COMENTARIO DE TEXTO : R. DESCARTES Texto.

COMENTARIO DE TEXTO : R. DESCARTES
Texto.“Así pues, no queda más que la idea de Dios, en la cual es preciso considerar si hay algo que
haya podido proceder de mí mismo. Bajo el nombre de Dios entiendo una sustancia infinita,
eterna, inmutable, independiente, omnisciente, todopoderosa, y por la cual yo mismo y todas
las demás cosas que existen (si es verdad que existen) han sido creadas y producidas. Tales
atributos son tan grandes y eminentes que cuanto más atentamente las considero tanto menos
me convenzo de que la idea que poseo pueda tener su origen en mí mismo. Y, por consiguiente,
es preciso concluir necesariamente de todo lo dicho antes que Dios existe; pues aunque la idea
de la sustancia esté en mí, porque soy una sustancia, no por eso, sin embargo, poseería la idea
de una sustancia infinita, yo que soy un ser finito, si no hubiese sido puesta en mí por alguna
sustancia verdaderamente infinita.”
(R. DESCARTES, «Meditaciones Metafísicas lII», en Descartes, Obras escogidas, cit., pp. 239-244.)
1. Tema del texto. Ideas fundamentales.
 ¿De qué tema trata este texto? Señala las ideas fundamentales del texto e indica cómo están relacionadas.
 Explica los conceptos básicos siguientes: "naturaleza de Dios", "cosas sensibles", "idea", "compuesto".
 ¿Cómo y por qué introduce Descartes, en su meditación, el tema de Dios? ¿Qué papel representa Dios en su
filosofía?
Este texto trata sobre la naturaleza de Dios. En él hay dos ideas fundamentales:
 La naturaleza humana es ... imperfecta y compuesta.
 La naturaleza divina es ... perfecta y simple.
Estas dos ideas clave están en una relación de fundamentación. Es decir, conocemos la naturaleza de
Dios desde nuestra naturaleza. Dios es lo opuesto a lo que en nosotros es negativo; así, por ejemplo, si
descubrimos que nuestra naturaleza es imperfecta, Dios será perfecto.
La naturaleza de Dios es determinada desde la conciencia humana, desde el hombre. Cualquier acceso a
Dios se lleva a cabo en la época moderna desde el propio hombre (por eso este texto de Descartes es
muy representativo de la modernidad).
2. Algunos conceptos clave
Para explicar los conceptos propuestos es necesario contextualizarlos dentro de la filosofía de Descartes
(1596-1650).

Preguntar por "la naturaleza de Dios" es preguntar por la esencia (término medieval) de Dios y se
refiere no a la existencia, sino a las propiedades o características de Dios (es decir, la respuesta
a la pregunta: "¿Qué es Dios?"

Las "cosas sensibles" son despreciadas por Descartes pues de ellas siempre cabe dudar, y no
hay certeza y seguridad, la cual solo se alcanza por la razón.

Las "ideas" para Descartes son simplemente contenidos mentales. Hay que señalar la gran
diferencia con lo que Platón entendía por "idea", pues mientras que para este es lo más real y
externo, para Descartes es mental. Nuestro concepto de "idea" es el cartesiano.

Lo "compuesto" es imperfecto y, por tanto, se aplicará a Dios lo opuesto: lo simple. El hombre es
un ser compuesto de "cuerpo" y "alma"; el alma es el pensamiento (res cogitans y el cuerpo se
corresponde con lo material (res extensa).
3. Dios en el pensamiento de Descartes
En esta pregunta es importante contestar a aquello que se nos cuestiona ~ luego se podrá ampliar el
tema. Pero no podemos empezar simplemente a hablar de Dios en Descartes como si fuera un tema que
haqa que desarrollar. Por eso lo primero es contestar brevemente a las preguntas que se nos plantean:
¿Cómo introduce a Dios?
Dios es introducido por Descartes como una "idea innata"; no es sensible, pues no viene de la
experiencia, ni tampoco es adventicia, pues no procede de la imaginación. Descartes se esforzará en
demostrar que Dios no solo es una idea sino que también existe en la realidad, para lo cual utilizará el
argumento ontológico (de San Anselmo) ~ sobre todo la argumentación empleada en este texto que
comentamos (llegar a la naturaleza de Dios desde nuestra propia naturaleza).
¿Por qué introduce a Dios?
Lo introduce para no quedarse encerrado en su propia conciencia, para evitar el solipsismo (encerrado
en sí mismo). Estoy seguro de que soy, de que pienso, pero ¿existe lo que pienso y tal y como lo
pienso? ¿No puede ser que me esté engañando? Hay que demostrar (introducir) a Dios y presentarlo
como un ser que no puede permitir que me engañe. Introduce a Dios como puente hacia el mundo
garantía de conocimiento.
¿Qué papel representa Dios?
Dios es un "recurso" en la filosofía de Descartes: garantiza que pueda aplicar el criterio de certeza (lo
que perciba con claridad y distinción ha de ser cierto, Dios no puede permitir que me engañe) y, por
otro lado, permite dar el paso al mundo.
Garantía de conocimiento -
----- DIOS
YO (CONCIENCIA) ---------------- "puente" ----------------- ~ MUNDO (REALIDAD)
4. Contexto filosófico
Descartes se forma en la filosofía escolástica y advierte que esta filosofía no responde a los
problemas y preocupaciones de su época. En cambio, descubre en las matemáticas una ciencia que,
además de rigurosa y segura, sirve para organizar la experiencia y desarrollar la ciencia. Por consiguiente,
sitúa en el proceder de la matemática la estructura y los elementos de su método.
En la experiencia el sujeto es pasivo y el conocimiento que la experiencia proporciona es dudoso.
En la matemática ocurre todo lo contrario. El sujeto es activo y la razón deduce —produce, concibe—
conocimientos seguros. La razón encuentra, pues, los conocimientos por sí misma, sin ningún recurso a la
experiencia. Por ello, Descartes se aparta de la experiencia y busca en la razón el fundamento de su
método y la justificación de todo el conocimiento.
Inspirándose en el proceder de la razón en las matemáticas, formula las cuatro reglas de su
método: 1) regla de la evidencia, 2) regla del análisis, 3) regla de la síntesis y 4) regla de la enumeración.
En ellas se despliegan las dos operaciones fundamentales de la mente humana. La primera, la
intuición, que es la operación por la que la razón crea los elementos simples del conocimiento. La
segunda, la deducción, que añade al concepto de intuición el ser un paso de algo a algo en la mente. Es,
por tanto, una cadena de intuiciones.
La metafísica fundamenta, después, en el sujeto, este proceder de la razón que es el método. El
sujeto es pensamiento existente y como tal lo percibimos en nuestra intuición fundamental, que se expresa
en el “cogito ergo sum”.
En esta intuición el sujeto se percibe clara y distintamente como existencia pensante. Con ello
tenemos la primera certeza, modelo de toda otra certeza, que Descartes eleva a criterio de certeza: lo que
se percibe con igual claridad y distinción.
Pero estamos solos, seguros únicamente de nuestra existencia como seres pensantes. Y para
romper este círculo de soledad sólo tenemos el cogito y las ideas que piensa. Entre estas ideas encuentra
Descartes una, la idea de infinito, de Dios, que es el trampolín que le permite saltar fuera del círculo. En
la idea misma de Dios encuentra Descartes la garantía de su existencia como realidad superior y distinta
del hombre.
Y como Dios es el ser infinito, es perfecto y veraz, y no puede consentir que el hombre se
equivoque de forma irremediable cuando cree en la existencia del mundo. El mundo tiene, por tanto, que
existir.
Tenemos, pues, tres ámbitos de realidad: la sustancia pensante, el yo; la sustancia infinita, Dios; y
la sustancia extensa, los cuerpos.
Los cuerpos son puras máquinas. En ellos todo se explica por extensión y movimiento —
mecanicismo—. Y Descartes formula las importantes leyes de la inercia, del movimiento en línea recta y
de la conservación del movimiento.
En el hombre coexisten cuerpo y alma, extensión y pensamiento. Para explicar este paralelismo
Descartes acude a Dios, un Dios geómetra, último responsable del orden del Universo.
Y con similares principios quiere explicar la conducta humana. Nuestra actividad está dividida en
acciones y pasiones. Las primeras dependen de nuestra voluntad; las segundas, en cambio, se originan en
el cuerpo. El control de las pasiones es una tarea que corresponde a la razón.