UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA EQUINOCCIAL FACULTAD DE ARQUITECTURA, ARTES Y DISEÑO ESCUELA DE RESTAURACIÓN Y MUSEOLOGÍA TEMA: "APLICACIÓN DE PROCEDIMIENTOS ANTROPOMÉTRICOS PARA LA SELECCIÓN DE OBRAS PICTÓRICAS CON MIRAS A SU AUTENTIFICACIÓN: CASO DE ESTUDIO MIGUEL DE SANTIAGO" TESIS PREVIA A LA OBTENCIÓN DEL TÍTULO DE LINCENCIADA EN RESTAURACIÓN Y MUSEOLOGÍA AUTORA: FARAH ESMERALDA ESPINOSA RIBADENEIRA DIRECTOR: MSc. MARCO ROSERO BEDOYA QUITO AGOSTO 2012 RESPONSABILIDAD Declaro que el contenido de la presente tesis es de responsabilidad absoluta de la autora. Farah Esmeralda Espinosa Ribadeneira I DEDICATORIA Al esfuerzo en cada paso para conocer la verdad y a quienes hagan uso de ello. Farah Esmeralda Espinosa Ribadeneira II AGRADECIMIENTO A quienes me brindaron su apoyo sin reservas; al Convento San Agustín, a Rosa Torres: Directora del proyecto de restauración de los lienzos de Miguel de Santiago quien me ofreció su conocimiento. A mi padre por guiarme en la búsqueda de la verdad junto con mi familia. A Julio Benítez quien me dió las primeras pautas para realizar este trabajo. A Marco Rosero, director de la presente tesis. A Mara Gutiérrez Cancellier por su ayuda prestada en la fotografía. Farah Esmeralda Espinosa Ribadeneira III RESUMEN Cada personaje posee una relación de medida y forma (canon) con la que ha sido representado de acuerdo con las normas establecidas en cada época. Bajo estas perspectivas se analiza la serie de lienzos del pintor quiteño Miguel de Santiago, mediante el estudio antropométrico de la figura humana de los personajes que componen ésta serie ubicada en el Convento de San Agustín. Esto nos permite determinar si Miguel de Santiago se ajustó a un sistema de proporciones o canon, o si las ejecutó de acuerdo a un modelo propio, pues en estos tiempos en el siglo XVII el artista estaba sujeto a una serie de parámetros estéticos, tanto por el entorno religioso como por los modelos que venían de Europa. IV ABSTRACT Each character has a relation of size and shape (canon). It has been represented in accordance with standards established in every age. Under this perspective this work analyzes the series Miguel de Santiago`s, by anthropometric study of the human form of the characters that make this work from San Agustín convent. This allows us to determine whether Miguel de Santiago was adjusted to a proportional system or canon, or if executed according to he´s model, because in these times in the seventeenth century the artist was subject to a number of aesthetic parameters, both religious environment as aesthetic models from Europe. V CERTIFICACIÓN Certifico que el presente trabajo de investigación "APLICACIÓN DE PROCEDIMIENTOS ANTROPOMÉTRICOS PARA LA SELECCIÓN DE OBRAS PICTÓRICAS CON MIRAS A SU AUTENTIFICACIÓN, CASO DE ESTUDIO MIGUEL DE SANTIAGO", fue desarrollado por su autor, Farah Espinosa, bajo mi dirección y supervisión. MSc. Marco Fabián Rosero Bedoya VI "APLICACIÓN DE PROCEDIMIENTOS ANTROPOMÉTRICOS PARA LA SELECCIÓN DE OBRAS PICTÓRICAS CON MIRAS A SU AUTENTIFICACIÓN, CASO DE ESTUDIO MIGUEL DE SANTIAGO" PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA Cada periodo tiene su forma particular de representar el cuerpo humano, así como también cada artista. Miguel de Santiago, el máximo representante del siglo XVII basó su obra pictórica de la vida de San Agustín ubicado en el claustro Agustino, en una serie de grabados provenientes de Europa, los cuales sirvieron de modelos para la representación pictórica, éstos grabados a pesar de preestablecer la creación del artista permitieron cierta libertad en la composición. Por tanto, es posible reconocer mediante el estudio de la figura humana si guarda relación con un modelo de medida o no. Los tratados de pintura del viejo continente como Varia conmensuración de Juan de Arfe y Arte de la pintura de Pablo Céspedes, son escritos a los que se cree que Miguel de Santiago recurrió para la realización de su obra, como describe José María Vargas (1944) en su libro "El arte ecuatoriano", aunque por otro lado Navarro asegura que éstos tratados llegaron en el siglo XVIII. Mostrando una notable contradicción entre los datos y los autores. Pero independientemente de que Miguel de Santiago haya o no utilizado como base éstos manuales de pintura debió utilizar un patrón de normas, medidas y proporciones para plasmar las imágenes de los lienzos, las cuales deben guardar cierta composición además de un modelo para el trazo de las dimensiones y rasgos anatómicos. Nuestro propósito es encontrar estas referencias en la representación de la figura humana y en el rostro, que al ser una de las partes más importantes se cree que Miguel de Santiago las realizaba solo. VII OBJETIVO GENERAL - Analizar si los personajes representados por Miguel de Santiago guardan relación o concordancia con un canon específico como herramienta para ayudar a su caracterización. OBJETIVOS ESPECÍFICOS - Describir los cambios en la representación de la figura humana y los cánones predecesores que pudieron haber influido en la obra de Miguel de Santiago. - Medir las características anatómicas del rostro, manos y figura humana erguida presentes en la obra de Miguel de Santiago de la serie de la vida de San Agustín del convento que lleva el mismo nombre. - Determinar la influencia de los grabados europeos en la serie de lienzos sobre la vida de San Agustín del pintor Miguel de Santiago. PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN - ¿Cuáles han sido los cánones de representación del cuerpo humano a través del tiempo? - ¿ Hasta que punto influenciaron los grabados de Bolswert en la serie pictórica de San Agustín? - ¿Se basó Miguel de Santiago en tratados de arte para realizar su obra? -¿Utilizó la proporción y simetría en la resolución de los personajes de su Pintura? - ¿ Los lienzos de Miguel de Santiago guardan concordancia con un canon específico? VIII JUSTIFICACIÓN Uno de los máximos representantes de la pintura quiteña del siglo XVII fue Miguel de Santiago, quien marcó dicha época con su labor artístico, momento en el que el arte colonial quiteño estuvo notablemente influenciado por los modelos que venían de Europa. Sin embargo poco se sabe sobre la aplicación de un canon antropométrico o de la utilización de tratados de arte en la pintura colonial quiteña. Pues alrededor de Miguel de Santiago los estudios anteriores se han limitado a la recopilación de datos sobre el estilo del pintor y su historia. Abarcando notas biográficas en su mayoría donde no se han encontrado indicios referentes al estudio sobre la figura humana, los cánones y proporciones aplicadas al estudio de las obras del pintor quiteño. La importancia de esta serie de lienzos de la vida de San Agustín radica en que es el primer gran encargo que Miguel de Santiago realizó y equivale a sus inicios en el arte y a la primera etapa de su estilo. NATURALEZA DE INVESTIGACIÓN La presente investigación es exploratoria pues pretende encontrar datos sobre la composición de la figura humana de las obras de Miguel de Santiago en los lienzos del convento de San Agustín. Descriptiva porque recoge datos sobre la representación de la figura humana a través del tiempo y trata de deteminar sobre arte y estética. HIPÓTESIS Los personajes de las obras pictóricas pertenecientes a la serie de San Agustín de la autoría de Miguel de Santiago guardan una relación de proporción de acuerdo con un canon previamente establecido. IX ÍNDICE INTRODUCCIÓN ............................................................................................... 4 CAPÍTULO I ....................................................................................................... 5 1. ARTE Y ESTÉTICA ........................................................................................ 5 1.1. Conceptos generales .................................................................................... 5 1.2. Aspectos sobre la definición de arte .............................................................. 5 1.3. Origen del arte ............................................................................................ 6 1.1.2. El concepto de arte através de la historia ................................................. 8 1.2. La Estética................................................................................................. 11 1.2.1. Concepto de Belleza artística y Categorías Estéticas ................................... 11 1.2.2. De la belleza natural a la belleza del arte ................................................... 13 1.2.3. Categoría estética de lo Feo ..................................................................... 14 1.3. EL SER HUMANO COMO MEDIDA DE LAS COSAS .............................. 16 1.3.1. Las unidades de medida antropométricas en el arte..................................... 16 1.3.2. Canon artístico de la figura humana .......................................................... 17 1.3.2.1. Canon antropométrico ...................................................................... 18 1.3.3. Proporción ............................................................................................. 20 1.3.4. El Número Phi ....................................................................................... 21 CAPÍTULO II .................................................................................................... 24 2. LAS FORMAS DE REPRESENTACIÓN DEL CUERPO HUMANO A TRAVÉS DE LOS PERIODOS DEL ARTE....................................................... 24 2.1. LA FIGURA HUMANA EN EL TIEMPO.................................................. 24 2.1. 2. La imagen del ser humano en la prehistoria........................................... 24 2.1.3. La figura humana en la cultura egipcia .................................................. 27 2.1.4. Grecia: El ideal del cuerpo humano....................................................... 29 2.1.5. Edad Media: El simbolismo frente a la forma de representación humana... 32 1 2.1.6. Retorno al ideal. El Renacimiento ........................................................ 39 1.1.7. El Barroco .......................................................................................... 44 CAPÍTULO III ................................................................................................... 52 3. EL BARROCO ESPAÑOL EN LA REAL AUDIENCIA DE QUITO ................ 52 3.1. Antecedentes del Barroco en América ......................................................... 52 3.2. Miguel de Santiago................................................................................... 53 3.2.1. La estampa como modelo artístico para la serie de lienzos de San Agustín 54 3.2.2. Series pictóricas .................................................................................. 57 3.2.2.1. La serie pictórica de la vida de San Agustín: Producción artística 57 3.2.2.1.1. Miguel de Santiago y el sustento teórico en la resolución de su obra ........................................................................................................... 58 3.2.2.1.2. Representación de los personajes. .......................................... 61 3.2.1.3. Estudio antropométrico aplicado a los personajes de la serie de la vida de San Agustín. ................................................................................. 64 3.2.1.4. Procedimientos Antropométricos.................................................. 65 3.2.1.4.1 Representación de la figura humana, estudio antropométrico aplicado a los personajes de la serie de la vida de San Agustín. ................. 68 3.2.1.4.1.1 Aparición de Cristo a San Agustín ........................................... 68 3.2.1.4.1.2 SAN AGUSTÍN ENTREGA LA REGLA A LAS CUATRO ÓRDENES QUE FUNDA .......................................................................... 77 3.2.1.4.1.3 LA CONSAGRACIÓN EPISCOPAL DE SAN AGUSTÍN ......... 88 3.2.1.4.1.4 SAN AGUSTÍN ANTE HONORIO ........................................... 94 3.2.1.4.1.5 LA ORDENACIÓN DE SAN AGUSTÍN ................................. 101 3.2.1.4.1.6 EL SANTO EN ÉXTASIS SOSTENIDO POR DOS ÁNGELES ................................................................................................................ 109 3.2.1.4.1.7 SAN AGUSTÍN Y SANTA MÓNICA....................................... 115 CONCLUSIONES ........................................................................................... 120 RECOMENDACIONES .................................................................................. 122 2 BIBLIOGRAFÍA .............................................................................................. 123 ANEXOS ........................................................................................................ 129 3 INTRODUCCIÓN A lo largo del tiempo, el ser humano desde sus inicios se ha representado a sí mismo, y es de esta forma que en el arte la concepción del cuerpo ha ido variando conforme a sus nociones ideológicas. Ya en un principio en las cavernas todas estas manifestaciones a las que ahora llamamos "arte" no fueron concebidas como tal, pues tenían otras implicaciones que son captadas dentro de lo mágico. El término arte encierra numerosos factores que lo determinan, por lo que es difícil ubicarlo en un solo concepto, así ya desde la antigüedad, si partimos de la tradición clásica; los griegos le otorgaron al arte un fin estético conforme a ciertas reglas. Aún ahora algunos artistas retoman este ideal de la figura humana al recurrir al canon clásico, sin embargo hay quienes opinan que el canon a limitado al arte a un solo modelo excluyéndolo de todas las diferencias culturales. Ahora vemos que nace una "estética de lo feo" aunque parezca paradójico puesto que algunas corrientes ya no buscan la antropometría estética en la representación del cuerpo, sino que tienden a la simplificación de las formas que cada vez desaparecen evadiendo rasgos concretos (arte abstracto), o donde la desfiguración de los individuos está latente mostrándonos al ser humano susceptible, deforme y violento. En este sentido se desarrolla el primer capítulo; al introducirnos al arte y estética, canon y proporción. Aspectos que abriran camino hacia el segundo capítulo. En el segundo capítulo se describe como la representación de la figura humana ha ido variando junto con la teoría de las proporciones humanas y los métodos auxiliares de construcción de la figura humana. Pues todos los cánones son la expresión del ideal de belleza de cada época en particular. Esto nos dará una pauta para conocer posteriormente si los lienzos de Miguel de Santiago guardan alguna concordancia con un canon específico. En el tercer capítulo, se analizan los personajes principales de los lienzos de Miguel de Santiago mediante las medidas antropométricas de los personajes tomadas previamente de los lienzos originales. 4 CAPÍTULO I 1. ARTE Y ESTÉTICA 1.1. Conceptos generales En cuestiones de gusto no existe nada escrito y tampoco reglas universales, sin embargo si se admite el subjetivismo no existiría el estudio estético. La idea de belleza a sido siempre relacionada a lo bueno, mientras que lo feo a lo malo. Estas dos concepciones no son para nada desconocidas y son las más comunes que utilizamos para determinar algo. En este sentido más de una vez se le ha otorgado al arte un vínculo inseparable con la belleza y que como todo ha variado en su sentido. En un concepto general el arte es una práctica y la estética es la reflexión de esta práctica (Souriau, 1998). Reflexión que se ocupa del estudio de lo "bello" y de las cualidades que se consideran como originarias de la belleza como la proporción, la simetría, el orden. 1.2. Aspectos sobre la definición de arte Desde sus inicios, el ser humano ha estado siempre en la búsqueda por definir todo lo que encuentra a su alrededor, y el arte no es una excepción. La expresión "arte" se deriva del latín "ars" y del griego τέχνη "téchne", o técnica, concebido como una habilidad o destreza. No obstante esta palabra no siempre ha tenido el mismo significado, por lo que no es posible generalizarla en un solo concepto. Lo que hoy se designa como arte en otra época hubiese sido totalmente inpensable. El ser humano es el único que produce arte y es el quien se encarga de darle un concepto, por lo que si nos remitimos a preguntar ¿Qué es arte? a diversas personas, cada una tendrá una respuesta en base a lo que conoce dentro de los valores que entiende por arte. Sin embargo si consultamos en el diccionario, este define “arte” como: "Conjunto de reglas para hacer bien alguna cosa"(Diccionario Enciclopédico Universal Aula, 1998). Refiriéndose al conocimiento y a la habilidad reflejado en la producción de la obra para 5 realizar algo de manera propicia. Acercándose a la concepción de arte que tenían los griegos, ya que para ellos todo arte estaba ligado a una norma. En una segunda definición el "arte" es: "Acto mediante el cual, utilizando lo material, se expresa una concepción" (Diccionario Moderno, 1979). Puesto que a través del arte se ven exteriorizadas ideas y creencias de orden individual y cultural, el mensaje está involucrado en el objeto y este a su vez lo refleja para permanecer en la memoria cultural de las personas. Una obra de arte no se remite únicamente a ser producto material sino también, es su carácter comunicativo el que le otorga un valor inmanente. En una tercera definición el arte es: "Todo lo que se hace por industria o habilidad del hombre" (Diccionario Enciclopédico Universal Aula, 1998). Esta definición hace referencia ya no sólo a la habilidad como actividad estrictamente humana, sino que se puede evidenciar como a partir de la industrialización y la presencia de la máquina, el arte se inicia en un nuevo campo de acción reflejado en bienes de consumo que involucran nuevas tecnologías en donde el arte pasa a ser un producto. En consecuencia, sólo en éstas tres definiciones el sentido de la palabra arte alberga diversas ideas que hacen mucho más difícil una determinación unívoca. Pues cada proceso de cambio responde a un pensamiento y acción humana, asumiendo un lenguaje propio. Todo gira en torno a la reflexión humana y dentro del arte se puede considerar a un objeto como obra de arte por el reconocimiento que le da la comunidad. Hay objetos que son considerados arte porque ese es su fin, así como también hay objetos que han adquirido esta característica porque es el ser humano quien lo reconoce dentro de la categoría de arte; un reloj de cuerda es un instrumento realizado con la función de proporcionarnos la hora, mientras que pasa el tiempo este mismo reloj llega a formar parte de un museo. 1.3. Origen del arte El arte existe por el reconocimiento que le asigna el ser humano como tal y por el concepto que ha creado alrededor de lo que llamamos arte. Siendo el ser humano un ser dotado de razón, habilidad, sensibilidad e imaginación es capaz de transformar lo que 6 piensa, en un objeto material o perceptible; habiéndose representado a sí mismo desde que realizó las primeras manifestaciones gráficas. “Si bien el arte rupestre no llegó a ser una forma de escritura ni un lenguaje fonético, lo gráfico comunica acontecimientos históricos, vivencias, pensamientos, creencias, y sus imágenes transmiten mensajes visuales." (Arguello & Botiva, 2003, p. 2). Al acercarnos a la evidencia de las primeras manifestaciones del ser humano. Desde los primeros signos gráficos hasta la creación de objetos utilitarios y ceremoniales se advierte que éstos actúan como un documento histórico y comunicativo mediante el que se puede interpretar las costumbres y reconstruir el pasado. En este sentido la necesidad y también el instinto de supervivencia es lo que ha llevado al ser humano a desarrollar una serie de actividades como el lenguaje. Kant señala que existen tres modos que el ser humano utiliza para transmitir sus ideas las que respectivamente han sido desarrolladas en tres artes distintas: "Las palabras se refieren al arte de la poesía, los sonidos a la música, los gestos a la pintura, escultura y arquitectura". (Tatarkiewicz 1997, p. 56). Es así como el origen del arte se remonta a los primeros años cuando el ser humano ha desarrollado todo un sistema de comunicación y entendimiento, en el que interviene el mensaje que es el que satisface la necesidad de comunicación. Este mensaje a su vez puede ser expresado de forma escrita, hablada y gráfica en el que el componente fundamental es la comunicación de una idea, la que se desarrolla dentro del sujeto, quien al percibir a través de sus sentidos la naturaleza del objeto, se va nutriendo de estas características que le inspiran para reproducir lo que ha captado, por ejemplo: las representaciones que se encuentran en las cavernas. Tatarkiewicz (1997) explica que el término "arte" anteriormente hacía referencia a la habilidad del ser humano para producir objetos utilitarios para así cubrir sus propias necesidades y que hoy en día más bien es una colección de ellos. Sin embargo, se puede considerar que en estas primeras manifestaciones la motivación no es únicamente utilitaria. Se evidencia dos campos de inspiración: el mundo como realidad objetiva y el mundo mágico vinculado a los antepasados y deidades. 7 Dolmatoff (1912 - 1994), quien ha investigado sobre los orígenes del arte rupestre advierte desde un punto de vista neurofisiológico, que las formas de representación visuales en el arte rupestre se presentan en formas geométricas a lo que denominan "fosfenos" (Alonso, 2002). Por ejemplo en la actualidad aún varios grupos étnicos de la Amazonía, realizan trazos y dibujos una vez que han ingerido ayahuasca o natema. En Punta del Este (Cuba). Esta relación se reproduce con fidelidad en los pictogramas que recrean las visiones inducidas por los alucinógenos. 1.1.2. El concepto de arte através de la historia En la antigüedad en Grecia, Roma, en la Edad Media y mucho más tarde incluso en el Renacimiento, la palabra "arte" era una expresión que hacía referencia a la destreza y al conocimiento para realizar algo. Porque para el dominio de toda habilidad era necesario el conocimiento de una serie de reglas. En la época antigua y Edad Media el término arte tenía un concepto mucho más amplio del que conocemos hoy en día, comprendía todo tipo de habilidades como los oficios manuales e incluso las ciencias como la gramática, lógica, retórica, geometría y otras. Es decir oficios como la sastrería, actividades como la pintura y ciencias como la matemática se encontraban dentro de la categoría del arte. Sin embargo dentro de esta categoría existía una clasificación, la cual estaba plasmada de acuerdo con el esfuerzo que debía realizarse: Artes liberales aquellas que denotaban el esfuerzo mental y las artes vulgares el esfuerzo físico. Siendo las segundas (artes vulgares) consideradas las menos importantes, ya que para los griegos las actividades que denotasen esfuerzo físico estaban muy por debajo de las artes que involucravan el pensamiento. De esta manera lo que conocemos hoy como arte en un principio no eran consideradas importantes, por ejemplo en la Edad Media; ni la pintura ni la escultura entraban dentro de las artes liberales, ni mecánicas pues en una de las clasificaciones por Hugo de San Víctor (XII) se las excluía. Solo fue a partir del siglo XVIII que Batteux estableció 8 formalmente y clasificó en siete a las artes: pintura, escultura,arquitectura, música, poesía, danza y retórica acercándose más a lo que hoy conocemos por arte. Así el arte ha albergado entonces, numerosos conceptos que han tenido diversas aceptaciones a lo largo del tiempo. La belleza es la palabra que más se la ha relacionado al arte. Esta característica para los artístas clásicos y para los renacentistas radicaba en el estudio de las proporciones. Había una concepción que asimilaba al número como principio de la belleza y como orden de la naturaleza. En este sentido desde la tradición griega hasta el Renacimiento, el concepto de arte estaba ligado a un conjunto de normas para realizar algo de manera propicia, por medio de la razón. Para los griegos la importancia de la obra radicaba en el naturalismo de esta, pero no era la representación de una figura real sino la expresión de un ideal que aspira a un concepto objetivo de la idea de belleza. El arte griego y el renacentista se acercó específicamente en gran medida a la representación del hombre como tema principal y el cuerpo desnudo fue en donde completaron las limitaciones de la naturaleza. De esta manera, el concepto de arte era válido mientras la idea de belleza se presente como característica de la obra, sin embargo si lo comparamos con el arte contemporáneo esta misma idea pasará a ser excluida. En la época griega nadie hubiera podido imaginarse que la obra de un cuerpo desfigurado podría llegar a ser llamado arte. Todos estos cambios se han dado básicamente en las ideas que se ven reflejadas de una u otra forma en las diferentes expresiones del arte que actúa como un espejo de la humanidad. Fot. 2 Leonardo Da Vinci, La Belle Ferroniére1 1 2 Fot. 3 Fotografía digital inspira en la mujer llorando de Picasso. 2 http://www.pintoresfamosos.cl/obras/leonardo-3.htm http://www.freakingnews.com/Picasso-Celebrities-Pictures--2168.asp 9 El arte clásico se limitaba a la reproducción de la realidad y la creación no existía, ya que como ideal era la búsqueda de la belleza no la creación de cosas nuevas, y su gran diferencia con el arte contemporáneo como el surrealismo, cubismo, arte digital etc. Es que modifica los modelos anteriores del arte ocupando nuevos campos y materiales innovadores que trae consigo la tecnología. Por esto el arte contemporáneo no se limita a estar dentro de un marco sobre la pared, sino que adopta la utilización de nuevas formas de representación, busca impactar no agradar. Por mucho tiempo se tomó a la belleza de las obras de arte como valor absoluto, y como renuncia a este estereotipo aparecieron diversos movimientos artísticos. Posteriormente surgieron nuevos paradigmas como movimientos contra- culturales que cambiaron la perspectiva del concepto para determinar lo que es arte. A partir del surgimiento del arte contemporáneo que se fundamenta en la belleza interior de la obra, en su esencia entendida como el mensaje del artista; el arte se vuelve más personal y abandona la formalidad del arte academicista mostrándose en rechazo a todo tipo de reglas preestablecidas, a todos los cánones y modelos y a todo lo que pueda predisponer al artista y limitarlo en su imaginación y creación. El arte busca transgredir distancias y en muchos casos es contestatario al canon de belleza. "Jean Dubufett; afirma que la cultura anula y aplasta a todo el mundo, especialmente a los artistas. Esta es la razón por la que se opone a toda tradición europea, a los griegos, a la belleza del arte a su racionalidad y al contenido literario" (Tatarskiewicz,1997,p. 75). A pesar de que han transcurrido desde los griegos miles de años el concepto clásico ha permanecido a través de la historia del arte, se piensa aún que el arte debe producir belleza en un sentido ortodoxo. Sin embargo ahora no son los artistas los que realizan grandes obras de arte. El arte puede ser practicado por cualquiera en medida que se desee, el arte no se limita a estar en un museo. Todas sus expresiones son válidas y puede representar tanto la crudeza de la realidad o puede manifestar cosas que no existen, construir formas nuevas a partir de las ya conocidas y no importa ponerle un concepto. Por otro lado, el arte no tiene un desarrollo lineal, en base a que las representaciones artísticas no van siempre desde las formas más simples a las más complejas, así 10 podemos evidenciar el retorno a la esquematización y a la utilización de elementos básicos como la línea, el punto y el plano presentes por ejemplo en el arte abstracto de Wassily Kandinsky y relacionarlo con las primeras impresiones del arte paleolítico. Fot.4 Cazadores con sombreros (Dos Aguas - Valencia - España) Pintura rupestre 3 Fot. 5 Wassili Kandinsky Structure Joyelouse (1926) arte abstracto4 1.2. La Estética 1.2.1. Concepto de Belleza artística y Categorías Estéticas La belleza es inmutable a lo captado por los sentidos. Es bella en su esencia y no sólo como cualidad de un objeto. Los seres humanos utilizamos valores para medir y designar todo lo que encontramos alrededor, términos como bello y feo para referirnos a algo en particular, valores que son totalmente antagónicos entre sí. La "estética" según Baumgarten es la: "ciencia de lo bello" (Soriau, 1998, p.536). Sin embargo la estética admite valores negativos dentro de su categoría. En términos generales la palabra estética, proviene de las voces griegas αἰσθητικς, y tiene por objeto el estudio de la percepción y apreciación de los valores que se le atribuyen al arte. Valores o cualidades como la belleza, la proporción, la armonía; que son consideradas en estética causas de la belleza. 3 4 http://www.oocities.org/es/barduck6/pagina6.htm http://mezcolanzas.wordpress.com/2010/03/06/vasili-kandinski/ 11 La belleza ha estado relacionada al arte de forma implícita, como un valor inmanente, Tomás de Aquino señala: "las cosas bellas son aquellas agradables de percibir" (Tatarkiewicz, 1997: 36). De acuerdo con esta frase la belleza actúa como medio y el "hedonismo" puede ser su fin. En el hedonismo estético la experiencia es lo que produce placer y bienestar en los espectadores, es lo que produce en los espectadores abordar la realidad en un campo de sensibilidad que se considera que produce la obra de arte cualquiera que fuese. No obstante el término de belleza no se limita a una realidad unívoca, también ha sido utilizado a través del tiempo para designar una serie de cosas de carácter diverso, en Grecia en un principio se utilizaba para referirse solamente a los niños y a las mujeres. Posteriormente el concepto de belleza en el arte nace en relación de las partes y con el todo (la proporción) que fue llamada como "La Gran Teoría" vigente en el arte clásico. Sin embargo, los griegos al referirse a la proporción en el arte utilizaron la simetría que responde a la demanda de la razón, de orden intelectual y la euritmia que es la belleza que perciben los sentidos, porque no todo lo que es simétrico se ve como tal. Es decir, que en la belleza simétrica, la imagen está arraigada a una fórmula a un modelo matemático que evoque hermosura mientras que la euritmia responde a la percepción visual. En el estudio estético, la utilización de la palabra belleza abarca un campo extenso, nos referimos a este término para calificar a una experiencia que relaciona objeto - sujeto (observador), con la participación de los sentidos que son estimulados para percibir. Es así que el ser humano se inspira en su entorno natural para contemplar, asimilar y crear nuevos objetos solo a partir de una idea. Al observar un cuadro, se aprecian los elementos inmediatos, que se hallan materializados en la obra, como es la composición, el color, forma, orden, lo perceptible a simple vista. Propiedades atribuidas como causas de la belleza. Pero la belleza puede también ser independiente de su soporte físico como es el significado o el concepto en el arte. En el pensamiento Antiguo la belleza era una cualidad propia de la naturaleza que cuestionaba muchas veces a la existencia de la belleza en el arte, y para los estoicos, la belleza estaba delimitada al campo de lo visible y decían que es: "aquello que posee una proporción apropiada y un color atractivo" (Tatarkiewicz, 1997, p.17). Sin embargo, 12 apesar de que la belleza se hace perceptible en la forma, esta se encuentra tanto en el objeto como también en el ojo de quién lo ve, pues cada quien posee una apreciación determinada de su entorno y la belleza se encuentra en todo lo perceptible y nace en relación con los sentidos y con el conocimiento humano. También se encuentra en lo sensitivo y en lo racional que en el arte podrían ser analizados de distintos modos: El primero es la aplicación de la razón y la lógica que puede hallar su antítesis en los sentidos, que utiliza la proporción y armonía, que buscaban los antiguos en la medida y el segundo, la realidad vista desde el campo sensorial o el campo de la imaginación que modifica la realidad como en el arte postmodernista. Adorno en su teoría estética menciona lo siguiente: "Si un concepto estuviera emparejado con el alma, como opinan muchas corrientes psicológicas, o con la sociedad, como creen algunas doctrinas sociales, se acabaría la estética" (Adorno,1986, p. 73). Esto nos permite mediar o intentar un equilibrio en donde la estética es también claramente objetiva, cualidad que se encuentra en situaciones y cosas reales. Es una cualidad de la cosa no sólo de quien observa. Pero también quien observa pone mucho de sí en lo que ve. La obra de arte es la misma representación para todos los observadores. Sin embargo la interpretación no va a ser la misma porque son términos subjetivos. Esta diversidad de concepto individual podría ser la anulación de la teoría estética, pues éstos valores no pueden reducirse a un patrón o modelo estético ya que son diversos. Cada obra y forma artística tiene diferentes valores que no se ajustan a un solo término universal porque no toda obra tiene como fin producir belleza. 1.2.2. De la belleza natural a la belleza del arte La transición de la belleza natural a la belleza artística se desarrolla dentro de un proceso de dominación, que según Adorno (1980) implica el apropiamiento de los elementos objetivos para ser representados por el individuo. La diferencia estriba en que la belleza natural no es el resultado de la producción del ser humano y la naturaleza actúa como modelo para la representación artística (relación mimética). Con respecto a 13 esto ya mucho antes Platón y Aristóteles se referían a la pintura y escultura con un fin meramente imitativo. Los antiguos griegos contemplaban al mundo en su gran magnificencia, afirmando que existía la belleza en todo el universo. Los estoicos la llamaban "Pankalía" y los pitagóricos encontraban la belleza en el número y en el orden. En el arte, es el ser humano el creador, el artífice y el compositor de la belleza, pero esta idea fue rechazada por el teocentrismo de la Edad Media ya que se decía que no se puede admirar algo que haya sido hecho por la mano del hombre. Se decía que todo es "bello", porque es creado por dios, la naturaleza como perfecta obra Divina. San Agustín citado en De la calle (2006) nos comenta lo siguiente: Este arte soberano, propio de Dios todopoderoso, este arte por el cual todo fue sacado de la nada y que, gracias a él, siguen manifestándosenos la sabiduría y el poder divinos, es el mismo arte que sigue obrando a través de los artistas, haciéndoles producir obras bellas y proporcionadas. Sin embargo hay que tener muy en cuenta que dichos artistas no operan a partir de la nada, sino de una materia previamente dada. (p.138). De manera que la "creación" artística está sujeta a una materia preexistente. El sujeto humano no inventa, él es sólo un instrumento por medio del que actúa Dios. Esta concepción medieval se distancia del Renacimiento y con Marsilio Ficino (1433 - 1499) aún más. Él afirmaba que el ser humano podía fabricar todo aquello que la naturaleza hacía y aún más podía mejorarla y corregirla. 1.2.3. Categoría estética de lo Feo Sin la fealdad no se podría apreciar lo que llamamos belleza, por lo que deben coexistir las dos. "La fealdad es la carencia de medida" (Tatarkiewcz, 1997, p.158). El número, la armonía, el orden hallan relación con la belleza que descansa en las formas, en la naturaleza y en el ser humano. En el arte puede estar representada en medidas o en proporciones, sin embargo sabemos que este precepto en la realidad no siempre se cumple. 14 Plotino nos dice que "Se da la salud cuando hay en el cuerpo unidad armónica, la belleza cuando la unidad mantiene unidas las partes, y la virtud en el alma cuando la unión de las partes resulta de un acuerdo" (Romero,2007, p.10). Para Plotino es a partir de la unidad que surge el todo y si este se divide, al separar su unidad pierde su esencia, todo es una totalidad y la fealdad es lo incompleto, la antítesis del arte en el sentido tradicional. En cierta forma a lo largo de la historia la belleza ha sido considerada como la cualidad condicionante del arte, como determinante de la calidad de la obra, basada en estereotipos, fórmulas y disciplina. Pero la belleza para los movimientos del siglo XX , significó por el contrario un término caduco, donde características como: la deformidad, la fealdad, la desproporción y lo grotesco van a estar presentes en las obras de arte, aceptando valores estéticos opuestos, como reacción al estereotipo del arte formal. Lo que en el proceso histórico significó la ruptura de la relación del concepto de belleza como característica absoluta en el arte, siendo la belleza un valor subjetivo dado por las personas que aprecian el objeto, debido a que provoca sensaciones y emociones, correspondientes a su libre albedrio. Es así que el arte se vuelve invalorable desde un punto de vista meramente objetivo. 15 1.3. EL SER HUMANO COMO MEDIDA DE LAS COSAS 1.3.1. Las unidades de medida antropométricas en el arte Cada ser humano es un microcosmos y podemos entenderlo como un modelo a escala del universo. Cada galaxia, montaña, edificio o célula tiene una proporción en relación con el cuerpo humano. Aquí presentamos un esquema relacionando al ser humano con el macrocosmos y el microcosmos. Es importante tomar en cuenta la cantidad que representa el ser humano no solo frente a sus propias creaciones sino frente al Universo, porque de estas relaciones surgen consideraciones que nos permiten tener en cuenta la inmensidad del universo frente a la inmensidad del ser humano que al darse cuenta de sus referencias las compara con las de todo lo existente para encontrar comprensiones en su afán de entenderse y entender el universo. "El ser humano es la medida de todas las cosas"5 Protágoras (485 a. C.-411 a. C.). Todos los sistemas de medidas de longitud en la antigüedad derivaron de las dimensiones de las partes del cuerpo humano (el codo, el pie, etc.). Vitruvio, en la época Grecorromana al referirse a la construcción del templo griego comenta: "Por otra parte, ellos obtuvieron de los miembros del cuerpo humano las dimensiones proporcionadas que necesariamente aparecen en todos los trabajos constructivos, el dedo o pulgada, el palmo, el pie, el codo." Y así fue, hasta cuando se adoptó el sistema métrico decimal en el XVIII y el sistema internacional de medidas en el siglo XX, unificando así las diferentes unidades 5 http://es.scribd.com/doc/8832700/El-Hombre-Es-Medida-de-Todas-Las-Cosas 16 metrologías que existían hasta entonces en las diferentes regiones y que variaban por su imprecisión. Es así que las primeras relaciones de medida que el ser humano realiza nacen con la exploración del propio cuerpo y además derivan de las acciones y gestos humanos como la braza o la vara. Para la construcción de representaciones figurativas del cuerpo humano se utilizaron las medidas de longitud (distancia entre dos puntos). Las mismas que variaron entre las distintas épocas y civilizaciones. El sistema métrico romano y grecorromano (referentes al cuerpo humano) influenció en gran medida a la Edad Media y al Renacimiento en Europa, incluso hoy en día aún escuchamos hablar de estas medidas. 1.3.2. Canon artístico de la figura humana El término "canon" "es una forma normal en la que todas las partes están en justa relación entre sí y con el todo"(Stratz, 1926, p. 7). Proviene del griego Kanon que en un principio significaba "vara": que era la medida utilizada por el artesano (Souriau, 1998). Sin embargo, también se sabe que el término deriva de la palabra Qanu por su gran relación fonética. Pues estudios realizados por el Arquitecto Carlos Calvimontes Rojas (2009) en las estatuas de Gudea demuestran que el Qanu y La Gran U eran una medida sumeria utilizada para la representación de la figura humana, pero que no tenía un módulo como referencia. A lo largo de la historia el canon del cuerpo humano ha tenido diversas representaciones, no obstante este se obtiene partiendo de una unidad de medida o módulo que se encuentra en el mismo cuerpo. Por ejemplo, en el antiguo Egipto el módulo era el dedo o el puño que repetido 18 ó 21 veces daba la altura total. Mientras que en Grecia, se empleó como unidad la altura de la cabeza. Así Policleto (siglo V a.c.) estableció el canon de 7 y 3/4 alturas de cabeza que están presentes en su estatua 17 del Doríforo. Posteriormente, Lisipo y Vitruvio en épocas diferentes compartieron la idea de un canon de 8 alturas de cabeza. Así mismo ocurrió en el Renacimiento donde se adoptaron los cánones clásicos y a pesar de que existieron otras propuestas como la Exempeda (pie como módulo) de Alberti, la cabeza fue la unidad de medida más utilizada. Este modelo idealizado del cuerpo humano en el arte la mayor parte de tiempo no comparte con la realidad, pues cada persona es diferente y pertenece con su individualidad a diversos grupos sociales. Cada expresión de la representación del cuerpo está fuertemente vinculado al medio y lugar donde se desarrolla el arte. No obstante el canon que más ha influenciado es el europeo por lo que este de cierta forma ha universalizado la individualidad. 1.3.2.1. Canon antropométrico La antropometría no solo se encarga de estudiar las medidas del cuerpo humano, sino también las proporciones. El canon antropométrico se construye al obtener la medida media de una parte de la población específica. Quizá los primeros en aplicar la antropometría al arte antes de que el término exista fueron Alberti y Durero que mediante un estudio de comparación entre un grupo de individuos trataron de detreminar las medidas medias humanas con miras a la aplicación en la representación del cuerpo humano en el arte. Alberti dejó una serie de medidas en su libro De la scultura mientras que Durero en los cuatro libros de las proporciones, publicado póstumamente en 1528. De esta manera se han articulado numerosos cánones que aún más al acercarnos al siglo XIX; Quételet (1796-1874) considerado el padre de la antropometría aportó con su metodología a estudios posteriores. Así también Langer y Richer que detreminan la altura media del hombre en 7 ½ cabezas. 18 Cánones del siglo XIX Fot.8 Canon de 7 ½ cabezas Richer y Langer 6 Fot.9 Canon de 7 ¾ de Fristch y Merke 7 Fot.10 Canon de 8 alturas de cabeza Richer y Geyer 8 - Canon de Fritsch: 7 y 3/4, tipo normal hasta 1,70 cm. - Tipo normal de mediana: 7 ¾ cabezas hasta 175 cm de altura. - Tipo heróico de Richer, Geyer y Schadow : Canon de 8 : Heróico + 1,80 cm. A pesar de los numerosos estudios no es posible establecer en una única medida al ser humano, pero éstos canones serían una medida general, vemos que el canon cambia de acuerdo donde se hayan tomado los datos, además sus imprecisiones se dan por la población escogida. Statz utiliza la antropometría para su aplicación en el arte, compara el modelo natural humano con la figura representada. A continuación reproducimos las medidas antropométricas según Stratz (1926), (cabeza como módulo). 6 7 8 Imagen tomada de: Startz. (1926). La figura Humana en el arte. p. 11 Imagen tomada de: Startz. (1926). La figura Humana en el arte. p. 13 Imagen tomada de: Startz. (1926). La figura Humana en el arte. p. 15 19 Canon Hombre real 7 = 1.65 +- 7 ½ = 1.70 +- 7 y 3/4 = 1.75 +- 8 = 1.80 +- Todos estos autores han tratado de determinar las medidas de la figura humana, pero no se debe olvidar que cada ser humano tiene su propia estructura individual y que varía según la etnia, el género, la edad y otras variables. Startz nos dice que : "Los que quieran utilizar éstos cánones como regla para obras artísticas, no tienen más que construir para éstas una red de alturas de cabeza, si es que se limitan a una determinación según estas alturas" (1926, p. 19). 1.3.3. Proporción El argumento pitagórico sobre la objetividad estética se fundamenta en la armonía, representada en la medida correlacionada con el todo. “Se trata de la armonía y la armonía se deriva del orden, el orden de la proporción, la proporción de la medida y la medida del número”(Tatarkiewicz, 1997, p.232) Los aspectos de la proporción están relacionados al estudio estético en razón al postulado de que todo lo que posee una simetría es bello, el cuerpo es bello en base a ciertas proporciones matemáticas. La proporción es la relación de las partes con el todo y el canon es la justa relación que utiliza como unidad a un módulo. "Policleto definió la relación adecuada entre uno y otro dedo, entre los dedos y la mano, entre la mano y el antebrazo, entre el antebrazo y el brazo y finalmente, entre cada miembro y el cuerpo entero" (Panofsky,1998 ,p.85). Juan de Arfe (1535-1603) decía que mediante la medida de un miembro del cuerpo humano, podemos conocer la medida de todo el hombre, es decir, la proporción responde a que a partir de una parte se puede deducir el todo y a la inversa pues esta puede ser deducida de la totalidad. 20 La proporción se relaciona con la simetría, porque busca la armonía entre todas las partes que componen el todo, así como la belleza del rostro humano del que se dice que está determinado por la simetría. Aunque en la realidad hoy en día es comprobable que en la anatomía humana la simetría como tal no existe. Se puede comprobar que la simetría es un ideal más que una realidad. Stratz dice que "Todos los hombres tienen, más o menos grado, en su estructura corporal, pequeñas irregularidades, que Gaupp califica de "asimetrías normales" y que constituyen el carácter personal, no pudiendo considerarse como defectos sino cuando destruyen la armonía de una manera notable" (1926, p.5). 1.3.4. El Número Phi Fot. 11 Valor numérico de Phi 9 La búsqueda por la representación perfecta del cuerpo humano relacionó al número, a la medida y al canon con el arte. Desde la antigüedad, culturas como Grecia le dedican gran atención a la observación de la naturaleza como modelo de inspiración. Desde esta perspectiva es posible acercar uno de los conceptos matemáticos al arte, el número de oro o "Phi" al que se le ha dado una característica mística desde la antigüedad. Este número se obtiene al dividir un segmento en media y extrema razón, también llamado razón áurea, sección áurea, proporción áurea y divina proporción. Que se cree que se halla en toda la naturaleza e incluso en el cuerpo humano, tal es el caso que en el arte a mediados del siglo XX esta razón la utilizó Le Corbusier creando El Modulor (1949); que trata de un esquema de la figura humana que utiliza la secuencia numérica de Fibonacci. Si observamos en la figura del Modulor en la sección roja podemos darnos cuenta que esta desciende en cifra con la serie de Fibonacci de forma que al sumar la dos cifras anteriores obtenemos la siguiente que al dividirla por la anterior nos da 1.6 hasta aproximarse a 1.618.Como por ejemplo: 9 http://centros5.pntic.mec.es/ies.victoria.kent/Rincon-C/Curiosid/Rc-25/RC-25.htm 21 698 + 432 = 1130 1130 / 698 = 1.61891... 432 + 267 = 698 698 / 432 = 1.61805... 267+ 165 = 432 432/ 267 = 1.61797... Fot.12 El Modulor, Le Corbusier. 10 Desde épocas anteriores le han dedicado a este número muchos estudios. Luca Paccioli (1445 - 1517) escribió La Divina Proportione y Zeising en el siglo XIX encuentra la proporción aúrea en el crecimiento de las ramas de las plantas y en toda la naturaleza, además establece un canon humano con éstos referentes pues se basa en que toda estructura natural comparte cierta relación con la proporción aúrea. Este tema que se ha tratado desde un punto casi divino también ha sido abordado dentro del arte como una busqueda de la perfección de las cosas. De esta manera el canon humano a lo largo del tiempo actúa como un referente histórico porque es la manifestación de la figura ideal de determinado tiempo, así como también de determinado artista. 10 Rescatado de: http://www.arkinetia.com/breves/le-corbusier-modulor_a449 22 Los primeros referentes del ser humano son los concretos en base a su cuerpo, como por ejemplo el sistema de construcción de la figura humana que aplicaron los egipcios o el homo cuadratus de Da Vinci y el Modulor en el siglo XX. Dalí (1904 1989) fué también un claro ejemplo al implantar en sus pinturas el estudio de los sólidos platónicos y de la razón áurea. 23 CAPÍTULO II 2. LAS FORMAS DE REPRESENTACIÓN DEL CUERPO HUMANO A TRAVÉS DE LOS PERIODOS DEL ARTE 2.1. LA FIGURA HUMANA EN EL TIEMPO A lo largo del tiempo, el ser humano desde sus primeras manifestaciones en las cavernas se ha representado a sí mismo. Este interés por retratarse ha tenido diversas motivaciones que han cambiado continuamente junto con las ideas y percepciones de cada época; las que en efecto han determinado la reproducción de la figura humana en el arte. Dentro de la historia del arte existen lineamientos generales que se comparten con un determinado estilo artístico o con un periodo. Sin embargo, la representación de la figura humana responde también al entorno y a la zona geográfica donde a pesar de que siga un mismo patrón, cada artista tiene su forma individual de representar y realizar cada trazo. Y todas estas particularidades en su representación permiten reconocerlo dentro de una época artística específica o a un artista en concreto. 2.1. 2. La imagen del ser humano en la prehistoria La representación de la figura humana en el arte prehistórico ha estado fuertemente vinculada a las creencias cosmológicas y rituales. En su paso por el mundo, el ser humano ha dejado su huella al utilizar diversos signos, símbolos y formas como medios expresivos, tales signos por mencionar algunos se componen de puntos, líneas, triángulos, círculos, espirales y motivos geométricos, a los que se les ha atribuido una naturaleza mágica y simbólica. Que evidentemente han dado lugar a varias interpretaciones como es el caso de los dibujos circulares que han sido asociados al sol, a la luna y a los astros (Ruiz, 2009), e incluso a las formas femeninas. Esta relación con la representación antropomorfa se halla inspirada en el mundo sobrenatural que está fuertemente vinculado a la fertilidad y a la tierra. Mostrándonos que en el principio del arte, la mujer desarrolla un papel muy importante. 24 Se cree que durante el Paleolítico, la representación zoomorfa y de signos prevalecen por encima de la antropomorfa, pues se conocen en menor grado las representaciones de la figura humana datadas de esta época (Historia Universal vol.1, 2004), no obstante se sabe que a esta etapa pertenece la representación de un hombre y un bisonte hallada en Lascaux (15.000 a.c). A esto se suma también el descubrimiento de pinturas antropomorfas consideradas como la más antiguas hasta el momento, ubicadas en la Grotta de Fumane (Italia) con una antigüedad de 32.000 aproximadamente. Una de la mayor prueba del paso del ser humano por las cavernas es la impronta de la mano que ha quedado inscrita en las paredes como las que se encuentran en la Cueva de las Manos en Argentina. Todos éstos acontecimientos visuales son seguramente las primeras manifestaciones gráficas de comunicación y sin duda el antecedente más cercano de la escritura que ha quedado plasmados por el hombre en la memoria de las cuevas, piedras, huesos y en toda estructura que la naturaleza nos ha provisto. Al hablar de pintura parietal (mural) en términos generales observamos que no existe intención en trazar detalles ni rasgos anatómicos definidos, a excepción de resaltar ciertas características. A menudo en la pintura, la figura del hombre y de la mujer están claramente diferenciados por el órgano reproductor masculino (figuras sexuadas) y también por el tipo de actividades que realiza, como plantea Jean Clottes (2008) al mencionar que es posible identificar al hombre por el uso de armas al estar vinculado a la casería. Mientras que en la mujer se distingue por el tipo de vestimenta, por la representación de los pechos y por la actividad de la recolección. De esta misma manera se expresa la forma femenina en la escultura donde existe un marcado predominio de figurillas femeninas que en su mayoría muestran proporciones del cuerpo exageradas, mediante la acentuación de los órganos sexuales reproductivos. Este patrón se observa alrededor del mundo en los ídolos femeninos como las Venus de 25 Brassempouy (Francia), Winderdolf (Austria) y la Venus de Dolní Věstonice en (República Checa). Sin embargo, lejos de convertirse en un ideal de un cuerpo simétrico buscan resaltar lo que les parece más importante mediante el aumento del tamaño de las proporciones. Es decir, que si bien no tuvieron un canon propiamente dicho durante la Prehistoria, las imágenes y efigies guardan un vínculo estrecho con el simbolismo adoptando la voluptuosidad como modelo. Es por esta fuerte asociación que se ve repetido el patrón que resalta los atributos de la mujer al agrandar las proporciones anatómicas que estaban asociadas con la vida y por ende con la perpetuación de la especie. Por otro lado, dentro de la representación gráfica en la prehistoria, nos encontramos con una serie de figuras que en su mayoría se conservan en posición hierática, sin embargo resulta fascinante el dinamismo que sugiere el cuerpo en movimiento que es resuelto a través del aumento de dimensión en las extremidades. Estas primeras manifestaciones del ser humano son estrechamente parecidas a los primeros trazos de los niños y corresponden más bien a siluetas sintetizadas de trazos rígidos y esenciales en donde se deja de lado la intención realista, no obstante se observa una notable capacidad de simplificación. De igual forma al existir una fuerte implicación mística es evidente que la creación se establece a partir del realismo y la abstracción, es decir a través de lo que se observa, lo cotidiano y de lo que no, que es lo sobrenatural. Y el teriantrópodo (parte hombre parte animal) es una de las manifestaciones más comunes en el arte rupestre. A pesar de esta mirada general se debe tomar en cuenta que las representaciones advierten diversas formas ya sea según los periodos y las regiones, pues así como tantas personas diferentes hay en el mundo también se distinguen notables variaciones al representar el cuerpo humano. Prueba de ello son las escenas caracterizadas de gran dinamismo de la pintura levantina o la rigidez de los hombres pintados en la Sierra de San Francisco (Estados Unidos) 26 ubicados en "Cueva Pintada" y considerados como parte del arte Paleolítico en América. No obstante una de las características que conservan las primeras manifestaciones de arte es la ley de "frentalidad" que se verá en todas las primeras civilizaciones como en Egipto y en la representación del arte griego arcaico. 2.1.3. La figura humana en la cultura egipcia A diferencia de los artistas primitivos, los egipcios son los primeros en representar el cuerpo humano mediante un esquema modular que se verá también en el canon griego. Sin embargo se puede decir que los artistas egipcios más que la aplicación de un sistema de proporciones se basaron en un sistema constructivo para representar el cuerpo humano. Se conoce que los Egipcios le otorgaron gran importancia a la conservación del cuerpo humano, así como también a la representación de la imagen corpórea por estar considerados como vínculos que aseguraban la vida después de la muerte, por lo que al plasmar gráficamente el cuerpo humano cuidaban del detalle para no omitir ningún rasgo que vaya a afectar al representado en su regreso. Por tanto la representación de la figura humana era realizada desde un ángulo que mostrase su totalidad (Ley de frontalidad). La cabeza y las piernas eran plasmadas de manera que quedasen de perfil donde se exponían desde un eje plenamente visible, mientras que el pecho y los brazos permanecían de frente, mostrando dos proyecciones diferentes en una misma figura. La pintura era lineal y carente de profundidad con la visión de un plano único para el fácil reconocimiento de las partes que conforman la imagen. Las figuras eran representadas mediante un sistema homogéneo de normas como la variación de color siendo el hombre representado de un color más oscuro que la mujer (Gombrich, 1997) como en la "Escultura de Rahotep y Nofret". además del esquema de variación de la escala de los personajes de acuerdo a la importancia de éstos. Por esta razón se pueden observar diversos tamaños del cuerpo en una misma pintura (perspectiva jerárquica). Tomando en cuenta también la composición que dividía las escenas en franjas donde se puede observar personajes a diversas escalas. 27 Los estrictos parámetros a la hora de representar las proporciones de la forma humana se basaron en la utilización de una cuadrícula uniforme subdividida en 19 partes iguales (Stratz, 1926) y en 18 ó 22 unidades (Panofsky,1995) que tenían como unidad de medida al dedo de la mano ó al puño. Esto suponía para los egipcios una base para organizar la figura en los determinados segmentos, sin embargo no todas las líneas que atraviesan la imagen son significativas, " ya que no se preocupaban en hacer coincidir cada línea de la retícula con las articulaciones de carácter importante"( Panofsky, 1995, p. 83). Este mismo sistema de retículas también fue la base constructiva para la escultura en el que previamente se dividía el bloque, esto se conoce gracias a un papiro conservado en el Museo de Neues (Berlín) que muestra el sistema de construcción que utilizaban los escultores egipcios y por las huellas de las redes que han quedado en algunas de las escenas. Este esquema de rejillas significó todo un modelo de distribución de las proporciones del cuerpo humano y además sirvió también de soporte para la representación de las imágenes en movimiento que sutilmente cambiaban de posición sin alterar su patrón ni sus dimensiones. Por esta razón las imágenes muestran un movimiento mas mecánico que orgánico, en posturas más que en desplazamientos. Sin embargo esta idea de movimiento generalmente estaba sugerida por la representación de una pierna rígida y otra que se le adelanta insinuando avanzar. Esta distancia, Panofsky (1995) la representa en unidades mesurables a las que ubica en la cuadrícula donde establece para la imagen en movimiento un recorrido de diez unidades y media (desde el comienzo de un pie al otro), mientras que en una figura erguida determina la distancia aproximadamente en cuatro y media o cinco y media unidades. Lo que respondería a que el canon egipcio, de acuerdo con lo expuesto tenía una función específicamente constructiva que ordenaba en la retícula las partes del cuerpo que iban a ser representadas sobre el esquema, pues al tener una ubicación determinada, facilitaba su representación. Proyectando así una 28 figuración homogénea que además les permitía hacer la misma figura en diferentes escalas siguiendo un mismo patrón. Por otro lado, tomando en cuenta el punto de vista anatómico, el Dr. Stratz (1926) nos convence de que la representación de la figura egipcia no corresponde al reflejo del cuerpo real, pues señala que las figuras se muestran desproporcionadas. Esta afirmación se da en base a que según el autor "el ideal desnudo egipcio se deriva del cuerpo vestido" (Stratz, 1926, p.60), pues generalmente la vestimenta se dibuja en la cintura lo que crea la sensación visual de las extremidades inferiores más largas en relación al tronco. Pero lo que no se ha tomado en cuenta es que las largas extremidades son porque probablemente no existió en el arte egipcio una demanda de crear una figura en base a las medidas de un cuerpo real. Así entonces, mientras el sistema egipcio se aferraba a un modelo fijo, los griegos se sujetaban a una antropometría estética para acercarse a la verdad natural. 2.1.4. Grecia: El ideal del cuerpo humano El cuerpo humano fue motivo de inspiración para el arte griego que surgió a partir de la práctica de los Juegos Olímpicos, pues "Solo el atleta, dice Lange , introdujo la desnudez en la vida y en el arte griegos"(Stratz, p.64). Lo que por consiguiente representación determinó del la cuerpo despertando a su vez la apreciación de la belleza de las formas humanas que iban en busca de un modelo estético. Sin embargo no es la pintura la que en su mayoría representa el dominio del cuerpo humano, sino la escultura. Todos los cánones que nos 29 han llegado hasta hoy en día provienen de las artes plásticas. Después del periodo Arcaico griego se rompe con la rigidez que en un principio se conservaba de la figura de Egipto. Poco a poco este entendimiento del cuerpo humano va derivándose en figuras anatómicamente exactas y en posiciones fisiológicas que se acercan a las correctas. Mientras que por otro lado, la representación del cuerpo admite un mayor desplazamiento y experimenta con diferentes posturas, así se rompe la ley de "frontalidad" Arcaica. Una de las actitudes humanas más comunes representadas en el arte griego es el "contrapossto" (pierna en tensión y la otra flexionada) que se hace evidente en el Doríforo, el Idolino, el Discóbolo. Esta dinámica es la que provoca la sensación de movimiento como si quisieran las estatuas echarse a andar, en donde la expresión del movimiento del cuerpo se hace orgánico a diferencia de la figura egipcia. Así, queremos dejar en claro que para la representación de la figura humana los griegos no sólo se ocuparon de establecer determinadas proporciones sino de aplicar las bases anatómicas. En un estudio publicado por el Dr. Straz, se muestra que en la plástica griega se representaba el cuerpo cuidadosamente desde las articulaciones dejando también en evidencia líneas de torsión que se forman en los pliegues de la piel, venas exaltadas por la fuerza y músculos pronunciados que se acentúan cuando un cuerpo se mueve o gira. Todos estos detalles en función de acercarse a la verdad natural. Para los Griegos el cuerpo humano fue motivo de contemplación y estudio, lo que representó para la época clásica la búsqueda del dominio de las proporciones humanas. Pues la disposición de la figura se encontraba sujeta a un ideal estético que relaciona la medida como principio de belleza. Sin embargo no todo lo que obedece a una regla es estrictamente bello, pues no todo objeto a pesar de ser simétrico causa una impresión óptica correcta. Dentro de la concepción griega las proporciones humanas estaban determinadas por la experiencia visual. De acuerdo con esta noción, la belleza del arte griego no radicaba únicamente en un sistema simétrico, aunque parezca paradójico sino que estaba influenciado también por consideraciones de perspectiva, ya que al alterar los rasgos de las figuras humanas a un modo irregular y desproporcionado conseguían que se produjese una impresión armónica de las formas ya que ciertas imágenes estaban concebidas para ser vistas desde un punto de vista determinado, para causar la 30 impresión justa, pues: "La naturaleza de los sentidos al deformar lo que percibe, hace que se tenga de la simetría una impresión que no es simétrica-tiene entonces que transformarse de tal modo que proporcione impresiones eurítmicas" (Tatarkiewicz, p.122). Tal es el caso que la iluminación y la ubicación de las figuras a ciertas distancias pueden crear diversos efectos y alteraciones sobre las imágenes, ejerciendo impresiones distorsionadas sobre los sentidos de percepción, motivo por el que aplicaban la asimetría. Esto explica que a pesar de que representan el ideal de belleza mediante un canon también buscan la sensación visual real. De esta misma preocupación no se tiene conocimiento de que haya sido aplicado en la pintura (Panofsky, 1995). En todo caso, en el periodo clásico existieron varios modelos antropométricos aplicados a la representación de la figura humana, el canon ideal respondía a 8 alturas de cabeza, el que ha trascendido hasta nuestros tiempos y que aún hoy en día se enseña en muchas escuelas de arte. El canon del Dioríforo de Policleto según Stratz (1926) se acerca a 7 y 3/4 alturas de cabeza mientras que otros se acercan al natural de 7 1/2 y de 7 3/4 aplicada para la figura-retrato. Vemos que en este caso la unidad de medida constante es la cabeza, una unidad mucho más grande de la que utilizaron los egipcios para la construcción de la figura humana. Por otro lado, dentro de la teoría clásica, el canon griego en lugar de una división en cuadrículas y multiplicación mecánica para determinar las proporciones o divisiones constructivas del cuerpo estableció un sistema orgánico, es decir un método que relaciona las diferentes partes del cuerpo con el todo. Este sistema de proporciones nos transmite Vitruvio en los textos que ha dejado. Panofsky (1995) : a) rostro ( desde el comienzo del cabello hasta la barbilla) = 1/10 (de la longitud total); b) mano (desde la muñeca hasta la punta del dedo corazón) = 1/10; c) cabeza (desde la barbilla hasta la coronilla) = 1/8; d) del hoyo de la garganta hasta el comienzo del cabello = 1/6; e) del hoyo de la garganta hasta la coronilla = 1/4; 31 f) longitud del pie = 1/6; g) codo = 1/4; h) grosor del pecho = 1/4. (p.118) Estas mismas especificaciones que determina Vitruvio sobre las proporciones del homo bene figuratus, las veremos tiempo más tarde en otras teorías del Renacimiento. Cabe recalcar que las relaciones de proporción que se presentan en el cuadro de Panofsky, sólo son algunas de las que determinó Vitruvio. Estas relaciones de proporcionalidad del cuerpo son expresadas en fracciones de longitud total en base a una unidad constante que vemos que no sólo es la cabeza, es decir hay una unidad constante en relación con una unidad mayor. Por otro lado dentro de las especificaciones de medidas de Vitruvio existen datos que no concuerdan con lo real que serán corregidos por los artistas del renacimiento. Vitruvio, ya además de establecer las dimensiones relaciona también al hombre con las formas geométricas; el cuadrado y el círculo determinando que el centro es el ombligo pero matemáticamente es la pelvis. Este carácter antropométrico que conserva la teoría clásica responde a la concepción estética de la época que ha determinado en expresiones numéricas las diferentes partes del cuerpo humano. Porque por un lado, el arte clásico debía adaptarse a un sistema de proporciones objetivo o arriesgarse a excluir el sistema de proporciones para cumplir con la experiencia visual (euritmia). Es decir, que esta búsqueda de la perfección no radica meramente en un número exacto pues si trasferimos las relaciones de proporción a medidas (cm) no van a ser exactas, sino que es una aproximada porque utiliza un módulo que tiene como medida a la cabeza, y al ser parte del cuerpo no es un sistema numérico. 2.1.5. Edad Media: El simbolismo frente a la forma de representación humana. Tras la caída del imperio Romano se constituye el fin de la historia clásica antigua y con ello el abandono del modelo griego de representación de la figura humana. La creación del arte durante la Edad Media va a estar determinada por el cristianismo de los primeros tiempos que en efecto condicionarían la representación de la figura 32 humana. Prueba de ello es la imagen de Cristo la que se convierte en motivo de representación principal, sin embargo mucho antes, el cristianismo primitivo apoyado ya en la prohibición bíblica, rechazaba cualquier representación naturalista de la imagen que pudiese ser motivo de idolatración. Por lo que la utilización de íconos era muy común durante el paleocristianismo. Cristo era representado simbólicamente mediante el cordero y no fue hasta el concilio del 691 cuando se establece que se muestre el rostro de Jesús en la representación pictórica. Estos hechos repercutirían en una constante lucha a favor y en contra de las imágenes, y en particular en la estatuaria, que de acuerdo con Gombrich (1997), en un principio es objetada por encontrarla semejante a los ídolos paganos, a diferencia de la pintura que halló mayor aceptación por ser considerada útil para el propósito sagrado de instruir al pueblo, pues " La pintura puede ser para los iletrados lo mismo que la escritura para los que saben leer " (Gombrich, 1997, p.135). Principio defendido por el papa Gregorio el Grande hacia el siglo VI. Batalla que terminaría definitivamente en el 842 d. C. año en el que se abolió definitivamente las leyes iconoclastas por la emperatriz Teodora. Por tanto el objetivo de la pintura medieval era representar claramente el mensaje de la doctrina cristiana más que reproducir formas naturalistas que pudiesen distraer a los fieles. No es la representación del cuerpo humano el centro del arte, sino Dios y su mensaje. Esto se verá reflejado en la construcción de la figura humana en donde se observa ningún rasgo en cuanto a la herencia antigua del conocimiento anatómico. Las figuras no poseen un volumen corpóreo sino que más bien son planas y hieráticas, pues su intención no es la imitación del modelo real ni la creación de un ideal como lo fue para el arte griego. "Por tanto no fue un arte de formas sino de ideas" (Santiago Sebastián, 1994, p.229). Esta esquematización de la imagen se muestra también a favor de no caer en lo profano que una imagen naturalista pudiese causar, por esto se muestran en formas simplificadas y que permitía la iconodulia (veneración de imágenes). Sin embargo esto no quiere decir que rechazaran toda propuesta estética para plasmar la imagen humana, dentro de la teoría de las proporciones del Medioevo, la imagen responde a un "esquema planimétrico", que de acuerdo con Panofsky, es representada en dos diversas formas, la primera a la manera bizantina y la segunda a la gótica. 33 2.1.5.1. Canon Bizantino El canon bizantino descrito en el Manual del pintor del Monte de Athos, obedece a un sistema que utiliza como módulo a la cara y la suma de nueve veces su altura dará como resultado la longitud total del cuerpo. Dentro de este mismo contexto Myrna Soto (2005), nos dice que este canon de nueve rostros también es conocido como canon "Varroniano" atribuido por algunos autores a Marco Terencio Varrón (116 a. C. 27 a. C.). Este canon se puede ver reflejado en obras bizantinas del siglo XII y XIII y que Panofsky (1997) afirma que ha tenido gran influencia hasta de los siglos XVII y XVIII, así como también en teóricos como Gaurico, Ghiberti y Filarete. La teoría bizantina de las proporciones humanas parte de una unidad específica que se relaciona con un sistema que multiplica la unidad para obtener las diferentes dimensiones del cuerpo humano. En este caso, la nariz es la unidad de medida constante para la reproducción de las dimensiones específicas de la cara, y es un tercio de ella. Esta misma subdivisión del rostro en tres partes coincide con lo que había dicho ya Vitruvio y tendrá también gran influencia durante el Renacimiento. Es así, que este mismo postulado se recrea en el tratado de pintura de Cennino Cennini (XIV). Dentro de la teoría bizantina la longitud de la nariz además de determinar la medida del rostro actúa también como base para la construcción de la cabeza. Panofsky (1997) advierte que la cabeza está formada por un esquema de tres círculos concéntricos de diferente tamaño como en la imagen que hemos recreado, el primero parte de la nariz y circunscribe mejillas y frente, mientras que el segundo limita el contorno del cabello terminado su recorrido en la barbilla, y el último coincide generalmente con la aureola. Así mismo se utilizó el esquema de los tres círculos para representar la cabeza en otras posiciones (3/4), sin embargo esto supuso que las dimensiones cambiaran y la medida de la frente se redujo. 34 En consecuencia, en el Manual del Monte Athos no sólo estaban determinadas las proporciones, sino que también se encontraban directivas de cómo debían representarse los personajes. Por lo que el trabajo del artista no era crear sino seguir aquellos parámetros establecidos. Es por esta razón que se observan ciertos detalles comunes en los rasgos faciales de los íconos bizantinos, como las cejas arqueadas o la forma de la nariz que acaba en forma de gota alargada y triangular. Pareciéndose más a un prototipo o modelo objetivo. Fot.18 Ícono de la Santa Faz XIII, Moscú. 11 Fot.19 Deesis, Sofía, XV, Estambul Gal. Nacional.12 Fot.20 Detalle de Cristo crucificado (1200) Pinacoteca Cívica de Lucca. 13 Estos "prototipos" religiosos pretendían establecer una unidad homogénea no sólo en cuanto a la representación de la forma humana sino en cuanto a los gestos que llevaban los personajes para su unificación con el fin de hacer fácil el reconocimiento del personaje para los iletrados. La representación de las imágenes lograba una conexión espiritual y de significado con todo motivo de ilustración. Algunas de las fórmulas para la representación de las imágenes fueron recogidas por el monje Dionizego Furny que se encuentran en su tratado Hermeneia o Podlinnik (1734) que habla sobre la representación del rostro. A continuación transcribimos algunas de las fórmulas que recogió de los textos más antiguos y que los artistas de la época debieron haber conocido. 11http://foros.marianistas.org/showpost.php?s=a0e8e3e20f9915024f694975d2e2f55a&p=22023&postcou nt=3 12 http://foros.marianistas.org/tema-1525.html 13 http://es.wikipedia.org/wiki/Crucifijo 35 - Las anchas frentes indican sabiduría y fortaleza espiritual. - La boca es fina, alejada de toda sensualidad. - Las orejas son visibles siempre, prontas a la escucha (excepto en la Virgen con velo, donde sólo se mostrará el lóbulo). - Las orejas están pegadas al cráneo para indicar la fidelidad de la escucha, están a la altura de la nariz y son de menor tamaño que ésta. - El lóbulo de la oreja a la misma altura que la gota de la nariz indicando la sincronía entre los sentidos. - La línea del párpado inferior va disminuyendo de grosor para concentrar la mirada más en el observador pero hacerlo con amabilidad. - El rostro nunca es simétrico; la cara gira levemente hacia su izquierda y el ojo derecho es más pequeño que el izquierdo para indicar que Cristo se vuelve hacia el observador, se torna a él. - La nariz comienza también en forma de triángulo equilátero en entrecejo y acaba en forma de gota mostrando la suspensión del tiempo en la eternidad 14. Todas éstas fórmulas textuales están ligadas a un discurso simbólico y vienen determinados por componentes religiosos ajenos al naturalismo del cuerpo humano en donde prevalecen las relaciones simbólicas y el mensaje. 14 http://www.panyrosas.es/El%20Resplandor%20de%20los%20Iconos.pdf 36 Esquema de la nariz en base al principio bizantino de representación humana Fot. 21 Detalle del rostro del ícono de la Santa Faz. 16 Fot. 22 Esquema nariz.15 Observamos que el hieratismo de los personajes caracterizan al esquema bizantino y que en su mayoría son figuras alargadas, rígidas y erguidas que conservan la posición frontal, abandonando todo aquel ideal del arte griego. 2.1.5.2. El sistema Gótico de representación del cuerpo humano Dentro de la teoría de representación del cuerpo humano, se conoce que es el arquitecto Villard de Honnecourt (1200 1250), quien establece en su álbum de dibujos un método de diseño de la figura humana en base a esquemas geométricos. El método gótico muy al contrario del canon bizantino experimenta el desapego por un sistema de medidas para la representación del cuerpo humano y está muy lejos de establecer las dimensiones abandonando así el módulo. Este sistema es más un método auxiliar de construcción de la figura humana en base a un esquema geométrico. No toma como base la estructura orgánica del cuerpo humano sino formas como el círculo, el cuadrado, el triángulo e incluso el pentagrama, que se presentan como una especie de geometría oculta en las figuras constituyendo un nuevo distanciamiento de la teoría clásica. 15 16 http://www.atelier-st-andre.net/es/paginas/estetica/estilizacion_bizantino.html http://www.panyrosas.es/El%20Resplandor%20de%20los%20Iconos.pdf 37 Fot. 23. Rostros incritos en formas geométricas por Villard de Honnecout 17 Así entonces, más que establecer las proporciones humanas este sistema sirvió propiamente para determinar las direcciones del movimiento de las figuras mediante la utilización de un método de líneas guía que coinciden con los contornos y articulaciones. El álbum de dibujo de Honnecourt estaba hecho para ser aplicado en la arquitectura. De ello se conoce que éstos dibujos sirvieron de modelos para los artistas de esta época. Donde al sustituirse los muros por grandes ventanales y la pintura al estar inherente a la arquitectura debía adaptarse a dicha estructura y sólo mediante un esquema de la figura geométrica se facilita su aplicación y también facilitaba el traslado. La cabeza del Cristo de la Catedral de Reims (fotografía abajo izquierda) guarda una notable relación con uno de los esbozos del Arquitecto Villard de Honnecourt en donde resalta la idea de un cuadrado inscrito. Este tipo de modelos también se presentan en iluminaciones que tomaban a la estructura arquitectónica como inspiración. 17 Panofsky, (1995). El significado de las artes visuales. (p.101) 38 Fot.25 Construcción del rostro en base a una cuadrícula. 18 No obstante, el carácter planimétrico y esquematizante en la posteridad tomará fuerza a través de la observación del natural que a medida que se adentra a una representación más fidedigna del natural abandonando este sistema de construcción de la figura . 2.1.6. Retorno al ideal. El Renacimiento Al abandonarse la esquematización Medieval de la figura humana, se adoptan nuevamente los cánones de la Antigüedad proponiendo una vuelta hacia lo clásico. Lo que significó para los artistas renacentistas el estudio de los postulados antiguos y con ello a Vitruvio y su sistema antropométrico de ocho longitudes de cabeza. Sin embargo más que la búsqueda de un modelo antropométrico único en el arte cada artista perseguía el suyo propio en donde se verá reflejada su individualidad. El estudio de las proporciones, la anatomía, la perspectiva y los tratados antiguos marcan un hito a partir en que los artistas renacentistas desarrollaron nuevas formulaciones elevando al arte a una disciplina racional. Alberti (1404-1472), Da Vinci (1452-1528) y Durero (1471-1528) son quizá los artistas que más han aportado a los estudios teóricos sobre la construcción de la forma humana. Sin embargo para representar el cuerpo humano de manera objetiva no solo es necesario aplicar las medidas y proporciones adecuadas sino representar al individuo tal y como es en realidad en base al estudio de su estructura natural. Para conseguirlo, los maestros renacentistas se apoyaron necesariamente en la ciencia que va a servir como soporte constructivo para este fin. Bajo este planteamiento: la matemática, la geometría y la 18 Recuperado de : Panofsky. El significado de las artes visuales (1995). 39 anatomía se estudiarán durante el Renacimiento en virtud de lograr una antropometría estética aplicada a contribuir a una representación visual que creían correcta. Esto responde a la tendencia hacia un realismo antropométrico apoyado en la idea de que el arte es bello en medida que se acerca más a la realidad, se conoce que Da Vinci para la comprensión de la estructura humana diseccionó varios cadáveres y que Durero apoyado en la Geometría realizó una serie de modelos humanos, mientras que Alberti propuso la búsqueda de la clave para la construcción del cuerpo humano tomando como base la osteología, pues sólo el estudio del cuerpo en sí mismo a partir de la investigación empírica puede proporcionar un entendimiento de su estructura. Esto se da "debido a que la consideración de la estructura ósea se corresponde estrechamente con las medidas corporales, y si el artista conocía la dimensión de los huesos, se garantizaba poder deducir correctamente las proporciones" (Crespo, 2009, p. 499). Este vínculo entre anatomía y arte se verá reflejado en algunos de los artistas que recurren a los tratados de medicina como lo hace Ghiberti (1378-1455) que mucho antes de Alberti propone un vínculo entre proporción y anatomía al estudiar a Avicena. Alberti (1999) argumenta lo siguiente: Y están en lo cierto, pero así como, para un hombre vestido, es preciso dibujarlo antes desnudo y luego envolverlo con ropas, así también para pintar un desnudo es preciso situar primero los huesos y los músculos, que luego cubres de carne y de piel de modo que no será difícil percibir la posición de los músculos (p. 99, versículo 36). Esto confirma el compromiso que tenía el artista de profundizar en el conocimiento para representar los objetos tal y como son en la realidad, y que efectivamente se hace evidente en el tratamiento de la composición del cuerpo que para Alberti tenía que seguir un proceso que determinaría la adecuada representación presente en su tratado de pintura. Por otro lado, los cánones que conocemos son los que nos han llegado de la antigüedad clásica y si revisamos provienen de modelos escultóricos como el tratado de estatuaria de Policleto o de los tratados de arquitectura de Vitruvio, que en efecto han sido admitidos por la pintura al no tener más referencias que éstas. 40 Para hablar de las proporciones humanas que Alberti formula, primeramente hay que remitirse a su tratado De la escultura (1451), en donde el artista aborda la representación del cuerpo humano desde una visión antropométrica mientras que en los escritos sobre pintura este tema es emprendido desde un punto de vista anatómico más que desde las mismas proporciones humanas. Alberti en su tratado de escultura establece una tabla de dimensiones del cuerpo humano, tomando como referencia un grupo de individuos para así fijar un término medio de las medidas del hombre, cantidades que obtuvo mediante un sistema de medida al que llamó exempeda. Este sistema básicamente divide la longitud total del cuerpo en seis pies y cada pie en diez pulgadas y cada pulgada en diez minutos, cada una contenida en la anterior en partes iguales. Por lo que la longitud total de un hombre de acuerdo con esta formulación sería de seis pies, sesenta pulgadas o seiscientos minutos, que a continuación se recrea en el recuadro siguiente. Canon de Alberti "Exempeda" Medida de la altura total División por unidad del cuerpo contenida en un pie Pies Pulgadas (unceoale ) Minutos (minuta) 6 pies de la altura total 60 600 1/6 1/10 1/100 Entonces si decimos que la altura total es de seis pies, cada pie está dividido en diez pulgadas y estas mismas diez en diez minutos lo que equivale a cien minutos que tiene cada pie y que se observa en el recuadro anterior. Sin embargo este canon no llegó a trascender durante el Renacimiento así se siguieron usando los cánones convencionales 41 que tenían como módulo la cabeza. Alberti mediante la Exempeda no solamente sistematizó la teoría de las proporciones, sino que tenía la ventaja que este sistema le permitía representar a cualquier escala. Cabe recalcar que este esquema de medida longitudinal está hecho para ser aplicado tanto en la pintura como en la escultura, así lo reitera Alberti en las últimas páginas del tratado De la escultura. Todo esto implicaba que el artista sea también un inventor. Alberti para realizar la tabla de proporciones humanas debió resolver un reto, pues al darse cuenta que para obtener las medidas de la estructura humana implicaba un método especial, ideó el finitorium (Ver anexo). Así como Alberti fija la exempeda a partir de la afirmación de Vitruvio de que el pie es la sexta parte de la altura total del cuerpo y renuncia al módulo tradicional. Leonardo Da Vinci recurre al canon de ocho alturas de cabeza (que va desde el mentón hasta la coronilla) o diez unidades de cara (desde el mentón hasta el nacimiento del cabello) que equivale a la altura total del cuerpo y que es el canon más utilizado por la mayor parte de artistas como Tiziano y Raphael. Sin embargo persiste también el canon de nueve unidades heredado por el manual del monte de Athos y transmitido por Ceninno, y que perduró aún en los países del norte que estaban ligados a la tradición gótico bizantina y que Da Vinci utiliza según el caso. (Souriau, 1998). Por otro lado, también dentro de la teoría de la proporciones permanece el concepto sobre la subdivisión del rostro en tres partes iguales transmitido en principio por Vitruvio, posteriormente por el canon bizantino y retomado por Ceninni en El Libro del Arte: "Para empezar, el rostro, como te dije antes se divide en tres partes, a saber: una, 42 la cabeza; otra la nariz; y de la nariz al mentón, la tercera." (Cennini, 2008, p. 81).Por lo que se puede entender este proceso como una recapitulación del arte clásico, los artistas renacentistas en su mayoría estudiaban los manifiestos anteriores y a Vitruvio. Da Vinci también estudia el sistema de proporciones clásico y determina que la altura del hombre es igual a la longitud de los brazos estirados de acuerdo con el hombre de Vitruvio. También comparte con la teoría clásica que el hombre inscrito en un círculo y en un cuadrado tiene su centro respectivo. En el círculo su centro es el ombligo, mientras que en el cuadrado es la pelvis que divide al cuerpo en dos partes iguales. El ombligo es el centro natural del cuerpo y la pelvis el centro matemático. Hombre de Vitruvio: Fot. 28 Ombligo centro del círculo19 Fot. 29 Pelvis centro del cuadrado 20 Pero si comparamos los planteamientos defendidos por Alberti y los establecidos por Da Vinci encontramos que por un lado Alberti trata de establecer un ideal de medida del hombre preocupándose más por perfeccionar el sistema de medida, en cambio Da Vinci se dedica a la observación de la naturaleza y al estudio de la anatomía y no se esfuerza por buscar otras unidades de medidas sino que mediante "analogías" relaciona entre sí las diversas partes del cuerpo expresando las proporciones en relación al conjunto. Más tarde Durero considerado el introductor del Renacimiento en Alemania, recurrió a un método que no utiliza una unidad constante de la longitud total del cuerpo, sino que 19 20 Recuperado de :http://epsomat.blogspot.com Recuperado de :http://epsomat.blogspot.com 43 utiliza subdivisiones que concuerdan con las divisiones reales del cuerpo. Durero es quizá uno de los artistas que más contribuyó con una diversidad de "tipos". Además inmerso en los estudios geométricos de Euclides resuelve la figura mediante un principio geométrico aún ligado a las formas de Villard de Honnecourt pero de un naturalismo influenciado por el Renacimiento. En consecuencia, podemos concluir que el canon en el arte era entendido como una verdad objetiva que muchos artistas perseguían, sin embargo no tardaron mucho tiempo algunos en entender que al igual que en el natural la figura en el arte admite un sinnúmero de tipos debido a que existen infinitas variables que tienen las personas reales, tales como la edad, estatura, género y constitución física, y Durero ya lo había descubierto realizando su estudio antropométrico de relación, así como también tiempo antes entendió Da Vinci. Rejón (1980) con palabras de Da Vinci nos comenta lo siguiente : Siempre debe anhelar el pintor á ser universal, porque si unas cosas las hace bien y otras mal, le faltará todavía mucha dignidad como, á algunos que solo estudian el desnudo, según la perfecta proporción y simetría, y no advierten su variedad: porque bien puede ser un hombre ser proporcionado, y ser al mismo tiempo grueso, alto, algo baxo, delgado ó de medianas carnes, y así el que no pone cuidado en esta variedad, hará siempre sus figuras de estampa, y merecerá gran reprehensión ( p.10). Por último queremos dejar en claro que así como en Egipto el canon fue constructivo y en la Edad Media esquemático, en Grecia y en el Renacimiento fue antropométrico. En donde la representación del cuerpo y proporciones exigía una comprensión de las medidas para entenderse en ese campo del ideal estético. 1.1.7. El Barroco El arte del siglo XVII generalmente es llamado Barroco, a pesar de que no todo en el siga esta tendencia, pues a la par también existieron otras corrientes artísticas, como la clasicista en Francia, la naturalista en Holanda y la manierista en España. Pues "Los periodos de absoluta uniformidad son muy poco frecuentes en el arte" (Tatarskiewicz,1995, p.415). 44 El arte clásico y el arte barroco para Tatarkiewicz se diferencia básicamente en que "El primero pretendía ser y es en cierto modo un arte exacto; el segundo, rico; el primero es monumental, y vivo el otro. Las formas clásicas son económicas, y las barrocas generosas; por un lado hay mesura y formas estáticas, y por otro un fortíssimo y formas dinámicas" (1995, p.415). En la pintura barroca en general las formas exuberantes, los cuerpos llenos de vida y el movimiento del cuerpo se acompañan en escorzos y en composiciones más atrevidas, evitando así también contornos y líneas definidas. La luz marca el protagonismo de lo que se intenta resaltar iluminando una parte de la composición y creando contrastes violentos. Motivos en los que encontrará la Academia del siglo XVII argumentos para la crítica del Barroco. La representación del cuerpo desnudo siguió siendo un ámbito muy explorado para los artistas del Barroco, entre ellos los pintores flamencos como Rubens (1577 - 1640), Van Dyck (1599 - 1641) o el Holandés Rembrandt (1606 - 1669). También se retoma la temática mitológica, se practica el retrato y la representación del poder político, religioso y económico. Mientras que en España siguieron la misma tendencia acentuada en el campo religioso como Francisco Ribalta (1565–1628) Zurbarán (1598 – 1664), Velázquez (1599 – 1660), Murillo (1617 –1682) y entretanto en Italia Caravaggio (1571 –1610) y Carracci (1560 - 1609) presentando este último una corriente con clara tendencia clasicista. Durante el barroco el dramatismo en las escenas y el movimiento del cuerpo humano es resuelto con gran dinamismo y realismo, es así como el conocimiento anatómico preparado permite a artistas como Rubens a conseguir el dominio en la representación del cuerpo, en donde la expresión con la que alcanza a resolver este artista las imágenes es de un profundo naturalismo. Estas características van a prevalecer en la representación del cuerpo humano durante este estilo. A tal punto que estas pinturas para Richer (citado en Stratz,1926), pueden ser utilizadas como documentos científicos pues afirma que "Rubens es el único pintor que pinta los enfermos con tal exactitud, que, viéndolos, se puede diagnosticar la epilepsia, el histerismo y el baile de San Vito ..." (Stratz, 1926, p.294). 45 Esta opinión artística resuelta desde el punto de vista de un médico, es la afirmación y reflejo de la importancia que le daban los artistas del Barroco a la resolución del cuerpo humano al igual que los del Renacimiento. Sin embargo la distancia que existe en la manera de resolver la figura humana en estos dos estilos radica en que la serenidad del Renacimiento es renovada por el dinamismo del Barroco que se centra en el estudio de la expresión humana más que en establecimiento de una nueva antropometría. Para el pintor barroco el tratamiento de la expresión, las formas del cuerpo, los gestos y movimientos se emplean para comunicar los reflejos del alma, haciendo visibles las emociones en las figuras representadas, consiguiendo así intensificar los sentidos del espectador. Pues la pintura del barroco tan vinculada a la religión intenta provocar el ejercicio de la misericordia en los fieles. De tal manera que si observamos un cuadro de Caravaggio su deseo por representar la realidad fielmente tal y como es lo lleva a presentar escenas con mayor crudeza, que a juicio cierto buscan alterar al espectador. Esos rostros que parecen desafiarnos se acusan entre lo grotesco y violento, su personalidad artística lo lleva a humanizar a los personajes divinos tomando como modelos para sus figuras a seres comunes que en ocasiones provocaron la censura de sus obras. "La incredulidad de Santo Tomás" (1602) es la muestra del hijo de dios desde una visión más terrenal que etérea. Es entonces cuando se identifica el desapego por un modelo idealizado y Caravaggio lo hace al implantar los rostros del pueblo a la devoción de ellos mismos mostrando a nuestro parecer cierta ironía al romper el prototipo clásico en cuanto al sistema "moralizante" en la pintura. Durante la corriente del barroco cada lugar proyectó de diversa manera las formas, las temáticas y los asuntos pictóricos, en Holanda el retrato prima, en Francia es más bien decorativa y de retrato, mientras que en España sigue fuertemente vinculada a la Doctrina cristiana, pues el arte estaba al servicio del poder. Generalmente la representación del cuerpo humano es tan diverso que se es difícil reconocerlo en un mismo estilo. En Rubens se observa cuerpos vigorosos y regordetes reflejo de su estilo propio y en Van Dyck con palabras de Stratz aparece el cuerpo "suave y delicado" (1926, p.305). Pues cada artista resuelve la representación del cuerpo de maneras distintas, a pesar de que utilice un canon y siga un mismo estilo. 46 Otra constante en la representación de la figura humana es que al ser la reproducción del real van a presentar características propias de su entorno, así se ve el tipo del hombre flamenco en Rubens, el anglosajón en Van Dyck o las facciones del tipo español en Velázquez. Y esto ocurre también en los demás estilos artísticos. Stratz (1926) afirma que Rubens nunca estableció un canon único y menciona que las figuras de este artista se acercan a 7 3/4 y 7 7/8 alturas de cabeza, mientras que su sucesor Van Dyck se aleja de estas medidas presentando ocho alturas de cabeza en el lienzo del San Sebastián y en el retrato de Danae. En el que se revela un cierto acercamiento al canon difundido por Da Vinci tiempo atrás. Sin embargo, dentro de esta afirmación se debe tomar en cuenta que cuando Stratz propone éstos cánones, es su interpretación la que responde, pues a ciencia cierta no se han encontrado antecedentes de ello en los tratados de arte del siglo XVII. Así como también de la utilización de un canon antropométrico en específico durante el barroco. La causa de este acontecimiento es que durante el siglo XVII existió un gran distanciamiento entre la teoría y la práctica que estaban encaminadas en direcciones contrarias, la teoría seguía el clasicismo tradicional defendido por los academicistas, mientras que la práctica artística presentaba características barrocas. La teoría era evidentemente ortodoxa y la práctica pretendía romper con las ataduras conservacionistas, las que provocaron que la corriente barroca fuese vista como una provocación. El estilo barroco no tiene una propuesta diferente en cuanto a la teoría de las proporciones, no establece una teoría propiamente barroca que acompañe a lo que se 47 estaba realizando. Todo lo que se conoce son recopilaciones anteriores del arte antiguo que prestan servicio a los nuevos artistas, pues las teorías clásicas siguieron estudiándose en esta época, que a nuestro juicio dentro de la teoría de representación del cuerpo humano influenció en que no se haya establecido una reestructuración en la teoría del canon de acuerdo con la corriente del barroco. Tatarkiewicz (1991) nos hace notar que durante la centuria del XVII, el arte comienza a prescindir de la teoría y de los tratados de arte que en siglos anteriores habían gozado de popularidad así como los escritos del Renacimiento, haciendo que en Italia se hicieran cada vez más limitados. Mientras que en Francia la situación no era similar, pues de los escritos que se conocen la mayor parte proviene de este lugar del mundo, y justamente por la influencia de la corriente academicista, que a la cabeza de Poussin (1594 - 1665) rememora el tema clásico que es reflejado en su pintura y transmitido por André Félibien (1619-1695), quien recopiló sus ideas, basadas en una concepción que radica en que el arte debe de apoyarse en ciertas reglas y que son las pasiones del alma las que deben de ser representadas en el movimiento del cuerpo y no en los gestos faciales. Al contrario de El Método para aprender a dibujar las pasiones (1698) de Charles le Brun (1619 - 1690) quien resalta la importancia del tratamiento de la expresión humana, prestándole mayor atención al formular su teoría a la representación de las facciones del rostro y no al cuerpo humano como se ha venido dando durante el renacimiento. Además fue concebido como una guía para que los artistas no acudieran a la naturaleza. Fig. 31 Le brun, El Método para aprender a dibujar las pasiones. 21 21 http://arte.observatorio.info/2008/12/expresiones-de-las-pasiones-del-alma-charles-le-brun-1698/ 48 Por otro lado en España la teoría de la representación de la figura humana también sigue conservando la línea clásica renacentista pues durante el siglo XVII español, según Bendala et al. (2003) los estudios anatómicos en los talleres son parte imprescindible para la formación del artista, afirmación que compartimos en base a los documentos que hemos ilustraciones encontrado halladas y en a el las libro SUMMA ARTIS del grabado en España en donde se observa que destacan las cartillas de anatómica, dibujo e osteológica investigación y de las proporciones y construcción del rostro. Fray Juan Ricci, (1600- 1681) en su tratado de la "Pintura Sabia" dedica varias páginas a los dibujos del cuerpo humano al igual que Crisóstomo Martínez (1638 - 1694) considerado este último adelantado en la investigación microscópica, cuyas láminas complementarían las investigaciones científicas de la época. Sin embargo mucho antes se conoce también del Pintor y grabador Pedro de Villafranca (1615 - 1684) con estudios que nos han llegado de la construcción del rostro a partir de formas geométricas y de ciertos modelos de los rasgos faciales como las maneras de representar la nariz. A esto se suma el tratadista, grabador y pintor José García Hidalgo (1646 - 1719) quien escribió los "Principios para estudiar el nobilísimo y real arte de la pintura" que fue publicado en 1691 en el que se encuentra una ilustración de las proporciones del cuerpo femenino representado en un canon de ocho cabezas, que a juicio nuestro muestra la influencia de fuentes italianas en la concepción antropométrica debido a que nos transmite un esquema que evidentemente señala los mismos principios expuestos por Da Vinci al exponernos la correspondencia de que la altura total del cuerpo es igual al largo de los brazos extendidos. 49 Fig. 33 Pedro de Villafranca, modelos de nariz 22 A esto queremos añadir sin antes concluir que todas estas cartillas de ilustraciones se convirtieron en un fenómeno muy difundido en toda Europa ya que el grabado durante el siglo XVII alcanzó su auge teniendo gran circulación tanto en los talleres europeos como también en los obradores del denominado "Nuevo Mundo" pues éstos servían de modelos para la enseñanza de la pintura que sólo se alcanzaba tras dominar el dibujo. Por tanto el grabado se hace imprescindible haciendo que se desarrolle la utilización gráfica para acompañar los textos científicos, matemáticos, médicos que a su vez eran elaborados por los grandes dibujantes y artistas, razón por la que encontramos muchas de las representaciones del cuerpo humano en los tratados de anatomía del siglo XVII. Es así como se difunden alrededor del mundo los tratados de pintura y los grabados que sirvieron a artistas de todos lados del mundo, como modelos para el aprendizaje artístico los mismos que con el dominio español de las tierras de América, empezaron a llegar junto con las órdenes religiosas para implantar un nuevo arte en nuestras tierras. Prueba de ello son las estampas de Schelte de Bolswert que llegaron a la Real Audiencia de Quito para ser interpretadas durante el siglo XVII por las hábiles manos de Miguel de Santiago y su taller. 22 Imagen tomada de: Carrete, J.P., Checa, F. C. & Bozal, V. (1994). Summa Artis (Vol.XXXI), el grabado en España siglos XV - XVIII (4ta ed.). Madrid: Espasa-Calpe, S. A. 50 ESQUEMA DE LA REPRESENTACIÓN DEL CUERPO A TRAVÉS DEL TIEMPO Periodo Ideología Canon Módulo Prehistoria Creencias rituales y fertilidad Canon simbólico Egipto Vínculo de la vida después de la muerte Exageración de las proporciones del cuerpo. (No hay evidencias de la utilización de un módulo) El puño y el dedo multiplicado 18, 19 y 21 veces dan la altura total. Antigüedad Clásica La belleza como ideal, culto al cuerpo humano desnudo. Canon constructivo Representación de la figura humana No tenían un canon como tal, tenía que ver con la exageración de las partes que querían resaltar. Es el primer canon modular para facilitar la construcción de las imágenes. Representación esquemática de perfil. Preocupación por la perfección en la representación humana. Canon antropométrico La cabeza como módulo. El ideal era de 8 alturas de cabeza, pero también se presenta el canon de 7 ½ y 7 ⁄ cabezas. Canon esquemático orgánico y simbólico. La cara como módulo, 9 veces esta unidad es la longitud total del cuerpo. Se desprende del ideal clásico. Canon esquemático inorgánico y simbólico. Abandona el módulo, es un método auxiliar de construcción de la figura humana en base a la geometría. Ignora la estructura orgánica del cuerpo humano. Edad Media: - Canon Bizantino ,Varroniano o del Monte de Athos. El mensaje es más importante que reproducir formas naturalistas. (Teocentrismo) - Canon Gótico de (Villard de Honnecourt) Figuras hieráticas y esquemáticas Renacimiento (Antropocentrista) Retorno a la belleza como ideal. Las ciencias como la matemática la geometría y anatomía en el arte. Canon antropométrico científico La cabeza como módulo. Canon de 8 alturas de cabeza y de nueve alturas de rostro. Naturalismo en la representación del cuerpo humano Deseo por el mayor acercamiento a la realidad. Barroco El objetivo es hacer visibles las emociones a través de los gestos de los personajes. No se establece un canon en específico. No se establece una nueva antropometría siguen con el canon renacentista de 7 y 8 alturas de cabeza. Voluptuosidad en las formas, composiciones más atrevidas en las representaciones de los personajes. 51 CAPÍTULO III 3. EL BARROCO ESPAÑOL EN LA REAL AUDIENCIA DE QUITO 3.1. Antecedentes del Barroco en América Tras el establecimiento de los españoles en América y su necesidad por implantar en los nativos un nuevo modelo religioso. Se produce un gran choque cultural que en efecto se verá reflejado en el arte. Quito se convierte en un pequeño centro artístico de la expresión del arte español del que poco a poco va apropiándose hasta dar lugar a la denominada "Escuela Quiteña" a finales del siglo XVI. Durante el siglo XVII la pintura barroca es el reflejo propio de los pueblos católicos y coincide con la contrarreforma que en Europa se venía dando. Hecho que afianzará la producción artística tanto en el viejo continente como en la Real Audiencia de Quito; que encontró en la pintura una herramienta para facilitar la enseñanza de la doctrina cristiana. Fue entonces cuando se consolidaron las órdenes religiosas que se encaminaron en instruir a los indígenas en las artes. Trayendo consigo una serie de grabados del viejo continente que servirían de modelos para su formación artística y junto con ello, también es posible que viniesen los tratados, teorías y libros de arte que se cree que Miguel de Santiago utilizaría para plasmar su obra. Se sabe que el uso de fuentes gráficas era un hecho habitual en los talleres europeos, pues sólo se llegaba a dominar la pintura mediante el ejercicio de la copia; práctica que se implantaría también en los artistas coloniales. En unos estudios publicados por la "Project on the Engraved Sources of Spanish Colonial Art" (PESSCA) dirigido por Almerindo Ojeda de la Universidad de California en Davis, se investiga sobre la influencia del grabado europeo en la composición de la pintura hispanoamericana de la época colonial. Grabados que en principio eran particularmente flamencos como las láminas de Marten de Vos ( 1532 -1603), Adrian Collaert (1560 - 1618) y Schelte de Bolswert (1586 - 1659) que inspiraron a muchos de los artistas de la pintura colonial quiteña al igual que a sus contemporáneos del siglo XVII de la escuela cuzqueña, mexicana y de Guatemala. De Bolswert no solo queda constancia de la difusión que tuvo en América, sino también en Europa. Sabemos por Estebaranz (2008) que 52 Francisco Zurbarán recurrió al grabado de Bolswert de San Agustín como protector del clero para la representación de La Virgen de los Cartujos. Esto hace evidente la influencia italiana y flamenca en los artistas españoles e hispanoamericanos a través de la circulación de la estampa. Jorge Alberto Manrique (1982) nos comenta que a principios del XVI, poco antes que llegase el auge de los grabados, los artistas acudían también a las ilustraciones de los libros de rezos y hojas sueltas de biblias. Siendo éstos y la estampa la mayor fuente gráfica para los artistas. También era común la distribución de copias de las pinturas de los grandes artistas como Rubens del que sus composiciones fueron las predilectas durante el barroco (Palomo, 1966). Y que indirectamente han servido de inspiración para los pintores coloniales. La estampa durante el siglo XVII encuentra su apogeo y podría decirse que es característica de la pintura barroca. Fajardo (2011) al respecto nos comenta lo siguiente: Desde España, a partir de la Contrarreforma, los tratadistas de arte, quienes orientaban y dirigían a los pintores, promovían la copia, tanto de los cuadros mismos, como de los grabados, los cuales contaban con la ventaja de asegurar la aprobación de las autoridades, en una época en la cual la iglesia luchaba fuertemente por evitar divisiones como las que contemporáneamente había causado la reforma protestante. (p.195) En Hispanoamérica este influjo del grabado se entiende no sólo como una práctica de educación artística sino que su uso aseguraba que las imágenes que venían desde Europa fueran las apropiadas para la enseñanza de la fe cristiana en las colonias mediante la pintura. 3.2. Miguel de Santiago Miguel de Santiago es el máximo representante de la pintura quiteña del siglo XVII. Nació hacia 1633 aunque su fecha de nacimiento es cuestionable pues no se tienen datos que lo confirmen. Y murió en el año de 1706, fecha que se conoce gracias a su testamento conservado en el Archivo Nacional de Historia en Quito. No se sabe a 53 ciencia cierta quien fue su maestro por lo que se le ha considerado en varias ocasiones como un autodidacta, sin embargo pudo haber recibido cierta orientación artística del padre Basilio Ribera (1612 - 1678) (Estebaranz, 2008), quien estuvo más cerca de Santiago y le confió realizar la serie de lienzos para el convento de San Agustín en base a los grabados flamencos de Schelte de Bolswert. Pero con maestro o sin él, fueron dichos grabados los que determinaron directamente en la composición de la obra, la representación de la figura humana y por último influenciaron en el ejercicio artístico de esta serie. No obstante Miguel de Santiago contribuyó con la cromática de los cuadros y plasmó su personalidad única en la pintura. Personalidad a la que algunos autores la llamaron oscura y violenta alimentando su leyenda. Diezcanseco (2008) atribuye este carácter personal de la obra de Santiago al hecho de haber sufrido la pérdida de su hijo influenciándolo en esta primera etapa de su pintura. A lo largo de la historia del arte ecuatoriano le han otorgado posibles maestros a Miguel de Santiago, entre ellos figura el pintor Sánchez Gallque (?) como sostiene Diezcanseco (2010) y la posible tutoría del Hermano Hernando de la Cruz (1592 - 1646). Los que precisamente no pudieron ser maestros directos de Santiago, pues su vida artística se relaciona a finales del siglo XVI e inicios del XVII. Pero en una más reciente aportación, Estebaranz (2008) apunta a que Miguel de Santiago debió formarse artísticamente con su padre natural Lucas Vizuete, pues este era un maestro pintor. El apellido de "Santiago" lo adopta en el año de 1633 por lo que se relaciona esta fecha a la de su nacimiento. 3.2.1. La estampa como modelo artístico para la serie de lienzos de San Agustín El conjunto de lienzos que se conserva en el convento agustino en Quito es la primera serie de obras de Miguel de Santiago y por ende también una de las más importantes, pues recoge sus primeros pasos en la pintura. Durante esta centuria le fue encargado a nuestro artista interpretar una serie de cuadros basados en la vida de San Agustín (1653 - 1656) para el convento que lleva el mismo nombre. Esta serie consta con sesenta y cuatro lienzos que Miguel de Santiago ejecutó junto con la ayuda de su taller tomando como modelo los veintiocho grabados del flamenco Schelte de Bolswert (Editados en 1624) de los que dos son de Cornellius Galle su colaborador. Sin embargo como se puede advertir Miguel de Santiago no se 54 pudo basar exclusivamente en este conjunto de láminas, pues no son suficientes para el número de lienzos que realizó, uno de ellos es el cuadro del "Nacimiento de San Agustín" del que para ejecutarlo se inspiró en otras fuentes. El Dr. Estebaranz (2008) contribuye a esta interrogante señalando que el artista debió haber recurrido a los grabados de Adrian Collaert del "Nacimiento de la Virgen" y de Cornelis Cort (1533 – 1578) de "El Nacimiento de San Juan Bautista" para la realización de este cuadro de la serie. En donde explica haber encontrado cierta similitud en la composición del cuadro con los modelos expuestos. No obstante se desconocen las otras fuentes gráficas que sirvieron para los demás lienzos, pero creemos que al igual que éstas, Miguel de Santiago combinó varios elementos de diferentes estampillas tomando de ellas lo que le habría parecido más importante, por lo que se hace más difícil su determinación. Mientras que si observamos los demás cuadros que se han basado en las láminas de Bolswert podemos constatar que éstas siguen casi fielmente la composición que le venía dada. Fig. 34 Grabado de Schelte de Bolswert 23 Fig.35 Miguel de Santiago / "Tres milagros de San Agustín " 24 Es también evidente que Miguel de Santiago a pesar de recurrir a los grabados introdujo igualmente detalles personales y modificó la composición. En algunas escenas se manifiestan estas variantes como por ejemplo en la escena de San Agustín preside la conferencia de Cartago. En donde aparece en el primer plano un personaje que da vuelta hacia nosotros y que en el grabado no. 23 24 http://colonialart.org/ Estebaranz, J. Miguel de Santiago en San Agustín de Quito.(2008). 55 Fot.36 Grabado/ Schelte de Bolswert. 25 Fot. 37 Miguel de Santiago/ San Agustín preside la conferencia de Cartago. 26 Miguel de Santiago no fue el único en utilizar las estampas de Bolswert para la ejecución de la vida de San Agustín, sino que éstas sirvieron también al pintor cuzqueño Basilio Pacheco para que casi cien años más tarde realizara la serie agustina entre 1742 y 1746. De España igualmente se conoce otra serie que pintada por el sevillano Juan Ruiz Soriano toma la composición de éstos grabados para la representación de los lienzos. Algunos de los temas sobre la vida de San Agustín que aparecen en los grabados de Bolswert no son representados en la serie pictórica quiteña, entre ellos la escena de "San Agustín lava los pies a Cristo" o el tema del bautizo. Quizá porque no llegó completo el cuadernillo de grabados o porque son los cuadros de la serie que Estebaranz (2008) los da por desaparecidos. La serie originalmente contaba con sesenta y cuatro lienzos de los que se conservan cincuenta y siete. Por otro lado, el orden de la serie de San Agustín ha tenido también innumerables cambios de ubicación a lo largo de la historia, algunos fueron llevados al museo como el lienzo de "San Agustín visitado por nuestro Señor" que se encuentra actualmente allí y otros fueron reubicados en otras instancias del convento por diversas razones en diferentes épocas. De esta serie al momento se encuentran quince lienzos que están siendo intervenidos mientras que los restantes están en espera en el corredor y en la reserva del convento agustino. 25 26 http://colonialart.org/ Imagen tomada de: Estebaranz, J. Miguel de Santiago en San Agustín de Quito.(2008). 56 3.2.2. Series pictóricas La serie de cuadros de la vida de San Agustín no es la única realizada por Miguel de Santiago. De él se conocen varios conjuntos pictóricos, pues en esta época era habitual que la Iglesia encargara numerosas obras destinadas a instruir y relatar la vida de los santos para mostrarlos como ejemplos de vida. En Quito se conservan tres series importantes de Miguel de Santiago, la primera que corresponde al convento agustino (1653-1656) como se ha mencionado anteriormente, la segunda que consta de ocho lienzos sobre la "Doctrina Cristiana" en San Francisco (1670) y los doce lienzos de "Los Milagros de la Virgen" en la iglesia de Guápulo (1699-1706); de los que se cree que trabajó sin modelos. De manera que cada uno de los conjuntos pictóricos de Santiago corresponden a un estilo diferente de acuerdo con estas tres etapas (Kennedy, 2002). No obstante además de las series que reposan en las iglesias de Quito se conservan otras en el exterior demostrando la gran demanda de las obras del arte quiteño y la fama de la que gozó Miguel de Santiago en aquella época. Sólo en la Catedral Metropolitana de Bogotá existen once pinturas sobre "El Credo" (1673) atribuidas a Miguel de Santiago y basadas en los grabados de Marten de Vos (1532-1605), Johan Sadeler (1550-1600) y en Adrien Collaert (1560-1618) (Fajardo, 2011). Mientras que en el convento de San Francisco en Bogotá la serie del "Alabado" se encuentran los catorce lienzos de las "Obras de Misericordia". Esto pone en evidencia lo frecuente que era durante este período la utilización de fuentes gráficas, así como también la realización de obras en conjuntos pictóricos que para Gustavo Vives Mejía esta última podría ser considerada como una de las características más representativas de la pintura barroca. (Arte Quiteño más allá de Quito, 2007). 3.2.2.1. La serie pictórica de la vida de San Agustín: Producción artística A pesar de que la composición del conjunto pictórico de la vida de San Agustín le venía dado por los grabados de Bolswert, Miguel de Santiago tuvo libertad al aplicar los colores a los lienzos, los que se caracterizan por sus tonalidades oscuras y en donde también destacan los colores cálidos. Es decir, tomó de los grabados la composición y de la naturaleza los colores. 57 Se presume que Miguel de Santiago no dibujaba previamente a la realización pictórica, pues no se ha encontrado evidencia de un trazo subyacente en los estudios de los estratos de sus obras pictóricas, como sostiene Rosa Torres actual Directora del taller de Restauración de los lienzos del convento de San Agustín27. Convirtiéndose esta práctica en característica del artista. Sin embargo, no estamos tan seguros. Esto abre paso a una nueva interrogante. Miguel de Santiago debió utilizar ciertos criterios para trasladar la idea del grabado al lienzo de grandes dimensiones. ¿Pero cuáles eran estos criterios?. A lo largo de la historia la utilización de sistemas como la cuadrícula ha sido una herramienta habitual para asistir a los artistas en su labor que además de cumplir con una función constructiva es también traslativa (Panofsky,1995). Esta última como su nombre indica generalmente ha sido empleada para copiar y transferir a otra superficie conservando la misma proporción mientras que la constructiva le permite hacer lo mismo pero a otra escala. Con respecto a esto es posible que Miguel de Santiago haya utilizado un sistema de cuadrícula que debe haberle ayudado a disponer en el lienzo los elementos y los diferentes personajes de manera ordenada. De aquí que creemos que existe un posible boceto debajo de la capa pictórica o por lo menos ciertas directrices que le asistieron para realizar la obra. Rosa Torres en una segunda entrevista comenta que no se ha encontrado evidencia de posibles trazos porque no se aplicó la Reflectografía infrarroja en el estudio de la serie, que como se sabe esta permite visualizar el esbozo subyacente. El mismo Miguel de Santiago en su testamento según sus propias palabras deja varios lienzos en “bosquejo” lo que responde a nuestra interrogante. 3.2.2.1.1. Miguel de Santiago y el sustento teórico en la resolución de su obra Según Vargas, Miguel de Santiago para la representación de los personajes de la serie de San Agustín además de los grabados de Bolswert, utilizó varios recursos teóricos como respaldo para su producción artística. "En su testamento declaró que dejaba cuarenta libros, chicos y grandes, de distintos autores, propios y ajenos." (Vargas, 1989, p.185). En donde a pesar de que no se especifica el tipo de libros, Vargas sostiene que los textos que le sirvieron de fuente de consulta a Santiago son los mencionados en el "Tratado de Pintura" de Samaniego (1767-1824) como la "Varia Conmensuración" de 27 Información obtenida en una entrevista 12/Junio/12, Convento San Agustín, Quito-Ecuador 58 Juan de Arfe (1535-1603), los escritos de Pablo de Céspedes (1538 - 1608) y otros textos de Francisco Pacheco (1564-1644) y Carlos Bexemandes. Los mismos que fueron empleados en el siglo XVII. Obras que para Navarro (1991) no llegarían sino a partir del siglo XVIII, por lo que creemos que es posible que Miguel de Santiago no conociera de ellas, debido a que de todas estas obras literarias descritas por Vargas no se tiene constancia documental de que Miguel de Santiago las haya manejado para la ejecución de sus obras. En el "Tratado de Pintura" de Samaniego se transcriben las proporciones del cuerpo humano de Juan de Arfe y Céspedes. Tratado que fue publicado en 1795 por Vargas, quien al comparar el texto con la obra de Santiago asegura que el artista hizo uso de este. En el capítulo II del texto de Samaniego se menciona que "Diez rostros tiene el hombre más gallardo" (p.41). Seguido de una serie de medidas antropométricas de otras partes del cuerpo. La cabeza es igual a 4/3. Dividida en cuatro partes, la 1 era va desde la cabeza al nacimiento del cabello. La 2 da de ahí a las cejas. La 3 era de las cejas hasta el final de la nariz y la 4ta de la nariz hasta el mentón. Subdivisión que ya Vitruvio se había referido en la teoría de las proporción clásica. A continuación hemos reproducido a través de esquemas gráficos el texto de la teoría de proporciones humanas que aparece en el tratado de Samaniego para su mejor comprensión, recurriendo específicamente a algunas de las proporciones del rostro. De acuerdo con lo descrito, a manera de ejemplo se aplicaron las pautas del texto en uno de los cuadros de Miguel de Santiago; en el lienzo de San Agustín entrega la regla a las cuatro órdenes que funda. La cabeza de frente Fot.38 Medidas del espacio del mentón 28 28 Fot. 39 Detalle del rostro “San Agustín entrega la regla 29 Esquema modificado por la presente autora 59 Espacio del Mentón Fot. 40 Medidas del espacio del mentón 30 Fot. 41 Detalle del rostro “San Agustín entrega la regla 31 Medidas por menor “El largo de la boca tiene lo que hay del fin de la barba a la abertura y división de los labios; desde el lagrimal del ojo hasta el fin de la ventana de la nariz hay la misma medida."(Vargas, 1975, p. 42). Fot.42 Medidas por menor 32 Fot. 43 Detalle del rostro San Agustín entrega la regla. 33 29 Imagen de propiedad de la presente autora. Esquema modificado por la presente autora. 31 Imagen de propiedad de la presente autora. 32 Esquema modificado por la presente autora. 33 Imagen de propiedad de la presente autora. 30 60 En este sentido de acuerdo con los gráficos expresados anteriormente en el que se ha aplicado la teoría de las proporciones del tratado de Samaniego en el lienzo de San Agustín entrega la regla a las cuatro órdenes que funda de Miguel de Santiago. Al trasladar dichas medidas al rostro de San Agustín se ha de notar que ciertas directrices formuladas en dicho texto responden positivamente en la práctica pictórica como la subdivisión del mentón en tres partes exactas que se observan en la fotografía treinta y nueve. Sin embargo, afirmar que Miguel de Santiago se basó en este tratado es un hecho apresurado, pues muchos de estos preceptos persistieron desde las teorías clásicas. De la pintura colonial quiteña del siglo XVII poco o nada se conoce sobre la utilización de un modelo teórico para la realización de las obras, quizá porque en su mayoría existía un gran número de pintores analfabetos como apunta Estebaranz en el “Esplendor del Barroco Quiteño”. La formación de los artistas más bien era práctica y transmitida verbalmente por sus maestros. El aprendizaje era autónomo y los artistas se convirtieron en autodidactas a partir del uso de los grabados y las imágenes traídas de Europa. Estas imágenes les permitían conocer los modelos occidentales de representación del cuerpo humano. Así como también sucedió con los escultores quiteños quienes trabajaban de memoria como sostiene Navarro (2006), sin un modelo natural frente a ellos. “Esta no es, sin embargo, una memoria natural sino otra entrenada y domesticada a partir de la imitación de obras existentes. “Era la costumbre,” dice Navarro, “de copiar Cristos desnudos la que les hacía conocer los secretos de las proporciones y la anatomía superficial, que la utilizaban de memoria y de manera admirable…” (Kennedy, (2001) p. 123). Así los artistas coloniales como sucede en todo proceso de aprendizaje se educaron a través de la percepción visual y la práctica conociendo el cuerpo a detalle para poder representarlo. 3.2.2.1.2. Representación de los personajes. Se conoce que Miguel de Santiago realizaba las partes más importantes de los lienzos. La composición del rostro y la figura es representada en base a los grabados, sin 61 embargo Miguel de Santiago se encargó de darles profundidad y textura. En la construcción gráfica de la figura humana no recurre siempre a líneas definidas sino a contornos difuminados (sfumato) que se mezclan con la atmósfera. Sabemos que Santiago aplicaba el color directamente y el óleo le ofrecía ciertas ventajas como la de trabajar a su ritmo, de corregir detalles y de admitir retoques a lo largo de la ejecución. Así por ejemplo la figura de San Agustín es representada junto con una serie de personajes en innumerables actitudes lo que le ayudó al pintor a formarse en la construcción y conocimiento de los movimientos del cuerpo humano. Durante esta época era común que el maestro realizara las obras que le eran encargadas junto con varios colaboradores los que formaban el taller al que llegaban los encargos pictóricos. Bernabé Lobato junto con Simón de Valenzuela, Fray Alonso Vera de la Cruz y Carreño conformaron el taller de Miguel de Santiago para la elaboración del conjunto pictórico de la vida de San Agustín. La constancia que ha quedado de ello es que se ha encontrado en uno de los lienzos de la serie una firma que pertenece a Carreño, exactamente en el cuadro de "San agustín enseña retórica en Milán". Todos ellos pertenecen a la primera generación de discípulos de Santiago. Para los grandes encargos como este, por sus dimensiones y por su número, Miguel de Santiago se ayudó de su obrador al que le confiaba la intervención de los lienzos. En los que se observa la diferenciación del estilo y calidad pictórica entre el maestro y sus colaboradores, pintando él las escenas más significativas y dejando las menos importantes a sus discípulos. Estebaranz (2008) sostiene que de la serie pictórica, los lienzos que fueron realizados por el propio Miguel de Santiago son los pasajes sobresalientes de la vida de San Agustín como el "Nacimiento del Santo" y los lienzos sufragados por los personajes más influyentes de la época como Fray Basilio de Ribera, y los que presentan el escudo de armas los que posiblemente pintó el propio Miguel de Santiago. Para el estudio del conjunto pictórico de la vida y milagros de San Agustín hemos tomado varios cuadros de la serie en el que el Santo es el personaje principal de los lienzos. Generalmente San Agustín iconográficamente es representado como obispo, con un báculo y mitra (tocado sobre la cabeza). Y en algunas ocasiones con una maqueta, libro y pluma que sugieren su condición de doctor de la Iglesia, además también es llamado el Obispo de Hipona, por su labor en lo que hoy es Argelia. 62 En los cuadros de la serie quiteña se observa que la figura de San Agustín en ocasiones es representada con el hábito agustino y en otras como obispo llevando una larga capa. De la figura humana no se advierten detalles anatómicos pues deriva de una figura vestida, excepto el rostro y manos que quedan al descubierto. Al observar la serie de San Agustín sabemos que la representación de la figura humana estaba preestablecida por los grabados flamencos. La composición del cuerpo le venía dada, pero las medidas y proporciones; no, al menos de manera directa. Para esto Miguel de Santiago debió tener ya cierto conocimiento de ello, pues sin su habilidad artística al copiar de los modelos de Bolswert las figuras al lienzo, las imágenes no tendrían la manufactura que ostentan. Todas éstas obras han sido intervenidas varias veces. En esta reciente restauración de los lienzos agustinos, se ha descubierto varios repintes que han afectado el carácter original de las figuras puesto que hay detalles que han sido modificados y no son propios del autor. Por lo que al intento por reconocer los rasgos del artista puede que sea una de las cuantas intervenciones que ha tenido la serie. Fot. 44 Repinte. San Agustín entrega su regla a las cuatro órdenes que funda. 34 Foto. 45 Imagen después de la eliminación de repintes . 35 En este acercamiento del rostro de uno de los canónigos, es evidente constatar las modificaciones en los rasgos físicos que ha sufrido la obra a través del tiempo. Estos detalles transforman en gran medida la obra original donde parece ser otro rostro 34 35 Imagen tomada de: Estebaranz, J. Miguel de Santiago en San Agustín de Quito.(2008). Imagen de propiedad de la presente autora 63 completamente diferente; la oreja, el cabello, la extensión de la barba y el rostro en conjunto muestran otra fisonomía que no tiene relación con la anterior. Fot. 46 Detalle del rostro de las monjas de Santa Mónica. 36 Fot. 47 Detalle del rostro. Imagen después de la eliminación de repintes. 37 Estebaranz (2008), se refiere a esta obra exponiendo que los posibles rostros realizados por Miguel de Santiago son los de las monjas de Santa Mónica, no obstante con la intervención sabemos que estos rostros no tenían nada que ver con los originales, variando desde el color del rostro hasta el aspecto. Pero tras varios repintes es posible que se haya perdido la característica original de los rasgos físicos del rostro. 3.2.1.3. Estudio antropométrico aplicado a los personajes de la serie de la vida de San Agustín. El presente estudio pretende dar a conocer los patrones de medida que Miguel de Santiago utilizó para la construcción de la figura humana de los personajes de la serie. Aprendizaje práctico que bien pudo ser formándose con los grabados o con algún maestro. De los quince cuadros que se encuentran en el taller de restauración del convento San Agustín se han tomado siete. Para el análisis antropométrico de los personajes del conjunto pictórico de la vida de San Agustín, la selección de los lienzos a investigar fueron escogidos en base a su importancia como es la escena de la Aparición de Cristo a San Agustín que es la única obra firmada del conjunto pictórico donde ha quedado constancia de la autoría de Miguel de Santiago. De acuerdo con esto también la selección se hizo en base a la 36 37 Imagen tomada de: Estebaranz, J. Miguel de Santiago en San Agustín de Quito.(2008). Imagen de propiedad de la presente autora 64 importancia del personaje que como se presume Santiago pintaba e intervenía en los personajes más importantes. El segundo criterio que influenció en la elección fue la accesibilidad a las obras, escogiendo de los sesenta y cuatro lienzos los que se encontraban a disposición en el taller de restauración del convento de San Agustín, puesto que las demás obras se localizaban en la reserva y en la parte alta de los corredores. El tercer parámetro fue la disponibilidad debido a que algunos de los lienzos se hallaban en proceso de restauración y no se podía intervenir para nuestro propósito; la toma de medidas antropométricas de los personajes. El cuarto criterio que se aplicó para escoger las ecenas fué la posición de los personajes en el que era necesario la presencia de la figura erguida como patrón para la aplicación del estudio, pues el movimiento y otras posiciones modifican las medidas. Por último dentro del quinto parámetro se escogieron algunas de las obras que fueron inspiradas en los grabados de Bolswert. Todos estos criterios han servido para delimitar el grupo de obras a ser estudiadas mediante la aplicación antropométrica. Por otro lado, de los personajes de la serie; las dimensiones que se tomaron para la presente investigación; fueron la longitud total de la figura humana, el rostro y las manos que son las partes claramente visibles entre los ropajes de los personajes. 3.2.1.4. Procedimientos Antropométricos Estos son algunos de los criterios que se han tomado en cuenta para obtener las medidas antropométricas de los personajes, pues antes de medir es necesario conocer dichos parámetros puesto que nos ayudaran a determinar los puntos clave que servirán para la toma de medidas puntuales. En antropometría y en la teoría de proporciones la altura total se calcula desde la corona (parte más alta de la cabeza) hasta el talón, mientras que las dimensiones estructurales como son las de la cabeza van desde su parte más alta hasta el mentón. Y las manos desde la muñeca hasta el dedo más prominente, el dedo medio. Como se sabe los personajes en general están en diversas actitudes y movimiento y nunca completamente erguidos. Usualmente en contraposto o ligeramente inclinados, para esto cuando se toman las medidas de las figuras como la longitud total del cuerpo 65 hay que cuidar a detalle tomar la medida de la pierna que no se encuentra en flexión sino la pierna estirada. Procurando siempre medir hasta el talón. Por otro lado, para tomar las medidas de la cabeza es siempre necesario seguir la dirección de esta o la alineación de los ojos, puesto que la cabeza casi nunca es representada completamente de frente y en su mayoría encontramos rostros en posiciones variantes, con la cabeza inclinada hacia abajo o los lados. Por lo que es necesario estudiar la actitud del personaje para obtener las medidas reales. Se debe considerar que hay variantes propias del movimiento lo que hace que las medidas cambien. Las dimensiones que han sido tomadas en cuenta para el estudio del rostro son medidas de longitud y ancho. Dichas medidas que hemos tomado de los cuadros originales responden a lo siguiente: Medidas Antropométricas 1. Altura total 2. Manos 3. Cabeza: Medidas de longitud (medidas verticales) 1. a) Altura de la cabeza (De la nuca al mentón) 2. ab) Mitad del rostro 3. b) Rostro (De la línea del nacimiento del cabello al mentón) 4. c) Espacio que comprende el cabello 5. d) Espacio de la frente (De la línea del nacimiento del cabello al inicio de la nariz) 6. e) Espacio de la nariz 7. f) Espacio del mentón (Desde el final de la nariz al mentón) 8. g) Mentón (Del final de la nariz a la división de los labios, de ahí hasta el hoyo del mentón y de allí hasta donde termina éste. 9. h) Dimensión de la Oreja 66 Medidas de ancho (medidas horizontales) 10. i) Ancho de la oreja 11. j) Distancia del ojo izquierdo 12. k) Entrecejo ( Distancia del ojo a ojo) 13. l) Distancia del ojo derecho 14. m) Ancho de la nariz 15. n) Largo de la boca Todos éstos nos han servido de puntos clave para la toma de medidas puntuales. 67 3.2.1.4.1 Representación de la figura humana, estudio antropométrico aplicado a los personajes de la serie de la vida de San Agustín. De los quince lienzos que están siendo intervenidos en el taller de restauración del convento de San Agustín, son siete los que se han tomado como muestra para la aplicación de los procedimientos antropométricos. 3.2.1.4.1.1 Aparición de Cristo a San Agustín Fot 48. Aparición de Cristo a San Agustín 38 Fot.49 Detalle del rostro de San Agustín39 La Aparición de Cristo a San Agustín es una de las escenas más significativas para el estudio de la serie porque además de llevar las iniciales de Miguel de Santiago en la parte inferior derecha del lienzo; M d S. Muestra también la imagen de Cristo erguida y semidesnuda, permitiéndonos conocer datos antropométricos y anatómicos a diferencia de los demás personajes que se derivan de la figura vestida. Este lienzo no ha sido inspirado en los grabados de Bolswert. 38 39 Imagen de propiedad de la presente autora. Imagen de propiedad de la presente autora. 68 Fot. 50 Derecha: Detalle de Cristo / Izquierda: Esquema de contraposto mediante líneas de dirección Sin embargo, antes de ahondar en datos antropométricos. El Cristo de Miguel de Santiago se ajusta a las leyes del “contraposto” con una pierna ligeramente flexionada y otra recta que juega entre el balance y equilibrio de la figura, muy recurrente en las imágenes de la Antigüedad Clásica (foto 50). Fot. 51 Torso antiguo según Stratz Fot. 52 Detalle del torso de Cristo Por otro lado, desde el punto de vista anatómico en el torso de Cristo se advierte tanto la acentuación del músculo oblicuo externo como el hueso de la cresta iliaca de forma 69 bastante marcada, resultado de la propia posición de la pierna que no está en flexión. Para esto Miguel de Santiago debió haber sido un gran conocedor del cuerpo humano para retratarlo a detalle. Continuando con el torso en la figura de Cristo, la línea pelviana frontera se marca de tal manera que forma un arco arriba de los genitales (Fot. 52). Para Stratz (1926) este tipo de corte de pelvis es utilizado comúnmente en la representación de la figura varonil y lo denomina “torso de tipo antiguo” que en general se ha utilizado en el arte clásico (Fot. 51). Fot. 53 Canon del Cristo de Miguel de Santiago Para Vitruvio y para la teoría de proporciones humanas la mitad matemática de la altura total de un hombre es la pelvis que divide en dos partes iguales al cuerpo humano. En el gráfico 53 es posible apreciar este precepto, pues al medir la figura total del personaje de Cristo su mitad matemática es de 70 cm teniendo como altura total 140 cm, y su centro evidentemente reposa sobre la pelvis que en proporción es la cuarta parte de la 70 dimensión total. La altura total del personaje de Cristo equivale en proporción a ocho alturas de cabeza. Para esto, la figura de Cristo fue sometida a una esquematización mediante un software de ilustración digital (Adobe Ilustrator CS5) en la que se le ha dividido tomando como módulo único a la cabeza, pues desde la antigüedad clásica fue la unidad de medida más común utilizada por los artistas. Fot. 54 Medidas Antropométricas de Cristo PUNTOS DE REFERENCIA MEDIDAS EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN ANTROPOMÉTRICAS a) Cabeza 17.5 cm 1/8 de la altura total Ab) Altura total 140 cm (alto total/cabeza) 140 cm /17.5 cm = 8 alturas de cabeza Ac) Desde la parte más alta de la cabeza al ombligo 53 cm 3/8 de la altura total (cabeza x 3) = 17.5 x3 = 52.5/ (53 cm/17.5= 3.02) = 3 alturas de cabeza Ad) Centro de la figura (alto total/mitad) = 70 4/8 de la altura total (pelvis) cm 70/17.5 = 4 alturas de cabeza 71 Ae) Pierna más larga (desde la pelvis hasta la mitad de la rodilla) 35.5 cm Aprox. 2 alturas de cabeza Af) Desde la rodilla al talón 35.5 cm Aprox. 2 alturas de cabeza Ag) Mano izquierda (desde 12 cm Aprox. La dimensión de la cara Ah) Antebrazo 21 cm Aprox. 1 cabeza Ai) Brazo 30 cm 1 2/3 cabezas Aj) Ancho hombros 26 cm Una cabeza y media ½ Ak) Ancho pecho 21 cm Aprox. 1 cabeza Al) Largo del Pie izq. 17 cm Aprox. 1 cabeza Am) Largo del Pie derecho 17 cm Aprox. 1 cabeza dedo más largo a la muñeca) Regresando al gráfico 53, vemos que cada subdivisión concuerda con una parte específica del cuerpo humano. Como por ejemplo el recuadro número dos corresponde al pecho atravesando casi exactamente las tetillas y otros puntos importantes como el ombligo y la mitad de las rodillas. Fig. 55 Canon de Praxiteles Fig. 56 Canon de la Afrodita de Rubens Fig. 57 Canon del Cristo de Miguel de Santiago Si se observan estos tres esquemas juntos; el Cristo de Miguel de Santiago con sus ocho alturas de cabeza (Fig.57), la Afrodita de Rubens de “El Juicio de París” del periodo 72 Barroco (Fig. 56) y el canon de Praxiteles (Fig. 55). Se advierte que concuerdan en los mismos puntos de intersección: en los pezones, ombligo, pelvis y rodillas. Que vienen a ser más o menos como puntos fijos en el canon. La representación de la figura humana con ocho alturas de cabeza viene desde la época clásica y responde a la dimensión ideal de las esculturas griegas. De esta manera ya conociendo la dimensión antropométrica de la figura de Cristo de Miguel de Santiago se presenta a continuación las dimensiones faciales del mismo personaje. Medidas del rostro y proporciones faciales Fot. 58 Rostro de Ctristo40 Fot. 59 Rostro de San Agustín41 Para aplicar este esquema de canon o tomar las medidas antropométricas de esta o cualquier otra figura se ha estudiado la actitud del personaje, es decir la dinámica de cómo está representado. En este caso vemos que la cabeza se encuentra no erguida, en posición de tres cuartos y ligeramente agachada. Todos estos datos nos ayudarán a obtener las dimensiones reales respetando la dirección de la cabeza, como se observa en la fotografía 56. 40 41 Fotografía de la propoiedad de la presente autora Fotografía de la propoiedad de la presente autora 73 CRISTO Fig. 60 Medidas del rostro de Cristo PUNTOS DE REFERENCIA MEDIDAS EQUIVALENCIA Medidas de longitud (medidas ANTROPOMÉTRICAS EN verticales) DEL ROSTRO PROPORCIÓN a) Cabeza (Altura) 17.5 cm 1 cabeza ab) Mitad de la cabeza (subdivisión 8. 7 cm (alturacabeza/2) = ½ Cabeza por la línea de seggel) 8.7 cm x 2 = 17.4 cm b) Rostro 15 cm --- c) Espacio que comprende el cabello 2.5 cm d) Espacio de la frente 5 cm 8va parte del rostro o ½ de la frente 1/3 del rostr0 e) Espacio de la nariz 5 cm 1/3 del rostro f) Espacio del mentón 5 cm 1/3 del rostro g) De la naríz a la abertura de la boca 1.5 cm --- - De ahí boca al hoyo del mentón 1.5 cm --- - De ahí al fin de la barbilla 2.5 cm --- h) Dimensión de la Oreja --- --- Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja --- --- j) Ojo izquierdo 2 cm ¼ cara k)Entrecejo (distancia del ojo a ojo) 2 cm ¼ cara l) Ojo derecho 1.7 cm --- 74 m) Ancho de la nariz 2.5 cm --- n) Largo de la boca 2.5 cm La boca tiene un ojo y medio de largo A través de la realización de los esquemas en base a la fotografía original de la serie pictórica de Miguel de Santiago, hemos querido ilustrar las diferentes dimensiones tomadas del rostro del cuadro original. En la fotografía 56 la línea que subdivide el rostro en dos partes atraviesa los ojos, tal y como se advierte en los libros de teoría de proporciones. Sin embargo esto suele variar en escorzos y por cuestiones de perspectiva. Vemos que el rostro está dividido en tres partes iguales comprendido por la frente, la naris y la boca. Así como también el mentón aunque no se divide en tres partes exactamente iguales. Por otro lado se observa que en medidas la distancia de ojo a ojo tiene como cifra 2 cm. Lo que en teoría de proporciones significa que la distancia entre los ojos es siempre la de otro ojo. SAN AGUSTÍN Fig. 61 Medidas del rostro de San Agustín 75 a) Cabeza (Altura) MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17.5 cm EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ab) Mitad de la cabeza (atravieza el 8. 7 cm (alturacabeza/2) ½ Cabeza b) Rostro 13.5 cm --- c) Espacio que comprende el cabello 4 cm --- d) Espacio de la frente 4. 5 cm 1/3 del rostro e) Espacio de la nariz 4. 5 cm 1/3 del rostro f) Espacio del mentón 4. 5 cm 1/3 del rostro g) De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla 1.5 cm 1/3 del mentón 1.5 cm 1/3 del mentón 1.5 cm 1/3 del mentón 5 cm Aprox 1/3 de rostro PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) párpado móvil) h) Dimensión de la Oreja Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja 2.5 cm -- j) Ojo izquierdo 1 cm Distancia de un ojo k)Entrecejo (distancia del ojo a ojo) 2 cm --- l) Ojo derecho 2 cm -- m) Ancho de la nariz 3 cm -- n) Largo de la boca --- --- Las medidas del personaje de San Agustín y el de Cristo en terminos de medidas antropométricas guarda una relación de proporción como se evidencia en los datos obtenidos como por ejemplo: el rostro subdividido en tres partes iguales y la relación de la naríz con la oreja que es aproximadamente el 1/3 del rostro en San Agustín que en teoría tiene el mismo tamaño. La frente es una de las áreas que conformemente varía; puesto que es un espacio relativo que depende de la población del cabello y el peinado esto se verá en las diversas representaciones de San Agustín. En personajes como el Cristo la figura al tener la frente más grande, el espacio del cabello es menor. En cuanto a la división del mentón en tres partes, en el rostro de Cristo éstas no son iguales, la parte que subdivide desde el hoyo del mentón hasta el final de este es siempre en medida mayor. 76 Fig 62 Medidas de las Manos de San Agustín Se ha tomado de las dimensiones de la mano solo la longitud, la mano derecha tiene 12 cm que en relación con el rostro (13.5 cm) llega a la frente, aproximadamente casi hasta el nacimiento del cabello, y acercándose a la medida total del rostro, mientras que la mano izquierda es mucho más pequeña por la forma de representación. 3.2.1.4.1.2 SAN AGUSTÍN ENTREGA LA REGLA A LAS CUATRO ÓRDENES QUE FUNDA Fot. 63 San Agustín entrega la regla. 42 Fot.64 Detalle del rostro, San Agustín entrega la Regla 43 Esta composición basada en los parajes de la vida de San Agustín no utiliza como base los grabados de Bolswert. En ella se representa a las cuatro órdenes que el santo fundó. 42 43 Imagen de propiedad de la presente autora. Imagen de propiedad de la presente autora. 77 Los personajes que se encuentran de pie y con la figura erguida son de los que nos hemos servido para la toma de medidas de la longitud del cuerpo. A excepción de San Agustín, que a pesar de que no está de pie es imposible excluirlo, pues es el personaje principal de la escena por lo que de este se han recopilado solamente las medidas del rostro. SAN AGUSTÍN Fig. 65 Medidas del rostro de san Agustín PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (subdivisión por la línea de seggel) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17 cm 8. 5 cm (alturacabeza/2) EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 12 cm 5 cm 2 cm 5 cm 5 cm 1.6 cm 1.6 cm 1.6 cm 4 cm --Aprox. 1 frente ---1/3 mentón 1/3 mentón 1/3 mentón Aprox. Mentón Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja 2.5 cm --- 78 j) Ojo izquierdo k)Entrecejo Distancia del ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 1 cm 2 cm 2 cm 3 cm --- ¼ cara ¼ cara ------- En la mayor parte de representaciones del Santo se observa que la frente se retrata estrecha por la forma de estar marcado el cabello, lo que hace que disten las dimensiones del rostro con otros personajes. En teoría el rostro se divide en tres partes iguales, e inicia en el nacimiento del cabello pero existen casos como este en el que el cabello ocupa parte de la frente lo que hace que las proporciones varien en el rostro. En esta imagen (San Agustín, arriba) por ejemplo: la línea que divide la mitad de la cabeza pasa por los ojos y a partir de esta es posible conocer la altura total de la cabeza en algunos casos. En este caso se cumple esta afirmación, pero vemos que en otros rostros la línea que divide no pasa exactamente por la mitad de los ojos pero se aproxima. Para determinar en los personajes masculinos el mentón que no se advierte al estar representado por una larga barba se duplica la medida de la naríz tomando como referencia esta (Stratz, 1926). También es posible llegar a una determinación para obtener dicha longitud, repitiendo tres veces la dimensión desde el final de la nariz hasta la mitad de la boca y de ahi hasta donde se repita la misma medida y otra tercera vez donde sería la quijada. Sin embargo hay imágenes que por la misma posición del rostro las medidas se modifican y esto no es aplicable. Otro punto a considerar es que el rostro al no estar de frente totalmente es representado con una parte más grande que otra por cuestión de perspectiva así por ejemplo el eje horizontal de los ojos. 79 MONJAS DE LA ORDEN DE SANTA MÓNICA Monja lado izquierdo Fig. 66 Medidas del rostro: Monja izquierda PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (Línea de la ceja) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17 cm 8. 5 cm (alturacabeza/2) EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 12.6cm 4.4 cm 4 cm 4.6 cm 4 cm 1.3 cm 1.3 cm 1.4 cm --- Aprox. 1 frente ------------ Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k)Entrecejo Distancia del ojo a ojo) l) Ojo derecho --1.7 cm 1.5 cm 2 cm m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2 cm 2.5 cm --¼ cara ¼ cara Equivalente nariz a la --- 80 En este esquema (arriba) vemos que la línea que subdivide la mitad de la cabeza no atravieza los ojos (línea de seggel), sino las cejas y coincide con la línea que divide en tres partes el rostro. Bellanger explica al respecto que: “En el caso de que la nariz, por ser demasiado corta o excesivamente larga, no representase la cuarta parte de la longitud total, esa línea no pasará precisamente por los ojos, quedando un poco por encima o por debajo de este nivel normal” (1943, p.111). Habiendo casos curiosos en el que el punto medio de la cabeza se ubica en las cejas como el presente rostro, en el que la parte que comprende la nariz es más grande que los demás espacios de acuerdo con las cifras obtenidas. Miguel de Santiago resolvió con proporción los rostros de los personajes, en los datos obtenidos, la nariz tiene de ancho 2 cm y el ojo derecho el mismo número, lo que en proporción cumple con la teoría de que la nariz tiene un ojo de ancho. Este personaje tiene de altura de cabeza 17 cm desde la parte más alta hasta el mentón y de altura total 129 cm lo que en proporción equivale a 7 1/2 alturas de cabeza, que es (altura total/cabeza = 7.58cm) Fig 67. Canon de la figura humana 81 Monja lado derecho Fig. 68 Medidas del rostro: Monja derecha PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (Línea d ela ceja) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17.2 cm 8. 6 cm (alturacabeza/2) EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 12.2 cm 5 cm 3.2 cm 4.5 cm 4.5 cm 1.5 cm 1 cm 2 cm --- ---------- Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca ------------- ------------- De este personaje muchos de los datos del rostro no han sido obtenidos por encontrarse la pintura muy difuminada, detalles como ojos y nariz no son visibles en el lienzo. Sin embargo al igual que el personaje anterior la mitad de toda la cabeza coincide con la línea que atraviesa la ceja. Cada personaje presenta medidas y proporciones diferentes respondiendo a sus necesidades de representación. 82 Este personaje tiene de altura de cabeza 17. 2 cm y de altura total 134 cm lo que en proporción equivale a 7 2/3 alturas de cabeza, que es (altura total/cabeza = 7.79cm) . En teoría la mano llega aproximadamente hasta la ceja e incluso un poco más, en este caso la mano mide 13.5 cm, una cifra más grande que el rostro (12.2 cm). Fig 69 Canon de la figura humana MONJAS DE LA ORDEN AGUSTINA Personaje lado izquierdo Fig. 70 Medidas del rostro: Personaje izquierdo PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17 cm EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza 83 ab) Mitad de la cabeza (Línea de la ceja) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la nariz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja 8. 5 cm (alturacabeza/2) ½ Cabeza 11 cm 6 cm 2.4 cm 4.3cm 4.3 cm 1cm 0.9 cm 2.4 cm --- Aprox. 1/3 cabeza Aprox. 1/5 rostro -------- Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) --2cm 2.5cm l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz 2cm 2.5 cm n) Largo de la boca 2.5 cm ----Equivalente al espacio de la nariz --Equivalente al espacio de la boca. -- Este personaje al igual que la figura 67 como característica propia presenta una frente bastante estrecha por el requerimiento propio del personaje que lleva una toca sobre la cabeza. Este personaje tiene de altura de cabeza 17cm y de altura total 132 cm lo que en proporción equivale a 7 ¾. Que es (altura total/cabeza = 7.76cm) . Acercándose a 8 alturas de cabeza. La mano (11cm) mide aproximadamente la dimensión del rostro (10 cm). Aspecto que se viene repitiendo en las demás figuras. Fig 71 Canon de la figura humana 84 Personaje lado derecho Fig. 72 Medidas del rostro de monja lado derecho PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17 cm 8. 5 cm (alturacabeza/2) 11 cm 6 cm 2 cm 4.5 cm 4.3 cm 1.3 cm 1.3 cm 1.9 cm --- EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza --Aprox. 1/3 cabeza Aprox. 1/5 rostro --------- Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca --2cm -----2.5 cm 2 cm ------------- 85 La altura de la cabeza de este personaje es de 17 cm y de altura total tiene 140 cm que en proporción equivale a 8 1/6 alturas de cabeza. Que es (altura total / cabeza = 8. 23). La dimensión de las manos varían en la misma figura pero se aproximan. La mano derecha mide 12 cm y la izquierda 10 cm acercándose a la dimensión total del rostro. Fig 73 Canon de la figura humana CLÉRIGO AGUSTINO Fig. 74 Medidas del rostro de un clérigo agustino PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 86 a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (Línea de los ojos) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja 16.8 cm 8.4 cm (alturacabeza/2) 1 cabeza ½ Cabeza 14. 4cm 2.4 cm 4.4 cm 5.3 cm 4.7cm 1.5 cm 1.5 cm 1.7 cm 4 cm --Aprox. 1/3 cabeza Aprox. 1/5 rostro --------Aprox. a la frente Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz 2.5 cm 2cm -----3 cm n) Largo de la boca 3 cm --------Igual que la boca de perfil --- En este personaje la línea que subdivide la cabeza en dos partes pasa por los ojos, este dato puede ayudar en algunos casos a conocer la altura total de la cabeza. Stratz nos comenta que: "En la cabeza la línea de unión de las pupilas, la línea fundamental de Seggel, está exactamente en el centro equidistante de la barba y la coronilla" (1926, p.10). Este personaje tiene de altura de cabeza 16.8 cm y de altura total 118 cm lo que en proporción equivale a 7 alturas de cabeza. Que es (altura total/cabeza = 7.0 cm) . Mano: 10 cm y con relación al rostro llega por la línea que atravieza la ceja aproximadamente. Fig 75 Canon de un clérigo 87 Al cotejar las dimensiones de los rostros del lienzo de "San Agustín entrega la regla a las cuatro órdenes que funda". Se observa que en las cabezas más grandes la línea de subdivisión de la mitad atravieza la ceja o el párpado móvil, mientras que en rostros con menos amplitud en el espacio del cabello esta línea se situa en los ojos. Cada personaje tiene su medida individual al ser representado y responde a su canon personal. Pero varía entre 7 y 8 alturas de cabezas en este lienzo . Mientras más esbeltas las figuras el canon es más grande. 3.2.1.4.1.3 LA CONSAGRACIÓN EPISCOPAL DE SAN AGUSTÍN Fot. 76 La consagración episcopal de San Agustín. 44 Fot. 77 Rostro de San Agustín. 45 Este lienzo ha sido inspirado en los grabados de la serie de Bolswert. En el plano principal aparece sentado San Agustín vestido de pontífice para recibir la mitra que le entregan los obispos. En este lienzo se encunetran una variedad de personajes como un niño y los obispos ancianos. 44 45 Imágen tomada de : Estebaranz, J. Miguel de Santiago en San Agustín de Quito.(2008). Imagen de propiedad de la presente autora. 88 SAN AGUSTÍN Fig 78 Medidas del rostro de San Agustín PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (línea ojos) MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 18 cm 9 cm (alturacabeza/2) EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja 13 cm 5 cm 3cm 5 cm 5cm 1.5 cm 1.5 cm 2cm 5.3 cm --1/3 cabeza --1/3 cabeza 1/3 cabeza ---Aprox. 1/3 cabeza Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2 cm 2.5 cm 2 cm 2 cm 3 cm 3 cm ----Equival. a un ojo --Equival a una boca ---- El rostro de San Agustín en esta escena está representado en tres cuartos e inclinado hacia la derecha. La línea que subdivide la cabeza pasa exactamente por la línea de los ojos dividiendo en dos partes iguales,tal y como se describe en algunos tratados de arte. El rostro está dividido en dos partes iguales y una más corta que comprende el espacio 89 de la frente. Esto se debe a la representación individual del personaje, que es usualmente representado con la frente pequeña por la influencia propia del peinado que reposa sobre la frente y la hace ver más corta. Característica que se viene repitiendo en este personaje. En este sentido también se advierte que la oreja tiene la misma proporción del espacio de la naríz y la boca (1/3 de la cabeza). Fig 79 Medidas de las manos de San Agustín En cuanto a las manos la dimensión de éstas es de 12 cm cada una, desde la muñeca hasta el dedo más sobresaliente aproximadamente la dimensión total del rostro (13 cm). MONJE Fig 80. Medidas del rostro de un monje 90 PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (atravieza la ceja) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17.2 cm 8.6 cm (alturacabeza/2) EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 12.4 cm 5 cm 3cm 4.5 cm 4.5cm 1.5 cm 1.5 cm 1.5 cm 5 cm --1/3 cabeza Aprox 1/5 rostro ----1/3 del mentón 1/3 del mentón 1/3 del mentón 1/3 rostro Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2 cm 1 cm 1.5 cm 2 cm 2 cm 2 cm --------Distancia al ojo --- Este personaje que lleva un cirio entre sus manos, tiene de altura de cabeza 17.2 cm y de altura total 130 cm que en proporción equivale a 7 1/2 cabezas. Que es (altura/cabeza= 7.55) . Las manos no están estiradas por lo que las medidas de lelas no se han tomado en cuenta. Fig 81 Canon de un monje 91 NIÑO Fig. 82 Medidas del rostro de un niño PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 15 cm 7.5 cm (alturacabeza/2) 12 cm 3 cm 5cm 3.5 cm 3.5 1 cm 1 cm 1.4 cm ---- EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza --Aprox 1/2 rostro -------- Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca --1 cm ----1.2 cm 1cm --Aprox. ancho nariz ------Aprox. ancho naris Dentro de las medidas del rostro la parte más prominente es la frente con 5 cm. Una proporción mucho mayor que el espacio de la boca y el mentón, puesto que en los niños la frente es mucho más amplia. “A medida que el niño va teniendo más edad los tamaños relativos de la cabeza y el tronco varían”(Perard,1983, p. XII). Por esto en la representación de los niños usualmente la cabeza es más grande relativamente a su 92 tamaño. Es por esto, que la línea que divide en dos mitades la cabeza se situa en la ceja porque al ser la cabeza relativamente más grande en los niños y los espacios de la boca y narís más cortos en el rostro de la figura, la línea asciende a la ceja. Uno de los aspectos más notables es que son las cejas y no los ojos como en el adulto (salvo en algunas excepciones) los elementos que coinciden con la mitad de la altura de la cabeza en el niño. Este personaje tiene 87 cm de altura total, que en proporción equivale a 6 alturas de cabeza. Que es (altura/cabeza = 5.8). En este sentido, el personaje se aproxima al canon de un niño de más de tres años que generalmente es representado con 5 cabezas. “ Tiene de alto por la parte frontera desde la la superficie del casco a la planta del pie, cinco cabezas de las suyas…” (Vargas, 1795, p.60). Fig. 83 Canon de un niño Como se ha dicho anteriormente los grabados de Bolswert le sirvieron a Miguel de Santiago para realizar su obra. ¿Pero utilizó el canon que venía en ellos?. Este grabado sirvió como fuente para la realización del lienzo, él que sigue muy de cerca el grabado original. Los dos personajes del lado derecho de la composición; el niño y el monje presentan un canon menor al de el lienzo del mismo tema de Miguel de Santiago. El monje se aproxima a 7 y el niño a 5 ½ alturas de cabeza. Notándose que Santiago representa a los personajes en un modelo más estilizado que el del grabado. 93 Fig 84 Canon de la Consagración episcopal de SanAagustín del grabado de Bolswert 3.2.1.4.1.4 SAN AGUSTÍN ANTE HONORIO Fig 85 San Agustín ante Honorio 46 Fig 86 Rostro de San Agustín 47 En esta escena sobre la vida de San Agustín, el pintor ha tomado como fuente iconográfica el grabado de Schelte de Bolswert del mismo tema. En ella se encuentra el 46 47 Imagen tomada de : Estebaranz.(2008) Miguel de Santiago en San Agustín de Quito Imagen de la propiedad de la presente autora 94 emperador Honorio junto a San Agustín como los protagonistas de la escena. El lienzo sigue de muy de cerca la composición original SAN AGUSTÍN Fig 87 Medidas del rostro de San Agustín PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab)Mitad de la cabeza(línea de los ojos) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 16.5cm 8.2 cm (alturacabeza/2) EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 13.5 cm 3 cm 4.5cm 4.5 cm 4.5cm 1.5 cm 1.5 cm 1.5 cm 4.5 cm --1/3 cabeza 1/3 rostro 1/3 rostro 1/3 rostro 1/3 del mentón 1/3 del mentón 1/3 del mentón 1/3 rostro Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2 cm 2 cm ----2 cm 1.5 cm --Equival. ancho naris ----Equival. ancho ojo --- En este personaje vemos que la línea que subdivide la cabeza en dos partes pasa por la línea de los ojos repitiéndose este patrón al igual que en los demás personajes salvo en 95 algunas excepciones. En esta representación de San Agustín a diferencia de las demás la frente es mucho más amplia por la propia representación individual de éste. En esta escena el santo ha sido representado de pie pero no completamente erguido pues se encuentra levemente inclinado hacia abajo. Dentro de las medidas antropométricas el personaje tiene de altura de cabeza: 16.5 cm y de altura total 124 cm que en proporción equivale a 7 ½ cabezas. Que es (altura total/cabeza= 7.5). La mano derecha mide 12 cm mientras que la mano izquierda: 11 cm aproximandose a la dimensión del rostro (13.5 cm). Fig 88. Canon de San Agustín HONORIO Fig 89 Medidas del rostro de Honorio 96 PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 16.5cm 8.2 cm (alturacabeza/2) 11.5 cm 5 cm 2cm 4.5 cm 5cm ------------- EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza ------------------- Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho --2 cm 2 cm 2.5 cm --Igual a un ojo --- m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2 cm 1.5 cm Igual a un ojo --- El personaje que representa a Honorio tiene de altura de cabeza 16.5 cm libre de la corona. Tomando en cuenta para este caso que al no tener la especificación del comienzo de la cabeza se ha duplicado el espacio desde la mitad de los ojos al mentón. La altura total del personaje desde la corona es de 122 cm. Pero la altura real es de 115.5 cm. Que equivale en proporción a 7 alturas de cabeza. Que son (altura total/cabeza= 7). La mano que está estirada mide 12 cm acercándose a la medida del rostro (11.5). Fig 90 Canon del personaje de Honorio 97 MONJE DE LA ORDEN AGUSTINA Fig. 91 Medidas del rostro de un monje PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab)Mitad de la cabeza (línea de los ojos) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17cm 8.5 cm (alturacabeza/2) EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 13.5 cm 4 cm 4.5cm 4.5 cm 4 cm 1.5 cm 1.5 cm 2 cm 4.5 cm --------------1/3 rostro Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2 cm 2 cm ----2 cm 1.5 cm -------Ancho de un ojo --- 98 En este personaje la altura de la cabeza es de 17 cm y la altura total de 126 cm que en proporción equivale a 7 ½ alturas de cabeza. Que es (altura/cabeza=7.4). Fig. 92 Canon de un monje NIÑO Fig. 93 Medidas del rostro de un niño 99 PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 13cm 6.5 cm (alturacabeza/2) 9 cm 3 cm 2.2cm 3.4 cm 3.4cm 1 cm 1 cm 2 cm ---- EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza ------------- ---- Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) --2 cm 2 cm l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 1.5 cm 2 cm 2.2 cm ----Igual que distancia del ojo ------- la En este personaje la línea que divide el rostro en dos partes pasa por debajo de los ojos además de que en la subdivisión del mentón al igual que en algunos de los otros personajes presenta un espacio mayor en el área que va desde el hoyuelo del mentón hasta el fin de este. Este personaje tiene de altura de cabeza 13 cm y de altura total 77 cm que en proporción equivale a 6 alturas de cabeza. Aunque es difícil definir la edad a la que equivaldría el niño por sus rápidos cambios en el crecimiento. Según Loomis (1943) el canon de seis alturas representa a un niño de cinco años. Fig .94 Canon de un niño 100 Los personajes del grabado de Bolswert tienen 6 ½ alturas de cabeza, salvo el niño que está representado con 6. A diferencia de este, los personajes de Miguel de Santiago varían entre 7 y 7 ½ alturas de cabeza. Esto quiere decir, que los personajes de Santiago fueron hechos con media y una cabeza más que las figuras del grabado. Fig 95 Canon de San Agustín ante Honorio del grabado de Bolswert 3.2.1.4.1.5 LA ORDENACIÓN DE SAN AGUSTÍN Fot. 96 La Ordenación de San Agustín 48 48 Imagen tomada de : Estebaranz.(2008) Miguel de Santiago en San Agustín de Quito 101 . Para la realización de esta escena, Miguel de Santiago ha recurrido al grabado de Scheltze de Bolswert. En el plano principal se encuentra San Agustín vestido con el hábito de la orden interactuando con un monje y dos caballeros.”Se aprecian diferencias en los rostros, pues mientras que los del santo, los dos caballeros que lo flanquean y el monje de la derecha son de gran calidad y atribuibles a Miguel de Santiago, el resto de rostros es mediocre”.(Estebaranz, 2008, p. 23). Esto se debe a que los rostros mejor resueltos son los de los personajes principales pues acaparan mayor atención demandando mayor calidad. SAN AGUSTÍN Fot. 97 Medidas del rostro de San Agustín PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) Mentón h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 18.5 cm 9.2 cm (alturacabeza/2) 14 cm 4.5 cm 3 cm 5.5 cm 5.5cm --4.4 cm EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza --------- 102 Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2.5 cm 2 cm 2 .2 cm 2.7 cm 2.7 cm --- -------- En la teoria de proporciones el rostro se divide en tres partes iguales pero vemos que esto varía de acuerdo al personaje como por ejemplo detalles como el cabello, el peinado o la perspectiva, el movimiento de la cabeza hace que las proporciones se modifiquen en la representación de los personajes. Por otro lado, en este personaje por la influencia de sombras y difuminación propias de la técnica pictórica no se distingue la boca ni sus detalles definidamente. En este caso es dificil precisar exactamente donde termina el mentón por el aspecto por la difuminación de los bordes. Por lo que de acuerdo con los procedimientos de Stratz (1926) hemos reproducido la misma proporción de la nariz para el mentón. San Agustín en este lienzo tiene de altura de cabeza 18.5 cm y de altura total 130 cm que equivale en proporción a 7 cabezas. Que es (altura/cabeza= 7, 02). Las manos de acuerdo con los datos se aproximan en cifra la una de la otra pero la mano izquierda es más grande con 13 cm a diferencia de la derecha con 12 cm. Acercándose a la dimensión del rostro (14 cm). Fig 98 Canon del personaje de San Agustín 103 CONDE BONIFACIO Fig 99. Medidas del rostro del Conde Bonifacio PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (atravieza la ceja) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) Mentón h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17.5 cm 8.7 cm (alturacabeza/2) EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 15.5 cm 2 cm 6 cm 4 cm 5.5cm --4 cm ------------Igual al espacio de la naris. Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 1.8 cm 2 cm ----2.5cm --- ------------ 104 Este personaje tiene de altura de cabeza 17.5 cm y de altura total 123 cm que equivale en proporción a 7 cabezas. Que es (altura/cabeza= 7.02). La mano que se distingue tiene de longitud total 12 cm que al compararse con el rostro vendría a dar más arriba de la ceja por la mitad del espacio de la frente. Fig 100 Canon del personaje del Conde Bonifacio MONJE Fig 101 Medidas del rostro de un monje 105 PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (atravieza la ceja) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17 cm 8.5 cm (alturacabeza/2) EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 12 cm 5 cm 3.5 cm 4.5 cm 4cm 1 cm 1 cm 2 cm 4.5 cm --------Igual al espacio de la nariz y cabello. Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo 2 cm 2 cm k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2 cm 1.7 cm 2 cm 2.5 cm Equivalente al entrecejo y a al nariz. ------- Este personaje que representa a un monje tiene de altura de cabeza 17 cm y de altura total 120 cm. Que equivale en proporción a 7 cabezas. Que es (altura/cabeza= 7. 05). Fig 102. Canon del personaje de un monje 106 Caballero MEDIDAS DEL ROSTRO Fig. 103 Medidas del rostro de un caballero PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (atravieza el ojo) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 18 cm 9 cm (alturacabeza/2) 14 cm 4 cm 4 cm 4cm 6cm 1.5 cm 1.5 cm 3 cm 5 cm EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 1/3 de la cabeza 1/3 de la cabeza 1/3 de la cabeza ----------- Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo 2 cm 2 cm k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca ----3m 3.2 cm --Equivalente al entrecejo y a al nariz. ------Aprox. ancho boca 107 Este personaje tiene de altura de cabeza 18 cm y de altura total 126 cm que en proporción equivale a 7 alturas de cabeza. Que es (altura/cabeza= 7). Para definir la altura de la cabeza por la amplia población de cabello y por no conocer la definición del mentón por la larga barba la línea de subdivisión de la mitad de la cabeza que atravieza por los ojos ayudó para la determionación de este espacio. La mano mide 11.3 cm aproximándose a la del rostro 14 cm. Fig. 104 Canon del personaje de un caballero Todos los personajes de esta escena cumplen con el canon de 7 alturas de cabeza, guardando concordancia entre sí. Aunque es difícil definir a que etapa epecífica pertenece el canon que ha utilizado Santiago podemos decir que tiene la influencia tanto clásica (7 ½ y 8 cabezas ) como barroca porque durante esta última a pesar de que la representación de la figura humana no tuvo relación con un solo modelo específico, se conoce que había una predilección por 8 alturas de cabeza gracias al canon del grabado barroco transmitido por José García Hidalgo (pág . 49). Según Staratz (1926) este canon de 7 cabezas se acerca al canon natural de un hombre de 1.65 cm +-. 108 Fig 105 Canon de la Ordenación de San Agustín del grabado de Bolswert Miguel de Santiago no toma como referente el canon de Bolswert y como se ha dicho anteriormente sus figuras a pesar de ser las mismas de la escena del grabado son más esbeltas presentando un canon diverso al de los modelos. Los personajes de Miguel de Santiago tienen un canon de 7 alturas de cabeza en este lienzo mientras que las del grabado de 6 ½ cabezas. 3.2.1.4.1.6 EL SANTO EN ÉXTASIS SOSTENIDO POR DOS ÁNGELES Fot.106 El Santo en éxtasis sostenido por dos ángeles 50 49 50 Fot. 107 Rostro de San Agustín49 Imagen de la propiedad de la presente autora. Estebaranz, J. Miguel de Santiago en San Agustín de Quito.(2008). 109 Este lienzo no utiliza como fuente los grabados de Bolswert sino que está inspirado en un grabado de Peter de Jode el Joven (1606–1674) (Estebaranz, 2008). Miguel de Santiago ha tomado para la recreación de esta escena sólo la parte inferior del cuadro y ha eliminado algunos personajes que aparecen en el grabado original. Proporcionándole así mayor protagonismo al santo. Dicha escena también fue hecha por el pintor flamenco Van Dyck en 1628 para los agustinos de Ambers. SAN AGUSTÍN Fot 108. Medidas del rostro de San Agustín PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 17 cm 9 cm (alturacabeza/2) 15.5 cm 2 cm 4 cm 5 cm 7 cm 2 cm 2 cm 3cm EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza -------- 110 h) Dimensión de la Oreja 5 cm Equival. al espacio de la naris Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2 cm 2 cm 2 cm 1.5 cm 3 cm 3cm -Equival . entrecejo ----Equival a la boca Equival ala naris El rostro de San Agustín en esta escena se halla inclinado hacia arriba, por esto el efecto de la dimensión es mucho menor en la frente por lo que obtenemos partes diferentes. Las medidas varían conforme a la representación y la posición en que se encuentre el personaje. Las medidas no son matemáticamente exactas pero si guardan una relación de proporción esto se hace evidente en el tamaño de la naríz que se acerca al de la boca o en la subdivisión en tres partes del mentón en algunos personajes. Este personaje tiene de altura de cabeza 17 cm y de altura total 146 cm que equivale en proporción a 8 ½ cabezas. Que es (altura/cabeza=8.58). La Mano izquierda tiene 14.5 cm mientras que la mano derecha: 13 cm. Aproximándose al rostro. Este canon pertenece al canon ideal de ocho y media cabezas. Fig 109. Canon del personaje de San Agustín 111 ÁNGEL DERECHA Fig 110 Medidas del rostro (Ángel) PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 16.5 cm 8.2 cm (alturacabeza/2) 14 cm 2.5 cm 5cm 5 cm 4 cm 1 cm 1 cm 2 cm 4.5 cm EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 1/2 frente 1/2 del mentón 1/2 del mentón Mitad del mentón 1/3 rostro Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) --2 cm 2.7 cm l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2 cm 2.5 cm 2.5 cm 112 Este personaje que representa a un ángel tiene de altura de cabeza 16.5 cm y de altura total 132 cm que en proporción equivale a 8 alturas de cabeza. Que es (altura/cabeza=8). Mano: 10.5 cm Fig 111. Canon del personaje de un ángel ÁNGEL IZQUIERDA Fig 112 Medidas del rostro de un ángel 113 PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (linea de ojos) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 18 cm 9 cm (alturacabeza/2) 13.5 cm 3 cm 5cm 5 cm 5cm 2 cm 2 cm 1 cm --- EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 1/3 cabeza 1/3 rostro 1/3 rostro 1/3 rostro 1/3 del mentón --- Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2 cm 2 cm ----2 cm 1.5 cm Este personaje tiene 18 cm de altura de cabeza y 135 cm de altura total que equivale a 7 ½ alturas de cabeza. Que es (altura/cabeza=7.5). La mano en dimensión tiene 15 cm. Fig. 113 Canon de un ángel 114 Fot. 114. Grabado de Peter de Jode el Joven 51 La disposición de los personajes del lienzo de Santiago es la misma que del grabado, sin embargo Santiago ha sintetizado la escena eliminando algunos personajes. San Agustín muestra en el lienzo y en el grabado una figura más imponente por tratarse del personaje principal con 8 ½ alturas de cabeza en comparación con el ángel que flanquea a su izquierda que presenta 8 alturas de cabeza en el grabado y 7 ½ ene el lienzo. Santiago representa a los personajes entre 7 ½ y 8 ½ alturas. Lo que muestra una diversificación en la representación del cuerpo en una misma escena. El ángel que está a la derecha de San Agustín no es tomado en cuenta en el grabado porque no se percibe el final de la figura. 51 Estebaranz, J. Miguel de Santiago en San Agustín de Quito.(2008). 115 3.2.1.4.1.7 SAN AGUSTÍN Y SANTA MÓNICA Fot. 115 Imagen tomada de: Estebaranz. Miguel de Santiago en San Agustín de Quito(2008). Fot. 116 Rostro de San Agustín La composición de la presente escena no está basada en los grabados de Bolswert. En el primer plano se encuentra San Agustín y su madre Santa Mónica sobre un fondo paisajistico. La calidad pictórica de la obra se diferencia en los rostros mostrándonos líneas más severas, facciones marcadas y movimientos más rígidos en los personajes. SAN AGUSTÍN Fot. 117 Medidas del rostro de San Agustín 116 PUNTOS DE REFERENCIA Medidas de longitud (medidas verticales) a) Cabeza (Altura) ab) Mitad de la cabeza (final de la nariz) b) Rostro c) Espacio que comprende el cabello d) Espacio de la frente e) Espacio de la nariz f) Espacio del mentón g) - De la naríz a la abertura de la boca - De ahí boca al hoyo del mentón - De ahí al fin de la barbilla h) Dimensión de la Oreja MEDIDAS ANTROPOMÉTRICAS DEL ROSTRO 21 cm 10.5 cm (alturacabeza/2) EQUIVALENCIA EN PROPORCIÓN 1 cabeza ½ Cabeza 20 cm 1cm 5cm 6 cm 9 cm 2 cm 2 cm 5 cm 6 cm ----------------Igual al espacio de la nariz Medidas de ancho (medidas horizontales) i) Ancho de la oreja j) Ojo izquierdo k) Entrecejo (distancia de ojo a ojo) l) Ojo derecho m) Ancho de la nariz n) Largo de la boca 2.5 cm 3 cm 2 cm --3.2 cm 2.5 cm ------- El rostro de San Agustín en esta escena se halla inclinado hacia arriba en un eje diagonal por lo que la frente se percibe más corta en comparación con los espacios del mentón y la nariz. En este caso es dificil precisar exactamente donde termina el mentón por el aspecto de la pintura que no esta definida sino difuminada en esta zona y se pierde con el ambiente. La línea que subdivide la cabeza en dos partes pasa por la nariz, efecto de la posición de la cabeza del personaje y por el corto espacio de la zona del cabello (1 cm). Mientras más corta sea esta área y más grande sea la del mentón, la línea que subdivide la cabeza baja mucho más y se aleja de la línea de los ojos. En este personaje de acuerdo con los datos encontrados la dimensión de la oreja (6 cm) es la misma que la de la nariz (6 cm), patrón que se viene presentando también en los otros personajes. “La altura de la oreja es un tercio de la longitud de la cara” 52 igual que la longitud de la nariz. 52 http://reprodart.com 117 La altura de la cabeza del santo es de 21 cm y la altura total es de 180 cm que equivale en proporción a 8 ½ alturas de cabeza. Que es (altura/cabeza= 8.57 ). La mano derecha tiene 17 cm y la izquierda más grande 19 cm aproximándose a la medida total del rostro (20 cm). En este caso, mientras la cabeza es mucho más grande se subdivide en más segmentos. Esta escena muestra una figura esbelta mucho mayor a las demás representaciondes de San Agustín en otros lienzos. Según la teoría de Stratz este canon responde al canon antropométrico del hombre heróico de +- 1.80 cm. Fot. 118 Esquema de la figura humana de San Agustín. Sin antes concluir, cabe mencionar que la teoría y los grandes tratados en muchas ocaciones están lejos de la práctica, ya desde los grandes tratadistas como Alberti y Durero no aplicaban en sus representaciones algunos de sus planteamientos teóricos, sin embargo aportaron a la teoría de la representación de la figura humana. No todo es matemáticamente exacto pero desde el punto de vista de la proporciones Miguel de Santiago a pesar de no haber conocido a los tratadistas clásicos resolvió de manera correcta la reproducción del cuerpo humano. El ser humano dependiendo de las circunstancuias de cada época ha expresado de manera libremente su percepción de la belleza del cuerpo humano y todos los cánones son la expresión de un tiempo y de un artista en especial. Como resultado, establecer un canon único para la figura humana significaría fijar todas las condiciones que deben cumplirse para que una figura esté dentro de unas normas “naturales”. Un canon tiene un valor en general , pero no se cumple con exactitud para 118 todos los casos. No se puede esperar de un rostro que está en escorzo las mismas proporciones que uno que está de frente. Miguel de Santiago no establece un canon especifico sino que atiende a las caracteristicas individuales de la naturaleza y la fisonomía. 119 CONCLUSIONES Los personajes de las obras pictóricas pertenecientes a la serie de San Agustín de la autoría de Miguel de Santiago guardan una relación de proporción de acuerdo con un canon previamente establecido. En consecuencia, dentro de la investigación realizada creemos que Miguel de Santiago para resolver la proporción de sus figuras se basó en un conocimiento, pese a que no tuvo una formación académica o teórica. La formación de los artistas coloniales era más bien práctica que teórica. El artista a pesar de no estudiar los cánones del ser humano resuelve la serie pictórica de manera correcta, pues la habilidad es innata. Santiago utiliza un canon diverso para cada personaje y en algunos el canon más grande pertenece al personaje más importante. San Agustín en sus diferentes representacines presenta canones diversos ajustándose al requerimiento del lienzo y la figura, y varía entre 7 y 8 ½ alturas de cabeza. Miguel de Santiago utiliza un canon más grande que el canon del grabado de Bolswert, mostrándo personajes más esbeltos. La utilización de un tratado como afirma José María Vargas es poco probable pues no se han encontrado datos que verifiquen a ciencia cierta la utilización de éstos para la realización de su obra pictórica. Esto implica que no utilizó bases teóricas en cuanto a la representación de la figura humana pero si recurrió a bases gráficas o ilustrativas como los grabados de Bolswert. Por otro lado, en cuanto al arte en la colonia, desde el punto de vista de la creación, la pintura estaba fuertemente determinada por los modelos europeos que impedían la libertad artística. No obstante Miguel de Santiago modificó ciertos detalles no siguiendo el modelo por completo, en muchos casos usó artifugios implantando en las composiciones detalles personales como cambio de posiciones y agregando otros personajes. Su obra se desarrolló en plena época barroca pero muestra características que se heredaron del estilo anterior es decir el renacentista; como: la formalidad y del 120 Barroco: la predilección por las líneas no muy marcadas sino que se pierden con el fondo, pero recurriendo a efectos de perspectiva. Es difícil determinar la obra de Miguel de Santiago al encontrar constantes intervenciones que han modificado la obra, dificultando su lectura real, ya que en muchos de los trazos (reintegros cromáticos posteriores) que hemos visto no son los de Miguel de Santiago ni de su taller. Dentro de este trabajo es posible que Miguel de Santiago haya dibujado previo a la aplicación del color, o al menos utilizó una guía (cuadrícula) para la distribución de los personajes en el lienzo. La proporciones son modificadas ajustandose al requerimiento de la posición y escorzo, en su mayoría los personajes que están provistos de una gran dimensión de cabeza la mitad de esta se encuentra en la ceja. Las proporciones varian por las caracteristicas fisonomicas individuales. En su vida artística, Miguel de Santiago no sólo se valió de los grabados como sucede en San Agustín, sino que también tomó su modelo para pintar de la observación del natural. En Guápulo vemos ya, la introducción del paisaje andino en los lienzos de Santiago. Sin embargo en cuanto a la representación de la figura humana no podemos asegurar lo mismo, pues durante la época colonial no se conoce que los artistas hayan trabajado con modelos humanos; lo común eran los modelos gráficos. En la serie de San Agustín se ve a lo largo de la obra de Santiago la diferencia entre la resolución de los personajes desde los mismos gestos y actitudes. Hay rostros en la serie que distan mucho en calidad de otros. Se pudo evidenciar también que hay escenas en el que debió haber intervenido un mismo colaborador por el parecido en la representación gráfica de algunos lienzos. 121 RECOMENDACIONES Para efecto de las proporciones es necesario conocer que el término cabeza en algunos libros es confundida con rostro. Por lo que hay que tomar en cuenta para su debido estudio. Según las posturas las medidas de los personajes pueden variar por lo que es importante establecer a que personajes y desde donde se toman las dimensiones, tomando en cuenta los ejes de las figuras. Los repintes posteriores mal resueltos, hacen que la obra pictórica se vea diferente de lo que era originalmente. Algunos de estos cambios en los rostros pueden variar las medidas. Para poder establer la autoría de una obra además de este estudio se debe combinar con otros procedimeintos como el científico. 122 BIBLIOGRAFÍA Adorno, T. (1983). Teoría estética. Barcelona: Orbis. Alberti, Batista. (1999). De la Pintura y otros escritos sobre el arte. Madrid: Tecnos Alfredo Flores y Caamaño. (1939). El testamento de Miguel de Santiago. Gaceta Municipal (n. 93 p. 117-132). Quito. ANH. Testamento de Miguel de Santiago. Sección protocolos. Vol 56. Arguello, P. & Botiva, A. (2003). El arte rupestre en Colombia. Recuperado el 06 de de Marzo del 2012, del sitio Web de la Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano: openarchive.icomos.org/968/1/68079.pdf Barrat, K. (1980). Logic and Design. Great Britain: George Godwin Limited. Bellanger, C. (1943). Manual del Pintor y el Dibujante. Buenos Aires: Editorial las Américas. Carcelén X. & Estebaranz, A. (2010).Esplendor del barroco quiteño. {En línea} Ediecuatorial. 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