INVESTIGACIÓN JURÍDICA SOBRE LA CONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 255 DEL CÓDIGO CIVIL Mg. Sergio Henríquez Galindo, Coordinador Equipo de investigación de Puentes Consultores para este documento: Estudiante de Derecho Universidad Autónoma de Chile, Makarena Burnes Triviño Estudiante de Derecho Universidad Autónoma de Chile, Nicole Muñoz Vera Estudiante de Derecho Universidad Autónoma de Chile, Nicole Soto Valenzuela Estudiante de Derecho Universidad Autónoma de Chile, Ricardo Galaz Moreira Estudiante de Derecho Universidad Autónoma de Chile, Pablo Varas Plagges Santiago de Chile, 05 de diciembre de 2012 INVESTIGACIÓN JURÍDICA ANÁLISIS DE LA CONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL ASOCIACIÓN LIBERTADES PÚBLICAS Santiago, 05 de diciembre de 2012 OBJETIVO DEL DOCUMENTO: El presente documento es el primer avance de la recopilación de proyectos de ley, jurisprudencia y causas ante el Tribunal Constitucional, en relación a la constitucionalidad del artículo 225 del Código Civil. Asimismo, se exponen los principales argumentos a favor y en contra de la constitucionalidad del artículo 225 del Código Civil. La primer parte presente resumidamente las principales posiciones doctrinarias sobre el tema, en la página 3 del documento. La segunda parte presenta los proyectos de ley presentados para la modificación del artículo 225 del Código Civil y sus historias legislativas, en la página 10. La tercer parte presenta los principales casos presentados ante el Tribunal Constitucional, en la página 47. La cuarta parte presenta algunas sentencias de Tribunales del Poder Judicial, recopiladas sobre el tema, en la página 56. Finalmente, se presentan las columnas de opinión recopiladas del Diario La Tercera que se han relacionado con este debate, en la página 65. SERGIO ANDRÉS HENRÍQUEZ GALINDO ABOGADO – MAGÍSTER EN DERECHOS DE LA INFANCIA, LA ADOLESCENCIA Y LA FAMILIA SUBDIRECTOR DE PUENTES CONSULTORES MIEMBRO DE ASOCIACIÓN LIBERTADES PÚBLICAS 2 RESUMEN DE LOS PRINCIPALES ASPECTOS DOCTRINARIOS DEL DEBATE EN TORNO A LA CONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL INVESTIGACIÓN JURÍDICA ANÁLISIS DE LA CONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL ASOCIACIÓN LIBERTADES PÚBLICAS Coordinador Sergio Henríquez Galindo 3 Presentación del problema: El asunto sobre el cuidado personal y su regulación en caso de separación de los padres, se divide en tres categorías, según su fuente: De adjudicación Convencional De adjudicación Judicial De adjudicación legal El primero, de adjudicación convencional, es aquel que en caso de separación entrega el cuidado personal a aquel de los padres que se designe de común acuerdo entre ambos, lo cual debe ser realizado formalmente por escritura pública. La segunda, de adjudicación judicial, corresponde a aquel que entrega el cuidado personal al padre o madre, de conformidad a tres criterios o causales legales: el maltrato, la negligencia u “otro interés calificado”, lo cual ha sido interpretado por cierta parte de la doctrina y jurisprudencia, como el interés superior del niño. Finalmente, la tercera, corresponde a la adjudicación del cuidado personal a la madre, cuando existe una separación de los padres, no existiendo acuerdo (adjudicación convencional), quedando obligatoriamente el padre, sin el cuidado personal de sus hijos. El debate doctrinario y jurisprudencial se ha centrado en la adjudicación legal del cuidado personal, que es asignado en ese caso a la madre, de género femenino, eliminando inmediatamente la posibilidad de que se le asigne al padre, salvo que concurran algunas de las causales que habilitan la adjudicación del cuidado personal por vía judicial. Entonces la pregunta que surge es: ¿es justo y respetuoso del principio de igualdad ante la ley, que se le asigne por ley a la madre el cuidado personal de sus hijos, y no al padre, o que no exista una alternativa que le permita al padre tener la posibilidad de tener ese cuidado personal incluso en el caso que no haya acuerdo para una asignación convencional de tal cuidado personal? Las respuestas se dividen en dos: Aquellos que afirman que tal asignación legal del cuidado personal es constitucional y no vulnera el principio de igualdad ante la ley, ni corresponde a una discriminación de género arbitraria. Aquellos que afirman, por el contrario, que tal asignación legal del cuidado personal es inconstitucional, y discriminatoria. 4 Posición que considera legítima y constitucional la actual redacción del artículo 255 del Código Civil María Sara Rodríguez Pinto1, sostiene que el cuestionamiento a la constitucionalidad del artículo 255 del Código Civil surge de dos fuentes 2: 1.- Desde la perspectiva de la prohibición de la discriminación arbitraria, en la medida que se consideraría esta atribución legal un derecho subjetivo de la madre que sólo puede ser privado a título de una sanción. 2.- Desde el principio del interés superior del niño, en la medida que puede ser usado como “pieza táctica” en negociaciones económicas entre los padres, lo que cosifica al niño y lo convierte en trofeo u objeto de intercambio. La señalada autora responde a estos cuestionamientos, señalando primero que esta regla no ofende el principio de igualdad entre los progenitores, pues no se trata de un derecho subjetivo que la ley le atribuya a la madre, sino más bien un “deber” por ley, la cual además puede cambiarse por disposición judicial en función del interés del hijo. Asimismo, señala que no existe en esta regla discriminación de género, puesto que esta regla evita conflictos entre los progenitores, favoreciendo el interés superior de los hijos. Claro, pues de otra forma se sobre-expondría a los niños y niñas a juicios cada vez que los padres se separen, con la consiguiente recarga de los Tribunales de Familia, y perjuicio de su interés superior. Afirma también que el legislador pudo también haber optado por la preferencia paterna, aunque señala que parece aconsejable que se mantenga la preferencia materna, desde una perspectiva “histórica” que no explica. Lo importante, según la autora, es que “exista una regla de atribución legal que funcione automática y supletoriamente en caso de falta de acuerdo entre los progenitores, evitando con esto el litigio al que necesariamente deberían llegar de no existir la regla legal”3. 1 María Sara Rodríguez Pinto es Licenciada en Derecho por la Pontificia Universidad Católica de Chile, abogada, Master of Laws (LL.M) por Northwestern University, Doctora en Derecho por la Universitad Autónoma de Madrid, y Profesora de Derecho Civil de la Facultad de Derecho de la Universidad de Los Andes. 2 Rodríguez Pinto, María Sara. “El cuidado personal de los niños y adolescentes en el Nuevo Derecho chileno de Familia”, Editorial Abeledo Perrot Legal Publishing, segunda edición, Santiago de Chile, 2011. 3 Rodríguez Pinto, María Sara. “El cuidado personal de los niños y adolescentes en el Nuevo Derecho chileno de Familia”, Editorial Abeledo Perrot Legal Publishing, segunda edición, Santiago de Chile, 2011, p.54. 5 Respecto de la segunda argumentación relativa al interés superior de los niños que se vería afectada por esta regla de atribución legal del cuidado personal a la madre, María Sara Rodríguez rechaza tal afirmación, pues como ya se ha planteado, esta regla evita la judicialización y litigiosidad en materias de cuidado personal de los hijos, aunque no profundiza en qué consiste el daño efectivo que se generaría al judicializar estos casos. Señala que la ausencia de esta regla de atribución legal a la madre favorecería a los progenitores y sus intereses, pero no la estabilidad y paz a favor del niño, aunque tampoco profundiza cómo ello llegaría a suceder, o si en el caso contrario no se altera de todas formas dicha estabilidad y paz a favor del niño. Insiste en que “la preferencia materna no ofende el interés del hijo. Al contrario, evita litigios y la excesiva judicialización de los conflictos de los padres sobre el cuidado personal de sus hijos; y favorece los acuerdos”4, aunque tampoco explica cómo esta regla estimularía la atribución convencional del cuidado personal de los hijos. Posición que considera ilegítima e inconstitucional la actual redacción del artículo 255 del Código Civil Fabiola Lathrop Gómez5, sostiene6 que esta regla es inconstitucional, por las siguientes razones: “Además de vulnerar el principio de igualdad ante la ley, no respeta lo establecido en los tratados internacionales, y en la misma Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la mujer (artículo 16 letra d). No justifica esta discriminación, la creencia generalizada que estima más conveniente entregar a la madre el cuidado de los hijos de corta edad, aduciendo razones de mejor aptitud en comparación con el padre e incluso de mejor interés para el niño, o que simplemente por razones de lógica “y por obra de la naturaleza, los hijos deben estar al lado de la madre”, aunque luego señala que no comparte completamente este último criterio, pues no es fácil fijar una edad a partir de la cual el 4 Rodríguez Pinto, María Sara. “El cuidado personal de los niños y adolescentes en el Nuevo Derecho chileno de Familia”, Editorial Abeledo Perrot Legal Publishing, segunda edición, Santiago de Chile, 2011, p. 55. 5 Fabiola Lathrop Gómez es Licenciada en Ciencias Jurídicas y Sociales por la Universidad de Chile, Doctora en Derecho por la Universidad de Salamanca, y Docente de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile. 6 Lathrop Gómez, Fabiola. “Cuidado Personal de los hijos. Análisis de Ley de Matrimonio Civil y Tribunales de Familia”, Editorial Punto Lex S.A., Santiago de Chile, 2005. Copyright 2005 Fabiola Lathrop Gómez, Derechos Reservados. 6 niño esté en condiciones físicas y psicológicas para desprenderse del seno materno, considerando por ejemplo el período de lactancia”7. El aporte de la Sentencia del caso “Atala Riffo y niñas versus Chile”. En la sentencia de la Corte Interamericana, definiendo lo que se entiende por principio de igualdad ante la ley y no discriminación, señala en su párrafo 79 que “Sobre el principio de igualdad ante la ley y la no discriminación, la Corte ha señalado que la noción de igualdad se desprende directamente de la unidad de naturaleza del género humano y es inseparable de la dignidad esencial de la persona, frente a la cual es incompatible toda situación que, por considerar superior a un determinado grupo, conduzca a tratarlo con privilegio; o que, a la inversa, por considerarlo inferior, lo trate con hostilidad o de cualquier forma lo discrimine del goce de derechos que sí se reconocen a quienes no se consideran incursos en tal situación”. Cuando aborda el problema de la prohibición de discriminación por orientación sexual, la Corte Interamericana de Derechos Humanos se hace cargo de que no esté expresamente mencionada en la Convención Americana, interpretando su artículo primero a la luz de lo que se ha definido en el sistema Europeo y Universal de Derechos Humanos concluyendo en su párrafo 91 que “Teniendo en cuenta las obligaciones generales de respeto y garantía establecidas en el artículo 1.1 de la Convención Americana, los criterios de interpretación fijados en el artículo 29 de dicha Convención, lo estipulado en la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados, las Resoluciones de la Asamblea General de la OEA, los estándares establecidos por el Tribunal Europeo y los organismos de Naciones Unidas (supra párrs. 83 a 90), la Corte Interamericana deja establecido que la orientación sexual y la identidad de género de las personas son categorías protegidas por la Convención. Por ello está proscrita por la Convención cualquier norma, acto o práctica discriminatoria basada en la orientación sexual de la persona. En consecuencia, ninguna norma, decisión o práctica de derecho interno, sea por parte de autoridades estatales o por particulares, pueden disminuir o restringir, de modo alguno, los derechos de una persona a partir de su orientación sexual”. Al tratar la discriminación que en concreto la Corte Suprema realiza en contra de Káren Atala Riffo, en especial en cuanto se invoca el interés superior del niñlo como argumento que sostiene tal discriminación, señala en sus párrafos 110 y 111 que “110. En conclusión, la Corte Interamericana observa que al ser, en abstracto, el “interés superior del niño” un fin legítimo, la sola referencia al 7 Lathrop Gómez, Fabiola. “Cuidado Personal de los hijos. Análisis de Ley de Matrimonio Civil y Tribunales de Familia”, Editorial Punto Lex S.A., Santiago de Chile, 2005. Copyright 2005 Fabiola Lathrop Gómez, Derechos Reservados, p. 14. 7 mismo sin probar, en concreto, los riesgos o daños que podrían conllevar la orientación sexual de la madre para las niñas, no puede servir de medida idónea para la restricción de un derecho protegido como el de poder ejercer todos los derechos humanos sin discriminación alguna por la orientación sexual de la persona. El interés superior del niño no puede ser utilizado para amparar la discriminación en contra de la madre o el padre por la orientación sexual de cualquiera de ellos. De este modo, el juzgador no puede tomar en consideración esta condición social como elemento para decidir sobre una tuición o custodia. 111. Una determinación a partir de presunciones infundadas y estereotipadas sobre la capacidad e idoneidad parental de poder garantizar y promover el bienestar y desarrollo del niño no es adecuada para garantizar el fin legítimo de proteger el interés superior del niño. La Corte considera que no son admisibles las consideraciones basadas en estereotipos por la orientación sexual, es decir, pre-concepciones de los atributos, conductas o características poseídas por las personas homosexuales o el impacto que estos presuntamente puedan tener en las niñas y los niños”. La Corte Suprema de Chile argumentó que su decisión tenía también por objeto prevenir la discriminación que sufrirían las niñas, por no tener una familia “tradicional”. Al respecto, la Corte señala en su párrafo 119 que “La Corte considera que, para justificar una diferencia de trato y la restricción de un derecho, no puede servir de sustento jurídico la alegada posibilidad de discriminación social, probada o no, a la que se podrían enfrentar los menores de edad por condiciones de la madre o el padre. Si bien es cierto que ciertas sociedades pueden ser intolerantes a condiciones como la raza, el sexo, la nacionalidad o la orientación sexual de una persona, los Estados no pueden utilizar esto como justificación para perpetuar tratos discriminatorios. Los Estados están internacionalmente obligados a adoptar las medidas que fueren necesarias “para hacer efectivos” los derechos establecidos en la Convención, como se estipula en el artículo 2 de dicho instrumento interamericano por lo que deben propender, precisamente, por enfrentar las manifestaciones intolerantes y discriminatorias, con el fin de evitar la exclusión o negación de una determinada condición”. En relación a la supuesta superposición de intereses, según el cual la madre habría privilegiado su orientación sexual declarada en perjuicio del interés superior de sus hijas, la Corte Interamericana de Derechos Humanos afirma que “138. En el presente caso, el Tribunal observa que tanto la Corte Suprema de Justicia como el Juzgado de Menores de Villarrica fundamentaron sus decisiones para 8 entregar la tuición al padre bajo el supuesto de que la señora Atala podía declararse abiertamente como lesbiana. Sin embargo, indicaron que, al ejercer su homosexualidad cuando decidió convivir con una pareja del mismo sexo, privilegió sus intereses sobre los de sus hijas (supra párrs. 41 y 56). 139. Al respecto, el Tribunal considera que dentro de la prohibición de discriminación por orientación sexual se deben incluir, como derechos protegidos, las conductas en el ejercicio de la homosexualidad. Además, si la orientación sexual es un componente esencial de identidad de la persona, no era razonable exigir a la señora Atala que pospusiera su proyecto de vida y de familia. No se puede considerar como “reprochable o reprobable jurídicamente”, bajo ninguna circunstancia, que la señora Atala haya tomado la decisión de rehacer su vida. Además, no se encontró probado un daño que haya perjudicado a las tres niñas. Se abordó también la alegada existencia de una “familia tradicional” por parte de la Corte Suprema chilena. Al respecto, la Corte Interamericana señala que “141. Al respecto, la Corte Suprema de Justicia señaló que se desconoció “el derecho preferente de las menores [de edad] a vivir y desarrollarse en el seno de una familia estructurada normalmente y apreciada en el medio social, según el modelo tradicional que le es propio”. Por su parte, el Juzgado de Menores de Villarrica, en la decisión de tuición provisoria, indicó que “el actor presenta argumentos más favorables en pro del interés superior de las niñas, argumentos, que en el contexto de una sociedad heterosexuada, y tradicional, cobran gran importancia”. 142. La Corte constata que en la Convención Americana no se encuentra determinado un concepto cerrado de familia, ni mucho menos se protege sólo un modelo “tradicional” de la misma. Al respecto, el Tribunal reitera que el concepto de vida familiar no está reducido únicamente al matrimonio y debe abarcar otros lazos familiares de hecho donde las partes tienen vida en común por fuera del matrimonio”. De todo lo anterior, y de otros argumentos que se sostienen en el fallo, cabe concluir que para la Corte Interamericana de Derechos Humanos, ni el género, sexo u orientación sexual, son criterios validos para asignar preferentemente a uno u otro el cuidado personal de lo hijos. 9 PROYECTOS DE LEY QUE MODIFICAN EL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL INVESTIGACIÓN JURÍDICA ANÁLISIS DE LA CONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL ASOCIACIÓN LIBERTADES PÚBLICAS Coordinador Sergio Henríquez Galindo 10 Esta sección comprende los boletines de los proyectos presentados para modificar el artículo 225 del Código Civil, así como la historia de la ley de cada Boletín. BOLETINES BOLETÍN 5197 PROYECTO DE LEY QUE MODIFICA ART 225 DEL CÓDIGO CIVIL EN RELACIÓN AL CUIDADO PERSONAL DE LOS HIJOS. Considerandos: La ley Nº 19.585 vino a corregir substancialmente la injusticia que significaba discriminar entre los hijos legítimos, ilegítimos, naturales, en abierta contravención al principio de igualdad ante la ley que establece nuestra Constitución. No obstante los grandes avances que produjo esta modificación al Código Civil, no se tuvo en consideración el principio de igualdad en lo que se refiere en materia de cuidado personal de los hijos, ya que la ley otorgó esta facultad supletoriamente a la madre, sin tomar en cuenta los derechos del padre si es que este estuviera tan capacitado como la madre para ejercer dicho cuidado. El artículo 225 del Código Civil vulnera los principios esenciales establecidos por la ley 19.585, y además los derechos establecidos en nuestra Constitución y Tratados Internacionales, en lo referente a la calidad del ser humano y a la igualdad entre hombre y mujer, ya que se discrimina al padre sólo por su género. Es así que dentro de los deberes y derechos entre padres e hijos derivados de la autoridad paterna, está el de guarda o tuición, que dice relación con el cuidado personal, crianza, educación, y este por regla general corresponde de consuno a los padres, o a la madre si estos viven separados, (art. 225 C.C). Esta situación, que entrega a la madre el cuidado personal de los hijos menores, cuando los padres se encuentran separados es considerado un derecho , y solo por causas muy específicas puede ser privada una mujer de éste, lo que a todas luces es arbitrario, tal como lo expresa don Enrique Barros Bourie en el libro "El Nuevo Estatuto de Filiación en el Código Civil Chileno, "habida consideración del principio de igualdad ante la ley, tengo dudas de la constitucionalidad del 11 artículo 225 I y III, si esas normas fuesen interpretadas como constitutivas de un derecho de la madre, del que solo puede ser privada a título de sanción, en verdad, también puede haber discriminación en contra del padre"...Y ello es mas grave si tal discriminación actúa, eventualmente en perjuicio del hijo,". El art. 19 N° 2 de nuestra Constitución establece que "los hombres y mujeres son iguales ante la ley" esto es una constatación que no existe una diferencia entre la calidad de persona de un hombre o de una mujer. Esta igualdad que establece nuestra Carta Fundamental es un derecho por lo que no puede ser privado el padre, de tener la misma prerrogativa que la madre para obtener el cuidado de sus hijos, por el solo hecho de su sexo. No existen en nuestra sociedad actual razones para sustentar esta preferencia entre la madre y el padre en la materia de tuición. Mas aún existen numerosos estudios que reafirman que el padre es vital en todo lo que dice relación con el cuidado personal de los hijos, y su presencia constante puede evitar incluso riesgos de drogadicción y alcoholismo. La actual normativa entonces, que opta por la madre como titular de la tuición no tiene ningún argumento de peso para concluir que el padre no puede estar en iguales condiciones que la mujer para tener el cuidado personal de los niños lo que debe ser corregido, permitiendo que los padres que estén mas capacitados que la mujer para atender las necesidades de sus hijos puedan de derecho ejercerla. Las diversas legislaciones extranjeras como la alemana, entregan al juez un rol preporanderante al decidir la custodia del menor, considerando el bienestar del niño con consideración de sus vínculos con los padres y hermanos, La jurisprudencia del Tribunal Supremo Alemán exige que el juez de familia se plantee la pregunta por " la decisión que mejor contribuye al desarrollo y educación de una persona responsable de si misma y capaz de desenvolverse en sociedad". Una solución similar a la alemana se adoptó en Francia donde la ley establece que en caso de separación, la tuición corresponde a ambos padres en común y a falta de acuerdo o si el acuerdo le parece contrario al interés del niño, el juez decide en su solo interés. Es así que vengo en proponer el siguiente proyecto de ley: Artículo primero sustitúyase el art. 225 del Código Civil por el siguiente, Artículo 225. Si los padres viven separados mediante escritura pública, o acta extendida ante cualquier oficial del Registro Civil, subinscrita al margen de la inscripción de nacimiento del hijo 12 dentro de los treinta días siguientes a su otorgamiento, ambos padres, actuando de común acuerdo, podrán determinar a cual de los padres corresponde el cuidado personal de uno o más hijos. Este acuerdo podrá revocarse, cumpliendo las mismas solemnidades. En caso de no haber acuerdo entre los padres en esta materia, será el juez correspondiente quien atendido el interés superior del niño, y habiendo escuchado su opinión deberá entregar el cuidado personal de éste al padre que se encuentre mas facultado para esta función. En todo caso, el juez podrá entregar el cuidado personal de el o los menores a ambos padres, cuando éstos se encuentren igualmente habilitados para dicho cuidado, para que la tuición sea alternada entre ellos. No se podrá confiar el cuidado personal al padre o madre que no hubiese contribuido a la mantención del hijo mientras estuvo bajo el cuidado del otro padre, pudiendo hacerlo. Mientras una subinscripción relativa al cuidado personal no sea cancelada por otra posterior, todo nuevo acuerdo o resolución será inoponible a terceros. JAIME NARANJO O. SENADOR DE LA REPÚBLICA HISTORIA PROYECTO DE LEY BOLETIN 5197-07 Protege integridad del menor en el caso de padres separados Diversos intentos al interior del Congreso Nacional han aspirado a modificar una serie de cuerpos legales con el objeto de propender a que el menor, cuyos padres no viven juntos, tenga la mejor calidad de vida posible, todo ello en condiciones de igualdad de ambos progenitores y teniendo principalmente en cuenta el interés superior del niño. En este sentido pasáramos a revisar dichos proyecto, sus propuestas y las principales discusiones. 13 I. Datos del proyecto Nº BOLETIN: 5197-07 Fecha Ingreso: 11 JUL. 2007 Estado: Archivado Iniciativa: Moción Cámara de Origen: Senado Autores: - Pedro Muñoz Aburto Jaime Naranjo Ortiz Con miras a perfeccionar las modificaciones realizadas en la ley 19.585, en relación con el fin de la denominación de “Hijos Naturales” e “Hijos Legítimos” se lanza esta nueva propuesta que permite a los padres a participar como un actor prepondérate en la vida de los menores cuyos padres viven separados. Actualmente la ley otorga el cuidado de los hijos supletoriamente a la madre, sin tomar en cuenta los derechos del padre, todo ello atentando a la propia ley 19.585, la Constitución y Tratados Internacionales.En dicho sentido se postula modificaciones en el siguiente sentido: - Art. 225 Código Civil. Determinar de común acuerdo de los padres a quien le será dada la tutela del hijo, y de igual forma habilitar al juez paraentregar el cuidado personal del menor a ambos padres, cuando éstos se encuentren igualmentehabilitados para dicho cuidado, para que la tuición sea alternada entreellos.- Luego de un largo tiempo durmiendo la propuesta en el Senado, el día 17 de marzo de 2010 dicho proyecto es archivado en virtud del Art. 36 bis del reglamento.- 14 BOLETÍN 5743-07 PROYECTO DE LEY QUE MODIFICA EL CÓDIGO CIVIL, LA LEY Nº 19.968 QUE CREA LOS TRIBUNALES DE FAMILIA Y LA LEY Nº 16.618 DE MENORES EN MIRAS DE ASEGURAR UNA EFECTIVA PROTECCION DE LOS DERECHOS Y DEBERES QUE EMANAN DE LA FILIACIÓN. Considerando: 1.- La realidad sociocultural y jurídica chilena en relación a los ciudadanos de orientación sexual diversa, basada en la ignorancia y la discriminación; y, los cada vez, más frecuentes casos de demandas de tuición en contra de madres de orientación lésbica, sin sustento jurídico y/o científico es un hecho plausible. Ejemplo de esto es la jurisprudencia fijada recientemente en este sentido, por la Excma. Corte Suprema en el juicio de tuición en contra de doña Jacqueline Karen Atala Riffo, basada en un prejuicio social que es contraria a la Constitución Política de la República y a los Tratados Internacionales ratificados por nuestro país en materia de derechos fundamentales. 2.-En atención a la renuencia de las sociedades de respetar la maternidad y paternidad de personas con orientación lésbica u homosexual respectivamente, se han efectuado diversos estudios e investigaciones de carácter científico que buscan determinar si los hijos que crecen o se desarrollan en una familia homoparental presentan alteraciones cognitivas, afectivas, sociales o sexuales con motivo de dicha procedencia familiar. 3.- En el ámbito científico, en diversos estudios, se concluye que la estructura o configuración de una familia8 9 (es decir, qué miembros la componen y qué relación hay entre ellos) no es el 8 La IV Conferencia Mundial de la Mujer alude a la familia, reconociéndola como el núcleo básico de la sociedad que debe ser fortalecida, esto es, que tiene derecho a recibir protección y apoyo amplio. De igual modo…reconoce la diversidad de tipos de familia existentes en el mundo y propugna respetar sus derechos, buscar potenciar sus capacidades y aumentar la responsabilidad de los 15 aspecto determinante a la hora de conformar el desarrollo de los niños y niñas que viven en ella, sino la dinámica de relaciones que se dan en su seno. Es decir, no parece ser tan importante si esta familia es biológica o adoptiva, con uno o dos progenitores, si estos son de distinto o el mismo sexo, si previamente han pasado por una separación o si es su primera unión. En estas investigaciones, los aspectos clave están relacionados con el hecho de que: en ese hogar se aporte a chicos y chicas buenas dosis de afecto y comunicación, se sea sensible a sus necesidades presentes y futuras, se viva una vida estable con normas razonables que todos intentan respetar, al tiempo que se mantengan unas relaciones armónicas y relativamente felices. Por tanto en las conclusiones de estas investigaciones se señala que la orientación sexual de los progenitores, en sí misma y vivan o no en pareja, no parece ser una variable relevante a la hora de determinar el modo en que se construye el desarrollo y ajuste psicológico de hijos e hijas. En definitiva, para las investigaciones, lo importante de un hogar no es su forma externa sino que sirva para las funciones de acomodo y protección que debe ejercer. Parece claro que las familias son el marco imprescindible e idóneo para cubrir las necesidades de protección, afecto o estimulación que tenemos los seres humanos, y particularmente aquellos y aquellas que aún se encuentran en las primeras etapas del desarrollo; y, asimismo, resulta claro que la composición de esta familia resulta ser lo menos relevante, puesto que estas funciones imprescindibles pueden ejercerlas con idéntico éxito una constelación bastante variada de modelos familiares, incluyendo dentro de ellos los formados por padres gays o madres lesbianas, vivan solos o en pareja. 4.- En el ámbito judicial, reciente Jurisprudencia fijada por la Excma. Corte Suprema no se compadece, es más, contradice derechos esenciales reconocidos por el Estado en la Constitución Política de la República. Entre ellos, la igualdad entre las personas y respeto en el igual ejercicio y protección de sus derechos. En consecuencia, es deber del Estado proteger esta igualdad, no sólo respecto de las madres lesbianas y de los padres homosexuales, que han sido (o serán) privados de los derechos y deberes para con sus hijos o hijas arbitrariamente, fundamentado en el sólo hecho de su orientación sexual, sino más aún, de los derechos de los hijos e hijas que son (o serán) separados, también arbitrariamente, de la que fue su familia para insertarse en una distinta, con todos los trastornos sicológicos y sociales que esa separación efectivamente va a significarles. La disyuntiva es proteger la integridad familiar y la salud de sus miembros o darle sanción legal o jurisprudencial a los prejuicios sociales, como parece ser la directriz de la jurisprudencia recientemente indicada. miembros de cada familia. Josefina Bilbao, “Los desafíos de la familia futura” en; A partir de Beijing, Sergio Marras, Compilador, Ed. de Fundación Chile XXI y Universidad Diego Portales. 9 La aceptación de la democracia se ve reflejada en la concepción de ésta al interior de la familia. Sus miembros reclaman sus identidad, respeto y reconocimiento de sus derechos. Maria Antonieta Saa, “Crisis en el modelo patriarcal”en Op. Cit. 16 Las normas Constitucionales que fundamentan este proyecto de modificación legal y que han sido relegadas por la Jurisprudencia indicada son: Artículo 1. Las personas nacen libres e iguales en dignidad y derechos. La familia es el núcleo fundamental de la sociedad. (…) El Estado está al servicio de la persona humana y su finalidad es promover el bien común, para lo cual debe contribuir a crear las condiciones sociales que permitan a todos y a cada uno de los integrantes de la comunidad nacional su mayor realización espiritual y material posible, con pleno respeto a los derechos y garantías que esta Constitución establece. Es deber del Estado (…) dar protección a la familia, propender al fortalecimiento de ésta, promover la integración armónica de todos los sectores de la Nación y asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional. Artículo 5. La soberanía reside esencialmente en la Nación (…) El ejercicio de la soberanía reconoce como limitación el respeto a los derechos esenciales que emanan de la naturaleza humana. Es deber de los órganos del Estado respetar y promover tales derechos, garantizados por esta Constitución, así como por los tratados internacionales ratificados por Chile y que se encuentren vigentes. Artículo 6. Los órganos del Estado deben someter su acción a la Constitución y a las normas dictadas conforme a ella. Los preceptos de esta Constitución obligan tanto a los titulares o integrantes de dichos órganos como a toda persona, institución o grupo. La infracción de esta norma generará las responsabilidades y sanciones que determine la ley. Artículo 19. La Constitución asegura a todas las personas: 1°. El derecho a la vida y a la integridad física y psíquica de la persona. 2°. La igualdad ante la ley. En Chile no hay persona ni grupos privilegiados. En Chile no hay esclavos y el que pise su territorio queda libre. Hombres y mujeres son iguales ante la ley. Ni la ley ni autoridad alguna podrán establecer diferencias arbitrarias; 3°. La igual protección de la ley en el ejercicio de sus derechos. 17 4°. El respeto y protección a la vida privada y pública y a la honra de la persona y de su familia. Las normas de Derecho Internacional relativas a Derechos Esenciales y que, en consecuencia, gozan de rango constitucional de acuerdo al artículo 5 de la Constitución Política de la Republica, también relegados por fallos judiciales en esta materia, son: - “Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos”, publicado en Chile el 29 de Abril de 1989, en el que se establece que “Cada uno de los Estados Partes en el presente Pacto se comprometen a respetar y a garantizar a todos los individuos que se encuentren en su territorio y estén sujetos a su jurisdicción los derechos reconocidos en el presente Pacto, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición social”. - “Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales”, publicado en Chile el 27 de Mayo de 1989, mediante el que se compromete a “Los Estados partes en el presente pacto se comprometen a garantizar el ejercicio de los derechos que en él se enuncian, sin discriminación alguna por motivos de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición social”. - “Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto San José de Costa Rica)”, publicado en Chile el 5 de enero de 1991, mediante el que se dispone que “Los Estados partes en esta Convención se comprometen a respetar los derechos y libertades reconocidos en ella y a garantizar su libre y pleno ejercicio a toda persona que esté sujeta a su jurisdicción, sin discriminación alguna por motivos de raza, color, sexo, idioma, religión, opiniones políticas o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición social” - “Declaración de los Derechos del Niño”, ratificado por Chile en 1990, en el que se establece que: “Principio 6: El niño, para el pleno y armonioso desarrollo de su personalidad, necesita amor y comprensión. Siempre que sea posible, deberá crecer al amparo y bajo la responsabilidad de sus padres y, en todo caso, en un ambiente de afecto y de seguridad moral y material; salvo circunstancias excepcionales, no deberá separarse al niño de corta edad de su madre. La sociedad y las autoridades públicas tendrán la obligación de cuidar especialmente a los niños sin familia o 18 que carezcan de medios adecuados de subsistencia. Para el mantenimiento de los hijos de familias numerosas conviene conceder subsidios estatales o de otra índole.” “Principio 10: El niño debe ser protegido contra las prácticas que puedan fomentar la discriminación racial, religiosa o de cualquier otra índole. Debe ser educado en un espíritu de comprensión, tolerancia, amistad entre los pueblos, paz y fraternidad universal, y con plena conciencia de que debe consagrar sus energías y aptitudes al servicio de sus semejantes. Se hace presente que jurídicamente se entiende por discriminación, por ende, arbitraria, toda distinción, exclusión, restricción o preferencia en la adquisición o ejercicio de derechos y deberes u obligaciones que no tenga fundamento en la norma positiva. Desde un punto de vista general, se ha entendido mundialmente como discriminación (arbitraria) todas las distinciones, exclusiones, restricciones o preferencias que se sustentan en: raza, color, origen étnico, edad, sexo, género, religión, creencia, opinión política, nacimiento, origen nacional, cultural o socioeconómico, idioma o lengua, estado civil, orientación sexual, enfermedad, discapacidad, estructura genética o cualquier otra condición social o individual. Desde un punto de vista particular y enfocado a los hechos que originan este proyecto de modificación legal, la privación de una madre o de un padre del ejercicio de los derechos y deberes u obligaciones para con sus hijos y/o hijas en atención a su orientación sexual, ejercida en forma privada o pública, constituye discriminación y trasgrede todo el Sistema Constitucional, tanto desde la perspectiva de la madre o padre, como de la los niños y niñas que son desarraigados arbitrariamente del cobijo y cuidado de “su familia” por el sólo hecho de tener ésta, alguno o dos de su miembros una orientación sexual diversa Esto último se colige de los antecedentes proporcionados por las investigaciones expuestas en los Fundamentos Científico- empíricos que refutan categóricamente toda razón que se alegue en favor de cualquier clase de distinción, exclusión, restricción o preferencia de los derechos de las madres o padres de orientación sexual diversa, que convivan o no con pareja, respecto de sus hijos o hijas. Asimismo, refutan categóricamente toda razón que se alegue en favor de cualquier clase de distinción, exclusión, restricción o preferencia de los derechos de los niños y/o niñas para con su respectiva madre o padre que tenga una orientación sexual diversa y conviva o no con una pareja. 19 5.- En consecuencia, se infiere que pese a la consagración constitucional de la igualdad de derechos y deberes u obligaciones y a las investigaciones pertinentes, el marco legal que regula las relaciones jurídico-familiares se torna ambiguo, prestándose para interpretaciones erradas o arbitrarias. Y es, por ello que se hace urgente la modificación legal que por medio de la presente se propone. 6.- Por Tanto; en base a los antecedentes referidos, someto a consideración de éste H. Senado el siguiente proyecto de ley: PROYECTO DE LEY ARTÍCULO 1º: Introdúzcanse las siguientes modificaciones al Código Civil: 1° Agréguese al artículo 225, el siguiente inciso tercero nuevo, pasando a ser el actual inciso tercero, el cuarto: “No se comprende dentro de las inhabilidades para ejercer el cuidado personal del menor, la orientación sexual diversa de la madre, padre o adulto que ejerza o pueda ejercer, de acuerdo con las reglas generales, este cuidado. Tampoco será causal de inhabilidad el hecho que quien detente o pueda detentar, el cuidado personal del niño mantenga o no alguna relación con otra persona de su mismo sexo, ya sea en la esfera de su vida privada o pública.” 2° Modifíquese el artículo 229 del Código Civil, agregando el siguiente inciso final nuevo: “No será causal fundada para suspender o restringir este derecho, la orientación sexual diversa de la madre o del padre, sea que mantenga o no alguna relación, ya sea en la esfera de su vida privada o pública, con otra persona de su mismo sexo.” 3° Modifíquese el artículo 244 del Código Civil, incorporando el siguiente inciso final nuevo: “No será causal para suspender, restringir o privar de este derecho a quien lo detente, su orientación sexual diversa, sea que mantenga o no alguna relación, ya sea en la esfera de su vida privada o pública, con otra persona de su mismo sexo.” ARTÍCULO 2: Modifíquese La Ley Nº 19.968 que crea los Tribunales de Familia en el siguiente sentido: 20 1° Modifíquese el artículo 34l incorporando el siguiente inciso segundo nuevo, pasando a ser el actual inciso segundo, el final: “La prueba de la orientación sexual diversa de alguna de las partes, sea que se manifieste en la esfera de su vida privada o pública, no será considerada en la sentencia como fundamento para restringir, suspender o privar de algún derecho con respecto del menor, a aquel contra quien resulte probada dicha orientación.” ARTÍCULO 3: Modifíquese La Ley Nº 16.618 de Menores en el siguiente sentido: 1° Intercalase en el inciso segundo del artículo 16 bis, después del (.) seguido y antes de la frase “De la misma forma procederá respecto de un menor de dieciséis años imputado de haber cometido una falta.”, la siguiente frase: “No será motivo suficiente para que Carabineros de Chile ejerza esta función, la sola orientación sexual diversa de los miembros de su familia, de algún miembro de la familia o de quien ejerce el cuidado del menor, sea que se manifieste en la esfera de su vida privada o pública dicha orientación.” Carlos Ominami P Senador HISTORIA DEL PROYECTO DE LEY BOLETÍN 5743-07 Datos del Proyecto Nº BOLETIN: 5743-07 Fecha Ingreso: 22 ENE. 2008 21 Estado: Archivado Iniciativa: Moción Cámara de Origen: Senado Autores: - Carlos Ominami Pascual En miras de asegurar una efectiva protección de los derechos y deberes que emanan de la filiación, tomando en consideración los cambios sociales en nuestro país y la contingencia se propone cambios en el siguiente sentido: - - - Art. 225 Código Civil. Eliminar dentro de las inhabilidades para ejercer el cuidado personal del menor, la orientación sexual diversa de la madre, padre o adulto que ejerza este cuidado.Art. 229 Código Civil. No será causal para suspender o restringir este derecho, la orientación sexual diversa de la madre o del padre.Art. 244 Código Civil. No será causal para suspender, restringir o privar de la Partía Potestad a quien lo detente por su orientación sexual diversa.Art. 34lLey Nº 19.968 que crea los Tribunales de Familia. Que la prueba de la orientación sexual no sea fundamento para restringir, suspender o privar de algún derecho con respecto del menor.Art. 16 bis de la Ley Nº 16.618 de Menores. Agregar que no será motivo suficiente para que Carabineros de Chile ejerza esta función la sola orientación sexual diversa de los miembros de su familia.- Al igual que el proyecto anterior, esta propuesta es archivada en virtud del Art. 36 bis del reglamento con fecha 17 de marzo de 2010.- 22 BOLETÍN 5793-07 MOCIÓN QUE MODIFICA EL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL PARA PROTEGER AL MENOR EN CASOS QUE LOS PADRES VIVAN SEPARADOS Hace unos meses presenté un proyecto de ley para proteger el derecho del padre o madre que no tiene el cuidado personal de sus hijos, a mantener con ellos una relación directa y regular. En efecto, el artículo 225 del Código Civil así lo consagra. Es más, dicho artículo incluso sostiene que ello es una obligación y la Ley de Menores permite castigar al que no la cumple con arresto. Gracias a la constante comunicación que he logrado tener a través de mi blog con padres y madres que no tienen el cuidado personal de sus hijos, me he podido dar cuenta que este proyecto de ley abarca sólo una parte de los problemas que ellos deben enfrentar respecto de sus hijos. En efecto, conozco casos en que el progenitor que los tiene a su cuidado se lleva a los hijos a vivir a otra ciudad lejana, con el solo objeto de impedir que el otro realice las visitas; casos en que los niños son sacados de un buen colegio injustificadamente, supuestamente para molestar al otro padre; casos en que se les cambia de barrio para alejarlos del otro padre y de toda su familia; etc. No toman en cuenta, o no les importa, que en todos casos, el que sufre el mayor daño es el menor. Sabemos también que, en muchos casos, el progenitor al cuidado de los niños realiza una verdadera campaña de desprestigio en contra del otro progenitor sin que éste pueda siquiera defenderse o mostrar al hijo que lo que de él se dice no es cierto y que lo quiere. Las consecuencias de estas conductas son gravísimas y, además, claramente identificables. Tanto así, que hoy en día se conocen con el nombre de “Síndrome de Alienación Parental” (SAP). El SAP fue descrito recientemente como una situación en la que un progenitor intenta deliberadamente alienar (alejar) a su hijo o hija del otro progenitor, envenenando su mente, normalmente con éxito. Consiste en un desorden que surge habitualmente en el contexto de las disputas por la custodia de un hijo. Su primera manifestación es la campaña de denigración contra un padre que se despliega sobre el niño. Es el resultado de la combinación de una programación 23 llevada a cabo por el adoctrinamiento de un progenitor y de la propia contribución del niño en el envilecimiento del padre10”. En una definición más completa, aparecida en el American Journal of Forensic Psychology, el SAP “…se refiere a un trastorno cuya principal manifestación es la campaña injustificada de denigración del niño hacia el padre, o el rechazo al mismo, debido a la influencia del otro combinada con la propia contribución del niño. Notar los tres esenciales elementos de esta definición: 1) rechazo o denigración hacia un padre que llega al nivel de una campaña, es persistente, no es solamente un episodio ocasional; 2) el rechazo está injustificado, el alejamiento no es una respuesta que pueda ser razonable a los comportamientos del padre rechazado. 3) es en parte el resultado de la influencia del otro padre. Pero si alguno de estos tres elementos estuviera ausente, el término Síndrome de Alejamiento Parental no puede ser utilizado….” Cabe destacar que el SAP sólo es aplicable cuando el progenitor objeto de la hostilidad no ha mostrado ningún grado de comportamiento alienador que pudiera justificar la campaña de vilificación a la que el otro progenitor ha sometido al niño. El padre victimizado sería considerado por la mayoría de los investigadores como un padre normal, cariñoso, como mucho con mínimas disgresiones de la capacidad parental. Por su parte, se describe al progenitor alienador como una “figura protectora, ciego de rabia o animado por un espíritu de venganza provocado por la envidia o por la cólera. Generalmente se muestra como la víctima de un tratamiento injusto y cruel por parte del otro progenitor, del cuál intenta vengarse haciendo creer a los hijos que aquél no es mecedor de ningún afecto. En ciertas circunstancias puede adoptar actitudes engañosas como “hacer el esfuerzo” para que exista contacto entre los hijos y el progenitor alienado, o “sorprenderse” por la actitud de éstos cuando manifiestan oposición hacia el progenitor ausente”. Los efectos en los niños víctimas del SAP pueden ser: depresión crónica, incapacidad para adaptarse a los ambientes sociales, trastornos de identidad y de imagen, desesperación, tendencia al aislamiento, comportamiento hostil, falta de organización, consumo de alcohol y/o drogas y algunas veces suicidios u otros trastornos psiquiátricos. Pueden darse también sentimientos incontrolables de culpabilidad cuando el niño, una vez adulto, constata que fue cómplice inconsciente de una gran injusticia hacia el progenitor alienado. 10 Joel R. Brandes, New York Law Journal – 26 Marzo 2000; http://sindromedealienacionparental.apadeshi.org.ar/brandes.htm 24 En las familias que presentan disfunciones graves, el síndrome puede persistir durante varias generaciones. En consecuencia, El lazo entre el hijo y el progenitor alienado será irremediablemente destruido, no se puede reconstruir el lazo entre el hijo y el progenitor alienado, si ha habido un vacío de unos años. Por todo lo anterior, según los expertos, el SAP es una forma de abuso contra los niños, que debería ser castigable como abuso bajo el amparo de la regulación del orden familiar. Por ejemplo, señala que en un caso de custodia en Nueva York, en 1980, se sostuvo que una interferencia del padre custodio en la relación entre un niño y un padre no custodio es “un acto tan inconsistente con los mejores intereses del niño que suscita per se una fuerte probabilidad de que la parte ofensora no sea la idónea para ser el progenitor custodio” y, aún más, que debería privarse al padre que aliena al niño contra el otro del derecho de visita. A todo lo anterior, puedo agregar que de acuerdo a artículo publicado por La Tercera 11, el Juzgado de Familia de Coquimbo dictó, recientemente, una sentencia que hace referencia al Síndrome de Alienación Parental. En efecto, en la sentencia, que favoreció a un padre chileno, se declara que “se hace altamente probable la ocurrencia de alienación parental a futuro, que aún bajo la excusa de querer un bien para el propio niño puede impedir su normal desarrollo” y que “esta situación es la que habilita al Tribunal para intervenir en esta etapa de la vida y de su grupo familiar, lo que podría producirse en una situación grave de vulneración del niño”. Agrega el artículo que la sentencia dictaminó que el niño debe de manera paulatina volver a reencontrarse con el entorno perdido, lo que probó que esta manera de manipular la mente de los hijos es cierta, considerándola como una forma de maltrato procológico. Otra forma de denigración en contra del progenitor que no tiene el cuidado personal del hijo, y que se da comúnmente hoy en día en los tribunales, es la interposición de acusaciones de gravísimos actos de violencia intrafamiliar en su contra. La mayor parte de las veces, estas acusaciones son probadas como falsas o sencillamente quedan en suspenso. Peor aún, son consideradas parte de las “estrategias” que los abogados utilizan para obtener lo que sus clientes les solicitan, sin que el tribunal, los padres ni los abogados tomen en cuenta que la persona más dañada con este tipo de acusaciones no es el progenitor en contra de la cual se hacen, que ya sufre un daño de por vida, sino los menores, que pueden quedar con secuelas que les impedirán llevar una vida sana y normal en el futuro. 11 Nota obtenida en: http://www.latercera.cl/medio/articulo/0,0,3255_5666_336614100,00.html 25 Considero, por tanto, que este tipo de situaciones deben ser combatidas de la misma forma que el SAP de forma que nunca más veamos en nuestros tribunales que estas acusaciones se hacen con la mayor liviandad e irresponsabilidad. Por todo lo anterior, someto al H. Congreso un proyecto de ley que modifica el artículo 225 del Código Civil, en el sentido de exigir que toda decisión que afecte o pueda afectar gravemente la forma de vida del menor o el régimen de visitas sea adoptada con el acuerdo de ambos padres. En caso que el progenitor que lo tiene a su cuidado no respete lo anterior, el juez podrá considerar dar el cuidado personal del hijo al otro progenitor, salvo en los casos que la misma ley lo impide. Propongo también, en este proyecto de ley, que el juez pueda adoptar la decisión anterior cuando el progenitor que tenga a su cuidado al hijo persista en una campaña injustificada de desprestigio y denigración del otro padre o cuando efecto en su contra, en un juicio, acusaciones graves e infundadas con el objeto de impedir o afectar el régimen de visitas. Por todo lo anterior, someto a la consideración del H. Senado el siguiente: PROYECTO DE LEY Artículo único: sustitúyase el artículo 225 del Código Civil por el siguiente: Artículo 225.- Si los padres viven separados, a la madre toca el cuidado personal de los hijos. No obstante, mediante escritura pública, o acta extendida ante cualquier oficial del Registro Civil, subinscrita al margen de la inscripción de nacimiento del hijo dentro de los treinta días siguientes a su otorgamiento, ambos padres, actuando de común acuerdo, podrán determinar que el cuidado personal de uno o más hijos corresponda al padre. Este acuerdo podrá revocarse, cumpliendo las mismas solemnidades. Sin perjuicio de lo anterior, las decisiones que afecten o puedan afectar gravemente la forma de vida del menor, como las relativas al colegio en que se educa, lugar de habitación, sistema de 26 salud al que adhiere, entre otras, o la relación directa y regular a que se refiere el artículo 229, deberán adoptarse con el consentimiento de ambos padres. Cuando el interés del hijo lo haga indispensable, sea por maltrato, descuido u otra causa calificada o cuando no se cumpla lo señalado en el inciso anterior, el juez podrá entregar su cuidado personal al otro de los padres. Asimismo, ello corresponderá cuando quien lo tenga a su cuidado persista en una campaña injustificada de denigración y desprestigio del otro padre o cuando, para obtener una resolución judicial ventajosa, efectúe en su contra acusaciones graves e infundadas. Con todo, el juez no podrá confiar el cuidado personal al padre o madre que no hubiese contribuido a la mantención del hijo mientras estuvo bajo el cuidado del otro padre, pudiendo hacerlo. HISTORIA DE LA LEY BOLETIN 5793-07 Fecha Ingreso: 02 ABR. 2008 Estado: Primer Tramite Constitucional Iniciativa: Moción Cámara de Origen: Senado Autores: - Juan Antonio Coloma Correa Jovino Novoa Vásquez Más bien lo que se postula es una modificación al Art. 225 del Código Civil, pero en el sentido que la madre sea a quien le toca el cuidado personal de los hijos cuando cuyos padres estén separados pero con algunas modificaciones para evitar el síndrome de alienación.Actualmente el proyecto se encuentra en la primera etapa del trámite constitucional.- 27 28 Nº BOLETIN: 5917-18 Fecha Ingreso: 12 JUN. 2008 Estado: Segundo Tramite Constitucional Iniciativa: Moción Cámara de Origen: Diputado Autores: - Ramón Barros Montero Sergio Bobadilla Muñoz Juan Bustos Ramírez Francisco ChahúanChahúan Eduardo Díaz del Rio Álvaro Escobar Rufatt Jorge Sabag Villalobos Alejandra SepúlvedaOrbenes Ximena Valcarce Becerra Esteban Valenzuela Van Treek El objeto del este proyecto de ley es fortalecer la integridad del menor y persigue el propender a que el menor tenga la mejor calidad de vida posible en caso de que sus padres vivan separados.Para llevar a cabo esta tarea se propone una serie de modificaciones a diversos cuerpos legales: - - Art. 222 de Código Civil. En el sentido de que ambos progenitores actúen en forma conjunta en las decisiones que tengan relación con el cuidado, educación y crianza de los hijos, debiendo evitar actos u omisiones que degraden, lesionen o desvirtúen en forma injustificada o arbitraria la imagen que el hijo tiene de ambos padres o de su entorno familiar. Art. 225 Código Civil. Eliminar la custodia prefente a la madre cuando los padres del menor viven separados, en consecuencia se plantea que ambos progenitores tengan el deber de criar y educar a sus hijos en forma compartida, es decir, el cuidado personal de 29 - los hijos en principio le corresponderá a ambos padres y solo en caso de desacuerdo darle la labor al juez de decir quién es el más apto. Art. 229 Código Civil. Consagrar la figura del SAP. Art. 245 Código Civil. Conceder en principio la patria potestad a ambos padres. Art. 104 de la ley Nº 19.968, sobre tribunales de familia. Para evitar la judialización en estos casos, establecer que se resuelvan a través de la mediación. Además facultar al juez para suspender o modificar el régimen de tuición de un menor cuyo padre o madre que lo tuviere a su cuidado cometiere conductas de alienación respecto del otro progenitor o alentare al menor a proferir declaraciones falsas que afecten la honra e integridad del otro padre. Con fecha 13 de octubre de 2010 este proyecto de ley se refunde con otro, boletín nº 7007-18. En consecuencia a partir de esta fecha ambos tienen una tramitación conjunta.- 30 Nº BOLETIN: 7007-18 Fecha Ingreso: 29 JUN. 2010 Estado: Segundo Tramite Constitucional Iniciativa: Moción Cámara de Origen: Diputado Autores: - Gabriel Ascencio Mancilla Carolina GoicBoroevic Adriana Muñoz D’Albora Sergio Ojeda Uribe María Antonieta Saa Díaz Marcelo Schilling Rodríguez Mario Venegas Cárdenas Con el objeto de incluir aristas no contempladas en el proyecto de ley anterior se propone modificaciones en los siguientes sentidos: - - Art. 225 Código Civil.En el sentido de exigir que toda decisión que afecte o pueda afectar gravemente la forma de vida del menor o el régimen de visitas sea adoptada con el acuerdo de ambos padres.Art. 228 Código Civil. Derechamente se postula derogarlo, pues aquí se contempla una herramienta para que un tercero ajeno al menor decida con quien no puede vivir.- TRAMITACION PROPIAMENTE TAL: 31 Primer trámite constitucional, Informe de la Comisión de Familia y de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia 1. Respecto de las indicaciones referidas al artículo 222 del Código Civil, que declara los deberes y derechos recíprocos de padres e hijos: a) La Comisión acogió la indicación presentada en la Sala, pero solo en lo que respecta a precisar de mejor manera lo ya resuelto por la Comisión, en el sentido de que ambos padres deben actuar de común acuerdo en las decisiones sobre cuidado personal, crianza y educación. b) En cuanto a la indicación para suprimir la proposición contenida en el primer informe, que declara la correspondencia del Estado en la elaboración de políticas públicas tendientes a garantizar el cuidado y desarrollo de hijos e hijas, y al sector privado contribuir a la conciliación de la familia y el trabajo, los integrantes de la Comisión estuvieron divididos en cuanto a sus opiniones; pero la mayoría aprobó la indicación y suprimió el texto propuesto, por cuanto coincidieron con los autores de la indicación que no le correspondería al Estado intervenir en el cuidado personal de los hijos, materia que es solo de competencia de los padres, y lo que el Estado debe hacer es propender al fortalecimiento de la familia. En consecuencia, desarrollar políticas en ese sentido e incorporarlas en el Código Civil no les pareció lo más acertado. Así como se impide que el Estado intervenga en la vida del matrimonio o en la de las convivencias, tampoco le corresponde regular materias vinculadas con el cuidado personal de los hijos. 2. Respecto de las indicaciones presentadas para modificar el artículo 225 del Código Civil propuesto por la Comisión, que prescribe a quién le corresponde el cuidado personal de los hijos cuando los padres viven separados, fueron todas rechazadas por la mayoría de los miembros presentes, sin mayor debate, insistiendo en el texto propuesto en el primer informe, por considerar que sobre el mismo hubo ya un largo intercambio de opiniones durante la discusión del primer informe. Por su parte, algunos integrantes fueron de la idea de volver a discutir el texto aprobado para el artículo 225 propuesto. Sin embargo, igualmente manifestaron que al no haber disposición de todos los integrantes de la Comisión, no tendría sentido una nueva discusión y preferían esperar el debate en la Comisión de Constitución, cuando ésta analice el proyecto. En definitiva, el texto en que insiste la Comisión de Familia, por la mayoría de sus integrantes, para que exista claridad respecto de una materia tan importante como es la relación parental, se resume de la siguiente manera: a) Privilegia el acuerdo entre los padres. Consagra el cuidado personal compartido, entendido como participación en la crianza y educación de los hijos e hijas, el que procederá siempre que haya acuerdo entre las partes, lo que viene a cambiar lo existente hasta ahora en la ley, en cuanto a que, en cualquier caso, será siempre unilateral, toda vez que si existe acuerdo, pasa al otro de los padres, pero no a ambos en conjunto. 32 b) La residencia habitual será una sola, preferentemente la de la madre. Esto significa que, sin perjuicio de que el cuidado personal se ejerza compartido, la residencia habitual de los hijos comunes debe ser una sola, de preferencia la materna, con el propósito de velar por su estabilidad. c) Cuando no hay acuerdo, permanece la atribución legal a la madre. d) En lo que respecta a la atribución judicial de entregar el cuidado personal al otro de los padres, el principio rector es el interés superior del niño o niña, y será por causa justificada, o: -Cuando quien tenga el cuidado personal, entorpezca las visitas del padre no custodio con el hijo. -Cuando quien tenga el cuidado personal denuncie o demande falsamente al otro padre para perjudicarlo y obtener beneficios económicos. En ningún caso, el juez podrá fundar su decisión en base a la capacidad económica de los padres, como asimismo, el padre o madre que ejerza el cuidado personal facilitará el régimen comunicacional con el otro padre. 3. En cuanto a las indicaciones presentadas en diversos artículos, para reemplazar la palabra “padres” por “progenitores”, cada vez que aparece, fueron todas rechazadas por la unanimidad, en atención a que el término padre contiene un significado legal que abarca a los padres adoptivos, lo que no ocurre con el término progenitor, que proviene del latín y contiene el prefijo “pro” -hacia adelante-, la raíz “gen” -engendrar, dar a luz- y el sufijo “tor”, que significa agente. En consecuencia, el cambio propuesto podría confundir y dejar fuera a los padres adoptivos. 4. Respecto de la indicación presentada para suprimir la derogación propuesta por la Comisión del artículo 228 del Código Civil, que señala que la persona casada a quien corresponda el cuidado personal de un hijo que no ha nacido de ese matrimonio, solo podrá tenerlo en el hogar común con el consentimiento de su cónyuge, fue rechazada por la mayoría de los integrantes presentes, quienes fundamentaron su votación y abogaron por la mantención de la derogación del artículo 228, pues consideraron que se trata de una disposición arcaica que otorga a un tercero, ajeno a la relación filial, la prerrogativa de dar el consentimiento para que un hijo o hija pueda vivir con su padre o madre. Por su parte, quienes estuvieron por apoyar la indicación y restablecer la norma, lo hicieron en el entendido de que debe primar el interés superior del hijo o hija para evitar que sea expuesto a abusos o maltratos por una madrastra o padrastro que no lo quiere viviendo en su mismo hogar. La señora ZALAQUETT, presidenta de la comisión de familia, postula que la preferencia a la madre en la legislación actual claramente no responde a los cambios culturales que Chile vive hoy, debemos introducir una modificación en nuestro Código Civil, que aborde la protección del menor en el caso de separación de sus padres. Postula además modificar la Ley de Menores, estableciendo los factores que el juez deberá considerar al aprobar un régimen de cuidado personal compartido. Estos elementos dan cuenta de una mirada mucho más integral. Es un avance del proyecto es la derogación del artículo 228 del Código Civil 33 Finalmente se regula de manera más completa y justa el derecho del padre no custodio a mantener una relación directa, regular y personal con su hijo. La señora SAA de la Comisión de Constitución, legislación y justicia, la comisión está de acuerdo con el grueso de la propuesta, pero dispuso que cuidado personal del menor corresponda a la madre solo mientras no haya acuerdo entre los padres o decisión judicial. Lo bueno del proyecto también, le posibilidad a los padres de ser buenos cuidadores de sus hijos El señor SAFFIRIO ‘’estimula el compromiso de los padres, en especial el del padre, en el cuidado de sus hijos’’. Postula que hay que rectificar que estas subinscripciones no tengan el carácter público que tienen hoy, de manera que solo puedan tener acceso a ellas el padre, la madre o el hijo, toda vez que se trata de relaciones de familia que, desde mi punto de vista, en tanto digan relación con el cuidado de los hijos, se deben mantener dentro de la esfera privada. El señor HARBOE postula que artículo 225 de dicho Código, que se refiere al derecho preferente de la madre, en mi concepto adolece de un vicio de constitucionalidad, toda vez que el artículo 19, N° 2°, de la Constitución Política de la República. La tendencia mundial, además, apunta hoy a la corresponsabilidad. Finalmente al no haber normas supletorias, existen más incentivos para llegar a acuerdos en la etapa de mediación. Mi percepción es que la derogación del artículo 228 del Código Civil. La señora SEPÚLVEDA piensa que el proyecto representa un mensaje positivo para la sociedad, para la familia y, especialmente, para los varones. La señora TURRES cree que los niños quedarán de manera preferente al cuidado de su madre, mientras se define quién tendrá a cargo la custodia o crianza de los niños. A su juicio, es una cuestión bastante razonable; no es bueno hacer un miniproceso dentro de un proceso más largo El señor SABAG dice que el artículo 225 del Código Civil establece otra discriminación positiva en favor de la mujer, por cuanto dispone que cuando los padres viven separados la preferencia en el cuidado de los hijos corresponde a la madre. Sin embargo, esa disposición ha provocado muchas injusticia. Que sea el juez quien decida al respecto del cuidado compartido, habría significado, en mi opinión, judicializar las relaciones de familia. Este proyecto avanza en el concepto de corresponsabilidad. Se debe cambiar la sociedad Matriarcal El señor LETELIER.- le parece que la incorporación de los padres al cuidado de sus hijos es una medida adecuada que corrige, en muchos casos, el hecho de que los niños menores carezcan de padre. La introducción de la propuesta cambia mucho el panorama, porque el escenario es totalmente distinto podrán determinar los progenitores, de común acuerdo, que el cuidado personal de uno o más hijos corresponda al padre o a la madre o a ambos en forma compartida. 34 El señor SALABERRY.-Por su intermedio, señor Presidente, quiere recordar a que los autores de la mayoría de los proyectos de ley hoy día discutidos en esta Sala son de parlamentarios de la UDI o de Renovación Nacional. El señor LARROULET (ministro secretario general de la Presidencia). El proyecto fomenta valores importantes en nuestra sociedad. Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 87 votos. No hubo votos por la negativa ni abstenciones. Segundo trámite constitucional Introduce modificaciones en el Código Civil y en otros cuerpos legales con el objeto de proteger la integridad del menor en caso de que sus padres vivan separados, con informe de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento y urgencia calificada de “suma”. -El señor LABBÉ (Secretario General).- El objetivo principal de la iniciativa es consagrar, en caso de separación de los padres, el principio de la corresponsabilidad parental en el cuidado de los hijos y distribuir entre ambos progenitores, equitativamente, los derechos y deberes que les asisten en la materia. La Comisión, por la unanimidad de sus miembros, Senadores señora Alvear y señores Espina, Carlos Larraín, Hernán Larraín y Patricio Walker, acogió la idea de legislar -El señor LARRAÍN: Estamos ante un conjunto de enmiendas que recogen dos mociones de distintos señores Diputados y que se orientan a proteger la integridad del menor en caso de que sus padres vivan separados. Se sugieren en la materia cambios bastante relevantes a la legislación vigente. Por eso, para enfrentar debidamente el asunto, la Comisión escuchó largamente a personeros del mundo público y del ámbito privado: participaron la señora Ministra del SERNAM y otras autoridades de Gobierno, académicos, jueces especializados, mediadores, peritos y representantes de agrupaciones de padres separados, quienes estuvieron interesados en dar a 35 conocer sus puntos de vista, particularmente, para reclamar sus derechos en cuanto a ser parte de la educación de sus hijos. Los criterios que inspiran las modificaciones que hoy día se someten a conocimiento de la Sala son los siguientes: -Reforzar el foco del cuidado personal en el interés superior del niño y no en los derechos de sus padres. -Estimular la corresponsabilidad de los progenitores en el cuidado del hijo, favoreciendo una participación activa de parte de ambos, a pesar de la separación. -Incentivar el logro de acuerdos entre los padres, evitando de este modo que lo relativo al cuidado de los hijos se judicialice, con los consecuentes efectos negativos que los juicios implican para los niños. -Y entregar mayores facultades al juez para cambiar al titular del cuidado personal, teniendo en consideración que el único factor relevante en esta materia es el interés superior del niño. Entrando más en detalle, las modificaciones propuestas se orientan, en primer lugar, a crear la figura del “cuidado personal compartido”, lo que obedece a una tendencia de la legislación comparada: establecer una alternativa legal para el cuidado de los niños en el caso de los padres que se separan. Este nuevo modelo deja a los padres la decisión sobre quién ejercerá el cuidado personal de los hijos, pudiendo este ser asumido por la madre, por el padre o por ambos en forma compartida. En todo caso, debe procurarse un sistema de residencia del menor que asegure su estabilidad. Igualmente, se garantiza la relación sana, estable y regular del hijo con el padre con el que no reside habitualmente, y se fija un régimen de visita basado en el interés superior del niño, lo cual debe quedar determinado en el mismo instrumento en que se acuerda el cuidado personal. Esta es una de las innovaciones más significativas del proyecto, y merece una especial atención Como segundo aspecto relevante, la iniciativa establece que, mientras no haya acuerdo o decisión judicial sobre quién tiene el cuidado personal del niño, este no quedará a cargo de ninguna institución, sino que, supletoriamente, se entregará a la madre durante el juicio. Esta decisión mantiene el principio que actualmente establece la legislación. 36 En tercer lugar, el proyecto otorga criterios amplios a los jueces para cambiar al titular del cuidado personal del menor. En esta materia, se prioriza el interés de este, de manera que el tribunal siempre podrá conferir el cuidado personal al otro padre o radicarlo en uno de ellos cuando “el interés del hijo lo haga conveniente”. En cuarto término, se refuerzan las relaciones directas y regulares entre el padre no custodio y el hijo. En este aspecto, se define relación directa, regular y personal como “aquella que propende a que el vínculo paterno filial entre el padre no custodio y su hijo se mantenga a través de un contacto personal, periódico y estable”. Además, se establece la corresponsabilidad, de manera que ambos padres participen en la vida de los niños En quinto lugar, se dispone la patria potestad compartida, sea para padres que viven juntos o para los que tengan el cuidado compartido del hijo. Luego, se consagran criterios para que el juez determine lo que en cada caso será el interés superior del niño. A este respecto, se contemplan aspectos tales como el bienestar del hijo, su estabilidad y la evaluación que el niño haga, así como también su opinión, si ha alcanzado los 14 años. Finalmente, el proyecto establece los factores que el juez tomará en cuenta para aprobar un acuerdo de cuidado personal compartido, entre los cuales figura la vinculación afectiva del hijo con cada uno de sus padres; la aptitud de estos para garantizarle bienestar; el tiempo que cada uno de los progenitores le entrega a sus hijos; la evaluación de estos últimos, y la ubicación del domicilio de los padres. El señor LETELIER: Urge contar con una ley marco de protección de los derechos de los niños, las niñas y los adolescentes. Naciones Unidas lo han señalado en forma reiterada. Y el informe del Instituto Nacional de Derechos Humanos ha indicado que la materia en debate constituye hoy una de las áreas donde estamos en deuda. Por lo mismo, el inciso cuarto del artículo 225 que se propone para el Código Civil no me gusta. Presumir que siempre el niño, la niña o el adolescente debe estar con la madre me parece una visión cultural un tanto anacrónica. No está garantizado que tal determinación apunte al interés superior del menor. Ello depende mucho de las causales de la separación. Podría caerse en el absurdo de que se otorgue el cuidado del hijo a la madre cuando el motivo del término de la 37 relación fue la violencia de ella hacia él. Producida la separación, podría prolongarse el perjuicio al niño, si no se cambia la redacción de dicha norma. En tal disposición también se habla de que el juez puede modificar lo establecido cuando “el interés del hijo lo haga conveniente pero existe una diferencia entre lo que conviene al niño en determinado momento y lo que constituye su interés superior. Ello dice relación con una temporalidad distinta El señor LAGOS: Esta iniciativa viene a hacerse cargo de una realidad: durante mucho tiempo en nuestro país, por razones culturales, se ha establecido que el cuidado de los hijos debe radicarse principal, prioritaria y casi exclusivamente en la madre. La señora SCHMIDT (Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer).- El proyecto termina con el derecho de la madre de estar siempre al cuidado de los niños, privilegiando el cuidado compartido de ambos progenitores y la decisión y presencia de ellos en su crianza y educación. También evita generar mayor tensión al niño. Por eso, solo durante el juicio de tuición el menor tiene un lugar estable junto a su madre, mientras se llega a la decisión final, terminando con la situación actual en que siempre aquella es la que la tiene La señora ALVEAR.- Señor Presidente, esta es de las iniciativas que uno se alegra de discutir en el Senado, por cuanto tienen que ver con la habitualidad y el diario vivir de niños y niñas y de padres y madres. Todos sabemos de la situación que se produce cuando una pareja o un matrimonio se deshace y los padres dejan de vivir juntos. Es un drama para ellos y un duelo para los niños. A ese duelo como lo dijeron en la Comisión especialistas mediadoras en la materia- se agrega el que aquellos terminan siendo una moneda de cambio para exigir alimento: según lo que se obtenga, podrán salir con su padre Señor Presidente, evidentemente, voy a presentar, en su oportunidad, algunas indicaciones. Pero desde ya, no me parece adecuada la norma supletoria en el proyecto de ley aprobado en la 38 Cámara de Diputados, en virtud de la cual el niño queda a cargo de la madre si los padres no arriban a consenso. ¿Saben por qué? Porque bastaría con que esta siempre dijera que no, independiente del bien superior del niño, para que se le entregara el menor Lo mejor es que el conflicto llegue rápido a manos del juez, se resuelva y que el niño tenga estabilidad, para lo que resulta -insisto- fundamental la corresponsabilidad El señor TUMA.-En el artículo 225 propuesto se establece: “Si los padres viven separados podrán determinar de común acuerdo el cuidado personal...”. Luego, el inciso cuarto, señala: “Mientras no haya acuerdo entre los padres o decisión judicial, a la madre le toca el cuidado personal...”. Lo anterior es un despropósito. El artículo es absolutamente contradictorio. Por una parte, hace creer que el acuerdo busca la protección del niño y, por otra, dispone que si no hay consenso se hace una cosa distinta. Entonces, nunca habrá arreglo El señor WALKER (don Patricio).- Efectivamente, si hablamos de corresponsabilidad, es decir, que a los padres les asisten derechos pero también obligaciones en lo concerniente a la educación, a la crianza, no podemos establecer como sinónimos los términos “educación” y “residencia”. Muchas veces el niño vive con la mamá, pero se le impide al papá participar en todas las decisiones que dicen relación con el niño, por ejemplo, en qué colegio estudiará, qué enseñanza va a recibir, si tendrá o no alguna formación religiosa, en fin. Aunque uno de los padres no viva con el hijo, creo que resulta muy importante que aquel pueda participar en las determinaciones concernientes a su desarrollo. Y por eso la iniciativa aborda estas materias tan importantes, que espero podamos mejorar con algunas indicaciones durante la discusión particular. La señora ALLENDE: debemos dar este paso importante pensando en el bien superior del niño, a fin de reparar una situación de injusticia y dar una oportunidad a los padres separados, que hoy día no la tienen. Pero -insisto- también queremos una sociedad más equitativa no solo respecto de los hijos, sino además en cuanto a las responsabilidades domésticas presentes cotidianamente en un hogar 39 El señor ROSSI: Considero que la idea general de este proyecto es positiva. Pero se le deben introducir modificaciones El señor SABAG: La propuesta apunta a igualar la responsabilidad de los padres separados en el cuidado de los hijos, distribuyendo entre ambos en forma equitativa los derechos y deberes que tienen respecto de sus hijos. Para ello se modifica el Código Civil, en materia de cuidado personal de los hijos y de patria potestad, y las leyes de Menores y de Matrimonio Civil Indicaciones formuladas durante la discusión en general del proyecto de ley, en segundo tramite constitucional, que introduce modificaciones al código civil y a otros cuerpos legales, con el objeto de proteger la integridad del menor en caso de que sus padres vivan separados. Articulo 1º: 1.- Los Senadores Walker y Alvear proponen modificaciones al Art. 222 de la siguiente manera: a) suprímase el Inc. Primero b) Agréguese, en el inciso segundo la siguiente oración “Es deber de ambos padres cuidar y proteger a su hijo o hija, mantener una relación parental sana y cercana, y velar por la protección de sus derechos, en especial, por su integridad física y psíquica” c) Como inciso 2º, 3º y 4º agréguese: “La responsabilidad parental es el conjunto de derechos y deberes existentes entre padres e hijos, comprendiendo: 1º El cuidado personal; 2º La relación directa y regular en caso de no ejercerse por uno de los padres el cuidado personal; 3º La educación y establecimiento; 4º Los alimentos; 5º La orientación; 40 6º La representación legal; 7º La autorización de salida del país. 8° En general, la adopción de las decisiones de importancia relativas al hijo o hija, entendiéndose por tales aquéllas que inciden, de forma significativa, en su vida futura. Ambos padres ejercerán la responsabilidad parental de su hijo o hija no emancipado conforme a los principios de igualdad parental y corresponsabilidad, procurando, asimismo, conciliar la vida familiar y laboral. En el ejercicio de dicha responsabilidad, velarán por el interés superior de su hijo o hija, su derecho a ser oído, a mantener relaciones personales y contacto directo con sus padres y demás parientes cercanos, y a desarrollarse en compañía de sus hermanos y hermanas. 2.- Efectúese las siguientes enmiendas al Art. 223 a) Incorpórese, como inciso primero, el que sigue: “Los hijos e hijas deben obediencia a sus padres mientras permanezcan bajo su responsabilidad parental” b) Intercálese en el inciso primero, que pasa a ser segundo, después de la frase “queda siempre obligado a”, la locución “respetar y” 3.- Sustitúyase el Art. 224 por el que se indica a continuación: “El derecho y deber de cuidado personal consiste en proporcionar atenciones personales cotidianas al hijo o hija” 4.- Del senador Navarro: Agréguese los siguientes incisos primero a cuarto al artículo 224, pasando los actuales incisos primero y segundo a ser quinto y sexto: Art. 224.- “Es un derecho y un deber de ambos padres, sea que vivan juntos o separados, el cuidado y protección a sus hijos, velar por la integridad física y psíquica de ellos y procurar su orientación y beneficio en los aspectos de la vida que ellos lo necesiten. Los padres deberán actuar en forma conjunta en las decisiones que tengan relación con el cuidado, educación y crianza de los hijos” ooooo Numero 1º: 41 5.- Del Senador García-Huidobro y 6.- Senador Uriarte para reemplazarlo por los siguientes números 1 y 2: 1. agréguese: Art. 223 bis.- “El cuidado personal compartido es un régimen de vida que procura estimular la corresponsabilidad de ambos padres que viven separados, en la crianza y educación de los hijos comunes.” 2. Reemplácese el artículo 225 por el siguiente: Art 225.- “Si los padres viven separados, podrán determinar de común acuerdo que el cuidado personal de uno o más hijos corresponda al padre, a la madre o a ambos en forma compartida. El acuerdo se otorgará por escritura pública o acta extendida ante cualquier oficial del Registro Civil, y deberá ser subinscrito al margen de la inscripción de nacimiento del hijo dentro de los treinta días subsiguientes a su otorgamiento. Este acuerdo podrá revocarse o modificarse cumpliendo las mismas solemnidades” - No habiendo acuerdo entre los padres ni decisión judicial que determine a quién corresponderá el cuidado personal de los hijos menores, éste corresponderá a la madre, sin perjuicio de la relación directa, regular y personal que deberán mantener con el padre. 7.- El Senador Navarro para reemplazar el articulo 225: Art 225 “En correspondencia a la necesidad de que ambos padres mantengan el deber general de cuidado y protección de sus hijos de manera conjunta, se propenderá a que, cuando ambos padres vivan separados, tengan los padres el cuidado personal y compartido de los hijos en la forma establecida en la ley.” 8.- Los Senadores Walker y Alvear proponen las siguientes enmiendas en el Art 225: Toca de consuno a los padres, o al padre o madre sobreviviente, el cuidado personal de su hijo o hija.”. 9.- Incorporar el siguiente numeral nuevo: “Modifíquese el artículo 227, de la siguiente forma:” a) Intercálase en el inciso segundo, a continuación de la expresión “que se dicten”, la frase “acerca de la atribución del cuidado personal”. b) Agrégase el siguiente inciso tercero: “El juez podrá apremiar, en la forma establecida por el artículo 543 del Código de Procedimiento Civil, a quien fuere condenado por resolución judicial que cause ejecutoria, a hacer entrega del hijo o hija, y no lo hiciere o se negare a hacerlo en el plazo señalado por 42 el juez. En igual apremio incurrirá el que retuviese especies del hijo o hija y se negare a hacer entrega de ellas a requerimiento del juez.” Numero 3º: 10.- Los Senadores Walker y Alvear para modificar el Art. 229 proponen: a) Reemplazar en los incisos primero y segundo la frase “relación directa, regular y personal” por la siguiente: “relación directa y regular”. b) Eliminar en el inciso segundo, luego del término “contacto”, la voz “personal”. c) Suprimir la segunda oración del inciso segundo, que dice: “El régimen variará según la edad del hijo y la relación que exista con el padre no custodio, las circunstancias particulares, necesidades afectivas y otros elementos que deban tomarse en cuenta, siempre en consideración del mejor interés del hijo.”. 11.- Del Senador García-Huidobro y 12.- Senador Uriarte, para efectuar las siguientes modificaciones en el Art. 229 propuesto: a) Sustituir, en el inciso primero, la locución “directa, regular y personal” por “directa, regular y, en la medida posible, personal”. b) Suprimir el inciso tercero 13.- El Senador Navarro para reemplazar el inciso final del artículo 229 por los siguientes: “El juez podrá suspender, restringir o modificar el derecho y deber establecido en este artículo al padre o madre que no tuviere a su cargo el cuidado de los hijos y que incurriere en alguna de las conductas previstas en el artículo 225 o instigare a terceros a hacerlo. Sin embargo, por acuerdo de los padres o resolución judicial fundada en el interés del hijo, podrá atribuirse la patria potestad al otro padre o radicarla en uno de ellos si la ejercieren conjuntamente. Además, basándose en igual interés, los padres podrán ejercerla en forma conjunta. Se aplicará al 43 acuerdo o a la resolución judicial las normas sobre subinscripción previstas en el artículo precedente. De igual manera, constituirán motivo para la atribución anterior los mencionados en el inciso séptimo del artículo 225 del Código Civil.” Numero 4º: 14.- Del Senador García-Huidobro y 15.- Senador Uriarte para que se introduzcan las siguientes modificaciones en el Art. 244: a) Reemplázase el inciso segundo por el siguiente: “A falta de la suscripción del acuerdo, toca al padre y madre de consuno el ejercicio de la patria potestad.” b) Intercálase el siguiente inciso tercero, pasando los actuales tercero y cuarto a ser cuarto y quinto, respectivamente: “En el ejercicio de la patria potestad de consuno, los padres deberán actuar conjuntamente o uno con mandato otorgado por el otro. En caso de que los padres no logren alcanzar un acuerdo respecto a un asunto determinado, el asunto será sometido a la decisión de un mediador elegido de común acuerdo o por resolución judicial.”. 16.- Los Senadores Walker y Alvear para consultar en el número 4 un literal nuevo, del tenor siguiente Intercálase en el inciso primero, a continuación de la expresión “su otorgamiento”, lo siguiente: “, siendo oponible a terceros desde la mencionada subinscripción. Este acuerdo podrá revocarse, cumpliendo las mismas solemnidades.”. Numero 5º: 17.- Del Senador García-Huidobro y 18.- Senador Uriarte para suprimirlo Articulo 2º: Numero 2 22.- Los Senadores Walker y Alvear para reemplazar el artículo 41 que propone, por el que sigue: “Artículo 41.- Para los efectos del artículo 21 de la ley Nº19.947 y de los artículos 106 y 111 de la ley 44 Nº19.968, sobre Tribunales de Familia, y cada vez que esté llamado a aprobar un régimen de cuidado personal compartido, el juez tomará en cuenta, a lo menos, los criterios establecidos en el artículo 225 del Código Civil.”. 45 Nº BOLETIN: 8205-07 Fecha Ingreso: 19 MAR. 2012 Estado: Primer Tramite Constitucional Iniciativa: Moción Cámara de Origen: Senado Autores: - Alejandro Navarro Brain Con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los hijos cuyos padres estén separados, se propone el cuidado personal compartido de los menores. Para ello se contemplan los siguientes cambios: - - - Art. 222 del Código Civil. En el sentido que sea deber de ambos padres, cuidar y velar por la integridad física y psíquica de sus hijos, debiendo actuar en forma conjunta en las decisiones que tengan relación con el cuidado personal, educación y crianza y formación de los hijos.Art. 225 del Código Civil.Que el cuidado personal de los hijos corresponda a ambos en forma compartida y solo cuando haya desacuerdo juez decidirá a solicitud de cualquiera de ellos cuál de los padres tendrá a su cargo el cuidado personal de los hijos. Art. 229 del Código Civil.Se postula que aquel de los padres que no tenga el cuidado personal del menor no será privado del derecho ni quedará exento del deber, que consiste en mantener con él una relación directa y regular, la que ejercerá con la frecuencia y libertad acordada con quien lo tiene a su cargo. Actualmente este proyecta esta en el primer trámite constitucional.- 46 CAUSAS PRESENTADAS ANTE EL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL RELATIVAS AL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL INVESTIGACIÓN JURÍDICA ANÁLISIS DE LA CONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL ASOCIACIÓN LIBERTADES PÚBLICAS Coordinador Sergio Henríquez Galindo 47 FICHA DE SINTESIS CAUSA ROL Nº 1422-09 IDENTIFICACIÓN DEL FALLO TRIBUNAL CONSTITUCIONAL, declara inadmisible acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad con respecto al artículo 225 del Código Civil incisos primero y tercero, 15 de Octubre del 2009, Rol Nº 1422-09 HECHOS David Alejandro Abuhabda Coldrey, se dirige al Tribunal Constitucional con la finalidad de declarar inaplicable el artículo 225 del Código Civil en tanto otorga a la madre el cuidado preferente de los hijos, y el cual fue utilizado por la Ilustrísima Corte de Apelaciones para modificar la decisión emanada por el Cuarto Juzgado de Famila de Santiago. HISTORIA PROCESAL Demanda por cuidado personal de los hijos ante el Cuarto Juzgado de Familia de Santiago, el que otorga a razón del interés superior del niño el cuidado al padre, siendo esta decisión revocada por la Ilustrísima Corte de Apelaciones conforme al artículo 225 y a una interpretación distinta de este Interés Superior. A raíz de esto, el demandante presenta recurso de casación en el fondo la resolución apelada, obteniendo fallo desfavorable por la Corte Suprema, y posteriormente dirigiéndose al Tribunal Constitucional ARGUMENTOS DE LAS PARTES DAVID ALEJANDRO ABUHABDA COLDREY, señala que el artículo 225 incisos primero y tercero, establecen una discriminación arbitraria, conforme a lo que señala el artículo 19 N º 2 de la Constitución Política de la República, y que ambos incisos analizados en conjunto inclusive, tienden a confirmar lo señalado. Además basa sus argumentos apoyado en normas recientes que conceden igualdad con respecto a los hijos, tales como la Ley N º 19.505, que concede un permiso especial a los trabajadores en caso de enfermedad grave de sus hijos, en relación con el nuevo 48 articulo 199 bis inciso 2 del Código del Trabajo y de la ley Nº 20.047 que otorga permiso paternal para el nacimiento de un hijo. Complementa además con la Historia Fidedigna de la ley, modificaciones posteriores y jurisprudencia inclusive. ANDREA MARINA MOENA OLGUIN, respondiendo al traslado, solicita al Tribunal Constitucional que se declare la improcedencia del recurso en cuestión, puesto que no se cumplen los requisitos de procedencia contenidos en el articulo 93 Nº 6, a saber, no existe gestión judicial pendiente, puesto que la Ilustrísima Corte de Apelaciones con fecha 22 de septiembre de 2009, emitió un certificado en el cual señala, que la causa ingreso de corte 565-2009, RIT 3274-2006 se encuentra firme y ejecutoriada, además hace presente que la Corte Suprema ratifica el fallo de la Ilustrísima Corte de Apelaciones y hace además énfasis al no pago de pensiones alimenticias por 8 años de parte del recurrente. ARGUMENTOS DE DERECHO En cuanto a la admisibilidad de la acción deducida el Tribunal Constitucional, se refiere conforme al artículo 93 inciso primero Nº 6 e inciso undécimo de la Constitución Política, en relación con la Ley 17.997 en su artículo 31. DECISIÓN Se declara que se rechaza el requerimiento deducido. VOTO DE MINORÍA No presenta 49 FICHA DE SINTESIS CAUSA ROL Nº 1515-09 IDENTIFICACIÓN DEL FALLO TRIBUNAL CONSTITUCIONAL, declara inadmisible acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad con respecto al artículo 225 del Código Civil, 17 de Diciembre del 2009, Rol Nº 1515-09 HECHOS Juan Enrique Carrasco Pennaroli interpone demanda de Cuidado Personal ante el Juzgado de Familia de Talca, en la necesidad de que sus tres hijos tengan control médico de sus enfermedades y fundada en la inhabilidad de la madre para seguir ejerciendo y manteniendo el cuidado personal, en orden a afectar dichos cuidados y a denostar la figura paterna para impedir una relación directa y regular con los niños. Luego de entablar una demanda ante Tribunal de Primera Instancia, se dirige al Tribunal Constitucional con la finalidad de declarar inaplicable un precepto que eventualmente pudiera utilizarse en la resolución del cuidado personal. HISTORIA PROCESAL El Primer Juzgado de Menores de Talca ordena relación directa y regular a favor del padre, lo cual señala el recurrente no se ha cumplido. Con posterioridad interpone la demanda de Cuidado Personal ante el juzgado de familia de Talca, el cual aún no ha fallado. ARGUMENTOS DE LAS PARTES El recurrente señala que el artículo 225 en cuestión es manifiestamente inconstitucional, pues vulnera el articulo 19 Nº 2 de la Constitución Política de la República, lo cual es además apoyado por normas recientes que conceden igualdad con respecto a los hijos, tales como la Ley N º 19.505, que concede un permiso especial a los trabajadores en caso de enfermedad grave de sus hijos, en relación con el nuevo articulo 199 bis inciso 2 del Código del Trabajo y de la ley Nº 20.047 50 que otorga permiso paternal para el nacimiento de un hijo. Complementa además con la Historia Fidedigna de la ley, modificaciones posteriores y jurisprudencia inclusive. ARGUMENTOS DE DERECHO En cuanto a la admisibilidad de la acción deducida el Tribunal Constitucional, se refiere conforme al artículo 93 inciso primero Nº 6 e inciso undécimo de la Constitución Política, en relación con la Ley 17.997 en su artículo 47 F. A razón de esto, se observa que la acción carece de fundamento razonable, pues la existencia de gestión pendiente es abstracta, en el sentido de que no se observa una violación al precepto constitucional de la Carta Fundamental, y el Tribunal Constitucional no puede fallar conforme a hechos posible o eventualidades, si no a hechos concretos. DECISIÓN Se declara inadmisible el requerimiento interpuesto, teniéndose por no presentado para todos los efectos legales. VOTO DE MINORÍA Presentado por el Ministro Marcelo Venegas Palacios, quien estuvo por declarar admisible la acción deducida, por declarar que ésta cumple con todas las exigencias previstas a esos efectos en el numeral 6 del inciso primero y en el inciso undécimo del artículo 93 de la Constitución Política. 51 FICHA DE SINTESIS CAUSA ROL Nº 2156-2011 IDENTIFICACIÓN DEL FALLO TRIBUNAL CONSTITUCIONAL, declara inadmisible la acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad respecto al artículo 225 del Código Civil, con fecha 20 de noviembre de 2012. HECHOS El padre, PABLO ANDRÉS TORREALBA GÁRATE, interpone demanda de Cuidado Personal, con fecha 11 de marzo de 2011, contra la madre, Gabriela Mélendez Tormen, de profesión Médico Psiquiatra, ante el Primer Juzgado de Familia de Santiago, bajo el Rit C-1234-2011, fundada en la inhabilidad de la madre para seguir ejerciendo y manteniendo el cuidado personal, en orden a afectar dichos cuidados por sobreponer su interés por sobre el interés superior de las niños esto debido a que ambos niños son víctimas de agresiones en el colegio en el cual estudian, por lo cual ambos padres deciden el cambio de los hijos de establecimiento educacional y la madre, después de contemplados todos los trámites de cambio y producto de un ataque por parte de una de sus pacientes comienza a sufrir fobia laboral y decide no cambiar a los niños de colegio e impedir todo el contacto que pueda tener el padre con sus hijos. Luego de entablar una demanda ante Tribunal de Primera Instancia, se dirige el padre al Tribunal Constitucional con la finalidad de declarar inaplicable un precepto que eventualmente pudiera utilizarse en la resolución del cuidado personal. HISTORIA PROCESAL El Primer Juzgado de Familia de Santiago, al tiempo de presentación de este recurso, conforme a lo solicitado certifica que la causa antes señalada se encuentra en estado de tramitación y en etapa de audiencia de juicio. ARGUMENTOS DE LAS PARTES 52 Señala el recurrente que es inconstitucional el artículo 225 en cuestión específicamente, la frase “Lo haga indispensable, sea por maltrato, descuido u otra causa calificada” ya que vulnera en artículo 19 N°2 sobre Igualdad ante la Ley, el artículo 19 N° 23 de Igualdad ante las cargas públicas, el Derecho de Educación de ambos padres, consagrado en el artículo 19 N° 10, todos de nuestra Constitución Política de la República y además, el artículo N° 5 de nuestra Constitución, Interés superior del niño, en relación a la Convención Internacional de Derechos del Niño, artículo 3. ARGUMENTOS DE DERECHO En cuanto a la admisibilidad de la acción deducida el Tribunal Constitucional, se refiere conforme al artículo 93 inciso primero Nº 6 e inciso undécimo de la Constitución Política, en relación con la Ley 17.997. DECISIÓN Se rechaza el requerimiento de inaplicabilidad deducido por el actor, sin costas, por haber tenido motivos plausibles para deducir su acción. VOTO DE MINORÍA Presentado por el Ministro Raúl Bertelsen Repetto, quien estuvo por declarar admisible la acción deducida, por declarar que la disposición que contempla el Código Civil en el articulo en cuestión “excesivamente onerosa y desproporcionada pues exige la concurrencia de circunstancias tan altas y calificadas que constituyen una diferencia de trato que cabe calificar de arbitraria y que no tiene amparo en la Constitución”, y que esta “diferencia de trato entre padre y madre excede lo que es lícito hacer al legislador conforme a la garantía constitucional de igualdad ante la ley” por lo cual debiese declararse la inaplicabilidad de la norma impugnada. 53 FICHA DE SINTESIS CAUSA ROL Nº 2306-2012 IDENTIFICACIÓN DEL FALLO TRIBUNAL CONSTITUCIONAL, declara inadmisible la acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad respecto al artículo 225 del Código Civil, con fecha 20 de noviembre de 2012. HECHOS El padre, LUIS EUGENIO PALMA BUSTAMANTE, que se desempaña como empleado en el Liceo Experimental Manuel de Salas, contesta demanda de aumento de pensión de alimentos y conjuntamente interpone demanda reconvencional en contra de la madre del hijo de ambos, JOCELYN ÁLVAREZ CÁCERES, en el Segundo Juzgado de Familia de San Miguel bajo el Rit C-13032012 fundada en que las condiciones que entrega la madre no ofrecen garantía de respeto irrestricto por el interés superior del niño, tales como que el niño vive en una casa acompañado por tres adultos que son fumadoras y padeciendo él asma bronquial; que la vivienda en que habita el menor se encuentra seriamente dañada producto del terremoto de 2010 y además que la ubicación de ésta es en una población peligrosa como es Población Yungay. Otro factor a considerar para dicha solicitud al tribunal, es entregar al niño una mejor educación para ello el actor señala su intención de matricular al menor en el liceo donde desempeña sus labores y para ello además cambiar su domicilio a las inmediaciones del liceo. Luego de entablar una demanda reconvencional ante el Juzgado de Primera Instancia, se dirige el padre al Tribunal Constitucional con la finalidad de declarar inaplicable un precepto que eventualmente pudiera utilizarse en la resolución del cuidado personal. HISTORIA PROCESAL El Segundo Juzgado de Familia de San miguel, al tiempo de presentación de este recurso, conforme a lo solicitado certifica que la causa antes señalada se encuentra en estado de tramitación y en etapa de audiencia de juicio para el día 13 de septiembre del presente, suspendida ésta por no encontrarse afinadas las pericias solicitadas por esta parte, fijándose nuevo día y hora para el 31 de octubre del presente. 54 ARGUMENTOS DE LAS PARTES Señala el recurrente que es inconstitucional el artículo 225 en cuestión ya que vulnera en artículo 19 N° 2 sobre Igualdad ante la Ley. Además se vulnera el artículo 12 de la Convención Internacional sobre los Derechos del niño y el artículo 16 número 1 letra D, en conjunto con el artículo 14 de la misma convención Complementa. Se complementa además con la Historia Fidedigna de la ley, modificaciones posteriores y jurisprudencia inclusive. ARGUMENTOS DE DERECHO En cuanto a la admisibilidad de la acción deducida el Tribunal Constitucional, se refiere conforme al artículo 93 inciso primero Nº 6 e inciso décimo de la Constitución Política, en relación con la Ley 17.997. DECISIÓN Se acoge a tramitación el requerimiento deducido. Se deja constancia que la causa en cuestión aun esta siendo ventilada por el Tribunal Constitucional. 55 JURISPRUDENCIA NACIONAL RELATIVA AL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL INVESTIGACIÓN JURÍDICA ANÁLISIS DE LA CONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL ASOCIACIÓN LIBERTADES PÚBLICAS Coordinador Sergio Henríquez Galindo 56 JURISPRUDENCIA NACIONAL Santiago, dos de mayo de dos mil once: En autos, RIT N° C-1415-2008, RUC N° 08-02-0283060-k Causa que fue conocida por el juzgado civil de colina. Que luego fue apelada en la Corte de Apelaciones de Santiago y entro a la Corte Suprema por recurso de Casación en el fondo. Por sentencia de catorce de junio de dos mil diez, se acoge demanda de cuidado personal deducida, por lo tanto se entrega el cuidado personal al padre y se establece un régimen comunicacional directa y regular entre la madre y el hijo consistente en todos los fines de semana. Esta sentencia fue confirmada por la C. de apelaciones. Hechos: El niño es hijo de las partes y desde la separación ha vivido junto a la madre, manteniendo con el padre contacto directo y regular, regulado judicialmente. A mediados de 2008 el niño junto a su madre, hermanos y la pareja de su madre, se cambiaron de domicilio, lo que implicó también el cambio de colegio. El mismo año su padre dispuso que al niño se le realizara una evaluación psicológica, la que diagnosticó un trastorno adaptativo con sintomatología de ansiedad, depresión y temor de ser separado de su padre. El entorno del menor presenta problemas con la Figuera de la pareja de la madre a quien percibe como una persona irritable y agresiva y a su madre como distante y carente de recursos suficientes para satisfacer las necesidades de seguridad, cuidado y protección que requiere. En cambio el padre es percibido por el menor como una figura protectora, receptiva de sus necesidades. Derecho: La madre a su favor hace ver que no se ha tomado en cuenta el art. 225 del cc. Que establece ´´si los padres viven separados, a la madre toca el cuidado personal de los hijos´´, lo anterior supone la inexistencia de acuerdos o pactos entre las partes que alteren ésta regla. En este caso, los padres del menor no han celebrado una convención acerca de su tuición, por lo que, a la madre toca el cuidado personal del menor. Razonamiento de la Corte Suprema: Que en virtud de lo previsto en los artículos 225 inc. 3ro, 226 y 228 del código civil que establecen causales especificas, permiten por decisión judicial, modificar la regla del art. 225 del código civil. 57 La interpretación armónica de las normas citadas permite concluir que el juez de la causa puede modificar la convención de las partes, estando obligado a respetar el límite establecido por la ley. Solo podrá confiar el cuidado del menor al otro padre cuando el interés del menor lo haga indispensable y no podrá resolverlo cuando éste no hubiere contribuido a su mantención mientras estuvo al cuido del otro progenitor, pudiendo hacerlo. En estas materias debe tenerse siempre en consideración el interés superior del niño, como principio fundamental e inspirador del ordenamiento jurídico nacional. En virtud de lo expuesto y razonado por la Corte Suprema, el recurso en examen fue rechazado 58 Santiago, nueve de abril de dos mil doce: En autos, RIT N° C-1414-2009, RUC xxxxxxxxx Causa que fue conocida en primera instancia por el juzgado de familia de Colina, luego fue apelada en la C. de apelaciones de Santiago, y finalmente el recurrente dedujo recurso de casación en el fondo. Por sentencia de once de febrero de dos mil once, se rechazó la demanda de cuidado personal entablada por el padre, manteniéndose el cuidado personal de los menores en la madre. Fue confirmada por la C. de Apelaciones. Hechos: Se estableció que la madre sufre un trastorno bipolar que genera en ella estados depresivos y euforias y, consecuencia de ello, se genera daños sicológicos y de relación con sus hijos. La madre les daría malo tratos, lo que habría generado en los menores sentimientos de desprotección y abandono. Así mismo también hay problemas de convivencia con la pareja de la madre y finalmente la falta de preocupación o descuido materno en el cuidado y crianza de sus hijos lo que estaría provocando inestabilidad en ellos. Derecho: Se denuncia por el recurrente la infracción de los artículos 222, 225,226, 1698 del código civil, 42 de la ley 16.618, 16 y 32 de la ley 19.968, 3, 8 y 12 de la convención internacional de los derechos del niño y artículos 1°, 19 N° 1, 2, 3 y 7 de la constitución política de Chile. Se argumenta que se ha prescindido de estas normas relativas a establecer el derecho de los menores a vivir bajo el cuidado personal de su padre en circunstancias que el interés superior de los niños lo hacía pertinente. El recurrente sostiene, además, que se ha infringido las normas de la sana crítica pues los jueces han descartado el informe psiquiátrico sin argumento técnico sólido, no obstante haber quedado acreditado que la madre padece de una enfermedad del ánimo que afecta profundamente las relaciones interpersonales. Indica también que se infringen las normas constitucionales ya citadas, ya que, imponen la obligación de propender al fortalecimiento de la familia. Razonamiento de la Corte Suprema: 59 -De acuerdo a lo previsto en los arts. 225 inc 3ro, 226 y 228 del código civil que establecen causales especificas que permiten modificar la norma legal del art. 225. -El juez de la causa puede modificar la convención de las partes y aun desatender la regla del art. 225. -Debe tenerse siempre en consideración el interés superior del niño. –No obstante la trascendencia del principio citado, los jueces del fondo no le han dado la relevancia pertinente, pues se han limitado en sus consideraciones a preferir determinadas probanzas para reconocer por sobre toda otra motivación, el derecho legal de la madre para tener el cuidado personal de los hijos, reduciendo la cuestión a descartar la existencia de inhabilidad por parte de la madre o causa calificada para privarla del cuidado de sus hijos, sin atender a la condición de los niños, como sujetos de derecho de especial protección por el legislador. Por estas consideraciones se acoge el recurso de casación deducido por el demandante. 60 Santiago, tres de mayo de dos mil diez: En autos, RIT N° C-2127-2008, RUC N° 0820274001-5 Ésta causa fue conocida en primera instancia por el juzgado de familia de Iquique, luego fue alzada a la Corte de Apelaciones de Iquique. En contra de ésta última resolución se dedujo recurso de casación en el fondo. Se rechazo la demanda de cuidado personal interpuesta por la madre y se establece un régimen comunicacional a favor de la actora. La C. de Apelaciones de Iquique confirmó la sentencia apelada. Hechos: El demandado ha sostenido que posee la titularidad del cuidado personal del menor en virtud de lo acordado por las partes el 27 de septiembre del 2004. La demandada pese a no desconocer este acuerdo, ha alegado que el mismo no tendría validez, ya que, las partes al haber reanudado su convivencia el 30 de septiembre del citado año rige lo dispuesto en el art. 224 del código civil, norma que atribuye legalmente el deber de crianza y educación a la madre. Ninguno de los padres presenta inhabilidades patentes para ejercer el deber de crianza del menor, habiendo dedicado ambos, los mayores esfuerzos para hacerlo feliz. Ambos padres presentan habilidades parentales para cuidar un niño, sin embargo, el padre entiende de mejor forma las necesidades del hijo, prestando éste mayor apego con la figura paterna. Derecho: Se denuncia como error de derecho, haber arribado los jueces a la conclusión que el cuidado personal del menor le corresponde al padre, en razón de lo acordado por las partes el 27 de septiembre del 2004, puesto que ello significa desconocer que ellas, el 30 de septiembre de 2004 reanudaron su vida en común, por lo que debió regir nuevamente la norma del art. 225 del C. Civil, 61 conforme a la cual, en caso que los padres vivan separados, toca a la madre el cuidado personal del menor, norma que ha sido vulnerada según la recurrente. Sostiene que no puede sostenerse la decisión de los jueces en la aplicación de la regla del statu quo, de acuerdo a la cual se mantiene la situación existente, es decir, al menor bajo el cuidado del padre. Razonamiento de la Corte Suprema: -La demandada no se sustenta en ningún hecho, conducta u omisión que configure los presupuestos fácticos del inciso tercero del artículo 225 del Código Civil. –ninguno de los padres presenta inhabilidades para ejercer el deber de crianza del menor. –no se acreditó ningún tipo de maltrato que haga migrar el cuidado personal del niño a la madre. – ambos padres presentan habilidades para cuidar al hijo, sin embargo, el padre entiende de mejor forma las necesidades del hijo, presentando éste mayor apego al padre. – el interés superior del niño. Conforme lo razonado, no habiendo incurrido los jueces en los errores de derecho enunciados, el recurso de casación en el fondo es rechazado. 62 Santiago, diecinueve de mayo de dos mil nueve. RIT N° C-2928-2007, RUC N°07-2-0283380-7. Causa que fue conocida por juzgado de familia de Santiago, luego conoció una de las C. de apelaciones de Santiago. Y finalmente se interpuso un recurso de casación en el fondo en contra de aquella. Se rechazo en primera instancia, la demanda deducida por el actor (padre) por medio de la cual solicita el cuidado personal de sus hijos. Se alzó el demandante y una de las salas de la C. de Apelaciones, confirmó el de primer grado Hechos: La madre de los menores sufrió con ocasión del nacimiento de éstos una depresión post parto, que cambió su conducta, exacerbándose los rasgos infantiles de su personalidad. La madre no ha descuidado las funciones normativas, formativas, ni la satisfacción de sus necesidades afectivas, aún en el período post-parto y con las delegaciones que realizó en cuanto a cuidados directos de los menores. Se estableció una medida de protección, que estuvo centrada en la pretensión de la madre de extirpar la figura del padre en el desarrollo de sus hijos hasta el punto de querer que éstos creyeran que su padre era otra persona. Derecho: El recurrente denuncia la infracción del art. 32 de la ley 19.968, argumentando que los jueces no han apreciado la prueba rendida, vulnerando la sana crítica, ya que, se entrega el cuidado de los hijos a la madre, no obstante existir causas calificadas que no lo hacen procedente, tanto por el trastorno de personalidad, como por el interés de los mismos y su deseo de permanecer junto al padre. Expresa que estos yerros implican la vulneración del art. 3° de la convención internacional de los derechos del niño, en relación con el art 5° de la constitución, artículos 222, 225, y 227 del C.C. y 16 de la ley 19.968. Razonamiento de la Corte Suprema: -No son niños que presenten muestras de haber sido objeto de maltratos, o respecto de los cuales se haya ejercido en forma negligente su cuidado personal, que justifique alterar el cuidado que de ellos tiene la madre. –El recurrente desarrolla los planteamientos de su recurso partiendo de una base fáctica diferente a la determinada en la sentencia atacada. –Siendo el interés superior del niño un principio fundamental, no se advierte que los jueces lo hayan desatendido, por el 63 contrario, se ha respetado la regla de orden natural prevista en el art. 225 del C.C. –No se estableció en el fallo impugnado inhabilidad o causa calificada que le impida a ésta ejercer su rol, ni tampoco una situación de vulneración, peligro o amenaza para los menores. –Los jueces aplicaron las normas de una forma adecuada y no en forma desacertada como señalaba el recurrente. Por lo razonado y al no haber demostrado el recurrente los errores de derecho, el recurso de casación en el fondo es rechazado. 64 COLUMNAS DE OPINIÓN RECOGIDAS EN LA PRENSA (DIARIO LA TERCERA) RELATIVA AL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL INVESTIGACIÓN JURÍDICA ANÁLISIS DE LA CONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 225 DEL CÓDIGO CIVIL ASOCIACIÓN LIBERTADES PÚBLICAS Coordinador Sergio Henríquez Galindo 65 DIARIO LA TERCERA COLUMNA DISCRIMINACIÓN EN EL CUIDADO DE LOS HIJOS 25/10/2012 POR MAURICIO TAPIA Cuando se percibe una intensa demanda por igualdad en el país, sorprende que el proyecto de ley que modifica esta materia confirme la actual discriminación que existe contra los padres. EL DERECHO de las familias se ha modificado lenta pero radicalmente en Chile. Conforme a la transformación de las costumbres, los cambios han estado inspirados en la necesidad de introducir más igualdad, autonomía y protección. No obstante, varias deudas subsisten, como dan cuenta las discusiones recientes sobre la apertura del matrimonio a las parejas homosexuales, la restitución de la plena igualdad de la mujer casada en sociedad conyugal y la eliminación de la discriminación contra el padre en el cuidado de los hijos. Esta última regla, contenida en el artículo 225 del Código Civil, atribuye legalmente, luego de la separación, la custodia de todos los hijos (sin importar su edad) a la madre. La única justificación que se esgrime a favor de esta regla es que -supuestamente- disminuiría la “litigiosidad”. No obstante, la justificación es falaz, y la regla es contraria al interés del hijo, inconstitucional y envuelve un prejuicio contra la mujer. 66 Es falaz, porque lo usual es que esta disputa se plantee precisamente en el marco de un juicio de divorcio, donde debe acordarse por los padres, o decidirse por el juez, el cuidado personal de los hijos. Los Tribunales de Familia fueron creados para resolver estos asuntos y, por ello, el argumento parece estar movido por una infundada desconfianza en los jueces, como lamentablemente está ocurriendo en varios ámbitos. La regla es también contraria al interés superior del hijo, porque si bien con frecuencia puede ser conveniente que los niños (particularmente los lactantes) residan con la madre, ello no ocurre en todos los casos. La regla permite, por el contrario, que las madres sientan a los hijos como “de su propiedad”, lo que reduce la posibilidad de acuerdos que beneficien una repartición equitativa de los derechos y deberes entre los padres y la presencia de ambos en su crianza. La regla es, además, inconstitucional, pues no resiste ningún análisis desde la perspectiva del principio de igualdad, presentándose como una discriminación arbitraria contra el padre. Por último, fundada en una supuesta “aptitud natural” de la mujer para cuidar a los hijos, materializa una concepción prejuiciada y estereotipada de ésta, que no se condice con la creciente repartición equitativa entre el hombre y la mujer, de las labores de cuidado de los hijos y del hogar común, por una parte, y en la obtención de recursos y en el desarrollo profesional, por otra. En un momento en que se percibe una intensa y urgente demanda por igualdad en el país, sorprende que el proyecto de ley que modifica esta materia (actualmente en segundo trámite constitucional en el Senado) confirme esta regla discriminatoria. Tan inexplicable como aquello es que este proyecto ni siquiera permita al padre solicitar al juez el otorgamiento de un régimen compartido de cuidado personal, que en muchas situaciones podría lograr, en beneficio de los hijos, un sistema que asegure un tratamiento más equitativo entre los padres y la presencia de ambos en su crianza y educación. 67 Es de esperar que este proyecto de ley sea corregido. Difícilmente los ciudadanos entenderán cómo, en un momento como el actual, el Congreso decide confirmar una regla que perjudica a los hijos, discrimina al padre y envuelve una concepción prejuiciada de la mujer. 68 CARTAS AL DIRECTOR Discriminación en el cuidado de los hijos 27/10/2012 Señor director: En una columna publicada el 25 de octubre, el profesor Mauricio Tapia critica la regla de atribución del cuidado personal de los hijos a la madre, que subsiste en el Código Civil chileno, sin reparar en que se trata de una regla extrajudicial y supletoria de la voluntad de los padres. Sin advertir, además, que la regla opera también en el caso de hijos de madres solas, reconocidos voluntariamente por el padre. Está actualmente en trámite legislativo una reforma al Código Civil que regula la tuición compartida por ambos padres y mejora la situación de los niños en el caso de separación de sus padres. La ley en trámite busca eliminar una práctica judicial, que tiende a privilegiar a la madre en los juicios. Para corregir esta práctica se reafirma que es el interés del niño el criterio de atribución en juicios entre padres, no la “preferencia materna”. Es decir, la madre no tiene ni debe tener preferencia ni privilegio alguno en un escenario judicial, sino el niño. Dicho esto, hay que explicar la función de la regla supletoria que se ha resuelto mantener en la legislación chilena. Esta ley pretende evitar que sea necesario ir a juicio para que un niño tenga determinado el padre o madre que lo cuida y, por tanto, el padre o madre que lo representa legalmente. Esto ocurría antes de la Ley de Filiación (Ley Nº 19.585), por ejemplo, con los niños no matrimoniales. La eliminación de la regla supletoria sería regresiva. Significaría una discriminación para todos los niños no matrimoniales cuyos padres no viven juntos y para las madres solas que nunca han tenido vida en común con el padre de su hijo. Esta situación afecta a muchísimas mujeres chilenas. María Sara Rodríguez / Profesora de Derecho Civil / Universidad de los Andes 69 Discriminación en el cuidado de los hijos 30/10/2012 Señor director: En respuesta a mi columna, la profesora de la Universidad de Los Andes, María Sara Rodríguez, defiende la atribución preferente de los hijos hacia la madre. En su concepto, yo no habría reparado que se trata de una regla extrajudicial y “supletoria” que estaría inspirada en el interés del hijo, que evitaría ir a juicio y que beneficiaría sobre todo a los niños “no matrimoniales” y a las “madres solas”. Estas afirmaciones confirman lo sostenido: el fundamento esgrimido para mantener esta regla es erróneo e ideológico. Nadie discute que la atribución preferente opera “extrajudicialmente” y es ahí -y luego en el juiciodonde genera la discriminación arbitraria contra el padre. La ley atribuye a la mujer la custodia por el sólo hecho de ser tal, y sin reparar con quién de los padres se encontraría mejor el niño. Por otra parte, la supuesta regla “supletoria” de atribución preferente para la madre no es tal. Una regla supletoria se entiende como “voluntad presunta” de las partes y materializa una distribución equilibrada de derechos y deberes entre ellas. Nada de eso ocurre acá. No puede decirse que sea la voluntad presunta (al menos la del padre) ni menos que refleje una distribución equilibrada. Asimismo, no es efectivo que esta regla evite juicios. Generalmente se discute precisamente en un juicio de divorcio y en el resto de las situaciones cabe la pregunta sobre en qué medida esta regla injusta desincentiva al padre a demandar derechos en la custodia del hijo. Finalmente, sostener que esta regla beneficia a los hijos no matrimoniales y a las “madres solas”, además de envolver una terminología desdeñosa, olvida el interés del niño de que ambos padres puedan participar en su cuidado. Nuevamente, es el interés de las madres y sobre la base de un estereotipo el que es defendido por sobre el interés del niño. Mauricio Tapia 70 Discriminación en el cuidado de los hijos 01/11/2012 Señor director: No quiero polemizar con el profesor Mauricio Tapia sobre una materia que tiene un interés práctico y técnico. Los opositores a mi defensa de la regla supletoria me atribuyen animadversión al rol del padre en el cuidado de los hijos. Y también leen en mis palabras connotaciones que no tienen. Nadie más partidaria que yo de que los hijos estén bajo el cuidado de su padre y de su madre. Por eso, defiendo el matrimonio como forma normal de establecer un hogar, y cualquier regla que favorezca su estabilidad. El matrimonio es lo que mejor asegura la crianza y educación de los hijos por ambos padres. Pero la realidad indica que no todos los niños nacen como fruto feliz del matrimonio de sus padres, y que son frecuentes los padres ausentes y las mujeres abandonadas. Aun así, qué mejor para un niño que tener la seguridad del cuidado de su padre y de su madre. Todo lo que favorezca la mayor participación de los padres en el cuidado de sus hijos debe estimularse. Por eso, yo misma he apoyado los acuerdos de cuidado compartido cuando los padres no viven juntos, y he criticado una aplicación judicial errónea de la preferencia materna. Pero si no existiera la regla supletoria que defiendo, el cuidado de estos niños sería inmediatamente una cuestión litigiosa y judicial, una lastimosa y desagradable pelea por la tuición. ¿Por qué añadir esta pena a las carencias que ya sufren los niños por la separación de sus padres? María Sara Rodríguez / Profesora de Derecho Civil / Universidad de los Andes 71 Discriminación en el cuidado de los hijos 04/11/2012 Señor director: La profesora María Sara Rodríguez, en su carta publicada anteriormente, insiste en defender la discriminación arbitraria contra el padre en el cuidado de los hijos. Y lo hace, nuevamente, dejando en evidencia el sesgo ideológico de su defensa. La académica de la U. de Los Andes afirma que defiende el “matrimonio como forma normal de establecer un hogar”, pero que no todos los hijos nacen “fruto feliz del matrimonio de sus padres” y que es frecuente ver “padres ausentes” y “mujeres abandonadas”. Parece más bien un prejuicio ideológico de la profesora el sostener un estereotipo de mujeres víctimas de la maldad masculina. Para qué decir del hecho de vincular la felicidad familiar a la existencia del matrimonio. Además, vuelve a afirmar que la atribución preferente a la madre evita juicios. Lo repito con fuerza: tal afirmación es errónea y envuelve una desconfianza en el Poder Judicial. Es errónea, porque en la mayoría de los casos esta cuestión se discute en un juicio de divorcio ya iniciado. Por eso, los principales sistemas comparados no contemplan esta regla de discriminación. Más aún, si esta regla supuestamente evita juicios, ¿entonces por qué no atribuir la custodia de todos los hijos varones al padre? Sería tan insostenible -por inconstitucional- como la regla actual. Por último, si creamos tribunales especiales para resolver estos conflictos, ¿por qué se teme su intervención? Los tribunales de familia cuentan con las herramientas para decidir la forma de custodia que mejor asegure el interés superior del niño. Es de esperar que nuestro Parlamento legisle en la materia no sobre la base de estos sesgos ideológicos, sino en defensa del interés de los niños y de una forma consistente con leyes civiles que deben aplicarse en una república democrática. Mauricio Tapia / Profesor Universidad de Chile 72 Discriminación en el cuidado de los hijos 08/11/2012 Señor director: Hace unos días, María Sara Rodríguez se refirió en una carta a la importancia que le merece el padre en el cuidado de los niños, defendiendo el matrimonio como “forma normal de establecer un hogar”. Es tan delicada esta forma de esconder la discriminación de género, y al mismo tiempo imponer una visión de familia propia del siglo pasado, que aplaudo el texto, es un delicatessen. Lamentablemente, este país sigue anclado a visiones anacrónicas, y quienes deliberan estos asuntos en cortes logran imponer su visión estereotipada y prejuiciada al resto de la sociedad. Actualmente, existe en el Congreso un proyecto que “legitima” esta discriminación de género en contra del padre, a pesar de los numerosos ejemplos de hombres que han luchado por la tuición de sus hijos. Hay que recordar que recién en 1989 se estableció la modificación que entrega a la madre el cuidado de “todos” los hijos y que derogó la norma que atribuía al padre el cuidado de los hijos varones desde los 14 años. ¿Será que el padre nunca puede ser cuidador de sus hijos, a menos que esté casado? La misiva, además, explica que la norma es “ventajosa”, por cuanto “reduce la litigiosidad”. En otras palabras, no es tan importante la calidad de la norma, sino que reduzca la judicialización. Este argumento no merece palabras. Lo que ocurre hoy es claramente una discriminación de género que no se extingue por entregar un plan de visitas o por considerar que se otorga un deber a la madre, en lugar de un derecho. Esos son juegos de palabras y, en el mejor de los casos, eufemismos. Me recuerda a los dueños de esclavos que consideraban que su papel era divino, ya que ellos no se podían cuidar a sí mismos y era “su” deber hacerlo. 73 Jorge Fuenzalida 74