LA AIF EN ACCIÓN Administración pública y reforma legislativa H ace una década, la Asociación Internacional de Fomento (AIF), fondo del Banco Mundial para los países más pobres del mundo, proporcionaba apoyo en relación con las cuestiones de administración pública, descentralización e imperio de la ley, centrándolo casi exclusivamente en medidas técnicas del lado de la oferta, tales como las reformas de los salarios y empleo y de la administración pública, la descentralización fiscal y la gestión de los juicios. Actualmente, la AIF ha reconocido cada vez más la importancia de centrar sus esfuerzos en sistemas más amplios de buen gobierno del sector público, desarrollando al mismo tiempo una demanda interna de tales reformas. Esto ha inducido a centrar más la atención en las cuestiones de transparencia y rendición de cuentas, entre las que figuran las leyes sobre la libertad de la información, la legislación sobre declaración de bienes y el fortalecimiento de mecanismos de representación de los ciudadanos, como los defensores del pueblo. Ha incluido también el seguimiento y la publicación de información sobre los efectos de las reformas y sobre lo que los ciudadanos pueden esperar de sus gobiernos. Se ha apoyado esta labor con trabajos de análisis e instrumentos para establecer parámetros de referencia. La estrategia actual de la AIF para apoyar cambios relacionados con la administración pública, la descentralización y el imperio de la ley se halla incorporada en la estrategia general sobre buen gobierno y lucha contra la corrupción expuesta en el documento titulado “Intensificación de la labor del Grupo del Banco Mundial con respecto al buen gobierno y la lucha contra la corrupción” (GAC, por sus siglas en inglés), que fue aprobado recientemente por el Directorio del Banco Mundial en las Reuniones de Primavera de 2007. Datos básicos • El apoyo para reformas legislativas y de la administración pública representó, en promedio, una cuarta parte del financiamiento total de la AIF durante los últimos siete años (ejercicios de 2000–06). • El financiamiento de la AIF en este sector se duplicó entre 2000 y 2006, ascendiendo de US$1.370 millones a US$2.760 millones, y el mayor crecimiento se registró en el financiamiento para la administración pública. • La asistencia de la AIF en esta área ha incluido la prestación de apoyo para la contratación competitiva de funcionarios en Albania; la descentralización a los ámbitos regional, de distrito y de subdistrito en Etiopía; la modernización de los tribunales en Honduras y Georgia; la creación de capacidad de las administraciones públicas en países con situaciones posteriores a conflictos, como Afganistán, Sierra Leona o Timor-Leste; y la integración en el Financiamiento para Políticas de Desarrollo de la utilización de tarjetas de informe de los ciudadanos con el fin de escuchar mejor la voz de los usuarios de los servicios sociales en Georgia, Laos y Perú. • La labor de la AIF en estos sectores ha tenido por objeto contribuir al desarrollo de estados e instituciones capaces y responsables que puedan elaborar y aplicar políticas sólidas, proporcionar servicios públicos, establecer normas que rijan los mercados y combatir la corrupción, ayudando así a reducir la pobreza. CONTRIBUCIONES DE LA AIF Sectores en que se centra principalmente la atención En el ejercicio de 2006, la administración pública, incluyendo la legislación y la justicia, recibió la mayor parte del apoyo de la AIF, el cual ascendió a US$2.760 millones, o el 29% del total. El financiamiento de la AIF en este sector ha aumentado notablemente durante los últimos años, pasando de US$1.370 millones en 2000 a US$2.760 millones en 2006. En el ejercicio de 2006, este financiamiento se concentró en tres esferas: administración del gobierno central (55,9%), descentralización (22,9%) y administración pública general (15,8%). Una función en evolución Hace aproximadamente una década, la AIF centraba su actividad en intervenciones del lado de la oferta, tales como la reforma de los salarios y el empleo, la reforma de la función pública y la gestión de los juicios. Al cabo del tiempo, la AIF ha reconocido cada vez más la necesidad de fortalecer simultáneamente la capacidad de las instituciones, así como de desarrollar una demanda interna de tales reformas, a fin de mejorar el buen gobierno y la prestación de servicios y reducir las oportunidades de corrupción. Por estas razones, se han focalizado más los esfuerzos en las cuestiones de transparencia y rendición de cuentas, apoyándolos en muchos casos con operaciones programáticas de financiamiento e inversión. Esto incluye la integración en los proyectos y programas de la AIF de intervenciones del lado de la demanda, tales como las relacionadas con el apoyo para: leyes sobre libertad de información; legislación sobre declaración de bienes; creación o fortalecimiento de los mecanismos de supervisión externa y para dar voz a los ciudadanos, como los defensores del pueblo o el seguimiento y la publicación de información sobre lo que los ciudadanos pueden esperar de sus gobiernos por medio de Cartas Ciudadanas; y el desarrollo de instrumentos del tipo de encuestas de seguimiento del gasto público, para detectar las desviaciones de fondos en las asignaciones presupuestarias. La eficacia de la supervisión La AIF fue la pionera en la utilización de encuestas de seguimiento del gasto público en Uganda. Gracias a esta innovación, el 80% de los fondos llegó a las escuelas en 2000, en contraposición a sólo el 13% de los fondos destinados a becas entre 1991 y 1996. Anunciando en los periódicos y en la radio las transferencias para la educación, el gobierno informó a las asociaciones de padres sobre la cantidad de dinero que recibirían las escuelas. La campaña del gobierno para un mejor seguimiento y transparencia ayudó a reducir el desvío de dinero y a aumentar la matriculación y los resultados escolares. El porcentaje de alumnos que alcanzaron determinados niveles de competencia en alfabetización en el nivel tres de la enseñanza primaria aumentó del 19% en 1999 al 46% en 2006. Al mismo tiempo, la AIF colabora cada vez más con otros donantes y orienta sus instrumentos de financiamiento hacia una combinación de la inversión y el soporte técnico con el financiamiento para las políticas, apoyando reformas estructurales de políticas de manera adecuada y ayudando a fortalecer la capacidad para que estas reformas logren sus objetivos. Ha contribuido a apoyar este enfoque la mayor concentración de los esfuerzos en la labor analítica y en los instrumentos para establecer parámetros de referencia. Enfoque múltiple de la AIF 1. La AIF ha asumido el liderazgo en el desarrollo y la aplicación de medios eficaces para el seguimiento de los efectos de las reformas. El año pasado, el Banco Mundial emprendió la nueva iniciativa de elaborar “indicadores para la acción” que permitan profundizar y obtener detalles suficientes para proporcionar una guía útil sobre las intervenciones que se necesitan. Esto es importante debido a que los cambios de la administración pública tienden a realizarse de forma más bien teórica cuando no se practica un seguimiento de sus efectos. Con los indicadores para la acción, los funcionarios estatales pueden ver las mejoras de las reformas antes de que se consigan los beneficios últimos, tales como una mejor prestación de servicios. Los indicadores de la Iniciativa sobre gasto público y rendición de cuentas financieras (PEFA, por sus siglas en inglés) son un ejemplo de estos indicadores para la acción. Se están elaborando otros que se aplicarán a la gestión de los recursos humanos, con el fin de realizar un mejor seguimiento de las reformas de la administración pública, así como indicadores de la rendición de cuentas públicas para medir la ejecución de las reformas encaminadas a la transparencia y lucha contra la corrupción. 2. La AIF está apoyando el suministro de bienes públicos, como una mejor gestión de gobierno y la armonización de los donantes. Ha tomado la iniciativa de colocar las reformas del buen gobierno en el centro de las estrategias de reducción de la pobreza, contribuyendo así a mejorar la eficacia de todo el gasto público y de la asistencia de los donantes. Asimismo, la AIF ha ayudado a facilitar la armonización y coordinación de los donantes, lo que puede proporcionar grandes beneficios, en cuanto a la reducción de los costos de transacción y el uso eficiente de los recursos. Se están utilizando ahora acuerdos de financiación en común en Tanzanía, Zambia, Etiopía, Mozambique, Kenya, Uganda, Sierra Leona, Nepal, Bangladesh y Ghana. Una ventaja comparativa fundamental de la AIF es su capacidad de contribuir a facilitar la armonización de los donantes y reducir los costos de transacción en la utilización de recursos externos. Esto incluye la coordinación por parte de la AIF de los grupos de donantes en el país, la realización conjunta de trabajos de asistencia técnica (por ejemplo, la evaluación de la gestión de las finanzas públicas del programa PEFA de donantes múltiples) o la colaboración con donantes bilaterales o multilaterales en estrategias coordinadas (por ejemplo, el código de conducta propuesto por la Red sobre buen gobierno del Comité de Asistencia para el Desarrollo de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (CAD-OCDE), el que pueden aplicar los donantes para armonizar sus actividades en entornos de mucha corrupción, a fin de evitar que se ofrezcan respuestas distintas para cada caso y se den señales diversas). 3. La AIF es líder en el diseño y apoyo de reformas del sector público. Participa normalmente en foros internacionales y proporciona asesoramiento de expertos a las instituciones de investigación y grupos de seguimiento mundiales sobre estas cuestiones. Todo ello es el resultado de la amplia gama de los trabajos analíticos de la AIF. 4. La AIF es capaz de ocuparse tanto del lado de la oferta en reformas relacionadas con la gestión pública, como del lado de la demanda, prestando apoyo para conseguir estados más fuertes, responsables y transparentes. Por ejemplo, la reciente estrategia de asistencia a los países de Bangladesh propuso intervenciones que abarcaban desde la reforma de la justicia hasta la mejora de la libertad de información, y la estrategia de Indonesia apoyaba una alianza de ámbito nacional entre la sociedad civil, los donantes y el gobierno para la reforma del buen gobierno. 5. Por último, la AIF aplica un enfoque multisectorial en las reformas de la administración pública. Durante la última década, ha ampliado su ámbito de acción transcendiendo las meras reformas del núcleo del gobierno, tales como la reforma de la gestión de las finanzas públicas, las compras y la administración civil, para integrar de forma más sistemática el análisis del buen Apoyo de la AIF por regiones En África, “la creación de estados capaces y la mejora del gobierno” es una de las tres prioridades estratégicas y se está terminando de preparar en la región un importante informe de un grupo de estudio sobre el desarrollo de la capacidad. Más del 25% del apoyo de la AIF a África se ha destinado a fomentar el buen gobierno en los sectores público y privado en los países y regiones. La cartera relacionada con el buen gobierno del sector público se ha centrado en: (i) la gestión de las finanzas públicas, facilitada por planes de acción preparados para 23 PPME de África; (ii) la mejora de la gestión del sector público en los gobiernos centrales (Burkina Faso, Tanzanía y Zambia), descentralización y buen gobierno local (Etiopía, Malawi, Rwanda y Sierra Leona) y prestación de servicios (Madagascar, Mozambique y Uganda); (iii) la integración del buen gobierno y la prestación de servicios en los Créditos de apoyo a la lucha contra la pobreza (CALP) y en los programas nacionales de creación de capacidad (Etiopía y Rwanda); y (iv) la creación de capacidad, en colaboración con el Instituto del Banco Mundial y otros asociados, en instituciones de rendición de cuentas nacionales. En Asia oriental y el Pacífico, los desafíos son muy diversos: desde países receptores de la AIF con situaciones posteriores a conflictos, los cuales padecen problemas endémicos de buen gobierno (Timor-Leste y Camboya), hasta el último estado comunista que recibe financiamiento de la AIF para cuestiones relacionadas con el buen gobierno en la transición al mercado (Viet Nam). Los programas han sido igualmente diversificados, ya que figuran entre ellos desde los centrados en operaciones integradas de modernización de la gestión de las finanzas públicas (Viet Nam) hasta la creación de demanda de reformas (Camboya) y la aplicación de nuevos enfoques del análisis de la economía política para configurar el diseño de los programas (RDP Lao). En Europa y Asia central, pese a las grandes diferencias entre las circunstancias de los países, la labor del Banco sigue centrándose en el fortalecimiento de los sistemas esenciales de gestión pública y la mejora de la rendición de cuentas y transparencia. La AIF participa activamente en la investigación y el diálogo sobre políticas dentro de los países y proporciona distintos tipos de financiamiento. El componente de buen gobierno en los CALP ha ido cobrando una importancia cada vez mayor (como en Georgia y Albania). Ha seguido habiendo también una considerable demanda de trabajos en varios sectores: gestión del gasto público (todos los países que pueden recibir financiamiento de la AIF); reforma administrativa y de la administración pública (Albania); y reforma jurídica y judicial (Albania, Armenia y Georgia). En lo que respecta a los aspectos analíticos y de seguimiento y evaluación, la Encuesta sobre el entorno empresarial y el desempeño de las empresas que se está realizando es el instrumento fundamental para el seguimiento de los progresos en la reforma del buen gobierno en la región. En América Latina y el Caribe existe desde hace tiempo una demanda de reformas de la gestión central del sector público que se ha satisfecho con una amplia gama de operaciones, análisis y diálogos sobre políticas. Entre los programas relacionados con el buen gobierno del sector público cabe señalar: las reformas de la gestión financiera en casi toda la región; programas innovadores de modernización de los tribunales (Honduras); e iniciativas más recientes centradas en la rendición de cuentas y transparencia, el fortalecimiento de la prestación de servicios y la capacidad institucional de los parlamentos. La mayor parte del diálogo sobre políticas y el financiamiento relacionado con el buen gobierno se basan en la consideración regional de la desigualdad y en una utilización intensa de las Notas de política para la transición. En el Oriente Medio y Norte de África, las cuestiones del buen gobierno se hallan ahora en el primer plano del debate sobre el desarrollo. El buen gobierno es uno de los cinco pilares principales de la estrategia regional y, en 2004, se preparó un importante informe sobre un mejor gobierno para el desarrollo en el Oriente Medio y Norte de África, titulado Better Governance for Development in the Middle East and North Africa. El programa de trabajo de la AIF se ha centrado tradicionalmente en ayudar a los clientes a mejorar la calidad de sus administraciones públicas por medio de iniciativas como el proyecto de modernización de la administración pública en Yemen. En 2005, la AIF empezó a ampliar su enfoque para abordar cuestiones más controversiales como la transparencia, la rendición de cuentas, la descentralización y la lucha contra la corrupción, que se destacan en el informe sobre buen gobierno. En Asia meridional, donde hay una demanda creciente de reformas del buen gobierno, se ha aplicado la estrategia de actuar con oportunismo, apoyando reformas progresivas. Para ello, se han separado los elementos del amplio programa de reforma del buen gobierno y se han elegido cuidadosamente aquéllos en los que se pueden centrar inicialmente los esfuerzos. Las iniciativas de la AIF encaminadas a mejorar el clima para la inversión y fortalecer la prestación de servicios a nivel sectorial han sido los principales vehículos para promover una mayor rendición de cuentas del sector público y un mejor gobierno. Se están ejecutando con éxito en la región muchos programas innovadores, como los relacionados con: el fortalecimiento de la representación, la participación y la transparencia mediante iniciativas de descentralización en Nepal; la mejora de los sistemas de compras en Bangladesh y Sri Lanka; y los esfuerzos para mejorar el entorno fiduciario y fortalecer la capacidad, independencia y eficacia de las instituciones supervisoras en toda la región. gobierno y el apoyo a proyectos y programas sectoriales, empezando por el principal documento de estrategia del Banco para los países, la Estrategia de asistencia a los países, y dentro de sectores como infraestructura, salud, educación, actividades forestales o recursos naturales. RESULTADOS Durante los últimos años, se han conseguido modestas mejoras en la gestión del sector público y en las prácticas de aplicación del imperio de la ley en los países que pueden recibir financiamiento de la AIF. No obstante, la institución ha contribuido a conseguir progresos reales en varios países. gestión presupuestaria, administración pública, y legislación y administración de la justicia. En los países que pueden recibir financiamiento de la AIF, la puntuación media en 2001–05, según el indicador de la CPIA para los derechos de propiedad y el buen gobierno basado en las normas, aumentó de 2,60 a 2,93 (en una escala de 1 a 6) y la puntuación media según el indicador de la calidad de la administración pública aumentó de 2,87 a 3,01, mientras que el número de países con muy mala puntuación (2 o menos) disminuyó de 10 a 6 y la puntuación media según la transparencia, rendición de cuentas y corrupción en el sector público aumentó también de 2,78 a 2,90. Modestos resultados en conjunto Los indicadores de la Evaluación de las políticas e instituciones nacionales (CPIA, por sus siglas en inglés) incluyen medidas de la ejecución de las reformas encaminadas a mejorar la gestión del sector público. Dicha evaluación hace un seguimiento de cuatro sistemas fundamentales del buen gobierno: gestión de los ingresos, En comparación con las reformas de la gestión de las finanzas públicas, las cuales tienden a ser eficaces independientemente del contexto del país, las operaciones de reforma de la administración pública parecen depender mucho más de dicho contexto, porque frecuentemente amenazan con cambiar sistemas que adolecen de un alto grado de clientelismo político. Con todo, la AIF ayudó Puntuaciones agregadas, según la CPIA, de la administración e instituciones del sector público en los países receptores de la AIF (2001–05) 4 3.5 2001 2005 3 2.5 2 1.5 1 0.5 0 Derechos de propiedad Calidad de la gestión presupuestaria y financiera Eficiencia de la movilización de ingresos Calidad de la administración pública Transparencia, rendición de cuentas y corrupción en el sector público a conseguir progresos reales. A continuación, se presentan algunos ejemplos. Ejemplos del “lado de la oferta” En Tanzanía, se consiguieron notables reducciones de personal y mejoras de salarios. Como parte del Programa de estrategia de lucha contra la pobreza aplicado por el Gobierno con apoyo de los Créditos de apoyo a la lucha contra la pobreza (CALP), se proporcionaron mejoras salariales solamente en los ministerios, departamentos y órganos en los que se han realizado reformas. En Ghana, la AIF mejoró notablemente la eficiencia y el gobierno de las aduanas, reduciendo los retrasos y las oportunidades de corrupción mediante la informatización de su administración. En el puerto de Tema, el tiempo de despacho en aduanas se redujo, en promedio, de varias semanas a entre uno y cinco días. Se lograron en Uganda avances importantes hacia la descentralización por medio de una serie de proyectos de creación de un gobierno local, basados en un enfoque del desarrollo impulsado por la comunidad que asigna a los grupos comunitarios una función importante en la adopción de decisiones sobre proyectos locales. En Lesotho, el apoyo de la AIF para la creación de capacidad jurídica incluyó la introducción de normas de servicio en el poder judicial y la lucha contra la corrupción. La AIF ha ayudado a mejorar las normas profesionales y éticas, la rendición de cuentas, la formación y la eficiencia operativa en el poder judicial en Madagascar. Contribuyó a la creación de la Chambre des Comptes (Tribunal de cuentas) y el Conseil Constitutionnel (Consejo constitucional) de Camerún. Con el apoyo de asistencia técnica y para las políticas financiado por el Banco, entre 1999 y 2004, Albania ha introducido la contratación de funcionarios por concurso de méritos. Gracias a ello, ha disminuido la rotación del personal en comparación con los nombramientos políticos (2,7% frente al 11,7%), ha aumentado el número de solicitantes cualificados para los puestos anunciados (del 5,9% en 2003 al 9,3% en 2004) y se ha creado un órgano de apelación razonablemente independiente. El Proyecto de Reforma Judicial de Guatemala ha acercado la justicia al pueblo (6.000 pobres de zonas periurbanas y comunidades indígenas en el primer año) mediante tribunales móviles que proporcionan servicios gratuitos de mediación y un foro para resolver pequeñas reclamaciones y litigios civiles, familiares y laborales. Por medio del Proyecto de derechos de propiedad urbana del Perú, se registraron más de 1,1 millones de títulos de propiedad, que beneficiaron a más de 5,7 millones de peruanos en comunidades marginales; los valores de la propiedad aumentaron en más de US$1.000 millones; y se movilizó crédito oficial por un monto de US$400 millones. El Proyecto de reforma institucional y creación de capacidad de Sierra Leona ha mejorado la gestión local de los recursos públicos por medio de un programa de descentralización y atribución de facultades en virtud del cual se ha establecido un sistema intergubernamental de transferencias, que incluye subvenciones no asignadas a un fin determinado para financiar proyectos de creación de gobiernos locales. Utilizando un enfoque de resultados rápidos, los consejos locales han desarrollado su capacidad de gestión de proyectos, compras y rendición de cuentas, han acelerado la prestación de servicios y han mejorado la apertura, transparencia y rendición de cuentas. El Programa de donantes múltiples sobre planificación y creación de capacidad en Timor-Leste incluye un enfoque innovador de la creación de capacidad, que integra habilidades y conocimientos, sistemas y procesos con los que trabaja la gente y un marco de desempeño del personal construido en torno a la transparencia, la rendición de cuentas, el liderazgo, la ética, el trabajo en equipo y las comunicaciones, así como la asistencia de asesores extranjeros. Ejemplos del “lado de la demanda” y aprendizaje El Programa digital de lucha contra la corrupción municipal (GDLN, por sus siglas en inglés), que forma parte del Proyecto de radio digital de África, utiliza la tecnología innovadora de la radio digital para llegar a zonas rurales remotas y difundir instrumentos y prácticas de lucha contra la corrupción y de buen gobierno. Ofrece una plataforma estructurada para que los funcionarios locales y los ciudadanos aprendan estrategias concretas de lucha contra la corrupción. Las encuestas sobre buen gobierno y lucha contra la corrupción proporcionan análisis de diagnóstico en profundidad sobre la dinámica del buen gobierno en el nivel micro y generan una aportación concreta para programas de acción específicos de los países. El Banco ha apoyado la preparación y aplicación de tales instrumentos en los países clientes, en asociación con organismos bilaterales y ONG locales (por ejemplo, en Benin, Haití, Guinea, Madagascar, Mozambique y Paraguay). El Gobierno de Karnataka, India, está realizando mejoras innovadoras en la prestación de servicios, que incluyen contratos con organismos que ofrecen servicios. En Bangalore se ha mejorado espectacularmente la calidad de los servicios prestados por los organismos ciudadanos; las tarjetas de informe de la encuesta muestran que la satisfacción de los usuarios ha aumentado del 6% al 94% en lo relativo a la electricidad, del 4% al 73% con respecto al agua y del 25% al 73% en relación con los hospitales públicos. En el ejercicio de 2006, el Programa de medios de comunicación, información y gestión de gobierno del Instituto del Banco Mundial emprendió un programa plurianual en apoyo de la función de los medios para incrementar la transparencia y rendición de cuentas en el sistema de gobierno de Nigeria. En él se aplica un enfoque completo sobre las cuestiones relativas a los medios de difusión e información, haciendo hincapié en las instituciones de difusión de la información, la capacidad de periodismo, el acceso a la información y la capacidad de información pública. El Partnership for Transparency Fund (PTF) (Fondo de alianza para la transparencia), apoyado por el Banco Mundial —que es una ONG internacional dedicada a contribuir a que la sociedad civil desempeñe una función eficaz en la preparación, ejecución y seguimiento de programas de lucha contra la corrupción—, proporciona financiamiento por un monto de hasta US$25.000 para actividades o proyectos concretos, diversificados y a plazo fijo, encaminados a combatir la corrupción. Lecciones aprendidas Las lecciones aprendidas en relación con las reformas jurídicas y judiciales y de la administración pública indican que: • La identificación y el compromiso del país son muy importantes para el éxito de los proyectos relacionados con el buen gobierno del sector público. Las operaciones de reforma de la administración pública son eficaces en la mayoría de los entornos, si bien lo son menos en situaciones de mal gobierno. Por ejemplo, el éxito de tales operaciones es del 84% en la mayoría de los países, pero desciende al 36% en los países con peor gobierno. Las reformas legislativas y de la administración pública tienen muchas más probabilidades de éxito cuando están adaptadas a las circunstancias del país. • Es preciso prestar más atención a la colaboración con los gobiernos locales, ya que en muchos países la descentralización ha trasladado los problemas de buen gobierno y corrupción al nivel local. • Hay que hacer especial hincapié en la creación de capacidad en los países que están decididamente comprometidos con el mejoramiento del gobierno, pero adolecen de grave escasez de conocimientos y capacidad de organización. DE CARA AL FUTURO El enfoque estratégico adoptado por la AIF con respecto a la reforma de la administración pública y al imperio de la ley forma parte de la estrategia general del Banco sobre el buen gobierno y la lucha contra la corrupción. Dentro de cada país, el Banco trata de fortalecer las instituciones básicas de gobierno para que sean más eficientes, responsables y transparentes. Para avanzar en el futuro, el Banco, por ejemplo: • Apoyará a una amplia gama de interesados para contribuir a crear estados capaces y responsables, lo que implica un establecimiento más participativo de las prioridades sobre las políticas y el gasto público, la intensificación de la transparencia y supervisión en el uso de los recursos presupuestarios, el aumento de la participación y supervisión de los usuarios en la prestación de los servicios, la mejora del gobierno local participativo y el fortalecimiento de otras instituciones oficiales de supervisión (como el poder judicial, defensores del pueblo y entidades fiscalizadoras superiores). • Apoyará las reformas de los salarios de los funcionarios y los códigos de conducta destinados a reducir los incentivos para la corrupción y permitir una mejor prestación de servicios a los ciudadanos. • Ayudará a los gobiernos locales para que puedan responder mejor a las necesidades de las comunidades locales y rendir cuentas de ello. • Apoyará las reformas judiciales y jurídicas y la capacidad parlamentaria para que estas instituciones examinen y contrapesen al Poder Ejecutivo. Fuera de la rama ejecutiva, el Banco colaborará con otros donantes para ayudar más sistemáticamente al Poder Legislativo, a las entidades fiscalizadoras superiores y a otras instituciones oficiales de supervisión a fortalecer su capacidad para la vigilancia del gasto público. Al final del período abarcado por los recursos de la AIF15 (ejercicio económico 2008–11), el Banco espera que los progresos en los efectos sobre la administración pública y el imperio de la ley se demuestren por medio de indicadores para la acción y de otro tipo. Recursos adicionales de la AIF pueden ayudar a conseguir que un número mayor de países receptores de los fondos otorgados por el organismo cuenten con capacidad para el seguimiento de dichos indicadores y los utilicen como instrumentos de gestión que guíen sus propios esfuerzos de reforma de la administración pública y aplicación del imperio de la ley. Mayo de 2007. http://www.bancomundial.org/aif