TESIS Para la obtención del grado de DOCTOR EN CIENCIAS MENCIÓN QUÍMICA Título de tesis DETERMINACION DEL ORIGEN Y MECANISMO DE CONTAMINACION POR METALES Y METALOIDES EN LOS SUELOS DEL VALLE DE PUCHUNCAVÍ (Chile) Sonnia Marbel Parra Vargas Director de Tesis: Dr. Waldo Quiroz Venegas Valparaíso, Enero 2013 INDICE GENERAL RESUMEN I INTRODUCCION GENERAL AGRADECIMIENTOS 14 I INTRODUCCION 20 II ANTECEDENTES BIBLIOGRAFICOS 22 II.1 Suelo, estructura y composición química 23 II.2. Contaminación del suelo 26 II.2.1 Orígenes de la contaminación de suelos 26 II.2.1.1 Origen natural 27 II.2.1.2 Origen antropogénico 27 II.3. Material particulado 32 II.3.1 Definición 32 II.3.2 Clasificación del material particulado 33 II.3.2.1 En función de su origen 33 II.3.2.1.1 Partículas naturales 33 II.3.2.1.2 Partículas antrópicas 33 II.3.2.2 De acuerdo a su mecanismo de formación 34 II.3.2.2.1 Partículas primarias 34 II.3.2.2.2. Partículas secundarias 34 II.3.2.3 De acuerdo a su composición química 34 II.3.2.3.1 Materia mineral 34 II.3.2.3.2 Aerosol marino 35 II.3.2.3.3 Partículas derivadas de azufre 36 II.3.2.3.4 Partículas derivadas de nitrógeno 37 2 II.3.2.4 Clasificación de acuerdo a su tamaño (Distribución granulométrica) 37 II.3.2.4.1 Partículas ultra finas 39 II.3.2.4.1.1 Moda de nucleación (<0.02 μm) 39 II.3.2.4.1.2 Moda Aitken (0.02-0.1 μm) 39 II.3.2.4.2 Partículas finas 40 II.3.2.4.2.1. Moda de acumulación (0.1-1 μm) 40 3.2.4.3 Partículas gruesas 40 II.3.3 Velocidad de Sedimentación 41 II.4. Contaminación de suelo por material particulado 42 II.5. Lluvia ácida 46 II.6. Identificación de las principales fuentes de emisión en la zona de estudio 48 II.6.1 Factor de enriquecimiento (EF) 49 II.6.2 Análisis de componentes principales (PCA) 51 II.6.3 Positive matrix factorization (PMF) 59 II.7 Toxicología de elementos traza 64 II.9 Contaminación de suelos en Chile 71 II.10 Descripción de fuentes existentes en el Valle de Puchuncaví 76 II.10.1 AES GENER S.A. – Central Ventanas 76 II.10.2 CODELCO División Ventanas 77 II.11 Plan de descontaminación 78 III. HIPOTESIS 80 IV OBJETIVOS 82 IV.1 Objetivo general 82 IV.2 Objetivos Específicos 82 V. PARTE EXPERIMENTAL 84 3 V.1 Reactivos y soluciones 84 V.2 Instrumentos y equipos 86 V.3 Metodología 90 V.3.1 Recolección de muestras 90 V.3.2 Tratamiento de las muestras 93 V.3.3 Fraccionamiento de muestras de suelo 93 V.3.4 Digestión de muestras 94 V.3.5 Lixiviación de suelos 94 V.3.6 Análisis de contribución de fuentes 95 VI RESULTADOS Y DISCUSION 100 VI.1. Validación de métodos analíticos 100 VI.2 Niveles de elementos mayoritarios y traza en muestras de suelo 102 VI.2.1 Niveles de elementos mayoritarios 102 VI.2.2 Niveles de elementos traza 110 VI.3. Niveles de elementos mayoritarios y traza en muestras de material particulado re suspendido 118 VI.3.1 Niveles de elementos mayoritarios en muestras de material particulado resuspendido 118 VI.3.2 Niveles de elementos minoritarios en muestras de material particulado resuspendido 123 VI.3. Análisis mineralógico 127 VI.3.1 Difracción de rayos X en muestras de suelo 127 VI.3.2 Difracción de rayos X en muestras de material particulado resuspendido 127 VI.3.3 Scanning electron microscope 129 VI.3.4 Granulometría muestras de suelo del Valle de Puchuncaví 135 VI.4 Determinación de sulfatos y nitratos 137 4 VI.5 Determinación de pH en el suelo 142 VI.6 Niveles de elementos mayoritarios y traza en lixiviados de suelo 144 VI.6.1 Niveles de elementos mayoritarios en lixiviados de suelo 144 VI.6.2 Niveles de elementos traza en lixiviados de suelo 148 VI.7 Contribución de fuentes 155 VI.7.1 Factor de enriquecimiento (EF) 155 VI.7.2 Análisis de Componentes Principales (PCA) 158 VI.7.3 Possitive Matrix Factor (PMF) 162 VI.7.3.1 Perfiles Químicos obtenidos por PMF 166 VI.7.3.1.1 Crustal 166 VI.7.3.1.2 Antropogénico 1: (Fundición de cobre) 168 VI.7.3.1.3 Antropogénico 2: (Fundición de cobre+ sulfato secundario) 169 VI.7.3.2 Contribución de la muestras en cada factor obtenido por PMF3 172 VI.7.3.2.1 Contribución Factor crustal 172 VI.7.3.2.2 Contribución Factor antropogénico 1 (Fundición de cobre) 173 VI.7.3.2.3 Contribución Factor antropogénico 2 (Fundición de cobre + sulfato inorgánico secundario) 174 VII. CONCLUSIONES 176 VIII. RECOMENDACIONES Y FUTURAS LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN 178 BIBLIOGRAFIA 180 5 INDICE DE TABLAS Tabla 1. Ejemplos de estudios de contribución de fuentes mediante PCA para identificar el origen de elementos contaminantes en muestras de suelos. 58 Tabla 2: Ejemplos de identificación de fuentes de aerosoles ambientales y su respectiva contribución mediante PMF, donde aparece el % de contribución de cada fuente identificada. 62 Tabla 3: Condiciones instrumentales para la determinación de metales y metaloides en muestras de suelo y material particulado resuspendido por ICP-AES. 86 Tabla 4: Condiciones de trabajo óptimas para el análisis por ICP-AES 86 Tabla 5: Condiciones instrumentales para la determinación de metales y metaloides en muestras de suelo y material particulado resuspendido por ICP-MS. 87 Tabla 6: Relación m/z utilizada para cada elemento en el análisis por ICP-MS 87 Tabla 7. Datos de validación de estándares de referencia para material certificado NIST 1633b. 100 Tabla 8. Datos de validación de estándar de referencia para material certificado SOIL SO-2. 101 Tabla 9. Valores de los límites de detección para elementos analizados. 101 Tabla 10. Concentración de elementos mayoritarios para muestras de suelo del Valle de Puchuncaví (2007-2009) determinados por ICP-AES. Máximo (Máx.), mínimo (Mín.) y promedio (Prom.). 107 Tabla 11. Promedio de datos de la concentración de elementos mayoritarios para muestras de suelos del Valle de Puchuncaví determinados por ICP-AES. 108 Tabla 12. Concentraciones de elementos traza en muestras de suelos del valle de Puchuncaví (2007-2009) determinadas por ICP-MS. Máximo (máx.), promedio (prom.) y mínimo (mín.) 112 Tabla 13. Comparación de la concentración de algunos elementos traza (2009) con valores de concentración para el sitio de referencia “Maitencillo”. 114 6 Tabla 14. Concentración de elementos mayoritarios en diferentes fracciones de muestras de material particulado resuspendido determinadas por ICP-AES. 122 Tabla 15. Composición química de elementos traza en fracciones de diferente tamaño para muestras de material particulado resuspendido del Valle de Puchuncaví (año 2009) determinadas por ICP-MS. 126 Tabla 16. Valores de % acumulado de PM 10 y PM 2.5 encontrados en los análisis granulométricos para muestras de suelo del Valle de Puchuncaví. 136 Tabla 17. Determinación de la concentración de iones sulfatos y nitratos (mg kg -1) analizados por ICP-AES en muestras de suelo del Valle de Puchuncaví recolectadas en los años 2007-2009. 137 Tabla 18. Valores de pH para muestras de suelo del Valle de Puchuncaví (2007-2009). Máximo (máx.), Mínimo (min), Promedio. (prom.). 142 Tabla 19. Concentraciones de elementos mayoritarios en lixiviados de suelo de los años 2007-2009 determinados por ICP-AES. Máximo (máx.), Mínimo (min), Promedio (prom.). G (Greda), M (Maitenes), V 147 Tabla 20. Concentraciones de elementos traza en lixiviados de suelo de los años 20072009, determinados por ICP-MS. Máximo (max.), Mínimo (min.), Promedio (prom.). (G: Greda; M: Maitenes, V: Valle Alegre; P: Puchuncaví; Ref: Maitencillo). 148 Tabla 21. Factor de enriquecimiento promedio para las muestras de suelo del Valle de Puchuncaví. 157 Tabla 22. Factores identificados en muestras de suelo del Valle de Puchuncaví, mediante PCA mostrando los factores loading asociados a cada componente químico para cada uno de los factores y el porcentaje de varianza de las muestras que explica cada uno de los factores obtenidos. 161 Tabla 23. Valores de Incertidumbre Sij para variables analizadas por el modelo PMF3, en las muestras de suelo del Valle de Puchuncaví. G07, G08 y G09 (Muestras recolectadas en la estación la Greda durante los años 2007 a 2009); M07, M08 y M09 (Muestras recolectadas en la estación los Maitenes durante los años 2007 a 2009); V07, V08 y V09 (Muestras recolectadas en la estación Valle Alegre durante los años 2007 a 2009); P07, 7 P08 y P09 (Muestras recolectadas en la estación Puchuncaví durante los años 2007 a 2009). 164 Tabla 24. Concentraciones (mg kg-1) de los perfiles químicos y porcentajes (%) obtenidos para cada elemento de cada una de las fuentes obtenido por PMF. 171 8 INDICE DE FIGURAS Figura 1.Modelo del ácido húmico 24 Figura 2. Clasificación del material particulado de acuerdo a su distribución granulométrica. (Warneck, 1988);(Harrison y Grieken, 1998) 38 Figura 3. Loadings con sus principales componentes para las cuatro fuentes principales identificadas en PM. F1 (a), F2 (b), F3(c), F4(d).Huang et al., (2009). 55 Figura 4. Loadings con sus principales componentes para las fuentes principales identificadas en muestras de suelo. PC1, PC2, PC3, de muestras de suelo (Franco et al., 2009). 56 Figura 5. Ejemplo gráfico de perfiles y contribuciones resueltos por PMF. (EPA PMF, 2008) 61 Figura 6. Impactador en cascada RETSCH PI-1. Derecha: anillos del impactador. Su sistema se basa en la separación de fracciones granulométricas, donde cada fracción queda adherida en su anillo correspondiente por impactación. 89 Figura 7. Localización de las zonas de estudio (amarillo) así como de las principales fuentes de emisión. 91 Figura 8. Rosa dirección del viento para las estaciones de monitoreo de la calidad de aire de la región de Valparaíso. 92 Figura 9. Diagrama Ishikawa simplificado que indica las fuentes de obtención de muestras y error en el laboratorio (Vaccaro et al., 2007). 98 Figura 10. Variación temporal de elementos mayoritarios para el año 2007. 104 Figura 11. Variación temporalde elementos mayoritarios para el año 2008. 104 Figura 12. Variación temporal de elementos mayoritarios para el año 2009. 105 Figura 13. Variaciónespacial de elementos mayoritarios en muestras de suelos del Valle de Puchuncaví. (G07, G08, G09; corresponde a las muestras recolectadas en la estación la Greda durante los años 2007 a 2009; M07, M08, M09; corresponde a las muestras recolectadas en la estación los Maitenes durante los años 2007 a 2009; V07, V08, V09; corresponde a las muestras recolectadas en la estación Valle Alegre durante los años 2007 9 a 2009; P07, P08, P09; corresponde a las muestras recolectadas en la estación Puchuncaví durante los años 2007 a 2009) 109 Figura 14. Variacióntemporal de algunos elementos traza en muestras de suelo del Valle de Puchuncaví para los años 2007-2009 (G: Greda, M: Maitenes, V: Valle Alegre, P: Puchuncaví; años 2007 a 2009). 111 Figura 15. Variacióntemporal de la concentración de cobre en muestras de suelo (2007 2009) del Valle de Puchuncaví 2007-2009 (G: Greda, M: Maitenes, V: Valle Alegre, P: Puchuncaví). 111 Figura 16. Concentración de algunos elementos traza en la estación la Greda en diferentes años de muestreo (2007-2009). *Escala logarítmica base 10. 115 Figura 17. Concentración de algunos elementos traza en las estaciones Maitenes, Valle alegre y Puchuncaví en diferentes años de muestreo (2007-2009). 116 Figura 18. Concentraciones de elementos mayoritarios en muestras de material particulado resuspendido correspondientes a la estación la Greda. 120 Figura 19. Distribuciónde elementos mayoritarios en muestras de material particulado resuspendido correspondientes a la estación los Maitenes. 121 Figura 20.Distribución de elementos mayoritarios en muestras de material particulado resuspendido correspondientes al sitio de referencia Maitencillo. 121 Figura 21. Distribución de elementos traza en muestras de material particulado resuspendido correspondientes a la estación la Greda. 123 Figura 22. Distribuciónde elementos traza en muestras de material particulado resuspendido correspondientes a la estación los Maitenes. 124 Figura 23. Distribución de elementos traza en muestras de material particulado resuspendido correspondientes a Maitencillo. 125 Figura 24. Imágenes de SEM de material particulado re suspendido donde se encuentran a. silicato de aluminio poroso (Estación los Maitenes). b. Silicato de aluminio con cenizas volantes (Estación la Greda). 129 10 Figura 25. Imágenes de SEM donde se observan partículas de oxido de cobre identificadas en a. Fracción (1.5-3 µm); b. Fracción (3-6 µm); c. Fracción (6-12 µm); d. Fracción (>20 µm); Estaciones la Greda y los Maitenes). 129 Figura 26. Imágenes de SEM de material particulado re suspendido PM 2.5 proveniente de la Estación los Maitenes donde se demuestra la existencia de cenizas volantes de forma esférica que determinan la presencia de contaminantes antropogénicos. 130 Figura 27. Espectro EDX de material particulado re suspendido (PM 2.5) proveniente de la Estación la Greda donde se muestra la presencia de óxidos de Pb, Zn, As, Cu y Ca. 131 Figura 28.Espectro EDX de material particulado re suspendido <3µm correspondiente a la estación la Greda donde se muestra la presencia de trazadores contaminantes tales como Ni, Cr, As, Cu, Zn entre otros. 131 Figura 29. Imagen de microscopia electrónica de barrido de material particulado re suspendido (PM 10) proveniente de la Estación la Greda donde se muestra la presencia de silicatos de Fe, Al, y Ti, y análisis por EDX. 132 Figura 30. Imagen de SEM donde se muestra una partícula de oxido de calcio encontrada en material particulado re suspendido procedente de la Estación la Greda. 133 Figura 31. Imagen por SEM donde se muestra la forma típica de cenizas volantes encontradas en muestras de material particulado re suspendido proveniente de la Greda. 134 Figura 32. Distribución del tamaño de partículas de muestras de suelos del Valle de Puchuncaví analizadas por difracción laser. (La línea verde indica el % acumulado y la línea azul indica el % en volumen). 136 Figura 33. Concentración de sulfatos en muestras de suelo provenientes de las estaciones de monitoreo del Valle de Puchuncaví (2007-2009). 140 Figura 34 . Concentración de nitratos en muestras de suelo provenientes de las estaciones de monitoreo del Valle de Puchuncaví (2007-2009). 140 Figura 35. Concentración de elementos mayoritarios en lixiviados de suelo (2007) (G: Greda, M: Maitenes, V: Valle alegre, P: Puchuncaví). 145 11 Figura 36. Concentración de elementos mayoritarios en lixiviados de suelo (2008) (G: Greda, M: Maitenes, V: Valle alegre, P: Puchuncaví). 145 Figura 37. Concentración de elementos mayoritarios en lixiviados de suelo (2009) G: Greda, M: Maitenes, V: Valle alegre, P: Puchuncaví). 146 Figura 38. Concentración de elementos traza en lixiviados de suelo (2007) (G: Greda; M: Maitenes; V: Valle Alegre; P: Puchuncaví). 149 Figura 39. Concentración de elementos traza en lixiviados de suelo (2008) (G: Greda; M: Maitenes; V: Valle Alegre; P: Puchuncaví). 150 Figura 40. Concentración de elementos traza en lixiviados de suelo (2009) (G: Greda; M: Maitenes; V: Valle Alegre; P: Puchuncaví). 150 Figura 41. Representación gráfica de los Loading encontrados en el Análisis de Componentes Principales (PC1- PC2) para las muestras de suelo del Valle de Puchuncaví. 160 Figura 42: Factor 1 (Crustal) obtenido mediante el modelo PMF (La barra azul indica la masa de la especie distribuida en cada factor y el punto rojo corresponde al porcentaje de cada especie que se distribuye en el factor). 166 Figura 43: Factor 2 (Fundición de cobre) obtenido mediante el modelo PMF (La barra azul indica la masa de la especie distribuida en cada factor y el punto rojo corresponde al porcentaje de cada especie que se distribuye en el factor). 168 Figura 44: Factor 3 (Fundición de cobre+ sulfato secundario) obtenido mediante el modelo PMF (La barra azul indica la masa de la especie distribuida en cada factor y el punto rojo corresponde al porcentaje de cada especie que se distribuye en el factor). 169 Figura 45. Porcentaje de contribución de cada factor a la masa total 172 Figura 46: Contribución del factor 1 (crustal) a la masa total por muestra obtenida mediante el modelo PMF (Las líneas naranjas delimitan las estaciones de monitoreo ambiental). 173 Figura 47: Contribución del factor 2 (Fundición de cobre) a la masa total por muestra obtenida mediante el modelo PMF (Las líneas naranjas delimitan las estaciones de monitoreo ambiental). 174 12 Figura 48: Contribución del factor 3 (Fundición de cobre + CIS) a la masa total por muestra obtenida mediante el modelo PMF (Las líneas naranjas delimitan las estaciones de monitoreo ambiental). 175 13 AGRADECIMIENTOS A la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica CONICYT por la beca otorgada para estudios de doctorado en Chile. A la comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica CONICYT por la beca de extensión de Doctorado. A la comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica CONICYT por la beca de asistencia a eventos y cursos cortos en el extranjero. Al programa de becas MECESUP (UCH0601) año 2010, por la beca concedida para la realización de la estadía de investigación en el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua, Barcelona, España. Al programa de becas MECESUP (UCH0601) año 2011, por la beca concedida para la realización de la estadía de investigación en el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua, Barcelona, España. A mi profesor guía Dr. Waldo Quiroz Venegas por haber aceptado la dirección del presente trabajo de tesis y por sus innumerables consejos en el desarrollo de la misma, tanto en el aspecto científico como en lo humano. Así como su enorme confianza hacía mí en estos años de trabajo. A la Dra. Teresa Moreno por su dirección en mi trabajo de tesis durante mis estadías de investigación en el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua, Barcelona, España, así como por sus innumerables consejos y apoyo personal constante. 14 A la Dra. Angeliki Karanasiou, investigadora del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua, Barcelona, España, por su constante colaboración y apoyo en los análisis de contribución de fuentes, así como por su amistad incondicional. Al Dr. Oriol Font, investigador del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua, Barcelona, España, por su constante colaboración en los análisis microscópicos desarrollados. Al Dr. Manuel Bravo Mercado, académico de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso por la formación adquirida así como también por su apoyo y constante colaboración durante el tiempo permanecido en el Laboratorio de Química analítica y Ambiental, así como a toda la comisión interna y externa que ha aceptado participar en la evaluación de esta tesis de doctorado. Al Centro Superior de Investigación Científica y Tecnológica, Instituto de Diagnostico ambiental y estudios del agua por su colaboración y apoyo en los análisis realizados durante las estadías de investigación 2010 y 2011. Al Serveis Científico - Técnics de la Universitat de Barcelona, por permitirme realizar los análisis de microscopia electrónica de barrido. Al Centro de Tecnologías Ambientales CETAM, al laboratorio de Química Analítica y Ambiental de la Universidad Santa Maria y en especial al Dr. Francisco Cereceda por el apoyo en la toma de muestras y revisión del presente escrito. A todos los compañeros del CSIC por su valiosa amistad, colaboración y apoyo personal durante mis estadías de investigación. 15 A todos los compañeros del Laboratorio de Química Analítica y Ambiental de la PUCV, especialmente a Marcelo, Aníbal y Roxanna, por su amistad incondicional y apoyo constante. A mi linda hija María Alejandra quien me ha acompañado en cada momento de mi vida brindándome su amor, compañía y apoyo diario. A todas las personas que directa e indirectamente fueron participes del desarrollo de la presente tesis doctoral. 16 RESUMEN El impacto ambiental que sobre el suelo está ejerciendo el hombre ha originado que su contaminación sea uno de los problemas medio ambientales que está recibiendo una constante atención en los últimos años. La contaminación del suelo en Chile ha sido causada principalmente por elementos traza que emiten diversas actividades industriales, los cuales pueden contaminar al suelo por vía aérea a través de la deposición de material particulado de diferente granulometría y por emisiones gaseosas. Tal es el caso de la comuna de Puchuncaví la cual es un área fuertemente afectada por contaminantes atmosféricos, emitidos por empresas que se encuentran activas en el sector como lo es la Fundición y Refinería de la empresa Nacional de Minería ENAMI, actual CODELCO División Ventanas y la Central termoeléctrica CHILGENER S.A., actual AES GENER. Dentro de los contaminantes emitidos por estas empresas se encuentran principalmente, material particulado (MP) enriquecido con elementos traza, SO2 y NOx, siendo los dos últimos los principales precursores de lluvia ácida. En esta tesis se presentan los resultados de los estudios realizados con el fin de identificar el origen y mecanismo de la contaminación por metales y metaloides en los suelos del Valle de Puchuncaví, para lo cual se han analizado muestras de suelos de 5 emplazamientos (Greda, Maitenes, Valle alegre, Puchuncaví y Maitencillo), las cuales fueron recolectadas durante los años 2007 a 2009. Los resultados de las variables estudiadas se han analizado considerando tanto los perfiles espaciales como temporales de cada uno de los emplazamientos de estudio. Se ha logrado identificar tanto cualitativa como cuantitativamente el aporte que realizan tanto CODELCO División Ventanas como AES- Gener a los niveles de elementos traza en los suelos del Valle de Puchuncaví. 17 Los resultados del análisis de las fracciones de suelo determinaron un incremento en las fracciones más pequeñas correspondiente a Ca, Cu, Zn, As, Mo, Cd, Sb y Pb, hecho que identificó la emisión de partículas finas procedentes de la Fundición de Cobre existente en el lugar de estudio. Por otra parte, los análisis mineralógicos realizados demuestran que en los suelos del Valle de Puchuncaví no solo predominan minerales típicos del mismo como lo son los aluminisilicatos si no también la presencia de óxidos de diferentes elementos trazadores lo cuales son producto de la oxidación de minerales sulfurados. Se han identificado las fuentes principales, naturales y antropogénicas cuantificando la contribución de cada una de ellas a los niveles de contaminación del suelo. Se ha constatado que los niveles de elementos trazadores contaminantes estuvieron dominados principalmente por la Fundición de Cobre a lo largo del periodo de estudio. Los tres factores (fuentes o tipos de fuentes) encontrados con el análisis del modelo PMF (Positive Matrix Factorization) con sus contribuciones en % a la masa total se asocian de la siguiente manera; Factor crustal (75%) (Al, Ca, Fe, K, Mg, Na, Ti, Mn, Sc, V, Cr, Co, Ga, Ge, Gd, Sr, Ni, y Li); Factor antropogénico 1 (10%) (Fundición de cobre: Cu, Zn, As, Se, Mo, Sn, Sb, y Pb); Factor antropogénico 2 (15%): (Fundición de cobre + sulfato secundario: sulfato, Cu, Zn y Ca). Esto indica que en el Valle de Puchuncaví la Fundición de Cobre es la fuente principal del impacto sobre los niveles de trazadores contaminantes en el suelo. 18 I INTRODUCCION 19 I INTRODUCCION La contaminación del suelo por metales y metaloides juega un papel importante debido a su enorme impacto medioambiental (Fernández, 1995; Grzebisz et al., 1997). Las actividades que provocan una modificación de la composición natural de los suelos son muy variadas. Dentro de éstas, una de las actividades industriales que se citan como principales contaminantes del suelo son las refinerías de cobre (Carrizales et al., 2006; Querol et al., 2004; Moreno et al., 2006; Dunnette et al., 1994; Bustueva et al., 1994; Pope et al., 2005) y las plantas termoeléctricas (Smith et al., 1987; Clarke et al., 1993; Godoy et al., 2005; Vejahati et al., 2010) las cuales pueden contaminar el suelo por vía área a través de la deposición de emisiones gaseosas y material particulado que contiene numerosos elementos de cuya acción toxicológica se tiene comprobada constancia; (Alloway, 1990; Colbourn y Thornton, 1978; Davies 1987). Cuando un suelo se encuentra inmerso en un polo industrial, normalmente este presenta alteraciones en su composición, lo cual es un indicativo de que está siendo contaminado por estas actividades (Derome y Lindross, 1998; Tyler, 1984; Martley et al., 2004). Sin embargo el asignar un mecanismo mediante el cual los contaminantes llegan al suelo y las fuentes responsables de esta contaminación es un problema complejo el cual pocos estudios abordan debido a la presencia de múltiples fuentes potenciales de emisión de contaminantes. Existen estudios que ya han utilizado modelos receptores para la identificación de fuentes emisoras contaminantes (Turston y Spengler 1985; Yongming et al., 2006; Xie et al., 1999; Alleman et al., 2010) entre otros, encontrando resultados satisfactorios en este campo de aplicación. En Chile, el complejo industrial ventanas, constituido por la Fundición y Refinería de la empresa Nacional de Minería ENAMI actual CODELCO División Ventanas y la Central 20 Termoeléctrica de CHILGENER; actual AES GENER se encuentra ubicado en la comuna de Puchuncaví (provincia de Valparaíso), zona donde los suelos han sido afectados por más de cuarenta años por emisiones atmosféricas provenientes de dicho complejo (Folchi, 2006). El impacto de estas emisiones industriales ha sido demostrado por varios estudios previos donde se concluye que las actividades de fundición han aumentado la concentración en el suelo de la zona por Cu, Zn, Pb y Cd (Chiang et al., 1985; González y Bergqvist 1986; González et al., 1992; Ginocchio, 2000; Ginocchio et al., 2004). A la vez los diversos estudios de caracterización de suelos del Valle tienen en común la presencia y dispersión de elementos traza en zonas cercanas a las fuentes emisoras. Dichos estudios se han basado en el análisis clásico univariado de la relación concentración distancia de la fuente. Sin embargo el estudio de perfiles multivariado de elementos trazadores contaminantes presentes en los suelos del Valle de Puchuncaví, que permitan identificar y cuantificar las fuentes emisoras de cada una de las áreas de estudio a través de las herramientas estadísticas que nos proporciona la Quimiometría aún no ha sido realizado. Por otra parte aun no existen estudios que incluyan la influencia que tiene la central termoeléctrica AES Gener en el sector, como tampoco se han encontrado publicaciones científicas que traten sobre la variación de elementos traza en diferentes fracciones granulométricas del suelo. En este contexto el objetivo de este estudio fue determinar el origen y mecanismo de la contaminación por metales y metaloides en suelos del Valle de Puchuncaví con el fin de identificar las principales fuentes de emisión y los elementos trazadores contaminantes que tienen una influencia significativa sobre la contaminación del suelo, utilizando para ello diferentes modelos receptores que permiten extraer los perfiles de origen de las principales fuentes de emisión así como su contribución relativa en la contaminación de los suelos. 21 II ANTECEDENTES BIBLIOGRAFICOS 22 II. ANTECEDENTES BIBLIOGRAFICOS II.1 Suelo, estructura y composición química Desde el punto de vista de su composición, el suelo es una delgada capa ubicada en la interfase entre la litósfera y la atmósfera y constituye un componente básico de los ecosistemas terrestres al suministrar los nutrientes minerales y el agua esenciales para la vida (Allen y Bailey, 1995). La organización Internacional de Normalización ISO (11074-17:2005), (ISO, 2005) define el suelo como la capa superior de la corteza terrestre, compuesto de partículas minerales, materia orgánica, agua, aire y organismos vivos y es la interfaz entre la tierra (geósfera), el aire (atmósfera) y el agua ( hidrósfera). Según esta definición dentro del suelo se pueden encontrar una componente biótica y otra abiótica. La parte biótica o parte viva del suelo comprende una gran variedad de organismos como raíces de plantas, fauna de suelo y microorganismos. La parte abiótica del suelo, está constituida por tres fases diferentes: la disolución acuosa, la fase sólida y la fase gaseosa. La disolución acuosa del suelo, actúa de intermediaria entre la litósfera y los organismos vivos, por lo que tiene una gran importancia para el equilibrio químico y biológico, debido a que contiene los solutos necesarios para el desarrollo de la vegetación existente en el mismo (Orozco et al., 2003). En la disolución del suelo se encuentran una variada gama de iones cuya concentración es variable, dependiendo esencialmente del tipo de suelo. Los iones más abundantes o mayoritarios son Cl-, SO42- y Ca2+, en menor cantidad Mg2+, H3SiO4-, K+, Na+ y Mn2+ y como minoritarios pueden estar presentes Al3+, Fe3+, Zn2+, Cu2+, H2PO4-, etc (Doménech, 1995). La fracción gaseosa representa el contenido en gases atmosféricos del suelo, aunque varía en función de la porosidad del suelo. La composición del aire edáfico varía también con la profundidad. 23 La fase sólida del suelo está fundamentalmente formada por partículas que constituyen el soporte que confiere rigidez y firmeza al suelo. Representa aproximadamente la mitad de la composición total de los suelos y está constituida por una fracción inorgánica y una orgánica. La fracción orgánica del suelo, aunque sólo representa un porcentaje en peso muy pequeño de la composición global del mismo, es de vital importancia para determinar su fertilidad, porque es una fuente de alimentos para microorganismos, participa en diversos procesos químicos edáficos y afecta a sus propiedades físicas. Está formada por la acumulación de residuos de orígenes vegetales y animales, en parte descompuestos y en parte reconstituidos. Esta materia está en constante transformación debido a la descomposición que experimenta por los microorganismos del suelo (Allen y Bailey, 1995). En lo que respecta a los residuos vegetales, la composición más habitual es celulosa, hemicelulosa, lignina, proteínas, aminoácidos, azúcares y componentes minoritarios como pectina, pigmentos, ceras, etc. Estos compuestos pueden ser degradados por microorganismos presentes en el suelo. Como resultado de otras vías de transformación de los residuos vegetales en el suelo existe también materia orgánica muy difícilmente degradable denominada fracción húmica (Sposito, 1989) (Figura1), la cual se divide fundamentalmente en ácidos fúlvicos, ácidos húmicos y humina (IHSS, 2007). Figura 1.Modelo del ácido húmico 24 En la fracción inorgánica se encuentran partículas minerales de distintos tamaños como gravas, arenas, limos y arcillas. A su vez la fracción inorgánica del suelo está compuesta por minerales primarios, como aluminosilicatos (minerales que contienen óxido de aluminio Al2O3 y cuarzo SiO2) ,cuarzos, feldespatos, micas, etc., y secundarios como carbonatos, óxidos, compuestos de azufre, etc., (Orozco et al., 2003). Así los elementos que forman las rocas y que constituyen principalmente la corteza terrestre son alrededor de 50 de los cuales 10 son los más abundantes y corresponden a O>Si>Al>Fe>C>Ca>K>Na>Mg>Ti. Dichos elementos son clasificados como macronutrientes y micronutrientes dependiendo de la concentración en la disolución acuosa del suelo (Sposito, 1989). Siendo los macronutrientes: C, N, O, Na, Mg, Si, S, Cl, K y Ca y los micronutrientes: Li, Be, B, F, Al, P, Sc, Ti, V, Cr, Mn, Fe, Co, Ni, Cu, Zn, Ga, Ge, As, Se, Br, Rb, Sr, Y, Zr, Nb, Mo, Ag, Cd, Sn, Sb, I ,Cs, Ba, La, Hg, Pb, Nd, Th y U (Sposito, 1989). Por lo tanto el contenido de elementos que se encuentran en el suelo debería ser únicamente función de la composición del material original, pero la actividad humana incrementa el contenido de éstos elementos en cantidades considerables, siendo esta sin duda la principal causa de su presencia a niveles tóxicos. 25 II.2. Contaminación del suelo La contaminación del suelo por metales y metaloides, juega un papel importante debido a su enorme impacto medioambiental (Fernández-Turiel et al., 1995; Grzebisz et al., 1997). La contaminación causada por elementos traza es uno de los mayores problemas ambientales del mundo, generando importantes consecuencias sanitarias y económicas (Raskin et al., 1997). Los elementos trazas, en pequeñas cantidades, pueden ser beneficiosos y hasta imprescindibles para los organismos vivos. Sin embargo pasado cierto umbral pueden convertirse en elementos muy peligrosos, debido a que tienen una lenta y difícil eliminación (Millán et al., 2007). La problemática ambiental derivada de la presencia de metales en el suelo incluye principalmente: daños al medio ambiente; efectos tóxicos en el hombre y los animales, a los que pueden acceder por ingesta directa, inhalación o a través de los alimentos; reducción del crecimiento de las plantas debido al efecto fitotóxico de los metales y a su influencia en los organismos vivos del suelo, entre otras (Volke et al., 2005). Así, se denomina suelo contaminado a una porción de terreno superficial o subterráneo cuya calidad ha sido alterada como consecuencia del vertido directo o indirecto de residuos o productos peligrosos (Doménech, 2000). II.2.1 Orígenes de la contaminación de suelos El contenido de elementos traza en suelos, debería ser únicamente función de la composición del material original y de los procesos edafogenéticos que dan lugar al suelo, pero la actividad humana incrementa el contenido de estos metales en cantidades 26 considerables, siendo esta sin duda la causa más frecuente de su presencia a niveles tóxicos. Cabe distinguir, por tanto dos tipos de procedencia para los elementos traza; II.2.1.1 Origen natural Sucede si se producen desequilibrios en los constituyentes del suelo, provocando variaciones de algunas especies a concentraciones nocivas para los seres vivos, como por ejemplo movilización de metales a causa de procesos de acidificación, disminución de Mn2+ por presencia de especies metálicas que catalizan su oxidación, aumento del porcentaje de Na en el suelo, produciendo una salinización del mismo que influye en los cultivos. Las rocas ígneas ultra básicas (como las peridotitas y las serpentines) presentan lo más altos contenidos en elementos traza, seguidos de las ígneas básicas (como los gabros y basaltos) las menores concentraciones se encuentran en rocas ígneas ácidas (como el granito) y en las sedimentarias (como las areniscas y las calizas). Los porcentajes más altos se dan para Cr, Mn y Ni, mientras que Co, Cu, Zn y Pb se presentan en menores concentraciones, siendo mínimos los contenidos para As, Cd, y Hg. II.2.1.2 Origen antropogénico En muchos casos el contenido de elementos traza en suelos se incrementa por causas no naturales, siendo la actividad humana la causa más frecuente de este incremento. Por lo tanto, los elementos son de origen antrópico cuando sus concentraciones son mayores a su correspondiente composición geoquímica. A escala regional y local las emisiones antropogénicas juegan un papel muy importante, dominante en algunos casos, debido a que las fuentes de emisión están muy localizadas en entornos urbanos e industriales. Actividades humanas como; aplicación de productos químicos agrícolas, actividades de minería y fundición, centrales termoeléctricas, fabricas de hierro y acero, generación de electricidad y otras actividades industriales; entre otros, 27 son fuentes de emisiones de material particulado de origen antropogénico (Orozco et al., 2003). La contaminación atmosférica generada por procesos industriales constituye una perturbación de origen antrópico que ha provocado cambios en la cantidad de recursos minerales en los ecosistemas naturales hacia niveles de toxicidad, tanto a corto como largo plazo. Los efectos específicos de la contaminación atmosférica dependen, sin embargo, del tipo de contaminante y de la forma, duración, intensidad y distribución espacial y temporal de los contaminantes (Mudd, 1975; Reinert et al., 1975; González y Berqvist, 1986). Dentro de éstas, las actividades industriales que se citan como principales contaminantes son las refinerías de cobre (González y Ite, 1992; Basta y Gradwohl, 2000) y las plantas termoeléctricas (combustión del carbón), (Murphy y Solomon, 2009; Vejahati et al., 2010), las cuales pueden contaminar al suelo por vía aérea a través de la depositación de emisiones gaseosas y material particulado que contiene numerosos elementos de cuya acción toxicológica se tiene comprobada constancia (Chiang, 1985a). Los procesos industriales utilizados en la fase de fundición de los concentrados en la minería metálica, son algunos de los más contaminantes, debido al gran volumen de producción involucrado (Treshow, 1970; Marshal, 1982; Larcher, 1995). La fundición de minerales de cobre sulfurados altera la calidad del aire al liberar gases, principalmente dióxido de azufre (SO2), óxidos de nitrógeno (NOx) y partículas ricas en diversos elementos traza, tales como Cu, As, Zn, Pb (Ross, 1974; ERM, 1993; Lagos y Ibañez, 1993; Gidhagen et al., 2002; Beavington et al., 2004; Carn y Krugerj, 2007; Doménech, 1995), denominados contaminantes primarios (Sienfeld, 1998; Goudie, 1990), los cuales son producto de los diversos procesos de fusión que se llevan a cabo para la extracción de cobre a partir de minerales sulfurados y oxidados (Codelco). 28 Después de ser emitidos, los contaminantes gaseosos están sujetos a cambios químicos en la atmósfera, generando los denominados contaminantes secundarios (Orozco et al., 2003). El SO2 y los NOx se oxidan a sulfato y nitrato particulados denominados aerosoles, constituyendo núcleos de formación de nubes que usualmente presentan una acidez de tres o más veces mayor que la de las gotas de lluvia (ERM, 1993). La presencia de contaminantes primarios y secundarios en la atmósfera produce una alteración en la composición química del aire (Orozco et al., 2003; Manahan, 2001). Los contaminantes atmosféricos son posteriormente depositados en el suelo. La constante depositación de aerosoles ácidos de azufre y nitrógeno y de partículas ricas en elementos trazadores contaminantes sobre la superficie terrestre conlleva un aumento gradual y permanente en la disponibilidad de algunos recursos minerales en el suelo (Wallace y Berry, 1979; Johnson, 1982; González y Berqvist, 1986; Paces, 1986; Baudo, 1987; Davies, 1987; Eijsackers, 1987; Sparks, 1995). Sin embargo, debido a las diferentes velocidades de dispersión atmosférica y de depositación de los contaminantes (Goudie, 1990) se genera un gradiente de alteración del hábitat en torno al complejo industrial, caracterizado por una mayor acumulación de algunos elementos traza en los suelos más cercanos a la fundición que en los más lejanos (ERM, 1993). La contaminación asociada a la mineria del cobre ha sido reportada en muchas zonas del mundo como en San Luís Potosi Mexico (Carrizales et al., 2006), España (Querol et al., 2004; Querol et al., 2004; Moreno et al., 2006), Polonia (Dunnette et al., 1994), Rusia (Bustueva et al., 1994), Rumania (Pope et al., 2005), Turquia (Çubukçu y Tüysüz, 2006) y Zamba (Tembo et al., 2006), donde se han encontrado elementos tóxicos tales como As, Cd, Cu y Pb; asociados con la fundicion de cobre en suelos. Asi mismo se han encontrado suelos tóxicos por actividades mineras en la zona de Hunan China (Liao et al., 2005), donde se reportan altas concentraciones de Zn, Pb, Cd, Cu, y As con valores promedio correspondientes a 508.6 mg Kg-1, 384.3 mg Kg-1, 7.53 mg Kg-1, 356 29 mg Kg-1, y 44.6 mg Kg-1 respectivamente; y en Londres (Rimmer et al., 2006) donde se reportan suelos contaminados con altas concentraciones de Cu (233 mg Kg-1), Pb (350 mg Kg-1), Zn (419 mg Kg-1), As (42 mg Kg-1) y Cd (1,3 mg Kg-1). Las emisiones tóxicas de las fundiciones de cobre también han dado lugar a la contaminación del suelo especialmente en las cercanías de las plantas de fundición y en las áreas que se encuentran en la dirección del viento dominante, como es el caso del Complejo de Cobre Sarcheshmeh en Iran (Rastmanesh y Moore, 2011), lugar donde el índice de geoacumulación, y el factor y grado de contaminación indican el enriquecimiento potencial de la superficie del suelo por metales toxicos como As (121.9 mg kg-1), Cu (1905.6 mg Kg-1), Pb (82,6 mg Kg-1), Zn (213 mg Kg-1), Mo (9.9 mg Kg-1), y Cd (3.1 mg Kg-1). Así mismo este hecho es reflejado en los suelos cercanos al complejo industrial de Puerto Kembla, NSW, Australia (Martley et al., 2004), el cual comprende una fundición de cobre, siderurgia e industrias asociadas. Siendo la fundición de cobre considerada como la principal fuente de metales para el medio ambiente la cual ha afectado los suelos circundantes con elementos tales como Cu, Zn, As, Pb, y Zn. Chopin y Alloway (2007), estudiaron los suelos contaminados por elementos trazas provenientes de actividades mineras y de los procesos de fundición del área industrial de la provincia de Huelva España, encontrando valores máximos para As, (470 mg Kg -1), Cu (6690 mg Kg-1), Pb (1120 mg Kg-1) y Zn (9810 mg Kg-1) en el medio ambiente circundante, por lo que la presencia de dichos elementos traza fue atribuida a la emisión de grandes cantidades de elementos traza por parte de los procesos de fundición (Alloway y Ayres, 1997; Salomons, 1995; Selim, 2001) donde la mayoría de minerales sulfurados contienen FeS2, CuFeS2, ZnS, PbS, FeAsS, convirtiéndose estos en un potencial de liberación de As, Cu, Pb y Zn (Kelly y Thornton, 1996). Por otra parte, industrias como las centrales de energía térmica que usan carbón como combustible para producir energía generan una serie de subproductos de su combustión 30 que pueden contaminar al suelo vía aérea a través de emisiones gaseosas o por depositación de material particulado ( Smith, 1987; Clarke, 1993). Dentro de estos subproductos se encuentran; cenizas volantes y escorias además de gases de combustión. Las cenizas volantes están compuestas por partículas que debido a su pequeño tamaño son arrastradas por el flujo de gases que se generan durante la combustión del carbón (Querol et al., 1996). Mientras que las escorias constituyen la parte del subproducto residual que no puede ser arrastrado por dicho flujo gaseoso y caen depositadas en el fondo de la cámara de combustión. El porcentaje de uno y de otro tipo de residuo depende de la composición del carbón, además de la configuración de la central, especialmente del tipo de caldera empleado. En el caso de los gases de combustión la mayor parte de ellos corresponde a emisiones de SO2 (McLaughlin, 1985, Agrawal y Agrawal, 1989; Hougfa, 1989). La contaminación por la quema de carbón reportada en varios países como es el caso de Brasil donde se encuentra el Complejo Termoeléctrico Jorge Lacerda el cual está formado por siete plantas de energía, convirtiéndose en la Termoeléctrica más grande de América Latina (Godoy et al., 2005), donde mediante modelos receptores tales como análisis factorial, análisis de clúster se ha determinado que las emisiones procedentes de éste Complejo son la fuente principal de elementos contaminantes tales como As, Bi, Cd, Pb, Sb y Se. La contaminación generada por plantas termoeléctricas es también un factor de preocupación para la salud pública, ya que elementos como Hg, As y Se presentes en el carbón, incluso a niveles de partes por millón, pueden dar lugar a emisiones de varias toneladas de contaminantes en el medio ambiente (Vejahati et al., 2010). 31 II.3. Material particulado II.3.1 Definición El material particulado atmosférico es el conjunto de materia en estado sólido y/o líquido presente en suspensión en la atmósfera. Es necesario considerar que el término material particulado atmosférico es un concepto amplio que engloba tanto las partículas en suspensión como las partículas sedimentables, (Mészáros, 1999). El material particulado atmosférico es emitido mayoritariamente por fuentes naturales (materia mineral re suspendida, aerosol marino, actividad volcánica, incendios forestales, etc); así como por numerosas fuentes de emisión antrópica (emisiones residenciales y domésticas, tráfico rodado, procesos industriales, generación de energía, actividades de construcción y demolición, incendios forestales intencionados, quemas de biomasa, entre otros), que contribuyen a incrementar los niveles de material particulado en suspensión, si bien las fuentes naturales contribuyen de forma dominante a las emisiones a escala global (IPCC, 2007). Independientemente de su origen natural o antrópico, el material particulado en suspensión se considera como un contaminante atmosférico ya que altera la composición original de la atmósfera (Mészáros, 1999). El creciente interés en el estudio del material particulado atmosférico se debe a los diferentes efectos adversos que origina. El principal de todos ellos es el efecto negativo que produce en la salud humana incrementando el riesgo de afecciones de tipo respiratorio, pulmonar (Douglas y Dockery, 1993; Schwartz, 1994; Schwartz et al., 1996; Hoek et al., 2002; Pope et al., 2002; Pope et al., 2004; Wichmann y Peters, 2000; Brunekreef y Forsberg, 2005; Who, 2006) y cardiovascular (Wyzga, 2002; Dockery y Stone, 2007; Miller et al., 2007). La presencia de material particulado en suspensión tiene efectos adversos sobre los ecosistemas (Peters, 1973; WGB, 2000); acelera el deterioro de 32 materiales de construcción (Laurenzi et al., 1992; Alastuey et al., 2004) y a la vez puede originar la reducción de la visibilidad (IPCC, 2007). II.3.2 Clasificación del material particulado El material particulado atmosférico puede ser clasificado en función de su origen (natural y antrópico), atendiendo a su mecanismo de formación (primario y secundario), en base a su composición química (aerosoles carbonosos, aerosoles inorgánicos secundarios, materia mineral, aerosol marino), o según su tamaño (nano partículas, partículas ultra finas, partículas finas, partículas gruesas). II.3.2.1 En función de su origen II.3.2.1.1 Partículas naturales Son aquellas presentes en la atmósfera por acción de fenómenos naturales, mayoritariamente por procesos mecánicos (re-suspensión de polvo mineral, generación de aerosol marino) y en menor medida por otras causas (partículas primarias derivadas de erupciones volcánicas, emisiones biogénicas, descargas eléctricas, etc.) II.3.2.1.2 Partículas antrópicas Constituyen una proporción importante de material particulado. Son emitidas a la atmósfera por acción antropogénica (p.ej, emisiones industriales, urbanas, agrícolas, mineras o por el transporte aéreo o terrestre). Sus principales fuentes se ubican en zonas urbanas e industriales. En zonas industriales la materia particulada primaria de origen antrópico proviene de las emisiones de chimeneas de determinados procesos industriales como la combustión del carbón, la fundición de metales (Zn, Cu), o la producción de cementos, ladrillos o cerámica. Entre las partículas antropogénicas de origen secundario dominan los sulfatos generados por oxidación del SO2, emitido por ejemplo por centrales térmicas y plantas industriales, o nitratos que provienen de la oxidación de óxidos de nitrógeno (NOX) emitidos por determinados procesos de generación eléctrica ó industrial. 33 II.3.2.2 De acuerdo a su mecanismo de formación II.3.2.2.1 Partículas primarias Son aquellas emitidas como tales a la atmósfera. A escala global su origen se encuentra en fuentes naturales (zonas áridas y semiáridas, océanos y mares), si bien a escala local las fuentes de emisión antrópicas pueden contribuir de forma dominante (tráfico rodado, procesos industriales). II.3.2.2.2. Partículas secundarias Son aquellas que se originan en la atmósfera a partir de precursores gaseosos (SO X, NOX, entre otros), ya que procedan de fuentes naturales o antrópicas (IPCC, 2007) II.3.2.3 De acuerdo a su composición química Las partículas de naturaleza mineral y aerosol marino dominan el material particulado en suspensión a escala global (IPCC, 2007). En una escala menor la composición del material particulado atmosférico está fuertemente influenciada por las fuentes de emisión locales. Según la naturaleza de las partículas se establecen los siguientes grupos composicionales (Sienfeld, 1998): materia mineral, aerosol marino, materia orgánica y carbono elemental, partículas derivadas de azufre y partículas derivadas de nitrógeno. II.3.2.3.1 Materia mineral El material particulado mineral de origen natural constituye la fracción mayoritaria en cuanto a masa del aerosol atmosférico (44% de las emisiones globales a nivel terrestre), (Duce y Liss, 1991; IPCC, 1996). La emisión de partículas minerales se genera por medio de la acción de los vientos sobre la superficie terrestre, en forma de emisiones fugitivas. La distribución granulométrica de este tipo de partícula una vez emitidas en el área fuente es relativamente constante, y se concentra principalmente en tres modas de diámetros 1.5, 6.7 y 14.2 μm, respectivamente (Alfaro et al., 1998). Como se verá más adelante, estas partículas se caracterizan por que tienden a acumularse en las fracciones mayores del material particulado re suspendido analizado. 34 La abundancia relativa de partículas dentro de cada una de las modas depende de la velocidad del viento, de modo que a bajas velocidades se produce la re-suspensión de las partículas de mayor diámetro, mientras que al incrementar la velocidad se emiten las partículas de menor diámetro. Al margen de la velocidad del viento, la emisión de las partículas de origen mineral depende de la superficie del suelo, de la humedad y la cobertura vegetal entre otros factores (Marticorena y Bergametti, 1997). La composición química y mineralógica de estas partículas varía de una región a otra dependiendo de las características y composición de los suelos, pero generalmente está constituida por calcita (CaCO3), cuarzo (SiO2), dolomita [CaMg(CO3)2], arcillas sobre todo caolinita, Al2Si2O5(OH)4, e illita, K(Al,Mg)3SiAl10(OH)], feldespatos [KAlSi3O8 y Na,Ca)(AlSi)4O8], cantidades inferiores de sulfato cálcico (CaSO4.2H2O) y óxidos de hierro (Fe2O3), entre otros (Glaccum y Prospero, 1980; Schütz y Sebert, 1987; Adedokun et al., 1989; Avila et al., 1998; Caquineau et al., 1998). El origen de estas partículas es primario, ya que son emitidas directamente a la atmósfera. II.3.2.3.2 Aerosol marino El material particulado de origen marino es el segundo tipo de partícula con mayor importancia en cuanto al volumen total de emisiones a escala global (38% de las emisiones globales a nivel terrestre (IPCC, 1996). Al igual que el material particulado mineral, las partículas de aerosol marino poseen en su mayoría origen natural y son emitidas directamente a la atmósfera (partículas primarias). El número de partículas de origen marino en la capa límite oceánica es así directamente proporcional a la velocidad del viento (Pósfai y Molnár, 2000). El aerosol marino se forma cuando el viento incide sobre la superficie del océano. Se forman de este modo pequeñas burbujas que son proyectadas a altas velocidades y se incorporan a las masas de aire en movimiento. Se trata por tanto de partículas con un diámetro considerable y similar al de la materia mineral. 35 La composición química del aerosol marino deriva de su fuente de origen: el agua de los mares y océanos. Consecuentemente, las relaciones entre los principales elementos presentes en el agua de los océanos descrita por (Mészáros, 1999); se observa también en el aerosol marino. Así, la fracción primaria del aerosol marino está principalmente compuesta por cloruro sódico (NaCl) aunque otras formas de cloruros y sulfatos (ej. MgCl, MgSO4 o Na2SO4) también se encuentran presentes. Dado que los iones y compuestos mencionados son solubles en agua, el diámetro de partícula del aerosol marino en la atmósfera es dependiente de la humedad relativa. II.3.2.3.3 Partículas derivadas de azufre En cuanto a los compuestos de S se refiere, los sulfatos presentes en la atmósfera son generalmente partículas de origen secundario, ya que no son emitidos directamente a la atmósfera sino que se generan mayoritariamente como resultado de la oxidación de precursores gaseosos (principalmente SO2). El diámetro de este tipo de partícula suele ser < 1μm (EPA, 1996). Las fuentes de emisión de SOx pueden ser naturales y antropogénicas. Las fuentes naturales corresponden a gases provenientes de erupciones volcánicas; y las fuentes antropogénicas a gases provenientes de automóviles, centrales térmicas, calderas industriales de generación de calor, y explotación de minerales con contenido de azufre, entre otros (Vega, 2002). Los sulfatos de origen no natural, por otra parte, constituyen la fracción principal del material particulado atmosférico antropogénico (Chuang et al., 1997). La producción antropogénica de gases precursores de los sulfatos de origen secundario se centra esencialmente en procesos de combustión de combustibles fósiles con alto contenido en S, mayoritariamente carbón en centrales térmicas y complejos industriales, la combustión de carbón supone un 60% de las emisiones de sulfato antropogénico (Warneck, 1988). El 36 principal compuesto gaseoso emitido es SO2, que se oxida a H2SO4 (Hidy, 1994) (Ecuación 1). SO2 SO3 H H 2 SO4 02 2O Ecuación (1) II.3.2.3.4 Partículas derivadas de nitrógeno - En cuanto a los compuestos de nitrógeno (principalmente NO3 ), al igual que los sulfatos, son de origen mayoritariamente secundario y provienen de la reacción de precursores gaseosos antropogénicos (Seinfeld y Pandis, 1998). En cuanto a los precursores gaseosos de los nitratos de origen antropogénico, en la actualidad se conocen numerosas fuentes emisoras entre las cuales destacan la combustión del carbón y otros procesos de combustión a temperaturas elevadas (capaces de oxidar el N2 atmosférico) tales como los que ocurren en las centrales térmicas principalmente (Vega, 2002). Los principales gases emitidos por fuentes antropogénicas son así NO, NO 2, cuya oxidación en la atmósfera tiene como resultado más frecuente la formación de ácido nítrico (HNO3) (Warneck, 1988; Mészáros, 1999) (Ecuación 2). 2O NO O2 NO2 H HNO3 Ecuación (2) II.3.2.4 Clasificación de acuerdo a su tamaño (Distribución granulométrica) En cuanto al tamaño de las partículas atmosféricas en suspensión varía desde nanómetros (nm) hasta decenas de micras (μm). Generalmente se identifican diferentes rangos de tamaños de partícula denominados “modas”, que están relacionados en su mayoría con el mecanismo de formación de las partículas: nucleación, Aitken, acumulación y moda gruesa (Warneck, 1988; EPA, 1996; Seinfeld y Pandis, 1998), (Figura 2). En general, la 37 granulometría y la composición química del material particulado suelen ser características del foco emisor (Warneck, 1988). Por tanto, las partículas ambientales generalmente se distribuyen en tres modos: ultrafino (<0.1 µm), fino (entre 0.1 y 1µm) y grueso (>1 µm) (Figura 2). La agencia de protección del medio ambiente de Estados Unidos (USEPA) y otras agencias alrededor del mundo regulan el nivel de partículas en el ambiente de un diámetro inferior a 10 µm (PM10). Algunas agencias, incluyendo la USEPA, también regulan las partículas menores a 2,5 µm de diámetro (PM 2.5) (Seneviratne et al., 2011). Por lo que las partículas con un diámetro aerodinámico de 10 µm o menos, conocidas como partículas respirables en suspensión o PM10, se mantienen en la atmósfera durante períodos más largos debido a sus bajas velocidades de sedimentación. Todas las partículas de diámetro <10 μm (PM10) tienen un tamaño suficiente para penetrar en la región traqueobronquial, pero sólo aquellas de diámetro <2.5 μm (PM2.5) pueden alcanzar la cavidad alveolar y, por tanto, provocar mayores afecciones (Rodríguez et al., 2004). Figura 2. Clasificación del material particulado de acuerdo a su distribución granulométrica. (Warneck, 1988;Harrison y Grieken, 1998) 38 II.3.2.4.1 Partículas ultra finas Son aquellas de tamaño inferior a 0.1 µm, están presentes en todos los ambientes, pero su abundancia es mucho mayor en zonas urbanas debido que es aquí donde se encuentra su foco emisor, el tráfico rodado (Wehner et al., 2002; Zhu et al., 2002; Rose et al., 2006) en donde son muy abundantes en número, sin embargo suponen una parte mínima de la concentración en términos de masa (Wichmann y Peters, 2000). Dentro de ellas en función del tamaño y de los mecanismos de formación, se diferencian dos subgrupos que se describen a continuación: II.3.2.4.1.1 Moda de nucleación (<0.02 μm) Son partículas generadas en la atmósfera a partir de gases, especialmente H 2S04. Este tipo de partículas tiene una vida media en la atmósfera de horas, ya que rápidamente se convierte en partículas más gruesas por coagulación con otras partículas (Wichmann y Peters, 2000; Wehner et al., 2002; Kulmala et al., 2004). Los procesos de nucleación se pueden producir bajo diferentes situaciones. Algunos estudios ponen de manifiesto la estrecha relación entre la temperatura, la humedad relativa y la concentración de precursores a la hora de producirse la nucleación. Eastern y Peter, 1994 constataron la ocurrencia de este proceso a bajas temperaturas y elevada humedad relativa. Otros autores han registrado como episodios de nucleación se registran en condiciones de humedad relativa muy baja, velocidad del viento elevada e intensa radiación solar (Rodríguez et al., 2004). II.3.2.4.1.2 Moda Aitken (0.02-0.1 μm) Estas partículas pueden tener un origen primario (natural o antropogénico) o secundario (a partir de partículas de la moda de nucleación). Mucho se desconoce aún acerca de la composición química de estas partículas, aunque es muy probable que las de origen secundario se formen por procesos de coagulación a partir de la moda de nucleación (Wehner et al., 2002; Lingard, 2006; Kulmala et al., 2004). Según estudios llevados a cabo 39 por (Oberdöser et al., 1995), este rango de partículas es el que tiene efectos más negativos sobre la salud. II.3.2.4.2 Partículas finas Se consideran partículas finas aquellas cuyo tamaño es inferior a 1 µm. Una fracción importante de las partículas finas constituye la moda acumulación. II.3.2.4.2.1. Moda de acumulación (0.1-1 μm) Las partículas que componen ésta moda son aquellas que resultan del proceso de coagulación entre otras partículas existentes. Una fracción importante de esta moda la componen aquellas partículas primarias emitidas por vehículos pesados (Zhu et al., 2002; Rose et al., 2006). El tiempo de residencia de estas partículas en la atmósfera es superior a las partículas de modas anteriores, pudiendo ser transportadas a largas distancias. 3.2.4.3 Partículas gruesas Se consideran partículas gruesas a las que tienen un tamaño superior a 1 µm. Las partículas gruesas pueden ser de origen primario (aerosol marino o materia mineral), que a escala global es esencialmente natural, aunque en áreas urbanas e industriales, la fracción mineral es mayoritariamente de origen antrópico (Querol et al., 2001a, Querol et al., 2001b; Salvador et al., 2007). Por otra parte pueden ser de origen secundario, como algunas especies de nitratos y sulfatos que se concentran en muchas ocasiones en la fracción gruesa. 40 II.3.3 Velocidad de Sedimentación Intuitivamente, se debería pensar que todas las partículas deberían sedimentar y depositarse sobre la superficie terrestre de forma rápida bajo la influencia de la gravedad, pero eso no es así para las partículas más pequeñas. Los tiempos de residencia de las partículas en la atmósfera, también dependen de su tamaño. Partículas de tamaño menor a 2,5 μm pueden tener tiempos de residencia de días o incluso semanas y podrían ser transportadas miles de kilómetros (Seneviratne et al., 2011). Partículas de tamaño mayor a 2,5 μm tienen tiempos de residencia de minutos a horas y pueden ser transportadas hasta unos pocos centenares de kilómetros (Vana et al., 1999). De acuerdo con la Ley de Stokes, la velocidad expresada en distancia por segundo a la que las partículas sedimentan, aumentan con el cuadrado de su diámetro. En otras palabras, una partícula que posee la mitad de diámetro de otra caerá cuatro veces más lentamente (Baird et al., 2001). Por lo tanto la velocidad de caída de una partícula y la medida de sedimentación está basada en la ecuación de la Ley de Stokes, representada por la siguiente ecuación; (ecuación 3) V gD 2 ( partícula fluido ) 18 Ecuación (3) Donde; V= velocidad de sedimentación; g= aceleración de la gravedad; D= diámetro de la partícula; y µ= viscosidad del fluido. 41 II.4. Contaminación de suelo por material particulado La presencia de las partículas en la atmósfera, así como su posterior deposición, puede generar efectos en el clima, en los ecosistemas, así como en los seres vivos (Aitken, 1880; Douglas y Dockery, 1993; Schwartz, 1994; Schwartz et al., 1996; Dockery y Pope, 1996; Arimoto, 2001; Mészáros, 1999). Las partículas contaminantes del aire provenientes de emisiones industriales y la explotación de recursos naturales representan una importante contribución a la contaminación del suelo. Estas partículas de la atmosfera, partículas sedimentables por lo general se depositan en el suelo a través de deposiciones secas y húmedas (Azimi et al., 2003; Kim et al., 2000), por lo tanto las consecuencias más directas de contaminantes del aire en el suelo son la acidificación y el enriquecimiento de metales pesados como componentes del material particulado re suspendido. Por lo tanto, el origen de elementos traza contaminantes presentes en el suelo puede estar asociado con el transporte de partículas emitidas a la atmosfera en forma de aerosoles (Menjivar et al., 2009), las cuales son transportadas hasta varios kilómetros de distancia de sus fuentes y transferidas al suelo por deposición. Así, la deposición de metales es una fuente importante de contaminación del suelo, por lo que en zonas expuestas a niveles de contaminación significativos pueden tener efectos tóxicos como consecuencia de la inhalación o ingestión por los seres humanos (Manta et al., 2002). Las partículas sedimentables que contaminan el suelo, pueden permanecer en la atmósfera durante periodos cortos debido a su tamaño (Cizmecioglu y Muezzinoglu, 2008), pero una vez incorporadas al suelo, se mantienen por periodos muy largos de tiempo, hasta varios miles de años (Brookes, 1995). 42 Por tal razón, la actividad humana incrementa el contenido de elementos traza en el suelo en cantidades significativas, siendo ello la causa más común de las concentraciones de elementos tóxicos (Wei y Yang, 2010; Moral et al., 2005). Así, por ejemplo altos niveles de metales se pueden encontrar alrededor de minas metalíferas, lo que puede provocar efectos adversos en el ambiente (Pérez et al., 2007), convirtiéndose el suelo en un importante sumidero de elementos traza que son liberados al medio ambiente. Según numerosos estudios, las fuentes antropogénicas que emiten material particulado al suelo incluyen emisiones provenientes de tráfico, emisiones industriales (centrales térmicas, combustión de carbón, industria metalúrgica, plantas químicas, etc.), entre otras (Wei y Yang, 2010). Ejemplo de ello lo citan los estudios de (Soriano et al., 2012), quienes evaluaron la influencia de las emisiones de material particulado en la contaminación del suelo, en las localidades de Almazora y Vila-real (España), lugares donde existe una alta densidad industrial. Los elementos traza analizados en partículas sedimentables fueron Cd, Pb, Ni, Sb y Bi, los cuales se asociaron con las siguientes fuentes: Sb; por emisiones del tráfico, (Lijima et al., 2007; Pakkanen et al., 2003; Sternbeck y Sjodin, 2002), Ni; por emisiones de centrales eléctricas, plantas petroquímicas y tráfico (Pallarés et al., 2007; Boix et al., 2001), Bi, Cd y Pb; atribuidos a la industria de la cerámica (Minguillón et al., 2007; Querol et al., 2007; Vicente et al., 2007), y a emisiones provenientes de fuentes de tráfico en el caso de Pb (Gómez et al., 2006; Manalis et al., 2005). Los autores asociaron el origen de las emisiones en el área de estudio principalmente con los procesos de combustión y la presencia de la industria cerámica (Pallarés et al., 2007), mediante un estudio comparativo de los niveles de elementos traza en muestras de suelo de algunas ciudades cercanas a los sitios se estudio; donde de acuerdo a valores establecidos para suelos contaminados (http://www.ukqaa.org.uk), se reflejo enriquecimiento por Pb, Ni y Cd. Sin embargo la variabilidad en los niveles de estos 43 elementos traza en partículas sedimentables, fue atribuida a la aplicación de medidas correctivas en las principales industrias de la zona, lo que por ende conduce a un menor enriquecimiento de elementos contaminantes en el suelo. De igual forma, la contaminación del suelo por emisiones de material particulado se refleja en los estudios realizados por (Keane et al., 2001), quienes evaluaron la concentración de elementos traza en hojas de (Taraxacum officinale), muestras de suelo y PM10 de muestras recolectadas en el oeste de Estados Unidos; encontrando una correlación positiva entre las concentraciones de metales presentes en el suelo con las de material particulado, por lo que los autores concluyeron que las partículas presentes en la atmosfera son un buen indicador de contaminación del suelo . En el caso de las industrias metalúrgicas, éstas pueden contribuir a la contaminación del suelo de varios modos como lo es el caso del material particulado (por emisión de aerosoles y polvo que son transportados por el aire y eventualmente depositados sobre los suelos y la vegetación) (Vega, 2002). En la industria de la minería y la fundición metalífera, el PM procede de partículas residuales de minerales no eliminados por los procesos de separación, los cuales pueden ser transportados por el viento y/o el agua constituyendo una fuente de contaminación por metales en suelos circundantes a zonas de minería y fundición (Liao et al., 2005). En cuanto a las actividades de fundición de metales, estas representan una de las más fuentes importantes en la contaminación de suelos por la deposición atmosférica de metales y metaloides (Rieuwerts et al., 2006; Sterckeman et al., 2006; Burt y Horton, 2003; Udachin et al., 2003; Martley et al., 2004; Williamson et al., 2004; Ettler et al., 2005; Douay et al., 2006; Ettler et al., 2010). Ejemplo de ello lo citan los estudios realizados por (Ettler et al., 2012) quienes estudiaron la distribución de metales y metaloides en suelos contaminados por una fundición de 44 cobre en Zambia con el fin de evaluar la distribución espacial de los elementos traza (As, Co, Cu, Pb, Zn). Los autores determinaron que las concentraciones más altas de contaminantes se encuentran distribuidas de acuerdo a la dirección predominantes de los vientos respecto de la fuente, por lo que la zona directamente afectada por las emisiones es la que se encuentra cerca a la fundición de cobre (Sterckeman et al., 2006; Rieuwerts et al., 2006; Kříbek et al., 2010). Los valores reportados en éstos suelos reflejan altas concentraciones para; As (255 mg kg-1) ,Cu (27410 mg kg-1), Co (606 mg kg-1), Pb (480 mg kg-1) y Zn (450 mg kg-1), consideradas éstas como un enriquecimiento antropogénico por emisiones provenientes de la fuente respectiva. 45 II.5. Lluvia ácida La biodisponibilidad de los metales en los suelos, también puede tener su origen por la llamada lluvia ácida, la cual es causada por óxidos de nitrógeno y azufre, sustancias que se clasifican como contaminantes primarios (Celis, 2004). La lluvia ácida es un fenómeno translacional, debido a que los gases generados en una parte del planeta, son arrastrados por los vientos, produciendo problemas a muchos kilómetros de distancia del centro emisor (Doménech, 2006). El pH del agua de lluvia normal oscila en torno a 5,5-5,7, por lo que se considera lluvia ácida la que tiene un pH inferior a 5,5. Aunque el término de lluvia ácida se refiere a la deposición húmeda de sustancias de carácter ácido, también se incluye bajo esa denominación la deposición seca de especies de carácter ácido. Refiriéndose la deposición húmeda a la lluvia, niebla y nieve, donde a medida que esta agua se esparce por el suelo, afecta a la flora y fauna que queda a su paso. Los efectos de este paso dependen de varios factores como cuan ácida es el agua, y de la capacidad del suelo de soportar estos factores. Y la deposición seca se refiere a los gases y partículas ácidas. Aproximadamente la mitad de la acidez imperante en la atmósfera se precipita nuevamente a la tierra a través de esta deposición seca (Orozco et al., 2003). Las principales causantes de este fenómeno son las emisiones, tanto naturales como antropogénicas de S02 y NOx. En cuanto a las fuentes de emisión naturales de SO2, se encuentran principalmente los gases provenientes de erupciones volcánicas, mientras que las fuentes antropogénicas son principalmente gases de automóviles, centrales térmicas y explotaciones de minerales con altos contenidos de azufre (fundiciones de cobre). Por otra parte las fuentes de emisión antropogénicas de N0x pueden tener su origen debido a combustiones de carbón, centrales térmicas y/o presencia de abonos nitrogenados. 46 Aunque se calcula que el ácido sulfúrico contribuye en un 60-70% aproximadamente a la lluvia ácida, no es el único componente de esta naturaleza que forma parte de la misma, si bien la mayor solubilidad en agua del SO2 comparada con la del NO2 es la causa de que sea la sustancia mayoritaria. Se calcula que también hay una importante cantidad de ácido nítrico, del orden del 30% proveniente de los óxidos de nitrógeno (por combustión de carbón, residuos, disolvente) (Orozco et al., 2003). La lluvia acida causa efectos de gran importancia sobre los suelos, como el aumento de su acidez, lo que se traduce en cambios en la composición del mismo. Numerosos estudios indican que la lluvia ácida esta lixiviando de los suelos nutrientes importantes para las plantas, tales como calcio, magnesio y potasio, transformándolos en suelos inutilizables o de menor calidad para los cultivos (Matzner y Murach, 1995 ). Otro efecto causado por el aumento de acidez de los suelos es la posible movilización de metales tóxicos. Así por ejemplo, en los suelos que contienen silicato de aluminio y calcio, el aluminio puede movilizarse ocasionando problemas en las raíces de las plantas al competir con otros elementos esenciales en su fijación, inhibiendo de esta forma el crecimiento de la planta (Ulrich, 1983). Ejemplo de ello lo cita, (Liao et al., 2005); quienes investigaron la contaminación de suelos forestales de Huna, al sur de China, afectados por metales pesados (Cd, Cu y Zn) y por la simulación de deposición ácida, encontrando que la movilidad de Cd en los suelos de estudio fue menor a pH superior, por lo que cadmio es más móvil y tóxico para las plantas en ambiente ácido (Rautengarten et al., 1995), facilitando su acumulación y redistribución en algunos órganos de las plantas, lo que trae como consecuencia lesiones en las mismas (Lagriffoul et al., 1998). Los resultados encontrados mostraron que el efecto de la deposición acida conduce a la liberación de metales pesados, asi como a la liberación de aluminio, debido a los procesos de intercambio cationico asi como de acidez. 47 II.6. Identificación de las principales fuentes de emisión en la zona de estudio En los estudios ambientales donde un sitio está siendo impactado por una sola fuente, es relativamente simple establecer la correspondencia contaminante-fuente emisora. Sin embargo, ante la presencia de más de una fuente emisora de contaminación, el problema del análisis de la contribución de cada una de estas fuentes potenciales puede ser un problema muy complejo. La mayoría de estudios ambientales para abordar este tipo de problemas aplican técnicas quimiométricas al análisis de datos obtenidos, hecho que ha experimentado un gran desarrollo en las últimas décadas. La utilización de técnicas estadísticas y matemáticas aplicadas al reconocimiento del origen e identificación de patrones físico-químicos se ha convertido en una herramienta cada vez más importante para caracterizar aire, agua, suelo y sedimentos (Wenning y Erickson, 1994; Massart, 1983). Entre estas técnicas se destacan las multivariantes; Análisis de Componentes Principales (PCA), Análisis de Clúster (AC), Análisis Discriminante Lineal (LDA), Análisis de discriminante por mínimos cuadrados parciales (PLS), y Análisis de Clasificación por Modelamiento Suave (SIMCA), entre otros. Todas ellas se han usado ampliamente en aplicaciones geoquímicas para la identificación de las fuentes de contaminación y la diferenciación entre el aporte natural frente a la contribución antrópica. Los modelos receptores (Henry et al., 1984; Thurston y Lioy, 1987; Gordon, 1988) constituyen por tanto una de las técnicas más comúnmente utilizadas para la identificación de las fuentes de emisión y la cuantificación de sus contribuciones a los niveles de partículas en un emplazamiento de medida. A continuación se explicara en más detalle tres técnicas ampliamente utilizadas para este tipo de estudios, incluyendo el cálculo del factor de enriquecimiento, el estudio de análisis 48 de componentes principales y por último el método comparativamente más avanzado de “Positive Matrix Factorization”. II.6.1 Factor de enriquecimiento (EF) Este método receptor es utilizado con el fin de evaluar si el contenido de elementos presentes en las muestras de estudio se deriva de fuentes naturales o antropogénicas. La determinación del factor de enriquecimiento de cada elemento se realiza respecto a su concentración en la composición natural de la corteza terrestre. De tal forma que el factor de enriquecimiento se representa como (Loska et al., 2004). EF ( X / C ) muestra ( X / C ) corteza Ecuación (4) Donde X es el elemento de interés y C un elemento de referencia, por lo que dichos términos denotan la relación entre la concentración del elemento X con respecto al elemento de referencia en la muestra y a la concentración de dicho elemento con respecto al elemento presente en la corteza terrestre. Para determinar cuál es el origen de cada elemento en estudio, el EF establece diversas escalas que pueden variar dependiendo de los autores (Lawson et al., 1979; Stiotyk et al., 2002). Así (Sutherland, 2000), establecen los siguientes valores: EF <2: Deficiencia o mínimo de enriquecimiento EF ~ 2- 5: Moderadamente enriquecido EF ~ 5-20: Significativamente enriquecido EF~ 20-40: Alto enriquecimiento EF > 40: Extremadamente enriquecido La clasificación de dicha escala puede variar ya que varios autores han establecido otras categorías para su determinación como es el caso de (Lawson et al., 1979 ; Poissant et al., 1994; Stiotyk et al., 2002), entre otros. 49 Como ejemplo de la aplicación del estudio de EF, se encuentran los trabajos realizados por: Yaylalı-Abanuz et al. (2012), quien investigó la contaminación de suelos por metales pesados alrededor de una zona industrial en Turquía utilizando para la determinación del factor de enriquecimiento (EF) el elemento de referencia Sr, ya que es uno de los elementos más importantes de la corteza crustal en los suelos de esta región. Los resultados indican que existe un enriquecimiento antropogénico muy alto para el caso de Cd (109), Pb (45), Zn (32), Mn (38.7), Cu (137), As (173) y Cr (63) y Hg (72.6). Alleman et al. (2010), evaluaron datos de la composición elemental de aerosoles ambientales provenientes del puerto industrializado de Dunkirk (Francia), utilizando métodos receptores tales como el EF, entre otros. Para determinar dicha magnitud antropogénica, los autores han considerado como elemento de referencia el Al y valores de EF < 5 como indicativo de componentes crustales (Ce, Eu, Si, Sm, Sr, Th, Ti, U y Zr), mientras que los valores de EF>100 fueron considerados como elementos con alto enriquecimiento de origen antropogénico (As, Ag, Bi, Cd, Cu, Mo, Pb, Sb, y Zn). Águila et al. (2005) también han determinado los factores de enriquecimiento y geoacumulación de Cd, Cr, Cu, Ni, Pb y Zn en muestras de suelo provenientes de México. De acuerdo a la escala de valores utilizada (Lawson y Winchester, 1979; Poissant et al., 1994; Stiotyk et al., 2002), solo el plomo presenta un factor de enriquecimiento moderadamente elevado consecuencia de fuentes antropogénicas. Yongming et al. (2006) investigaron la contaminación por metales en el polvo urbano en China Central, utilizando métodos multivariados. Donde los autores determinaron el EF utilizando como elemento de referencia el Mn y como escala de valores la sugerida por (Sutherland, 2000; Loska et al., 2004), donde se consideran que los valores <2 indican una deficiencia o mínimo de enriquecimiento y valores >40 como extremo enriquecimiento 50 antropogénico. Los valores de EF>50 indicaron una contaminación extremadamente alta para Ag, Hg, Pb y Sb en las muestras de polvo analizadas. Machado et al. (2008), igualmente han utilizado también EF para determinar el grado de contaminación en muestras de suelo y sedimento de Maracaibo. Para lo cual consideraron Al como material de referencia debido a su alta concentración en la corteza terrestre y como escala de clasificación los autores se basaron en (Moyer et al., 1977), quien establece que valores ≤1 pertenecen a la corteza crustal, valores >1 indican una contribución de elementos de tipo litogénico y antropogénico y >10 son elementos altamente enriquecidos por fuentes antropogénicas. Los resultados obtenidos demostraron enriquecimiento antropogénico principalmente de Zn, Pb y Ni en muestras de suelo y sedimento. Moreno et al. (2006), igualmente utilizaron EF en el estudio de las variaciones de metales traza en material particulado de ciudades españolas con el fin de identificar la influencia de fuentes antropogénicas. Para este estudio Li fue elegido como elemento de referencia. La escala de valores de EF utilizada por los autores tomó como referencia valores mayores a 10 como indicativo de influencia antropogénica (Chester et al., 1999; Veysseyre et al., 2000). Los elementos enriquecidos antropogénicamente encontrados fueron son Cu, Zn, As, Se, Cd, Sn, Sb y Pb. II.6.2 Análisis de componentes principales (PCA) La aplicación de técnicas analíticas multielementales para la caracterización química de muestras, sumada a la determinación de otros parámetros, genera una gran cantidad de datos que conforman una matriz de N muestras por V variables. La caracterización multielemental de las muestras puede utilizarse para diferentes propósitos tales como formar grupos estadísticamente significativos de muestras similares, asignar muestras a grupos ya establecidos o en general, encontrar una estructura o vínculo latente en los 51 datos. Cualquiera que sea el propósito del estudio, habitualmente es imposible investigar visualmente las relaciones entre las muestras y/o variables, siendo necesaria la aplicación de técnicas que permitan el manejo y evaluación de largas series de datos. Para investigar las relaciones entre numerosas variables pueden calcularse los coeficientes de correlación. Sin embargo cuando se tiene un conjunto de datos grande, pude haber interés en encontrar “grupos naturales” o la existencia de patrones comunes de agrupamiento dentro de los mismos. El análisis de clúster y el análisis de factores son técnicas, donde debe partirse de un conjunto de variables altamente relacionadas entre sí, tratando de buscar reducir el número de variables que describen el problema sin perder la información original. El cálculo de coeficientes de correlación constituye el primer paso de la aplicación del análisis multivariado. Cada muestra puede representarse como un punto en el espacio determinado por las variables medidas, buscándose hallar algún tipo de relación oculta por la complejidad de la matriz de datos. Para ello, se comienza aplicando un análisis de componentes principales (PCA) a los datos transformados o no, con el propósito de reducir la dimensionalidad del conjunto de datos de manera que un número mínimo de componentes pueda explicar la máxima varianza de los datos. El Análisis Factorial y el Análisis de Componentes Principales (PCA) están muy relacionados y son técnicas de análisis multivariante de reducción de datos de manera que algunos autores consideran el segundo como una etapa del primero. El Análisis de Componentes Principales (PCA) es un método receptor cuyo objetivo es identificar grupos de fuentes, reduciendo un gran número de variables a un conjunto más pequeño de factores que mantienen la mayoría de la información (variabilidad) de la base de datos originales (Hopke, 1991). 52 La idea que se encuentra detrás del PCA es encontrar componentes principales Z 1, Z2,…..Zn que sean combinaciones lineales de las variables originales X 1, X2,…Xn. Donde las componentes principales se eligen de manera que la primera componente principal PC1 (Z1), recoge la mayor parte de la variación que hay en el conjunto de datos, la segunda PC2 (Z2), recoge la siguiente mayor parte de la variación y así sucesivamente hasta que el número de componentes es igual al de las variables originales. Por consiguiente cuando hay correlación significativa el número de componentes principales útiles debe ser mucho menor que el número de variables originales (Miller, 2000). Una de las ventajas del PCA para reducir la dimensionalidad de un grupo de datos, es que retiene aquellas características del conjunto de datos que contribuyen más a su varianza, manteniendo un orden de bajo nivel de los componentes principales e ignorando los de alto nivel. La estructura derivada de los datos y relacionada con las muestras pueden representarse en este espacio de componentes principales, utilizando los “factor scores”, mientras que los “factor loadings” proporcionan información para la identificación de las variables correlacionadas y para asignar un significado físico a los factores hallados. Habitualmente es posible describir hasta un 70% o más de la varianza original con un número limitado de componentes y una mínima pérdida de la información. El número de componentes que se retiene se determina en base a los “eigenvalues” de la matriz de correlación. Una vez extraídos los componentes, esta solución matemática tiene que ser transformada en una con significado físico. Una de las transformaciones ortogonales más utilizada es la Varimax, que maximiza la diferencia de varianzas entre las variables, conservando la independencia estadística de los factores sirviendo de nexo entre ellos y su significado físico (Plá y Jasan, 2005; Jollife, 2002; Henry, 2002). Numerosos estudios han utilizado modelos receptores como el PCA para la identificación de fuentes emisoras de contaminantes, con resultados satisfactorios como es el caso de los estudios realizados por (Thurston y Spengler, 1985), quienes identificaron las 53 principales fuentes de contaminación que afectan a la región metropolitana de Boston mediante la aplicación de dicho modelo, encontrando 5 factores que determinaron los trazadores contaminantes, entre los que se encuentran; factor crustal (Al, Si, K, Ca, Ti, Mn, Fe), emisión de motores de vehículos (Br, Pb); quema de carbón y aceite residual (V, Ni); incineración de partículas (Cu, Zn) y aerosol marino (Cl). Así mismo otros autores han aplicado el PCA al análisis de diferentes muestras medioambientales (Xie y Hopke, 1999; Chueinta et al., 2000; Alleman et al., 2010; Stortini et al., 2009); evaluando la contaminación atmosférica de diferentes lugares originada por la emisión de material particulado logrando explicar la contribución de diferentes fuentes de emisión tales como; factores de tipo marino (Mg, K, Na), crustal (Al, Fe, Mn), ó factores relacionados con actividades industriales tales como industrias petroquímicas (Co, Ni, V, La), e industrias de ferromanganeso (Cd, Mn y Pb); entre otras. Igualmente, (Huang et al., 2009) investigaron la contaminación por elementos traza en deposiciones atmosféricas provenientes de China Oriental. Así mediante el PCA, los autores lograron identificar cuatro componentes principales que explicaron el 78% de la varianza total de los datos. Los valores finales de los vectores propios se obtuvieron por rotación varimax, considerándolos por tanto como “footprints” de las fuentes de emisión (Đorđević et al., 2005). Los cuatro principales componentes se presentan en la Figura 3, donde el factor 1 (F1), que explicó el mayor porcentaje de la varianza total (44%), indica la existencia de una fuente de emisión común a los elementos As, Hg, Cu, Cd, Mo, Zn y S; dicho factor podría estar asociado con fuentes antropogénicas como lo es la emisión de contaminantes correspondientes al tráfico rodado (Adachi y Tainosho, 2005; De-Miquel et al., 1997; Hua et al., 2008; Bem et al., 2003). El factor 2 (F2), se caracteriza por la asociación de Fe y Mn, atribuido a la re suspensión de partículas de suelo; el factor 3 (F3) formado por clúster de Cr y Ni se atribuye a los procesos piro metalúrgicos que tienen lugar en la zona (Manno et 54 al., 2006); mientras el factor 4 (F4) en el que se encuentra Pb y Se está asociado a la combustión del carbón (Besser et al., 1996; He et al., 2002; Siegel, 2002). Figura 3. Loadings con sus principales componentes para las cuatro fuentes principales identificadas en PM. F1 (a), F2 (b), F3(c), F4(d).Huang et al., (2009). El suelo puede recibir una importante cantidad de contaminantes procedentes de diversas actividades industriales (Schuhmacher et al., 1997; Fernandez et al., 2002; Sterckeman et al., 2006; Tariq et al., 2006); emisiones de vehículos (Tam et al., 1987), y otras fuentes contaminantes de elementos traza principalmente por deposición de partículas aéreas, hecho que despierta el interés en la aplicación de métodos multivariados como el PCA que determinan su origen. 55 Ejemplos de la aplicación de PCA en estudios de contaminación, incluyen los estudios realizados por (Franco et al., 2009), quienes identificaron el origen de elementos trazadores contaminantes de suelos en Galicia (España). Los autores lograron explicar el 79% de la varianza total de los datos con cuatro componentes principales extraídos con rotación varimax. La Figura 4, representa los clústers encontrados para cada una de las componentes, donde PC1 muestra la asociación de Mn, Cu, Ni y Co; la cual explica el 37% de la varianza, mientras que PC2 representado por Fe y Cr explica el 17% de la varianza. Tanto PC1 como PC2 explican el origen litogénico de dichos elementos presentes en el material parental de dicho suelos (Guitán, 1992). La contribución antropogénica en este análisis se encuentra representada por PC3 (Cd y Pb) y PC4 (Zn), elementos que se encuentran asociados con actividades humanas como deposiciones de emisiones procedentes de vehículos (Pb), abonos químicos (Zn) y fertilizantes (Cd). Figura 4. Loadings con sus principales componentes para las fuentes principales identificadas en muestras de suelo. PC1, PC2, PC3, de muestras de suelo (Franco et al., 2009). El PCA, también ha sido utilizado en otros estudios de contaminación de suelos (Kalogeropoulos et al., 1994, Ruiz et al., 1998), entre otros, en los que se aplican técnicas multivariantes a los distintos problemas de contaminación causados por fuentes diversas 56 con el fin de identificar asociaciones de elementos provenientes de fuentes antropogénicas. En la tabla 1, se presentan algunos otros ejemplos de estudios de contaminación de suelos realizados en los últimos diez años en los cuales se ha aplicado la técnica multivariante del análisis por componentes principales a los distintos problemas de contaminación en suelos causada por fuentes diversas con el fin de identificar asociaciones de elementos provenientes de fuentes antropogénicas. Estas citas bibliográficas constituyen solo una muestra de gran cantidad de estudios medioambientales en que se emplean las técnicas quimiométricas como herramienta en la caracterización de la contaminación, resultando especialmente interesantes su aplicación en la identificación de las diferentes fuentes contaminantes, objetivo difícil de lograr con un análisis de datos clásico (univariado) lo que justifica su utilización en éstos trabajos abordados. 57 Tabla 1. Ejemplos de estudios de contribución de fuentes mediante PCA para identificar el origen de elementos contaminantes en muestras de suelos. Investigadores País No de factores Facchinelli et al., 2001 Italia 3 Manta et al., 2002 Italia 2 Guvenc et al., 2003 Turquía 3 Boruvka et al., 2005 República Checa 3 Yongming y Peixuan 2006 China 2 Li et al., 2008 China 3 Zhang et al., 2008 China 4 Moreno-Jiménez et al., 2009 España 2 Qishlaqi et al., 2009 Irán 2 Rastmanesh et al., 2011 Irán 2 China 4 Liu et al., 2011 Trazadores encontrados Antropogénico (Fertilizantes y abonos) Antropogénico (Pesticidas) Antropogénico (Pesticidas+ emisión de vehículos+ gases industriales) Litogénico Antropogénico Litogénico Antropogénico Mixto; Aerosol marino ,motores de vehículos Litogénico (Co, Cr y Ni) y Antropogénico (Cu, Zn) Antropogénico Antropogénico Antropogénico (Tráfico + industria) Antropogénico (Comercial y doméstico) Antropogénico (Riego con aguas residuales) Antropogénico (Actividades agrícolas) Antropogénico Antropogénico (Fundición de cobre) Antropogénico (Combustión de carbón) Antropogénico(Fundición de cobre) Litogénico Antropogénico (Desechos mineros) Antropogénico (Retención de minerales) Litogénico Antropogénico (Productos agroquímicos, abonos sólidos) Antropogénico (Fundición de cobre) Litogénico Litogénico Antropogénico (Industria) Antropogénico (Fertilizantes, pesticidas) Antropogénico (Emisiones de vehículos, aguas residuales) Elementos Cr, Ni, Co Cu, Zn Pb Co, Ni, V, Cr, Mn Hg, Pb, Zn, Cu, Sb Cr, Ni, Al, Fe, K, Ca, Mn Cu, Zn Na, Mg, K, Ca- Pb Co, Cr, Ni Be, Hg Cd, Pb, Hg Cr, Cu, Pb, Sb ,Zn Ag, Hg Hg, As Cu Pb Cu, Zn, Pb, Cd Cu, As, Hg Cd, Se Fe, Mn Cd, Zn, Cu, Fe. Mn Cr, Ni, Fe, Mn, Pb, Zn, Al Cu, K, As, Cd As, Cu, Mo, Zn, Cd, S, Pb Fe, Al, Mn Cr, As, Ni Hg Zn, Cu, Cd Pb 58 II.6.3 Positive matrix factorization (PMF) Este método fue desarrollado por (Paatero y Tapper, 1993). Este tipo de modelo utiliza dos tipos de matrices de datos, una constituida por las concentraciones de las diferentes variables, y la otra por los errores asociados a dichas concentraciones, que se calculan previamente, siendo ésta una de las ventajas que presenta con respecto al modelo PCA. Además este modelo posibilita la inclusión de variables cuyas concentraciones no han sido obtenidas o se encuentran por debajo del límite de detección respectivo (Paatero y Tapper, 1994; Paatero, 1997; Polissar et al., 1998). El PMF es un modelo en el que la manifestación de cada variable en el perfil de cada factor es forzado a tener valores positivos. Esto no ocurre en la obtención de factores mediante el PCA, donde los perfiles de los factores tienen cargas factoriales o “factor loadings” positivos y negativos. La aparición de valores negativos con PMF desaparece y es de utilidad en la medida en que no es fácil interpretar contribuciones negativas en los factores obtenidos. Así al tener cada concentración una medida de error asociada, el PMF consigue mejores ajustes de los datos que los obtenidos por otros modelos estadísticos. El modelo PMF, resuelve la siguiente ecuación: p X ij g ik . f kj eij Ecuación (5) k 1 Donde Xij es la concentración media de la especie j en la muestra i, gik es la concentración con que la fuente k contribuye a la muestra i (contribución de cada una de las fuentes), fkj es la fracción másica de la especie j en la fuente k (perfil de cada una de las fuentes) y eij es la parte de las medidas que no puede ser explicada por el modelo, llamado residual (Karanasiou et al., 2009). La técnica de análisis del PMF puede resolver la ecuación (5) en más de una solución, aportando varios factores que se ajusten bien a los datos experimentales. Este problema se conoce como ambigüedad rotacional. Para reducir el grado de libertad de rotación, el 59 PMF restringe los valores gik y fkj en la ecuación 5 a valores positivos. Además el PMF estima los valores de gik y fkj de forma que minimicen la suma del cuadrado de los residuales Q, parámetro que viene dado por la siguiente ecuación (Paatero y Tapper, 1993; Paatero y Tapper, 1994; Polissar et al., 1998). eij Q i 1 j 1 s ij m n 2 Ecuación (6) Donde; p eij xij f ik . g kj k 1 Ecuación (7) Correspondiendo Sij a la incertidumbre de la concentración Xij. La cual esta determinado por la siguiente ecuación: S ij (l j (d j X ij) 2 )1 / 2 2 Ecuación (8) Donde lj es el límite de detección para el componente j que es el blanco más tres veces la desviación estándar del blanco (Tertian y Claisse, 1982; Knoll, 1999), mientras el segundo término dj representa la incertidumbre relativa para valores de la matriz Xij, lo que podría representar cualquier otra fuente adicional de incertidumbre Como se observa en la Figura 5 el PMF es una herramienta de análisis factorial multivariable cuyo objetivo es identificar el perfil químico “F” y la cantidad de masa aportada por cada factor “G”, es decir su contribución. 60 Figura 5. Ejemplo gráfico de perfiles y contribuciones resueltos por PMF. (EPA PMF, 2008) PMF, ha sido utilizado en numerosos estudios de contaminación atmosférica en los que se aplican técnicas multivariantes a los distintos problemas de contaminación causados por fuentes diversas, con el fin de determinar el número de fuentes y los correspondientes perfiles y contribución de masa, como es el caso de los estudios llevados a cabo por (Juntto y Paatero, 1994; Anttila et al., 1995; Xie y Hopke, 1999; Paterson et al., 1999; Polissar et al., 2001a) y otros estudios más recientes como los que se citan en la Tabla 2. En los últimos años el modelo receptor PMF desarrollado por (Paatero y Tapper, 1993) utilizado para identificar y cuantificar fuentes contaminantes de aire ha tenido cada vez más aplicación en análisis de muestras de suelo. 61 Tabla 2: Ejemplos de identificación de fuentes de aerosoles ambientales y su respectiva contribución mediante PMF, donde aparece el % de contribución de cada fuente identificada. Autor Kim et al., 2003 Lugar Washington N. Factores 7 Hedberg et al., 2005 Chile 5 Nicolás et al., 2008 España 6 Factores Quema de vegetales (Al, Si, K) Sulfatos (SO42-; NH4+) % Contribución 44.3 19.3 Emisiones de tráfico ( Fe, Pb, Zn, Al, Si) Nitratos (NO3-) 10.8 8.9 Suelo (Al, Si, K, Ca, Fe) Procesamiento de metales (Cu, Fe) Fuentes industriales (Cl) Fundición 1 (As, Cu, Mo, Bi) Fundición 2 (As, Cu, Mo, Ag ,Zn, Pb ,As) Suelo (Na, Mg) Tráfico (Br, Pb) Aerosol marino (Na, Mg) Nitratos (NO3-) 8.5 5.7 2.5 2.6 7.1 56.4 10.2 23.8 26 Sulfatos (SO42-; NH4+) Alleman et al., 2010 Francia 8 Lim et al., 2010 Korea 9 Duckshin et al., 2011 Korea 4 22 Resuspensión de suelo (Al, Ca, Fe, K, Sr) Tráfico (Cu, Zn) Aerosol marino (Cl, Na, Mg) Polvo de Sahara (Al, Ti, Ca, Mn, Fe) Corteza terrestre (Si, Th, Al, Fe, U) Aerosoles marinos (Na, Mg, Sr, K) Actividades petroquímicas (V, Ni) Industria de acero (Rb, Cd, Ag, Pb) Planta de coque (As, Bi, Cd, Cs, Pb, Sb , Rb , Se) Planta de ferromanganeso (Mn, Mo, As, Cd y Pb) Emisiones de tráfico (Cu, Sb, Ba, Zn) Antropogénico (Ni, Cr) + Litogénico (Al, Ca, Sc, U) Aerosoles secundarios (N03-,SO42-) Cementeras (Ca, Na) Resuspensión de suelo (Al, Mg, Ti, Fe) Polvo de carretera (Si, Ce, Al, Ba, Zn) Gases de vehículos (Br, Sb, Pb y Ni). Emisiones industriales (Pb, K, Sb) Fundición de metales (As) Combustión de combustibles fósiles (Cr, Cd, Ni, Se V, Zn) Quemas (K, Se, NH4+) 21 13 11 7 11 12 9.2 8.6 12.6 6.6 15 13 23 20 16 12 9 7 7 3.5 2.5 Suelo y polvo de camino ( Si, Mg, Cr, Ni) Funcionamiento de ferrocarril (Fe. Mn, Cu) Quema de combustible (Nitratos (NO3-)) 2Quema de combustible (Sulfatos (SO4 ) y cloruros (Cl ) 27.2 47.6 16.2 9 62 Ejemplos de la aplicación de PMF en estudios de contaminación de suelos lo citan los estudios realizados por (Vaccaro et al., 2007), quienes caracterizaron las fuentes contaminantes de un conjunto de muestras de suelos de la provincia de Pavía (Italia). Para dicho análisis los autores utilizaron PMF2 versión 4.2, encontrando cuatro factores; donde el factor 1 indica la mayor varianza para Mn y As seguida por V, Fe, Ni y Co; lo que sugiere el origen de una fuente de contaminación antropogénica. En el Factor 2, los elementos que presentan la mayor variación corresponden a Hg, Pb, Zn, Cu, P y Cd, determinado por el impacto de diferentes fuentes antropogénicas; mientras que en el factor 3, la mayor variación corresponde a C, H, lo cual indica que la fuente principal de contaminación se asocia con la introducción de residuos orgánicos. Finalmente el factor 4 explicó la variación para Si, Ca, K, Fe, Mg, Ti, Al y Na, relacionada con la geoquímica del suelo, la cual fue confirmada con la identificación de minerales por medio de análisis de difracción de rayos X. En base a ello, los autores atribuyen la contaminación de los suelos de esta región a la deposición atmosférica de partículas contaminantes. Igualmente, (Wang et al., 2009) aplicaron PMF al análisis de hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAH) en muestras de suelo provenientes de la región de Dalian (China), encontrando tres principales fuentes de contaminación que corresponden a combustión de carbón (46%), diesel (30%) y gasolina (24%) en época de invierno; mientras en la época de verano la contribución de dichos factores fue 72%, 20% y 8% respectivamente. Por otra parte (Lu et al., 2008) también han aplicado PMF a datos de propiedades físicas, químicas y biológicas de muestras de suelo provenientes de California (Estados Unidos), con el fin de identificar sus fuentes de contaminación. Así los autores han logrado encontrar dos factores, uno característico de suelos ácidos con textura gruesa y otro característico de suelos con fina textura, compactos y ligeramente ácidos. 63 II.7 Toxicología de elementos traza La toxicidad de los elementos traza puede producir alteraciones diversas en los sistemas respiratorio, gastrointestinal, cardiovascular, nervioso y en las funciones hematopoyéticas y renal, dependiendo la severidad de la manifestación clínica de la duración e intensidad de la exposición. Todo ello da lugar a distintos procesos patológicos, como disfunciones renales, hipertensión, arteriosclerosis, inhibición del crecimiento, y desmineralización entre otros. Producen por otra parte efectos abortivos, trastornos psicomotores, irritabilidad y dolores de cabeza. Algunos elementos traza también tienen, efectos teratógenos induciendo desarrollos anormales en el feto y malformaciones genéticas, debido a sus efectos genotóxicos, ya que atraviesan la placenta, produciendo mutaciones somáticas y germinales, alteraciones cromosómicas y cambios en la membrana. Estos efectos pueden tener lugar a muy bajas dosis, ya que los elementos traza se acumulan en el feto, alcanzándose de este modo concentraciones más elevadas que en la madre (Carbonell, 1995). Están comprobados los efectos adversos crónicos y agudos sobre la salud de las personas y sobre el medio ambiente, asociados al material particulado, óxidos de azufre y óxidos de nitrógeno. Actualmente, en Chile se están haciendo esfuerzos para la reducción de emisiones de mercurio, dado que es una sustancia tóxica y persistente a escala global, con impactos sobre la salud de la población y la vida silvestre. Entre sus principales efectos peligrosos se indica que puede ser mortal por inhalación y perjudicial por absorción cutánea, puede tener efectos nocivos sobre los sistemas; nervioso, digestivo, respiratorio e inmunitario y en los riñones, provocando temblores, trastornos de la visión y la audición, parálisis, insomnio, inestabilidad emocional, deficiencia de crecimiento durante el desarrollo fetal y 64 problemas de concentración y retraso en el desarrollo durante la infancia. El principal efecto adverso del mercurio es la alteración del sistema nervioso central. Una exposición crónica provoca inflamación de la boca, salivación excesiva, pérdida de dientes, temblores musculares, cambios de personalidad, depresión e irritabilidad. La dosis letal de mercurio inorgánico es de 1 gramo aunque hay evidencias de toxicidad con valores de 50 a 100 mg. El níquel y vanadio, también presentan peligrosidad para la salud. El níquel es cancerígeno, provoca efectos adversos en las vías respiratorias, incluyendo el asma, disminución de la función del pulmón y bronquitis. El vanadio genera efectos adversos como irritación del pulmón, garganta, ojos y cavidades nasales, daño cardiaco y vascular, inflamación del estómago e intestinos, daño en el sistema nervioso, sangrado del hígado y riñones, irritación de la piel, temblores severos y parálisis. Exposiciones prolongadas al vanadio generan anorexia, nauseas y diarrea (http://www.epa.gov). El arsénico, no tienen una función probada en el metabolismo humano, por lo que su ingestión, aún en bajas concentraciones durante largos períodos de tiempo, puede originar el que se manifiesten sus efectos toxicológicos, produciéndose cambios fisiológicos y desórdenes estructurales. Se ha comprobado en ensayos con animales que los efectos de un aporte sub óptimo de elementos traza aparecen al cabo de dos o tres generaciones (Cervera, 1990). El Arsénico es reconocido como un elemento cancerígeno (International Agency for Research y Cancer, 2004), que produce diferentes tipos de cáncer, como de piel, pulmones y cáncer de vejiga urinaria (Englyst et al., 2001; Cantor y Lubin, 2007). Además, estudios previos han demostrado que la exposición al arsénico causa otros efectos adversos para la salud como la diabetes mellitus y la hipertensión (Chen et al., 2007; Coronado et al., 2007), efectos respiratorios y cardiovasculares, entre 65 otros (Mandal y Suzuki, 2002). Recientemente se ha detectado la acción cancerígena, en el pulmón, en obreros expuestos a atmósferas de fábricas de fundición. Entre los minerales asociados al cáncer en el hombre, el arsénico es el único que no lo es en el animal de laboratorio (Cervera, 990). El arsénico inorgánico en general, existe en dos predominantes estados de oxidación, As(III) y As(V), los cuales son tóxicos para el hombre y las plantas. El arsénico inorgánico, especialmente el As(III) es siempre considerado como un potente cancerígeno en seres humanos, asociado altamente al cáncer de la piel, los pulmones, vejiga urinaria, hígado y riñón (NRC, 1999; Mandal y Suzuki, 2002). La dosis letal media de trióxido de arsénico (As2O3) es de 2 a 3 µg kg-1 de peso corporal. El Antimonio es un elemento considerado no esencial para vegetales y mamíferos, siendo reconocida su potencial toxicidad sobre una serie de organismos dentro de los cuales se puede mencionar bacterias, invertebrados, animales mamíferos y el hombre (Gurmani et al., 1994). El Antimonio puede ingresar al organismo por diferentes vías, ejemplo de estas son la ingesta de agua, comida, suelo, aire y polvo. Una vez dentro del organismo, el antimonio ingresa al torrente sanguíneo en unas pocas horas. Posteriormente, el metaloide puede ser transportado a diferentes partes del organismo principalmente hígado, pulmones, intestinos y el bazo. La exposición al metaloide puede producir efectos adversos en la salud humana, ejemplo de ello son, pneumoconiosis (inflamación de los pulmones producto de la irritación producida por inhalación de polvo) y alteraciones en la función pulmonar (obstrucción de las vías respiratorias, bronco espasmos e hiperinflación) en trabajadores expuestos a ambientes con elevada concentración de antimonio (Jones, 1994), cáncer al pulmón, hígado y riñones (Dieter et al., 1991), muerte de células cardiacas (Wey et al., 1997), problemas en el desarrollo de embriones y fetos (Leonard y Gerberg, 1996), afecta la reproducción en humanos, puede causar irritación de ojos, piel pulmones y estomago en forma de diarrea y vómitos. Es así como la dosis letal media se sitúa entre 10 y 11,2 mg/100 g (Wey et al., 1997). 66 La presencia de Cd en los suelos y el riesgo de este elemento en la cadena alimenticia, ha generado mundialmente una preocupación creciente, debido al efecto toxico de este elemento en humanos y animales (McLaughlin y Singh, 1999; Gupta y Gupta, 1998). La ingesta de cadmio puede causar trastornos en el tracto gastrointestinal, los síntomas incluyen náuseas, salivación, vómito, dolor abdominal tipo cólico y dolor de cabeza. Los síntomas que produce la inhalación de cadmio son dolor de cabeza, irritación del tracto respiratorio, resequedad nasal, tos, escalofríos, debilidad general, respiración agitada y en algunos casos fiebre. La inhalación de compuestos de cadmio superiores a 1 mg/m3 durante ocho horas o en concentraciones superiores durante periodos más cortos puede producir una neumonitis química y en algunas ocasiones edema pulmonar (Mungera et al., 1998). Por otra parte, la intoxicación aguda por selenio produce efectos nocivos sobre el sistema nervioso central como somnolencia, nerviosismo y en algunos casos convulsiones. Por ingestión puede causar trastornos en el tracto digestivo, dermatitis, etc. En animales se han detectado daños en el hígado por la ingestión de selenio. Los síntomas por intoxicación crónica por inhalación son palidez, trastornos gástricos, posibles daños en el riñón e hígado, anemia, irritación de las mucosas y dolor lumbar. La ingesta de sulfato de cobre, en cantidades de orden de gramos produce náuseas, vómitos, diarrea, sudoración y posible fallo renal. La inhalación de polvo o nieblas de sales de cobre puede causar congestión nasal y de las mucosas, ulceración con perforación del tabique nasal, náuseas y diarrea. La ingestión de niveles altos de cobre puede producir náusea, vómitos y diarrea, dolores de cabeza. Cantidades muy altas de cobre pueden dañar el hígado y los riñones y pueden causar la muerte (ATSDR, 2004). El síntoma más común de intoxicación por plomo es el dolor tipo cólico gastrointestinal. Al principio existe un estado de anorexia con síntomas de estreñimiento y después un 67 ataque de dolor abdominal generalizado. Otros síntomas que se pueden presentar son diarrea, náuseas, vómitos, insomnio, debilidad, etc. Las concentraciones de plomo en sangre asociadas con la intoxicación se encuentran el intervalo de 80 a 100 µg/100 ml y en ocasiones se han encontrado hasta 300 µg/100 ml de sangre (Albert, 1990). Las emisiones de óxidos de zinc pueden causar ataques de escalofríos, fiebre irregular, sudoración profusa, náuseas, sed, cefalea, dolores en las extremidades y sensación de extremo cansancio. Mientras que la intoxicación producida por los compuestos de molibdeno produce irritación gastrointestinal grave con diarrea, coma y muerte por insuficiencia cardíaca, así como también graves problemas pulmonares, irritación ocular y de las mucosas de la nariz y la garganta. Por otra parte el dióxido de azufre es un contaminante capaz de causar daño severo a la salud de las personas, en especial entre los infantes, los ancianos y los asmáticos, por su carácter irritante. Los efectos reconocidos son sobre el sistema respiratorio y abarcan desde un debilitamiento del sistema inmunológico, bronquitis crónica, bronco espasmos en asmáticos, hasta la muerte. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), exposiciones de la población a una media diaria mayor a 500 mg/m 3 producen un exceso de mortalidad, en tanto que para exposiciones entre 500 y 250 mg/m 3 se observa un aumento de las enfermedades respiratorias agudas. (CONAMA, 2007) II.8 Legislación La comisión nacional del medio ambiente (CONAMA), según la resolución exenta 7550 del 7 de Diciembre de 2009, aprueba la norma de emisión para termoeléctricas, basada en el hecho de que el proceso de combustión de las termoeléctricas genera emisiones de partículas, gases y metales pesados, estos últimos principalmente por el uso de carbón . 68 Los esfuerzos de prevención y control de esta norma de emisión se concentran en la reducción de emisiones de material particulado, óxidos de azufre, óxidos de nitrógeno y en la reducción de metales tales como: mercurio, níquel y vanadio, los cuales se encuentran como elementos traza en los combustibles fósiles, principalmente en el carbón. Por otra parte, actualmente se encuentra en elaboración la norma de calidad primaria para el material particulado fino, por lo que una norma de emisión para termoeléctricas será una contribución para el cumplimiento de esta normativa, ya que este tipo de fuentes contribuye considerablemente a la emisión de dicho contaminante. Actualmente, dentro de las tecnologías de abatimiento para dióxido de azufre se encuentra la desulfurización en seco con humidificación controlada, en la cual se utiliza cal (CaO) como reactivo para la transformación de dióxido de azufre a sulfito de calcio, (ecuación 9); SO2 CaO CaSO3 CaSO4 H 2 O Ecuación (9) O2 Obteniéndose además como residuos, mezcla de cenizas volantes y aditivos sin reaccionar por lo que los co-beneficios que se obtienen con esta norma comprenden la reducción de metales pesados a través del control de emisiones de material particulado y óxidos de azufre; así como la reducción de material particulado secundario (sulfatos y nitratos) a través de la reducción de las emisiones de sus precursores (dióxidos de azufre y óxidos de nitrógeno). Razones y fundamentos que conllevan a que se reglamenten los límites máximos (mg/Nm3), que se verificaran en chimeneas para termoeléctricas existentes, los cuales corresponden a los siguientes niveles MP (50), SO2 (200), NOx (400), Hg (0.1), Ni (0.5), y V (1.0) (CONAMA, 2009). 69 Por otra parte, la Norma de Emisión de Termoeléctrica Decreto Supremo No 103 del 2011 establece un límite de emisión para mercurio para fuentes emisoras existentes y nuevas que utilicen carbón de 0.1 mg/Nm3. Información SEREMI del medio ambiente, región Valparaíso. Sin embargo, cabe aclarar que según resolución exenta No 0536 del 25 de Junio de 2012 el Ministerio del Medio Ambiente de la República de Chile aprueba el anteproyecto de norma de emisión para fundiciones de cobre y fuentes emisoras de arsénico las cuales se caracterizan por generar emisiones al aire tanto en forma fugitiva como por chimeneas. Según este anteproyecto las emisiones se caracterizan por contener SO 2 y trazas de sustancias tóxicas tales como: As, Hg, Pb y Ni, entre otros. Tales elementos forman parte natural de la composición química de los concentrados o de los minerales, que al ser sometidos a procesos térmicos de fusión y conversión y al ser liberados a la atmósfera como gases y partículas aumentan su nivel de agresividad y toxicidad.Asi con esta norma de emisión se reducen las emisiones al aire de sustancias tóxicas y emisiones directas de MP y SO2. Por lo cual respecto de los límites máximos de emisión al aire; la Fundición Ventanas transcurridos 5 años contados desde la fecha de la publicación de esta norma deberá cumplir un límite máximo de emisión para SO2 de (14.650 ton/año) y As (48 ton/año). Respecto de la emisión en chimenea los límites máximos (mg/Nm3) serán: MP (50), SO2 (2.080), y As (1). 70 II.9 Contaminación de suelos en Chile Chile posee una extraordinaria riqueza metálica, lo que se ha traducido en el desarrollo de una minería extractiva de gran peso en la economía del país. Además es sabido que las faenas minero-metalúrgicas han contribuido a través de sus diferentes actividades, a la diseminación de metales y metaloides en el medio ambiente. En relación a esta problemática ambiental en la quinta región se han realizado algunos estudios tendientes a evaluar las concentraciones de metales en distintos componentes de los ecosistemas. Estos se han realizado especialmente en las zonas donde se realizan diferentes actividades de carácter antropogénico de importancia, como es la zona de Puchuncaví. En Chile, la comuna de Puchuncaví se encuentra ubicada en la zona costera de Chile central (V región). Posee una superficie de 306.50 km 2. Sus límites político-administrativos son: por el norte la comuna de Zapallar, al sureste la comuna de Quintero y al este las comunas de Quillota, La Cruz, Nogales, al oeste limita con el Océano Pacifico (Almendras, 2008). Comprende 22 localidades de las cuales 4 son urbanas y 18 son rurales. Siendo el principal uso de sus suelos la agricultura y la ganadería. En la zona de Puchuncaví se encuentra el complejo industrial Ventanas, quien está constituido por la Fundición y Refinería de la Empresa Nacional de Minería ENAMI, actual CODELCO División Ventanas y la Central Termoeléctrica de CHILGENER S.A., actual AES GENER; industrias que representan las principales fuentes antropogénicas de la zona. De acuerdo a los antecedentes encontrados la comuna de Puchuncaví y sus alrededores desde hace más de 40 años, han estado bajo la influencia de las emisiones contaminantes del complejo industrial de ventanas (Flores et al., 2001), generando preocupación publica 71 durante las dos últimas décadas (Chiang, 1985a; González y Ite, 1992; Díaz, 1998; Folchi, 2006). A partir de los años ochenta, se han realizado diversas investigaciones sobre el comportamiento de los metales en el valle de Puchuncaví. Específicamente se ha estudiado su acumulación en el suelo, (González y Ite, 1992; Chiang, 1985b) su deposición atmosférica (Kelly y Thornton, 1996) y su dispersión (Bruno, 1992). Debido a los efectos de la lluvia ácida, las zonas vecinas a los centros industriales en esta área presentan aceleramiento de la erosión del suelo, además de haber sufrido los impactos dañinos de los humos de la refinería de cobre instalada en esta localidad, se ha perdido la fertilidad y riqueza de sus cultivos (Díaz, 1998). En Chile, las actividades de fundición y refinación de cobre como de generación energética constituyen una fuente importante de contaminación atmosférica, debido a que sus procesos generan grandes cantidades de anhídrido sulfuroso y partículas ricas en metales (Folchi, 2006). Es así como, (Chiang, 1985b), propone un modelo que relaciona la deposición atmosférica de Cd, Cu, Mn, Pb, Fe, Zn y As con la distancia desde la chimenea de la refinería Ventanas. El algoritmo indica que con la distancia disminuye la deposición de los elementos, por lo que se prueba que la fuente contaminante es la refinería. Los autores concluyen que las características topográficas y las condiciones meteorológicas del sector influyen sobre la distribución de los contaminantes. Lamentablemente los autores no entregan información precisa de las distancias de los sitios de muestreo. Igualmente, las concentraciones de metales presentes en el suelo han variado como se demostró en un estudio realizado sobre la acumulación metálica en suelos del área industrial de ventanas (González y Ite, 1992), donde se observó el incremento en el contenido de algunos elementos analizados en el año 1983 vs 1991. Así los autores 72 reportan concentraciones para; Cd (2 mg kg -1), Cu (1214 mg kg-1), Pb (150 mg kg-1), y Zn (98 mg kg-1), durante 1983; mientras que en 1991 los valores reportados corresponden a Cd (11.9 mg kg-1), Cu (7921 mg kg-1), Pb (717 mg kg-1), y Zn (512 mg kg-1); hecho que coincide con los estudios realizados por (González y Berqvist, 1986; Ginocchio, 2000; Ginocchio et al., 2004). Achiardi (1991), también determino la presencia de metales en los suelos de Puchuncaví, sus resultados indican una alta concentración de Fe y Cu, seguidos por Mn, Zn, Pb y As. El autor detecto las mayores concentraciones en dirección noreste desde la zona industrial. Posteriormente, y sobre la base de los mismos puntos de muestreo, (Hernández, 1994), evaluaron la evolución temporal y vertical de los mismos metales, detectando mayores concentraciones en superficie y flujos verticales en profundidad, sin embargo no se da una explicación al respecto en relación a la fuente de emisión. Ginocchio (2000), evaluó los efectos de una fundición de cobre sobre una comunidad de matorrales en el Valle de Puchuncaví, Chile. La autora reportó que las emisiones de metales así como de SO2 provenientes de la fundición de cobre, pueden ser los principales responsables de la defoliación, la productividad de retraso en el crecimiento, reducción y muerte de especies sensibles de plantas. De Gregori et al. (2002), describen un procedimiento analítico para llevar a cabo la especiación redox de selenio presente en muestras de agua de sitios afectados por actividades mineras de minerales de cobre como lo es Puchuncaví, encontrando que las tanto las cantidades totales de selenio como de cobre disminuyen exponencialmente en función de la distancia de la fuente, lo que indica que estos elementos se derivan del complejo industrial de Ventanas. Ginocchio et al. (2004) también investigaron la contaminación por metales en el suelo y plantas cercanas a la fundición de cobre en Puchuncaví. Los autores encontraron suelos 73 ácidos y altas concentraciones de Cu (superiores a 680 mg kg -1) en las capas superiores (05 cm) y por debajo de los arbustos, hecho que se atribuyo a las emisiones generadas por la fundición de cobre presente en la zona. Dichos niveles concuerdan con los estudios realizados por (De Gregori et al., 2003), quienes reportan concentraciones de cobre total (530 mg kg-1) en muestras de suelo de la zona de los Maitenes. Recientemente, (González et al., 2008); investigaron la acumulación de cobre en una comunidad vegetal afectada por la contaminación minera en el Valle de Puchuncaví (Chile Central), con el fin de identificar especies hiperacumuladoras en el área afectada por las emisiones de la fundición Ventanas donde es común encontrar extensas áreas contaminadas con diversos elementos eco tóxicos, tales como: cobre, cadmio, plomo, arsénico y otros. Para lo cual los autores determinaron las concentraciones de cobre en la biomasa área de diferentes plantas, encontrando concentraciones con valores de hasta 614 mg kg-1, lo que supone una relación entre la absorción de Cu por las plantas y las fuentes de Cu en el suelo. Igualmente (Almendras, 2008); realizó un estudio de estabilización de metales pesados de suelos contaminados en la comuna de Puchuncaví (N 6373520 E273309), encontrando altas concentraciones para Fe (6543 mg kg -1), Cu (288 mg kg -1), Zn (78 mg kg -1), Pb (45.9 mg kg -1) y As (30.6 mg kg-1), este último un metaloide; y valores de pH en un rango de 4 a 6. Por lo tanto se concluyó que la acidez de éstos suelos puede deberse principalmente a la presencia de compuestos oxidados de S, formados a partir del SO 2 emitido por la fundición cercana que generan la llamada lluvia ácida, lo cual ha originado escasa vegetación, y presencia de metales contaminantes con movilidad hacia las capas inferiores, como es el caso de Cu y Zn. Por otra parte, (Neaman et al., 2009) estudiaron la movilidad del cobre en suelos contaminados del Valle central de Puchuncaví localizados aproximadamente a 2 km al este de la Fundición Ventanas. De acuerdo a los análisis realizados, las concentraciones de 74 cobre en la capa superficial del suelo (hasta 30 cm) fueron de 310-640 mg kg-1 con un pH de 4.6-5.5, mientras que los valores obtenidos para el subsuelo mostraron valores de 3060 mg kg-1 de Cu, por lo que se concluyo que el aporte antropogénico de la fundición de ventanas con respecto a las concentraciones de cobre se limita a la capa superior del suelo. Como se ha descrito anteriormente, el impacto de las emisiones del complejo industrial ha sido demostrado por varios estudios previos donde se concluye que las actividades de fundición han aumentado la concentración en el suelo de la zona por Cu, Zn, Pb y Cd (González y Berqvist, 1986; González and Ite, 1992 ; Ginocchio, 2000; Ginocchio et al., 2004). A la vez los diversos estudios de caracterización de suelos del Valle tienen en común la presencia y dispersión de elementos trazadores contaminates en zonas cercanas a las fuentes emisoras. Dichos estudios se han basado en el análisis clásico univariado de la relación concentración distancia de la fuente. Sin embargo el estudio de perfiles multivariado de elementos trazadores contaminantes presentes en los suelos del Valle de Puchuncaví , que permita identificar y cuantificar las fuentes emisoras (descritas a continuación ) aún no ha sido realizado, lo cual representa una desventaja debido a que al explotar este tipo de herramientas se podría diferenciar si la fuente responsable de los elementos traza es una sola o si por el contrario los clústers de elementos trazadores que se formen indiquen fuentes distintas como lo es AES GENER ó CODELCO división ventanas. Por otra parte aun no existen estudios que incluyan la influencia que tiene la central termoeléctrica AES Gener en el sector, como tampoco se han encontrado publicaciones científicas que traten sobre la variación de elementos traza en diferentes fracciones granulométricas del suelo. 75 Desafortunadamente la mayoría de los estudios anteriores son incomparables entre sí, debido a que se refieren a una granulometría de suelo heterogénea, no analizan la capa de suelo a igual profundidad, como tampoco se reporta en la mayoría de ellos la distancia geo-referenciada de los sitios de muestreo. II.10 Descripción de fuentes existentes en el Valle de Puchuncaví En la zona de Puchuncaví, se encuentra ubicado el complejo industrial Ventanas. Las empresas que representan las principales fuentes antropogénicas de la zona son la Fundición y Refinería de la Empresa Nacional de Minería ENAMI, actual CODELCO División Ventanas y la Central Termoeléctrica de CHILGENER S.A., actual AES GENER. II.10.1 AES GENER S.A. – Central Ventanas AES Gener S.A. es una sociedad anónima abierta orientada fundamentalmente a la generación de electricidad en Chile. Sirve al Sistema Interconectado Central (SIC), a través de cuatro centrales hidroeléctricas, dos centrales termoeléctricas a carbón y una central turbo gas a petróleo diesel, todas pertenecientes directamente a AES Gener. Las dos unidades generadoras a carbón poseen una potencia eléctrica total de 338 MW. De acuerdo a su funcionamiento en su planta de Puchuncaví, el carbón almacenado cerca de la central es conducido mediante una cinta transportadora hacia una tolva que alimenta el molino. Aquí el carbón es pulverizado con el fin de mejorar la eficiencia de la combustión. Una vez pulverizado, el carbón se inyecta en la caldera, mezclado con aire caliente para su combustión. Como equipos de control de material particulado, AES Gener cuenta con un precipitador electroestático de tres campos, con una eficiencia teórica para la retención de partículas de un 99%. 76 El carbón utilizado puede ser butiminoso como sub butiminoso y se emplea en estado pulverizado (CONAMA, 2008). El uso de éste carbón como combustible para la producción de energía genera además de emisiones de anhídrido sulfuroso, material particulado. Las cenizas volantes producidas por la quema de carbón bituminoso pueden presentar elementos traza tales como vanadio, níquel, mercurio, cromo, estaño, germanio, cobalto, arsénico, antimonio, entre otros (Querol et al., 1996), las cuales tienen un impacto ambiental negativo. II.10.2 CODELCO División Ventanas Codelco División Ventanas, es una fundición y refinería de cobre. La capacidad de fusión de concentrados de Ventanas fue de 445 mil toneladas métricas secas para el año 2006. De acuerdo a CONAMA en su informe de seguimiento y plan de descontaminación de Ventanas, 1993-2008; la principal producción para el año 2006 correspondió a 376.005 toneladas métricas de cobre y 351.537 toneladas de acido sulfúrico por la planta de ácido. El proceso de fundición y de refinación de concentrados sulfurados de cobre (Chiang, 1985b; Ministerio de Minería, 1989), con un 35% de cobre y un 22% de azufre (Alfaro et al., 1998), que se realiza en Codelco, genera residuos sólidos (escorias y material particulado rico en elementos traza) y gaseosos, principalmente SO 2 y NOx (ERM, 1993); (Lagos y Ibañez, 1993), los que son descargados a través de una única chimenea de 155 metros (Alfaro et al., 1998; ERM, 1993; Pozo, 1993). Dichos residuos sólidos son principalmente el producto de la oxidación de minerales sulfurados tales como calcopirita, calcosina, covelina, Bornita, Digenita, Enargita, Tenatita, entre otros, los cuales generan emisiones de material particulado enriquecido con elementos traza entre los que se encuentran antimonio, arsénico, cadmio,molibdeno, cobre, plomo, selenio, zinc, entre otros. 77 II.11 Plan de descontaminación Mediante D.S Nº 252/92 del Ministerio de Minería, se aprueba el Plan de Descontaminación Ventanas propuesto simultáneamente por la Empresa Nacional de Minería y la Planta Termoeléctrica presentes en Puchuncaví. Este decreto, fijó un cronograma de reducción de emisiones de SO2 y MP10, estableciendo metas de emisión de Azufre hasta el año 1998 y de material particulado hasta el año 1999, con la finalidad de dar cumplimiento a las normas de calidad del aire vigentes para los contaminantes Material Particulado Respirable (MP10) y Anhídrido Sulfuroso (SO 2). Por otra parte, el D.S. Nº185/91 del Ministerio de Minería estableció que se instalara una red de monitoreo permanente de calidad del aire en la zona circundante al Complejo Industrial de Ventanas. Debido a que las concentraciones monitoreadas por dicha red alcanzaron niveles por sobre la norma establecida por el D.S. Nº185/91, se declara la zona como saturada por material particulado respirable (MP10) y dióxido de azufre (SO2) en el año 1994. Respecto de los resultados del plan de descontaminación Ventanas 1993-2008, las emisiones de SO2 que emite Codelco Ventanas han disminuido considerablemente desde el año 1993 (117.298 ton/año) hasta el año 2008 (21.344 ton/año), mientras que para AES GENER dichas emisiones no han sufrido variabilidad; sin embargo se reporta un máximo de 11.820 (ton/año) para el 2007 y un mínimo de 538 (ton/año) para el 2002. En cuanto a las emisiones totales de material particulado, dicho plan de descontaminación reporta emisiones por parte de Codelco Ventanas de 3.030 (ton/año) en 1994, disminuyendo estas considerablemente a 532 (ton/año) en el año 2008. Mientras que las emisiones por parte de AES GENER muestran un descenso significativo desde el año 1994 (23.404 ton/año) hasta el año 2008 (605 ton/año). 78 III HIPOTESIS DE TRABAJO 79 III. HIPOTESIS Respecto de la contaminación del suelo del Valle de Puchuncaví es posible identificar y cuantificar a través de estudios quimiométricos multivariados el aporte individual de elementos trazadores contaminantes que emiten tanto la Fundición y refinería de la empresa nacional de minería (Codelco Ventanas) como la central Termoeléctrica (AES GENER S.A). Dada la naturaleza de la composición química de los concentrados o de los minerales que son sometidos a procesos térmicos en la fundición de cobre (Codelco Ventanas), los elementos trazadores contaminantes del suelo en el Valle de Puchuncaví provenientes de esta fuente son; antimonio, arsénico, cadmio, cobre, molibdeno, plomo, selenio, zinc, además de anhídrido sulfuroso. Dada la naturaleza de la composición química del carbón bituminoso utilizado en el proceso de generación de energía de la central termoeléctrica central (AES Gener S.A), los elementos trazadores contaminantes del suelo en el Valle de Puchuncaví provenientes de esta fuente son; antimonio, arsénico, cromo, estaño, germanio, níquel, mercurio, cobalto, vanadio, además de anhídrido sulfuroso. El mecanismo de enriquecimiento de metales y metaloides en los suelos del Valle de Puchuncaví es a través de la sedimentación de material particulado fino (<63 µm) emitido por las fuentes antropogénicas. Actualmente, el sulfato presente en los suelos del Valle de Puchuncaví, desde el punto de vista cuantitativo proviene mayoritariamente de la emisión de la fuente de contaminación correspondiente a la Fundición de cobre (Codelco Ventanas). 80 IV OBJETIVOS 81 IV OBJETIVOS IV.1 Objetivo general Determinar el origen y mecanismo de contaminación por metales y metaloides en los suelos del Valle de Puchuncaví (Chile). IV.2 Objetivos Específicos Validar un método analítico para la determinación de metales y metaloides en muestras de suelo. Evaluar la distribución espacial y temporal de metales y metaloides en suelos del Valle de Puchuncaví. Determinar el aporte que el material particulado sedimentable está realizando a la contaminación de los suelos por metales y metaloides en los sectores cercanos a la fuente de contaminación. Diferenciar cuantitativamente el aporte individual a la contaminación en los suelos en el Valle de Puchuncaví por la por la Fundición y Refinería de la Empresa Nacional de Minería ENAMI, actual CODELCO División Ventanas y la Central Termoeléctrica de CHILGENER S.A., actual AES GENER, a través de los elementos trazadores contaminantes emitidos por dichas fuentes. 82 V PARTE EXPERIMENTAL 83 V. PARTE EXPERIMENTAL V.1 Reactivos y soluciones En todas las experiencias realizada se empleo agua desionizada (18 m) obtenida de un sistema de purificación Milli Q (Millipore, Bedford, MA, USA) o uno Nanopure ultrapure water system (Barnsted USA). Para todas las experiencias, los reactivos utilizados fueron de grado analítico o de pureza superior. El material de vidrio y plástico fue dejado durante un día en ácido nítrico (grado analítico) 10 % v/v y enjuagados numerosas veces con agua desionizada antes de usar. Los ácidos nítrico, fluorhídrico y perclórico, empleados en la digestión de las muestras de suelo y material particulado re supendido, fueron de alta pureza (Suprapur, Merck). Los materiales de referencia certificados (NIST 1633b y SOIL SO-2), fueron obtenidos desde el National Institute of Standards and Technology. Las soluciones patrón utilizadas en espectroscopia de emisión atómica con plasma de acoplamiento inductivo (ICP-AES) para la determinación de los elementos mayoritarios fueron preparadas a partir de patrones internacionales certificados (CPI) de concentración 10000 mg kg -1 (Al, Ca, Fe, K, Mg, Na) y 1000 mg kg-1 (Ti). Las soluciones patrón utilizadas en espectrometría de masas con fuente de plasma acoplado (ICP-MS), para la determinación de los elementos minoritarios, fueron preparadas a partir de la solución multielemental patrón de 1000 mg kg-1 (MERCK). La cuantificación de los elementos detallados se llevó a cabo por el método de calibración externa utilizando para ello curvas de calibración para todos ellos con concentraciones de: 84 10, 100, 500, 1000 µg kg -1 para Zn; 1, 5, 10, 25 µg kg -1 para Ni, y 0.5, 1, 5, 10, 25, 50 y 100 µg kg -1 para los demás elementos traza. Para los análisis de cromatografía líquida de alta resolución, los reactivos para las fase móvil empleada fue una mezcla de Borato/ gluconato de sodio de pH próximo a 9. Todas las muestras y patrones fueron filtrados por duplicado, para lo cual primero se utilizaron filtros de jeringa Millex (Millipore) con membrana compuesta por Difluoruro de polivinilideno (PVDF) (Durapore) de 0,45 µm de tamaño de poro, y posterior purificación mediante extracción en fase sólida con cartuchos SPE de C-18, marca (Discovery DSC-18 de Supelco). 85 V.2 Instrumentos y equipos Para el análisis de elementos mayoritarios en suelos, material particulado re suspendido y lixiviados de suelos, se utilizó un equipo de espectroscopia de emisión con plasma de acoplamiento inductivo (Thermo Jarrell-Ash), modelo IRIS Advantage Radial ER/S; nebulizador tipus Meinhard montado en una cámara de nebulización ciclónica y detector CID de 512x512 pixels. Las condiciones instrumentales utilizadas para el análisis por ICPAES se presentan en la tabla 3, así como también la longitud de onda seleccionada para cada elemento (Tabla 4). Tabla 3: Condiciones instrumentales para la determinación de metales y metaloides en muestras de suelo y material particulado resuspendido por ICP-AES. Parámetros Potencia RF Aux. Flow: Neb. Flow: Pum rate: Purga del tanque: CID max. integration time: Condición 1150 W 0.5 L/min 0.65 L/min 100rpm 4 L/min Low/High WL range 15/5 w sec Tabla 4: Condiciones de trabajo óptimas para el análisis por ICP-AES Elemento λ (nm) Al Ca Fe 396 317 238 K Mg Na Ti 766 280 589 334 El equipo utilizado para la determinación de elementos minoritarios en suelos, material particulado re suspendido y lixiviados de suelos fue un espectrómetro de masas con fuente de plasma acoplado inductivamente modelo X-series II (Thermo Electron Corporation), el cual consta de una celda de reacción cuadrupolo-hexapolo. Las condiciones instrumentales utilizadas durante la determinación se presentan en la tabla 5, así como también la relación m/z seleccionada para cada elemento (Tabla 6). 86 Tabla 5: Condiciones instrumentales para la determinación de metales y metaloides en muestras de suelo y material particulado resuspendido por ICP-MS. Parámetros Potencia RF incidente Flujos de Gases: Refrigerante (Argón) Auxiliar (Argón) Portador (Argón) Condición 1365 W 13 L/min 0.7L/min 0.85 L/min. Tabla 6: Relación m/z utilizada para cada elemento en el análisis por ICP-MS Elemento m/z Elemento m/z Elemento m/z Li Be 7 9 Ge As 74 75 Sb Cs 121 133 Sc V Cr Mn 45 51 52 55 Se Rb Sr Y 82 85 86 89 Ba La Ce Co 137 139 140 59 Ni Zn Cu Cd 60 64 65 111 Zr Nb Mo Pb 90 93 95 206 Hf Eu Gd Ga 178 153 157 71 Para el análisis mineralógico, las muestras de material particulado resuspendido se caracterizaron morfológica y mineralógicamente por difracción de rayos x (DRX) utilizando un difractómetro (Bruker, modelo D8 Advance), con cristal Göbbel primario, y detector de Centelleo, a una longitud de onda =1,5405 Å a unas condiciones de trabajo de kV= 40 y mA= 40. El barrido realizado para cada muestra fue desde 4° hasta 60° de 2, en pasos de 0,05°y con un tiempo por etapa de 3s. El estudio de las muestras de material particulado resuspendido, mediante microscopia electrónica de barrido (Scanning Electron Microscope, SEM) se realizó utilizando un microscopio (Leika JEOL5900LV) adaptado con un sistema de microanálisis para el estudio de partículas individuales mediante energía dispersiva de rayos X (EDX). Dada su gran resolución esta técnica permite una visualización tridimensional logrando apreciar las características 87 micro estructurales de partículas individuales, siendo posible realizar un análisis químico de partículas gracias al acoplamiento del analizador EDX. Para el análisis respectivo las muestras fueron adheridas a portamuestras de aluminio mediante un adhesivo de materia carbonosa, y se observaron con unas condiciones de microscopía de 20 kV de voltage, distancia de trabajo 24mm y 1nÅ de energía. Los análisis de partículas individuales se realizaron por periodos de 30 segundos. Las muestras fueron recubiertas con una fina capa de carbono (~20 nm) para su mejor visualización. El estudio de la distribución de tamaño de la muestras de suelo se realizó por difracción laser, utilizando un Mastersizer 2000 modelo APA 2000 de Malvern Intruments. Esta técnica permitió medir la distribución de partículas de una muestra en el rango 0.1 – 1000 micras en vía húmeda, siendo el dispersante agua. Para el fraccionamiento de las muestras de suelo se utilizó un impactador de cascada, (Retsch, modelo PI-1). Dicho equipo compuesto por 8 anillos de impactación y programado a un caudal de aspiración de 2.4 m3/h, con una presión de aire de 3-20 bares, ha permitido obtener las muestras fraccionadas en siete intervalos granulométricos que van de de 0.3 a >20 µm de diámetro (Figura 6). Para la determinación de las concentraciones de los aniones sulfatos y nitratos presentes en las muestras de suelo, se utilizó cromatografía líquida de alta resolución (HPLC) el cual consta de un detector de conductividad (Waters) 432, un muestreador automático (Waters) 717 plus, un sistema de bombeo binario (Waters) 1525 y una columna de cromatografía iónica IC-PAK ANION (Waters). Para la determinación de mercurio se utilizó un equipo de espectroscopia de absorción atómica con amalgama de oro marca LECO AMA- 254. 88 Figura 6. Impactador en cascada RETSCH PI-1. Derecha: anillos del impactador. Su sistema se basa en la separación de fracciones granulométricas, donde cada fracción queda adherida en su anillo correspondiente por impactación. 89 V.3 Metodología V.3.1 Recolección de muestras Las muestras de suelo fueron recolectadas en la comuna de Puchuncaví (Figura 7), la cual se encuentra localizada en la zona costera de Chile central (V región). El área de estudio corresponde a 301 km2 y comprende 22 localidades de las cuales 4 son urbanas y 18 son rurales. Siendo el principal uso de sus suelos la agricultura y la ganadería. En la zona de estudio se encuentra el complejo industrial Ventanas, el cual está constituido principalmente por la Fundición y Refinería de la Empresa Nacional de Minería ENAMI, actual CODELCO División Ventanas y la Central Termoeléctrica de CHILGENER S.A., actual AES GENER. La recolección de las muestras se realizó en la capa superior (0-5 cm) de los suelos en cada uno de los sitios correspondientes a la red de monitoreo ambiental “Codelco División Ventanas” en las estaciones: La Greda ubicada al ENE (Estenordeste) del complejo industrial (UTM 268185 E, 6373910 N); Maitenes ubicada al SE (Sudeste) de la fundición Ventanas (UTM 6372171 N, 270073 E); Valle alegre que se encuentra al SSE (Sudsudeste) del complejo (UTM 271889 E, 6367413 N); y Puchuncaví ubicado al ENE (Estenordeste) del complejo industrial (UTM 274379 E, 6377331 N) así como en un sitio de referencia no contaminado “Maitencillo”(UTM 272447 E, 6382175 N; ubicado a unos 15 km al sureste y 12 km al norte de los Maitenes y a 11 Km al norte de la fundición), sitios en los cuales la dirección predominante de los vientos corresponde a noreste para la Greda, este para Maitenes, noreste para Valle Alegre y nornoroeste en Puchuncaví (Figura7). El muestreo se realizó por tres años (2007 a 2009) durante los meses de invierno (Junio a Septiembre), a distancias de 1.89, 2.52, 6.43, y 8.58 kilómetros respectivamente con relación a CODELCO División Ventanas y AES GENER S.A. 90 Figura 7. Localización de las zonas de estudio (amarillo) así como de las principales fuentes de emisión. 91 * Coordenadas WGS84 UTM 19. ** Información Secretaria Regional Ministerial del Medio Ambiente. Región de Valparaíso Figura 8. Rosa dirección del viento para las estaciones de monitoreo de la calidad de aire de la región de Valparaíso. 92 V.3.2 Tratamiento de las muestras Las muestras de suelo recolectadas fueron secadas por temperatura a 55°C durante 72 horas y tamizadas a 250 µm de diámetro con el fin de alcanzar su homogenización (Castillo, 2006). Posteriormente se procedió a almacenar las muestras en frascos de plástico con tapa, para evitar su contaminación, conservándose en desecadores para su posterior utilización. Las muestras para análisis de material particulado re suspendido fueron secadas por temperatura a 55°C durante 72 horas y tamizadas a 63 µm de diámetro, (Castillo, 2006; Qishlaqi et al., 2009). Posteriormente se procedió a almacenar las muestras en bolsas de plástico, para evitar su contaminación, conservándose en desecadores para su posterior utilización. V.3.3 Fraccionamiento de muestras de suelo El fraccionamiento de las tres muestras de suelo analizadas, se logró haciendo pasar una corriente de aire en la parte superior y separando selectivamente en cascada las partículas de suelo más gruesas hasta las más finas, de forma que cada una de las fracciones queda adherida en su anillo correspondiente por impactación. Para ello se pesaron aproximadamente 0.2 gramos de muestra de suelo, los cuales se introdujeron en el impactador después de haber sido tamizados hasta 63 µm, para separar así las partículas más gruesas según las instrucciones del fabricante. El flujo de aire que pasa a través del impactador se mantuvo constante a 2.4 m3 h-1, con una presión de aire de 3-20 bares, siendo necesario el aire comprimido para disgregar las partículas antes de que entren en el impactador. Cada anillo del impactador se pesó antes y después del proceso de segregación con una balanza analítica (sartorius) (precisión 0.0001 g) con el objetivo de calcular la masa de la muestra recogida en cada etapa, posteriormente dichos anillos se lavaron con agua MQ y se llevó a sequedad la solución obtenida, recolectando así las 93 fracciones correspondientes a tamaños inferiores y >20 µm de diámetro que pudieron potencialmente provenir de las emisiones locales. V.3.4 Digestión de muestras La digestión de las muestras de suelo y de fraccionamiento de las mismas, se llevó a cabo usando ácidos inorgánicos fuertes, de acuerdo al protocolo descrito en literatura (Querol et al., 2001). Para ello se pesa en una bomba de teflón PFA aproximadamente 0.1 g de suelo, se añaden 2.5 ml HNO3 y 7.5 ml de HF y se cierra la bomba. Esta se deja reposar durante un mínimo de 8 horas en una estufa a 90°C. Los ácidos utilizados fueron Merck de pureza analítica y concentraciones al 65% para HNO3 y 40% el HF. Transcurrido este tiempo mínimo se saca la bomba de la estufa y la solución existente se deja enfriar a temperatura ambiente, posteriormente se abre la bomba y se le adicionan 2.5 ml de HClO4 (pureza 60%) colocándose esta sobre una placa a 230°C hasta conseguir la evaporación completa. El residuo seco obtenido se recupera con 2.5 ml de HNO3 y agua bi -destilada (grado Milli-Q) y se enrasa a 100 ml en un matraz aforado. En el caso de las muestras de material particulado resuspendido obtenidas de las muestras de suelo, el protocolo de digestión fue el mismo, utilizando en éste la proporción correspondiente para obtener un volumen final de 25 ml. Cada vez que se analizaron las muestras de suelos y material particulado resuspendido según este procedimiento, se realizaron paralelamente los blancos correspondientes. Los mismos protocolos de digestión fueron aplicados a los materiales de referencia (NIST 1633 y SOIL SO-2) comprobando de esta manera la exactitud de los análisis químicos. V.3.5 Lixiviación de suelos Para la extracción de la fracción soluble de las muestras de suelo se siguió el procedimiento indicado por la Norma DIN 38414-S4, para lo cual se pesaron 94 aproximadamente 5 gramos de muestra de suelo los cuales fueron introducidos en un recipiente de plástico con agua bi-destilada (grado Milli-Q) enrasando a 50 ml. Posteriormente la solución obtenida se colocó en una agitador electrónico modelo Hei dolph reax2 durante 24 horas al cabo de las cuales la muestras obtenidas se filtraron y centrifugaron respectivamente determinando el pH de las mismas. Esta solución fue utilizada para la determinación tanto de aniones como de elementos mayoritarios y traza, en el caso de éstos últimos el lixiviado obtenido fue filtrado nuevamente utilizando un filtro whatman 0.45 µm y acidificado al 2% con HNO3 para su posterior análisis. En todos los casos se realizaron paralelamente los blancos correspondientes. V.3.6 Análisis de contribución de fuentes Una vez determinadas las concentraciones de las diferentes especies químicas analizadas en cada uno de los emplazamientos de estudio para la totalidad de las muestras analizadas, se han aplicado en esta tesis doctoral tres modelos receptores para la identificación de fuentes emisoras de contaminantes, los cuales corresponden al factor de enriquecimiento (EF), Principal Component Analysis (PCA) y Positive Matrix factorization (PMF). La metodología aplicada en cada caso se describe a continuación. V.3.6.1 Factor de enriquecimiento (EF) Con el fin de evaluar si el contenido de elementos en el suelo se deriva de fuentes naturales o antropogénicas, se determinó el factor de enriquecimiento (EF) de cada uno de los elementos analizados en las muestras de suelos respecto a su concentración en la composición natural de la corteza terrestre. Fueron identificadas las distintas categorías de contaminación de acuerdo a los parámetros del EF descritas por (Loska et al., 2004) (Ecuación 4). En este caso el elemento de referencia fue aluminio, por ser considerado uno de los más abundantes en la corteza terrestre; (Lawson et al., 1979; Shotyk et al., 2002). 95 V.3.6.2 Análisis por componentes principales (PCA) La identificación de fuentes por medio de PCA como herramienta de reconocimiento de patrones multivariados (Thurston y Spengler, 1985), se aplicó a las concentraciones de elementos mayoritarios y traza de las muestras de suelo recolectadas en las estaciones de monitoreo ambiental del Valle de Puchuncaví. En este estudio PCA se aplicó a un conjunto de 57 muestras de suelo usando el software para análisis estadístico multivariado (SPSS 19-IBN SPSS Statistics), donde a partir de una matriz de concentraciones de los componentes mayoritarios y traza del suelo (loading) para cada una de las muestras (scores), se obtiene un número de factores principales. Estos factores son el resultado de las combinaciones de todos los parámetros considerados. Con el fin de maximizar la distancia entre los factores, se aplicó una transformación ortogonal (varimax normalized) para maximizar el número de factores loadings, sin cambiar el total de la varianza o la varianza de cada elemento en el modelo. De forma tal que una vez realizada la rotación, los elementos originarios de la misma fuente corresponderán a una misma componente con un alto peso (factor loading), siendo asociado dicho componente a una fuente especifica. Para la interpretación de los factores respectivos se han considerado cargas por encima de 0,70, que son valores que por lo general permiten la definición, del mayor y menor número de factores respectivamente (Henry, 2002). 96 V.3.5.3 Factorización de matrices positivas (PMF) El estudio de las fuentes responsables de la contaminación de los suelos del Valle de Puchuncaví se llevó a cabo a través del modelo Positive Matrix Factorization (PMF, (Paatero y Tapper, 1994), utilizando el programa PMF 3.0 (EPA-United States Environmenal Protection Agency, 2011). Como se dijo anteriormente PMF es una variante del análisis factorial con elementos de factores no negativos. Se define como un ajuste ponderado de mínimos cuadrados de una matriz de datos, en la que los pesos se determinan en función de la incertidumbre experimental (error) estimada para cada dato individual. De acuerdo con PMF, los datos fueron tratados de acuerdo a la siguiente matriz X: X= GF+E Ecuación (10) Donde las matrices G (que nos indica la cantidad de emisión presente en las muestras) y F (que nos indica el perfil químico para una fuente) han sido los factores determinados y E es la matriz de los residuos, es decir la parte no explicada de X. Como se ha indicado, el enfoque PMF hace uso del cálculo de las incertidumbres. La estimación de las incertidumbres se ha calculado teniendo en cuenta todas las posibles fuentes de error, incluyendo la incertidumbre derivada del muestreo (Ramsey, 1997), los cambios químicos durante el transporte y almacenamiento y los errores analíticos en el laboratorio. Un ejemplo de las fuentes de error que contribuyen a la incertidumbre experimental es representado usando el diagrama Ishikawa (Figura 8) derivado de la guía ISO para la expresión de las mediciones de incertidumbre (ISO, 1993). 97 Figura 9. Diagrama Ishikawa simplificado que indica las fuentes de obtención de muestras y error en el laboratorio (Vaccaro et al., 2007). 98 VI RESULTADOS Y DISCUSIÓN 99 VI RESULTADOS Y DISCUSION VI.1. Validación de métodos analíticos Con el fin de evaluar la calidad de las metodologías analíticas empleadas para la determinación de metales y metaloides en muestras de suelo y material particulado resuspendido, se llevó a cabo el análisis del material de referencia certificado NIST 1633b (fly coal ash) y SOIL SO-2 (soil), de acuerdo al protocolo descrito en literatura (Querol et al., 2001). Como se muestra en las tablas 7 y 8, los resultados obtenidos para estos materiales de referencia no presentan diferencias significativas respecto del valor certificado, lo cual comprueba la exactitud de los análisis químicos realizados. Tabla 7. Datos de validación de estándares de referencia para material certificado NIST 1633b. Elemento Aluminum Arsenic Barium Cadmium Calcium Cerium Copper Chromium Strontium Iron Magnesium Manganese Mercury Nickel Lead Potassium Selenium Sodium Titanium Thorium Uranium Vanadium Valor certificado (mg kg-1) 150500±2700 136.2 ±2.6 709±27 0.784±0.006 15100±600 190 112.8±2.6 198.2±4.7 1041±14 77800±2300 4820±80 131.8±1.7 0.141±0.019 120.6±1.8 68.2±1.1 19500±300 10.26±0.17 2010±30 7910±140 25.7±1.3 8.79±0.36 295.7±3.6 Valor reportado (mg kg-1) 146616±2200 132±3 689±12 0.77±0.03 14302±250 185±6 113±3 194±5 1011±16 78132±2200 4764±100 127±4 0.15±0.01 118±3 66±2 19063±500 10.2±0.3 1902±40 7802±254 24.2±1.4 8.4±0.4 299±10 Elemento Antimony Cobalt Tantalum Cesium Dysprosium Europium Terbium Hafnium Gadolinium phosphorus Thallium Thulium Lanthanum Lutetium Holmium Tungsteno Neodymium Terbium Zinc Rubidio Scandium Samarium Valor certificado (mg kg-1)* 6 50 1.8 11 17 4.1 2.6 6.8 13 2300 5.9 2.1 94 1.2 3.5 5.6 85 7.6 210 140 41 20 Valor reportado (mg kg-1) 6.1±0.2 50±2 1.90±0.05 10.2±0.4 16.1±0.4 4.0±0.1 2.3±0.1 6.2±0.4 14.1±0.5 2175±82 5.3±0.2 2.3±0.1 92±2 1.10±0.03 3.4±0.1 5.3±0.2 84±2 7.1±0.3 210±4 137±3 39±1 18.1±0.5 * valores no certificados en datos de material certificado 100 Tabla 8. Datos de validación de estándar de referencia para material certificado SOIL SO-2. Elemento Aluminum Calcium Copper Chromium Strontium Iron Manganese Valor certificado -1 (mg kg ) 80700 ±1320 19600±282 7.01±0.10 16.1±0.3 340±4 55600±1100 720±15 Valor reportado -1 (mg kg ) 79491±1700 18986±323 7.02±0.15 16.2±0.6 339±12 55439±2100 727±22 Elemento Magnesium Potassium lead Titanium Vanadium Zinc Valor certificado -1 (mg kg ) 5400±50 24500±1140 21.1±0.6 8600±230 64±2 124.1±1.3 Valor reportado -1 (mg kg ) 5289±110 24193±1400 20.3±0.8 8305±260 65±3 123±2 La tabla 9, muestra los límites de detección y cuantificación analizados según norma IUPAC (Danzer, 1998), para los elementos analizados por ICP-MS, e ICP-AES. Como se puede observar los valores estuvieron incluso sobre los límites de cuantificación de la metodología, por otra parte considerando los intervalos de confianza se demuestra que los resultados reportados para el análisis de ambos materiales de referencia son estadísticamente similares a los valores certificados para todos los elementos determinados. Tabla 9. Valores de los límites de detección para elementos analizados. Elementos *LOD **LOQ Elementos *LOD **LOQ As 0.03 0.09 Ge 0.01 0.03 B 0.03 0.09 Hf 0.008 0.02 Ba 0.05 0.2 Hg 0.01 0.03 Be 0.009 0.03 Ho 0.003 0.009 Bi 0.02 0.06 La 0.02 0.06 Cd 0.02 0.06 Li 0.02 0.06 Ce 0.03 0.09 Lu 0.002 0.006 Co 0.02 0.06 Mn 0.06 0.2 Cr 0.03 0.09 Mo 0.01 0.03 Cs 0.007 0.02 Nb 0.02 0.06 Cu 0.04 0.1 Nd 0.003 0.009 Dy 0.002 0.006 Ni 0.05 0.2 Er 0.002 0.006 Pb 0.01 0.03 Eu 0.003 0.009 Pr 0.002 0.006 Ga 0.01 0.03 Rb 0.003 0.009 Gd 0.002 0.006 Sb 0.04 0.1 Al 0.05 0.2 Mg 0.4 1 Ca 0.30 0.9 Na 0.01 0.03 Fe 0.06 0.2 Ti 0.09 0.3 K 0.04 0.1 *Rango del límite de detección (µg kg-1) LOD = (3.28*So) **Rango del límite de cuantificación (µg kg-1) LOQ= (10* So) Elementos Sc Se Sm Sn Sr Ta Tb Th Tl Tm U V W Y Yb Zn Zr *LOD 0.03 0.06 0.004 0.02 0.07 0.04 0.002 0.02 0.007 0.006 0.005 0.03 0.06 0.004 0.003 0.01 0.04 **LOQ 0.09 0.2 0.01 0.06 0.2 0.1 0.006 0.06 0.02 0.02 0.02 0.09 0.2 0.01 0.009 0.03 0.1 101 VI.2 Niveles de elementos mayoritarios y traza en muestras de suelo Una vez determinada la exactitud de la metodología analítica para la determinación de elementos traza en las muestras ambientales de este estudio, se procedió a determinar los niveles de elementos mayoritarios y traza en las muestras de suelo del Valle de Puchuncaví. VI.2.1 Niveles de elementos mayoritarios La tabla 10 muestra la variación anual encontrada para elementos mayoritarios en muestras de suelo recolectadas en las estaciones de monitoreo ambiental la Greda, Maitenes, Valle alegre y Puchuncaví (Figura 7) durante los años 2007 a 2009. De acuerdo a los resultados de los promedios obtenidos, la distribución de la concentración de los elementos mayoritarios que se encuentran en el suelo (Al, Fe, Ca, K, Na, Mg, y Ti) (Sposito, 1989) presentan la siguiente variación temporal y espacial. Respecto de la variación temporal, durante el año 2007 (Figura 10), la mayor concentración de dichos elementos correspondió a Calcio. Reportándose un máximo en el año 2007 de (164530 mg kg-1) en la estación la Greda sitio que se encuentra ubicado a 1.89 km de distancia de las fuentes de contaminación (Figura 7), mientras que el valor de concentración más bajo fue de 13517.0 mg kg-1 en la estación más lejana de las fuentes emisoras (Puchuncaví ubicada a 8.58 km). Hecho que puede explicarse como el posible uso de calcio por las fuentes contaminantes para neutralizar la acidez del suelo en los sitios cercanos a los emplazamientos emisores ó bien como agente desulfurante de dióxido de azufre emitido por la combustión de combustibles fósiles ya que dentro de las tecnologías de abatimiento para este gas se citan procesos de desulfurización de gases vía húmeda donde los gases de combustión se saturan con agua y la piedra caliza (CaCO3) actúa como reactivo, para la transformación de azufre en fase gaseosa (SO2) a yeso (CaSO4.2H2O) (Ecuación 11); 102 Ecuación (11) Así como también procesos de desulfurización en seco con humidificación controlada, donde se utiliza la cal (CaO) como reactivo para la transformación de azufre gaseoso a azufre en fase sólida (CaSO3) (Ecuación 12), (Parker, 2001; Bill, 2010). Ecuación (12) Por otra parte los niveles de Na y K fueron menores en la estación de monitoreo ambiental la Greda y estables en los demás sitos de estudio, por lo que la presencia de estos elementos no se debería a las fuentes industriales de la zona, sino mas bien a la composición del suelo de los emplazamientos respectivos (Hedberg et al., 2005). En cuanto a la distribución de Fe, Mg y Ti, estos elementos presentaron mayor contribución en todas las estaciones respecto la Greda y fueron similares con relación al sitio de referencia Maitencillo, siendo posible dicha semejanza debido a las características típicas del suelo de la comuna de Puchuncaví el cual se encuentra compuesto principalmente por arcilla, limo y arena como partículas mayores (Tavera, 1960). Igualmente en la tabla 10 se reporta un valor máximo de 9336.2 mg kg-1 para Mg en la estación Valle alegre, concentración que es similar a la corteza terrestre de Maitencillo y prácticamente 3 veces mayor al promedio encontrado en la Greda, lo cual es un indicio más de que este elemento es de origen crustal. 103 Figura 10. Variación temporal de elementos mayoritarios para el año 2007. Respecto de la variación temporal durante el año 2008 (Figura 11), la concentración de los elementos mayoritarios fue similar respecto a la variación del año 2007; similitud que se debe a la composición del suelo de dichos lugares, los cuales corresponden a Entisoles (Survey, 2003; Neaman et al., 2009; Ginocchio, 1997). Figura 11. Variación temporalde elementos mayoritarios para el año 2008. 104 Según la variación temporal 2009 (Figura 12), la concentración promedio de Al (86918 mg kg-1) en la estación la Greda reportada en la tabla 10 muestra que ésta fue aproximadamente dos veces mayor que en los años anteriores, mientras que la concentración promedio de calcio (21779 mg kg-1) disminuyó en esta zona de muestreo, lo que podría deberse a que en éste año las fuentes contaminantes no emitieron ningún agente desulfurante, probablemente debido a la reducción de emisiones contaminantes por parte de las fuentes respectivas. En la estación Valle Alegre las concentraciones promedio para Fe (53770 mg kg-1), Mg (7238 mg kg-1), y Ti (7196 mg kg-1), fueron similares a las concentraciones analizadas en la zona de referencia (Maitencillo), lo cual puede deberse a que éstos suelos se encuentran relacionados por la similitud de los procesos geológicos presentes en éstas zonas (Consultores, 2008). Figura 12. Variación temporal de elementos mayoritarios para el año 2009. De acuerdo a los datos que se encuentran en la tabla 10, la estación la Greda presentó un alto contenido de Calcio en el año 2007 el cual disminuyó en el año 2009 (164530 -21779 105 mg kg-1). Así mismo ésta estación presentó un menor contenido de Al en el año 2007 y mayor en el año 2009 (39490-86918mg kg-1). Por otra, en la estación los Maitenes la única variación durante los tres años fue el mayor contenido de Al durante el año 2009 (Valor promedio 81724 mg kg-1), mientras los demás elementos mayoritarios no variaron considerablemente. En general, aunque la mayor parte de los suelos de la comuna de Puchuncaví se encuentran relacionados con los mismos procesos geológicos, la estación Valle alegre se caracterizó por la alta presencia de Fe y Mg (Tabla 10) durante los tres años, hecho que demuestra que esta estación sería una de las zonas donde los suelos se asemejan a composición de los suelos no contaminados correspondientes a Maitencillo (Tabla 11). Por otra parte, respecto las tres estaciones más cercanas a las fuentes de contaminación, la estación Puchuncaví no presentó una mayor variación en cuanto a la concentración de elementos mayoritarios se refiere. 106 Tabla 10. Concentración de elementos mayoritarios para muestras de suelo del Valle de Puchuncaví (2007-2009) determinados por ICP-AES. Máximo (Máx.), mínimo (Mín.) y promedio (Prom.). Muestras (mg kg-1) Al Prom. % 39490.4 3.95 Máx. Mín. Prom. % Máx. Mín. Ca Fe K Mg Na Ti 164529.5 16.45 20098.6 2.01 7642.1 0.76 3749.7 0.37 10679.6 1.07 2417.6 0.24 47044.4 26091.8 69522.1 6.95 72838 66088.6 209559.5 135122 15113.2 1.51 15728.8 14266.5 23400.2 14372.3 40827.6 4.08 41934.6 39303.7 9814.6 5107.8 16642.4 1.66 17081.3 15954 4025.4 3314 4544.3 0.45 4616.5 4424.1 14487.8 7092.8 23023.8 2.30 23745.4 21764.1 3010.1 1516.7 5074.8 0.51 5491.2 4807.5 Prom. % Máx. Mín. Prom. % 69811.8 6.98 75580.7 66534.8 65111.4 6.51 17845.9 1.78 27223.8 13894.2 15220.1 1.52 47685.1 4.77 74263.6 36293.5 32147.6 3.21 12934.6 1.29 13588.3 12033.9 13015.3 1.30 4832.3 0.48 9336.2 2617.7 3048.6 0.30 19747.1 1.97 23371.1 18057.7 20590.5 2.06 4321.4 0.43 6101.1 2557.5 4082.5 0.41 Máx. Mín. 69575.4 61313.1 16994.1 13517 33103.2 31253.6 13689.3 12056.9 3534.4 2342.7 21776.7 19577.6 5824.6 1126.1 Prom. % Máx. Mín. Prom. % 50701.2 5.07 79138.4 16612 66919.4 6.69 133516.8 13.35 273290.7 27794 14450.1 1.45 25229.5 2.52 37152 9699.5 42277.8 4.23 10176 1.02 16526.1 3338.8 15238 1.52 4066.3 0.41 4557.8 3586.5 4515.3 0.45 14993.6 1.50 25334.6 5081.1 21582.7 2.16 3081.7 0.31 4258.2 1461.6 5413.2 0.54 Máx. Mín. Prom. % Máx. Mín. Prom. % Máx. Mín. 74550.8 51884.2 78112.6 7.81 83389 75739.2 75176.7 7.52 85701.1 68869.4 17442.3 12557.6 17545.3 1.75 18692.6 16280.2 14693.8 1.47 18653.1 12991.4 46635.9 33332 51502.3 5.15 57298.6 48934.8 39731 3.97 59986.3 32110.3 16602 13115.8 17506.5 1.75 17583.5 17351.3 12766.3 1.28 12972.7 12417 4990.8 3466.9 7370.5 0.74 9642.4 5965.6 5609.8 0.56 14179 2463.9 24025.9 18869.5 26020.8 2.60 26589.2 25592.3 21518 2.15 23182.7 20377.2 6082.4 4139.1 5911.2 0.59 7140.4 3380 3193.1 0.32 5917.5 1301.5 Prom. % Máx. 86917.9 8.69 93471.8 21778.5 2.18 41035.8 39912.5 3.99 43290.7 15263.5 1.53 17265 5064.5 0.51 5240.4 23471 2.35 26362.8 4426.9 0.44 4911.8 2007 Greda Maitenes Valle Puchuncaví 2008 Greda Maitenes Valle Puchuncaví 2009 Greda 107 Maitenes Mín. Prom. 82991.5 81723.9 13405.7 17083.7 34957.3 49915.1 11901.3 16888.8 4776.8 4862.4 18464.4 24713.1 3797.8 4673.9 Valle % Máx. Mín. Prom. % Máx. 8.17 83339.5 80155.2 80060.6 8.01 81187.3 1.71 18667.9 15415.3 18119.3 1.81 18478.4 4.99 53506 43317.2 53669.8 5.37 55234.4 1.69 17478.2 16281.2 16922.3 1.69 17876.4 0.49 5279.4 4534.4 7237.7 0.72 8302.1 2.47 25454.5 24088.8 25776.9 2.58 26212.7 0.47 7187.7 2643.5 7195.7 0.72 7623.4 Mín. Prom. % Máx. 79365.7 74740.5 7.47 76630.1 17676.8 13360.4 1.34 15436.9 51203.4 34707.6 3.47 38155.5 16467.8 13055.8 1.31 13768 5890.2 3307.9 0.33 4025.8 24848.5 21933.8 2.19 23579.3 6909.9 4759 0.48 6747.6 Mín. 71703.3 12179.5 31371 11923.4 2894.5 19349.3 1720.4 Puchuncaví Tabla 11. Promedio de datos de la concentración de elementos mayoritarios para muestras de suelos del Valle de Puchuncaví determinados por ICP-AES. Al Maitencillo -1 mg kg 85237±2557 % 85.24±0.26 Ca Fe K Mg Na Ti 24183±725 58189±1720 14901±447 8529±225 25069±750 4110±105 24.18±0.07 14.90±0.04 8.53±0.02 25.07±0.08 4.11±0.01 58.19±0.17 De acuerdo a la variabilidad espacial (Figura 13) en la estación de monitoreo ambiental la Greda se observa una mayor concentración de calcio durante los años 2007 y 2008, lo cual se podría explicar como la posible aplicación de una tecnología de abatimiento para dióxido de azufre como es el caso de la desulfurización en seco donde se utiliza CaO como reactivo para la transformación de azufre gaseoso a azufre en fase sólida (CONAMA, 2009; Bill, 2010). Mientras que en la estación ubicada a 2.52 km de distancia respecto de las fuentes de contaminación (Figura 7), presentó un mayor contenido de hierro durante el año 2009 y un menor contenido de calcio durante los tres años respecto a la estación la Greda, hecho que verifica el aporte de calcio en la estación la Greda. En la estación Valle alegre y Puchuncaví no se observó mayor variación respecto la concentración de elementos mayoritarios, hecho que puede significar la no existencia de 108 un aporte antropogénico de éstos elementos en dichas zonas, lo cual es factible verificar más adelante con el uso de métodos receptores. Por lo que podemos concluir que la estación que presentó mayor variabilidad de acuerdo a la concentración de elementos mayoritarios fue la más cercana a las fuentes de contaminación (Greda), lugar donde se encontró una acumulación de calcio equivalente a seis veces más que la existente en la corteza crustal (Maitencillo), hecho que podría deberse a la emisión de este elemento por parte de una de las fuentes contaminantes. Figura 13. Variaciónespacial de elementos mayoritarios en muestras de suelos del Valle de Puchuncaví. (G07, G08, G09; corresponde a las muestras recolectadas en la estación la Greda durante los años 2007 a 2009; M07, M08, M09; corresponde a las muestras recolectadas en la estación los Maitenes durante los años 2007 a 2009; V07, V08, V09; corresponde a las muestras recolectadas en la estación Valle Alegre durante los años 2007 a 2009; P07, P08, P09; corresponde a las muestras recolectadas en la estación Puchuncaví durante los años 2007 a 2009) 109 VI.2.2 Niveles de elementos traza De acuerdo a los datos reportados en la tabla 12, la variación temporal de elementos traza durante el año 2007 y 2008, (Figura 14) muestra un incremento de Zn, As, Se, Mo, Cd, Sb, Sn y Pb en la estación de monitoreo ambiental la Greda ubicada a 1.89 km (Figura 7), así como una mayor concentración de Cu durante estos dos años (Figura 15), por lo que se deduce que puede existir una mayor contaminación por dichos elementos en la zona más cercana a las fuentes emisoras, lo que da indicios de que el origen de la contaminación se debe al material particulado emitido por las fuentes contaminantes, ya que de acuerdo a reportes de CONAMA se registran emisiones de PM10 superiores en estos años en relación a los otros sitios de muestreo (CONAMA, 2008) situación que se asemeja a los estudios realizados en suelos de Irán (Khorasanipour y Aftabi, 2010), donde el perfil de suelos que se encuentra en la dirección del viento y en las proximidades de una planta de fundición de cobre se encuentra enriquecido con Cu, As, Cd, Pb, Zn, Mo, Sb, Sn; en la capa superficial del suelo (0-5 cm). Esta distribución de metales también es similar en otros estudios de contaminación de suelos que se encuentran cerca de plantas de fundición, donde se ha encontrado enriquecimiento antropogénico principalmente por Cu, As, Cd, Zn, Pb, y Sb (Schroeder y Lane, 1988; Rasmussen et al., 2001; Carrizales et al., 2006; Martley et al., 2004; Chopin y Alloway, 2007; Rastmanesh y Moore, 2011; Stafilov et al., 2010). Igualmente durante estos dos años en la estación los Maitenes, ubicada a 2,52 km (Figura 7) de distancia de las fuentes de contaminación se reportaron altas concentraciones de As, Mo, Cd, Sb y Pb, hecho que podría deberse a la cercanía de la Fundición de Cobre existente en el lugar que emite considerables cantidades de dichos elementos, lo que concuerda con estudios de años previos realizados en el mismo sector (Chiang, 1985b; González y Ite, 1992; González y Berqvist, 1986). 110 De acuerdo a los datos presentados en la tabla 12 para el año 2009 (Figura 14), los elementos trazas que aumentaron su concentración en los sitios más cercanos a las fuentes de contaminación fueron Cu, Zn, As, Mo, Cd, Sn, Sb y Pb, y Se. Sin embargo, los niveles reportados para estos elementos fueron menores pero siguen siendo importantes durante este año en comparación a los anteriores, lo que significa que efectivamente se experimentaron fluctuaciones que disminuyeron las emisiones en el año 2009. Figura 14. Variacióntemporal de algunos elementos traza en muestras de suelo del Valle de Puchuncaví para los años 2007-2009 (G: Greda, M: Maitenes, V: Valle Alegre, P: Puchuncaví; años 2007 a 2009). Figura 15. Variacióntemporal de la concentración de cobre en muestras de suelo (2007 -2009) del Valle de Puchuncaví 2007-2009 (G: Greda, M: Maitenes, V: Valle Alegre, P: Puchuncaví). 111 Tabla 12. Concentraciones de elementos traza en muestras de suelos del valle de Puchuncaví (2007-2009) determinadas por ICP-MS. Máximo (máx.), promedio (prom.) y mínimo (mín.) Samp Sitios 2007 Greda Maitenes Valle a. Puchuncaví 2008 Greda Maitenes Valle a. Puchuncaví mg kg-1 Mn prom. máx. mín. prom. máx. mín. prom. máx. mín. 416.0 420.3 413.0 621.9 683.2 564.7 877.0 1157.7 670.8 prom. máx. Sr Sc 508.5 4.7 538.8 5.7 484.6 3.0 309.4 9.3 317.8 10.5 300.0 8.5 304.8 11.4 403.9 13.9 263.8 10.1 V Cr Co Ni Cu Zn Ga 3310.2 4448.8 2717.6 1444.6 2175.0 392.2 403.6 696.1 105.9 406.0 586.9 253.1 264.4 316.5 139.8 147.2 198.8 102.3 7.4 9.0 5.1 14.6 15.1 14.2 14.9 18.5 13.5 59.8 69.5 41.8 122.9 131.1 115.6 124.0 150.3 106.1 22.9 7.1 30.4 8.5 16.2 5.3 26.5 9.4 29.8 10.1 21.9 7.3 30.2 11.3 36.3 14.9 25.4 9.8 12.5 15.6 9.0 9.4 11.4 6.4 8.2 11.4 5.9 622.9 662.2 269.1 9.1 95.5 282.7 10.1 114.4 35.1 9.6 44.3 10.5 7.7 8.8 mín. 564.8 248.2 7.0 31.0 8.5 6.5 prom. máx. mín. prom. 479.2 605.2 372.9 633.7 505.7 6.3 81.5 691.5 9.5 111.1 376.8 1.8 42.2 297.3 10.8 136.0 20.4 8.2 26.9 12.6 13.0 4.1 26.0 9.5 10.5 13.2 7.4 8.7 máx. mín. prom. máx. 714.7 476.4 1139.0 1393.9 341.3 258.2 266.1 290.1 12.0 157.7 8.1 97.4 16.9 181.9 20.8 204.7 32.4 12.2 16.1 6.0 32.7 18.1 36.5 23.4 13.1 2253.7 293.9 16.3 4.8 232.5 93.0 11.5 9.0 151.8 143.2 16.7 11.8 177.9 150.1 18.6 mín. prom. máx. mín. 989.8 885.0 1918.8 495.1 236.1 266.0 283.8 254.5 14.9 145.2 10.7 86.2 11.2 122.3 10.1 58.4 30.3 15.3 23.7 11.2 31.8 15.9 6.8 8.8 56.2 7.5 6.4 8.2 3.4 Ge As Se Mo Cd Sn Sb La Gd Pb Hg 9.3 16.0 3.9 7.4 14.3 3.9 4.1 5.8 2.5 9.0 11.8 5.6 13.6 14.5 12.5 16.2 21.0 14.2 2.1 2.5 1.4 3.2 3.3 3.0 4.1 5.0 3.6 173.3 302.0 95.3 154.1 223.3 83.5 69.0 139.6 27.2 0.6 0.8 0.4 0.6 0.9 0.4 0.1 0.4 0.1 0.7 60.9 1.1 102.1 0.0 42.8 1.9 74.7 2.5 108.8 1.4 39.6 1.3 29.2 1.5 46.0 1.2 13.0 1.7 2.6 0.9 1.5 1.9 1.0 1.0 1.2 0.8 11.8 18.5 8.3 6.6 10.1 2.6 3.7 4.3 3.1 3.0 4.2 2.5 2.2 3.0 0.9 1.3 1.5 1.0 2.9 4.5 1.1 4.7 7.0 2.0 2.1 3.1 1.2 506.6 167.4 13.2 931.6 193.6 13.8 1.3 1.5 31.0 51.1 1.4 1.4 2.5 2.9 1.5 1.9 2.4 2.5 3.3 13.8 3.4 79.5 0.2 4.2 14.7 3.8 144.9 0.5 232.0 118.3 12.5 1.2 13.8 1.4 1.5 1.2 2.3 2.1 13.3 3.2 1.2 1.5 0.9 1.9 44.3 80.6 23.2 77.2 1.7 3.2 0.8 1.5 6.0 16.4 1.6 6.3 2.0 3.8 1.1 1.6 2.0 3.6 0.6 4.6 5.9 11.0 2.7 107.4 12.6 15.3 3.8 243.7 2.1 4.0 1.1 25.5 7.5 14.0 3.4 108.5 2.9 134.9 1.1 23.4 1.4 10.6 1.5 11.5 2.5 0.9 1.0 1.1 13.0 1.9 2.2 1.3 0.4 <LOD 0.7 <LOD 9.6 1.1 1.8 2.1 16.8 2.2 1.6 2.0 15.2 10.6 23.8 25.4 3.8 226.8 0.3 2.5 37.6 0.2 6.2 24.6 0.1 7.1 26.9 0.1 1.3 1.8 1.8 1.8 0.9 1.1 1.5 0.8 1.5 2.4 3.7 1.1 0.9 8.8 8.8 8.8 21.9 16.9 25.6 13.4 5.5 3.8 4.9 3.1 2365.2 4406.2 1064.5 1001.3 358.0 9.8 838.7 15.1 129.8 3.3 181.5 15.0 121.8 135.1 15.6 361.8 119.6 15.4 676.0 150.9 20.4 76.5 84.5 13.1 10.0 28.3 54.7 8.8 0.0 3.1 5.2 1.0 <LOD <LOD <LOD <LOD 40.3 0.1 23.3 52.8 96.3 10.8 112 0.6 0.6 0.5 0.3 0.1 0.1 0.1 0.1 2009 Greda Maitenes Valle a. Puchuncaví Maitencillo prom. 641.2 344.0 12.3 121.4 28.9 11.7 10.9 1393.7 306.7 16.4 1.4 65.3 2.4 4.0 1.3 1.7 máx. mín. prom. máx. mín. prom. máx. mín. prom. máx. 705.8 551.7 745.7 943.6 597.2 1126.7 1282.8 892.6 666.3 805.7 368.9 320.0 347.0 365.7 318.4 290.0 330.6 262.9 263.7 294.3 14.8 9.7 12.4 13.8 10.8 17.0 19.2 14.2 11.8 12.4 39.1 20.1 31.9 34.9 27.5 34.7 38.7 31.9 38.8 43.8 15.1 2081.7 402.4 17.6 7.0 768.2 219.0 15.4 9.9 1077.5 232.0 16.7 10.9 1698.7 291.1 17.8 8.2 453.0 185.8 15.6 9.2 285.7 164.8 17.2 10.1 773.6 206.8 18.0 8.6 115.7 140.6 16.6 9.0 571.2 164.9 14.3 12.0 897.7 209.1 14.7 1.6 105.9 1.1 40.6 1.7 72.9 2.3 100.0 0.8 39.8 1.6 23.0 1.8 56.9 1.5 10.9 1.6 45.1 1.8 54.0 3.3 1.4 1.8 2.1 0.9 1.5 1.8 1.2 1.2 1.8 6.8 2.6 4.1 8.4 0.4 1.3 4.1 0.2 2.3 3.6 1.6 0.8 1.1 1.7 0.0 0.5 1.1 0.0 0.9 1.5 2.4 1.2 3.1 6.4 1.1 2.2 3.2 1.8 2.5 3.4 mín. prom. Máx Min. 503.5 966.0 967 965 237.5 404.1 405 403 10.7 80.9 32.7 10.4 15.9 130.1 33.4 13.6 16 132 35 14 15 129 32.3 13 0.9 1.0 1.3 1.2 0.9 1.2 1.3 1.2 0.0 0,9 1.1 0.9 1.1 0,9 1.1 0.9 129.5 103.9 136.9 183.5 94.0 203.4 219.1 187.8 115.9 138.4 14.6 9.1 11.5 14.5 9.7 17.5 20.9 13.3 12.3 14.1 6.8 10.1 11 10 238.9 125.8 13.8 1.5 54.0 157.5 18.4 <LOD 56 160 19 <LOD 52 158 17 <LOD 23.5 16.4 18 15 3.9 16.5 4.1 6.8 1.3 6.7 13.6 1.7 3.0 6.4 1.1 4.7 7.5 17.6 15.4 17.1 19.4 15.1 22.9 24.8 19.8 16.8 17.6 4.6 3.8 3.9 4.4 3.4 5.9 6.6 4.7 4.1 4.5 96.3 2.0 144.1 58.1 137.0 219.9 49.1 44.9 101.3 24.9 84.4 129.9 3.9 0.5 0.3 0.5 0.1 0.1 0.1 0.1 0.3 0.4 1.7 15.8 3.7 36.7 0.1 0,2 19.4 4.6 27.0 0.1 0.4 21 5.2 28.2 0.2 0.3 20 5 26.4 0.9 113 Así la relación entre las altas concentraciones de Cu, Zn, Pb, y As con los niveles reportados para los suelos de referencia de Maitencillo que son suelos menos afectados por la contaminación antropogénica ya que su ubicación es al norte del complejo Ventanas (Muena et al., 2010) (Tabla 13), deduce la existencia de una fuente de contaminación adicional a la composición natural del suelo (González et al., 2008; Ginocchio et al., 2004; Neaman et al., 2009; Folchi, 2006), la cual corresponde posiblemente a la Fundición y refinería de cobre debido a que el tratamiento de la mayoría de los minerales sulfurados utilizados en los procesos de fundición emite dichos elementos trazadores contaminantes al medio ambiente circundante tal y como se reporta en otras partes del mundo como es el caso de los estudios de (Rastmanesh y Moore, 2011; Pope et al., 2005; Çubukçu y Tüysüz, 2006; Chopin y Alloway, 2007; Siegel, 2004; Khorasanipour y Aftabi, 2010; Tembo et al., 2006), donde se han encontrado suelos contaminados a distancias a menos de 2 y hasta 7 km de la fuente de emisión y en dirección de los vientos predominantes (Taylor et al., 2010). Tabla 13. Comparación de la concentración de algunos elementos traza (2009) con valores de concentración para el sitio de referencia “Maitencillo”. Estaciones (mg kg -1) Greda Cu Zn 1394 As Se Mo Cd Sn Sb Pb 307 65 2.4 4.0 1.3 1.7 3.9 96 Maitenes Valle Puchuncavi 1078 286 571 232 165 165 73 23 45 1.8 1.5 1.2 4.1 1.3 2.3 1.1 0.5 0.9 3.1 2.2 2.5 6.7 3.0 4.7 137 45 84 Maitencillo 54 158 16 1 1.2 0.9 0.9 1.2 27 114 De acuerdo a la variabilidad espacial la estación la Greda (Figura 16) (la más cercana a las fuentes de contaminación; (Figura 7) durante el año 2007 y 2008, presentó mayores concentraciones de los siguientes elementos trazadores contaminantes Cu, Mo, Cd, Sn, Sb y Pb en el caso del año 2007. Figura 16. Concentración de algunos elementos traza en la estación la Greda en diferentes años de muestreo (2007-2009). *Escala logarítmica base 10. En el caso de la estación los Maitenes, los elementos trazadores que disminuyeron los niveles de concentración del año 2007 a 2009, fueron principalmente Cu, Mo, Pb, Cd , Zn y Sn , mientras en la estación Valle alegre dichos elementos correspondieron a Cu, As, Mo, Sn y Pb (Figura 17) (Tabla 12). El incremento de elementos traza tales como; Cu, As, y Pb durante los años 2007 a 2009, en la estación Puchuncaví (Figura 17) podría deberse a las emisiones de material particulado que llegan a este emplazamiento debido a la influencia de la dirección del viento (Figura 8), así como también a las partículas que llegan a éste lugar como consecuencia de la altura de las chimeneas respectivas (Álvarez et al., 2008) las cuales 115 superan más de 150 metros en el caso de CODELCO ventanas y 100 metros en el caso de AES GENER (CIMM, 2011). Figura 17. Concentración de algunos elementos traza en las estaciones Maitenes, Valle alegre y Puchuncaví en diferentes años de muestreo (2007-2009). *Escala logarítmica base 10. Por otra parte, como se observa en la tabla 12 el mayor contenido de mercurio en el suelo del Valle de Puchuncaví presentó una mayor concentración con un rango promedio de 2 mg kg-1 en la estación la Greda especialmente durante el año 2009 mientras que la estación menos contaminada corresponde a Valle Alegre (0.1 mg kg -1); emplazamiento que se encuentra no solo más lejos de las fuentes de contaminación sino también está ubicada en zona opuesta a la dirección de los vientos, siendo ello factor que predice una menor contaminación en dicho lugar. 116 En los datos de la tabla 12, se observó un aumento en los índices de contaminación de mercurio del año 2007 a 2009 en la estación la Greda, mientras que en la estación los Maitenes se presento un descenso de la concentración promedio (0.6 a 0.3 mg kg-1). Finalmente en las demás estaciones no se presentó una variación significativa, tal es el caso de Valle Alegre donde los valores encontrados fueron constantes (0.1 mg kg-1). La emisión de dichas concentraciones puede deberse principalmente a procesos industriales como lo es la combustión de combustibles fósiles (quema de carbón) (Pant et al., 2011; Lindqvist y Rodhe, 1985; Nriagu, 1989), donde el origen más importante de mercurio en la superficie terrestre es la emisión de material particulado (Diamond y Zalups, 1998; Kabata y Pandias, 1999); siendo por tanto este elemento uno de los más importantes contaminantes del medio ambiente (Mason et al., 1994). 117 VI.3. Niveles de elementos mayoritarios y traza en muestras de material particulado re suspendido En las tablas 14 y 15 se recogen los valores medios de los elementos mayoritarios y minoritarios depositados como material particulado re suspendido en muestras de suelo de las estaciones la Greda, Maitenes (Figura 7) y del sitio de referencia Maitencillo; correspondientes al año 2009. VI.3.1 Niveles de elementos mayoritarios en muestras de material particulado resuspendido De acuerdo con los datos reportados en la tabla 14, la distribución de la concentración de los elementos mayoritarios (Al, Ca, Fe, K, Mg, Na y Ti) que se encuentran en las diferentes fracciones de material particulado resuspendido, muestran que en la estación la Greda ubicada a 1.89 km de la fuente de contaminación (Figura 18) la mayor concentración de dichos elementos presente en todas las fracciones corresponde al elemento Al, presentando un máximo de 196833 mg kg -1 en la fracción de 0.3-0.7 µm y un mínimo de 77075 mg kg-1 en la fracción >20 µm, dicha distribución puede estar asociada a la contribución de componentes crustales tales como aluminosilicatos (Castillo et al., 2008). De acuerdo a los datos registrados en la tabla 14, las mayores concentraciones en todas las fracciones fueron registradas para el caso de aluminio y calcio, lo cual podría deberse en el caso de aluminio a la contribución de componentes crustales tales como Al 2O3 (Castillo et al., 2008) y en el caso de calcio al aporte antropogénico emitido por alguna de las fuentes emisoras. Como se reporta en la tabla 14, existe también un incremento en la concentración de Ca en las fracciones más pequeñas correspondiente a las fracciones cuyo diámetro se encuentra entre 0.3-0.7 µm y 0.7-1.5 µm, lo que podría deberse a una contribución antropogénica. Al respecto, se ha reportado que para inhibir las emanaciones ácidas 118 desde los procesos de tostación de minerales sulfurados de cobre, se agrega al horno óxidos y carbonatos de calcio (Parker, 2001; Bill, 2010), por lo que se deduce que para esta investigación la posible fuente de emisión de Calcio seria CODELCO, a la vez si comparamos los niveles de Ca reportados en todas las estaciones, se observa una disminución de la concentración en función de la distancia de alejamiento de ésta fuente por lo que el aporte de Ca sería por emisión de material particulado resuspendido. Así el enriquecimiento de calcio por emisión de material particulado en la estación los Maitenes comparado con el de la estación la Greda, resulta ser menor ya que de acuerdo a los resultados de la tabla 14; la distribución de dicho elemento en esta estación no presenta una gran variación en las siete fracciones analizadas, reportándose un máximo de 19508 mg kg-1 en la fracción correspondiente a 0.3-0.7 µm. Los análisis de elementos mayoritarios en la estación la Greda (Figura 18), reportan a la vez un aporte de aerosol marino determinado por los niveles de concentración de K y Na en todas las fracciones del material particulado re suspendido con máximos de 16436 mg kg-1 y 24106 mg kg-1 respectivamente, en la fracción más pequeña. Mientras existe un enriquecimiento por Na y K en todas las fracciones de material particulado resuspendido debido a la composición de la corteza crustal no solo de la zona más cercana a la fuente de contaminación sino también a estaciones ubicadas a 2.52 km (Figura 7) como lo es los Maitenes. (Hedberg et al., 2005; Alleman et al., 2010; Nicolás et al., 2008; Mészáros, 1999). La distribución de la concentración para Fe, Mg y Ti en la tabla 14, demuestra que las fracciones que contienen altas concentraciones de dichos elementos mayoritarios se encuentran en las fracciones que van desde 6 hasta >20 µm, lo que se demuestra que las fracciones que contienen altas concentraciones de elementos mayoritarios se encuentran en las fracciones más gruesas, lo que se deduce como un aporte crustal de dichos elementos en este emplazamiento (Zhao et al., 2006). 119 Figura 18. Concentraciones de elementos mayoritarios en muestras de material particulado resuspendido correspondientes a la estación la Greda. De acuerdo a la concentración de elementos mayoritarios que se encuentran en las diferentes fracciones de material particulado re suspendido en la estación de monitoreo ambiental los Maitenes (Figura 19), se demuestra que los elementos que están predominantemente en la fracción gruesa son principalmente Fe y Al, lo cual es lógico ya que dichos elementos se encuentran en forma abundante en la corteza terrestre. Mientras que a diferencia de la estación de monitoreo ambiental la Greda, la concentración de calcio en las fracciones más pequeñas permanece constante en todas las fracciones lo cual puede indicar que el aporte de calcio se lleva a cabo solamente en la estación de monitoreo más cercana a las fuentes de contaminación. Los datos de la tabla 14, muestran que para el sitio de referencia Maitencillo, la distribución de elementos mayoritarios es uniforme en las todas las fracciones, solo en el caso de Na (25920 mg kg-1) y K (29475 mg kg-1) se observó una mayor concentración en la fracciones menores a 1.5 µm lo cual es lógico puesto que puede ser resultado del aporte de aerosol marino presente en el lugar (Figura 20). 120 Figura 19. Distribuciónde elementos mayoritarios en muestras de material particulado resuspendido correspondientes a la estación los Maitenes. Figura 20.Distribución de elementos mayoritarios en muestras de material particulado resuspendido correspondientes al sitio de referencia Maitencillo. 121 Tabla 14. Concentración de elementos mayoritarios en diferentes fracciones de muestras de material particulado resuspendido determinadas por ICP-AES. Muestras Greda Fracciones mg kg-1 Al % mg kg-1 Ca % mg kg-1 Fe % mg kg-1 % K mg kg-1 Mg % mg kg-1 Na % mg kg-1 Ti % 0.3-0.7 µm 0.7-1.5µm 1.5-3µm 196833.3 196500 189750 19.68 19.65 18.98 184058.3 142020.8 110340.1 18.41 14.20 11.03 9933.0 14700.0 14931.8 0.99 16435.8 1.47 16422.4 1.49 15242.5 1.64 1.64 1.52 1170.8 2304.6 3671 0.12 24106.3 0.23 23333.3 0.37 24057.5 2.41 2.33 2.41 4900.0 0.49 4928.6 0.49 4979.2 0.50 3-6µm 6-12µm 12-20 µm >20µm 185960.5 156166.7 167442.5 77075.4 18.60 15.62 16.74 7.71 109530.9 10861.5 8761.5 6859.8 10.95 1.09 0.88 0.69 19244.7 26170.0 35488.5 46244.3 1.92 2.62 3.55 4.62 15246.1 15283.3 12814.8 11058.9 1.52 1.53 1.28 1.11 4622.7 5290.4 6304.6 6166.7 0.46 0.53 0.63 0.62 19559.2 19108.3 20888.9 19681.8 1.96 1.91 2.09 1.97 4761.8 4834.7 4793.4 4101 0.48 0.48 0.48 0.41 0.3-0.7 µm 0.7-1.5µm 1.5-3µm 3-6µm 140150 131057.7 99349.1 95074.1 14.02 13.11 9.93 9.51 19507.5 18528.8 17613.2 16459.3 1.95 1.85 1.76 1.65 28150.0 29096.2 35424.5 38796.3 2.82 29475 2.91 28211.5 3.54 23155.7 3.88 22574.1 2.95 2.82 2.32 2.26 5527.5 5365.4 6528.3 6583.3 0.55 0.54 0.65 0.66 25919.8 26706.5 23242.4 21388.9 2.59 2.67 2.32 2.14 3437.5 3059.6 3075.5 3430.6 0.34 0.31 0.31 0.34 6-12µm 12-20 µm >20µm Maitencillo 0.3-0.7 µm 0.7-1.5µm 1.5-3µm 3-6µm 6-12µm 12-20 µm >20µm 89643.9 83289.9 75359.7 94150.4 93157.7 99349.1 95074.1 89643.9 83289.9 75359.7 8.96 8.33 7.54 9.42 9.32 9.93 9.51 8.96 8.33 7.54 15854.5 14633.3 14575.5 19507.5 18528.8 17613.2 16459.3 15854.5 14633.3 14575.5 1.59 1.46 1.46 1.95 1.85 1.76 1.65 1.59 1.46 1.46 43787.9 48796.4 58150.2 28150.0 29096.2 35424.5 38796.3 43787.9 48796.4 58150.2 4.38 4.88 5.82 2.82 2.91 3.54 3.88 4.38 4.88 5.82 2.18 2.02 1.49 2.95 2.82 2.32 2.26 2.18 2.02 1.49 5009.8 5771.7 5348.9 5527.5 5365.4 6528.3 6583.3 5009.8 5771.7 5348.9 0.50 0.58 0.53 0.55 0.54 0.65 0.66 0.50 0.58 0.53 18115 15692.3 22532.4 25919.8 26706.5 23242.4 21388.9 18115 15692.3 22532.4 1.81 1.57 2.25 2.59 2.67 2.32 2.14 1.81 1.57 2.25 3540.9 3677.5 3277.3 3437.5 3059.6 3075.5 3430.6 3540.9 3677.5 3277.3 0.35 0.37 0.33 0.34 0.31 0.31 0.34 0.35 0.37 0.33 Maitenes 21818.2 20221 14928.1 29475 28211.5 23155.7 22574.1 21818.2 20221 14928.1 122 VI.3.2 Niveles de elementos minoritarios en muestras de material particulado resuspendido La tabla 15 muestra los promedios de la variación de la concentración de los elementos traza depositados en los suelos como material particulado resuspendido en las muestras de suelos analizadas de la Greda, Maitenes y Maitencillo, recolectadas durante el año 2009. Como se muestra en la tabla 15, los elementos traza que presentan una mayor concentración en las fracciones de material particulado resuspendido más fino (<6 µm) en la estación la Greda (Figura 21) fueron Cu, Zn, As, Mo, Cd, Sb y Pb. Dichos niveles podrían deberse a las emisiones de partículas finas procedentes de las actividades industriales pertenecientes a ENAMI, actual CODELCO. La presencia de partículas emitidas por industrias en fracciones pequeñas, han sido referenciadas por otros autores quienes constataron el predominio de elementos trazadores contaminantes en fracciones finas debido a cargas de tipo antropogénico (Castillo et al., 2008; Viana et al., 2008; Moreno et al., 2006). Figura 21. Distribución de elementos traza en muestras de material particulado resuspendido correspondientes a la estación la Greda. 123 Por otra parte en la estación los Maitenes (Figura 22), los datos de la tabla 15 muestran un incremento en la variación de elementos traza tales como Cu, Zn, As, Mo, Cd, Sn, Sb y Pb; en las fracciones más finas con tamaño inferior a 6 µm, los cuales se encuentran depositados en el suelo como material particulado re suspendido. Hecho que podría explicarse como resultado del aporte de material particulado emitido por la Fundición de Cobre, lo que concuerda con los resultados obtenidos en estudios previos del sector (Chiang, 1985b; González y Ite, 1992; González y Berqvist, 1986). Figura 22. Distribuciónde elementos traza en muestras de material particulado resuspendido correspondientes a la estación los Maitenes. Los datos de la tabla 15, reflejan a la vez el resultado de la distribución de elementos traza que se encuentran en las fracciones de material particulado re suspendido en el sitio de referencia Maitencillo, el cual a diferencias de las otras estaciones de la localidad de Puchuncaví, presenta una mayor concentración de Mn, Sc, V, Cr y Ni en las fracciones superiores a 1.5 µm (Figura 23). En general este es el resultado esperable para un suelo cuya composición está formada por granitos y sedimentos, lo cual evidencia que el origen de éstos elementos sea litogénico (Vergara et al., 1995; Aguirre et al., 1999;Gana y Tosdal, 1996; Creixell et al., 1998). 124 Figura 23. Distribución de elementos traza en muestras de material particulado resuspendido correspondientes a Maitencillo. 125 Tabla 15. Composición química de elementos traza en fracciones de diferente tamaño para muestras de material particulado resuspendido del Valle de Puchuncaví (año 2009) determinadas por ICP-MS. Muestras Stages µm 0.3-0.7 0.7-1.5 1.5-3 534.3 540.8 696.7 20.6 17 20.6 <LOD <LOD 11.1 3a6 6 a 12 12 a 20 >20 985.5 1967 1875 1583 14.4 37.3 28.3 24 Maitenes 0.3-0.7 0.7-1.5 1.5-3 3a6 6 a 12 12 a 20 >20 818 826.7 866.4 1597 1476 1896 1612 Maitencillo 0.3-0.7 0.7-1.5 1.5-3 3a6 6 a 12 12 a 20 >20 777.7 833.4 1161 1237 1210 1232 1078 Greda Mn Li Sc V Cr Gd Co Ni Cu Zn Ga Ge As Se Sr Mo Cd Sn Sb Pb 117.1 77.6 103.4 24.1 100.2 16.7 <LOD <LOD 5.8 15.5 11.6 11.4 78.8 57.4 37.2 2686 3054 2526 1209 1152 968.4 15.6 13.8 12.8 <LOD <LOD 2.5 234.5 236.9 206.6 <LOD <LOD 3.4 484.8 398.5 379.9 52.6 44.6 31.7 1.77 1.2 1.13 <LOD 12.5 5.8 11.5 9.1 7.4 514.6 477.2 380.8 11.3 7.6 9.3 11.9 147.2 79.3 273.5172.2 195.2 80 170.4 114 5.6 5.4 4.2 3.9 30.3 45.4 79.5 69.1 23.1 19.7 12.1 8.9 2092 1350 1494 1857 652.1 491.3 341.4 314 17.9 18.3 34.6 28.8 1.9 1.8 1.7 1.4 168.5 108.4 99.6 96.5 2.8 2.6 2.5 2.2 368.1 309.8 267.9 256.5 19.2 9.7 7.7 9.4 1.55 1.12 <LOD <LOD 4.3 2.7 3.5 2.3 6.1 5 3.3 2.3 274.6 165.2 161.2 132.1 14.5 17.6 15.9 23.5 25.9 37.4 32 <LOD 16.6 15.7 17.5 6 12 12.8 142.2 37.1 133.2 27.9 102.8 49.7 161.3 54.1 190.2 71 178.1 66.4 219.6 58.7 3.5 2.9 3.8 5 6.7 6.4 5.6 27.8 22.8 14.8 36.3 39.8 54.7 43.1 37.2 12.1 78.8 8.9 57.4 23.1 37.2 1131 907.9 852 671 523.7 514.6 422.1 983 896.3 553.4 452.9 168.3 136.7 130.4 14.7 14.2 11.2 18.9 18.9 26.2 22.3 2.3 2.1 0.5 2.5 2.8 5.5 4.6 141 117.5 122.8 94.8 69.7 47.1 28.8 <LOD <LOD <LOD 1.4 1.3 1.2 1.2 366.8 349.9 335.4 338 324.2 342.8 313 15.4 14.6 11.4 10.4 14.1 9.3 1.7 2.9 3.3 2.5 1.7 1.7 <LOD 1.1 8.1 8.4 5.2 5 3.8 2.8 0.9 7.9 8.3 6.9 6.1 5.5 4.9 1.1 102.5 102.6 97.8 96.7 92.4 57.4 38.6 14.2 15.4 30.1 29.5 18.5 15.4 35 <LOD <LOD 8.2 17.3 8.6 11.9 11.6 98.5 36.5 108.5 35.1 106.1 33.1 117.1 38.3 125.8 36.6 122.8 39.3 124.9 38 <LOD <LOD 4.33 7.37 4.75 3.75 3.32 13.7 15.7 14.7 12 19.6 15.7 13.6 10.7 14.7 23.7 22 19.6 22.6 25.5 42.9 41.1 46.2 53.7 52.9 61.1 55.3 120.3 124.1 126.3 133.7 142.5 142.9 150.3 <LOD 13.2 11.9 20.6 12.8 11.8 11.5 <LOD <LOD <LOD 3.2 <LOD 1.5 0.6 13.9 16.9 16.2 13.7 19.7 18.2 18.9 <LOD <LOD <LOD <LOD <LOD <LOD 0.8 290.8 282.2 295.5 309 312.1 338.5 351.3 1 1 1 1.6 1.4 1.6 1 <LOD <LOD <LOD <LOD <LOD 0.8 0.5 1.1 2.4 2.4 2.8 2.2 1.1 1.9 1.5 2 2.5 2.3 1.8 2.5 2.2 19.1 18.3 19.75 21.71 21.73 25.85 24.3 126 VI.3. Análisis mineralógico VI.3.1 Difracción de rayos X en muestras de suelo Los resultados de DRX para las muestras de suelos de las estaciones La Greda, Maitenes, Valle Alegre y Puchuncaví, demuestran el predominio de los siguientes minerales en todos los casos; Cuarzo (SiO2), Albita (Na, Ca) (Si, Al)408, Hematite (Fe2O3), Microcline (KAlSi3O8) Illita (K-Na-Mg-Fe-Al-Si-O-H2O), Pérovskite (CaTiO3); hecho que evidencia la presencia de elementos tales como Al, Ca, Fe, K, Mg, Na, y Ti en su composición. La presencia de dichos minerales concuerda con los estudios realizados por (Marrero et al., 2007), quienes determinaron por DRX la composición de cenizas volantes en Argentina, encontrando fases minerales tales como cuarzo, y hematite principalmente. En el caso de muestras de suelo; minerales tales como cuarzo, illita y hematite, también han sido determinados por DRX en estudios realizados por (Chopin y Alloway, 2007). VI.3.2 Difracción de rayos X en muestras de material particulado resuspendido Los resultados de difracción de rayos X en las muestras de material particulado re suspendido demuestran no solo el predominio de cuarzo, albita, yeso, y hematites en todos los casos; sino también las distintas mineralogías de las muestras. Las diferencias encontradas con el análisis de rayos X, dan cuenta de la presencia de calcita (CaCO3) en las fracciones menores a 6 µm en las muestras provenientes de la Greda. Así como también la existencia de Tenorita (CuO) y Cal (CaO) en fracciones inferiores a 10 µm. Por lo tanto los análisis de ICP-MS, concuerdan con los resultados de difracción de rayos X; ya que la presencia de tenorita en la estación más cercana a las fuentes de 127 contaminación ratifica la emisión de material particulado enriquecido con partículas que contienen cobre, lo cual es lógico ya que siendo este un mineral de CuO su presencia en sectores aledaños a la fundición de cobre se podría esperar, como parte del proceso de oxidación de minerales sulfurados utilizados en el proceso de producción de cobre (www.codelco.com), siendo ello una evidencia más que nos indica que el mecanismo de contaminación de Cu es mediante la depositación de material particulado. A la vez de acuerdo a los resultados de los análisis de difracción de rayos X, podemos verificar la presencia de Cal (CaO) en las fracciones más finas; esto concuerda exactamente con la hipótesis planteada anteriormente para explicar los altos niveles de calcio encontrados para las muestras de suelo (Tabla 10) como también el enriquecimiento reportado para el material resuspendido procedentes de la estación de monitoreo ambiental, la Greda (Figura 7), ya que el CaO es un producto del proceso de calcinación de la fuente contaminante y no de un proceso natural (Parker 2001; Goecke et al., 2011; Córdova et al., 2011). Los análisis de difracción de rayos X correspondientes a la estación los Maitenes mostraron no solo la presencia abundante de cuarzo y albita en todas las fracciones, sino también el predominio de minerales tales como la rectorita y caolinita lo cual puede deberse al origen de los suelos de esta zona. Por otra parte el reporte de los análisis de difracción de rayos X para las muestras de material particulado resuspendido procedente del sitio de referencia “Maitencillo” mostró diferencias en su composición mineralógica con respecto a la Greda en cuanto a la presencia de rutilo y montmorillonita en sus fracciones mayores a 10 µm lo que significa el aporte de Ti como parte fundamental de la corteza terrestre así como el tipo de suelos arcillosos presentes en éste lugar. 128 VI.3.3 Scanning electron microscope Los análisis de microscopia electrónica de barrido (SEM) realizados a las fracciones de material particulado re suspendido provenientes de los sitios la Greda y los Maitenes demuestran que en estos emplazamientos se encuentra un amplio conjunto de minerales donde las fases más comunes son los silicatos, sulfatos y diferentes óxidos; todos ellos presentes en las diversas fracciones. Mineralógicamente las fracciones inferiores a 10 µm incluyen la presencia de silicato de aluminio (Figura 24) con morfología esferoidal y partículas de cobre con forma alargada y ancha relacionada con la morfología de la tenorita (Figura 25); hecho que concuerda con la caracterización de aerosoles por SEM realizada por (Aragon et al., 2009). Figura 24. Imágenes de SEM de material particulado re suspendido donde se encuentran a. silicato de aluminio poroso (Estación los Maitenes). b. Silicato de aluminio con cenizas volantes (Estación la Greda). Figura 25. Imágenes de SEM donde se observan partículas de oxido de cobre identificadas en a. Fracción (1.5-3 µm); b. Fracción (3-6 µm); c. Fracción (6-12 µm); d. Fracción (>20 µm); Estaciones la Greda y los Maitenes). El análisis de las muestras de la Greda y los Maitenes, revelan la existencia de emisiones antropogénicas presentes en el material particulado re suspendido correspondientes a 2.5 µm (Figura 26), hecho que fue comparado con los análisis de ICP-MS (Tablas 12 y 15) 129 realizado a los elementos traza tanto de las muestras de suelo como de material particulado re suspendido y difracción de rayos X, encontrando óxidos de elementos tales como Cu, Zn, As, y Pb (Figura 27); los cuales no solo se encuentran en altas concentraciones sino que también se concentran en las fracciones más pequeñas (Moreno et al., 2006; Aragon et al., 2009) indicativo de un origen antropogénico más que natural, por lo que podemos afirmar que los suelos de ésta región se encuentran afectados por las emisiones de fuentes industriales existentes en el lugar como es el caso de la Fundición y refinería de cobre CODELCO, quien emiten aerosoles ricos en elementos trazadores contaminantes oxidados como producto del proceso de extracción a partir de minerales sulfurados, mediante el mecanismo de emisión de material particulado (Birmili et al., 2006; Lin et al., 2002). Figura 26. Imágenes de SEM de material particulado re suspendido PM 2.5 proveniente de la Estación los Maitenes donde se demuestra la existencia de cenizas volantes de forma esférica que determinan la presencia de contaminantes antropogénicos. 130 Figura 27. Espectro EDX de material particulado re suspendido (PM 2.5) proveniente de la Estación la Greda donde se muestra la presencia de óxidos de Pb, Zn, As, Cu y Ca. Los análisis de SEM realizados a las fracciones <3 µm correspondientes a las muestras del emplazamiento la Greda, también dieron cuenta del aporte de emisiones enriquecidas con trazadores contaminantes tales como Ni y Cr (Figura 28); las cuales podrían provenir de actividades tales como la quema de combustibles fósiles generada por la termoeléctrica presente en el lugar (AES Gener S.A) (Marrero et al., 2007; Vejahati et al., 2009). La presencia de dichos trazadores fue comparada con los análisis de ICP-MS realizado a las fracciones correspondientes (Tabla 15) donde se puede constatar que efectivamente dichos valores son más altos que los datos registrados para la estación los Maitenes. Figura 28.Espectro EDX de material particulado re suspendido <3µm correspondiente a la estación la Greda donde se muestra la presencia de trazadores contaminantes tales como Ni, Cr, As, Cu, Zn entre otros. 131 Así mismo los análisis de SEM realizados a las muestras de suelo, fueron comparados con los análisis de ICP-AES para elementos mayoritarios tanto de suelo como de material particulado re suspendido (Tabla 10 y 14), encontrando que en las fracciones mayores a 10 µm existen silicatos de titanio, hierro y aluminio, lo que nos indica un aporte crustal de dichos elementos en este lugar (Figura 29). Figura 29. Imagen de microscopia electrónica de barrido de material particulado re suspendido (PM 10) proveniente de la Estación la Greda donde se muestra la presencia de silicatos de Fe, Al, y Ti, y análisis por EDX. Por otra parte los análisis de ICP-AES (Tabla 14) realizados a las diferentes fracciones granulométricas correspondientes a las muestras provenientes de la Greda, los Maitenes y Maitencillo, demuestran que la mayor concentración de calcio se presenta en las fracciones más finas (<3 µm) de la Estación la Greda; datos que son comparables con los resultados obtenidos en los análisis de difracción de rayos X, con los cuales se revela la existencia del aporte de CaO en este emplazamiento (Figura 30). 132 Figura 30. Imagen de SEM donde se muestra una partícula de oxido de calcio encontrada en material particulado re suspendido procedente de la Estación la Greda. Como se observa en la Figura 31, es posible evidenciar el aporte de material particulado atmosférico, el cual se ve reflejado en la forma típica de cenizas volantes (partículas esféricas de origen antropogénico) (Font, 2008; Henderson et al., 2003; Ettler y Zdenek, 2003; Gregurek et al., 1998; Jambhulkar y Juwarkar, 2009), las cuales pueden ser emitidas principalmente por la combustión de combustibles fósiles (Marrero et al., 2007). Dichas cenizas están constituidas por esferas compactas de tamaño variable y algunas huecas, estas últimas reciben el nombre de cenosferas (Figura 31-d). Las cenósferas son ligeras, inertes, compuestas principalmente de aluminosilicatos, por otra parte también se pueden encontrar cenizas compactas irregulares vítreas (Figura 31 b y c) y con trozos esponjosos e irregulares (Figura 31-e y f), así como también cenizas de forma esférica más regular y con superficie rugosa (Figura 31-a), las cuales se caracterizan por sus altos contenidos de hierro (Font, 2008). 133 Figura 31. Imagen por SEM donde se muestra la forma típica de cenizas volantes encontradas en muestras de material particulado re suspendido proveniente de la Greda. 134 VI.3.4 Granulometría muestras de suelo del Valle de Puchuncaví De acuerdo a los análisis granulométricos realizados a las muestras de suelo (250 µm) del Valle de Puchuncaví (Figura 32), se puede constatar que en los emplazamientos correspondientes a la Greda y los Maitenes efectivamente existe un mayor % acumulado para PM 2.5 (3,7%) y (3,4%) respectivamente; lo que sugiere un mayor enriquecimiento antropogénico por la presencia de material particulado más fino en dichas zonas (Tabla 16). En cuanto al % acumulado para PM10 en la Greda este correspondió a valores por encima del 10% mientras que en la estación los Maitenes dicho valor fue de 8,7%. Por otra parte los análisis granulométricos realizados para las muestras de suelo de Valle Alegre muestran menor porcentaje acumulado de PM 2.5 (0.2%) y un porcentaje acumulado para PM10 correspondiente a 2,0%. Estos resultados fueron similares a los de la estación Puchuncaví donde se encontró un % acumulado para PM 2.5 de 0.3% mientras que para PM10 fue de 2,7%. Como se puede observar la granulometría de las muestras de suelo varía en función de la distancia de transporte. Los análisis granulométricos (Figura 32, Tabla 16) y la composición química de los elementos trazadores contaminantes (Tabla 15), reflejan que los emplazamientos más afectados posiblemente por la depositación de material particulado emitidos por las fuentes emisoras que se encuentran en la zona de Puchuncaví son la Greda y los Maitenes. Hecho que concuerda con los estudios realizados por (Medina et al., 2010; Font et al., 2005; Marrero et al., 2007); quienes analizaron mineralógica y químicamente diversas muestras contaminadas por fuentes antropogénicas, encontrando que las partículas más pequeñas reflejan la emisión de material particulado, siendo consideradas dichas partículas las más peligrosas para la salud. 135 Figura 32. Distribución del tamaño de partículas de muestras de suelos del Valle de Puchuncaví analizadas por difracción laser. (La línea verde indica el % acumulado y la línea azul indica el % en volumen). Tabla 16. Valores de % acumulado de PM 10 y PM 2.5 encontrados en los análisis granulométricos para muestras de suelo del Valle de Puchuncaví. Tamaño µm Greda Maitenes Valle Alegre Puchuncaví Maitencillo PM 2.5 3.7 3.4 0.2 0.3 0.1 PM 10 10.0 8.7 2.0 2.7 0.2 136 VI.4 Determinación de sulfatos y nitratos Otros de los productos generados por fuentes antropogénicas, son los precursores de la lluvia ácida, los cuales se determinan como sulfatos y nitratos. La determinación de dichos iones en las muestras de suelo analizadas se presenta en la tabla 17. Tabla 17. Determinación de la concentración de iones sulfatos y nitratos (mg kg -1) analizados por ICP-AES en muestras de suelo del Valle de Puchuncaví recolectadas en los años 2007-2009. Prom. 2007 Máx. Greda Maitenes Valle A. Puchuncaví 334 131 48 95 570 143 77 118 145 123 15.7 80 236 114 39 72 293 122.3 47 83 202 107 31 63 124 87 35 57 135 90 43 62.4 115 83 25 50 Maitencillo 15 16 14 16 16 15 17 20 16 249 156 29 287 260 44 224 111 17.8 106 132 25 139 142 35 83 114 20 73 119 49 128 136 84 40 106 19 56 9 109 10 12.6 9 36 12 78 13 14 11 66 8 202 9 15 6 mg kg -1 min Prom. 2008 Máx. min Prom. 2009 Máx. min Sulfatos Nitratos Greda Maitenes Valle A. Puchuncaví Maitencillo Los valores encontrados, demuestran que la mayor concentración tanto de SO42- (Figura 30), como de NO32- (Figuras 33-34), se presentaron en la estación la Greda con un máximo de 570 mg kg-1 de sulfatos y un máximo de 287 mg kg-1 de nitratos, así como también en Maitenes con un máximo de 143 mg kg-1 para sulfatos y 260 mg kg-1 para nitratos, hecho que disminuyó en el año 2009 en ambos casos, lo que puede significar una mayor contaminación producto de la lluvia ácida durante el año 2007, causada por las emisiones de S02 y de NOx, provenientes principalmente de fuentes industriales (Menz y Seip, 2004; Zhu et al., 2002; Cao et al., 2009; Calvo et al., 2010). 137 El incremento de SO2 en la estación más cercana a las fuentes contaminantes (Tabla 17), indica un mayor aporte de actividades provenientes de la fundición de cobre, lo cual se debe principalmente a la combustión de minerales sulfurados, lo cual es lógico ya que si comparamos dichos niveles de contaminación con las concentraciones de elementos mayoritarios y traza, y los análisis de DRX realizados a las muestras de suelo, podemos determinar que el Valle de Puchuncaví ha sido expuesto a emisiones de elementos traza tales como Cu, Zn, Mo, Pb, As, entre otros; que van acompañados por emisiones de SO2, procedentes de la Fundición de Cobre (González y Berqvist, 1986; Ginocchio, 2000; Ginocchio et al., 2004), las cuales posiblemente han sido mitigadas con métodos de desulfuración mediante el uso de óxido de calcio (Bill, 2010). Así mismo los análisis de variación espacial en las estaciones estudiadas, demuestran que la mayor emisión de dichos contaminantes se encuentra en las zonas cercanas a la fundición (Estación la Greda). Hecho que es comparable con otros estudios realizados en el Valle de Puchuncaví, donde se demuestra que los sitios más cercanos a la fundición de cobre constituyen la fuente más significativa de SO2 (Gallardo et al., 2000; García et al., 2001). Igualmente la emisión de SO2 en el Valle de Puchuncaví, ha sido atribuida al producto de las emisiones de la Fundición de Cobre del complejo industrial Ventanas, la cual tiene su mayor impacto en el área que abarca 15 km de radio (Ecocare, 1998). La contaminación antropogénica de suelos causada por fundiciones de cobre también ha sido reportada en numerosos estudios (Eatough et al., 1982; Newhook et al., 2003; Dudka y Adriano, 1997; Barcan et al., 1998; Farago et al., 1999; Lee et al., 2001; Liu et al., 2003; Krzaklewski et al., 2004; Voegelin et al., 2008); entre otros donde se ha determinado que la combustión de minerales sulfurados genera la emisión tanto de material particulado como de S02 principalmente. Respecto la estación los Maitenes, se puede observar (Figura 33-34) que los valores promedio de la concentración de SO42- y NO32- son menores respecto a la estación la 138 Greda, lo que supone que la emisión de dichos contaminantes disminuye con la distancia respecto de los emplazamientos emisores, lo cual es comparable con el comportamiento de los elementos traza presentes en las muestras de suelo, lo que podría significar que el origen tanto de los precursores de la lluvia ácida como de los elementos traza contaminantes es el mismo. Este hecho ha sido verificado en otros estudios donde la determinación de los precursores de la lluvia ácida ha proporcionado información relativa de las diferentes fuentes contaminantes así como de su dispersión de acuerdo a la distancia (Kulshrestha et al., 2003; Zhang et al., 2007) . Por otra parte la estación que presentó una menor concentración de sulfatos y de nitratos con relación a las demás estaciones de monitoreo ambiental, correspondió a la zona de Valle alegre (Figura 33-34), lo cual coincide con la influencia que puede tener la dirección de los vientos en esta región (Figura 8) ya que la dirección predominante de los mismos es ESE-NE respecto de las fuentes, mientras que la estación Valle alegre se encuentra ubicada en dirección SE de los emplazamientos contaminantes; hecho que puede contribuir a ser una de las zonas menos impactadas tanto por el aporte de SO42- como NO32- y elementos traza contaminantes emitidos por el material particulado, principalmente por la Fundición de cobre existente en el lugar. Lo que coincide con los estudios realizados por (Zhang et al., 2012) quienes realizaron un estudio relacionado con el análisis de los patrones de lluvia ácida en el noreste de China, encontrando que la dirección de los vientos y los precursores de la lluvia ácida tienen una fuerte influencia en la contaminación de los suelos. Los datos reportados en la tabla 17 para la estación más lejana a las fuentes de contaminación (Puchuncaví) muestran que en dicha zona la contaminación de sulfatos es mayor en las estaciones la Greda y los Maitenes, mientras que en comparación a la zona de Valle alegre esta es mayor, hecho que corrobora la incidencia de la dirección de los vientos (Figura 8) en los niveles de contaminación de los precursores de la lluvia ácida, por 139 otra parte existe niveles de contaminación en esta zona debido a la emisión de contaminantes que pueden llegar a esta distancia por la altura de la chimenea perteneciente a CODELCO Ventanas (150 metros) (CIMM, 2011). Figura 33. Concentración de sulfatos en muestras de suelo provenientes de las estaciones de monitoreo del Valle de Puchuncaví (2007-2009). Figura 34 . Concentración de nitratos en muestras de suelo provenientes de las estaciones de monitoreo del Valle de Puchuncaví (2007-2009). 140 De acuerdo a los datos de la tabla 17, se puede pensar que los suelos del Valle de Puchuncaví han sido afectados por emisión y precipitación de compuestos ácidos desde la atmósfera, en un fenómeno conocido como lluvia ácida (Schwarz et al., 1999), así como también por la deposición de elementos trazadores contaminantes procedentes de la fundición de cobre. Los procesos de fusión y conversión de concentrado de cobre que se llevan a cabo en CODELCO, generan emisiones gaseosas sulfuradas, las que arrastran elementos traza en forma de material particulado constituido por; Cu, As, Zn y Pb entre otros (ERM, 1993; Lagos y Ibañez, 1993; Universidad de Chile, 1999; Folchi, 2006). En el periodo de 1964 a 1990, la fundición no contó con sistemas para el control de estas emisiones, por lo que altas cantidades de material particulado y gases sulfurados fueron liberados al ambiente y se depositaron en un radio de 20 km en el Valle de Puchuncaví, lo que incrementó principalmente los contenidos de Cu, Zn, Pb y As en los suelos y disminuyó el pH desde 5,5 a 4,5 (Chiang, 1985b; Alfaro et al., 1998). Lo que confirma que la zona circundante al Complejo Industrial Ventanas se declaró saturada para anhídrido sulfuroso y material particulado respirable, según Decreto Supremo No 346/93. Sin embargo, si bien es cierto que las políticas de descontaminación posteriores a los años 90 han disminuido efectivamente los niveles de SO2 y material particulado, reflejados en nuestros resultados revelan que aun se manifiesta una evidente contaminación en el sector tanto de elementos traza como de precursores de lluvia ácida en el suelo superficial. 141 VI.5 Determinación de pH en el suelo En base a los elevados niveles de sulfatos y nitratos que se determinaron en las muestras de suelo de la localidad de Puchuncaví, se procedió a determinar la acidez de dichas muestras (Tabla 18). Tabla 18. Valores de pH para muestras de suelo del Valle de Puchuncaví (2007-2009). Máximo (máx.), Mínimo (min), Promedio. (prom.). Estaciones Greda Maitenes Valle alegre Puchuncaví Maitencillo pH 2007 2008 2009 prom. máx. min prom. máx. min prom. 6.16 6.88 5.68 5.53 5.61 5.41 6.38 6.03 6.22 5.87 5.22 5.26 5.17 6.35 5.02 5.22 4.83 4.86 4.98 4.72 6.44 máx. min prom. máx. 6.87 5.55 6.20 6.35 6.71 5.92 6.17 6.24 6.63 5.98 6.04 6.17 min 6.08 6.03 5.88 prom. 5.86 5.86 5.89 De acuerdo a los datos relacionados durante el año 2007 la estación más cercana a las fuentes de contaminación (La Greda) presentó los valores más altos de pH con un máximo de 6.88 y un mínimo de 5.68, mientras que los pH más ácidos fueron reportados en la zona de los Maitenes con un valor mínimo de 5.53 y un máximo de 5.61. De acuerdo a los valores de referencia (Maitencillo) la estación menos afectada por la lluvia ácida puede haber sido Valle alegre reportándose un valor promedio de 6.38. Durante el año 2008 los valores de pH no presentaron mayor variación respecto el año inmediatamente anterior, siendo la estación Los Maitenes la que presentó suelos más ácidos, mientras que los suelos más básicos correspondieron a la estación Puchuncaví y a la fuente más cercana a las fuentes de contaminación (La Greda). 142 El pH de los suelos en el año 2009 en las cercanías de las fuentes contaminantes (estación La Greda), presentan una mayor acidez con un mínimo de 4.83 lo cual puede deberse a la influencia de la lluvia ácida que puede estar afectando la contaminación de dichos suelos. Ahora bien, siendo el pH un indicador de las emisiones antropogénicas, éste también puede verse afectado por muchos factores ambientales como lo son las emisiones con fines neutralizantes (Migliavacca et al., 2005; Zhao y Gao, 2008; Calvo et al., 2010). Por lo que las variaciones de pH no esperadas en la estación la Greda sugieren posibles entradas de especies alcalinas las cuales se han precipitado al suelo. Este hecho puede deberse a la posible aplicación de CaO en la estación más cercana a las fuentes contaminantes con una mayor proporción durante los años 2007 y 2008 lo que permitió que hubiese aumentado el pH de los suelos y a la vez incrementado los niveles de calcio en la estación la Greda tal y como lo confirman los datos de la tablas 10 y 14 y más aun los análisis realizados por DRX con el cual se logró determinar la presencia de CaO en las fracciones granulométricas de las muestras de suelo, lo que indica que existe un aporte del mismo como medio desulfurante lo que conlleva a encontrar dicho pH en los suelos. Esta variación coincide con los estudios de (Muena et al., 2010) quienes investigaron el efecto del encalado sobre el desarrollo de los suelos del Valle de Puchuncaví afectados por la minería de cobre, concluyendo que la aplicación de cal a suelos ácidos aumenta el pH y con las investigaciones realizadas por (Lu et al., 2011), quienes analizaron muestras de agua lluvia encontrando valores de pH>6.0 en sitios impactados por actividades antropogénicas debido a la emisión de especies alcalinas (Cao et al., 2009). 143 VI.6 Niveles de elementos mayoritarios y traza en lixiviados de suelo Desde un punto de vista ambiental es de especial interés conocer los elementos solubles presentes en un suelo, por cuanto son estos lo que en general presentan una mayor disponibilidad para ingresar a las cadenas tróficas con efectos positivos o negativos dependiendo de la naturaleza y toxicidad de estos. En este estudio se determinaron los elementos solubles presentes en los suelos analizados de la localidad de Puchuncaví. VI.6.1 Niveles de elementos mayoritarios en lixiviados de suelo En la tabla 19 se presentan las concentraciones (mg kg-1) medias, máximas, mínimas y porcentajes de los elementos mayoritarios presentes en los lixiviados de la muestras de suelo recolectadas en las estaciones de monitoreo ambiental durante los años 2007 a 2009. De acuerdo a los resultados de los promedios y porcentajes obtenidos, la distribución de la concentración de Al, Fe, Ca, K, Na, Mg y Ti presentan la siguiente variación: Como se observa en las Figuras 35 y 36, durante los años 2007 y 2008 la mayor concentración en solución que se presentó en la estación la Greda correspondió a Ca, lo cual corrobora una vez más el aporte de CaO que puede estar siendo depositado cerca de las fuentes contaminantes. Por otra parte los bajos niveles de aluminio respecto a calcio pueden deberse a las diferencias de solubilidad de ambos hidróxidos en donde el hidróxido de calcio es uno de los hidróxidos más solubles que existen (Kps=5x10 -6) (Haynes, 2011). Durante el año 2009, como lo reportan los datos de la tabla 19 la concentración de calcio disminuyó en comparación con los años anteriores, mientras que los niveles de aluminio fueron superiores, lo cual puede deberse al menor aporte de CaO en éste año, hecho que se confirma a la vez con la disminución de pH en la estación la Greda. 144 Figura 35. Concentración de elementos mayoritarios en lixiviados de suelo (2007) (G: Greda, M: Maitenes, V: Valle alegre, P: Puchuncaví). Figura 36. Concentración de elementos mayoritarios en lixiviados de suelo (2008) (G: Greda, M: Maitenes, V: Valle alegre, P: Puchuncaví). Así mismo como se puede observar, la concentración de Al y Fe (Figura 37) fue mayor en la estación los Maitenes, lugar donde se presentó un valor menor de pH lo cual indica que la solubilidad de éstos elementos aumenta en suelos ácidos lo cual es a su vez consistente con los valores de solubilidad de cationes ácidos. 145 Figura 37. Concentración de elementos mayoritarios en lixiviados de suelo (2009) G: Greda, M: Maitenes, V: Valle alegre, P: Puchuncaví). En cuanto a la concentración de hierro soluble es posible que este se encuentre en alguna de sus formas hidroxiladas, mientras que las altas concentraciones de Fe presentes en el suelo (Tabla 10) son propias de óxidos y súlfuros de hierro, lo cual fue posible evidenciar con los análisis mineralógicos realizados, mientras que las altas concentraciones de aluminio en el suelo se deben a la presencia de aluminosilicatos. 146 Tabla 19. Concentraciones de elementos mayoritarios en lixiviados de suelo de los años 2007-2009 determinados por ICP-AES. Máximo (máx.), Mínimo (min), Promedio (prom.). G (Greda), M (Maitenes), V (Valle alegre), P (Puchuncaví), Ref. (Maitencillo). muestras -1 38.4 54.8 19.4 44.8 56.2 25.0 41.2 49.5 32.2 19.5 24.4 16.8 23.7 31.4 16.4 42.7 52.6 27.4 15.5 37.5 44.4 174.9 18.7 62.7 45.6 178.2 42.8 27.0 23.9 10.1 86.8 18.0 87.0 24.9 212.5 153.2 27.5 15.0 87.1 47.0 96.6 19.9 Prom. 67.1 76.6 39.8 67.1 54.8 66.8 25.4 máx. mín. 91.3 36.6 93.3 62.4 51.9 28.8 91.3 36.6 89.2 17.7 89.7 41.2 K Prom. máx. mín. 53.7 74.5 34.4 57.6 65.6 49.7 85.0 96.5 73.2 81.5 93.7 60.3 70.5 74.8 66.8 Mg Prom. 19.6 11.7 28.6 26.6 máx. mín. 27.7 15.2 14.8 9.5 39.3 23.0 Na Prom. máx. mín. 35.7 46.3 31.3 43.7 55.2 26.5 Ti Prom. máx. mín. 1.1 1.4 0.5 0.8 0.9 0.6 Fe 48.5 85.1 23.6 M 63.1 90.2 29.9 prom. 35.8 máx. mín. V P G 2007 M 53.2 66.3 33.0 Ca G 2008 M 51.8 68.9 42.7 Al mg kg prom. máx. mín. 2009 V P G V P 20.0 40.9 12.3 21.3 34.0 12.7 Ref. 8.5 10.4 7.4 27.3 66.4 55.5 24.2 220.4 144.5 31.8 22.5 78.2 56.5 81.0 24.8 31.4 20.5 27.8 45.3 61.1 21.7 27.1 12.7 35.6 17.6 44.0 19.3 63.3 36.1 73.8 47.4 34.1 10.6 33.2 20.0 13.8 11.6 56.7 69.3 46.4 115.1 129.2 108.1 78.8 92.1 51.2 62.3 87.3 47.4 58.7 66.7 45.1 120.7 136.1 108.8 77.1 94.0 68.5 53.6 56.0 49.9 22.6 15.2 52.3 22.9 26.6 15.5 53.9 29.8 9.6 39.9 15.1 25.6 20.1 16.7 11.8 61.9 40.5 25.0 19.1 47.3 15.3 21.7 11.1 69.2 40.4 44.8 16.2 11.8 8.3 52.1 62.8 31.5 57.4 63.0 53.2 66.5 84.0 53.7 29.2 33.3 25.1 50.3 59.0 34.8 77.3 89.6 61.7 75.5 92.0 63.9 22.2 31.2 16.9 55.6 67.9 46.7 72.1 79.4 60.6 24.4 30.9 19.9 0.3 0.4 0.3 0.1 0.2 0.1 0.5 0.9 0.2 0.8 1.0 0.6 0.3 0.3 0.2 0.2 0.4 0.1 0.5 0.8 0.3 0.6 0.9 0.4 0.4 0.5 0.3 0.2 0.3 0.1 0.8 0.9 0.7 147 VI.6.2 Niveles de elementos traza en lixiviados de suelo En la tabla 20 se presentan las concentraciones (mg kg -1) medias, máximas y mínimas de algunos elementos traza presentes en los lixiviados de la muestras de suelo recolectadas en las estaciones de monitoreo ambiental durante los años 2007 a 2009. Tabla 20. Concentraciones de elementos traza en lixiviados de suelo de los años 2007-2009, determinados por ICP-MS. Máximo (max.), Mínimo (min.), Promedio (prom.). (G: Greda; M: Maitenes, V: Valle Alegre; P: Puchuncaví; Ref: Maitencillo). muestras 2009 2008 2007 -1 G M V P G M V P G M V P Ref. Cu prom. máx. min. 9.10 14.25 4.30 8.27 13.67 3.79 1.76 4.51 0.70 3.43 5.06 1.94 10.59 18.22 4.10 8.16 14.59 3.08 0.86 1.16 0.60 2.84 4.17 0.71 11.78 15.85 8.00 11.34 14.96 7.65 5.44 6.92 2.64 7.55 15.96 0.51 0.39 0.40 0.38 Zn prom. máx. min. 1.38 2.29 0.47 0.87 1.18 0.71 0.24 0.34 0.08 0.28 0.33 0.17 0.63 1.35 0.07 0.78 1.11 0.41 0.22 0.52 0.01 0.32 0.47 0.08 0.86 1.41 0.39 0.89 1.45 0.42 0.63 1.35 0.07 0.57 0.97 0.16 0.44 0.25 0.11 As prom. 0.94 0.94 0.14 0.66 1.02 1.33 0.07 0.78 1.02 1.12 0.35 0.38 0.04 máx. min. 1.47 0.40 1.35 0.41 0.41 0.04 1.66 0.10 1.98 0.56 1.98 0.56 0.08 0.04 2.53 0.03 1.27 0.88 1.27 1.00 0.58 0.10 0.50 0.22 0.05 0.04 prom. 0.08 0.14 0.01 0.04 0.07 0.14 0.05 0.05 0.16 0.46 0.07 0.08 0.01 máx. min. 0.16 0.03 0.33 0.02 0.01 0.01 0.09 0.01 0.13 0.03 0.25 0.07 0.05 0.04 0.11 0.01 0.22 0.10 1.10 0.14 0.14 0.01 0.20 0.03 0.01 0.01 prom. máx. min. 0.81 1.46 0.12 0.50 0.72 0.28 0.14 0.38 0.04 0.14 0.25 0.08 0.44 0.81 0.09 0.43 0.57 0.29 0.04 0.08 0.02 0.13 0.24 0.06 0.49 0.74 0.28 0.39 0.57 0.29 0.23 0.34 0.14 0.20 0.41 0.01 0.07 0.08 0.06 mg kg Mo Pb 148 Según los datos de la tabla 20 la movilidad de los elementos traza es muy baja, quedando acumulados éstos en los primeros centímetros del suelo, siendo lixiviados posiblemente a los horizontes sub superficiales en muy pequeñas cantidades. Razón por la cual la presencia de altas concentraciones en el horizonte superficial, es un buen criterio de diagnóstico de contaminación antrópica (Corinne et al., 2007). Los resultados para el año 2007 y 2008, muestran una mayor concentración de los elementos traza Cu, Mo, Zn, As y Pb en la estación la Greda así como en la estación los Maitenes (Figuras 38 y 39); lo que sugiere un mayor aporte de contaminantes asociados a la fundición de cobre. Este hecho sugiere que la mayoría del cobre estaría principalmente bajo su forma oxidada más que sulfurada ya que esta última presenta solubilidades muy baja de acuerdo a su valor de Kps de 6x10-37 a diferencia del valor de Kps para CuO el cual es 2.2x10-20 no sólo varios órdenes de magnitud mayor sino que además con una dependencia del pH mucho mayor. Figura 38. Concentración de elementos traza en lixiviados de suelo (2007) (G: Greda; M: Maitenes; V: Valle Alegre; P: Puchuncaví). 149 Figura 39. Concentración de elementos traza en lixiviados de suelo (2008) (G: Greda; M: Maitenes; V: Valle Alegre; P: Puchuncaví). Durante el año 2009, los elementos traza que presentaron mayor concentración en los lixiviados analizados, correspondientes a la estación la Greda y Maitenes fueron Cu, Zn, As y Pb, hecho que evidencia que a pesar de que el nivel de emisiones disminuyó en dicho año, estos elementos traza presentan una mayor movilidad (Figura 40). Figura 40. Concentración de elementos traza en lixiviados de suelo (2009) (G: Greda; M: Maitenes; V: Valle Alegre; P: Puchuncaví). 150 Así, de acuerdo a los análisis realizados el elemento traza que presentó mayor concentración en los lixiviados de suelo durante los años 2007 a 2009 fue el cobre, presente en las estaciones la Greda con un máximo de 18.2 mg kg-1 en el año 2008 y en los Maitenes con un máximo de 15.0 mg kg-1 durante el año 2007. Sin embargo, los datos reportados demuestran que las concentraciones de Cu (mg kg-1) en los lixiviados analizados en todas las estaciones es baja con relación a las concentraciones reportadas de cobre en las muestras de suelo (Tabla 12), lo cual puede deberse a la poca cantidad de materia orgánica presente en dichas muestras, ya que se sabe que los ligandos orgánicos solubles pueden aumentar la movilidad de cobre en los suelos (Martínez et al., 1999; Ruttens et al., 2006). De tal forma que el cobre soluble presente en las muestras de lixiviado correspondería posiblemente a sales inorgánicas o complejos orgánicos de bajo peso molecular (Shorrocks y Alloway, 1986; Bourg, 1995, Kabata y Pandias, 1999; Sauvé et al., 2000), mientras que las altas concentraciones de cobre insoluble presentes en el suelo corresponderían a súlfuros tales como (Cu2S), (FeCuS2), (FeCuS2), (CuS), así como también a CuO, lo cual se ha evidenciado en los análisis mineralógicos realizados. Por otra parte al comparar la concentración reportada para Cu en los lixiviados analizados se puede observar que durante los años 2007 a 2009 (Figuras 38-40) en las estaciones que reflejaron un menor pH (Greda y Maitenes) se presentó una mayor concentración de cobre, debido a que la solubilidad de la mayoría de los metales en este caso del cobre aumenta al disminuir el pH del suelo, por lo tanto es lógico pensar que el mayor contenido de cobre en el suelo se encuentra como óxidos los cuales son más solubles en medio ácido que los súlfuros (Bourg, 1995; Ginocchio et al., 2002). Por tanto el pH del suelo además de grado de solubilidad es un factor determinante en el contenido de cobre presente en los lixiviados; hecho que se evidencia en los estudios de (Neaman et al., 2009) quienes estudiaron los suelos expuestos a las emisiones de la Fundición de cobre Ventanas en el 151 centro de Chile encontrando suelos (capa superficial) con concentraciones de 310-640 mg kg-1 con valores de pH entre 4.6-5.5 y en contraste valores de pH en rangos de 6.4-7.2 en suelos con concentraciones de 30-60 mg kg-1, por lo que los autores consideran que la solubilidad de los metales es el principal factor que afecta la movilidad de los mismos en suelos contaminados (McGowen y Basta, 2001; Carrillo et al., 2006). En cuanto a los niveles de plomo presente en las muestras de lixiviado, se puede observar que la mayor concentración del mismo durante los años 2007 y 2009 (Figura 38-39) se presentó en las estaciones Greda y Maitenes, lugares en los cuales se registró el menor valor de pH, hecho que verifica el efecto que tiene dicho parámetro sobre la solubilidad del mismo en los suelos (Sauvé et al., 1997; Badawy et al., 2002). Sin embargo al comparar las concentraciones de plomo reportadas en los lixiviados con los datos de las muestras de suelo, evidentemente estas últimas son superiores a las de los lixiviados por lo que se puede esperar que el plomo se encuentre en los lixiviados como nitratos, cloratos y/o acetatos, mientras que las mayores concentraciones en el suelo se puede encontrar en forma de compuesto insoluble [Pb(OH)2, PbCO3, PbS, PbO, PbSO4], donde la especie predominante dependerá del pH, hecho que fue posible evidenciar con los análisis mineralógicos realizados donde se logró identificar la presencia de súlfuros y óxidos de plomo. Dicha dependencia es comparable con investigaciones realizados por (Corinne et al., 2007), quienes realizaron un estudio sobre el control de la solubilidad de Pb en suelos contaminados y el efecto del pH, encontrando un promedio máximo de 8.5 – 9.5 mg l-1 de Pb en las soluciones que registraron un pH~4.5 y concentraciones menores a <0.5 mg l-1 para soluciones con pH~7.0, debido a una mayor solubilidad del plomo al disminuir el pH (Harter, 1983; Adriano, 2001a; Basta y Tabatabai, 1992), considerando por tanto que la 152 solubilidad de los metales es principal factor que afecta la movilidad de los mismos en los suelos contaminados (McGowen y Basta, 2001; Carrillo et al., 2006). Igualmente las concentraciones de zinc presentes en los lixiviados durante los años 2007 a 2009, presentaron los mayores promedios en las estaciones los Maitenes (Dato de pH más bajo) y la Greda (sitio más cercano a las fuentes de contaminación). Dichos valores, sin embargo son bajos en relación a las concentraciones de zinc reportadas en las muestras de suelo (Tabla 12), por lo que se puede esperar que el contenido de zinc en los lixiviados sea producto de la formación de complejos con los ácidos fúlvicos que son solubles en agua (lixiviado) (Kiekens, 1995), así como por la formación de sales solubles (Muñiz y Arozarena, 1988). Mientras que las altas concentraciones de zinc presentes en los suelos se deben a la presencia principalmente de óxidos y súlfuros de zinc, lo cual fue posible evidenciar con los análisis mineralógicos realizados en las muestras de suelo. Los niveles de concentración de arsénico en las muestras de lixiviado de suelo analizado (Tabla 20), puede sugerir que la mayor concentración de arsénico en los suelos se encuentre principalmente como óxidos y/o súlfuros; lo cual concuerda con los estudios realizados por (Ávila et al., 2007), quienes evaluaron la toxicidad de cobre y arsénico en suelos agrícolas en inmediaciones de áreas mineras en la cuenca del río Aconcagua (Chile), encontrando arsénico en forma de súlfuros de cobre (Cu3AsS4) (Neill, 1995) y óxidos de hierro (FeAsO4.2H2O) (McBride et al., 1997; Adriano, 2001b); siendo éstas las formas que tienen baja solubilidad, además de reportar concentraciones de 2.1 µg kg -1 y valores de hasta 34 mg kg-1 en arsénico total lo cual sería comparable con las bajas cantidades de arsénico reportado en las muestras de lixiviado. Igualmente este hecho lo evidencia los estudios realizados por (García et al., 2010), quienes investigaron la distribución y movilidad de arsénico en suelos de áreas contaminadas de la Provincia de Salamanca (España) reportando concentraciones de 153 arsénico entre 0.004 y 0.107 mg kg-1 en lixiviados de suelo, las cuales son similares a las reportadas en nuestro estudio. Por otras parte debido a la eventual adición de CaO es posible que en los suelos donde aumentó el pH (Estación la Greda) se encuentre presente como arseniatos de calcio Ca3(AsO4)2 (Smith et al., 1999). 154 VI.7 Contribución de fuentes VI.7.1 Factor de enriquecimiento (EF) Como una primera determinación del alcance de la contribución de las emisiones antropogénicas por las concentraciones de elementos mayoritarios y traza, se ha calculado el EF, utilizando Al como elemento de referencia. Para el cálculo del EF se utilizó la ecuación de Buat- Menard y Cherselet 1979 que más tarde fue modificada por (Loska et al., 2004) (Ecuación 4). Los valores obtenidos se muestran en la tabla 21, donde el promedio del EF para cada una de las estaciones considera los valores >2 como elementos de origen antropogénico enriquecidos moderadamente y con valores de EF>5 a los elementos de origen antropogénico enriquecidos significativamente. Los datos de la Tabla 21 muestran que los elementos enriquecidos significativamente por emisiones de carácter antropogénico incluyen Ca, Zn, As, Mo, Sb, Pb y Hg, mientras que Cu presenta un extremado enriquecimiento antropogénico en la zona de estudio (EF>40), lo que concuerda con el ambiente industrializado en el área de estudio. De acuerdo a la variación temporal en el año 2007 (Tabla 21), las estaciones de monitoreo que se vieron más afectadas por las emisiones de carácter antropogénico (EF>5) fueron la Greda y los Maitenes, donde los suelos se vieron enriquecidos con elementos trazadores contaminantes tales como; Ca, Cu, Zn, As, Mo, Cd, Sb, Pb y Hg; mientras que en las estaciones Valle Alegre y Puchuncaví el elemento que presentó un EF >5 fue únicamente Cu y el Mo en Puchuncaví. Como se observa en la tabla 21, para el año 2008, los elementos que presentaron EF>5 en las estaciones la Greda y los Maitenes fueron Cu, As, Mo, Ca, Pb y Hg en la Greda. En la estación Valle Alegre el elemento que presentó un mayor enriquecimiento fue Cu, (EF <5: 155 enriquecimiento moderado) mientras que en la estación más lejana a las fuentes de contaminación (Puchuncaví) se observó un EF > 5 para Cu, Mo y Sb. Aunque para el año 2009 los valores de EF (Tabla 21) son menores que en los años anteriores, la estación la Greda presenta un enriquecimiento significativo (EF ~5-20) para Cu, Mo, y Hg. Igualmente en la estación los Maitenes los elementos con EF>5 fueron Cu, Mo, Sb y Pb y en las estaciones más alejadas de la fuente de contaminación (Valle Alegre y Puchuncaví) el enriquecimiento significativo correspondió a Cu y Mo respectivamente. De acuerdo a la variabilidad espacial las estaciones la Greda y los Maitenes en el año 2007, se vieron afectadas antropogénicamente (EF>5) por los mismos elementos que presentaron enriquecimiento de acuerdo a su variabilidad temporal. Por lo tanto el EF para el Cu demostró que existe extrema abundancia antropogénica para este elemento en la estación la Greda, lo cual se debe a la existencia de una fuente de contaminación antropogénica, tal como se ha demostrado en estudios previos (González y Ite, 1992; Ginocchio, 2000; Ginocchio et al., 2002; Ginocchio et al., 2002b; De Gregori et al., 2003; Neaman et al., 2009; Achiardi, 1991), donde se concluye que el incremento en el contenido de cobre se debe a las actividades de la fundición realizadas en el Valle de Puchuncaví. La estación de monitoreo Puchuncaví aún siendo la más lejana se vio afectada por emisiones antropogénicas de elementos trazadores contaminantes tales como Cu, Mo, y Sb, especialmente durante los años 2008 y 2009. Por otra parte los datos de la Tabla 21 muestran que una de las zonas menos afectada fue el sector de Valle Alegre lo que se puede interpretar como una influencia de la dirección de los vientos, ya que la dirección principalmente dominante corresponde a NE para la Greda, E para Maitenes, NE para Valle Alegre y NNE en Puchuncaví. Por lo que las partículas de material particulado provenientes de las fuentes de contaminación son 156 arrastradas en dirección NNE, es decir en dirección a la estación de monitoreo ambiental de Puchuncaví (Figura 7-8). Como se observa el EF disminuye desde el año 2007 al 2009 en los emplazamientos de estudio en el caso de Ca, Cu, Zn, As, Mo, Cd, Se y Pb. Así mismo se aprecia un alto enriquecimiento de Ca en la estación la Greda en 2007 y 2008 con una drástica disminución en el 2009. Tabla 21. Factor de enriquecimiento promedio para las muestras de suelo del Valle de Puchuncaví. 2007 2008 2009 Greda Maitenes Valle Puchun. Greda Maitenes Valle Al Ca Fe K Mg Na Ti Mn Sr 1.4 16.2 0.8 1.1 1.0 0.9 1.3 1.0 2.9 1.3 0.8 0.9 1.4 0.7 1.1 1.5 0.8 0.9 1.2 0.9 1.0 1.1 0.7 1.0 1.3 1.1 0.9 1.4 0.8 0.7 1.1 0.5 1.1 1.3 0.8 0.9 1.4 19.3 0.8 1.1 1.1 1.0 1.4 1.1 3.5 1.1 0.8 0.9 1.3 0.7 1.1 1.7 0.8 0.9 1.1 0.8 1.0 1.3 0.9 1.1 1.6 1.3 0.7 Sc V Cr Co Ni Cu Zn Ga Ge As 0.6 1.0 1.5 1.2 2.7 140.4 5.6 0.9 1.2 8.3 0.7 1.2 1.0 0.8 1.1 32.3 2.0 1.0 2.1 5.5 0.9 1.2 1.1 1.0 1.0 9.1 1.1 1.0 1.5 2.2 0.7 1.0 1.4 0.9 1.0 12.6 1.4 0.9 1.6 2.5 0.7 1.2 1.2 1.1 2.5 93.2 4.0 0.9 2.4 5.2 0.9 1.3 1.0 0.9 1.1 23.1 1.5 1.0 2.1 5.8 Se Mo Cd Sn Sb La Gd Pb Hg 4.0 22.1 7.8 4.8 11.2 1.0 1.0 14.1 13.0 2.0 6.7 3.0 4.4 5.0 0.9 0.9 6.9 6.4 1.4 3.8 1.8 1.8 1.9 1.0 1.1 3.2 1.2 2.0 6.4 2.1 1.9 1.8 0.9 1.0 3.9 2.6 4.2 8.3 4.3 3.8 4.4 1.0 1.0 6.6 10.0 2.1 6.6 2.3 3.3 4.0 0.9 0.9 5.0 3.8 Puchun. Greda Maitenes Valle Puchun. 1.4 0.7 0.8 1.0 0.7 1.0 0.9 1.0 0.7 1.5 0.9 0.7 1.0 0.6 0.9 1.1 0.7 0.8 1.1 0.7 0.9 1.2 0.6 1.0 1.2 0.8 0.9 1.0 0.8 1.0 1.2 0.9 1.1 1.9 1.2 0.8 1.4 0.6 0.7 1.0 0.4 1.0 1.3 0.8 0.7 1.2 1.5 1.1 1.4 1.0 3.1 1.0 1.0 1.4 0.7 0.8 0.8 0.8 0.9 0.7 8.0 0.9 0.9 1.9 1.8 0.8 0.9 0.8 0.8 1.0 25.1 1.9 0.9 1.2 3.8 0.8 1.1 1.0 0.9 1.0 20.9 1.5 0.9 1.6 4.7 1.1 1.7 1.1 1.4 1.0 5.6 1.1 1.0 1.6 1.5 0.8 1.0 1.3 1.0 1.0 12.2 1.2 0.9 1.7 3.2 1.2 0.4 0.1 2.1 2.1 1.3 1.5 1.0 1.1 1.4 5.2 0.1 3.1 5.5 1.0 0.9 2.5 1.1 2.6 7.4 1.4 1.8 3.0 0.8 0.9 3.5 15.0 2.1 5.4 1.2 3.5 5.7 0.9 0.9 5.3 3.4 1.8 1.1 0.7 2.6 2.6 1.3 1.4 1.8 1.1 1.5 5.0 1.1 3.0 4.3 1.0 1.0 3.6 3.4 157 VI.7.2 Análisis de Componentes Principales (PCA) La identificación de fuentes por medio de PCA como herramienta de reconocimiento de patrones multivariados (Thurston y Spengler, 1985), se aplicó a las concentraciones de elementos mayoritarios y traza de 57 muestras (analizadas por triplicado) de suelo recolectadas en las estaciones de monitoreo ambiental del Valle de Puchuncaví usando el software IBM SPSS Statistics 19. Los componentes fueron rotados utilizando una rotación varimax normalizada. Los resultados indican que la utilización de PCA como modelo receptor permite identificar 2 factores capaces de explicar satisfactoriamente el 74% de la varianza de los datos de la matriz, lo cual es un indicativo de la buena representatividad del análisis. Cada uno de los factores viene definido por uno o varios trazadores, que presentan una carga o factor loading próximo a uno, por lo que se ha considerado en los resultados solo las variables que presentan un factor loading superior a 0.70. La aplicación de PCA a las matrices de datos y los factores loading asociados a cada uno de los componentes químicos presentes en la muestras de suelo se presentan en la tabla 22, donde el primer componente (PC1), incluye los elementos Al, Fe, Ca, K, Na, Ti, Sr, Sc, V, Co, Ga, y Gd; siendo atribuido este a un origen crustal. Esta componente explica el mayor porcentaje de varianza de los datos (46%) (Figura 41). El origen de éste factor se asemeja igualmente a los estudios realizados por (Alleman et al., 2010; Guvenç et al., 2003; Rastmanesh et al., 2011) entre otros, quienes encontraron en la identificación de fuentes por PCA un componente que atribuye dichos elementos al enriquecimiento de la corteza terrestre. 158 Aunque la presencia principalmente de V y Co en material particulado atmosférico puede ser indicativo de trazadores de la combustión del carbón (Goodarzi et al., 2006; Rudd et al., 1997; Meij y Winkel, 2007; Bhangare et al., 2011; Godoy et al., 2005;Querol et al., 1996; Medina et al., 2010; Ondov et al., 1989), en este estudio han sido relacionados dichos elementos con el enriquecimiento de la corteza terrestre, ya que los datos de EF muestran deficiencia o mínimo de enriquecimiento (EF <2) por dichos elementos traza. La contribución antropogénica de elementos traza en el suelo se representa por PC2 (Tabla 22) (Figura 41). Este componente explica la presencia de emisiones de la fundición de cobre y muestra que los elementos Cu, Zn, As, Se, Mo, Sn, Sb y Pb, se encuentran asociados. Es importante también el valor de SO42- en dicha componente, debido a que el SO2 es producido principalmente por la oxidación de minerales sulfurados tales como CuFeS2, en el proceso de fundición de cobre. Esta componente explica el 28% de la varianza de los datos. Así mismo la contribución positiva de calcio en PC2 (Tabla 22) es un indicativo de que no solo el calcio presenta un aporte crustal sino también antropogénico.Por otra parte como se observa en la figura 41; aunque el factor loading para mercurio es inferior a 0.70 (Tabla 22), su valor es positivo en PC2 y de hecho este mismo elemento traza coincide con el EF calculado para la estación la Greda donde evidentemente existe emisión de mercurio, siendo por tanto éste contaminante traza eliminado como producto de la combustión del carbón que se lleva a cabo por parte de la termoeléctrica ubicada en el emplazamiento de estudio. Dicha componente coincide con los estudios realizados por (Fernández et al., 2010), quienes evaluaron los niveles de composición química de PM10 y PM2.5 en la zona de Huelva (España) para evaluar el impacto de emisiones de una fundición de cobre, donde por medio de análisis de componentes principales se explicó la correlación de la 159 componente formada por As, Pb, Cd, Cu, Zn y Bi con las emisiones de la fundición de cobre. Igualmente los resultados obtenidos coinciden con los estudios realizados por (Rastmanesh et al., 2011), quienes estudiaron muestras de suelo de Irán contaminadas por emisiones de una fundición de cobre, encontrando por análisis de componentes principales que este factor antropogénico es explicado por la presencia de As, Cu, Mo, Zn, Cd, S y Pb. Este factor antropogénico ha sido igualmente determinado en otros estudios de contribución de fuentes de contaminantes inorgánicos del suelo (Zhang et al., 2008; Pope et al., 2005; Çubukçu y Tüysüz, 2006). Los resultados obtenidos para este factor coinciden con los valores de EF (Tabla 21) donde se observa que los elementos Cu, Zn, As, Se, Mo, Cd, Sn, Sb, Pb presentan un EF>5, lo que corrobora su enriquecimiento antropogénico, como producto de las emisiones provenientes de la fundición de cobre. Figura 41. Representación gráfica de los Loading encontrados en el Análisis de Componentes Principales (PC1- PC2) para las muestras de suelo del Valle de Puchuncaví. 160 Tabla 22. Factores identificados en muestras de suelo del Valle de Puchuncaví, mediante PCA mostrando los factores loading asociados a cada componente químico para cada uno de los factores y el porcentaje de varianza de las muestras que explica cada uno de los factores obtenidos. Matriz de componentes rotados Componente Al Ca PC-1 .916 -.855 PC-2 .023 .301 Fe K .865 .885 -.086 .026 Mg Na .517 .917 -.138 -.127 Ti Mn Sr Sc V Cr Co Ni Cu Zn .761 .663 -.753 .896 .804 .522 .771 .679 -.555 -.240 .003 -.318 .166 -.201 -.077 .068 -.147 -.140 .762 .810 Ga Ger As Se Mo Cd Sn Sb Gd Pb .958 .602 -.020 .039 -.348 -.499 .169 -.104 .844 -.210 -.034 .348 .908 .750 .857 .647 .748 .774 -.265 .914 Li NO3 S04 Hg .431 -.493 .408 -.022 .577 .241 -.685 .400 46 28 % varianza 161 VI.7.3 Possitive Matrix Factor (PMF) Tal y como se expuso en el capitulo anterior, para la identificación y contribución de fuentes que afectaron los suelos del Valle de Puchuncaví se utilizó el modelo estadístico Possitive Matrix Factorization (PMF). Para la aplicación del modelo PMF se consideró que las estaciones de la Greda, Maitenes, Valle Alegre y Puchuncaví están afectadas por los mismos procesos de contaminación, tanto regional como a larga distancia. Para el análisis de PMF 3.0 realizado hemos calculado el valor de Q de acuerdo a la ecuación 6, encontrando una interpretación razonable de los datos para tres factores que contribuyen a la contaminación del suelo del Valle de Puchuncaví, los cuales corresponden a un factor crustal y dos factores antropogénicos de origen industrial. Los valores estimados para las estimaciones de error se ha especificando aplicando la fórmula propuesta por (Anttila et al., 1995) para cada dato de los elementos de la matriz Xij (Ecuación 5), donde la incertidumbre Sij, se determinó de acuerdo a los parámetros anteriormente indicados (Ecuación 8), considerando como valores de incertidumbre relativa (dj) un coeficiente estimado de 0.10 para elementos mayoritarios y 0.05 para elementos traza), lo que podría representar cualquier otra fuente adicional de incertidumbre. Los valores de Sij presentados (Tabla 23) han sido analizados en PMF3 demostrando buenos resultados en la obtención del valor Q (Ecuación 6) (Vaccaro et al., 2007). La estimación de la incertidumbre proporciona un criterio para separar las especies que mantienen una señal significativa. Este criterio se basa en la relación señal/ruido S/Nj, coeficiente definido por (Paatero y Hopke, 2003). Para nuestro análisis, las especies con S/N<2 son generalmente definidas como variables débiles y por lo tanto no se han tenido en cuenta siendo utilizado el % de datos por encima del límite de detección como criterio complementario (Amato et al., 2009). 162 Por lo tanto, la combinación de dichos criterios nos ha permitido seleccionar 27 variables fuertes de 61 variables analizadas, las cuales fueron elegidas en base a la relación señal/ruido (Paatero y Hopke, 2003), el porcentaje de valores por encima del límite de detección y al tamaño de los datos según el requerimiento del programa PMF 3. 163 Tabla 23. Valores de Incertidumbre Sij para variables analizadas por el modelo PMF3, en las muestras de suelo del Valle de Puchuncaví. G07, G08 y G09 (Muestras recolectadas en la estación la Greda durante los años 2007 a 2009); M07, M08 y M09 (Muestras recolectadas en la estación los Maitenes durante los años 2007 a 2009); V07, V08 y V09 (Muestras recolectadas en la estación Valle Alegre durante los años 2007 a 2009); P07, P08 y P09 (Muestras recolectadas en la estación Puchuncaví durante los años 2007 a 2009). Sij G07 M07 V07 P07 G08 M08 V08 Al Ca Fe K Mg Na Ti Mn Sr Sc V Cr Co Ni Cu Zn Ga Ge As Se Mo Sn Sb Gd Pb Li S04 4621 4704 3861 13512 13777 17567 2340 2262 2000 981 897 668 403 372 394 1449 1273 841 301 271 244 20.8 21.0 20.7 25.8 24.7 26.9 0.3 0.3 0.2 3.5 3.3 3.1 1.0 1.5 1.2 0.4 0.4 0.4 0.5 0.8 0.8 135.9 149.3 222.4 18.1 21.2 29.3 0.5 0.4 0.4 0.1 0.1 0.0 2.3 2.7 5.1 0.1 0.1 0.1 0.4 0.6 0.9 0.1 0.2 0.2 0.4 0.4 0.8 0.1 0.1 0.1 6.6 8.2 15.1 0.6 0.6 0.6 7.3 28.5 16.3 2609 7284 7052 6865 20956 1427 1507 1538 1437 4092 4194 4115 511 1595 1708 1687 331 462 461 442 709 2176 2321 2337 152 496 504 549 20.7 29.0 32.9 34.2 24.2 15.3 15.7 15.0 0.1 0.4 0.5 0.5 2.1 5.9 6.3 6.6 0.8 1.4 1.5 1.3 0.3 0.5 0.5 0.5 0.5 0.6 0.5 0.5 154.4 108.8 86.3 74.2 12.7 15.7 14.3 15.8 0.3 0.7 0.8 0.7 0.0 0.1 0.1 0.1 2.1 5.4 4.8 2.7 0.0 0.1 0.1 0.1 0.4 0.5 0.3 0.4 0.1 0.4 0.3 0.2 0.2 0.7 0.2 0.4 0.1 0.2 0.2 0.2 4.8 11.2 8.8 6.7 0.3 1.1 1.1 0.9 14.6 7.1 6.6 6.3 6609 7558 6846 6867 1573 2722 1432 1389 3930 7426 3642 3629 1667 1359 1299 1312 453 934 361 376 2374 2337 1915 1806 481 256 472 391 28.2 32.9 33.5 36.7 15.9 20.2 13.7 13.2 0.4 0.7 0.5 0.5 5.8 5.9 6.0 5.3 1.1 1.8 1.3 1.3 0.4 0.7 0.5 0.5 0.3 0.6 0.4 0.4 19.6 18.3 22.6 34.6 7.0 7.3 7.1 9.9 0.7 0.9 0.7 0.7 0.1 0.1 0.1 0.1 2.0 0.7 2.3 2.1 0.1 0.1 0.0 0.1 0.1 0.2 0.2 0.2 0.1 0.1 0.2 0.1 0.2 0.2 0.3 0.1 0.2 0.3 0.2 0.2 4.2 1.4 4.1 7.0 0.8 1.0 0.7 0.7 6.2 3.8 2.5 2.5 6653 6958 6424 6131 1594 1649 1388 1352 4377 3310 3172 3125 1203 1317 1369 1206 262 348 234 284 1841 2027 2178 1958 610 518 583 113 47.3 33.1 28.2 32.5 13.8 14.1 13.4 12.4 0.6 0.5 0.5 0.4 7.6 5.4 5.7 2.8 1.6 1.6 1.7 1.6 0.5 0.5 0.4 0.5 0.3 0.4 0.3 0.4 5.3 11.6 17.2 46.6 5.1 8.7 5.9 9.7 0.7 0.7 0.7 0.6 0.1 0.1 0.1 0.1 0.8 0.7 1.8 2.6 0.1 0.1 0.1 0.1 0.2 0.1 0.1 0.1 0.1 0.1 0.1 0.1 0.2 0.1 0.2 0.2 0.2 0.2 0.2 0.2 1.4 2.0 2.8 7.2 0.6 0.7 0.7 0.7 0.8 5.9 4.6 4.5 6532 4089 6616 7914 1699 16890 6413 2780 3252 1962 3715 3445 1315 825 1259 1653 353 384 456 428 2074 1207 1749 2533 420 240 426 421 30.7 20.6 30.3 26.4 13.9 27.6 18.8 20.1 0.5 0.3 0.4 0.5 5.1 3.3 5.6 5.3 2.2 1.0 1.3 1.1 0.5 0.4 0.6 0.4 0.4 0.6 0.7 0.4 25.9 117.5 220.3 53.2 9.2 12.1 41.9 11.0 0.7 0.4 0.6 0.8 0.1 0.0 0.1 0.1 1.2 1.9 4.0 1.8 0.1 0.1 0.2 0.0 0.1 0.2 0.8 0.1 0.1 0.1 0.2 0.1 0.2 0.2 0.6 0.2 0.2 0.1 0.2 0.2 3.8 4.8 12.2 3.3 0.7 0.5 0.8 0.9 4.1 14.6 11.4 11.0 1661 6687 5188 7437 27329 1256 1269 1744 970 4316 3425 4506 334 1628 1312 1660 359 487 347 499 508 2168 1887 2403 146 548 414 595 18.6 34.4 23.8 32.8 34.6 13.8 12.9 17.1 0.1 0.6 0.4 0.6 2.1 7.1 4.9 7.3 0.7 1.6 0.8 1.3 0.2 0.6 0.3 0.4 0.5 0.7 0.2 0.4 82.0 112.7 11.6 32.7 6.5 14.7 4.7 7.8 0.2 0.8 0.6 0.8 0.1 0.1 0.1 0.1 1.2 6.7 1.2 2.8 0.1 0.1 0.1 0.1 0.1 0.6 0.1 0.2 0.0 0.5 0.1 0.2 0.1 0.8 0.1 0.3 0.1 0.2 0.1 0.2 1.3 11.3 1.9 4.9 0.2 1.2 0.6 0.9 10.1 6.1 5.8 5.6 7455 8339 7616 7716 7574 1551 1628 1869 1747 1773 4664 5730 5024 4893 4954 1495 1758 1735 1754 1755 473 964 597 683 705 2176 2569 2659 2621 2559 608 338 714 714 599 35.7 69.7 49.5 54.1 54.6 15.7 11.8 14.5 13.7 13.3 0.6 1.0 0.7 0.8 0.8 7.9 7.3 9.9 10.2 8.9 1.5 1.8 1.7 1.5 1.5 0.5 1.2 0.8 0.9 0.8 0.4 0.6 0.4 0.4 0.4 43.2 8.9 6.1 7.8 7.6 9.2 7.3 6.8 7.5 7.1 0.8 0.9 0.8 0.8 0.8 0.1 0.1 0.1 0.1 0.1 4.7 0.5 0.6 0.6 0.5 0.0 0.0 0.0 0.1 0.1 0.3 0.0 0.0 0.0 0.0 0.2 0.1 0.1 0.1 0.1 0.3 0.1 0.1 0.1 0.0 0.2 3.6 164 0.4 1.3 0.3 1.2 0.3 1.2 0.3 1.2 1.0 0.6 0.4 0.5 0.5 5.4 2.1 1.9 1.6 2.3 P08 7090 6887 8570 1351 1363 1865 3211 3406 5999 1296 1297 1242 263 246 1418 2038 2120 2318 592 130 381 28.2 28.1 95.9 12.7 13.3 14.2 0.6 0.5 0.5 6.1 2.9 4.4 1.6 1.4 0.3 0.5 0.4 0.8 0.4 0.3 0.2 33.8 21.2 3.8 7.5 5.3 6.8 0.7 0.7 1.0 0.1 0.1 0.1 2.7 1.7 0.4 0.1 0.0 0.1 0.3 0.1 0.2 0.2 0.1 0.1 0.4 0.4 0.4 0.2 0.2 0.2 4.8 3.3 0.5 0.7 0.7 1.4 4.1 3.7 3.5 G09 7524 8561 1299 1592 3277 3973 1271 1586 317 504 2131 2467 174 485 24.7 31.7 13.0 18.1 0.5 0.6 3.8 6.1 1.4 1.2 0.5 0.5 0.4 0.5 13.6 38.7 4.2 11.0 0.7 0.8 0.1 0.1 0.7 2.7 0.1 0.1 0.2 0.2 0.1 0.1 0.4 0.2 0.2 0.2 1.9 3.5 0.7 1.0 3.2 6.7 M09 9347 8299 8559 8016 1341 1676 4104 1542 4167 3496 4329 4332 1602 1727 1190 1748 520 478 524 453 2439 2636 1846 2492 491 415 380 550 33.7 27.6 35.3 29.9 16.0 18.4 16.3 15.9 0.7 0.5 0.7 0.5 6.5 5.2 6.5 7.1 1.6 1.0 2.0 1.6 0.6 0.5 0.7 0.5 0.6 0.3 0.8 0.5 97.5 38.4 104.1 84.9 19.3 11.0 20.1 14.6 0.8 0.8 0.9 0.8 0.1 0.1 0.1 0.1 5.3 2.0 3.0 5.0 0.2 0.1 0.2 0.1 0.3 0.1 0.1 0.4 0.1 0.1 0.1 0.3 0.3 0.2 0.1 0.7 0.2 0.2 0.2 0.2 7.2 2.9 5.6 11.0 1.2 0.9 1.3 1.0 6.3 6.0 5.8 4.5 8334 8130 1672 1753 5351 4976 1628 1721 528 474 2409 2545 337 264 47.2 34.4 17.3 17.9 0.7 0.6 6.4 4.7 1.7 1.4 0.7 0.5 0.5 0.4 22.7 48.0 9.9 9.3 0.9 0.8 0.0 0.1 2.0 3.2 0.0 0.1 0.0 0.1 0.1 0.1 0.1 0.1 0.2 0.2 2.5 6.2 1.0 0.9 4.4 4.2 V09 8210 8119 1867 1768 5308 5414 1659 1788 489 830 2439 2621 719 762 37.7 64.1 18.3 13.1 0.7 1.0 9.2 11.0 1.7 1.8 0.5 1.0 0.5 0.5 59.9 6.9 12.6 8.3 0.9 0.9 0.1 0.1 4.4 0.6 0.1 0.1 0.3 0.0 0.2 0.1 0.5 0.1 0.2 0.3 7.7 1.3 0.9 0.6 4.2 1.3 P09 7944 7937 8025 7663 1835 1797 1848 1544 5523 5120 5410 3816 1679 1656 1647 1298 765 711 589 304 2584 2621 2485 2358 723 702 691 675 61.9 54.7 44.6 40.3 14.2 14.2 16.5 14.7 0.9 0.8 0.7 0.6 10.4 9.9 9.4 6.9 1.9 1.6 1.6 2.0 1.0 0.8 0.7 0.6 0.5 0.4 0.4 0.3 5.8 5.8 38.7 11.9 7.3 7.0 10.3 6.3 0.9 0.8 0.8 0.7 0.1 0.1 0.1 0.1 0.5 0.6 2.8 1.2 0.1 0.1 0.1 0.1 0.0 0.0 0.2 0.0 0.1 0.1 0.2 0.1 0.1 0.1 0.3 0.1 0.3 0.3 0.2 0.2 1.2 1.4 5.1 1.8 0.5 0.5 0.7 0.6 1.7 1.9 2.1 3.0 7170 7489 7574 1221 1218 1361 3513 3137 3417 1192 1377 1355 403 289 327 1935 2131 2349 172 463 593 37.8 25.2 30.0 11.9 12.8 13.4 0.6 0.5 0.6 4.0 5.6 6.6 2.0 1.6 2.2 0.7 0.5 0.6 0.6 0.4 0.5 44.9 29.7 27.7 10.5 7.7 8.6 0.7 0.7 0.7 0.1 0.1 0.1 2.5 2.7 2.7 0.1 0.0 0.1 0.1 0.2 0.2 0.1 0.2 0.2 0.1 0.4 0.3 0.2 0.2 0.2 6.5 4.7 3.9 0.7 0.7 0.7 3.0 2.9 2.5 165 VI.7.3.1 Perfiles Químicos obtenidos por PMF VI.7.3.1.1 Crustal Esta fuente se caracterizó por la presencia de Al, Ca, Fe, K, Mg, Na, Ti, Mn, Sc, V, Cr, Co, Ga, Ge, Gd, Sr, Ni, y Li (Figura 42, Tabla 24). Siendo identificados dichos elementos como fuentes crustales del suelo. Figura 42: Factor 1 (Crustal) obtenido mediante el modelo PMF (La barra azul indica la masa de la especie distribuida en cada factor y el punto rojo corresponde al porcentaje de cada especie que se distribuye en el factor). La característica principal de éste factor indica que el conjunto de elementos de su perfil químico puede ser considerado como resultado de los minerales que componen las muestras de suelo, lo cual se confirma con el análisis de las fases mineralógicas presentes en las muestras llevado a cabo por DRX, donde se observa que los suelos del Valle de Puchuncaví están dominados por la presencia de cuarzo (SiO2), feldespatos como Microclina (KAlSi3O8) y albita (Na,Ca)Al(Si,Al)3O8; minerales de arcilla como la Illita (K,H3O)(Al, Mg, Fe)2(Si, Al)4O10[(OH)2,(H2O) y otros minerales que contienen óxidos tales como la magnetita (FeO4), y perovskita (CaTiO3). A pesar de que elementos tales como Ni y V son en general elementos trazadores típicos de actividades petroquímicas (Olmez y Gordon, 1985; Alleman et al., 2010; Lim et al., 2010; Kavouras et al., 2001), y que Cr y Co son trazadores de la combustión del carbón (Huggins et al., 2000; Didyk, 2003), en este caso éstos elementos se han clasificado como 166 elementos crustales ya que los análisis de EF realizados no han determinado un enriquecimiento en los suelos de la región. Por otra parte al comparar las concentraciones de dichos elementos (mg kg-1) con la composición química de los suelos de la muestras de referencia (Maitencillo), no hemos encontrado una gran variación entre sus datos, lo cual concuerda con los valores de composición del suelo de Quillota y Linares presentados en los estudios de (Hedberg et al., 2005). El perfil químico de esta fuente es comparable con otros estudios donde debido al alto porcentaje de los principales elementos de la corteza terrestre tales como Al, Ca, Fe, k, Mg, y Ti; esta fuente constituye la contribución más alta, en los análisis realizados por el modelo PMF. Ejemplos de ello lo citan (Lim et al., 2010; Chueinta et al., 2000; Hedberg et al., 2005); Nicolás et al., 2008; Kim et al., 2003; Liu et al., 2003; Lee et al., 2008), entre otros, quienes han aplicado el modelo PMF para el estudio de contribución de fuentes, encontrando un factor atribuible a la composición del suelo que se caracteriza por la presencia de Al, Mg, Ti, Fe, La, Mn, Ca, y Th. 167 VI.7.3.1.2 Antropogénico 1: (Fundición de cobre) El porcentaje de variabilidad de cada parámetro medido indica que este factor fue identificado como una fuente enriquecida antropogénicamente por las emisiones procedentes de la fundición de cobre presente en el Valle de Puchuncaví al incluir los elementos Cu, Zn, As, Se, Mo, Sn, Sb, y Pb (Figura 43, Tabla 24). Figura 43: Factor 2 (Fundición de cobre) obtenido mediante el modelo PMF (La barra azul indica la masa de la especie distribuida en cada factor y el punto rojo corresponde al porcentaje de cada especie que se distribuye en el factor). El perfil químico descrito en este factor coincide con los estudios de (Hedberg et al., 2005) quienes estudiaron la contribución de fuentes a la concentración de PM10 en la zona central de Chile, encontrando con el modelo PMF un factor atribuible a emisiones de una fundición que se caracteriza por la presencia de Cu, As y Mo. El perfil químico atribuido a la industria de la fundición de cobre, ha sido también relacionado en los estudios de (Liu et al., 2003), donde los perfiles de una fundición de cobre han sido resueltos por PMF. De acuerdo al análisis realizado la contribución de dicho factor fue represento el 2% de la masa explicada. Asi mismo este perfil químico coincide con los estudios de (Liu et al., 2003) quienes encontraron con el modelo de PMF, la asociación de los elementos Cu, Zn y Pb los cuales fueron atribuidos a las emisiones de una fundición de cobre, logrando identificar en este factor el 11,6% de la masa explicada. 168 VI.7.3.1.3 Antropogénico 2: (Fundición de cobre+ sulfato secundario) El tercer factor ha sido también atribuido a las emisiones de la fundición de cobre con la presencia del sulfato inorgánico secundario, sulfato que presenta una elevada correlación con elementos tales como Cu, Zn y Ca; representando éste último el aporte de calcio antropogénico a los suelos de estudio (Figura 44, Tabla 24). Figura 44: Factor 3 (Fundición de cobre+ sulfato secundario) obtenido mediante el modelo PMF (La barra azul indica la masa de la especie distribuida en cada factor y el punto rojo corresponde al porcentaje de cada especie que se distribuye en el factor). El Sulfato es un contaminante principalmente secundario (procedente de la oxidación de SO2 y formación de H2SO4) y por lo tanto tiene generalmente un origen industrial, lo cual determina la fuente a la que se le asigna este factor. Por otra parte estudios anteriores han demostrado que desde 1964, los suelos del valle de Puchuncaví en la zona costera de Chile central han estado expuestos a las emisiones de dióxido de azufre y partículas enriquecidas con emisiones procedentes de la fundición de cobre (Chiang, 1985b; González y Berqvist, 1986; Alfaro et al., 1998; González y Ite, 1992; Gallardo et al., 2002; Ginocchio, 2000; García et al., 2001; De Gregori et al., 2003; Ginocchio et al., 2004; Folchi, 2006; González et al., 2008; Neaman et al., 2009; CONAMA, 2009). En el análisis de contribución de fuentes de PM10 analizadas con PMF, (Lim et al., 2005) también han encontrado altas concentraciones del aerosol secundario de sulfato y NO3-. 169 Sin embargo debido a que los aerosoles secundarios se producen como resultado de la reacción y la transformación entre los contaminantes emitidos en el aire, los autores no han logrado asignar con precisión su fuente respectiva. Yue et al. (2008), también han encontrado el factor sulfato utilizando como matriz PMF, en un estudio de contribución de fuentes de partículas finas en Alemania, siendo atribuidas dichas emisiones a la industria. Liu et al. (2003), han aplicado el modelo receptor PMF en aerosoles atmosféricos en New York, encontrando una alta concentración de sulfato secundario el cual ha sido atribuido a la emisión de contaminantes emitidos por la combustión de carbón producido en las centrales eléctricas de la región (Polissar y Hopke, 2001). En cuanto a la contribución de dicho factor, las muestras que contribuyen más a la masa explicada son las recolectadas en época de verano. Siendo esta fuente la que contribuye con la mayor parte de la masa explicada (56%). Igualmente (Lee et al., 2008), quienes investigaron el aporte de las fuentes de PM2.5 en St. Louis (Estados Unidos), utilizando el modelo receptor PMF, también encontraron un factor sulfato como la fuente de mayor contribución (40%) atribuido a la emisión de contaminantes industriales. Otro factor encontrado por éstos autores comprende Cobre, sulfato y nitrato el cual representa el 3% de la concentración de la masa de PM2.5 siendo asociado dicho factor a la producción de cobre, que se lleva a cabo por la compañía productora existente en el lugar, coincidiendo este mismo factor en las investigaciones de (Alpert y Hopke, 1981). 170 Tabla 24. Concentraciones (mg kg-1) de los perfiles químicos y porcentajes (%) obtenidos para cada elemento de cada una de las fuentes obtenido por PMF. Factor 1 Crustal Elemento Factor 2 % Fundición de cobre Factor 3 % Fundición de Cu + CIS* % Predicha promedio Al 54585 79 8134 12 6650 10 69369 69857.6 Ca Fe 19896.4 32386 55 86 1833 2414 5 6 14739 2886 40 8 36468 37686 38614.1 39808.9 K Mg Na 10721 3325 17915 79 69 86 1931 729 1372 14 15 7 844 760 1457 6 16 7 13496 4814 20744 14004.4 4850.9 21170.9 Ti Mn 2403 576 58 86 946 17 23 3 813 76 20 11 4162 669 4545.9 727.5 Sr Sc 183 9 58 86 31 0.5 10 5 103 1 32 10 317 11 330.9 11.1 V 93 82 11 10 10 9 114 122.1 Cr Co Ni 21 8 5 78 85 57 3 0.4 1.8 11 4 20 3 1 2 11 11 23 27 9 9 29.3 11.4 9.3 Cu Zn 2 49 0.2 22 564 87 52 40 510 83 47 38 1076 219 1072.7 221.3 Ga Ge 12 1 86 67 1 0.4 7 27 1 0.1 7 7 14 2 14.3 1.5 As Se Mo Sn Sb 4 0.4 0 1 1 9 29 0 37 22 33 0.8 4 1.5 3 72 57 95 56 67 9 0.2 0.2 0.2 0.5 20 14 5 7 11 46 1 4 3 5 46.9 1.5 4.3 2.7 5 Gd Pb Li 3 6 10 82 7 67 0.34 66 4 9 73 27 0.3 19 1 8 21 7 4 91 15 4 94.3 15.4 S04 0 0 44 41 64 59 108 114.3 Sumatoria 142215.8 -1 Con.(mg kg ) % Contr. 18232.74 29033.5 189482.04 Crustal Fun. de Cobre Fun. de Cobre+CIS* 75 10 15 *Compuesto inorgánico secundario 171 VI.7.3.2 Contribución de la muestras en cada factor obtenido por PMF3 Una vez identificados todos los perfiles químicos, se ha realizado la contribución de cada una de las fuentes a las muestras estudiadas la cual se detalla a continuación: VI.7.3.2.1 Contribución Factor crustal La contribución de la fuente crustal representa la mayor parte de la masa explicada (75%) (Figura 45). Su mayor contribución está dada por el aporte correspondiente a las muestras de suelos de la estación Valle Alegre (6.43 Km) respecto las fuentes contaminantes y en dirección contraria a los vientos que pueden llevar consigo partículas contaminantes que son producto de las emisiones industriales de la zona de Puchuncaví (Figura 46). Figura 45. Porcentaje de contribución de cada factor a la masa total 172 Figura 46: Contribución del factor 1 (crustal) a la masa total por muestra obtenida mediante el modelo PMF (Las líneas naranjas delimitan las estaciones de monitoreo ambiental). VI.7.3.2.2 Contribución Factor antropogénico 1 (Fundición de cobre) La mayor contribución de la fuente correspondiente a la fundición de cobre está dada por las muestras de suelo recolectadas en las estaciones la Greda y los Maitenes (Figura 47), lo cual es lógico ya que estos sitios se encuentran cercanos a las fuentes de contaminación. El porcentaje de contribución de esta fuente a la contaminación de los suelos es equivalente al 10% de su masa explicada (Figura 45). 173 Figura 47: Contribución del factor 2 (Fundición de cobre) a la masa total por muestra obtenida mediante el modelo PMF (Las líneas naranjas delimitan las estaciones de monitoreo ambiental). VI.7.3.2.3 Contribución Factor antropogénico 2 (Fundición de cobre + sulfato inorgánico secundario) La contribución de la fuente que hace relación a la fundición de cobre con aporte de sulfato representa el 15% de su masa explicada. El mayor aporte de esa fuente esta dado por las muestras de suelo más cercanas a las fuentes de contaminación (Greda y Maitenes) (Figura 48), lo cual indica que las zonas que se encuentren a dicha distancia son las más impactadas por la emisión de elementos traza contaminantes. Por lo tanto podríamos considerar que la fundición de cobre existente en el lugar es el mayor foco industrial de emisión en la zona. 174 Figura 48: Contribución del factor 3 (Fundición de cobre + CIS) a la masa total por muestra obtenida mediante el modelo PMF (Las líneas naranjas delimitan las estaciones de monitoreo ambiental). La caracterización de las fuentes contaminantes en el Valle de Puchuncaví por medio de los métodos receptores utilizados (EF, PCA, PMF) presentó perfiles similares. En este caso EF ha sido utilizado para diferenciar los elementos litogénicos de los antropogénicos presentes en las muestras de suelo, PCA nos ha permitido estimar el número de fuentes y asociaciones elementales, mientras que con la aplicación del modelo PMF hemos identificado con mayor claridad la principal fuente de contaminación que afecta los suelos y estimar a su vez la contribución relativa de las concentraciones de los contaminantes y los perfiles químicos correspondientes. Por lo tanto el modelo PMF nos ha confirmado el origen de las partículas contaminantes derivadas principalmente de la mayor actividad antropogénica presente en la zona (Fundición de cobre). 175 VII. CONCLUSIONES 1. Respecto de los estudios realizados anteriormente referentes a la contaminación del suelo del Valle de Puchuncaví, es la primera vez que se utiliza un modelo estadístico multivariado (PMF) que permita identificar y cuantificar los elementos trazadores contaminantes emitidos por las principales fuentes de emisión, obteniendo resultados satisfactorios. 2. Los resultados obtenidos con el modelo PMF muestra tres perfiles químicos correspondientes a un factor crustal formado por los elementos Al, Ca, Fe, K, Mg, Na, Ti, Mn, Sc, V, Cr, Co, Ga, Ge, Gd, Sr, Ni, y Li; así como por también por dos factores antropogénicos, el primer de ellos fue atribuido a la Fundición y Refinería de Cobre representado por los elementos Cu, Zn, As, Se, Mo, Sn, Sb, y Pb, mientras que el tercer factor lo conforma SO42-, Cu, Zn y Ca, siendo atribuido este último de acuerdo a su perfil químico a la Fundición de cobre más el sulfato secundario. 3. En base al mismo modelo PMF, desde un punto de vista cualitativo y cuantitativo la fundición de cobre (Codelco Ventanas), es la única fuente que aporta de forma estadísticamente significativa elementos trazadores contaminantes a los suelos del sector. En términos estadísticos, el aporte de un factor antropogénico asociado a la termoeléctrica AES Gener para explicar la contaminación actual de los suelos, no es significativa. 4. El modelo PMF determina que el factor crustal contribuye con el 75% de la masa explicada. La mayor contribución del factor antropogénico (Fundición de Cobre) está dada por las muestras de suelos de la Greda y los Maitenes siendo dicho aporte de un 10% a un 15% de masa explicada. 176 5. La utilización de PCA como modelo receptor permitió identificar dos factores capaces de explicar satisfactoriamente el 74% de la varianza de los datos de la matriz, lo cual es un indicativo de la buena representatividad del análisis. PC1 explicó los elementos de origen crustal (46%), mientras la componente PC2 explicó la presencia de elementos trazadores de origen antropogénico relacionados con la Fundición de Cobre tales como Cu, Zn, As, Se, Mo, Sn, Sb y Pb, esta componente explicó el 28% de la varianza de los datos. 6. Los análisis de DRX realizados a las muestras de suelo de la Greda, Maitenes, Valle alegre, Puchuncaví y Maitencillo, confirman la presencia de minerales tales como Cuarzo, Albita,Hematite, Microcline, Illita, Cal y Tenorita, hecho que evidencia la presencia de elementos tanto litogénicos como antropogénicos en el material particulado fino < 63 µm. 7. El análisis mediante microscopia electrónica de barrido (SEM-EDX) realizado a las fracciones de material particulado re-suspendido permitió la detección de partículas de silicato de aluminio, así como de cobre, zinc, arsénico, plomo y calcio entre otros, hecho que corrobora la emisión de partículas enriquecidas por dichos elementos traza asociados a la Fundición de Cobre. 8. Las muestras provenientes de la estación la Greda presentaron material particulado enriquecido con níquel y cromo, así como la presencia de cenizas volates relacionadas con el aporte cualitativo de la termoeléctrica presente en el lugar. 9. De acuerdo a los análisis granulométricos realizados a las muestras de suelo del Valle de Puchuncaví se puede constatar que en los emplazamientos de la Greda y Maitenes existe un mayor porcentaje acumulado de material particulado PM 2.5 177 µm lo que sugiere un mecanismo de enriquecimiento por la sedimentación de material particulado fino emitido por las fuentes antropogénicas. VIII. RECOMENDACIONES Y FUTURAS LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN Respecto de las proyecciones de este estudio, podemos afirmar que si bien es cierto se ha logrado responder la pregunta respecto de cuál es el aporte individual de AES-Gener y Codelco a la contaminación de los suelos del sector de Puchuncaví, se necesita evaluar el origen y calidad del material particulado sedimentable que actualmente se está arrojando a la zona. Por otra parte, aun quedan preguntas por responder respecto de la incorporación de estos contaminantes a las cadenas tróficas considerando que Puchuncaví es una zona agrícola. Además queda planteado el problema ambiental y social del sector respecto de los riesgos que conlleva para esa población el vivir en una zona con suelos contaminados, así como también evaluar si es factible técnicamente remediar esta situación. Otras futuras líneas de investigación propuestas, es el estudio de la contribución de las fuentes a las concentraciones de PM10 en los mismos emplazamientos de este estudio, mediante la utilización del modelo Positive Matrix Factorization. Sería de gran interés a nivel científico la instalación de una estación de control de calidad de aire en un emplazamiento de fondo regional (Como lo es la escuela la Greda) ya que permitiría el estudio minucioso de los niveles de fondo que se registran en esta zona y que podrían estar afectando a la población. 178 Realización de análisis de contribución de fuentes a partir de otros métodos como el Chemical Mass Balance (CMB). Esta metodología requiere del conocimiento previo de todas las fuentes de material particulado posibles, además de los perfiles químicos de dichas fuentes. Esta metodología permitiría la individualización de un mayor número de fuentes. 179 BIBLIOGRAFIA Achiardi , M. Niveles de concentración de metales pesados en suelos de la comuna de Puchuncaví. UTFSM. Viña del Mar; 1991. Adachi, K., Tainosho, Y. Single particle characterization of size-fractionated road sediments. Applied Geochemistry 2005;20:849–59. http://linkinghub.elsevier.com/retrieve/pii/S0883292705000326. Adedokun, A., Adedeji, A., E.W.O. Physical, chemical and mineralogical properties of harmanttan dust at lle-ife,Nigeria. Theoretical and applied climatology 1989. Adriano, D. Trace Elements in Terrestrial Environments: Biogeochemistry, Bioavailability, and Risk of Metals. Springer-Verlag, New York, NY. 867 pp. Springer-V. 2001a. Adriano, D. Cadmium :Trace elements in the terrestrial Environments. 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