El problema actual de la migración María de Lourdes Rosas Martínez Las migraciones han sido constantes desde tiempos antiguos, pero las que se desarrollan en este siglo XXI no tienen precedentes. Actualmente datos de la ONU estiman que hay 232 millones de migrantes en el mundo. Las migraciones internacionales se han mundializado, sin embargo en un planeta crecientemente globalizado, la movilidad de las personas se ha visto severamente restringida. Ahora las fuentes de la migración internacional son Asia, América Latina y África, que prefiguran un nuevo mapa migratorio. África es un continente de migrantes, y su principal destino es Europa. América Latina y el Caribe, con el 13 por ciento de los migrantes, es la primera región receptora de remesas. En el golfo pérsico, más de la mitad de la población activa es extranjera. En Asia, la migración se ha potenciado con los cambios en China. Las causas de la globalización migratoria son diversas, desde la miseria y la necesidad de mano de obra hasta la mundialización del transporte y de la información, que han disminuido el tiempo y el espacio. Si los trabajadores migrantes fueran a la huelga todos juntos, en todo el mundo, las economías de los países ricos se verían descalabradas y los países con más migrantes, privados de los envíos de remesas, se arriesgarían al colapso. La migración produce efectos económicos benéficos tanto al país emisor, como al país receptor, pero en las sociedades democráticas se plantea otro reto: cómo integrar a los migrantes como ciudadanos con plenos derechos. Las respuestas de las sociedades occidentales son distintas. Estados Unidos, que es un país de migrantes, se siente inseguro y poco receptivo por la cantidad de llegados cada día. Sin embargo es digno de atención el modelo multicultural canadiense, el cual resulta de una política basada en los derechos humanos, la igualdad y el reconocimiento cultural. En la Unión Europea, la migración es una de las fuentes de la diversificación de su diversidad, ya que introduce otras religiones y culturas, en un continente donde las fronteras internas han dejado de ser estrictamente fronteras, y donde las políticas de ciudadanía pueden derivar en contenciosos entre los estados miembros. Las migraciones que cruzan fronteras hoy son objeto de alta prioridad en las agendas de gobiernos y partidos políticos, como de organismos internacionales, organizaciones de la sociedad civil y medios de comunicación. En muchos países, el tema migratorio se ha politizado fuertemente, y se ha convertido en un factor de confrontación partidaria y electoral. El actual orden migratorio internacional da lugar a importantes desequilibrios y conflictos: entre el volumen de migración que necesitarían los países menos desarrollados y el que están dispuestos a admitir los más desarrollados. Ello significa que la nómina de países receptores de migrantes se ha multiplicado. La mayor parte de ellos se agrupan en cuatro grandes ejes migratorios internacionales – América del Norte, Europa occidental, la región del Golfo Pérsico y la cuenca del Asia-Pacífico. Hay que añadir algunos países que no forman parte de estos ejes migratorios internacionales, como Israel, Libia, Costa Rica o Sudáfrica. Las principales fuentes de la migración internacional se concentran en Asia, América Latina y África, y se suman nuevos, como Ucrania, Bolivia o Nepal. México, y muchos otros más, son receptores, expulsores y países de tránsito, una triple categoría en fuerte expansión que es en sí misma reflejo de los obstáculos que se oponen a la libre circulación. El incremento de países, de origen, destino y tránsito, al mapa mundial de las migraciones internacionales se completa con una fuerte tendencia a la diversificación de rutas y conexiones origen-destino. La internacionalización de las migraciones A diferencia del pasado, el vigente es un sistema global y multipolar. De hecho, el rasgo más destacado de las migraciones internacionales en nuestros días es su carácter mundial, y de él derivan múltiples implicaciones. La globalización no se ha concretado en la esfera de la libertad de circulación de las personas. Algunas de sus principales modalidades están severamente restringidas, en especial las migraciones laborales y las que conducen al establecimiento indefinido. Se trata de una globalización llena de fronteras y de barreras, esta mundialización migratoria tiene que ver con otras facetas de la globalización, en especial la de los transportes, que ha disminuido la distancia y el tiempo, y la de las comunicaciones y la información, que han creado algo parecido a una perspectiva mundial que hace posible que cualquier país pueda constituir destino potencial para los migrantes y que éstos tiendan a moverse, con éxito variable, por el mundo entero. La globalización migratoria se enfrenta a un gran desequilibrio entre oferta y demanda de migrantes, resultado de la disminución relativa de la demanda de trabajo en general, tanto por procesos de mecanización e intensificación del capital y la tecnología como por una nueva división internacional del trabajo que ha relegado las operaciones más intensivas en trabajo a países con niveles salariales más bajos. Sin duda hay demanda de trabajo de los migrantes, pero en general se sitúa en sectores donde la tasa de ganancia depende de bajos salarios, como ejemplifican diversos tipos de servicios y actividades agrícolas. Y por ello es limitada en volumen. La disminución también resulta de las fuertes y crecientes reservas que muchas sociedades receptoras muestran hacia el aumento del volumen de la población migrante en su seno. No pocos países receptores se muestran reticentes a admitir a los trabajadores foráneos que necesitan, por el temor a que menoscaben la homogeneidad cultural, o bien se les liga a la violencia ciudadana. En tiempos no lejanos, en la literatura especializada se acuñó la expresión wanted but not welcome, “queridos pero no bienvenidos”, para definir los sentimientos de algunas sociedades receptoras hacia los migrantes. Hoy cabría sustituir el primero de los adjetivos, wanted, por needed: “requeridos pero no bienvenidos ” http://www.ilo.org/global/standards/subjects-covered-by-international-labour-standards/migrant-workers/ htm.