Por qué motivar a la lectura Implicación de la familia

MOTIVACIÓN A LA LECTURA:
SENTIR, IMAGINAR, CREAR
Por qué motivar a la lectura
Motivar a la lectura es fundamental para potenciar sus habilidades verbales
(vocabulario, estructuras gramaticales...), para hacerles más reflexivos y críticos,
para despertar su fantasía y su creatividad, para fomentar la empatía (tomando el
punto de vista de los personajes) y por el mero hecho de que disfruten de las
historias que anidan en los libros.
Los beneficios de la lectura en el ámbito escolar son inmensos. De hecho, los
niños lectores suelen ser mejores estudiantes, están más dispuestos a atender en
clase, se concentran más, aumentan la capacidad de retención y de memorización y
comprenden y asimilan los nuevos conceptos con mayor rapidez
Aun así, como dice Umberto Eco, “no hemos de leer para tener éxito, sino
para vivir más”. Porque leer es vivir otras vidas, viajar a otros lugares sin moverse,
trasladarse a otras épocas, soñar, aprender, sentir... Pero todo esto no lo saben los
lectores en potencia, por eso padres y educadores tenemos el papel de que lleguen
a sumergirse con placer en las páginas de un libro.
Nunca debemos olvidar que los libros nos hacen más libres. En efecto, si
fomentamos la lectura, contribuiremos a la maduración y el crecimiento de las
personas, educaremos la sensibilidad de las mismas y les proporcionaremos
herramientas para que sean más independientes y libres.
Implicación de la familia
Desde la familia cometemos una serie de errores cuando intentamos motivar
a la lectura. Los principales son sermonear, sobornar para que lean, criticar sus
preferencias, pedirles resúmenes y recordarles continuamente los beneficios de
leer.
En cambio, algunas actitudes que sí funcionan cuando pretendemos
adentrarles en el universo de los libros serían contarles cuentos, dar ejemplo (que
nos vean leer), hablar de libros, leer con ellos (implicarse) y regalar libros.
María Ángeles Chavarría
www.mirarconpalabras.wordpress.com
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El cine puede ser un gran aliado para que se interesen por los libros: “¿sabes
que esa película se basa en un libro?”
Antes de proponerles un libro hemos de ver si el lenguaje y la temática son
adecuados a su edad para que no se aburran; ahora bien, si ellos eligen el
libro hay que respetar su iniciativa solo prestándoles ayuda si nos la piden.
Es importante orientar y estimular, no convertir la lectura en una obligación.
Los cómics atraen por la combinación de la palabra impresa y la imagen.
Muchos grandes lectores comenzaron interesándose por ellos.
Si a los niños les gusta leer, hemos de seguir estimulándoles para mantener
vivo el interés.
Hacerles socios de una biblioteca es como abrirles las puertas a un mundo de
imaginación donde todo es posible.
Hemos de enseñarles a cuidar los libros y devolverlos en el plazo exigido y en
buenas condiciones.
Para incitar a la lectura nada mejor que rodearse de libros, tenerlos cerca,
convivir con ellos...
En definitiva, para motivar desde la familia, deberíamos tener en cuenta lo siguiente:
proponer
sugerir
incitar
FAMILIA
estimular
María Ángeles Chavarría
seducir
www.mirarconpalabras.wordpress.com
Implicación de la escuela
Según las edades las actividades aumentarán en complejidad.
(los niños despiertan a la lectura)
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Comenzar por obras de poco texto y muchos dibujos que fomenten la
imaginación.
Libros participativos.
De tapas duras, de tela...
Con música, animales...
Combinar la lectura con actividades en las que se sientan implicados como el
teatro, los bailes...
(comienzan a saber leer)
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Debemos acompañarles en el aprendizaje y animarles a que experimenten.
Relatos ilustrados y no demasiado largos.
Leyendas, fábulas, cuentos de hadas y magia que estimulen su imaginación.
Libros de poesía con rimas y palabras sonoras.
Se pueden realizar actividades como las lecturas dramatizadas, charlas
sencillas sobre libros, jugar a cambiar el final, títeres, encuentros con
escritores...
(edad en que se forman los futuros lectores)
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Relatos de suspense, de acción, de misterio, de detectives, de miedo o de
ciencia ficción en los que los protagonistas son un grupo de amigos que viven
aventuras insólitas y maravillosas.
Primeras novelas cortas.
Libros instructivos.
Cómics.
Actividades como libro fórum guiado para, tras haber leído el libro, compartir
opiniones y comunicar experiencias vitales metiéndose en la lectura.
Asistencia a la feria del libro o a alguna actividad literaria correspondiente a
su edad.
(se consolida el gusto por la lectura)
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La temática que les interesa es muy amplia: musical, deportiva...
Buscan en los libros explicaciones sobre lo que les pasa a ellos mismos y con
situaciones con las que se identifican: amistad, enamoramiento, conflictos
sobre la identidad.
Costará convencerles de que un título les interesa porque en esta etapa
creen saberlo todo y no se dejan aconsejar fácilmente.
María Ángeles Chavarría
www.mirarconpalabras.wordpress.com
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Buscar clásicos adaptados; mejor aún si ellos mismos se interesan por un
clásico en su versión original.
Pueden leer cualquier libro dirigido a los adultos siempre que estén
motivados.
Es el momento de introducirlos en la literatura de calidad y de seleccionar
autores que formen su gusto literario.
Animarles a la escritura creativa: fichas de personajes, relatos breves,
poemas...
Aprovechar su atracción hacia el lenguaje audiovisual (televisión, cine,
informática...) para convertirlo en aliado de la lectura en vez de en enemigo.
Actividades más elaboradas.
Visita a una editorial.
Club de lectura.
Lecturas poéticas...
En resumen, la escuela puede implicarse del siguiente modo:
guiar
formar
recomendar
ESCUELA
potenciar
María Ángeles Chavarría
crear
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