Festival “Una Canción para Jesús” 1.- Elementos que tienen que ver con la persona del cantante: Buena voz y agradable al oído, aunque no necesariamente brillante ó, lírica, pero, algo más notable de lo común. Que resuene en el oído de quien la escucha, y que al escucharla, produzca un cierto deleite de agrado y placer:“que suene bonita y bella”, sea de hombre o de mujer. Cierto dominio de escena; capacidad de moverse y manifestar convicción artística en la interpretación. Que muestre, además, seguridad, desenvoltura y serenidad. 2.- Elementos que tienen que ver con el sentido religioso. a.- Tengo entendido que este festival tiene como por objeto crear “temas musicales religioso-católicos”, es decir que, por su letra y modo musical sirvan, no solo para ser escuchados como deleite, sino además, al escucharlos, la persona pueda reflexionar y fortalecer su espiritualidad religiosa católica. Existen dos tipos de música religiosa. En primer lugar, aquella que, en forma general, ayuda a suscitar y cultivar la fe cristiana, y no necesariamente es católica;se llama, sencillamente, “Música Religiosa”y es la que, en general, evoca y expresa los sentimientos de una persona religiosa. Su inspiración es la búsqueda de lo divino, lo trascendental y el deseo de un encuentro personal y comunitario con Dios. En segundo lugar, aquellamúsica que,siendo religiosa propiamente tal, puede convertirse en una música “para la liturgia”,y es la que llamamos, sencillamente, “Música Litúrgica”, ó, también llamada música sagrada, es decir, que puedaser interpretada en la Misa y en otros eventos litúrgicos. Su inspiración son, fundamentalmente, los ritos litúrgicos como la Eucaristía, exequias, sacramentos, etc. b.- Para aclarar un poco más: los cantos litúrgicos, propiamente tal, son aquellos que por “su texto”,están dentro del canon propio de la Eucaristía o de otro rito sacramental o litúrgico, son invariables y no modificables. La iglesia, como “liturgia”, propiamente tal, es la dueña y constructora de esos textos; están en el Misal Romano, para el caso de la Eucaristía, y en otros libros rituales, para el caso de otras celebraciones. La Misa es la liturgia más conocida y participada por nuestros feligreses y es, a la vez, la más utilizada por músicos en general, para musicalizarla. La estructura básica de la Misa, común para toda la celebración, es lo que llamamos “Ordinario de la Misa”, y es invariable porque es parte de un rito concreto que tiene, en sí mismo, un significado específico que manifestar. Los textos son siempre los mismos. Por ejemplo, el kirie, el Gloria, el Sanctus y el Agnus Dei,son textos rituales que tienen un significado puntual; su forma textual no es posible modificarlos, pero sí podrían utilizarse melodías adecuadas y distintas, según la creatividad de los músicos y los criterios pastorales litúrgicos exigidos. Los cantos religiosos “paralitúrgicos” son aquellos cantos religiosos que pueden acompañar ciertos momentos de la Misa, como por ejemplo, el canto de Entrada, el Ofertorio o la Comunión, que en cierta manera, varían en su música y texto, de acuerdo a los textos bíblicos, el tiempo litúrgico, las fiestas de santos, etc. Éstos, ayudan a celebrar el acto eucarístico y complementan los temas de reflexión en la Misa. En este sentido,creo, que un canto salido de un festival de la canción, creado inéditamente, puede ser considerado de dos maneras: a) Ser un canto religioso católico que ayude a despertar o cultivar la fe; será escuchado, meditado, aplaudido y alabado. En este sentido, puede ser considerado solo un canto religioso en general. b) Ser un canto que pueda ser parte de la celebración litúrgica como la Misa. Para ello, debe tener ciertos requisitos, siendo el principal de ellos, el acompañar, orar y cantar lo que la liturgia celebra en los distintos actos litúrgicos. La liturgia es un acto público de toda la iglesia y por ello, los cantos deben cantar lo que ella celebra. 3.- Criterios para un canto religioso que pueda ser incorporado en la Eucaristía. Los cantos religiosos son el producto de una experiencia de fe personal, y en esa experiencia, se unen el sentimiento de una búsqueda de lo trascendental, en definitiva, de Dios, como también de una interpelación de la Sagrada Escritura y el acompañamiento de la iglesia propiamente tal. Para que un canto sea religioso católico y pueda ser interpretado por una asamblea creyente, como parte de la eucaristía, debe tener los siguientes requisitos: Debe expresar los contenidos de una experiencia profunda de fe: búsqueda, encuentro y satisfacción con el Dios de Jesucristo y su misterio de muerte y resurrección. De ahí que puede ser un canto de alabanza, un canto de súplica, un canto que exprese algún tema en particular, como por ejemplo el misterio de la Santísima Virgen María, etc. Los cantos religiosos para la misa son de muchos contenidos que aportan al misterio celebrado en la misa. Lo que expresa el canto religioso para la liturgia, debe tener algún asidero bíblico; tener contenidos de la Sagrada Escritura, aun cuando sea en forma indirecta. Debe expresar los dogmas de nuestra fe católica. La eucaristía es un acto litúrgico y, mientras el canto se acerque más al contenido de lo que se celebra en cada liturgia, será más sagrado, santo y santificará los fieles. 4.- Criterios para un jurado de festival religioso. Como se trata de premiar un canto religioso, debe expresar además, la calidad religiosa en la interpretación. Es muy fácil confundirse con la interpretación de los cantantes más populares y modernos que hay en la actualidad, donde se trata de mostrar mucho la calidad de una interpretación llamando mucho la atención del público. En este caso, en el festival religioso a la persona de Jesucristo, creo que hay algo distinto, es un canto religioso que debiera, no solo llamar la atención del público en términos de un deseado “aplauso”, también, en cierta manera, el público deberá ser parte de él, escuchando, meditando, dejándose interpelar por él, y en definitiva, orando en el silencio de cada conciencia. Esto es algo subjetivo, pero será el puente para convertirse en un canto que, en verdad,pueda interpretar la fe del pueblo creyente. Ésta, creo, que es la tarea del jurado de un festival religioso. Es difícil, pero es el sentido de la fe religiosa. Y, para ello, debe tener las siguientes características: Una letra que esté apoyada en textos bíblicos, ó, que al menos, esté inspirado en una experiencia indirecta con la Sagrada Escritura. Una letra que incorpore, o haga presente, la figura y la persona de Jesucristo en la vida de toda la iglesia y el mundo entero, creyentes y no creyentes. Una letra universal, en la que todo un pueblo entero se identifique con ella; en este sentido que la letra no sea exageradamente personal, donde se destaca mucho el “yo”, sino más bien el sentido del pluraldel “nosotros”, como pueblo que cree. Que tenga contenido dogmático; en el caso de la Persona de Jesucristo, por ejemplo, son varios temas o dogmas incorporados a él: Dios Encarnado como Hombre; Redentor y Salvador de todo el género humano; Camino, Verdad y Vida para todo ser humano y la naturaleza entera; Señor de la Historia y comunicador de Vida Eterna con su resurrección; Esperanza de los pobres, etc. Todos estos contenidos y muchos más, hacen un todo en la eucaristía, si es que se desea incorporarlo al canon de la misa. Por otro lado, una característica de tipo musical, que tiene su asidero religioso, es su forma musical: debe ser, de tal forma que, al oído de una asamblea creyente, les sea muy fácil de entender e interpretar. En este sentido debe ser bella y agradable. Las melodías siempre son bellas para sus autores pero, en última instancia, es el pueblo fiel quien las convierte, con el tiempo, en un “clásico” universal, como es el caso del “Pescador de hombres”, que, de acuerdo a su estructura musical y religiosa, se ha convertido en un clásico de la música paralitúrgica, y en todos los países del mundo. Dios les bendiga y les ayude en este discernimiento. P. Orlando Torres Madrid. Septiembre de 2012