MALAS HIERBAS La importancia de las malas hierbas en el cultivo de la remolacha azucarera es primordial tanto en el aspecto técnico como en el económico; técnicamente por la dificultad de controlar las malas hierbas, y económicamente por la repercusión en los costes de producción y en el producto bruto final, bien sea utilizando la escarda manual, mecánica o la aplicación de herbicidas. A continuación citaremos algunos herbicidas empleados en los cultivos de remolacha azucarera y sus características más acentuadas: - Cloridazona: es un herbicida que actúa tanto por vía foliar como radicular y se aplica tanto en preemergencia como post-emergencia. Se incorpora al suelo mediante riego y controla las siguientes malas hierbas: · Amaranthus retroflexus. · Capsella bursapastoris. · Chenopodium album. · Lanium sp. · Spergula arvensis. · Urtica urens. · Atriplex patula. · Poa annua · Poa pratensis - Fenmedifan: se debe aplicar cuando el suelo se encuentra en tempero, pues favorece la absorción de la planta. No tiene efecto residual y es eficaz contra malas hierbas de hoja ancha compuesta y anuales. - Etofumesato: este herbicida es absorbido por las yemas de las plantas nada más germinar éstas. Se aplica en el suelo húmedo y es eficaz contra: · Amaranthus sp. · Avena sp. · Polygonum aviculare. - Lenacilo: se incorpora mediante una labor con riego y no tiene acción de contacto y es eficaz contra: · Anagallis arvensis. · Anthemis sp. · Chenopodium album. · Malva silvestris. · Solanum nigrum. · Stellaria media. - Metacloro:este herbicida inhibe la germinación de las plántulas al ser captadas por ellas y controla las siguientes especies de hoja ancha y estrecha: · Amaranthus. · Capsella. · Fumarian. · Matricaria.