ACTUALIZACIÓN JUDICIAL EN EL ESTADO DE TLAXCALA, DENTRO DEL MARCO DEL DERECHO INFORMÁTICO Y LA INFORMÁTICA JURÍDICA EN EL SIGLO XXI. Autor: Lic. Rufino Mendieta Cuapio Introducción La informática jurídica no solo es una materia fascinante, sino que en la actualidad, instrumento indispensable para el logro de uno de los anhelos mas esperados por los gobernados; una administración de justicia pronta y expedita. Si bien el desarrollo de esta materia se ha dado a pasos agigantados a nivel federal, en las entidades federativas, este avance a sido más lento, debido en gran parte a los recurso destinados para ello y por otra a la regulación que en esta materia en el Estado apenas se ha cristalizado. Ha sido necesario introducir en nuestro sistema jurídico el desarrollo de tal actividad, pues habiéndose reformado el texto constitucional local se hizo indispensable dar cabida a tan invaluable instrumento. La sociedad reclama día a día el perfeccionamiento de las instancias encargadas de la administración de justicia y Tlaxcala no se ha querido quedar a la saga en esta dinámica. Por lo que es un reto y una responsabilidad el acceder a una real administración de justicia apoyada en los instrumentos que la ciencia actual nos proporciona. He aquí un panorama de lo que es y un anhelo de lo que pretende ser el Tribunal Superior de Justicia del Estado de Tlaxcala, en la aplicación de la informática jurídica como un instrumento para la administración de la justicia local. Marco Conceptual. 1 Evidentemente, en la presente exposición se hace referencia a la interacción entre informática y derecho, como conceptos fundamentales de las ciencias de que se trata y de las que se desprenden el derecho a la informática y la informática jurídica; sin embargo y al efecto de aclarar en cierta medida los términos referentes a lo que es “informática jurídica” y “derecho informático”, nos apoyaremos en lo precisado en las siguientes definiciones: La palabra Informática, proviene del francés Informatique y es una contracción de las palabras francesas information y automatique, y se le considera como el conjunto de conocimientos científicos y técnicas que hacen posible el tratamiento automático de la información por medio de ordenadores electrónicos.1 Por otra parte, la Enciclopedia Encarta la define de una manera más práctica para efectos del tema en cuestión y dice textualmente: "Informática o Computación, conjunto de conocimientos científicos y de técnicas que hacen posible el tratamiento automático de la información por medio de computadoras. La informática combina los aspectos teóricos y prácticos de la ingeniería, electrónica, teoría de la información, matemáticas, lógica y comportamiento humano. Los aspectos de la informática cubren desde la programación y la arquitectura informática hasta la inteligencia artificial y la robótica".2 Ahora bien el término "información", proviene del latín informatio, -onis, "implica comunicación o adquisición de conocimiento que permiten ampliar o precisar los que se poseen sobre una materia determinada"3 1 Diccionario Edit. Espasa-Calpe, Madrid 1988. Tomo II, Tercera Edición, Pág.880 2 "Informática." Enciclopedia Microsoft Encarta 2001. 1993-2000 Microsoft Corporation. Reservados todos los derechos. 3 Real Academia Española. Diccionario de la Lengua Española, 21a. Edición Madrid, 1992. 2 A su vez lo automático, es la ciencia que trata de sustituir en un proceso el operador humano por dispositivos mecánicos o electrónicos. 4 Finalmente se establece lo que es un ordenador para efectos de entender las definiciones anteriores. En ingeniería se considera como un ordenador a la máquina dedicada al tratamiento total de la información. Y para el caso de la informática entendida en la perspectiva común es simple y llanamente un computador.5 Atendiendo a la problemática inmersa en la actividad jurisdiccional, la informática representa no sólo la captura de la información en medios electrónicos, sino su sistematización para crear una auténtica informática jurídica, esto hace posible que se permita al juzgador obtener los medios necesarios de conocimiento vertido a través de diversos tópicos jurisdiccionales y consecuentemente le abre un campo conceptual más amplio para colocarlo en aptitud de resolver las controversias sometidas a su criterio y a resolver en forma más pronta y expedita como lo establece la Constitución General de la República. Lo anterior, da origen a una serie de actividades que configuran conductas que deben ser reguladas, a fin de alcanzar los objetivos propuestos, esto es, la informática interrelacionada con el derecho. Ahora bien, el derecho de la informática se define como el conjunto de normas jurídicas que regulan la creación, desarrollo, uso, aplicación de la informática a los problemas que se deriven de la misma en las que exista algún bien que es o deba ser tutelado jurídicamente por las propias normas. 6 4 Diccionario Enciclopédico Ilustrado. Océano Uno. Editorial Océano. Barcelona, España, 1994. Sin número de página. 5 Diccionario Enciclopédico Ilustrado. Océano Uno. Editorial Océano. Barcelona, España, 1994. Sin número de página. 6 Ríos Estavillo Juan José. Derecho e Informática en México. IIJ-UNAM. México 1997. Pág. 73 3 En esta breve exposición encontramos los conceptos fundamentales del tema que nos ocupa, los cuales servirán de referencia para el efecto de exponer las necesidades de la actualización judicial en el campo de referencia antes descrito. Panorama General La informática, desde una perspectiva aislada, es una ciencia que se desarrolla a través de una galopante actividad que rebasa en mucho a los propios fabricantes de equipo computacional, y los denominados software se actualizan con una frecuencia que solo los llamados hackers alcanzan a igualar en conocimientos a los creadores de dichos programas computacionales, las aplicaciones de los programas a las diversas actividades científicas está padeciendo los mismos síntomas afortunadamente para la humanidad; sin embargo, no está ocurriendo lo mismo con las personas que se deben a las diversas ramas de las ciencias. La anterior descripción es plenamente válida al aplicarse al ámbito jurídico, tanto en el marco de la informática jurídica, como en el campo del derecho de la informática. En efecto, si partimos del análisis sistemático que se hace de la información jurídica a través de documentos para la creación de bancos de información, tenemos que el retraso en este rubro es bastante amplio, ya que solamente encontramos algunas instancias jurisdiccionales que manejan esta clase de información y lamentablemente sabemos que son los menos, incluso en la propia Suprema Corte de Justicia de la Nación, donde se cuenta con un presupuesto bastante amplio, comparado con el de los Poderes Judiciales de los Estados integrantes de la Federación, apenas se encuentran en una etapa de recopilación de la información de los expedientes históricos, porque cuentan con los aparatos 4 capaces de digitalizar ese amplio y valioso acervo cultural, pero ello, podemos afirmar, es de los pocos casos de excepción. La parte de la informática jurídica encargada de llevar el seguimiento de trámites y procesos jurisdiccionales y de mantener actualizada dicha información, también es relativamente pobre en algunas entidades federativas, donde se cuenta, en algunos caso, con equipo computacional obsoleto, y en otros, existen juzgados donde se carece definitivamente de equipos de cómputo para el trabajo rutinario, y en el caso de nuestro Máximo Órgano de Justicia, encuentra complicaciones de tal envergadura que muchas ocasiones transita por los misteriosos caminos denominados “caídas de sistemas” como ocurre con las listas de los asuntos que se publican en el Primer Circuito del Poder Judicial Federal por la vía de internet. En lo referente a la informática en los aspectos de la academia, encontramos que la enseñanza del derecho asistida por computadora es relativamente escasa y salvo en algunas Universidades donde existe el presupuesto suficiente, se les ha dotado de equipo, que siendo limitado empieza a dar algunos frutos en la educación jurídica; pero ello sigue siendo insuficiente, toda vez que dichos equipos se vuelven obsoletos y difícilmente las universidades actualizan dichas herramientas de trabajo. Por otra parte, el derecho de la informática presenta un panorama más nebuloso, pues es evidente que no existe una verdadera legislación en México, que proteja las diversas facetas que comprende esta disciplina, ya que es muy claro que la información personal existente en diversos archivos tanto de carácter público como privado, la cual debe ser mantenida como reservada, es comercializada incluso a nivel internacional (todos recordamos la venta del Padrón Electoral vendido a una empresa extranjera), o llega a extremos tales la salida de esa información que nos hace víctimas de constantes molestias por parte de vendedores de empresas que no tienen escrúpulo alguno para entrar a la 5 intimidad de la vida de quienes ingenuamente aportaron su datos personales en archivos a los cuales consideraron reservados, sin que hasta la presente fecha exista una legislación aplicable a dichos vendedores o sustractores de esta información personal. Asimismo, la protección de los programas computacionales es un rubro que merece un tratamiento especial, pues es evidente que la ley bajo la cual se rigen en la actualidad, no responde a una realidad concreta, los simples derechos de autor no reglamentan con la debida claridad los impactos que se causan en la sociedad respecto de las obras creadas, lo que las hace susceptibles de ser tomadas con alguna variación para ser reeditadas con otro registro sin que exista disposición que impida con certeza esta clase de piratería, por ejemplo, todos conocemos el Ius de la Suprema Corte, pero similares versiones se encuentran en establecimientos comerciales, sin que exista un reconocimiento legal de que estas últimas versiones sean verdaderas copias del trabajo de compilación y sistematización que realiza el Alto Tribunal. Finalmente hacemos referencia a la falta de una legislación apropiada para el reconocimiento de convenios o contratos que se realizan por medio de la informática o a lo correspondiente a los delitos de esta rama, así como a la falta de valor probatorio pleno a los documentos electromagnéticos en los tribunales. Problemática en la Actualización Judicial. a).- La Información. Pese a la aprobación de la Ley de Acceso a la Información por parte del Congreso Federal, ésta en la práctica ha quedado trunca, debido a que la información que se proporciona se ha vuelto arbitraria y caprichosa por los entes obligados a proporcionarla; por lo que sería conveniente en primera instancia determinar cual es la información que como ente puede proporcionar X o Z organismo de acuerdo a la naturaleza de la actividad que desarrolla y cual es 6 esa información de carácter personal de los miembros que la integran que se debe considerar reservada. Al llegar a este cuestionamiento es válida la pregunta ¿hasta que punto se encuentran comprometidos con los gobernados las instituciones de carácter público para proporcionarles determinada información y a la vez que tan fidedigna puede ser esta?. b). Al publicitarse la actividad que desarrolla cualquier institución, ésta tiene como finalidad el dar a conocer al gobernado que la actividad encomendada se está desarrollando dentro de los cánones constitucionales y legales; así como también a posteriori poder realizar cuadros comparativos de eficiencia en lapsos de temporalidad por lo que la información que se proporcione deberá contener un soporte tal que no permita duda alguna sobre ella. c). No es posible considerar procedimientos sin sustancia, por tal motivo la compilación y sistematización de la información deben ser el núcleo fundamental en donde gire la información. Lo complicado de cualquier procedimiento debe facilitarse al momento de obtener la información requerida por lo que teniendo una base fundamental de datos el procedimiento de sistematización cobrará fuerza en esta etapa del procedimiento que es el de sistematizar y optimizar la información compilada. d). En la informática jurídica debe considerarse un complemento ideal lo que significa la informática como ciencia y el derecho también como tal, concebir un desequilibrio entre ambas tendría consecuencias desastrosas para la finalidad perseguida; es decir, si existe un equilibrio de poderes (checks and balances) también debe existir un equilibrio entre lo que es el derecho como ente regulador de la sociedad y la informática como materia que facilita la información, así cada una de estas ramas, dentro de su ámbito servirá para un sano desarrollo de esta materia. 7 e). En la dinámica actual que se vive, el juzgador se encuentra obligado a mantener contacto directo con las diversas instancias análogas: estatales, federales e internacionales, para el óptimo desempeño de su función, por lo que es requisito sine quan non el que dentro de las herramientas que utilice se encuentren a su alcance instrumentos adecuados para el desarrollo de su plena actividad, contando desde luego con una buena computadora, con programas idóneos, paquetería adecuada, internet instalado y toda clase de instrumentos que de manera rápida y fácil lo ponga en contacto con esas instancias. La comunicación en nuestros días es fundamental para que los juzgadores estemos a la par de una justicia pronta y expedita como es el anhelo de todos los gobernados. f). Punto primordial para lo anterior, lo constituye el presupuesto asignado, piedra angular para llevar a cabo tales objetivos, ya que este sirve lo mismo para comprar instrumentos adecuados, como para capacitar al uso de los mismo, en una relación directamente proporcional; por lo que el contar con un presupuesto adecuado conllevaría a mejores instrumentos y mejores pagos para capacitadores. g). Finalmente se debe ser preciso en la capacitación de los funcionarios judiciales así como en la debida protección de los datos personales Necesidad del Poder Judicial del Estado de Tlaxcala de acceder a la informática jurídica. De acuerdo a lo establecido en el artículo 80 de la Constitución del Estado de Tlaxcala que cita textualmente: "El Tribunal Superior de Justicia, funcionando en pleno, tendrá las siguientes facultades. . . IX. Determinar los precedentes obligatorios sustentados en cinco resoluciones en el mismo sentido, que vinculen a las Salas y juzgados del Estado, y resolver las contradicciones de los 8 precedentes que sustenten las Salas. . . XI. Ordenar que se publiquen, para su obligatoriedad, en el Boletín Judicial del Estado, las disposiciones de observancia general que dicte: . . .", así como el artículo 81 de la propia Constitución que expresa: "El pleno del Tribunal Superior de Justicia, actuando como Tribunal de Control Constitucional del Estado, conocerá de los asuntos siguiente: V, El trámite y resolución de los juicios de competencia constitucional y acciones de inconstitucionalidad a que se refieren las tres fracciones anteriores, se sujetará a los términos siguientes: ... g). Todas las resoluciones definitivas del Tribunal, deberán publicarse en el Boletín del Poder Judicial y en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado; un extracto de las mismas, se publicará en los periódicos de mayor circulación del Estado." Estos artículos constriñen a dar a conocer al público disposiciones de carácter jurisdiccional, que por su importancia deben de ir más allá del ámbito de desarrollo meramente gremial a un ámbito de características más amplias y de conocimiento general, debido a su obligatoriedad y trascendencia social. Para desarrollar una dinámica de respuesta a los anteriores imperativos, se reitera, se debe contar con el personal idóneo y con el equipo computacional suficiente en todas las instancias del Poder Judicial. En efecto, la informática será la herramienta de trabajo indispensable para que las resoluciones estén al alcance del público. En una perspectiva más amplia encontramos que no sólo se trata de las resoluciones trascendentes del Pleno del Tribunal Superior, sino que comprende la actividad de los distintos órganos jurisdiccionales del Poder Judicial, esto es sencillo de entender, basten unos simples ejemplos, si el Tribunal Pleno actuando como Tribunal de Control Constitucional emitiera una resolución, cuyo volumen representara un número extraordinario de páginas, agregado a las listas que deben remitir los juzgados ubicados en los diferentes Distritos Judiciales, para la 9 elaboración del citado Boletín Judicial se requeriría de bastante tiempo para ordenar y sistematizar esta información, además de lo que representaría la captura de datos si estos se enviaran vía fax, o más tiempo si fueran enviados con un mensajero específicamente elegido por el titular del órgano jurisdiccional, para tal función, peor aún sería la remisión por correo; así, empleando la informática se obtendría un ahorro en tiempo y esfuerzo lo que permitiría no sólo la llegada rápida de la información, sino que además, haría viable sistematizar dicha información y ponerla a disposición del público por otros medios, tal como su emisión en la página de Internet. "Lo anterior es porque quien trabaja para el desarrollo de la misma informática jurídica tiene como principal función la ordenación (que conlleva al tratamiento) y el análisis del discurso jurídico en el cual se anexan estudios del lenguaje jurídico y su fin es la creación de instrumentos que permitan el acceso a la información jurídica."6 Es preciso comentar lo establecido por la fracción IX del citado artículo 80 de la Constitución del Estado, la cual sustenta las bases para la creación de la jurisprudencia por el Tribunal Superior de Justicia; pero para cumplir satisfactoriamente con lo previsto por el numeral en comento, independientemente de los lineamientos que se puedan prever en la respectiva ley orgánica o en el reglamento interior, podemos adelantar al efecto la necesidad de la formación de una unidad especializada para dar seguimiento a las resoluciones que sirvan como precedentes a la jurisprudencia; y tomando en consideración, que en el Boletín Judicial se publicarán tanto las listas de los distintos juzgados y Salas, así como las resoluciones trascendentes que se dispongan, resulta indispensable una publicación donde se den a conocer tanto precedentes como jurisprudencias, luego entonces, la unidad especializada reclamará juristas, ingenieros en computación y diseñadores gráficos. 6 Ríos Estavillo Juan José. Derecho e Informática en México. IIJ-UNAM. México 1997. Pág. 46 10 La unidad especializada cuya creación se requiere por parte del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Taxcala, tendrá funciones análogas a las actividades generales de la Coordinación General de Compilación y Sistematización de Tesis de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ya que en un futuro no lejano publicará su propio órgano de difusión en forma continua y constante, así mismo se verá en la necesidad de editar discos compactos de contenido jurisprudencial, para esto básicamente deberá tomar en cuenta la estructura de la antes referida Coordinación y contar con un titular y las áreas especializadas en Compilación y Sistematización de Tesis, Formación Editorial de la Publicación, Contradicción de Tesis, Seguimiento y Producción de Discos Compactos y, finalmente, Sistemas y Procesos de Cómputo.7 Como puede advertirse, las reformas a la Constitución del Estado de Tlaxcala, obligan necesariamente a la modernización de la estructura administrativa del Tribunal Superior de Justicia, y como consecuencia a la capacitación, en todos los ámbitos, de su personal, destacando entre ellos, por ser materia del tema descrito, el de la informática jurídica. Si bien es cierto que la capacidad académica y pragmática de los juzgadores no esta en duda, también es cierto, que la falta de un programa debidamente diseñado que les permita alcanzar mayores resultados, no ha sido concretado, por tanto se hace indispensable la elaboración de un proyecto integral que contemple la actividad de capacitación en el rubro de la informática jurídica, a todo el personal del Poder Judicial de Estado, y además la adquisición del equipo de cómputo suficiente para satisfacer los reclamos de una pronta y expedita administración de justicia. 7 Ver Reglamento de la Coordinación General de Compilación y Sistematización de Tesis, de la Suprema corte de Justicia de la Nación, publicado en el Diario Oficial e125 de noviembre de 1996. 11