En nuestro Derecho Positivo ha prevalecido una concepción sintética, jurídico-técnica, según la cual el concepto de Contabilidad Pública abarca tanto el registro de las operaciones relativas a los ingresos s y gastos públicos como la rendición de las cuentas correspondientes a dichas operaciones. Dicho lo anterior, y de acuerdo con la L.G.P., están sometidos al régimen de Contabilidad Pública “el Estado y las Entidades integrantes del Sector Público estatal”, estableciendo su Art. 119 que el sometimiento al régimen de Contabilidad Pública implica “la obligación de rendir cuentas de las respectivas operaciones al Tribunal de Cuentas...”. La propia Constitución Española recoge este principio, elevándolo así al superior rango constitucional, al establecer en su Art. 136.2 que “las cuentas del Estado y del Sector Público estatal se rendirán al Tribunal de Cuentas y serán censuradas por éste”. El Art. 4. de la L.O. del Tribunal de Cuentas dice que integran el Sector Público entre otros, la Administración del Estado y los Organismos Autónomos. Así pues, tanto la S.G.I.P. como el O.A.T.P.F.E., es decir la Administración Penitenciaria en su conjunto, como parte integrante de la Administración General del Estado en el ámbito contable está sometida a la legislación general aplicable al conjunto de las Administraciones Públicas con las peculiaridades propias del Organismo Autónomo según sus características particulares. Al tal efecto, el Art. 292 R.P. dispone como hemos visto que “los recursos económicos asignados y gestionados por los Establecimientos Penitenciarios tienen la naturaleza de recursos públicos, a los que resultará de aplicación la normativa presupuestaría, contractual, contable o patrimonial vigente para las Administraciones Públicas”. Asimismo, dice el R.D. 868/2005, de 15 de Julio, por el que se aprueba el Estatuto del O.A.T.P.F.E., en su Art. 11 (sobre rrégimen presupuestario y de contratación) que “El régimen presupuestario, económico y financiero, de contabilidad, intervención y de control financiero del Organismo Autónomo será el determinado en la Ley 47/2003, de 26 de Noviembre, General Presupuestaria”. 2.1. BREVE REFERENCIA SOBRE LA CONTABILIDAD PÚBLICA APLICABLE EN EL ÁMBITO DEL SECTOR PÚBLICO De la contabilidad del Sector Público Estatal trata el Título V de la Ley 47/2003, de 26 de Noviembre, General Presupuestaria, (L.G.P.), Arts. 119 a 139, estableciendo es su Art. 120 como fines de la misma los siguientes: FINES DE LA CONTABILIDAD PÚBLICA La contabilidad del Sector Público estatal debe permitir el cumplimiento de los siguientes fines de gestión, de control y de análisis e información: 1. Mostrar la ejecución de los presupuestos, poniendo de manifiesto los resultados presupuestarios, y proporcionar información para el seguimiento de los objetivos previstos en los Presupuestos Generales del Estado. 2. Poner de manifiesto la composición y situación del patrimonio así como sus variaciones, y determinar los resultados desde el punto de vista económico patrimonial. 3. Suministrar información para la determinación de los costes de los Servicios Públicos. 4. Proporcionar información para la elaboración de todo tipo de cuentas, estados y documentos que hayan de rendirse o remitirse al Tribunal de Cuentas y demás órganos de control. 5. Suministrar información para la elaboración de las cuentas económicas de las Administraciones Públicas, Sociedades no financieras Públicas e Instituciones financieras Públicas, de acuerdo con el Sistema Europeo de Cuentas Nacionales y Regionales. 6. Proporcionar información para el ejercicio de los controles de legalidad, financiero, de economía, eficiencia y eficacia. 7. Suministrar información para posibilitar el análisis de los efectos económicos y financieros de la actividad de los Entes Públicos. 8. Suministrar información económica y financiera útil para la toma de decisiones. 9. Suministrar información útil para otros destinatarios. IGNACIO G. CH. Telf.: 606.658.855 - www.ignacioch.es 474 Derecho Penitenciario Tema XX