Krishna Hinduismo Krisna es la forma principal de Dios, de quien emanan Visnú y los demás dioses (como Shiva y Brahma). El mismo Krisna declara: «Siempre que la rectitud decae y aumenta la injusticia, yo me manifiesto; y para la protección de los virtuosos, la destrucción de los viciosos y el restablecimiento de la rectitud, yo encarno de era en era» (Bhagavad-guita, capítulo IV, versos 7-8). Es uno de los dioses más importantes y adorados de la India. Krisna, su piel Krishna tenía su piel ‘azul oscuro’. Esto puede estar conectado con el hecho de la práctica moderna de representar a las deidades hinduistas con piel azul, en realidad no es exactamente azul oscuro, es del color de una nube llena de lluvia, muy auspiciosa en India, ya que es la que hace que crezcan las cosechas. En las pinturas, Krisna aparece frecuentemente de color azul. Por ejemplo las murtis (‘formas’, estatuas) y representaciones pictóricas del Señor Yagannatha (Krisna como ‘Señor del universo’) en Puri. En esas representaciones, su hermano y hermana aparecen con un color mucho más claro. Las primeras representaciones pictóricas generalmente lo muestran como negro. Las pinturas miniaturasrayastaníes (siglo XVI) muestran una figura color marrón o negra. Sin embargo, desde el siglo XIX, aparece casi siempre con piel de color azul. Nacimiento e infancia[editar] Krisna pertenecía a la tribu de los iadus, de la dinastía lunar. Como su tío Kamsa (‘bronce’) — primo de Devakí y tirano del reino de Vrisní con sede en la ciudad de Mathurá— fue avisado por el sabio Nárada Muni de que moriría en manos de un hijo de Devakī con su esposo Vasudeva (un noble de la corte), Kamsa los encarceló. Aunque Devaki y Vasudeva trataron de no tener hijos (para evitar que fueran muertos), tuvieron uno cada año. Kamsa fue matando uno por uno todos los hijos que nacieron en cautiverio. El séptimo hijo, Balarama, escapó de la muerte al ser transferido desde el útero de Devakī encarcelada al de Rójini (esposa no encarcelada de Vasudeva, que había quedado bajo el cuidado del pastor Nanda y no tenía contacto con Vasudeva desde hacía varios años). Como octavo hijo se encarnó Visnú, en la forma de Krisna. Actualmente ahora existe un templo (Krisna Yanma Bhumi) donde los hinduistas creen que estaba la celda del rey Kamsa. Para sustraerlo de la muerte, su padre lo sacó milagrosamente de la celda y lo llevó hasta Vrindavan (a 10 km), donde lo reemplazó subrepticiamente durante el sueño por una bebé que acababa de alumbrar la esposa de Nanda, Iashodá. Regresó a la celda, donde la hija de Iashodá —que en realidad era la energía material de Krisna, conocida como Durgá— se dio a conocer ante Kamsa y le advirtió que el hijo que habría de matarle ya había nacido y que él nada podría hacer contra eso ya que los planes de Visnú jamás son frustrados. En la casa donde quedó Krisna, ya había un bebé, que sería su hermano mayor, Balarama. En historias de la adultez de Krisna aparece también una hermana menor, Subhadrá, pero no es nombrada en las historias de la juventud de Krisna. Krisna el príncipe[editar] Krisna se convirtió en el rey de los iadavas (descendientes del rey Iadu) en Mathurá. En este período hizo amistad con su primo Áryuna y los demás príncipes Pāndavas del reino de Kuru, al otro lado del río Iamuna. Se casó con Rukmini, hija del rey Bhishmaka de Vidarbha. Varias décadas más tarde, se llevó a sus súbditos a Dwaraka (en la actualGuyarat). Krisna, junto con Áryuna, fue responsable de incendiar el bosque de Khandavá para alimentar a Agní, el dios del fuego. La batalla de Kurukshetra[editar] En el Majabhárata, Krisna es primo de los líderes de ambos grupos contendientes: los pandavas y los kurus. Tuvo un papel importante en la lucha por el trono de la ciudad deJastinápur (fundada por el rey Jastin, de la dinastía lunar) cuando se volvió amigo y aliado de los Pándavas (los cinco hijos de Pandu). Su hermano Balaram, favorecía en cambio a los malvados kurus. Cuando el kuru Dushasana trató de desnudar ante la corte a Draupadī (la esposa de los cinco Pándavas), Krisna la protegió proveyéndola de infinita tela para el vestido sari que la envolvía. Finalmente Krisna se puso en el bando de los Pándavas (donde estaba su mejor amigo, Áryuna). A pesar de ser Dios, accedió a ser el auriga (cochero) de la cuadriga de Áryuna en la gran batalla. Por eso se le conoce como Partha Sárathi (‘auriga del hijo de Prithu’). Al principio de la batalla, su primo Áryuna no quería pelear contra sus familiares, entonces Krisna le habló el Bhagavad-guita (una sección del Majabhárata). (la guerra duró 18 días). Bhagavad-guitá Hipótesis[editar] Aunque se desconoce la fecha exacta de la composición del Bhágavad-guitá, existen varias hipótesis: Bal Gangadhar Tilak supone que se compuso en torno al año 3100 a. C.[cita requerida] En el propio texto del Bhágavad-guitá, Krisná afirma que el conocimiento del yoga contenido en el Guitá se instruyó a la humanidad en el comienzo mismo de su existencia.16 Como el hinduismo ha tenido históricamente una tradición oral que ha transmitido el conocimiento de generación en generación durante miles de años, no es descabellado que las tradiciones religiosas hinduistas consideren que las enseñanzas del Bhágavad-guitá sean de una fecha anterior a la que apuntan los estudiosos del tema.17 Surendranath Dasgupta supone que el Guitá habría sido un texto prebudista (o sea, de antes del siglo IV a. C.) y que fue escrito antes del Majabhárata (o sea, antes del siglo III a. C.),18 por lo que se habría compuesto en torno al siglo VI a. C.19 Otros investigadores sitúan la composición del Bhagavad-guitá entre el siglo V y el II a. C.13 20 21 Según el escritor indio Prabhakar Kamath, a mediados del siglo III a. C. los seguidores del brahmanismo ―tomando como base al rey Ashoka― crearon el guion original delBhágavadguitá, llamado Áryuna vishada (‘la debilidad de Áryuna’) y lo insertaron en el expansivo Majabhárata. Así trataron de revertir la tendencia de los chatrías a abandonar la antigua religión y convertirse a las nuevas religiones no violentas como el yainismo y el budismo.22 Según Sarvepalli Radhakrishnan, el Bhágavad-guitá sería anterior a la mayor parte de las primeras Upanishad y anterior también al periodo de desarrollo de los sistemas filosóficos y su formulación en los sutras, por tanto el origen del Guitá se situaría entonces en la era precristiana (o sea, antes del siglo I d. C.).13 Basándose en las diferencias entre los estilos poéticos, algunos especialistas del tema han señalado que el Bhágavad-guitá se añadió al Majabhárata en una fecha posterior (o sea, después del siglo III a. C.).23 24 Mircea Eliade y Ioan P. Couliano proponen fechas más recientes, en torno al siglo II d. C.25 Análisis de su contenido[editar] El Bhágavad-guitá en un manuscrito del siglo XIX. El Bhágavad-guitá se desarrolla en el capítulo «Bhismá-parva» del Majabhárata y consta de 18 capítulos, del 25.º al 42.º, con un total de 700 versos.26 27 Los propios versos utilizan la variedad y el estilo de la métrica sánscrita (chhandas) con símiles y metáforas, siendo escritas de una forma poética que tradicionalmente es cantada; de ahí el título «El canto del Divino». Preludio del «Bhágavad-guitá»[editar] Representación de Áryuna y su mujer Subhadrá en un cuadro de Raja Ravi Varma. El tema principal del Majabhárata son las hazañas de dos familias de primos reales, conocidos como los Pándavas y los Kauravas, que eran los hijos de dos hermanos, Pandu y Dritarastra, respectivamente. Dritarastra era ciego de nacimiento, por lo que Pandu heredó el ancestral reino, que comprendía la parte norte de la India moderna, en torno al actual Delhi. Los hermanos Pándava eran: Yudistira el mayor, Bhimá, Áryuna, Nakula y Sajá Deva. Los hermanos Kauravas eran un total de cien, siendo Duriodhana el mayor. Cuando Pandu murió a una edad joven, sus hijos, todavía pequeños, pasaron a estar bajo el cuidado de su tío Dritarastra, quien usurpó el trono.28 29 Los pándavas y los kauravas fueron llevados juntos al mismo hogar, teniendo los mismos profesores, de los cuales, los más notables fueron Bhismá y Drona.29 Bhismá, el abuelo sabio, actuaba como su jefe guardián, y Drona como su instructor militar. Los pándavas fueron dotados de justicia, autocontrol, nobleza y otros muchos rasgos caballerescos. Por otro lado, los cien hijos de Dritarastra, especialmente Duriodhana, adquirieron cualidades negativas, como la crueldad, la injusticia, la falta de escrúpulos, la codicia y la lujuria. Duriodhana, celoso de sus cinco primos, buscó maneras para acabar con ellos.30 Cuando llegó el momento de coronar a Iudistira, el mayor de los Pándavas, como príncipe, Duriodhana, mediante un tortuoso juego de dados, desterró a los Pándavas al bosque.29 A su regreso del destierro, los Pándavas demandaron su legítimo trono. Duriodhana, que había consolidado su poder mediante varias alianzas, se negó a restaurar sus derechos jurídicos y morales. Los intentos de los mayores y de Krisná, que era amigo de los Pándavas y también de los Kauravas, para resolver el asunto fallaron. Nada satisfaría la codicia desmedida de Duriodhana.31 32 La guerra se hizo inevitable. Duriodhana y Áryuna, cada uno por su parte, pidieron a Krisná que les ayudara en la guerra, ya que poseía el ejército más fuerte y era venerado como el más sabio y maestro yogi más grande. Krisná ofreció otorgar su gran ejército a uno de ellos y convertirse en un auriga y consejero del otro, pero no tocaría ningún arma ni participaría en batalla alguna.31 Duriodhana eligió el vasto ejército de Krisná, mientras que Áryuna prefirió escoger a Krisná como su auriga.33 El reino entero respondió a la convocatoria de los Pándavas y los Kauravas. Los reyes, príncipes y caballeros de la India con sus ejércitos, se reunieron en la llanura sagrada de Kurukshetra.31 El rey ciego Dritarastra deseó seguir el desarrollo de la batalla. El sabioVyasa le ofreció dotarle de una vista sobrenatural, pero el rey se negó ante tal ofrecimiento, ya que consideraba que ver de cerca la destrucción de sus seres queridos sería demasiado para poder soportarlo. Vyasa reaccionó dotando de una visión sobrenatural aSanyaia, que iba a actuar como reportero de Dritarastra. El Guitá se inicia con la pregunta del rey ciego a Sanyaia respecto a lo que sucedió en el campo de batalla cuando los dos ejércitos se enfrentaron entre sí.34