JORNADAS SAM/ CONAMET/ SIMPOSIO MATERIA 2003 07-09 PREVISIÓN DE LA RESISTENCIA RESIDUAL DE PROBETAS M(T) DE LAMINADOS FIBRA-METAL A PARTIR DE LA TENACIDAD JC DE PROBETAS SE(B) Y C(T) E. M. Castrodeza a, F. L. Bastiana, y J. E. Perez Ipiñab a Laboratório de Compósitos, COPPE/UFRJ, CP 68505, 21941-972, Rio de Janeiro, Brasil. [email protected] b GMF/LPM, Universidad Nacional del Comahue, Buenos Aires 1400, (8300) Neuquén Argentina. [email protected] En el presente trabajo son comparados resultados teóricos y experimentales de la resistencia residual de probetas M(T) (chapa ancha con entalla centralizada) de laminados fibra-metal unidireccionales Arall y Glare. Los valores teóricos fueron calculados a partir de valores de JC obtenidos de probetas SE(B) y C(T) utilizando una metodología experimental desarrollada específicamente para estos materiales. La comparación de los resultados teóricos y experimentales indica muy buena correspondencia. También son discutidos aspectos referidos al efecto del crecimiento estable de fis ura en la resistencia residual y las ventajas de predecir adecuadamente la resistencia residual de chapas anchas mediante resultados de ensayos de probetas de dimensiones reducidas. Palabras claves: Laminados Fibra-Metal, FMLs, Resistencia Residual, Tenacidad a la Fractura. 1. INTRODUCCIÓN metal con lay-up 3/2, como los utilizados durante la etapa experimental de este trabajo. Los laminados Arall® y Glare ® son materiales compuestos estructurales pertenecientes a la familia de laminados fibra-metal (FMLs). Fueron creados y desarrollados para aplicaciones aeronáuticas en la Technical University of Delft, Holanda [1, 2], con el fin de obtener chapas finas de alta resistencia específica con alta tolerancia al daño. La característica principal de estos materiales es su muy baja velocidad de propagación de fisuras por fatiga (comparada con aleaciones de Al aeronáuticas tradicionales). Este comportamiento singular es debido al mecanismo de fiber-bridging que restringe la apertura de la fisura en cada ciclo de fatiga, disminuyendo su velocidad de crecimiento [3, 4]. Aunque los FMLs fueron desarrollados básicamente en función del mecanismo de bridging, presentan también varias propiedades mejoradas con respecto a las aleaciones monolíticas, por ejemplo mayor resistencia a la corrosión, a rayos, al impacto y a la penetración de llama [5]. Los laminados fibra-metal son reforzados por fibras unidireccionales de vidrio o aramida, orientadas siguiendo las características de carga de la estructura. El laminado Glare está siendo probado en estructuras primarias, principalmente fuselajes [3] y es fuerte candidato para grandes regiones del fuselaje superior del nuevo Airbus A380 [2, 3]. Los FMLs son producidos con diferentes lay-ups del tipo m/n, con m láminas de aluminio pegadas por n láminas prepreg de epoxi con fibras (m = n + 1). Pueden se fabricados como chapas de tamaño similar a las de Al comercial, o mucho mayores, incluyendo formas de baja complejidad y paneles de doble curvatura [3, 5]. La Figura 1 ilustra un laminado fibra- 635 Figura 1. Diagrama esquemático de un laminado fibrametal en lay-up 3/2. La aplicación de FMLs en estructuras aeronáuticas demanda un conocimiento profundo de una amplia gama de propiedades mecánicas y otras magnitudes tecnológicas, incluyendo su resistencia residual [6]. En este trabajo, se entiende como resistencia residual a la resistencia estática remanente del material en presencia de un defecto pasante con fibras cortadas hasta la punta de la entalla (ausencia de crackbridging). El uso de conceptos basados en mecánica de fractura, junto a valores precisos de tenacidad a la fractura, resultan necesarios en las evaluaciones de resistencia residual. Recientemente, una metodología de ensayo basada en mecánica de fractura elastoplástica (I ntegral J y CTOD de Schwalbe, ä 5 ) que emplea pequeñas probetas C(T) y SE(B) fue propuesta para evaluar la tenacidad a la inestabilidad de FMLs [7, 8]. Según esta metodología, la tenacidad a la fractura (JC, ä 5C) es calculada en el punto crítico correspondiente a la ocurrencia de una inestabilidad total o parcial (similar a pop-ins en uniones soldadas). o al comienzo del plateau de máxima carga. JORNADAS SAM/ CONAMET/ SIMPOSIO MATERIA 2003 El objetivo del presente trabajo fue comparar valores teóricos y experimentales de resistencia residual de probetas tipo placa ancha (M(T)) de Arall 3 3/2 y Glare 1 3/2. Las previsiones teóricas fueron realizadas basadas en la tenacidad a la fractura (JC) de pequeñas probetas SE(B) y C(T) medida siguiendo la metodología propuesta. 2. MATERIALES Y MÉTODO Fueron ensayados los laminados Arall 3 3/2 y Glare 1 3/2. Los laminados Glare 1 son reforzados por fibras de vidrio tipo S2, mientras que los laminados Arall 3 son reforzados por fibras de aramida. Ambos laminados son constituidos por capas de la aleación 7475-T76 y sometidos a post-deformación después de la cura para revertir tensiones residuales perjudiciales que se generan durante la fabricación [1]. Algunas de las propiedades mecánicas mas importantes son mostradas en la Tabla 1 [9] (la dirección 1 coincide con el sentido de las fibras). 07-09 ocurrencia de puntos críticos. Si la caída de carga durante una inestabilidad es mayor que 2 %, el punto es considerado crítico y la tenacidad debe obtenerse en ese punto. Cuando no ocurre inestabilidad o ella no es significativa, la tenacidad a la fractura es medida al comienzo del plateau de carga máxima. 2.1 Medición de resistencia residual con probetas M(T) La resistencia residual de probetas M(T) de W entre 150,0 y 200,0 mm y relaciones 2a/W = 1/4 y 1/3 de Glare 1 3/2 y Arall 3 3/2 fue medida experimentalmente. Los ensayos fueron realizados en una máquina de ensayos hidráulica de 400,0 kN a temperatura ambiente y bajo una velocidad de desplazamiento constante (0,5 mm/min). Fue necesario utilizar placas anti-pandeo para prevenir la flexión lateral de las probetas. Los ensayos fueron instrumentados con un LVDT para la medición del desplazamiento de la carga. Una vista de una probeta M(T) lista para ser ensayada es mostrada en la Figura 2. Tabla 1. Propiedades mecánicas [9]. Propiedad Glare 1 3/2 Arall 3 3/2 545,0 565,0 σYS [MPa] 1282,0 765,0 σU [MPa] E1 [GPa] 64,0 68,2 E2 [GPa] 49,0 48,9 Densidad [kg/m3 ] 2520 2300 Volumen metálico [%] 67,9 67,9 Espesor [mm] 1,42 1,34 Post-deformación [%] 0,5 0,4 La evaluación de tenacidad a la fractura fue realizada a temperatura ambiente utilizando probetas SE(B) de W = 25,0 mm y C(T) de W = 50,0 mm, con entallas orientadas transversalmente a las fibras, de acuerdo con la metodología propuesta para estos materiales [7, 8], cuyos aspectos principales son: • Uso de probetas C(T) y SE(B) normalizadas [10]. Deben emplearse probetas SE(B) cuando haya ocurrido crecimiento inestable de fisura fuera del plano de la fisura en probetas C(T). • Las entallas deben ser agudas, con las fibras cortadas hasta la punta del mismo. No se admite la prefisuración por fatiga para evitar el mecanismo de bridging. • Deben ser usadas placas anti-pandeo. • La medición del desplazamiento de la línea de carga en probetas C(T) debe ser realizada usando un clip gauge en la boca de la entalla. En probetas SE(B), en cambio, se mide el desplazamiento del puente de la máquina de ensayo y la energía debida a indentaciones debe ser descontada. • La anisotropía del material es tenida en consideración para el cálculo de la componente elástica de J. • Las inestabilidades en los registros carga vs. desplazamiento son evaluados para establecer la 636 Fig. 2. Probeta M(T) preparada para ser ensayada. 2.2 Cálculo de la resistencia residual teórica Los valores de KC fueron estimados a partir de valores experimentales de JC usando la siguiente expresión [10]: K JC = J C E ' (1) donde 1 a a = 11 22 ' E 2 a22 2a12 + a 66 + 2a11 a11 (2) Los a ij son las componentes de la matriz de compliance. En la ecuación (2) E’ es considerado JORNADAS SAM/ CONAMET/ SIMPOSIO MATERIA 2003 como el módulo de Young “aparente” del material ortotrópico en la dirección considerada. La ecuación (2) es aplicable cuando el plano de la fisura coincide con una dirección principal [11, 12], tal como ocurre en este caso. La tensión residual teórica de probetas M(T) fue calculada usando la expresión de KI indicada por la norma ASTM E561 [13], incluyendo la corrección por crecimiento de fisura debida a deformación plástica. σ res = K JC πaeff sec (4) πa eff W siendo a eff calculado como a eff 1 = a0 + 2π K JC σY 2 (5) Los valores de resistencia residual calculados según la ecuación (4) fueron entonces comparados con los valores experimentales. 3. RESULTADOS En la Tabla 2 se muestran los valores de tenacidad a la fractura obtenidos a partir de en probetas SE(B) de 25,0 mm y C(T) de 50,0 mm. Tabla 2. Módulo de elasticidad aparente y tenacidad a la fractura (JC y KJC). E’ JC KJC FML [GPa] [kJ/m2 ] [MPa.m1/2 ] Glare 1 3/2 51.8 259,11 115.84 Arall 3 3/2 56.6 84.92 69.36 En la Tabla 3 son presentados los resultados de resistencia residual teórica y experimental de probetas M(T), así como la relación de los resultados experimentales a los teóricos para cada caso. Tabla 3. Resistencia residual teórica y experimental de probetas M(T). W 2a σres teór. σres exp. FML Relación [mm] [mm] [MPa] [MPa] 150,00 50,00 360,39 360,16 1,00 Glare 1 150,00 37,50 425,23 425,56 1,00 3/2 200,00 66,67 317,16 344,56 1,09 200,00 50,00 375,09 403,11 1,07 Arall 3 200,00 50,00 228,71 239,39 1,05 3/2 200,00 66,67 192,90 203,15 1,05 Los valores de resistencia residual teórica fueron calculados usando la corrección por zona plástica según ASTM E561 [13], utilizando la tensión de fluencia efectiva en lugar del límite convencional 0,2 %. En caso de usarse la tensión convencional de fluencia, el tamaño de la zona plástica resulta sobreestimado, especialmente para laminados con 637 07-09 gran diferencia entre la tensión de fluencia y la de rotura (ver Tabla 1 para el caso de Glare 1). 4. DISCUSIÓN El uso de probetas pequeñas, SE(B) o C(T), presenta algunas ventajas frente a las M(T), entre las mas importantes están el bajo costo de material, menor costo de mecanizado y para la realización de ensayos, facilidades de laboratorio menores y la posibilidad de realizar ensayos dentro de cámaras ambientales, hornos y otros equipamientos experimentales no convencionales. Para ilustrar la necesidad de facilidades mas leves se puede dar el siguiente dato: probetas M(T) de W = 200,0 mm y relación 2a/W = 1/4 soportan aproximadamente 115,0 kN antes de fracturar, mientras que una SE(B) de W = 25,0 mm fractura con cargas menores a 1,5 kN. El uso de probetas pequeñas puede ser muy útil en las etapas de desarrollo o selección de materiales, aunque probetas M(T) deben ser ensayadas para la homologación del material para ser empleado en aeronaves. Todas estas ventajas son amplificadas en caso de que los resultados de probetas pequeñas puedan ser empleados para predecir los de ensayos M(T), por esto el proyecto experimental fue orientado a estudiar esta posibilidad. Como un paso previo, se desarrolló una técnica para medir tenacidad a la fractura por medio de los parámetros JC y δ5C [7, 8]. Ella ha sido brevemente descripta en la sección Materiales y Método y resultó adecuada para las determinaciones requeridas. Como puede ser visto en la Tabla 3, las predicciones de resistencia residual están en muy buen acuerdo con los resultados experimentales. Examinando con más detalle las relaciones entre valores de resistencia residual medidos y calculados de la Tabla 3, puede observarse que para ambos laminados ensayados hay una tendencia clara a incrementarse la relación a medida que el ancho W se incrementa. Esta tendencia fue atribuida a la capacidad de probetas más anchas de resistir más crecimiento estable de fisura antes de fracturarse en forma frágil, dando entonces un mayor valor de resistencia residual [14, 15]. Esta tendencia también fue verificada comparando con valores de resistencia residual obtenidos de la literatura [16]. Por este motivo se estima que las predicciones de resistencia residual de paneles más anchos, basadas en la metodología propuesta, serían conservativas. Es importante notar que la tenacidad a la fractura es en gran medida una propiedad del material, mientras que la resistencia residual es una combinación de geometría (tamaño de la probeta, relaciones entre longitud de fisura o espesor y ancho de la probeta o de la estructura, etc.), carga aplicada y tenacidad a la fractura. Por otro lado, debido a las pequeñas tolerancias a las inestabilidades de los registros carga desplazamiento que admite la metodología propuesta para medir tenacidad, los valores de tenacidad críticos están relacionados con el comienzo del crecimiento de fisura. Por esta razón, la resistencia residual predicha JORNADAS SAM/ CONAMET/ SIMPOSIO MATERIA 2003 de probetas más anchas, que presentan mayor crecimiento estable de fisura al momento de la inestabilidad, es esperable que resulte conservativa. Por el contrario, si se realizara un análisis de fisuras cortas en un componente pequeño a partir de resultados experimentales de resistencia residual de placas anchas, la predicción podría resultar ser no conservativa. El uso de probetas SE(B) y C(T) para tenacidad a la fractura de FMLs unidireccionales se muestra muy atractivo para las etapas de desarrollo y/o de selección de materiales por las razones técnicas discutidas más arriba, pero también por razones económicas: El costo en material para una probeta C(T) de 50,0 mm de Glare 3/2 es aproximadamente 20 veces menor que el de un panel M(T) de W = 200,0 mm, que cuesta aproximadamente USD 200. Solamente el material para una probeta M(T) de W = 800,0 mm puede llegar a costar USD 2.200. 5. CONCLUSIONES - La tenacidad a la fractura obtenida a partir de probetas convencionales SE(B) y C(T) fue útil para predecir la resistencia residual de paneles anchos M(T). - Los valores calculados fueron muy cercanos a los valores experimentales obtenidos ensayando paneles M(T). - Hubo una pequeña tendencia a estimar por abajo la resistencia residual de los paneles de mayor tamaño. Este comportamiento fue asociado a la mayor capacidad de probetas M(T) mayores de presentar crecimiento estable de fisura al momento de la inestabilidad. - Teniendo en cuento el costo del material, la evaluación de tenacidad a la fractura de FMLs unidireccionales parece ser una alternativa muy interesante, al menos durante las etapas de desarrollo y selección de material. Agradecimientos A CNPq, CAPES, SeTCIP, FAPERJ y CONICET por el apoyo financiero. A Eduardo Benotti (U. N. del Comahue) por el mecanizado de probetas y dispositivos y por la asistencia durante los ensayos. 4. REFERENCIAS 1. 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