PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE MODIFICA LA FRACCIÓN VII DEL ARTÍCULO 27 DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS. Recinto del Senado de la República, a 03 de Octubre de 2011. CC. SECRETARIOS DE LA MESA DIRECTIVA CÁMARA DE SENADORES DEL H. CONGRESO DE LA UNIÓN PRESENTE Los suscritos, Senadores de la República de la LXI Legislatura del H. Congreso de la Unión, integrantes del Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista de México, con fundamento en lo dispuesto por el artículo 71 fracción II y 72 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; artículo 163 numeral I y 164 numeral I y II, y demás relativos del Reglamento del Senado de la República, sometemos a la consideración de esta Honorable Asamblea, la presente INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO MEDIANTE LA CUAL SE MODIFICA LA FRACCIÓN VII DEL ARTICULO 27CONSTITUCIONAL, de conformidad con la siguiente: EXPOSICIÓN DE MOTIVOS El artículo 27 constitucional en su segundo párrafo señala que: “las expropiaciones sólo podrán hacerse por causa de utilidad pública y mediante indemnización”; por lo tanto no se da una pérdida de las particularidades de la propiedad por lo contrario lo que tenemos es el reemplazo de un bien jurídico por otro, para favorecer una necesidad pública. El punto central de este párrafo, se encuentra en la cuestión de “la utilidad pública”, este concepto sirve, para justificar diversas formas de intervención del Estado. El diccionario jurídico mexicano del Instituto de Investigaciones Jurídicas, establece que interés público “es el conjunto de pretensiones relacionadas con las necesidades colectivas de los miembros de una comunidad y protegidas mediante la intervención directa y permanente del Estado”. De acuerdo con esta definición, es tarea del Estado velar por las necesidades de las comunidades y grupos sociales, cualquier acción que lleve a cabo el Estado, está debe de garantizar ante todo, proteger y cubrir las necesidades de la población. Esto en teoría debería eliminar o detener los abusos y arbitrariedades por parte del Gobierno. Bajo la idea del interés público, el Gobierno Federal intenta justificar la expropiación y desalojo de comunidades enteras, para la creación de proyectos de desarrollo a gran escala, sin embargo a la hora de realizar la plantación de estos proyectos, las comunidades afectadas no son tomadas en cuenta y se les cataloga como obstáculos del desarrollo. La intervención por parte del gobierno federal muchas veces no es objetiva, y mucho menos es eficiente, esto se da, por una mala visión administrativa, a la hora de planear las acciones que se llevaran a cabo; y en consecuencia, las políticas públicas, aun cuando son dirigidas a la población en general, se enfocan a necesidades de la clase política y de ciertos sectores económicos, que dan como resultado, el rezago de los menos favorecidos. Las secuelas negativas que genera el desarrollo sobre el medio ambiente, son pagadas por aquellos grupos que se encuentran marginados, estos se encuentran en una constante lucha, por su patrimonio, su identidad y sus tierras, son comunidades que no se oponen al desarrollo, a lo que se oponen es a que pasen sobre ellos, lo que piden es justicia, exigen que estos proyectos no violenten su estilo de vida, pues al desplazarlos, se les arrebata todo lo que son. Ejemplo de esta situación, es el caso de la construcción de la presa el Zapotillo en río verde, este proyecto de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), y de los gobiernos de los Estados de Guanajuato y Jalisco el cual se, a causado gran controversia durante su desarrollo, pues se han detectado diversas irregularidades y con su construcción, se estaría desalojando un número significativo de familias, pues para su realización, se tienen que inundar tres poblados. Justificado en la idea de la utilidad pública, la CONAGUA ha decidido que si las negociaciones no se terminan pronto, eventualmente se estaría emitiendo un decreto presidencial para expropiar los terrenos, dando como resultado la disminución de los beneficios que se ofrecen a las comunidades afectadas y la expulsión de los pobladores de las tierras expropiadas. El derecho de las comunidades en la participación de la toma de decisiones que afecten sus derechos fundamentales, tales como su libre determinación, identidad, igualdad, cultura y uso de la tierra, garantiza un Estado democrático pleno. En el caso de los proyectos de desarrollo, es esencial la aprobación de las comunidades para garantizar el respeto de sus derechos humanos. Hay que entender que los pueblos y las comunidades, tienen una estrecha vinculación con sus territorios, este es el espacio geográfico en el cual se desarrollan las distintas dinámicas sociales, se vuelve indispensable para su supervivencia, ya que en este espacio generan su identidad como comunidad. El derecho a ser consultados mantiene los principios de igualdad y respeto a la diversidad cultural que deben mantenerse entre el Estado y los pueblos. La fracción VII del artículo 27 Constitucional, proclama la protección de la integridad de las tierras de las comunidades; el cual a la letra señala “… se reconoce la personalidad jurídica de los núcleos de población ejidales y comunales y se protege su propiedad sobre la tierra, tanto para el asentamiento humano como para actividades productivas.” En el Partido Verde, siempre hemos velado por los derechos de todos los pueblos y sus comunidades, por eso mediante la presente propuesta pretendemos agregar un cuarto párrafo a la fracción VII del artículo 27 de Nuestra Carta Magna, para que cuando los ejidatarios y comuneros sean afectados por proyectos o megaproyectos de desarrollo, estos sean consultados y den su consentimiento, o su negativa, ante la realización de cualquier obra o infraestructura que atente de manera directa o indirecta a su modo de vida usos y costumbres. El sacrificio de las pequeñas comunidades para el beneficio de los proyectos o megaproyectos de desarrollo, no deben de ser en vano, y debe de venir ligados a una meditación y plantación de las dos partes a fin de que con esto, tanto el proyecto, como las comunidades afectadas, puedan encontrar soluciones que beneficien a las dos partes. Por lo expuesto y fundado, sometemos a consideración de esta honorable asamblea la siguiente: INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMA LA FRACCIÓN VII DEL ARTICULO 27 DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS Artículo Único: Se reforma el cuarto párrafo de la fracción VII del Artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS Artículo 27. … La capacidad para adquirir el dominio de las tierras y aguas de la Nación, se regirá por las siguientes prescripciones: VII. Se reconoce la personalidad jurídica de los núcleos de población ejidales y comunales y se protege su propiedad sobre la tierra, tanto para el asentamiento humano como para actividades productivas. La ley protegerá la integridad de las tierras de los grupos indígenas. La ley, considerando el respeto y fortalecimiento de la vida comunitaria de los ejidos y comunidades, protegerá la tierra para el asentamiento humano y regulará el aprovechamiento de tierras, bosques y aguas de uso común y la provisión de acciones de fomento necesarias para elevar el nivel de vida de sus pobladores. La ley, con respeto a la voluntad de los ejidatarios y comuneros para adoptar las condiciones que más les convengan en el aprovechamiento de sus recursos productivos, regulará el ejercicio de los derechos de los comuneros sobre la tierra y de cada ejidatario sobre su parcela, así mismo, cuando estos sean afectados por proyectos o megaproyectos de desarrollo, se deberá realizar una consulta para que estos otorguen su consentimiento o negativa, ante la realización de cualquier obra que atente de manera directa o indirecta su modo de vida, sus usos y costumbres. Asimismo establecerá los procedimientos por los cuales ejidatarios y comuneros podrán asociarse entre sí, con el Estado o con terceros y otorgar el uso de sus tierras; y, tratándose de ejidatarios, transmitir sus derechos parcelarios entre los miembros del núcleo de población; igualmente fijará los requisitos y procedimientos conforme a los cuales la asamblea ejidal otorgará al ejidatario el dominio sobre su parcela. En caso de enajenación de parcelas se respetará el derecho de preferencia que prevea la ley. Dentro de un mismo núcleo de población, ningún ejidatario podrá ser titular de más tierra que la equivalente al 5% del total de las tierras ejidales. En todo caso, la titularidad de tierras en favor de un solo ejidatario deberá ajustarse a los límites señalados en la fracción XV. La asamblea general es el órgano supremo del núcleo de población ejidal o comunal, con la organización y funciones que la ley señale. El comisariado ejidal o de bienes comunales, electo democráticamente en los términos de la ley, es el órgano de representación del núcleo y el responsable de ejecutar las resoluciones de la asamblea. La restitución de tierras, bosques y aguas a los núcleos de población se hará en los términos de la ley reglamentaria; TRANSITORIOS Artículo Primero.- El presente Decreto entrará en vigor el día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Federación. Artículo Segundo.- Se derogan todas aquellas disposiciones que contravengan el contenido del presente decreto. Por el Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista de México: SEN. ARTURO ESCOBAR Y VEGA COORDINADOR SEN. FRANCISCO AGUNDIS ARIAS SEN. JORGE LEGORRETA ORDORICASEN. MANUEL VELASCO COELLO SEN. JAVIER OROZCO GÓMEZ SEN. LUDIVINA MENCHACA CASTELLANOS