AÑO in. -Tomo i. 10 de Diciembre de 1901. * Kúm. 11. <£fa Cnergia Cíécírioa REVISTA GENERAL D E ELECTRICIDAD Y SUS APLICACIONES P U B L I C A C I Ó N Q U I N C E N A L s» U M. I L U S T R A D A 1 O Sobre la afinidad química (continuación), por José Echegaray.—Estación Central Eléctrica de Praga, de Emilio Kolben, por Luis de la Peña.—Aparatos protectores contra los excesos perjudiciales de tensión (Memoria leída en la sesión del 26 de Marzo de 1901, por el Dr. Gustavo Benischke, en la Sociedad electrotécnica de Berlín) (continuará), por B. \V. Cálculo detallado de una dinamo Compound de corriente continua (continuación), por David Blumenthal.—Nuevo limitador de corrientes, por L. S. C. —Aiiálisis electrolítico de los latones, por Severo Gómez Ntiñez.— Bibliogiafia. - Crónica científica: Interruptor electrolítico. - Interruptor automático para aparatos eléctricos de cocina. —Lámpara con tres arcos. - Nueva lámpara incandescente regenerable.—Accidentes en las líneas de tranvías e l é c tricos; Sistema protector empleado en Santiago de Chile.—Información.—Libros y Revistas. —Ofertas y demandas.— Preguntas y lesfw.stas.—Correspondencia particular. SOBRE LA AFINIDAD QUÍMICA (CONTINUACIÓN) Repitatnos esto mismo de otro modo. Si el átomo A estuviera en A y el átomo A' en B, ó bien si oscilaran con pequetias amplitudes, el primero á un lado y otro de A, el segundo á un lado y otro de B, por ejetnplo, de a á a' ó á la inversa, estos dos átotnos constituirían una coiTibinación quítnica sobre el armazón estático que representan los dos puntos A y B. Por el contrario, si los dos átomos estuvieran, el primero en A, el segundo en D; ó dicho con más exactitud, el pequeño vibrara con pequeñas amplitudes á un lado y á otro de A y el segundo, asimismo, vibrara con amplitudes también pequeñísimas á un lado y á otro de D, por ejetnplo, entre A' y A'', pero sin alcanzar nunca á la región B C; en este caso, los dos átomos A y A' no estarían en combinación química, porque por hipótesis, las distancias A A', A A " y A D son, por hipótesis, del orden físico. En el lenguaje vulgar hoy en uso, no se diría que A y A' están sornetidos á la fuerza de afinidad, sino á fuerzas análogas, á las que hoy se llaman cohesión, adherencia, capilaridad ú otras análogas. En resumen, el sistema A B constituiría una combinación química; el sistema A D una agrupación física. ¿Cómo se pasa de ésta á la primera? Este es el problema de la combinación química, y en rigor parece sencillísimo. El átomo A ocupa la posición absoluta ó relativa A. El átomo A' vibra á un lado y á otro de D. La fuerza viva de esta vibración representa, como se sabe, el calórico almacenado en el átomo A', y si se tratase de gases, podríamos decir que la temperatura, sólo que entonces las condiciones iniciales del problema serían distintas. No confundamos, pues, unas cuestiones con otras. Mientras el átomo A no haga otra cosa que vibrar á un lado y á otro de su centro A y el átomo A' no amplíe su excursión vibratoria á A' A'', los dos átomos no se combinarán ni podrá realizarse la combinación A B. Esto explica que entre dos átomos puede e.xistir una gran afinidad, su combinación será posible en determinadas condiciones, y una vez verificada, podrá dar origen á un sistetna por todo 2SO ^ _ L A ENERGLA ELÉCTRICA extremo estable; y sin embargo, aun estando en presencia ambos átomos, no se combinarán si la temperatura es la que corresponde, por ejemplo, á la vibración A' A". *' Pero la temperatura aumenta y la combinación se verifica; y precisamente se verifica porque aumenta la temperatura, que á temperaturas menores no podría verificarse. Esto explica un hecho, al parecer paradójico, y es el siguiente: Dos átomos no se combinan: se aumenta la temperatura, es decir, se introduce un elemento, que tiende por sí solo á destruir toda combinación, y en este caso es cuando la combinación que á menor temperatura no había podido realizarse, se realiza. El exceso de temperatura favo­ rece lo que al parecer debía hacer imposible. Veamos cómo esto se explica: Mientras el átomo M' oscila desde A' á A'', y en su oscilación no llega al punto crítico C, la combinación es evidente que no puede verificarse. Pero si la amplitud de la oscilación aumenta y dicho átomo oscila, por ejemplo, desde c á d, á un lado y á otro de D, la combinación se verifica ó tiende á verificarse; porque en el punto c la fuerza que actúa sobre el átomo es atractiva, como lo indica la ordenada positiva c c' y el átomo en cuestión continuará moviéndose hacia la izquierda y pasará por el punto B, que co­ rresponde á la combinación química de los dos átomos. Vemos, pues, que la posibilidad de la combinación consiste en que el átomo en su oscilación calorífica penetre en la renglón B C. Un aumento de calor determina ó puede determinar una combinación química que á menor temperatura y á igualdad de las demás condiciones, nunca hubiera podido verificarse. Pero penetremos más en el fondo del problema. Supongamos el átomo M' en el punto D sin ninguna velocidad. Es un punto de equilibrio, y no se moverá espontáneamente. Comuniquémosle una velocidad hacia el origen, de suerte que tenga una fuerza viva M' V,*. Si esta fuerza viva es tal que el átomo no llega al punto C , porque al llegar al punto A ' el trabajo resistente haya destruido toda la fuerza inicial, la combinación no se verificará. Claro es que el punto A' estará determinado por esta condición: que el trabajo resistente destruya la fuerza viva, pero este trabajo está representado por el área A' P' D puesto que el elemento de esta área es d x multiplicada por la fuerza, es decir, por la ordenada de la curva. Por el contrario, si el área C P' D es menor que M' V„* el átomo llegará al punto C con cierta velocidad hacia el origen; penetrará en la región B C, y su velocidad irá aumentando, por­ que irá aumentando su fuerza viva proporcionalmente á las áreas de la curva B b ' c C. Al llegar al punto B su fuerza viva estará representada por - i M' V(,« — área C P' D - + - área B t/ c' C cantidad positiva, toda vez que hemos supuesto que el primer término es mayor que el segundo y que el último término es esencialmente positivo. (ContÍ7ii(m-á.) LA ENERGÍA ELÉCTRICA 2;i Estación Central Eléctrica de Praga, de Emilio Kolben. E 'sTA-estación, recientemente instalada, ya funcionando desde hace algún tiempo, es una de i las primeras centrales de corriente alterna trifásica de alta tensión, con la que se obtiene ''J^ una distribución de energía eléctrica simultáneamente para tracción, para motores y también para el alumbrado público y privado. La distribución se efectúa de una sola instalación de máquina agregada, con un solo sistema de conductores ó sobre la misma red. Y como esta instalación corresponde á todas las exigencias modernas, daremos una descripción particular, ya en cuanto se refiere á la maquinada, ya á los conductores, como también una relación sobre el resultado de los ensayos obtenidos para dar un mayor y más importante rendimiento en la instalación de centrales públicas. I.- A n t e c e d e n t e s . Durante el año 1894 se sintió en la ciudad de Praga la imperiosa necesidad de ampliar la preexistente red de tranvías de sangre mediante un aumento de concesión á Sociedad Belga, y se inició, naturalmente, en aquel tiempo la discusión sobre la aplicación de la tracción eléctrica á los tranvías. Lo mismo la población que la representación Comunal, encontraron oportuno autorizar á la Sociedad Belga para hacer la instalación eléctrica, y que en alguna línea de tranvías se aplicase la tracción eléctrica explotada por la propia Comunal. A tal objeto se autorizó para instalación de una central provisional en la llamada «Karlshofe», tomando la instalación hidráulica municipal, de la cual el tranvía eléctrico municipal recibiere la energí.a. Existía ya una pe- : quena instalación á 600 voltios para alimentar las lámparas de arco de la plaza Wengel. ^ Al propio tiempo se suscitó la cuestión de la oportunidad de distribuir la corriente eléctrica i para el alumbrado tanto público como privado, mucho' más cuanto que en Karolinenthal, Smi- i chon, Kónigl Weinberge, Zirkow y Koschir, existían ya pequeñas instalaciones aisladas. Se encargó á la Dirección d e la Oficina del Gas municipal, el estudio de una instalación para producir corriente eléctrica para aplicaciones de alumbrado, fuerza motriz y tracción en el tranvía municipal, y de presentar los proyectos oportunos á la Comisión nombrada. La Comunal anunció la creación de la oficina y la explotación por su cuenta de la instalación eléctrica. Bajo la dirección del ingeniero jefe de la oficina del gas, Sr. Pelikan, se hicieron cinco proyectos que se propusieron al Consejo Municipal. En el primer proyecto se proponía hacer la instalación con cuatro estaciones intramuros con distribución de la corriente á la tensión de 2 X i lO voltios. El segundo proyecto se refería á la instalación de una central única de corriente continua con un cierto número de estaciones secundarias con acumuladores á cargarse en la central de alta tensión, mientras que la red de distribución sería igualmente á tres hilos á 2 x 100 voltios. La central eléctrica principal debía estar en la proximidad de la estación del ferrocarril del gobierno. En el tercer proyecto se proponía la instalación de una central de corriente alterna de alta tensión situada en el V I I barrio, Ploleschovic, á la orilla izquierda del Moldava. Por medio de convertidores se reduciría la corriente alterna á continua destinada también á la carga de acumuladores y manteniendo para la distribución el sistema de tres hilos. El cuarto proyecto se refería á una estación central de corriente alterna de alta tensión, pero con transformación directa y con una red secundaria de corriente alterna.. El quinto proyecto proponía la instalación en el llamado «Paradiesgarten» de una gran central de corriente continua, de la cual directamente, mediante una red á tres hilos de 2 X lOO voltios, se distribuiría en las inmediaciones parte de la corriente eléctrica, y la restante se utilizaría en los centros más importantes de consumo para la carga de acumuladores. ^ 5 2 , LA ENERGÍA ELÉCTRICA Estos proyectos se sometieron al examen de una comisión de competentes compuesta de los señores profesor Domalip, profesor Puloj, consejero áulico Kareis y profesor Dorfel. Dicha comisión recomendó, ante todo, la instalación de una estación central única en sitio alejado del centro del movimiento de la ciudad, y con la que se pudiese distribuir corriente para alumbrado público y privado, fuerza motriz y de tracción para el tranvía eléctrico. Con esta conclusión como base, se abrió im concurso poco extensamente especificado, que dio escaso resultado á causa de la poca importancia de las varias proposiciones hechas, no permitiendo resolver; por consiguiente, la Oficina Eléctrica Municipal, ya funcionando, se aumentó con dos peritos, profesores de la Escuela técnica superior, Sres. K. Domalip y R. Dorfel, para redactar un programa detallado y abrir nuevo concurso entre los que ya habían hecho precedentemente proposiciones. El citado programa contenía las siguientes disposiciones: I. Instalación de una gran central única en el VII barrio, Holeschovic. para producir corriente trifásica de alta tensión. II. Que la corriente para el tranvía eléctrico viniese transformada de trifásica de alta tensión en corriente continua á 600 voltios. III. Distribuir la corriente trifásica para aplicaciones de alumbrado y de energía á los particulares con grupos de transfortnadofes, sirviéndose de una red secundaria. IV. Distribución de la corriente para alumbrado público con corriente continua á 900 voltios. Bajo las bases de este programa se presentaron siete proposiciones completas, y la represen tación municipal decidió tratar separadamente la parte mecánica, la eléctrica y todo cuanto había que proporcionar. En Agosto de 1898 se decidió definitivamente, concediendo la preferencia en la parte mecánica-eléctrica á la Elecktricitáts Actien Gesellschaft-Ivorm. Kolben & C. de Praga, que había hecho las mejores proposiciones, tanto desde el punto de vista técnico como del económico, il.—Objeto y s i s t e m a de i n s t a l a c i ó n e l é c t r i c a . Como ya se ha expuesto, la estación central tenía por objeto la distribución de la corriente eléctrica á los particulares para aplicaciones de alumbrado y de energía, alumbrado público y tracción del tranvía eléctrico comunal. Teniendo en cuenta la gran distancia entre los únicos barrios que habían de servirse de la corriente eléctrica, y los cuales se encontraban próximamente á siete kilómetros de la central, como también en consideración al hecho de que para la aplicación al tranvía la corriente debía ser continua á 600 voltios, se estableció un sistema mi.xto, á saber: distribución de la corriente trifásica directamente á los consumidores particulares para luz y fuerza; distribución de la corriente continua á 600 voltios para servicio del tranvía eléctrico y para el alumbrado público de arco. La instalación entera consta de tres partes principales, que son: A. Estación central eléctrica. B. Estaciones secundarias. C. Red de conductores. En la Central se produce la corriente eléctrica á la tensión de 3.000 voltios que se distribuye en la ciudad por medio de los conductores. Una parte de la corriente es transportada, mediante la red primaria de alta tensión, á un sólo grupo de transformadores que la reducen á la tensión de 123 voltios en una red secundaria, y de ésta distribuida entre los consumidores; la otra parte de la corriente es llevada por medio de conductores á dos estaciones secundarias, donde por medio de los convertidores se convierte en corriente continua á 550-600 voltios. Esta corriente es la que alimenta el tranvía, y sirve también para el alutnbrado público con lámparas de arco. En la estación eléctrica central, y por medio de dos pequeñas dinamos acopladas á motores de vapor, se produce directamente una corriente continua á 550-600 voltios, cuyo objeto es accionar el tranvía eléctrico que se encuentra en la proximidad de la citada estación central. LA ENERGÍA ELÉCTRICA 253 Ili.—Disposición de la Central e l é c t r i c a . I La Central se encuentra en el VII barrio, Holleschovic, en el triángulo formado por el río Moldava, la calle Palacky y de la principal carretera de la Sociedad de ferrocarriles del Estado, línea Bodenbacher, ocupando un área de 41.500 metros, en la que se incluye una cochera para los carruajes y el taller de reparaciones para el tranvía eléctrico. La posición del edificio único está indicada en la figura i.", plancha i." El área está unida al ferrocarril del gobierno mediante una carretera. En dicho jocal se encuentra: Local para las calderas y máquinas. Depósito de carbón, unido á la vía férrea. 2° -> o Almacén de materiales. o4.0 Cochera. Taller de reparaciones. Oficinas de la Administración. 6." El pavimento de la sala de máquinas se encuentra á 186,86 m. sobre el nivel del mar, y se eleva 1,50 m. sobre la máxima avenida del río, y que, verificada en el año 1845, alcanzó 185,35 metros sobre el nivel del mar. La carretera de acceso está elevada 2,75 m. sobre el suelo del almacén de carbones, de modo que puede venirse á descargar en el almacén mismo de alto á abajo. El mínimo nivel observado en el río Moldava fué de 177,19 m.; de modo que la altura á que se encuentra el suelo del edificio de las máquinas, es de 9,66 m. Terminada la construcción, el edificio de las máquinas tendrá una longitud total de 145,5 "ipor 22 y 11,5 de altura de la cumbrera; actualmente sólo hay construidos cien metros en el sentido de la longitud. En el centro se eleva una construcción ornamental en forma de cúpula con lucernas de cristales con objeto de dar buena luz al grupo de máquinas y al cuadro de distribución central; exteriormente hay adosado un edificio de dos pisos y que contiene: el entresuelo, el vestíbulo, el laboratorio para el análisis; el piso primero, el cuadro principal de la distribución de alta tensión; y en el segundo piso, un gran local para las medidas fotométricas. Una grúa de veinte toneladas recorre todo el edificio de las máquinas. LUIS DE LA PEÑA, Ingeniero de Minas y de la casa constructora Falcó, Peña y Compañía. ( CoiiiÍ7iuará,) foaiatos protec ra 08 (Memoria leída en la sesión del 26 de Marzo de 1901, por el ür, Gustavo Benischke, en la Sociedad electrotécnica de Berlín.) ?/r dos clases de causas deben su origen los peligros que amenazan á las instalaciones elécwL tricas por tensiones excesivas y perjudiciales: á las cargas eléctricas de la atmósfera y á »/¿f las de la misma corriente; de las primeras sólo nos interesan las que ofrecen una diferencia de potencial con respecto á la tierra, porque son las únicas que pueden buscar comunicación con ella rompiendo los elementos aisladores de una máquina ó de un aparato, y esto de tres modos distintos: por descarga repentina en forma de rayo, que deja en libertad, en poco tiempo, cantidades de energía muy considerables; por chispas sucesivas más ó menos espaciadas unas de LA ENERGL'V ELÉCTRICA 254 otras, y, por último, por lo que se llaman descargas obscuras ó disimuladas, nombre debido á que, ó no son perceptibles en modo alguno, ó lo son en la obscuridad, bajo la forma de un penacho ó destello luminoso, que ha hecho llamar á estos fenómenos fuegos de San Elm. De estas tres formas de descarga, la primera, ó sea el rayo, no es objeto en electrotécnica de gran atención, en tanto que se trate de reglas de protección contra él. Excluyendo los edificios, puede decirse que es rarísima la caída de rayos en líneas eléctricas elevadas, y casi imposible conseguir, con ninguna clase de pararrayos, llevar la descarga á tierra en forma que evite en Figura I l'^igura 2 absoluto daño á la instalación eléctrica. Cuando cae un rayo en una línea elevada, generalmente destruye los aisladores de porcelana más próximos, y va á tierra por los postes. Si hay algún pararrayos en la proximidad, lo destruye también; tales accidentes son tan raros, que no vale la pena de tratar de hallar medios de protección, que de todos modos no serían suficientes. Mucho más perjudiciales son las descargas de la segunda clase, que, á veces, indicadas t:m sólo por pequeñas chispas, pueden reconocer dos causas: las cargas atmosféricas, esto es, las que poseen las partículas acuosas y de polvo, del aire, cargas que se transmiten á los conductores, originándose en seguida una tendencia á nivelarse el potencial que adquieren con el de tierra, por el intermedio de la parte de la instalación que ofrece menos resistencia; ó bien, como segunda causa, cargas inducidas, originadas en las nubes situadas encima de los hilos, bien por nubes tempestuosas que se elevan, ó por un desplazamiento del equilibrio eléctrico, ó por lo que se llama choque de retroceso, esto es, por aquellas cargas inducidas originadas por la caída de un rayo en la pro.ximidad del conductor ó una descarga entre dos nubes encima del mismo. Para aplicar un símil moderno á es'^s fenómenos ya de antiguo conocidos, pudiéramos decir que la descarga entre dos nubes y el consiguiente choque de retroceso en un conductor colocado debajo, en circunstancias favorables, es un telégrafo de chispas en gran escala; las nubes son el transmisor y el conductor el receptor, sólo que esta telegrafia es poco agradable, porque si no hay disposiciones protectoras, siempre se ocasionan daños á la instalación. Esta clase de descargas son tan frecuentes en verano, y en especial en ciertas comarcas, que las redes aéreas permanecen frecuentemente todo el día, y aun durante la noche, bajo una cierta tensión, en consecuencia de lo cual, mientras tal estado dura, hay una propensión á atravesar los medios de aislamiento empleados, cuando no hay aparatos á propósito que lo impidan. En comarcas donde las tormentas son frecuentes, puede observarse que los conductores elevados, en especial en tramos que vayan sobre alturas desprovistas de bosque, son los mejores indicadores de tempestades, á veces con horas de anticipación. Contra la clase de descargas que nos ocupa, peligrosas en particular por su frecuencia, es preciso precaverse, y eso se consigue con los pararrayos conocidos. En el transcurso del tiempo han ido dándose á conocer una porción de construcciones que, LA EIÍERGIA ELÉCTRICA 255 al menos á las tensiones ordinarias, han llenado más ó menos completamente su objeto; la cuestión se complica al tratarse de altas tensiones. El problema de encontrar un medio adecuado de protección contra las descargas mencionadas, está completamente resuelto colocando en la inmediación del conductor elevado un espacio para chispas que ofrece á las cargas atmosféricas camino á tierra más fácil que el que pueden en ligura 3 centrar por el intermedio de una máquina ó aparato; es, pues, ante todo preciso, que la resistencia del conductor á tierra sea lo menor posible y que no tenga en él auto-inducción alguna porque es un hecho cierto que la mayor parte de las descargas atmosféricas son de índole oscilante, aunque no en tanto grado como antes se creía. Por otra parte, puede utilizarse la propiedad de la auto-inducción para obstruir el camino á las partes que se trata de proteger, intercalando entre ellas y el espacio de chispas una pequeña auto-inducción, con lo cual habrá mayor seguridad de que la descarga tome el camino á tierra, que está libre de ella. Cuanto más corto sea el espacio de chispas, tanto más sensible es el pararrayos, y sabido es que conviene dirigir á tierra las cargas que puedan ser peligrosas para las máquinas y aparatos. Poca atención se concede, por regla general, á la clase de descargas que hemos llamado obscuras, á causa de no ser, á veces, visibles; son, sin embargo, comparadas con las de chispas, una especie de enfermedad traidora, porque si se las deja obrar algún tiempo, corroen poco á 2S6 LA ENERGÍA ELÉCTRICA poco los materiales aisladores, abriendo paulatinamente estrechas canales, que acaban por establecer un verdadero circuito corto. Para patentizar los efectos de las descargas obscuras se hizo la siguiente experiencia: en una fuerte placa de lo mm. de espesor, de material aislador, se atornillaron dos electrodos á unos lo cm. de distancia y se estableció una tensión de lo.ooo voltios; al cabo de algunas horas, una parte de la placa situada entre los electrodos, voló con estrépito hasta el techo de la habitación, comprobándose la existencia en la placa, entre los dos electrodos, de una canal finísima con muchas sinuosidades, como si hubiese sido practicada por un gusano, y de la cual partían ramificaciones en todos sentidos. En la canal se produjo, finalmente, un circuito corto, y los gases por ello originados fueron los que hicieron saltar la placa con acompañamiento de explosión. Por fortuna, hay materias como la mica y la cstabilita, que al parecer Figura 4 resisten á las descargas obscuras, por más que ofrezca el inconveniente de producir circuitos cortos, por carbonizar.se gradualmente cuando en los transformadores y máquinas de alta tensión se establecen cortos contactos entre algunas circunvoluciones. Sería, por lo tanto, de desear que pudieran evitarse las descargas obscuras por medio de pararrayos á propósito; para ello sería preciso hacer muy corto el espacio de chispas, lo cual ofrece serias dificultades, porque cuando en pararrayos de dos polos diferentes se verifican descargas simultáneas, van seguidas de una corriente que cierra en circuito corto la red correspondiente con los conductores á tierra; trátese, pues, de LA ENERGÍA ELÉCTRICA 257 extinguir esta corriente lo más rápidamente posible. Como es natural, los circuitos cortos se presentan con mayor frecuencia y violencia cuanto más estrecho es el espacio descargador de chispas, y, por lo tanto, hay que renunciar á hacer los pararrayos tan sensibles que sirvan también contra las descargas obscuras, á las que habrá que oponer disposiciones especiales cuando sea necesario; de todos modos es recomendable que los descargadores de chispas, contra las descargas en esta forma, sean lo más cortos posible y que se hagan cesar cuanto antes las violentas corrientes de circuito corto que como consecuencia se originen. Con tales propósitos Herr. Benischke ha construido un pararrayos, tomando como punto de partida las experiencias que en 1896 se hicieron en la Sociedad General de Electricidad con una máquina dispuesta para 15.000 voltios, y relativas á la extinción de un arco voltaico originado entre arcos en forma de cuernos, semejantes á los que tiene el conocido pararrayos de Thomson; no eran, sin embargo, como en el último, una especie de placas, sino que estaban hechos de alambre y encorvados después, como fueron dados á conocer más tarde en una Memoria de Gorges, la cual prueba que Oelschláger y Benischke, sin ponerse de acuerdo, seguían el mismo • camino para la resolución del problema; la ventaja sobre el sistema Thomson consistía en que se refuerce la elevación de la chispa producida por el aire caliente por medio de la autoinducción electrodinámica del circuito. Las experiencias citadas fueron presenciadas por muchas personas con ocasión de reunirse la Sociedad electrotécnica. La acción electrodinámica de arrastre es tanto más enérgica, cuanto más se aproximan á ser paralelas las partes inferiores de los cuernos; la chispa entre ellos originada, se extingue siempre con seguridad cuando la fuerza de corriente es bastante grande; cuando es demasiado pequeña, tanto la corriente ascendente de aire caliente como la acción electrodinámica impulsora son demasiado débiles para que el arco sea impulsado hacia arriba; pero aun cuando la corriente sea bastante fuerte, se necesitan varios segundos para que el arco se eleve, y una'vez elevado, se extinga. Durante este tiempo la red se halla en circuito corto, que es muy violento, en tanto que la chispa está todavía en la parte estrecha del espirador estirador de chispas; la tensión de la red decae considerablemente, y si tal estado dura, puede ocurrir que queden fuera de fase los motores que están en circuito. Era, pues, preciso construir un pararrayos en que el arco voltaico fuese cuanto antes lanzado de la parte estrecha del aparato de chispas para que, al menos la violenta corriente de que hemos hablado, fuese de la menor duración posible; circunstancia tanto más necesaria, cuanto que en pararrayos al aire libre los circuitos cortos no provienen sólo de cargas atmosféricas, sino por los insectos, gotas de agua, etc., en particular en comarcas en que nieva mucho, por el deshielo. Las experiencias han demostrado que los medios mecánicos no dan resultado para desgarrar un arco voltaico de alta tensión; sólo con pequeñas tensiones pueden emplearse. No quedaba más que el fuelle magnético, el cual ha sido empleado por Herr. Benischke en la forma siguiente: Un cuerpo de hierro laminado E (figs. i y 2) lleva una ó varias circunvoluciones destinadas á intercalarse en el conductor que se trata de proteger, y es, por lo tanto, magnetizado por la •acción de la corriente normal de servicio, originándose un campo magnético indicado en la figura por las líneas de puntos. La corriente de circuito corto que va á tierra no sirve para el fin indicado, pues en otro caso, el conductor á tierra presentaría importante autoinducción, lo qne es inadmisible, según principios conocidos. Encima de uno de los polos del imán citado, se encuentra el espacio de chispas, que consiste en dos arcos de metal simétricamente dispuestos y comunicado uno de ellos con el conductor que se trata de proteger, y el otro con el de tierra. Tan pronto como se origina en el aparato un arco voltaico, éste es impulsado por el fuelle magnético, normalmente, hacia las líneas de fuerza del campo magnético, á lo que contribuye la disposición de los arcos, haciendo que el de luz pueda ser impulsado á uno de los dos lados en la dirección de la flecha; llegado fuera de la zona de acción del campo magnético, alcanza ya 258 LA ENERGÍA ELÉCTRICA una cierta longitud y sigue desarrollándose en virtud de la corriente de aire caliente, que lo im. pulsa hacia arriba hasta que se extingue; esa es la razón de que los arcos metálicos estén dirigi­ dos hacia arriba. La acción es la misma con corriente continua que alterna, pues si bien con ésta cambia la dirección de la corriente, lo propio le sucede á la del campo magnético, y, en conse­ cuencia, la dirección en que se mueve el arco de luz ei en todos los momentos la misma. La di­ rección en que sea impulsado el arco de luz depende exclusivamente del sentido de las vueltas que lleva el fuelle magnético, esto es, de la relación de fase entre la corriente en el espacio de chispas y el campo magnético; pero para no tener que preocuparse de esta relación, se hacen los dos arcos metálicos simétricos, pues si se exigiera un sentido determinado en las vueltas del Figura 5 iuelle, sería preciso en la fabricación someter el aparato á pruebas que encarecerían .su pro. ducción. En la red de corriente continua de los talleres de electricidad de Berlín, se probó uno de esos aparatos con 220 voltios. El espacio de chisjjas, colocado á G mm., se unió con un hilo fino de plata é inmediatamente se formó circuito corto de la red con el aparato, y el arco voltaico originado se extinguió con una fuerte detonación; no se puede en la red citada ha cer pruebas semejantes con alta tensión y suficiente fuerza de corriente. No obstante, las figs. 3 y 4 dan un^ idea de cómo se comparte en tal caso el arco de luz; la 3 es una vista no instantánea del circuito corto de 60 kilovatios por 3.000 voltios de tensión; puede verse cómo el arco de luz es impulsado desde la parte más estrecha de los arcos metálicos hacia un lado y hacia arriba, viéndose á lo largo de los arcos varios espacios particularmente brillantes, que co­ rresponden á los cambios de polos parciales. La fig. 4 es una instantánea inmediatamente antes de la extinción del arco de luz, con 60 kilovatios y 6 . 0 O O voltios; se ve que á mayores tensiones el arco de luz se eleva mucho más; en esa experiencia la altura llegó, próximamente, á ser de un metro. LA ENERGÍA ELÉCTRICA 259 El aparato completo, que puede verse en la fig. 5, parece más complicado que otros sistemas, puesto que lleva en sí una bobina de auto induccción, como es el fiíelle magnético, respecto del cual conviene cuidar, al hacer la instalación, de que su envuelto se intercale entre el origen de corriente y el descargador de chispas, pues de otro modo, al producirse el circuito corto quedaría el fiíelle sin corriente. Se ha dicho ya el objeto que tiene la intercalación de una auto inducción entre el espacio de chispas y las partes que se desean proteger. Se admite que la envuelta de una máquina ó de un transfiarmador posee ya por sí bastante auto inducción; pero no puede decirse esto de los cables de conducción á las máquinas, de algunos á tierra y de la mayor parte de los aparatos conectadores, pues en estos casos es imprescindible intercalar una auto inducción, lo cual en la mayor parte de los otros pararrayos e.xige una instalación especial, en tanto que en el descrito está satisfecha esa necesidad con sólo la unión de los alambres conductores y del de comunicación con tierra, resultando más sencillo y más barato que en los demás sistemas. B. W. f Continuará.) Cálculo detallado de una dinamo Compound de comente continua. (CONTINUACIÓN) todavía algunas palabras más sobre estas curvas importantísimas (fig. 13), en uso general en las casas constructoras de máquinas eléctricas. «/ En las ordenadas del diagrama se hallan las inducciones magnéticas B hasta 20000; en las abscisas, las amperios vueltas por centímetro del camino de las líneas. La figura contiene NADAMOS fa te io S€ ec * 5 C 7c go gf, lüv //f ízc isv ne ^so i6it /70 /gf no ice* J 7 ' tí 9 ío 71 7Z ti A>"r^^' (".«¿/éij ^€/r Cvytútff^i 77 7s ií _^ to JT las curvas para el hierro fundido, el hierro forjado, el palastro del núcleo y el acero fundido. Respecto al palastro del núcleo, hay que observar que es una clase especial de hierro forjado dulce, elegido con esmero para los objetos deseados. Las curvas superiores son las continuaciones de las inferiores, correspondiendo las primeras á las abscisas I y las segundas á las abscisas II. 26o - LA ENERGLA ELÉCTRICA El procedimiento de cálculo es ahora sencillísimo: Tomemos en nuestra tabla las induccioi\es B, tracemos por el punto correspondiente de la ordenada una línea horizontal, hasta encontrar una de las curvas en otro punto; la perpendicular de este punto sobre la abscisa nos da en su corte, con la horizontal inferior, los amperios vueltas por centímetro del camino del flujo de fuerza, cantidad que debe multiplicarse por el camino L, para lograr el número total de los amperios vueltas. Debemos hacer notar que, trabajando con inducciones superiores á 19.000, los ensayos ya no nos dan valores exactos de X . Recomienda Kapp, en estos casos, prolongar las curvas rectilíneamente, ó, en otras palabras, suponer proporcionales los crecimientos de amperios vueltas é inducciones. Designado con X N , X D y X E los amperios vueltas precisos para el núcleo, los dientes y el entrehierro, hallamos con auxilio de la fig. 13: Xn = Xd = 140 (3,7) 1 660 280). Las cifras entre paréntesis son los valores de los amperios vueltas por centímetro, indicadas directamente por las abscisas de la fig. 13. Los amperios vueltas X E se calculan mediante nuestra ecuación fundamental: La permeabilidad M en el aire es igual á I . Tendremos, por tanto, reemplazando w"x I por X e , y las demás letras por sus valores numéricos: X e = 0,8 X X 10.390 S í 16 620. Vemos, pues, claramente, que se necesita la mayor parte de los amperios vueltas excitadores para forzar el flujo de fuerza á través del entrehierro, por ser la resistencia magnética del aire mucho más elevada que la del hierro, y, por tanto, justo es preguntar: ¿Por qué no reducimos el espacio entre tambor y polos todo lo posible.? Aceptemos, por ejemplo, un entrehierro de 0,25 centímetros; la suma X E + XN •+- X D de las amperios vueltas en este caso, no será más de 6.000, y habremos disminuido de tal modo muchísimo el peso del arrollamiento del campo. No es posible reducir mucho el entrehierro, por dos razones: una de naturaleza mecánica, otra eléctrica. Armaduras como la nuestra tienen un peso considerable y ejercen, por consiguiente, una grande presión sobre el árbol, que se curva un poquito, de modo que el espacio entre tambor y polos es siempre un poco mayor sobre el árbol gue debajo. Se debe admitir cierto juego para esta flexión; de otro modo es de temer que, en el transcurso del tiempo, existiera contacto directo entre armadura y polos, lo que causaría, naturalmente, desperfectos considerables. Además, un fenómeno eléctrico impide disnñnuir demasiado el entrehierro. Durante la rotación, la armadura ejerce una influencia magnética sobre el campo excitador, que es la llamada reacción de la armadura, de la que trataremos más adelante. Esta influencia, que se debe evitar todo lo posible, se hace tanto más sensible, cuanto más reducimos el espacio entre tambor y polos. La cifra total de los amperios vueltas necesarios para formar aquella parte del circuito magnético atravesando el entrehierro, los dientes y la armadura, será: X e - | - X d - | - X a = X e d a = 18.42O. Debemos tener presente que cierta parte de las líneas de fuerza, emanando de los imanes, no entra en la armadura, formando una derivación á través del aire (fig. 14). Estas líneas de derivación representan, naturalmente, una pérdida, porque no contribuyen en nada á la producción de l a / . c. in. Los antiguos tipos de máquinas electrodinámicas, tenían la desventaja de un gran flujo derivado. La derivación en las dinamos modernas es de menor importancia; pero, no obstante, debemos tenerla en cuenta. LA ENERGÍA ELÉCTRICA 261 La fuerza del campo de derivación depende del tipo de la máquina en cuestión y del valor Xeda. El ya citado electricista Kapp ha hallado fórmulas empíricas, permitiéndonos calcular, aproximadamente, las líneas Ns de la derivación: D x B ,/"' dei)ende del tipo de máquina y puede suponerse en nuestro caso 0,5. D el diámetro de la armadura = 150 cm. B la anchura — = 36 » p el número de pares de polos. Substituyendo por todas las letras los valores numéricos, obtendremos: La cantidad total de las líneas de fuerza Np en los imanes, por tanto, ha de ser: Np = N-ENs = 11,25. Sólo ahora podemos seiialar las inducciones Bp y Bm en los polos y el anillo polar: Bp = Bm = N -—£- 2 Soi 14.600 = 10.400, siendo las secciones correspondientes: Sp=78occ. Sm = 5 4 ° ce. Como en todas las dinamos modernas, confeccionaremos el anillo polar y los polos de acero fundido. Es verdad que este tnaterial es más costoso que el hierro fundido empleado antes exclusivamente en la construcción de dinamos. Una mirada sobre la fig. 13, nos enseiia que para producir cierto niimero de líneas de fuerza, se exigen muchos más amperios vueltas en el hierro fundido que en el acero, ó dados los amperios vueltas y la inducción magnética, la masa del anillo debe ser más grande en caso de hierro fundido, que de acero fundido. Con auxilio de la fig. 13, obtendremos los amperios vueltas Xp y Xm correspondientes á los polos y al anillo polar. Xp=58o(i3) X„, = 220 (3,4). Sumando, finalmente, todos los amperios vueltas, se obtiene el ntímero total X necesario para inducir l a / . e. m. de 6 1 5 voltios en el arrollamiento: X = Xc - f - Xd - | - Xa - } - Xp - j - X,„ —. 19.220. Dibujemos ahora la característica estática de nuestra dinamo, es decir, la curva cuya ecuación es: .X = f u n c t ( N ) . Se reconoce á primera vista que prescindiendo de un factor numérico tica con: X = funct(E), siendo E = k x N esta curva es idén- LA 262 ENERGÍA ELÉCTRICA Queda todavía por determinar unos puntos de la característica, pues hasta ahora no conocemos más de dos: N = o, X = o N = 10, X = 19.220. Con este fin tomamos valores de N inferiores á 10, y por medio de las curvas en la fig. 13 y / / / / / / / / / / / / / tMo* n— FMI* í í « lU*» '! buscamos los amperios vueltas correspondientes, siguiendo en todo el mismo camino de cálculo, como arriba, para N = 10. De este modo se obtienen, por ejemplo, los puntos: N = 2,5, X = 4.700 N = 5, x = 8.940 N = 8, X = 14.340. Bastan estos puntos para poder trazar con e.vactitud suficiente la caracterísdca estática indicada por la fig. 15. Se reconoce que hasta el punto N = 8, X = 14.340, la curva es casi rectilínea, y existe, por consiguiente, proporcionalidad entre N y X. A partir de este punto, los amperios vueltas crecen algo más rápidamente que los flujos de fuerza ó la / . e. m. DAVID BLUMENTHAL, Ingeniero de la .Sociedad anónima de electricidad, antes .Scluicl;er y Compañía, Colonia (Alemania). ( Conthiuará.) lluevo limitadotí de cocientes. E N los talleres electromecánicos de esta corte se está procediendo con gran actividad á la construcción de considerable ntjmero de limitadores de corriente, con arreglo á un nuevo modelo ideado por el Sr. Vílchez, ingeniero electricista de Granada. Publicamos una vista de dicho aparato, después de levantada la cubierta, y un esquema que inuestra claramente su funcionamiento y montaje. ESTAGIÓS CENTRAL ELÉCTRICA DE PRAGA DE EMILIO KOLBEN Plancha 1.» Figura 1 Figuras 2, 3 y 4 l''¡íiura 3 Figura 4 Kiüura 5 LA ENERGÍA ELÉCTRICA 263 El limitacorrientes va montado en serie sobre uno de los cables del abonado, sin que sea preciso interrumpir el otro. Los bornes B y B' sirven para sujetar los cabos del cable interrumpido, y en el esquema se ve que toda la corriente pasa por el devanado de un electroimán A. Contiene además el aparato dos pequeñas palancas D y E, de las cuales la última, en condiciones normales, descansa por la acción de la gravedad sobre un tornillo c, que permite regular su distancia á los polos del electroimán A. La pieza metálica unida al borne B lleva un hilo fino n Abonado. de platino, que, gracias á un pequeño codo, permite que sobre él descanse otro hilo de platino sostenido por la palanca D. Mientras la corriente consumida por el abonado no exceda en intensidad al máximo para que ha sido graduado el aparato, las palancas E y ü se apoyan por su propio peso sobre el tornillo C y el hilo w, respectivamente. La corriente en estas condiciones pasa del borne B al B', á través de los hilos n y m, la palanquita D y el devanado del electro, al cual excita. Desde el momento en que aquel máximo es excedido por cualquier causa, la imanación del núcleo alcanza un valor suficiente para atraer la palanca E, la cual, á su vez, levanta la palanquita D, suprimiendo el contacto de los hilos m y w, é interrumpiendo, en consecuencia, la corriente. Una vez interrumpida ésta, la E cae por su peso, restableciéndose el contacto de m y n y volviendo á ser atraída dicha palanca, que por sus rápidas oscilaciones sucesivas no consiente lucir bien las lámparas hasta tanto que cesa el consumo excesivo de corriente. Las chispas en el punto de ruptura, que es el contacto de in con pueden, en ocasiones, fundir estos hilos, y entonces el funcionamiento normal no se restablece hasta que se coloquen nuevos hilos de 264 LA ENERGÍA ELÉCTRICA platino, cosa que no puede hacerse sin quitar previamente el precinto que une la base con la cubierta del aparato. Los detalles de construcción están cuidadosamente estudiados para hacerlo económico y de funcionamiento seguro. No existen resortes, cuya acción es siempre variable con el tiempo. Los hilos ju y n, por su fusión, no dan lugar á soldadura que inutilice el aparato desde el punto de vista de sus fines, y aun esa misma fusión hace de aquél un cortacircuitos, que protege la canalización del abonado contra corrientes demasiado intensas. La regulación del aparato dentro de ciertos límites se hace muy fácilmente, subiendo ó bajando el tornillo C. Este queda inmovilizado, en la posición que se desee, por medio de una contratuerca. Todo el limitacorrientes va montado sobre una base de porcelana, á la cual se une á rosca la cubierta del mismo material, ofreciendo cerrado el aspecto de un cilindro de unos diez centímetros de diámetro por siete de altura, es decir, poco más que un cortacircuitos ordinario unipolar. L. S. C. Análisis electííolitiGO dé los latones. á conocer en L A E N E R G Í A E L É C T R I C A del lo de Diciembre de 1900 (año II, tomo III, núm. 3) las ventajas del sistema de análisis químico por electrólisis, aplicado á los metales, (i) A partir de aquella fecha hemos podido comprobar prácticamente la utilidad y conveniencia de tan exacto procedimiento de análisis, que se aplica en el Taller de precisión y laboratorio de artilleria para dosificar los componentes de los latones destinados á la construcción de cartuchería Maüser. Por su especialidad, requiere la fabricación de los cartuchos de guerra, que los metales á ese objeto dedicados reúnan condiciones de extraordinaria precisión, que de día en día se van aumentando. Actualmente, los pliegos de contratación exigen que el latón para cartuchos de fusil con tenga 72 partes por 100 de cobre y 28 de cinc, admitiéndose en el cobre una tolerancia en -p- de 0,5 y en el cinc una tolerancia en — de 1,00. Las materias extrañas sólo pueden llegar á -)- 0,10 de plomo y -|- 0,05 de hierro. Por manera que este análisis ofrece un buen ejemplo de manipulación electrolítica, que agradará conocer á los lectores de esta Revista. Aparte de las antes anotadas, exígense á estos latones otras características de homogeneidad, pruebas de embutición y de fuego que, en buena parte, dependen de la composición química. Los análisis por la vía húmeda, cuando se trata de evaluar tan distintas materias, en pequeñas dosis algunas, además de acarrear mayores errores posibles, absorben considerable tiempo, inconveniente que disminuye merced al análisis por electrólisis, en el cual la rapidez es factor principal. Las operaciones de análisis que vamos á describir se realizan diariamente con éxito en el mencionado Laboratorio de artillería por el primer teniente de aquel Cuerpo D. Carlos Rodríguez de Rivera, que ha investigado la composición de diversas muestras de latones. LIMOS Dosificación del cobre y del planta. Se corta un trozo de 0,5 gramos de la muestra de latón que se desea analizar. Colócase en una cápsula de porcelana y se disuelve en NO'H, agregando seis gotas de SO'H'^ para con(ij Para mejor explicación de este trabajo, véase en el núm. 3 de la Revista. LA ENERGIAJEI^CTRICA _ 265 vertir el cinc en sulfato. Efectuada la disolución, tendremos, por lo tanto, el cobre que contenía aquel trozo de latón convertido en nitrato y el cinc en sulfato. Esta solución se evapora en la misma cápsula al baño maría hasta sequedad completa, y una vez seca, la materia que queda en la cápsula se disuelve en ácido nítrico, diluido en agua al i por 10. El líquido resultante se coloca en la cápsula de platino, ya descrita en el precitado número de L A E N E R G Í A E L É C T R I C A (cápsula de Clansen), pesando antes con toda precisión la cápsula vacía. Después se sumerge en el líquido el otro electrodo de platino, y se establece la corriente eléctrica, poniendo en contacto el polo negativo de la pila con la cápsula, y el positivo con el referido electrodo (disco ó espiral de platino). La corriente debe tener apro.ximadamente 0,3 de Ampere, pudiendo graduarse con el voltámetro en forma que produzca 1,5 cm." de gas hidrógeno por minuto. Establecida la corriente, se deja actuar durante diez y seis ó diez y ocho horas, al cabo de las cuales, todo el cobre que contenía el baño, como metal más electropositivo, se habrá depositado sobre el fondo y paredes de la cápsula de platino, pudiendo comprobarse si queda algún cobre en el baño tomando una gota de éste y tratándola por el amoníaco: si da precipitado, es señal de existir aún cobre en la disolución, en cuyo caso se deja actuar la corriente hasta la ausencia completa de precipitado. Se saca el líquido; se lava muy bien la cápsula de platino con agua y después con alcohol; se seca á la estufa á 100° C y se pesa: la diferencia entre este peso y el que tenía vacía al principio dará la cantidad de cobre contenida en la muestra que se analiza. El plomo que la disolución contuviera se habrá depositado, durante la misma anterior operación, en el otro electrodo, en estado de PbO'^; de suerte que, pesándolo ahora y hallando la diferencia entre este peso y el que antes tuviera, conoceremos la cantidad de PbO'^, que, multiplicada por la relación entre el equivalente del Pb' y del PbO'-', que es 0,8661, nos dará la cantidad de Pb' contenida en la muestra. Determinación del cinc. El líquido que se ha sacado de la cápsula de platino ya no contendrá ni cobre ni plomo. Para determinar el cinc se evapora á sequedad, añadiendo seis gotas de SO*H^ (i), con lo que se conseguirá transformar el cinc al estado de sulfato. Una vez seco, se le calcina á la llama de alcohol hasta que cesen de desprenderse vapores de SO^H''. Enfriada la cápsula, se disuelve su contenido en agua caliente. Para hacer este líquido electrolito pueden seguirse dos procedimientos, á saber: I." Se neutraliza por el amoníaco, añadiéndole esta substancia hasta que no coloree el papel tornasol. En seguida se añaden á la solución 15 cm.' de citrato de amoníaco á i por 100, y 9 cm.* de ácido acético cristalizado, y se vuelve á agregar amoníaco hasta nueva neutralización (2). Por último, se agregan 3 cm.' de ácido acético cristalizado, completando hasta 350 cm.' con agua. El líquido resultante se lleva á la cápsula de platino y se establecen los electrodos como antes, pero elevando la corriente á 0,5 de Ampere. Al terminar diez horas, estará depositado todo el cinc en la cápsula y, por diferencia de pesos, tendremos, como antes, la cantidad de este metal contenida en la porción que se analiza. Debe siempre obtenerse el cinc sobre la cápsula recubierta de cobre, esto es, sin quitarle el cobre que en la anterior operación se hubiese depositado. 2.0 A la disolución de sulfato de cinc obtenida después de echar el SO'H'^ en el líquido restante de la dosificación del cobre y del plomo, se le agrega poco á poco .una solución de amoníaco al i por 3, hasta que se disuelva el precipitado que se forma, es decir, hasta la neutralización. Añádense entonces 3 gramos de sulfato amónico, y el líquido así obtenido se pasa á la cápsula de platino, haciendo pasar la corriente durante ocho horas. ( i j Bastan seis golas en este caso; pero si la cantidad de latón sometida al análisis fuese mayor, se pondrán seis gotas de ácido sulfúrico por cada 0,5 gramos de cinc que pueda contener la muestra. (2) Estas dos materias equivalen á 13,8 de acetato de amoníaco seco, con el que pueden substituirse. 266 LA ENERGÍA ELÉCTRICA La dosificación del cinc exige que, á la mitad de la operación, se vuelva á añadir sulfato amónico para que el cinc permanezca en el baño en estado de sulfato. 3.° Ocurre alguna vez que, por impurezas del sulfato amónico ó por alteraciones en la corriente eléctrica, se forma sulfuro de cinc pulverulento y no se precipita en estado metálico', para evitar ese escollo puede emplearse el procedimiento de Alex Classen, en el cual se siguen las mismas operaciones de evaporar el líquido sacado de la cápsula, echándole por cada 0,25 gra mos de cinc seis gotas de SO'H-, y después de disuelto se le añaden 4 gramos de oxalato de amoníaco por 0,25 gramos de cinc, poniéndolo luego á la acción de la corriente de 0,3 Ampere, con lo cual se obtienen depósitos muy adherentes. 4.0 Procedimiento Millot. Se precipita el cinc en el líquido sacado de la cápsula, por la potasa, y se disuelve el precipitado en un exceso de álcali. .Se pone á la acción de la corriente y se produce un depósito muy rápido y adherente. En este caso, la solución debe estar e.xenta de amoníaco. Defermlnaclón del hierro. ya se ha separado el cobre y el plomo, el líquido que queda en la cápsula de platino se pasa á otra de porcelana, se evapora hasta sequedad, se deja enfriar y se disuelve en agua. Añádesele agua de bromo para oxidar el hierro, y se precipita por el amoníaco. EL precipitado se recoge en un filtro previamente pesado y seco; se le lava con agua acidulada con HCL para disolver el precipitado; oxídase de nuevo con agua bromada, y se precipita otra vez por el amoníaco, recogiendo en el mismo filtro el residuo sólido. Esta segunda operación se hace para quitarle el cinc que pudiera aún tener. Secado el filtro, en estufa se pesa, y este peso dará por diferencia la cantidad de hierro, pero en estado de óxido, que hay que multiplicar por 0,70007 (relación de equivalentes) para deducir la cantidad de hierro metálico. Puede comprobarse por el método volumétrico la exactitud de esta dosificación de hierro; para ello, disuélvase el precipitado anteriormente obtenido en agua acidulada con HCL; el líquido que resulta se coloca en un vaso de Bohemia con limaduras de cinc para convertir todo el HIERRO en sal ferrosa; se deja enfriar, y se le va echando poco á poco una solución titulada permanganato de potasio hasta que aparezca la coloración violeta; la cantidad de permanganato que haya sido preciso añadir nos dará la de hierro, teniendo en cuenta que cada cm.' de permanganato equivale á 0,01 de hierro. Observado7ies.—Deben emplearse pilas que produzcan corriente de intensidad muy constante y que no desprendan vapores. Se recomienda la pila Callaut. El procedimiento volumétrico es más exacto que el electrolítico para dosar el hierro. Si se desea acelerar la acción electrolítica, puede conseguirse calentando la cápsula de platino al baño maría á la vez que se somete al tratamiento eléctrico. De ese modo se consigue reducir á la mitad el tiempo empleado en la electrólisis. CUANDO *** La evaluación de los componentes de una muestra de latón para cartuchos de fusil, por este método, dio el siguiente resultado, como promedio de cuatro análisis: Cobre Cinc l'lomo Hierro Materias extrañas 72,2655 27,6600 o,f'252 o,o,S43 0,0150 100,0000 En las materias extrañas están comprendidas las ligeras pérdidas sufridas en el análisis. SEVERO Madrid, Octubre 30 de 1901. GÓMEZ NLÑE.Z. LA ENERGÍA ELÉCTRICA 267 BIBLIOGRAFÍA por Gais- que ocurrirán al montador, con lo que le evita eno­ berg, traducido del alemán por Antonio Alvarez josos cálculos. 'l'ermina recopilación tan cuidadosa, con la com­ Redondo, ingenieros de Caminos. probación y localización de defectos en una red Después de las nociones generales más impres­ eléctrica. cindibles, y entre las que se dedica preferente aten­ La casa Ronío y Füsel, ([ue ha editado este A/a­ ción á las medidas de aislamiento, se encuentra el capítulo titulado «Instalación de máquinas», donde nual, ha procurado poner la traducción en buenas se estudia el montaje, ensayo, .conservación, aco­ manos, cosa cpie creemos importantísima para que plamiento, puesta un marcha y regularización de los electricistas espaiioles vayan orientándose y dinamos de corriente continua, alterna y trifásica. aceptando palabras que la Academia se encargará Este capítulo, como el resto de la obra, está ins­ de sancionar. No es posible, ni es lógico que sigamos, en lo pirado en un carácter eminentemente práctico y sencillo, por lo que asuntos tan complejos como el cn'e se refiere al vocabulario técnicoeléctrico, en de averías de dinamos, se explican con precisión anarquía tan completa; hojeando unos cuantos li­ bros Iteremos, seguramente: decalado... retraso de grande y laconismo notable. El segundo capítulo se refiere al montaje, con­ fase.. dista?iciado, dhfasado; rectancia, rcctencia; im­ pedancia, impcdencia, resistíncia aparente, etc., etc. servación, carga y descarga de acumuladores. Un abjetivo verdaderamente feliz encontramos Los diagramas de montajes de acumuladores con en el libro que bibliografiamos, y que sometemos dinamos de doble voltaje, están bien entendidos. En los capítulos siguientes trata del montaje de al parecer de les técnicos: llama el Sr. Redondo á electromotores, transformadores, lámparas de arco, las corrientes normales, á las í. e. m., es decir, á la lámparas incandescentes y aparatos accesorios de componente de corriente normal, á la f. e. m. que produce una corriente di.{pasada, corriente adiuctialumbrado. Después de estudiar la distribución trifilar, su­ ca, adjeüvo ])erfectamente adecuado á una corriente cintamente calcula los conductores, tanto por la que no entra en la determinación de la potencia de pérdida de tensión, como por la máxima intensidad, un alternador, y que, caso de aumentar, hace dis­ y reúne en unas tablas los casos más frecuentes minuir el factor de potencia. —H. H. MANUAL DEL MONTADOR ELECTRICISTA, CRÓNICA CIENTÍFICA ra, sobre el cual hay que accionar para variar la in­ tensidad de la corriente eléctrica. En el fondo de . la caja, que se llena con el electrolito, están los elec­ trodos a y b, de los cuales el posidvo termina en concavidad troncocónica, hecha en el mismo fondo de la caja, encima de cuya cavidad se mueve el ex­ tremo c de la varilla reguladora. Se comprende que, '.al subir ó bajar el trozo aislador e, auiuentará ó dis nnnuirá la sección de la columna líquida, y, por consiguiente, variará la intensidad de la corriente. —C. R. I n t e r r u p t o r a u t o m á t i c o pava a p a r a t o s e l é c t r i c o s de cocina. En todos los aparatos en que se utiliza el calor desarrollado por el paso de corrientes eléctricas de una substancia aisladora, lo mismo que su cu­ para los fines de la cocción, hay que evitar el ca­ bierta, la cual está atravesada por una varilla que lentamiento excesivo del fondo de los mismos, y remata en un bolón, también de substaucia aislado­ esto se consigue haciendo uso del interruptor au- Interruptor electrolítico. Una variedad de esta clase de aparatos, de la que se acaba de sacar patente en Alemania, está representada en la figura adjunta. La caja c es 268 LA ENERGÍA ELÉCTRICA tomático inventado por W. C. Heraens, en Ha- í nan a. M. j En el fondo del aparato de cocción existen los j resortes metálicos //, que sujetan fuertemente á la j cáps\i!a a hueca y fabricada con materia aisladora sobre la que están los contactos metálicos b y c, los cuales, antes de dejar paso á la corriente por el putnte e, la obliga á pasar por unas soldaduras'fusibles d, d. Tan pronto como la temperatura en e\ fondo del aparato de cocción alcance el límite de fusión de las partes d, éstas se fundirán y, en virtud del resorte/, el puente e caerá y cesará la corriente eléctrica.—C. R. I.iámpara c o n trcH n r c o s . En los montajes de dos lánqjaras de arco en circuitos con lio voltios existe una pérdida no des preciable de energía eléctrica; de ahí que los cons- lámparas que se puedan montar en series de á tres en circuitos con la tensión dicha. La fábrica alemana «Electrische BogenLiinpen und-Armaturem-Fabrik», en Nuremberg, ha tenido la idea de reunir en una sola armazón los tres arcos, como representa ia figura adjunta.—C. R. X a e v a lánipni-a incandc.>sccnte regenerable. Para evitar la consiguiente disminución de tamaño de las peras eléctricas una vez regeneradas, ha inventado el Sr. Roberto Trimmel, en Viena, la lamparilla leprcsentada en la figura adjunta, en la que se ve la pera b que, en lugar de estar montada directamente sobre el soporte c, está soldada al tubo de cristal d. De esta manera puede efectuarse el desoldado sin estropear en nada la pera.—C. R. Accidente)!» e n l a s l i n e a s d e t r a n v í a s eléctricos. — S i s t e m a protector emp l e a d o e n S a n t i a g o de Chile. A consecuencia de desgracias ocurridas en Santiago de Chile por la rotura de hilos telefónicos, el Municipio pensó ordenar á las Compañías de teléfonos que substituyeran sus redes aéreas por subterráneas; pero teniendo en cuenta el estado financiero de dichas Compañías, nombró una Comisión compuesta por el Director de Obras ptiblicas, un Ingenisro y el Profesor de Física de la Universidad, Sr. Salazar. Esta Comisión estudió los diferentes sistemas empleados en Europa, especialmente el Ubricht, experimentado en Bielefeld (Alemania), y el de Mr. Quin, de Blackpool (Inglaterra), decidiéndose por fin por el de hilos protectores unidos á tierra por medio de los carriles. La Compañía de tranvías se opuso á este sistema diciendo que los postes no podrían soportar el exceso de peso, y que además, en caso de accidente, toda su red padecería. El Sr. Salazar ideó una modificación que es muy interesante. Para que se vea bien la diferencia entre ambos sistemas damos un dibujo de cada uno. El sistema usual (fig. i.'') lleva el hilo protector Iructores de lámparas de arco se hayan esforzado unido directamente al carril. Sus inconvenientes iempre en disminuir esta pérdida, construyendo son los siguientes: LA ENERGÍA ELÉCTRICA i.° Trabajar con una corriente indeterminada que puede subir á un gran número de amperios. 2° Los hilos protectores deben ser muy buenos conductores y de sección relativatnente grande / 9 -—7~ 1 Fig I." l, cable; g, hilo protector; carril; i, corlacircuilos automátíeo;/", feeder. | i para que no se fundan por la corriente que puede pasar por ellos. 3.° Toda la red sufre en caso de tm accidente, 269 con tierra lleva una resistencia. Sus ventajas sobre el sistema anterior son las siguientes: I." Certeza de su funcionamiento con una corriente determinada. 2.^ No es necesario que los hilos ^protectores sean muy buenos conductores, ni que su sección sea grande, pues la corriente oscilará entre 0,05 y 2 amperios. 3.'^ Independencia entre el cortacircuito y el feeder de la sección. 4." Esta disposición no funciona por exceso de corriente, y por consiguiente no se funden los cables ni se resiente parte alguna de la red. 5." Es muy fácil restablecer el circuito. La resistencia interpuesta puede variar entre 10.000 y 250 omhs. El choque sufrido por una persona en el caso más desfavorable al tocar al hilo caldo, sería insignificante y nulo reduciendo la resistencia á 250. Según T/ie Electrical Review, el resultado de las experiencias hechas ha sido muy satisfactorio, y el Municipio de Santiago ha obligado á la Compañía de tranvías eléctricos á que proteja su red por este sistema, hasta que se pueda obligar á las Compañías de teléfonos á llevar sus líneas subterráneas —A. FERNÁNDEZ. • INFORMACIÓN Nueva industria. — No necesitamos presentar á nuestros lectores ia casa Pirelli y compañía, de Milán (Italia). Es de sobra conocida por todos los que se dedican en España á las industrias eléctricas, pues cubre con sus productos la tnayor parte ilel mercado nacional. Su fábrica principal de Milán sostiene 200 empleados y 3.000 operarios, con una sucursal en Spezia dedicada exclusivamente á la fabricación de cables telegráficos submarinos, y filiales en Milán, Ñapóles y Turín. Ocupa la casa Pirelli y compañía lugar preeminente entre los más renombrados fabricantes de hilos y cables eléctricos aislados, por su esmerada construcción. Su triunfo en el mercado es])añol se debe exclusivamente á la calidad de sus productos. Fig. 2.^ Fundó esta fábrica en 1872 el ilustre ingeniero t, cable; g, hilo prolector; r, carriles; e, electroimán; R, italiano Pirelli, gerente y alma de la socied.id coresistencia; b, interruptor independiente del feeder,/. manditaria Pirelli y compañía. Sus talleres de Milán especialmente si son varios los alambres que caen. ocupan la respetable cifra de 40.000 metros cuaLa modificación Salazar está indicada en la figu- drados de superficie, y construyen desde el delgadíra 2.", donde se ve que el hilo prolector en su unión. simo hilo recubierto de seda para los más delicados LA ENERGÍA 270 instrumentos de laboratorio hasta los poderosísimos ; cables subtendneos, forrados de plomo y armados , de hierro, para elevadísimas tensiones. El mundo técnico recuerda el éxito de la casa I Pirelli y compaiiía en la última Exposición ínter-1 • ^ tí ELÉCTRICA ñas, la que sin dejar de ser buen aislador es mucho más barata que el caucho. En cables de muchos conductores se tiene además la ventaja de rellenar completamente los huecos que quedan entre aquellos. La figura representa el cable que, como dijimos antes, funcionó.durante toda la Exposición Internacional de París á 25.000 voltios, transportando gran cantidad de energía para alimentar un grupo trifásico de lámparas montadas en serie. Estas circunstancias interesaron vivamente al mundo técnico. Cerrada la Exposición de París, la casa Pirelli y compañía solicitó del Laboratorio Central de Electricidad de dicha capital que hiciera ensayos sobre el citado cable, los cuales se ejecutaron bajo la di_ rección de Mr. P. Janet, el sabio jefe de dicho esta, blecimiento. Del certificado extendido extractauíos los siguientes datos: Número de torones, 3 de 25 mm.^ cada uno. Distancia mínima entre torones, 19 mm. Diámetro del cable, 94 mm. Longitud ensayada, 34 metros. Los ensayos se llevaron á cabo en el mismo local de la Exposición, por medio de un alternador trifásico de la casa Ganz (frecuencia 50), elevando la tensión con un transformador trifásico de la casa Gadda. Las tensiones se midieron con el electrómetro Kelvin, y los resultados fueron: Tens;one.=;. nacional de París, donde obtuvo merecidamente el disputado premio Grand Prix. Su famoso cable de 25.000 vohios funcionó sin interrupción durante ocho meses, el tiempo que duró la Exposición. La figura adjunta, que representa un cable de 3 torones de 25 mm.''^, da clara idea de su disposición. Este tipo de cable, con patente de invención á favor de la casa Pirelli y compailla, reúne las ventajas de los cables aislados al caucho con los aislados al papel impregnado de resina; es, en efecto, feliz combinación de los dos sistemas. A partir de los núcleos de cobre, hacia el exterior, se encuentra como primera capa aisladora el caucho, esjjecialmente fabricado para este fin por la misma casa, que también se dedica á esta industria, y recubre esta capa otra de papel y yute impregnados de una composición aisladora á base de resina, por un procedimiento especial secreto. Dé esta manera se consigue gran espesor en la capa aisladora y mucha economía, pues se concentra el caucho en el interior, donde es menor la sección, y se dejan para las capas exteriores, que son de gran superficie, la materia aisladora compuesta de papel, yute y resi- Voltios e/tcaces. 28.OCO 33.000 34-500 40.000 'ri,:Ilil-n de . plícaciúii. Minutos. 5 20 5 Saltaron chispas en el electrómetro, y hubo que suspender la experiencia. Cerrada la Exposición, no pudo repedrse por falta de corriente trifásica con que alimentar el transformador. Sacado del subsuelo de l^arís y llevado á Milán bastante mal tratado y deteriorado al desenterrarlo ¡¡rosiguiéronse los ensayos en el Laboratorio de la Escuela Electrotécnica. Los resultados fueron; 1 TensioDes. / 'ottios ejlciices. Tienipo de aplicaciÓD. Minutos. 40.000 45.000 50.000 52.000 60 60 60 120 56.50o 60.500 64.000 120 I20 20 LA ENERGÍA ELÉCTRICA Después de sufrir durante veinte minutos 64.000 voltios, la capa aisladora se perforó entre un conductor y el tubo de plomo. Estos resultados demuestran claramente la gran rigidez dieléctrica del citado cable. Congratúlanos sobremanera este triunfo porque la casa Pirelli y compaiiía ha decidido implantar esta industria en España, á cuyo efecto, fundó la sociedad que lleva el nombre de Pirelli y Compañía, feibrica española de hilos y cables eléctricos en Villa, nueva y Geltrú; sobre un terreno de 13.000 metros cuadrados, está levantando una hermosa fábrica de conductores eléctricos, y quien se haya ocupado ligeramente nada más de asuntos eléctricos, no dejará de apreciar la importancia que puede tener este hecho para nuestro país. La firma social garantiza el éxito de la nueva fábrica, y es seguro que podremos contar con producto nacional bueno, igual ó mejor que el que puedan ofrecernos del extranjero. De los datos que nuestro amigo D. Pedro Bossí, representante de la casa en Madrid nos ha proporcionado, se desprenden detalles que indican la buena organización técnica de la nueva fábrica. La fabricación abarcará toda clase de conducto res eléctricos, empezando por los tipos más protegidos por el Arancel de Aduanas, y como introductores de nueva industria tienen ya concedidas por nuestro Gobierno 13 patentes. Les deseamos completo éxito en su nueva empresa. B. C. Sociedad general española de electricidad A. E. G.—Hemos recibido una atenta circular en la que la muy acreditada casa «Levi y Kocherthaler», delegación en España y Portugal de la Compañía general de electricidad de Berlín, pone en conocimiento de su numerosa clientela haberse constituido una Compafiía mercantil anónima con la denominación que sirve de título á estas líneas y bajo los auspicios de la «Allgemeine Elektricitats Gesellschaft» de Berlín, siendo su objeto «explotar la industria eléctrica, y en especial la instalación, explotación y venta de centrales de electricidad, y la construcción y venta de aparatos, material, útiles y maquinaria relacionados con las aplicaciones industriales de la electricidad». Esta nueva Compafiía funcionará independientemente de la casa «Levi y Kocherthaler», que seguirá dedicándose á los demás géneros de asuntos distintos del ramo de electricidad á que desde su fundación viene dedicada. 271 El administrador-delegado de la Sociedad recién constituida es D. Julio Levi, habiéndose nombrado apoderados en Madrid á D. Bernardo Wolf y á don Kuno Levi, con firma mancomunada, y en Barcelona á D. Eugenio Armbruster y á D. Guillermo Bruck. Aprovechamiento de aguas.—Se han incoado en el Gobierno civil de Navarra varios e.xpedientes para aprovechar aguas con destino á unos industriales. A peüción de D. Manuel Vizcaíno, de Miranda de Arga, para utihzar 6.000 htros de agua por segundo, del río Arga. ídem D. Luis Gaztelu, vecino de Madrid, 500 litros por segundo de la regata Zemunz, cerca de Urdax. ídem D. Fermín L. Julián y Zozaya, 550 litros en jurisdicción de Echalar. ídem D. Nicolás Lasarte, vecino de Andoain, 420 en las jurisdiciones de Goizueta, Erasua y Ezcurra. ídem D. Galo Arrieta, vecino de Orbaiceta, 1.500 en término de Berástegui. —De la Jefatura de Obras públicas de Burgos ha solicitado el vecino de dicha capital D. Joaquín González Roldan, la concesión de 250 htros de agua por segundo, en el término de Frías, para utilizarla como fuerza motriz productora de energía eléctrica. —Por el Gobierno civil de Navarra ha sido autorizado D. Toribio Lanca y Desmit, gerente de la S. A. Minero hidráulica, domiciliada en Bilbao, para derivar de la regata Albarsen 1.400 litros de agua por segundo, de las llamadas Ipursior 50, EsrospiUo 50, Urdansolo 30, Sarca 20, Alcadi 52 y Chirchillo 400 litros que hacen un total de 2.002 litros, que se utilizarán en el salto que se crea con los otros proyectados, en la obtención de fuerza motriz con destino á unos industriales. —Ha sido adquirida por la Sociedad Ahlemeyer de Bilbao, en el río Genil, un salto de agua de 1.300 caballos, y en un punto rodeado de poblaciones importantes á distancia máxima de 60 kilómetros. Ferrocarril eléctrico. — El día 29 de Noviembre quedó perforado el túnel de Loyola, del ferrocarril eléctrico de San Sebastián á Hernani. Las obras de este ferrocarril se están llevando con tal actividad, que es de esperar que el próximo verano esté ya en explotación. Dirige las obras el inteligente ingeniero D. Manuel .Alonso Zabala, autor del proyectó. O'JO LA ENERGÍA ELÉCTRICA Camino de hierro eléctrico de Milán á Arona, Laveno y Porto-Ceresio (Italia).— La «Societé des cherains de fer de la Mediterranée» ha adoptado la tracción eléctrica para la vía férrea de Milán á Gallarate, cuya longitud es de 40 kilómetros, y los ramales que, partiendo de dicha población terminan en las ciudades de Arona, Laveno y Porto-Ceresio, próximas á los lagos Mayor, Vánese y Lugano, con desarrollos de 26, 31 y 33 kilómetros respectivamente. Después de una serie de estudios realizados con elfinde buscar el medio más económico para la utilización de la energía eléctrica, la compañía se ha decidido por el empleo del tercer carril para la toma de corriente, segiín manifiesta la Revista italiana Le Genio civile, aprobando el proyecto presentado por la casa TlwmsonHouston de la Mediterrance, que inserta en e! liltimo mimero de su Boletín un interesante extracto de dicho trabajo, ilustrado con gran mimero de fotograbados. Razones de índole económica han impulsado á la sociedad explotadora de la indicada red al cambio de tracción, con el cual consigue reemplazar la hulla, de un precio muy elevado por tenerse que importar del extranjero, por fuerza hidráulica, creando así un servicio más rápido y frecuente, sobre todo en la época de verano, durante la cual es grande la afluencia de touristas. El trayecto Milán Gallarate-Porto-Ceresio, ha sido ya inaugurado, esperando poder abrir el total de la red al servicio ptiblico en el año entrante. La estación generatriz de fuerza hidroeléctrica se ha instalado cerca de Tornavento, utilizando un salto de agua del río Tessin, que accionará sobre ocho grandes turbinas acopladas á los alternadores, y otras dos pequeñas para el servicio de las excitatrices. La potencia de cada motor hidráulico es 1.200 caballos, y la del motor eléctrico correspondiente 750 kilovatios, á una tensión de 13.000 voltios. Para ser utilizadas como reserva ó en caso de accidente se han montado tres máquinas de vapor horizontales, tipo Corliss, de doble expansión, con una potencia de 1.410 caballos cada una. El vapor se produce en 8 calderas multitubulares, funcionando á una presión media de 12 atmósferas. Las generatrices producen corrientes alternativas trifásicas, y son del tipo de inductores móviles, soportando sin calentamiento perjudicial una sobrecarga del 25 por 100 durante dos horas. La frecuencia es de 25 períodos por segundo, á la velocidad normal de 94 vueltas por minuto. Su e.xcita- ción se produce por medio de dos dinamos hexapolares de 75 kilovatios, de corriente continua, á la tensión de 125 voltios, accionadas por dos máquinas verticales de 85 caballos. El cuadro de distribución de esta estación central está dividido en nueve partes, que corresponden: tres á los alternadores, uno á las disposiciones para los acoplamientos y dos para cada una de las líneas de transmisión de fuerza que van en las direcciones opuestas de Gallarate y Pasabiego, en cuyos puntos, y en los de Musoceo, Bissuschio Vigió y Porto-Ceresio, se han establecido las subestaciones de transformación y alimentación de la red. En el circuito de cada alternador se ha intercalado su interruptor de aceite para 13.000 voltios y para prevenir los efectos de cortos-circuitos ó cargas exageradas; en la estación central se han tnontado en los cables de línea unos interruptores automáticos, alojados en cajas incombustibles, colocadas detrás del cuadro, y á 1,50 metros de distancia, siendo manejadas por un sistema de palancas. Es tos interruptores cortan automáticamente el circuito cuando la corriente pase de un límite determi nado. Para evitar los peUgros en el manejo de los aparatos de medida, los cables de alta tensión se enpalman por medio de barras á transformadores, situados detrás del cuadro, operando así con corrientes de bajo voltaje. Pararrayos sistema Wirt protegen la central de las descargas atmosféricas. La corriente trifásica será transportada á la tensión de 13.000 voltios, por 6 hilos de cobre de 4 á 9 milímetros de diámetro, sostenidos por aisladores de porcelana fijos á postes de madera hasta liis cinco subestaciones antes nombradas (distantes entre sí próximamente unos 16 kilómetros), en cada una de las cuales, siete transformadores de ventila ción forzada (uno de reserva) de 180 kilovatios cada uno reducen el voltaje de 12.000 á 420 voltios, transformándose, á su vez, esta corriente de alternativa en continua, á 650 voltios en los conversores rotativos. Cada subestación llevará dos ventiladores movidos por igual ntámero de motores asincrónicos de un caballo. Los conversores rotativos serán de dos tipos, de seis polos y de 500 kilovatios y de cuatro polos y 250 kilovatios, girando á razón de 500 y 750 vueltas'por minuto respectivamente. En los cuadros de distribución de las subestaciones se han tomado las mismas precauciones que en el de la central. Ei material móvil se compone de 20 carruajes LA ENERGÍA ELÉCTRICA automotrices y 20 remolcados, pudiendo contener los primeros 75 viajeros y 90 los segundos, siendo sus pesos, cuando están ocupados todos los asientos, de 43 y 30 toneladas respectivamente. El equipo eléctrico de Los coches automotrices comprende: cuatro motores de 75 caballos cada uno_ 24 reóstatos de regulación, cuatro aparatos de toma de corriente, dos interruptores automáticos, dos pararrayos y 20 lámparas de incandescencia, montadas en el circuito de alimentación. Las escobillas de contacto, destinadas á recoger la corriente que recorre el tercer carril, están colocadas en la extremidad del carruaje, y van unidas á una viga de hierro fija sobre las cajas de grasa de los truks. Para el remolque de los vagones de mercancías se hará uso de una locomotora eléctrica tipo «Elihu», de 35 toneladas de peso, comprendiendo su equipo eléctrico cuatro motores de 160 caballos, marca J. E., de la casa Thomson Houston. El carril conductor es tipo Vignole, de 45 kilogramos de peso, y va colocado á lo largo de la vía, descansando sobre aisladores de granito artificial, distantes 4 metros. Este modelo de aislador, del que ya hemos hablado en esta Revista, posee condiciones en extremo recomendables de resistencia mecánica y eléctrica. El carril descansa sobre un sombrerete de hierro, que va colocado encima del dado de granito, pudiendo desplazarse libremente sobre aquél cuando se producen dilataciones ó contracciones debidas á variaciones, grandes de temperatura ó movimientos originados al paso de los trenes por mal asiento de las traviesas. Los carriles se unen entre sí para establecer su continuidad por medio de barras de cobre de 200 milímetros cuadrados de sección y de pletinas, andándolos por grupos de 10, para evitar desplazamientos, no sin dejar el juego necesario para prevenir los efectos antes indicados, en la extremidad de cada sección, por medio de conexiones flexibles. En los trozos de vía doble en la sección MilánGallarete, los dos carriles de contacto están unidos transversalmente cada 100 metros por conexiones de 11 mm. de diámetro. En los puntos donde hay que interrumpir la continuidad del carril, como en las agujas, pasos á nivel, etc., se asegura la buena comunicación dé los trozos aparados por medio de un cable armado de 400 mm.^ de sección. La distribución de energía sobre la línea no se hace por medio de feeders, sino que directamente 273 las subestaciones alimentan, en su trozo correspondiente, el carril de contacto que se interrumpe en cada una de aquéllas. Según los gráficos de servicio, para el recorrido sin detención de Milán á Gallarete se necesitará una intensidad media de corriente de 3.100 amperios, exigiendo un tren formado por un carruaje automotriz y otro remolcado una energía de 65 vados hora por tonelada y kilómetro de recorrido, con una velocidad de 88 á 96 kilómetros por hora.—E. G. Nuevo contador reglamentario. — Por Real orden de 25 de Noviembre úkimo se ha aprobado el sistema de contadores electrolíticos «Basdan», de la casa «The Basdan Meter C." Limited», de Londres, de la que es apoderado en España D. Santiago Pérez Triana. La Central de electricidad del Mediodia.— El crecimiento constante en la demanda de fluido eléctrico que viene recibiendo la Central del Mediodía desde que comenzó su funcionaiuiento en Abril de 1901 , decidió á su Consejo de administración á ampliar en grande escala la red, aumentando, en su consecuencia, notablemente la cantidad de energía producida, que hasta ahora es tan sólo de cerca de 400 kilovatios, que suministran tres dinamos de corriente continua de 150 kilovatios cada una de la «Compagnie internationale d'électricité de Liexe», y una dinamo para distribución trifilar de la casa Planas y Flaquer, de Barcelona, tipo Gans C.° de Budapest. Este aumento en la producción de fluido á que nos referimos lo suministrarán dos nuevas dinamos de 750 kilovados cada una, dpo Oerhkon, de corriente continua á 250 voltios, acopladas directamente á dos enormes máquinas de vapor de la casa Escher-Wiss, de 1.000 caballos, y otra doble dinamo acoplada también á una tercera máquina de la misma casa y 750 caballos de írerza. Cada una de estas últimas dinamos, también de corriente continua á 125 voUios, es de una potencia de 250 kilovatios, y acopladas enviarán corriente al hilo compensador de la distribución trifilar. Una batería de acumuladores construidos en los talleres de la «Sociedad general de automóviles y tracción eléctrica», capaz de producir 4.000 amperios-hora, servirá para obtener la perfecta regularización en la red en combinación con la doble dinamo, para proporcionar fluido en los casos de aumento de consumo en horas determinadas ó de averías en las máquinas, y en una palabra, como reserva de energía que podrá emplearse en los momentos en que sea necesaria. 274 LA ENERGÍA La necesidad imperiosa de reducir en lo posible eL enorme gasto de carbón que tan potentes máquinas efectúan, ha aconsejado el empleo de la condensación, que exige á su vez la construcción de un refrigerante cuyo gasto será 800 m.-' de agua por hora. Tan importante obra ha comenzado ya á ejecutarse con arreglo al proyecto é instrucciones detalladas del ingeniero directoí: D. José Benito, quien ha introducido gran número de modificaciones en los modelos de tales aparatos hoy en uso, conducentes á facilitar el fin apetecido en los refrigerantes y á obtener al propio tiempo facilidades para su construcción, traducidas naturalmente en ventajas económicas. El mencionado refrigerante se eleva sobre un depósito ya construido de 23 m. X 13 m. X 4,5° m-'i su chimenea, ó por mejor decir, su cámara de condensación, tendrá una altura de 27,50 m. sobre el fondo de dicho depósito. Según nuestras noticias, el Sr. Benito, después de un detenidísimo estudio comparativo de las condiciones y precios dados por casas francesas y alemanas para dicha obra, construida de madera como son todos los refrigerantes hoy existentes en Madrid, parecidos por la cantidad de agua condensa, da al que nos ocupa, se ha decidido por el empleo del cemento armado, encargando de su ejecución á la agencia en España de la «Compagnie fran(;aise du metal de ployé>', en representación de la cual intervienen en la obra los ingenieros militares señores Benítez y Gallego. A juzgar por la parte ya construida, el refrigerante resultará con una ligereza y esbeltez que asombra estén compaginadas con la estabilidad y resistencia tan extraordinarias é inherentes á todas las construcciones de cemento armado. Como complemento del refrigerante se ha proyectado también un depósito para agua caliente que será elevada por una bomba hasta el refrigeran, te, del que pasará nuevamente después de enfriada al condensador. Para la ampliación de la red se han pedido ya los cables y todo el material accesorio de cajas de empalme, placas fusibles, etc., etc., á la importante casa alemana «Lond-undSeckabelwerke», de Colonia, y dado lo adelantado que se encuentra el montaje de las máquinas antes mencionadas, es de pre sumir que para principios de verano estén ultimadas todas las obras y ejecutado en su totalidad el proyecto de ampliación, debido á los ilustrados in genieros de dicha Central D. José Benito y D., Ma- ELÉCTRICA nuel Cardenal, que con gran acierto y extraordinario celo han conseguido sacar todo el partido posible del material de que han ido disponiendo desde que principió á funcionar la fábrica, contribuyendo con ello notablemente al buen nombre y próspero estado de la naciente Sociedad de electricidad del Mediodía. Lámpara eléctrica de osmio. — En Sep tiembre último empezó á fabricar la Compañía alemana de Welsbach las lámparas eléctricas incandescentes con filamento de osmio inventadas por el Dr. R. de Welsbach. Las nuevas lámparas, según su inventor, consumen la mitad de la corriente para producir igual alumbrado que las mejores lámparas que se venden hoy. Las industrias eléctricas en España.— Tranvía eléctrico.—La Sociedad Hilario Díaz y compañía ha solicitado se le conceda autorización para establecer un tranvía eléctrico que, partiendo de San Cristóbal de la Laguna (Canarias), vaya á la Orotava. Fábrica de aluminio en España.—Utilizando un salto de agua en Zudaire Amescoa (Navarra), va á establecerse una fábrica de aluminio con capitales franceses y españoles, bajo la dirección de D. Pablo Espinosa, iniciador del pensamiento. Concesiones. — Por la Jefatura de Obras públicas de Burgos se ha autorizado á D. Ambrosio Ruiz utilizar 600 litros de agua por segundo del río Engaña, en términos de Valdeporres y Sotoscueva, para obtener fuerza hidráulica que se propone transformar en energía eléctrica para usos industriales y alumbrado de varios pueblos inmediatos. La transmisión de fuerza á mayor distancia.—Según leemos en la prensa americana, la «Bay Comitles Pomer Compagny» ha inaugurado ya la fábrica hidráulica generatriz, situada al Norte y próxima al río Juba (E. U.), que transporta la energía hasta Oakland (California), distante 223 liilómetros, empleando una tensión de 40.000 voltios. Tal distancia de transporte es la mayor en el mundo hasta el día.—E. G. Maschinen fabrik Oerlikon.—¿VÍ^«Í/« parte del catálogo. (Parte B.) —Generadores, motores y transformadores de corrientes alternativas mono y polifásicas. Los talleres de construcción Oerlikon construyen dos tipos d'ferentes de alternadores llamados tipo de hierro giratorio (enrollamientos fijos) y tipo de inductor móvil. LA ENERGÍA ELÉCTRICA De los de enrollamientos fijos se construyen hasta de 1.300 K V A á 75 vueltas; uno de esta potencia excepcional (1.500 caballos á too vueltas) fiínciona en la estación eléctrica de la villa de Zurich. 30 tipos distintos de potencias crecientes hasta 1.500 caballos, se construyen de inductor móvil. En magníficos grabados están representados un inductor «tipo volante» en las distintas fases de su construcción; un inducido terminado; cortes y vistas de un generador de 500 caballos, con disposición especial para desplazar lateralmente el inducido; otro generador con inductor móvil exterior de 1.500 caballos á 90 vueltas. Los motores de corriente monofásica tienen disposición para facilitar el arranque, los de corriente trifásica pueden ser de baja tensión (190 á 300 voltios) ó de alta tensión (1.750, 3.400 y 5.000 voltios). Entre estos motores, merece citarse el de 230 caballos á 560 vueltas, para accionar las locomóviles de los caminos de hierro de Soungfran. Otro motor trifásico digrio de nombrarse, construido en estos talleres, es uno de 570 caballos á 75 vueltas para agotamientos (uno de los mayores motores trifásicos de la casa). Los transformadores se construyen para diferentes relaciones de transformación y para tensiones variables de i.ooo á 30.000 voltios. Son muy distintos los que han de servir para alumbrado de los de transporte de fuerza; estos tíltimos tienen dimensiones más grandes, para impedir los descensos de tensión al poner en marcha un motor unido al transformador ó al variar la carga de este motor. El catálogo está muy razonado y contiene"figuras esquemáticas que aclaran los conceptos y curvas de funcionamiento de indudable nulidad. Nombramiento.—Por Real orden de 8 del actual se nombra verificador de contadores eléctricos de la provincia de Ciudad Real al Licenciado en Ciencias D. Luis Barrain y Grande. LIBROS NOTA E l c o n s i d e r a b l e exceso de o r i g i n a l nos o b l i g a & a u m e n t a r este número en ocho p á g i n a s de lee. tura. Y REVISTAS Agenda de Bufete para igoz.—La importante casa editorial de los Sres. Bailly-Bailliére é hijos, ha puesto á la venta la Agenda de Bufete para tgoz, cuya obra contiene datos sumamente preciosos é interesantes, á más del excelente papel y esmerada impresión; la recomendamos con gusto á nuestros lectores. Se halla de venta en las librerías, establecimientos d e objetos de escritorio y bazares; variando su precio entre una y cuatro pesetas; en provincias sufren un pequeño aumento á causa del franqueo. Almatiague Bailly-BaiHiire para igo2.— Consta de cerca de 500 páginas, de variada y amenísima lectura, resultando tan interesante y útil como los de los años anteriores. Contiene calendarios, agenda, consejos higiénicos, recetas titiles y un gran ntímero de tablas y trabajos variados, i l u s trados con multitud de grabados. Ofertas y demandas. Empleo.—Hay uno para encargado de dinamos de corriente continua y acumuladores, en Oviedo. Diríjanse las peticiones, con buenas referencias, al director de la Sociedad popular Ovetense. Preguntas y respuestas. ^ (CONTINUACIÓN k LA RESPUESTA DE LA PREGUNTA 6.>) Segundo procedimiento. — Cuando se desea mayor aproximación, y tratándose de cursos de bastante importancia se divide la sección por varias verticales en abscisas y ordenadas (se escoge la sección en una parte rectilínea, de igual pendiente, etc., etc.), entre cada dos ordenadas se toma por el molinete de Woltman, por ejemplo, tres velocidades á profundidad media, á 0,15 por encima del fondo y á 0,15 por bajo de la superficie; con todas estas velocidades se obtiene la media, que multiplicada por la sección dará el gasto por segundo. Tercer procedimiento.—Puede determinarse la velocidad por nivelación de dos puntos que formen parte de una pendiente uniforme en un cauce de orillas paralelas y rectas y de secciones bastante iguales. La fórmula aplicable á este caso es V = 52 \ / - | x J - 0 , 0 7 2 , ADVERTENCIA Con objeto de poder c e r r a r l a s c u e n t a s de Un de arto, siiplicamoa & n u e s t r o s c o r r e s p o n s a l e s y s u s c r i p t o r e s , que se h a l l e n a l d e s c u b i e r t o con esta A d m i n i s t r a c i ó n , tengran l a bondad de liqíiidnr «n el inils b r e v e plazo itosible. 275 siendo V = velocidad media buscada por i " . S = siiperficie d e la sección mojada. P = longitud en metros del perímetro mojado. H = diferencia d e nivel entre los d o s puntos considerados. L = distancia horizontal entre los mismos. H — = pendiente por metro. L< Cuarto procedimiento.—Si la profundidad del cauce no permite el empleo de flotadores lastrados y se hace necesa- 276 LA E N E R G L \ ELÉCTRICA ''io emplearlos superficiales, se deduce la velocidad media de la velocidad máxima por la siguiente fórmula: 2,37-l-V 1, = V 3>i5- - V Quinto procedimiento. — Interceptando (como dijimos al principio) el curso de agua por un encofrado con una escotadura rectangular en su borde alto, de dimensiones tales que permita verter sin rebosar el cauce total del río. El encofrado debe formar un embalse, es decir, que el agua llega al vertedero sin casi velocidad apreciable y el cauce debe ser agua abajo del encofrado recto y de p e n diente pronunciada para que el pequeño salto de agua formado por el encofrado tenga salida franca. Dentro del embalse así formado, y en punto en que la velocidad no sea apreciable, coloqúese una escala de milímetros. Conviene que la longitud de la escotadura sea por lo menos " j de la longitud total del encofrado. Léase la altura en metros de la escala por cima del fondo de la escotadura. Con esta dimensión, que llamaremos h, tenemos lo suficiente para conocer el caudal de agua. Puede hacerse uso, si no se necesita gran aproximación, de la fórmula siguiente; Q = OT L ,4 \l2g h, en la que Q = gasto por secundo. w = coeficiente prdbtico — 0,405 (Poncelet y Lesbros). L — longitud de la escotadura h = altura de la escala = altura de la lámina de agua que cae 2g= 19,62 = Q = IS h =— distancia en metros del vértice del triángulo á la superficie del agua tranquila. Segiín experiencias de Thompson L = 2 / i < : - = 0,595. L = . 4.4 í- = 0,620. Se comprende que en lugar de escotaduras puede también determinarse el gasto por orificios abiertos en el encofrado bien rectangulares ó circulares. Fácilmente podrán aplicarse estos casos á saltos de agua en los que obras de fábrica interceptan la corriente.— J. G. B. * :•: * Pregunta núm / . — El método y tablas de Houston y Kennelly, que conocemos por una traducción del Tlie Electrical IVorld, nos da a conocer el modo de calcular la caída suplementaria de tensión debida á la inductancia de la línea en el caso en que los aparatos receptores no retrasan la fase de la corriente, pero la cita la traducción que poseemos no trae el modo de calcular la caída suplementaria de tensión, debida á la inductancia de la línea, en el casq en que el ángulo x de retraso de fase producido por los aparatos receptores sea bastante grande. Se desea saber el modo de calcular la caída suplementaria de tensión en el segundo caso citado.—G. F . CORRESPONDENCIA PARTICULAR |f 2 X 9,31. Toledo —Corresponsal.—Recibido su giro y conforme. También puede emplearse la fórmala Se le han servido los números pedidos de la ' Q = 1,80. L A^/li, más sencilla que la anterior. Si se desea proceder con más exactitud, hágase un bisel en el fondo de la escotadura para reducir la contracción de la vena líquida, y apliqúese la fórmula Q=- -cLhyf^h^ en la que «res igual á un coeficiente de contracción. Los va.ores del coeficiente de contracción son: Para L '/^ de la longitud del encofrado 0,595. Para L — longitud del encofrado c — 0,667. Y para longitudes intermedias las obras del Sr. Duyos y A g a c i n o . Gallur (Zaragoza).- D . M. M.—Recibido su giro. Cádiz.—D. C. Dorien. —Anotada suscripción. Monóvar (Alicante).—ídem id. Madrid.—V>. P . Bossi.—Id. i d . Eibatr (Guipúzcoa). D . M. Anitua.—Id. id. Madrid.—V). N . Monreal. Id. id. Lesaca (Navarra).—D. i l . Esparza. - I d . i d . Granada.—Corresponsal.— ^ = ° ' " + -¿3^B = longitud del encofrado. Si por la importancia del curso de corriente no ha podido formarse balsa, y por tanto la escala no puede situarse en punto que la corriente pueda suponerse nida, llamemos a esa velocidad. segunda época. Idem. — V). ]. Simarro. — Anotada suscripción. Gijón ( O v i e d o ) . — D . A . P.—Recibido su giro y servidas Puede girar directamente á la Administración. ü / í « j ¿ . —Corresponsal. • Recibido su girb. Cartagena.—Acorazado «Victoria» . - Ai.otada suscrip- ción. Logroño. — D. D . de la S. —Recibido su g i r o . Madiid.—Sociedad Española del Acumulador T u d o r . — Anotada su suscripción. será la altura debida á esa velocidad; en este caso el gasto es la diferencia de los gastos debidos á la altura 'h — j y la altura /; en un agua tranquila; la fórmula será Q == 2,95 í L [(A - h / O 2 — =/,]. Sexto procedimiento—Debido al profesor Thompson, de Belfast, consiste en trazar la escotadura en forma triangular con el vértice hacia ab»jo, con lo que se suprimen correcciones de contracción debidas en los rectangulares á las dimensiones relativas. Con tal escotadura la sección del chorro es siempre semejante. El gasto en m.^ por segundo es Calanda (Teruel).—D. J. B — R e c i b i d o su envío y servi das obras del Sr. Olmos y Agacino. Puerto Rico.—Corresponsal. - R e c i b i d o su envío. Idem. — X). J. Annexy.—Anotada suscripción. Habana (Isla de Cuba).—Corresponsal. — Recibido su giro. Geiona — D . J. M." M. —Recibido su envío y servido número que pedía. Madrid. - D. Barrasa y Breüer. - Anotada su suscripción. I m p . de A . M a r z o , c a l l e de las P o z a s , 12. j