JUEVES 18 DE JUNIO DE 2015 N° 96 ESPACIO DE PUBLICIDAD Personaje Académico Juan Gabriel Arias deja su huella en Mozambique como representante de la iglesia Católica y recurre al fútbol –y a Racing- como herramienta de unión y formación. S A L I M O S A L A C A N C H A C A D A D O S S E M A N A S | P R E PA R AT E PA R A E L J U E V E S 2 D E J U L I O Q U E L A TA PA P O D E S S E R V O S Sueño del Padre En la previa de su día, Guillermo Landolfo tiene su mejor regalo: compartir cancha con su hijo Franco. Los dos players de “Otra Chanz” tiran paredes en el torneo del Esquiú y viven el sueño de muchos futbolistas. JUEVES 18 DE JUNIO DE 2015 Olé PAG. 2 Olé Amateur Editorial VIEJOSPENDES vs. PENDESVIEJOS ALBERTO PAZOS [email protected] H oy en día, padres e hijos comparten su deporte favorito y fundan una amistad más allá de los cánones familiares. A través del fútbol, comienzan a tener una relación diferente: de compañeros, de amigos y de socios. No se trata de una etapa competitiva generacional sino de desarrollo deportivo, una vida de padre e hijo disfrutando de un momento que está por encima de la relación formal. Hasta la moda feme- nina como masculina es compartida. Rapsodia impulsó la moda rockera para jóvenes y también terminó siendo para las madres; Adidas lanzó productos similares enfocados en jóvenes y adultos. Todo se está unificado en una edad promedio, los gustos se han mezclado ¿Cuál es la edad de los jóvenes? ¿Cuál es la época de la madurez? La edad es la que se demuestra con los compromisos, con la posibilidad de compartir una carre- ra profesional como un deporte en conjunto. La vida saludable está en pleno período de crecimiento: los padres se movilizan al ritmo de sus hijos sin ánimos de competir, pero si quieren estar a la altura de su rendimiento, con esfuerzo y dedicación. Lo lindo de esta situación es poder ver a un padre e hijo jugando juntos, con la misma camiseta, con el mismo fin: compartir la satisfacción de ganar y el consuelo mutuo de perder. UNA COSECHA TARDIA VUELTA A LA ESENCIA La iniciativa de “Creciendo con el fútbol” apunta a que los chicos puedan divertirse de una manera sana y gratuita. El proyecto de Diego Capelletti, ex jugador y entrenador, tiene fecha, lugar y horario: entrenamientos todos los domingos, en la plaza de Jean Jaures y Av. Córdoba (atrás de la calesita), a las 16.30 hs. El único requisito es ir con ropa cómoda para jugar y divertirse. Además, si tenés una pelota que no uses, a través de ellos podes donarla a escuelas de fútbol comunitarias. Para más información, pueden visitar su web -www.creciendoconfutbol. com.ar- o bien comunicarse por mail - creciendoconelfutbol@hotmail. com - o por teléfono - 115-837-7120-. ¡Que viva el fútbol! No son de la mejor cepa, pero el equipo “Cosecha” no baja sus brazos y la sigue peleando en el torneo La Cantera de Tortuguitas (BsAs). Son jóvenes mayores de 35 que todos los sábados luchan frente a los aviones de 25 años. El team formó éste sábado con Nicolás Pechi, Leandro Delia, Javier Celada, Leandro Mataloni, Maxi Villa, Javier Giammanco, Gustavo Penzotti y Leonardo Iallen, acompañados de Violeta y Beltrán. Ya son campeones Estos padres ya tienen su regalo, son campeones en La Asociación Intercountry de Fútbol de Zona Norte. Banco Provincia “F” derrotó por 1 a 0 a Golfer’s “F” y se consagró campeón del torneo Clasificación Zona “B” de la categoría Super Maxi. Banco Provincia “Blanco” derrotó por 4 a 2 a Campo Chico “F” y se consagró campeón del torneo Clasificación Zona “A” de la categoría Super Maxi. En la 9ª. fecha de la categoría Maxi 2015, San Diego venció 4 a 1 a Bco Provincia y se quedó con la 2ª posición detrás de Haras del Pilar. Daniel Valfredi, uno de los cracks y goleador de San Diego (2 goles). Gabrile Moni y José Armando Rodriguez sellaron el 4 a 1. JUEVES 18 DE JUNIO DE 2015 Olé PAG. 5 Olé Amateur HISTORIAS AMATEURS Un futbolista todoterreno Fabián Pianelli hace 15 años combina su habilidad por el arco, su funcionalidad en la zaga y particularmente su pasión por ser la cabeza de Pumas FC. F abián Pianelli, más conocido como “Fap”, comenzó a codearse con el fútbol amateur en 2000, a los 22 años. Quince después, con 38 en el lomo, casado y tres hijas, sigue dedicándole su vida porque es su pasión. “Papá está todo el día viendo fútbol”, asegura su familia sobre este fanático de Racing, que al toque devuelve con un elegante “mi esposa me conoció así y es la que más me banca”. El debut fue en Organizaciones Cantilo con un fútbol siete, donde permaneció varios años con Safer FC y luego Siete Caldas, antes de recalar en un paso breve por SportPro y un par de años en NorthChamp. De esa época, lo que más recuerda es su presencia en estas páginas. “En 2008 salí en el Olé Amateur como el mejor arquero de la sede Nuñez. Ese ejem- plar lo perdí en una mudanza”, se lamenta. La frustración fue tal que dejó el arco y se convirtió en un rústico marcador central. Los años le dieron experiencia pero le quitaron físico, aunque su labor en el equipo siempre fue una: la de Organizador. “Lo considero un trabajo más, por el cual no me pagan, pero que se compensa con la cantidad de amigos que hice gracias al fútbol”, asegura. En 2010 se dio el retorno al fútbol 11 junto a Pumas FC. “Logré congeniar un plantel con ganas de jugar al fútbol y que se tradujo en un gran equipo que salió campeón invicto en 2014, en Cantilo”, saca pecho Fabián, y reluce su marca de 20 partidos: 15 triunfos y cinco empates. El conjunto buscó nuevos aires y ahora se encuentra en la Zona C de Rincón del Plata, en Nor- thchamp. “El torneo donde jugamos pasa a ser lo más importante: me gusta conocer a todos mis rivales, los analizo y saco estadísticas. Tengo archivados los partidos jugados con los resultados, comentarios, goleadores y figuras”, explica este fanático, a quien los compañeros le dicen que debería haber sido dirigente. “Fap” pasó por varias operaciones cuando era chico. También estuvo afuera durante ocho meses por una rotura de ligamentos. Pero siempre estuvo, con muletas y en una banquetita. “Jamás falte a un partido”, se enorgullece, sin otra distracción que dedicarle su vida deportiva a Pumas FC. “Compartir cancha con amigos de la vida vale más que los campeonatos que hemos ganado”, resume. No podía ser de otra manera. El capitán de Pumas FC diagrama el equipo de cara a los segundos 45 minutos. “El escenario era magnifico. Los equipos se enfrentaron a más de 2500 mts de altura y más de 25.000 espectadores. JUEVES 18 DE JUNIO DE 2015 Olé PAG. 6 Olé Amateur EL REGALO EN EL DIA DEL PADRE La redonda se lleva en la sangre Con el paso del tiempo, la compartida de cancha entre padres e hijos se vuelve una realidad. ¿Experiencia para los jóvenes o más aire para los jovatos? E l 12 de mayo de 2013, los uruguayos Walter y Nicolás Pandiani compartieron cancha en la tercera división del fútbol español. Padre e hijo vistieron la camiseta del Atlético Baleares, club de Palma de Mallorca, y disputaron 64 minutos hasta que el defensor fue reemplazado. Un año más tarde, con 37 y 21 años respectivamente, volverían a hacerlo como titulares pero en su país, defendiendo los colores de Miramar Misiones. El 24 de agosto de 2008, también en Uruguay, Carlos María Morales y su hijo Juan Manuel habían coincidido algunos minutos en la derrota de Wanderers ante Peñarol. A comienzos de 2014, el crack brasileño Rivaldo también se dio el lujo de jugar con su hijo en el campeonato Paulistao. Con 18 años, Rivaldinho jugó todo el partido para Mogi Mirim mientras que su padre, con 41 pirulos, ingresó a los 56 minutos. Otro caso emblemático es el del islandés Eidur Gudjonhsen, ex Chelsea y Barcelona: en abril de 1996, con 17 años, se dio el gusto de reemplazar a su padre Arnor, de 35, en un partido de su selección frente a Estonia. Y los ejemplos podrían seguir con los peruanos Bazalar, Juan Carlos (40) y Carlos Alonso (17), quienes jugaron juntos para el Cienciano frente a Juan Aurich, el 25 de mayo de 2008. Y sin ir más lejos, en marzo de 2009, el “Beto” Acosta (42) compartió cancha con su hijo Mickael (18), en la derrota de Fénix contra Berazategui por la Primera C. Y siempre hay lugar para los amateurs. El hombre de tapa, Guillermo Landolfo, asegura que heredó la pasión del fútbol de su viejo y de su hermano, con quien jugó muchos años. Y hoy se da el lujo de compartirla con su hijo Franco. “Se moría por los caballos y lo acompañaba en su sentimiento. Su gran amor por el fútbol arrancó a sus seis años, en el Mundial 2006”, recuerda. “Una de las cosas más lindas es que desde chiquito iba a verme ju- gar con mis amigos de toda la vida y siempre pensaba en estirar mi retiro para que algún día me invite a jugar en su equipo”, cuenta “Cuyen”, como lo conocen. Pero el sueño se adelantó y el niño debutó con los grandes. “Faltando 10 minutos un amigo mío le gritó ‘Vení Fran, entrá por mi´. Esa gran emoción se coronó con una montonera en el córner después de que metiera su primer gol”, se entusiasma, pero va más allá. “Lo que más me importa es que no pierda de vista el esfuerzo, la pasión, el compañerismo y el respeto por las reglas y el rival”, destaca. Ambos son fanáticos de Boca y van a la cancha cuando pueden, y también aprovechan para mirar cuanto partido aparezca en la tele. “Desde que supe que mi primer hijo iba a ser varón, en un segundo proyecté su vida y todo lo que íbamos a poder compartir juntos. Han pasado sólo 14 años y gracias a Dios hemos podido disfrutar, y seguiremos haciéndolo, de un montón de esos momentos que imaginé”, concluye. “Me invitaron a que me sume al equipo”, cuenta Hernán Rojas, siempre enfocado en el deporte. “Mi viejo tiene mejor estado físico que yo. Lo que empezó como un refuerzo se convirtió en el motor del equipo”, asegura Matías. “Jugué más partidos con papá que con muchos de mis amigos”, cuenta el hijo mayor, Lucas. Para Hernán, que viene de una familia con padres grandes y de bastante diferencia de edad entre los hermanos, “compartir cancha es haber tocado el cielo con las manos”. Y vaya si lo hacen en Northchamp. En cuanto a los “niños” con la redonda, “son toda pasión: liderazgo uno, habilidad el otro. Trabajo en equipo, motivación y mucho respeto, al contrario y a todos en general”. “Ver a un tipo que pisa los 50, corriendo como si tuviera 17, te motiva. La edad lo hace más sabio, una autoridad en la cancha. Ordena pero no habla de más, tranquiliza pero también es el primero en llegar si alguien nos falta el respeto”, coinciden los Rojas. “Hoy estamos tan apurados y sin tiempo para nada, que el fútbol es una excusa más. Cuando disfrutas algo, siempre lo querés compartir. Aguante tener un papa con tantos huevos”, sentencian. Alejandro Ursa encontró en el fútbol su continuidad en el deporte tras concluir con el rugby. “Mis hijos, Santi y Marcos, son 100% futboleros”, compara, sobre quienes juegan el campeonato de La Rana y en donde él es el director técnico. “Siempre lo vivieron con mucha intensidad, pateando desde chiquitos. De hecho, hace siete años formaron una escuelita en el barrio, para chicos de entre seis y ocho años”, recuerda Alejandro. El momento más emotivo se dio hace un año cuando los tres empezaron a compartir cancha en el torneo de fútbol 5 del barrio. “Más de la satisfacción de jugar competitivamente, es algo que siempre hubiera querido hacer con mi viejo. Él murió muy joven, a mis 20 años”, admite en un marco de nostalgia. “Alguna vez los escuché decir que para ellos era una gran alegría jugar conmigo. Me llena el corazón de emoción”, agrega. La descripción del padre, babero de por medio, indica que los Ursa menores se complementan muy bien: con la garra como marca registrada, habilidad por un lado, y despliegue y marca por el otro. Los tres fanáticos de Boca, que incluso se fueron a Montevideo por el día para ver jugar a su equipo, les hacen lugar a las mujeres de la casa. “Mi mujer, Ana, es una socia ideal: siempre los alentó en el deporte, de hecho, la escuelita fue idea suya. Y Rosario, mi hija, con su sonrisa permanente y su energía única, también salió muy deportista”, repasa. “Feliz día del padre para todos. Ojalá la nota llegue al cielo y la pueda leer mi viejo”, anhela. Que así sea. Subí que te llevo. Franco, con 14, marca la diferencia con los grandes: debut y gol. La cancha de El Lucero recibe a los Ursa. Fútbol 5, duro y muy buen nivel: promedio de edad, 35 “Es un honor haber podido compartir tantas veces la cancha”, coinciden los Rojas, de rojo JUEVES 18 DE JUNIO DE 2015 Olé PAG. 7 Olé Amateur EL CONSEJO DE LOS QUE SABEN Movete pibe, movete Para ahuyentar los dolores, evitar las lesiones y rendir más, ¡entrená! Eso sí: que siempre sea con un profe. J ugar al fútbol con amigos es sin dudas el programa que todos estamos esperando, siempre y cuando el cuerpo no pase “factura”. Para que no aparezcan frases del estilo de “me tiró” y “no doy más”, o que te griten de afuera “regalás más pelotas que Olé”, movete en la semana, agarrá ritmo y marcá la diferencia. Algunos puntos a tener en cuenta: 1-La cantidad de entrenamientos es muy importante. No es lo mismo jugar cada siete días sin hacer nada que meterle dos o tres estímulos semanales. Un partido se puede considerar como un entrenamiento, siempre y cuando realices una buena entrada en calor -mo- vilidad articular, trote durante cinco minutos, y estiramiento de cuadriceps, isquiotibiales y aductores- sumada a un prolongado trabajo de elongación de los mismos músculos al terminar. 2-La fuerza siempre es importante: para tu velocidad, tu potencia, tu capacidad de salto y hasta para prevenir lesiones. El trabajo de piernas -sentadillas, estocadas y multisaltos-, de la zona media -abdominales, espinales y oblicuos- y del tren superior -fuerza de brazos y dominadas- harán de tu cuerpo una unidad mucho más funcional. 3-Ser “resistentes” durante todo el partido no dependerá única- mente de tu fuerza de voluntad: un trabajo de base hará tu juego más efectivo. Recordá que trotar durante 60 minutos, dos veces a la semana, no garantizará un buen rendimiento durante el partido. Por el contrario, enfocáte en los piques, en los cambios de ritmo y de dirección, a ¾ de tu máxima velocidad y con pausas cortas –mismo tiempo del esfuerzo-. Son métodos intermitentes de entrenamiento que serán más efectivos. 4-La recuperación es tan importante como la preparación para la competencia. Muchos juegan sábado y/o domingo y el lunes arrancan la semana laboral sin afrontar aquellos do- lores y molestias, que pueden durar desde 48 hasta 72 horas. En los primeros días realizá un trabajo de moderada intensidad que conste de un trote regenerativo para aflojar; y elongá cuadriceps, isquiotibiales, aductores y psoas, principal flexor de la cadera. Por Juan Manuel Denoy, Profesor de Educación Física, Entrenador Personal y Preparador Físico. Contacto: [email protected]. Una secuencia de imágenes que cansan, ¿no? El esfuerzo tendrá su recompensa. JUEVES 18 DE JUNIO DE 2015 Nro. 96 Idea, Producción y Comercialización Malabia 11 Of. 5 (B1609HHA) Boulogne, Bs. As.- Argentina Tel: (54 11) 4765 8883 • 4763 3906 www.facebook.com/conceptofutbol.oleamateur [email protected] Dirección Periodística: Sebastian Pazos Colaboradores: Nicolás Armellin - Maximiliano Villa Fotografía: Santiago Ropero EL CURA DE RACING Un idioma universal Juan Gabriel Arias es ex dirigente y fanático de la Academia. Hoy misiona en Mozambique con la pelota. E ntre varias idas y venidas, el cura Juan Gabriel Arias dejó su parroquia Natividad de María, en Barracas, y se fue a vivir a Mozambique para jugar su “Mundial”. “Es lo más alto a lo que puedo aspirar en mi en mi proyecto de vida. Es un gran privilegio, no tengo ninguna otra meta en el horizonte”, describe. Y como no podía ser de otra manera, hasta allá llevó su pasión por Racing. -¿Cuán importante es el fútbol en tu tarea misionera? El fútbol es muy importante, si picas una pelota ya juntas a un grupo de chicos. Me ayuda a inculcarles valores, a llevar una vida sana, a hacer amigos, y acercarme a los más reos de cada zona. Y por supuesto les quemo la cabeza con Racing: les muestro fotos, revistas y jugamos con la camiseta. El equipo que formé se llama Racing de Mangundze, que es el nombre de la aldea en la que estoy. Una vez, un cura argentino, hincha de River, vio a tres chicos con camisetas y pantalones de Racing y les preguntó qué hacían con esa ropa, si el equipo más grande de Argentina era River. Ellos enseguida le contestaron que era Racing. El tema fue la forma en que se lo dijeron. Cuando nos vimos, me dijo que les había lavado la cabeza, que parecía que habían nacido en Avellaneda. Uno misiona con lo que es y Racing es importante en mi vida. Transmito lo que soy. -¿Cómo es el Padre Juan Gabriel como hincha? Crecí mucho como hincha. El haber sido dirigente me dio una visión distinta, más real, pero la esencia es la misma. Soy pasional y me preocupo mucho por Racing y su gente. Es mi casa, mi familia, así me siento en la cancha. Racing me dio muchos amigos y también enemigos. Hay muchos que dicen que para ser dirigente, tenés que dejar el hincha de lado. Siempre estuve en desacuerdo con esa frase. Sí es cierto que tenés que ser racional y pensar lo mejor para el club, que no suele ser lo primero que pasa por tu cabeza, o lo que sentís en un momento de bronca. Pero si hubiera dejado el hincha de lado, no le hubiera dedicado todo el trabajo, tiempo y dinero que le di en esos años. Hubiera renunciado mucho antes. -¿Qué balance haces de tu paso como dirigente? Dejé mucho por Racing pero me sentí usado en los dos períodos en los que estuve. Traté de cambiar muchas cosas desde adentro. Quise dejar la postura de criticar desde afuera, y tener una actitud más madura, haciéndome cargo. Pero fue insuficiente, no tuve el poder necesario, fui un “cuatro de copas” en cuanto a la conducción del club. Pensé que iba a ser diferente en el segundo período, pero no. Por eso renuncié. Pero en lo que era mi responsabilidad directa, creo que hice un buen trabajo. -¿Cuál era tu tarea? Creé el Departamento Solidario del club -Racing Solidario-, que no existía, y creció mucho. Generamos una marca y le dimos un perfil solidario al club, que ya es parte de la estructura. Todas las agrupaciones políticas tienen gente que trabaja en ese tema y tienen proyectos para ese sector. -¿Pensás en volver? No me veo como dirigente. Cuatro agrupaciones me han ofrecido la vicepresidencia en las últimas elecciones. Es un honor para mí. Y era gente amiga. Pero quiero quedarme en Mozambique para siempre. Y si por esas vueltas de la vida, llego a volver a Argentina, tampoco me veo. Pero si Racing llegara a necesitarme, y espero que no, estaría dispuesto a jugarme nuevamente. Pero no me comería ningún sapo y me aseguraría de hacer lo que quiero para el club. Iría como primero o segundo de alguien de mi entera confianza y elegiría a cada uno de los miembros de Comisión Directiva y los puestos principales. Conozco a casi todos los empleados actuales y gente de todas las agrupaciones. Haría una buena selección de los que, para mí, serían los mejores, o de los que pienso que podría trabajar bien en conjunto. Con los que compartimos el mismo sentimiento de querer lo mejor para el club, sin ambiciones personales. -Imagino que el club te dio alegrías y tristezas… La mayor alegría son los amigos. Y en lo deportivo, el campeonato de 2001. Rubén Paz fue el jugador que me dio más alegrías. Ser amigo de él, es un regalo que Dios me hizo. Así como la mayor tristeza fue el vaciamiento con quiebra incluida, los malos dirigentes. -¿Qué es lo que más extrañas de Buenos Aires? Lo que más me duele es perderme los viajes con Racing. Este año tuvimos varios internacionales, que suelen ser fantásticos. También extraño los asados de los primeros viernes de mes, en la que era mi Parroquia, e ir a la cancha. Pero todo no se puede. Con Francisco hablamos de fútbol, pero no mucho”, cuenta. Con inferiores en Mozambique: los juveniles del Racing de Mangundze.