revistacinemagrafía ESTUDIOS SOBRE CINE Año I • N° 1 • 2015 DOSSIER El extrañamiento del sujeto y la estética fragmentada en el cine de Cristián Sánchez Director Vladimir Silva Oyaneder Editor Carlos Aguirre Aguirre Comité Académico Pablo Aravena Nuñez Pablo Corro Penjean Bruno Cuneo Alfonso Iommi Christian Miranda Colleir Valeria de los Ríos Sergio Rojas Cristián Sánchez Garfias Ximena Vergara Versluys Carlos Aguirre Aguirre Vladimir Silva Oyaneder Comité Internacional Esteban Mizrahi Mariel Ortolano Ángel Quintana Morraja Eduardo A. Russo ISSN: 0719-4579 © Derechos Reservados Edición no comercial Se permite la reproducción citando la fuente Imagen de portada: Los deseos concebidos (1982) Cristián Sánchez CONTENIDOS E D I T O R I A L 07 A R T Í C U L O S 10 Diario de vida a dos pantallas: Joven y alocada como autobiografía indeterminada CATALINA DONOSO 11 D O S S I E R 25 EL EXTRAÑAMIENTO DEL SUJETO Y LA ESTÉTICA FRAGMENTADA EN EL CINE DE CRISTIÁN SÁNCHEZ Muestra de cine estudiantil Escuela de Artes de la Comunicación 1970-1977 XIMENA VERGARA El cine Lateral de Cristián Sánchez ORLANDO TORRES, GONZALO PERUCCA Cristián Sánchez, La Imagen Flotante de un cine chileno DIEGO LORCA Lo político como espacio de clausura en el filme Vías paralelas CARLOS AGUIRRE AGUIRRE 26 42 100 134 Declaraciones sobre Tiempos Malos CRISTIÁN SÁNCHEZ GARFIAS Fábula nocturna. Sobre Tiempos malos de Cristián Sánchez IVÁN PINTO VEAS El otro round : Una reflexión acerca de la fijeza y el miedo a la esperanza VLADIMIR SILVA OYANEDER El viaje como laberinto temporal CRISTIÁN SÁNCHEZ GARFIAS Relaciones Secretas: fragmentos y retazos de la obra pictórica de Anelys Wolf ANELYS WOLF 151 172 180 199 225 E N T R E V I S T A S 242 Entrevista a Cristián Sánchez GONZALO PERUCCA Y ORLANDO TORRES Cristián Sánchez: a propósito de Tiempos malos GABY GONZÁLEZ 243 275 D O C U M E N T O S 291 Esperando a Godoy : la reconciliación con la realidad (Publicado en Revista Primer Plano, nº5, verano de 1973) HÉCTOR SOTO GANDARILLAS 292 Apuntes sobre El zapato chino (Publicado en ocasión del estreno de El zapato chino en 1979) ENRIQUE LIHN El film justifica los medios (a La Bicicleta con cariño) (Publicado en revista La Bicicleta, marzo de 1982) EDUARDO YENTZEN Los Deseos Concebidos (Publicado en el diario Die Frankfurter Rundschau, 12 de marzo de 1983) WÓLFRAM SCHUTTE-BALANCE Entrevista: Cristián Sánchez (Publicado en Revista Enfoque, primavera 1983) CONSTANZA JOHNSON Cristián Sánchez: El mundo secreto del secuestro (Publicado en Artes y Letras, El Mercurio, Domingo 11 de Abril 1999) ASCANIO CAVALLO El secreto mejor guardado de nuestro cine (Publicado en el diario El observador de Viña del Mar, Domingo 30 de Julio de 2006) MARCELO LÓPEZ M. Las precariedades pasan, las obras quedan (Exposición dictada en el marco de la presentación del DVD El zapato chino, 16 de Junio 2011) HÉCTOR SOTO GANDARILLAS 301 303 313 315 356 367 375 EDITORIAL En éste, el primer número de Revista Cinemagrafía Estudios sobre cine, hemos querido incluir un dossier acerca de la obra fílmica del director chileno Cristián Sánchez. Esto se debe, creemos, a que las problemáticas aparecidas en su cine representan algunos de los intereses y preocupaciones en los cuales hemos querido indagar y reflexionar como revista dedicada a la problematización cinematográfica. Ellas guardan relación con establecer un discurso que plantee como horizonte posible la lectura crítica y la reflexión teórica que sobrepase lo que podríamos llamar puramente cinematográfico. Es, en este sentido, que se pretende plantear una mirada que pueda hacer surgir en la filmografía los problemas, enfermedades y padecimientos de la sociedad, considerando que en el discurso retórico del cine, también pueden ser apreciables los problemas de la historia, de la filosofía o de la política. Esto en razón de que las cuestiones expuestas por las películas reflexionan sobre problemas nacidos en el presente y su explicación narra los padecimientos de su propia contemporaneidad. De este modo, entendemos que, las películas de Cristián Sánchez instalan en el cine chileno, por un lado, una escritura que busca recorrer la presencia de sujetos –o una alteridad- que circulan en una dirección discontinua y en la que se encuentran alojados múltiples sucesos y experiencias de contornos eclipsados que se niegan a salir plenamente a flote. Por otro lado, una conexión con el tiempo histórico que le es contemporáneo, es decir, un presente político opacado y, desde el cual, se abren líneas de fuga capaces de dibujar un discurso cinematográfico esquivo del lenguaje que ha sido ciertamente hegemónico. Ambas características nos hablan de una obra configurada por imágenes que se sitúan en el espacio de lo espectral, el cual ha sido quebrado por acontecimientos involuntarios que dan forma al umbral de lo inhabitable y de lo incómodo y, además, a la violencia como el único mecanismo posible de sobrevivencia en una zona donde la certeza es clausurada. De esta manera, entonces, el mismo Sánchez ha llegado a plantear en el texto Aspectos fundamentales de mi cine que: “Este saber, ignorado, pone en duda la identidad de mis héroes y los arrastra a extraños devenires. A vínculos con fuerzas que los desposeen en sus discursos de superioridad y los empujan hacia un Afuera que es como un llamado o una visión que imperceptiblemente los transforma en almas errantes, en fantasmas, que vagan trágicamente sin puerto, ni patria. Pero ese es el precio del encuentro con una multiplicidad de fuerzas que se organizan en la construcción de una patria más amplia, más habitable y cósmica”. Siguiendo este argumento, podemos apuntar que la obra de Sánchez no puede ser abandonada a su simple vínculo con los significantes y límites que impone el tiempo histórico en el cual se consolida el desarrollo de su cine, ya que su texto fílmico desdibuja los modos en que se discursiviza la experiencia cotidiana de la época, al nutrirse de tensiones que son resignificadas y que insinúan aquellas problemáticas que le dan un contenido crítico a su discurso. Así, creemos que su imagen sugiere un proceso fílmico complejo, donde los valores, la categoría de lo popular y las prácticas sociales, junto con innumerables elementos, gravitan en un espacio cinematográfico en el que las acciones parecen no encontrar hospitalidad ni en la estructura discursiva de lo que usualmente se llama cine político, ni en las formas estilística que para muchos eran demandantes en aquel entonces. En este sentido y, evocándonos a sólo un aspecto de su trabajo, podemos observar que las corporalidades de sus personajes -como el boxeador frustrado Dinamita Araya de El otro round (1984) o el ambivalente joven liceano R de Los deseos concebidos (1982)- si bien son un compendio de los infortunios de una atmosfera violenta, sobrepasan los condicionamientos de un contexto peculiar al ubicarse en las antípodas de todo paternalismo social. Este trágico síntoma que devela su cine, nos habla de una concatenación de significados que, creemos, deben ser traducidos y reinsertados en diversos registros que quiebren las usuales reducciones que se hacen acera de su obra. Una obra que, sin duda, se suspende en el hostigamiento de lo real. Bajo estas aspiraciones y reflexiones formulamos el dossier El extrañamiento del sujeto y la estética fragmentada en el cine de Cristián Sánchez compuesto de distintas textualidades que, proviniendo de variados campos disciplinares, han abierto nuevas interpretaciones sobre su obra y han dado como resultado un lugar donde surgen nuevas preguntas acerca de cómo podemos abordar con distintas herramientas, no sólo la obra de Sánchez sino que, también, el devenir de la historia, de la filosofía y del propio discurso retórico que presenta el cine pensado como dispositivo. Asimismo, hemos incorporado distintas entrevistas y documentos que permiten una lectura capaz de transitar por múltiples planos y formatos, para así instalar una reflexión profunda sobre el corpus fílmico que se estudia en el dossier de esta edición inaugural. A su vez, este número de Revista Cinemagrafía Estudios sobre cine, está acompañado de una sección de artículos de interés general que intentan dar respuesta a las inquietudes y preocupaciones que hemos mencionado. Agradecemos, de esta forma y, de manera muy especial a Cristián Sánchez por su dedicada ayuda, preocupación, y participación en las páginas sucesivas. Por otra parte, queremos hacer extensible los agradecimientos tanto al Comité Académico, como al Comité Internacional de la revista y a los colaboradores de este número. También a quienes desde distintos lugares e inquietudes han apoyado la cristalización de este proyecto. Todos ellos han mostrado gran interés y preocupación por aquello que a todos nosotros apasiona. Carlos Aguirre Aguirre Editor Vladimir Silva Oyaneder Director DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA CATALINA DONOSO Doctora en Lengua y Literaturas Hispánicas de la Universidad de Boston y Magíster en Literatura Chilena e Hispanoamericana de la Universidad de Chile RESUMEN El presente artículo examina la representación de la infancia en el largometraje de ficción chileno Joven y alocada (2012) de Marialy Rivas, enfatizando su inscripción problemática en ciertas categorías que intentan definir la infancia como concepto moderno. La cinta está caracterizada por una indeterminación en varios niveles: narrativo, de formato y de contenido, en la que permanece sin intentar resolverla. Este trabajo propone primero una breve revisión de las contradicciones que albergaría la idea de infancia como construcción cultural, para luego exponer de qué manera, en ciertos segmentos del filme es posible reconocer la exposición de tales contradicciones desde una perspectiva que subvierte las categorizaciones del orden adulto, y por el contrario promueve y reinvindica la voz del infante como territorio insurrecto. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso * Este artículo tiene su origen en el proyecto “Hogar y vagabundeo: estrategias narrativas de representación de la infancia en el cine y la novela chilenos contemporáneos”, Fondecyt Iniciación 2012, Proyecto N°11121528. * * Parte de este trabajo fue presentado en el coloquio “Un pie aquí y otro allá. La literatura en la frontera con otras disciplinas”, organizado en noviembre de 2012 por IDEA-USACH. 1 Los filmes a los que me refiero específicamente son: Los olvidados de Luis Buñuel (1950), Tire dié de Fernando Birri (1960), Crónica de un niño solo de Leonardo Favio (1965), Largo viaje de Patricio Kaulen (1967) y Valparaíso mi amor de Aldo Francia (1969). DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA* ** CATALINA DONOSO En varios artículos relativamente recientes me dediqué a analizar la representación de la infancia en el cine latinoamericano. En dichos trabajos, me concentré fundamentalmente en la figura del niño marginal, intentando rastrear en las cintas escogidas1 no solo la descripción que hacían de sus personajes infantiles, sino también de qué manera en los propios recursos audiovisuales que cada una utilizaba en su intento por representarlos, se podía hallar una suerte de diálogo con el concepto mismo de infancia. Así, el punto de partida era reconocer en la idea de infancia que hoy manejamos y aceptamos como natural, el andamiaje cultural que nos autoriza a llamar niños a seres humanos con ciertas características. Como construcción cultural moderna, la infancia albergaría, y así es como lo presenté en estos análisis, una serie de contradicciones, por ejemplo: el pasado versus el presente (o en algunos casos el futuro), ISSN 0719-4579 | 12 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso el control versus la autonomía, la perversidad versus la pureza. En su libro Theorizing Childhood, Alison James, Chris Jenks y Alan Prout proponen dos categorías básicas de modelos que pueden describir las concepciones vinculadas a la infancia a lo largo de la historia: los modelos pre-sociológicos y los modelos sociológicos. Es en estos últimos donde se enmarcan nuestras nociones más actuales de infancia, pero lo más interesante, siguiendo a los mismos autores, es que ambas categorías de modelos pueden convivir, en cuanto algunas ideas delimitadas por los modelos pre-sociológicos, impregnan todavía nuestro imaginario cultural respecto de lo que es y debe ser un niño o una niña. Así, entre los pares inversos que acabo de mencionar, el pasado opuesto al presente y la autonomía confrontada al control se podrían inscribir en los modelos sociológicos, mientras la maldad enfrentada a la pureza en los modelos pre-sociológicos. La infancia es pasado cuando hablamos de lo que James, Jenks y Prout denominan niño inconsciente, hijo de los aportes del psicoanálisis, y en el cual se reconoce la permanencia de los conflictos y traumas pasados en el adulto, lugar por tanto inestable y frágil, que no implica la superación total de la etapa anterior de la que tanto pretende distanciarse. En el caso del control y la autonomía, esta dupla se reconoce sobre todo en el interés más o menos reciente ISSN 0719-4579 | 13 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso por estudiar y comprender al infante, que Leslie Cadwell sitúa principalmente después de la Segunda Guerra Mundial, en su texto The elusive child, y que podemos vincular también, al menos como sustento teórico, al famoso estudio de Phillipe Ariés, El niño y la vida familiar en el Antiguo Régimen, donde describe cómo la preocupación creciente por el niño desde mediados del siglo XVIII contribuyó, más que a fortalecer su independencia, a reforzar una red de control y supervisión que no hizo sino mermar sus derechos como individuos. En el caso de la última dupla, no es difícil encontrar una buena analogía con la idea del “buen salvaje”, especie de tábula rasa, previa a la moral, pero cuya inscripción pre-cultural lo sitúa como territorio propicio para sembrar la mayor de las noblezas así como conductas sociopáticas y peligrosas. Actualmente, me encuentro trabajando en un proyecto que pretende ampliar esta investigación, incorporando piezas audiovisuales chilenas contemporáneas que aborden también la infancia desde una perspectiva problemática. El presente trabajo es un avance de algunos de los hallazgos hasta ahora recogidos, en relación a un filme en particular: Joven y alocada (2012) de Marialy Rivas. Me pareció relevante poner en contexto el análisis para vincular las ideas antes detalladas con las razones que me hicieron escoger esta cinta y el cómo explorarla. Lo primero es enfatizar que ISSN 0719-4579 | 14 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso lo que más me interesó de la profunda y doble contradictoriedad que habita la idea de infancia (doble en razón a esta serie de opuestos y a la convivencia de modelos actuales y arcaicos), era buscar obras en las que esa oposición no buscaba ser resuelta sino que se regocijaba en ella. Eso es lo primero que quiero acentuar respecto del primer largometraje de Rivas, su capacidad para permanecer, en varios niveles –narrativo, de formato, de contenidoen una indefinición gozosa que lo sostiene. En segundo lugar, me parece que pueden fácilmente reconocerse en esta cinta, las tres oposiciones que detallé antes: el pasado versus el presente (o el niño habitando en el adulto), la autonomía que disfraza el control y la pugna entre ser un continente de bondad o uno de perversión. En tercer lugar, y ya que una de las líneas fundamentales de mi dedicación a trabajar la infancia en el cine pasa por la posibilidad de rastrear en el aspecto formal de cada filme una manera de reforzar la idea de infancia presentada en ella, esta cinta chilena propone una productiva relación entre dos formatos: el cinematográfico y el de los nuevos medios. Esa doble inscripción tampoco aspira a resolverse y presenta de manera creativa una película que es un blog y un blog que es una película. Es esa indeterminación formal la que colabora en el retrato de una niña que es no-niña, que postula su propia redención y que a la vez se describe a sí misma y con orgullo como “fornicaria”, que encuentra en el espacio virtual su territorio de ISSN 0719-4579 | 15 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso libertad, el mismo donde corre el constante riesgo de ser descubierta. Esta investigación en la que trabajo actualmente y que busca ser una extensión de la que acabo de terminar, se propone también superar la marca social de la marginalidad para abrirse a lo que podríamos llamar infancia burguesa, complejizando aún más la aproximación a la infancia como concepto (en el sentido de reconocer que no hay una sino varias y diversas formas de definir lo que es ser niño o niña). LA VOZ INDETERMINADA Joven y alocada es un filme estrenado en 2012 en nuestro país, y que tuvo cierto reconocimiento en el extranjero, principalmente al obtener el premio al mejor guión en el Festival de Cine de Sundance. En Chile recibió calificación para mayores de 14 años, superando una pequeña disputa entre los miembros del Consejo de Calificación Cinematográfica, entre los cuales había quienes abogaban por ubicarla en el rango de filmes aptos para mayores de edad, que en Chile son los 18 años. Esta pequeña anécdota me sirve aquí para poner en discusión también el estatus de esa instancia aún más difícil de asir, que es la adolescencia. No he querido hacer una distinción taxativa entre niños y adolescentes, marcando como única frontera ISSN 0719-4579 | 16 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso conceptual a la adultez y su carácter de individuo formado, integrado y completo. Tanto la infancia como la adolescencia amenazan ese orden, fundiéndose en una sola fuerza de oposiciones no resueltas que lo confrontan. Nuestra calificación de películas no tiene, como la de otros países, el rango de 16 años, que tal vez habría sido el elegido por el consejo en este caso, pero que por no existir, dejó a esta cinta habitando aún más el espacio imaginario de una infancia tardía. A fin de ilustrar las ideas que acabo de exponer acerca de esta cinta, he decidido concentrarme en un par de escenas que aparecen como buenos ejemplos de la indeterminación que ella misma propone, tanto en la descripción de su personaje como en los medios que usa para llevarla a cabo. La cinta está dividida en “ebanjelios” (con b larga y jota), que funcionan a modo de entradas del blog y episodios del filme. El penúltimo de ellos, el número 10, se titula “Shao Hombre Viejo” y es en una de sus escenas que me quiero detener. Daniela, la protagonista, acaba de abandonar la casa de su amante femenina, justo después de que esta le recrimine ser “la otra” en las sombras, toda vez que Daniela mantiene un romance oficial con uno de sus compañeros de trabajo. La vemos caminar por una calle santiaguina mientras se va cuestionando su propia moral, el ISSN 0719-4579 | 17 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso camino que ha recorrido, no ya en un sentido literal sino metafórico, hacia una suerte de pozo de perdición. La cámara la sigue en un largo plano secuencia para luego integrar un pequeño corte que nos la presenta ahora desde la perspectiva opuesta, esto es, de frente. Esta pequeña sección muestra la eficacia del montaje, sin que éste afecte realmente a las tomas escogidas, más que por ese pequeño corte que divide la escena en dos. Así, el plano secuencia está también habitado por una voz en off que es doble, el relato de su consciencia y un susurro misterioso –que ha aparecido ya previamente en el filme y que es un poco la voz de la madre, pero también de su propio espacio de normatividad y juicio- y que hace las veces de segunda consciencia, o consciencia escindida, que refuerza pero a la vez cuestiona la voz interna de la protagonista. En la misma secuencia aparecen textos, no a modo de subtítulos o intertitles, sino que integrándose en un estatus igualitario con las imágenes. No solo cruzan la pantalla, sino que además se tachan, se sobrescriben, poniendo énfasis en una declaración fundada en su propia negación. El tema de la escena es la caída, su largo descenso hacia un infierno imaginario y la búsqueda de redención, pero es también siempre la duda: “Y ahora digo: Dios, quiero caminar por un pasillo limpio y recto, y eso, recto. ¿O no?”. La idea de montaje aquí no es, como dije, el simple corte y pegado de imágenes, sino su manipulación en el nivel sonoro y visual, al servicio de la significación ISSN 0719-4579 | 18 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso y no de la continuidad dramática. Un montaje que es a la vez planosecuencia y un plano-secuencia que es a la vez montaje. El “ebanjelio” que sigue se titula “Ahora vemos por espejo, oscuramente”, haciendo referencia a una frase contenida en la Primera Carta de San Pablo a los Corintios, texto que es frecuentemente citado y parodiado por Daniela en su blog autobiográfico. La misma frase es proferida por la madre de ésta, en el discurso que realiza durante el funeral de su hermana, tía de Daniela. En ese momento en particular se relaciona con el dolor y el desconcierto que embargan a la madre, pero desde una perspectiva más general, alude también a la confusión –sexual, religiosa, existencial- que inunda la vida de la protagonista en ese momento. A propósito de esta confusión y de su irresolución es que quiero referirme a otra escena del filme. Esta ubicación indefinida de la protagonista es algo que habita el filme permanentemente, y que es visitado también de una indefinición en el lugar de enunciación desde el que se declara. Su tono es a veces distanciado y cómico, reforzando una mirada cínica y crítica del entorno social y religioso en que se mueve; pero en otras ocasiones alcanza ribetes dramáticos, exponiendo así su propia inmersión y apropiación de los valores y principios contra los que se rebela. ISSN 0719-4579 | 19 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso LA MADURASOUND El último “ebanjelio” es en verdad una suerte de epílogo, de hecho se titula solamente “Post data”. La escena transcurre en una micro, locación que ya ha sido utilizada como especie de templo de introspección para la protagonista. Ahí presenciamos un monólogo que viene a dialogar directamente con las ideas que propuse al inicio respecto de la infancia: “Lo dijo Pablo en Corintios: Cuando yo era niño, juzgaba como niño, hablaba como niño, pensaba como niño, blablabla como niño. Mas cuando fui hombre, dejé lo que era de niño. Lo digo yo en ninguna parte: Cuando yo era niña, pensaba como niña, juzgaba como niña. Ahora que soy no-niña no he dejado nada, y no me importa, porque no sé si creo en la felicidars, ni en la calma, ni en la madurasound, ni en no sé qué, solo creo en estar perdida. Amén y amén y amén y amén”. Las últimas tres frases aparecen también como títulos que cruzan la imagen y dialogan de igual a igual con ella. Hay varias ideas que revisar en esta escena. La primera tiene que ver con la confrontación con el texto de San Pablo, al que opone la permanencia del estado de infancia a una idea de maduración o lugar de llegada para el individuo normalizado. Si tenemos en cuenta, además, que San Pablo, Saulo, es el ejemplo del converso, del perseguidor de cristianos convertido en uno de ellos, hay ISSN 0719-4579 | 20 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso también ahí una intención de desafiar el tránsito entre el pecador y el santo: se puede estar en un punto intermedio que no termina de definirse y encarna esa “perdición” que la protagonista defiende. Es digno de mencionar también que la oposición no sea niña/adulta o niña/mujer, que sería la analogía lógica con el texto de San Pablo, sino niña/no-niña, promoviendo ese lugar insurrecto y no definido, no terminado (la niñez), como su propia medida. En tercer lugar, la maduración o la adultez es aquí la madurasound, un concepto lúdico e irreverente, que cuestiona la solemnidad del adulto en el que debería aspirar convertirse. Me quiero detener un poco en la importancia de esta denominación, creada por la autora del blog que inspiró la película, y que puede leerse desde lo que Andrea Jeftanovic señala en la Introducción de su libro Hablan los hijos. Discursos y estéticas de la perspectiva infantil en la literatura contemporánea: El narrador niño siempre va a ser una posibilidad de discurso alternativo, a partir de las convenciones que estipulan la parcialidad de su mirada, la incapacidad para explicar algunas cosas, su vulnerabilidad. Este lugar “desventajado” será utilizado por los autores para inscribir una resistencia, un discurso “al reverso” del lenguaje y las ideologías tiránicas, generando así una forma alternativa de saber y construyendo una subjetividad particular (29). ISSN 0719-4579 | 21 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso Así, la idea de madurez es travestida por su doble, la madurasound, una jerga que puede considerarse “desventajada” por incorrecta, pero que a la vez supera a su versión culta, en cuanto la desborda en significaciones. La madurasound es la madurez pero es al mismo tiempo la necesidad de cuestionar, burlar y resemantizar sus implicaciones. Como acabo de mencionar, el filme se basó en el blog homónimo de Camila Gutiérrez, que recogía sus experiencias como adolescente hiper sexualizada en una familia evangélica. Así, la cinta se cruza también con los territorios de la autobiografía, lo que enriquece aún más el análisis de la perspectiva infantil. Históricamente, el niño ha sido considerado un sujeto subalterno o periférico (Jejtanovic 28), cuya voz no posee los mismos derechos de ser escuchada, conservada y compartida que la del adulto. En este sentido, la creación de vocablos o expresiones que deforman (en este caso voluntariamente) el lenguaje aprendido como parte de los procesos de socialización, puede reconocerse como una de las “tretas del débil”, de las cuales echa mano para restituir, desde la subversión, su posición en el marco social y cultural. Un acucioso estudio realizado por Lorena Amaro, Ghislaine Arecheta, Esteban Castro y María José Delpiano, revisa la aparición de la voz infantil en textos autobiográficos de la literatura chilena. Si bien en el siglo XX ISSN 0719-4579 | 22 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso surge con mayor fuerza este punto de vista como uno válido, al que se le reconocen además sus propias particularidades y modulaciones. Estos nuevos textos vienen a resistir al discurso positivista anterior que lo que quería era, a través de la remembranza de la infancia, reforzar y fundar un sujeto adulto coherente y cohesionado (Amaro et al 145). Las estrategias discursivas de Camila Gutiérrez en el blog y de Daniela, la protagonista del filme, se enmarcan en esta tradición reciente, la de restaurar la experiencia infantil como lugar de enunciación válido, respetando por cierto su inscripción anómala e incómoda para la ordenación social adulta. En Joven y alocada, la madurasound es un desafío a las normas que tratan de catalogar la infancia en casilleros que siempre le quedan estrechos a fin de, por lo demás, algún día llegar a deshacerse de ella. En ese sentido, la cinta puede leerse como la reivindicación de la energía caótica e indefinible del infante sublevado. ISSN 0719-4579 | 23 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DIARIO DE VIDA A DOS PANTALLAS: JOVEN Y ALOCADA COMO AUTOBIOGRAFÍA INDETERMINADA • Catalina Donoso BIBLIOGRAFÍA Amaro, Lorena, Ghislaine Arecheta, Esteban Castro y María José Delpiano. “Los saberes ocultos: La infancia en los textos autobiográficos chilenos. Acta sociológica, N°53. Septiembre-diciembre 2010. 123-146. Impreso. Ariés, Philippe. “Capítulo II: El descubrimiento de la infancia”. El niño y la vida familiar en el antiguo régimen Web. 8 mayo 2014. http://201.147.150.252:8080/jspui/bitstream/123456789/1346/1/Texto%2015.pdf Cadwell, Leslie (ed.). The elusive child. London: Karnac, 2002. Impreso. James, Alison, Chris Jenks y Alan Prout. Theorizing Childhood. Oxford: Polity Press, 1998. Impreso. Jeftanovic, Andrea. Hablan los hijos. Discursos y estéticas de la perspectiva infantil en la literatura contemporánea. Santiago: 2011. Impreso. Joven y alocada. Dir. Magaly Rivas. Act. Alicia Rodríguez, Aline Küpenheim, María Gracia Omegna. Fábula, 2012. Fílmico. ISSN 0719-4579 | 24 MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL ESCUELA DE ARTES DE LA COMUNICACIÓN 1970-1977 XIMENA VERGARA Licenciada en letras y en estética, diplomada en teoría de cine y magíster en literatura de la PUC, donde actualmente realiza sus estudios de doctorado en literatura. RESUMEN Lo que se presenta a continuación es el registro de un fragmento de la discusión del primer día de la Muestra de Cine Estudiantil de la Escuela de Artes de la Comunicación, específicamente la parte en que debatieron profesores y alumnos luego del visionado de un conjunto de cortometrajes. Estos fueron Cosita (1971) ficción de Cristián Sánchez; No virar a la izquierda (1971) ficción de Carlos Wittig; Caperucita (1972) ficción de Rodrigo González; La cortina (1973) ficción de David Vera Meiggs; Tríptico Paraíso (1973) ficción de Carlos Pinto; Casas viejas (1977) ficción de David Vera Meiggs; La huesa (s/f) documental de Domingo Robles; y Obituario (s/f) ficción también de Robles. Todos estos materiales, a diferencia de muchos perdidos o posiblemente destruidos, forman parte del catálogo del Archivo Fílmico UC1. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 27 MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977* XIMENA VERGARA * Este documento forma parte de los materiales de trabajo del proyecto de Investigación “El desafío de la televisión el cambio de las audiencias para el teatro y el cine. Un caso de estudio: la Escuela de Artes de la Comunicación UC, 1968-1978” (Fondecyt Regular n°1131115, 2013-1015), en el que participan Susana Foxley, Milena Grass, Jorge Iturriaga, Pablo Julio, Rodrigo Moreno, Isabel Sierralta y quien escribe. Si bien muchas veces las obras primerizas de los directores son a juicio de muchos, simples ejercicios audiovisuales, las intenciones que hay detrás de estas –se logren o no– pueden dar pistas de posiciones estéticas germinales. En el caso de Sánchez estas pequeñas obras fueron realizadas en la Escuela de Artes de la Comunicación (1968-1978), un proyecto docente de la Universidad Católica que estuvo motivado, entre otras cosas, por la Reforma Universitaria. Las particularidades de esta escuela fueron variadas: se trató del primer espacio universitario de formación cinematográfica profesional, tuvo un enfoque docente marcado por la enseñanza interdisciplinar, e incorporó como problema técnico, social y teórico el asentamiento de la televisión. Las audiencias estaban en movimiento, en la deriva de las pantallas grandes y las chicas, y empezaban a necesitarse expertos. En esta línea audiovisual, la Escuela impartió las carreras de Director artístico con Mención en Cine, en Televisión, además de la mención en dirección teatral, y la ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 28 carrera de Actuación. En el caso de la Mención en Cine, la Escuela formó a destacados directores como Sánchez, Ignacio Agüero, Ricardo Larraín, entre muchos otros. En este contexto es entonces, en donde se sitúa la Muestra de Cine Estudiantil realizada en 1977, en la que se mostraron de forma retrospectiva cortometrajes documentales y de ficción realizados por los alumnos de EAC entre 1970 y 1977. Lo central aquí fue que luego de las sesiones de visionado se discutieron fundamentos técnicos y estéticos. Se expresan aquí, por tanto, posturas de alumnos y profesores. Y en el trayecto van quedando demarcadas dos generaciones, una contextualizada en la Unidad Popular y otra restringida técnica y expresivamente por la dictadura. Si bien el objetivo de toda discusión, y esta Muestra no escapa a esto, es armar y desarmar, postular y cuestionar idearios, en este diálogo se advierten ciertas características. La que nos interesa aquí tiene que ver con el posicionamiento de Sánchez frente a la libertad creativa de la primera generación de la que formó parte, y también su posición frente al cine. Una postura embrionariamente metacinematográfica y deconstructivista, que marcará su cine posterior como ha señalado Jorge Ruffinelli: “Mientras por lo común los cineastas niegan u ocultan con denuedo las huellas del cine anterior, a menudo bajo el ropaje neutralizador del realismo y del ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | 1 El MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara Archivo Fílmico de la Universidad Católica resguarda un importante acervo cinematográfico, compuesto por la suma de materiales del Instituto Fílmico y aquellos realizados en la EAC, ambos de la UC. Entre las piezas, se encuentran documentales de lineamiento más autoral y otros por encargo, ficciones y un conjunto importante de spots teatrales que dan cuenta de una forma particular de difusión del teatro en la época. Se conservan aquí las realizaciones del fundador del Instituto Fílmico, Rafael Sánchez, y ejercicios realizados por alumnos de EAC, entre muchos otros. Los materiales fueron catalogados por Carmen Brito, Carlos Ovando y Francisco Venegas, y disponen de completas fichas técnicas y temáticas. | 29 naturalismo, Sánchez enfatizó la condición constructiva, intelectual, experimental de su cine, y la desarrolló sin timideces como relato fílmico de alta cualidad innovadora” (p. 14, en El cine nómada de Cristián Sánchez. Santiago: Uqbar, 2007.). En este ambiente, claro está, las figuras de Ruiz y de Godard se volvían relevantes. Lo que se presenta a continuación es el registro de un fragmento de la discusión de la Muestra del primer día, específicamente la parte en que debatieron profesores y alumnos luego del visionado de un conjunto de cortometrajes. Estos fueron Cosita (1971) ficción de Cristián Sánchez; No virar a la izquierda (1971) ficción de Carlos Wittig; Caperucita (1972) ficción de Rodrigo González; La cortina (1973) ficción de David Vera Meiggs; Tríptico Paraíso (1973) ficción de Carlos Pinto; Casas viejas (1977) ficción de David Vera Meiggs; La huesa (s/f) documental de Domingo Robles; y Obituario (s/f) ficción también de Robles. Todos estos materiales, a diferencia de muchos perdidos o posiblemente destruidos, forman parte del catálogo del Archivo Fílmico UC1. Finalmente, quienes participaron en este primer día de la actividad fueron las profesoras de la Escuela, Filma Canales, María de la Luz Hurtado, Consuelo Morel (moderadora), y Alicia Vega, En el caso de los alumnos participaron Carlos Besa, Gerardo Cáceres, Álvaro Godoy, Jaime Rippes, además de Carlos Ochsenius, alumno ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 30 de Sociología que tomaba cursos en EAC. En este primer día, además, las exposiciones estuvieron a cargo de la profesora Giselle Munizaga y del alumno Cristián Sánchez. 2 Este cortometraje de Carlos Wittig trata sobre las fantasías de un hombre y una mujer que bajan juntos en el espacio claustrofóbico e incómodo de un ascensor. La apertura de la puerta en los distintos pisos -que va dando la bienvenida a otros personajes, como señoras que “conventillean” o niños boy scouts-, se vuelve pretexto para fantasear puertas afuera: por jardines idílicos o por espacios abiertos en donde la mujer está cautiva. La representación del amor se manifiesta, por tanto, desde la idealización y el platonismo. 3 En su época de estudiante, Gerardo Cáceres dirigió cortometrajes como Al margen (1997) o Salto Alto (1978) y escribió una de las pocas críticas de la época que se hicieron a El zapato chino. DISCUSIÓN POSTERIOR A LA MUESTRA Luis C. Sánchez: Entre Cosita y No virar a la izquierda podría existir una relación: la realidad en ambas se encuentra mediatizada, pero de manera distinta. En esta segunda película la realidad está mediatizada por la visión idealizada que impone ciertos códigos que la sociedad se ha dado a sí misma; en cambio, Cosita intenta rescatar ciertos códigos que se suponen son reales. La desmitificación que opera aquí parte de una realidad concreta que es la fotonovela, un código que funciona realmente así. En No virar a la izquierda no hay desmitificación del amor, de la relación de la pareja tradicional2. Y el relato apoya esta concepción, por eso la película está bien lograda dentro de lo que es, pero no es más que eso. Gerardo Cáceres3: Algunas de las películas que hemos observado, no todas, enfrentan un problema cultural. Son películas sobre la cultura, en cuanto ella es expresión de una realidad, pero no intentan sacar los problemas que se encuentran “por debajo” de la cultura, es decir, no son problemas sacados de la realidad misma. Los problemas que ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 31 pueden ser interesantes desde el punto de vista de la cultura no son, a lo mejor, tan sustanciales, tan significativos, de tanta fuerza como los de la realidad de un determinado momento. Luis C. Sánchez: En definitiva, toda película es sobre la cultura… Tu afán, lo que está tratando de hacer es proponer un arte totalizador de la realidad, que dé las claves, que sea una especie de metáfora, de modelo de la realidad. Creo, en cambio, todo lo contrario, que el arte debe ser cada vez más específico de determinadas situaciones. Ojalá haya un arte cinematográfico que explore las subculturas que en Chile son tan abundantes y que nadie ha expresado, salvo algunos realizadores como Raúl Ruiz, que se han dado una tarea de indagación sobre los mecanismos reales de comportamiento de ciertos sectores sociales chilenos. Y a partir de ahí hay que elaborar una dramaturgia, un cine. Cine que es consecuente porque una forma que no nace de una imposición cultural, de un bagaje técnico aprendido de antemano con el cual se trata de aprehender la realidad o aplicársela mecánicamente, se trata de un cine que nace precisamente de las posibilidades latentes de esa realidad determinada. Creo que son dos puntos de partida distintos. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 32 C. Ochsenius: Se decía que muchas de estas películas tienen como objeto de preocupación la cultura o determinados aspectos de ella, es decir, una realidad mediatizada culturalmente y no la realidad misma. Pero el problema es que jamás la realidad se presenta a nuestros ojos de manera desnuda, en sí misma, sino a través del prisma de determinados marcos culturales compartidos. Cultura para mí -por ejemplo el “mundo cultural” de la fotonovela o del melodrama-, significa todo el código valórico a través del cual un determinado grupo social ve la realidad, la entiende y actúa en ella. Por eso, los valores que conforman una determinada cultura o subcultura no son entes informes, etéreos, sino realidades concretas que se encarnan en la acción, en el vivir y sentir de esos hombres. Y esto es la realidad, la realidad para los hombres que comparten ese código cultural, que el artista puede desmitificar o no. Jaime Rippes: Luis Cristián hacía al principio una distinción entre el trabajo en casa, el hecho en la Escuela y el hecho de forma independiente. Incluso en las películas que hemos visto se nota esa diferencia (por ejemplo, en las de Domingo Robles). ¿Cuál ha sido tu trabajo? Tus películas, ¿en cuál de estas líneas se insertan? ¿o son el resultado de una síntesis en que al final cedía un poco la Escuela y otro poco tú? ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 33 Luis C. Sánchez: No sé quién cedía, me imagino que la Escuela. En ese tiempo, la Escuela no se preocupaba de lo que pudiera hacer cada alumno en especial. Se le entregaban los medios y cada cual se planteaba las cosas como quería. El profesor operaba más bien como guía en los aspectos técnicos y los alumnos nos preocupábamos de todos los aspectos que significan adoptar una forma para relatar un determinado tema, cifrar o descifrar una realidad. Teníamos bastante libertad en ese tiempo. Alicia Vega: Hay algo que me conmueve al ver estas películas y es lo que señala Luis Cristián: la libertad que ha tenido cada alumno para manejar su tiempo cinematográfico. Esto es algo evidente en todas las películas. En general, me parece que el tiempo cinematográfico está bien usado. Con respecto a la forma cinematográfica, en casi todas resulta distinta, son planteamientos diferentes acerca de lo que es el cine. Ahora bien, en el cine, una cosa es clara: una cosa es lo que se pretende hacer y otra lo que efectivamente se realiza. El tiempo embellece las cosas, por eso al analizar estas películas, hay que ver lo que objetivamente percibimos hoy en ellas, incluso si tomamos en cuenta las intenciones de sus autores. A mi juicio, el máximo valor de las películas reside en su honestidad y hay que contemplar el hecho de que la mayoría son las primeras películas de cada realizador. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 34 Moderador: ¿Antes, había mayor o menor énfasis en los aspectos de la construcción dramática de los films? ¿Era importante para ustedes como lo es para la generación actual? Luis C. Sánchez: Justamente lo que nosotros no queríamos era acceder a una construcción dramática de las películas. Pienso que, por ejemplo, Cosita es un punto de partida para un cine de deconstrucción dramática. Conocí los mecanismos dramáticos en los cursos de David Benavente (que eran muy buenos), no sé si los estudié a fondo o no, pero lo que sí sé es que existe un determinado cine que utiliza ciertos mecanismos dramáticos que a mí me parecen ilegítimos, coercitivos con respecto a la propia obra. Por eso, lo que hemos pretendido hacer poco a poco, a medida que hemos ido trazando nuestra posición teórica -y digo “nosotros” porque éramos varias las personas que trabajábamos en lo mismo en esa época-, es ir descentrando nuestras obras del punto de vista de la dramaturgia tradicional y de las formas usuales del relato. Intentábamos buscar otra manera de estructurar las series o las secuencias y hemos encontrado una forma un poco repetitiva (que tiene un cierto parentesco con las novelas de Robbe-Grillet) en que las secuencias se van reiterando y son siempre inversiones o derivaciones de la misma secuencia inicial de significado. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 35 Así, la obra progresa en espiral. En la Muestra de hoy, no hay nada en que se pueda ver este proceso. Cosita, por ejemplo, no se proponía nada de esto todavía. En esta película yo no quería hacer cine, tenía una resistencia al cine, no sabía hacer cine, no me interesaba la luz, no quería hacer cosas dramáticas. Creo que lo único que me interesaba era descontruir esos mecanismos. Es la misma posición que tengo ahora, claro que más sistematizada y teorizada: descontruir los códigos cinematográficos que utiliza el cine comercial y todos los códigos que representen la ritualización de los hechos. En el fondo, el trabajo nuestro ha sido el de negar estos códigos y de afirmar la obra como totalidad de significación. Las películas que se han visto ahora marcan el inicio de un punto de partida de esta posición, nada más. En ese tiempo no conocía a Bresson ni el tipo de actuación hierática; no sabía lo que era el plano secuencia, no tenía idea de que una escena, en vez de filmarla en veinte o treinta planos, podía hacerlo en un plano; no sabía quién era Andy Warhol. En suma, no sabía cine. Moderador: En síntesis, la gran búsqueda de esa época era hacer un cine para ¿qué? O contra ¿qué? ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 36 Luis C. Sánchez: Parece contradictorio: contrario al cine. Es decir, defendía al cine atacándolo. Lo defendía porque de hecho estaba utilizando el medio, pero para volverlo en su propia contra. Quería hacer cine contra el cine, contra las opciones cinematográficas que yo percibía en esos momentos como únicas y no como códigos históricos, como una determinada manera histórica de hacer y entender el cine. Álvaro Godoy: ¿No puedes expresar en términos positivos esa búsqueda? Luis C. Sánchez: No, en esa época no podía porque desconocíamos todo un proceso de la historia del cine que significa determinados autores, determinadas técnicas aplicadas a ciertos momentos, determinadas formas de montaje, como por ejemplo el plano secuencia. En suma, no tenía alternativas, las desconocía. La única actitud que podíamos tener era atacar esos códigos cinematográficos, no aceptarlos. Álvaro Godoy: ¿Pero tú estabas a favor de qué? ¿A favor de no utilizar ciertos recursos o a favor de expresar algo? Luis C. Sánchez: En favor de expresar algo utilizando el medio cinematográfico de distinta manera. La anécdota daba lo mismo. Por ejemplo, en Cosita, la anécdota estaba escrita de antemano en el ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara 4 Cosita (1971) es un cortometraje que trata sobre una mujer que quiere hacerse un aborto. Pero, si como decía Sánchez, la anécdota tenía inicialmente una tonalidad melodramática y sicologista, su oposición a esto deriva en la construcción de un filme en el que se insertan elementos contramelodramáticos como la balada animosa “Te he prometido” de Leo Dan. Además, existen indagaciones fílmicas como la desdramatización de la voz de la mujer (que volverá a utilizar más tarde en El zapato chino) o el cambio de escenas no mediante el montaje sino a través de principiantes planos-secuencias. Luego, si tomamos en cuenta la idea de si “resultó o no” en el documento “Esperando a Godoy. La reconciliación con la realidad” el encargado de la nota señala que los directores “Consideran las películas que han dirigido o en que han participado como simples borradores no muy afortunados”. En específico, se está refiriendo a los directores de la mítica película Esperando a Godoy: Rodrigo González; Sergio Navarro y Sánchez, todos formados en la EAC. | 37 guión que me presentaron. A mí no me gustó porque lo encontraba melodramático. La intención de mis compañeros, entre ellos el guionista, era hacer una película muy vivencial en donde los personajes expresaran mucho. En el fondo, se pretendía hacer una cosa muy sicologista e intimista. Yo me oponía, quería hacer algo frío porque intuía que esa manera de tratar la anécdota era la forma menos convencional de enfrentar esa realidad que era muy convencional, convencionalmente la película se perdía, se transformaba en un melodrama que era lo que precisamente quería denunciar la película. Al final se impuso mi criterio, no sé con qué resultado4. Gerardo Cáceres: Volviendo un tanto atrás, entre la opción de utilizar una dramaturgia tradicional o recrear una dramaturgia propuesta por la misma realidad que ha sido el método propuesto por Luis Cristián, los alumnos de la nueva generación hemos optado por la primera. Pero no porque sí o para satisfacer las exigencias de relatar bien un cuento, sino como un método de conocimiento de determinada realidad. Posiblemente después podamos abandonar esa opción, pero esto significa todo un proceso, como el que ha vivido Luis Cristián y parte de su generación. En esta medida es importante ver películas como Cosita, ya que constituye un peldaño que permite acercarse a la comprensión de lo que su autor quiere ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 38 hacer y hacer ahora. Y esto es un camino que va develando el método seguido, método que trata de encontrar una significación a la realidad, si no total, al menos a algunas de sus parcialidades o aspectos. Moderador: Este punto es central a lo expresado por Giselle en un comienzo: el problema de si la dramaturgia se encuentra al servicio de la realidad o la realidad se empieza a ver dominada o encasillada por la dramaturgia. ¿Qué significa concretamente esto en el cine? María de la Luz Hurtado: Quisiera referirme a ese problema. Giselle nos planteó algunas interrogantes: si existe una primacía de la técnica o de la expresividad y qué papel juega en esto la dramaturgia. Lo que ha dicho Luis Cristián lo interpreto como que técnica, expresividad y dramaturgia son indisolubles; tienen una ligazón tan íntima, compleja y directa que no podemos plantearnos una de ellas olvidando las otras. Si yo quiero realizar cinematográficamente tal tema, ese tema no existe en sí, desligado de la forma en que lo voy a expresar en mi lenguaje. El mismo tema será otro si yo ocupo un lenguaje cinematográfico distinto y otra forma de la dramaturgia. Creo que la búsqueda de la cual habla Luis Cristián es la búsqueda de un cine que intenta armonizar, complementar estas tres dimensiones. Intenta, a partir de su propia ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 39 visión de la realidad, crear un nuevo lenguaje que sea capaz de expresarla plenamente. Gerardo Cáceres: En cambio, los alumnos de la nueva generación nos encontramos ante el hecho de tener que resolver un tema dado. Es un poco la idea del productor de “spots” publicitarios que le pregunta a su director: “¿cómo resuelves tú tal tema?” Es decir es la negación absoluta de la idea que cada realidad tiene su propia expresividad, que es lo que se acaba de concluir. La realidad, así, es coartada, se la encasilla, se nos dice: “De esta manera se cuenta, de esta manera se expresa, de esta manera hay que mostrarla”. Nos encontramos aquí que la dramaturgia tradicional no ha permitido resolver el problema, porque a toda la realidad le impone la misma formulita. A pesar de eso, la dramaturgia nos ha servido también para encontrar verdaderamente algunos rasgos y elementos presentes en la realidad. Carlos Besa: Por lo que hemos conversado y visto en las películas, lo que caracterizaba la búsqueda de la generación anterior es la concepción de que la realidad propone al realizador, en términos de lenguaje cinematográfico, tanto planos como iluminación, actuación e, incluso, la construcción dramática adecuada para ser expresada. La realidad, tal como es vista por el cineasta, le estimula al empleo de un determinado lenguaje cinematográfico. Pero, me parece que ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 40 la dramaturgia tradicional es también válida como instrumento de conocimiento de la realidad. Todo depende de lo que se pone en juego: si el instrumento mismo y la demostración de su validez o el dar a conocer la realidad cinematográficamente, ya sea a través de la posición de tratar de rescatar una dramaturgia desde la realidad misma o a través de la aplicación a la realidad de una metodología dramática previa. Es decir, si el realizador está buscando la expresión, el conocimiento de una realidad, cualquier metodología es válida; si está buscando la demostración de la validez de ciertos instrumentos, simplemente está errado como realizador. Luis C. Sánchez: Estoy en absoluto desacuerdo con esto último. En primer lugar, estás negando todo el aporte que ha hecho Godard al proceso de creación del lenguaje cinematográfico moderno. En sus últimos films, precisamente, se interroga sobre el cine, reflexiona sobre los medios de validez del cine, sobre los supuestos teóricos que subyacen a la actividad de hacer cine. En segundo lugar, creo que hay un concepto que no está claro: el lenguaje cinematográfico como instrumento. Cuando se utiliza, por ejemplo, el lenguaje hablado con fin comunicativo, de transmitir un determinado mensaje a ciertos receptores, se está cumpliendo con una función específica. Pero también es posible otra función con el mismo instrumento, con las mismas palabras de ese lenguaje: crear un ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | MUESTRA DE CINE ESTUDIANTIL EAC 1970-1977 • Ximena Vergara | 41 poema. Esta es la función metalingüística que permite que el lenguaje se autorreflexione. Lo anterior es válido para todos los lenguajes, también para el cinematográfico. Lo que ocurre, entonces, es que el objeto del cual se habla, la realidad que se está expresando, no es exterior al instrumento, sino es el instrumento mismo. C. Ochsenius: Se dijo aquí que, para los fines de conocimiento de la realidad, cualquier método tiene igual validez. Pues bien, estos no son neutros ni indiferentes. Como queda mucho más claro en el caso de las Ciencias Sociales, el uso de determinado método para acceder a la realidad social, a un objeto específico, implica necesariamente ciertos presupuestos básicos acerca de él. El método prefigura el objeto, lo conceptualiza previamente de determinada manera. Entonces, al emplear una metodología hay que preguntarse si los presupuestos sobre los cuales descansa coinciden o no con nuestra visión del objeto y si esa definición del objeto nos parece la más adecuada para dar cuenta de él en sus aspectos esenciales. Concretizando un poco, me parece que al usar la dramaturgia tradicional (u otra metodología) hay que preguntarse: ¿qué concepto de realidad late detrás, qué aspectos de la realidad muestra y qué aspectos oculta ese concepto y si éste es adecuado para toda realidad, indistintamente? ISSN 0719-4579 EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ ORLANDO TORRES/GONZALO PERUCCA Cineasta de la Escuela de Cine de Chile. Integrante de MAFI (Mapa fílmico de un país)/ Cineasta de la Escuela de Cine de Chile RESUMEN Uno de los aspectos más importantes del cine de Sánchez, consideramos, es la lateralidad. En este sentido su cine crea una alternativa al modelo americano y bordea las estructuras dramáticas clásicas de construcción narrativa cinematográfica, buscando puntos en común que rápidamente se descarrían, se van por las ramas, desconcertando al espectador. A partir de este desvío, se interesa en mostrar otros aspectos de la vida de sus personajes, como si nos invitara a ver fragmentos que no son interesantes para la estructura principal de la película, pero que los registra igual, como si hubiese diseñado un plan antes de hacer la película y el personaje le hubiese presentado otro, el cual Sánchez, recorrerá junto con el espectador, sin presentar problemas y que, quizás, luego de eso volverán a la estructura inicial, pero es incierto. Es por esto que las primeras películas aquí analizadas, como El zapato chino y Los deseos concebidos, permitirán instalar una discusión que se instale en situaciones fuera de lo común, para insertar la ambigüedad y bipolaridad de un país, tanto en sus diálogos, como en la estructura dramática de las escenas surrealistas y oníricas. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 43 EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ ORLANDO TORRES, GONZALO PERUCCA 1. INTRODUCCIÓN No es lo más habitual en el mundo del cine encontrar un director que mantenga un anonimato sostenido en el tiempo, pero existen y en Chile encontramos uno de ellos: Cristián Sánchez. ¿Quién es Cristián Sánchez? ¿Por qué centrar nuestra atención en su cine? El cineasta más oculto y desconocido de Chile posee una filmografía, hasta el momento, de ocho películas realizadas entre mediados de los años 70 y comienzos de la década del 2000, quien continúa generando proyectos, algunos por salir a la luz pública y otros aún por rodarse. El ser humano es esencialmente creativo siendo tal vez ésta la característica que lo diferencia de otros habitantes del planeta, sin embargo el desarrollo de la creatividad en el arte es algo que surge en contextos especiales. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 44 Siendo niño, Sánchez, estuvo rodeado de libros que despertaron su interés por las historias, y más tarde por la filosofía, entre otros temas. Esto lo llevó a que quisiera en algún momento de su vida dirigir teatro o escribir un libro, pero como cuenta en la entrevista de Jorge Ruffinelli1, fue su contacto con el cine, sobretodo el francés, lo que hizo que posteriormente se interesara en estudiar primero teatro en la Universidad Católica, para luego descubrir la Escuela de Artes de la Comunicación de dicha Universidad, donde podría integrar todos sus intereses artísticos en un solo oficio. En dicha escuela se formó realizando algunos cortometrajes y un largometraje en 16 mm, Esperando a Godoy (1972). 1 Jorge Ruffinelli en diálogo con Cristian Sánchez El deseo de desear, en El cine nómada de Cristián Sánchez, Revista Nuevo Texto Crítico, nº 37/ 40, 20062007, Stanford University. Sus primeras películas, Vías paralelas (1975), co-dirigida con Sergio Navarro, y luego El zapato chino (1976-79) tienen la energía de explorar historias sin un hilo conductor coherente, la anti-teoría ante lo aprendido en la Escuela. Los rodajes de estas cintas se caracterizaron por el bajo perfil que poseían, lo que ayudó a este director a mantenerse oculto a pesar de ser visible a los ojos de todos. Ni siquiera los militares de la época notaron su presencia en las calles ya que su equipo pasó por un grupo de jóvenes haciendo experimentaciones con su cámara de cine. Pero esto fue un ejercicio arriesgado, ya que al ver sus películas hoy es indiscutible identificar personajes que tienen algún grado de conflicto con la autoridad, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 45 con el sistema, ya que son dominados por alguna organización o grupo de personas. Finalmente, son personajes con límites que desean traspasar. Bajo estas condiciones Sánchez hizo películas a su manera, sin recurrir a modelos estándares de producción. Sus cintas fueron posibles ya que se realizaron con un equipo pequeño, prácticamente sin nada de presupuesto y destinadas a un grupo reducido de personas, ya sea en un cine club o en espacios íntimos. Sus primeras películas expresan en sus personajes y situaciones “un modo irrisorio de ser, pero real al mismo tiempo”, finalmente una voluntad de crear otro verosímil fílmico, que se presente de manera lateral a los demás. De todos modos, es necesario considerar que ésta no es una casualidad, entre fines de los años 60 e inicios de los 70, eran sentimientos que se estaban manifestando a lo largo del mundo, mucho antes que las producciones de Sánchez. Existían nuevos cines que optaban por una actitud independiente. Entre los precursores se puede considerar a Helvio Soto, que filmó Caliche Sangriento (1969) en condiciones extremas, con un equipo técnico reducido, sacando a flote una producción de difícil realización. En el contexto internacional estaba John Cassavetes que con Shadows, demuestra ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 46 que una película se puede hacer en un barrio, de forma simple, y sacando provecho de la precariedad de producción con creatividad. Los espacios donde se sitúan las películas de Sánchez son lugares reconocibles, en estos se desarrollan realidades cotidianas que son filmadas de modo naturalista, de manera que su estética está conformada por el lugar común y ordinario, pero aquí radica una paradoja, ya que es precisamente en esos sitios donde ocurre lo extraño, lo cual es la esencia de su mundo. La forma de filmar dicho mundo no pretende ser un retrato costumbrista de nuestra sociedad, ni tampoco su fin es mostrar la “chilenidad” a través de diálogos adornados con nuestra forma de hablar. Esto se manifiesta al trabajar con no-actores, los cuales no juegan el rol como lo haría un profesional, con técnicas precisas y dominio de su interpretación, sino que a través de una actuación plana y minimalista, logran fragmentos de realidad en medio de la ficción. Otro aspecto que enriquece el retrato que Sánchez hace de nuestro país es el modo de trabajar la fotografía, registrando la cotidianidad en forma natural, en la cual cada cuadro parece como si un fotógrafo hubiese salido a hacer un foto reportaje, a la usanza de Robert Doisneau o Henri-Cartier Bresson en las afueras de Paris, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 47 en distintos barrios de Santiago. Una vez en interior, las escenas son iluminadas de manera verosímil, pero con algún elemento en el plano que inconscientemente provoca en el espectador una sensación de extrañeza, de algo que no está funcionando de manera normal. Un color extraño en el cuadro, fuentes de luz dispuestas fuera de lugar, todo para generar una atmósfera bizarra. Y es ahí donde el universo de Sánchez como autor se presenta. Estas obras tienen la cualidad de ser las únicas que muestran nuestro país de manera inusual. Cuando la cámara registra a personajes reales en una calle de barrio, respetando su forma espontánea de hablar, con equivocaciones incluidas, se tiene un aspecto de Chile interesante de apreciar en una película. Sánchez busca en la imperfección de las actuaciones otro modo de ver la realidad, donde lo falso también tiene cabida. Sus películas nos conectan con un universo surrealista. Es por eso que su cine se puede apreciar más bien por sensaciones que siguiendo un hilo conductor coherente de una historia clásica. Hay que dejarse llevar por el camino que siguen sus personajes. Son películas que apelan principalmente a nuestra percepción, a nuestros sentidos en vez de nuestra racionalidad. Sus personajes son seres errantes que van cambiando de domicilio constantemente, que arriendan piezas por la noche, que cambian de actividad todo el ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 48 tiempo, que llegan a vivir a casas ajenas donde son increíblemente bien recibidos, a pesar de ser unos perfectos extraños. Un elemento fundamental que recorre su filmografía y nutre sus personajes es el deseo. Sus personajes se mueven por la pulsión de la inmediatez, es el deseo acompañado de la frustración. Ellos están carentes de cariño, faltos de amor, son seres incompletos que finalmente establecen una relación de dominación entre uno y el otro. Sus personajes intentan buscar al otro, fusionarse, ser uno. Si se hiciese una analogía con el estado anímico de Chile en la mitad de los 70, se podría describir como un país dividido con ansias de estar unido, pero esta imposibilidad, ya sea por diferencias de ideas, por imponerse uno sobre los demás, terminó con un ambiente de violencia tal como los personajes de Sánchez terminan en sus películas: mutilándose y matándose unos a otros. Entre los personajes que manifiestan esta dualidad se destaca los que interpreta Andrés Quintana como Gallardo en El zapato chino y Luis Mansilla en Los deseos concebidos. Estos generan una relación de dominio y control sobre las chicas jóvenes que aparentan proteger, adquiriendo un ambiguo comportamiento paternal, una especie de tutor que a la vez las desea como amante y tiene que lidiar con otros hombres que se les acercan. “Las mujeres tienen ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 49 poder para provocar el deseo de los hombres. Sería injustificado decir de las mujeres son más bellas, o incluso más deseables que los hombres. Pero, con su actitud pasiva, intentan obtener, suscitando el deseo, la conjunción a la que los hombres llegan persiguiéndolas. Ellas no son más deseables que ellos, pero ellas se proponen al deseo”.2 La manera posesiva en que Gallardo o Mansilla se manifiestan frente a las mujeres los asocia con personajes venidos del campo, del medio popular, en el cual ellos controlan la relación con su pareja femenina. Si contrastamos esta postura a todo lo que la mujer logró desde los años 60 a partir de su fuerza y organización, los personajes de Quintana lucirían anacrónicos, fuera de lugar. Su manera de vestir de terno negro impecable, el pelo engominado y parecido a Jorge Negrete, según como le llaman algunos de los personajes de El zapato chino, lo vincula a los años 50, como si su personalidad trascendiera la filmografía de Sánchez, sin importar el contexto en el cual se desarrollan las historias. 2 Bataille, George “El Erotismo”. TusQuets 1997. Editores. Barcelona Para construir estos universos Sánchez filma, inconscientemente, con influencias del cine de Robert Bresson y de Luis Buñuel. El primero a través de la forma realista de utilizar la ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 50 cámara y el trabajo con no-actores. En tanto el segundo, por los personajes de comportamientos inusuales y fetichismos, que Buñuel incluye en películas como El Fantasma de la Libertad, por ejemplo. El cine de Sánchez en general puede quedar en un lugar aparte, si se buscan en sus películas historias estructuradas y con guiones acotados, pero pese a esto es relevante considerarlo dentro del estudio de la historia del cine chileno, porque fue uno de los pocos directores que quiso realizar este tipo de películas, darse la libertad de crear historias que vinieran desde las entrañas. Su filmografía es extensa siendo un director chileno, pero dentro de todo lo visionado de su filmografía, lo que más nos interesó fueron sus primeras películas, El zapato chino y Los deseos concebidos, que resumen el universo que rodea a Sánchez, sus obsesiones, sus intereses y personajes tan disímiles. También pretendemos destacar aspectos y asociaciones que hemos descubierto al ver su filmografía en relación a sus actores fetiches, temas recurrentes y espacios donde normalmente se desarrollan sus historias. ¿Qué hay tras este director de cine que con pocos recursos, con actitud discreta, hace ver lo oculto sin mostrarse demasiado? ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 51 2. EL CINE DE CRISTIÁN SÁNCHEZ Las películas de Sánchez tienen una fuerza singular, sus historias se pasean por espacios donde convergen los lugares comunes, la violencia, el poder, el deseo, todo lo cual bordea lo retorcido y oscuro. 3 Undurraga, Vicente. Revista “The Clinic” Entrevista Cristián Sánchez, el cineasta oculto Jueves 19 de Abril de 2007 N°203. 4 Jorge Ruffinelli en diálogo con Cristian Sánchez El deseo de desear, en El cine nómada de Cristián Sánchez, Revista Nuevo Texto Crítico, nº 37/ 40, 20062007, Stanford University. Cuando empezó a realizar sus películas, el tema político estaba vetado, aunque no así las connotaciones a la vida cotidiana producto del régimen. En el ejemplo de Sánchez, el hecho de que lo político como tema estuviera “fuera de lugar”, lo impulsó a buscar un lenguaje cinematográfico propio. Las atmósferas de sus películas son un retrato expresivo de su época y al mismo tiempo expresión de una mirada social desencantada. Pero más allá de la relación con lo político, Sánchez define su trabajo como un cine ético ya que le interesa “descubrir los mecanismos negativos que impiden que la vida se exprese”.3 “Nosotros creíamos que era importante mantener esta continuidad en Chile, hacer un cine que reflejara en cierto modo el clima, la situación y el terror que ejercía de la dictadura en todos los niveles y creo que “Los deseos concebidos” también tiene eso, como “El zapato chino”, esa idea de reflejar de una manera indirecta, que sé yo, esta situación de represión, de violencia, de supresión de todo. Creo que ese clima está en la película”.4 ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 52 Su cine es el resultado de una resistencia, basada en una postura de bajo perfil, sustrayéndose de modas, y es así que ha generado un espacio propio donde ha podido realizar sus películas sin muchos obstáculos a niveles creativos, franqueando con astucia las dificultades económicas para producirlas. Las películas de Sánchez no cayeron en un discurso panfletario, emitiendo mensajes políticos, este no fue el tema central de su cine, por lo menos en forma directa, sino que expuso las contradicciones, evitando juzgarlas, buscando fundamentos por los cuales los acontecimientos son de cierto modo en nuestro país. Sánchez opina: “No me interesa hacer un cine de batalla, que te obliga a estar en una trinchera o en la otra, porque yo creo que lo interesante es que el cine te sugiera un poder de elección, y no la elección”.5 5 Undurraga, Vicente. Revista “The Clinic” Entrevista Cristián Sánchez, el cineasta oculto Jueves 19 de Abril de 2007 N°203. De esta manera se asocia a la postura de su maestro Raúl Ruiz, quien exhibió Tres Tristes Tigres en el Festival de Cine de Viña del Mar de 1969, cuando ya se había formado el Nuevo Cine Latinoamericano, con directores como Miguel Littin, Helvio Soto y Aldo Francia. Este movimiento tuvo sus influencias a partir de la Revolución Cubana y la lucha antiimperialista, realizando un cine comprometido con los acontecimientos que estaban ocurriendo en nuestro continente en esos momentos. Ruiz, a pesar de simpatizar con dicho movimiento, cuestionó la voluntad de hegemonía de ese ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 53 cine politizado. Sus películas posteriores mostraron la posibilidad de manejar otra estética, otros temas y estilos. El cine podía ser antiimperialista, expresándolo a través de una forma distinta, inmiscuyéndose así en argumentos más complejos. Basado en esta línea, Sánchez, configuró su cine, que ineludiblemente incluía también bajo su mirada y punto de vista, situaciones extrañas, en el contexto de un país donde todo estaba funcionando al revés. En sus películas se producen crímenes misteriosos y actos autoritarios mostrados en su cotidianidad. Para el crítico de cine, Ascanio Cavallo, las cintas de Sánchez “a pesar – o en virtud- de la sencillez de sus recursos, transmiten con intensidad algunas de las angustias más profundas e inexpresadas del Chile contemporáneo”.6 6 Ruffinelli, Jorge Cristian Sánchez, retrato del nómada que nunca se fue. Ponencia presentada en el Festival de Toulouse 2007. En el desarrollo de ellas se pueden identificar elementos que atraviesan toda su filmografía. Estos se pueden definir como conceptos y temas recurrentes que él aborda de manera disímil. Mirados desde otro ángulo. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 54 2.1 Teoría del conflicto central y la simultaneidad de mundos en Sánchez Toda película tradicional y comercial, especialmente de Hollywood, basa la construcción dramática de sus historias en una estructura bien definida, la cual funciona para los espectadores que frecuentan el cine. Los libros de guión manifiestan que sin ella no hay guión y sin guión no existe la película. Dicha estructura se construye a partir de la teoría del conflicto central, la cual plantea que: “Una historia tiene lugar cuando alguien quiere algo y otro no quiere que lo obtenga. A partir de ese momento, a través de diferentes digresiones, todos los elementos de la historia se ordenan alrededor de ese conflicto central”.7 7 Poética del Cine Raúl Ruiz Ed. Sudamericana, Santiago 2002. El autor extrae dicha cita desde el libro “Cómo escribir un guión” de John H. Lawson. Todas las tramas adicionales de la película quedan en plano secundario. A partir de esta teoría, al interior de una trama clásica, un protagonista activo al inicio de la historia, se ve enfrentado a una situación o adversidad que le plantea un objetivo que debe lograr. Para llegar a su meta final con éxito deberá lidiar paso a paso contra fuerzas externas antagonistas que les interpondrán obstáculos en la persecución de su deseo, a través de un tiempo continuo, dentro de una realidad ficticia coherente y causalmente relacionada. Al conseguir traspasar las dificultades, habrá llegado a otro equilibrio ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 55 aprendiendo de las vicisitudes y ganando experiencia al alcanzar el objetivo concreto que se trazó al comienzo. Bajo estos términos, un buen guión es aquel que tiene una sólida línea de acción dramática que va hacia un lugar, avanzando hacia la resolución del conflicto principal. Una pieza fundamental del viaje que emprende el héroe de la película es su voluntad de llegar al objetivo. Ante él se agrupan una serie de acciones, decisiones, confrontaciones y elecciones. Finalmente lo importante en esas historias es obtener lo que se quiere. El protagonista debe pasar al acto de resolver el conflicto con inmediatez, es la labor primordial ante cualquier actividad que esté realizando. Para Raúl Ruiz, uno de los directores que inspira a Sánchez, este concepto se adapta muy bien a Estados Unidos, donde: “La consecuencia inmediata de la mayor parte de las decisiones en una tal cultura se resume en una cierta forma de conflicto, lo que no ocurre en otras culturas. Las otras maneras de pensar rechazan el vínculo causal directo entre una decisión y el conflicto que podría resultar de ella, así como rechazan la idea de que la colisión física o verbal sea la única forma del conflicto”.8 8 Poética del Cine Raúl Ruiz Ed. Sudamericana. Sin embargo este modo de construir historias, ha sido aceptado por la mayor parte de países del mundo, independiente de cuál sea ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 56 su cultura, adoptando exteriormente el comportamiento retórico de Hollywood. Ruiz tiene su propia opinión sobre el conflicto central, para el cual en la vida existen muchas historias paralelas. El enfrentamiento entre dos fuerzas antagónicas no es lo único que sucede en una trama. Se deja de lado eventos secundarios que no tienen ninguna confrontación: “Los acontecimientos a los que somos indiferentes o sólo despiertan en nosotros una vaga curiosidad- tales como un paisaje, una tormenta lejana o una cena entre amigos-, a menos que tales escenas encuadren dos combates entre buenos y malos. Mayormente aún en las escenas desprovistas de toda acción la teoría de conflicto central excluye lo que nosotros llamamos escenas mixtas: una comida ordinaria interrumpida por un incidente incomprensible –sin razón ni rima, sin consecuencia- y que se terminará como una comida tanto o más ordinaria”.9 Dicho autor se plantea la siguiente pregunta: “¿Es concebible una historia sin centro ni punto de decisión?”10 9 Ibíd. 10 Ibíd. Las películas de Sánchez, siguen de cierta forma esta línea, empiezan con una situación que podría resolverse a través de la teoría del conflicto central, pero minutos después, las voluntades de sus protagonistas se tornan débiles, sus decisiones iniciales cambian, toman otro camino, se encuentran con otros personajes, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 57 con los cuales hablan de asuntos que no tienen mayor importancia para la historia principal. Luego vuelven a la línea de acción que se proyectó al inicio, pero ya todo luce enrarecido, cumplir el objetivo presentado en el primer tercio de película pierde importancia. La distracción provocada por el giro inicial hace que el espectador siga el camino errante de los personajes, aceptando que no se le conduzca al lugar que al comienzo fue propuesto. 11 Ruffinelli, Jorge Cristian Sánchez, retrato del nómada que nunca se fue. Ponencia presentada en el Festival de Toulouse 2007. 12 Johnson, Constanza, Entrevista a Cristian Sánchez, Dossier Revista ENFOQUE “Cine Chileno de los 80”, Santiago, 1990 Podríamos decir que en contraposición al modelo clásico hollywoodense, los personajes de Sánchez carecen de voluntad en cumplir las metas que se proponen. Ellos optan por un camino lateral, en el cual se transforman en nómadas, viviendo en distintas casas y pensiones, con actividades laborales fluctuantes, ya que Sánchez se interesa por la simultaneidad de mundos en sus relatos, exhibiendo “cruces sociales entre sectores marginales inmersos en la violencia y el delito, clases medias intelectualmente anémicas, y sectores altos de la sociedad faltos de vida y decadentes”.11 “Es en esas desigualdades de texturas, de hablas a todo nivel, donde se puede configurar un universo rico y distinto. Por eso es que juego con oposiciones. Oposiciones de clases, de individuos, también dentro de una misma clase, por sus humores personales, por su personalidad, por sus tendencias, sus temperamentos”.12 ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 58 Entonces el juego es oponer siempre, constantemente, porque eso es lo que da tensión verdadera en una obra, y no necesariamente el argumento, no la estructura dramática”. La preponderancia de sus historias ocurre en el mundo popular, el cual está poblado de personajes que deben sobrevivir dentro de un sistema hostil, que no les da mucha alternativa, y que los motiva a moverse. En otros casos, como Los deseos concebidos, este movimiento se produce por el afán de cambiar de espacio, de fugarse, lo que incita a los personajes a dejar sus hogares, partiendo en un viaje que no presenta una búsqueda concreta. Este es uno de los aspectos de los cuales se aprovecha Sánchez para desviar el relato y llevar a sus personajes a estados irregulares. El sendero tomado por éste cineasta no obliga a los personajes a cumplir con su cometido, es posible que nunca lleguen a un fin satisfactorio. Raúl Ruiz indaga en el asunto planteando que existen personas y personajes de novelas que aplican la “teoría abstencionista”, es decir, dejar un propósito de lado porque se quiso, desviarse antes de enfrentarse al conflicto, lo cual queda mejor explicado bajo la “teoría de la resolución de conflictos”: “En esta teoría la intervención se produce antes del conflicto, a fin de neutralizarlo. Pero esta controversia toma la forma de varios “conflictos de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 59 distracción” que tienen por tarea disolver y hacer olvidar el conflicto principal”.13 El camino emprendido por los protagonistas de Sánchez se fragmenta en pequeñas historias cotidianas, como si nos invitaran a ver momentos de su vida que una película clásica obviaría, ya que no harían avanzar la historia hacia un objetivo. En esos momentos Sánchez instala diálogos que dan a su cine una mirada personal de Chile donde confluye la talla, el chiste corto, las visitas entre amigos que no se ven nunca para pedirse favores, las conversaciones en fuentes de soda y restaurantes. El tiempo es dilatado para situar esos escenarios, provocando revelaciones entre los personajes donde comparten sus deseos, sus sueños, sus obsesiones. Los personajes en plena conversación pueden hacer un comentario que desvíe el tema hacia otro nivel, hacia algo más profundo de la intimidad de cada uno, esto se manifiesta cuando uno de los dos realiza acciones que no tienen nada que ver con lo que están discutiendo, sobre todo entre personajes del sexo opuesto, que parecen estar seduciéndose mientras hablan de cuestiones concretas dentro de una conversación formal. 13 Poética del Cine Raúl Ruiz Ed. Sudamericana. Todo el conjunto de personajes se instala en una ciudad conformada por casas antiguas, barrios, pequeños pasajes, cuyas ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 60 texturas hablan y enriquecen el espacio fílmico que se presenta en la historia. Tal como sus historias fraccionadas, Sánchez presenta una ciudad fragmentada, en la cual se combinan calles de distintas comunas de Santiago, pero que son verosímiles para el espectador, ya que entran en una dinámica en la cual los sucesos, personajes y lugares se mezclan en forma homogénea, es una ciudad construida para la ficción. Las historias se pasean por una realidad plausible, pero a medida que avanzan integran elementos fuera de lo normal, fuera de nuestra realidad. La particularidad que tiene el cine es que genera una impresión de realidad directa. Una película que está bien relatada a nivel de su puesta en escena y montaje, puede hacernos verosímil cualquier elemento o situación externa a la historia, haciendo que lo real y lo irreal se mezclen en forma fluida. “Este sentimiento tan directo de credibilidad actúa tanto en los filmes insólitos o maravillosos como en los filmes “realistas”. Una obra fantástica sólo es fantástica cuando convence (si no, es simplemente ridícula), y la eficacia del irrealismo en el cine se debe a que lo irreal aparece realizado y se ofrece a la mirada bajo las apariencias de un surgimiento gradual, no de la plausible ilustración de algún proceso extraordinario puramente concebido. Los temas fílmicos pueden dividirse en “realistas” e “irrealistas”, si ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 61 uno quiere, pero el poder de realización del vehículo fílmico es el denominador común a estos dos “géneros”, asegurándole al primero su intensa familiaridad, tan reconfortante para la afectividad, y al segundo su potencial de extrañamiento, tan suculento para la imaginación”.14 En el cine de Sánchez todas sus historias parten presentando una realidad concreta, en la cual intervienen elementos y personajes que poco a poco le profieren una atmósfera inquietante. Este mundo irreal de sus cintas, es aceptado porque los personajes lo abordan como algo totalmente natural. Existe un nivel de poesía en las imágenes creadas, las cosas suceden porque son así, y no hay mayor explicación necesaria. Los personajes relatan sucesos fantásticos con la normalidad de quien cuenta una anécdota cotidiana. Un ejemplo se da en El zapato chino, cuando el taxista Gallardo se lleva a Marlene del prostíbulo y cae tras ellos una lluvia de zapatos. 14 Metz, Christian, Ensayos sobre la significación en el cine (19641968) Volumen 1.Barcelona. Paidós Comunicación 133 Cine. “Lo verdaderamente personal es la mirada, la voz…nadie renuncia a la voz propia en respeto de un material (llámese esto realidad o verdad…) Y si el arte distorsiona lo que mira, no lo hace por mala educación, sino que por un respeto superior…y es una lástima que este respeto superior no sea nada sino el respeto al norespeto (alguna regla hay que tener) es una verdadera lástima, pero el arte se apoya en este malentendido, destruye lo aparentemente ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 62 real en busca de lo esencial” dice Sánchez en una entrevista de la revista “La bicicleta” de 1982. 2.2 El habla coloquial y la similitud antipoética del cine de Sánchez Se dice que Chile es un país de poetas y por mucho que esta frase haya sido utilizada hasta el cansancio, no deja de tener un componente fuerte de realidad, en las palabras que la recorren. La tradición poética de nuestro país es ineludible como influencia para cualquier creador que haya nacido en estas tierras. Al existir tradición es posible una reacción y de esta manera una ruptura con lo establecido. Gabriela Mistral y Pablo Neruda, elefantes blancos, nobeles poetas, se encontraban en el Olimpo, inalcanzables para los jóvenes vates como Nicanor Parra, al momento que escribió el libro de poemas llamado Poemas y Antipoemas en el año 1954. Sus antipoemas de inmediato se diferenciaron de lo que se venía escribiendo. Parra incorporó el lenguaje coloquial a la poesía, la voz tomó un giro, desde la grandilocuencia nerudiana, a una poesía como el mismo Parra define “contraria a la poesía de pequeño dios, de vaca sagrada, de toro furioso”, repleta de barrio, calle y habla popular. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 63 En este salto desde un Neruda grandilocuente que le canta a América, a España o al Océano, a un Parra que le canta a una mujer de provincia o al mendigo de la plaza pública hay un cambio de mentalidad. Es esta visión rupturista y de vanguardia que se puede apreciar en Parra, que de alguna manera se puede asemejar a la actitud fílmica de Cristián Sánchez. Aunque las situaciones fueran completamente dispares. La historia cinematográfica chilena no tenía personajes de tanto peso, como sí los había en poesía, pero esto mismo le permitía una mayor libertad a la hora de utilizar el lenguaje. Llevar el habla coloquial al cine era una tarea que otros cineastas chilenos ya habían empezado. El Nuevo cine chileno se había propuesto con películas como Valparaíso mi amor, Tres tristes tigres, entre otras, acercar la cámara a la calle, buscar en lo más profundo de la sociedad las formas de comunicación que caracterizan a nuestro modo de actuar como sujetos gregarios. De esta manera, al reflejarlas, lograr un entendimiento mayor de lo que somos y comprender nuestras conductas en pos de buscar la individualidad y como consecuencia de esto la libertad. Como dice el manifiesto de los cineastas de la Unidad Popular en uno de sus enunciados: “Es el momento de comenzar a rescatar nuestros propios valores como identidad cultural y política”. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 64 En esta búsqueda de identidad cultural Sánchez emplea estrategias concretas y precisas para lograr que brote la “chilenidad” desde la representación. En principio, reflejar la sociedad de un modo fidedigno trabajando con las diversas clases sociales. “Trabajo con las clases sociales, porque no puedo desconocer que existen y, dentro de las clases sociales existen, estratos sociales. Y porque soy riguroso en eso, pienso que cada estrato social tiene su habla, su manera particular, su jerga, su modo de ser, su forma de pronunciar incluso. Hay miles de sutilezas que yo creo que el cine tiene el deber de rescatar, porque trabaja el lenguaje hablado y no puede desconocerlo”.15 También la utilización de actores no profesionales en papeles principales, le permite evitar cierto mecanicismo en los movimientos y en la entonación de la voz que los actores de carrera incorporan en las escuelas. Es este automatismo el que se busca evitar. Como lo explica el mismo Sánchez: 15 Johnson, Constanza, Entrevista a Cristian Sánchez, Dossier Revista ENFOQUE “Cine Chileno de los 80”Santiago, 1990. “Quiero contagiar a los actores con la necesidad de desnudarse, de dejar de actuar. Cuando veo a un actor trato de anular todas sus posibilidades histriónicas. Él quiere construir al personaje, ser stanislavskiano. Pero yo lo quiero pillar, sorprender, porque me interesa que aparezca el ser humano. Hay un equívoco en esto. Él cree que me interesa porque es actor. Pero yo quiero otra cosa que él no sabe que tiene y que yo intuyo que tiene. Los noactores cuando actúan pierden la sensación de estar actuando, no tienen control alguno, y eso descontrola también al actor. Yo de eso saco partido. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 65 Busco que se descontrolen más, al punto que lanzo la cámara en los ensayos sin avisarles, porque ahí están más espontáneos. O les mando a personajes que les dicen parlamentos imprevistos, y ahí vemos que pasa. El actor conmigo tiene el deber de no parar. Pase lo que pase, el juego sigue. Nadie dice “corten”. Todo cuenta. Y emerge una verdad. Lo que llamo la verdad en el cine.”16 Esta verdad surge tanto en el habla como en los movimientos y posturas corporales. La naturalidad que puede ofrecer un no-actor al desplazarse, al tomar un objeto entre sus manos o incluso al realizar acciones mecánicas, no viene precedida de la autoconciencia que un actor de escuela tiene incorporada, al tratar de lograr la perfección y la pulcritud en el actuar. Es en este mismo potencial error de comunicación, que Sánchez encuentra la verdad de su poética fílmica. La humanidad manifestándose en las imprecisiones del lenguaje, en el tartamudo del habla, en la reiteración de frases con el mismo sentido, en la vacilación y la duda. De algún modo la apuesta por la identidad reside en este juego de equivocación e inseguridad. Quintana es el epítome de Chile, de su dualidad y su misterio. 16 Undurraga, Vicente. Revista “The Clinic” Entrevista Cristián Sánchez, el cineasta oculto, Jueves 19 de Abril de 2007 N°203. “La primera vez que lo vi me impresionó. Me dije: Quintana es Chile, Chile es Quintana. Es un trozo de Chile y representa a Chile. Hay algo extraordinario de la idiosincrasia chilena contenido en él. Una mezcla contradictoria de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 66 cosas. Ser buena persona y al mismo tiempo malo, maquinador. No él, sino los personajes que construimos. Y su capacidad de decir cosas delirantes y de ser sensato a la vez. Si de repente hasta saca sentencias psicoanalíticas. Puede pasar de un complot terrible, casi criminal, a ser muy buena persona, solidaria, preocupada”.17 El poeta chileno Enrique Lihn escribió acerca de la película El zapato chino de Sánchez: “La libre andadura de El zapato chino sigue el rastro ortopédico de lo real”. Una especie de surrealismo criollo surge desde su imaginario, un surrealismo mestizo, bastardo y ladino que desnuda la pifia, ortopedizando, pero a su vez evidenciando la cojera, el trastabillar. En el fondo, exponiendo lo que hay de humano y lo que no tenemos de dioses. 3. ANÁLISIS DE EL ZAPATO CHINO Y LOS DESEOS CONCEBIDOS, EN RELACIÓN A LOS TEMAS Y CONCEPTOS DEL CINE DE SÁNCHEZ. 3.1 El zapato chino (1976-1979) 17 Johnson, Constanza, Entrevista a Cristian Sánchez, Dossier Revista ENFOQUE “Cine Chileno de los 80”Santiago, 1990. Cristian Sánchez hizo algo distinto. Claramente, su película El zapato chino es un momento único, un instante de catarsis, de libertad creativa dentro de la historia de nuestra breve filmografía nacional. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 67 Corría el año 1976, en medio de toques de queda, falta de película virgen para poder rodar, y condiciones políticas dificultosas, Sánchez se las ingenió para realizar una obra que hoy en día recién comienza a mostrarse, a revelarnos como en un largo proceso de laboratorio, lo que estaba impreso dentro de sí. A decirnos, como alguien que guardó un secreto por años, la verdad que contiene entre sus intersticios. El zapato chino cuenta la historia de un taxista, Andrés Gallardo, que se obsesiona perdidamente de una joven mujer provinciana llamada Marlene. En su deseo de poseerla termina enloqueciendo, debido a sus celos enfermizos y la coquetería incesante de ella con otros hombres. Confinándose a vivir encerrado en la maleta de su auto alejándose de la sociedad y del salvajismo de la urbe. El filme comienza presentando a Marlene, interpretada por Felisa González, una joven adolescente de provincia que llega a Santiago a trabajar en un supuesto prostíbulo. A su llegada, conoce a Andrés Gallardo, interpretado por Andrés Quintana, un taxista que tiene un problema con un cliente que no le ha pagado una carrera. Al dirigirse Gallardo a la casa de éste para saldar la deuda, se encuentra con Marlene y la rescata de ahí, ya que ella había tenido un problema, que nunca se especifica, con la patrona del lugar ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 68 donde trabajaba. Además de llevársela a modo de secuestro por la deuda impaga. Andrés Gallardo es un personaje vagabundo que circula por el universo fílmico de Sánchez como un fantasma. Se relaciona con los que lo rodean asumiendo la postura del gurú, mostrando a sus discípulos la manera indicada para desenvolverse en la sociedad. Quintana vive a la usanza del peonaje de los siglos pasados, pagando con sus trabajos domésticos las deudas que arrastra y en otras ocasiones ofreciendo sus servicios sexuales a las damas que así lo requieran. El zapato chino propone una interesante mirada sobre nuestro país. En ella vemos personajes populares, de vidas esforzadas, que tienen trabajos que los mantienen al borde de la crisis económica a cada momento. Por esto es que todos los días deben sortear vicisitudes para poder solventar sus gastos, recorriendo la ciudad como perros callejeros en busca de alimento. Personajes que habitan en la escasez y la violencia. Andrés apadrina a Marlene y la protege de cualquier sujeto que quiera sacar ventaja de ella. Es así que inician una relación que va desde el amor paternal al deseo desenfrenado y los celos. Andrés es ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 69 celoso de las mujeres que están a su alrededor, como jefe de la manada, no permite que ellas se involucren con otros hombres. Como el mismo Sánchez lo dice, la clave de la película se encuentra en la relación que se genera entre Andrés y Marlene y cómo estos dos personajes que aparentemente son dos extremos opuestos, pueden lograr fundirse y de alguna manera funcionar como metáfora de lo que sucedía en el país en un contexto general. “Encuentro en la metáfora de la niña Marlene, la que narra, este personaje que es como enigmático, de alguna manera, no sabemos exactamente qué es lo que ocurre con ella, que se torna casi imbunchada. Yo tenía esa idea. De alguna manera estaba la idea del imbunche detrás de eso. Ella había sido cosida en cierto modo en todos sus orificios pero es algo que no se declara, que no se dice sino que siempre se expresa lateralmente, es una expresión de otro orden, va por otro lado. En esa época había leído a Antonin Artaud y él sentía que su cuerpo estaba horadado, perforado y pensaba cómo construirse a sí mismo un cuerpo sin órganos. Construir un cuerpo sin órganos no es un cuerpo que se le haya extirpado el corazón y los riñones sino que está diciendo un cuerpo anorgánico, o más allá de lo orgánico en el fondo como constituir un cuerpo espiritual. Entonces yo veía a Marlene como metáfora de Chile, ese cuerpo espiritual que tenía que constituirse precisamente porque ella es impenetrable. Curiosamente el personaje de Quintana termina castrado, por eso ambos son personajes complementarios. Yo decía en ese tiempo en la entrevista que me hizo Héctor Soto que la película era un viaje hacia lo indiferenciado, es decir a la superación de los ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 70 géneros o del elemento de la sexualidad como algo divisorio, por eso que finalmente la imagen de Quintana, el chofer de taxi se funde con la imagen de ella, casi como son las dos caras de un mismo ser, de una misma expresión. Pero yo quería que esa expresión fuera más que un ser o un personaje, una figura emblemática de lo que es un país. Ese era el sentido último, si ustedes quieren más esencial de lo que yo estaba sintiendo.”18 El zapato chino tiene claras influencias de las películas surrealistas de Luis Buñuel, en la cuales no existe ni se espera un comportamiento racional y concreto por parte de los personajes. Se da libertad para que estos se encuentren con diversos individuos, con los cuales tendrán episodios breves de vivencias conjuntas. Personajes que desaparecerán y volverán a aparecer en su camino como si nada. Esta libertad ansiada por el surrealismo es trasplantada a un Chile convulso, mutando a un surrealismo criollo que rompe con la hegemonía del conflicto central y permite que las historias que viven los protagonistas no se guíen por voluntades ni motivaciones únicas sino que, dándole cabida a la multiplicidad de sentidos, se amplíen las posibilidades de acción. 18 Conferencia y retrospectiva Universidad Arcis 8/11/2006 Al observar los planos y lugares físicos donde se desarrolla la historia, se recuerda a Tres tristes tigres de Raúl Ruiz, en la cual los personajes se reúnen a conversar de temas que no se dirigen a ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 71 ninguna parte, o dicho de otro modo se dirigen a muchas partes, en las cuales la coherencia no es un factor esencial a respetar. Es en este punto que se da pie a las mejores escenas de la película, en las cuales los protagonistas hablan continuamente, sin realmente decir algo preciso. Las locaciones, situaciones y diálogos de la película son muy chilenos, absolutamente reconocibles. No caen en mostrar un país maqueteado, construido al servicio de la historia u ordenado de una manera poco verosímil, sino que se muestra una realidad casi documental, como si el camarógrafo caminando por la calle se hubiese detenido a registrar lo que ocurre entre estos personajes. A pesar que muchas de sus conversaciones distan de ser coherentes o concretas, sino que se van por las ramas, confundiendo, llevándonos a otro nivel de comunicación en la cual los gestos y los titubeos son parte significativa. La película es simple, de pocos recursos, pero esto finalmente le da un valor agregado. Para los encuadres habitualmente se usan lentes normales y en algunos casos angulares para así tener a tres personajes o más en cuadro y de este modo generar una economía de planos. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 72 Resultando un montaje que no pierde el tiempo en cortar en varios planos las secuencias para relatarlas, sino que las resuelve de manera sencilla. En algunos casos, conversaciones completas ocurren en un solo plano. Permitiendo que, en la sensación de estabilidad que produce el plano secuencia se constituya la continuidad que la película requiere, a modo de equilibrar las constantes fisuras que el filme plantea en otros aspectos de la escritura cinematográfica. La fotografía de El zapato chino realizada en blanco y negro, que era el tipo de película más económica de la época, está muy influenciada por las obras de la Nueva Ola francesa y de alguna manera también por algunas películas del neorrealismo italiano. La cámara captura a los personajes de una manera cruda y circula por los barrios periféricos de un Santiago gris. También la iluminación está realizada la mayor parte del tiempo con luz natural, en locaciones reales, lo que recuerda también películas de la Nueva Ola Francesa y los filmes que inspiraron a ésta del maestro Robert Bresson como Pickpocket (1959) o Au hasard Balthazar (1966), confesa influencia de Sánchez. Quizás debido a los restringidos recursos de la película, esta forma de filmar era la más indicada para sacar provecho a la historia. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 73 La música tiene una relevancia importante y la forma en que está construida guarda directa relación con el sistema aplicado para las otras unidades que componen la película. El tema principal es una pieza de Rachmaninoff, que se reitera a lo largo del transcurso de los acontecimientos, acompañando las acciones de un modo que parece aleatorio, irrumpiendo con la melancolía de las cuerdas persistentemente, mientras Andrés y Marlene recorren la ciudad. La forma misma en que se trabajó la pieza es interesante, como lo explica el propio creador, es parte de una reelaboración, una reinterpretación de una obra ya antes compuesta, lo que demuestra el atrevimiento de Sánchez y la valentía a la vez de enfrentarse a un autor tan complejo como Rachmaninoff. 19 Conferencia y retrospectiva Universidad Arcis 8/11/2006 “También estaba la música de Rachmaninoff que yo utilicé, construyéndola casi como una pieza de música serial, invirtiendo partes del movimiento poniéndolo al revés y constituí esa partitura extraña que está ahí que es Rachmaninoff y que no lo es. Esta reelaborada, entonces la reelaboración también en el fondo de materiales culturales que tu vuelves a tomar y creo que ese es el trabajo del arte, el trabajo del espíritu. El espíritu trabaja sobre el espíritu dice Valery tan sabiamente, hay algo construido y tú tienes que destruir eso para construir otra cosa, o tomas algo de eso, es la herencia también, la fijación, o sea cómo ubicarse dentro de cierto cine, en el que yo quería ubicarme.”19 ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 74 La historia ahonda en el mundo popular. Sus personajes se encuentran y ayudan mutuamente, se piden favores, se espían unos a otros. En la película hay algo oculto. Es realista, pero al escuchar hablar a sus personajes hay algo que no calza, no es una realidad como la contaría una película clásica. Existen personajes que parecen ser tipos que trabajan para alguna institución policial, o incluso para una pequeña mafia, que es dueña del barrio por donde la película transcurre, como el Tolo o el Ojitos de Uva. Ironizando con las organizaciones de represión estatal que estaban muy presentes en la vida cotidiana en esos años de comienzo de dictadura. Andrés, el taxista, se relaciona con distintas personas, tiene conocidos por diversos lugares, por ejemplo en un bar de la ciudad, en la casa del patrón, etc. También está casado, pero como su trabajo lo mantiene siempre fuera parece no estarlo, su esposa aparece sólo en aproximadamente cuatro oportunidades y casi nunca acompañada por él, sino que por tres tipos que parecen vecinos que transitan dentro de la casa. Una vez que el negocio de los taxis termina, intenta encontrar trabajo en otros lugares, es así que llega a la casa de una mujer de clase social alta que busca alguien como mayordomo, que haga todo ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 75 tipo de servicios. La escena es muy curiosa, pero sin embargo tiene algo de realista. Al llegar todos los hombres que postulan al trabajo están mirando de cara a la muralla, en una posición como si los fuesen a registrar. Andrés se coloca junto al último y sólo pregunta “¿estamos todos en la misma?” para ubicarse inmediatamente como los demás, sin cuestionar nada. Luego lo llaman a él y conversa con la dueña de casa quien le pide de súbito bailar y luego le dice que suban a la pieza. Pero le interrumpen los tipos de esta organización pseudo mafiosa que estuvo en su taxi anteriormente, justo cuando la señora le está quitando la corbata. Esta escena es una directa alusión a las películas de Buñuel, en las cuales el erotismo y el deseo son formas de transgresión, de romper con las barreras de clase, quitándole al hombre lo que lo resguarda y transportándolo al plano animal del deseo. Dentro de El zapato chino el humor es muy importante, especialmente la idea del chiste inconcluso que nunca acaba, o que no acaba para el espectador porque los personajes no quieren contarnos el final, quieren dejarse para sí la mejor parte, el remate. De la misma manera en que nos ocultan sus intenciones y se escudan en acciones indescifrables. Hacia el final del filme, rescatado por el Negro, su fiel compañero, luego de ser castrado Gallardo, cual outsider de la ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 76 sociedad, decide terminar su vida, oculto en el maletero del taxi, sin ánimo de vivir, alimentado por Marlene. Ella se decide por una extraña forma, vivir junto a Andrés fuera del maletero, entregándole su vida a un hombre que es una especie de imán para los que lo rodean. Marlene encuentra en Gallardo el complemento perfecto, ella mujer imbunche impenetrable y él esterilizado por la castración. Gallardo ha perdido los dientes dentro del maletero y con ellos ha construido un instrumento musical que no para de tocar, consiguiendo cual flautista de Hamelín que Marlene y el Negro finalmente continúen a su lado. 3.2. Los deseos concebidos (1980-1982) Argumento R., es un adolescente que estudia en un liceo de hombres, al cual asiste a veces. Vive con sus tíos y su hermana mayor, quien deja el hogar posteriormente. El ambiente en su Liceo es aburrido y represivo. Al ser sorprendido copiando en una prueba, R., finalmente, es suspendido por todo el resto del año escolar. Su nombre es borrado del libro de clases. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 77 Al mismo tiempo, Luis Mansilla, mayordomo del liceo y amigo de los estudiantes es despedido y R. se muda a su casa, a partir de la cual comenzarán su errancia. Primero llegan a la casa de Const, un compañero de R., ya que la madre de Const necesita servicios de todo tipo de Mansilla. Junto a Const, R. roba un mimeógrafo a unos compañeros que realizan una publicación en el liceo. Posteriormente ambos se distancian por la relación que llevan en forma paralela con una prima que llega a la casa. Además, la madre de Const, insatisfecha con los servicios otorgados por Mansilla, lo despide. Cuando se descubre el robo del mimeógrafo, los compañeros rivales se pelean a golpes, y R., que está entremedio, logra escapar de la rencilla. Refugiándose esta vez en la casa de su profesora de Filosofía, donde cenan junto a su excéntrico marido, mientras esta coquetea con R. Después de comer, el marido se va a su habitación y R. se queda con la profesora en la habitación contigua. El marido mira por un orificio de su biblioteca a R. desvistiendo a su esposa, mientras la empleada le ahorca gradualmente. En este juego voyerista sexual, el marido muere ahorcado en completo éxtasis. Al día siguiente llega la funeraria y R. se esconde en el ataúd, que es llevado por Mansilla, quien trabaja como cargador fúnebre. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 78 R. y Mansilla llegan a una pensión donde éste último se relaciona con la casera y con su hija adoptiva escolar adolescente, con la cual adquiere un ambiguo rol protector. La chica, que no habla casi nada, también está interesada en R., pero Mansilla la quiere sólo para él y escapa con ella, más el dinero que roba de un negocio fraudulento que hizo con R. y sus amigos. Toda esta amalgama de sucesos conlleva a un final trágico en el cual Mansilla, se esconde en un hotel junto a la chica escolar, a la cual mata y luego se da un tiro en la sien. R. queda solo y continúa su camino errante por la ciudad. 3.3. Los deseos concebidos frente a la teoría de conflicto central Desde el inicio, R., su protagonista, no tienen una voluntad clara, lo cual provoca una divagación en su recorrido por la narración, trasladándose de espacio en espacio, con una aparente indiferencia ante los sucesos que se van desarrollando antes sus ojos. De esta manera el relato se abre a situaciones que no tienen una relación lógica con el universo de R., como la secuencia en la casa de la profesora de filosofía y su voyerista sadomasoquista marido, pero que se insertan libremente a la historia como una pieza más, por la ausencia de un conflicto central preciso. La falta de centralidad ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 79 narrativa provoca una multiplicidad de focos de atención en la audiencia, a la cual no le queda otra solución que fijar su mirada hacia elementos dispuestos en cada plano, a recorrer la pantalla, a tomar atención en las texturas, los accesorios de los espacios, los sonidos emitidos por los diálogos de los personajes, como si se tratase de una instalación que se observa en una exposición. De esta manera, toda acción que aparece en la cinta posteriormente, es aceptada como una parte más del deambular de los personajes principales, lo cual da pie a la incorporación de secuencias oníricas y surrealistas, como Mansilla arrodillado, en estado hipnótico, sosteniendo unas piedras en el living de la casa de Const. La estructura errante que Sánchez opta para contar Los deseos concebidos, plantea una cantidad de pequeñas historias que quedan inconclusas a través del nomadismo que R. y Mansilla emprenden. Cada uno deja relaciones amorosas a medio camino, trabajos sin finalizar, inician negocios que terminarán en fraudes, y todo este fresco enriquece el particular modo de ver Chile que tiene este realizador. Es una construcción narrativa que se da el tiempo de partir en otro rumbo, irse por las ramas, porque llega un punto en el que el conflicto central realmente no es necesario desarrollarlo ya que éste se diluye en las conversaciones, en la multiplicidad de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 80 mundos, tanto popular como burgués, que se entrelazan, y la falta de voluntad de seguir un asunto hasta el final. 3.4 Personajes y Fotogenia Muchos de los actores y no actores de Los deseos concebidos encarnan personajes que hemos visto a lo largo de nuestra vida en el Chile urbano. Con muchos de ellos podemos conectarnos con nuestro subconsciente y recuerdos. Los personajes que destacan entre los demás son Luis Mansilla, el mayordomo del liceo, el profesor de castellano y R. Ellos poseen una presencia en escena que se enaltece al ser filmados en cine. El formato hace que junto a su vestuario, posturas, formas de desenvolverse en el cuadro, adquieran una cualidad más en pantalla, y que finalmente sean recordados incluso al terminar de ver la película. Luis Mansilla (Andrés Quintana): Su vestuario, el terno de los años cincuenta que viste, su pelo engominado, patillas, bigote y un cigarro en la boca, su modo de hablar en tono coloquial, pero intentando construir con cuidado sus frases para adaptarse a la situación que se le presente, hacen de él un personaje que tiene una clara presencia en cada escena que aparece. Mansilla genera ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 81 empatía. Es un ser anacrónico que insertado en el contexto urbano del relato se acepta, fluye. Este presenta todo un mundo. Es un mundo que tiene múltiples vidas en una sola persona. Puede pasar por variados trabajos y actividades, funcionando en todos como si fuese un experto en el tema y desenvolviéndose en cualquier circuito social. Su modo de desplazarse entre los espacios a lo largo de la película, es un reflejo de numerosas personas de nuestro país que no pueden arraigarse a un grupo o movimiento preciso, funcionan para la situación y patrón que sea. Son personajes que no tienen nada que perder y utilizan su astucia para enfrentarse a cada obstáculo. El profesor de castellano (Javier Maldonado): Es un personaje que tiene una breve aparición en la película, pero que sin duda se hace notar. Se pasea por la sala de los alumnos con los hombros pegados al cuello, habla con los dientes bien cerrados, viste un jockey café claro, lentes grandes de marco grueso, una chaqueta café de la cual no saca las manos de los bolsillos. Pero más allá de estas características físicas y formales, este profesor se hace finalmente real gracias a la secuencia en que se sincera sobre sus sentimientos con sus alumnos e intenta explicarle lo que es el amor entre un hombre y una mujer. La esencia de lo que es poseer el cuerpo de otra persona, a nivel espiritual. El grado de honestidad del personaje ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 82 y las analogías que realiza con figuras poéticas lo hacen lucir de carne y hueso. Habla del amor con la misma urgencia y necesidad que tiene el personaje del Hombre que amaba a las mujeres de François Truffaut, uno de los mayores representantes de la Nueva Ola Francesa, también influencia de Sánchez. A pesar que al final de la secuencia, cuando el profesor ha manifestado su pena de amor desde las entrañas, y un alumno reduce todo a la pregunta “¿Fue por lo de la Profe de Física?” a lo cual el profesor asiente resignado, esta intervención breve de Maldonado en la película queda en la memoria, quizás por la intensidad de las palabras que ocupa, las pausas y los desplazamientos que realiza a lo largo del espacio, que producen que sus emociones tomen peso, independiente de cuál sea su preocupación afectiva. R. (Andrés Aliaga): Es un personaje silencioso, habla sin elevar la voz, y mantiene una postura de observador, como si no quisiese notarse. Su rostro parece el de un niño. Esta proyección se hace evidente en la secuencia que conversa con su hermana de noche y en un plano su rostro se ve iluminado por luz cálida, lo cual le hace ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 83 parecer casi como una chica, como si fuese una gemela de la actriz que interpreta su hermana. R. se mueve libremente, por inercia. Es un ser que deambula por los espacios casi sin notarse, está presente físicamente pero ausente de la realidad que se le presenta. Para él no existe un cuestionamiento profundo sobre las cosas. El escucha, observa y sigue con calma a los demás. Sus opiniones sobre las cosas son débiles, ya que no le interesa emitir un juicio de peso sobre ellas. Tiene un fuerte deseo por expresarse, pero prefiere pasar de lado el conflicto que pueda tener con los que le rodean. En él conviven una multiplicidad de personajes, el chico enamorado de las mujeres tanto de su edad, como menores y notoriamente mayores. El lector de literatura y escritor de poemas. El que roba junto a sus amigos del liceo, siguiendo a los demás sin mayor cuestionamiento de lo que hace, peleando con el que tenga que enfrentarse para defenderse de afrentas. R. es como una especie de Antoine Doinel, el personaje adolescente, revuelto y descontento con su vida de Los cuatrocientos golpes de François Truffaut, que en el caso toma una dimensión más contemplativa y pasiva, pero sin perder su esencia. Al igual que Doinel, a R. no le interesa la opinión que los adultos tengan sobre él. Es así que ambos personajes al final de ambas películas, Doinel corriendo por la playa, y R. caminando en ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 84 fuga por las calles de Santiago, emprenden un camino que no sabemos si los llevarán a un destino preciso, pero si a ser libres aunque sea por un instante. 3.5 Diálogos: la forma de hablar de los personajes En Los deseos concebidos, el habla de los personajes, particularmente del medio popular, del campo transportado a la ciudad se hace evidente al espectador, ya que este realiza asociaciones con su propio universo, con personas que ha conocido en su vida que tienen relación con los modelos expuestos por Sánchez. Ésta es una película en la cual los personajes hablan mucho y finalmente dicen poco. Desean confesarse, expresarse de una forma directa y no lo logran, entonces recurren a hablar de cualquier cosa, transmitiendo otra sensación con el cuerpo y gestos. Una escena que ejemplifica bien este punto es en la que la mamá de Const, le relata a Mansilla un sueño que tuvo y éste le dice: “¿No cree usted que puedan ser deseos, o algo, contenido que usted tiene?”, mientras la mujer se quita los zapatos y le soba la pierna con sus pies descalzos. De esta manera la conversación se proyecta hacia otro nivel desviándose para contar aspectos personales de los personajes que no conoceríamos de otra forma. Están hablando de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 85 un tema concreto, pero con el cuerpo están expresando sus deseos más reprimidos. “Es conveniente conversar estas cosas, tener una persona con quien conversarlas” termina por decir Mansilla. Existen otras escenas en que los diálogos son una seguidilla de tallas y chistes cortos. También hay momentos donde se instalan situaciones tan extrañas como la visita de Mansilla a la pieza de la propietaria de la pensión (Gloria Münchmeyer) quien está acostada viendo televisión con un hombre viejo y Mansilla lo saca de la pieza porque: “No se desenvuelve bien con un caballero mirándolo al lado”. El hombre sin reclamo alguno se recuesta en el suelo fuera de la pieza utilizando sus zapatos como almohada. Sánchez parece disfrutar de registrar situaciones insólitas y diálogos extensos en que los personajes son reiterativos hasta el cansancio. Quizás es en este tipo de escenas donde encuentra sonidos de conversaciones típicas chilenas que ningún cineasta, aparte de Raúl Ruiz, se interesa o se da la paciencia de instalar en sus relatos. Los diálogos en esta película se acercan a la realidad en el sentido que si transcribiéramos nuestras propias conversaciones durante una cena familiar, por ejemplo, obtendríamos algo parecido a los diálogos de Los deseos concebidos. En las pausas que se producen en algunos de las conversaciones, da cabida a una sensación de extrañeza respecto a las intenciones de los personajes, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 86 no sabemos realmente lo que traman, a veces las pausas o preguntas que se hacen son simple curiosidad, pero queda la duda que pueda existir algo oculto, una especie de subtexto, que acerca lo cotidiano a una dimensión siniestra. 3.6 Simultaneidad de Mundos Los personajes de esta película mutan, se desplazan físicamente a variados espacios pero dentro de ellos también existe una multiplicidad de mundos internos. El personaje de Luis Mansilla es un buen ejemplo del tipo de persona multifuncional que según las circunstancias puede realizar todo tipo de actividad. Es un auxiliar de liceo, luego es una suerte de Gigoló-Mayordomo de casa de clase acomodada, trabajador de una funeraria, negociante fraudulento y criminal. Hace parte de los personajes de nuestro país, que hacen de todo, tienen una capacidad camaleónica de cambiar y aprender funciones totalmente dispares. La instalación de estos personajes en diversos hogares ofrece una variedad de mundos existentes en la ciudad, tanto en casas acomodadas con maridos ausentes, casas familiares de clase media y pensiones de barrios populares. R. y Mansilla ingresan con facilidad a estos lugares como si fuese su propia vivienda, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 87 relacionándose el adolescente con las hijas de las dueñas de casa y el auxiliar del colegio con las madres. Es esta relación la que configura el modo de recorrer el mundo de estos seres que anárquicamente van destruyendo las relaciones de poder que se suceden en los hogares que habitan, generalmente estos, faltos de la figura paterna, o bien en su defecto esta figura es representada por personaje faltos de carácter, llenos de perversiones y sumidos en la locura. 20 Johnson, Constanza, Entrevista Aquí se mezclan dos clases sociales, que es un punto habitual en el cine de Sánchez, donde se produce un espacio de encuentro del mundo popular con el de alta sociedad, la simultaneidad de mundo. Tal como ocurre en El zapato chino, en el cual se produce una situación similar, cuando Gallardo también va a una entrevista de trabajo con una mujer (también interpretada por Margarita Wielandt) y ella le pide que bailen, para luego llevarlo a su cama. Sánchez opina: “siento que los míticos deseos ocultos de las señoras burguesas son esos, porque son aquéllos que no harían jamás, porque los deseos siempre tratan sobre lo imposible, son fantasmas”.20 a Cristian Sánchez, Dossier Revista ENFOQUE “Cine Chileno de los 80”Santiago, 1990. En este punto el protagonista tiene encuentros con personajes colmados de fetichismos que permiten a Sánchez instalar atmósferas ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 88 donde estos adquieran comportamientos bizarros, permitiéndose así que ingrese lo irreal en sus historias, en que lo verosímil toma otro rumbo, tal como lo hacen sus personajes, y lo cual es aceptado por el espectador que ya ha conectado con este extraño universo. Dentro de este contexto de verosímiles retorcidos, Mansilla, que ha tenido el rol de protector cambia, desde el momento en que R. comienza a entablar una relación amorosa con la joven escolar de la pensión a la cual el auxiliar quiere poseer. Esta suerte de dependencia, da un giro, y en él afloran comportamientos animales, los cuales lo conducirán a tratar de deshacerse del adolescente, para poder escaparse con la joven, para hacerla suya, no solo en un plano sexual sino que también en uno paternal. 4. CONCEPCIÓN SONORA Sánchez es un cineasta que se interesa por la concepción sonora de sus cintas. A través de ella señala el devenir de los personajes, su estado de ánimo o bien genera atmósferas extrañas, sobre todo al utilizar sonidos de animales. Algunos ejemplos son los que comenta con Jorge Ruffinelli en su entrevista: “Los aullidos que R. escucha dos veces, son aullidos de un mono que pueden ser escuchados en películas donde se ambientan selvas. Aquí, fuera de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 89 contexto, adquieren otra connotación y pueden pasar por cuasi humanos. En todo caso expresan, con otras apariciones sonoras, como maullidos de gatos, un paulatino devenir-animal de R., es decir, algo en él se conecta con lo animal, como parte de un proceso que lo llevará a un desnudamiento más radical y ontológico, fuera de toda psicología o pertenencia a un yo social. Se anuncia así un vínculo fundamental con un Afuera de carácter cósmico pero todavía dependiente de lo orgánico, a diferencia de Mansilla que por instantes deviene piedra, mineral, materia inorgánica”.21 Tal como ocurre en la escena donde sostiene unas piedras arrodillado en un living de casa acomodada, que se explicará en el siguiente punto. Sánchez continúa: “Es como si presentara las dos caras del universo, la creación de una vida elemental, instintiva, en lo orgánico animal que tiene acentos de "inquietante extrañeza", que nos conduce a una extraña vida no-orgánica de lo que retorna desde la muerte y la otra cara de los procesos de creación inorgánicos que no son un final de la vida y el tiempo sino la oportunidad de la aparición de nuevas formas. Todo esto está concentrado en pequeñas imágenes y sonidos que, ciertamente, no son conceptuales, pero sí son perceptos o iluminaciones”.22 21 Ruffinelli, Jorge, en diálogo con Cristián Sánchez El deseo de desear, Revista Nuevo Texto Crítico, nº 37/40, 2006 -2007. 22 Ibíd. En otra secuencia, cuando la joven escolar de la pensión, que ha coqueteado con R. en la cocina, pasa por el lado de Mansilla quien le dice: “Me tenís vuelto loco” y en la banda de sonido se escucha la sirena de una ambulancia. Ambulancia que puede estar ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 90 “proyectando” el final sangriento de ese “amor fou”, o también, a la vez, la locura, pero ante todo señala algo “anormal” e inminente, como siempre ocurre con las sirenas de ambulancias. “En tanto que las sirenas policiales (que también podrían asemejarse a ambulancias) propician el crimen, son un abierto llamado al crimen, resultado de la imposibilidad de reciprocidad amorosa de Mansilla con la escolar”.23 Las músicas populares como un tema de Franco Simone que se escucha en un hotel al que llega R., también están siempre enfocadas a producir un clima sonoro complejo que viene del fuera de campo y permite construir sensorialmente el espacio que no se ve. 23 Ibíd. Respecto a los trabajos anteriores de Sánchez, como Vías paralelas y El zapato chino, Los deseos concebidos es una película más acabada y personal, con más niveles de significación, los cuales se abren hacia un campo amplio de experimentación que se ve reflejado en la estética, a través de la fotografía y la dirección de arte; los sonidos, a partir de la combinación de registros de la naturaleza con registros sonoros urbanos, más la utilización de sonidos fuera de campo, elementos hábilmente mezclados; y la narración, a partir del alejamiento de los protagonistas del conflicto central, dejando que tracen libremente su propio trayecto, donde Sánchez encontrará los fragmentos de ficción de su universo fílmico que desea finalmente exponer. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 91 El realizador combina una vez más actores profesionales con no actores. Él se interesa por buscar más que interpretes infalibles, modelos, a la manera de Bresson, que expongan exactamente el tipo de personaje que él quiere ver en pantalla, lo cual aporta una mirada personal sobre la cotidianidad de nuestro país y nos permite desplazarnos como espectadores por una dimensión en la cual se permite que la mala actuación, que las equivocaciones y la intuición entren en juego y acerquen más a la realidad el relato, lo cual no es muy habitual ver en cintas nacionales, que intentan cuidar estas falencias. Sánchez las utiliza a su favor, le intriga el mundo que puede presentarnos, y no se detiene al inmiscuirse en él, haciendo evidentes todas sus posibilidades narrativas. 5. CONCLUSIÓN Cristián Sánchez es un cineasta con un discurso concreto sobre el cine que realiza. A través de los años se ha mantenido fiel y consecuente a sus ideas, elaborando un tipo de cine que quizás muchos no se atreverían a realizar. Su intuición se mantiene intacta y a través de su punto de vista único, retrata a su manera nuestra cotidianidad. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 92 El tema de sus películas se repite constantemente, puede que cambie de espacio, que cambie de situación, pero en el fondo lo que ahonda es la misma idea, es una estructura obsesiva que se va imponiendo una sobre otra como bloques. En ella figuran el nomadismo, los deseos reprimidos, el cruce de clases sociales y el mundo del campo trasplantado a la ciudad. Sánchez continúa reflexionando sobre las posibilidades que poseen el relato cinematográfico y las capas de profundidad que éste puede llegar a tener. La única forma de hacer cine como él es jugando con la cámara, con los actores, sorprendiéndolos y nunca darse límites rígidos dentro de una filmación. Ya que la locación, el estado de ánimo, el clima, todo puede servir para el resultado final de la película. Es a esto a lo que apuesta Sánchez. A la intuición como fuerza primordial dentro su obra. Sus películas constituyen un material muy interesante tanto para cineastas, sociólogos, antropólogos, filósofos, como para un espectador común y corriente que tiene curiosidad por descubrirlas, y reconocer en ellas parte de la idiosincrasia de nuestro país. Es por eso que su filmografía es importante considerarla en la historia del cine chileno. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 93 Sánchez hoy en día continúa realizando un cine rupturista, lejano a los estándares de cine industriales. Que rompe con el conflicto central y juega con el verosímil fílmico. Él muestra un Chile que no es habitual ver. El que está ante nuestros ojos día a día pero visto a través de un lente que invierte la realidad. Sánchez sigue la senda que Raúl Ruiz comenzó y se ha transformado en una figura de ejemplo de resistencia y consecuencia con su cine, lo cual ha llamado la atención tanto de jóvenes cineastas como de Festivales de Cine internacionales, como el de Buenos Aires y Toulouse, Francia, que le han rendido en los últimos años un espacio a través de retrospectivas de su obra. Luego de haber analizado los primeros filmes de Sánchez hemos descubierto algunos de sus mecanismos utilizados para reflejar y transmitir su visión de la realidad chilena. Desde nuestro punto de vista, el habla coloquial, herencia del giro poético que Parra incorporó a la poesía, generó un cambio de mentalidad que luego se desplazó a otras artes como el cine. De alguna manera permitió librarse de ataduras en cuanto a las formas tradicionales de creación y al igual que en el lenguaje poético parriano, Sánchez tuvo la visión de incorporar en sus películas elementos como el chiste y el hablar popular, instalándolos en el ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 94 cotidiano, permitiendo contar historias crudas, de personajes afligidos por situaciones dificultosas, despojándolas a su vez del melodrama. Sánchez escucha su entorno y transmite las conversaciones que se dan en la calle, en negocios, al interior de casas y pensiones. Encuentra ahí, en el diálogo no depurado y lo reiterativo, la imperfección que acerca sus historias a lo real. La incorporación de la pifia, la falla, según el autor, en vista de acercar lo verdadero a través del error y transformar la realidad, lo desarrolló gracias a la mezcla entre actores no profesionales y actores de escuela, lo que permitió un cruce de estilos, con los que pudo experimentar nuevas propuestas de puesta en escena. Y a través de lo falso y las “malas actuaciones” resultantes, generar un verosímil fílmico que no por alejarse de los cánones establecidos para la verdad en el cine, deja de ser cierto de una manera extraña, es el universo de Sánchez y debe ser aceptado tal cual es, fiel a su propuesta. El mostrar personajes que vienen del campo, de pequeños pueblos a la urbe y cómo estos se desenvuelven en la ciudad, buscándose la vida y logrando sobrevivir a veces mediante el engaño y la mentira, rescata el lado ladino del huaso chileno que, a lo Pedro ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 95 Urdemales, engaña al cola larga con la astucia del que se hace el “gil”, pero en el fondo tiene todo planeado. Tal como los personajes que interpreta su actor fetiche, Andrés Quintana. Como uno de los aspectos más importantes del cine de Sánchez consideramos la lateralidad. En el sentido de que su cine crea una alternativa al modelo americano y se la juega bordeando las estructuras dramáticas clásicas de construcción narrativa cinematográfica, buscando puntos en común que rápidamente se descarrían, se van por las ramas, desconcertando al espectador. A partir de este desvío, se interesa en mostrar otros aspectos de la vida de sus personajes, como si nos invitara a ver fragmentos que no son interesantes para la estructura principal de la película, pero que los registra igual, como si hubiese diseñado un plan antes de hacer la película y el personaje le hubiese presentado otro, el cual Sánchez recorrerá junto con el espectador, sin presentar problemas, y que quizás luego de eso volverán a la estructura inicial, pero es incierto. Es por esto que las primeras películas aquí analizadas, como El zapato chino y Los deseos concebidos, permiten que se instalen situaciones fuera de lo común, para insertar la ambigüedad y bipolaridad de un país, tanto en sus diálogos, como en la estructura dramática de las escenas surrealistas y oníricas. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 96 Al revisar la suma de su trabajo cinematográfico, leer sus entrevistas, asistir a sus intervenciones en ciclos dedicados a su obra, además de entrevistarlo nosotros mismos, podemos describir al oculto director, Cristián Sánchez, como un creador que tiene un planteamiento concreto, con sólidas bases teóricas, sobre el cine que desea ver en pantalla. Para lograr plasmar esto en celuloide o en formato digital, según el proyecto, conoce claramente cada aspecto técnico y cómo servirse de él para llevar sus películas a campos más amplios de exploración, a través del manejo de la fotografía, la concepción sonora, el montaje y la mezcla final de todas estas operaciones formales que agrupadas en sus filmes logran generar efectos, emociones y cuestionamientos en el espectador. Nunca dejándolo indiferente, ya sea por interés como por una postura crítica ante su trabajo. El cine de Sánchez posee una rica dualidad, puede ser interpretado como un conjunto de obras complejas, que pueden producir una distancia con el espectador poco familiarizado con ese tipo de producciones, en las cuales algunos personajes hacen reflexiones filosóficas y psicológicas, en medio de una conversación que se desarrolla, por ejemplo, en una cena, pero a la vez es un cine cercano, por las situaciones que se construyen en torno a personajes del medio popular que hablan con dichos, que expresan sus pesares, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 97 que sufren por no tener dinero suficiente para realizar sus sueños pero que, de todos modos, se ayudan para solucionar sus problemas, lo cual es muy cercano a la realidad que vivimos entre nuestros amigos, familiares y compañeros de trabajo. En esos espacios nunca falta la broma, el chiste corto, la pena, la alegría, el rumor, los favores, los apoyos. Sánchez pone atención a estos elementos y le fascina incluirlos en sus películas. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 98 BIBLIOGRAFÍA Bataille, George, El Erotismo, 1957, Les Éditions de Minuit. TusQuets Editores. Ensayo. Barcelona. Edición de 1997 Estevez, Antonella. Luz, cámara, transición. El rollo del cine chileno de 1993 al 2003. Crónicas Ediciones Radio Universidad de Chile. Santiago, 2005. Conferencia y retrospectiva Cine de Cristián Sánchez, Universidad Arcis 8, 11, 2006 Johnson, Constanza, Entrevista a Cristian Sánchez, Dossier Revista Enfoque “Cine Chileno de los 80”.Santiago, 1990. Metz, Christian, Ensayos sobre la significación en el cine, (1964-1968) Volumen 1”.Barcelona. Paidos Comunicación 133 Cine. Mouesca, Jacqueline, Plano Secuencia de la memoria de Chile. Madrid. Ed. Del Litoral 1988. Primer Plano número 3. Entrevista a Aldo Francia. Publicación Universidad Católica de Chile de Valparaíso. Revista Cultural “La Bicicleta” Marzo 1982. Romaguera, Joaquin y Alsina Thevenet, Ramió Homero. “Textos y manifiestos del cine”. Ed. Cátedra. 1989 Ruiz, Raúl, Poética del Cine Ed. Sudamericana, 2000. Ruffinelli, Jorge. Cristian Sánchez, retrato del nómada que nunca se fue. Ponencia presentada en el Festival de Cine de Toulouse, Francia, Marzo 2007. Publicado en Hacer Cine, producción audiovisual en América Latina, Eduardo A. Russo, (compilador). Paidos Estudios de Comunicación 25, 2008. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL CINE LATERAL DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Orlando Torres, Gonzalo Perucca | 99 Ruffinelli, Jorge, en diálogo con Cristián Sánchez El deseo de desear, El Cine Nómada de Cristián Sánchez, Revista Nuevo Texto Crítico, nº 37/40, 2006 -2007. (Publicado como libro por Uqbar Editores, 2007, con el mismo título). Undurraga, Vicente. Revista “The Clinic” Entrevista Cristián Sánchez, el cineasta oculto Jueves 19 de Abril de 2007, N°203 Varios Autores, La Nueva Ola. Sus protagonistas, Barcelona. Ed Paidós. 2004. ISSN 0719-4579 CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO DIEGO LORCA Licenciado en Cine Universidad de Valparaíso. Magister en teoría e historia del arte por la Universidad de Chile RESUMEN El presente trabajo es una reflexión teórica sobre algunos aspectos de la obra fílmica de Cristián Sánchez Garfias. El plan se circunscribe a la elaboración de un cuerpo de ideas en torno a la cuestión del realismo cinematográfico del mencionado autor. Para ello tomaré como objeto principal de análisis su película Cautiverio Feliz, 1998, que me permitirá establecer las bases de su propuesta fílmica para vislumbrar algunas certezas respecto al carácter del tipo de lenguaje auto reflexivo que Sánchez ha instalado en el espacio cinematográfico nacional. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 101 CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO DIEGO LORCA “La libre andadura del Zapato Chino sigue el rastro ortopédico de lo real” Enrique Lihn EL TRÁNSITO NÓMADA DE CRISTIÁN SÁNCHEZ 1 Sánchez, Cristián. “Cuando el cine chileno empezó a hablar (tres décadas de cine en Chile 19691990)”. Revista de cine 4, Facultad de Artes, Universidad de Chile, 2002. En recopilación de Ruffinelli El realismo y el carácter auto-reflexivo de la obra de Sánchez puede ser sustentado, desde un comienzo, en la siguiente afirmación del propio autor: “Sin lugar a dudas el cine directo, el documental y la ficción antropológica representan a través de sus planteos críticos, testimoniales o indagatorios la vertiente más rica del cine chileno. La ficción clásica, salvo excepciones, parece sustentar compromisos ineludibles con el espectáculo y los gustos masivos que lastran tanto su potencial expresivo como su fuerza revulsiva”.1 Su obra realizada al margen de los circuitos comerciales y mayoritariamente en la época de la Dictadura Militar, se enmarca en lo que el crítico de cine Jorge Ruffinelli ha descrito: “Lo suyo ha sido ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 102 un cine incómodo, accidentado, arriesgado y solitario. Y sin embargo no dejó que la realidad se le escapara, fuera social, política, psicológica. Hoy es preciso ver su cine como un testimonio indirecto de la época en que lo realizó”.2 Seguramente el carácter y sólida formación cultural de Sánchez, hijo de padre periodista y escritor y de madre escritora reside, desde su infancia, en la enorme inclinación familiar por la lectura. Ingresa a la Escuela de Teatro de la Universidad Católica de Chile, que abandona tempranamente por la naciente Escuela de Artes de la Comunicación de la misma institución. Ahí, luego de vencer reticencias institucionales y junto a otros compañeros, logra que la EAC contrate como profesor de dirección al sobresaliente cineasta chileno Raúl Ruiz. 2 Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez”, Nuevo texto crítico. Universidad de Stanford, California, 2007. 41 Sánchez destaca rápidamente con sus filmes universitarios: Cosita 1971, Así Hablaba Astorquiza 1971, El que se ríe se va al cuartel 1972, y los largometrajes: Esperando a Godoy, 1972-1973 y Vías Paralelas, 1975, realizados en co-dirección. Una vez ocurrido el Golpe Militar el ambiente cinematográfico nacional apoyado por Chile Films prácticamente se desploma debiendo, la mayoría de los cineastas nacionales, partir al exilio. Muchos compañeros de universidad del propio Sánchez que por esos años se encontraba ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 103 preparando Esperando a Godoy, su filme de egreso, también debieron exiliarse. En plena soledad y sin ningún soporte institucional, debió enfrentar este panorama, cuando menos, desalentador. Sin embargo, con obstinación logra continuar, en plena dictadura, con una propuesta cinematográfica extremadamente personal y a la vez muy chilena. Son destacables películas tales como: El Zapato Chino 1979 y Los Deseos Concebidos 1982, entre otras, que ciertamente guardan algún lazo de filiación con la primera etapa de la filmografía de Raúl Ruiz. Para la presente investigación me remitiré, tal como he señalado, al caso particular de su filme Cautiverio Feliz 1998, realizado en el periodo de transición hacia la democracia. A nuestro juicio este filme plantea con mayor complejidad las proposiciones de Sánchez con respecto a la construcción de un realismo profundamente vinculado la identidad nacional y a una cinematografía particularmente chilena, y subrayó este enunciado, pues es aquí donde establezco la siguiente proposición. ¿Es posible situar la propuesta artística de Cristián Sánchez y en particular su filme Cautiverio Feliz, como punto de encuentro, de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 104 continuidad y de búsqueda para la construcción de una cinematografía propiamente chilena? Mi perspectiva de estudio se circunscribe precisamente a lo que expresa Cristián Sánchez, de modo auto reflexivo, respecto a su filmografía Mi materia prima ha sido Chile, el país con sus aspectos más soterrados, insólitos, paradójicos e irrisorios.3 EL RECONOCIMIENTO DEL TERRITORIO El filme Cautiverio Feliz 1998, (160 minutos, 16 mm. Color, HD). Es una producción independiente de la casa productora Nómada Producciones del propio realizador, con el aporte del Consejo Nacional de Televisión 1995, La Fundación Ford 1996 y Fondart 1997. Trata de una adaptación del libro Cautiverio feliz y razón individual de las guerras dilatadas del Reino de Chile (1673). 3 López, Marcelo. “El secreto mejor guardado de nuestro cine”. El Observador, Viña del Mar, 30 de julio de 2006. En recopilación de Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez”, Nuevo texto crítico. Universidad de Stanford, California. 2007, 278 “La obra Cautiverio feliz y razón individual de las guerras dilatadas del Reino de Chile, redactada por Francisco Núñez de Pineda y Bascuñán, es la más incisiva reflexión acerca de los regímenes gubernamentales de Chile en el siglo XVII. La obra fue escrita durante la reclusión del autor entre los guerreros mapuches y en ella narra con gran frescura y amena descripción el encuentro entre dos culturas: la española y la indígena. En todo caso, el autor, pone el énfasis no en el combate ni en el enfrentamiento de dos razas, sino, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 105 por el contrario, en la tolerancia, en la simpatía con el enemigo, en la compasión, puesto que su cautiverio le da ocasión de acercarse amigablemente a la cultura del otro. Así, en su “cautiverio feliz”, Pineda y Bascuñán aprendió de las costumbres, fiestas, juegos, borracheras, vida doméstica, sistemas de guerra, industria y organización política de los araucanos. Por sus descripciones puede señalarse que el escritor se sintió muy a gusto viviendo con ellos. A juicio del historiador Diego Barros Arana, Núñez de Pineda y Bascuñán se ha esforzado en dar a conocer “los abusos del sistema de encomiendas, la codicia de los encomenderos, la rapacidad de los que traficaban indios y el mal pago que se daba a los buenos servidores del rey mientras eran premiados algunos hombrecillos desprovistos de todo mérito”. Para el historiador Álvaro Jara, Pineda y Bascuñán es “un autor que muy tempranamente adquiere un sentido nacional, como expresión de una realidad propia, conectada en el espacio temporal con la conciencia de ella, pero con pleno respeto por la cultura araucana, en cuanto parte constituyente de la nueva cultura nacional”.4 Cautiverio Feliz, es la adaptación cinematográfica de las 4 htp://www.memoriachilena.cl/te mas/index.asp?id_ut=francisconu nezdepinedaybascunan:cautiverio feliz peripecias vividas por el joven capitán del regimiento Tercio San Felipe de Austria Francisco Núñez de Pineda y Bascuñán, hijo del célebre maestre de campo Álvaro Núñez de Pineda que fue tomado prisionero en 1629 por un contingente de guerreros (weychafes) mapuche, durante la batalla de Las Cangrejeras. Luego de innumerables vicisitudes en que el longko Maulican, para proteger ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 106 al cautivo de los belicosos longkos de cordillera que deseaban asesinarlo, lo traslada a diversas parcialidades de su mismo linaje logrando finalmente intercambiarlo por prisioneros indígenas. De este modo, Francisco, “Pichi Álvaro”, se impregnará de todos los aspectos de la vida cotidiana, incluidas ceremonias y fiestas de los mapuches. Es liberado después de seis meses de cautiverio y varias décadas después, cuando su carrera militar ha terminado, escribe este libro que resulta, más que nada, un firme testimonio a favor de los mapuche y una gran requisitoria en contra de los abusos y corrupción de la administración colonial en Chile. En el aspecto de los dispositivos estilísticos del filme, se hace notoria la busca de un deliberado ascetismo técnico y narrativo. Sánchez instala lo que viene progresivamente utilizando en todos sus filmes, reducir los recursos de lenguaje para comprender el cine a partir de las potencialidades de la imagen y el sonido como experiencia, de lo que Deleuze define como la aparición de la imagen-tiempo: “Las situaciones ópticas y sonoras puras pueden tener dos polos, objetivo y subjetivo, real e imaginario, físico y mental. Pero dan lugar a opsignos y sonsignos que no cesan de comunicar los polos entre sí y que, en un sentido o en el otro, aseguran los pasajes y las conversaciones, tendiendo hacia un ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 107 punto de indiscernibilidad (y no de confusión). Un régimen similar de intercambio entre lo imaginario y lo real”.5 Cautiverio Feliz se sitúa más allá de la imagen-movimiento, en el régimen cristalino pensado por Deleuze para la imagen-tiempo como intercambio entre lo real y lo imaginario, en un territorio indiscernible y donde la descripción de situaciones ópticas y sonoras puras reemplaza a las situaciones sensoriomotrices de la narración clásica. La depuración de recursos y el modo ascético de Sánchez va justamente en el sentido de la imagen-tiempo y resulta, quizás, la meta de una intuición que arranca de una idea de realismo cinematográfico pensada por André Bazin: 5 Deleuze, Gilles. “Estudios sobre cine 2” Imagen Tiempo, Más allá de la imagen movimiento. Paidos comunicación, Barcelona. 1987, 21 “Uno de los mayores méritos del cine italiano es haber recordado que no hay realismo en arte que no sea ya en su comienzo profundamente “estético”. Tanto lo real como lo imaginario en el arte pertenece sólo al artista. […] Llamaremos por lo tanto, realista a todo sistema de expresión, a todo procedimiento de relato, que tiende a hacer aparecer un mayor grado de realidad sobre la pantalla. Un mismo suceso, un mismo objeto es susceptible de muchas representaciones diferentes, Cada una de ellas abandona y salva algunas de las cualidades que hacen que reconozcamos al objeto sobre la pantalla: cada una de ellas introduce con fines didácticos o estéticos abstracciones más o menos corrosivas que no dejan subsistir todo el original. Al final de esta alquimia inevitable y necesaria la realidad inicial ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 108 ha sido sustituida por una ilusión de realidad hecha de un complejo de abstracciones de convenciones y de realismo auténtico.”6 Varios de los lúcidos postulados de André Bazin, padre de la Nouvelle Vague y mentor del cine moderno, son rápidamente asimilados por Sánchez quién ve en el realismo mediado por el tamiz estético, reclamado por Bazin, una vía para acceder a una forma de misticismo o trasfondo cósmico de la imagen como expresión compleja y ambigua, es decir, como un dispositivo de múltiples capas de comprensión, cuestión esencial en la teoría baziniana. El mismo Sánchez expresa claramente el problema: 6 Bazin, André. ¿Qué es el cine?, Ontología de la imagen cinematográfica. Ediciones RIALP, 5º Edición. Madrid, 2001. 297-299 7 Roman, José. “Los Deseos concebidos” Apsi, 30 de diciembre de 1980 al 12 de enero de 1981. En recopilación de Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez”, Nuevo texto crítico. Universidad de Stanford, California. 2007, 232 “Para que el discurso sea legítimo y verosímil hay que partir de una realidad concreta. No puedes desconocerla. Lo que sí siento es que no puedo quedarme en las apariencias. Eso sería naturalismo. He intentado trascender de las apariencias tras un lenguaje que me permita estructurar la película en términos más simbólicos o significantes; que haya un segundo trazado que aporte un grado de generalización mayor. Yo busco una especie de mirada esencial en este mundo muy concreto y rescatar lo que allí hay de místico”.7 En Cautiverio feliz la composición de los planos y la propuesta fotográfica, tal como el mismo de Sánchez ha expresado tiene una deliberada influencia de pintores como Velásquez y la pintura china del siglo XVII, especialmente Lou Shitao y Zhu Da. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 109 Y en el plano nacional la pintura de corte costumbrista de Juan Mauricio Rugendas, (aunque haya dos siglos de diferencia) atestigua la mirada de un país más próximo a la narración de Francisco Núñez de Pineda. El paisaje chileno en Cautiverio Feliz no es un realismo crudo sino siempre mediado por consideraciones estéticas que implican relaciones entre figuras, colores, luces y la profundidad del campo visual. Este estilo de composición visual se emplea rigurosamente en la totalidad del filme. De tal modo que Sánchez no articula una puesta en escena en base a las posibilidades del montaje y los movimientos de cámara que siguen la acción, recurso del cine de la imagen-movimiento, sino que busca, por el contrario, un “punto de partida neorrealista”, como aquel emplazamiento de mirada que permite descubrir la totalidad de la situación y su entorno atmosférico filmado desde una perspectiva visual o punto único de cámara. A este recurso se añade una propuesta de atonalidad de la imagen y los sonidos (opsignos–sonsignos) que trasuntan la reconocida influencia de la obra y teoría de Robert Bresson en el cine de Sánchez. Citemos algunos de estos breves asertos. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 110 - Aplanar mis imágenes (como con una plancha), sin atenuarlas. - El cinematógrafo es una escritura con imágenes en movimiento y con sonidos. - Cambiar a cada rato de objetivo fotográfico es como cambiar a cada rato de anteojos. “Notas sobre el cinematógrafo”.8 8 Bresson, Robert. “Notas sobre el cinematógrafo”. México, 1979. Biblioteca Era. 9 Deleuze, Gilles. “Estudios sobre cine 2” Imagen Tiempo, El pensamiento y el Cine. Paidos Comunicación, Barcelona. 1987, Pág. 277 La posición de Sánchez orientada en una perspectiva baziniana, pero también bressoniana, se ubica primero en el reconocimiento de una realidad concreta sin mediación alguna. Y prosiguiendo una línea de cine moderno de la imagen-tiempo busca luego aprehender la extrañeza que supuestamente subyace en el banal cotidiano. Es este procedimiento el que permite superar la realidad concreta o bruta para hacer emerger dimensiones cósmicas de la realidad más insignificante. La imagen cinematográfica se constituye entonces como imagen objetiva pero dotada de las cualidades de la Imagen mental, esto es, una imagen que toma por objeto relaciones, actos simbólicos, sentimientos intelectuales y que dice Deleuze tiene con el pensamiento una nueva relación9. Pues no sólo afecta al campo inteligible de una imagen como signo, sino que comprende también otros aspectos que intervienen en un filme, como relaciones nuevas entre una situación óptica y sonora pura y lo espiritual o cósmico. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 111 En Sánchez sucede, además, que la imagen como descripción de lo real concreto y sus capas mentales que indagan en lo espiritual, se abre a un tercer grado que incorpora decididamente lo azaroso como apertura a la vida en tanto esta es permanente incertidumbre. De manera que el realismo que propicia no es simplemente lo real bruto, sino una realidad constituida por síntesis complejas. Es una imagen objetiva o reflejo que suscita en ella misma todas las cualidades propias de la imagen mental. Imagen objetiva que, tal como la piensa Edgard Morin, posee la cualidad mágica del doble pero interiorizado. Doble interiorizado y virtual (que en Sánchez es copia dispar o simulacro), y que posee la cualidad psíquica de la zona intermedia de las participaciones afectivas y mágicas, y que es precisamente aquella fuerza espiritual o cósmica que reivindica Sánchez. “Gilles Deleuze señala la existencia de dos modelos científicos, denominados compars “es el modelo legal o legalista adoptado por la ciencia real […] el dispars como elemento de la ciencia nómada remite a materia-fueras más bien que materia-forma”.10 10 Ibíd., 21 Más exactamente la imagen de los filmes de Sánchez se constituye como una mirada sin un eje central, sino más bien como un desplazamiento nómada del territorio visual entendido por Deleuze como esas materia-fuerzas, que implica apostar por el ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 112 devenir, por la deriva, por lo inestable y no-determinista que naturalmente incluye lo azaroso. El viaje del héroe, del que habla Sánchez, es un correlato de su idea de imagen, porque es un viaje de aprendizaje inconsciente, como exploración de fuerzas que asoman desde el Afuera. Un ejemplo de esta experiencia de imagen en devenir y el devenir del héroe, es la situación vivida en Cautiverio Feliz por el propio personaje del filme. El joven capitán Francisco Núñez de Pineda que es tomado cautivo por los mapuche y salvado de su ejecución gracias a la intervención del longko Maulican que lo protege como botín de guerra. Es así como pide, ante el toki Butapichun y la junta de longkos, que no lo ejecuten y que él se encargara de entregárselos en un plazo estipulado. Como el plazo se cumple y los longkos de la cordillera le recuerdan a Maulicán el compromiso, Francisco se ve impelido a emprender un continuo nomadismo, por distintas parcialidades de del mismo linaje como única posibilidad de sobrevivencia. Queda así librado a un inevitable vagabundeo que le impide instalarse en un lugar determinado, a un viaje incierto de vínculos transitorios y al aprendizaje inaparente, como lo denomina Sánchez, porque aprende sin saber que aprende, es decir a una permanente desterritorialización, en el concepto acuñado por Deleuze y Guattari. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 113 Así, el vínculo entre el tipo de imagen objetiva y mental, a la vez, y el carácter de los sucesos de Cautiverio Feliz permite pensar la idea de una realidad concreta que incluye lo irreal con un carácter indiscernible: “Ya la imagen, visual o sonora, tiene armónicas que acompañan a la dominante sensible y entran por su cuenta en relaciones suprasensoriales, es eso, la onda de choque o la vibración nerviosa, tal que ya no podemos decir "yo veo, yo oigo», sino “Yo siento”. Y es el conjunto de las armónicas que actúan sobre el cortex lo que hace nacer el pensamiento, el “Yo pienso” cinematográfico: el todo como sujeto”.11 11 Deleuze, Gilles. “Estudios sobre Es un estado del sentir como onda de choque lo que produce pensamiento. Es finalmente una clave del cine de Sánchez, un tipo de imagen-tiempo compuesta de fragmentos de realidad concreta e irrealidad incorporados en una imagen objetiva y mental que actúa como sensación directa sobre el cortex del espectador. Pero ya antes de Deleuze Edgar Morin había entrevisto, desde una perspectiva antropológica, la potencia mágica y afectiva de la imagen mental, inherente al registro fotográfico: cine 2” Imagen Tiempo, El pensamiento y el Cine. Paidos Comunicación, Barcelona. 1987, 212 p. “La fotografía parece el producto mental más espontáneo y universal; contiene los genes de la imagen (imagen mental) y del mito (doble) o, si se quiere, es la imagen y el mito en estado naciente. Pero su campo principal de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 114 irradiación es en nuestras culturas modernas, esta zona intermedia mágicoafectiva donde reina lo que se llama el alma”.12 Ahora, podemos sostener, entonces, que el tipo de imagen implícita en el cine de Sánchez se sitúa en esa zona intermedia pero indiscernible de realidad concreta y afectiva, que Morin llama reflejo o imagen objetiva, y el polo irreal y mágico propio de la imagen mental. De aquí se desprende precisamente la propiedad mística, que el mismo Sánchez reivindica como sentido último de sus imágenes, arraigada en la experiencia la de “fotogenia” como resolución: a) Del traslado sobre la imagen fotográfica de las cualidades propias de la imagen mental y b) de la implicación de las cualidades de sombra y de reflejo en la misma naturaleza del desdoblamiento fotográfico13. Además ocurre que esta misma operación de creación de una imagen indiscernible en capas o niveles, desde la realidad concreta a la sensación mística, encuentra una equivalencia entre las situaciones sonoras puras de sus filmes. 12 Morin, Edgar. “El cine o el hombre imaginario” Paidós Comunicación. Buenos Aires, 2001. Pág. 277 13 Ídem. En el ámbito de los recursos sonoros Sánchez la emprende con las potencialidades del Afuera, como un eje central de su posición de lo real. Los sonidos proclaman el adentro del héroe, para motivarlos en estas materia-fuerzas que sin explicación provocan en ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 115 el personaje motivaciones, esto también sucede en el espectador. Sonidos de kultrung, de pájaros como el chucao, el wet wet, o él mosco azul, dotan de significaciones y cambio en los acontecimientos. El mosco azul es señal que la muerte viene en busca de un alma14. Así, destina entonces los dos lenguajes, imágenes y sonidos indiscernibles pero compuestos, a distintos momentos del filme, tal como lo prescribe Bresson, porque Imagen y sonido no deben prestarse ayuda, sino trabajar cada uno a su turno en una especie de relevo. La música incidental y la música diegética incorporada en las distintas acciones como los cantos, fiestas, pero también los gritos de guerra participan de igual modo, en Cautiverio Feliz, de esta misma idea de composición indiscernible. 14 Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez” 15 Burch, Noël. “Praxis del Cine”, Capítulo 9. Argumentos de ficción, Editorial Fundamentos. Madrid, 1998. 157 Desde el punto de vista de la organización narrativa podemos ubicar a Cautiverio Feliz en un tipo de argumento que Noel Burch denomina como de psicología imaginaria15. Porque no son los móviles externos de los personajes ni la naturaleza de las contingencias exteriores quienes condicionan los actos que se nos ocultan, sino sus motivaciones interiores sobre los que siempre se ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 116 articula el mundo en proceso de extrañamiento por el que transitan los personajes de Sánchez. Sin embargo la vocación por el fragmento de realidad concreta del cine de Sánchez nos permite situar sus filmes en una proximidad a los argumentos de no-ficción de Burch. Se trata, por una parte, del argumento del tipo de meditación y por otra parte del tipo de ritual16. Tendencias opuestas del cine documental. La forma meditación es un idea sobre la realidad tal como aparece. Aquí poco importan las ideas en sí mismas, lo que cuenta es la expresión de esas ideas. Un cine en el que el argumento suministra la base de una construcción intelectual susceptible de convertirse en una estructura que atraviesa todo el filme. En el caso de Sánchez la forma meditación participa de cada uno de los sucesos fragmentados, más o menos visibles u ocultos, durante el proceso del viaje del héroe. 16 Ibíd., 164 17 Deleuze, Gilles. “Estudios sobre cine 2” Imagen Tiempo, El pensamiento y el Cine. Paidos Comunicación, Barcelona. 1987, 216 Pero esta participación conlleva una unidad indisoluble del tipo de imagen y su posibilidad de expresar una forma de meditación o pensamiento conceptual. Es lo que dice Deleuze: No ya de la imagen al concepto y del concepto a la imagen, el concepto está en sí mismo en la imagen, la imagen está para sí misma en el concepto17. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 117 ¿Pero hacia dónde se dirige esta meditación conceptual inscrita en las imágenes mismas? La respuesta a esta pregunta es la constatación de la innegable influencia del modo surrealista de entender el arte y la vida que adquiere validez con su intención de unificar todos los aspectos de lo real concreto y lo irreal o mental en un mismo territorio de experiencia. Un ejemplo del filme es la escena de la aparición del tío ya muerto del longko Quilalebo que todos en la familia reconocen como un alma errante regresada del wenu mapu, o tierra de los muertos pero cuya presencia parece no sorprender a nadie. 18 De Micheli, Mario. “Las principales vanguardias del Siglo XX”. Capítulo 6, Sueño y realidad en el surrealismo. Alianza Editorial, Madrid, 1979 76 19 Marín, Pablo. “El Otro Cautiverio”. Revista Cine 7-8, Universidad de Chile, Noviembre, 2004. En recopilación de Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez”, Nuevo texto crítico, nº37/40 Universidad de Stanford, California. 2007, 269 Podemos decir que la imagen surrealista apunta resueltamente a la disimilitud. Acoplamiento de dos realidades en apariencia inconciliables en un plano que, en apariencia, no conviene a ninguna de las dos. La imagen surrealista, es una atentado al principio de identidad18. En otro aspecto, Cautiverio Feliz sin ser una película de gran presupuesto escenográfico, es no obstante, muy cuidadosa en todos los detalles. “Cautiverio Feliz no es una recreación histórica en el sentido del cine convencional, de época. No obstante el filme está documentado etno-historicamente19”, es decir que hay una reconstrucción precisa de objetos domésticos, armas, utensilios y sobretodo de ciertas ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 118 convenciones valóricas propias de una sociedad señorial, de moral aristocrática, tal como lo señala el autor. Además el filme se permite romper los estereotipos de representación de hispanocriollos y mapuche, para describir una serie de rasgos verdaderos de la sociabilidad y la cultura mapuche. La integridad; el trato digno a los cautivos; el respeto a los sabiduría de los mayores y de cumplimiento de la palabra empeñada son algunos de los valores que la película expone en contraposición con el habitual sesgo etnocentrista que domina la representación de las acciones de nuestros pueblos originarios. LA DESTERRITORIALIZACIÓN COMO EXPERIENCIA La mayor riqueza que podemos encontrar en los filmes de Cristian Sánchez se encuentra en el contenido de la imagen en tanto portadora de signos extraños. Su cine es un proceso de descubrimiento de aspectos inquietantes y enrarecidos de la experiencia banal, sin que exista ningún supuesto para esta aparición. Esto genera un distanciamiento con el espectador convencional que espera una conducción impuesta en la estructura narrativa clásica y los procesos de identificación proyectiva aristotélica. Sánchez, por el contrario, acentúa procedimientos ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 119 distanciadores para evitar la implicación emocional y disipa la narración orientada por la teoría del conflicto central para propiciar un espectador pensante. Es por ello que su cine desconcierta, sobre todo por la presencia abrupta de esos significantes opacos que exigen en cierta manera mantener un trabajo del espectador para descubrir el significado de esas imágenes. En el plano de la construcción narrativa, que busca desdramatizar y romper con el conflicto central del cine norteamericano, Sánchez asimila muchos de los supuestos del cine moderno. Su mejor muestra es la utilización de la forma vagabundeo del neorrealismo italiano que repercutió fuertemente en sur y norte américa, poco después del período de la postguerra. “El vagabundeo había encontrado en América las condiciones formales y materiales de una renovación. Se vagabundea por necesidad, interior o exterior, por necesidad de escape20. 20 Deleuze, Gilles. “Estudios sobre cine 2” Imagen Tiempo, El pensamiento y el Cine. Paidos Comunicación, Barcelona. 1987, 289 21 Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez” En ese aspecto se hace necesario especificar que una de las particularidades de Sánchez es ser un observador de los acontecimientos. Atestiguando en sus filmes lo que el mismo indica anteriormente, todo lo que pudo descubrir de la realidad, ya sea psicológica, espiritual o moral. Pero a la vez, hizo un proceso de traducción de lo observado con la cultura popular chilena y es ahí donde apuesto mi hipótesis. Sánchez construye un cine chileno gracias a su apuesta en el vagabundeo narrativo, que en Latinoamérica no es una opción sino una conciencia cultural, una oportunidad de sobrevivencia21. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 120 Pero hay un propósito indagatorio sobre Chile en que la forma vagabundeo del cine de Sánchez adquiere una total consistencia. Este propósito fue lucidamente comprendido por Ascanio Cavallo al definir que, en las películas de Sánchez: ”El autosecuestro forma parte esencial de la identidad chilena, desde sus orígenes como comunidad mestiza infectado de frustraciones y soledad, y pasando desde luego por eso periodos de violencia que han hecho emerger, desde el fondo de su aislamiento y de sus apariencias, toda la demencia disimulada de rutina. Si las implicancias sociales de esta visión son inquietantes, sus alcances políticos podrían ser devastadores”.22 22 Cavallo, Ascanio. “El mundo secreto del secuestro” Arte y Letras / El Mercurio, 11 de abril de 1999. En recopilación de Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez”, Nuevo texto crítico. Universidad de Stanford, California. 2007, 295 Este argumento provocador define, entonces, el tipo de viaje del héroe de Sánchez; abandono, destierro y vagabundeo que genera una identidad frágil y en devenir. Es un viaje en la construcción de subjetividad y en ese sentido es también un autosecuestro en tanto este hecho es un mecanismo de defensa propio de una contracultura mestiza, excluida. Puntualmente en Cautiverio Feliz este acontecimiento se inicia en el momento que Francisco acepta la explicación de Maulican de haber mentido a los longkos de la cordillera como estrategia de salvación ante la inminente ejecución del cautivo. En Cautiverio feliz, como en toda la filmografía de Sánchez, observamos siempre el mismo plan de incluir diferentes universos y ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 121 subculturas. Lo encontramos en los diversos espacios que transita el chofer de El Zapato Chino, en los distintos mundos incluidos en la casa de El Cumplimiento del Deseo, o en los distintos lugares que aparecen en Los Deseos Concebidos. No obstante en esta diversidad de entornos y territorios, Sánchez siempre traza la misma ruta de exploración o viaje nómada. Es el viaje de aprendizaje inaparente del héroe motivado por la construcción de su propia subjetividad. No se trata de una busca épica sino de una interioridad en lucha por su autonomía y por la realización de sus deseos, pero que no termina con la resolución de estos porque es un viaje abierto y en permanente devenir, un desajuste con la experiencia misma del viaje que, ante sus ojos, no resulta comprensible sino tardía y trágicamente cuando entiende lo que ha perdido o dejado de vivir, tal como el propio Sánchez lo ha recalcado. El devenir trágico del héroe de sus películas se sostiene en una actitud mítica, pero el mito mismo, dice Sánchez, es capaz de construir una realidad más esencial. Bajo el mismo modo de operación con el realismo, la mitología también ejecuta ese camino de develamiento de lo real. En tanto creadora de una realidad en su grado más alto. Por eso los mitos persisten y las realidades son contingentes. Los mitos pertenecen a las esencias y finalmente las realidades pasan, una época histórica se ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 122 termina. Pero el mito se hace transhistórico, aunque vacía lo histórico hay algo en ellos que subsiste, hay algo en ellos de la contradicción humana que está muy bien expresado23. ¿Y cuál es el mito que Sánchez construye con su cine? Es el devenir sin comprensión, figuras que se relacionan con fuerzas ocultas del inconsciente, fuerzas que en su irrealidad terminan siendo más reales que los acontecimientos mismos. Esto se puede percibir, por ejemplo, en la escena donde Francisco observa el cadáver de un indígena y Colpoche le pide que se aleje porque la entidad maligna que dio muerte al indígena podría alojarse en su alma. Este uno de los episodios que describen la inevitable pérdida del alma del cautivo que Sánchez piensa como parte de su devenir-indígena. Es la idea de un alma mestiza conformada por la identidad hispanocriolla y la mapuche, elevada por el mito. El mito se deja ver por lo tanto como ese recorrido trágico que 23 Ruffinelli, Jorge. “El Deseo de Desear”. [entrevista] En recopilación de Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez”, Nuevo texto crítico. Universidad de Stanford, 2007 es paso de lo uno a la multiplicidad, está casi siempre expresado por un camino lateral o serie discontinua, por un desdoblamiento del lenguaje que domina subrepticiamente los filmes sin romper la convención realista. Es una especie de sutura invisible que mantiene la inmanencia, como sostiene Sánchez con clara autoconciencia. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 123 Respecto a la cuestión del conocimiento a través del cine Sánchez tiene una expresión bien nítida sustentada, en principio, en la posición del neorrealismo. Suscribe la idea del cine antropológico que contempla el mundo tal cual es, es decir parte del fragmento de real, de la imagen objetiva o reflejo pero más allá de eso, persiste la idea de la escritura cinematográfica. Está Bresson que se sirve de lo real, explora lo real para crear, por medio de una forma de composición de fragmentos en estado puro, algo que resulta irreal24. Ahora la finalidad última de esa irrealidad es producir la verdad o lo verdadero que en Cautiverio Feliz es el devenir-indígena del cautivo. 24 Ruffinelli, Jorge. “El Deseo de Desear”. [entrevista] En recopilación de Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez”, Nuevo texto crítico. Universidad de Stanford, 2007, 90 Es así como Francisco vive diferentes situaciones que se ofrecen como fragmentos de su cautiverio. Las podemos descubrir en su transitar por diferentes rucas de linajes amigos del longko Maulican donde participa de la vida cotidiana y de las fiestas que se celebran en su nombre. Pero, también, cuando se lo piden, les comunica su religiosidad cristiana y termina bautizando a Ignacio, el hijo del longko Luancura que luego enferma y muere y a los sobrinos de Maulican. También se encuentra en la encrucijada de resolver el ofrecimiento del longko Quilalebo de su hija mestiza como esposa. Esto acrecienta su anhelo de volver a tierra de cristianos, explicando a Quilalebo que no puede casarse con la joven porque sus diferencias religiosas lo imposibilitan. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 124 Si observamos el viaje de los personajes de Sánchez, este siempre ocurre de un modo imprevisto y fragmentario, como un vagabundeo sin meta. Pero es precisamente en esta diversidad de situaciones inciertas y fragmentarias donde el héroe despliega su propia multiplicidad. “Y este sería el carácter de todo devenir, el permitir un vínculo con fuerzas desconocidas para entrar en un proceso de desconocimiento interior que no implica renunciar a la identidad, sino que reclama el eclipsamiento del personaje como identidad fija. En ese sentido el devenir es una sacudida poderosa que anuncia la multiplicidad del personaje que se origina en el instante mismo de su desajuste, a la búsqueda de una morada que siempre termina siendo más amplia pero no comprendida sólo dibujada como un anhelo no actualizado. Y esto es precisamente lo que le pido al cine: que realice este movimiento nómada y cómplice, con esas fuerzas del Afuera que permiten los devenires, para explorar un universo de sensaciones físicas o espirituales que excede toda verdad.”25 25 Ruffinelli, Jorge. “El Deseo de Desear”. [entrevista] En recopilación de Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez”, Nuevo texto crítico. Universidad de Stanford, 2007, 49 p.Ibíd., 90 Esa fuerza que no tiene corporeidad, devenir-animal en Los Deseos Concebidos y El Cumplimiento del Deseo o devenir-indígena en Cautiverio Feliz, que los excede en tanto es inaprensible y mayor, los transforma en almas errante, en fantasmas, que vagan trágicamente sin morada, como dice Sánchez. Ello ocurre en el alejamiento con la relación institucional, ya sea la familiar de Francisco Núñez de Pineda con su obligada retención por los linajes ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 125 mapuche y en el encuentro con otras culturas o con aspectos desconocidos de la misma cultura. Aquí se revaloriza la constante preocupación de Sánchez por las subculturas, en la exploración de un modo de ser y entender que sobrevive al margen del comportamiento normativo. Subculturas que actúan como contraculturas en oposición al poder de la cultura oficial. Modo de defenderse, de reírse, desacreditarlo, que encuentra en lo popular el modo de una nueva morada26. Es en este ámbito donde los filmes de Sánchez sacan partido, “en esas desigualdades de lo popular, de texturas, de hablas a todo nivel, donde puedes configurar un universo rico y distinto. Por eso juego con oposiciones, oposiciones de clases, de individuo, también dentro de una misma clase, por sus humores personales, por sus personalidad, por sus tendencias, por sus temperamentos, creo que hay que armar un arte lo más dialéctico posible, donde las oposiciones sean amplias27. EL RETORNO AL TERRITORIO PERDIDO 26 Ibíd., 90 27 Ídem. Para comprender con mayor claridad nuestra argumentación se hace necesario concentrarnos en la metodología empleada por Sánchez en su puesta en escena y planificación. Al igual que el ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 126 neorrealismo acepta un punto de vista único de cámara para dar preponderancia, entonces, a la imagen como testimonio espacial de los movimientos de los personajes (no actores) y su conexión, más o menos visible, con los objetos y el ambiente que busca capturar con el punto único de cámara. Resulta significativo observar que progresivamente desde sus comienzos hasta la actualidad su puesta en escena, pero sobre todo su estilo de planificación se ha ido paulatinamente simplificando con el fin de neutralizar y aplanar los sucesos, abandonando toda lógica causal narrativa. Gran parte de esta influencia, fuera del neorrealismo y del cine de Antonioni, viene de los filmes y los postulados de Robert Bresson: “Nada de actores. (Nada de dirección de actores) Nada de papeles. (Nada de estudio en papeles) Nada de puesta en escena. Sino el empleo de modelos, tomados de la vida SER (modelos) en lugar de PARECER (actores).”28 28 Bresson, Robert. “Notas sobre el cinematógrafo”. Biblioteca México, 1979. 18 Era. Es así como en Cautiverio Feliz abandona todo uso del primer plano, generando así otra distancia más con el modelo dramático y con la convención académica narrativa. Incluso se niega a sacrificar sucesos inexpresivos, “tiempos muertos”, que atentan contra el ritmo ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 127 y que van contra la idea de mantener la tensión en el espectador, resguardando siempre la aparición de cosas insospechadas, de elementos insólitos en pequeños detalles. Esto queda muy claro en el ritmo átono del filme. Otro recurso importante de Cautiverio… es la presencia de “no actores”, no se trata entonces de actores haciendo de personaje que vienen del pueblo, sino alguien del pueblo mismo. Es la mirada desde el pueblo, intentando que esos actantes, sean ellos mismos los que se representen y no un actor que hace “como sí”. Siempre existe la diferencia del “como sí”, de lo verdadero, de lo auténtico29. 29 Ruffinelli, Jorge. “El Deseo de Desear”. [entrevista] En recopilación de Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada de Cristián Sánchez”, Nuevo texto crítico. Universidad de Stanford, 2007 30 Bazin, André. ¿Qué es el cine?, La amalgama de los intérpretes. Ediciones RIALP, 5º Edición. Madrid, 2001. 293-296 En el caso de Cautiverio Feliz Sánchez elige a Juan Pablo Aliga, un creador de efectos especiales cinematográficos para el rol de Francisco Núñez de Pineda y a intelectuales, artistas y dirigentes mapuche para los papeles de los longkos más importantes. Pero tampoco podemos obviar el empleo de actores profesionales en sus otras películas. Todo esto comprendido como la técnica de la amalgama neorrealista 30, retomado por el cine latinoamericano de los años `70. Donde se apuesta que en la relación de la técnica actoral y la espontaneidad del no actor, hay un resultado eficaz pero de mayor frescura y espontaneidad. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 128 Así también los decorados, las locaciones y los objetos, son reconstrucciones etnohistóricas de gran veracidad. Esto significó una gran producción de arte para realizar vestimentas y elegir las locaciones naturales fotogénicamente necesarias, como la notable reconstrucción de los interiores de todas las rucas en un galpón techado que sirvió de locación principal o ruca-set. En ese aspecto Sánchez como un observador de las subculturas, nos plantea que ese plan siniestro que oculta las diferencias es un modelo reproducible de la historia como sometimiento, en el caso de Cautiverio Feliz al etnocentrismo occidental, que permanece como la esencia de un mito pero que puede ser desmitificado, desplazado de su potencia rectora. Así, en su filme, Sánchez termina generando su propia tesis del forjamiento de nuestra identidad chilena. El sujeto adoptado por una cultura indígena que debe aprender a convivir con las dos culturas. Nace, de este modo, lo que Sánchez nos permite ver en todo el filme como el origen histórico de la “chilenidad”. EL ARTE DE LA EXPERIENCIA COMO IDENTIDAD La elección de Cautiverio Feliz de Cristián Sánchez con un propósito analítico se debe a la consagración por parte del artista de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 129 su propuesta creadora y también teórica. Los descubrimientos y experimentaciones de sus anteriores filmes, adquieren en este una madurez al igual que en el aspecto discursivo. Sánchez consolida una comprensión de la imagen como composición indiscernible por capas, desde el fragmento de realidad concreta hasta el avance hacia lo místico. Pero es el devenir del viaje del héroe, el nomadismo de sus personajes en tanto desarrollo de una singular estructura narrativa fluctuante y lateral, la que me parece un fundamento de la propuesta teórica de Sánchez como una Imagen Flotante. Esta inestabilidad, esta apuesta por lo azaroso, esta estrategia de nomadismo o vagabundeo es lo que se propone como identidad verdadera de la cultura chilena. Y propongo esta idea eje para entender un Cine Chileno auténtico, pues en otra comprensión, estable, sedentaria, controlada, propia de la lógica del cine norteamericano, en tanto comprensión del mundo como estructura lineal, que nos gobierna soterradamente y continúa conduciendo nuestro cine más bien como un producto hecho en Chile pero con una identidad débil. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 130 Todo este descubrimiento elaborado a pulso, en la soledad y perseverancia de Sánchez, es el que motiva a validar su figura en el plano nacional. Cautiverio Feliz es la hipótesis de Sánchez respecto a la identidad chilena. El punto de encuentro entre la conciencia occidental hispano-criolla, con su religiosidad, costumbres y concepción de mundo y la sociabilidad indígena, su cosmovisión, sus valores de relaciones de padre e hijo, todo lo que Francisco recibe en su experiencia nómada por las diversas parcialidades mapuche. Cautiverio… más que el acontecimiento de un choque de culturas es el punto de encuentro de la construcción de una identidad propiamente chilena. En definitiva Cristian Sánchez, es un creador que busca conciliar el cine de la imagen-tiempo con la idea de una realidad concreta y fragmentaria que encuentra capas soterradas de irrealidad en la imagen mental para configurar una imagen compuesta, indiscernible y abierta, capaz de tomar por materia prima a un país, Chile, que no ha perdido la riqueza de su vida popular. Si bien el pueblo y las minorías étnicas son el centro de su foco Sánchez sigue al igual que Francisco el imperativo de un devenir nómada, indígena o minoritario dominado siempre por esas fuerzas del Afuera sin ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 131 necesidad ya de lo popular o de lo indígena, en ese mismo viaje de aprendizaje inaparente en que el mismo instala a sus personajes. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 132 BIBLIOGRAFÍA Ruffinelli, Jorge. El cine nómada de Cristián Sánchez, Nuevo texto crítico, nº37/40. Universidad de Stanford, California, 2007. 344 p. De Micheli, Mario. Las principales vanguardias del Siglo XX. Capítulo 6, Sueño y realidad en el surrealismo. Alianza Editorial, Madrid, 1979 345 p. Deleuze, Gilles. Estudios sobre cine 2 Imagen Tiempo, El pensamiento y el Cine Paidos Comunicación, Barcelona. 1987, Pág. 310 Morin, Edgar. El cine o el hombre imaginario Paidós Comunicación. Buenos Aires, 2001. Pág. 223 Bazin, André. ¿Qué es el cine?, Ontología de la imagen cinematográfica. Ediciones RIALP, 5º Edición. Madrid, 2001. Pág. 265 Barthes, Roland. “Mitologías”, Necesidad y límites de la mitología, Siglo XXI editores, México, 1999. 156 p. Burch, Noël. “Praxis del Cine”, Capítulo 9. Argumentos de ficción, Editorial Fundamentos. Madrid, 1998. 192 p. Bresson, Robert. “Notas sobre el cinematógrafo”. Biblioteca Era. México, 1979. Pág. 126. Kay, Ronald. “Del espacio de Acá” Señales para una mirada americana. La reproducción del nuevo mundo. Pág. 69. Salazar, Gabriel. “Ser niño huacho en la historia de Chile” (Siglo XX). LOM Ediciones. Santiago, 2006. 132 p. Memoria Chilena. “Cautiverio Feliz” [en línea]. Chile, 2004. [ref. de 08 enero 2011]. Copyright 2004© Disponible en el sitio Web: ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ, LA IMAGEN FLOTANTE DE UN CINE CHILENO • Diego Lorca | 133 http://memoriachilena.cl/temas/index.asp?id_ut=francisconunezdepinedaybascunan:ca utiveriofeliz ISSN 0719-4579 LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS CARLOS AGUIRRE AGUIRRE Candidato a Magister en Estudios Latinoamericanos por la Universidad Nacional de Cuyo. Periodista Licenciado en Comunicación Social por la Universidad de Playa Ancha RESUMEN Vías paralelas (1975) de Cristián Sánchez, realizada en compañía de Sergio Navarro, puede ser leída como una obra donde lo político se muestra como un espacio de clausura debido a que alberga la mudez represiva del régimen en el cual fue realizada y el deambular irrisorio de personajes que anidan una idiosincrasia políticamente inestable y socialmente errática. Desde esta idea, que en el presente escrito se discute este filme como un sincretismo entre una narración fílmica ajena al paradigma narrativo convencional y la desaparición de lo político como práctica que cobija la disputa. Finalmente se concluye como Vías paralelas es una película que circula en un constante deambular que oscila entre lo trágico y el extrañamiento, y que tiene la fuerza de producir significaciones que aluden a una intriga en forma de catástrofe, lo que obligadamente nos desplaza al terreno de lo irrisorio. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 135 LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS CARLOS AGUIRRE AGUIRRE 1 Soto, Héctor. “Esperando a Godoy: La reconciliación con la realidad” en Primer Plano Revista de cine No.5. Valparaíso: Ediciones Universitarias de Valparaíso, 1973. 39. El primer largometraje de Cristián Sánchez es Esperando a Godoy el cual realizó en compañía de Sergio Navarro y Rodrigo González. Esta cinta de 1973 tuvo como principal objetivo otorgar “una mirada crítica sobre el proceso sociopolítico chileno1”. El film nunca vio la luz debido a la censura que ejerció el golpe militar sobre un sinnúmero de obras que se realizaron en esos años. Caso contrario es el de Vías paralelas, cinta que el director de El zapato Chino (1976) realiza junto a Navarro en 1975 para obtener su título universitario en la Escuela de Artes de la Comunicación. La película logra exhibir primitivamente algunos elementos característicos de lo que será su obra posterior y tuvo la fortuna de ser mostrada en algunos círculos ese mismo año, rompiendo así el cerco ideológico que comenzaba a germinar en aquella época. Jorge Ruffinelli señala en relación al título de esta obra que: ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 136 “Las “vías paralelas” del título, a la vez de aludir a las Vías paralelas de Marcel Schwob, le quitan dimensiones individualistas a los personajes, o le reconocen la única que tienen: sobrevivir repetitiva, superficialmente una serie de proyectos que se disuelven en conversaciones fútiles, en mesas de café, en restaurantes, o en interiores desangelados de casas que en ningún momento simulan ser hogares”. 2 Vías Paralelas es una obra donde lo político se muestra como 2 Ruffinelli, Jorge. “El cine nómada: El “fuera de lugar” en la obra de Cristián Sanchez” en Ruffinelli, Jorge (ed.) Nuevo Texto Crítico ISSN: 1048-6380 VOL. XIX-XX. No. 37-40. California: Stanford University, 2007. p.22. un espacio de clausura, situándose en un registro incesante de aquellos territorios reservados para un diálogo entre los acontecimiento singulares que personifican en trauma en estado larvario, pero hegemonizados por la mudez represiva del régimen, y la pauperización simbólica de sujetos irrisorios que no logran desligarse de un aprisionamiento provocado por el drástico término de la epopeya revolucionaria de los años anteriores. Nos referimos a que el filme entra en un estado que se escinde de toda referencia explícita al Chile dictatorial, consiguiendo elevar lo político en una operación donde los lugares que fueron soterrados por la fuerza contemplativa y didáctica del cine político pretérito –registro que dedicaba su observación a un pueblo que se emancipaba– son reubicados temporalmente y suspendidos a los intersticios de la certeza. La obra, así, ingresa en un diálogo con un presente enunciativo que es alimentado por una imagen que marca la incesante búsqueda de aquellos espacios sofocados por un contexto ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 137 amenazante que comienza a circular como una condición del desencanto de los distintos personajes de la película. Sánchez discute sobre Vías Paralelas que: “Me sentí con permiso para lanzar todas mis baterías en contra del realismo convencional fundado en el verosímil fílmico y segundo porque sus universos describen clausuras, mundos cerrados donde los personajes parecen atrapados que logra escindirse de lo político como lo contingente, lo militante o como la experiencia de una sociedad civil que se emancipa” (Comunicación personal, 24 de mayo 2014). 3 Kracauer, Siegfried. Teoría del cine. La redención de la realidad física. Barcelona: Paidós, 1989. p.368. De esta forma, Vías Paralelas se puede establecer como un juego de cruces entre lo tácito del contexto y esas acciones desperdigadas que consiguen capturar las trizaduras de la vida cotidiana del Chile de los años 70 que muchas veces fueron desplazadas a las insolvencias del olvido. En el plano de un distanciamiento del realismo cinematográfico, la obra abre una radical ruptura con aquel rescate de la realidad física problematizado por Siegfried Karacuer en su célebre Teoría del cine cuando señala que “El cine puede definirse como un medio de expresión particularmente dotado para promover el rescate de la realidad física. Sus imágenes nos permiten, por primera vez, aprehender de los objetos y acontecimientos que comprenden el flujo de la vida material3”. Desde esta idea, Vías Paralelas no es la representación ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 138 mistificadora y segura de un pueblo –en que la revelación y el sentido de las prácticas enunciantes reclaman una interpretación única de la realidad– lo que confina a la obra al espacio de lo político, sino que es aquella esfera de la no claridad, donde se hace imposible e incómodo dialogar explícitamente con el rediseño dictatorial, la que posibilita que la película diagrame un cine político en otro sentido: “Era 1975. Entonces la pregunta era cómo hacer un cine trasgresor, en cierto modo político, pero disfrazado; sino, no hubiéramos podido hacerlo. El riesgo era enorme en esa época, por la represión era fuerte. Buscamos, entonces, una especie de metáfora visual: un viaje hacia la locura del personaje principal, que es un funcionario que ha trabajado en un ministerio y quiere volver obstinadamente a su trabajo, y no puede”. 4 4 Ruffinelli, Jorge. “El deseo de desear: Una conversación con Cristián Sanchez” en Ruffinelli, Jorge (ed.) El cine nómada de Cristián Sanchez. Santiago: Uqbar, 2007. p.56. El realismo cinematográfico, desde las discusiones establecidas por André Bazin, ha pretendido entender a la imagen en movimiento como un mecanismo que alberga un conjunto de artificios retóricos que posibilitan el registro de la realidad en forma absoluta. El cine directo, el cine político y gran parte del documental social presente en el Nuevo Cine Chileno alojó esta idea, con el objeto de exhibir las contradicciones de la sociedad chilena desde la óptica del compromiso militante. Películas como Voto + Fusil (1969) de Helvio Soto o El Primer año (1972) de Patricio Guzmán se ubican en esa ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 139 esfera que buscaba elevarse al nivel de la certidumbre mediante un enfrentamiento dialectico de polos contrarios. En cambio, en Vías Paralelas lo político se encuentra aún en un estado de fragilidad, por personajes en el cual sus cuerpos y sus diálogos han perdido todo poder enunciativo al verse confinados al molde disciplinario de un nuevo saber que se sustenta en la idea del terror. Los sujetos articulan una idiosincrasia políticamente inestable y socialmente errática, transformándose en fragmentos rotos, con horizontes muchas veces difusos, que terminan por somatizar el panorama político inquietante de la dictadura chilena. Tomas Moulian señala, en relación a la internalización de ciertas nociones cognitivas que permitieron el funcionamiento del proceso dictatorial que recién se instauraba, que “Este saber en constitución, instrumento de una revolución, se impuso anulando la posibilidad de expresión de otros saberes e instituyendo una ortodoxia, un sistema de protección de su integridad en cuanto a saber emergente5”. La película que acá problematizamos se convierte así en un soporte de tensiones que no tienen resolución. 5 Moulian, Tomás. Chile actual: anatomía de un mito. Santiago: LOM, 1998. p.195. En los inicios de la obra, cuando Kaska, ex empleado público, se dirige al lugar en el que anteriormente había sido jefe con la finalidad de recuperar su antiguo empleo, se advierte ya un evidente distanciamiento tanto de los personajes característicos del cine ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 140 social como del carácter determinante y revelador en estado puro que el realismo cinematográfico, y en especial el cine directo, le asignaba a los acontecimientos. La cámara desorientada que refleja, en parte, la inestabilidad social de personajes que se sienten ajenos a su entorno, donde un cesante que busca desesperadamente la oportunidad de hablar con el actual gerente del lugar para poder reinsertarse laboralmente y el junior de la oficina que parece ignorar la petición de éste debido a que está más atento a lo que transmiten en la radio, refleja un estado de vaguedad que dinamiza el registro más allá de las acciones cotidianas que se exhiben. Es el estado de clausura lo que permite que la obra se establezca como un espacio de incertidumbre que se sostiene en lo que no se ve de lo real. Sánchez indica que su intención era “Quitar suelo, quitar piso al registro de las acciones cotidianas. Quiere decir, sobre todo, que no pretendo que la atribución de sentido del filme le pertenezca a este primer nivel del acontecimiento, este acontecimiento como actualidad o real.” (Comunicación personal, 24 de mayo 2014) La vaguedad de los personajes se agudiza en la escena siguiente, cuando Kaska entra a la oficina del jefe comentándole que se siente destruido moralmente por no tener su antiguo trabajo y que últimamente ha tenido que vender llaveros de rollos de foto velada y con imágenes de mujeres desnudas. Finalmente el gerente, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 141 que se descubre que antes había sido el ascensorista del lugar, en un cambio repentino de ánimo expulsa de la oficina a Kaska por hablar “muy fuerte”. El análisis de Vías Paralelas, en tanto representación de lo político como espacio de clausura, nos lleva a pensar en que el foco de Sánchez está puesto en una propuesta fílmica que sustituye al modelo representacional empático, y que, en palabras de Rancière, apunta “a sacar a la luz tensiones y contradicciones inherentes a la presentación de situaciones y a la manera de formular sus elementos, motivos y salidas6”. Sánchez señala que “En buenas cuentas el estilo de Vías paralelas debía ir hacia una búsqueda de distanciamiento, pero lejos de cualquier forma fílmica conocida. Este tipo de distanciamiento estaba, en mi cabeza, inspirado en Brecht y también en Godard” (comunicación personal, 23 de mayo 2014). 6 Rancière, Jacques. Las distancias del cine. Buenos Aires: Manantial, 2012.p.106. El juego que opera acá es el de un sincretismo entre una narración fílmica ajena al paradigma narrativo convencional y la desaparición de lo político como práctica que cobija la disputa. En relación a lo primero, la obra rompe con la gramática cinematográfica clásica. Vías paralelas deconstruye el discurso fílmico al negar la necesidad de articular un centro argumental claro que determine el actuar de los personajes al éstos depender de un deambular que dificulta la resolución de los variados conflictos que ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre 7 ”Yo estaba muy interesado en ese momento por ciertas teorías que tienen que ver con el vuelo de las moscas, el movimiento browniano, lo aleatorio, y en términos de escritura fílmica, me interesaba el underground, es decir, un cine anti-académico. Todo aquello que nos había enseñado la escuela, queríamos desaprenderlo en esta película. El trabajo que hicimos con el director de fotografía, Toño Ríos, al menos en mi parte de la película, fue que él no sabía –no debía saberlodónde se iban a mover los actores en la puesta en escena, y tenía que registrar la cámara en mano esta situación como mejor pudiera. Se las tenía que arreglar. Ese era el juego sorpresa, y la película tiene eso: la cámara va, viene, busca… Lo que está haciendo hoy Dogma 95, tiene un poco de eso: una reconstitución del espacio, pero sobre todo una expresión directa del tiempo, a través de ese movimiento de cámara, que busca pero que a veces no encuentra nada y otras se desenfoca.--- | 142 surgen durante la película. Las situaciones que se desarrollan a lo largo del filme interrumpen abruptamente la búsqueda de trabajo de Kaska, quien encarna a aquel sujeto desempleado víctima del plan económico de la época, entremezclándose así múltiples historias que no se cimentan en un norte claro. Si bien es cierto que Sánchez reconoce que en este filme se trabajó empujado por una experimentación ingenua y poco caligráfica 7, en este plano, la cinta adquiere un valor importante cuando en ella se construyen situaciones que quedan sujetas a un desconcierto causado por un determinado vaciamiento de lo político. En relación al segundo elemento, es la casi nula aparición de la esfera pública en la obra lo que viene a neutralizar lo político como acto deliberativo, en tanto que el espacio de visibilidad política, de elaboración de discursos, de reunión y de construcción de identidades, que por excelencia era dominante antes del golpe de Estado - nos referimos a la calle como espacio donde se daba la disputa por el poder y la articulación de las relaciones humanas- es reemplazado por los lugares cerrados. El espacio de lo privado al neutralizar el espacio de lo público recluye a los personajes a una suerte de prisión doméstica, castrándolos de toda posibilidad de construir socialmente un proyecto que les permita salir de su condición de cesantes. Esto último es perfectamente reconocible cuando en Vías Paralelas se dibujan situaciones donde los desocupados buscan alcanzar su viejo estatus ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 143 de empleado público, pero que en el espacio histórico en que se encuentran -la puesta en marcha del plan económico de shock en 1975, por ejemplo- está fracturado por las trasformaciones estructurales del régimen. Así, los personajes idean un sinnúmero de proyectos que nunca se concretan en bares, oficinas y casas que irrumpen de forma sistemática en la obra, anulando toda referencia alguna a un espacio reconocible. ---Un lenguaje que considero hoy, y visto desde otra perspectiva, como menos caligráfico. Mi lenguaje después se fue depurando hacia otra cosa, pero en ese momento, sentíamos que era necesario hacer una película como Vías paralelas”. Ruffinelli, J. Op. Cit. 55. Ejemplo de esto es la reunión que tiene Kaska con sus amigos, donde mediante un largo plano secuencia, se los exhibe en la mesa de un restaurant discutiendo acerca de las posibles empresas que puede establecer para así salir del desempleo. La actitud de Kaska cuando interrumpe el diálogo para brindar por la presencia de la única mujer en la mesa diciendo “porque acá se juntan puros hombres a tomar pero nunca hay mujeres” es una práctica que oscila entre la superficialidad que cruza al tiempo libre y la negación de una realidad que aún es extraña para el individuo. Después de brindar, los personajes siguen hablando de los posibles proyectos sin concretar nada claro. Nuevamente Kaska interviene en la discusión mencionando que debido a que en la reunión hay sólo intelectuales es difícil llegar a concretar proyecto alguno. El plano secuencia es interrumpido por una escena donde uno de los participantes se dirige a un baño y se encuentra con un sujeto que ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 144 anteriormente lo había golpeado y que ahora le solicita si puede hablar con su hermana que es vedette. Lo irrisorio de este trozo fílmico es la nula relación argumental que existe entre la escena anterior y la siguiente. Podemos decir que en estas operaciones de Vías Paralelas lo que está en juego es representar el paso de lo político al plano de lo ontológico, como forma de ingresar a un segundo nivel de acontecimiento que rompe con los márgenes de la seriedad, de lo verosímil y lo evidente. Sánchez destaca que: “De lo político se va siempre a lo ontológico. Es la dirección que toman mis películas, emiten un juicio sobre una circunstancia histórica pero extienden ese juicio a un número mayor de circunstancias que puede ser, en el caso de Vías paralelas, la existencia misma de Chile como un país donde practicamos el canibalismo al amparo de padres disociados, impostores y homicidas. Ello trae como consecuencia una afirmación humorística e irrisoria que pone en tela de juicio el fundamento de un Chile hermanable y sin violencia, que es casi siempre una ficción historizada, es decir, un mito (comunicación personal, 27 de mayo 2014). Una de las manifestaciones inmediatas de la violencia, según Walter Benjamin, es la instauración mítica de un derecho bajo el nombre del poder, el cual tiene por necesidad ligarse de forma ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre 8 Benjamin, Walter. “Hacia la crítica de la violencia” en Benjamin, Walter, Obras II, 1. Madrid: Abada, 2007. p. 201. 9 Ver el trabajo de Valeria de los Ríos “El zapato chino como alegoría política, una aproximación” publicado en BARRIL, Claudia, CORRO, Pablo y SANTA CRÚZ G, José M (Eds.), Audiovisual y Política en Chile, Santiago: Editorial Arcis, 2014. 10 “Aquí hay escenas que expresan un modo irrisorio, absurdo de ser, pero real al mismo tiempo, con la voluntad de crear un inverosímil fílmico”. Ruffinelli, Jorge. “El deseo de desear: Una conversación con Cristián Sanchez” en Ruffinelli, Jorge (ed.) Nuevo Texto Crítico ISSN: 1048-6380 VOL. XIX-XX. No. 37-40. California: Stanford University, 2007. p.49. | 145 permanente a dicho ejercicio de la violencia. Tanto como fin y como medio, la violencia funciona como mecanismo indispensable, como stricto sensu del mito8. El poder del derecho en Vías paralelas funciona como una huella que se encuentra aún en estado letárgico y que sólo es ejercido por individuos que han parecido naturalizarlo mediante un disciplinamiento que circula entre lo visible y lo invisible. Entre lo evidente y lo irrisorio de sus actos. Es debido a esto, que se puede entender que lo absurdo que pueden resultar algunos pasajes de la cinta, alertan de la existencia de un gesto cinematográfico que apela desnudar una realidad cruzada por el desasosiego social mediante la alegoría histórica9 bajo distintos niveles. Una cinta que indaga en la clausura política de aquella época a la vez que consigue el valor de ser un inverosímil fílmico10. Cuando Kaska visita el restaurante Doce apóstoles éste se encuentra con su dueño que al mismo tiempo es presidente de una cooperativa. Este personaje le comenta que ha logrado establecer el restaurant gracias a su iniciativa individual. En repuesta, Kaska le menciona que comparta su prosperidad con él porque está sin empleo. Mientras ocurre este diálogo, la cámara circula por el escenario realizando leves paneos donde se ven a dos garzones que vigilan la entrada con unos cuchillos en sus manos. El dueño invita a Kaska a conocer la parte trasera del restaurant. En esta escena, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 146 articulada en un plano secuencia, se muestran zapatos colgados de una cuerda junto a un cadáver. Finalizado esto, ambos personajes se trasladan a una mesa en la que se encuentran unos garzones. A Kaska le sirven un plato que contiene botones, al mismo tiempo que uno de los empleados le roba sus zapatos y su chaqueta. Finalmente éste es desalojado del lugar. Podemos decir que en este trozo fílmico existe una convergencia entre un “absurdo”, según Jorge Ruffinelli, y una alusión a un determinado tiempo histórico que es retratado de forma irónica. El hombre que aparece colgado se puede leer como una insinuación indirecta a política del terror que aplicaba la dictadura militar. En una escena posterior el hermano de la vedette cesante se encuentra en el restaurant comiendo junto a su dueño. Acá nuevamente la cámara se desplaza por el lugar logrando exhibir un pequeño rincón donde hay apilados una gran cantidad de zapatos. Terminado esto, los dos personajes se enfrentan con unos cuchillos pequeños, debido a que el hermano de la vedette le señaló al dueño del lugar que ahí cocinaban a los clientes. Finalmente el personaje que caracteriza Ángel Quintana termina apuñalando a todos los empleados del restaurante mientras enrabiado discute sobre el fracaso de su negocio y de la cooperativa que él encabezaba. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre 11 Foucault, Michel. Vigilar y Castigar: nacimiento de la prisión. Buenos Aires: Siglo XXI editores, 2009. p. 355. | 147 En ambas piezas, la violencia opera como elementos de aquel poder normalizador que se ha multiplicado en distintas esferas sociales y que funciona como base de aquella generalidad carcelaria problematizada por Michel Foucault11. Según el autor, la omnipresencia de los dispositivos de disciplinamiento se han convertido en los pilares principales de la sociedad, los cuales permiten someter a los cuerpos, los gestos, los comportamientos y las actitudes al gran soporte, en la sociedad moderna, de ese poder normalizador que actúa sin escrúpulos. La cárcel, en tanto institución, ha permitido que el arte de castigar se vuelva natural y aceptable ser castigado. El amedrentamiento se convierte así en ley del comportamiento humano, que bajo formas compactas y diseminadas, permite que el “delincuente”, o aquel elemento disfuncional del régimen social, entre en el orden de la observación, y en el caso más drástico, en el de la muerte. Desde que Kaska entra a los Doce apóstoles es aquella legitimidad del castigo lo que rápidamente lo sorprende. Los garzones con cuchillos en sus manos evidencian la naturalización de la represión, fenómeno que es más agudo cuando se exhibe a un cadáver colgado en la zona trasera del inmueble. Por otro lado, cuando en la otra escena descrita, el dueño del restorán asesina a sus empleados, la acción es realizada sin reservas. El castigo en la esfera privada no es una anomalía, debido a que ésta encuentra su fundamento en un régimen en el que todo ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 148 mecanismo disciplinador es necesario para conseguir su hegemonía represiva y amenazante. En definitiva, Vías paralelas, como obra donde lo político se muestra como un espacio de clausura, es una película que circula en un constante deambular que oscila entre lo trágico y el extrañamiento, y que tiene la fuerza de producir significaciones que aluden a una intriga en forma de catástrofe, lo que obligadamente nos desplaza al terreno de lo irrisorio. La experiencia de reubicarnos en el espacio cotidiano del Chile dictatorial permite que una construcción significante que desafió la rigidez doctrinaria del cine social, ponga en tensión aquellas imágenes de un cine que pretendió movilizar una conciencia crítica que finalmente fue funcional ante la inmediatez de lo real. Nos referimos a que en Vías paralelas es el devenir de esa inestable identidad de los personajes lo que lleva a que la obra sea reflejo de una parálisis política propia del Chile de aquellos años. Así, cuando Kaska en el epílogo de la cinta grita – como el profeta saltarín- ¡Utopía y todo eso es absolutamente falso! No hay camino. Aleluya pan de hallulla, mientras salta por las calles, refirma ese deambular trágico del héroe que Sánchez destaca en su texto Aspectos fundamentales de mi cine: “Este saber, ignorado, pone en duda la identidad de mis héroes y los arrastra a extraños devenires. A vínculos con fuerzas que los desposeen de sus ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 149 discursos de superioridad y los empujan hacia un Afuera que es como una llamado o una visión que imperceptiblemente los trasforma en almas errantes, en fantasmas, que vagan trágicamente sin puerto ni patria”. 12 12 Ruffinelli, J. Op. Cit. 205. Por otro lado, el personaje del junior de la oficina quiere cumplir el programa de Artur Rimbaud y André Breton de cambiar la vida. La obra, finalmente, termina por representar sujetos angustiosos que jamás se reconcilian con aquella realidad despiadada que los excluye brutalmente. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LO POLÍTICO COMO ESPACIO DE CLAUSURA EN EL FILME VÍAS PARALELAS • Carlos Aguirre Aguirre | 150 BIBLIOGRAFÍA Benjamin, Walter. “Hacia la crítica de la violencia” en Benjamin, Walter, Obras II, 1. Madrid: Abada, 2007 de los Ríos, Valeria. “El zapato chino como alegoría política, una aproximación” en BARRIL, Claudia, CORRO, Pablo y SANTA CRÚZ G, José M (Eds.), Audiovisual y Política en Chile, Santiago: Editorial Arcis, 2014. Foucault, Michel. Vigilar y Castigar: nacimiento de la prisión. Buenos Aires: Siglo XXI editores, 2009. Kracauer, Siegfried. Teoría del cine. La redención de la realidad física. Barcelona: Paidós, 1989. Moulian, Tomás. Chile actual: anatomía de un mito. Santiago: LOM, 1998. Rancière, Jacques. Las distancias del cine. Buenos Aires: Manantial, 2012. Ruffinelli, Jorge. El cine nómada de Cristián Sanchez. Santiago: Uqbar, 2007. Ruffinelli, Jorge (ed.) Nuevo Texto Crítico ISSN: 1048-6380 VOL. XIX-XX. No. 37-40. California: Stanford University, 2007. Soto, Héctor. “Esperando a Godoy: La reconciliación con la realidad” en Primer Plano Revista de cine No.5. Valparaíso: Ediciones Universitarias de Valparaíso, 1973. 37-39. ISSN 0719-4579 DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS CRISTIÁN SÁNCHEZ GARFIAS Director, guionista y teórico de cine. Académico de la Escuela de Cine de Chile RESUMEN El presente artículo recoge una serie de declaraciones dictadas por Cristián Sánchez en referencia a la película Tiempos malos. En él se abordan los diversos intereses y problemáticas inmersos en su filmografía. De este modo y, tomando como ejemplo el filme citado, el autor indaga en temas como la filosofía, la teoría de cine y el contexto general de sus películas para abordar y problematizar en contenidos como: el héroe y el pensamiento, la cultura y el desastre, filosofía y crimen, la inclusión de lo extraño y el afuera. Lo anterior en razón de dar a conocer algunas claves teóricas encriptadas en el argumento de este filme y que bien podrían extenderse a una comprensión cabal del resto de sus películas. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 152 DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS CRISTIÁN SÁNCHEZ GARFIAS TÍTULO; TEMA; HÉROE Y EL PENSAMIENTO Me gusta el título Tiempos malos porque en coa, el léxico del hampa chileno, quiere decir ocasión peligrosa, momento de definición, lo que puede ser bueno o malo, pero un momento decisivo en qué algo va a pasar. El espacio del narcotráfico y los hechos de la banda delictual constituyen la superficie de Tiempos malos, el mundo representado. Pero una película se define más por su modo de expresión que por el mundo representado, se define por signos y figuras extraídas de ese mundo. Ciertamente los personajes del filme pertenecen al mundo del hampa y del narcotráfico, es el medio en que existen. Pero lo que tiene valor artístico no es la representación, fidedigna o no, de ese medio sino la expresión mediante afectos y perceptos, lo que Deleuze llama lógica de la sensación. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 153 El narcotráfico es en verdad la materia prima, lo informe que se presta a operaciones fílmicas pero sin determinar los alcances de sus dispositivos. Lo que interesa en un filme son las relaciones internas de imágenes y sonidos, su forma de composición y también las relaciones de las figuras que sufren transformaciones, como el caso de Ángel, el héroe de Tiempos malos, un adolescente que decide quedarse a vivir con sus vecinos porque su madre y hermana se van al sur luego que su padre muere, al parecer asesinado. El tema de Tiempos malos es sobre trastornos de una familia que prácticamente se disemina en una diáspora, o mejor, la absorción de una familia pequeña o nuclear por una de carácter tribal, una familia extendida, compleja, que se constituye como clan, y esto es lo importante, donde todos los valores están invertidos. Es decir, el familiarismo edípico, burgués, da paso a la irrupción de una banda nómada, arcaica, que efectúa actos que impiden todo afán protector y hacen del espacio del clan un lugar poseído por otras fuerzas, las fuerzas del Afuera, que son aquellas que me han interesado en Los deseos concebidos y El cumplimiento del deseo. Sin embargo este proceso liberador tiene dos caras, donde todo lo que parece extremadamente seductor es en verdad la señal de algo mortal, o que se vive maníacamente al borde de la muerte pero de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 154 algo que, a fin de cuentas, no es todavía una liberación sino una nueva forma de prisión, una nueva forma de cautiverio, otro inaparente cautiverio feliz. Si lo pienso bien es exactamente la inversión de Cautiverio feliz. En esa película el cautivo fue libre sin saberlo y en Tiempos malos Ángel se da cuenta al final que ya no es libre y por eso se aleja de la casa materna siguiendo los pasos de su fe animal como diría Santayana, o de su devenir-animal como piensan Deleuze y Guattari. Ángel, el héroe, está ahí atrapado por el canto de sirenas, inmerso en ese mundo seductor, irresponsable y moralmente laxo, participando de actos delictuales de la banda, al menos como observador. Pero, no obstante, algo lo separa de la complacencia delictual. Quiero hacer notar que Ángel está pensando algo, algo distinto a lo que ocurre, aunque no se sepa que es. Es un misterio, el misterio del pensamiento no declarado, incluso no declarado por la voz off de Ángel que explicita de manera lacónica algunos sentimientos en algunos momentos del filme. Es la contemplación o lo implicado del pensamiento en tanto es contemplación y no explicación, todavía. Lo que importa en Tiempos malos son las relaciones de figuras que se van resquebrajando en la medida que ocurren acontecimientos destructivos y trágicos que el héroe contempla y ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 155 piensa en secreto. ¿Pero qué quiere decir pensar en secreto? Quiere decir que el héroe no ejerce la voluntad de pensar los acontecimientos sino que se abandona a ellos. Estos aparecen y reaparecen una y otra vez, con una frecuencia aleatoria, es decir la decisión proviene del acontecimiento que va dejando su sedimento, sus capas, ¿de qué? diría que son capas o un sedimento provocador, porque acumulan algo que va a forzar el pensamiento, que va a forzar el tener que pensar, que es, entonces, como la emergencia de un estallido, que se da sin darse efectivamente en la acción, como ocurre normalmente en la transformación de la acción por la voluntad, sino, por el contrario, ocurre como resultado de una inacción de la voluntad, de una anestesia que, sin embargo, moviliza la totalidad de las fuerzas del héroe que cae en el entendimiento, literalmente, en algún momento, como decimos en Chile, “le cae la chaucha”, que es la versión criolla de un satori. El punto de vista de la película se sitúa desde Ángel pero a veces toma a los guardaespaldas, Burro chico, Percha y Caremuerto como intercesores o emisarios, la familia está vista desde la perspectiva de ellos. Eso incluye a Eulalio, el capo, Blanca, su esposa que es pituca, y expresión el arribismo del jefe del clan. Incluye, también a sus tres hijas, cada una con su personalidad y problemas. La primera, Norma, rivaliza con su hija en la conquista de hombres. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 156 Dita, la segunda, férrea encargada de los dineros familiares, e implacable a la hora de impartir justicia, Nury, la menor, celópata compulsiva, con evidentes trastornos de personalidad. Vitoco el hijo termocéfalo del capo y Beto su hijastro y frío brazo derecho. Jano y Maggie hijos de Norma. También participan del familión la Tato, antigua mama, el mayordomo, Andrés (Lito) Quintana, y el Cheto, el chofer del capo que pocas veces está sobrio y que es el único que resiste la presencia de Ángel en la casa. En el plano narrativo o sintagmático Tiempos malos es completamente lineal, se la sigue fácilmente, pero en la dimensión paradigmática está organizada de modo que aparecen varios motivos temáticos entrelazados. Es una película sinfónica, de un tejido complejo, enrevesado, con diversas capas de sentido. Incluso hay un personaje, la niña errante, que aparece con un ovillo de lana roja que si el héroe la siguiera se perdería aún más en el laberinto. La película misma es una madeja que está enrollada o plegada sobre sí misma en un ovillo y por ello tiene la potencia de rodar y desplegarse. La niña, a su vez, aparece como una especie de Ariadna desorientadora, que guía siempre hacia las zonas de mayor enredo del laberinto- madeja- ovillo. Figura equívoca que conduce a ninguna parte, es como una “bola huacha” que arrastra con su presencia balidos de ovejas y aullidos de lobos. (Esto indica el ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 157 enorme arrastre de una “bola huacha”, es decir cuando se vuelve huacha al separarla del rebaño de los semejantes). Esta niña es tierra fértil ella para la eterna lucha de lobos y ovejas, o mejor de ovejas que devienen lobos y viceversa. Es, por una parte, la presencia de un alma animal en conflicto que ella lleva consigo, lo extrahumano soportando lo humano como lo piensa Santayana, y es también hacer el animal en el humano en la idea de Deleuze y Guattari. Pero al mismo tiempo la niña errante expresa una figura del mundo indígena chileno y latinoamericano. Una huérfana absoluta que atraviesa los tiempos moviéndose sin ton ni son y que por eso mismo puede guiar aunque sea al abismo o a un infierno más profundo. Lo infernal es muy importante en Tiempos malos y en consecuencia el ámbito cristiano. De hecho el protagonista se llama Ángel, eso ya dice algo. Entra sin saber a un infierno, uno que parece el cielo pero es un infierno, como son los infiernos en Chile, lindos, amables, cautivadores pero extremadamente equívocos. Además, Ángel es un personaje que expresa la integridad y la inclinación a valores e intereses superiores. Por ejemplo su interés por la filosofía. Él lee a Nietzsche, aunque sea por casualidad. Lee un libro que le pasa el mayordomo del colegio, que le dice: ¿no sabes ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 158 nada del Super Hombre, de La Voluntad de Poder, del Eterno Retorno? y le pasa Más allá del bien y del mal. No sabemos que partes lee, cómo lo integra en su vida, pero lo está leyendo y eso lo impulsa a contemplar, es decir a pensar en forma implicada. Y naturalmente Don Segundo, el mayordomo, pertenece a esa filiación secundaria y minoritaria de anti-maestros paradójicos que propagan no una filosofía secreta sino el secreto de un pensar a contrapelo. SOBRE EL GUIÓN, LA CULTURA Y EL DESASTRE La novela Chicago Chico fue el punto de partida de Tiempos malos. Resultaba extraño que estuviese dispuesto a renunciar a mis propios temas para trabajar con ideas de otro, pero había decidido ser un poco estratégico y tomé la novela de Armando Méndez Carrasco con la idea de hacer una adaptación libre. Ya había leído otras novelas del autor que me resultaba simpático y tremendamente auténtico porque retrata con lealtad el mundo del lumpen, del hampa chileno. Pero al releerla me di cuenta que no podía mantener la historia en la época que aparecía en el libro (años 30’). Entonces decidí quedarme con el espíritu de la novela e inventé otras situaciones y personajes que terminaron por transformarla completamente. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 159 En Tiempos malos el mundo del hampa aparece expresado sin ánimo caricaturesco y de un modo distanciado y no representativo, es decir evité mostrarlo de una manera ilusionista, dejando de lado, en lo posible, los prejuicios de una mirada paternalista y burguesa. Porque, a mi criterio, la mayor parte de las construcciones y suposiciones implícitas describen este mundo de manera esquemática y limitada sin comprender un factor primordial de su particularidad que es su pertenencia a una contracultura, una cultura de resistencia de la cultura oficial. Quise ir más allá y empecé a investigar, a leer la crónica roja, a documentarme sobre personas que provenían de ese mundo. No obstante sentía que todo ese esfuerzo resultaba epidérmico y entonces decidí a confiar en mi intuición y me lancé a escribir y una vez que el guión estuvo escrito lo confronté con las opiniones de algunos de mis no actores que me entregaron, como siempre, preciosos elementos de la cultura popular. Escribí la primera versión del guión el 2001 pero trabajé varios años puliendo detalles. La escritura misma no me demoró más de tres o cuatro meses porque había estado elaborándose en mi cabeza mucho tiempo antes. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 160 Traté de poner una gran cantidad de cosas que me importaban. Muchos años sin realizar una película hace que uno quiera ponerlo todo. En Tiempos Malos hay como diez películas en una. Fiel a mí a mi idea de cine, deseaba expresar coordenadas antropológicas verdaderas de la contracultura del hampa pero huir, al mismo tiempo, de todo realismo pseudo documental. Entonces fue que aparecieron, de manera espontánea, casi como un dictado del inconsciente, esas conexiones a aspectos de nuestra civilización, sobre todo del mundo griego arcaico. Pero traté, en lo posible, que esas conexiones no fueran meros adornos o símbolos ostensibles trasplantados al mundo chileno sino que funcionaran en el medio donde esos personajes se desenvuelven. Me parecía que sólo así se convertirían en figuras auténticas. Ulises, por ejemplo es un personaje que se dedica al “cambiaso”, es decir hace trueques, vende y compra objetos, está en consecuencia en el dominio de la comunicación y por tanto bajo el patrocinio de Hermes. Pertenece, también, al ámbito del intercambio que incluye el traspaso de información, pues también a través de sus averiguaciones la familia llega a saber quién es el soplón que los está delatando. Y es esta perspectiva de incorporar figuras legendarias lo que permite sacar a la película del verosímil realista y obsecuente hacia toda forma de representación. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 161 Creo que Tiempos malos tiene una línea humorística que no se pierde incluso en las situaciones más violentas y desgarradas. Hay en ella un tránsito, un vaso comunicante entre lo cómico y lo trágico y es precisamente el humor lo que al final prevalece, con una visión optimista propia del mundo popular. Es un modo de ser chileno que se expresa en las situaciones donde ocurren las cosas más espantosas y sin embargo la gente, muchas veces, se está riendo, solapadamente. Pase lo que pase la gente se ríe igual y mejor si lo que pasa es terrible. Es un hecho conocido, los mejores chistes se cuentan en los funerales. El desastre le permite al chileno fortalecer su identidad y eso está aquí en Tiempos malos, esa identidad encontrada en medio del desastre que llama a la risa. FILOSOFÍA Y CRIMEN El héroe de Tiempos Malos es una radicalización de los héroes de mis películas anteriores y especialmente de R. de Los deseos concebidos. Ángel, también un escolar que aprende de un modo inaparente o paradójico, va hacia el mal o hacia lo oscuro, se sumerge vertiginosamente en un infierno excitante y maníaco donde las figuras del hampa resultan enormemente atractivas y lo que es ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 162 peor aún su mundo sigue siendo un infierno a pesar que ellos tiendan incesantes lazos de afecto. Naturalmente al héroe le costará un esfuerzo mayor de superación de su indiferencia moral para escapar de esa inclinación insoslayable, de ese progresivo deslizamiento que indefectiblemente lo conduce hacia lo infernal. La idea órfica de descenso como eje vertical cosmológico me resulta capital. Pero también está el laberinto que se despliega en el plano horizontal, el laberinto-madeja-ovillo. Aquí, en Tiempos malos, me interesaba la unidad de las series verticales, intensivas y horizontales, extensivas. La primera explorada en El cumplimiento del deseo y la segunda en Los deseos concebidos y Cautiverio feliz. Ángel es Orfeo y Teseo a la vez y no solamente una figura del cristianismo. Me doy cuenta que las figuras mitológicas y legendarias griegas resultan fundamentales para mí visión del cine, por eso incluyo también a la niña errante con el ovillo de lana roja que, como he señalado, remite al hilo de Ariadna, la pequeña tarántula que teje y desteje, figura así mismo del pensamiento nietzscheano. Sin embargo Ariadna niña- errante- araña podría ser una víctima de actos de brujería, podría estar “ojeada” porque como dice ella misma: “me hicieron un trabajito”. De ahí la presencia casi policial de la vidente ciega que insiste en exorcizarla y en enrostrar a Ángel el error que cometió al dejarla entrar a su vida. Pero también lisa y ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 163 llanamente podría ser un witranalwe, un alma en pena que retorna para resguardar al héroe tal como ocurre en la tradición cultural mapuche. De cualquier modo, la niña errante es una figura plural o una multiplicidad paradójica que expresa que quien protege o guía debe estar necesariamente perdida y olvidada de sí misma. Debe ser proclive a conectarse con su fe animal, en la bella afirmación de Santayana usada como ejemplo de percepción primera, desde las vísceras, por Whitehead. El anti viaje iniciático o de formación inaparente de Ángel es sinuoso e inquietante y puede llevar tanto a su perdición moral como física. Pero es un viaje necesario de conquista del devenir niño, de la alegría superior del juego, como ocurre en el concepto nietzscheano de ebriedad y el pensamiento de la alegría del juego en el conatus de Spinoza. Es la angelidad, su esencia angélica luminosa, lo que Ángel debe extraer de sí mismo al contemplar el mundo en su oscuridad obscena para llegar a ser un Ángel superado, un super Ángel. Ciertamente el héroe de Tiempos malos, transita el camino hacia el crimen, pero a la vez se interesa por el pensamiento filosófico y ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 164 eso implica una diferencia que podría ayudarlo a salir del laberintomadeja-ovillo. Pero no se trata de cualquier filosofía sino de aquella filosofía disruptiva que, como cuchillo afilado, corta o interrumpe hábitos conceptuales. Es la cualidad demoledora del pensamiento nietzscheano. <<Ahora mi martillo se enfurece cruelmente contra su prisión. De la piedra saltan pedazos: ¿qué me importa?>> (Ecce homo, Fiedrich Nietzsche). Toda filosofía que interrumpe de modo intempestivo, es también un crimen porque implica devastar conceptos periclitados que permanecen insepultos propagando su docta doxa, como hábil lecho de Procusto. Pensar es la antítesis de un acto criminal pero, a su modo, pensar radicalmente es también un crimen que desea borrar un crimen anterior. Y es también el acto piadoso de inhumar restos insepultos, despedir en cortejo fúnebre conceptos que no se ajustan a la urgencia desmesurada, a la inminencia forzosa de tener que pensar aquello que se resiste al pensamiento. Porque el cadáver conceptual desea perpetuarse infinitamente fijando la imagen del mundo en una fase eternizada e impedir así todo devenir. Venganza del mundo, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 165 ahora Procusto debe ajustarse a los hechos, no disponiendo ya de lecho para torturar. Hago el parangón entre la filosofía como crimen y éste como organización, aunque la actividad criminal que muestro es desorganizada, es decir las cosas se hacen de un modo que podría ser justo el contrario para tener rédito productivo. Para mí la filosofía es un crimen que afirma una idea de afirmación de la vida. Por eso la referencia a Más allá del bien y del mal de Nietzsche con todo lo intempestivo y demoledor de su análisis sobre lo que sustenta lo bueno y lo malo. Y además la película termina con Ángel siguiendo a la Ariadna, niña- errantearaña, con la Ética de Spinoza en la mano, es decir que la voluntad de poder o de potencia que es afirmación pura, da paso a las contemplaciones o esencias de Spinoza donde lo que contempla es a su vez contemplado, potencia de un nuevo orden de pensamiento que conquista una velocidad absoluta, como lo expresa Deleuze, y que es el tercer género de conocimiento y también un modo de existencia y expresión, tal como aparece en el libro V de la Ética. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 166 LA INCLUSIÓN DE LO EXTRAÑO Y EL AFUERA La irrupción de lo otro, la alteridad más radical e inaprensible, en un contexto en el que resulta absolutamente inadecuado, extraño e imposible de integrar y que desde el punto de vista del héroe, no hay ninguna presunción para comprender este Acontecimiento, es eso lo que me interesa incluir en mis películas, es el Afuera; no hay aquí la solución de una ecuación policial, ¿quién es el asesino, o dónde está el tesoro? Esto, el enigma a resolver, la ecuación a despejar, tiene que ver con el drama y con esa línea edípica, relacionada con una filosofía que busca el origen. Pero la cuestión es otra, hay que rebasar el origen, no estamos en el problema del fundamento, estamos en el devenir que es un movimiento peligroso trágico y cómico, a la vez, estamos en el viaje tragicómico que es un nomadismo de las cosas que lleva a que nos encontremos de sopetón con esos Atractores Extraños, bajo cuya acción empiezan a proliferar acontecimientos desconocidos y desconcertantes. Como ocurre en el cine de Lynch, donde hay esos vectores insólitos que llevan a los personajes a cruzar umbrales que, sin embargo, están plegados en lo cotidiano. O en el cine de Ruiz donde el cambio de naturaleza se ha instalado desde un comienzo como un doble disímil del mundo que succiona sus fuerzas hasta el punto convertir lo real en una serie de mundos desechados que se superponen como ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 167 parches, (esos mundos incomposibles de Leibniz) que terminan por vampirizar o “imbunchar” el mundo real. La aparición de algunos acontecimientos inesperados cambia subrepticiamente el universo sin que el héroe se dé cuenta. La certeza de un piso seguro para transitar se resquebraja en beneficio de un contorno que empieza a sufrir turbulencias. Pero en un instante el héroe se da cuenta del cambio, percibe la transformación y entonces, un poco a ciegas, adecúa sus movimientos a la nueva situación. Sus movimientos serán más rápidos o más lentos, pero sobre todo con mayor capacidad de esquivar, de realizar fintas para transitar en ese universo fluctuante y comprender, al mismo instante, en qué lógica se encuentra. Por ejemplo, en Tiempos malos abundan escenas de dormitorio, donde aparecen mujeres seductoras siempre al acecho, verdaderos súcubos prestos a martirizar al héroe, a torturar su alma bajo el pretexto de un encuentro erótico prometido y jamás cumplido. O al comienzo, en que la vidente, ciega, le habla al protagonista acerca de la niña errante que él ha dejado entrar en su vida y que por tanto deberá hacerse cargo de ella; claro, la niña pareciera venir de otro espacio- tiempo, de otro nivel del Acontecimiento. Esto me interesa mucho, porque implica el desfondamiento del verosímil realista que deja al espectador sumergido en las olas de una realidad ambigua e inquietante. Hemos ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 168 propiciado, así, la aparición del Afuera, aunque el Afuera mismo, como tal, nunca aparezca. Me interesa hallar esa extrañeza radical de las cosas donde el mundo ya no se reconoce a sí mismo, pero partiendo siempre del mundo real, el más cotidiano e insignificante, aquel de relaciones domésticas y pedestres donde inesperadamente irrumpen esos pequeños sucesos que son “puntos relámpagos” de acontecimientos contraídos que actúan como Atractores extraños capaces de inducir sacudidas que caotizan el ordenamiento trivial e incluso un cambio de naturaleza del mundo. Mansilla con las piedras en las manos, en Los Deseos concebidos y también su parodia, Lito Quintana en Tiempos malos, son signos oscuros que llevan a ese no reconocimiento, no necesariamente fantástico pero siempre misterioso; de modo que en medio de lo familiar surja, como pensaba Freud, una inquietante extrañeza. Sensaciones y fuerzas sin un origen distinguible. Sensaciones y fuerzas que provienen del Afuera. En todas mis películas busco el Afuera del lugar que existe o insiste como un pliegue escondido del Acontecimiento puro. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 169 RETORNO AL HÉROE Y EL ACONTECIMIENTO En mi cine el héroe átono y replegado sobre sí mismo se deja llevar por acontecimientos sin distinción, no se resiste al llamado que lo interpela y lo impele. Pero de ello no debe concluirse una abulia vital, como si las cosas le resbalaran. Es simplemente un modo de supervivencia que le permite afrontar o acechar los acontecimientos desde su interior y aunque ello le imponga una reacción tardía. Es esta ausencia de reacción o reacción tardía la que permite la inmensa desproporción y donación sin reciprocidad del héroe lanzado al mundo, en la intemperie más absoluta, desprotegido y exiliado de todo hogar, suelo o fundamento, y debiendo afrontar en total soledad las peripecias de un destino que en modo alguno controla y que además le resulta completamente insondable. Lo que encuentra, sin haberla buscado, es una plenitud de sí mismo al contemplar lo otro como destino cósmico, el Acontecimiento puro como esencia y superación de todos los acontecimientos fortuitos. Así, Ángel, contemplando las actividades delictivas de la banda familiar lumpen que lo cobija, puede pensar y llenarse de una idea de plenitud de sí mismo. La contemplación del héroe mientras participa de los acontecimientos de la vida maníaca del lumpen anula cualquier expresión de su voluntad, suspende cualquier deseo abriéndolo a la alteridad más distante y, paradójicamente, lo hace ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 170 llenarse de sí mismo, el self-enjoyment de Whitehead, (regocijo de sí mismo), ese optimismo subjetivo que nadie le puede quitar y por lo cual resulta invencible. Pero se trata ciertamente de un sí mismo nuevo, es la novedad del sí mismo y no el recuerdo del antiguo haber sido mismo. Entonces, primero Ángel tiene que conquistar o sobrepasar los acontecimientos para devenir otro mismo, super Ángel. Pero no hay devenir sin conquista, sin acechar o afrontar el destino. Hay que ser digno del Acontecimiento, como dice con acierto Deleuze, hay que ser estoico y soportar lo insoportable, sin queja alguna, eso es resistir. Finalmente el héroe de Tiempos malos se encontrará con el sí mismo más despojado y con la idea del sí mismo como espíritu animal expresada en los balidos de ovejas y los aullidos de lobos que se intensifican mientras el sale de cuadro siguiendo a la Ariadna, niña errante-araña. El abandono de las certidumbres del mundo práctico por lo desconocido es el acto de máximo desprendimiento generoso, la donación inherente al impulso nómada de exilio permanente y la idea del sí mismo animal, puro espíritu despojado, como optimismo cósmico, es lo que finalmente mueve a Ángel como si él fuese una manada de lobos. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | DECLARACIONES SOBRE TIEMPOS MALOS • Cristián Sánchez Garfias | 171 La banda delictual gregaria, a pesar de su disgregación, funciona todavía como una máquina sedentaria capaz de atrapar cualquier figura e incorporarla al rebaño. Al final de la película Ángel deja de ser una presencia al borde, en los lindes de la banda y es reclamado como figura central o padre. Para evitar todo retorno al hogar, a la familia, para impedir toda reedipización, Ángel sigue, con paso mesurado, tras la manada lobos que dejan atrás a las ovejas, al parecer… Así el pensamiento como determinación nómada animal, como espíritu despojado, reafirma alegremente y de manera objetiva una alegría primordial subjetiva y así también los tiempos malos que son una ocasión peligrosa y tiempos de incertidumbre se actualizan en un tiempo de esplendor venidero. Pero el tiempo que vendrá es también lo impensable que ronda a todo pensamiento como ocasión peligrosa. ISSN 0719-4579 FÁBULA NOCTURNA. SOBRE TIEMPOS MALOS DE CRISTIÁN SÁNCHEZ IVÁN PINTO VEAS Licenciado en Estética por la Universidad Católica y de Cine y televisión Universidad ARCIS, con estudios de Comunicación y Cultura (UBA, Buenos Aires). Editor del sitio laFuga.cl RESUMEN Escribo esto con cierto sentido de necesidad: es esencial que Tiempos Malos se estrene, esto porque me parece una película de enorme relevancia para discutir con el cine chileno actual y segundo porque es un paso adelante dentro de la filmografía de Cristián Sánchez, otra pieza clave para seguir comprendiendo su visión de mundo, en una de las cinematografías más interesantes, extrañas y sólidas a la vez actualmente en curso. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | FÁBULA NOCTURNA. SOBRE TIEMPOS MALOS DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Iván Pinto Veas | 173 FÁBULA NOCTURNA. SOBRE TIEMPOS MALOS DE CRISTIÁN SÁNCHEZ IVÁN PINTO VEAS “Realismo desfondado”. El concepto fue comentado por el propio Sánchez en una entrevista ya lejana del 2006 durante un festival de cine, y nos puede ser útil para organizar un pequeño comentario. La idea hace mención al “realismo” como modo retórico, sistema y estilo, y bien podría ser un comentario a los distintos “realismos” puestos en juego en el cine, (desde uno más institucional a otro más documental), pero que se sustentan en un régimen de luz/verdad de la imagen. “Desfondado”, por otro lado, podría hacer referencia a su fondo o fundamentación, a la idea de una evidencia que debe ser cuestionada. Contra la imagen de la evidencia, Sánchez propone no “denunciarla” (en ese juego infinito entre la ideología y su marco) si no trastocarla. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | FÁBULA NOCTURNA. SOBRE TIEMPOS MALOS DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Iván Pinto Veas | 174 A la luz de sus filmes anteriores y patente en Tiempos Malos, este ejercicio operaría en un pliegue: entre el relato y su desmontaje, entre lo evidente y lo obtuso, una operación que desde la fuerza de la extrañeza, enrarece, ambivaliza, cuestiona lo evidente. Así visto, Tiempos malos puede funcionar en un nivel literal: es, de hecho, un relato que está basado en la novela Chicago Chico de Armando Mendes Carrasco, que originalmente describe el ambiente del hampa de la década del 30 en Chile, pero que Sánchez sabe extraer y adaptar a un Chile contemporáneo. Este primer nivel extrae una historia que se puede seguir con absoluta continuidad: es el ingreso del adolescente Angel al mundo del hampa. Este comienza con el asesinato de su padre y la seducción de una bailarina en una boite nocturna. Desde aquí, el universo descrito por Sánchez está construido en su mayoría desde este punto de vista y puede comprenderse como una “contra”- Bildungsroman, si seguimos la idea acuñada por Grínor Rojo sobre las novelas de Manuel Rojas. Es interesante que este relato “de-formativo” se sitúe en el campo de la experiencia y las claves de lectura están dadas por la ética de Spinoza y la voluntad de poder Nietszcheana, ambas citadas en la película, transferidas por un personaje típicamente Sanchezeano , un portero que hace cameos cada tanto. El personaje de Angel, ingresa a este universo – es un personaje que funciona como dispositivo para el espectador- y nosotros con él. Lo que viene en gran parte es ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | FÁBULA NOCTURNA. SOBRE TIEMPOS MALOS DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Iván Pinto Veas | 175 la aprobación de códigos de ingreso, así como la descripción de un mundo bizarro, caótico, sin privacidad, a la vez seductor y comunitario, apadrinado por don Eulalio. La galería de personajes aquí es bastante particular abriéndose a una dimensión coral, pero destaca sobre todo la ambigüedad moral y el constante juego libidinal donde lo sexual está constantemente mediando entre los personajes masculinos y femenino (donde ellas- sean prostitutas o ya esposas- negocian un espacio de poder). En un nivel quizás “histórico-social”, la película puede comprenderse también en términos de procesos y capas. Se trataría aquí del mundo social del narcotráfico y los cambios en términos de grupos de poder y generaciones, que abandona un viejo mundo, la “vieja escuela” y la lucha a mansalva y de gatillo fácil donde la violencia no hace más que crecer. Esta “alegoría social”, es la zona donde Sánchez podría leer los cambios culturales dados por el neoliberalismo, esta pérdida de “memoria profunda” de la contracultura, hoy transformado en banalidad. Sánchez no esconde cierta idealización por estas capas contra-culturales, sabemos que en parte son tomadas del “realismo púdico” Ruiciano, pero en este caso, con unas tesis aún más radicalizadas. Observemos: Tiempos Malos bordea la infamia, los sujetos que están en las fronteras de la ley, ellos son modélicos de un Chile oculto, develado, nocturno, así ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | FÁBULA NOCTURNA. SOBRE TIEMPOS MALOS DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Iván Pinto Veas | 176 también, verdadero y “real”, un saber, podríamos decir, que tensiona todo proyecto social. Las trazas de esta “sub-capa” están en el lenguaje y específicamente en la oralidad, la “sabiduría” del refrán popular, aquí devenido en un complejo coa a la distancia sustraídos como verdaderas piezas poéticas. Un habla circular que trabaja permanentemente ocultando y develando, y donde el decir no coincide con lo dicho, donde la materialidad del habla es más relevante que “lo hablado”: la transformación dentro de los grupos mafiosos, así también, el “olvido del código” subyace a toda la película, y es en esta pérdida donde la fábula esconde su verdad social, vinculado esencialmente a la desarticulación social y la aparición de una violencia desatada y sin ritual. Visto así, el submundo del narcotráfico, le sirve a Sánchez para hacer una radiografía oportuna del Chile contemporáneo, una novela “realista” que alegoriza sobre las transformaciones de lo sociocultural en un Chile contemporáneo. Los “Tiempos malos” son efectivamente, “malos tiempos”, los tiempos donde un mal radical parece ahogar todas las esferas, todas las relaciones sociales. Pero aún aquí estamos a un nivel literal. La segunda capa de Sánchez está dada por los signos que a este primer nivel le sustraen su verosimilitud, lo vuelven poroso, dando claves de lectura que una ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | FÁBULA NOCTURNA. SOBRE TIEMPOS MALOS DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Iván Pinto Veas | 177 interpretación literal, narratológica e incluso sociocultural perderían sin atención ¿Qué hay aquí? En esta capa aparecen los guiños, por ejemplo, los filosóficos y la idea recurrente del eterno retorno, o los dichos populares “el correo de las brujas”, la permanente presencia de la muerte, pero se materializa esencialmente en lo fantasmático. Algunos ejemplos: la visita de algunos personajes como son la niña errante, una niña mapuche que irrumpe en el cotidiano y va recogiendo un ovillo de lana roja, que bien podría ser una especie de hilo de Ariadna (como el mismo Sánchez ha señalado), y cuyo rol en la película puede ser tanto el de una especie de “cuidadora” de Ángel como un “coro”. Sánchez la ha definido de forma múltiple: “Así la niña errante, es una mulplicidad, es una figura plural o un signo perceptual paradójico, que expresa que quien protege o guía debe estar necesariamente perdido y olvidado de sí mismo.” Estas presencias, están alrededor de toda la película y ellas, como hemos dicho, nos llevan a la ambigüedad y la extrañeza, y la alejan de lo que el mismo Sánchez ha llamado un “realismo epidérmico”. Quizás las presencias más marcadas en este sentido son las apariciones de don Eulalio. En tránsito hacia su propia muerte y en ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | FÁBULA NOCTURNA. SOBRE TIEMPOS MALOS DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Iván Pinto Veas | 178 una clara melancolía de alguien a quien esto le acecha (recordemos que al inicio del filme prepara un asalto solo para robar unas viejas revistas Pingüino), se le empiezan a aparecer diversos personajes a quien él asesinó, desde delincuentes de poca monta a ex socios, y que le acechan en la culpa. Este motivo shakesperiano es quizás dentro de las sus capas, uno de los que subyace a todo el filme, donde el relato una finitud arrastra a sus propios fantasmas, pero estos son también los fantasmas de una época, y lo que abre el filme a la multiplicidad temporal. Los hilos de la niña errante abren este acceso a las temporalidades, las manifiestas y las ocultas, en este esfuerzo por querer dar a verlas Sánchez despliega estos seres. Aún hay dos más, ejemplo, el de una ciega que anuncia la desgracia, especie de oráculo fantasmático, otro personaje sin rumbo. Y sin duda su segundo “Quintana”, que es un doble del verdadero, personaje que protagonizaba El zapato chino (1978) y que se ha ido cristalizando como una clave de lectura fundamental de su cine. Personaje curioso, especie de anónimo desapercibido, tragicómico y luego modelo de una pose sublime. Este último es el caso de una escena en que este posa con dos rocas en sus brazos, imagen alegórica y barroquista con cierta reminiscencia colonial ¿el sujeto mestizo de la colonialidad? ¿Otra veta temporal? ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | FÁBULA NOCTURNA. SOBRE TIEMPOS MALOS DE CRISTIÁN SÁNCHEZ • Iván Pinto Veas | 179 No creo que haya otra Tiempos Malos en el cine chileno. Las condiciones para que surja una película así en sus dimensiones históricas y estéticas son difíciles en un marco donde las puestas en escena cinematográficas, los desafíos intelectuales y las ambiciones artísticas se han vuelto sosas, académicas y discutibles, en un marco globalizado e imperial de una imagen cinematográfica que a la larga ha vuelto a una singular transparencia. A destiempo, anacrónico, un poco desajustado del canon y las premisas ideológicas, Sánchez y Tiempos malos esperan una salida a sala. Será algo necesario para abrir la discusión. ISSN 0719-4579 EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA VLADIMIR SILVA OYANEDER Profesor y Licenciado en Historia por la Universidad de Viña del Mar. Diplomado en teoría de cine por la PUC. Candidato a magíster en Arte, Pensamiento y Cultura latinoamericanas IDEA/USACH RESUMEN El presente artículo propone una reflexión que relaciona los afectos, sentimientos y estados de ánimo con el ejercicio crítico que realiza el director chileno Cristián Sánchez en sus películas. De este modo, tomando el ejemplo del filme El otro round, se formula una mirada que compara el tiempo fílmico con el tiempo histórico-filosófico inscrito en la película mencionada. Desde allí, se intentará dar una explicación acerca del gesto moderno presente en su filmografía, la que a menudo, presenta una acción en crisis, una desdramatización de estilo bressoniana y un tiempo cinematográfico aletargado. Desde este punto de vista, afectos como miedo, temor, esperanza y desesperanza se convertirán en sentimientos que respaldarán la reflexión teórica en la que basaremos nuestro análisis y por la cual Sánchez realiza una dura crítica a la situación política que se vive en el Chile de la década de los ochenta. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 181 EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA VLADIMIR SILVA OYANEDER No filmar para ilustrar una tesis o para mostrar a hombres o mujeres limitados a su aspecto externo, sino para descubrir la materia de la que están hechos. Alcanzar ese “corazón” que no se deja atrapar ni por la poesía, ni por la filosofía, ni por la dramaturgia. Robert Bresson Uno de los casos que resultan ser más particulares dentro del cine chileno son los largometrajes de Cristián Sánchez, quizás éste sea el único corpus autoral de ficción, menciona Pablo Corro en Retóricas del cine chileno, concebido y realizado durante la dictadura militar dentro Chile. Sus películas se expanden, además, como una propuesta retórica alternativa a la narración hollywoodense y se proyectan como el hito dramático de lo moderno en el cine nacional. De este modo, su filmografía se desapega y, desajusta la narración y representación que había caracterizado hasta 1973 al cine producido en el país, apegado ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder 1 Término acuñado por Noël Burch en el libro Praxis de cine, para referirse a los filmes del periodo clásico de Hollywood. Los cuales dependen de un mismo modelo narrativo y dramático que pone al héroe como centro del drama, estructurando una representación que es equivalente a todos los géneros y temáticas del cine de la época. Los filmes, por lo tanto, no presentan diferencias en sus formas retoricas o narrativas sino más bien solo en sus tramas. Por lo general hasta 1973, el cine chileno había dependido de aquel modelo, incluso en los filmes de marcada intención crítica hacia la representación hollywoodense conocido como Nuevo cine chileno e, incluyendo, el denominado cine militante. Caso aparte, por supuesto, son las películas producidas en Chile por el cineasta Raúl Ruiz. 2 Corro, Pablo: Retoricas del cine chileno. Ensayos con el realismo. Editorial Cuarto Propio, Santiago, 2012, pág. 151 | 182 tradicionalmente al Modelo de Representación Institucional 1, utilizado por el cine clásico de Hollywood. Esto se debe principalmente, a que manifiesta una acción en crisis, temporaliza la imagen, desdramatiza la acción o elimina la causalidad como fuerza narrativa. En este sentido, lo anterior significa “la atrofia del principio dramático o de concatenación de las acciones de tipo activo reactivo, la crisis de la causalidad como motor narrativo, que se manifiesta mediante la presentación de efectos sin causas de causas sin efectos2”. De esta manera, es común observar en su filmografía situaciones que no presentan un hilo conductor coherente, ya que la causalidad es suprimida como experiencia narrativa de estilo clásico. Es así como en una de sus películas más conocidas El zapato chino (1979) el protagonista, Gallardo, termina viviendo al interior de la maleta del taxi en el cual se ganaba la vida sin presentar causas anteriores o posteriores que expliquen tal situación. En la película El otro round (1983), cinta en la cual centraremos nuestra mirada, ocurre algo similar. A menudo las decisiones de los protagonistas no están determinadas por la coherencia interna y su accionar es errático, taciturno y desapegado de lo que podríamos haber creído decidían. Sánchez desestima la utilización de recursos dependientes del modelo hollywoodense y crea, de este modo, un universo propio apegado a la filosofía de Deleuze y a la teoría de cine de Bazin y Bresson. Es así como su discurso suele situarse en el realismo ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 183 desdramatizado que podemos observar en el cine de Antonioni, el cual propone un proceso de desdramatización basado en la fractura de la causalidad como concepto impulsor de la acción narrativa3. Del mismo modo, Sánchez incorpora una crisis en la acción que hace a sus personajes presentar estados de ánimo ligados a la tristeza, al miedo o a la desesperanza llegando incluso a estar desafectados, extrañados y abstraídos de lo que les atañe, de lo circundante y de lo social. 3 Quintana, Ángel: El cine italiano, 1942-1961 del neorrealismo a la modernidad, Ediciones Paidós, Barcelona, 1997, pág. 214 4 Véase Corro, Pablo: 138 Op. Cit., pág. En este sentido, lo que nos interesa plantear en el siguiente texto, es una mirada acerca de cómo los afectos y los estados de ánimo propician los acontecimientos en su cine. Ellos, ralentizan la imagen cinematográfica, desdramatizan la acción y se trasforman en el enunciante discursivo de la propuesta estética que nos ofrece. Desde este punto de vista, el miedo, el temor, la esperanza y la desesperanza se convertirán en sentimientos que respaldarán la reflexión teórica y crítica en la que basaremos nuestro análisis y por la cual Sánchez realiza una dura crítica a la situación política que se vive en el Chile de la década de los ochenta. Por lo mismo, la película de su filmografía que más nos interesa y que (re)presenta, creemos, la totalidad de problemas que hemos enunciado es El otro round (1983). En dicho filme el autor articula una teoría de cine que lo posiciona como hito moderno en chile4, planteando una ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 184 homologación entre la trama plástica y psicológica. En otras palabras, iguala el discurso visual al discurso narrativo y transforma la imagen plástica en el enunciado de esta película. La cinta cuenta la historia de Dinamita Araya, un boxeador que ve truncada su carrera al perder una pelea fundamental al inicio del filme. Desde ese momento él junto a su entrenador, se embarcan en una serie de negocios y actividades en los que no tienen experiencia y que resultan inútiles: una fuente de soda, un taxi, un taller de reparación de bicicletas y la venta de flores en la calle. La cesantía de la sociedad chilena de los ochenta se ve reflejada en la búsqueda de labor constante de estos héroes trágicos, donde a menudo y, de manera solapada, nos hacen recordar a los planes de empleo de la dictadura militar PEM y POJ. En la película, Sánchez, pone en crisis la acción dramática, Dinamita Araya constantemente parece desafectado y abstraído. El aura del miedo y la represión armada de la dictadura cívico-militar parece hacerse notar en los estados de ánimo de los protagonistas. La desdramatización como recurso es una constante para representar la crisis política y subjetiva que vive el país y, también, para poner de manifiesto el modelo retórico y filosófico que ha construido el mismo cineasta. En éste se puede observar, creemos, con claridad una construcción binaria que unifica la ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 185 desdramatización con la ralentización de la temporalidad que se utiliza en este filme. Dicho binomio estaría emparentado con el shock que produce la dictadura militar en la subjetividad del país. Del mismo modo, como en Europa la segunda guerra mundial reduce la ciudad burguesa icono de la modernidad a escombro y, devela la crisis de la cultura occidental retratada con los extensos planos secuencias de películas como Ladrón de bicicletas (1947) de Vittori De Sica o Alemania, año cero (1947) de Roberto Rossellini, en Chile el golpe militar ha acabado de una manera similar con el orden de las cosas introduciendo la idea de un Estado de guerra. De hecho, como escribe claramente Naomi Klein en el libro La doctrina del Shock. El auge del capitalismo del desastre, para los militares el golpe de Estado es considerado como tal: “El general Augusto Pinochet y sus seguidores se refirieron siempre a los hechos del 11 de septiembre de 1973 no como un golpe de Estado sino como «una guerra». Santiago de Chile, desde luego, parecía zona de guerra: carros blindados abrían fuego conforme avanzaban a través de los bulevares y los edificios del gobierno eran atacados por cazas de combate. Pero había algo extraño en esa guerra: sólo combatía un bando5”. 5 Klein, Naomi: La doctrina del shock. El auge del capitalismo del desastre, Paidós, 1ra. Ed. Argentina, 2008, pág. 124 Que se refieran a él como un enfrentamiento bélico tiene que ver en gran medida con la idea de querer aniquilar a un enemigo interno. Por otra parte y, a pesar de que el golpe no fue una guerra, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 186 estaba diseñado para parecerlo, lo que lo convierte en un precursor chileno de la estrategia de shock y conmoción6. Esta situación, entonces, presenta como objetivo posible romper de una manera rápida, violenta y traumatizante la construcción material e histórica que había existido hasta antes del 11 de septiembre de 1973. De ese modo, el impacto visual y el shock psicológico de advertir aviones de guerra y tanques sobrevolando y bombardeando a La Moneda tienen la intención de transformar, a través del miedo y la conmoción, a un sistema económico, cultural, social e histórico que había tenido lugar hasta antes de estos acontecimientos en otro dominado por el neoliberalismo. En consecuencia, entonces, se intenta hacer tabula rasa con gran parte de cultura del país: hay desapariciones humanas, exilios y crisis en todos los ámbitos de la vida social. Es por lo mismo que el académico chileno Pablo Corro, escribe que: “En ambas crisis, la mundial y la nacional, la transformación cruenta del estado de las cosas, como evento de sucesión vertiginosa de estímulos desmesurados visuales y sonoros, física y anímicamente hostiles, genera dramáticamente una reacción, más o menos paradojal, de inmovilidad, fijeza, aturdimiento, pasmo7”. 6 Ídem. 7 Véase Corro, Pablo: 144 Op. Cit., pág. Esto hace, sin duda, que el tiempo en El otro round, aparezca ralentizado, la turbulencia misma del Golpe militar y el shock ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 187 económico y físico, a esa altura cotidiano, reproducen una crisis social que se ve reflejada en los estados de ánimo de los protagonistas de la película comentada y en la temporalidad de la misma. De esta manera, el miedo que produce un Estado represor, paraliza todo, incluso la vida cotidiana, haciendo parecer que no hay posibilidad aparente de cambio. En este sentido, la ralentización que realiza Sánchez podría entenderse como un estado de denuncia a la escisión subjetiva que ha desatado lo que Naomi Klein denominó como Doctrina del shock. En ella pone especial énfasis en el miedo como un estado de ánimo que paraliza y desorienta la subjetividad y la comprensión de lo inmediato y duradero, de lo social y de lo histórico. El shock es visto como un mecanismo que propicia el temor y el desconcierto del sujeto y con ello el extrañamiento de un presente que se transita sin rémoras al pasado. La propia Klein se refiere a los estados del shock de la siguiente manera: 8 Klein, Naomi: Op. Cit., pág. 37 “La verdad suena tan extraña: «Estoy escribiendo un libro sobre el shock. Y sobre los países que sufren shocks: guerras, atentados terroristas, golpes de Estado y desastres naturales. Luego, de cómo vuelven a ser víctimas del shock a manos de las empresas y los políticos que explotan el miedo y la desorientación frutos del primer shock para implantar una terapia de shock económica. Después, cuando la gente se atreve a resistirse a estas medidas políticas se les aplica un tercer shock si es necesario, mediante acciones policiales, intervenciones militares e interrogatorios en prisión8”. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 188 El caso chileno encierra todo lo antes descrito: un golpe de Estado, la implantación de un modelo económico neoliberal y la posterior tortura y desaparición de personas. El miedo se transforma en un afecto paralizante que hace vulnerable la voluntad de cambio, de lucha o de creación de espacios de comunidad. En la película de Sánchez podemos apreciar esta idea, por medio de un estado de denuncia propiciado por un ejercicio retórico de alto alcance que intensifica ideológicamente la personalidad de Dinamita Araya con afectos como miedo, angustia y soledad. Afectos que lo hacen parecer abstraído y desarraigado de su propio contexto sociohistórico. El modelo del director chileno, creemos, interioriza el shock, el desgarro y el terror implantado por la dictadura militar, en un gesto parecido a lo que ocurre en el cine de Antonioni, cuando este último plantea que, refiriéndose metafóricamente a el filme Ladrón de bicicletas: “Una vez resuelto el problema de la bicicleta, es importante saber qué hay en el espíritu y el corazón de este hombre a quien se le ha robado su bicicleta9”. 9 Font, Domènec: Michelangelo Antonioni, Editorial Cátedra, Madrid, 2003, pág. 50 El director italiano está planteando la superación y la interiorización de lo que ocurría en tiempos de De Sica: guerra mundial, pobreza e instauración del capitalismo por la vía del shock. Una vez superado aquello, entonces, es importante preocuparse de los afectos, de los sentimientos y de la subjetividad de los ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 189 personajes. En el caso del director nacional, previa censura militar, es imposible hablar directamente sobre las atrocidades de la dictadura, por lo tanto, existe una interiorización del proceso traumático chileno. Esto quiere decir que los sentimientos, afectos y estados de ánimo de los protagonistas tomarán el relevo de lo que no se puede expresar de manera explícita y, develarán al igual que en las películas de Antonioni, el desastre físico, psicológico y afectivo que ha dejado el terror del shock de una guerra o de un golpe de Estado que, atormenta constante y sostenidamente la subjetividad nacional. De este modo, Sánchez, plantea un filme que indaga en la personalidad de un boxeador desafectado y paralizado por las ruinas morales de un Estado que reprime la posibilidad de construir un nuevo futuro. El shock de una “guerra”, la tortura, la desaparición y el constante miedo hacen que el protagonista, no pueda expresar lo que siente, lo que piensa o lo que querrá construir en su futuro. En este sentido, el abandono de su pareja el día de la pelea crucial termina por derribar el último bastión que le permitía sostenerse en pie y tener un horizonte de cambio real. La temporalización de la imagen cinematográfica, además, intensifica la desdramatización y establece un punto de unión entre el tiempo cinematográfico y el tiempo histórico-filosófico. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 190 Es así como Ernst Bloch en el libro Principio esperanza I, comenta que por lo general éste el tipo de estados de ánimo que, ha traído la doctrina de choque a la personalidad de Dinamita Araya, se han distinguido como paralizantes y se han catalogado como asténicos10. La inmovilidad y la temporalidad de la imagen de El otro round, entonces, es una manera denotativa y propiamente retórica de hacer latente un discurso silenciado por los medios de comunicación de la época. No por nada, Corro nuevamente certero, indica que “hay en esta dinámica una alusión al estado de la sociedad, se trata de una figura verosímil históricamente en tiempos de dictadura, restricción económica, persecución política y alienación mediática, puesto que el tiempo del cine de Sánchez es el tiempo de la instauración hegemónica y controlada de la televisión en el sistema de medios chileno11”. 10 Bloch, Ernst: El principio esperanza I, Biblioteca Filosófica Aguilar, pág. 54 11 Corro, Pablo: Op. Cit., pág. 155 La imagen tiempo, que propone Sánchez en El otro round, es por lo tanto, un gesto político que lo hermana con el cine moderno en cuanto reflexiona sobre su propia contemporaneidad. La denuncia política ocupa la función legible de la imagen cinematográfica mientras que la función visible es altamente estética y reflexiva, propiciando el ejercicio al que hacemos mención. Lo político del tiempo y de los estados de ánimo sería, entonces, por un lado, la denuncia de los aparatos represivos del estado totalitario y, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 191 por otro, aún más interesante, la crítica ralentizada al tiempo cinematográfico, pero también al tiempo filosófico-histórico de una época determinada. Bloch apunta a que los afectos de espera, vale decir, el miedo, el temor y la esperanza siempre están sujetos al horizonte del tiempo. Y siempre éstos a un tiempo de largo alcance, el filósofo alemán lo explica de la siguiente manera: “Todos los afectos están referidos al horizonte del tiempo, porque todos son eminentemente intencionales, pero los afectos de la espera se abren plenamente a este horizonte. Todos los afectos están referidos a la temporalidad del tiempo, es decir, al modo del futuro, pero mientras que los afectos saturados solo poseen un futuro inauténtico, es decir, un futuro en que objetivamente no ocurre nada nuevo, los afectos de la espera implican un futuro auténtico, el todavía-no, lo que objetivamente no ha acontecido aún. De modo trivial, también el temor y la esperanza intencionan un futuro inauténtico, pero incluso en la satisfacción trivial se inserta una más plena, que trasciende de muy otra manera que en los afectos satisfechos lo dado inmediatamente12”. 12 Bloch, Ernst: Op. Cit., pág. 55 Si los afectos de espera producen una rapidez en el tiempo y son fenómenos activos que ven un futuro auténtico en el horizonte y que, además, esperan con ansias el cambio real sobre lo socialmente construido. Situando, de esa forma, en la esperanza la construcción de un futuro que, en el largo plazo, construya lo nuevo, lo auténtico, lo que podríamos llamar colectivo. La esperanza, se ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 192 transformaría en una condición que mueve, remueve, agita y revuelve el futuro y con ello puede, de algún modo, apresurar el tiempo del presente. Eso quiere decir, disminuir los tiempos históricos de las transformaciones sociales y apresurar sus cambios. Por el contrario, cuando una sociedad ha presenciado la aniquilación de un sistema cultural, de una forma de relación con lo contiguo, el desapego a la vida humana y una represión de choque constante y sostenida, se ve en el horizonte un futuro incierto. Del mismo modo, entonces, que todos los estados de ánimo son temporales, ante la desesperanza el tiempo presente responde con fijeza, lentitud y sopor. De todos modos, pareciese que el devenir de la historia también ha sido paralizado. Asimismo, la ralentización que podemos observar en El otro round, responde a una sociedad donde el futuro ha sido destruido. Donde el miedo como ente asténico domina la sociedad reprimida y paralizada por el constante hostigamiento físico y psicológico. El padecimiento que se vive y que se soporta, aparentemente, no ha tenido una explicación que se manifieste en una genealogía de acontecimientos históricos, por el contrario, todo parece haber ocurrido de manera repentina. Es así como la aniquilación de un sistema cultural, de una manera de relacionarse con los demás, con el entorno y con sí mismos ha sido, también, extrañada, deconstruida ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 193 y reducida a la desesperanza de un futuro imposible. De ahí que, Bloch incluso plantee que: “En aquellos que no encuentran salida a la decadencia, se manifiesta entonces el miedo a la esperanza y contra la esperanza. Es el momento en que el miedo se da como la máscara subjetivista y el nihilismo como la máscara objetivista del fenómeno de la crisis: del fenómeno soportado, pero no entendido; del fenómeno lamentado, pero no transformado13”. 13 Ibídem., pág. 3 14 Podemos observar aquello en la construcción retórica y narrativa de las películas filmadas en el periodo de la UP. Ellas presentan una construcción dependiente del modelo hollywoodense (Paranagua, 2003, pág. 15) y de lo que Gilles Deleuze denominó como imagen-acción. Algunos ejemplos son Valparaíso, mi amor (1969) de Aldo Francia, Voto+ fusil (1971) de Helvio Soto o el documental Venceremos (1970) de Pedro Chaskel. Todas ellas presentan un tiempo fílmico vertiginoso y de gran rapidez, basado en el montaje y la incorporación sucesiva de elipsis. Este temor, entonces, se propaga como un afecto que eterniza el presente y paraliza el futuro, donde el shock instala un control social basado en el hostigamiento, el miedo y la desorientación. La esperanza que había tenido la experiencia de la Unidad Popular y su manera de entender lo circundante y que, incluso había hecho de la experiencia de su cine un suceso de rapidez y movilidad14, ha finalizado de manera abrupta y horrorosa, dando paso a un estado de guerra y a la aniquilación de un enemigo interno. Posteriormente, la instauración sostenida y prolongada de un sistema de choque que impone el nuevo régimen dictatorial termina por eliminar cualquier tipo de esperanza o afán de cambio. Lo objetivo y lo cierto es el presente eternizado y fijado en la nada y la parálisis es el fenómeno soportado lamentado pero no transformado. Esto se debe a que el proceso traumático de la dictadura y de la instauración hegemónica de un nuevo sistema económico que determina la relación con lo ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 194 que existe ha traído como consecuencia inevitable la lentitud de los cambios históricos. La imagen que se manifiesta en El otro round, por lo tanto, responde de manera legible a estas características. El uso de una imagen cinematográfica temporalizada introduce la idea de un país sin futuro y desesperanzado que se ahoga en la nada, ya que no entiende su presente luego que su pasado ha sido destituido de valor. De esta manera el letargo ante la catástrofe del futuro se aprecia en los constantes vagabundeos de Dinamita Araya y su entrenador, en la errática buscada de un oficio que nos hace percibir un tiempo fílmico paralizado, constante, fijo e inactivo. Una de las secuencias más representativas al respecto, se produce cuando Dinamita discute con su entrenador porque el primero había abandonado por algún tiempo el trabajo como reparador de bicicletas, en un largo plano secuencia se puede observar como el ex púgil se lava sus manos en el taller, se cambia de ropa y deambula hasta la pensión en la cual vive. Mientras lee el diario, al llegar a su habitación, se mira al espejo, el plano queda fijo en la pared y luego retoma con un paneo la figura fantasmagórica de Araya. Él, sentado sobre su cama se soba las manos, al parecer piensa en algo (no sabemos en qué), transcurre el tiempo y no hace nada, comienza a fumar un cigarro en soledad, pareciera ser que algo le incomoda pero no sabemos qué es, al parecer ni él mismo lo ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 195 sabe. Mientras tanto el sonido de un reloj en el fuera de campo hace aún más agobiante la escena y percibimos el sopor del tiempo fílmico como si la misma historia haya sido frenada. Dinamita es un hombre sin futuro, sin oficio, el tiempo en su vida es un letargo constante, su subjetividad y su reflexión han sido dañadas por el aparato represivo de la dictadura militar. Podemos plantear, entonces, que el shock económico y físico ha producido en él y en la subjetividad de un país un estado de ánimo desafectado, donde lo único que podemos reconocer es temor y una división interna que lo hace parecer desenraizado de su entorno, de su pasado, de la historia y, también, de un posible futuro. Éste es un futuro inauténtico, un futuro en que objetivamente no ocurrirá nada nuevo. El sonido acusmático del reloj fuera del cuadro, además, pone de manifiesto lo que no se ve, y releva a lo visual en vez de duplicarlo15. Es decir, el tic-tac del reloj intensifica la idea de tiempo fijo y de un presente que ha sido suspendido de los posibles cambios históricos. 15 Deleuze, Gilles: La imagen movimiento, estudios sobre cine 1, Ediciones Paidós, Buenos aires, 2009, pág. 32 La temporalidad como alteración de los afectos y estados de ánimo de los protagonistas se propagan en este filme como un suceso político de denuncia social de manera retórica y de estética realista. La imagen ralentizada y la desdramatización insisten en la idea de poner en crisis la acción, ya que esta última (la acción), se ha visto paralizada y fijada por el devenir histórico que introduce el ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder 16 Bresson, Robert: Notas sobre el cinematógrafo, Biblioteca México, 1979, pág. 34 ERA, | 196 golpe militar: exterminio cultural, material y físico. El movimiento vertiginoso de la violencia de los años ochenta, paradójicamente, por lo tanto, se muestra con fijeza y aletargamiento como una manera lingüística de hacer notar la crisis política y subjetiva de una sociedad reprimida. Es así como al finalizar el filme, Dinamita Araya, roba un vehículo, pasa a buscar a su enamorada, asalta una bomba de bencina del barrio alto y escapa con un arma, también robada, a toda velocidad de la CNI. En aquella secuencia final, lo que está haciendo Sánchez, es proponer una crítica a la construcción cinematográfica convencional basada en las acciones de tipo activo reactivo. Podemos sostener, por lo tanto, que esta manera de representar la imagen cinematográfica lo emparenta con el cine del director francés Robert Bresson, en cuanto este último plantea como hito fundamental de su modelo fílmico denominado cinematógrafo: Que los sentimientos causen los acontecimientos, no a la inversa 16. En otras palabras, el temor, el miedo y la desesperanza retratan y propician los acontecimientos del filme y, además, se convierten en el sostén retórico de la temporalidad ralentizada de la imagen expuesta en la película: sentimientos, afectos y estados de ánimo convierten a la simple trama y a la narración evidente en el argumento central de la película. De ahí que la concreción de aquellos actos en Dinamita no correspondan a hechos aislados o sin explicación. Por el contrario, residen en el profundo enraizamiento e ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 197 interiorización de afectos y estados de ánimo, como los antes descritos que, convierten y legitiman a la violencia como forma socialmente aceptada de relacionarse con el entorno, con lo que existe y con sí mismos. Por este motivo, los acontecimientos que observamos y que, en apariencia, no tienen sentido en la construcción narrativa ni en la caracterización anímica de la personalidad del protagonista y que, sin embargo, logran instalar una crítica hacia la imagen-acción y a la dramatización clásica proponiendo un personaje desprovisto de sentimientos y que, más bien, presenta una mirada fija, desencajada, abstraída y taciturna, puede ser entendida como una consideración acerca de la violencia que se vive en la época. En este contexto, Dinamita representaría la naturalización de lo que se ha denominado como doctrina de choque en una sociedad que ha disuelto la subjetividad, la política y la comunidad en un estado de violencia constante, compulsiva y cotidiana. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL OTRO ROUND : UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA FIJEZA Y EL MIEDO A LA ESPERANZA • Vladimir Silva Oyaneder | 198 BIBLIOGRAFÍA Bloch, Ernst: El principio esperanza I, Biblioteca Filosófica Aguilar Bresson, Robert: Notas sobre el cinematógrafo, Biblioteca ERA, México, 1979 Corro, Pablo: Retoricas del cine chileno. Ensayos con el realismo. Editorial Cuarto Propio, Santiago, 2012 Deleuze, Gilles: La imagen movimiento, estudios sobre cine 1, Ediciones Paidós, Buenos aires, 2009 Font, Domènec: Michelangelo Antonioni, Editorial Cátedra, Madrid, 2003 Klein, Naomi: La doctrina del shock. El auge del capitalismo del desastre, Paidós, 1ra. Ed. Argentina, 2008 Paranaguá, Pablo Antonio: Tradición y modernidad en el cine de América Latina, Fondo de Cultura Económica, Madrid, 2003 Quintana, Ángel: El cine italiano, 1942-1961 del neorrealismo a la modernidad, Ediciones Paidós, Barcelona, 1997 ISSN 0719-4579 EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL CRISTIÁN SÁNCHEZ GARFIAS Director, guionista y teórico de cine. Académico de la Escuela de Cine de Chile RESUMEN El siguiente trabajo indaga y aborda el tema del viaje como un laberinto del tiempo en la filmografía de Cristián Sánchez. Es así como por ejemplo, la aventura de R. en Los Deseos Concebidos se organiza como un viaje, principalmente, en extensión. Es un recorrido donde lo que aparece en el espacio y el tiempo está sujeto a una magnitud extensiva que ocupa un espacio y lo ocupa en una duración determinada, dicho en términos kantianos. Y ello es necesario porque la magnitud extensiva, que relaciona las partes por su exterioridad, es un requisito de cualquier acontecimiento, pero no el único. La aventura de R. es un recorrido, si se quiere parabólico divergente, asintótico, extensivo y horizontal que asume una topología laberíntica de superficie (donde un círculo conduce a otro círculo que mantiene, con leves variaciones, algunos aspectos del primero y así sucesivamente, mientras el conjunto de las variaciones diferenciables de todos los círculos es determinado por un invariante). Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 200 EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL CRISTIÁN SÁNCHEZ GARFIAS Estoy aquí siguiendo las pisadas de los que murieron… Las huellas de los que murieron están aquí. Lola Kiepja Canto de la última chamán Selk’nam informante de Anne Chapman 1 Manuela, la hermana de R. en Los Deseos Concebidos, aparece cinco años después como heroína de El Cumplimiento del Deseo. La segunda parte de la trilogía de Los deseos debía tener una contraparte femenina, con su consecuente viaje exploratorio de círculos donde el deseo, para ser deseo puro, debe también ser pensamiento del deseo, de ahí el epígrafe de Spinoza al comienzo del filme: El deseo que nace de la razón, puede nacer de un sentimiento de dicha, que no es una pasión. La travesía de Manuela por diversos mundos es la del deseo que nace de un sentimiento de dicha, es decir el deseo que nada le debe al encuentro pasional y que habiendo germinado desde el pensamiento debe ser también ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 201 pensamiento del deseo para completar su despliegue conceptual. Es lo que Whitehead llama selft-enjoyment, alegría o regocijo del sí mismo. A diferencia de Los deseos concebidos, en El cumplimiento del deseo los mundos se superponen, unos a otros, formando brazos con varios peldaños o gradaciones de la misma índole topológica que los círculos o ciclos límites. Más que al cono invertido del Infierno de Dante en La Divina Comedia este objeto se asemeja al rewe, la escala sagrada del chamanismo reche-mapuche. Me explico, la aventura de R. en Los Deseos Concebidos se organiza como un viaje, principalmente, en extensión. Es un recorrido donde lo que aparece en el espacio y el tiempo está sujeto a una magnitud extensiva que ocupa un espacio y lo ocupa en una duración determinada, dicho en términos kantianos. Y ello es necesario porque la magnitud extensiva, que relaciona las partes por su exterioridad, es un requisito de cualquier acontecimiento, pero no el único. La aventura de R. es un recorrido, si se quiere parabólico divergente, asintótico, extensivo y horizontal que asume una topología laberíntica de superficie (donde un círculo conduce a otro círculo que mantiene, con leves variaciones, algunos aspectos del primero y así sucesivamente, mientras el conjunto de las variaciones ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 202 diferenciables de todos los círculos es determinado por un invariante). Este laberinto circular se organiza en regiones lisas pero con pliegues donde irrumpen series heterogéneas divergentes, dispares que producen cuencas de atracción; turbulencias; puntos repulsores y atractores extraños, esos objetos perturbadores que desordenan los recorridos y lanzan a los acontecimientos hacia regiones de catástrofes para regresarlos finalmente a la normalidad. Sin embargo el paso de un círculo o ciclo límite a otro se da por cantidad intensiva, esto es, por una variación de grado hacia intensidades crecientes, donde la cantidad intensiva es una función subordinada a la magnitud extensiva que resulta principal en la aventura de R. Por el contrario, el viaje de Manuela en El cumplimiento del deseo es, en primer lugar, una aventura intensiva, es decir implica esa dimensión del acontecimiento donde el espacio y el tiempo son comprendidos en grados determinados. Es un recorrido parabólico convergente e intensivo hacia las alturas y hacia las profundidades. Una organización vertical del viaje de ascenso y descenso. Viaje vertical pero oblicuo, significado por la casa de cuatro niveles, donde Manuela llega como arrendataria y cuya diferenciación cuadripartita impide referirlo al reparto conceptual, al simbolismo freudiano del yo, super yo y ello. Por el contrario el asunto, en este caso, es ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 203 concebir una travesía intensiva hacia el Adentro, pliegue interior, región de lo eterno o eternalidad, donde las cartas de navegación se aproximan más a un siquismo de las materias, tal como lo entiende Bachelard, que al sicoanálisis. Equivalente, también, a una exploración concordante con la jerarquía espacial de cuatro planos verticales del cosmos rechemapuche, constituido por el wenu mapu, tierra e arriba, dominada por küme newen o fuerza del bien y locus sagrado de las deidades; los ancestros animales y los antepasados míticos; el angka mapu, espacio habitado por weküfü, espíritus malignos que actúan por cuenta propia o controlados por algún kalku, brujo, y ubicado apenas por encima de la superficie de la nag mapu, tierra donde transcurre la vida cotidiana; y el miñche mapu, lugar bajo el suelo dominado por weda newen o fuerza del mal y donde los alwe o espíritus de los recién fallecidos son examinados por weda püllü; weda neyen y weda kürüf, diversas fuerzas malignas del conocimiento cuando el alwe de algún muerto desea ascender al wenu mapu. El motivo de la partida de Manuela tiene relación con el deseo de alejarse de una relación demasiado sedentaria y veladamente edípica con Santiago, su marido. Pero existe también, encabalgado, el deseo más radical y manifiesto de alejarse de la psicología y de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 204 cualquier modelo interpretativo acerca de la vida anímica incluido el sicoanálisis de Freud y Lacan. Para ello se sirve de la teoría de Baudrillard que invierte la relación sujeto objeto1. Manuela huye, entonces, de cualquier interpretación que explique su conducta para hacer la experiencia límite de exponerse como objeto de deseo. 2 El poder de aquellos que se fueron vuelve a mí Lola Kiepja Canto de la última chamán Selk’nam informante de Anne Chapman 1 De la seducción, Jean Baudrillard. Ver, también: El intercambio simbólico y la muerte y Las estrategias fatales. En ese tránsito intensivo de ascender y descender hacia lo desconocido, Manuela encuentra una parte de sí misma en Judith, la niña de mano secuestrada en el sótano por Anselmo, el mayordomo de la casa. Judith, como la bella heroína judía que salva su ciudad decapitando a Holofernes, (el general Asirio de Nabucodonosor), luego de haberlo seducido y cuyo motivo ha sido tratado ampliamente en la historia de la pintura. Se me vino a la cabeza, en primer lugar, la versión de Lucas Cranach, el viejo, (que recordaba haber visto reproducida en la ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 205 entrañable La Edad del hombre de Michel Leiris), con Judith serena, pensando quizás en la legitimidad del acto realizado, mientras enarbola su espada y exhibe la cabeza del general que tiene los ojos abiertos, al tanto que sus pupilas, veladas, empiezan a desaparecer tras los párpados. Sin duda había olvidado la pintura cuando, recientemente, pesquisando curvas divergentes asintóticas, me encontré con las dos versiones del tema realizado por Artemisa Gentileschi, discípula del Caravaggio. Artemisa, la diosa de la caza y los animales, gemela de Apolo pide a Zeus, su padre, el deseo de permanecer virgen, y es, como se sabe, el antecedente griego de Diana. Las pinturas barrocas de Artemisa Gentileschi, de una violencia casi sádica, describen, sin ahorro de sangre, el momento de la decapitación del general Asirio. Donde la impasibilidad de Judith, como si el degüello fuese una intervención quirúrgica menor, contrasta con el terror de Holofernes. No se le corta la cabeza sino al deseo La inmaculada concepción Paul Éluard y André Breton ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 206 La segunda versión, hecha por encargo, es casi idéntica, con una diferencia que implica otras modificaciones menores y un leve alejamiento de la perspectiva pero en el mismo eje óptico, lo que se traduce en un encuadre un poco más abierto, más aireado, como se dice en cine. La sangre que mana del cuello de Holofernes mancha de igual modo la sábana blanca de la cama, con un matiz amarillento en esta versión. Pero salpica también, a diferencia de la pintura original, el vestido de Judith modificado de un intenso azul jacinto a un tono tabaco claro. La tonalidad del ambiente lumínico es ahora de un tinte dorado y el claroscuro menos tenebrista, permitiendo que Artemisa ilumine, justamente, la zona del vestido donde se perciben las salpicaduras de sangre que se reparten con cierta regularidad, y aquí está para mí lo extraordinario, lo que se encuentra sin buscar. Las salpicaduras aparecen repartidas como si fuesen el resultado de trayectorias de proyectiles, el punto de término de parábolas divergentes asintóticas. Y no es extraño porque Artemisa utilizó, para darles ubicación precisa, en el vestido de la heroína, estudios de trayectorias de balas que estaba haciendo Galileo Galilei de quien era amiga. No puedo extenderme aquí en el comentario detallado de otra encantadora pintura de Artemisa que representa a la ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 207 hermosa viuda judía con una canasta donde lleva nuevamente la cabeza del general. Poca duda cabe que el insistente deseo de castración de Artemisa tenía un claro origen biográfico, fue violada por Agostino Tassi, su profesor de pintura y amigo de su padre el maestro toscano de pintura barroca Orazio Gentileschi. Fue denunciado por el padre de Artemisa, procesado pero nunca condenado por la violación, ni por haber mandado asesinar a su esposa, sino por mantener relaciones carnales con su cuñada que por aquella época se consideraba un acto de carácter incestuoso. La Judith de mi película es más modesta en sus reacciones y aunque discute por sus derechos se deja secuestrar en el sótano sin pretender cortar la cabeza del mayordomo. Lo que si logra es que el desquiciado Anselmo pierda la cabeza por ella en un rapto de amorloco delirante que resulta una variante del primer enloquecimiento del actor Andrés Quintana, bajo el disfraz de Gallardo, el chofer de El zapato chino, quién lleva a Marlene en la cajuela del taxi con absoluta anuencia la muchacha. Y del segundo, con Mansilla, el mayordomo del liceo, en Los deseos concebidos, que realiza algo entre fuga y rapto consentido con la escolar. Acto que culmina en la catástrofe del hotel, con la ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 208 niña asesinada y el enloquecido de amor pegándose un tiro en la sien. Judith es la figura que expresa el deseo de ser objeto puro o puro objeto; en cierto modo es una parte de sí misma que Manuela anhela integrar a su ser, en una suerte de sofisticado canibalismo ontológico. Es, de cualquier modo, una parábola trazada en un movimiento descendente hacia el Adentro, donde se reunirían las partes perdidas disyuntas bajo la forma de una multiplicidad heterogénea convergente que es como el juego de variabilidad interna de una misma figura afectada por él en sí de la diferencia diferenciante o disparidad. De ahí que el descenso imperioso conduzca a Manuela hacia un rojizo dominio de lenguas y saberes extintos, cuya señal es el cántico en lengua háusi kút, o yagan, mezclado con un incesante croar de ranas y el sonido bronco de una caldera que ella escucha al descender al sótano, al tanto que el obseso mayordomo permanece en la penumbra azulosa como espíritu cautivo de un cazador, condenado a rondar eternamente su presa. Judith y Anselmo expresan, también, como si fuesen sobrevivientes de una catástrofe histórica, un vínculo posible con el ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 209 pasado reciente de milenarios pueblos indígenas de Tierra del Fuego exterminados con violencia extrema, en el inmediato roce con la civilización occidental. 3 El acto es virgen aunque se repita Las hojas de Hipnos, René Char La otra parte que Manuela desea recobrar está representada por la hija muerta del psiquiatra que es idéntica a ella misma. Una copia perfecta que hace desaparecer, en apariencia, (y para deleite de Platón), la diferencia entre original y copia. Es el triunfo del pretendiente verdadero. Hacia el final de la película, la ex estudiante de sicología sube la escalera hasta el altillo en un movimiento parabólico, esta vez ascendente, para entrar al dormitorio del psiquiatra muerto. Sustrae la foto de su hija, reintegrando, como imperioso mandato órfico, esa parte de sí que es ella misma en otra vida. Y es entonces como si ella fuese Eurídice y hubiese retornado desde la muerte sin el auxilio de Orfeo, sin su equívoca y mortal asistencia. (Porque hay auxilios que ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 210 matan y perjuicios que dan vida). Una Eurídice lazárica que hace revivir esa parte muerta de sí misma. O quizás sea Perséfone (Persephónē, la que lleva la muerte, o el rayo que mata la luz), la joven doncella raptada por Hades quién la convierte en reina de los muertos, cuyo nombre era mejor pronunciar en voz baja y a la que se referían veladamente como «La Doncella»2. 2 Su figura era una presencia inevitable en los ritos iniciáticos secretos de regeneración de los misterios de Eleusis que celebraban el triunfo de la vida sobre la muerte con sacrificios de vacas negras estériles en su honor. Al parecer los orígenes de los misterios de Eleusis, (del 700 a. c., en Grecia), están, por una parte, en ceremonias ancestrales de iniciación, en ritos sagrados de permisividad sexual y por otra en rogativas a la tierra y que la síntesis de iniciación, plegarias y sexualidad expresa la celebración del triunfo de Eros. Y como Eurídice, a la que ayudó a salir del inframundo, Perséfone también fracasó en su intento por retornar definitivamente al mundo de los vivos, aunque su derrota no fue completa porque se le exigió pasar solamente una temporada de seis meses al año en el oscuro Hades. Pero hilando más fino encuentro algo que me sorprende, el prestigioso mitólogo Kerényi ha identificado a Perséfone con la anónima «señora del laberinto» de Cnosos que fue la ciudad más importante de la civilización minoica. Es decir Ariadna y Perséfone serían derivaciones de una misma figura, expresiones de una multiplicidad heterogénea convergente y no infinita que implica el paso incesante y reversible de vida y muerte. De modo que Manuela desea nada menos que recuperar, bajo la figura aparente de la hija del siquiatra, una parte ilimitada de sí misma, una parte eterna y divinizada, una parte que no le concierne ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 211 solamente a ella, pero que es ella también en su deseo de participar de una figura transfigurada y muchas veces retornada como otra misma. No en vano la misma ex estudiante de sicología dice, en una vuelta de tuerca de la fórmula de Rimbaud: Soy otra, siempre soy otra, que desnuda la afirmación desplegando su potencia he sido otra siempre, y siempre seré otra. Referencia ineludible al pasado como región temporal impersonal, donde hay otra que ella ha sido y al futuro donde, en alguna región indefinida, seguirá afectada por la alteridad del devenir. Son tiempos referidos desde la perspectiva del presente de la entidad actual, en este caso Manuela, pero que son partes integrantes del conjunto de prehensiones que conforman el Acontecimiento extensivo absoluto, esto es, la certidumbre de la heroína de ser la otra que será y de haber sido otra en un pasado inmemorial. El Adentro es el locus eterno de cualquier entidad que acusa en su actualidad haber sido otra, diferente de la que es, y de la que será. Se escapa así del error de la localización simple del presente de una entidad actual, como subjetividad aislada y abstraída de su remoto proceso constitutivo, porque el pasado y el futuro, aunque distantes de la actualidad, son inevitablemente prehendidos como hechos objetivos definitorios, virtuales y posibles que, en este caso, transfieren su potencia de repetición a Manuela ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 212 actual, siendo su parte perdida en el pasado, y la parte anhelada en el futuro, aspectos constituyentes de su actualidad prehensiva, pero también siendo el presente actual de Manuela un heredar del pasado que la antecede y ella misma el hecho antecedente de otra que vendrá. Es lo que Whitehead denomina inmortalidad objetiva, como expresión de la sobrevida eternizada de una entidad actual cuando ha concluido su ciclo de existencia subjetiva pero sobrevive como hecho o dato cierto para otras prehensiones. Definición extraordinaria de la continuidad ininterrumpida y creadora de todo proceso, que asegura siempre la inmanencia de lo infinito en lo finito, es decir, asegura las posibilidades limitadas del universo que avanzan siempre hacia una realización ilimitada. 3 Ciencia y mundo moderno, Alfred N. Whitehead. El fundamento de la posición metafísica que estoy manteniendo es que la comprensión de la actualidad exige una referencia a la idealidad. Los dos reinos están intrínsecamente implicados en la situación metafísica total. Y es que la posición neorrealista de Whitehead, que implica una comprensión de la actualidad, exige también una referencia a la idealidad. Porque los dos reinos están intrínsecamente implicados en la situación metafísica total 3. Pero compréndase bien, el ideal no es la Idea. No significa, en modo alguno, un retorno a Platón sino aquello que retorna como inactual, y en efecto, lo inactual es lo único que puede retornar para trabar combate con la actualidad llana. No es por esta orilla que ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 213 podemos percibir el platonismo explícito de Whitehead. Por el contrario, el ideal, aquello investido de importancia, aunque inactual no es un fundamento, sino lo nuevo que funciona como si fuese un ideal porque es lo mismo-otro retornado, pero lo aun no realizado que tensa y abre la apetencia de completitud de la entidad actual, hacia un punto de máxima realización de la potencia como forzamiento. Lo que retorna es, entonces, la potencia como mismootro, o ideal, que traza una parábola de convergencia de diversas entidades heterogéneas implicadas en la heroína. Pero en lo que retorna está también lo que fuerza el retorno, la potencia. La verdadera novedad no es un otro cualquiera que retorna desde alguna región olvidada, sino la potencia misma que fuerza el retorno y es retornada por la fuerza. No es el deseo que retorna como cumplimiento ineluctable, sino la potencia de desear, el deseo de desear, afirmado como pensamiento del deseo. A su vez, lo retornado son las partes disyuntas, los fragmentos del ideal que permiten la conjunción, la síntesis disyuntiva de la desperdigada extensión espacio-temporal proteica y múltiple de la heroína en El cumplimiento del deseo. De ahí también la gravitación del discurso sobre la repetición del ex psiquiatra que ha perdido a su hija y que se sostiene, ciertamente, en el concepto de eterno ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 214 retorno de Nietzsche, pero también en la idea de repetición en Kierkegaard (un ensayo de este último que se llama justamente así4. Lo que retorna, entonces, en la travesía intensiva de Manuela es la potencia de retorno que se trae a sí misma, pero también la tensión del ideal disperso, el hallazgo de una filiación remota y espectral, el encuentro con figuras que participan de una multiplicidad heterogénea olvidada y fantasmal, pero que vuelven a aparecer, que retornan como lo nuevo, es decir como impredecible e incesante creatividad del universo. 4 Para que una herencia sea realmente grande, preciso es que la mano del difunto no se vea. Las hojas de Hipnos, René Char 4 KIERKEGAARD, SØREN: repetición. Buenos Aires: Psiqué, 1997. La JVE En El cumplimiento del deseo se escuchan una serie de relinchos de un caballo que evocan la pesadilla, the nightmare o yegua de la noche. El sonido produce esa sensación de desconcierto y perplejidad ante una situación familiar que súbitamente se vuelve desconocida y siniestra y que Freud llamó una inquietante extrañeza, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 215 das unhemlinche. Los relinchos son singularidades nómadas, esto es, un percepto que trasunta el llamado de las fuerzas del Afuera que reclaman a la heroína y ella sin resistir, acude, sonámbula. Este episodio, en su forma visual, se origina, y eso fue algo deliberado, en Viridiana de Buñuel, cuando la novicia en estado de sonámbula entra al dormitorio de don Jaime y vacía un canastillo con cenizas sobre su cama. Del canastillo cae, también, un ovillo de lana. En su aspecto sonoro, remite, en cambio, al cuadro de Füssli The Nigthmare, que expresa, en sus dos versiones, 1782 y 1783, un poderoso componente sexual debido a la presencia del aterrador íncubo en cuclillas sobre el torso de la doncella, quién sueña totalmente entregada, mientras la cabeza de un caballo, con los ojos velados pero fulgurantes, aparece entremedio del sombreado cortinaje de un púrpura infernal, en la segunda y más lograda versión. Me permito efectuar también un link hacia las cebadas yeguas antropófagas de Diomedes, rey de Tracia, alimentadas con carne de sus huéspedes en curiosas leyes de hospitalidad y cuyo exterminio, como se sabe, fue la octava tarea encomendada por los dioses a Heracles. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 216 Los relinchos remiten, por último, a sacrificios realizados por los antiguos pewenche de sus caballos más queridos para aplacar a gualichú, intangible entidad maligna, (equivalente al weküfü rechemapuche), pero se reservaban sus pieles, que purificaban de gualichú y a veces consumían casi crudas. Y no sólo entre los pewenche, sino en muchas otras culturas existen ritos de inmolación y purificación del caballo. Sacrificios de potrillos sobre las tumbas de los niños, dice el poeta antillano Saint- Jonh Perse en Anabasis. En el extremo opuesto está el caballo blanco, venerado por el ülmen y kalku o brujo, Mangiñ Wenu, fütalongko de los wenteche, mapuche arribanos, que le ofrecía augurios sobre el resultado de combates, kawell pelom wenu, caballo vidente de carácter celestial, retornado desde la muerte. Caballos que practicarían la magia…refrenda Hernri Michaux en Ecuador. Ciertamente sería posible añadir otros casos para extender la serie de acontecimientos espectrales con caballos anómalos, conjurados y celestiales, pero resulta innecesario hacerlo. Ni siquiera fue necesario que describiese los acontecimientos que implican las tres situaciones de referencias de caballos que me permití describir. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 217 Ello se debe, en primer lugar, a lo siguiente: los términos expuestos representan tres entidades diferentes pero homogéneas, enlazadas en una serie convergente no infinita, sin actualidad, porque es la proyección de un pasado posible simplemente conjetural y nunca virtual o coextensivo a un presente. De tal modo que carece de importancia, en este caso, añadir nuevos caracteres o términos que redundarían en una mayor extensión y complejidad de la serie que solamente tiene valor como corte o perspectiva que trae a la superficie como invariante un eco inquietante, una tonalidad siniestra, la fantasmalidad de una figura plural, o entidad inactual múltiple y anómala, que implica caballos de retorcida sexualidad con humanos, caballos antropófagos, otros sacrificados para aplacar una entidad maligna y finalmente el caballo luminoso y mágico retornado desde la muerte. En segundo lugar, lo que interesa es que la figura plural o entidad múltiple, proyectada desde un pasado puramente conjetural, sin virtualidad y en consecuencia no solamente inactual sino improbable, guarda una relación de exterioridad con una entidad actual constituida de manera autónoma, esto es, el percepto del relincho del caballo. El que guarde una relación de exterioridad, salvaguardando su autonomía, significa que desde la entidad múltiple no se puede desprender el percepto o singularidad nómada ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 218 del relincho del caballo como si estuviese implicado en ella, porque no es un predicado de aquella entidad. Así como tampoco se puede explicar el carácter, ni la naturaleza de la figura plural, o entidad múltiple, inactual e improbable, que conforma la serie convergente, no infinita, de tres términos, desde la actualidad del percepto del relincho del caballo. El relincho, como singularidad o percepto, guarda una relación de exterioridad pero además de determinación con la entidad múltiple. La determinación se constituye por el hecho que el percepto es una sensación arrancada a una percepción y un punto de vista con disparidad interior, capaz de dar cuenta o englobar a la entidad múltiple como totalidad que encuentra satisfacción, como serie convergente no infinita, en su devenir hacia la completitud. De modo que el percepto, al igual que una cualidad, el color verde, por ejemplo, y aunque sea afectado por la disparidad, tiene una forma de eternidad o eternalidad que sobrepasa todo cambio y permanencia, sobrepasa, por tanto, la inclusión o exclusión de términos en la serie siendo su relación entonces la de aquello que tiene potencialidad o propiedad de definibilidad, como es el caso de los objetos eternos al ingresar en un proceso para modificar un nexo de entidades actuales posibles, en este caso, acontecimientos que expresan un pasado conjetural donde, justamente, se aloja la figura ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 219 plural o entidad múltiple. El mismo tipo de argumento debería aplicarse al percepto de las cáscaras de papas qué Manuela en estado de sonámbula pela en la cocina de su casa, al comienzo del filme. ¿Pero qué relación existe entre el relincho del caballo y las cáscaras de papas? Ninguna conexión tangible, salvo, quizás un precursor oscuro que relaciona ambos perceptos. Hemos visto con anterioridad la función de lazo interior que asigna Deleuze al precursor oscuro. ¿Basta con decir eso? No. Es necesario dilucidar, entonces ¿cómo se forma el precursor oscuro para enlazar el relincho del caballo con las cáscaras de papas? Como se produce el lazo interior que vincula esos dos perceptos en una serie divergente. Se puede entender que la figura plural, caballo de sexualidad retorcida, antropófago y proclive a entrar en connivencia con entidades malignas como gualichú, es una multiplicidad anómala y qué al igual que un chivo expiatorio exige el sacrificio para restituir el orden violentado, en este caso un orden sobrenatural impregnado de la tonalidad moral que todo sacrificio conlleva. El resultado es el animal anómalo muerto y purificado, y su piel, cuál trofeo, cuál vellocino de oro, exhibida y preservada como fetiche que alcanza un ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 220 esplendor glorioso y luego es consumida o abandonada como pellejo sin brillo, como cáscara inútil que es justamente el modo de ser más allá de la muerte del animal sacrificado, su pellejo como rastro fantasmal hasta la determinación última del fantasma animal liberado de cualquier lastre corporal. 5Y esto recuerda a los despellejados de la fiesta religiosa de Lora, en la comuna de Licantén, provincia de Curicó, derivada de una ceremonia ancestral pikunche, donde los participantes se visten con cueros de ovejas. Y, también, las mañaguas de zorros y pumas que ponen en sus cabezas los indígenas de las culturas reche y pewenche. El precursor oscuro, si estamos bien encaminados, es el tránsito del animal sacrificado y desollado al pellejo como rastro fantasmal para finalizar en el fantasma animal. La piel cortada y arrasada que subsiste una vez que el resto orgánico ha muerto y desaparecido, desaparece, a su vez, subsumida por un fantasma dispar que se expresa mediante el relincho. El fantasma del relincho es lo que sobrevive sin piel, es lo resiste sin cuerpo, es la insistencia despellejada del clamor, su desnudez absoluta, la singularidad nómada y consistente del Acontecimiento purificado y eternal 5. De un modo semejante el rastro fantasmal de las cáscaras de papas que Manuela secciona como autómata tiene su expresión final en un fantasma vegetal que participa, desde un clamor mudo de ese mismo Acontecimiento purificado y eternal. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 221 5 ¿Cómo me oís vosotros? Hablo de tan lejos Las hojas de Hipnos, René Char El aullido del mono en Los deseos concebidos, la jauría de perros que ladra en Cuídate del agua mansa, el himplar del leopardo en Susana, los balidos de ovejas, los aullidos de lobos y el singular ladrido del lobo marino de Tiempos malos son también perceptos, es decir percepciones arrancadas de un acontecimiento trivial. Percepciones anómalas originadas de una percepción usual, tal como la sonrisa sin gato en Alicia en el País de las Maravillas de Lewis Carroll, que cita Deleuze. Es el aullido del mono que se propaga desorientado, sin dirección precisa y lejos de la selva; es el relincho que subsiste después del sacrificio del caballo desollado, que insiste en su pellejo como rastro y como fantasma luego de actos pasados de velada zoofilia, o de antropofagia animal y connivencia con gualichú o entidades malignas; son los ladridos de la jauría, que persisten más allá del instante en que los perros despedazan a su víctima; el himplar corto y bronco del leopardo despegándose de su sentido como marca territorial y también los balidos de ovejas y los aullidos de lobos en un conflicto ancestral que los sobrevive; es el ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 222 ladrido del lobo marino que se eterniza. Son distintas formas de subsistir; de persistir; insistir; de resistir todo, incluso el tiempo, sobre todo el tiempo. Por último, los perceptos acústicos animales no buscan un cuerpo, son buscados por cuerpos que los reclaman como fugitivos escapados de una prisión. Los sonidos animales son perceptos fantasmales extraviados en regiones del espacio-tiempo, extraviados, pero libres. Fugitivos escapados de un cautiverio. Por ello no remiten, en lo absoluto, a un fuera de campo como extensión homogénea de la región espacio-temporal de donde provendrían las fuentes de tales signos acústicos, pero tampoco son parte de esa fuente o entidad actual, sino que son señuelos perceptuales, rastros fantasmales inactuales y disyuntos que vienen del Afuera, son el Afuera, su intimidad más insondable y secreta. 6 ¿Escucharon cantar a los pájaros hacia las cuatro de la tarde del mes de abril? Esos pájaros están locos. Soy yo. La inmaculada concepción, Paul Éluard y André Breton ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 223 Hacia final de El cumplimiento del deseo, cuando la heroína nuevamente sonámbula corta una cáscara de papa en forma espiral se escuchan crecientes trinos de pájaros que anuncian la aurora. Esta vez los relinchos del caballo han desaparecido. ¿El relincho del caballo se ha extinguido o ha devenido trinos de pájaros? Sea como sea, el cambio de expresión sonora es una bifurcación real. ¿Pero quién produce esta inesperada bifurcación? El atractor extraño, porque precisamente su función es inducir transformaciones cualitativas en el precursor oscuro, fantasma del relincho que insiste más allá de la piel, fantasma despellejado capaz de producir una sensación de incongruencia, de ruptura del tejido de la trivialidad y de emergencia de un misterio irreductible. El fantasma trinos de pájaros es el mismo precursor oscuro devenido canto de amanecer que trae la alegría o regocijo del sí mismo, sellfenjoyment que disipa la otra noche, la noche infernal. El atractor extraño es la manifestación exterior, la expresión visible y actual del lazo interior o precursor oscuro que une dos términos perceptuales puestos en conjunción en una serie heterogénea divergente. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL VIAJE COMO LABERINTO TEMPORAL • Cristián Sánchez Garfias | 224 Pero ese lazo sería invisible si no estuviese atravesado por la fuerza trastornadora y anómala del atractor extraño. Cuando escribía estas líneas, tomé inadvertidamente entre mis manos, las Notas Sobre el Cinematógrafo, de Bresson, abrí al azar una página y me encontré con uno de esos certeros textos epigramáticos: <<Nada de psicología (de aquella que sólo descubre lo puede explicar)>>. Entonces en El Cumplimiento del Deseo se trataría de otra psicología o de un siquismo más extraño y misterioso. Hay que mantener el misterio, dice Bresson. Hay que invocar el misterio y permanecer en él, refrenda Buñuel. En este caso utilizo a Freud como punto de partida o mejor punto de huida para hacer el viaje. El sicoanálisis es el suelo que hay que resquebrajar, así como es necesario socavar el piso inerte de toda impresión de realidad, de toda percepción trivial para encontrar la tensión de un territorio irregular y fraccionado atravesado por figuras fantasmales o singularidades nómadas que recorren los tiempos y nos interpelan, vienen hacia nosotros sin terminar nunca de venir como presentían, con lucidez, Blanchot y Derrida. ISSN 0719-4579 RELACIONES SECRETAS: FRAGMENTOS Y RETAZOS DE LA OBRA PICTÓRICA DE ANELYS WOLF ANELYS WOLF Parte de la exposición presentada en la galería Michaela Stock y en el espacio Schaufenster del KulturRaum Neruda, en Viena, Austria, en marzo y abril de 2012 SOBRE EL AUTOR* El trabajo pictórico de Anelys Wolf se ha caracterizado por representar escenas que muestran personas en situaciones cotidianas. Generalmente pinta a partir de fotografías, referente que, por sus encuadres, se evidencia en sus pinturas. Si en obras anteriores su modelo fueron fotografías extraídas de su entorno familia, en la serie Relaciones Secretas que ahora presenta, el modelo son fotogramas sacados de películas de los cineastas chilenos -distantes generacionalmente- Cristián Sánchez, José Luis Torres Leiva y Elisa Eliash. La elección de estos fotogramas como punto de partida para sus pinturas hace manifiesta la inclinación de Anelys Wolf por lo narrativo, asunto que traspasa toda su obra (…) El formato pequeño de las pinturas que nos presenta, su organización como serie y título que les dio, son factores que colaboran a que el observador se permita especular sobre las conexiones o “relaciones secretas” entre ellas. En la realización de esta serie pictórica Anelys extrapola la edición cinematográfica a la edición de las pinturas. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | RELACIONES SECRETAS: FRAGMENTOS Y RETAZOS DE LA OBRA PICTÓRICA DE ANELYS WOLF • Anelys Wolf * Extracto del texto Historias Mudas, incluido en la compilación de pinturas presentadas por Anelys Wolf en la exposición Relaciones Secretas, escrito por Malena Cárdenas Ortega * * Parte de la exposición presentada bajo el título Relaciones Secretas en la galería Michaela Stock y en el espacio Schaufenster del KulturRaum Neruda, en Viena, Austria, en marzo y abril de 2012. Las pinturas que aquí se exhiben son un extracto de los fotogramas pintados sobre el cine de Cristián Sánchez | 226 RELACIONES SECRETAS: FRAGMENTOS Y RETAZOS DE LA OBRA PICTÓRICA DE ANELYS WOLF** ANELYS WOLF Voy a citar a Antonioni: "No tengo facilidad de palabra, tengo facilidad de imagen." En el cine de Sánchez hay una energía o fuerza que está circulando como un flujo que tomo como objeto en mi pintura: una fuerza que a veces es de carácter sexual. El motivo más nítido es la figura de Quintana. ISSN 0719-4579 Quilalebo, Pichi Alvaro y Mestiza. Escena extraída de la película Cautiverio Feliz (1998) Pichi Alvaro e Ignacio enfermo. Escena extraída de la película Cautiverio Feliz (1998) Dinamita fumando. Escena extraída de la película El otro round (1983) El otro round II. Escena extraída de la película El otro round (1983) El otro round I. Escena extraída de la película El otro round (1983) Francisca bebe. Escena extraída de la película Cuídate del agua mansa (1995) Francisca se refresca. Escena extraída de la película Cuídate del agua mansa (1995) Ignacio con niñas. Escena extraída de la película Cuídate del agua mansa (1995) Manuela caminando. Escena extraída de la película El cumplimiento del deseo (1994) Manuela. Escena extraída de la película El cumplimiento del deseo (1994) Mansilla. Escena extraída de la película Los deseos concebidos (1982) Escolar y R. Escena extraída de la película Los deseos concebidos (1982) Mansilla con las piedras. Escena extraída de la película Los deseos concebidos (1982) Mesa II. Escena extraída de la película Los deseos concebidos (1982) Motel. Escena extraída de la película Los deseos concebidos (1982) Marlene de perfil y manos. Escena extraída de la película El zapato chino (1979) Marlene de perfil. Escena extraída de la película El zapato chino (1979) Mesa I. Escena extraída de la película El zapato chino (1979) Gallardo recostado. Escena extraída de la película El zapato chino (1979) Gallardo hablando. Escena extraída de la película El zapato chino (1979) ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ GONZALO PERUCCA Y ORLANDO TORRES ¿Con qué cámara filmaste El Zapato Chino y cómo llegaste a conseguirla en ese momento tan difícil? El Zapato Chino se hizo con una cámara Bolex con motor, que pertenecía al departamento de cine y televisión de la Universidad Técnica, porque yo trabajaba en ese departamento entonces pude acceder a ella, y después esa cámara se echó a perder durante el rodaje, tuvo un problema. Al camarógrafo se le cayó la cámara y entonces tuvimos la suerte que apareció un francés, Jacques Michaud, que andaba con una cámara igual, pero se iba en una semana y yo le dije “oye, por favor, préstame la cámara, estoy en esta situación…” y el francés se apiadó de nosotros y nos prestó la cámara y estuvimos como uno o dos meses con él acá, o más, porque filmábamos en forma diferida, no en forma seguida, a veces los fines de semana o cuando se podía. Salvo un par de planos, al comienzo, que eran con una Bolex a cuerda, el resto fue Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 244 con esa cámara Bolex con motor, que tenía sincronismo de cuarzo y trabajábamos con Nagra, por supuesto, en sonido. ¿Y el financiamiento de la película también provino del departamento de cine? No, provino de mi bolsillo, provino del hecho que finalmente se terminó el departamento de cine el año 76, yo estuve el año 74, 75, 76, y parte del desahucio lo utilicé para hacer la película, para pagar el revelado, yo ya había comprado el material, y el resto se financió, lo he dicho, milagro producciones. Con el aporte de los técnicos, de la gente, de la voluntad de hacer la película más bien que plata, no había recursos. ¿Mucha gente también trabajó sin remuneración? Nadie, a nadie le pagamos, salvo algunos actores como Lucho Alarcón que se le pagó, no mucho pero un poquito. Los demás, a María Castiglioni también se le pagó, pero el resto, los técnicos, todos, nadie cobró un peso, eran otros tiempos. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 245 ¿Qué dificultades tuviste al hacerla? Por la época en la que se rodó. No hubo dificultades policiales, si tú quieres, porque nosotros éramos un equipo tan chiquitito, estábamos haciendo algo aparentemente experimental, como que no llamamos la atención, y como yo no pedía permiso ni nada entonces salíamos y filmábamos las tomas que queríamos, por lo demás no habían tantas escenas de calle. La mayoría son interiores. Hay algunas, sí, pero se pudieron hacer sin problemas en ese sentido. Yo siempre he pensado al ver las películas ¿por qué se filmó tan poco en esa época? Uno podría pensar que había más limitantes. No, las limitantes eran económicas más bien. Limitantes de posibilidades de hacer películas, pero en términos, digamos, porque no es una película directamente política entonces uno se podía cubrir perfectamente y decir: “bueno pero esto es otra cosa, una cosa experimental”, entonces había una justificación, siempre había un riesgo naturalmente, pero decidimos correr ese riesgo. Afortunadamente en esa película no tuvimos problemas. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 246 ¿En qué lugar la filmaste? Es que son lugares distintos de la ciudad, calles más bien. Roberto Espinoza, algunas escenas, entre Santa Isabel y Roberto Espinoza, hay otras escenas en la calle Condell, incluso, en fin, distintas calles de Santiago. Es interesante que hayas escogido esas locaciones que son más barriales. Sí, busqué esos lugares más bien por las texturas, por el vínculo que había entre las texturas que tú estás mostrando. El tipo de escenografía que representaba, el tipo de decorado, lo que podía traducir eso que andaba buscando, independiente si era un barrio u otro. Entonces tú construyes una especie de barrio imaginario de Santiago con esos fragmentos distintos. Ahora que me acuerdo también, la calle Arturo Prat, por ejemplo, las entradas al hotel de Quintana con la niña son en la calle Arturo Prat, pero esa parte, solamente esa parte es la que me interesaba. Siempre vi la cosa por pedazos, por fragmentos. Entonces cómo esos fragmentos van creando un universo irreal, pero verdadero a la vez. Eso es Bresson, eso es un poco Bresson. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 247 Para nosotros como espectadores funciona. Funciona perfectamente porque se construye. Y creo en eso que dice Hitchcock, así se construye el cine, en función de los encuadres. Tú puedes decir “¡Qué bonito este espacio maravilloso!” y después no queda nada, porque lo que mostró el encuadre era nada. Yo siempre estaba pensando en función de la cámara, en función de lo que la cámara iba a captar, entonces eso era lo que me interesaba en ese momento. Con respecto a Bresson. Me da la impresión que trabajaste en el Zapato mayormente con lentes normales. Hay poca utilización de grandes angulares. Siempre he tenido un reparo contra los angulares, ya de la escuela, desde las primeras películas. Y también contra los lentes tele. Entonces evité los tele-tele y los angulares. Trabajábamos con el Angenieux 12-120 que era el que estaba adherido a la cámara. En general buscamos lentes normales y eso proviene un poco de la estética francesa, de Bresson y de Rohmer también. De su preferencia por el lente 50 equivalente al 25 en 16mm., en ambos. Yo sabía que eso me iba a dar una unidad estética mucho mayor, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 248 como la película ya era fragmentada porque aparecían distintos espacios y lugares. Además porque los materiales de impresión del negativo provenían de distintos lugares, eran Orwo de Alemania Oriental, había película Fuji, película Agfa, Kodak, Ferrania y de distintas latitudes, era una ensalada de negativo que había, en cierto modo, que equiparar. Yo no quería más dispersión, por eso la utilización de lentes normales. ¿Las limitantes técnicas, como la falta de equipos de iluminación, te hicieron también cerrar los cuadros? Claro, tener planos más cerrados, sin que fuera una estética de primer plano, pero si más acotada, de no mover la cámara, eso me permitió jugar mucho con el fuera de campo, cosa que también me interesaba mucho en esa época y me sigue interesando. Porque está relacionado con la narración off. He notado que el sonido fuera de campo en tus películas, sobre todo en El Zapato Chino es muy importante. Por ejemplo en la secuencia del velorio de la madre, cuando el hijo ve el partido de fútbol por sobre la pandereta en la casa del vecino, en esa secuencia no se ve el partido pero se oye. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 249 Ahí no se ve el partido nunca, pero tú lo percibes todo, ese es un ejemplo perfecto que tu pusiste del trabajo que a mí me interesa, creo que el sonido es muy importante en una película, y no sólo como un correlato de la imagen, sino importante porque es capaz de crear algo sobre la imagen, sobreañade algo a la imagen. La imagen ya no es lo mismo con el sonido. Con los ruidos. De alguna manera reconstruye el espacio y de pronto tú no necesitas más que unos fragmentos, unos pequeños datos, o índices de realidad sonora, para que esa realidad se constituya, en algo mucho más poderoso. En ese sentido estoy huyendo de la mentalidad behaviorista del cine, tautológica, de mostrar las cosas tal como son, esa silla es una silla, ese árbol es un árbol, vemos lo que vemos. No, lo interesante es la conjetura, es decir a través de eso que vemos podemos conjeturar algo que se nos escapa y que de alguna manera introduce una riqueza mucho mayor. Porque nos hace sentir eso, por lo tanto pensar también. A nosotros nos obsesiona la figura de Andrés Quintana, ¿cómo llegaste a ponerlo en una película? ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 250 Él trabajaba en cine experimental de la Universidad de Chile, en la cineteca, bajo la jefatura de Kerry Oñate, y estaba ahí yo lo conocí, me lo presentaron y me pareció un personaje extraordinario, maravilloso, muy afable, además muy simpático, yo pensé inmediatamente, Quintana tiene que actuar, puede actuar. Entonces ahí lo metimos con un papelito chiquitito en Esperando a Godoy, él interpretaba al mayordomo de la sociedad de escritores. Kerry Oñate era un intelectual democratacristiano que venía de afuera, después de mucho tiempo, a ver el proceso de la Unidad Popular pero era un poco crítico. Quintana le contaba lo que había ocurrido en el período en que él no había estado ahí. Empezaba todo un juego en que aparecían unas cintas de sonido. Yo tengo esta cinta en que aparece De Rokha hablando, ahh... pero yo tengo esta otra en que aparece Neruda, y empezaban a poner las cintas, y de repente Quintana le agarraba unas cintas y se las robaba sin que Kerry se diera cuenta. Unos pequeños actos que marcaban un poco la contradicción de Quintana. Me gustó mucho lo que hizo, también a Sergio Navarro y a Rodrigo González, los otros codirectores. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 251 Pero me tocó más bien dirigirlo a mí, entonces conmigo fue el vínculo más fuerte. Entonces después, cuando empezamos a trabajar con Sergio Navarro en Vías Paralelas inmediatamente me dije Quintana tiene que hacer un papel fundamental y le inventé una historia donde era presidente de una cooperativa de un restaurante donde se comían a los clientes, cuyo socio era Lucho Alarcón y que termina en una cosa delirante en que Quintana termina matando a Lucho Alarcón que le reprocha: “mira, hay zapatos chiquitos de niñitos chicos” y Quintana le dice: “bueno es cosa mía cada uno lleva la cooperativa como quiere, como le da gusto y gana ¿algún problema? Lo solucionamos al tiro”. Entonces con unos cuchillos de comida y un tenedor empiezan a pelear, así como a jugar y de repente lo mata a Lucho Alarcón que dice: “por aquí se me va la viuda” y muere. Todo un juego con el inverosímil fílmico, del cual yo creía mucho y sigo creyendo, pero más morigeradamente hoy día. El inverosímil fílmico que había visto Roman Gubern, en la lectura que hace de Godard, en el Godard polémico, un libro muy famoso de los setenta. Entonces esa idea de inverosímil fílmico, de ruptura del realismo tradicional, para mí ha sido fascinante, es lo irrisorio, lo absurdo, una realidad que se expresa de otro modo, una realidad más compleja, donde lo falso también participa. En el fondo es eso, donde lo falso ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 252 es parte, o la mala actuación es parte también de esa forma de ruptura de la representación tradicional. Bueno, entonces Quintana era como un pez en el agua para mí. O sea hacía eso muy bien, nos gustó mucho lo que hizo en esa secuencia del bar de los doce apóstoles que se llamaba así porque eran doce mozos, uno era cojo, tuerto, otro ciego, en fin, manco, todos tenían algún defecto, era una corte de los milagros en realidad y resultó muy humorístico todo eso, muy delirante porque Quintana los termina matando a todos, finalmente. Después dije, él tiene que ser el protagonista del Zapato Chino, de todas maneras y después siguió con Los Deseos Concebidos, con el papel de mayordomo del liceo, y después el mayordomo en El Cumplimiento Del Deseo y el casi protagónico en El Otro Round. Bueno y hasta ahí llegamos porque se nos muere Quintana. ¿Tú llegaste a tener un vínculo afectivo con él? Sí, grande nos veíamos mucho, se reía mucho de las cosas que yo le pedía al actuar: “pero maestro las cosas que me hace hacer usted” y se mataba de la risa, le gustaba desarrollar ese sentido lúdico, teníamos una amistad, un vínculo bien bueno con Quintana. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 253 A nosotros Quintana nos parece atractivo como personaje porque era una fuerza sexual muy potente dentro de tus películas. También, ¿ustedes lo ven como fuerza sexual? Claro, como fuerza arrasadora, que toma todo, qué se yo, entra, miente, hace mil cosas para poder funcionar, se adapta a los espacios de un modo extraño. Capta lo que hay en cada espacio, los seres, y entra en convivencia con eso y engrupe, engrupe y al mismo tiempo es verdadero, es sincero. Es una mezcla entre ingenuidad y exceso de malicia. Una malicia muy chilena, pero al mismo tiempo una malicia que viene del campo pero pasada por la ciudad ya. No sé, esa es la sensación que yo tengo. Es un poder mágico de seducción. Un poder de seducción, sí. Un poder seductor que está con la cosa de las piedras, en Los Deseos Concebidos, hay un poder ahí enorme de transformación. Me gusta mucho lo que creamos con Quintana, porque bueno, está el aporte de las cosas que le pedía que hiciera y que él las hacía con tanta gracia. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 254 El nivel de improvisación era grande me imagino. Mira, la cosa de la improvisación tiene un límite, es decir yo creo que cuando la gente piensa en improvisación piensa que uno llega y le dice al actor, a ver inventemos algo. Yo nunca he llegado a esa situación, sé lo que quiero hacer y le digo a los técnicos, estos van a ser los puntos de cámara, este es el espacio, aquí ocurre la acción. Y después hablo con los actores y empiezo a decirles cuál es la acción. Entonces tú te levantas, tomas el vaso, tú haces acá y llegas por este lado izquierdo, a ver veamos, vamos viendo, vamos encuadrando, me meto mucho con la cámara, voy viendo los movimientos de cámara si los hay y finalmente empiezan los textos, comienzan a decirse cosas los actores y yo voy corrigiendo sobre eso. No, dile tal cosa, no, no, no, es ese el tono, a ver escucha, mira, este es el tono. Y lo dice, lo corrige, no, eso elimínalo, lo otro no funciona, no te muevas para allá en realidad el movimiento era aquí solamente, ahora que miro por cámara me doy cuenta. Eso es improvisación, o sea yo no lo tenía previsto porque no ensayé doscientas veces antes, pero eso es también control de la puesta en escena, no hay improvisación, en el fondo es como lo que hace Antonioni o Tarkovski, que llegaba a los lugares sin story, sin ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 255 nada y empiezan a mirar media hora antes. Tarkovski era muy desordenado por lo que dicen y Antonioni también, le gustaba mirar quince o veinte minutos antes el espacio y ahí decidía los planos y las acciones. En el fondo es eso, yo quería decidir a última hora aquello que no quería escribir o tener demasiado confirmado, porque era como hacer la película antes. Creo que ese es el arte del cine, el riesgo de la puesta en escena, de resolver en ese instante las cosas. En tu cine hay influencias clarísimas de Bresson, Godard y Antonioni. Si, están ahí los maestros que yo he admirado. Sobre todo en El Cumplimiento Del Deseo hay una cita a Blow Up directa. Claro la cosa de la fotografía, todo el espionaje fotográfico es grande. Sí, esos son homenajes decididos, además el tono átono, plano, la plenitud y la búsqueda de esa tonalidad es muy Antonioni y Bresson, estaban los dos, porque en el plano corto más bien se parece a Bresson, la cámara fija. Antonioni mueve más la cámara, tiene otra concepción, se preocupa más de las reverberaciones de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 256 los hechos. Mi manera de filmar es más brutal, era una acción que pasaba a la otra inmediatamente. Pero yo pensé en esos dos maestros que he admirado y sigo admirando, ciertamente. Y Rohmer también. Pero Rohmer está más yo diría en Cuídate Del Agua Mansa, que es una película donde incluso los créditos son como los de las Comedias y Proverbios, el mismo tipo de letra, el lugar donde ocurren. Se llama Cuentos del agua, Cuídate del agua mansa. Porque era parte de una serie. Que espero en algún momento realizar. Que son las cuatro materias, son muy rohmerianas, incluso las citas, todo. También el espacio en que se desarrolla que es un lugar burgués. Claro, exactamente, el cambio de estrato social, aunque aparecen los personajes populares. Daniel Pérez y Juan Carlos Ramírez que son los que están espiando al personaje principal, a Ignacio, por encargo de la ex esposa que cree que le va a quitar los hijos y quiere tener pruebas. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 257 El personaje popular se expresa a través de la picardía y el ladinismo. El ladinismo que Quintana lo expresaba tan bien, ese lado ladino, me gusta mucho. Me gusta mucho el mundo popular por eso, porque tiene una riqueza, hay algo indeterminado, algo fluctuante, algo aleatorio. Lo no previsible, eso es lo que me interesa que haya en una película. A todos los niveles. Desde luego el mundo popular te provee más de esas coordenadas, es más rico en eso. Por eso siempre me ha interesado más. ¿Le permitías a Quintana que adornara el lenguaje? Sí claro, yo no le reprimía el lenguaje, todo lo contrario, lo alentaba a que usara sus propias palabras. Por ejemplo en El Otro Round cuando llega Daniel Pérez después de una farra, Quintana lo está esperando, mientras tiene una llamada telefónica en la cual le están pidiendo entregar el taller de bicicletas. Y cuando aparece le dice: “y tú llegai despampanante aquí”, por decir: “tú llegai tan campante”. Y a mí me pareció fascinante dejarlo, no corregirlo. No corregía esas cosas, me gusta mucho el léxico popular y verdadero, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 258 por lo tanto siempre busco que eso aparezca en las películas. Sobre todo con Quintana. Está la aparición de la redundancia en el lenguaje. También, de repetir y repetir. Porque eso en la lengua hablada es así. En una película podrá sonar mal y uno tiende a limpiar. Pero no estamos hablando del lenguaje escrito, no estamos hablando de esos guiones pulidos, perfectos. Sino de aquellos en donde está el tráfago del ejercicio de la expresión humana comunicativa. Donde emitimos eso, que incluso parecen ruidos de pronto, no hay comunicación, pero está este flujo de palabras. ¿Cuál es la etapa que más te fascina en el proceso de hacer una película? Me fascinan todas las etapas, me encanta la etapa del guión porque requiere una soledad muy grande y una concentración que me gusta mucho, pero me frustra cuando no lo logro realizar. Por lo tanto yo creo que la etapa que más me fascina es la del rodaje, el momento del rodaje, incluso con dificultades, con cambios a última hora, situaciones inesperadas. Eso es lo que me encanta. Y después ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 259 el montaje también me gusta mucho porque yo me meto mucho en el montaje, de hecho monté casi todas mis películas. O he estado ahí. Entonces son tres etapas: el guión, la realización y el montaje pero yo diría que si me obligan a quedarme con una etapa me quedo con el rodaje. Me llaman la atención en El Zapato Chino los personajes que están en la casa de Quintana que son una especie de vecinos, que acompañan a la esposa. ¿De dónde surgió la idea de instalar estos personajes? Me surgió porque quería ver que había un vecindario, que naturalmente no estaban solos los personajes. Entonces se me ocurrió que podían participar estos personajes, cada uno de ellos tiene algo muy especial físicamente, como expresión, como todo. Era eso más que nada, de completar esta idea de espacio donde vive Quintana con su esposa y lo que hay ahí. Un mundo más abigarrado que siempre ocurre, que tiene ese lado más complejo. Y las cosas chistosas fueron surgiendo ahí. Ahí se me ocurren los gestos transgresores, una cosa un poco lúdica. Siempre me han interesado los juegos, la posibilidad de jugar con las escenas, de evitar aquella cosa convencional en la cual el espectador ya sabe ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 260 todo. Huir del mecanismo, o del modelo dramático. Son formas de huir de ese modelo y de acercarme a otro modelo más próximo de la realidad que de lo dramático, más del espacio real o de las formas de interacción reales, y que por eso es más antropológico y no es dramático. No someto lo antropológico a lo dramático para organizarlo, eso es lo que intento desechar, superar. Porque claro, veo que la corriente Neorrealista ya había roto con eso, entonces el cine moderno tiene que seguir por otra línea. Por la línea que marcó la Nouvelle Vague, el Nuevo Cine alemán. Buscar otras formas de expresión que no tienen que ser necesariamente aquellas de los mecanismos dramáticos que son las del cine como imagenmovimiento. Y por lo tanto, algo ya periclitado en la historia del cine. ¿Tú crees que luego del término de las dictaduras militares en Sudamérica, es posible retomar la senda que había comenzado el Tercer cine y lo que hacía Glauber Rocha, hoy día en el momento que se encuentra el continente? Yo creo, absolutamente. No digo tan directamente, es decir, en repetir eso. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 261 Pero está la herencia de todo eso. Yo creo que no se puede volver atrás en el cine. Cuando se vuelve atrás, tú te das cuenta que en el fondo es un acto inútil. El alma del cine ya no pasa por eso. Eso ya fue explotado, explorado hasta la saciedad, por lo tanto lo que tú tienes que hacer es releer quizás aquellos movimientos que parece que no tuvieron una consecuencia, o una incorporación en el lenguaje cinematográfico. Aunque yo creo que sí la tuvieron. Y desarrollar desde ahí, desde esos gérmenes, esos fragmentos, una nueva concepción. Por eso lucho, o si no, no estaría haciendo cine. Creo en eso, algunos dirán desapareció el cine arte, a lo mejor desapareció la dicotomía cine industrial, cine arte. El cine arte fue absorbido. Pero dentro de las posibilidades del cine de hoy día, sean más o menos industriales, tú puedes crear un espacio donde ese otro cine de experimentación verdadera, ya no solo en lo formal sino en todos los terrenos, pueda tener una enorme cabida, yo creo en ese cine, ese cine es el cine por el cual hay que apostar, es el cine que el espectador quiere cada vez más y va a querer cada vez más ver, creo yo. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 262 En Chile, la maquinaria de producción inclusive gubernamental de apoyos estatales sigue estancada en formas de ver el cine que para mí están un tanto obsoletas. Yo estoy de acuerdo contigo, están periclitadas, son la caducidad total. Pero esos modelos se siguen levantando como los modelos canónicos, como que no entienden que hay otros, lo otro es como riesgoso, no se sabe, no hay un conocimiento. Quizás lo que hay que hacer es un esfuerzo por hacer entender que existen otras posibilidades y que esas posibilidades pueden ser tan buenas y tan exitosas, porque claro, siempre se está buscando el éxito, que las platas del estado reditúen, en fin. Pero vemos que muchas de esas películas que representan esos modelos canónicos no han redituado y tampoco han tenido rédito en lo artístico que es donde debería medirse la inversión del estado, en la calidad o en la repercusión artística de esas películas, verdaderamente, por la crítica en los festivales, por los caminos nuevos que están generando. Entonces, creo que ahí hay una tarea por hacer, hay una lucha por dar. Todo eso creo que tiene que ver con el esfuerzo y con la lucha, con un cierto combate. Pero claro, si no discutimos esos otros modelos entonces simplemente pareciera que todos estamos de acuerdo, que el asunto es solamente a quién le dan los medios para hacer una historia y que ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 263 la forma no se discute, que la forma tiene que ser siempre la misma, y eso yo lo considero, por decir lo menos, inaceptable. ¿Tú fuiste alumno de Raúl Ruiz? Sí, fui alumno de Raúl Ruiz en la Universidad Católica, ahí lo conocimos, nosotros incluso lo llevamos como profesor, lo propusimos y él estuvo con nosotros un tiempo, un año. Él tenía dos cursos con nosotros. Ahí pude ver su trabajo, sus métodos de dirección también, nos habló de ellos y viendo sus películas deduje otras cosas. Ahí me empecé a interesar por el tipo de cine que hacía Ruiz, que era evidentemente innovador dentro del cine latinoamericano. Había otros trabajos semejantes, Nelson Pereira dos Santos, el mismo Glauber, pero no eran tantos los que estaban en una línea tan rebelde, tan inasible como el cine de Ruiz y eso es lo que me gustaba, esa cosa inasible, que tú no podías decir, ah esto está dentro de estos parámetros, sino que había algo que parecía que iba en un sentido y cambiaba de rumbo, o sea una mayor complejidad, esa complejidad que se expresaba por el plano secuencia y la profundidad de campo me interesó mucho. ¿Cómo es tu relación con los directores de fotografía? ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 264 En general cuando hago un guión y lo termino, tengo una impresión fotográfica, tengo una impresión de los lugares que quiero. Y para mí eso está relacionado, qué lugares y qué luz están unidos. Ahora, siempre pienso en cierto tipo de luces, pienso siempre en luces donde haya la menor distorsión estetizante posible. Pienso en un principio que no hay que cambiar las fuentes de donde proviene la luz. Las fuentes naturales o artificiales, las que sean, mezcladas o no, con temperaturas de color distintas, como sea, pero que no habría que cambiarlo. Miro los espacios, voy a los espacios si es que puedo, si tengo acceso a ellos y ahí empiezo a pensar en los planos también. ¿Qué tipo de planos? ¿Voy a mover la cámara? ¿No la voy a mover?, esto es plano general o un plano medio, un plano americano, más o menos, de qué ángulo, de qué altura. Y ahí empiezo a sentir un poco la luz, pero no me quedo con esa concepción realista de la luz. Siempre estoy pensando como pasamos gato por liebre, esta luz que parece realista, vamos a tener ciertos rebotes y darle una sensación de extrañeza. Eso lo vimos con Toño Ríos por ejemplo en Los Deseos Concebidos. Le dije, quiero que toda la luz de Los Deseos parezca realista, pero que siempre tenga un elemento de extrañeza que se va acentuando en los momentos nocturnos, en los espacios ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 265 nocturnos de las casas y a medida que se desarrolla la historia eso tiene que ser cada vez mayor. Toño captó muy bien esa concepción y le dio esa sensación lumínica a través de temperaturas de color distintas, de mezclar por zonas en que el personaje va pasando, de un cierto trabajo con las sombras y la luz. Y eso creo que quedó muy bien expresado. En El Zapato Chino había más precariedad, porque no teníamos muchas luces, había que ser más ascético. Había que iluminar como se pudiera, de manera que las cosas quedaran bien, había un interés por un cierto gusto estético. Que hubiera un control de escritura tanto en la luz, como los encuadres, la actuación, en todo. Ya después, en El Cautiverio Feliz también, con los exteriores, con las luces que teníamos de atardecer o de amanecer, ahí fueron buscadas, momentos específicos. Estábamos esperando el momento porque sabíamos que el sol estaba ahí y que esas sombras eran de tal tipo y eso lo repetíamos un poco en los interiores. Ese fue el trabajo con Pedro Micelli. Hay un trabajo bien cercano, y con algunas referencias, a veces. No soy muy amigo de mostrar referencias, porque a veces los directores de fotografía se pierden. Pero algunas referencias pictóricas o de luces de autores que me gustaban como Antonioni, o de otros, que los veíamos, mira esto se parece, por aquí va la cosa, pero vamos afinando, vamos llegando a algo que sea muy ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 266 personal de esta película. Siempre me he preocupado que cada película tenga su identidad lumínica. Por ejemplo en El Cumplimiento teníamos cero luz, muy poca, generalmente andábamos con 6 u 8 kilos de luz que para cine es poco. De repente en escenas nocturnas en el hotel ahí tuvimos más reflectores, teníamos de repente 15 o 20 kilos, pero era excepcional. Por lo tanto no movía tanto la cámara, tenía que cerrar el espacio y trabajamos una cierta concepción de la luz también que era particular de esa película, que no se parece, aunque tiene que ver, a la de Los Deseos Concebidos. Y así la luz de Cuídate del Agua Mansa es una luz mucho más cercana a Rohmer, a la luz francesa, más iluminado, más luminoso, sol, una película de verano, una película sin sombras. Depende del proyecto, depende del tipo de película. Esas películas más nocturnas tienen sombras, que son El cumplimiento y Los Deseos Concebidos. Son películas subterráneas, en fin, de realidades más soterradas. Y en cambio en películas como la que yo te nombré o como El Otro Round tienen una cosa más solar que lunar. Da la impresión de que tú quisieras utilizar más música y tu ascetismo te dice que no. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 267 Ocurre, sí. He insertado, pero después me preocupa la cuestión de los derechos, como lo van a tomar. Me gusta mucho la música popular, o sea la música que sale de las radios porque es lo que inunda el espacio acústico en que vivimos. Vivimos rodeados de esas músicas, de ruidos y sirenas y cosas así, si estoy en la ciudad es lo que yo quiero escuchar. Siento que eso es parte de la imagen, del espacio, eso crea el espacio. En Los Deseos Concebidos se acuerdan la escena del final, cuando R está tendido en la cama, se escucha una música de Franco Simone, pero muy bajito saliendo de una radio. Eso está todo puesto, está todo trabajado porque incluso esas escenas se hicieron sin sonido directo, yo hice una postsincronización de los pasos y todo eso, y no se nota, pasa como directo también, y todo fue recreado. Recreado como una sensación ambiental, no una música que está ahí directamente. Es decir una música diegética pero que viene del fuera de campo. Me interesa nuevamente la cosa del fuera de campo y las cosas que ocurren desde el fuera de campo acústicamente son muy interesantes. Y la otra música son las músicas incidentales que a veces utilizo. Como la de Rachmaninoff en El Zapato Chino, haciendo una serie de modificaciones que hice yo mismo, para armar una especie de partitura serial, que me gustó mucho lo que quedó. Y la música, poca música que utilicé de Tomás Lefever en Los Deseos Concebidos, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 268 pero que creo entra en momentos muy precisos, esa música de cello, me gusta mucho. Y la música que hizo para El Cumplimiento José Miguel Miranda y para Cuídate del Agua Mansa. En general tendía o creía que no iba a usar mucha música pero al final termino usando en esas películas harta música y en el Cautiverio… también. ¿Te encargas de los encuadres de forma directa? Me encargo de los encuadres. Cuando hay por ejemplo, movimientos de cámara, empiezo el movimiento y hago los ensayos, le digo al camarógrafo, déjame hacerlo a mí, veo los ensayos, veo a los actores, corrijo a los actores por cámara, y corrijo el encuadre y le digo, ese es el encuadre preciso. Este es el punto de partida, aquí sigue y aquí llega, llega a esto. Soy bien maniático con los encuadres, creo que es mi función, salvo que el director de foto me proponga, o el camarógrafo me proponga algo interesante. Por ejemplo en Los Deseos Concebidos estaba Jaime Reyes que hizo la cámara, con él hablaba sobre los encuadres y Toño Ríos hacía la foto solamente. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 269 Si él director de foto me sugiere un cambio y me dice, mira qué te parece esto. Si me parece lo acepto inmediatamente, digamos, tampoco soy tan llevado a mis ideas, así tan atrabiliario. Pero si creo que tengo razón voy a insistir, pero fíjate por esta razón creo que es mejor este. A veces me convencen, tienes toda la razón, es mejor tu encuadre y aceptémoslo, hagámoslo así. No me preocupa tanto, lo importante es que esté bien. Así que estoy siempre muy metido con el trabajo de cámara. Y después lo dejo al camarógrafo, obviamente ya no lo molesto más y me dedico a ver la escena desde fuera a ver cómo funcionan los actores, que está pasando, si hay algunas caídas, algunos problemas de ritmo, sobre todo con los planos largos siempre está ese problema del ripio, es un momento en que las cosas se te desinflan, entonces hay que ver qué hacer, como lograr crear esa tensión, que no se note tampoco para el espectador. Son difíciles los planos secuencia, pero cuando tú logras un plano secuencia tienes muchos minutos de película, eso es lo maravilloso, resueltos ya. ¿Siempre me ha obsesionado el momento preciso, intuitivo del corte, tienes tú alguna manera de determinar en qué momento cortar los planos en general? ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 270 Instinto, yo soy instintivo para dirigir actores, instintivo para poner la cámara, no me pregunten mucho, entro así como en un estado hipnótico, llego y digo, esto aquí. ¿Pero porqué? Porque aquí es, y miro y es ahí, sé que es ahí. Lo mismo me pasa cuando estoy en el montaje digo, aquí tiene que ser el corte, en general tengo seguridad en eso, no trepido mucho. No ando buscando, probemos esto, ahora con el Avid. Antes el corte en la moviola había que pegar los fotogramas, tenías que pensarlo un poco. Ahora puedes tener muchas versiones. No me gusta tener tantas versiones. Si el corte es acá, yo sé que el corte es acá. Después, en general, no digo que siempre, no soy infalible, pero creo que la intuición es muy importante. El sentido del ritmo, ¿dónde está?, ¿qué está afuera? Y ahí voy apretando la película y después rápidamente llego a otros cortes más precisos aún. Porque después me doy cuenta en el contexto del total que sobra eso, o que faltó algo, porque a veces también es al revés. O a veces un cambio de lugar, cambio mucho las escenas de lugar, las pruebo, esta acá, pongámosla acá mejor, va a funcionar mejor. Esos traslados a veces son buenos, a veces no. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 271 Como dice Godard quizás el momento del corte en toda su magnitud es lo más crucial a la hora de hacer una película. Es que Godard es un cineasta de montaje, el reedita sus películas. Yo diría que soy un cineasta más bien del rodaje. Creo más bien en el plano. Por lo tanto para mí, a los cortes son pocas las posibilidades que le dejo después. Salvo esos cambios, esas inversiones que les digo. Pero en general no hago muchos cambios. Ya sé cuando estoy en el rodaje dónde voy a cortar, dónde terminó el plano y donde va a empezar el otro, ya lo tengo bien intuido. Creo que si no hay intuición no hay creación, simplemente. No puedes crear de manera tan mecánica, todo reflexionado. No, eso me aburre. Para mí la intuición es una reflexión rápida, como un sobrevuelo centellante, un destello, un rayo. Es como pensar a doscientos mil kilómetros por hora. Miles de operaciones rápidas. No es que sea algo ciego sino que es una reflexión rápida una meditación enorme que el cerebro te permite, por algo está la intuición. ¿No te gusta ensayar mucho? No, muy poco. No quiero, porque los actores mecanizan todo, se aprenden la improvisación de memoria. Entonces voy y les digo no, vamos a cambiar, esto no funciona porque se empieza a notar ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 272 falso. Se empiezan a repetir los movimientos, se miran a sí mismos, son auto escópicos y por lo tanto empiezan a pensar sus movimientos. No se mueven espontáneamente. Busco que esa situación de psicodrama, de verdad, aparezca en el momento de la representación. Los sacudo. Nunca muestro todas mis cartas, nunca le digo que voy a meter otras cartas y en el momento del rodaje saco esas cartas, entonces los actores quedan sorprendidos. Y ese remezón, esa adrenalina que sale ahí es la que aparece en la película. Si lo hago al comienzo todo es pavo, se desvanece y queda flojo, repetido. En cambio en último instante sacas algo, haces un pequeño cambio, algo que desconcierte un poco a los actores. ¿Qué futuro le ves al cine chileno? Va a depender de las luchas que se den, de los modelos que triunfen o no, yo creo que hay un modelo que hoy día se está desmoronando. Qué bueno que este Ruiz en chile porque Ruiz ayuda a la otra posición, a la posición verdadera. Encuentro que es muy importante que Ruiz aparezca porque él representa una opción muy radical de un otro cine, de muchos otros cines. Creo que esos otros cines, esa radical alteridad respecto a ese modelo canónico es lo que ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 273 hace falta, es lo que se necesita para entender que Chile puede tener una cinematografía interesante a condición de que se permita que esos talentos y que ese otro cine pueda expresarse. Y no éste cine ritualista, devoto de las convenciones y de las formas absolutamente previsibles. Hay que alimentar esa otra actitud, de tal manera que se perfile ese otro cine. Sentimos que no existe discusión instalada entre los mismos cineastas sobre estos temas. Porque este es un país en que todo quiere evitarse, es un país evitativo, un país de negadores, todo se niega, todo se evita. Todo se hace imposible, todo es discreto en tono menor y por lo tanto no hay fuerza, no hay ganas ni energía. Eso es lo que se siente, una cosa demasiado ordenada. Esa cosa demasiado ordenada viene de las escuelas también. Te enseñan a ordenar todo, a presentar todo antes de hacer la película, tienes que tener todo previsto: la venta, las ventanas, distribución, storyboard. Háganlo pero deséchenlo como Bresson. Él hacía sus storyboard, llegaba al set y decía esto no sirve. ¿Qué va a hacer? Le preguntaban. No sé, voy a meditar. Y empezaba a pensar hasta que finalmente esos storyboards quedaban ahí muertos, era ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ • Gonzalo Perucca, Orlando Torres | 274 letra muerta, era algo inútil. No digo que no haya que hacerlos, es un buen ejercicio hacerlo, pero también es un buen ejercicio no seguir los storyboards. Falta fuerza, energía, una cuestión de irracionalidad de encontrar otras cosas, otros materiales y no ver lo que hizo el otro y repetirlo y seguir un mismo modelo dramático atrasado, estetizante, fuera de la realidad, es terrible. El síntoma es ese, un síntoma de mucha decadencia. Tenemos medios ahora pero estamos en decadencia, en lo creativo hay una decadencia de sensaciones. De lo que te transmiten, hay sensaciones muy pobres. ISSN 0719-4579 ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS GABY GONZÁLEZ En pleno proceso de finalización de su más reciente trabajo cinematográfico y también concluyendo un texto que aborda la producción audiovisual de Raúl Ruiz, el cineasta Cristián Sánchez cuenta detalles de Tiempos Malos, largometraje que retrata el mundo del hampa, y que lo enfrentará por primera vez a un público masivo, luego de tomar la decisión de estrenar comercialmente el film. Hablemos de Tiempos Malos ¿Cómo podría definir la película? Tiempos Malos es una comedia dramática que tiene elementos trágicos, tiene ese vaso comunicante de la comedia que oculta o envuelve un elemento trágico y que a mí me gusta mucho. Y en términos más específicos ¿Cuál es el o los temas de la cinta? El tema del narcotráfico es la superficie de Tiempos Malos, pero una película se define por ciertas emociones, signos y fisuras Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 276 extraídas del universo representado. Ciertamente los personajes de Tiempos Malos están insertos en el mundo del narcotráfico, pero nunca se está hablando de ello. Lo que interesa en el filme son sus relaciones o interacciones personales, que se transforman rápidamente. Ángel (el protagonista) es un adolescente que decide quedarse a vivir con sus vecinos porque su madre y hermana se van al sur luego que su padre muere, al parecer asesinado. El tema es el de las transformaciones o trastornos de una familia que prácticamente se disemina en una diáspora, o mejor dicho, la absorción de una familia pequeña o nuclear a una de carácter casi tribal, una familia extendida y compleja, que se constituye como un clan donde todos los valores están invertidos. Es decir, el familiarismo edípico burgués da paso a una irrupción nómada de acciones que arrasan todo afán protector y hacen del espacio del clan un lugar poseído por otras fuerzas. Sin embargo este acto liberador tiene un límite, donde todo lo que parece extremadamente seductor es en verdad tanático y se vive maníacamente al borde de la muerte pero que, a fin de cuentas, no es todavía una liberación sino una nueva forma de prisión, una nueva forma de cautiverio, otro inaparente cautiverio feliz. Lo que importa en Tiempos Malos son las relaciones humanas que se van resquebrajando en la medida que ocurren ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 277 acontecimientos destructivos y trágicos que el protagonista contempla. ¿La película se centra en la visión del protagonista y su inserción en ese ambiente? El personaje protagónico está ahí inmerso en ese mundo, participando plenamente. Sin embargo, se nota que está pensando en algo distinto a lo que ocurre, aunque no se sepa que es. Es un misterio. Generalmente la visión o el punto de vista de la película se sitúa desde Ángel, pero a veces tomo a los guardaespaldas o la perspectiva de la familia. Esto incluye a Eulalio (el capo), Blanca (su esposa), a sus tres hijas, también Vitoco, el hijo termocéfalo del capo, y Beto, su brazo derecho. Está además la Tato (antigua mamá), el mayordomo, Lito Quintana, Cheto, el chofer del capo que pocas veces está sobrio. Hartos personajes, hartas historias… Tiempos Malos tiene muchas líneas temáticas entrelazadas, es una película compleja con muchas capas de sentido. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 278 ¿De difícil comprensión? En lo narrativo es lineal, es decir, se sigue fácilmente, pero tiene varias lecturas dependiendo del público. Hay un personaje que es la niña errante, que aparece con una madeja de lana roja y que si el protagonista la siguiera se perdería más en el laberinto. Es una especie de Ariadna desorientadora que conduce a ninguna parte. En ese sentido es la aparición de la tragedia griega, el mundo griego arcaico trasladado a este mundo chileno. Esta construcción e incorporación de personajes legendarios sacan a la película de un cierto naturalismo silvestre. Pero al mismo tiempo la niña errante expresa una figura del mundo indígena chileno y latinoamericano. Una huérfana absoluta que atraviesa los tiempos moviéndose sin ton ni son y que por eso mismo puede guiar al abismo o al infierno. ¿Lo infernal? Lo infernal es muy importante en Tiempos Malos. De hecho, que el protagonista se llame Ángel ya te dice algo. Los personajes están sumergidos en un infierno, en uno que parece el cielo pero que es un infierno, así como son los infiernos en Chile, lindos, amables, cautivadores. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 279 Además Ángel es un personaje que expresa la integridad y la inclinación a valores e intereses superiores. Por ejemplo le interesa la filosofía y lee- por casualidad- a Nietzsche. No sabemos que partes lee, cómo lo integra en su vida, pero lo está leyendo. Se inspiró en una novela para desarrollar Tiempos Malos… Fue un punto de partida. Sucede que yo tengo mis propios intereses y me es muy difícil trabajar con ideas de otro, pero había decidido ser un poco estratégico y tomé la novela Chicago Chico de Armando Méndez Carrasco. Ya había leído otras novelas de él y me gusta porque retrata muy bien el mundo del lumpen, de los bajos fondos, del hampa. Pero al releerla me di cuenta que no podía mantener la historia en la época que aparecía en el libro (años 30’, 40’), entonces decidí quedarme con el espíritu de la novela e inventé otras situaciones y personajes. ¿Y el nombre “Tiempos Malos” qué quiere decir? Me gustó el título porque en coa quiere decir ocasión peligrosa, momento de definición, que puede ser bueno o malo, pero es un momento en que algo va a pasar. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 280 ¿Tiene que ver con el momento en que se encuentra usted con esta película? Si claro. Además tiene que ver con mostrar una realidad del mundo del hampa sin caricatura. Mi idea no era mostrar este mundo con una visión naturalista, desde la burguesía, porque las construcciones sobre este mundo tienen que ver con la realidad, pero a mi juicio lo reflejan de manera superficial. Quise ir más allá y empecé a investigar, a leer la crónica roja, a conversar con personas que provenían de ese mundo, pero sentía que todo ese esfuerzo resultaba epidérmico y entonces decidí a confiar en mi intuición y me lancé a escribir y una vez que el guión estuvo escrito lo confronté con las opiniones de algunos de mis no-actores que me entregaron siempre elementos significativos de la cultura popular. ¿Cómo fue el proceso de rodaje? No quería que los actores se aprendieran de memoria los textos. De hecho, tuve problemas con algunos de mis asistentes de dirección porque les pasaban los textos a los actores. Preferí y prefiero ensayar la situación en el lugar preciso de la acción y crear ahí mismo los diálogos, es una especie de dialéctica entre lo escrito ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 281 y el hallazgo del momento. Al principio de la preparación de cada escena había dificultades porque cuando un no-actor quiere actuar es penoso. Lo importante fue que se olvidaran que estaban actuando y así se dio una dinámica en que se fueron sintiendo envueltos en la situación y desde ahí buscando una perfección. Filmamos muchas tomas de cada plano, en algunos casos hasta 19 o más, porque me gusta manejar los diálogos de este modo. ¿Improvisando? No lo llamo así porque yo estoy metido en el ensayo, agregando y quitando elementos que se me ocurren en ese instante. ¿Siempre fue ese su modo de trabajo? Sí, yo diría que desde Esperando a Godoy lo adquirí, porque ese método te permite construir diálogos y situaciones más reales. Los actores en general no están acostumbrados a este sistema, ellos esperan a un director más distante, que no interviene mucho, sino que aprueba o rechaza. Yo me muevo, pongo o saco objetos del set, intervengo en el encuadre y por supuesto en los diálogos. Para mí el arte de la dirección en cine tiene que ver con estar presente en todo. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 282 Me gusta indicarle al director de fotografía la altura de cámara, la angulación, el encuadre. Para mí eso es decisivo, ahí se juega el éxito de una toma, de una escena. Si fuera músico también estaría metido en la música… (risas) ¿Cuánto tiempo se tardó en escribir el guión? Escribí la primera versión el 2001, pero trabajé varios años puliendo detalles. La escritura misma no me demoró más de tres o cuatro meses porque había estado elaborándose en mi cabeza mucho tiempo antes. Traté de poner una gran cantidad de cosas que me importaban. Muchos años sin hacer película hacen que uno quiera ponerlo todo, son como diez películas en una (risas). ¿Qué tipo de detalles hay en esta cinta? Hay referencias a distintos aspectos de nuestra civilización, sobre todo del mundo griego antiguo, pero esas referencias culturales no son meros adornos sino que funcionan en el universo donde existen esos personajes. Ulises, por ejemplo es un personaje que se dedica al “cambiaso”, hace trueques, vende y compra objetos. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 283 Está en el dominio de la comunicación y el intercambio, que incluye el traspaso de información, pues también a través de él llegan a quién es el soplón que los está delatando. Además la película tiene una línea humorística que no pierde, incluso en las situaciones más violentas y desgarradas. Es una mezcla entre drama y humor y es éste el que al final prevalece con una visión optimista que es propia del mundo popular. Es una imagen de Chile, en que en medio de las situaciones más trágicas la gente se está riendo. La gente se ríe igual, pase lo que pase, y mejor si lo que pasa es terrible. Los mejores chistes salen en los funerales, por ejemplo. El desastre le permite al chileno fortalecer su identidad y eso está aquí, esa identidad encontrada en medio del desastre que llama a la risa. Extrañaba todo lo que implica hacer una película, hace más de diez años que no rodaba… Claro, siempre extraño rodar. Me encantaría ser como Raúl Ruiz y filmar todos los días. De hecho, tengo muchos guiones sin rodar y me encantaría que acá hubiera industria, casas productoras. Me gusta mucho la situación de rodaje, pero si bien el año 1998 fue la presentación de mi última película (Cautiverio Feliz) entre el 2001 y 2003 filmé una película en formato digital que se llama ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 284 Camino de Sangre, con recursos de fondos concursables de la Universidad de Chile. Ahora voy a tratar de grabar la segunda parte, Sangre en el Camino, en la que los mismos personajes pasan del siglo XIX a la actualidad, de repente eso pasa y nadie sabe por qué ocurre… pero pasa. Hay que ver la película para saber por qué. Ese proyecto lo voy a terminar una vez que se cierre el ciclo de Tiempos Malos. Ya hay 50 minutos grabados. Entonces no es tanto tiempo que he estado alejado del cine. Por otro lado no vivimos en un país en que haya posibilidades de producir de manera menos espaciada. ¿Hay alguna fecha, tentativa al menos, para el estreno de la película? No tengo fecha clara de estreno. Ni siquiera me he topado con el problema de distribución porque no he terminado la película. Si tuviera los recursos para la posproducción, porque no los tengo asegurados, tal vez lo pensaría, pero filmé con fondos asignados del Fondo de Fomento Audiovisual que cubrían solamente el rodaje. Cerramos esa etapa, y después que regresé de Stanford University donde dicté un curso trimestral de cine y literatura hicimos un montaje off line provisional en DVD con el que pude ganar el Work ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 285 in Progress del Festival de Cine de Valdivia. Los recursos de servicios en Chilefilms que obtuve los hemos estado usando porque la película venía de ese transfer provisional. Ahora tenemos finalmente el transfer definitivo y estamos en la parte de selección de material, de armado de escenas y tratando de mantener el montaje con el que ganamos Valdivia porque me gusta como idea. ¿En qué estado está el proyecto en la actualidad? La situación actual es esa. Además estoy invitado a dar una conferencia en Talent/Campus y a participar en el BAFICI (Festival Internacional de Cine Independiente de Buenos Aires), pero no a competir porque en rigor el filme no está terminado, pero llevaré una copia en betacam digital. La única diferencia sustancial con la versión de Valdivia es que ahora va una narración off del protagonista, un elemento nuevo que se incorporó. Como todavía no tengo recursos asegurados para las siguientes etapas, pienso buscar alguna fórmula de coproduccion, pero no quiero perder el control de la película porque creo que tiene un potencial muy grande, tiene un elemento popular de llegada al público que le asegura una comunicación exitosa y como creo en ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 286 esa llegada, protejo las decisiones artísticas finales de la película. Además por si la película llegara a redituar, y creo que eso va a ocurrir, prefiero ser cauto y mantener el control. Por lo mismo he sido cauteloso, buscando fondos que me permitan terminar la película pero manteniendo mi visión y mi independencia como productor. Éste será su primer estreno comercial… Sí, antes no había tenido interés de estrenar comercialmente y por una razón muy simple: mis películas están hechas en 16 mm y era muy caro pasarlas a 35mm. Se daba esa circunstancia y además que una vez realizadas no me interesaba más por ellas y me bastaba que circularan en festivales y pequeños circuitos de cine arte. Esta es la primera película que va a tener una relación con el público que va a pagar su entrada por verla. ¿Está nervioso? No, para nada. Estoy muy confiado, a pesar de la crisis mundial tengo gran confianza en mi película. Además he tenido buenos feedback no sólo de la gente de mi equipo y amigos, sino del crítico ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 287 Javier Portafouz, de la revista El Amante que estaba en el jurado del WIP de Valdivia. Él escribió sobre las películas que le tocó ver en la competencia en progreso y le dedica una crítica muy elogiosa a Tiempos Malos, que ciertamente es una película muy chilena, con nuestro singular léxico, que es como otro castellano, pero él la entendió perfectamente. Así que creo la película no sólo va a funcionar acá sino también afuera, es muy sólida. ¿Y la competencia con películas extranjeras? El año pasado ese fue un gran tema para las producciones locales que estrenaron comercialmente. La competencia de películas extranjeras es importante, pero creo que quizás fueron películas que eran buenas pero que fueron estrenadas en momentos inadecuados. Tal vez hubo falta de tacto o de visión en ese sentido. Yo no sé las razones por las que fracasaron comercialmente las cintas de mis colegas y deploro que eso haya pasado, pero también hubo algunas a las que les fue muy bien en términos de premios como La Buena Vida de Andrés Wood. Lo negativo es que el fracaso comercial va creando la sensación de que al público chileno no le gusta el cine chileno, lo que no es cierto. Vaya a saber qué vaivenes hay, qué cosas, es difícil decir por qué ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 288 algo fracasa. Lo que si sé es que voy a tener éxito, eso si que lo tengo claro, estoy muy optimista. ¿Por qué tanta confianza en esta ocasión? Sé que tengo actores fantásticos como Fernando Farías que está notable como Eulalio, el capo de la familia; Claudia Pérez que interpreta a una de sus hijas en un rol de tremenda fuerza; Rodrigo Muñoz que emociona en su papel, sacando una veta dramática, fiero, distinto a lo que hace habitualmente. Me encanta lo que realizó Lorene Prieto como una madre seductora que compite con su propia hija y la locura de Ángela Vallejo, la hija menor de Eulalio. También está Loreto Aravena, que es la actriz revelación de la serie Los 80’. Nosotros filmamos con ella antes, y este es un papel absolutamente distinto y está extraordinaria. Si a eso le sumas el talento de algunos hallazgos que darán que hablar y de la aparición de mis no-actores de siempre, que algunos ya tienen varias películas en el cuerpo, se armó una cosa extraordinaria, un gran fiato en la puesta en escena. Los actores se contagiaron de la capacidad de improvisación, de la chispa permanente de los no- actores y éstos se pusieron a la par del ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 289 rigor y la disciplina de los actores profesionales y eso creó un clima especial, de mucha gracia y vitalidad y a la vez de cierta elegancia. ¿Cuándo cree que estará lista? Quiero terminarla luego, en cuatro o cinco meses, porque quiero separarme de ella, pensar y hacer otras cosas, ¿por qué no una segunda parte de Tiempos Malos? Que podría ser mucho más delirante. Está demasiado contento con esta película… Sí, de hecho creo que es mi mejor película, donde he manejado mejor los ritmos internos, la puesta en escena, la planificación, los diálogos. Estoy sobre todo muy contento con la actuación, la dirección de arte, la fotografía y el sonido. Tiempos Malos es un buen camino hacia un cine popular y exigente a la vez. Pero también se encuentra trabajando en un libro sobre la obra de Raúl Ruiz ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA A CRISTIÁN SÁNCHEZ SOBRE TIEMPOS MALOS • Gaby González | 290 Sí y no es para nada sencillo porque la obra de Ruiz va creciendo día a día, además que sus películas son de muy difícil acceso. ¿Incluye sólo su trabajo en cine? Todo, también lo que hizo en televisión. Para mí una de sus mejores películas es la Recta Provincia que pienso que marca algo importante en su carrera. Mi admiración por la obra de Ruiz me llevó a escribir algunos ensayos donde esbocé algunos conceptos sobre su modo de hacer cine y su escritura fílmica. Luego estas ideas que tenía en la cabeza fueron extendiéndose, proliferando hasta concluir en el plan de un libro de análisis y quizás de teoría del cine. Espero estar a la altura del cine de Raúl que es, sin lugar a dudas, uno los grandes creadores del cine moderno. ISSN 0719-4579 ESPERANDO A GODOY: LA RECONCILIACIÓN CON LA REALIDAD HÉCTOR SOTO GANDARILLAS Publicado en Revista Primer Plano, nº5, verano de 1973 El siguiente artículo es el producto de una informal entrevista con tres alumnos de la Escuela de Artes de la Comunicación que, en enero pasado, rodaban el largometraje Esperando a Godoy. Con vanas experiencias en el cortometraje, Luis Cristián Sánchez (Cosita, Así hablaba Astorquiza, El que se ríe se va al cuartel), Rodrigo González (Cosita, Así hablaba Astorquiza, Chile tudéi, Caperucita Roja) y Sergio Navarro (21 de junio, Tanto, tantos y tanto) decidieron realizar un proyecto que, cuando menos, promete originalidad, tanto por la estrechez de los recursos destinados como por la concepción que lo preside. La revista agradece las gestiones de Rodrigo Maturana para hacer posible este breve reportaje. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ESPERANDO A GODOY: LA RECONCILIACIÓN CON LA REALIDAD • Héctor Soto Gandarillas | 293 No tienen -es cierto- muchos pergaminos que defender. Ellos mismos lo reconocen y por eso no hablan con la voz engolada. De repente, claro, como cualquier mortal al fin y al cabo, se entusiasman con los nombres de Brecht, Bazin o Benjamin, pero al promediar los discursos siempre salen con los disparates más oportunos. Y la eventual pedantería, entonces, se disuelve en la humorada. Sus edades oscilan entre los 21 y los 27 años y tal vez esto lo explica todo. Estudian en la Escuela de Artes de la Comunicación de la Universidad Católica de Chile y se llaman Luis Cristián Sánchez, Rodrigo González y Sergio Navarro. Egresaron este año con el título de realizador en el bolsillo, un cartón profesional que acaso no les sirva ni para cubrir el hoyo de una pared. Pero no se inquietan mayormente y, por las dudas, uno de ellos declara estar resignado a manejar un taxi. De alguna manera, por último, hay que vivir. Cultivan una irreverencia canónica y comparten un saludable desprecio por el cine. Apenas lo frecuentan. Casi nunca retienen el nombre de una película y a menudo se olvidan de los realizadores. Admiran a no más de cuatro o cinco, e invariablemente el nombre de Godard les provoca algunos reflejos que comprueban que no todo está perdido en ellos. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ESPERANDO A GODOY: LA RECONCILIACIÓN CON LA REALIDAD • Héctor Soto Gandarillas | 294 Ingresaron a estudiar cine como quien se matricula en lenguas muertas y ni siquiera asistió a una misa en latín. Perseveraron allí porque el asunto no les pareció tan deprimente y porque, de alguna manera, les entretenía. Y si se los apura un poco, hasta reconocen que en esta actividad uno puede expresarse a sí mismo. Y esto podrá parecer un lugar común, seguramente lo es, pero –qué diablos- de alguna manera hay que darse a entender. Decidieron co-realizar un largometraje -Esperando a Godoy- y en eso estaban cuando se los entrevistó en un rincón del Casino Unctad. Habían rodado como 10 de las 21 escenas de un filme que se empinará sobre las dos horas de proyección y aún no estaban corrompidos por la gravedad ni por la elocuencia de los cineastas profesionales. Reconocen haber madurado bastante. Quizás no lo suficiente, pero en todo caso bastante. Trabajaron durante un mes -o algo asíjunto a Raúl Ruiz y cual más, cuál menos, los tres quedaron helados. Como después de una ducha fría en una mañana invernal. El chapuzón los afectó tanto que experimentaron una decantación repentina. Consideran las películas que han dirigido o en que han participado como simples borradores no muy afortunados y dieron un salto adelante que, más que a evolución, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ESPERANDO A GODOY: LA RECONCILIACIÓN CON LA REALIDAD • Héctor Soto Gandarillas | 295 huele a ruptura. Elaboraron entonces una teoría original: la del “cinecanguro”, donde cada obra es un salto sin solución de continuidad con la anterior y donde cada película se resuelve sin perder los escrúpulos del caso para parecer consecuentes y unitarios. Como no pretenden dar ningún testimonio personal, favorecer ninguna causa, obtener ningún premio ni arreglar, por el momento al menos, ningún entuerto, se desenvuelven con entera libertad, refugiados en su juventud y en una suerte de irresponsabilidad creativa que alterna la pasión profesional con el descubrimiento, el aprendizaje, la reflexión, la autocrítica, la “tincada”, la imaginación, todo ello ejercido en forma casi voluptuosa. AI cabo de tres años en la Escuela, expresan estar políticamente más radicalizados y más conscientes de la imposibilidad de determinar los límites entre lo real y lo irreal, en el nivel personal y creativo, respectivamente. Sus primeras películas se plantearon en la frontera realidad-imaginación con esa falsa seguridad para discernir donde está lo uno y dónde está lo otro que da el autoengaño, la inmadurez y, por qué no decirlo, el desconocimiento de las posibilidades del cine. Por lo que cuentan, el largometraje que están realizando es al respecto harto más ambiguo. Lo han trabajado como un juego y allí, paradojalmente, reside su seriedad. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ESPERANDO A GODOY: LA RECONCILIACIÓN CON LA REALIDAD • Héctor Soto Gandarillas | 296 Es, desde luego, un buen punto de partida. La lección de que la realidad es más rica que la imaginación, y cualquier tentativa de ésta por superar a aquélla termina quedando corta, habría evitado en el plano local, de ser aprendida a tiempo, presumidas experiencias seudorrealistas que pretendiendo escandalizar no escandalizaron y, además, sesudos manifiestos que queriendo interpretar políticamente un hecho, ni siquiera lo vislumbraron. En esta depuración de Sánchez, González y Navarro, la influencia de Ruiz, claro, es considerable y oportuna. Pero ellos mismos advierten ciertas distancias. “El cine de Raúl -expresan- es más bien barroco. El tiende a sobresignificar al máximo, a crear la mayor densidad de significaciones posibles. Nosotros, en cambio, en nuestra película, estamos tratando de depurar al máximo. De despejar líneas para quedarnos sólo con las que sustancialmente nos interesan. La mayoría de las escenas están trabajadas con dos actores, con una puesta .en escena bastante esquemática, con poquísimos movimientos de cámara, influidos un poco por Rohmer y su película Mi noche con Maud que nos gustó mucho. La cámara fija, el tiempo real... etc… todo eso. Antes creíamos que éste era un cine tradicionalista; ahora nos damos cuenta de que es un cine de ruptura, un cine que reconcilia al cineasta con la realidad y lo sustrae ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ESPERANDO A GODOY: LA RECONCILIACIÓN CON LA REALIDAD • Héctor Soto Gandarillas | 297 de un código rígido, de una forma de hacer cine que es estéril y vacía”. Es un medio que sustenta todo lo contrario, que jura que con dos tomas de un campamento popular y tres fotos del “Che” Guevara se obtiene cine revolucionario, o que con una parejita y un atardecer (si es en colores, mejor) se hace cine político, es lógico que semejante concepción sea resistida y parezca una extravagancia mayor, fuera de época. “Eso -se argumenta- no es cine sino teatro filmado”. Para Luis Cristián Sánchez lo que ocurre es que a casi todos los cineastas nacionales les interesa la cámara y no lo que ocurre dentro del cuadro. Y exagera: “Yo personalmente soy admirador de la filosofía Zen y creo que el realizador debe desaparecer, debe quemarse ante la realidad, quemarse ante las cosas. Y esto es lo que nos interesa: quemarnos como personas, como realizadores, como cámara, frente a la realidad. La película en que están empeñados es -un poco a la manera de Ruiz- una mirada crítica sobre el proceso sociopolítico chileno. O mejor dicho, una mirada autocrítica, en cierto modo pedagógica, que políticamente no se plantea en términos incondicionales y que abandona el esquema del spot publicitario de izquierda, actualmente en boga. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ESPERANDO A GODOY: LA RECONCILIACIÓN CON LA REALIDAD • Héctor Soto Gandarillas | 298 EL ARGUMENTO Aunque no tiene mayor sentido reseñar el argumento de una película, siempre resulta de interés adelantar algo al respecto. En el caso de Esperando a Godoy, de Luis Cristián Sánchez, Rodrigo González y Sergio Navarro, esta curiosidad puede terminar defraudada, porque la obra, más que una historia, es un permanente enfrentamiento ideológico entre tres grupos, donde el diálogo cumple un papel importante y decisivo. Durante el actual Gobierno y antes de octubre de 1972, en una población de Santiago, Juan Luis Godoy (Juan Carlos Moraga), un obrero que incursiona en la literatura, tiene un enfrentamiento verbal con un novelista (Waldo Rojas) que, representando a Editorial Quimantú, ha ido a proponer a los pobladores un taller literario donde estudiarían a Luckács, el realismo socialista, superestructura y conciencia de clase y otros asuntos teóricos. Godoy, para quien lo importante no es la técnica sino la creación, discute esta oferta pero, en definitiva, el proyecto se aprueba. A todo esto, el novelista integra un grupo de intelectuales de izquierda que, planteándose el problema de las carencias de nuestra realidad, preconiza la creación del Ministerio de la Cultura. Para presionar al Gobierno en este sentido, deciden tomarse una parte del Ministerio de Educación, donde, casualmente, también se ha reunido un grupo de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ESPERANDO A GODOY: LA RECONCILIACIÓN CON LA REALIDAD • Héctor Soto Gandarillas | 299 intelectuales democratacristianos que prepara el recibimiento a un connotado correligionario que durante la administración pasada se desempeñó como agregado cultural en un país europeo y que recién vuelve al país (Kerry Oñate). Todos ellos están en una cuerda un tanto nostálgica de todo lo que significó la Revolución en Libertad. Entre ambos grupos de intelectuales, el novelista opera como nexo, ya que mantiene relaciones con los DC, sus antiguos camaradas, y ahora pertenece a la izquierda. Él es quien protagoniza con unos y otros sesiones de autocrítica, puesto que todos han terminado reuniéndose en el mismo edificio del Ministerio de Educación. Allí también va a parar el obrero Juan Luis Godoy (velado homenaje a Jean-Luc Godard), que trabaja en una construcción cercana, y quien por su condición proletaria ha sido mistificado por ambas intelectualidades hasta la exageración. A Godoy, por la novela que ha escrito sobre el proceso político chileno, le confieren un premio literario en la Sociedad de Escritores de Chile. Allí tienen lugar nuevos enfrentamientos, porque ese mismo día alguien ha fallecido y hay quienes quieren realizar el funeral y quienes desean celebrar la ceremonia de entrega del premio. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ESPERANDO A GODOY: LA RECONCILIACIÓN CON LA REALIDAD • Héctor Soto Gandarillas | 300 Nuevamente discuten el novelista y el obrero laureado. Godoy vuelve a la población para entregar algunos ejemplares de su novela a sus vecinos y allí nuevamente se encuentra con el novelista quien, ante una especie de tribunal popular, pide sanciones en contra de Godoy porque muestra desviaciones pequeñoburguesas y ha decidido abandonar la población. Pero, en definitiva, su solicitud no es acogida. Godoy, entonces, se va y entra en relación con una niña que tiene algo de Ángel exterminador. Destruye a todos los hombres que con ella se relacionan. Mientras tanto, el taller literario organizado por el novelista no ha ido nada de bien y la conducta de los intelectuales que lo frecuentan comienza a provocar roces con los pobladores. Estos terminan pidiendo su clausura. A Godoy, mientras tanto, tampoco le ha ido mejor. Su idilio ha fracasado y ha terminado su relación con la niña, después de lo cual decide volver a la población. La escena final lo muestra en ese empeño, caminando a muy mal traer y solitario por una carretera, de vuelta a lo suyo. ISSN 0719-4579 APUNTES SOBRE EL ZAPATO CHINO ENRIQUE LIHN Texto publicado en ocasión del estreno de El zapato chino en 1979 1. Antecedentes en el cine de Ruiz. Diferencias y semejanzas. En la línea de la fundación de un imaginario realista 'en el orden de los procedimientos fílmicos. 2. Dividendos de las precariedades de un cine “manufacturado”; los condicionamientos de la tecnología internacional (extranjera) harían imposible “El Zapato Chino”. Es en ésta circunstancia en que reside su valor. 3. Aproximación a la técnica como contenido igualado con la forma. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | APUNTES SOBRE EL ZAPATO CHINO • Enrique Lihn | 302 4. Ruptura desde el realismo de los procedimientos mismos — de los verosímiles fílmicos del largometraje comercial. Esta flexibilidad del cine hecho a mano, permite aquí detectar — dialécticamente los estereotipos que torturan el cuerpo social, en una zona del mismo, particularmente incierta, la libre andadura de “El Zapato Chino” sigue el rastro ortopédico de lo real . 5. De la impotencia a la castración. ISSN 0719-4579 EL FILM JUSTIFICA LOS MEDIOS (a La Bicicleta con cariño) EDUARDO YENTZEN Publicado en revista La Bicicleta, marzo de 1982 ROLLO 1. En tus películas ¿estás ajustando cuentas contigo o tienes una proposición explícita a los demás, a la sociedad, a los jóvenes, al hombre? Tengo la impresión que las dos actitudes no son excluyentes. Ajustar cuentas: bonito término sacado directamente del cine negro. El código del hampa es draconiano. Pero nadie espera reacondicionar su pasado en vendettas imaginarias. Una película no es el lugar ideal para ajustar cuentas, tiene una voluntad de servicio público. Mi filosofía es simple: 'la ropa sucia se lava en casa, aunque a Sandrico le duela". "Ahora voy a decir lo contrario... Los Deseos Concebidos es una vendetta, pero una vendetta fantástica, porque nadie piensa seriamente que pueda serlo, ni siquiera yo... Y todo empieza de la siguiente manera: La juventud no es un tesoro, es una época dura, Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL FILM JUSTIFICA LOS MEDIOS (a La Bicicleta con cariño) • Eduardo Yentzen | 304 violenta, donde uno conoce (mejor, vive) el amor, la amistad, la crueldad, la lujuria, la traición, la muerte. En fin, nada ajeno le es humano, todo es extrañeza, angustia, náusea, introspección; uno no se lleva bien consigo mismo, uno está en pie de guerra con uno... se desgarra, se desangra en luchas intestinas, interinas... Porque uno no acepta a uno, quiere ser solo, está atacado de monismo... Por eso uno es el lobo, el verdugo de sí mismo, no sabe que también es otro... "Y esa singular entidad que dice llamarse uno, a veces se enamora, o pocas veces no está enamorado, pero como se vive en estado de guerra, todo termina en lo imposible que es donde todo comienza… "El espacio limitado del colegio no hace sino reforzar esta mirada que apunta (y que dispara) al horizonte, ¿qué busca la mirada?: seguramente las líneas de fuga. Porque del colegio hay que querer fugarse si se es generoso, la cimarra no es un vicio, es un don. Porque si la cárcel es el colegio del delincuente, el colegio es la cárcel del pensamiento y si a su vez el pensamiento es la cárcel de la fantasía, ésta a su vez es la cárcel del corazón, que es la cárcel de la acción, etc. ‘‘Volver al colegio es volver a los 17 después de vivir un siglo… ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL FILM JUSTIFICA LOS MEDIOS (a La Bicicleta con cariño) • Eduardo Yentzen | 305 "Así es que a tiritar Rector Candia, Sr. González, profesor de química que me pilló copiando por ahí por quinto año. Vayan poniéndose en filita señores que les llegó el juicio final, a ver cómo pasan la prueba global, no hay pero que valga, no hay derecho a pataleo señores que' aquí se aplica la ley de Moraga... no se pase de vivo Sr. González, vuelva a la fila o le llamo al apoderado, y a propósito, contésteme una cosita: ¿qué pasó con las cuotas del centro de padres?... contésteme esta otra: ¿al centro de alumnos quién lo eligió?... "Se vuelve con alegría... un sentimiento de libertad me mueve, me conmueve, por más que obsesivamente sueñe que no logro pasar el examen de matemáticas, que mi fraude ha sido descubierto… ¿Cómo he logrado pasar?... Ahora lo sé, jamás podré salir, jamás he salido". ROLLO 2. ¿Crees posible que preocupaciones personales resuenen en los demás? ¿Qué lo haría posible? Mis preocupaciones personales son mis preocupaciones personales. Pero no son mi Personal Stereo... ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL FILM JUSTIFICA LOS MEDIOS (a La Bicicleta con cariño) • Eduardo Yentzen | 306 "Yo no invento la materia que trato. Cosecho lo que no he sembrado. La regla es simple: estar atento a que en cualquier momento salta la liebre... "Lo verdaderamente personal es la mirada, la voz... nadie renuncia a la voz propia en nombre del respeto a un material (llámese esto realidad o verdad... Y si el arte distorsiona lo que mira no lo hace por mala educación sino por un respeto superior„_ y es una lástima que este respeto superior no sea nada, sino el respeto al no-respeto (alguna regla hay que tener) es una verdadera lástima, pero el arte se apoya en este malentendido, destruye lo aparente real en busca de lo esencial". ROLLO 3. ¿Te sitúas en la vida luchando contra algo, empujando para que algo suceda, anhelando algo? Como casi todo el mundo, empujo para que suceda, pero no sucede... por el momento. ROLLO 4. ¿Cuáles crees que son los fantasmas de Chile? Chile es una hipótesis. Hay que probarla. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL FILM JUSTIFICA LOS MEDIOS (a La Bicicleta con cariño) • Eduardo Yentzen | 307 ROLLO 5. ¿Existe el bien y el mal en tus películas? ¿Hay un ojo moral que enjuicia: absuelve o condena? Mi ojo es inmoral. Tiene sus tribunales en receso. ROLLO 7. En tus películas son recurrentes las situaciones cerradas. En Los Deseos Concedidos el peregrinaje del protagonista es como una espiral descendente hacia la soledad. ¿Es ese tu infierno? Pongámonos ahora los hábitos... partamos de la idea que la dialéctica es nuestro Dios... ”Si recurro a situaciones cerradas, es decir, a la puesta en soledad del individuo en el mundo, es justamente porque mi intención es hablar del inagotable deseo de apertura que con más o menos intensidad todo hombre reclama para sí... Y es que sólo somos hombres, en el sentido de la soberanía, si nos arriesgamos a vivir intensamente nuestros límites. "Erre, el héroe de Los Deseos Concebidos, vive de esa actitud. "Un héroe es siempre un ser enfrentado a un destino. El héroe consciente sabe qué debe sacrificar para lograr sus propósitos, pero también conoce la recompensa: la justicia, el cielo, una sociedad mejor... de este modo el dolor no es nada en relación al objetivo. En ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL FILM JUSTIFICA LOS MEDIOS (a La Bicicleta con cariño) • Eduardo Yentzen | 308 su sacrificio cede un bien (el no-dolor) para obtener otro bien; es una generosidad que tiene un límite, el de una inversión, el límite que todo cálculo de un beneficio impone. "Entonces el héroe completo no intenta influir ni ganar nada, su sacrificio se realiza improductivamente y él lo único que se tiene verdaderamente es la vida (si es que se la tiene) y esa vida se entrega, entonces el héroe que pierde la vida en el más alto sentido de palabra, la pierde en el ascenso a las cumbres del ser que es también el descenso más intenso. "Esto es Io que espero, un héroe que no sea un ejemplo (el moralismo es un egoísmo) sino en el sentido de llevar en sí el desprendimiento más grande, de la aventura de habitar humanamente este mundo, sin regreso, sin lugar, sin esperanza, pero feliz, deslumbrado como un niño". ROLLO 8. En una entrevista anterior responsabilizabas a tu última película de tu separación con tu mujer. ¿De verdad crees eso? No culpo al cine, no culpo a nadie, esto no es el juicio final... Moraleja: en el fracasar no hay engaño o no por mucho fracasar se amanece más temprano. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL FILM JUSTIFICA LOS MEDIOS (a La Bicicleta con cariño) • Eduardo Yentzen | 309 ROLLO 9. ¿Crees que la difusión pública de la vida privada de un artista tenga algún sentido, o se trata sólo de un recurso comercial? Habría que pensar, como Breton, vivir en una casa de cristal. "Por otro lado, todo es recurso comercial. La vida privada, la vida pública, la obra, el artista mismo. No se escapa del mercado, salvo error u omisión". ROLLO 10. ¿Por qué crees que se elige a los artistas para eso? Son buena gente. Se prestan de carne de cañón. ROLLO 11. A pesar de que no existe mayor tradición para tratar el desnudo en el cine chileno, tú pareces hacerlo con bastante soltura. ¿Cuál es tu acercamiento a él, como actitud personal y como trabajo con los actores? El desnudo no es la panacea. Una película no es mejor o peor porque haya o no haya desnudos... "Lo que me interesa no es el desnudo artístico, ni el desnudo porno, cada uno a su manera reprime la atracción por la mujer. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL FILM JUSTIFICA LOS MEDIOS (a La Bicicleta con cariño) • Eduardo Yentzen | 310 "El desnudo debe tener toda la angustia de una trasgresión. Toda la soberanía de una moral arrasada. El desnudo es la posición decisiva, cuando la última barrera que obstaculiza al deseo ha cedido; con la ropa ya en el suelo, el desnudo es el instante de la promesa... La promesa en su sentido más carnal... También tomo el desnudo en un sentido más amplio. En una película hay que desnudarse, hay que exponerse, permanecer en la línea de fuego, car'e palo". ROLLO 12. Los diálogos coloquiales de los personajes, con titubeos y lugares comunes, ¿son "retratos" de la realidad o contienen otras proposiciones? Amo los lugares comunes. Las frases hechas me encantan porque como ya están hechas no tengo que hacerlas. Soy flojo. Aplico la ley del mínimo esfuerzo… ROLLO 13. ¿Qué persigues en última instancia como hacedor de películas? Ante todo, poder hacerlas. En segundo lugar hacerlas cada vez mejor y en última instancia hacer amigos, quiero tener un millón de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL FILM JUSTIFICA LOS MEDIOS (a La Bicicleta con cariño) • Eduardo Yentzen | 311 amigos... desde el cine uno le toma el pulso a la vida, la gente, la bulla, se conocen calles, se mira y se escucha... se es un poco antropólogo o antropoloco o antropófago, se es principiante del sicoanlalis (nótese el lapsus, ¿qué será?)… se es físico rasca, biólogo de pacotilla, novelista entre comillas, etc., etc... Pero sobre todo con el cine se va más allá de todo eso". ULTIMO ROLLO. (Invención del entrevistado) Somos de una especie ya extinguida… nos distinguimos por acarrear propósitos por terrenos pedregosos, pantanosos, somos famosos por amar lo peligroso… Nuestra tarea es ardua, enorme, mítica, somos de la raza de Prometeo, de Sísifo, somos los titanes del ring... la idea de no tener nuestra propia Teletón nos pone tristes, nos hace llorar a gritos, lo mismo al oír un grillo cantar en descampado… nos vemos reflejados en el canto sin destino, en el canto divino... somos una raza generosa y cautiva, satánica y ladina... derramamos conciencia con ciencia, con paciencia, no nos damos licencia en la tarea de acarrear... somos una raza generosa, creemos en el paico y en el agua de rosa... "El rumor circula de boca en boca. El cojo se volvió loco, lo montó todo a su antojo... los espectadores "furiosos paran la ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL FILM JUSTIFICA LOS MEDIOS (a La Bicicleta con cariño) • Eduardo Yentzen | 312 proyección, lanzan al cojo contra la pantalla... todos gritan ojo por ojo...la pantalla se raja... el cojo se enoja, tiene sangre en el ojo....los espectadores se alejan... el cojo se raja, la pantalla cojea... la cortina se baja”. ISSN 0719-4579 LOS DESEOS CONCEBIDOS WÓLFRAM SCHUTTE-BALANCE Publicado en el diario Die Frankfurter Rundschau, 12 de marzo de 1983 Los deseos concebidos. Una obra notable por su valentía como por su valor artístico. Un adolecente huérfano que vive –como cosa lógica-, con su tío y su tía (no se sabe cuándo desaparecieron sus padres, ni por qué) es borrado de la nómina de alumnos del liceo. Su hermana luego de amonestarle, apelando a su “conciencia”, se va de la casa. De ahí en adelante, el adolecente se desliza como un paria por la realidad cotidiana de Chile, entre amigos drogadictos que terminan por robar un mimeógrafo, tras la fachada de una vida aparentemente normal. Vuelve a encontrar siempre un lugar donde cobijarse, ya sea una casa o una cama y es testigo y parte interesada e secretas y temblorosas conversaciones, seducciones eróticas, pasiones ocultas y negocios criminales. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LOS DESEOS CONCEBIDOS • Wólfram Schutte-Balance | 314 Como Buñuel, al cual Sánchez rinde tributo en una escena, las obsesiones eróticas hacen de sondas: muestran la temperatura de los deseos reprimidos, con su oculto cosquilleo bajo la piel. De este viaje al final de la noche, partera de pesadillas, va naciendo, gracias a planos totales o semitotales, a tomas de pocos segundos y miradas prohibidas sobre puertas cerradas, un clima de perturbación llevado al extremo en donde se revela el mosaico de una sociedad corrupta y reprimida. Inolvidable: la última escena que muestra una calle vacía en un barrio suburbano, casas destruidas, muros a punto de caerse; en uno se alcanza a ver a la distancia un anuncio luminoso, torcido, con una sola palabra: CHILE. Creo que fue Camus quién escribió que la verdad en el arte entra en punta de pies. En Los deseos concebidos de Cristián Sánchez, la verdad llega a nuestros ojos como un rayo de luz por el resquicio de una puerta entreabierta. Una obra del rango de El ángel exterminador o Los Olvidados de Buñuel. ISSN 0719-4579 ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ CONSTANZA JOHNSON Publicado en Revista Enfoque, primavera 1983 ¿Cómo se produjo Los Deseos Concebidos? Bueno, mira, la película se produjo el año 1980. Se empezó a producir en realidad entre diciembre del 79 y mayo del 80. El primer trabajo que hice fue hablar con Guillermo Cahn; se crearon así las primeras condiciones para producir la película, y le presenté un proyecto que quería realizar hacía mucho tiempo. Tenía la idea de abordar el tema del liceo chileno, que creía que la literatura chilena no lo había tocado, ni menos el cine. Es una idea de la que hace años habíamos hablado con Waldo Rojas. Me acuerdo que en el rodaje de Esperando a Godoy, donde Waldo era actor, me decía, “puchas, no existe la película del liceo chileno, realmente, como no existe la novela tampoco, creo que el cine tendría que remediarlo”. Yo siempre me quedé con esa idea, estoy hablando del año 1971, bueno, y cuando surgió esta posibilidad, Guillermo me dijo “sí me interesa la idea, preséntame un guión en dos semanas más”. Me Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 316 puse a trabajar como loco y empecé a reunir un material que yo tenía guardado hacía mucho tiempo, cosas que me habían interesado, incluso algunas escenas ya desarrolladas; yo tenía un antiguo guión que contaba la historia de R, pero no lo había vinculado a lo del liceo sino que esa vinculación se produjo en ese instante; me dije, voy a sintetizar estas dos cosas, voy a tratar esta idea que tengo de un liceo sin personajes –no tenía todavía personajes- y el mundo de estos cabros, de estos adolescentes. Entonces produje una síntesis de estas dos cuestiones. Posteriormente hice una segunda, una tercera, una cuarta versión del guión y una quinta final que fue la que usamos en el rodaje. No teníamos prácticamente medios para producir la película, todo fue consiguiéndose sobre la marcha. Pero ya teníamos la base del guión y Guillermo puso una cantidad de película, no me acuerdo exactamente, pero deben haber sido cuarenta latas, que me alcanzaban para rodarla según lo que yo tenía presupuestado. La otra cosa que conseguimos fue la cámara y el grabador (el nagra). Yo quería una óptica más o menos buena y una cámara blindada, porque iba a rodar en directo, entonces arrendamos una cámara Arri-Flex (B.L 16) que tenía Abdullah; se la arrendamos muy barata. Abdullah se portó muy bien, nos hizo un precio por todos los días que se suponía iba a durar el rodaje. Entonces empezamos a decidir el equipo técnico, a reunirnos, a ver que personas podrían ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 317 integrarlo y finalmente decidimos que Toño (Ríos) iba a hacer la fotografía. Él por supuesto que se interesó en participar, le interesó el proyecto, conversamos mucho antes de la película, del tratamiento del color, de la luz, incluso estuvimos viendo las pinturas de Vermeer. Me gusta mucho Vermeer y yo quería una luz como la de Vermeer; se lo pedí a Toño y él me dijo: “mira, vamos a hacer algo como lo de Vermeer, pero te sugiero estos cambios”, y fuimos llegando a una síntesis: lo que queríamos en el color, en los decorados, cómo íbamos a tratar el vestuario de los actores, en fin, un trabajo muy bueno a ese nivel previo. Paralelamente yo seguía trabajando en el guión, seguía haciéndole modificaciones, cambios, cosas que no me gustaban todavía. Desarrollando algunos diálogos, algunas escenas y también empezamos a seleccionar a los actores, que era el problema más grave saber qué personas iban a actuar. Ahí se produjo una discusión, porque Guillermo en un comienzo quería actores profesionales. Es que no hay actores profesionales de 17 años, le dije. Topamos con eso: la mayoría de los actores que mueven la película son de esa edad, entonces, no hay caso. Le dije: te propongo el siguiente método, hagamos una selección, que sé yo, ponemos un aviso en el diario; teníamos una oficina en la Alameda, entonces ahí con el equipo de producción y el de dirección, entrevistamos a 500 personas durante una semana. Empezamos a hacer ficheros con la gente que ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 318 nos tincaban para distintas cosas, y los que más nos tincaban los entrevistábamos de nuevo, les hacíamos una serie de pruebas y preguntas. ¿Y para los roles protagónicos, tu tenías una idea preconcebida de cómo debían ser físicamente? Mira, yo no tenía una idea física de cómo quería que fuera R, por ejemplo, pero sí una idea de lo anímico, de la personalidad, del temperamento, sabía que tenía que ser más introvertido que extrovertido, sabía que tenía que hablar menos que más, sabía que tenía que ser reservado, que tenía que tener una mirada que interesara, que hubiera algo de mucha sensibilidad en él, de mucho pudor, de mucha contención. Y casualmente nosotros estábamos viendo una obra de teatro en el Goethe Institut, y había un cabro que estaba mirando la obra, que era amigo de uno de los actores y ese cabro era Andrés Aliaga. Inmediatamente me tincó por la pinta, por el modo de hablar, de moverse. Entonces lo llamamos y hablamos con él: no, perdón, miento, ni siquiera lo llamamos, sino que yo me quedé con la idea, pasó el tiempo, y yo hablé con este actor que yo conocía, del grupo Piralé. “Oye, dile a tu amigo que me interesa para la película”. “Este cabro –me dijo- se fue para Chiloé”. Me quedé con ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 319 la idea, seguíamos trabajando, seleccionamos a otros actores que nos servían y de repente me llama un día: “Soy Andrés Aliaga –me dice- no sé, tú pensabas, te parece”. Estaba super nervioso. Vino para acá, le costaba hablar, pero yo inmediatamente tuve la impresión de que era justo lo que andaba buscando. Le dije, yo creo que tú eres el actor, quiero trabajar contigo, inmediatamente, estoy seguro que tú eres la persona. ¿Ya se comportaba como R? Ya se comportaba como R, ya había algo esencial en él que a mí me gustaba absolutamente. Además me di cuenta que podía fotografiar bien, que tenía fotogenia. Yo sabía que iba a crecer con la cámara, pero tenía que probarlo; entonces empezamos a trabajar, hicimos pruebas en video, respondió muy bien en todas las pruebas. Había otras alternativas que yo tenía de R, que las fui viendo en su desarrollo. Los cabros trabajaron tres meses conmigo y con Juan Cuevas. Nos reuníamos dos otres veces a la semana, a hacer trabajos de varias horas. ¿De actuación? ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 320 Sí, pero era muy entretenidos, porque eran juegos de improvisación donde les cambiábamos las reglas del juego sobre la marcha. Entonces es entretenían mucho los cabros y se hicieron muy amigos. Se formó un grupo, varios grupos, habían como 20 o 25 y de ahí yo seleccioné actores para papeles protagónicos, a los cabros del centro de alumnos como Jaime Ferrer, que era un pintor y no llegó a la selección. Curiosamente todos los de los papeles protagónicos llegaron por recomendaciones de personas, o los descubrimos accidentalmente. ¿Y este actor que representa el personaje Mansilla, que también tiene un rol protagónico en El Zapato Chino, lo habías pensado para Los Deseos Concebidos? Mansilla es mi debilidad; Quintana es mi alter-ego, mi otro yo, mi doble, es el doctor Jekill o mister Hyde. Es que Quintaba había trabajado conmigo no sólo en El Zapato Chino; había trabajado también en Vías Paralelas donde hace el dueño del Bar de los Doce Apóstoles, donde se comen a los clientes. Esa película se filmó el 75, a principios del 75. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 321 Ahora pasando a otro tema ¿Qué problemas has tenido de distribución con tu película? Todos. ¿Por qué no se ha exhibido más? Se va a exhibir ahora, es que yo la estaba guardando. No quería exhibirla, tirarla así, porque sí, porque hay que darla. Bueno, durante el verano hicimos una prueba, se dio en la Universidad Católica durante ocho días. Bastante bien, a pesar de que no tuvo casi publicidad. Y habían muchas películas, era el fin de año, se hacían recuentos anuales, se estaban dando muchas películas importantes. Sin embargo, tuvo una cantidad aceptable de público que me dejó conforme y la reacción fue buena. Y ahora probablemente se va a dar en Septiembre en la Católica. Mira, fundamentalmente el problema es el hecho del 16 mm; tú sabes, las salas en Chile no tienen equipos de 16 mm profesionales, significa un desbarajuste, porque las máquinas de 16 no están hechas para muchas horas de proyección, entonces se queman las ampolletas, se pararían en medio de la función. Es una cosa que liquida todo profesionalismo, entonces tú puedes hacer una o dos funciones. Esa cantidad de funciones que hicimos en la Católica fue heroico realmente, que no ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 322 pasaran desastres, que todo funcionara más o menos bien. No hay máquinas profesionales en 16 mm como hay en Europa, en México o en otros países, donde el 16 mm está incorporado a las salas, entonces tienes alternativa de darlo en 16 o en 35 mm. ¿Has tenido experiencia de buenas proyecciones en 16 mm? Claro, en Francia las proyecciones fueron excelentes y en Alemania estupendas, con máquinas profesionales, entonces digamos que ése es el problema fundamental de distribución. Pero ahora en la Católica vamos a tratar de darla algunos días. Por otro lado, acaba de ser vendido a la Televisión Alemana, así es que se están recuperando costos. La estación de Colonia la compra. También hay la posibilidad de que otras 5 estaciones de la misma cadena la compren. Con esto los costos disminuyen, no es una película en que todo haya sido pérdida. Desde luego he tenido otras retribuciones que las materiales, en orden de la crítica afuera, como la de Schütte, del Frankfurter Rundschau que cita Antonio Skármeta en su artículo de HOY, que es un crítico bastante importante. A propósito, esa era otra pregunta que quería hacerte: en general, la crítica chilena y el público corriente, exceptuando al público joven, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 323 no han recibido muy bien tu película; y a diferencia de esto en Biarritz y en Berlín tuvo una muy buena acogida. ¿A qué se debe esto? No sé, yo creo que habría que deslindar algunas cosas. Yo no estoy seguro de que toda la crítica chilena no le guste la película o haya opinado mal. Mira yo creo que lo que hay es una actitud escéptica, indiferente, una actitud no sé, descomprometida, es como una mirada superficial de ciertos críticos a los cuales les resto todo mérito dentro de la crítica, porque los considero con un grado de ignorancia bastante alta disfrazada por supuesto con un barniz de cultura. Creo que se remiten solamente a tomar revistas que vienen de afuera, a leer las críticas ya hechas sobre las películas, entonces como están acostumbrados a eso, se desorientan frente a un producto nacional que no venga con una especie de aplanadora publicitaria, y como siempre, ellos se dejan seducir por la publicidad que hay detrás y no por las obras reales. Entonces, justamente por eso es que reaccionan de esa manera. Desgraciadamente son también producto del sistema. Pero no los meto a todos en la misma colada, haya excepciones. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 324 ¿Ahora, respecto a la crítica de afuera? Yo creo que la crítica afuera es muy seria. Lo que yo pude percibir en el festival de Berlín es que la gente en Europa no opina porque sí. La gente opina cuando tiene algo que decir, y sabe muy bien lo que va a decir, y lo que quiere decir, o sea, hay precisión, hay capacidad de análisis, hay perspicacia. La gente es capaz de sentarse y ver una película y al margen de lo que hayan dicho o del programa que esté leyendo, sabe sacar sus propias conclusiones. Es decir, ellos han sido capaces de ubicar la película en el contexto cultural en que está inserta, lo que ocurre con poca gente en Chile, salvo la gente de sensibilidad y el público joven. Yo he tenido una excelente experiencia hace poco en la Escuela de Comunicación donde yo hago clases. Ahí la vio público joven, y te digo, no es gente que tenga cultura cinematográfica, ni que esté predispuesta en absoluto a este tipo de cine, al contrario. Es gente que ha visto mucho cine norteamericano, un cine contrario a esto. Y sin embargo la película les impactó y la siguieron durante toda la sesión, tanto que yo creo que ha sido una de las mejores proyecciones a que yo haya asistido en el sentido de ver cómo la gente participaba, cómo era capaz de completar la película, de rehacerla en su cabeza, y me lo dijeron después. Estaban estimulados. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 325 ¿Se sentían, de algún modo, identificados? Muy identificados. ¿Les tocabas temas que para ellos eran importantes? Exactamente, yo creo que en la película hay problemas de ruptura generacional también. Mi visión del mundo está ahí… Yo me puse en la mirada de R. No quise ser el autor que está por encima del personaje y lo manipula a diestra y siniestra, sino que de alguna manera yo estaba, desde la visión de R. Yo me mantuve en ese punto de vista, y por esto es porque le toca a la gente de 16 hasta 20 o 30 años ¿no?. Yo creo que ese es el grueso del público que puede entender la película, porque están más abiertos, y por supuesto, también el público que tiene mayor cultura, que tiene mayor apertura, ya no precisamente los cinéfilos. Porque, claro, en mi postura, en mi proyecto cinematográfico, en lo que yo estoy planteando generalmente hay un intento de despojamiento. Y resulta que vivimos en un país súper acomplejado, un país donde los valores de la siutiquería, del arribismo intelectual, del adorno, todos ésos, son verdaderos estandartes. Entonces resulta que a ellos les interesa más que todo esos valores, y cuando alguien habla sencillamente, cuando uno no imposta la voz, cuando uno no hace ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 326 que los actores produzcan énfasis artificiales ni muecas, cuando uno no está lleno de golpes de efecto alrededor de las cosas que trata, entonces se desconciertan. ¿Qué es lo que es esto?, dicen. Es lo que algún día, me acuerdo, dijo Raúl Ruiz, que de alguna manera la gente reaccionaba cuando tú le mostrabas el reflejo de lo que ellos creían ser. La gente quiere una verdad alienada, y en este país eso es lo que se busca, una verdad enajenada. ¿De spot publicitario, tal vez? Claro. No quieren la verdad de sí mismo. Entonces la gente se espanta y dice: ¿por qué se muestran bares en las películas? Lo dijeron con los Tres tristes tigres de Raúl. Los chilenos no somos borrachos. Los chilenos no tomamos. Los chilenos no somos sórdidos. ¿Por qué lo sórdido, ah? Entonces son esos mismos que se golpean el pecho y dicen no somos así, los que justamente participan de nuestras costumbres. Les toca justamente, porque los están descubriendo, les están tocando sus claves. Yo pienso que esa reacción es una reacción de rechazo frente a aquello que te zahiere, que te irrita, que te molesta, que te toca algo que no quisieras ver. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 327 Cierto público corriente encontró tu película pobre en cuanto a la actuación. Creo que esto alude a lo que explican en este momento. Claro. Creo que la gente tiene una idea de la actuación en las películas que para mí es errada. Yo creo que una de las virtudes que tiene la película es justamente la actuación. Es decir la fluidez, la soltura con que la gente se mueve o reacciona espontáneamente; es justamente una de las virtudes del rodaje, que tiene algo mixto entre improvisación y texto fijo, donde fluyen elementos aleatorios, donde la cosa se constituye en una especie de psicodrama, donde los personajes empiezan a funcionar casi solos. Y yo busco que se desprendan de alguna manera de esta manipulación que sería la dirección. Entonces, yo encuentro extraño, muy extraño, que se produzca esa impresión contraria, si justamente la actuación es lo más libre que hay. ¿Eso gustó afuera? Por supuesto que afuera la valoran. Porque, por ejemplo, en Europa, en Francia, hay tendencia a una naturalidad no enfática, sobria. Tú ves las películas de Rohmer, que son de una gran naturalidad, de una gran fluidez. Estoy seguro que a estas personas tampoco les gustaría el estilo de actuación de las películas de ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 328 Rohmer, y dirían que es frío, como lo he escuchado, que no emociona, que no toca, que no hay verdad. Porque están acostumbrados a la retórica de la teleserie; o al paquete comercial norteamericano, lleno de histeria y de Lee Strasberg y de todo esto. Yo creo que no, que cada pueblo tiene su idiosincrasia, y cada pueblo y cada cinematografía tiene que buscar sus propios medios de expresión, y no creo que el chileno sea histérico para vivir ¿no?; el chileno tiene otra manera. El chileno es calmado, es callado, son otros los tempos y es la captación de esos tempos en lo que yo me he interesado para trabajar con los actores, porque son chilenos, y están viviendo en Chile. Entonces, yo no pretendo que ellos actúen como modelos de películas norteamericanas, no pretendo que ellos imiten a Dustin Hoffman. Mala tarea estaría yo haciendo de contribución a mi cultura ¿no es cierto? O crear estrellas a propósito de los personajes. Claro, por supuesto. Yo creo que cada realizador dentro de sus coordenadas culturales va a trabajar un estilo que le parezca el más decantado, el que llegue más a lo esencial de lo que es una manera de ser, de un comportamiento, de un país. Y lo que yo busco es eso fundamentalmente, un despojamiento. Ahora, si a la gente eso le ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 329 molesta, le irrita y le parece como si eso fuera tomado directamente de la realidad, yo le diría que eso cuesta mucho trabajo. A la gente le parece que es lo más fácil lograr el documentalismo. Yo te diría que es lo más difícil, lograr eso, que la situación parezca real. Siempre están las señas del trabajo ahí, las huellas de una manipulación sobre los actores. Una cosa que a mí me desespera justamente en la mayoría de las películas. Esa poca libertad que yo veo en la actuación. Esa robotización de la actuación. A propósito de lo que estás diciendo, que en la actuación se ve una realidad del país, ¿tú dirías que hay una búsqueda de identificar modos de ser de las clases sociales, más que de los individuos? Por ejemplo, el protagonista es sin nombre, sólo una inicial lo define, R. Te diría lo siguiente, y voy a ser muy franco. Yo siempre parto de imágenes, de cosas que asocio, más que de una idea. Nunca parto de una idea preconcebida, de plantear tal o cual cuestión. Esa cuestión va a surgir del tema que se me va armando en la cabeza, pero primero tengo que sentir esa cosa concreta, ya sea un objeto, un decorado, una situación, un personaje, una mirada. Entonces yo construyo, primero que todo, personas, situaciones, seres humanos en situaciones y después busco vincularlos a un entorno social. Por ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 330 lo tanto, es posteriormente que yo establezco a qué clase podría pertenecer. Por supuesto que trabajo con las clases sociales, porque no puedo desconocer que existen y dentro de las clases sociales existen estratos sociales. Y porque soy riguroso en eso, pienso que cada estrato social tiene su habla, su manera particular, su jerga, su modo de ser, su forma de pronunciar incluso. Es decir hay miles de sutilezas que yo creo que el cine tiene el deber de rescatar, porque trabaja con el lenguaje hablado y no puede desconocerlo. Por eso no entiendo películas donde se dobla todo, y todo está a un mismo nivel, donde habla el patrón igual que el obrero. Hablan todos igual esta misma lengua híbrida. Creo que los hibridismos empobrecen el arte. Al contrario, es en la diversificación, es en la heterogeneidad, donde el arte saca partido. Es en esas desigualdades, de texturas, de hablas a todo nivel, donde tú puedes configurar un universo rico y distinto. Por eso es que juego con oposiciones. Oposiciones de clases, de individuos, también dentro de una misma clase, por sus humores personales, por su personalidad, por sus tendencias, por sus temperamentos; creo que hay que armar un arte que sea lo más dialéctico posible donde las oposiciones sean amplias. Sean desde oponer los vestuarios, de oponer un actor con otro, desde los decorados, que también nos dicen cosas. Todo nos habla, todo nos señala, todo es signo, todo significa en el cine. Entonces, el juego es oponer siempre constantemente, porque eso es lo que te da la ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 331 tensión verdadera en una obra, y no necesariamente el argumento, no la estructura dramática. ¿Y por qué el protagonista sin nombre? Bueno, porque no me preocupan los hechos, las reacciones de los personajes, las conductas, sino algo esencial, y R representaba algo esencial dentro de la película, algo que lo destacaba del resto de los personajes, que lo hacía un observador. Él es un personaje que conlleva los restos de una realidad humana, de una humanidad, de una conciencia quizás más desarrollada, de una intimidad que está perdida en el resto del mundo, donde lo automático, donde lo mecánico está dominando la vida, donde los personajes están sumidos en sus actividades y en sus discursos, o en su lógica y en sus razones. Él va más allá de la razón. De alguna manera representa aquello que es la búsqueda de esa intimidad, esa expresión máxima y mínima de una humanidad verdadera, pero que no puede resolverse en ese mundo que le es hostil, que le es distinto. Entonces el personaje tiene que vagar de espacio en espacio él no va a modificar directamente al mundo, sino que está a la búsqueda de su libertad en el sentido positivo del término. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 332 El nombre es por eso mismo esencia, R, es muy simple, una letra no más porque está ligado a esa cualidad de los antiguos con su nombre, que era parte de ellos mismos, no era un símbolo, no era como para mí llamarme como me llamo, que es una simbolización de mi yo… Para ellos era una parte como un brazo, como una pierna. Iba junto a ellos, podía ser conjurado por lo tanto. Al nombrarse se hacía aparecer, se hacía presente, podía ser por lo tanto sometido a los poderes de la magia. Por eso R también tiene esa característica, porque es en cierto modo héroe mítico, representa una síntesis de ciertos mitos antiguos de nuestra herencia cultural porque en el fondo es todo lo que repercute en la conciencia de uno, es lo que a uno se le graba, los mitos culturales y por otro lado los mitos de infancia, los mitos que están ligados a la época escolar que son muchos. Uno vive sumergido en un mundo muy mágico, muy mítico en esa época. Yo intenté rescatar o ver cuáles eran las estructuras más dominantes de esos mitos. Por eso puse a la profesora de filosofía: el mito de la relación del alumno con la profesora, o el mito del alumno perseguido. Este es el universo propio donde el héroe puede desarrollarse, frente a las oposiciones, frente a las barreras; él va a tener que trasgredir ese mundo, pasar por encima, va a tener que demostrar su fortaleza, por último, hay en él algo de la voluntad prometeica, de rescatar algo de la humanidad que está siendo perdida en este mundo, en un mundo donde todo está muy ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 333 desquiciado ya, donde no hay parámetros, donde todo está muy enloquecido, donde una persona puede ser muy permisiva en todo, pero en una cosa, en un detalle, ser absolutamente represiva. Todo puede ser menos eso, y no se sabe por qué; porque es un mundo maniático, un mundo de neuróticos, un mundo que está dominado por reglas fútiles y cuestiones que no pueden se trasgredidas de ninguna manera y no se sabe qué valor puedan tener esas reglas. ¿Y R de alguna manera las trasgrede con su actitud? Sin saber, claro, las trasgredí, sin saber con su actitud generosa no más, por él mismo las trasgredí o provoca reacciones… Lo importante es que de alguna manera R, como dices tú, es un personaje mítico y por otra parte también refleja todos los anhelos de la gente joven, de los adolescentes, porque todos los adolescentes en algún momento se han sentido distintos, se han sentido observadores, se han sentido aparte. ¿Se puede decir que se encuentran en el personaje, lo mítico, lo esencial y lo que refleja a la gente joven, la cosa real; lo real y lo mítico? ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 334 Es que yo creo que el mito es una realización más honda de lo real. Hay algo esencial en el mito que realiza a la realidad en su grado más alto, en su expresión más verdadera. Por eso lo mitos persisten y las realidades son contingentes. Los mitos pertenecen a las esencias y finalmente las realidades pasan, una época histórica se termina. Pero los mitos, ¿por qué persisten a través de distintas épocas históricas? ¿Por qué persisten a través de distintas épocas históricas? ¿Por qué se hacen transhistóricos?, porque hay algo en ellos que subsiste, que toca, hay algo en ellos de la contradicción humana que está ahí muy bien expresado, muy concretizado. Y en este sentido creo que el cine en general nunca ha desconocido el campo mítico, incluso ha creado sus propios mitos y por eso es un productor de mitos. ¿Y de qué manera relacionarías esta película, Los Deseos Concebidos, con el resto de tu producción, especialmente con El Zapato Chino? Mira, yo creo que hay una progresiva decantación del proyecto hacia un pinto, pero son distintas vertientes que se conjugan en una cosa. Por un lado está la especulación a través del lenguaje, o sea, la búsqueda de una ruptura sintáctica que ya está en las Vías Paralelas, ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 335 incluso en El Zapato Chino, para paulatinamente llegar a tierra más firme, a una lengua más personal. Esa era mi idea un poco al tratar el relato de Los Deseos Concebidos: que de alguna manera pudiera llevar esa investigación sobre el lenguaje a un plano más decididamente personal. Si en las otras películas hay más investigación o hay más riesgos asumidos, aquí hay –siento yo- una voz más personal, a través del medio que estoy usando, a través de la forma. Y por otro lado, a nivel del tema o de lo que yo estoy tratando, hay una mayor interacción entre los motivos como si de alguna manera hubiera una mayor limitación de un mundo, como si yo hiciera un corte en el mundo y dijera, voy a tratar estos temas solamente. En las otras películas hay más apertura hacia otros mundos, cosas que se contactas unas con otras, en que todo por lo tanto aparece como más errático, más divagatorio. Claro, en el mismo Zapato Chino Quintana recorre diversos lugares. Bueno, pero R también es un personaje errático… Sí, ocurre acá pero de otra manera. ¿Sabes por qué? Porque el tema que se repite es el mismo; puede que cambie de espacio, que cambie de situación, pero en el fondo lo que estoy ahondando es el mismo tema, es la misma situación recurrente casi, es una misma ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 336 estructura obsesiva que se va imponiendo una sobre otra como bloques por la estructuración que le doy. Pero que sea en bloque no es por relación de causa y efecto. Es decir, a R no le pasan ciertas cosas porque le hayan pasado otras cosas antes. No, son independientes. Cada cosa es independiente, es una mónada. Una situación que yo trato en una parte es una cosa y la que vienes es otra, pero estas situaciones están unidas por un grado de semejanza funcional, funcionan de la misma manera. Como si hiciera una síntesis dialéctica de cada situación, y después volviéramos a revisar lo mismo pero desde otra perspectiva, como ahondándola, como viendo algún ángulo que no ha sido tocado, hasta agotar un tema. Porque lo que yo me había propuesto era un tema y quise agotarlo en el itinerario de este personaje. ¿De alguna manera agotas espacios sociales? Además también porque cada espacio es un microcosmos, y como tú dices, por lo tanto es una sociedad. Es una sociedad en pequeño que está ahí de laboratorio. Por ejemplo, el tema de los jóvenes, de los adolescentes, de los niños sin padres. Si tú te fijas, en la película no existe la presencia paterna, la ley paterna. Es decir siempre la ley está puesta en cuestión, es una ley degradada por un ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 337 lado. O mecánica y represiva, como en el caso del inspector, o ausente en el caso de la casa de Const, donde el padre no existe sino la madre, o inexistente también en la pensión donde el Moro vive con su tía. Donde el único símbolo paterno, el significante paterno, podría ser el ciego, o sea, donde se establece una extraña relación con la niñita. Ley pervertida en la casa del Juez, donde hay una especie de padre que vería con buenos ojos que el hijo sedujera a su mujer, o sea a la madre. Una especie de Edipo que al contrario no se autocastiga por el pecado de mirar, sino por la accidental destrucción del juego voyerista. Toda la película juega sobre el triángulo edípico. Y desde luego, yo mantengo la estructura edípica hasta el final, en la relación de Mansilla, que es un padre, que no tiene que ver con la filiación edípica freudiana, sino que tiene que ver con la filiación que Freud insinuó y que Lacan desarrolló y que es la figura del “perverso polimorfo”. La figura del polimorfismo tiene que ver mucho con el comportamiento latinoamericano: es la figura que justamente representa todos los valores que en Latinoamérica se ven como degradados, la flojera del pueblo, el hecho que tomen, o sea, los no valores son justamente aquellos que el polimorfo acepta como valores, como la picaresca, donde el engaño, donde la macuquería, donde la socarronería, donde esos valores están destacados. Bueno, en Los Deseos Concebidos justamente Mancilla representa esos valores, y por eso quise dotar a R de rasgos edípicos ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 338 como si fuera su revés simétrico, pero de alguna manera hay una curación en él, que va por el encuentro con la realidad. La realidad es la que cura al héroe de sus obsesiones, de sus fantasmas, es el enfrentamiento con esos deseos, con esa cosa fantasmática… Es en el enfrentamiento con sus deseos incestuosos que el niño supera el complejo de Edipo, o sea, es la necesidad imaginaria de matar al padre y de estar con la madre, y él supera eso y llega hacerse hombre por el temor a la castración, por esa razón logra identificarse con el padre. ¿Ésta es la razón del título Los Deseos Concebidos? Claro, esta es la razón del título, exactamente, los “deseos concebidos”. Y la palabra “concebidos” es una palabra muy ambigua, que define dos cosas: por un lado que los deseos no han sido realizados sino “concebidos” o “imaginados”. O sea es una palabra que te sitúa en un terreno intermedio entre las dos cosas, o sea puedes optar por dos cuestiones: concebir como la madre que concibe a un hijo, y retomo un poco lo que decía antes, la curación de R a través del polimorfismo de Mansilla, de este padre a medias que asume de repente esas tareas. Cuando le conviene no más. Cuando lo manda que no mire, por ejemplo, por no es el padre ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 339 absoluto en el sentido de la protección. Es la curación de R por ese lado, es la curación a través del perverso polimorfo, es de ahí que el Edipo aprende a no ser represivo, aprende a ver el mundo, que es más amplio que él mismo. Se desneurotiza, es una terapia de desneurotización diría yo, la que sufre R. Y por otra parte, porque los personajes son complejos y están dibujados en sus contradicciones es que Mansilla es un personaje secretamente edipiano en el fondo, por eso si tú te fijas, es el personaje que a pesar de todas estas actitudes maquinadoras y siniestras, es masoquista, se siente culpable y paga sus culpas con expiaciones y penitencias, como por ejemplo la imagen de las piedras, y tanto es así que termina suicidándose. Y el suicida es justamente aquél que se siente culpable por determinados actos. Y él se siente culpable por el rapto de la niñita, y por sus deseos incestuosos con ella; porque la diferencia de edad obviamente establece una relación de padre e hija ¿no? En tus películas hay un sentido de humor oculto. ¿Tiene esto que ver con toda esta desvalorización de los personajes? Yo creo que hay más bien una visión no uniforme del tratamiento. Y justamente lo que me interesa a mí es mezclar tonos distintos, que la película sea planteada en tono de comedia. Me ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 340 gusta mucho el tono ligero que tiene, humorístico, donde la chacota, donde la sorpresa está pululando y salta como una ruptura; por ejemplo, cuando la mamá de Const se saca el zapato y le pone el pié encima a Mansilla, justamente cuando Mansilla le está hablando de estos deseos reprimidos que se tienen. Todo este tipo de cosas me gustan mucho, porque hacen saltar al espectador cartesiano, le doy una información subrepticia que él desearía no computar, que él desearía pasar por alto, claro, él desearía creer que la señora no se va a portar como una seductora frente al mayordomo, que lo hiciera frente a un señor burgués sí, eso está bien pero no ante el mayordomo. ¡Por favor! Pero yo trato eso, siento que los míticos deseos ocultos de las señoras burguesas son ésos, porque son aquéllos que no harían jamás, porque los deseos siempre son fantasmas. Si no serían posibilidades reales y una de las cosas del deso es justamente eso que lo torna imposible, el fantasma que se persigue inútilmente; entonces los hago declarar aquello que no querrían declarar, los hago cometer lapsus, como el lapsus de la señora cuando le toca la rodilla con la pierna a Quintana, cuando le dice que no puede más en esta casa. Eso para mí son reacciones inconscientes que no violan por otro lado el personaje, porque tiene tal grado de contradicción o de locura, que perfectamente ese personaje puede reaccionar así. Por supuesto que estas reacciones casi nunca son gratuitas. La mamá de Const le dice a R que puede ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 341 llevar a la casa mujeres, puede hacer orgías, pero la mariguana de ninguna manera, es intolerable para ella. Entonces, si tú te fijas, ese mismo personaje tiene mucha relación con la dueña de la pensión, que actúa igual pero a un grado extremo, cuando le dice “aquí no fuma nadie” porque es enferma de la limpieza, y por otro lado tira el cigarrillo al suelo; entonces la contradicción entre el orden maniático, por un lado, y por otro la desobediencia de las mismas normas que está tratado de imponer, es insostenible. ¿Como el director de escuela que se lustra los zapatos? Claro, esa actitud fetichista de los zapatos, es el orden que está ejemplificando ahí, en el acto de lustrar los zapatos, ¿no? Un orden irrisorio. Saliéndonos de tu película, ¿te sientes cercano al cine de Ruiz y qué conexión has tenido con él? Yo creo que Raúl Ruiz es un gran creador de cine. No lo digo yo, lo dice Cahiers du Cinema. Es uno de los cineastas modernos más importantes, más prolíficos de hoy. Tiene un mundo, incluso diría hay muchos Ruiz en el cine que ha hecho, digamos hay muchas ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 342 tendencias en Ruiz. Lo que vi en Chile es muy distinto formalmente a lo que vi en Europa, a pesar de que hay continuidad como él mismo lo dice. Él no ha cambiado esencialmente, aunque creo que ha evolucionado desde un tipo de puesta en escena naturalista hasta llegar a un tipo de puesta en escena mucho más barroca, donde utiliza todos los elementos del lenguaje cinematográfico en forma muy libre, en forma muy expresiva y como un comentario fílmico sobre las ficciones de otros. Pero, ¿te influyó de alguna manera? Por supuesto que me influyó, nos hizo clases un tiempo en la Escuela de Artes de la Comunicación, tratamos de aprender lo más posible de él, nos ayudó y nos aconsejó mucho en Esperando a Godoy, y le agradecemos, personalmente yo le agradezco y me siento cercano de algunas de sus posturas teóricas. Sobre todo porque él tenía posiciones teóricas derivadas de André Bazin que me interesaban mucho: por ejemplo, cómo de alguna manera la realidad o el objeto a filmar te determinan la manera de filmarlo. Eso es algo que está en Bazin. Hay algo en la realidad que el cine es capaz de revelar, esto es la fotogenia. La fotogenia es el proceso que permite revelar los objetos o los seres, es algo que el cine agrega, que no ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 343 está o está latente en la realidad; agrega a los objetos una posibilidad de revelación más que de manipulación, es lo que sostiene Bazin. En un momento tomamos muchas cosas de Raúl, pero poco a poco fui decantando mi propia postura, y pienso que en este momento no es tanto lo que tengo que ver con su cine. ¿Y respecto de otros cineastas chilenos, cómo te ubicarías tú, en relación a un Littin, un Caiozzi, por ejemplo? No conozco casi nada de la obra de Miguel afuera, sólo referencias. Ha hecho varias películas, tiene sus propios proyectos, su manera de ver la realidad, las cosas, el cine. Hace un cine en general de corte épico con connotaciones políticas, y que es un camino legítimo. Yo no creo en la homogeneidad o en la exclusividad, o sea que el ideal de una cinematografía sería que todos se parecieran e hicieran las mismas cosas. Yo creo que al revés, mientras más disímiles sean, mientras más caminos opuestos se sigan, más rico el cine. Es finalmente más rico porque es más problematizador, implica que cada realizador va a tener una visión de las cosas y eso enriquece la cultura y enriquece a los espectadores porque implica posturas y opciones distintas ante las cosas. Yo no creo que haya que hacer un solo tipo de cine. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 344 ¿No es tu estética, en todo caso, la de Littin o la de Caiozzi? No, obviamente. Silvio tiene su propia manera de ver las cosas, y me parece respetable, incluso hay una artesanía en él distinta de la mía, hay una búsqueda de un cine muy analítico, digamos desde el punto de vista de capturar la puesta en escena, o sea la tendencia a hacer muchos planos, cambiar de angulación, tendencia a la ubicuidad, a cambiar de punto de vista frente a la narración, donde funciona mucho la idea de movilidad. Mi tendencia es hacia otro tipo de cine, más contemplativo desde el punto de vista de la puesta en escena, donde yo estoy intentando decantar un lenguaje, de una manera propia, y en las próximas películas si es que llego a hacerlas, voy a tratar de jugar con el montaje, pero a mi manera, como yo lo veo, como yo lo siento… No soy muy dado a ocuparme de la “técnica”, así, entre comillas, es decir estoy consciente de la técnica cuando tengo que hacer una película, pero no cuando tengo que ver una película de otro, entonces me dejo deslumbrar o ganar por la película que estoy viendo porque me produce un placer muy grande… En mis películas trato de buscar la manera más exacta y precisa para resolver una escena lo más eficientemente posible. Creo un poco en el criterio de la eficiencia, sin ser pragmático por otra parte, pero se trata de llegar a construir lo más coherentemente posible sobre todo desde el punto de vista de la emoción, que es lo ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 345 que me interesa en una película. Pero a veces no sacrifico cuestiones que supuestamente atentaría contra el ritmo o que van contra la idea de mantener la tensión del espectador, prefiero sacrificar eso en función del sobresalto que puedo producir en otro sentido, del punto de vista de descubrimiento, de la aparición de cosas insospechadas, de elementos insólitos. Eso me fascina mucho, lo insólito… y por eso gusta mucho Buñuel, me siento muy cercano a Buñuel, lo estimo mucho, es una persona que me llega profundamente, me emociona, quizás más que sus películas él mismo me parece un tipo muy honesto, de una gran profundidad, un tipo que no es ostentoso, me gusta esa sinceridad que tiene, no se las da de nada, no parece un gran técnico, por otro lado. Pero yo sé que es un gran técnico porque hace lo justo, lo económico, me gusta esa simplicidad que tiene de ir a lo preciso, a no perder tiempo en hacer 4 o 5 planos cuando lo puede resolver en uno y no hacer 50 tomas cuando está bien con una, me gusta esa maestría humilde… de no meter música cuando no lo necesita por ejemplo… Bueno, eso también es Rohmer Claro, por supuesto, tampoco él mete música, es muy raro, o Bresson que también ha excluido la música de sus películas, en ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 346 general no la necesita porque hace música con los ruidos, porque él utiliza el método de Mallarmé y la poesía simbolista, donde la música tiene que ser construida en el poema y no podrían a esos poemas ponerles música, sería una aberración… Como la banda sonora de los Deseos, con todos esos pajarracos o no sé qué que hay… ¿Cuál es la idea ahí? Mira, de crear un clima más que todo. Un clima que apoye lo insólito, al misterio que es lo que a mí me gusta tratar todo el tiempo, porque en universos que son extremadamente codificados donde todas las reglas están claras –tú ves el universo burgués donde está todo muy medido y perfecto- y de repente introduces algo insólito y se produce un sentimiento de extrañeza, un cortocircuito y ese sentimiento de que lo extraño nos embarga, rompe en cierto modo este mundo ¿Qué lo que es esto? Dice uno, más que todo es por crear ese clima, esa dimensión, y por supuesto porque funcionan además como elementos significantes. Por ejemplo, el chillido del mono en la casa de Const, que se vuelve a repetir cuando el cabro después mira bajo la puerta, está asociada a las piedras y los zapatos y crea un complejo de elementos; elementos que se concatenan unos con otros, y tú puedes con esos elementos deducir muchas ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 347 cosas, puedes imaginar mucho. Por eso a mí me interesa mucho el método de Mallamé, porque creo que la poesía no puede mostrar los objetos en sí, como son, sino que lo que tiene que hacer es mostrar parte de esos objetos, porque lo que muestra finalmente es un objeto total reconstruido en la mente de la persona que lee el poema o que ve la película, y esa reconstrucción que uno hace, es lo que el objeto es. Yo creo eso, y pienso que lo real tiene que ser reconstruido, por eso el procedimiento en el cine es siempre metonímico. Bresson lo ha descubierto muy bien: él siempre muestra fragmentos de realidad, de cosas, es decir, nunca está la escena en su totalidad, sino que una parte puede sugerir un todo, todo lo que tú vas a reconstruir como espectador cuando tengas la totalidad de los planos que él te mostraba, de las partes, pies, objetos, manos, etc. De alguna manera ese procedimiento metonímico yo también trato de aplicarlo, pero con otra concepción de la puesta en escena, dominada por la idea de una cierta simultaneidad de acciones en el cuadro. Pero por otra parte, intento sugerir las situaciones, no mostrarlas nunca completamente, porque si las mostrar las agotaría, es decir, dejaría satisfecho al espectador. Yo creo que tanto el deseo como la tensión, incluso en el sentido del suspenso hitchcockiano, funcionan justamente porque hay algo que queda en suspenso, hay un enigma, un elemento del rompecabezas que falta para poder armarlo, y nosotros podemos construir con las otras piezas algo. De ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 348 repente yo le indico que es por acá, que es esto lo que hay que pensar, y después le digo, no, es por allá; entonces voy guiando al espectador, le voy creando esa necesidad interior de completar… ¿… de lectura? De lectura, porque él tiene que poner algo de sí ¿no? Porque él no es un espectador totalmente pasivo, tiene su actividad, por muy hipnótico que sea el cine, igual hay una actividad psíquica interesante dentro de una persona que está viendo una película; él está completando las acciones incluso hay una ley ahí que te indica que las cosas uno las tiende a completar, es una ley de la percepción, una ley de constancia que te obliga a que tú reconstruyas aquello, buscando la totalidad. Mi investigación del cine me ha permitido intentar aplicar esas cosas, como llegar con tres o cuatro elementos a producir una significación mayor. Y veo esa significación casi siempre como misteriosa, esto me gusta mucho en Buñuel, justamente, porque Buñel trata muy bien eso, él se niega a explicar esos misterios, que son por lo demás muy simples. La gente siempre cree que los misterios son símbolos, cree que el tipo es un gran racionalista, que dice, ya, aquí voy a poner este símbolo que significa tal cosa y los voy a dejar a todos metidos. No, y no entienden que es ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 349 fruto de su humor, porque la poesía como el cine es productor del humor, de un instante, de un arranque, es una pasión de escritura, y esa pasión implica llevar las cosas a un punto irreductible donde se forman esos mundos, esos puntos ciegos, esos callejones sin salida del sin sentido, porque, claro, esas imágenes producen un sin sentido, pero aquí el sinsentido capta la atención de la gente. A mí me interesa eso justamente y yo intento llevar siempre toda la película hacia esos sinsentidos, a que finalmente todo comunique ese sinsentido que sería una especie de significante el cual no tiene significado en sí pero potencialmente lo tiene, y este significante va a generar significados en el accionar de la película. Y porque están cargados además de reminiscencias o de pequeñas cosas que te inducen; por ejemplo, la escena de Quintana con las piedras, hay muchas asociaciones que se pueden hacer, hay lecturas religiosas: cristológicas, de penitencia, de castigo. Pero si yo lo hubiera puesto en una cruz, todos dirían: ah está representando a Cristo. Yo no quería utilizar un símbolo; yo utilizo algo que me remite a otra manera de ver las cosas, porque estoy creando una imagen nueva, que es esa de Quintana con las piedras y que yo nunca había visto en ninguna parte, sino que es única. Yo indudablemente insinué otros sentidos también, porque soy muy insidioso, como ciertas claves nacionales que yo sé que resuenan, quise relacionar dos cadenas de significaciones, sexual y religiosa, porque ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 350 constantemente quise ligarlas en la película… Yo creo que en las imágenes hay un grado de la creación que tiene que permanecer enigmático, pero no por hacerme el ilegible, el abstruso, sino por la potencialidad que el enigma tiene de reservas de significantes, de reservas de comunicabilidad potencial que está ahí. A propósito de esto ¿de qué modo ha influido tu formación académica y teórica en tu trabajo de realizador? Mucho, mucho realmente. Tú sabes, en la Escuela de Artes de la Comunicación en ese tiempo trabajábamos mucho en el orden de las comunicaciones, con la semiología, con la lingüística, con la antropología. Entonces a mí me interesó mucho desde un comienzo, de ahí al lado analítico mío, la investigación de la teoría, la filosofía al lado de la creación, y aunque trato de deslindar de repente a veces se me confunden las dos cosas. Pero a mí me ha servido mucho, te digo realmente, al contrario de mucha gente que tenía el miedo, el típico tabú de decir a los tipos que se meten mucho en un nivel teórico, que no van a ser buenos creadores, que se van a inhibir, van a empezar a ser demasiados críticos, etc. Yo creo que eso pasa cuando está el espíritu creador y la cosa te aguijonea y es fuerte esa ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 351 compulsión hacia lo imaginario. A mí me sirvió mucho tratar de ser sistemático, cosa que yo no soy naturalmente. ¿Te han servido los estudios teóricos de semiología para comprender la imagen cinematográfica? Me han servido para comprenderme a mí mismo, me han servido para comprender mis propias obsesiones, para entender de dónde venían y cómo ubicarlas y cómo sistematizarlas, y cómo poder explicarlas como lo estoy explicando ahora, cómo poder tener una explicación y no decir: ¿sabes que no sé de dónde me vienen estas cosas y las pongo ahí sin saber, me surgen? Es decir, está el lado de la conciencia, y por otro lado va la imaginación a un grado quizás más lejano, se escapa de uno mismo y después uno intenta ver hacia donde se escapó, a través de la investigación, de la teoría, del análisis, y empiezas a vislumbrar qué es lo que hay ahí de rescatable, es una cuestión dialéctica entre la cosa analítica y la cosa intuitiva y desbocada, más propia de lo poético, de la creación poética, pero yo creo mucho en la disciplina… ¿Cambiando de tema, cuáles son tus proyectos? ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 352 Mira, estoy escribiendo desde hace un par de meses desde que llegué de Alemania, un guión de cine fantástico, que empezaría en una ciudad europea, París o Berlín. Es una historia de un astrónomo chileno que regresa al país después de un tiempo, y que creo que se va a convertir en dos historias porque tomó mucho cuerpo lo que estaba allá y que era un antecedente no más, y van a ser dos guiones. ¿Dos películas? Claro, dos películas. Y la otra sería la historia de un psiquiatra, de un psicoanalista chileno que está afuera y que también vuelve, que es la que voy a empezar a escribir ahora, porque la otra la estoy terminando ya. ¿Y la otra filmarías en…? Teóricamente podría ser una ciudad reconstruida, no importa, una ciudad imaginaria en el fondo: todo es imaginario. Hay un grado de formalización y de estilización mucho mayor que en Los Deseos. Si bien todo ocurre de manera muy concreta y real, es imaginario absolutamente imaginario. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 353 ¿Y qué posibilidades tienes de empezar a filmarlas? Mira, en Chile no creo que muchas. Pero voy a tratar de presentar estos proyectos afuera y ver que factibilidad hay de realizarlas, no son tan caros. ¿Filmarías en qué condiciones? Mira, si se pudiera, en 35 mm, pero si no en 16 mm. No me obsesiono por el formato de 35 mm. Hay otros proyectos de un cine más realista. De una banda, un tema de cine negro que quiero desarrollar, que es una continuación por el lado policial de los Deseos. ¿Película para Chile? Sí película para Chile, muy chilensis. Y también tengo otra idea que también quiero desarrollar ahora que es también un poco la continuación del tema de Los Deseos, pero a otro nivel. O sea, siento que ya traté el estrato escolar, ahora quiero que sean personajes universitarios. Pero todo muy arraigado en la sociedad chilena, personajes muy concretos, muy reales… una película rohmeriana ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 354 casi, en el sentido de puesta en escena, muy precisa, muy etnográfica. Esas son más o menos las líneas. ¿Y qué posibilidades tendrías de continuar tu carrera fuera de Chile? Mira, hay otro proyecto con Antonio Skármeta y la Televisión Alemana que podría ser. Estoy trabajando en la adaptación de un cuento de Antonio, “El ciclista del San Cristóbal”. Es un estupendo relato, da para mucho, hay muchas posibilidades ahí. Bueno, está la posibilidad que se integre Quintana, también como otro personaje. Y finalmente, ¿Hay alguna pregunta que no se te hizo, y que hubiera gustado que te la hubieran hecho? Bueno, el título Los Deseos Concebidos ¿de dónde lo tomé? Había en el Parque O’Higgins una especie de santuario, de esos que se crean con animitas, así una niñita que murió, que fue violada por un tipo, se llamaba la Marinita Silva… no me acuerdo el otro apellido. Y entonces entre las personas que le pedían cosas, porque la consideran como una especie de santa popular, uno de los agradecimientos decía: gracias por los deseos “concebidos” y querían decir concedidos, se habían equivocado. Yo encontré ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | ENTREVISTA: CRISTIÁN SÁNCHEZ • Constanza Johnson | 355 maravilloso el lapsus, había un lapsus gráfico que yo aproveché, la b por la d; entonces empecé a jugar con la b y la d, y pensé que tenían una organización gráfica similar, digamos por lo menos en imprenta. Había toda una cuestión de la cosa gráfica, de las letras que producían un deslizamiento semántico, de modo que concedidos me iba a remitir a concebidos y viceversa, y estos deslizamientos están latentes en los cuentos infantiles, cosa que a mí me gustaba que la película tuviera, un hálito mágico de cuento de hadas. La resonancia de todo eso me gustó porque aludía un poco a lo que había en la película, aunque de manera bastante subterránea. ISSN 0719-4579 CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO ASCANIO CAVALLO Publicado en Artes y Letras, El Mercurio, Domingo 11 de Abril 1999 Con seis largometrajes realizados, un perfil fílmico distinguible y sólido y una independencia notable, la en Chile desconocida obra de Cristián Sánchez merece ser rescatada, tenida en cuenta. He dudado mucho acerca de la oportunidad de este artículo. Desde luego, no está en la línea de los otros que he escrito para este suplemento - los actores del canon del cine—e incursiona en un campo—el cine chileno— donde hay especialistas numerosos. Además, es probable que, de no ser por razones académicas, no habría accedido a un conocimiento más detallado del tema. Por si todo ello no bastara, el objeto es la obra de un cineasta cuyas películas, con un par de excepciones semiclandestinas, no han sido nunca exhibidas en salas comerciales y en el mejor de los casos habrá llegado a un par de miles de espectadores. Sin embargo, cuando se trata de un corpus de seis largometrajes Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO • Ascanio Cavallo | 357 terminados, un volumen que pocos cineastas chilenos han alcanzado, hay derecho a pensar que este anonimato es ya no solamente deliberado, sino parte constitutiva del proyecto fílmico. Y no sé si Cristián Sánchez ha tenido razón al optar por tan excesiva opacidad; pero puedo imaginar que sus películas serían recibidas con la misma perplejidad (o incomprensión) con que la última de ellas Cautiverio feliz, pasó por los festivales de Valdivia y Viña del Mar. Después de todo, los festivales sufren la misma mixtura de público despierto y obtuso que puede producirse en la sala de cualquier mall, aun cuando sus organizadores tengan la usual generosidad de programar películas como las de Sánchez. El mundo de Sánchez es tan extraño como Chile; y quizás ese rasgo lo hace especialmente opaco para muchos chilenos. De otra manera: la extrañeza - en sentido brechtiano- con que su cine nos observa funciona como si un espejo se nos apareciera bruscamente enfrente, desconcertándonos y obligándonos a un momento de reflexión. Ese instante de perplejidad, prolongado y desmenuzado durante más de una hora y media por cada cinta, constituye el centro de su programa fílmico. En sus películas ocurren cosas comunes con un casi imperceptible aire de locura, y ocurren cosas demenciales con aire ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO • Ascanio Cavallo | 358 de perfecta normalidad; los diálogos se pronuncian sin énfasis, como conversaciones casera, y a menudo se enredan en las tautologías, los implícitos y las amenazas no dichas que son típicas del habla local; por ejemplo, cuando un personaje de Los Deseos Concebidos pregunta a otro por una niña, los parlamentos producen una espiral de significados ocultos: — ¿Por qué? ¿Tenís algún problema? —No, te preguntaba nomás. —Ah, no, te digo yo nomás. — ¿Por qué? —No, porque si tú me decís eso... Además, yo estaba por cerrar ya. Los actores son usualmente no profesionales y se parecen a la gente más corriente: el gran icono del cine de Sánchez (y especialmente de sus primeras películas, Vías paralelas, El zapato chino y Los deseos concebidos) es Andrés Quintana un proyectista de cine dotado de una singular fotogenia y de una inaudita capacidad para comunicar la demencia de la vida cotidiana. Los decorados son corrientes, gastados, a veces decrépitos. Las riñas son a la chilena, es decir, amasijos confusos de patadas, revolcones y ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO • Ascanio Cavallo | 359 manotazos. La única batalla que aparece en Cautiverio feliz es tan tosca, que más parece un tableaux vivant que un esfuerzo de reconstrucción. Se trata de películas que, a pesar—o en virtud—de la sencillez de sus recursos transmiten con intensidad algunas de las angustias más profundas e inexpresadas del Chile contemporáneo. ¿CINE POLÍTICO, ANTROPOLÓGICO, ESTÉTICO? No tengo ninguna simpatía por las interpretaciones políticas del cine. Ni siquiera por las sociales. Pero sería un despropósito, cuando no una tergiversación, obviar el contexto del que el cine de Cristián Sánchez ha obtenido sus principales motivaciones. Las películas que filmó durante los años del régimen militar están cargadas de un clima de paranoia y peligro físico, que podía entenderse en conexión con la situación política de los '70 y '80. En los '90, ese clima fue sustituido por la escenificación de las relaciones de crisis: una mujer casada que quiere probar nuevas relaciones en El cumplimiento del deseo; un hombre separado que quiere multiplicar las suyas en Cuídate del agua mansa. Sin embargo, la lectura política de estas cintas es menos interesante que la antropológica, y destaca menos que la estética. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO • Ascanio Cavallo | 360 Pilar del cine de Sánchez es su estilo completamente ajeno a toda retórica visual. En sus películas no hay primeros planos, a menos que los personajes se acerquen a la cámara como parte de su desplazamiento. Los planos son prolongados y la cámara se mueve muy poco, siempre por razones de estricta funcionalidad: el zoom es un artefacto casi desterrado de esta estética. Hasta la mitad de su carrera parecía practicar una ortodoxia integrista en el rechazo a la narración espectacular, no había, por ejemplo, contraplanos, y el hecho de que más tarde los haya incorporados refleja, más que una renuncia, un control más maduro de los medios expresivos. Estas películas deben a esa estrictez su textura neorrealista, y es probable que Sánchez entendiera tempranamente que el corazón moral del neorrealismo no radicaba en mostrar la pobreza (como creyeron muchos), sino en plantar la cámara frente a los hechos - y viceversa- en intervenir lo menos posible, y con la menor retórica, en su densidad, en su espesura, en su cadencia. Esos largos planos secuencia, que a ciertos espectadores pueden parecer aburridos, y hasta exasperantes, son la explicación de porqué cautiverio feliz logra recoger los ritmos vitales de la cultura mapuche, el sentido que late bajo su monotonía, la profunda astucia que se esconde tras su aparente atonalidad: y se puede decir que por ello ésta es la gran película chilena sobre el pueblo araucano, la película que ha vuelto ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO • Ascanio Cavallo | 361 anacrónico todo, paternalismo y toda caricatura acerca de nuestras raíces indígenas. Y si se ha atrevido a rodarla, si ha asumido la tarea casi insensata de filmar una historia ambientada en el siglo XVII con un financiamiento más bien paupérrimo, es posiblemente porque percibe que ese estilo puede con todo, aunque también produzca un cine contracorriente, independiente a ultranza, solitario y muy poco valorado por sus contemporáneos. Apostaría a que a Sánchez hace su cine silencioso, pobre, marginal arropado con la convicción de que sus películas seguirán vigentes cuando el ruido que otras suscitan se encuentre ya muy olvidado. TRAYECTORIA CONSOLIDADA En sus seis largometrajes, y con ese disciplinado realismo estilístico, ha explorado en forma casi sistemática los rasgos de locura de la sociedad chilena. Vías paralelas (1973) y El Zapato chino (1979) investigan el mundo paranoico de las clases medias bajas, esas empresas de supervivencia saturadas de pillerías, engañifas, negocitos mal hechos y muchas, muchas cuentas por cobrar: el mundo del arreglín y de la sensación de ilicitud y peligro que constituye buena parte de la vida en nuestras ciudades. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO • Ascanio Cavallo | 362 Los deseos concebidos (1982), una de las más complejas debido a su coralidad, se interna en el universo feroz de los liceos, con todo su tráfico de pequeños delitos, sus profesores escépticos y sus autoridades comprometidas con la pedagogía autoritaria: mediante una narración "a crochet" que enlaza una secuencia no con la siguiente, sino con la subsiguiente, y que las encadena todas en una maraña de obsesiones, contemplamos cómo el estudiante Erre atraviesa por el aprendizaje de la pillería como método existencial, en ese universo del doble estándar entre lo formal y lo real que tan a menudo es la educación chilena. El cumplimiento del deseo (1994) y Cuídate del agua mansa (1995) son virtualmente complementarias: en la primera, Manuela decide separarse temporalmente de su marido para buscar su identidad en otras relaciones; en la segunda, Ignacio, un hombre separado, se esmera por diversificar sus conquistas como forma de confirmarse en su identidad masculina. Aquí se trata de un mundo profesional, de buen pasar, burgués; y sin embargo, estos personajes practican también el arte de andar con la del bandido, el lenguaje de ambigüedades y medias tintas, las reflexiones con aire sincero que ocultan más de lo que expresan. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO • Ascanio Cavallo | 363 OBSESIONES A LO BUÑUEL Entre las obsesiones más repetidas que pueblan el mundo de Sánchez, la dominante es de raíz buñueliana: los hombres maduros enloquecidos con jovencitas. El taxista de El zapato chino deambula con una adolescente; Mansilla, cuidador del liceo de Los deseos concebidos, persigue incesantemente a una escolar; el mayordomo de El cumplimiento del deseo tiene a la empleada más joven de la casa cautiva en un sótano; y Cuídate del agua mansa es un repertorio de esfuerzos por seducir muchachas. La extrañeza con que el cine de Sánchez nos observa funciona como si un espejo se nos apareciera bruscamente en frente, desconectándonos y obligándonos a un momento de reflexión. Notablemente, muchos de estos personajes llegan a grados de fijación que los conducen a formas veladas y maniáticas de secuestro, huyendo y ocultando a sus presas en hoteles de cuarta (El zapato chino y Los deseos concebidos) o en rincones como el de El cumplimiento del deseo; y un profesor de liceo que no ha llegado a ese límite del desquiciamiento, cita a John Donne ("EI desnudo calor de tu cuerpo, como un frío que viene del polo") para condolerse de la imposibilidad de poseer "el sentido de un cuerpo". La reiteración llega a constituir al secuestro en un tropo, un motivo cuya ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO • Ascanio Cavallo | 364 sistemática emergencia indica una manera de interpretar al sujeto y a la sociedad. ¿Es, ha sido, sigue siendo Chile una nación de secuestradores y secuestrados, una comunidad donde "los apetitos más especiales", incluyendo el de la muerte, requieren de una contención que los haga más exquisitos? El solo planteamiento resulta provocativo. Pero quizás Cristián Sánchez va todavía un poco más lejos. Cercados por la amenaza de la disoluci6n o la locura, sus protagonistas retroceden sobre sí mismos hasta que la crisis de identidad llega a su última línea de defensa, traspasada la cual dejan de existir el individuo y la misma comunidad. Y esa línea es, literalmente, el autosecuestro. El protagonista de EI zapato chino, que se cree perseguido por unos acreedores asesinos, termina habitando en la maleta de su propio taxi. Al final de Los deseos concebidos, Mansilla, que va perdiendo uno a uno los lugares donde podría vivir, se mata encerrado con la niña que "lo vuelve loco" en un hotelucho de mala muerte. Manuela se va a vivir a una casa donde habitan otras mujeres y cuyo altillo lo ocupa un psiquiatra sin vocación (¿un superego debilitado?), mientras que el subterráneo lo domina un hombre obsesionado que retiene a una empleada (¿la zona del instinto sin freno?). Ignacio se recluye en la casa de un amigo ausente. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO • Ascanio Cavallo | 365 EI caso más radical es el de Francisco Núñez de Pineda, el hijo adolescente de un bravo gobernador español que, capturado por los araucanos en un combate, cree vivir un Cautiverio feliz. Núñez de Pineda está en manos de caciques amistosos que quieren mantenerlo con vida como demostración de la superioridad moral del pueblo mapuche, en contra de la opinión de otro grupo de jefes que desea asesinarlo para dar un escarmiento al enemigo. Este peligro objetivo es una buena motivación para aceptar su reclusión, pero el hecho central es que el joven capitán no sólo vive pasivamente el secuestro, sino que más tarde lo añora como el momento más luminoso de su existencia. La película nos pone, además, en la línea sensorial de esa nostalgia: los amaneceres de Arauco, el hipnótico sonido del kultrún, los enigmáticos bailes en fila (todo lo cual ocupa la mayor parte del metraje) invocan a una cultura vuelta sobre sí misma, obsesiva, instrospectiva. El cine de Sánchez sugiere que el autosecuestro forma parte esencial de la identidad chilena, desde sus orígenes como comunidad mestiza hasta su desarrollo actual, infectado de frustraciones y soledad, y pasando desde luego por esos periodos de violencia que han hecho emerger, desde el fondo de su aislamiento y de sus apariencias, toda la demencia disimulada de rutina. Si las implicancias sociales de esta visi6n son inquietantes, sus ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | CRISTIÁN SÁNCHEZ: EL MUNDO SECRETO DEL SECUESTRO • Ascanio Cavallo | 366 alcances políticos podrían ser devastadores. Sin embargo, me parece más relevante el hecho de que el cine de Cristián Sánchez haya alcanzado su originalidad llevando hasta las consecuencias más radicales un proyecto que inequivocamente se inspiraba en las primeras obras de Raúl Ruiz. Mientras este último adaptó sus obsesiones a la situación del exilio, Sánchez persistió en una investigación que ha terminado por develar cortezas muy profundas de nuestra realidad Cualquiera que se acerque a sus películas, incluso en esas sesiones semiclandestinas donde ocasionalmente se pueden ver, hallará que la decidida independencia fílmica de Sánchez lo sitúa en el escuálido puñado de autores del cine chileno. ISSN 0719-4579 EL SECRETO MEJOR GUARDADO DE NUESTRO CINE MARCELO LÓPEZ M. Publicado en el diario El observador de Viña del Mar, Domingo 30 de Julio de 2006 Debe ser uno de los autores más brillantes de la filmografía nacional. Pero el nombre de Sánchez ha permanecido al margen, sin que a él le importe demasiado. Aun así, la deuda comenzará a saldarse con una revisión a su obra en el Festival de Cine de Valparaíso. Se suponía que Cristián Sánchez iba a venir a la inauguración del Festival de Cine de Valparaíso. "Tenía todas las ganas", asegura. Pero ese mismo día cerraba el plazo para postular a los fondos del Consejo del Arte e Industria Cinematográfica. Y Sánchez, claro, no podía darse el lujo de pasar la oportunidad. Ni siquiera por lo económico. El apuro más bien era por la enorme cantidad de ideas que pululan por su cabeza inquieta y que, para bien nuestro, quiere llevar al celuloide. Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL SECRETO MEJOR GUARDADO DE NUESTRO CINE • Marcelo López M. | 368 "Tengo guiones para filmar de aquí a veinte años", dijo recientemente. Y es que el hombre es tremendamente fructífero. Pero además es injustamente desconocido en los circuitos masivos de la cinematografía local, algo que lo tiene sin cuidado, pero también sin explicaciones. Raro si se considera la calidad de cintas como "Los deseos concebidos" o "El cautiverio feliz". No por nada se le rinde culto en casi toda Latinoamérica. Admirado en Argentina (en el último BAFICI se proyectaron varias de sus cintas), Cuba, México y otras naciones, a menudo se le consigna como "la joya del cine chileno". Pero en su patria faltaba un homenaje, hasta que Alfredo Barría, director del Festival de Valparaíso, comprendió que había que hacerlo a la brevedad. Y Escafandra le rinde tributo, con esta entrevista: ¿Por qué este país suele ser tan ingrato con sus valores artísticos? Te lo pregunto por el generalizado desconocimiento que se ha hecho de tu cine... "La ingratitud es moneda corriente en nuestro país y posiblemente en muchos otros. Pero no estoy decepcionado. Jamás me he hecho expectativa alguna ni he esperado recompensas de ninguna clase. Es más creo que, dado el tipo de cine que he podido ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL SECRETO MEJOR GUARDADO DE NUESTRO CINE • Marcelo López M. | 369 hacer, la reacción de ignorarlo o negarlo no ha sido si no justa, al menos esperable. No tengo el menor resentimiento. Para mí el cine es un arte y el reconocimiento es la obra misma". A tu cine a menudo se le rinde culto y suele encasillársele en el grupo de los "secretos" y los "malditos" ¿Te sientes parte de los "malditos"? La posición de "maldito" me resulta difícil de sostener, porque significaría que estoy en contra de algo; pero significaría también que una vez que fuese reconocido, que mi cine de supuesto outsider -o maldito- entrara al sistema, pasaría a formar de los que detentan los medios y el poder económico, el prestigio, la santa aureola del marketing, de aquellos en los que invertir resulta beneficioso". Y lo tuyo ha ido por otro lado... "Claro. Mi caso no es ese. Yo he podido hacer cine casi por milagro, pero para atacar a nadie, ni para demostrar que los demás hacen un cine menos artístico que el mío. No soy juez de nadie. Cada uno sabe dónde le aprieta el zapato y a mí me aprieta el "zapato chino"; es decir, seguí un camino plagado de dificultades, pero simplemente hice lo que podía hacer siguiendo mi intuición y la ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL SECRETO MEJOR GUARDADO DE NUESTRO CINE • Marcelo López M. | 370 voluntad de continuar una corriente en la historia del cine, que es la que me interesa y que podríamos caracterizar como de tendencia espiritual". Y bien chilena... "La materia prima ha sido Chile, el país con sus aspectos más soterrados, insólitos, paradójicos e irrisorios. Y he tratado de expresarlo con todo el humor y la fuerza interior de que dispongo para engendrar con ella una belleza del espíritu. Porque creo en la belleza del espíritu y es por lo demás la tarea de cualquier artista. Nos debemos a ella". Me imagino que jamás tuviste afanes comerciales con tu cine. Por ahí parece como si tras hacer una película, te esforzaras por mantenerla lejos de los cines, por guardártela para ti ¿O no? "Debo aclarar que no hago cine para guardar las películas bajo siete llaves en mi casa o para contemplarlas en secreto como si fueran un tesoro. De hecho ni siquiera me gusta volver a verlas. Quizás por eso me resisto a hacer exhibiciones privadas. Es que un inmenso pudor me paraliza. Pero de ahí a evitar que se exhiban en ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL SECRETO MEJOR GUARDADO DE NUESTRO CINE • Marcelo López M. | 371 circuitos públicos hay una gran diferencia. Si se han exhibido por períodos cortos ello se debe a su soporte (16mm o con copia final en video), una limitación suficiente". Pero donde se proyectan, hay una buena respuesta... "Recientemente en el BAFICI "El Zapato Chino" causó un gran impacto. Quedé estupefacto; yo esperaba un desastre, una deserción masiva de espectadores y otros quedándose sólo para enrostrarme mi ineptitud. Pero resultó todo lo contrario. Me gusta hablar de mis películas; me gusta dialogar con la gente, saber qué sintieron, qué pensaron y si les produje alguna sensación. Me doy por satisfecho cuando esa sensación ha logrado aumentar en las personas su potencia o su capacidad de ser, el perseverar en el sí mismo, el conatos de Spinoza. De modo que quiero y deseo un público y siempre lo he tenido, por minoritario que sea, en los lugares donde mis películas han pasado". ¿Y cuál es tu público? "Cuando hago una película, me pienso a mí mismo como espectador. Si me gusta a mí tendrá que gustarle a otros; es mi ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL SECRETO MEJOR GUARDADO DE NUESTRO CINE • Marcelo López M. | 372 premisa y la de muchos. Ahora, me gusta pasar desapercibido de los actos oficiales y sustraer a mi cine de ese espacio donde el proceso creador se conecta con el poder; ahí reclamo un devenir imperceptible de la obra. Esto es, que no pueda ser interpretada o controlada por poder alguno. La obra no debe estar donde se la espera y estar donde no se la espera. La potencia de una obra es su capacidad de fuga, de desaparecer, de hacerse imperceptible, que es una forma de lucha, de resistencia. El autor mismo, debiera tornarse imperceptible. Yo mismo trato de habitar un lugar como si fuera un fantasma". Igual tu cine exige un espectador activo intelectualmente, que se apropie de tus cintas, las mastique y luego haga su propia lectura. "Toda película debiera actuar directamente sobre el cerebro y el sistema nervioso. Toda película debiera ser un gran choque, para desencadenar un terremoto neuronal. Nuevas conexiones, nuevas sinapsis. Mi cine no está hecho para un espectador inteligente. Porque quien es el inteligente, sino el que quiere sentir, el que no quiere dejarse arrastrar por sensaciones nuevas. El inteligente es el que se aferra a sus certidumbres. En mi cine hay que ver y oír y dejar a un lado la inteligencia. Y en esto sigo a Bresson". ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL SECRETO MEJOR GUARDADO DE NUESTRO CINE • Marcelo López M. | 373 ¿Qué sentimientos tienes hoy con esta suerte de "retribución" que hace el Festival de Valparaíso, al proyectar una retrospectiva de tu obra? "No me queda más agradecer por este reconocimiento y la posibilidad de producir un diálogo entre mis propuestas y el público; y también a través del "Observatorio", este diálogo mediado por ponencias como la de Jorge Ruffinelli, profesor de Stanford, y la de Felipe Aburto, alumno de la Facultad de Artes de la Chile. Me gusta justamente esa asimetría, dos extremos del asedio interpretativo. De todo ello resultará algo muy enriquecedor porque yo también provengo del ámbito académico, haciendo la salvedad que propongo siempre una anti-pedagogía, una anti-academia, una enseñanza informal que no se da en el aula oficial o que ocupa el aula oficial para hacer otra cosa de ella". ¿En qué estás hoy en día? ¿Se viene ya "Camino de Sangre"? ¿Efectivamente tienes guiones para filmar de aquí a veinte años? "Mi única fuerza ha sido sostenerme, persistir en mi fragilidad. Mi cine y yo estábamos (Y quizás seguimos) destinados a desaparecer. Y bien, heme aquí todavía con proyectos, con deseos ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | EL SECRETO MEJOR GUARDADO DE NUESTRO CINE • Marcelo López M. | 374 de filmar... Y es que hay algo que no he perdido y es el 'deseo de desear', como bien dice Johny Holliday en una canción: 'Sólo pido que me den el deseo de desear' ". ISSN 0719-4579 LAS PRECARIEDADES PASAN, LAS OBRAS QUEDAN HÉCTOR SOTO GANDARILLAS Exposición dictada en el marco de la presentación del DVD El zapato chino, 16 de Junio 2011 Lo hemos sabido siempre, aunque siempre el hecho nos vuelve a sorprender: las precariedades pasan, las obras quedan. ¿Qué quiero decir con esto? Algo muy simple: que cuando se estrenó en 1979, El zapato chino parecía ser antes que nada un tributo obsesivo y de contornos casi épicos a la adversidad. A la pura adversidad. Este era el primer largometraje dirigido individualmente por un joven egresado de la antigua Escuela de Artes de la Comunicación de la UC. Esta era una película producida a palos con el águila y desde la pobreza. Esta era una proyecto absolutamente contracorriente. El horno del contexto político no estaba evidentemente para bollos. Sin embargo, así y todo, Cristián Sánchez sacó su película adelante, una película de franca resistencia como queda claro al verla hoy, 32 años después, y –cosa rara- cambió el contexto, Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LAS PRECARIEDADES PASAN, LAS OBRAS QUEDAN • Héctor Soto Gandarillas | 376 cambió el clima cultural, cambiaron las circunstancias políticas, pero El zapato chino nos sigue interpelando. Y nos sigue interpelando tanto o más que entonces. No solo es una película provocadora y muy estimulante en su dimensión política. El zapato chino también es un magnífico rescate de la descolocación nacional, por llamar de algún modo a la sensación de desacomodo, de fragilidad, de fuga, de lapsus erótico, político y verbal que transmiten estas imágenes. No cabe la menor duda que el contexto político de los años 70 es parte de eso, de las distorsiones, de las represiones, de los vacíos y de las conexiones indirectas que comporta esta historia. Pero en realidad, la película de Cristián Sánchez no se agota ni con mucho en esos alcances porque estas imágenes escarban en zonas a menudo muy poco visibles de la chilenidad. Son zonas que tienen que ver con el lenguaje, con el sexo, con la impostura, con las viejas prácticas de la eufemística chilena que cuando llamamos a una cosa por otra, cuando eludimos la realidad, cuando nos entregamos a formas ladeadas de complicidad. En el centro de El zapato chino está la relación extremadamente ambigua que establece un chofer de taxi con una chica provinciana que ha llegado a Santiago a prostituirse, al parecer. El protagonista asume que él va a ser su protector y su salvador. La chica se deja ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LAS PRECARIEDADES PASAN, LAS OBRAS QUEDAN • Héctor Soto Gandarillas | 377 ciertamente proteger. Pero nunca está muy claro en esta cinta perseverante y pertinaz quien está protegiendo a quien y hasta qué punto esta pareja está blufeando o diciendo la verdad con los sentimientos que manifiesta o que se confiesan recíprocamente. El zapato chino es un tratado de relaciones jabonosas y evasivas. Puesto que esta realización es sobre todo una película de situaciones, que funciona mucho mejor en términos de atmósfera que de trama, en términos de momentos que de historia lineal, en términos de observaciones que de personajes enteramente acabados, El zapato chino es una película recorrida por observaciones muy sagaces, por imágenes muy potentes y por situaciones muy divertidas. Cuando volvemos a ver las lecciones de seducción que la protagonista, Marlene, recibe en un baño antes de ir a juntarse con El Nano, a uno le dan ganas de decir, no me vengan con cuentos: estas lecciones están tan vigentes en el Chile actual como en el Chile del 79. Seguimos siendo básicamente los mismos. Otros pasajes que son dignos de rescatar en esta película película de tantos buenos y tan grandes momentos- son los que se abren a situaciones donde la sensación de descolocación a la cual ya me referí se traduce lisa y llanamente en absurdo, en extravío, en confusión, en violencia larvada primero, en violencia rampante después, incluso en franco desorden mental hacia el final. Recién ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LAS PRECARIEDADES PASAN, LAS OBRAS QUEDAN • Héctor Soto Gandarillas | 378 vimos el pasaje relativo a los agentes secretos, muy absurdo. Al ver la cinta ahora, está claro que esos delirios no son fugas circunstanciales porque El zapato chino va avanzando sostenidamente en esta dirección. El zapato chino vendría siendo algo así como un largo viaje a la disociación. Nadie tiene el piso muy seguro en esta realización. No lo tienen sus personajes. Tiendo a creer que tampoco lo tenía su director. El zapato chino es un relato lleno de historias inconducentes, de pasajes laberínticos y difíciles de explicar. Es también un relato cruzado por notables apuntes visuales. Dejo para el final un aspecto que es central en esta realización, y que concierne a la relación que Cristián Sánchez generó con Andrés Quintana, su actor fetiche. Esto es bien impresionante. No todos los días un cineasta se encuentra con un actor así. Las pocas veces que llegan a encontrarse, la probabilidad de que no enganchen mucho o de se pasen por alto mutuamente es muy grande. Aquí el encuentro tuvo lugar y la simbiosis se produjo en términos portentosos. El viejo Borges decía que todo encuentro era una cita y hay belleza en la idea de que Cristián Sánchez y el legendario Andrés Quintana estaban convocados –a lo mejor sin saberlo, a lo mejor dándose cuenta solo mucho después- a recorrer juntos algunas de las buenas páginas del cine chileno. ISSN 0719-4579 Revista Cinemagrafía N°1 2015 | LAS PRECARIEDADES PASAN, LAS OBRAS QUEDAN • Héctor Soto Gandarillas | 379 Volver a ver El zapato chino es una experiencia no solo estimulante. Es una sorpresa, porque durante estos años la cinta no ha dejado de crecer. Aparte de agradecer la invitación a presentar el DVD de la película de Cristián Sánchez, quiero agradecer también la iniciativa de Uqbar de reeditar (junto a Cien niños esperando un tren de Alicia Vega) esta cinta desafiante, divertida, abierta, pegajosa, visionaria y pionera que es El zapato chino. No me resta sino desear que estos dos DVD sean el comienzo de una gran colección, porque el cine chileno harto la necesita. ISSN 0719-4579