer, Jean. (1980) Marchands, salarial et capitalistes, Maspero, París, 1980. MARX Y LA TE ORlA ECON6MICA ACTUAL . theory "L Benettl,. Cario y e,arte l'ler, Jean . (1995B) "Money and pnce , ecturas de Economía ­ Medellín, Julio No 44 NOTAS Money, Form and determination of value, Ponencia en el Benettl,. Cario y Carte l'ler, Jean. (1995A) Congreso internacional de Bologna, 1995 " economlqu . e" , Cartelier, Jean, (1982) "Pour une approche théorique en histoire de la pensee Nice policopiado. a~oS~~PluS value: a suggested reformulation" Cartelier: Jean Marx's theory of value, exchange (1991) Cambridge Journal of economlcs 1991, . . ------------------(1995) Le mode d'accord marchand: monnaie ;ersus equilibre. en Jacob y Venn, L 'inscrption sociale du marché L 'Harmattan, Pans, 199 Véase una exposición clara en Lozano, Monsalve, Villa (1997) 2 Sobre este método véase Benetti (1977). 3 Véase un resumen de estas críticas en Cataño (1997)) 4 También: [En la sociedad del intercambio} los individuos producen en y para la sociedad, como seres sociales, pero esto a la vez se presenta como mero medio de objetivar su indivi­ dualidad. (p. 171). 5 Cataño, José Félix (1995). Reformulación clásica o monetaria. Cuadernos de Economía, No 23. Comentarios . . o e;téril? . . Félix (1997). El modelo de equilibrio general:. ¿estatlco y Villa. Cuadernos de Economla No 26 199 . Cat~ñoLOZ~~~, Monsalve J y D' autume ' R bert (1995) "Les fondaments de I'é conoml'e" en Cartelier . Clower, Robert y Howltt: deVlen o, t -e Ile 1 (Eds). ), L économle une science dure ? Economica, Pans También: Ricardo hace abstracción de lo que considera accidental. Otra cosa es exponer el proceso real en el que las dos cosas -lo que él llama accidental, pero que es algo constante y real, y Su ley, la relación promedio - aparecen igualmente como esenciales (Elementos T 111, P 47). 6 También: En Ricardo encontramos la confusión entre ellabour que se presenta en el valor de 123uso y el representado en el valor de cambio. (Marx, Teorías de la Plusva"ª, Tomo 1/1, p, 7 Véase Dumenil y Levy (1993) o Garegnani (1983). Dumem'1 G . y D Levy . The economlcs of the profit rate Edward Elgar London 1993. . . . nt de /'ideologie économlque, Dumont l.ouis (1977) Hamo Aequalis génese et epanoUlsseme Editions Gallimard . . I economists and Marx, Diccio­ Garegnani, Pierangelo. Distrlbution and value In the classlca nario Palgrave. . rt (1977) , Las pasiones y los intereses, F.C,E Albe, Hlrschman ,. .' conomía política" en Elementos fundamenta· Marx, Karl. (1971). "Introducclon a.la cr;t;ca d(~~~r:dOr) 1857.1858, Ed Siglo XXI, México. les de la crítica de la economla po I Ica , . de la economla . poiítlca, Siglo XXI, México. Marx, Kar1.1980. ContribucIón a la cntlca Marx Kar/. (1980) Teorías sobre la plusvalía F.C E. Tomo /l. Rossanvallon, P'lerre (1979), El capitalisme utopique, Editions du Seuil, París. . por med'o I de mercancías Oikos, Barcelona. Sraffa, Pie ro. ( 1966), Producción e mercanclas I (1977) Marx after Sraffa NLB Londres. (Edición española: Marx Sraffa y el Steedman, an . C E Mé 'co 1985) problema de la transformacion ,F. .., XI , Lozano, Monsalve y V I'IIa y (1997) . El modelo Arrow- Debreu es un modelo esta'1'ICO Cuadernos de economía, semestre, No 26. 8 Ver Cataño (1995). 9 Véase Clower Howit (1995) 10 La formulación matemática se encuentra en Benelli y Cartelier (1995) 11 La cita que apoya su pOSición es la siguiente: El dinero hace circular sólo mercancías que idealmente, no sólo en la mente de los individuos sino en la representación de la sociedad (e inmediatamente de las partes intervinientes en el proceso de compra y venta), estan vª transformadas en dinero, (Elementos, p.120, subrayados nuestros). 12 Cantillo n escribe en 1733 (edición española de 1950, p. 19): Los precios van fijándose en el mercado conforme a la proporción de los artículos que se ofrecen en venta y el dinero dis. puestos a comprarlos. Smith por su parte en 1776 (ed. Española 1988) plantea también: El precio de mercado se regula por la proporción entre la cantidad que se lleva al mercado y la demanda de aquellos que estan dispuestos a pagar el precio natural de la mercancía ... (p. 140) 13 Recuérdese que en la teoría neoclásica el desequilibrio es propiedad exclusiva de los merca­ dos y siempre los individuos están en equilibrio: sus gastos o restricciones de presupuesto son siempre iguales a sus compras. 14 En esta representación-dice Cartelier (1994), distanciándose de las explicaciones tradiciona. les del intercambio, que "no es en el espacio de los bienes (la "naturaleza") donde se inscriba el mercado. En realidad, podríamos pensar todo lo contrario: es el espacio de los bienes lo que es resultado del acuerdo mercantil cuya forma monetaria es la expresión de lo que Smith o Marx designaban como división mercantil del trabajo, Es como magnitud monetaria que se determina la riqueza de los individuos ... Los valores de uso, una vez contados socialmente el dinero, dependen de una actividad privada, sustraída a las relaciones de mercado". por (p.246). 15 Recordemos que frente a Ricardo Marx planteaba: Este apartado VI (del capítulo I de Ponci. pios) sobre una medida invariable del valor trata de la medida de los valores, pero sin que diga nada importante, No se comprende, ni siquiera se plantea en cuanto problema, la ca. - --.------.- ----- --------c:i1S -!------·-- ----._.__... _-­ ENSAYOS DE ECONOMiA MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL NOTAS Véase una exposición clara en Lozano. Monsalve. Villa (1997) 2 Sobre este método véase Benetti (1977). 3 Véase un resumen de estas críticas en Cataño (1997)) 4 También: [En la sociedad del intercambio] los individuos producen en y para la sociedad. como seres sociales, pero esto a la vez se presenta como mero medio de objetivar su indivi­ dualidad. (p. 171). 5 También: Ricardo hace abstracción de lo que considera accidental. Otra cosa es exponer el proceso real en el que las dos cosas lo que él llama accidental, pero que es algo constante y real, y su ley, la relación promedio aparecen igualmente como esenciales (Elementos T 111, P 47). 6 También: En Ricardo encontramos la confusión entre ellabour que se presenta en el valor de uso y el representado en el valor de cambio. (Marx, Teorías de la Plusvalía, Tomo 111. p. 123 7 Véase Dumeníl y Levy (1993) o Garegnani (1983). 8 Ver Cataño (1995). 9 Véase Clower Howít (1995) 10 La formulación matemática se encuentra en Benetti y Cartelier (1995) 11 La cita que apoya su posición es la siguiente: El dinero hace circular sólo mercancías que idealmente, no sólo en lél mente de los individuos sino en la representación de la sociedad (e inmediatamente de las partes intervmientes en el proceso de compra y venta), están ya transformadas en dinero. (Elementos. p.120. subrayados nuestros). 12 Cantillon escribe en 1733 (edición española de 1950, p. 19): Los precios van fijándose en el mercado conforme a la proporción de los artículos que se ofrecen en venta y el dinero dis­ puestos a comprarlos. Smith por su parte en 1776 (ed. Española 1988) plantea también: El precio de mercado se regula por la proporción entre la canfldad que se lleva al mercado y la demanda de aquellos que están dispuestos a pagar el precio natural de la mercancía ... (p. 140) 13 Recuérdese que en la teoría neoclásica el desequilibrio es propiedad exclusiva de los merca­ dos y siempre los individuos están en equilibrio: sus gastos o restricciones de presupuesto son siempre iguales a sus compras. 14 En esta representación-dice Cartelier (1994). distanciándose de las explicaciones tradiciona­ les del intercambio, que "no es en el espacio de los bienes (la "naturaleza") donde se inscriba el mercado. En realidad, podríamos pensar todo lo contrario: es el espacio de los bienes lo que es resultado del acuerdo mercantil cuya forma monetaria es la expresión de lo que Smith o Marx designaban como división mercantil del trabajo. Es como magnitud monetaria que se determina la riqueza de los individuos... Los valores de uso, una vez contados socialmente por el dinero, dependen de una actividad privada, sustraída a las relaciones de mercado". (p.246). 15 Recordemos que frente a Ricardo Marx planteaba: Este apartado VI (del capítulo 1 de Princi­ pios) sobre una medida invariable del valor trata de la medida de los valores, pero sin que diga nada importante. No se comprende. ni siquiera se plantea en cuanto problema, la co- MARX Y LA TEORIA ECONÓMICA ACTUAL nexión entre el valor, su medida inmanente por el tiempo de trabajo .Y la necesidad de la medida externa de los valores de la mercancía. (Historia CritIca T "p. 180) 16 Esto es algo que el propiO Marx veía claro: La circulación mer~antil dífíere no sólo form~' :5i~) esencialmente, del intercambio directo de productos. [.,.]. El ,eJedor, no cabe duda ha ca, biado, el lienzo por la Biblia, la mercancía propia por la alena. Poro este rr~omento so~~~! real para él, El difusol de Bibltas, más aficionado Al calor que al (rlO, no pensL en que tro L su Biblia Dar el líe; IZO, tal como el tejedor nada sospecha de qUé! troco su Ilenzc por trl?r~ent: : do B. <;'( Istl'tllye <"¡ la mercanc/a de' A" oero A y R. no IntercambIan ill9.lQ[QJ&L___ . • r 3"a mercanela ' ,,' s Por un lado se advierte aquí, como el mfercamhlO de mercanClélS a r, _ . sus men..anc;la ... . d t P ct a parte se las barreras individuah's V locales del intercambio dIrecto de pro uc os.... or ) r .' ; I desenvuelve toda una sene de vlnCUlaClolws SOCIales ce mdole natural, no Silletas al (.ont o de las pelsonas aC/lJantes.(p./36 subrayados de Marx) ALGUNOS ASPECTOS DE LA . VIDA Y. OBRA DE JOHN MAYNARD KEYNES "~ ' Ramón Alonso Berrío Cárdenas' 17 En un modelo de economía sin capital, corno es el tratado aquí, ,estas relaciones son ~n~ consecuencia lógica nero no S8 pueden llenar de contmlldos emplncos. En un modelo cadPI , .• r " nec. os"ma entre mercado_ y los merca os , !alista este es el espacio para explicar 1 a conexlon ¡Inacieros. 18 Marx confirma esta posición cuando declara en el capítulo 111 de El Capital: Si el estómago del mercado no puede absorber la canrldad total del lier1Zl~ al precIO normal de 2 chelmes po: vara, ello demuestra que se consumió, [JAjO la forma de la, rabncaclOn ~:"Ienzo, una partE, excesivamento grande del tiempo de trabalO soclol en su conjunto, (p, 31) 19 L~ IJnica teoria del valer-trabalo es, entonces, la formulada flor Ricardo aplicando el senti~o cantidades de trabajo asalariado Incorporadas en la producclon. que es a teoría ha sido superada por la tecrla sraffiana de los precIos de producclon. d~ Ho~. ~abernos La presente conferencia fue dictada durante el ciclo "Pensadores del Fin del Milenio-Economistas", diri­ gida a un amplio público universitario con el ánimo de difundir aspectos de la vida y obra de estos perso­ najes, más que con el áni­ mo de profundizar en ésta. Hablar de un gran hom­ bre, de su obra, y de su épo­ ca, como lo es la de J. M. Keynes en un espacio de tiempo tan reducido, es ta­ rea ardua que exige elegir con sumo cuidado los as­ pectos biográficos, históri­ cos y teóricos del autor. Ese es el intento que me propon­ go en esta charla. El éxito, si lo hubiere, de este traba­ jo va dedicado a mis estu­ diantes de primer semestre del pregrado de Economía de esta Universidad, a quie­ nes se debe el esfuerzo he­ cho por difundir la vida y obra de Keynes. El tiempo en el que nace, se forma, y hace sus prime­ ros aportes J. M. Keynes es el final de la llamada Epoca Victoriana que está tatuada Profesor Departamento de Economía, Universidad Nacional, Sede Medellín .ENSAYOS DE ECONOMiA -------r~1~Ü~ J----------- -. --.-----~- -·-------------c::JiI=t---- - ----- ------ - ___.__ ASPECTOS DE LA VIDI\ y OBRA DE KEYNES