Queja disciplinaria, ante la Suprema Corte de Justicia, contra el

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Honorable Magistrada
ELSY DEL PILAR CUELLO CALDERÓN
PRESIDENTA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
E.S.D.
Ref. Queja Disciplinaria contra el Procurador General de la Nación –
Alejandro Ordóñez Maldonado.
MÓNICA DEL PILAR ROA LÓPEZ, ciudadana colombiana, identificada con la cédula de
ciudadanía No.
, representante legal en Colombia de la organización
WOMEN’S LINK WORLDWIDE 1, debidamente reconocida por el Ministerio del Interior y
de Justicia del Gobierno Nacional, mediante Resoluciones Nos. 1983 del 17 de julio de
2007 y 2683 del 19 de septiembre de 2007, respetuosamente interpongo ante usted,
según lo establecido por los artículos 83 y 192 de la Ley 734 de 2002 2, QUEJA
DISCIPLINARIA EN CONTRA DEL PROCURADOR GENERAL DE LA NACIÓN – ALEJANDRO
ORDÓÑEZ MALDONADO, por incurrir en las faltas disciplinarias consistentes en i) el
incumplimiento de las funciones asignadas por la Constitución Política y abuso de poder
en el cumplimiento de su papel como supremo director del Ministerio Público,
ii)
nombrar y mantener como Procuradora Delegada para la Infancia, la Adolescencia y la
Familia a una persona incursa en conflicto de intereses y iii) las demás que se establezcan.
Solicito a la honorable Corte Suprema de Justicia que evalué las conductas descritas en
este documento y su tipificación como faltas disciplinarias de acuerdo a las normas
establecidas de manera rigurosa e imparcial, recordando que es el único órgano de la
1
Women’s Link Worldwide es una organización colombiana y española, que persigue internacionalmente la
equidad de género a través del trabajo estratégico con las cortes y tribunales.
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“Artículo 83. Competencias especiales. Tendrán competencias especiales:
1. El proceso disciplinario que se adelante contra el Procurador General de la Nación, en única instancia y
mediante el procedimiento ordinario previsto en este código, cuyo conocimiento será de competencia de la
Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia. En el evento en que el Procurador haya sido postulado por esa
corporación, conocerá la Sala Plena del Consejo de Estado. La conducción del proceso estará a cargo, de
manera exclusiva y directa, del presidente de la respectiva corporación.
(….)”
“Artículo 192. Competencia especial de la Corte Suprema de Justicia. Es competente la Corte Suprema de
Justicia, Sala Plena, para conocer en única instancia, de acuerdo con las formalidades consagradas en este
código, de los procesos disciplinarios que se adelanten en contra del Procurador General de la Nación.”
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Constitución de 1991 que puede controlar disciplinariamente el comportamiento del
Procurador. Adicionalmente, solicito a la Honorable Corte de manera muy respetuosa,
que a través del estudio de cada uno de los hechos y conductas acusadas, evidencie
también el efecto simbólico y compulsivo que tiene el accionar del Procurador General
de la Nación, frente a los funcionarios del Ministerio Público que él dirige, los demás
funcionarios sujetos a su jurisdicción disciplinaria y la ciudadanía en general. El
comportamiento del Procurador tanto en sus acciones como en sus omisiones, tiene
consecuencias negativas concretas que se describirán en el desarrollo de esta queja. Sin
embargo, también tiene efectos a un nivel mucho más difícil de probar, pero
igualmente persuasivo para los funcionarios que buscan en el Procurador General de la
Nación guías sobre cómo cumplir con sus funciones. Estos efectos, si bien por su
naturaleza imponen grandes límites probatorios, son en efecto fácilmente perceptibles.
Mi petición se reduce a tener la sensibilidad despierta para identificarlos. En ningún
momento estoy pidiendo que sean tenidos como hechos específicos de esta queja.
I.
HECHOS
1. El 10 de Mayo de 2006 la Corte Constitucional colombiana profirió la sentencia C355 en la cual se reconoció el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo
en tres circunstancias.
2. Ilva Myriam Hoyos como Presidenta de la Red Futuro Colombia, presentó solicitud
de nulidad de la sentencia C-355/06 en compañía de Luis Rueda Gómez y Aurelio
Ignacio Cadavid. Las solicitudes de nulidad fueron desestimadas en Auto 360 de
2006.
3. La garantía del acceso a la interrupción voluntaria del embarazo se ha protegido
de manera consistente a través de diversos fallos de la Corte Constitucional: T171/07, T-988/07, T-209/08, T-946/08, Auto 279/09, T-388/09 y Auto 330/09.
4. El Procurador General de la Nación, Alejandro Ordóñez Maldonado, designó como
Procuradora Delegada para la Infancia, la Adolescencia y la Familia a la señora Ilva
Myriam Hoyos Castañeda, quien tomó posesión del cargo el 9 de febrero de 2009.
En consecuencia, esta funcionaria quedó encargada entre otros asuntos, de la
protección y defensa de los derechos sexuales y reproductivos, de conformidad
con la Constitución y las leyes.
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5. Antes de ser nombrada como Procuradora Delegada, la señora Hoyos Castañeda
fue la fundadora y presidenta de la organización Red Futuro Colombia;
organización opositora de la sentencia C–355 de 2006 que asumió como
compromiso revertir esta decisión judicial.
6. El 13 de mayo de 2009, el Procurador General de la Nación, Alejandro Ordóñez
Maldonado, expidió la Circular No. 030, dirigida a todos los funcionarios del
Ministerio Público, en la que estableció “[d]irectrices para el ejercicio de las
funciones del Ministerio Público, en cumplimiento de la sentencia C-355 de 10 de
mayo de 2006, proferida por la Corte Constitucional y relativa a los casos
excepcionales de despenalización del delito de aborto”.
7. El Procurador General de la Nación, mediante Resolución 284 del 8 de septiembre
de 2009, ordenó conformar un “grupo especial de trabajo para ejercer control
preventivo” sobre el proyecto de la Clínica de la Mujer, que fue criticado porque
allí se realizarían Interrupciones Voluntarias del Embarazo.
8. El 15 de octubre de 2009, a raíz de una demanda de nulidad instaurada por un
miembro de Red Futuro Colombia, señor Luis Rueda Gómez, la Sección Primera
del Consejo de Estado suspendió provisionalmente el Decreto 4444 de 2006, que
reglamentaba la prestación del servicio de Interrupción Voluntaria del Embarazo.
9. El 20 de octubre de 2009, el actual presidente de Red Futuro Colombia, señor
Aurelio Ignacio Cadavid López, solicitó la nulidad del Auto 279 de 2009, en que la
Corte Constitucional asumió la competencia sobre el cumplimiento de la sentencia
T-209 de 2008, en que se ampararon los derechos fundamentales de una
adolescente que quedó embarazada como consecuencia de una violación, a la
que el sistema de salud y de justicia le negaron el acceso a una interrupción del
embarazo.
10. El 21 de octubre de 2009, la Procuraduría General de la Nación emitió un
comunicado de prensa en donde anunciaba la interposición de un incidente de
nulidad en contra de la sentencia T-388 de 2009, que entre otras órdenes incluía la
de diseñar e implementar campañas de difusión de los derechos sexuales y
reproductivos. En el comunicado se hizo referencia a dicha orden como campañas
masivas de promoción del aborto, y con base en dicha afirmación, se sustentó,
entre otras argumentaciones, la solicitud de nulidad de la providencia.
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11. El 27 de octubre de 2009 la Procuraduría General de la Nación conceptuó dentro
de un proceso de acción popular, que la píldora de anticoncepción de emergencia
debía ser retirada del mercado por ser abortiva. De esta manera desconoció la
decisión del Consejo de Estado del 5 de junio de 2008, que declaró que éste es un
método anticonceptivo y no abortivo.
12. El 29 de octubre de 2009, el Procurador presentó el incidente de nulidad en contra
de la sentencia T-388 de 2009, en la que se protegieron los derechos humanos y
fundamentales de una mujer a quien se le negó y obstaculizó la decisión de
interrumpir su embarazo a pesar de que estaba en una de las causales reconocidas
en la sentencia C-355 de 2006.
13. El domingo 8 de Noviembre fue transmitido a través del programa Veredicto del
Canal Capital, un debate entre la Procuradora Delegada para la Infancia, la
Adolescencia y la Familia, Ilva Myriam Hoyos Castañeda, y la sicóloga Florence
Thomas, en el que la primera defendía la solicitud de nulidad de la sentencia T–
388 de 2009, y expresaba posiciones institucionales acerca del alcance de los
derechos humanos.
14. El 10 de noviembre de 2009, la Procuradora Delegada para la Infancia, la
Adolescencia y la Familia, declaró que las órdenes contenidas en la sentencia T–
388 de 2009, eran inaplicables hasta tanto no se decidiera la solicitud de nulidad.
15. El 12 de noviembre de 2009, el Presidente de la Corte Constitucional aclaró a la
ciudadanía que la sentencia T–388 de 2009 debía acatarse con independencia de
la interposición del recurso.
16. El 7 de diciembre de 2009, con ocasión de una propuesta de un candidato
presidencial de distribuir gratuitamente píldoras de anticoncepción de
emergencia, el Procurador General de la Nación declaró que éstas eran abortivas,
aun cuando el 5 de junio de 2008, el Consejo de Estado había dicho que el
Postinor 2, forma como se le conoce en Colombia, era un método anticonceptivo
de emergencia y no abortivo.
II. NORMAS VIOLADAS
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Constitución Política
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Artículo 2.
Son fines esenciales del Estado: servir a la comunidad, promover la prosperidad general y
garantizar la efectividad de los principios, derechos y deberes consagrados en la
Constitución; facilitar la participación de todos en las decisiones que los afectan y en la
vida económica, política, administrativa y cultural de la Nación; defender la independencia
nacional, mantener la integridad territorial y asegurar la convivencia pacífica y la vigencia
de un orden justo.
Las autoridades de la República están instituidas para proteger a todas las personas
residentes en Colombia, en su vida, honra, bienes, creencias, y demás derechos y
libertades, y para asegurar el cumplimiento de los deberes sociales del Estado y de los
particulares.
Artículo 84.
Cuando un derecho o una actividad hayan sido reglamentados de manera general, las
autoridades públicas no podrán establecer ni exigir permisos, licencias o requisitos
adicionales para su ejercicio.
Artículo 188.
El Ministerio Público será ejercido por el Procurador General de la Nación, por el Defensor
del Pueblo, por los procuradores delegados y los agentes del ministerio público, ante las
autoridades jurisdiccionales, por los personeros municipales y por los demás funcionarios
que determine la ley. Al Ministerio Público corresponde la guarda y promoción de los
derechos humanos, la protección del interés público y la vigilancia de la conducta oficial
de quienes desempeñan funciones públicas.
Artículo 277.
El Procurador General de la Nación, por sí o por medio de sus delegados y agentes, tendrá
las siguientes funciones:
1.
Vigilar el cumplimiento de la Constitución, las leyes, las decisiones judiciales
y los actos administrativos.
2.
Proteger los derechos humanos y asegurar su efectividad, con el auxilio del
Defensor del Pueblo.
-
Ley 734 de 2002
Artículo 34.
Son deberes de todo servidor público:
1. Cumplir y hacer que se cumplan los deberes contenidos en la Constitución, los
tratados de Derecho Internacional Humanitario, los demás ratificados por el
Congreso, las leyes, los decretos, las ordenanzas, los acuerdos distritales y
municipales, los estatutos de la entidad, los reglamentos y los manuales de
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funciones, las decisiones judiciales y disciplinarias, las convenciones colectivas, los
contratos de trabajo y las órdenes superiores emitidas por funcionario competente.
2. Cumplir con diligencia, eficiencia e imparcialidad el servicio que le sea
encomendado y abstenerse de cualquier acto u omisión que cause la suspensión o
perturbación injustificada de un servicio esencial, o que implique abuso indebido del
cargo o función.
15. Ejercer sus funciones consultando permanentemente los intereses del bien
común, y teniendo siempre presente que los servicios que presta constituyen el
reconocimiento y efectividad de un derecho y buscan la satisfacción de las
necesidades generales de todos los ciudadanos.
Artículo 35.
A todo servidor público le está prohibido:
1. Incumplir los deberes o abusar de los derechos o extralimitar las funciones
contenidas en la Constitución, los tratados internacionales ratificados por el
Congreso, las leyes, los decretos, las ordenanzas, los acuerdos distritales y
municipales, los estatutos de la entidad, los reglamentos y los manuales de
funciones, las decisiones judiciales y disciplinarias, las convenciones colectivas y los
contratos de trabajo.
24. Incumplir cualquier decisión judicial, fiscal, administrativa, o disciplinaria en
razón o con ocasión del cargo o funciones, u obstaculizar su ejecución.
Artículo 48.
Son faltas gravísimas las siguientes:
17. Actuar o omitir, a pesar de la existencia de causales de incompatibilidad,
inhabilidad y conflicto de intereses, de acuerdo con las previsiones constitucionales y
legales.
60. Ejercer las potestades que su empleo o función le concedan para una finalidad
distinta a la prevista en la norma otorgante.
III. FUNDAMENTOS
1. EL PROCURADOR GENERAL DE LA NACIÓN INCUMPLE LAS FUNCIONES
CONSTITUCIONALES QUE LE HAN SIDO ASIGNADAS Y ABUSA DEL PODER CON
QUE LO INVISTE LA CONSTITUCIÓN.
El Procurador General de la Nación es responsable disciplinariamente por incumplir con
sus funciones constitucionales de i) vigilar el acatamiento de la Constitución y las
decisiones judiciales, y ii) proteger los derechos humanos y garantizar su efectividad
(artículo 277 de la C. P.).
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Así mismo, el Procurador ha abusado de su función para crear confusión y conceptos
errados en la ciudadanía acerca de la existencia y el ejercicio de los derechos sexuales y
reproductivos, al imponer su concepción filosófica sobre el tema, desconociendo
expresamente las decisiones judiciales, que son de obligatorio cumplimiento para todos
los funcionarios.
Las conductas que llevan a hacer las anteriores afirmaciones, y el sustento jurídico que
genera responsabilidad disciplinaria en cabeza del supremo director del Ministerio
Público, se mostrarán en tres segmentos a continuación:
1. El Procurador General de la Nación desconoce la sentencia C-355 de 2006 y
la jurisprudencia constitucional de protección a los derechos fundamentales;
2. El Procurador General de la Nación no es garante -y ni siquiera aparenta
serlo- de los derechos sexuales y reproductivos;
3. El Procurador General de la Nación confunde a la ciudadanía acerca del
alcance de los derechos sexuales y reproductivos, y genera conceptos errados
en torno a éstos.
1.1.
El Procurador General de la Nación desconoce la sentencia C-355 de 2006 y
los derechos humanos y fundamentales vinculados intrínsecamente con la
opción de decidir la Interrupción Voluntaria del Embarazo.
Una de las funciones de rango constitucional que corresponde al Procurador General de
la Nación, es la de “vigilar el cumplimiento de la Constitución, las leyes, las decisiones
judiciales y los actos administrativos” (art. 277 C.P.). Esta función ha sido desconocida por
el actual director del Ministerio Público de manera constante y reiterada, en cuanto se
trata de vigilar el cumplimiento de la Constitución y de las decisiones judiciales de rango
constitucional. Para mostrar cómo el supremo director del Ministerio Público ha incurrido
en el incumplimiento de esta función, me referiré a A) la sentencia C-355 de 2006 sobre
aborto, B) la Circular 030 de 2009 expedida por el Procurador General de la Nación y C) la
solicitud de nulidad presentada por el Procurador en contra de la sentencia T-388 de
2009.
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A. El alcance de la sentencia C-355 de 2006: el derecho a la Interrupción
Voluntaria del Embarazo
La sentencia C-355 de 2006, en que se ejerció control de constitucionalidad sobre los
artículos 122, 123 (parcial), 124, modificados por el Art. 14 de la Ley 890 de 2004, y 32,
numeral 7, de la ley 599 de 2000 Código Penal, determinó que:
 La vida no es un bien jurídico absoluto: No existe un deber absoluto e
incondicional de proteger la vida en gestación; el bien jurídico vida debe ser
ponderado con otros derechos, principios y valores reconocidos en la Carta de
1991 y en otros instrumentos del derecho internacional de los derechos humanos.
(Considerando 6. La vida y los tratados internacionales de derechos humanos que
hacen parte del bloque de constitucionalidad.)
 Los derechos sexuales y reproductivos son derechos humanos: Diferentes
tratados internacionales son la base para el reconocimiento y protección de los
derechos reproductivos de las mujeres, que han sido finalmente reconocidos como
derechos humanos, y como tales, han entrado a formar parte del derecho
constitucional, soporte fundamental de todos los Estados democráticos.
(Considerando 7. Los derechos fundamentales de las mujeres en la Constitución
Política Colombiana y en el derecho internacional.)
 En materia penal el legislador penal está limitado por los principios, valores y
derechos constitucionales: El legislador no cuenta con una discrecionalidad
absoluta para definir los tipos penales, pues está limitado por los principios y
valores constitucionales, así como por los derechos constitucionales de las
personas; la dignidad humana, el libre desarrollo de la personalidad, la salud (física
y mental), y la vida e integridad de las personas. (Considerandos: 8. Los límites a la
potestad de configuración del legislador en materia penal, 8.1. El principio y el
derecho fundamental a la dignidad humana como límites a la libertad de
configuración del legislador en materia penal, 8.2. El derecho al libre desarrollo de
la personalidad como límite a la libertad de configuración del legislador en materia
penal.)
 El derecho a la salud integral y su función como límite a las injerencias estatales
o de terceros: El derecho a la salud es un derecho integral que incluye el concepto
de salud mental y física; y además, en el caso de las mujeres, se extiende a su
salud reproductiva.
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El derecho a la salud, también tiene el carácter de un derecho de defensa frente a
injerencias estatales o de terceros que lo amenacen o vulneren; dentro de este
ámbito se incluyen el derecho a planear la propia familia, el derecho a estar libre
de interferencias en la toma de decisiones reproductivas y el derecho a estar libre
de todas las formas de violencia y coerción que afecten la salud sexual y
reproductiva. (Considerando 8.3. La salud, así como la vida y la integridad de las
personas, como límite a la libertad de configuración del legislador en materia
penal.)
 El principio de proporcionalidad y la vulneración de los derechos fundamentales
de las mujeres: Es necesario aplicar un juicio de proporcionalidad para decidir en
qué hipótesis las medidas penales establecidas con el propósito de proteger la
vida del nasciturus, afectan de manera desproporcionada los derechos de la
mujer; de una parte están los diversos derechos, principios y valores
constitucionales en cabeza de la mujer gestante, y por el otro, la vida en gestación
como un bien de relevancia constitucional.
Del juicio de proporcionalidad realizado, resulta que una regulación penal que
sancione el aborto en todos los supuestos, significa la anulación de los derechos
fundamentales de la mujer, y en esa medida supone desconocer completamente su
dignidad y reducirla a un mero receptáculo de la vida en gestación, carente de
derechos o de intereses constitucionalmente relevantes que ameriten protección.
(Considerandos 8.5. La proporcionalidad y la razonabilidad como límites a la
libertad de configuración del legislador en materia penal, 9. La cuestión del aborto
en el derecho comparado).
 Una mujer puede optar por la Interrupción Voluntaria del Embarazo en tres
eventos específicos: i) cuando hay peligro para la vida o salud de la mujer
embarazada, ii) cuando hay malformaciones del feto incompatibles con la vida
extrauterina y iii) cuando el embarazo resulta de acceso carnal o acto sexual sin
consentimiento, abusivo o de inseminación artificial o transferencia de óvulo
fecundado no consentidas, o de incesto.
 No hay objeción de conciencia estatal ni de personas jurídicas frente a la
Interrupción Voluntaria del Embarazo: La objeción de conciencia no es un derecho
del cual son titulares las personas jurídicas, o el Estado. Sólo es posible reconocerlo
a personas naturales, con base en una convicción de carácter religioso
debidamente fundamentada, y no puede implicar el desconocimiento de los
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derechos fundamentales de las mujeres; (Considerandos: 10. Examen del caso
concreto, 10.1. La inexequibilidad de la prohibición total del aborto.).
 La regulación en materia de Interrupción Voluntaria del Embarazo no es
necesaria y de existir no puede ser desproporcionada frente a los derechos
fundamentales de las mujeres: no es necesaria, para una inmediata aplicación,
una reglamentación de los tres eventos en que se permite la Interrupción
Voluntaria del Embarazo. Lo anterior, no impide que el legislador o el regulador en
el ámbito de la seguridad social en salud, en cumplimiento de sus deberes y dentro
de las respectivas órbitas de competencia, adopten decisiones respetuosas de los
derechos constitucionales de las mujeres, como por ejemplo, aquellas
encaminadas a regular su goce efectivo en condiciones de igualdad y de seguridad
dentro del sistema de seguridad social en salud. En estos casos, tampoco se
pueden establecer por el legislador requisitos que establezcan cargas
desproporcionadas sobre los derechos de la mujer ni barreras que impidan la
práctica del aborto (Considerandos: 10. Examen del caso concreto, 10.1. La
inexequibilidad de la prohibición total del aborto.)
 Vigencia inmediata de la sentencia C-355 de 2006: Para todos los efectos
jurídicos, las decisiones adoptadas en la sentencia tienen vigencia inmediata, y
para el goce de los derechos protegidos no se requiere de desarrollo legal o
reglamentario. (Considerando 11. Consideraciones finales.)
Como se puede ver, en la sentencia C–355 de 2006, la Corte Constitucional determinó
que la vida, como bien constitucional, debía ponderarse con los derechos sexuales y
reproductivos, y los derechos fundamentales íntimamente relacionados (dignidad
humana, vida, salud, integridad física, libre desarrollo de la personalidad) de las mujeres.
Como resultado de esta ponderación, la Corte concluyó que la prohibición impuesta a las
mujeres de decidir o no la Interrupción Voluntaria del Embarazo cuando éste no fue
consentido, cuando pone en riesgo la salud o vida de la mujer o cuando el feto presenta
malformaciones incompatibles con la vida extrauterina, vulnera los derechos humanos y
fundamentales de las mujeres.
En la sentencia C-355 de 2008, la Corte i) realizó ponderación entre bienes y derechos de
rango constitucional, y estableció el alcance del bien jurídico vida, así como de los
derechos sexuales y reproductivos, ii) determinó en qué eventos correspondía, de forma
exclusiva a la mujer, la decisión de Interrumpir Voluntariamente el Embarazo, iii)
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estableció la imposibilidad para Estado, personas jurídicas y personas naturales, de
establecer obstáculos para llevar a cabo la Interrupción Voluntaria del Embarazo decidida
por la mujer, y iv) decidió que el derecho a decidir la Interrupción Voluntaria del
Embarazo no requería regulación, y que de existir, debía ser respetuosa de los derechos
fundamentales de las mujeres y no establecer cargas desproporcionadas sobre los
derechos de esta ni barreras que impidan la práctica del aborto.
La sentencia C–355 de 2006 tiene jerarquía constitucional porque es el resultado de la
confrontación de una disposición del ordenamiento legal con la Constitución y en ella se
estableció el alcance de los derechos fundamentales y humanos de la mujer por parte de
la autoridad instituida para ello; es decir, la Corte Constitucional. Una vez que la Corte
Constitucional fija el alcance de un derecho, ninguna autoridad del Estado puede ejercer
su función desconociendo ese alcance o limitándolo.
En contra de las reglas jurídicas fijadas en la sentencia C–355 de 2006, específicamente en
cuanto se trata del alcance de los derechos fundamentales y humanos de las mujeres, ha
actuado el Procurador General de la Nación, supremo jefe del Ministerio Público,
precisamente encargado de velar por el cumplimiento de la Constitución y de los
derechos humanos.
El desconocimiento de la Constitución y del alcance de los derechos fundamentales y
humanos de las mujeres, y el consecuente incumplimiento de las funciones del
Procurador General de la Nación, quedan evidenciados con la expedición de la Circular
030 de 2009 y el ataque infundado a la sentencia T-388 de 2009 en la que se protegieron
los derechos de una mujer a quien se le obstaculizó el ejercicio de su derecho a decidir la
Interrupción Voluntaria del Embarazo.
B. La Circular 030 de 13 de mayo de 2009 desconoce el alcance de los
derechos fundamentales establecidos en la sentencia C- 355 de 2006
La Circular 030 de 13 de mayo de 2009, es un acto administrativo dirigido a todos los
funcionarios de la Procuraduría General de la Nación con funciones preventivas, de
intervención, de control de gestión y disciplinarias, así como a todos los miembros del
Ministerio Público que ejerzan funciones relacionadas con el cumplimiento de la
sentencia C-355 de 2006.
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La circular además de tener un amplio rango de sujetos destinatarios, pues no sólo se
dirige a los funcionarios de la Procuraduría sino también a los demás del Ministerio
Público (Defensoría del Pueblo y Personeros Municipales), contiene directrices de
obligatorio cumplimiento para estos funcionarios. No se trata de una mera
recomendación, sino de un acto vinculante y altamente compulsivo para los funcionarios
del Ministerio Público.
Si bien la circular tiene por objeto establecer las directrices que deben guiar el ejercicio
de las funciones del Ministerio Público en cumplimiento de la sentencia C-355 de 2006,
la circular no se apegó estrictamente a las directrices constitucionales establecidas en
tal sentencia, como debió hacerlo. El Procurador General de la Nación desconoció las
reglas jurisprudenciales sentadas y el alcance de los derechos fundamentales y
humanos, establecido por la Corte Constitucional.
De una parte, el Procurador General de la Nación, jamás reconoce que la Interrupción
Voluntaria del Embarazo constituye uno de los derechos sexuales y reproductivos, es
decir, parte de los derechos humanos. Aspecto que por sí mismo es grave porque sí el
Procurador General de la Nación es el encargado de proteger y garantizar la efectividad
de los derechos humanos, no puede esperarse un ejercicio idóneo de la función, si al
objeto de protección no le es reconocida la entidad de derecho; es decir ¿si la
Interrupción Voluntaria del Embarazo en los casos indicados por la Corte Constitucional
no es considerada derecho humano, cómo puede el garante de los derechos humanos
hacer efectivo el derecho, y más aún, garantizar la prevalencia de la Constitución?
La Interrupción Voluntaria del Embarazo fue reconocida como parte de los derechos
sexuales y reproductivos en la sentencia C-355 de 2009, como se mostró en el apartado
anterior, por lo tanto, ninguna autoridad en Colombia puede desconocer la existencia de
derechos, ignorarla o restringir el alcance que le ha fijado la Corte Constitucional, en
tanto es éste el órgano que tiene competencia para interpretar con autoridad la
Constitución. En otras palabras, le corresponde a la Corte Constitucional, y no al
Procurador, determinar si el aborto es garantizado por nuestra Constitución. Al mismo
tiempo, le corresponde al Procurador garantizar el respeto y eficaz cumplimiento de
aquellos derechos definidos por la Corte Constitucional sin lugar a criticar o desconocer
las decisiones de la Corte Constitucional.
Además de desconocer la entidad de derecho sexual y reproductivo que le corresponde a
la Interrupción Voluntaria del Embarazo, en la circular 030 de 2009, el Procurador General
de la Nación, también desconoce la sentencia C–355 de 2006, al ordenar a los
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funcionarios de la Procuraduría, que en ejercicio de la función preventiva, requieran
periódicamente a la Superintendencia Nacional de Salud y a las entidades territoriales, a
impartir las directrices para “que se garanticen los derechos fundamentales de los seres
humanos por nacer, así como de las madres gestantes que libremente opten por dar
continuidad al embarazo” aunque se encuentren en las circunstancias señaladas por la
sentencia C–355 de 2006.
La instrucción dirigida a los organismos de salud de impartir directrices que garanticen
los derechos fundamentales de los seres humanos por nacer, desconoce la sentencia C–
355 de 2006, porque ésta indicó de forma precisa y clara que la vida en gestación es un
bien constitucionalmente protegido, pero no estableció que existiera un derecho
fundamental a la vida del nasciturus, por lo que si no existe un derecho fundamental a la
vida del no nacido, no puede hablarse de ningún otro derecho fundamental de los no
nacidos, y menos se puede hacer uso del poder de vigilancia preventiva sobre las
autoridades nacionales y territoriales para instruirlas en el sentido de proteger derechos
inexistentes en detrimento de los derechos de las mujeres claramente reconocidos.
El Procurador General de la Nación se atribuye una competencia que no le corresponde al
afirmar qué es y qué no es un derecho fundamental. Esta definición corresponde a la
Constitución y a los tratados internacionales de derechos humanos, y el alcance de los
mismos lo fija con autoridad la Corte Constitucional, que es la interprete autorizada de la
Constitución. En consecuencia, por este aspecto es claro que el director del Ministerio
Público no sólo ha incumplido su deber de velar por la garantía de la Constitución y las
decisiones judiciales, que en este caso interpretan la norma superior, sino que a la vez
que se ha extralimitado en el ejercicio de sus funciones desconociendo sus deberes y las
prohibiciones que expresamente se consagran en el numeral 1 del artículo 34 y numeral 1
del artículo 35 de la ley 734 de 2002.
La confusión que genera el Procurador, entre bien constitucional protegido y derecho, y la
atribución de este último al no nacido, tiene gran entidad porque no sólo es la autoridad
encargada de vigilar la conducta de todos los funcionarios del país, y en este sentido sus
directrices tienen efecto en el ejercicio de sus funciones, sino que además como defensor
de los intereses de la sociedad, el alcance de sus conceptos y directrices trasciende el
ámbito de la función pública, para generar posturas en los miembros de la sociedad.
En este contexto, tanto funcionarios públicos como particulares, se preguntarán en el
momento en que conozcan el caso de una mujer que quiera interrumpir su embarazo y se
encuentra en las circunstancias establecidas por la sentencia C–355 de 2006, ¿cómo debo
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proteger los derechos del no nacido?, ¿cómo evito que la mujer aborte? Las implicaciones
de las directrices impartidas por el Procurador conducen necesariamente a una gran
confusión que afecta los derechos humanos y fundamentales de las mujeres, al entrabar
aun más en la práctica, la realización de Interrupciones Voluntarias del Embarazo a partir
de una anotación errada, por no decir de mala fe, de carácter jurídico.
Al finalizar el texto, y luego de reiterar la importancia de las directrices dadas en cada uno
de los ámbitos de acción de la Procuraduría (preventivo, de intervención, de gestión y
disciplinario), y de indicar la realización de talleres de capacitación sobre la sentencia C355 de 2006, el Procurador General de la Nación solicita “a los servidores del Ministerio
Público su mayor compromiso y disposición en defensa y protección de los derechos
fundamentales de las mujeres gestantes, del derecho a la vida del no nacido y del
derecho de los objetores de conciencia, así como en la vigilancia del cumplimiento de los
deberes de los funcionarios públicos o de las personas que cumplen funciones públicas
relacionados con las directrices de esta Circular” (negrillas fuer del texto).
Ya que el objeto de esta circular es establecer las directrices para el ejercicio de las
funciones del Ministerio Público en cumplimiento de la sentencia C-355 de 10 de mayo de
2006, es decir, para el ejercicio de la función de Ministerio Público en los eventos en que
está en juego el derecho a la Interrupción Voluntaria del Embarazo en los casos señalados
por la Corte Constitucional, la discusión acerca de la existencia o no de derechos del no
nacido, correspondía a la Corte Constitucional, que plasmó su criterio en la referida
sentencia de constitucionalidad. La función del Procurador General de la Nación es la de
vigilar el cumplimiento de la Constitución y de las decisiones judiciales, y garantizar la
efectividad de los derechos humanos. En esta labor debe atenerse a los parámetros
sentados por la Constitución, los tratados internacionales de derechos humanos y los
órganos que con autoridad interpretan éstos dos, y no puede injerir en dicha función al
atribuirse la capacidad de señalar el alcance ni los límites de los derechos. Mucho menos
puede el Procurador establecer una visión acerca de los derechos que desconozca los
pronunciamientos constitucionales, e imponer esta visión sobre todos los funcionarios del
Ministerio Público, para que estos a su vez cumplan sus funciones con base en directrices
erradas.
C. EL PROCURADOR REABRE DEBATES JURÍDICOS CERRADOS POR DECISIONES
JUDICIALES EN DETRIMENTO DE LOS DERECHOS HUMANOS
15
En la sentencia T-388 de 2009, la Sala Octava de Revisión se pronunció en el caso de una
mujer que optó por interrumpir su embarazo debido a que el feto presentaba
malformaciones incompatibles con la vida extrauterina, pero a la que le fue obstaculizada
la realización del procedimiento, primero por el personal médico que exigió una
autorización judicial, y luego por el sistema judicial pues el juez de primera instancia que
conoció la acción de tutela instaurada, se declaró impedido para fallar con base en una
objeción de conciencia, y luego, cuando no fue admitido su impedimento, resolvió el
asunto con fundamento en los argumentos expuestos en la declaración de impedimento.
La vulneración de los derechos de la mujer sólo se detuvo con el pronunciamiento de la
Jueza de segunda instancia, luego del cual se realizó la Interrupción Voluntaria del
Embarazo.
Aunque para el momento en que la Corte Constitucional profirió su sentencia ya se había
realizado la Interrupción Voluntaria del Embarazo, y por lo tanto había carencia actual de
objeto, por considerarlo un asunto de especial relevancia constitucional y debido a que el
caso concreto de la mujer evidenciaba la existencia de obstáculos para que la
Interrupción Voluntaria del Embarazo, como parte de los derechos sexuales y
reproductivos, fuera efectivamente garantizada en los términos establecidos por la
sentencia C-355 de 2006, la Corte emitió un pronunciamiento de fondo.
En la sentencia T-388 de 2009, la Corte reiteró el análisis jurídico realizado en la sentencia
C-355 de 2006, es decir, la prevalencia de los derechos sexuales y reproductivos, y
fundamentales de la mujer, sobre la vida del nasciturus como bien constitucionalmente
protegido, pero además, identificó una serie de prácticas indebidas y obstáculos, tanto en
el sistema de salud como en el sistema judicial, que impedían o dilataban el ejercicio de
su derecho a Interrumpir el Embarazo.
Además de reiterarse la prohibición de imponer barreras al ejercicio del derecho, se
reiteró que la objeción de conciencia en estos casos está permitida únicamente para el
personal médico directamente involucrado en el procedimiento, y no aplica ni a personal
ajeno al procedimiento, personal administrativo, ni a los jueces que deciden casos de
tutela. Se hizo énfasis en la importancia del secreto profesional médico y se puntualizó
que las menores de 14 años son plenamente capaces y autónomas para optar por una
interrupción del embarazo.
En esta sentencia, entre otras decisiones, la Corte Constitucional ordenó al Ministerio de
la Protección Social, de Educación Nacional y a la Procuraduría General de la Nación,
16
diseñar e implementar campañas de difusión y promoción de los derechos sexuales y
reproductivos en donde se incluya información sobre la sentencia C–355 de 2006.
Como se puede ver, en la sentencia T-388 de 2009, la Corte Constitucional al detectar los
obstáculos que el sistema de salud y el sistema judicial imponían para el ejercicio efectivo
de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres colombianas, emitió una serie de
órdenes que se encaminaban a la remoción de dichos obstáculos, y a la divulgación de
información sobre estos derechos.
Sin reparo en la importancia que este pronunciamiento tiene para los derechos humanos
de las mujeres, el Procurador General de la Nación, que no fue parte en el proceso de
tutela, solicitó anular dicha sentencia con argumentos que dejan a la vista su intención de
aprovechar su posición como cabeza del Ministerio Público para reabrir el debate sobre el
derecho al aborto en ciertas circunstancias, cerrado con la sentencia C-355 de 2006, y su
posición no jurídica en contra del avance en la garantía de los derechos sexuales y
reproductivos.
Aunque dudo de la legitimidad por activa del Procurador General de la Nación, para
atacar una sentencia de tutela proferida en un proceso en que no fue parte, no ataco el
uso de una figura procesal de la que puede hacer uso cualquier ciudadano. Lo que se
pone de presente, es que el Procurador General de la Nación en uso de sus atribuciones
constitucionales, que incluyen la defensa y garantía de los derechos humanos y de los
intereses de la sociedad, pretenda la nulidad de una sentencia que busca garantizar el
ejercicio efectivo de los derechos sexuales y reproductivos, y además lo haga con base
en argumentos que no evidencian sino su intención de retrotraer los avances logrados
en la materia.
La actuación hostil del Procurador en contra de los derechos sexuales y reproductivos,
concretamente en relación con el avance realizado por la sentencia T-388 de 2009 fue
clara desde el momento en que su despacho emitió el comunicado de prensa anunciando
la solicitud de nulidad de la sentencia el 21 de octubre de 2009 3. En este comunicado, el
Procurador, invocando su condición de representante de la sociedad y garante de los
derechos, señaló que presentaría un incidente de nulidad en contra de la sentencia T-388
de 2009, porque:
“1. La orden de dicha providencia al Ministerio de la Protección Social, al
Ministerio de Educación Nacional, a la Defensoría del Pueblo y a la
3
Disponible en: http://www.procuraduria.gov.co/html/noticias_2009/noticias_601.htm
17
Procuraduría General de la Nación, para diseñar y poner en movimiento
“campañas masivas de promoción” del aborto como derecho supera los
lineamientos jurisprudenciales de la misma Corte en la sentencia C-355 de
2006, cuando mantuvo al aborto (sic) su carácter de delito con tres
excepciones, sin conferirle la naturaleza de derecho.
(…)
Al mismo tiempo, el Procurador General de la Nación solicitará a la Sala
Plena de la Corte adicionar la sentencia T–388 de 2009, en cuanto al
procedimiento para la práctica del aborto en las condiciones y excepciones
establecidas por la sentencia C–355 de 2006, en razón de que la Sección
Primera del Consejo de Estado en providencia del pasado 15 de octubre
ordenó la suspensión provisional del Decreto 4444 de 2006” (Énfasis fuera
del texto).
La alusión a campañas de promoción del aborto como derecho, es una afirmación
carente de sustento y negligente frente a la sociedad. Carece de sustento porque la
Corte Constitucional ordenó la realización de campañas de promoción de los derechos
sexuales y reproductivos, no del aborto. Es negligente, porque el Procurador General de
la Nación como alto funcionario público, encargado de defender los derechos de la
sociedad, no puede, ni siquiera por ignorancia –que no existe en virtud de su formación
y su cargo– generar confusión en la sociedad y crear caos, al anunciar que se opondrá a
una orden judicial que no existe.
Tampoco es acertado que el Procurador desconozca la calidad de derecho sexual y
reproductivo que se le dio al aborto en ciertos casos por la Corte Constitucional. Es a esta
Corte a la que corresponde definir el alcance de los derechos, y el Procurador como
garante de los derechos no puede imponer interpretaciones restrictivas frente a las
hechas por la Corte Constitucional.
No son de poca relevancia estas afirmaciones erradas y estrategias de confusión utilizadas
por el Procurador, porque en ejercicio de su función, le habla no sólo a los funcionarios
que están bajo su dirección, sino a los servidores públicos que están sometidos a su poder
disciplinario y a la sociedad. ¿Cómo no creer en lo que dice el Procurador General de la
Nación, si lo dice él, se preguntarán las personas sin formación jurídica?
Emitido el comunicado, el Procurador presentó el escrito solicitando la nulidad de la
sentencia T-388 de 2009, en el que nuevamente deja ver su interés en retrotraer los
avances alcanzados en materia de derechos sexuales y reproductivos, al tratar de
enmarcar dentro de la violación del debido proceso -única causal para solicitar la nulidad
de una sentencia de la Corte Constitucional-argumentos que sólo pretenden reabrir un
18
debate cerrado por el máximo tribunal constitucional en la sentencia C-355 de 2006 y
reiterada en las sentencias T-209 de 2008 y T-388 de 2009.
Al referirse al presunto defecto fáctico en que habría incurrido la Sala de Revisión de la
Corte Constitucional que expidió la sentencia T-388 de 2009, el Procurador General de la
Nación, señaló que los aspectos que debían comprobarse probatoriamente por el juez
constitucional en sede de revisión y que por no haber sido objeto de prueba, configuran
la alegada vía de hecho, eran entre otros los siguientes:
 El supuesto de la malformación que hacía inviable la vida extrauterina.
 Los motivos de la realización de una cesárea para poner término al embarazo.
 El estado de avance de la gestación.
Dado que el caso concreto que dio origen a la sentencia T-388 de 2009, era el de una
mujer que se encontraba en el supuesto de una malformación del feto incompatible con
la vida, el único requisito que se le podía exigir para hacer efectiva la realización de la
interrupción del embarazo, era el certificado de un médico que acreditara la existencia de
dichas malformaciones. El Procurador General de la Nación, en su solicitud de nulidad de
la sentencia T-388 de 2009, adopta una postura que entraba la efectividad del derecho, al
pretender que el juez de tutela exija requisitos adicionales al certificado médico, es decir,
requisitos inconstitucionales.
No correspondía al juez determinar si la certificación médica era correcta o no, ni cuál era
el procedimiento para llevar a cabo la IVE o cómo fue el avance de la gestación; porque
los requisitos para acceder al procedimiento son taxativos y tienen origen constitucional,
y porque estos asuntos son ajenos al ámbito de la sentencia C-355 de 2006, y más bien
propios de la ciencia médica.
Otro de los cargos elevados por el Procurador en contra de la sentencia T-388 de 2009, tal
como lo anunció en el comunicado del 21 de octubre de 2009, consistía en que la orden
de diseñar e implementar campañas masivas de promoción de los derechos sexuales y
reproductivos y del conocimiento de la sentencia C-355 de 2006, no tendría justificación
en la parte considerativa de la sentencia de tutela.
Además de que la orden de diseñar e implementar campañas masivas de promoción de
los derechos sexuales y reproductivos tenía justificación en los obstáculos al ejercicio
efectivo de estos derechos, detectados en la sentencia T-388 de 2009, el Procurador
desconoce con esta actuación sus funciones de vigilar el cumplimiento de la Constitución,
19
de proteger los derechos humanos y asegurar su efectividad, puesto que la orden emitida
por la Corte, tiene sustento constitucional directo, ya que de acuerdo con el artículo 67 de
la Constitución, “la educación formará al colombiano en el respeto a los derechos
humanos”, derechos entre los cuales se encuentran los sexuales y reproductivos.
Igualmente, el derecho a recibir educación en derechos sexuales y reproductivos
encuentra respaldo en tratados internacionales de derechos humanos. Así, la Convención
sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer 4, en su artículo
10, establece la obligación para los Estados Partes de adoptar todas las medidas
apropiadas para eliminar la discriminación contra la mujer, a fin de asegurarle la igualdad
de derechos con el hombre en la esfera de la educación y en particular para asegurar, en
condiciones de igualdad entre hombres y mujeres entre otros, el “acceso al material
informativo específico que contribuya a asegurar la salud y el bienestar de la familia,
incluida la información y el asesoramiento sobre planificación de la familia” (literal h).
Así mismo, en la Declaración y Programa de Acción de Viena, aprobada en la Conferencia
Mundial de Derechos Humanos, en el numeral 41 del acápite II, se reconoció: la
importancia del disfrute por la mujer del más alto nivel de salud física y mental durante
toda su vida. En el contexto de la Conferencia Mundial sobre la Mujer y la Convención
sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, así como de la
Proclamación de Teherán de 1968, la Conferencia reafirma, sobre la base de la igualdad
entre hombres y mujeres, el derecho de la mujer a tener acceso a una atención de salud
adecuada y a la más amplia gama de servicios de planificación familiar, así como a la
igualdad de acceso a la educación a todos los niveles.”
Oponerse al desarrollo e implementación de campañas de derechos sexuales y
reproductivos, no solamente implica oponerse a la misma Constitución y a los tratados
sobre derechos humanos ratificados por Colombia, sino que además desconoce que, de
forma previa, la Corte Constitucional ya había reconocido en la sentencia C-355 de 2006,
que el derecho a la educación “incorpora el derecho de las mujeres a recibir educación
sobre salud reproductiva, así como a que se les permita ejercer el derecho a decidir el
número de hijos y espaciamiento de ellos de manera libre y responsable”, como parte de
los derechos sexuales y reproductivos.
De la oposición a una obligación constitucional, asentada en tratados de derechos
humanos y reafirmada por la jurisprudencia constitucional, no puede inferirse sino un
4
Aprobada mediante la Ley 51 de 2 de junio de 1981.
20
incumplimiento de funciones por parte del Procurador General de la Nación. Lo
expuesto permite evidenciar que el Procurador General está incurriendo en una falta
disciplinaria al desconocer sus deberes, específicamente el contenido del numeral 1 del
artículo 34 y la prohibición del numeral 1 del artículo 35 de la ley 734 de 2002, lo que en
términos del artículo 50 de la misma ley se constituye en una falta disciplinaria grave.
De otra parte, el Procurador General de la Nación, pretendió a través de su solicitud de
nulidad, convertir las consideraciones constitucionales hechas en torno a la imposibilidad
para los jueces de objetar conciencia, en una especie de persecución por motivos
religiosos al juez de tutela de primera instancia que se declaró impedido y negó la
protección de los derechos fundamentales. Al juez de primera instancia se le niega la
posibilidad de usar la objeción de conciencia, por tratarse de una función que debe
ejercer con base en la constitución y la ley, y no por profesar un determinado credo o
religión.
Además simplifica el problema de la implementación de la sentencia C-355 de 2006, a
partir de las múltiples declaraciones de impedimento que los jueces realizan con base en
convicciones personales, para no ordenar la protección de los derechos fundamentales de
las mujeres a quienes se les obstaculiza la práctica de una Interrupción Voluntaria del
Embarazo. El Procurador dice en su escrito, lo siguiente:
“Ahora bien, la regla general establecida en la Sentencia T-388 de 2009 en lo
relativo al derecho de objeción de conciencia y en especial a la exclusión de la
titularidad de este derecho a los funcionarios públicos como los jueces, implica
una violación directa a la Constitución, por cuanto:
(…)
(iv) La reglamentación adoptada por la Corte Constitucional sobre la
objeción de conciencia establece una discriminación fáctica hacia los
creyentes de ciertos credos y quienes rechazan la práctica del aborto por
razones ideológicas. En efecto, al prohibir absolutamente el derecho a la
objeción de conciencia de los funcionarios judiciales inhabilita tácitamente a
las personas que por motivos ideológicos o religiosos rechazan el aborto
para el ejercicio de la jurisdicción. En otras palabras, según la Sentencia C-388
de 2009 no se puede ser juez y, al mismo tiempo, profesar religiones como la
católica (recuérdese que en esta religión la cooperación activa con el aborto es
causal de excomunión) o los diversos credos cristianos. La Sentencia C-355 de
2006 establece una carga jurídica demasiado onerosa para los jueces que se
ven obligados a abdicar de su religión para ejercer la judicatura o a
renunciar a la judicatura para profesar la religión.
(v) Por adoptar una prohibición absoluta, esta prohibición atenta contra el
núcleo esencial de la libertad de conciencia. La anulación práctica de este
derecho es, por lo demás, innecesaria y, por ende, inconstitucional. En efecto,
el reconocimiento del derecho a la objeción de conciencia por parte de un juez
no supone la anulación del hipotético «derecho al aborto». El ordenamiento
21
jurídico ha previsto varias formas de afrontar los casos de inhabilidad e
impedimento de los funcionarios judiciales. No hay diferencia sustancial entre
la imposibilidad de ser imparcial por causa de parentesco o enemistad y la
imposibilidad de fallar por motivos ideológicos. La simple remisión del caso a
un juez que no se ha declarado impedido garantizaría los derechos de todos.
(…)“ (Énfasis fuera del texto)
El Procurador no sólo intenta reabrir, sin justificación en violaciones al debido proceso, el
debate cerrado por una decisión judicial, sino que además pretende desplazar el debate
de lo estrictamente jurídico a una supuesta discriminación para los jueces y funcionarios
públicos que profesan algunas religiones. Olvida el señor Procurador, que los jueces, en
ejercicio de sus funciones no actúan simplemente como personas naturales, sino que
actúan como funcionarios públicos, y que en ejercicio de su función de administrar
justicia, están sometidos en primer lugar, a la Constitución, y que ésta garantiza la
efectividad de los derechos fundamentales de todas las personas, por supuesto
incluyendo a las mujeres, y la prevalencia de los tratados de derechos humanos
ratificados por el Congreso en el ordenamiento interno.
Tampoco puede el Procurador General de la Nación desconocer que los impedimentos e
inhabilidades son figuras de aplicación restrictiva con base en causales taxativas, ni puede
minimizar el impacto que tiene sobre los derechos fundamentales y humanos de una
mujer, el que un juez que está instituido para protegerlos, se niegue a fallar una tutela o
la falle en forma desfavorable a la peticionaria con base en argumentos no jurídicos.
El marco constitucional de acuerdo con el cual las mujeres colombianas tienen derecho a
que en los eventos señalados por la Corte Constitucional se les realice una Interrupción
Voluntaria del Embarazo, es claro. No se les puede imponer a las mujeres, sortear,
además de los obstáculos que impone el sistema de salud, las mismas trabas en el
sistema judicial, y la ineficacia en la prestación de un servicio de administración de
justicia, por dilaciones en la resolución del caso, generadas por la extralimitación de los
jueces en el uso de los impedimentos con base en causales inexistentes. La acción de
tutela está diseñada para proteger de forma efectiva los derechos fundamentales de las
personas.
En consecuencia, la interpretación que escoge el funcionario encargado de velar por la
efectividad de los derechos humanos, no hace más que hacer invisibles los obstáculos que
afrontan las mujeres al ejercer su derecho de interrumpir el embarazo, y fomentar las
prácticas indebidas en los funcionarios judiciales encargados precisamente de velar por la
efectividad de la Constitución y la protección de los derechos frente a un caso concreto.
22
Más allá es interesante preguntarse cuál es la consecuencia que el argumento esgrimido
por el Procurador, de que no se puede exigir a los funcionarios públicos que renuncien a
su religión para poder ejercer sus funciones, tiene sobre sí mismo. A mi juicio, el
Procurador está admitiendo que no está dispuesto a renunciar a sus creencias católicas
durante el ejercicio de su función pública, y por lo tanto aceptando tácitamente que no es
la persona indicada para garantizar el cumplimiento de los derechos sexuales y
reproductivos que su religión rechaza. Si la argumentación del Procurador fuera aceptada,
y la prohibición de objeción de conciencia se considerara una persecución a los credos o
religión del funcionario, podríamos llegar al punto en el que un funcionario público, de las
características y jerarquía del Procurador General de la Nación, pudiera objetar
conciencia para no ejercer su función constitucional de garante de los derechos humanos,
cada vez que considera que estos van en contra de sus creencias religiosas.
Tomemos en cuenta la doctrina proferida por el Procurador, en su calidad de ciudadano y
académico, de acuerdo con la cual:
“Para rescatar los derechos humanos de este secuestro al que me he venido refiriendo,
no bastan las buenas intenciones; es necesario una vuelta al derecho natural católico
que funda las normas jurídicas en las relaciones concretas de las personas; es la única
solución que les queda a quienes tienen la misión de actuar prudentemente en un
orden justo. Habría que desandar el trayecto de la secularización de la cultura
occidental y derrotar al mundo que encierra a los derechos del hombre en el círculo
ideológico de la democracia y el liberalismo y el proyecto emancipador que
encarnan” 5,
Si aceptamos la objeción de conciencia para funcionarios y admitimos que no permitir
esta objeción implicaría una persecución inadmisible, llegaríamos al punto en el que el
Procurador General de la Nación podría objetar conciencia para no garantizar los
derechos humanos que no concuerden con su visión natural católica de los mismos,
vaciando de contenido el concepto mismo de derecho humanos, democracia y
liberalismo. Esta misma conclusión puede deducirse de otra de sus aseveraciones frente
al origen y significado de los derechos humanos, que como Procurador, tiene la obligación
de garantizar:
“No es que alguien con formación tomista esté desconociendo la existencia de los
derechos humanos; por el contrario, ellos son tan antiguos como el hombre. Dios
terminó la creación adoptando al hombre como hijo suyo y dotándolo de los derechos
correspondientes a su dignidad. Él es su autor, no la Revolución Francesa, ni la
Declaración de las Naciones Unidas, ni los tratados internacionales; ellos son el
instrumento de una ideología que en nada se parece a la tradición tomista sobre los
derechos naturales; no olvidemos que toda concepción de dichos derechos depende de
5
ORDOÑEZ MALDONADO, Alejandro. El nuevo derecho. El nuevo ordenamiento mundial y la revolución
cultural. Ediciones Doctrina y Ley Ltda. Bogotá, 2007, Pág. 47.
23
la noción de persona humana que se acepte, y como los católicos advertimos valores
humanos y divinos en ella, comprenderemos que esta misma dualidad afectará a
aquellos; cosa muy diferente será la concepción de derechos humanos para quien le
niega al hombre su trascendencia, su fin último, o para quienes niegan que las
personas tienen una naturaleza, etc… Nunca antes en la historia de la humanidad se
habían desconocido tanto los derechos humanos, pero también nunca antes la
ausencia de Dios en una sociedad había sido tan generalizada; por eso la única
manera de garantizar –los derechos humanos- es defendiendo los derechos de Dios en
la sociedad.” 6
Sólo nos queda preguntarnos qué clase de Procurador General de la Nación, puede ser un
funcionario que no está dispuesto a deshacerse de los mandatos de su religión en el
ejercicio de su cargo, y que tampoco cree en los derechos humanos de las Naciones
Unidas y los tratados internacionales. El Procurador, como defensor de los intereses de la
sociedad, da prevalencia a sus creencias y repudia las demás opciones, lo que desconoce
la libertad de cultos y sus responsabilidades constitucionales.
1.2.
El Procurador General de la Nación no es imparcial, ni aparece como tal ante
la ciudadanía, en materia de derechos sexuales y reproductivos.
Los funcionarios públicos deben ser imparciales y deben parecerlo ante la ciudadanía.
Esta es la conclusión que se desprende de la jurisprudencia de la Corte Interamericana de
Derechos Humanos y de la Corte Europea de Derechos Humanos en materia de
imparcialidad judicial, acogida por la Corte Constitucional, y aplicable a todo funcionario
público, de acuerdo con el diseño del Estado Social de Derecho colombiano y los
pronunciamientos del Comité de Derechos Humanos y del Comité para la Eliminación de
la Discriminación contra la Mujer.
La imparcialidad tiene un aspecto subjetivo y otro objetivo. El primero, consiste en la
inexistencia de un prejuicio personal. El segundo, implica la existencia de garantías
suficientes de índole objetiva que permitan erradicar toda duda que la comunidad pueda
albergar sobre la ausencia de imparcialidad 7. Esta garantía de imparcialidad está ligada
6
ORDOÑEZ MALDONADO, Alejandro. El nuevo derecho. El nuevo ordenamiento mundial y la revolución
cultural. Ediciones Doctrina y Ley Ltda. Bogotá, 2007, Pág.46.
7
Corte Europea de Derechos Humanos: Piersack v. Belgium, sentencia del 1 de octubre de 1982; De Cubber
v. Belgium, sentencia del 26 de octubre de 1984;Fey v. Austria, sentencia del 24 de febrero de 1993; Pullar v.
United Kingdom, sentencia del 10 de junio de 1996; Remli v. France, sentencia del 23 de abril de 1996;
Morris v. The United Kingdom, sentencia del 26 de febrero de 2002; Pabla ky v. Finland, sentencia del 22 de
junio de 2004.
Corte Interamericana de Derechos Humanos: Caso Herrera Ulloa vs. Costa Rica, sentencia del 2 de julio de
2004; Caso Palamara Iribarne vs. Chile, sentencia del 22 de noviembre de 2005; Caso Apitz Barbera y otros
24
directamente con el derecho al debido proceso y con la confianza que debe guardarse en
las instituciones en una sociedad democrática 8.
En relación con el aspecto objetivo de la imparcialidad, se ha indicado que puede
determinarse a través de hechos que puedan suscitar dudas respecto de la imparcialidad
del funcionario, y que a este respecto hasta las apariencias tienen importancia 9.
Mientras que la imparcialidad subjetiva se presume, la prueba objetiva, “consiste en
determinar si el juez cuestionado brindó elementos convincentes que permitan eliminar
temores legítimos o fundadas sospechas de parcialidad sobre su persona. Ello puesto que
el juez debe aparecer como actuando sin estar sujeto a influencia, aliciente, presión
amenaza o intromisión, directa o indirecta, sino única y exclusivamente conforme a -y
movido por- el Derecho.” 10. En este sentido, cuando sobre el funcionario recae algún
motivo para dudar de su imparcialidad, éste debe separarse del asunto que se somete a
su conocimiento 11.
La concepción de imparcialidad como un compuesto de elementos no sólo subjetivos,
sino también objetivos, ha sido tomada por la Corte Constitucional colombiana, siguiendo
al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, al señalar en sentencia de constitucionalidad
C–396 de 2007, lo siguiente:
“ … hay dos formas de apreciar la imparcialidad judicial, a saber: una
vertiente subjetiva, que se refiere a la convicción personal de un juez
determinado respecto al caso concreto y a las partes y, otra objetiva, que
incide sobre las garantías suficientes que debe reunir el juzgador en su
actuación respecto al objeto mismo del proceso. En otras palabras, (…) la
imparcialidad judicial no sólo se garantiza con las reglas tendientes a retirar
del proceso a quien, por circunstancias subjetivas, podría afectar la igualdad
de trato jurídico (impedimentos, recusaciones y objeción de conciencia), sino
también mediante la consagración de instrumentos propios del proceso que
concretan la realización de la justicia. De esta forma, el juez debe separarse
de una causa sometida a su conocimiento cuando exista algún motivo o duda
que vaya en desmedro de la integridad del tribunal como un órgano
imparcial, puesto que, como lo ha advertido el Tribunal Europeo de
vs. Venezuela, sentencia del 5 de agosto de 2008; Caso Reverón Trujillo vs. Venezuela, sentencia del 30 de
junio de 2009; Caso Usón Ramírez vs. Venezuela, sentencia del 20 de noviembre de 2009.
8
Corte Interamericana de Derechos Humanos: Caso Herrera Ulloa vs. Costa Rica, sentencia del 2 de julio de
2004; Caso Reverón Trujillo vs. Venezuela, sentencia del 30 de junio de 2009.
9
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso Herrera Ulloa vs. Costa Rica, sentencia del 2 de julio de
2004. Corte Europea de Derechos Humanos, Piersack v. Belgium, sentencia del 1 de octubre de 1982; De
Cubber v. Belgium, sentencia del 26 de octubre de 1984; Fey v. Austria, sentencia del 24 de febrero de 1993;
Remli v. France, sentencia del 23 de abril de 1996; Morris v. The United Kingdom, sentencia del 26 de
febrero de 2002; Pabla ky v. Finland, sentencia del 22 de junio de 2004.
10
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso Apitz Barbera y otros vs. Venezuela, sentencia del 5 de
agosto de 2008, parágrafo 56.
11
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso Apitz Barbera y otros vs. Venezuela, sentencia del 5 de
agosto de 2008.
25
Derechos Humanos, en múltiples decisiones, en la imparcialidad judicial no
sólo es importante serlo sino parecer imparcial, por lo que los jueces de los
que pueda temerse legítimamente una falta de imparcialidad, deben
separarse del proceso.” 12 (Énfasis fuera del texto)
Aunque la jurisprudencia referida trata sobre la imparcialidad judicial, ni la característica
de la imparcialidad ni su valoración en dos aspectos (el subjetivo y el objetivo), son ajenas
a otros funcionarios del Estado, especialmente cuando cumplen con funciones judiciales
de cualquier tipo.
El Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, al interpretar el artículo 2,
parágrafo 3, del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos 13, señaló que los
mecanismos administrativos (no judiciales) que deben ser establecidos por los Estados
partes para cumplir con la obligación de investigar las violaciones de derechos humanos,
debe hacerse a través de órganos independientes e imparciales 14.
Así mismo, el Comité para la Eliminación de Discriminación en contra de la Mujer, al
referirse a la situación de México 15, requirió al Estado, en el contexto de su obligación de
eliminar toda forma de violencia en contra de las mujeres, para que garantizara a la
Procuradora Especial para las ofensas relacionadas con los Actos de Violencia contra las
Mujeres, la autoridad y los recursos necesarios para permitirle cumplir su función de
manera independiente e imparcial.
12
Corte Constitucional, sentencia C 396 de 2007, M.P: Marco Gerardo Monroy Cabra.
13
“Artículo 2
1. Cada uno de los Estados Partes en el presente Pacto se compromete a respetar y a garantizar a todos los
individuos que se encuentren en su territorio y estén sujetos a su jurisdicción los derechos reconocidos en el
presente Pacto, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de otra índole,
origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición social.
2. Cada Estado Parte se compromete a adoptar, con arreglo a sus procedimientos constitucionales y a las
disposiciones del presente Pacto, las medidas oportunas para dictar las disposiciones legislativas o de otro
carácter que fueren necesarias para hacer efectivos los derechos reconocidos en el presente Pacto y que no
estuviesen ya garantizados por disposiciones legislativas o de otro carácter.
3. Cada uno de los Estados Partes en el presente Pacto se compromete a garantizar que:
a) Toda persona cuyos derechos o libertades reconocidos en el presente Pacto hayan sido violados podrá
interponer un recurso efectivo, aun cuando tal violación hubiera sido cometida por personas que actuaban
en ejercicio de sus funciones oficiales;
b) La autoridad competente, judicial, administrativa o legislativa, o cualquiera otra autoridad competente
prevista por el sistema legal del Estado, decidirá sobre los derechos de toda persona que interponga tal
recurso, y desarrollará las posibilidades de recurso judicial;
c) Las autoridades competentes cumplirán toda decisión en que se haya estimado procedente el recurso.”
14
General Comment No. 31 [80] Nature of the General Legal Obligation Imposed on States Parties to the
Covenant: 26/05/2004. CCPR/C/21/Rev.1/Add.13. (General Comments).
15
Committee on the Elimination of Discrimination against Women, Thirty-sixth session, 7-25 August 2006,
Concluding comments of the Committee on the Elimination of Discrimination against Women: Mexico, 25
August 2006,
26
Igualmente, en el auto 284 de 2007 16 al decidir un impedimento presentado por el
entonces Procurador General de la Nación en un proceso de constitucionalidad, la Corte
Constitucional indicó:
“Uno de los principios fundamentales del Derecho Procesal es el de la
imparcialidad de los servidores públicos, pues en un Estado Democrático los
ciudadanos tienen derecho a acceder a la administración en igualdad de
condiciones y con la confianza legítima en el actuar exento de prejuicios de
las autoridades estatales, lo cual exige que quien por alguna circunstancia se
encuentre en una situación que pueda alejarlo de la objetividad, la
ecuanimidad y la estricta sujeción a la aplicación de la ley, deba separarse del
conocimiento del proceso respectivo.” (Énfasis fuera del texto)
Por lo tanto, como se puede ver, la característica de la imparcialidad no sólo es exigible
respecto de los jueces, tribunales judiciales y jurados en cualquier evento, sino que
también es un requisito intrínseco a los demás órganos del Estado encargados de
investigar las violaciones de derechos humanos, v. gr. los cuerpos administrativos.
Adicionalmente, debe tenerse presente que el artículo 209 de la Constitución 17 establece
que la función administrativa debe ejercerse conforme a los principios, entre otros, de
igualdad e imparcialidad. Principios que le son aplicables a los organismos de control de
acuerdo con el parágrafo del artículo 3 de la Ley 489 de 1998 18, entre los que se
encuentra la Procuraduría General de la Nación.
Ahora bien, el Procurador General de la Nación no es imparcial, ni da la apariencia de
serlo frente a los derechos humanos, especialmente cuando se trata de derechos
sexuales y reproductivos.
16
17
Corte Constitucional, auto 284 de 2007, M. P: Nilson Pinilla Pinilla.
“ARTICULO 209. La función administrativa está al servicio de los intereses generales y se desarrolla con
fundamento en los principios de igualdad, moralidad, eficacia, economía, celeridad, imparcialidad y
publicidad, mediante la descentralización, la delegación y la desconcentración de funciones.
Las autoridades administrativas deben coordinar sus actuaciones para el adecuado cumplimiento de los fines
del Estado. La administración pública, en todos sus órdenes, tendrá un control interno que se ejercerá en los
términos que señale la ley.”
18
“Artículo 3°. Principios de la función administrativa. La función administrativa se desarrollará conforme a
los principios constitucionales, en particular los atinentes a la buena fe, igualdad, moralidad, celeridad,
economía, imparcialidad, eficacia, eficiencia, participación, publicidad, responsabilidad y transparencia. Los
principios anteriores se aplicarán, igualmente, en la prestación de servicios públicos, en cuanto fueren
compatibles con su naturaleza y régimen.
Parágrafo. Los principios de la función administrativa deberán ser tenidos en cuenta por los órganos de
control y el Departamento Nacional de Planeación, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 343 de la
Constitución Política, al evaluar el desempeño de las entidades y organismos administrativos y al juzgar la
legalidad de la conducta de los servidores públicos en el cumplimiento de sus deberes constitucionales,
legales o reglamentarios, garantizando en todo momento que prime el interés colectivo sobre el particular.”
27
El actual Procurador General de la Nación ha expresado su opinión negativa frente a los
derechos sexuales y reproductivos, en distintos escritos publicados antes de ser elegido
para el cargo; opiniones que lejos de quedarse en el ámbito privado del ciudadano
Ordóñez Maldonado, han transcendido hasta afectar el ejercicio de la función de
garante de los derechos humanos por el Procurador General de la Nación. Esta
acusación no se dirige a las afirmaciones que ha hecho como ciudadano o académico,
sino al uso que de ellas ha hecho, en ejercicio de sus funciones y en detrimento de los
derechos humanos. No sólo no es neutral en la función constitucional, sino que además
es evidente para la opinión pública en general, y para las organizaciones de derechos
humanos, que el Procurador no parece un funcionario imparcial.
Las opiniones expresadas por el actual Procurador General de la Nación, a título
ilustrativo, son del siguiente tono 19:
“Ahora se propone, entre otras cosas, desculpabilizar las conciencias de los
padres, de los médicos que lo practican o de la sociedad permisiva, por tal
acción homicida. Por eso se han inventado esa frase para referirse al aborto,
en donde la objetividad de la acción no se expresa por ninguna parte; por el
contrario, en vez de un contenido peyorativo, ostenta un contenido amable y
positivo, no se refiere a la muerte sino a la salud y a la vida. ¡Oh paradoja!,
es el único caso en el que el derecho a la salud, dicha reproductiva- equivale
a la muerte. ¡Qué horror!” 20
“Servicios de salud para las mujeres. Ello significa, en el lenguaje de género,
el acceso legalizado a la contracepción en todas sus formas y el aborto como
método eficaz de control natal, promovido hoy como política de Estado, ante
la ineficacia de los otros métodos contraceptivos en los países
hispanoamericanos.” 21
“Derechos de los trabajadores sexuales. Ello quiere decir derecho a
prostituirse, considerado como una de las expresiones más auténticas del
‘libre desarrollo de nuestra personalidad’.” 22
“Hace pocas horas la Corte Constitucional colombiana despenalizó el aborto.
El presidente de tal órgano judicial mostró su rechazo frente a las críticas de
numerosos sectores de la opinión pública, que señalaban la existencia de
presiones de los órganos multilaterales para que la decisión se tomara como
se tomó. No quiero hacer un juicio al respecto, puesto que tales
19
Énfasis fuera del texto.
ORDOÑEZ MALDONADO, Alejandro. El nuevo derecho. El nuevo ordenamiento mundial y la revolución
cultural. Ideología de Género. Utopía trágica o subversión cultural. Ediciones Doctrina y Ley Ltda. Bogotá,
2007, Pág. 141.
21
ORDOÑEZ MALDONADO, Alejandro. El nuevo derecho. El nuevo ordenamiento mundial y la revolución
cultural. Ideología de Género. Utopía trágica o subversión cultural. Ediciones Doctrina y Ley Ltda. Bogotá,
2007, Pág. 142.
22
Ibid.
20
28
circunstancias son bien conocidas por la opinión medianamente informada
sobre el tema y, además, rebasa el objeto del presente” 23
“La declaratoria de inexequibilidad no es sólo un problema jurídico; es una
pieza más dentro de un esquema muy bien diseñado para disolver
culturalmente a nuestra nación y en especial a su identidad cristiana.
Después vendrá, por la misma vía judicial, el matrimonio homosexual, la
adopción de hijos por tales parejas, la eutanasia, la eugenesia, la
manipulación de embriones, el desmonte de la patria potestad, la
despenalización de la pedofilia, en suma, la androgenización de la cultura.” 24
“Es indudable que pone en un mismo pie de igualdad a cualquier tipo de
pareja, no sólo la que hasta el momento hemos conocido como una familia,
o sea, la unión estable y más o menos fiel entre un hombre y una mujer. En
virtud de la “Tolerancia”-entendida no como el respeto al otro sino como la
aprobación de todas las conductas del otro, sin importar las aberraciones en
que puedan estar incursos-, se está abriendo una puerta ancha para la pareja
homosexual, lesbiana u ocasional. Es una ética relativista, pues quedan
aprobados todos los abusos.” 25
“La única conducta que según el criterio de la Corte podía ser objeto de
limitación, sería el acoso y la violación pública; nótese la rápida evolución
jurisprudencial: primero se protegen los derechos de la niñez, aún de los
escándalos que puedan producir las públicas manifestaciones homosexuales
y posteriormente esa limitación desaparece, primando el novísimo “derecho
a la sodomía”; no me extrañaría que con el criterio pedofílico al que nos
avoca la modernidad y el que parece imperante en vastos sectores de la
intelectualidad contemporánea, termine convirtiéndose en un “deber”, pues
la resistencia a cualquier solicitud de esa naturaleza agravia el derecho a la
igualdad consagrado en el artículo 13 de la Carta.” 26
“El derecho a hacer valer como derecho cualquier acto de carácter estatal o
individual, aunque a veces sea limitado por razones de utilidad, sería el
absoluto relativismo: Todos pueden hacer valer como derechos las cosas más
extrañas, contradictorias e inclusive absurdas; sin lugar a dudas, tendríamos
que concluir que la anarquía sería un derecho. (…) ¿Lo anterior no es acaso el
sustento ideológico del derecho a la dosis personal, al suicidio, al aborto, a
la unión homosexual, a la eutanasia, a la eugenesia, al incesto, a la
maternidad incógnita, a la zoofilia, etc., reconocidos por diferentes tratados
internacionales y por la gran mayoría de los ordenamientos jurídicos
nacionales y justificados en nombre de los nuevos dogmas laicos? ¿La
tolerancia, el pluralismo y la no discriminación, a los que toda la sociedad
está siendo conducida, ya fuere mediante los programas estatales
implantados por el Ministerio de Educación y de Salud, o ya sea por medio de
las decisiones proferidas por la Corte Constitucional en las sentencias que
hacen relación al libre desarrollo de nuestra personalidad? Habiendo perdido
el Estado su dimensión moral, se convierte en un claro promotor del desorden.
(…)” 27
23
Ibid, Pág. 69.
Ibid.
25
Ibid, Pág. 104.
26
Ibid, Pág. 262
27
Ibid, Pág. 38 – 39.
24
29
“Vivimos hoy una canonización ideológica de los derechos humanos. Así lo
indica su difusión desmedida y su influencia galopante, que ha credo una
religión civil enseñada en la escuela y difundida por los medios de información
y por multitud de canales de las burocracias estatales y privadas. En ella
encontramos el predominio marxista, que considera al hombre como un
alineado, cuya naturaleza no es algo dado, sino el producto de una
construcción libre de la propia autenticidad, como si cada cual pudiera
configurar su ser de modo independiente y siendo responsable sólo consigo
mismo.” 28
“La armonía perdida no nos la devolverá el nuevo orden mundial; en vano
todos los organismos unilaterales construirán en el mar y ararán en el
desierto. No es el derecho internacional humanitario, ni el Protocolo II de
Ginebra lo que la sociedad contemporánea requiere para volver a su cauce;
lo que ésta requiere es, a propósito lo que constituye la esencia de la
hispanidad, reconocer los individuos y las sociedades súbditos de aquél que
dijo: “sin mí nada podéis hacer”. Él es la salud de los individuos y de las
sociedades.” 29
“El gran reto de la revolución cultural hoy es disolver los principios y valores
sobre los que se funda la familia cristiana, su carácter de heterosexual,
monógamo, indisoluble y fecundo; son obstáculos que quieren remover a
toda costa mediante la aprobación, en principio, del divorcio, la
anticoncepción, el aborto y el matrimonio homosexual, primera fase que
están por concluir. Después, vendrá la eutanasia y la eugenesia; es una
verdadera guerra con una auténtica planificación estratégica, táctica y
operativa, desde luego que en el esquema Gramsquiano adaptados a la
realidad presente no será el partido quien forje la opinión, el sentido común
y el pensamiento hegemónico; esa función magisterial le corresponde a los
organismos multilaterales –ONU, UNESCO, UNICEG, OMS, PNUD- y una
constelación de organizaciones no gubernamentales que son los exclusivos
dispensadores de la nueva ortodoxia pública conocida como el pensamiento
políticamente correcto. (…)” 30
“Conocido lo anterior, fácil es comprender la perspectiva ideológica de las
actuales campañas antivida y antifamilia impulsadas por las Naciones
Unidas –Léase UNICEF, PNUD, OMS, FM, FNUAP-. Es un descarado
colonialismo cultural sin antecedentes en la historia. Son incalculables los
millones de dólares destinados a tales campañas; me refiero a las que
promueven la legalización del aborto o del matrimonio homosexual. Quien
esté medianamente informado sobre dichos temas conoce que la
organización internacional Planed Parenthood Foundation (IPPF),
cínicamente designada en nuestro país como PRO-FAMILIA, ejecutora del
proyecto antivida onusiano, tiene hoy un presupuesto para tales efectos de
120.000 millones de dólares.” 31
28
Ibid, Pág. 46 – 47.
Ibid, Pág. 59.
30
Ibid, Pág. 82.
31
Ibid, Pág. 87.
29
30
¿Cómo puede ser y percibirse como imparcial por parte de la ciudadanía el funcionario
encargado de garantizar de los derechos humanos, cuando considera que los derechos de
los y las trabajadoras sexuales equivalen al derecho a prostituirse, dice que la opción de
interrumpir un embarazo reconocida por la Corte Constitucional hace parte de una
campaña para convertir dicha opción en una forma de control de natalidad, señala que el
reconocimiento de derechos a parejas del mismo sexo conducirá a la pedofilia como
derecho y al matrimonio zoofilico, indica que no se requiere el derecho internacional
humanitario, ni los derechos humanos que en su criterio tienen una “difusión excesiva” , y
argumenta que las Naciones Unidas y sus órganos de protección a los derechos humanos
promueven campañas “antivida” y “antifamilia” ?
Dados los prejuicios y convicciones previas del Procurador en materia de derechos
humanos, la organización de derechos humanos Colombia Diversa, le solicitó separarse de
todo asunto en que por virtud del ejercicio de sus funciones constitucionales y legales,
tuviera que conceptuar, decidir, intervenir, etc, en materia de derechos sexuales y
reproductivos.
El Procurador desestimó este llamado de la ciudadanía, aduciendo que los impedimentos
eran figuras procesales diseñadas para procesos específicos, y argumentando que no
existe obstáculo para que “los funcionarios públicos puedan antes y después de acceder al
ejercicio de la función pública, tener opiniones sobre distintos ámbitos de la realidad,
incluso de la realidad jurídica” 32.
El no declararse impedido, debiéndolo hacerlo da lugar a la falta disciplinaria consagrada
en el numeral 46 del artículo 48 de la Ley 734, y podría incluso implicar que el Procurador
General de la Nación, esté él mismo incurso en un conflicto de interés, de acuerdo con el
artículo 40 de la misma Ley. 33
32
Escrito de 9 de junio de 2009 del Procurador General de la Nación dirigido a Colombia Diversa en relación
con la solicitud de declaratoria de impedimento.
33
Código Disciplinario Único:
Artículo 48. Corregido por el Decreto 224 de 2002, en el sentido de incorporar el numeral 38. Faltas
gravísimas. Son faltas gravísimas las siguientes:
(...) 46. No declararse impedido oportunamente, cuando exista la obligación de hacerlo, demorar el trámite
de las recusaciones, o actuar después de separado del asunto.
Artículo 40. Conflicto de intereses. Todo servidor público deberá declararse impedido para actuar en un
asunto cuando tenga interés particular y directo en su regulación, gestión, control o decisión, o lo tuviere su
cónyuge, compañero o compañera permanente, o algunos de sus parientes dentro del cuarto grado de
consanguinidad, segundo de afinidad o primero civil, o su socio o socios de hecho o de derecho.
Cuando el interés general, propio de la función pública, entre en conflicto con un interés particular y directo
del servidor público deberá declararse impedido.
31
Aunque no existe objeción a que cualquier ciudadano exprese opiniones sobre la realidad
jurídica del país, lo cierto es que aumentan las restricciones para quien se desempeña en
funciones públicas, al expresar opiniones sobre temas en que estará implicado por razón
de su función. El Procurador puede, antes y después de ejercer el cargo, dar sus opiniones
personales, pero no lo puede hacer durante su periodo. Debe recordarse que según la
jurisprudencia previamente reseñada, cuando existen dudas acerca de la imparcialidad de
un funcionario, éste debe separarse del conocimiento del asunto.
Los prejuicios y opiniones personales previas hacen parte del componente subjetivo de la
imparcialidad, sin embargo, los antecedentes del señor Procurador, aun cuando se hayan
producido cuando era un ciudadano no investido de la función pública, constituyen un
primer hecho verificable que muestra la carencia de imparcialidad objetiva de este
funcionario.
Lo anterior, aunado a que estas expresiones contrarias a los derechos humanos y a los
derechos sexuales y reproductivos han pasado de la esfera privada del ciudadano
Ordóñez a la esfera pública del Procurador, implica que este funcionario no es imparcial
de forma objetiva cuando de derechos humanos se trata, específicamente derechos
sexuales y reproductivos. Es así como son hechos verificables de la posición anti –
derechos del señor Procurador, los siguientes:
1. En la circular 030 de 13 de mayo de 2009, en que dio directrices para el
cumplimiento de la sentencia C–355 de 2006 (reconocimiento del derecho a optar
por interrumpir el embarazo en tres circunstancias), el Procurador se centró en
ordenar a los funcionarios públicos proteger los derechos del nasciturus, cuando
ya la Corte había dicho que se trataba de un bien jurídico y no de un derecho en
ese caso, y que en la ponderación con los derechos de la mujer, éstos tenían
prevalencia sobre tal bien.
2. El Procurador General de la Nación solicitó la nulidad de la sentencia T-388 de
2009, que se reiteró la jurisprudencia de la Corte Constitucional, especialmente la
sentencia C-355 de 2006, en cuanto a los parámetros dentro de los cuales se
puede optar por una interrupción voluntaria del embarazo. En la sentencia T-388
de 2009 se identificaron diversos obstáculos a la implementación efectiva de la
sentencia C-355 de 2006 (requisitos no establecidos constitucionalmente,
injerencias en la autonomía de la mujer, denegación de justicia, fallas en el
32
servicio de salud, entre otros), y se ordenó el diseño e implementación de
campañas de promoción de los derechos sexuales y reproductivos. El Procurador:
-
Anunció a la ciudadanía que solicitaría la nulidad de la sentencia porque
ordenaba implementar “campañas masivas de promoción del aborto como
derecho”; afirmación desprovista de sustento y hecha de mala fe para
confundir a la sociedad.
-
En la solicitud de nulidad de la sentencia, indicó que la orden de realizar
campañas de derechos sexuales y reproductivos i) no tenía ninguna relación
con el caso objeto de la revisión – a pesar de que se trataba de un caso de
obstaculización y negación de un procedimiento de interrupción voluntaria del
embarazo en las causales señaladas por la sentencia C-355 de 2006 – y ii) “el
carácter masivo de las campañas ordenadas tampoco encuentra fundamento
alguno, y por el contrario, podrían resultar interfiriendo en las competencias
constitucionales y legales de las entidades estatales destinatarias del
requerimiento de la Sala de Revisión y en la separación y la colaboración
armónica entre los diversos organismos para realizar los fines del Estado” 34;
¿por qué realizar campañas de promoción de derechos sexuales y
reproductivos interfiere en las competencias constitucionales de los obligados
y en la separación y colaboración de poderes, si de acuerdo con la
Constitución 35, la enseñanza de derechos humanos es obligatoria y la Corte
Constitucional estableció en la sentencia C–355 de 2006 que el derecho a la
educación “incorpora el derecho de las mujeres a recibir educación sobre salud
reproductiva” 36?
34
Solicitud de Nulidad de la Sentencia T 388 de 2009, p. 46.
Disponible en:
http://www.procuraduria.gov.co/html/noticias_2009/noticias_601.htm
35
“ARTICULO 67. La educación es un derecho de la persona y un servicio público que tiene una función social;
con ella se busca el acceso al conocimiento, a la ciencia, a la técnica, y a los demás bienes y valores de la
cultura.
La educación formará al colombiano en el respeto a los derechos humanos, a la paz y a la democracia; y en
la práctica del trabajo y la recreación, para el mejoramiento cultural, científico, tecnológico y para la
protección del ambiente.
El Estado, la sociedad y la familia son responsables de la educación, que será obligatoria entre los cinco y los
quince años de edad y que comprenderá como mínimo, un año de preescolar y nueve de educación básica.
La educación será gratuita en las instituciones del Estado, sin perjuicio del cobro de derechos académicos a
quienes puedan sufragarlos.
Corresponde al Estado regular y ejercer la suprema inspección y vigilancia de la educación con el fin de velar
por su calidad, por el cumplimiento de sus fines y por la mejor formación moral, intelectual y física de los
educandos; garantizar el adecuado cubrimiento del servicio y asegurar a los menores las condiciones
necesarias para su acceso y permanencia en el sistema educativo.
La Nación y las entidades territoriales participarán en la dirección, financiación y administración de los
servicios educativos estatales, en los términos que señalen la Constitución y la ley.”
36
Corte Constitucional, sentencia C- 355 de 2006, considerando 7. Los derechos fundamentales de las
mujeres en la Constitución Política Colombiana y en el derecho internacional.
33
3. La posición anti – derechos sexuales y reproductivos mostrada por el Procurador,
especialmente en cuanto se opuso a la implementación de las campañas de
promoción de este derecho, fue evidente para los medios de comunicación de
todo el país y los columnistas de opinión:
-
María Elvira Bonilla, en la columna titulada Oscurantismo galopante, publicada
el 30 de octubre de 2009 en la edición online del diario El Pais de Cali, señaló:
“Alejandro Ordóñez, ha hecho de su moralismo confundidor un
ingrediente de intimidación para impedir que se dicte la cátedra sexual
con el tema de las causales de despenalización del aborto incluido, que
debe dictarse en todos los colegios del país según sentencia de la Corte
Constitucional.
(…)
La intolerancia no es sólo frente a este tema sino respecto del consumo
de la dosis mínima, el respeto a los derechos de gays, transexuales o
lesbianas y a la eutanasia, duras batallas que libran sin éxito algunos
congresistas. El procurador Ordóñez se ha convertido en el adalid de su
persecución. Ha hecho de sus convicciones religiosas, tan respetables
como las de cualquier ciudadano, doctrina de obligatorio cumplimiento,
con lo que pretende, como cualquier Cruzado, imponer con las armas
que le confiere la ley en su condición de jefe del Ministerio Público. Esta
combinación nefasta de poder y religión nos puede, esa sí, mandar como
país y sociedad a los más profundos infiernos.”
-
Daniel Samper Pizano, en su columna del 31 de octubre de 2009, publicada en
el diario El Tiempo dijo:
“La Iglesia y el Procurador (“Absolvedor”, según Ramiro Bejarano) General
bloquean la aplicación del aborto legal …
(…)
El tema más delicado, el que más alebresta a los sectarios, es el aborto. La
judicatura colombiana sentenció que es legal interrumpir el embarazo en
ciertos casos especiales. Sin embargo, la oposición religiosa, encabezada por
los obispos y por el maniático Absolvedor, ataca esta norma. Su beligerancia
logró acobardar al Alcalde de Medellín e impidió la aplicación de la ley en una
clínica para mujeres.”
-
Cecilia López, escribió el 23 de octubre de 2009, en el periódico El Mundo de
Medellín:
“El ascenso dramático de embarazos adolescentes en Colombia refleja
grandes debilidades en las políticas de Estado y especialmente en el tema
de educación sexual. Pero el embarazo en adolescentes no es la única
crisis social que enfrentamos pues la alta mortalidad en mujeres por
causa de abortos clandestinos practicados de manera insegura e ilegal
asciende a la tercera parte de la mortalidad materna según el Ministerio
34
de Protección Social. A todas luces estamos ante un problema de salud
pública de dimensiones colosales que desafortunadamente afecta en
mayor medida a las mujeres de escasos recursos que se ven sometidas a
procedimientos de garaje.
Es por eso que resulta ofensiva la actuación del Procurador General de
intentar anular los mandatos de las sentencias de la Corte. Este
proceder desprecia la avasalladora realidad social, se atraviesa de
manera temeraria ante los avances jurisprudenciales de la Corte y
atenta contra el ámbito de respeto y garantía de los derechos sexuales
y reproductivos de todas las mujeres colombianas en los que están
incluidos los tres casos en los cuales se despenaliza el aborto.
El Procurador desencadena toda una marea de desinformación que
puso en alerta a las instituciones de salud, a las autoridades
administrativas e inclusive al alto gobierno, obligando a las altas Cortes
y al mismo Ministro de Protección Social a pronunciarse en el sentido
de aclarar que la Sentencia que determinó los eventos excepcionales en
los cuales procede el aborto, está plenamente vigente y goza de
absoluta eficacia. ¿Cómo puede avanzar una sociedad si mantiene
ocultos sus derechos? (…)
El Procurador está en campaña por anular los derechos sexuales y
reproductivos de las mujeres colombianas. Por eso hago un llamado a
las mujeres y a las autoridades encargadas de proteger estos derechos
para evitar este descalabro.” 37
-
La revista SEMANA en su artículo El cruzado del 24 de octubre de 2009,
relata las acciones del Procurador en contra de la garantía del derecho al
aborto:
“No es nada común en Colombia que un alto funcionario estampe su
firma en un comunicado de prensa. Y eso ocurrió la semana pasada con
el procurador general, Alejandro Ordóñez. Lo hizo para pedir que se anule
un fallo en el que la Corte Constitucional ordena al gobierno les hable a
las colegialas sobre los derechos que tienen en materia sexual. En el
comunicado, el Procurador no sólo tergiversó los términos del fallo de la
Corte, al decir que éste ordenaba "diseñar campañas masivas de
promoción del aborto", sino que al estampar su rúbrica dejó claro que
para él se trataba de algo personal. Y no es la primera vez que responde
de manera tan inusual. Hace un mes, en una decisión pocas veces vista,
creó un grupo especial para hacer control previo a la Clínica de la Mujer
de Medellín porque le dijeron que tenía como fin practicar abortos.
Y cerró la faena el viernes con una frase provocadora en un auditorio
universitario: "A mí no me asustan los editoriales ni las
estigmatizaciones... ¡me importan un bledo!", dijo refiriéndose a las
críticas
que
recibió
por
el
tema
del
aborto.
La conclusión es que en unas cuantas semanas, el Procurador logró lo
que las organizaciones provida han intentado por más de dos años sin
suerte: crear un manto de duda sobre la decisión que tomó la Corte
Constitucional en 2006 de darle vía libre al aborto en casos
excepcionales.
(…)
El hecho de que un hombre profese su religión con fervor no tendría por
qué convertirlo en blanco de acusaciones. Por el contrario, se podría
37
Negrillas fuera del texto.
35
pensar que en un país donde la corrupción crece a pasos agigantados, es
una buena noticia que a la cabeza de uno de los más importantes
organismos de control esté alguien que, como Alejandro Ordóñez, sigue
al pie de la letra preceptos como la verdad y la honestidad. El problema,
para un personaje público como él, se da si sus creencias terminan por
contaminar sus decisiones. En el caso de Ordóñez, evidentemente, lo ha
hecho en el tema del aborto (…)
Es claro que con Alejandro Ordóñez ha llegado a la Procuraduría no sólo
un jefe, sino toda una doctrina. Los miles de colombianos que rechazan el
aborto ganaron un mariscal de campo para librar esta batalla. Como los
cruzados de la edad media, el viene armado de poder y religión, para
conquistar territorios y corazones.”
-
Cristina de la Torre explicita la manera en la que las afirmaciones
académicas del Procurador, se han traducido en máximas de su función
como máximo jefe del Ministerio Público en Nostalgias de la inquisición
publicada en El Espectador el 26 de Octubre de 2009:
“El Procurador no improvisa. Ha plasmado en su Ideología de género
(Ediciones Doctrina y Ley, 2007) ideas que explican la intrepidez de su
verbo y de su acción. Si, en abierta insubordinación contra la norma,
estipula en Directiva 030 de este año que el aborto no es un derecho y
ordena proteger el derecho a la vida del feto, ya en su libro denunciaba la
marcha de una revolución cultural dirigida contra los valores de la familia
cristiana. Contra su carácter heterosexual, monogámico e indisoluble,
mediante el divorcio, los contraceptivos y el aborto. Inspiración de esta
cruzada sería la que él llama ideología de género. Sus primeras
manifestaciones se remontarían al proyecto de ley sobre igualdad de
géneros, donde homosexualismo, autoerotismo, amor libre, bestialismo,
zoofilia, sodomía y necrofilia podrían darse por normales. Esta cruzada,
dice, descalifica los roles que la naturaleza dio al hombre y a la mujer: el
primero en el trabajo, la otra, en tareas del hogar. También rompe lanzas
contra el Plan Nacional de Educación Sexual, que buscaría la muerte del
otro, pues promueve el aborto y el placer hedonista. Y contra el
diagnóstico del Plan, en virtud del cual la familia patriarcal estaría en
crisis, y habrían surgido nuevas formas de pareja y de familia. En suma, la
perspectiva de género se propondría “desmaternizar” a la mujer, eliminar
la patria potestad y promover el aborto. Disolver la religión, la familia, el
sexo, el idioma, la educación, el derecho; la cultura occidental y cristiana,
fundada en un orden natural creado por Dios.” 38
-
María Elvira Samper, en su columna titulada Cuestión de Conciencia, publicada
en la revista Cambio el 28 de octubre de 2009, dijo:
“El aborto está de nuevo en el centro del debate público por cuenta de
un fallo de tutela de la Corte Constitucional que amparó el derecho de
una mujer a interrumpir el embarazo por graves malformaciones del
feto, derecho que le fue negado mediante todo tipo de argucias. La
Iglesia puso el grito en el cielo porque el aborto atenta contra sus
38
Negrillas fuera de texto.
36
principios doctrinarios y lo mismo hizo el precandidato conservador José
Galat, cruzado católico, que publicó un aviso para invitar a la “resistencia
civil contra el aborto criminal”. Por su parte, el procurador Ordóñez
acudió hábilmente a argumentos jurídicos para cuestionar la
competencia de la sala que revisó la tutela y así soslayar el hecho de
que se opone al aborto por sus creencias religiosas.” 39
-
La carta del lector Orlando Arciniegas Lagos, publicada por El Tiempo, el
29 de Octubre de 2009, dice:
“Lamentable que la sentencia de la Corte sea tergiversada por el
camandulero Procurador General de La Nación, con posiciones
personales y no institucionales, en un país donde el problema es de salud
pública y en donde la regulación penal que sanciona el aborto en todos
los supuestos, significa la anulación de los derechos fundamentales de la
mujer, en la medida que supone desconocer su dignidad, reduciéndola en
mero receptáculo de vida en gestación, carente de derechos que
ameriten protección, en un país donde se debe educar como ordena la
Corte Constitucional en vez de seguir tratando el tema hipócritamente
dándose golpes de pecho, porque lo que si no se ha dicho, es que sólo en
los casos mencionados el aborto es permitido únicamente, pues cuando
se realiza en otras circunstancias la penalización no ha desaparecido.”
-
La editorial de la revista PODER del 31 de Octubre de 2009 titulada
Procurador general… no personal, evidencia cómo el Procurador
antepone sus creencias personales a su función pública:
“Casi en forma inmediata, el procurador General de la Nación, Alejandro
Ordóñez, reaccionó en forma airada, a través de un comunicado público,
en el que pide se anule el fallo de la Corte, alegando que el tribunal
pretende “diseñar campañas masivas de promoción del aborto. Y para
ratificar su desacuerdo, firma con su letra la comunicación. En un
principio, la postura personal de Ordóñez generó mayor confusión, pero
luego la Corte aclaró el enredo .
“A mí no me asustan los editoriales y las estigmatizaciones… me
importan un bledo”, dijo luego el Procurador, quien, junto con el
Defensor del Pueblo, se supone que es el representante de los ciudadanos
ante el Estado para que se cumplan las leyes y los derechos ciudadanos.
Pero una cosa es la función del Procurador, consagrada en la
Constitución, y otra –en muchos casos– su posición personal, que
legítimamente pueden no coincidir. Y en ese sentido, él no debe
anteponer sus creencias políticas, religiosas o de cualquier tipo a los
intereses generales, y por ética y conveniencia no permitir la
contaminación de sus decisiones o pronunciamientos.”
-
Pascual Gaviria escribió en su columna Dios nos libre de El Espectador del 3 de
noviembre del 2009:
“Con la llegada del Procurador al centro de la política colombiana han
comenzado a agitarse temas religiosos y morales que muy seguramente
serán importantes en las campañas por venir. En Medellín el tema del
39
Negrillas fuera del texto.
37
aborto en la clínica de la mujer ya causó un primer remesón político. La
Procuraduría fue protagonista de primer orden al hacer eco de las
reservas de los grupos católicos y los editoriales de la prensa
conservadora. Con inusitada diligencia el Ministerio Público, cada vez
con más aires de ministerio eclesial, creo un grupo especial de control
preventivo para poner sobre el proyecto una lupa que no sólo ausculta
sino que quema con su rayo de luz.
Pero el Procurador no es sólo un funcionario animado por la defensa de
algunas ideas más que por la protección de todos los ciudadanos, sino
también un polemista radical. Sería difícil negar que sus palabras
alientan la discriminación. Uno de sus libros, que ojalá sea el único,
sostiene que “considerar que el homosexualismo es una opción lícita
resulta tan contra natura como pretender que el hombre puede optar
entre ser racional o irracional”. Recordé a las niñas rechifladas y
repudiadas por todo un colegio en Manizales por reconocer su
homosexualidad. Imaginé al procurador dirigiendo la silbatina en
compañía de la rectora.
-
Manuel Iturralde, escribió lo siguiente en la columna titulada Tiranía de
creencias, publicada en Semana.com el 6 de noviembre de 2009:
“Pero lo más preocupante es que el estado de confusión reinante, así
como las acusaciones falsas contra la Corte que éste propicia, son en
buena medida responsabilidad de diversos funcionarios y organismos
estatales.
De una parte, el Procurador está anteponiendo sus creencias religiosas a
sus responsabilidades constitucionales: en vez de dar cumplimiento a las
decisiones de la Corte y velar por el respeto del orden jurídico vigente,
está usando su cargo para apoyar la postura de la Iglesia Católica en
contra
de
la
interrupción
voluntaria
del
embarazo.
Desde que el Procurador asumió su cargo, la entidad que preside no sólo
ha dejado de monitorear el cumplimiento de las decisiones de la Corte
por parte de las entidades de salud, sino que ha comenzado a cuestionar
abiertamente la jurisprudencia del alto tribunal.”
-
Ramiro Bejarano afirmó en su columna Alcalde sitiado publicado el 7 de
Noviembre de 2009 en el periódico El Espectador, lo siguiente:
“Lo que es peor es que el Absolvedor Alejandro Ordóñez, en un acto de
intolerancia y abuso sin precedentes, expidió el 8 de septiembre de 2009
la Resolución N° 284, por medio de la cual ha integrado una especie de
tribunal de inquisición, al que ha quedado sometido el frágil alcalde
Salazar. Ciertamente, bajo el eufemístico nombre de “Grupo de
Trabajo”, Ordóñez designó una comisión de seis funcionarios de su
absoluta confianza religiosa, para que ejerzan “control preventivo a las
autoridades municipales de Medellín” en lo que tiene que ver con “la
ejecución y puesta en funcionamiento del proyecto Clínica de la Mujer”.
En buen romance, la integración de ese grupo de funcionarios del
ministerio público tiene por objeto torpedear la posibilidad de que en esa
clínica antioqueña se pueda practicar el aborto, aun en los tres casos
autorizados en la sentencia de la Corte Constitucional. Es una paradoja
que mientras la corrupción invade todas las esferas de la administración
pública y Ordóñez anda cruzado de brazos, la Procuraduría conforme un
38
comité de censores para que el aborto no prospere, no importa que se
afecten las familias y mujeres hasta católicas. En el Senado que casi por
unanimidad eligió a Ordóñez como Procurador, se descubren
gigantescos sobrecostos, pero eso sí no merece un comité investigador.”
-
Juanita Durán Vélez, escribió en semana.com el 13 de noviembre de
2009, lo siguiente:
“Estos casos, que en su estructura son idénticos, parecen distintos porque
para muchos el aborto “es distinto”. Sobre si las mujeres debemos
acceder a los servicios de salud sexual y reproductiva que necesitamos –
cómo, cuándo y dónde - opinan todos: padres, hermanos, esposos y
sacerdotes. En general, hombres; muchos hombres. Y no opinan como
opinan sobre el tratamiento para el cáncer o los antibióticos para las
infecciones: No. Todos dicen qué deberíamos hacer las mujeres y algunos
de esos, como el procurador general Alejandro Ordóñez, trabajan
vehementemente para hacer de sus opiniones una norma jurídica o, en el
peor de los casos, una barrera de acceso a los servicios.”
4. El 13 de noviembre de 2009, el Procurador apareció en el programa de televisión
José Gabriel 40, en donde afirmó:
“José Gabriel (JG): “¿Por qué no al aborto?
Procurador General de la Nación (PGN): Porque la vida es vida desde la
concepción y allí la vida determina la posibilidad de ejercer los demás
derechos, si yo no tengo derecho a la vida no tengo ningún otro derecho.
En nuestro ordenamiento jurídico la Constitución es pro-vida, defiende el
derecho a la vida. Desde luego, las decisiones de la Corte Constitucional
han establecido algunas excepciones, pero el principio general de nuestro
ordenamiento jurídico es que la vida es vida desde la concepción y el
ordenamiento jurídico y la sociedad la deben proteger.
JG: ¿Por qué las parejas de homosexuales no deben, no pueden, adoptar
hijos?
PGN: No es desde luego un capricho del señor Procurador, son los
constituyentes los que determinaron que la familia era la unión entre un
hombre y una mujer. Es la ley de la infancia que cuando regula la
adopción la restringe, entonces, lo que hace el Procurador es defender la
Constitución y defender la Ley. Desde luego, hay toda una serie de
derechos esenciales y fundamentales que se les reconoce y se les protege,
pero a eso el ordenamiento jurídico ha dicho que no, hasta que haya
cualquier decisión de la Corte Constitucional, ayer se declaró inhibida de
decidir sobre ese tema.”
40
Disponible en:
http://www.caracoltv.com/producciones/informativos/elprogramadejosegabriel/video158906-saracorrales-revela-sus-ultimas-confesiones-la-noche-de-jose-gabr
39
5. En diciembre de 2009, nuevamente el Procurador se pronunció en contra de los
derechos sexuales y reproductivos, esta vez desconociendo una decisión del
Consejo de Estado. El Procurador aseguró que la píldora de anticoncepción de
emergencia, más conocida como “píldora del día después” es abortiva, al
presentar un concepto dentro de una acción popular entablada para prohibir su
distribución, y como forma de oponerse a la propuesta de un candidato
presidencial de distribuirla de forma gratuita en menores de 15 años.
Además de emitir una afirmación carente de todo sustento y de generar confusión
y temores infundados en la ciudadanía, el Procurador desconoció tajantemente la
sentencia de 5 de junio de 2008, en la que la Sección Primera del Consejo de
Estado desestimó las pretensiones de la demanda de nulidad instaurada en contra
del acto de registro del Postinor 2 - forma bajo la que se distribuye la
anticoncepción de emergencia en Colombia – porque dicha píldora no era
abortiva. Dijo en este sentido el Consejo de Estado:
“Así las cosas, el aborto tiene como condición necesaria la concepción o
estado de embarazo de la mujer, y como quiera el POSTINOR 2 no actúa
después de la concepción o embarazo, sino antes de que éste se presente, no
es posible que sea abortivo, e incluso, no está probado que actúe siquiera
sobre el embrión u óvulo fecundado.
2.2.3. De esa forma, no emerge circunstancia que comporte violación de las
normas jurídicas invocadas por el actor, en cuanto garantizan y protegen el
derecho a la vida de todas las personas y del que está por nacer, puesto que
las mismas protegen la vida en tanto está radicada como derecho humano y
fundamental en sujetos naturales de derecho, y no la vida en abstracto, pues
los derechos no existen en esa forma sino referidos a sujetos; por ello se
identifican como derechos de (la persona humana, la mujer, del niño, etc.).
(…)
En esas circunstancias procesales, la Sala observa que los elementos de juicio
que obran en el plenario y la información autorizada que se tiene sobre el
estado del conocimiento sobre la materia, especialmente el concepto del
Instituto Colombiano de Medicina Legal y Ciencias Forenses, en el sentido de
que “el LEVONORGESTREL no causan ningún daño directo al embrión
humano”, avalan los fundamentos fácticos de la resolución acusada, en
especial sobre el carácter anticonceptivo del POSTINOR 2, que de paso
descartan la calidad de abortivo que le atribuye el actor; de lo cual, por lo
demás, éste no aporta prueba o información científica proveniente de fuente
con autoridad sobre la materia, e incluso la prueba de esa índole que él solicitó
se contrapone o desvirtúa ese carácter abortivo que aduce en la demanda;
luego no aparece demostrado que vulnere el derecho a la vida, o lo que es
igual, que viole las normas invocadas en la demanda.”
40
La errada afirmación emitida por el Procurador General de la Nación, fue hecha ante
diversos medios de comunicación. La animadversión del funcionario en contra de la
anticoncepción de emergencia, y con ello frente a los derechos sexuales y reproductivos,
es tan evidente, que ante la propuesta del candidato presidencial al que se ha hecho
referencia, en las noticias de RCN, luego de hacer referencia a la propuesta del candidato,
se dijo lo siguiente:
“Vicky Dávila: claro, el primero en levantar la voz fue el Procurador General
Alejandro Ordóñez, quien calificó la píldora del día después como un método
abortivo.” 41
En el comunicado de prensa de 7 de diciembre de 2009 42 en el que el Procurador anunció
la presentación del concepto con ocasión de la demanda de acción popular presentada
con el objeto de que la pastilla de anticoncepción de emergencia fuera retirada del
mercado, además de señalar que la píldora es abortiva a pesar del pronunciamiento
previo y contrario del Consejo de Estado basada en información científica, volvió a hablar
de un derecho a la vida a partir de la concepción, aun cuando la Corte Constitucional ya
señaló claramente en la sentencia C-355 de 2006 que lo que tiene protección
constitucional es el bien jurídico vida, diferente del derecho a la vida, que debe ceder a
los derechos humanos y fundamentales de las mujeres en los tres eventos reconocidos
para interrumpir el embarazo de forma voluntaria.
Además, para finalizar el comunicado indicó que se debería “retirar del mercado todo
medicamento que posea el principio activo Levonogestrel”, lo que implica no sólo retirar
la anticoncepción de emergencia, sino también los de uso habitual que contienen ese
componente. Como es evidente, el Procurador se opone a todo los derechos sexuales y
reproductivos y en esta campaña pretende usar el poder que le confiere su cargo para
sabotear los avances que se han alcanzado en la materia, desde la educación sexual,
hasta la interrupción voluntaria del embarazo, pasando también por el acceso a los
anticonceptivos habituales y de emergencia.
Las convicciones y opiniones que el señor Ordóñez Maldonado expresó a título particular
y académico han pasado de tal esfera, a influir en el ejercicio de su labor como
funcionario público. Esta interferencia indebida de sus convicciones en el ejercicio de su
función como garante de los derechos humanos, es tan evidente que su animadversión
41
42
Sección de La cosa política del noticiero RCN del 7 de diciembre de 2009.
Disponible en: http://www.procuraduria.gov.co/html/noticias_2009/noticias_685.html
41
hacia los derechos sexuales y reproductivos ha sido plasmada por serios columnistas (que
incluyen comunicadores sociales de amplia trayectoria, investigadores serios y abogados
ampliamente reconocidos), y no dejan duda que el Procurador no es imparcial y no tiene
ninguna apariencia de serlo frente a los derechos humanos, especialmente los sexuales y
reproductivos.
Debe recordarse que el Procurador actúa como juez disciplinario de la mayoría de
funcionarios públicos del país, de los particulares cuando ejercen funciones públicas, y en
esta medida tiene una influencia indirecta pero tajante sobre su conducta; que además
puede expedir directrices de obligatorio cumplimiento para todos los funcionarios a él
subordinados, encauzando su labor hacia un fin específico; de intervención en proceso
administrativos y constitucionales, en los que emite conceptos no vinculantes, pero de
gran importancia para jueces y ciudadanos; y que no sólo tiene impacto en los
funcionarios públicos, sino en la ciudadanía, que presume cierto lo que dice la máxima
autoridad del Ministerio Público y de esta manera, cuando éste hace conclusiones erradas
(v. gr. la anticoncepción de emergencia) confunde a toda la sociedad y de esta manera
menoscaba el alcance de los derechos de todos los ciudadanos.
1.3.
El Procurador General de la Nación abusa de su poder: confunde a la
sociedad sobre el alcance de los derechos sexuales y reproductivos y su
alcance
El Procurador General de la Nación, es el director supremo del Ministerio Público. No
tiene superior jerárquico y por lo tanto, su actuación no está controlada por ningún
órgano o funcionario del Estado, salvo en lo que respecta a su responsabilidad penal o
disciplinaria.
Lo anterior, a pesar de que tiene a su cargo: la vigilancia disciplinaria de la conducta de los
funcionarios públicos y los particulares que ejercen funciones públicas, tiene funciones de
intervención en procesos judiciales administrativos y constitucionales, dicta directrices de
obligatorio cumplimiento para todos los funcionarios del Ministerio Público en calidad de
supremo director de éste y como defensor de los derechos humanos y garante de la
efectividad de la Constitución, las leyes y las decisiones judiciales, tiene gran influencia
en la sociedad colombiana.
Teniendo en cuenta la ausencia de control jerárquico, ante la amplitud de los ámbitos
sobre los que ejerce función pública y por la influencia que tiene sobre la conducta de
42
servidores públicos y sociedad, el Procurador General de la Nación no sólo debe ser
imparcial sino que además debe cuidar que el ejercicio de su función se haga con estricta
sujeción a los parámetros constitucionales y legales.
En consecuencia, no le está permitido extralimitarse en su actividad o abusar de su
función. Es en esta situación en la que se encuentra el Procurador puesto que haciendo
uso de su poder, ha generado confusión no sólo en funcionarios sino también en la
ciudadanía acerca del alcance de los derechos sexuales y reproductivos, con graves
consecuencias para el ejercicio de estos derechos por los colombianos y colombianas.
En primer lugar, el Procurador General de la Nación afirmó sin fundamento alguno que la
sentencia T-388 de 2009, había ordenado la implementación de “campañas masivas de
promoción del aborto” 43. Esta afirmación, con la que anunció la presentación de su
solicitud de nulidad en contra de dicha sentencia, no sólo generó una falsa creencia en la
ciudadanía y los funcionarios públicos vinculados a las órdenes de la sentencia – falsa, se
recuerda, porque se ordenó implementar campañas de promoción de derechos sexuales
y reproductivos – sino que además condujo a un encendido debate sobre premisas falsas,
y que no se centró en la obligación de enseñar derechos humanos en los colegios.
En segundo lugar, el Procurador General respaldó a la Procuradora Delegada para la
Infancia, la Adolescencia y la Familia, en la afirmación errada de acuerdo con la cual, la
sentencia T-388 de 2009 no era aplicable hasta tanto no se resolviera la solicitud de
nulidad presentada por él. Afirmación que hizo primero la Procuradora Delegada en esta
calidad a los medios de comunicación 44, y luego como representante de la Procuraduría
General de la Nación en el programa de televisión Veredicto de Canal Capital 45.
Con esta declaración proveniente de una funcionaria de alto rango y de conocida
formación jurídica, que por supuesto no tiene toda la población, se generó una gran
confusión que obligó a declarar al Presidente de la Corte Constitucional que la sentencia
era de obligatorio cumplimiento con independencia de la presentación de la solicitud de
nulidad 46.
43
Comunicado
del
21
de
octubre
de
2009,
disponible
en:
http://www.procuraduria.gov.co/html/noticias_2009/noticias_601.htm
44
Declaración rendida a Caracol Radio disponible en: http://www.caracol.com.co/nota.aspx?id=907681
45
Programa disponible en:
http://www.youtube.com/view_play_list?p=614BAE428AFA3665&search_query=Ilva+Hoyos
46
Declaración disponible en: http://www.elespectador.com/articulo171826-denuncian-negligencia-medicapracticar-aborto
43
En tercer lugar, con la expedición de la Circular 030 de 2009, dio directrices confusas a los
funcionarios del Ministerio Público y con ellas influencia la conducta no sólo de éstos sino
de todos aquellos que están bajo la vigilancia disciplinaria del órgano de control.
El Procurador se arrogó la facultad de hablar de derechos del nasciturus, mientras que la
autoridad instituida en la Constitución para fijar el alcance de la Constitución y los
derechos fundamentales fue enfática en señalar que no existía un derecho a la vida del no
nacido, sino que la vida de éste era un bien jurídico constitucionalmente protegido, que
debía ceder ante los derechos humanos y fundamentales de las mujeres en tres eventos.
Con base en la anterior premisa, ordenó a los funcionarios del Ministerio Público entrar a
proteger los derechos del nasciturus, en una circular que tenía por objeto asegurar el
cumplimiento de la sentencia C–355 de 2006. En consecuencia, los funcionarios se
encontraron frente a una circular que busca garantizar la efectividad de la sentencia C–
355 de 2006, pero que les ordena hacer algo que no está contemplado en dicha
sentencia. Se preguntarán los funcionarios públicos, ¿cómo garantizar los derechos de los
no nacidos?
Finalmente, el Procurador General de la Nación, declaró de forma falaz a la opinión
pública que el anticonceptivo de emergencia conocido como “la píldora del día después”
es abortiva. Esta afirmación no puede haber sido sino con el objeto de generar confusión
en la ciudadanía, pues ya en el año 2008, la Sección Primera del Consejo de Estado había
declarado que el Postinor 2 –forma como se distribuye la anticoncepción de emergencia
en Colombia- no era una píldora abortiva.
Esta afirmación hecha no sólo dentro de un proceso judicial (acción de cumplimiento)
sino también ante la propuesta de un candidato presidencial de distribuir anticoncepción
de emergencia de forma gratuita entre menores de 15 años, generó un gran impacto en
la sociedad. Dado que el Procurador es el defensor de los intereses de la sociedad, su
palabra tiene peso en ésta, y por lo tanto, no puede abusar de dicha posición para
infundir falsas creencia y temores infundados en la ciudadanía.
Aun más, el Procurador General fue más allá de la falsa afirmación sobre la
anticoncepción de emergencia y dijo que debería retirarse del mercado todo
medicamento que contuviera levonogestrel, pues éste era abortivo 47. Esta es una
afirmación falaz aún más grave que la anterior porque este es el componente de los
47
Comunicado
del
de
7
de
diciembre
de
http://www.procuraduria.gov.co/html/noticias_2009/noticias_685.html
2009.
Disponible
en:
44
anticonceptivos hormonales de uso habitual. En conclusión, el Procurador les está
diciendo a las mujeres no planifiquen porque están abortando. Una afirmación
absolutamente perversa en un país que tiene alta tasa de embarazos en adolescentes.
Todas las actuaciones anteriormente descritas, contrastan con el ejercicio transparente y
garantista que promovió el predecesor del Procurador Ordoñez, una vez expedida la
sentencia C-355 de 2006. Por ejemplo, para el segundo aniversario de la sentencia, se
publicó una edición de Procurando la equidad, dedicada exclusivamente al papel del
Ministerio Público en la vigilancia al cumplimiento de la sentencia C-355/06. En ella se
reconoce de manera explícita que existe un derecho a interrumpir el embarazo de
manera legal y segura en las circunstancias establecidas por la Corte Constitucional, se
identifican los principales obstáculos que menoscaban el derecho al aborto legal y seguro
y se hace una evaluación de la implementación de la sentencia en los primeros dos
años. 48 Esta postura garantista también se vio reflejada en la circular 038 de 2008 de la
Procuraduría General de la Nación, desafortunadamente derogada por la circular 030 del
2009. En esta circular se impartieron lineamientos para el ejercicio de las funciones de la
procuraduría frente a los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, partiendo de
la base de que “el acceso a los servicios de interrupción voluntaria del embarazo (en
adelante IVE) es un derecho fundamental de las mujeres amparado por la Constitución
Política de 1991”. 49
De acuerdo con lo hasta aquí expuesto el Procurador General de la Nación, Alejandro
Ordóñez Maldonado incurre en falta disciplinarias por el incumplimiento de deberes y la
extralimitación en el ejercicio de derechos y funciones 50.
2. EL PROCURADOR GENERAL DE LA NACIÓN NOMBRÓ Y MANTIENE COMO
DELEGADA PARA LA DEFENSA DEL MENOR Y LA FAMILIA A UNA PERSONA
INCURSA EN CONFLICTO DE INTERESES.
El Procurador General de la Nación incurrió en falta disciplinaria al haber nombrado como
Procuradora Delegada para la Infancia, la Adolescencia y la Familia, a la abogada Ilva
Myriam Hoyos Castañeda, quien está incursa en un conflicto de intereses, en tanto con
48
Procuraduría General de la Nación, Procurando la equidad: seguimiento y vigilancia a la garantía de los
derechos de mujeres y adolescentes desde una perspectiva de género, No 2, Mayo 2008.
49
Procuraduría General de la Nación, Circular 038 de 28 de Julio de 2008, pág. 1.
50
Artículo 23 de la Ley 734 de 2002.
45
anterioridad al ejercicio de su cargo y durante éste, ha mostrado vehementemente su
profunda animadversión en contra de los derechos sexuales y reproductivos.
La Procuradora Delegada para la Defensa de los Derechos de la Infancia, la Adolescencia y
la Familia, Ilva Myriam Hoyos Castañeda fue nombrada y ha sido mantenida en el cargo
por el Procurador General de la Nación, a pesar de la evidente existencia de un conflicto
de interés, en este caso un interés directo en la forma como debe regularse, interpretarse
y juzgarse los derechos sexuales y reproductivos, a partir de su propia concepción sobre el
tema, porque:
A. antes de ser funcionaria radicó más de 40 intervenciones en contra de la
demanda que dio origen a la sentencia C–355 de 2006, y se opuso a la misma
en diversos artículos de su autoría.
B. fue Presidenta y fundadora de la organización Red Futuro Colombia, que
también se opuso a la demanda de inconstitucionalidad y que continúa
realizando actividades en contra del derecho a la Interrupción Voluntaria del
Embarazo en ciertas circunstancias.
C.
su vinculación con Red Futuro Colombia, la relaciona de manera directa con
la campaña iniciada en Medellín para sacar el servicio de IVE de la Clínica de la
Mujer, con el demandante del Decreto 4444 de 2006, que reglamenta la
prestación del servicio de IVE, y con el solicitante de la nulidad del Auto 279
de 2009 en el que la Corte Constitucional avocó el cumplimiento de la
sentencia T-209 de 2008, que protegió los derechos de una niña que resultó
embarazada como producto de una violación y a quien se le negó y
obstaculizó el ejercicio de la decisión de interrumpir el embarazo.
Dentro del proceso de constitucionalidad instaurado contra los artículos del Código Penal
que excluían el derecho al aborto en todas las circunstancias, Ilva Myriam Hoyos, en ese
entonces persona particular, presentó 50 intervenciones firmadas por personas
extranjeras oponiéndose a la demanda y 2 intervenciones a nombre propio también en el
mismo sentido (anexo las páginas de la sentencia C-355 de 2006 donde quedó constancia
de estas intervenciones).
Así mismo, expuso posiciones en contra de la eventual decisión de inexequibilidad de los
artículos del Código Penal que prohibían el aborto en todos los casos, y que serían
materia de controversia jurídica después de proferida la sentencia C–355 de 2006 y
46
cuando ya ejercía como Procuradora Delegada para la Defensa de los Derechos de la
Infancia, la Adolescencia y la Familia.
Así por ejemplo, dijo que “el servicio del aborto en óptimas condiciones de salubridad
enmascara el derecho al aborto de la mujer embarazada” 51, y que “podría garantizárseles
a las personas naturales y jurídicas cuyas convicciones sean incompatibles con la
legalización o despenalización del aborto que sus impuestos y demás contribuciones
fiscales no se destinarán a la financiación del aborto u otras prácticas contraceptivas en
las instituciones del Estado. En tal caso podría plantearse, como contraprestación a la
existencia del servicio del aborto, la financiación de movimientos defensores del derecho a
la vida” 52.
Finalizó el artículo referido, diciendo:
“Frente al crimen del aborto debemos reivindicar con valentía el derecho del
hombre de actuar en conformidad con su juicio. Porque obligar al hombre a
actuar contra su conciencia es condenarlo por ella misma y negarle, sin más el
respeto debido a su dignidad. Ganar ese respeto exige que todo objetor de
conciencia asuma la responsabilidad que tiene frente al bien, el cual es la
forma como cada uno expresa el vínculo de la libertad con la verdad.
Ésta es la responsabilidad de todos aquellos que debemos oponernos, por
razones de conciencia, al injusto fallo de la Corte Constitucional.” 53
Luego, cuando ya había sido proferida la sentencia C–355 de 2006, la señora Hoyos escribió
el artículo La Corte Constitucional: Entre la Ley de Gradualidad y la Gradualidad de la Ley 54.
En este artículo señaló:
“Ya tendré tiempo para volver a pensar y a escribir sobre esa peculiar manera
de entender la justicia y los derechos, así como sobre el hecho de que unas
cuantas personas que defendieron las tesis abortistas hayan dejado de ser
minoría en nuestro país. Ficciones más que realidades. Sí, ficciones disfrazadas
de verdades. Falacias protocolizadas en papeles oficiales.
(…)
51
HOYOS, CASTAÑEDA. Ilva Myriam. La problemática jurídica de la objeción de conciencia. De nuevo sobre el
fallo del aborto. Ponencia presentada en la “Jornada de objeción de conciencia y aborto”, organizada por el
Departamento de Bioética de la Facultad de Medicina de la Universidad de la Sabana, con la colaboración
del Instituto de Humanidades y la Facultad de Derecho, Julio 25 de 2005, Pág. 75. Disponible en:
http://redalyc.uaemex.mx/redalyc/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=83210105.
52
Ibídem, Pág. 82
53
Ibídem, Pág. 83. Negrillas fuera del texto.
54
HOYOS CASTAÑEDA, Ilva Myriam. La Corte Constitucional: Entre la ley de gradualidad y la gradualidad de
la ley. A propósito del fallo sobre el aborto, Revista Dikaion, Universidad de La Sabana, Año 2006, Número
15. Disponible en: http://dikaion.unisabana.edu.co/index.php/dikaion/article/view/1346/1482
47
Sí, porque también nosotros hemos de empezar a recuperar la realidad, que
es la forma para que los derechos, también los derechos de los concebidos
pero no nacidos, no se queden en el papel. Si bien es cierto que “nunca para la
verdad es tarde”, no podemos dejar de pensar y de actuar. Así nuestro
pensamiento y nuestra acción sean quijotescos.” 55
“A partir de la distinción entre el nacido y el no nacido, la Corte concluye que
la protección del bien jurídico de la vida en cabeza del nasciturus “puede [en
ciertos casos] suponer cargas desproporcionadas para el derecho a la vida, a
la igualdad y a la salud de la mujer gestante” (numeral 2). La conclusión es
obvia: “La penalización del aborto en todas las circunstancias se revela de esa
manera como una medida claramente desproporcionada e irrazonable”
(numeral 4). Si se parte de una falsa premisa, la conclusión no puede ser sino
falaz. Si se adopta como punto de partida la tesis de que el ser humano
apenas concebido tiene una menor intensidad de vida que la mujer
embarazada, el bien jurídico de su vida no puede generar cargas al derecho a
la vida de la mujer gestante, porque los derechos predominan sobre los bienes
jurídicamente tutelados, lo que es una manera de decir que unos seres
humanos priman sobre otros. ¡Vaya manera de entender el principio de
igualdad en un “Estado social de derecho”!” 56
“Si se acepta, en gracia a la discusión, la tesis de que el aborto es la excepción,
la despenalización debe interpretarse y aplicarse, como corresponde a toda
excepción, en sentido estricto y, por ende, de manera restrictiva. Si la
justificación del aborto en Colombia es exceptiva, y si la Corte despenalizó
tres supuestos de hecho, el juez no puede iniciar proceso penal a la mujer
embarazada que ha realizado la acción abortiva en los supuestos
legitimados por la Corte. De conformidad con esta interpretación, la Corte
no estableció ningún derecho; por ende, el aborto, jurídicamente, no puede
considerarse bien debido ni bien exigido, y, en consecuencia, no es servicio
que el Estado deba prestar. No parece ser ésta la lógica del fallo, porque el
magistrado ponente ha hecho referencia de manera insistente a los derechos
de las mujeres y a la obligación de los médicos de prestar el servicio médico y
quirúrgico del aborto. Bien podría decirse que la regla general no fue el delito
del aborto: la regla general fue el derecho al aborto.” 57
“Sí, la Corte justificó el aborto indeseado y lo disfrazó en el primer supuesto.
Basta que la gestante aporte un certificado médico que acredite que ese
embarazo afecta su salud mental para que la conducta abortiva no se
penalice. ¿Puede afirmarse, entonces, que la decisión de la Corte tiene un
carácter exceptivo? ¿Puede decirse, como lo han hecho algunos medios de
comunicación –entre otros, el diario El Espectador–, que “la Corte encontró
un justo equilibrio entre las posiciones que han predominado en el debate”?
No, no hay justo equilibrio porque triunfaron las tesis abortistas.” 58
“Para la Corte –o, por lo menos, para el magistrado ponente, según las
declaraciones que ha dado a los medios de comunicación–, “hoy en día existe
el deber legal por parte de los médicos de prestar el servicio [de aborto] a la
mujer”. Ese deber, a juicio de dicho magistrado, va más allá de la objeción
de conciencia, porque un médico puede hacer uso de la objeción de
55
Ibídem, Pág. 56. Negrillas fuera del texto.
Ibídem, Pág. 62. Negrillas fuera del texto.
57
Ibídem, Pág. 64. Negrillas fuera del texto.
58
Ibídem, Pág. 65. Negrillas fuera del texto.
56
48
conciencia, pero tiene el deber de remitir a la paciente a otro médico que sí
esté dispuesto a cumplir con ese deber legal, “porque hoy en día ya existe el
deber legal de los médicos que no tengan problemas de conciencia de
prestarle el servicio [de aborto] a la mujer”. ¡Vaya manera de entender la
objeción de conciencia! ¡Vaya manera de dar primacía a los derechos de la
mujer, ya no sólo frente a los del no nacido sino también frente a los de los
médicos y los de las instituciones que se opongan a la práctica del aborto en
sus respectivos centros de salud!” 59
Teniendo en cuenta las afirmaciones hechas por la señora Hoyos Castañeda, la
Corporación Católicas por el Derecho a Decidir solicitó a la Procuradora Delegada
declararse impedida para conocer todos los asuntos relacionados con el seguimiento,
vigilancia y garantía de los derechos sexuales y reproductivos en razón del conflicto de
intereses en que se encontraba. La Procuradora respondió señalando que el impedimento
era improcedente por no referirse a un asunto concreto, que las posiciones tomadas en
sus artículos y sus manifestaciones ante medios de comunicación en la materia no eran
incompatibles con el ejercicio de la función pública y que no se cumplían los requisitos
para que se encontrara incursa en conflicto de intereses.
Finalizó indicando que “El Señor (sic) Procurador General de la Nación al nombrarme
como Procuradora Delegada para la Defensa de los Derechos de la Infancia, la
Adolescencia y la Familia, tuvo presente mis posiciones filosóficas, jurídicas y religiosas,
las cuales, he expresado, como Usted bien lo afirma, en diferentes escenarios de mi vida
profesional y académica y han contribuido al enriquecimiento del debate jurídico en
Colombia, sin que ello sea óbice para cumplir de manera eficaz, eficiente y oportuna los
deberes que la Constitución y la Ley establecen.” 60
Además de manifestar su oposición tajante a la sentencia C–355 de 2006, en estos
artículos, la hoy Procuradora Delegada para la Defensa de los Derechos de la Infancia, la
Adolescencia y la Familia, hizo parte del grupo de personas que solicitó la nulidad de
dicha sentencia. Igualmente, fue fundadora y presidenta de la organización Red Futuro
Colombia, organización opositora acérrima de la sentencia C–355 de 2006 y que prometió
y ha iniciado estrategias para revertir el alcance de los derechos humanos fijados por la
Corte Constitucional. En el comunicado que emitió al haberse proferido la sentencia de
constitucionalidad, dicha organización señaló:
“Cinco magistrados legitimaron el tránsito del delito del aborto al derecho «a
la interrupción del embarazo». Con esa «supuesta legitimación», la Corte
59
60
Ibídem, Pág. 66. Negrillas fuera del texto.
Escrito del 27 de julio de 2009 de la Procuradora Delegada para la Infancia, la Adolescencia y la Familia.
49
entregó la soberanía, que «reside exclusivamente en el pueblo» a
organizaciones internacionales que promovieron, patrocinaron y financiaron
el juego propuesto ante los jueces constitucionales por una de las
demandantes. Esa entrega de soberanía es un acto ofensivo contra el país
porque intereses económicos cedieron frente a los preceptos constitucionales y
a los tratados internacionales ratificados por Colombia que, sin distinción
alguna, reconocen el derecho a la vida desde el momento de la concepción.
(…)
La Red Futuro Colombia invita a todos los colombianos para que en nuestra
condición de Constituyente Primario actuemos como un ejército de ciudadanos
en defensa de la Constitución, cimentada en el respeto a la dignidad humana.
Frente al país nos comprometemos a adelantar las acciones jurídicas que
sean necesarias para revertir esta injusta decisión, para pedir del Estado la
promoción de los grupos pro-vida, para dejar a salvo el derecho a la objeción
de conciencia, para demandarle a los medios de comunicación a cumplir
fielmente el mandato constitucional «de informar y recibir información veraz e
imparcial» y para modificar, si es del caso, la Constitución Política que en
nuestro nombre ha sido promulgada.” 61
Además de la señora Hoyos, la nulidad de la sentencia C–355 de 2006 también fue
solicitada por los señores Luis Rueda Gómez y Aurelio Ignacio Cadavid López, quienes se
opusieron a la demanda de inconstitucionalidad instaurada a través de intervenciones
ciudadanas.
El señor Rueda, que hace parte de Red Futuro Colombia, organización de la que fue
presidenta la hoy Procuradora Delegada, y hace parte de la Fundación Laicos por
Colombia, otra organización opositora de la sentencia C–355 de 2006, también recusó al
Procurador de la época, Edgardo Maya Villazón; la Corte Constitucional rechazó dicha
recusación.
Además, el señor Rueda presentó la demanda de nulidad simple y la solicitud de
suspensión provisional del Decreto 4444 de 2006, que reglamentaba la prestación del
servicio de Interrupción Voluntaria del Embarazo, y cuya suspensión por la Sección
Primera del Consejo de Estado acarreó la confusión en la ciudadanía, prestadores del
servicio y funcionarios públicos que tenían dudas sobre la existencia del derecho a optar
por una IVE en las tres circunstancias señaladas en la sentencia C–355 de 2006.
Frente al Decreto 4444 de 2006, la entonces persona particular Ilva Myriam Hoyos, señaló
que el Decreto 4444 de 2006 reglamentaba la sentencia, acusación que hoy se esgrime en
la demanda de nulidad entablada por el señor Rueda, afirmó que la Corte legisló, indicó
61
Negrillas fuera del texto.
50
su preocupación por el papel del Ministerio de Protección Social y del Gobierno Nacional
en relación con el aborto, no sólo por la expedición del Decreto 4444 de 2006, sino
también por la de la Resolución 4905 de 2006, mediante la que se adoptó la Norma
técnica para la atención de la IVE, y por la firma del contrato de prestación de servicios
441 de 2006, “que tiene por objeto diseñar una estrategia de movilización social en los
medios de comunicación orientada a propiciar la adopción de hábitos y conductas
sexuales, a asegurar el ejercicio de los llamados derechos sexuales y reproductivos, entre
los cuales incluye el derecho al aborto”. 62
Es decir, la hoy Procuradora Hoyos, encargada de velar por la garantía de, entre otros, los
derechos sexuales y reproductivos, y delegada por el Procurador General para hacer
seguimiento a la implementación de la sentencia C–355 de 2006, ya ha manifestado no
sólo su total oposición a esta sentencia, al reconocimiento de los derechos sexuales y
reproductivos, a la actividad de la Corte Constitucional en la materia, sino que también
emitió un concepto de tipo jurídico sobre la presunta nulidad del Decreto 4444 de 2006,
hoy suspendido bajo los mismos argumentos, esta vez dados por su colega en la Red
Futuro Colombia, el señor Rueda.
Por su parte, Aurelio Ignacio Cadavid López, que al igual que el señor Rueda, hace parte
de la Red Futuro Colombia y Fundación Laicos por Colombia, no sólo se opuso a la
demanda que dio origen a la sentencia C–355 de 2006, sino que además solicitó la
nulidad de esta sentencia. Así mismo, en calidad de presidente de la Red Futuro
Colombia invitó junto con el hoy candidato a la Presidencia de la República, José Galat, y
Mónica Rueda Saiz, presidenta de la Fundación de la Vida Humana, otra organización
opositora a la sentencia de constitucionalidad, a hacer resistencia civil, en los siguientes
términos 63:
“La Corte Constitucional en sentencia C-355 del año 2006 autorizó el crimen
del aborto contra los seres más inocentes e indefenso que se gestan en los
vientres maternos.
En decisión más reciente, la Corte pretende imponer obligatoriamente la
apología de este incalificable delito y su difusión en los colegios y
establecimientos de educación. [hacen referencia a la implementación de
campañas de difusión de los derechos sexuales y reproductivos ordenadas por
la Corte Constitucional en sentencia T-388 de 2009, denominadas
erróneamente por el Procurador “campañas de promoción del aborto”]
62
“Entrevista: La Dra. Ilva Hoyos, líder pro-vida en Colombia, hace balance para HO cuando se cumple un
año de la despenalización parcial del aborto en el país”, 25 de mayo de 2007. Disponible en:
http://beatrizcampillo.blogspot.com/2009/07/entrevista-la-dra-ilva-hoyos-lider-pro.html
63
Avisos publicados en el diario El Tiempo el 23 de octubre de 2009, y en el periódico El Espectador el 25 de
octubre de 2009. Subrayas fuera del texto. Negrillas del original.
51
(…)
En efecto, la imposición del aborto comienza por desconocer el art. 11, que
establece “El derecho a la vida es inviolable. No habrá pena de muerte”.
Haciendo caso omiso del carácter categórico, absoluto e imperativo de esta
disposición, la Corte Constitucional hizo tres excepciones abusivas y
caprichosas.
(…)
Mas no sólo la imposición del aborto por la Corte Constitucional resulta estar
en contravía de la Carta Suprema y de la moral. También la imposición de
ahora, para que en los colegios y demás establecimientos de educación se
haga apología y difusión de este execrable crimen, resulta igualmente
violatoria del orden jurídico, ya que quebranta otros derechos fundamentales,
cuales son el de la libertad educativa (art. 67) y el de la libertad de conciencia,
consagrado en el art. 18, que dispone: “Se garantiza la libertad de conciencia.
Nadie será molestado por razón de sus convicciones o creencias ni compelido a
revelarlas ni obligado a actuar contra su conciencia”.
Con fundamento en las anteriores consideraciones, invitamos al pueblo de
Colombia y en especial a las mujeres y a las jóvenes gestantes, a los
educadores, a los médicos y paramédicos, no sólo a un vigoroso rechazo de
las decisiones de la Corte Constitucional sobre la práctica del crimen del
aborto o a su difusión y apología, sino también a un movimiento de
resistencia civil contra tales decisiones, por ser inconstitucionales,
arbitrarias, abusivas y tiránicas.”
El señor Cadavid, así mismo, solicitó la nulidad del auto 279 de 2009, en el cual la Corte
Constitucional avocó competencia sobre el cumplimiento de la sentencia T-209 de 2008,
en tanto sus órdenes no se estaban cumpliendo de forma idónea. La sentencia T-209 de
2008, por su parte, fue expedida con ocasión del caso de una niña que fue violada, quedó
en embarazo y le fue trasmitida una ITS (gonorrea), y que solicitó de acuerdo con los
requisitos constitucionales, la interrupción de su embarazo. Esta solicitud fue retardada y
obstaculizada no sólo por el sistema de salud sino por el sistema judicial, al punto que la
niña debió dar a luz, con la ITS sin tratamiento, tuvo una desviación de columna a causa
de la falta de capacidad física para el embarazo, y presentó graves alteraciones sicológicas
que generaron tres intentos de suicidio a causa de la violación, del tratamiento indigno
que se le dio en el sistema de salud, y de la imposición de dar a luz el producto de una
violación.
En esta sentencia se ordenó a la EPS Coomeva indemnizar a la niña, investigar a las IPS
que obstaculizaron el procedimiento de IVE, compulsar copias a las autoridades penales y
disciplinarias de las conductas en que pudieron incurrir fiscales y jueces en el caso, y a la
Procuraduría le ordenó hacer seguimiento a las órdenes dadas en la sentencia.
52
En el auto 279 de 2009, la Corte asumió la competencia para hacer cumplir la sentencia a
raíz de las irregularidades comprobadas que se presentaban en el proceso. El señor
Cadavid presentó solicitud de nulidad en contra de esta providencia, que fue rechazada
por improcedente en auto 330 de 27 de noviembre de 2009.
En conclusión, la actual Procuradora Delegada para la Defensa de los Derechos de la
Infancia, la Adolescencia y la Familia, expresó por vía de opinión y de mecanismos
procesales, su oposición al reconocimiento del derecho a optar por la Interrupción
Voluntaria del Embarazo, su intención como parte de la Red Futuro Colombia de revertir
la sentencia C–355 de 2006, y su desacuerdo con la garantía de los derechos sexuales y
reproductivos.
De la misma organización de la que fue Presidenta, hacen parte los señores Luis Rueda
Gómez y Aurelio Ignacio Cadavid López, opositores a la demanda C–355 de 2006,
promotores, el primero de la demanda en contra del Decreto 4444 de 2006, sobre
reglamentación del servicio de IVE, y el segundo, de la solicitud de nulidad en contra del
auto 279 de 2009 de la Corte Constitucional, en que se avocó el conocimiento del
cumplimiento de una sentencia de tutela en que se evidenciaron los obstáculos a la
prestación del servicio de IVE a una menor embarazada producto de una violación. El
señor Cadavid, además, como actual presidente de Red Futuro Colombia, llamó al
rechazo de y a la resistencia civil en contra de la sentencia de la Corte Constitucional.
De otra parte, la Clínica de la Mujer, que aún se encuentra en proyecto y que tiene como
objetivo prestar servicios de salud integral a la mujer, trabajando sobre 3 ejes básicos:
salud sexual y reproductiva, atención de violencias y salud mental 64, comenzó a ser
objeto, según el comunicado de 10 de septiembre de 2009 emitido por la Procuraduría
General de la Nación, de quejas de ciudadanos que habían “denunciado que esta clínica
será destinada para la práctica de abortos y que el proyecto carece de las garantías de
salud y bienestar para las mujeres.” 65
Estas quejas condujeron a que la Procuradora Delegada para la Defensa de los Derechos
de la Infancia, la Adolescencia y la Familia, iniciara vigilancia preventiva sobre el proyecto,
según el mismo comunicado. Las quejas en referencia provienen de una campaña
realizada por la organización fundada por Ilva Myriam Hoyos, Red Futuro Colombia y la
64
Oficio 200900532761 de la Secretaría de Salud del Municipio de Medellín. Respuesta a la petición radicada
por Women’s Link Worldwide sobre el proyecto de la Clínica de la Mujer.
65
Disponible en : http://www.procuraduria.gov.co/html/noticias_2009/noticias_493.htm
53
página web Estoesconmigo.org que había realizado anteriormente campañas que
buscaban promover su elección como magistrada de la Corte Constitucional. 66
Debido a que las denuncias se referían a la realización de abortos, y puesto que en la
sentencia C–355 de 2006 se permitió optar por éstos en tres circunstancias, ¿cuál es el
fundamento real para iniciar actividad preventiva en contra de una clínica por prestar
servicios de IVE, que deben ser prestados en toda la red de salud?
En el mismo comunicado, se anuncia que el Procurador General de la Nación, mediante la
Resolución 284 de 8 de septiembre de 2009, había creado un Grupo Especial de Trabajo
para ejercer control preventivo sobre el proyecto, en razón de las quejas de la ciudadanía
y la necesidad de salvaguardar los recursos públicos ($17.000’000.000). Esta pareciera ser
la razón que justifica el ejercicio de vigilancia preventiva sobre una clínica que no haría
más que cumplir sus obligaciones constitucionales con un enfoque de salud integral para
las mujeres, sin embargo, ninguna de las quejas (o no se dice en ninguna parte) tenían que
ver con el uso indebido de recursos públicos.
¿Cuál es el objeto de la función preventiva frente a un proyecto que pretende
implementar un derecho humano reconocido por el más alto Tribunal Constitucional del
país? ¿Si las denuncias de la ciudadanía tenían que ver con que en la Clínica de la Mujer se
realizarían abortos, de donde sale el fundamento de crear el grupo de trabajo para
salvaguardar recursos públicos?
Si de acuerdo con la misma comunicación, uno de los objetivos del grupo de trabajo es
que el proyecto se desarrolle dentro de los lineamientos previstos en la Constitución, las
leyes y la jurisprudencia existente sobre la materia, ¿por qué ejercer la función preventiva,
si en esta Clínica se garantizaría, precisamente, el ejercicio de un derecho reconocido
constitucionalmente por el que debe velar la Procuraduría General de la Nación? Todas
estas anteriores consideraciones fueron tomadas en la Resolución 284 de 8 de septiembre
de 2009.
A partir de la presión hecha no sólo por la ciudadanía, sino también por la Procuraduría
General de la Nación, el Alcalde de Medellín cedió y renunció a la práctica de
Interrupciones Voluntarias del Embarazo en tal clínica. 67
66
Ver http://www.lasillavacia.com/historia/4529
54
Más recientemente la Procuradora Delegada para la Infancia, la Adolescencia y la Familia,
dijo, con ocasión de la solicitud de nulidad de la sentencia T-388 de 2009, presentada
directamente por el Procurador General de la Nación, que las entidades a las cuales les
habían ordenado el diseño e implementación de campañas masivas de promoción de los
derechos sexuales y reproductivos, no podían cumplir dicha orden hasta que no se
resolviera el incidente de nulidad. 68
Carente de todo sustento jurídico, pues las solicitudes de nulidad no constituyen recursos
que afecten la ejecutoriedad de una sentencia, la afirmación hecha por una funcionaria
pública del rango de la Procuradora Delegada, que se espera tenga el conocimiento
jurídico para no generar falsas creencias en la ciudadanía, generó tal caos, que el
Presidente de la Corte Constitucional, Nilson Pinilla Pinilla tuvo que aclarar que la
sentencia era de obligatorio cumplimiento con independencia de la interposición de la
solicitud de nulidad por la Procuraduría General de la Nación. 69
Además, en relación con esta misma solicitud de nulidad, se presentó en calidad de
Procuradora Delegada, al programa de televisión Veredicto del Canal Capital, para
explicar por qué se presentó la nulidad contra la sentencia T-388 de 2009. Al ver el
programa queda claro que la Procuraduría no ataca la orden de la Corte Constitucional de
diseñar e implementar campañas de derechos sexuales y reproductivos por una violación
flagrante al debido proceso –única causal de nulidad de las sentencias de la Corte. Por el
contrario, es evidente que se trata de reabrir el debate cerrado en la sentencia que
guarda plena concordancia con la obligación constitucional de formar en derechos
humanos:
Ilva Myriam Hoyos (IMH): Por lo tanto, ¿que podríamos esperar de una
campaña de promoción de pedagogía de la sentencia C-355 de 2006, frente a
lo que se ha logrado en el país en relación con el tema de las cátedras sobre
sexualidad?
(Habla la testigo)
IMH : Es decir, la cátedra de sexualidad en el país ha fracasado, pero
queremos en todo caso queremos establecer una nueva cátedra que tenga
éxito en la difusión de la sentencia C-355 de 2006.
67
De regreso al pasado, artículo de la revista Semana del 19 de septiembre de 2009, disponible en:
http://www.semana.com/noticias-nacion/regreso-pasado/128916.aspx, No habrá abortos en la Clínica de la
Mujer,
artículo
publicado
el
21
de
septiembre
de
2009
en
la
página:
http://www.estoesconmigo.org/index.php?option=com_content&task=view&id=474&Itemid=56
68
Declaración rendida a Caracol Radio disponible en: http://www.caracol.com.co/nota.aspx?id=907681
Declaración disponible en: http://www.elespectador.com/articulo171826-denuncian-negligencia-medicapracticar-aborto
69
55
(Habla la testigo)
IMH: ¿Cómo ve usted el papel de los padres de familia en esa cátedra, en esa
pedagogía de la temática de sexualidad, de los derechos sexuales y
reproductivos? ¿No tienen ellos también unos derechos que deben ser
respetados?
(Habla la testigo)
IMH: En este momento la T-388 de 2009 no está ejecutoriada, y por lo tanto,
no obliga hasta que la Corte Constitucional no se pronuncié sobre la solicitud
de la nulidad presentada.
(…)
En esa sentencia (C-355 de 2006) la Corte no hace referencia al derecho al
aborto, el derecho al aborto no está reconocido por la Corte Constitucional en
la sentencia C-355 de 2006.
(…)
Si nosotros hubiéramos dejado pasar esta sentencia, como no conocimos en su
momento la T-209 de 2008 que también amplió la jurisprudencia en la
temática del aborto, ahí si estaríamos incumpliendo nuestro deber.
(…)
Presentador: Me están informando en este momento de la producción que
usted ha decidido no tener testigos, no presentar testigos. ¿Es así?
IMH: Si Néstor, he decidido no tener testigos y quiero explicarlo.
Presentador: Me quiere decir por qué por favor, podría explicarle a los
televidentes.
IMH: si lo explicaré, lo explicaré, precisamente por considerar que no era
conveniente en un programa de esta importancia que tuviéramos una postura
en la cual como que invitáramos a que unos están en contra nuestra, y otros a
favor. No, la Procuraduría es consciente que es un tema polémico, que es un
tema difícil, y ha considerado que el debate es necesario, el debate lo plantea
al fin y al cabo también el Procurador con sus declaraciones, con su acción
ante la Corte Constitucional y para no entrar a manifestar que hay un sector
de la opinión y que trabajamos o con los jueces objetores o con algunas
personas defensoras del tema de la vida hemos decidido participar en este
programa sin querer dividir, sin querer decir la Procuraduría tiene sus propios
testigos. No, la Procuraduría es abierta, la Procuraduría es abierta a toda la
sociedad y en ese sentido yo cumpliré la función de defensora y testigo a la
vez.
(…)
La Procuraduría defenderá los derechos, defenderá las mujeres, defenderá a
los objetores de conciencia, defenderá a los no nacidos, y aplicará estricta y
56
restrictivamente la sentencia C-355 de 2006, según los propios lineamientos
que ha dado la Corte Constitucional.” 70
Las opiniones dadas por la Procuradora Delegada en contra de los derechos sexuales y
reproductivos, antes de ser nombrada en el cargo, su determinación pública de revertir la
sentencia C–355 de 2006, su conexión irrefutable con quienes demandaron el Decreto
4444 de 2006, solicitaron la nulidad del auto 279 de 2009 e invitaron al rechazo de la
sentencia de constitucionalidad y a la resistencia civil en contra de los casos en que se
reconoció el derecho a optar por una IVE, implican sin lugar a dudas que la funcionaria se
encuentra en un conflicto de interés.
El conflicto de interés está definido en el artículo 40 de la Ley 734 de 2002, de la siguiente
manera:
“Artículo 40. Conflicto de intereses. Todo servidor público deberá declararse
impedido para actuar en un asunto cuando tenga interés particular y directo
en su regulación, gestión, control o decisión, o lo tuviere su cónyuge,
compañero o compañera permanente, o algunos de sus parientes dentro del
cuarto grado de consanguinidad, segundo de afinidad o primero civil, o su
socio o socios de hecho o de derecho.
Cuando el interés general, propio de la función pública, entre en conflicto
con un interés particular y directo del servidor público deberá declararse
impedido.” (negrillas fuera del texto)
El conflicto de intereses puede configurarse en dos supuestos. De una parte, el
impedimento del funcionario público para actuar en un asunto específico cuando tenga
interés particular y directo en su regulación, gestión, control o decisión. De otra, el
impedimento del funcionario público derivado del conflicto entre un interés particular y
directo de aquél, y el interés público, propio a la función pública.
Es en este último supuesto de conflicto de interés que se encuentra la Procuradora
Delegada para la Infancia, la Adolescencia y la Familia, pues su interés particular y directo
contradice el interés general propio a la función que ejerce. La Procuradora Delegada, tal
como he mostrado hasta aquí tiene un interés directo en retrotraer los avances
alcanzados en materia de derechos sexuales y reproductivos, especialmente en revertir la
sentencia C–355 de 2006. Este interés colisiona de forma directa con el interés general
70
Programa disponible en:
http://www.youtube.com/view_play_list?p=614BAE428AFA3665&search_query=Ilva+Hoyos
57
propio a la función, que no es otro que garantizar los derechos humanos y las decisiones
judiciales, conforme con los parámetros establecidos en los tratados de derechos
humanos, la Constitución, y de acuerdo con los alcances que les dan los organismos que
los interpretan con autoridad.
El conflicto de interés se hace aun más evidente, cuando como sucedió en el caso de la
Procuradora, frente a la obligación constitucional de enseñar derechos humanos que
concretó la Corte Constitucional en la sentencia T-388 de 2009, al ordenar la
implementación de campañas de derechos sexuales y reproductivos, hizo una afirmación
falaz para confundir, no sólo a la ciudadanía sino a los funcionarios públicos, sobre la no
obligatoriedad de la misma por la radicación de un incidente de nulidad en su contra. El
intento de dar implementación a su interés particular es la única causa posible para que
una funcionaria de su rango y con su formación jurídica hiciera afirmaciones de este tipo.
Ahora bien, el Procurador General de la Nación conocía los antecedentes de la señora
Hoyos Castañeda, pues como ella misma lo dice, analizó su hoja de vida y la eligió por su
perfil filosófico, jurídico y religioso; al analizar su hoja de vida debió conocer su oposición
acérrima a la sentencia C–355 de 2006 y sus estrechos vínculos con Red Futuro Colombia.
A pesar del evidente conflicto de interés, la nombró para ejercer el cargo de mayor nivel
relacionado con la implementación de la sentencia y la garantía de los derechos sexuales
y reproductivos.
Luego, ya como funcionaria, el Procurador la mantiene en el cargo a pesar de sus
estrechos vínculos con opositores conocidos de la sentencia C–355 de 2006 que han
iniciado acciones para revertir los alcances de los derechos sexuales y reproductivos,
como lo anunció Red Futuro Colombia, y la respalda en la decisión de ejercer vigilancia
previa sobre un proyecto de clínica dirigida a prestar servicios de salud integral a las
mujeres más vulnerables de Antioquia, con el argumento de que allí se realizarían
abortos.
El Procurador General de la Nación no sólo tiene un deber de elegir a los funcionarios de
dirección y confianza, de acuerdo con los requisitos legales, sino también de acuerdo con
los parámetros constitucionales y legales de la función pública. No puede elegir como
defensora de los derechos sexuales y reproductivos a quien está manifiestamente en
contra de los mismos, y además se ha comprometido públicamente a revertir una
sentencia que tiene que hacer cumplir por su función. Por esta acción el Procurador es
directamente responsable.
58
Adicionalmente, debe recordarse que de acuerdo con los parámetros constitucionales de
la delegación, ésta implica que el delegado realizará las actuaciones delegadas como si
fuera el titular de la competencia 71, y éste (el delegante) tiene competencia para
reformar o revocar los actos del delegatario y para revocar el acto de delegación 72.
Ahora bien, en virtud del papel que la Constitución le otorga al Procurador General de la
Nación como supremo director del Ministerio Público 73, los diferentes órganos y
funcionarios que lo conforman se encuentran articulados y subordinados orgánica,
funcional y técnicamente a dicha institución y concretamente al referido funcionario,
quien orienta, dirige y señala las directrices o pautas generales que deben ser
observadas por los referidos órganos a efecto de asegurar la coordinación de las
funciones y la unidad en las correspondientes acciones y decisiones.” 74
Dentro de la estructura orgánica del Ministerio Público, los Delegados del Procurador son
un alter ego de éste, es decir, hacen como si fuera él y por lo tanto, sus actuaciones lo
vinculan plenamente; el delegado actúa en nombre del delegante, y su actuación es de
plena potestad, autonomía en la ejecución y confianza intuito personae. Adicionalmente,
en condición también de agentes del Ministerio Público, están bajo la subordinación de
un superior, ante quien responden 75.
La función de dirección que corresponde al Procurador General de la Nación tiene como
fundamento el “asegurar que las acciones y actividades que acometa el órgano de control
efectivamente traduzcan las metas y objetivos que la propia Constitución le señala en el
artículo 277, cuando preceptúa que, a más de la tradicional función de supervigilar la
conducta oficial de quienes desempeñen funciones públicas, y de ejercer el poder
disciplinario, ésta debe encaminarse a:
- Hacer efectivo el Estado de derecho, vigilando
que se cumpla la Constitución, las leyes, las decisiones judiciales y los actos
administrativos (num. 1); - A proteger y asegurar la efectividad de los derechos humanos
(num. 2) (…)” 76
Teniendo en cuenta lo hasta aquí mostrado, se tiene que el Procurador General de la
Nación incurre en una falta disciplinaria por nombrar y mantener en el cargo de
Procuradora Delegada para la Infancia, la Adolescencia y la Familia a la abogada Ilva
Myriam Hoyos Castañeda, quien se encuentra incursa en un conflicto de interés. Además,
71
Corte Constitucional, sentencias C-936 de 2001 y C-372 de 2002.
Corte Constitucional, sentencias C-382 de 2000 y C-372 de 2002.
73
Constitución Política, artículo 275.
74
Corte Constitucional, sentencia C – 245 de 1995. Reiterado en sentencia C-743 de 1998.
75
Corte Constitucional, sentencia C- 245 de 1995.
76
Corte Constitucional, sentencia C- 245 de 1995.
72
59
es necesario tener en cuenta que las actuaciones de la Procuradora Delegada
comprometen directamente al Procurador General de la Nación, por tratarse de su alter
ego. El Procurador tiene la obligación no sólo de elegir bien a sus delegados, sino también
de vigilar sus actuaciones.
3. Petición
3.1 Por todo lo expuesto solicito respetuosamente al señor Magistrado iniciar
investigación disciplinaria en contra del Procurador General de la Nación, para que previo
el trámite correspondiente, la Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia le sancione por
las faltas en que ha incurrido.
3.2 Si la H. Corte considera que alguna de las conductas del Procurador aquí descritas
puede constituir un hecho punible, le solicito respetuosamente compulsar copias a las
autoridades competentes.
IV. PRUEBAS
1. Adjunto a este escrito y solicito que sean tenidas como pruebas las siguientes
documentales:
Documento
Folio
Circular 0030 de 13 de mayo de 2009 del Procurador General de la Nación.
Comunicado de prensa de 21 de octubre de 2009 anunciando la solicitud de
nulidad de la sentencia T 388 de 2009 por parte del Procurador General de la
Nación.
Solicitud de Nulidad de la sentencia T 388 de 2009 del Procurador General de la
Nación.
ORDOÑEZ MALDONADO, Alejandro. El nuevo derecho. El nuevo ordenamiento
mundial y la revolución cultural. Ideología de Género. Utopía trágica o
subversión cultural. Ediciones Doctrina y Ley Ltda. Bogotá, 2007.
Solicitud de declaración de impedimento dirigida por la organización no
gubernamental Colombia Diversa al Procurador General de la Nación.
Escrito de 9 de junio de 2009 del Procurador General de la Nación dirigido a
Colombia Diversa en relación con la solicitud de declaratoria de impedimento.
Columna Oscurantismo galopante de María Elvira Bonilla, publicada el 30 de
octubre de 2009 en la edición online del diario El Pais de Cali
Daniel Samper Pizano, columna del 31 de octubre de 2009, publicada en el
diario El Tiempo
Columna del 23 de octubre de 2009 de Cecilia López, publicada en el periódico
El Mundo de Medellín.
Columna Cuestión de Conciencia de María Elvira Samper, publicada en la revista
Cambio el 28 de octubre de 2009.
Columna Dios nos libre de Pascual Gaviria, publicada en El Espectador del 3 de
noviembre del 2009.
Artículo de Juanita Durán Vélez publicado en semana.com el 13 de noviembre
60
de 2009
Comunicado de prensa de 7 de diciembre de 2009 del Procuraduría General de
la Nación en que se anuncia la presentación del concepto según el cual la
píldora de anticoncepción de emergencia es abortiva.
“Píldora del día después es abortiva”: Procurador General, artículo del periódico
El Espectador del 7 de diciembre de 2009.
Propuesta de dar gratis píldora del día después a menores de 15 años fue
rechazada por el Procurador, artículo publicado en El Tiempo.
Proponen en Colombia dar gratis píldora del día después a menores de 15 años,
artículo de la agencia EFE del 7 de diciembre de 2009.
Polémica nacional desata propuesta de la píldora del día después, artículo del 7
de diciembre de 2009 en Caracol Radio.
Propuesta de la ‘píldora del día después’ provoca polémica, reportaje de CM&
disponible en: http://www.cmi.com.co/?ir=noticia&nota=38187&seccion=8
Rafael Pardo apoya la “píldora del día después”, en Semana. com del 7 de
diciembre de 2009.
Rafael Pardo propone dar de forma gratuita la ‘píldora del día después’ a
menores de 15 años, en W Radio del 7 de diciembre de 2009.
Páginas de la sentencia C-355 de 2006 donde quedó constancia de las
intervenciones de Ilva Myriam Hoyos.
HOYOS, CASTAÑEDA. Ilva Myriam. La problemática jurídica de la objeción de
conciencia. De nuevo sobre el fallo del aborto.
HOYOS CASTAÑEDA, Ilva Myriam. La Corte Constitucional: Entre la ley de
gradualidad y la gradualidad de la ley. A propósito del fallo sobre el aborto.
Solicitud de declaratoria de impedimento hecha por Católicas por el Derecho a
Decidir a la Procuradora Delegada para la Infancia, la Adolescencia y la Familia
disponible.
Escrito del 27 de julio de 2009 de la Procuradora Delegada para la Infancia, la
Adolescencia y la Familia frente a la solicitud de declaratoria de impedimento
de Católicas por el Derecho a Decidir.
Comunicado de Red Futuro Colombia emitido el 11 de mayo de 2006 en
relación con la sentencia C – 355 de 2006.
Páginas de la sentencia C – 355 de 2006 en que constan las intervenciones de
Luis Rueda Gómez y Aurelio Ignacio Cadavid López.
Demanda de nulidad simple y solicitud de suspensión provisional del Decreto
4444 de 2006 presentada por Luis Rueda Gómez.
Entrevista: La Dra. Ilva Hoyos, líder pro-vida en Colombia, hace balance para HO
cuando se cumple un año de la despenalización parcial del aborto en el país”, 25
de mayo de 2007.
Primera página del Auto 360 de 2006, en que constan los nombres de los
solicitantes de la nulidad de la sentencia C – 355 de 2006.
Avisos publicados en el diario El Tiempo el 23 de octubre de 2009, y en el
periódico El Espectador el 25 de octubre de 2009.
Solicitud de nulidad del Auto 279 de la Corte Constitucional presentada por
Aurelio Ignacio Cadavid López.
Oficio 200900532761 de la Secretaría de Salud del Municipio de Medellín, sobre
la Clínica de la Mujer.
Comunicado de 10 de septiembre de 2009 emitido por la Procuraduría General
de la Nación, sobre la Clínica de la Mujer.
Resolución 284 de 8 de septiembre de 2009 del Procurador General de la
Nación.
De regreso al pasado, artículo de la revista Semana del 19 de septiembre de
2009
61
No habrá abortos en la Clínica de la Mujer, artículo publicado el 21 de
septiembre de 2009.
Procuraduría General de la Nación, Procurando la equidad: seguimiento y
vigilancia a la garantía de los derechos de mujeres y adolescentes desde una
perspectiva de género, No 2, Mayo 2008.
Procuraduría General de la Nación, Circular 038 de 28 de Julio de 2008, pág. 1.
Columna Alcalde sitiado de Ramiro Bejarano publicada el 7 de Noviembre de
2009 en el periódico El Espectador.
Nostalgias de la inquisición de Cristina de la Torre publicada en El
Espectador el 26 de Octubre de 2009.
Procurador general… no personal, Editorial Revista PODER, 31 de Octubre
de 2009.
Carta del lector Orlando Arciniegas Lagos, publicada por El Tiempo, el 29
de Octubre de 2009.
El cruzado, revista SEMANA, 24 de octubre de 2009.
Los programas de televisión ha que se ha hecho referencia en este escrito pueden ser
consultados así:
Programa
de
televisión
José
Gabriel
http://www.caracoltv.com/producciones/informativos/elprogramadejosegabriel/video15
8906-sara-corrales-revela-sus-ultimas-confesiones-la-noche-de-jose-gabr
Declaración rendida a Caracol Radio por la Procuradora Delegada para la Infancia, la
Adolescencia y la Familia disponible en: http://www.caracol.com.co/nota.aspx?id=907681
Programa Veredicto en que aparece la Procuradora Delegada para la Infancia, la
Adolescencia
y
la
Familia
disponible
en:
http://www.youtube.com/view_play_list?p=614BAE428AFA3665&search_query=Ilva+Hoy
os
Declaración del Presidente de la Corte Constitucional disponible en:
http://www.elespectador.com/articulo171826-denuncian-negligencia-medica-practicaraborto
2. Solicito se oficie a la Procuraduría General de la Nación para que aporte todos los
documentos (circulares, directrices, requerimientos y correspondencia)
relacionados con la implementación de la sentencia C-355 de 2006, así como los
documentos relativos a otras sentencias de tutela relacionadas con el derecho a la
IVE.
V. Competencia
La Corte Suprema de Justicia en los términos de los artículos 83 y 192 de la ley 734 de
2002, es competente para conocer de esta queja disciplinaria toda vez que el Procurador
General de la Nación fue ternado por el Consejo de Estado.
VI. Notificaciones
A la firmante en la
62
Al Procurador General de la Nación en Carrera 5a No. 15-60
Atentamente,
MÓNICA DEL PILAR ROA LÓPEZ
C.C. No.
de Bogotá
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