Edición de Madrüd. Miércoles 7 de febrero de 1838. JVwm. 1379

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Miércoles 7 de febrero de 1838.
Edición de Madrüd.
JVwm. 1379.
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principales librerías del reino.—PreciO rfe fujcricio/i : en IMADRIÜ por un mes 20 rs. , p o r tres 58 , por seis 114 , p o r un año 22(3: en las I'KOVIKCIAS , franco de p o r t e , por un mes 5 1 rs. , por t r e s ' 9 0 , ) o
seis 178, por un año 354.— Las reclamaciones , co.nuiiicadus y anuucios se dirigirán al E D I T O R francos de p o r t e . Los números suellos a iO cuartos
KOTICIAS OFICÍALES.
Parles
recibidos
en e! ¡niiiisLerlo
de la. Gobernación
de
la
PcnitiáU'íi.
El í^efe político de Cor'lolia coii feclri 25 de enero último d.^ part e d« (lue eí capitMu de caKailtria don FeHro Kez.-i , comai]daMltí de
la columna voUtiíe de lo. I\:ilroriieá , liniici^ei 18 dei mes p.i.<Mdo á
una partida de facciosos oompuesta ile 21 á 50 cahallus , proce(l,;tites
al parecer de la laccioii de .1 ira y mandaila por el cabecilla Sevio en
el sitio dtí la Drilie>ilh, orliliS del Júcar; liabiiítKl.les causadü la pérdida de 10 lioiiibips, si: te iiiuírtos orí las diferentes c:<rgas, dos abo.
gados coii sos caballos, y un pri ic^iero, y codicióles adfimas cinco ca
billos, alyui)a.5 armas de fuego y blaiüjas y otros efectos.
El gefe político de Jaén con fecha dci 25 de enero último da p ir
te que el cabecilla I i loro lliii¿ , que lautos males ba causado en
aquella provincia, li.<bia si.lo ase=luado por ütio faccioso llamado Salvador P e r e í .
r^OTiClAS lili ¡ÍS1>ANA.
U A U C E L O X / V 20 de eaero = El Excmo. Sr. capitán general y
en gefe de este ejército y principado, ha recibido una comunicación
del comandante general de la provincia de Lérida el iirigadier D. Vi
cente Malgrat su fecha 15 del actual, cuyo contenido es el siguiente:
Excmo. Sr. = EI gobernador de Treiiip con fecha 12 del presente,
me dice lo que c o p i o . = P o r la comunicación que he dirijido á V. S.
esta mañana , daba conocimiento á V . S. de las poiiciones que
ocupaba el sefior comandante general de la tercera división y
el señor coronel Clemente , añadiendo ahora que son las doce
d é l a n o c h e , según parte que acabo de recibir de dicho señor comandanta general, de haber abandonado la facción el punto de Rialp,
dirijitíudose eu tres divisiones por los puntos de Canto Guills y T a ú s ,
detenido dicho superior gefe demoliendo la lortiticacion e a que se
sbriuaban.^^Lo que comunico a V. S. para su conocimiento y con el
objeto de que por su conducto llegue á noticia del Excmo. Sr. gene
ral en (>'efe.=!Vo be vuelto á adquirir noticias de la invasión A'avaira
Í D E M 2i.-=En la capiíania geneial con fecha 15 del que rige se
ha recibido una comunicación del gobernador de Oeíona (|ue en estracto dice : que noticioso el ca¡>itaii don E.teban X-j'ués de !a MiüEsteban de Bas , que los eiiem¡go.i liabiau situado
cía nacion;t Ide
una a<luana en San Fe.iu de Pallaro's , logró sorprenderla , matando
al cabecilla Jusé Soler , ex-fraile , célebre por sus crímenes , y c o g e r prisionero al faccioso Ramou Batlle.
l ü E M 22 =-=Mañana á las siete deben quedar relevadas por la milicia nacional las guardias que hasta ahora daba la tropa. Varias son
las especies que han corrido con este motivo; pero parece que el re •
levo tiene solo por objeto pasar alas tropas la revista estraurdiaaria
que se anunció anteriormente.
lUE.VI 23 = l í l Evcino. Sr. capitán getieral y en gefe de este
ejérciío ha recibido una couiunicaciou del gobernador de Lérida fecha 17 del actual , eu la que entre otras cosas dice lo siguiente:
»EI coronel Oribe desde Fonz eu 15 del actual refiriéndole á noticia dada por el gobernador de Sangüesa dice que la Iticcion que se
hallaba en aquellas inmediaciones ha niar.;hado el día 19 para Á l t e l a pasando el camino real hacia Userga y Legarda, presumiendo que
ya debia haber pasado el rio Ai ga.
Según el comandante de armas de A l m e n a r , refiriéndose á c o municación del alcalde de T a m i r i t e , se desmiente igualmente que
aquellos batallones navarros se li.dlan ya eu las iuinediacioacs de
Sangüesa ni con dirección á este principado.
—Estado mayor.•=S'eccion
ceaíi al =.iS. M. la Reina G o b e r n a
dora se ha servido conceder pensión de dos reales á doña N Arbós
y Donadeu, residente en RipoH, viuda de don Simón A r b ó s ; de real
y medio también diario ú Josefa Ccdina y l'onl de Maulleu, viuda
de Juan Codiiia ; otra igual á Manuela Cjjanas residente en Barcelona, viuda de Francisco Montells ; y otra de i'JD rs. vn. unual-.;s á
doña Francisca de Paula Diez de Cueva, viuda Ue don José Rodri
gue¿ , capitán que fué del regimiento inlaiiteiía de A l b u e r a , 7." ligero, muertos diclius causantes en acción de g u e r i a .
Í D E M 24. = EI rebelde Sagarra , nombrado últimamenle comandante general de los facciosos de este principado ha nombrado a dou
Ramou Samsó gobernador militar de Berga y comandante general de
los corregimientos de Manresay Puigceida; á dou Auloiiio Camps,
comandante general de la cabalieria facciosa ; y al comandante de
la arlilleria le ha ascendido al grado de comandante general de dicha arma.
ÍDIi.^I 2(). ==-Esta mañana han fondeado a'vista de este puerto
dos navios fianceses, uno a! mando del almirante M. Lalande. En
t r e los dos llevaban 182 cañones y 1712 p'azas. Se dice que corres
pouden al crucero que sirve de proteccioi. a mitstrai cortas.
— Según el contenido de dos comunicaciones que se han recibido
en la capitanía general del comandante de aiiuaa de Mataco, cuu fe
chas de los dias 20 y 22 del corriente , se ha con-.rgnido la captura
de dos facciosos ilamados Francisco liellavista y !N. T a u l e t ; debida
a la actividad y decidoa de los nacionales de Cardedeu y al destacamento de la Garriga.
l ü E . M 27.="Anteayer murió el escelenlisimo señor mariscal de
campo don José P a r r e ñ o , subinspector del nacional cuerpo de ingenieros. Celebráronse ayer las exequias fúnebres en la iglesia parros
quial de san José con todos los honores debidos á su distinguida clase.
—Se nos ha asegurado que el guardacostas Manzanares acaba de
apresar eu las aguas de los Alfaques do-, barquicbucios (|ue se ocupaban eu robar las pequeñas embarcaciones que con motivo del
mal t¡ein¡)0 se veiau precisadas á recalar en aquellas playas. Las p r e sas al parecer han sitio conducidas á lienicarló
A L . \ I O X A S T C R (Huelva) IGdccnero.^
He visto inserta en el
n ú m e r o 1315 de su apreciable periódico una esposiciou de la diputa
cion provincial de Sevilla á S. M queja'ndose de los procedimientos
de la de Huelva eu el rej.ariimiento del empréstito de los doscien
tos millones ; y auinpie e.-.toy casi seguro d e q u e la corporación de
esta provincia defenderá con verdad y energía los intereses de sus
representados , celoso de la opuiioii y crédito de los diputados pro
vinciales que ya terminaron su misión paso á rectificar los hechos
que con bastiute iiicx..ciitud y acriino:iía se refiereu en si documento mencionado.
Decretado en 30 de agosto da 1S33 el e m p r é s t i t o , y encargada
su ejecución á las diputación.:s provinciales y juntas de armamento
y defensa con arreglo á las bises de posibilidad de los c o n t r i b u y e n tes , hecha por el gobierno la distribución e n t r e las provincias según su divi^ion rentística , fue invitada Huelva pira que pagara un
comisionado á Sevilla á concertar la distribución de ios 13 millones
cupo de la intendtíncia entre las des provincias. Se verificó en setiem
bre I j !• uoion proyectada, y después de algunos debates preliiniuarese convino por la diputación y ;0.iU de armamí-nto de Sevilla y representante de Huelva en seúaiar a esta 15880J0 reales , cantidad
que según se empresa e n l a espjiicio'i á que contesto , se estimó arreglada prudentemente , atendida la población y riqueza de cada
resjiectiva provincia.
La misma c; rporacion aproba i,Ij el convenio celebrado de que
existe copia en su secretaría , y de que también • egun creo se iia da
do repetidas vece:^ conocimient > al gobierno , prot'.edió al re()at'timiento entre los puiibljs , grand.'s propietarios y capit i¡i.->tas , poseedores de la mayor y mejjr parte de su riqueza , de ia manera mas
confo me y justa al real decreto , siguiendo la marcha que también
se adoptara eu Sevilla y otras p o tes del reino. Concluido s j encargo en principias de octubre d : l:i3G , li diputación que le sucediera
continuó y perfeccionó sus trab ijos en este particular , pasando á la
intendencia de Sevilla la-oportuoas certificaciones para que rccaudase sus valores. Y efectivamente los pueblos tie cita provincia tan
dóciles cuanto jiniínados del ni.ejor espíritu, se api'íí^uraron á realizar sus p a g o s , de suerte que a lafeclia del decreto de I I de .abril
de 1837, quedaban bien pocas é insignificantes canlida les |>or logrea
sar si se esceptua el cabildo catedral de Si vi lia y algunos otras g r a n des propietarios que aun no liabiau S/,tisfechíi sus cupos, escusando su
morosidad en las escesiyas cuotas que les asignaran en otras provrus
cias aun por los bienes y rentas que poseían en esta , y otros ¡iretestos que por la fatalidad de hallarse la intendencia en Sevilla y demasiado cargada de atenciones , eran las mas veces ignorados en
Huelva. Lo cierto es que estaban cobrados mas de 800000 reales, y
si bien es verdad que hubo algunas reclamaciones , ni se hicieron
por los pueblos, ni fueron tan justas y atendibles en vista de los decretos entonces vigentes , para que la diputación provincial de Sevilla se permita zaherir con tanta acrimonia el repartimiento de esta,
asegurando con alguna ligereza ser de donde mas se elevaron á S. M.
y á las cortes tantas y tan fundadas quejas,
,''' No trato eu manera alguna de recr indnar ; pero consi'dten.'C los
periódicos de la época y el Diario de Sesiones de las pasailas cortes, y
veremos si fue de liuelva de donde partieran mas reclam iciones.
Se promulgó el decreto de 11 de abril, cuyo espíritu y tendencia
diferente del de íigosto no comp u , ..; ij,i¡i, ei .•.specL.) de convenie.,cia: mas sea diclio de paso, que su discusión |)arai¡zó la recaudación
en la esperanza de ver cambiadas las antiguas dispo-siciones , que se
desuatuializó el empréstito, y que acaso de aqui naciera la dificultad
del cobro, y quizá impo.sibiüdad de realizarlo pronta y cumplidamente. La diputación de Huelva, cercicrada de que casi todos los pueblos
habían satisfecho sus cupos , y creyendo sucediera lo mismo respcc
to de los grandes propieíaiio^ y capitalistas , y en la inteligencia de
que solo se adeudaban pequeñas cantidades , espuso al gibiernO de
S. IVl. a' fin de que consifli rase á esta provincia comprendida en el
articulo 12 del decreto de 12 de abi'l, y sin ocultarle los restos p e queños que en su concepto faltaban por ingresar ; pero desengañada
poco después por las comunicaciones del señor inteuilente que a l a
sazón se hallaba ya en Huelva', visto que ri staban mas de 4002) re
formó luego luego el repartimiento en conformidad á las recientes
y últimas disposiciones.
Con esta época coincidió la nueva invitación de la diputación p r o .
vincial de Sevilla para la reforma del repartimiento, y si bien es cierto se le contestara como por el mismo tiempo se espuso al gobierno,
también lo es haberse añarlido, (pie no alterándose por el decreto 14
de abril los cupos de las provincias , no se e s t i b a en el caso de a c ceder á sus deseos. ¿ Y ha dejado de ser cierta esta última asevera
cion ? Ni una palabra del mencionado d e c r e t o indica tal variación
entre las provincias, y teniendo la de Huelva mediante el convenio
celebrado su cupo de 1,388000 rs. , no sé como se puede inducirse
respecto de ella diversa legislación ; sin que haya j u g a r á ia interpretación arbitraria que da al decreto la diputación ile Sevilla , apo
yada en el silencio déla ley résped o de la rectificación entre las provincias correspondientes á una ndsnia intendencia , porque si esta
circunstancia insignificante probara a l g o , se deduciría igualmente
que á solas las diputaciones en cuyas capitales estuviesen enclavadas
las intendencias corresponde esclusivaniente reformar los repartimientos ; resultado seguro de semejante modo de raciocinar y miiv
«geno del decreto. P o r otra parte no sabemos que se desechara en las
cortes pasadas una proposición del señor diputado den Aniceto Al
varo , que terminaba á variar los cupos de las |>ioviiicias ? ,! ('óino
se quiere aun iiisist.r eu tales pietens oiies ? La diputación de llucl
va persuadida de estas y oti a.s poder asas razones , celosa dci cnniiilimiento de las leyes y del bienestar de sus representad )s. crcv o il,: sn
deber negarse á la invitación de Sevdhi , y llevó a cabo KÍ ib croto
en su provincia , que afjrtuuaíiamente y merced á la buena disposi.
cion de los pueblos y actividad d é l a intendencia recién inst.iLada tie
ne bien mas adelantada su recaudación que algunas OÍIM, provi;icias.
Mas á pesar de todo esto , la diputación ¡iroviíicial de Sevilla de
por SI, y sin consultar al goDierno d>" S Al. se creyó autorizada pa
ra rectificar el r e p a r t i m i e n t o , y remilij á la de Huí Iva el cupo que
le plugo asignar , aumentando el aniel ior en (ii2)21 rs Prescindu
del examen de los datos en que se apoy^,ra , equivocados cieitamens
te al comprender en el territoi io de Hue! va ¡us villas de Fregenal, liodonal y otras que no recuerdo , pertenecientes á otras provincias:
tampoco diré de la operación por la que S2 lia aplicado esclusivamente el sub-idio eclesiástico que p:igaba el Cíhi.Mo catedral v mitra arzobispal de Sevilla, no obstante proceder una gran parte de esta
cantidad de los bienes y rentas que poseyeran en e:,ta provincia y
algunos otros errores : ¿es ahora tiempo de cambiar los re[>artimieii
tos de los pueblos y grabarlos con un aumento indebido I' ¿ E n qué
bases de justicia estribara semejante trastorno? Con cuanta razón no
se hubieran quejado los pueblos de sus representantes ? La diputa
cion de Huelva que á ninguna otra cediera en patiiotismoy eu el
cuidado del bien estar de su provincia , se habría desacreditado con
tal debilidad , siendo ademas culpable su condescendencia.
Por último, no sé a qué conduce recordar la invasión del rebelde
Gómez en las Andaluci.is: es un hecho que la ruina y desolación que
por todas partes sembraran estos vandal J S , no alcanzó felizmente á
liuelva , gracias al ningún retiombre de su riqueza y a su posición
geográfica j Qiai lauíbicu eu ajueÜa época uzaro-U hizo sacrificios iu
mensos para contribuir a la común defensa , sin tocar un ápice á los
f jiid is del catado , y aurniu-: reducidí y pobre no se dejiiavcnlaiar
par otras provincias mas ricas y piqjulosas , siendo casi iocr eüdi; la
energía y decisión que dcSülegaia. i'osleí iormente CUntinuB llevando las caigas piíbdcas cad al COI liento con muy poca» es-«¡i,clones
pre tcido.se á cuantos sacrificijs se la evi¡
'
' 'y piou
ijen con una eticaría
tltud, que |j ace li.inora su patriotismo y a las antorid.idís e a c a r g i d a
eu su a
liSir a<:ion.
Aun inas pudiera añadir, mas prometiéadomfi que la corporacio.i
provincial n i il scuid.ará naila, llenando su deber cumpiídamecte cuu
pre.sfciu ia do datos y documentos de que carezco , Co.'icluyo sii|)li;;;;:i dt) a vds. se si; \ a;i da publicidad a esta nianife.síacioii, si uo t'jii tcr..
mioaiite y de IMVO como merece, al menos sinceraj y sin mas objeto
que vindicar de un grave Cargo a los individuos que re;)reseiil.i'i;iii la
provincia, cuyas disposiciones si acaso no fueron sienipit; acertadas
eiau iijja-.de los deseos mas puros en favor d é l a causa nacional y dé
la felicidad de si. . comprovinciales.
V Í T O Í U A i.o de febrero.^H-jice
dia,? que los enemigos han
puesto á la.s órdenes de! cura de Dallo 200 ó 500 infantes y 5ü ca .
Dallos, COI! objeto de apoderarse de todo el que salga de esia r i u dad. En efecto, ayer salieron de ella cinco zapadores v tres (.leron
prisioneros; pues aunque salió f u r r i a para rescatarlos , ya habiaii
desaparecido los traidores.
Tamliieii se ha dicho que ayer se aproximó á Nandares una partida facciosa, la cual hizo prisionero al gobernador y á doce soldados
que le acompañaban, y salieron á reconocerla.
S A A ' T Á N D E R 2(j de entfro = E i vapor francés McUoro que
entró en este puerto el di» 25 ha conducido d,-sde Pasages p l i . - o s
de importancia de Mr. Mole para el embajador francés rcsideute^eii
esa corte , y del cónsul nuestro en líayona; igiirdiiíeiile que del g e neral Arispe , según se dice, para el cunde de Lucharía. A ia una de
la tarde dt I mismo día salió un cslraordinario condia leudólos á sus
respectivos ilestinos.
I D E J I 50 = S e asegura que nuestras autoii'lades han acordado
que los liabitantesde esta provincia anticipen 5üií) duros para subvenir á las obligaciones á que tienen que atender. üíce.-:e (Míe c o r r f s ponderán \A'jj) » esta capital. Ignoramos cómo jiodrái. sacar e.-ta can
tidad coando falla todc.
Ya es p.sitivo que nuestro comandante g e n e r a l , t i stñ i C a y u c la , pasa con iijual destino á la provincia de Lugo.
J J l ' E L V . \ 25 í/c-e/u';í).=Con motivo de haber.sc aproximado a
la sierra de tiuadaliipe la facción de liasilio y de haberse i,oi- i'oii;,:i.
cuencia aumentado la osadía de las partidas facciosas do ¡a Es'rí.;i,¡..dura, se lian adoptado algunas P r o v i d e n c i a s e " - ¡-1:1:1 i. i,.,- <" ,
[lOr ei general Narvaez, a quien esperamos para ofrecerle ¡d prupi^j
tiempo los recursos que podamos, con objeto de que se H e v e a debibidü electo la formación de la reserva.
G R A Í M A D A 'lí de enero.•='VÁ señor Escalante, gefe político de
esta provincia , se ocupa con asiduidad de montar bajo cierto pie el
ramo de protección y seguridad. También han sido llamarlos á la cnpitania general algunos alcaldes constitucionales y gefes de la milicia nacional de los pueblos eu donde auteriorniente hubo ü'<'i; 1 movimiento, y han sido amonestados con energía.
F C E M ' E a R A R l A 2í> de e/ícro. — Habiéndose p r e s e n t a d a
bueno el tiempo antes de ayer, se pusieron en movimiento por la
tarde de dicho ilia las luerzas disponibles de esta línea, parte p e r
tierra y parte por mar para desembarcar eu Guetaiia v o p e r a r e n
combinación Efectivamente atacaron por la ala derecirwle la línea,
y con sola la pérdida de seis ú ocho heridos vadearon el rio Oria , y
ocuparon los pueblos de Usurbil, Orio, Lasarte y Zobieta. A yer tna
Sana parece empezaron á construir algunos parapetos ó reducios cu
ios puntos en que la ria es vadeable y en algunas cimas , y un bata Ion faccioso atacó una de dichas alturas, pero fue rechazado ; en seIguida yolvieron dos batallones enemigos á repetir la carga , y parece
fueron también echados con péi dida, debiéndose en gran parte esta
ventaja al acierto con que la arlilleria de Ja legión inglesa arr.qó las
granadas d e s d e d i d l a cima de Ziubieta. E n otro punto estuvieron
también bastante empeñadas dos compañías de prelerencia de Ciudad Rodrigo y cbapelgorris con un batallón enemigo para posesionarse de una altur'a, pero estos fueron vencidos por aquellos.
Ayer ha d ;bido haber mas jiérdida de una y oíra parte que l,i
víspera ; pero no sabemos á cuanto asciende, aunijue creo no será de
mucha consideración. Escriben también que los movimientos se han
ejecutado con mucha inteligencia, y (¡ue la trojia se ha conducido con
buen orden y disciplina. Se hizo ayer un cbapelchurri prisionero y
se luesentaron cuatro. El batallón de malina rea! briiánica siguió á
rctsguaidia de la tropa de observación ; antes de anoche vclvió tí San
S t b i s i i a n , y ayer á las once regresó á PasajesSuponernos que esta operaciun se Iribrá veririi-ad 1 [lor alijotn
conibinaciüu general de amagar por tadas partes el par, ocupado por
los rebeldes, y llamar así la atención de estos á diferí utos p u n t i ' s ;
piod inr te.no que antes de muchos dias se carguen de noche á bu
mañrina I ó ti batallones facciosos mas, den un ataque h i u - r o de io.s
que aco-lumbran, y resulte una pérdida de lasque suele haber en.
iiiicsii'as retiradas. Dios .quiera me equivoque, pero temo muchi»
ocurra alguna cosa seria, si nuestras tropas permanecen algunos dias
en los puntos actuales.
COliTES.
CONGRESO DÍÍ: l>ií»ÜTAI)OS.
SESIÓN
D K L U I A (i
UE rEBP.EBO.
Aliierta á la una v cuarto se leyó y a¡)robó el acta de la anterior.
Pasó a la comisión enea'gada de examinar las notas remitidas por
el gobierno sobre los diputarlos sujetos á reelección , una copia del
nombramiento de don Miguel Cornejo para la (daza de magistiailo
de la auiliencia ue .Madrid vacante por promoción de dou Modesúo
de la .Mota.
Se concedió al diputado don Diego Montoya la licencia de dos
meses que sellcitaba para restablecer su salud.
Se marularon pa ar al gobierno las solicitudes siguientes: una d e
don Juan García , dou .Santiago (aarria y dan Francisco iAoniaOos,
residentes en Turo pidiendo se les p : roiitiese ordenarse in. .sucri.,
por haber redimido ya la suerte de sol lados que les había cabillo 1.11
las quintas pasadas. Otra del presbítero don Juan Llórenle', n l i g i o Su secularizado de la urden do s:iii F i a u ^ i s c o , ca (juc I!M.::Í! .".:..Lt)
f •« i p«stir de su «mor á Ja libertad , como podian acrei'.itar las autoridades de la ciudad de C ó r d o b a , se veia reducido á la indigencia '
por faltarle el pago de su corta asignación , y pedia se le igualase en
el al de los de su clase que eu las demás provincias se hallaban asistidos con reguliiridnd.
Se dio cueula de que el teniente coronel don Juan Antonio LiOars reproducía la esposiciou que había elevado a S. M. la reina gob e r n a d o r a , quejándose de que hacia 17 meses que se le habia desterrado de Barcelona injustamente.
El señor conde de las N A V A S apoyó la esposicion del tenient e coronel Liniirs, manifestando que su conducta en favor del orden
y de la razón fue su|)erabundaDtemente buena en Barcelona y que
•in embargo habia sirio desterrado arbitrariamente y hasta la fecha
en que ya la libertad afianzada con el sabio código de 1837 garantí
laba i todos los ciudadanos sus d e r e c h o » , no habia visto Liuars ese
r-esplandor de libt-rtad que debia haber licuado de júbilo el corazón
de todos los españoles.
El señor M A D O Z apoyó algunas de las observaciones anteriores
añadiendo que sin embargo de que conocia que el referido Linars,
•era honi'bre de un carácter r a r o , parlirular , singularísimo, puesto
q u e se habia tremolado una bandera de unión, reconciliación y concordia era m^oester que el gi,bierno disimulase todos los estravios
anteriores á la publicación do la constitución de 183" , pues todos
ée dirigían a' locar el termino á que habinmos llegado.
Se acordó eu seguida i^ue dicha esposicion pasará al gobierno.
A la coniiíion de examen de actas se remitió una esposicion de
áoa Vicente Reina , capitán de infanleria r e t i r a d o , y vecino de un
pueblo de la provincia de Malaga, en que manifestaba los defectos
d-j <jue adoleciíin las elecciones de diputados y senadores de dicha
provincia, y pedia al congreso se sirviese declararlas nulas.
Se leyó por priniCTa vez la proposición siguiente de los señores
conde de las N¿vas, Carrasco , Madjz , Córdoba , B a r d a q u i , ü l a v a r rieta , Burriel , C h a c ó n , Mayans y otros.
«Conociendo las ventajas que reportara' a' la industria fabril , el
que se escluyau para las contratas de vestuario , equipo y demás los
géneros estraiigeros , pedimos al congreso que las que se celebien
eti lo sucesivo a.-i en la próxima quinta , como en otros casos, no en
tren géneros estiangeros de ninguua especie, debiendo ser todos na.
clónales.»
Se leyó por segunda vez la proposición siguiente del señor Monedero.
«Pido al congreso se sirva acordar lo conveniente para que los
pueblos de la capitanía general de Castilla la N u e v a , y cualesquiera
«tros que se hallen en su caso , liquicfen en la capital de su respecti
va provincia los suministros que hagan á las t r o p a s , evitándose por
este medio los perjuicios que se originan á las municipalidades que
han de concurrir á la c o r t e únicanieute en el dia , según está establecido.»
Admitida á discusión y apoyada b r e v e m e n t e por su autor, se man>
áó pasar á una comisión especial.
Se acordó que coostarian en el acta los votos siguientes. El del
rseñor Arrazola contrario al dictamen de la comisión de guerra sobre
I» adición del señor Quijana al proyecto de ley relativo á la quinta
d e 40'¿) hombres , el de los señores Loriga , Vázquez Moscoso , L ó p e z Ballesteros, F o n t a n , Villaverde y Cadabal, contrario á la resolución del c o n g r e s o , no admitiendo la adición del señor Villaverde
al mismo proyecto, sobre que no redimiesen los pueblos con dinero
Ja falta de mozos hábiles para el servicio.
Lí ido el proyecto de ley sobre la quinta de 403) hombres , por
el señor secretario Reinoso , el congreso le encontró conforme con
Jo aprobado y acordó pasase al senado para los efectos prevenidos eu
la constitución.
El señor P A C H E C O , secretaria de la comisión de reglamento
i n t e r i o r , manifestó que en el dictamen de dicha comisión sobre las
adiciones presentadas á su proyecto inserto en el Diario de hoy , se
Jiabia padecido un error gravísimo, cual era el de haber puesto tres
párrafos eu distinta colocación en la página 3 4 9 , pues el orden co"
que debian estar colocados era en primer lugar el 1.* y 3.* y luego
«I 2.* Añadió que hacia esta advertencia para conocimiento de los
señores diputados, y para que el señor redactor se sirviese enmendarlo eu el próximo Diario.
O r d e n del dia. Discusión del dictamen de la comisión de actas
sobre la de tercera elección de la provincia de Sevilla.
Se leyó dicho dictamen en el cual después de un largo prea'mb u l o la comisión opina c{W. la tercera elección practicada en Sevilla
para nombrar un diputado suplente en vez del 4." de igual clase que
habia r e n u n c i a d o , es ilegal y que asi debe declararlo el congreso,
(lando aviso al gobierno para que disponga lo conveniente á hu de
que se r e p i t a , bien como nueva paicial, como caso omitido en la ley,
y por el estado en que han venido á recaiir las cosas ; bien como segunda , conformándose con lo dispuesto en el artículo 44 de la ley
«lectoral.
Muchos diputados piden la palabra en contra.
El señor M A D O Z (en contra) Yo entraba , señores , con mucha
desconfianza á impugnar el dictamen de la mayoría de la comisión
de p o d e r e s , porque creia e u c o o t r a r m e solo en la defensa de mi voto
particular , pero después cuando he visto que tantos señores han pedido la palabra en contra , por de pronto me animé algo sin embargo
de que veo ahora que yo ataco el dictamen de la comisión por muy
malo y otros le atacan por muy bueno. Pero sea como quiera, no me
e n c u e n t r o del todo tolo en la arena , puesto que tendré un buen de
fensor. La cuestión parece cuestión de partido , mi dictamen puede
considerarse como de diputado que pertenece á la minoría y por eso
suplico al congreso que oiga con indulgencia Jas razones que he te
nido para fuudar mi voto particular.
C u n v e u g o con la comisión en que el caso es nuevo, pero de nin
g u n modo eu lo demás que sienta en su dictamen. Todos los señores
diputados convendrán conmigo en que la l e y e s imperfecta , pero n o fOtros no hemos de condenar á los pueblos i que sufran los grávame Des de que después me haré cargo. Creo pues de mi deber presentar
ante todo la historia de esta eleeciou y después e n t r a r é eu la c u e s xion legal. _
La provincia de Se villa se e n c o n t r ó , señores, i poco de hacerse
las elecciones generales sin niogun suplente. Renunciaron tres de los
diputados elegidos y vinieron á reemplazarlos otros tantos suplen
tes. Después de esto el señor don Manuel Maria Calderón renunció
el cargo de diputado y faltaba un s u p l e n t e , puesto que seis dignísi •
mos diputados por aquella provincia hoy se sientan en estoj escaños.
Luego el resultado es q u e le falta i la provincia u n solo diputado
que es el que ha sido elagido eii esta última elección ; elección bien
hecha en mi concepto y que por lo tanto debe aprobarse.
La ley electoral piesenta diferentes casos eu que p u e d e ocurrir
vacante del cargo de diputado : l i c u a n d o el elegido fuese nom»
brado senador; '¿."cuando después de haber tomado asiento en el
congreso renunciase su cargo. La misma lev dice en su art. 47. (lee).
tenemos pues que á elecciones pjrciales únicamente puede p r o c e derse para reemplaz'ir las vacantes que ocurran después de haber
tomado asiento los diputados en el co igreso. Ahora b i e n , al señor
don Manuel María Cilflecon puede aplicársele el art. 47? Me parece
que no. {Elseiior Arrazola pide la pa'abra como de la
comisión.)
Si el señor Caldero,i dice que no puede salir de áevilla por el estado
de su salud, no es p >sible que se le aplique este a i t i c u l o , pues su
aplicación solo puede tener lugar en el caso d e q u e el diputado se h u biera sentado en el congreso.
La comisión sin duda está muy escasa de razones cu^indo en la parte dispositiva de su dictamen no sabe que decir, fio hay q'ie leer mas
que dicha parte dispositiva para convencerse de e s t o , pues en ella
k eomision dice que se haga esto ó lo o t r o , cuando tolo Ja ley es la
que debe dirigirnos. Asi, yo r u e g o á los señores diputados que desechen el dictamen , pues es mas legal desecharle que aprobar lo que
la comisión sienta en él. Esto p r u e b a , y permílame que lo d g a
el señor Arrazola , que es el que va á tofuar la defensa , que la comisión tiene una convicción muy escasa , muy poco fuerte , no como
la q u e y o tengo y en virtud de la cual defiendo mi voto particular.
Antes de entrar á sostener lo que debió hacerse para la segunda
elaccion según yo opino, nie pecnilirá el congreso que lea el aru'cu41 de la ley electoral. Dice dicho artículo: « También se proveerá por
medio de segunda e l e c ion cuamlo resulte que no hay;< suficiente nú>
mero de candidatos para el senado, ó de diputados suplentes para leemplazar á los propietarios en los casos previstos en el artículo 5 °
de la presente ley. » Es decir, que se procederá a segunda elección
eu los casos á que se refiere el artículo 5.° Veamos este : y si eucou
tramos algún caso aplicable á la opinión de los individuos de la iiia
yoria d é l a comisión , debe precederse á la elecci lu parcial. En este
caso anúlese la elección de que tratamos, y precédase á otra nueva.
Dice el artículo 5." (lee dicho articulo ) Tenemos aqui los dos casos
en que debe precederse á seguudas elecciones. ¿ El señor don Ma
uuel Maria Calderón ha sido elegido senador? No. Ha llegado á tomar asiento en el cong-reso? Tampoco. Luego no esta coin.irendido
en ninguno de los dos casos del artículo 41 con refei tocia al 5 " Véase pues como debió precederse á elección parcial coo arreglo á la ius
truGcion del artículo 42 de la mi^ma ley electoral.
La comisión, señores , debió entrar francamente en la cuestión y
decir este articule de la ley se ha infringido y asi debe anularse la
elección. ¿Lo ha hecho? No. Ha dicho lo que podia decir y en lo que
convendrán todos , á saber que el cahO es dudoso ¿Y en caso de duda hemos de condenar á la provincia de Sevilla a nueva elección hoy
que tal vez se hallará invadida por el rebelde Ba,-,ilio, y los pueblos
se encuentran cansados de tantas y tantas elecciones? ¿Vanio- á determinar porque )a ley está obscura , que un pueblo vuelva a votar
nuevamente cuando ningún arlículode aquella se ha infringido? Tan
débil de razón ha estado ',a comisión , que se encueotr.i en >u dictamen un párrafo que honra mucho á mis compañeros, y demuestra
la imparcialidad y legalidad con que ha procedido siempre la comisión de poderes eu lodos sus dictámenes incluso el relativo á anular
las elecciones de la provincia de Ma aga.
Otra de las objeciones que pueden hacerse á la tercera eleeciou
de Sevilla , es que no c o n c u r r i r r o n todos los distritos al tscruLinio
general , pero yo trataré de desvanecerla.
No hay señores un solo artículo en la ley electoral por el que se
disponga deban asistir lodos los distritos eleclora'es ai escrutinio ge
n e i a l ; y si esto no fuese cierto, ¿ cuantos señores diputados se hallan
en estos bancos que no debieran sentarse en ellos, porque algunos
partidos de las provincias que representan no han asistido á las elecciones ? Las circunstancias críticüS en que nos encontiamos, la in
fluencia de los partido», que i las veces se amenazan de m u e r t e , ha
sido, a no dejar la ineu r duda, la causa da •:|ue los seis partidos de la
provincia de Sevilla no hayan concurrido á las elecciones. Debemos
considerar pues solo una cosa, qud a l a provincia de Sevilla le faltan
u n d i p u t i d o y un suplente, > que cuanto ante» d¡:beirios poner r e m e ,
dio á este mal, para no l u c e r mas hondas y cada vez ñ u s incurables
las heridas que alli se han abiei to á las leyes, faltándose á la imparcialidad y buena fe ron que se debió haber procedido.
El señor A R R A Z O L A : Se ha dicho per el señor Madoz, que la
comijion se presentaba muy débil de razones para sostener su dic
t i m e n , sin embargo d e q u e le constábalos dése is que leuia del
acierto en cuantos habia dado. La comisión á la vez podia decir, á
S. .S. que no deben ser sus argumentos muy fu;;rtes, cuando para
darle cierto colorido de justicia ha tenido que recurrir á sofismas,
pues en último análisis á esto queda reducido el discurso que acaba
de pronunciar y lo probaré.
El primer cargo que ha hecho el señor Madoz contra el dictamen es que la comi.ion d u d a , que está vacilante eo su opiuioa , y
que no ha presentado aquel ledactado en les términos con que ge
neralmente se espresan los hombres cuando están seguros de que lo
que proponen es justo. ¿ No es esto, señores , un sofisma ? ¿ Por ventura el mismo señor Madoz no ha dicho que habia motivo fundado
para d u d a r , que el caso era nueve y que no estaba espreso en la
ley? Se ha dicho también que la comisión mi preponía dictamen ¿No
es proponer diclamen decir que son ilegales las actas electorales de
Sevilla , que deben volver a repetirse por un medio parcial hacieu
do que vengan aqui ios que únicamente puedan calcularse que son
la espresion de la opinión de la provincia ? Vean los señores que im
pugnau el diclamen á qué estremo los conduce el no pararse á reflexionar s o b r í cuestiones que aunque á primera vista parezcan obvias,
son sin embargo dificiles y problemáticas? Es indudable que á cada
provincia le corresponde un número fijo de diputados y suplentes, y
que por estos últimos se suplen á los primeros cuando no pueden ó
no quieren veuir á este lugar; pero de aqui no se infiere lo que ha
sostenido el señor Madoz , comparando las segundas elecciones con
unas segundas nupcias, ni hay tampoco paridad en el caso; porque
las segundas nupcias serán nulas siempre que subsistan los efectos de
las p r i m e r a s ; y asi la comisión ha creído que las segundas elecciones
de Sevilla eran ilegales porque aun subsistían los efectos de las primeras. Estas, p u e s , me parece son r a z o n e s , y no de poco pe^o, como ha dicho el señor diputado por Lérida. Fundada, pues, en ellas
la comisíou , espera que el congreso se servirá declarar nulas las
elecciones de Sevilla , y que hará se verifiquen otras parciales se
gun prescribe la ley electoral.
El señor I Z N A R D I : Quisiera poder demostrar que las actas de
Sevilla d e b e n ser aprobadas tal cual han sido presentadas Yo, después de lo dicho por el señor Madoz , bien poce tendré que añadir,
pues en mi concepto su setioria ha probado hasta la evidencia que
las elecciones deben de ser s e g u n d a s , no parciales. Las segundas
elecciones claro es que no se dicen asi porque seau el complemento de
las primeras , sino porque puede suceder que uno de los individuos
nombrados en propiedad no quiera ó no pueda veuir á sentarse eu
estos bancos á representar los intereses de aquellos que lo han honrado con su confianza; y este es el caso de las elecciones de Sevilla
Ademas, las circunstancias particulares en que se encontraban aquellos habitantes deben tenerse muy presentes para resolver esta cuestión.
No puedo conformarme tampoco coa la solución que dio el señor
Arrazola á la comparación que hizo el señor Madoz de las segundas
elecciones con las segundas nupcias. Ha dicho su señoría que eo el
primer caso vivía , por decirlo a s i , la primera m u g e r , y por consiguiente que el segundo malrimonio era n u l o . N o , señores, v e n o lo
veo asi, pues el diputado propietario habia muerto , y la provincia
estaba como viuda , y cousiguientemente el caso presentado a vari
por el señor Madoz está perfectamente traído. C o n c l u y o , p j e s , manifestando que deben aprobarse las actas de Sevilla.
El señor G A L I A N O : Bien sé , s e i i o r e s , que p o d r é ser considerado como sospechoso eu este negocio , y que se me dirá procedo en
él por espíritu de partido.
No me reseutii é yo de tales calificacionas, pues estoy
firmemente
convencido d e q u e estos pariidus son el alma de los gobiernos consti
tucionales ó representativos. T r a t a r é dejaveriguar si la letra y genuí"
na iulerprelacíon de la ley esta terminante y bien aplicada á la c u e s tión que nos ocupa, ó si por el contrario^va contra su objeto y espiri»
t u . La ley electoral se ha hecho para que les pueblos, e n t r e dos partidos que se combaten en tod,)S los países regidos por instituciooes como
las nuestras, elijan los que quieran que los representen. Al efecto re
parten listas sus candidatos y hacen cuantos esfuerzos lesson posibles
para obtener la victoria , de manera que hay vencidos y vencedores. Pues bien, ahcra aprobamos l a s a d a s de Sevilla, e n ú l t i m o i e sullado vendremos i parar eu que un representante que no p e r t e n e -
ce al partido político que alli obtuvo la victoria electoral, y que r e a l mente no p i a r á nunca espresar la v e r d a d e r a opinión de sus comitentes , se sentará en estos escaños contra la índole de esta clase de
sistema de gidjierno
El orad,ir hace algunas otras observaciones, y concluye ofreciendo su voto de ajiroliacion al dictamen de !;• comisión.
En segulila á petición de un señor diputado , se declaró el punto
suñcienleinentu d i - r u l i d o , y puesto á votación quedó aprobado el
dictamen de la comisión.
Se da < lienta de otro dirlamen de la comisión de revisión de actas,
en que se manifiesta que habiendo examinado las actas de segundas
elecciones de la provincia de Madrid, y bal laudólas conformes a la
ley electoral , era de dictamen debian aprobarse. Asi se acordó siu
discusión.
Se delaró admitido como diputado por la misma al señor Cantero
que era quien habia remitido las actas al congreso.
Para completar la comisión de hacienda , se nombra á los señores
Benavides , marques de Montevirgen, Miguel P lo y Iñigo
Para la comisión que ha de informar sobre la tuoposic'on del señor M n i e d e r o , se nombra á los señ.jres conde de Toreiio, Aloe, Silvela y Ceballos.
Para la comisión de instrucción primaria al señor Muñoz Maldonado.
Se dio cuenta del siguiente diclamen de la comisión de guerra.
La comisión de guerra ha examinado las dos solicitudes i emitidas
por el g ibierno al congreso de doña Manuela Dominguez , viuda del
' e n i e n l e general don .losé C a n l e r a c , y eu su vista y teniendo p r e sente el mérito contraído por dicho general, que perdió su vida por
sostener la subordinación y disciplina militar , propone al congreso
el siguiente proyecto de ley.
Artículo único. Se concede á doña Manuela Dominguez , viuda
del teniente general don José Canterac , ad mas de la viudedad que
ya disfruta 2 ) 3 rs. de pensión , iinxiui-im de las de g u e r r a .
El señor I I U E L V E S hace presente que según se le ha informad o , y seguii han dicho los papeles públicos, la señora viuda del g e neral Canlerac , disfruta unas pensiones considerables , acaso por
el valor de cuatro mil d u r o s , y que si efectivamente era asi, no se
le debía conceder ahora lo que proponía la comisión.
Kl stñ ir SAN MKiUKL : Contestó á nombre de la comisión, que
los Individuos dp la misma , nada sabían relativamente á lo que liaira indicado el señor Huelves , que el gobieruo no habia pasado á lu
coinísiou antecedentes sobre el particular.
Después de hablar sobre este mismo asunto los señores M u r e , y
Burriel ^ manifestando ti último no Ser la situación de la nación la
mas á propósito para conceder las cuantiosas pensiones propuestas
por la comisión ; esta espone que relira su dictamen para proponer
nuevamente al congreso lo mas conveniente.
Se leyó el dictamen de la comisión especial nombrada por el congreso para informar sobre la proposición relativa á inscribirse en el
salen los nombres de algunos ciudadauos sacrificados por la tiranía
eu los diez años del despotismo.
La cumision eu dicho dictamen opinaba que no habia i n c o n v e niente en que el congreso acordase la inscripción de los nombres citados en la p oposición sujeta a su examen.
El señor V Á Z Q U E Z Q U E I P O pide la palabra para una cuestión
de orden , y concedida que le es d i c e ; que el dictamen de la comisión abrazaba dos cuestiones principales ; á saber , una si los ciuda d a n e s a que se refería la proposición eran ciertamente dignos del honor de inscribirse sus nombres en el salón ; y otra si las cortes t e nían facultades suficientes para resolver esto por sí después de p u blicada la ceust'lucioo de 1837.
Respecto de esta última cuestión que su señoría fija como cuestión
de orden, dice que él ha leído detenidamente todo el título quinto de
la constitución que trata de las atribuciones del congreso, y no ha e n .
centrado articulo ninguno que comprenda esta, cuyos inconvenientes no se salvan de modo alguno con el precedente de le hecho por
las cortes constiiuyentes, pues aquellas cortes no tenían ley fundamental a que atenerse, '¡iendocoino eran llamadas á formarla ; pero
que ahora bajo un sistema de orden , pues los poderes no se hallaban
confundidos bajo un sistema de legalidad , pues habia ya ley fundatai , dudaba su señoría si podrían las cortes acordar la inscripción de
esos nombres que la cemisicn proponía, conformándose en un todo
con la propo-ici ui de algunos seriores diputados.
El Sr. P R E S I D E N T E : La mesa no cree que lo p r o p u e s t i por el
Sr. Vázquez Queipo es una cuestión de orden, pues mas bien es una
impugnación al dictamen de la comisión , y asi pasa á conceder la
palabra á los señores que la han pedido en contra de la cuestión principal El señor Infame tiene la palabra e n c e n t r a .
El señor I N F A N T E : Señores, al tomar la palabra en esta cuescuestion tengo necesariamente que volver la vista airas y recordar
otra época.
A la comisión de premios nacionales de las cortes constituyente',
se la pasó una proposición pidiendo que se inscribiesen cierto número
de nombres en el salón ; la comisión propuso y las cortes acordaron
la inscripción de los que hoy ocupan esa lápida (señalando la que
tiene
enfrente.)
Esa lapida señores, no es mas que el epígrafe de un capítulo de
nuestra historia. Riego. Señores ¿quién al leer este nombre no r e c u e r d a la hazaña que le inmortalizó; como asi mismo la causa p o r que murió que fué por una votación que hizo como diputado; por la
que fué sentenciado á muerte con otros muchos señores?
Sigue de-pues de él, señores, el Empecinado.,
nombre que nos
trae á la memoria los emiuentes servicios que presló en la gloriosa
guerra de la independencia y su desastroso fin en un cadalso. Mijar:
ese honrado ciudadano cuyo fin es bien conocido de todos como asi
mismo sus esfuerzos y los de sus compañeros para dar la libertad á
su patria ; doña Mariana Pineda, por ser una patriota y una señóla ¿ quien podría reusarla el honor de inscribir su nombre en esa \imáa'í Manzanares:
Señores , ese digno militar cuyo desgraciado y
heroico suceso todos conocen bien. El último de todos esta
Torrijas,
I V quien al leer este nombre no lee también delras de él los de todos
sus compañeros de infortunio ?
Pero en medio de esto yo creo sinceramente que hay un nombre
entre lodos que sobresale como un gigante ; ese inglés que los acompañaba, el desgraciado W o y d y , qtie sin relaciones y sin intereses en
este país vino a sacrificarse por la libertad española, entregando para
aquella espedicien teda su riqueza, porque á mi me consta que ese
benemérito inglés eutregó 25 libras esterlinas.
Asi p u e s , las causas que tengo para oponerme al dictamen en«
cuentro son dos. 1 . ' Que algunos de los nombres propuestos, se leen
al leer el de Torríjos ;. y 2 . ' porque no se ha inscrito el nombre de
ese in"lés que tan relevantes servicios nos prestó.
Un señor individuo
de la comisión contesta b r e v e m e n t e manifestando que la coinision no tendría inconveniente alguno en que se
inscribiesen tantos nombres que no quedase ya mas que leer , pues
no podia convenir de modo alguno con el señor Infante , respecto
de que ciertos nombres se sobrenlendian al leer o t r o , pero que la
comisión por sí no tenia facultades para acordar la inscripción del
ingles citado por e' señor Infante , y que asi si el congreso lo estimaba oportuno , la comisión no tendría reparo alguno en ello.
El señor conde de las N A V A S (como miembro de la comisión)
dice que lo dicho por los señores Moure é Infante no era de moilo
ah'uno un ataque directo á la comisión, pues esta no podia proponer
la inscripción de mas nombres , pues era comisión especial nombrada para informar sobre per.^onas determinadas.
El señor I Ñ I O O (en contra) inai.ifiesta oponerse porque dice
que hay muchas personas cuyos eminentes servicios rivalizan con los
de las personas propuestas por la comisión. Y después de apelar •'
las gloriosas ruinas de Zaragoza , d e Gerona y otros puntos , concluye opinando por la desaprobación del dictamen.
El señor P R E S I D E N T E suspende esta discusión , y señalando
para mañana los asuntos p e n d i e n t e s , levantó la sesión de este dia á
las cinco menos cuarto.
SErVADO.
Se abrió a' la una menos c u a r t o , y leida el acta de la anterior
quedó aprobada
El senado quedó enterado de una comunicación del señor p r e sidente y secretario del congreso de señores difjutados participand)
ia elección becha en primero del actual de presidente , vice-presi
denles y primt-r secretaria d e l mismo
Asimismo In quedó . acordando quedasen en la secretaria dos esposiciones , una de la diputación provincial de León y otra de la de
Valladolid en las que manitieslan lus males que suíre la nación por
la continuación de la gufrra civil , y pidiendo á las cortes que uni
das con ^1 gobierno traten de terminar con mano vigorosa este azo
t e desolsdor.
También se acordó quedase en la secretaria otra esposicion del
cabildo catedral de la ciudad de Almería , baoiendu varias observa
ciones acerca de la necesidad de reformar la ley respectiva á diezs
•nos.
Se dio cuenta d e un dictamen d e la comisión de gobierno interior del senado acerca de la solicitud de don Juan V^elasco sobre
haberle obligado a desorufiar la casa que le si rvia de fabrica de
municiones cuando se declinó el edificio de doña Maria de Aragón para palacio del estamento de ilustres pro e r e s , y pide en su cun^e
cuencia se le indemnicen los perjuicios que por esta causa se le han
s e g u i d o ; y la comisión en visita de lo que de sí airoja el espedient e , es de Ojiinion se devuelva dlclio espediente al gidjieruo j.ara que
torne la resolución que proceda en justicia Aprc;bado.
Procediéodose a la orden del día se puso a discusión el dictamen
de la comisión especial encargada de examinar el proyecto de ley
p r e s e n t a d o por el gobierno relativo á dispensas de gracias llamadas
comunmente al sacar.
Se leyó el dictamen del g i b i e r n o y en seguida el de la comisión.
Abierta diicusiun sobre la totalidad
El Sr. mariiues de VA L ü O R N ERA dijo que a'su parecer en el
articulo 1 " se hablan mezclado en las faculludes que se conceden al
gobierno por esta ley, objetos e n t e í a m e n t e dislintos uno de otro, en
los cuales en algunos casos podria ser necesaria la concurrencia de
Jas cortes. Que estando el gobierno encargado de hacer ejecutai las
leyes bajo la responsabilidad de los ministros , pues la constitución
al señalar las facultades de la corona le da, no un encargo ligero sino
una potestad de ejecutar las leyes , y de consiguiente no parece justo atarle las manos para qut proceda en la ejecución de las leyes
cuando por la fundamental tiene ese poder
Manifestó que accedería gustoso al dictamen de la comisión siemp r e que el articulo empezase c r n otras palabias mas racionales y
mas propias para el g o b i e r n o : analizó en seguida varias d é l a s partes
de que se compone el articulo 1 ° espresando que en materia d e l e gitimaciones sabido era que solo correspondía al gobieruo, y en cuanto 8 las dispensas de edad espuso, que en ninguna materia como esta
desearla se revistiese al gobierno de facub'ades omnímodas.
El orador continuó sus observaciones acerca de los demás p a r t i culares contenidos en el artículo, y en cuanto á la tarifa a que están
sujetas las dispensas dijo , que siendo esta una parte económica que
forma parte de los presupuestos de gastos del estado, no obstante
haberse dicho por t i señor ministro de Hacienda al discutirse la ley
de presupuestos que nos rige que apesar de los abusos á q u e d a b a n
lugar estas gracias, creía conveniente subsistiesen esas tarifas, le pa
recia se dejase á la discreción y prudencia del gobierno , cuando la
causa fuese grave y el motivo justificado. Por lílti no , concluyó di
ciendo que no tendría reparo en aprobar el dictamen siempre que,
como dejaba sentado, las facultades con que se reviste y declaran inherentes ai poder real fuesen espresadas de una manera mas análoga.
El señor G Ó M E Z B E C E R R A , como de la comisión , contestó
que el señor preopinante había manifestado en su discurso lo mismo
que la comisión habia creido. y que si se tratase después de oírle, de
analizar su discurso, se podria dudar si habia hablado en pro ó en
contra , y que sí bien en los principios constitucionales que habia
sentado no podía menos la comisión de estar conforme con su señoría,
acaso no lo estaría en su aplicación. Que el señor marques de V a l gornera habia tocado una cuestión de la que la comisión precisamente había querido huir, pues no se concede por el proyecto que se es
tá discutiendo la autorización al gobierno que se supone por su s e ñoría ni en ninguno de sus artículos, que es lo que constituye la ley,
se usa de la palabra autorización
; que el señor marques quisiera se
empezase diciendo : «corresponde al gobierno» , pero que para d e cirlo de este modo tan terminante po Irían ofrecerse muchos argumentos , y la comisión diciendo el rey resolverá &.c, ha sentado una
cosa que dice lo mi^mo que desea su señoría. Que hasta ahora estas
gracias , que es el lenguaje usado en las leyes , pudíendo en adelante dárseles el nombre que se q u i e r a , especialmente después que se
publicó la constitución de 1812 , se han considerado como rigorosas
dispensas de ley , y solo b jo este conrepto podria corresponder su
resolución á las cortes y tom^ir en ellas una parte ; pero que la co"
misión habia tenido presentes las leyes antiguas y también la constitución que nos rige , siendo el resultado de estiis observaciones el
que verdaderamente pueden considerarse no como dispensas de l e y ,
sino como una obiígacion de la misma y bajo cuyo concepto las cor
tes pueden declarar que esta dispensa corresponde al gobierno.
derar que habia aprovechado la ocasión d e manifestar sus buenos
deseos acerca de que no se tijase la mayor edad á los 25 años ; manifestó el orador abundaba en las mismas ideas que su señoría, mas
era preciso tener presente no ser el tiempo oportuno para que la comisión lo propusiese por ser propio de los códigos, que es donde
debe estnblererse. Que la comi-ion al proponer este articulo solo hnbia tratado de dispeusar la edad para ciertos casos, guiada d e un
principio de economía política; pero que no habia creido oportuno
hacer esta esrepcion en favor de algunas clases, tales como la de
escribano á quien hasta ahora se le ha concedido dispensa para
que antes de los 25 años pueda ejercer un oficio por et cual se le
fiace depositario de la fé pública , en cuyo acto tiene tanta influencia en la suerte de sus conciudadanos: que las mismas consideraciones habían mediado para esceptuar al p r o c u r a d o r , pues si la ley le
consideraba menor antes de cumplir la edad " u e designa , y su facultad para manejar sus propios negocios, menos podría inanejar los
ajenos, pudiéndose decir lo propio del cirujano y médico, quienes
aun mas que las otras profesiones necesitaban para ejercerla de la
esperiencia.
Por ú l t i m o , el orador después de otras reflexiones en que demostró las razones que la '^emisión habia tenido para fundar su diclamen , concluyó rogando al senado tuviera á bien aprobarle.
El señor secretario del despacho de G R A C I A y J U S T I C I A im
pugnando el discurso del señor marques de V a l g o r n e í a . manifestó
que el gobierno no dt^bia presentarse á pedir una autorización que
tiene y'le está concedida por la ley fundamental que nos rige , y por
eso ha traído un proyecto de ley para que discutiéndose se esplanase
la cuestión y se declarase que usando de un derecho i)eculiar suyo no
infringía las leyes
Dcclurado el punto suficientemente d i s c u t i d o , se declaró haber
lugai á votar sob e la totalidad de los aiticulos.
.Se leyó el articulo 1." que dice :
A l t . 1 " El rey resolverá todas las instancias sobre los objetos si
guíenles: Einancipaciones , legilimaciones de b s hijos naturales se
gun los define la ley 1.» títujo 5. ' lib 10 de la Novísima Recopilación ; dispensa de edad para adminislrar bienes; dispensas de ley
pi<ra que las viudas que pasan a segundas nupcias conserven la tutela ; dispensas a los abogados para revalidarse escribafos: suplemento
de faltas de confiímnrion de privilegios , dÍ5|)ensa de formalulndes
en los oficios r e n u n c i a b l e s ; facultad d e n o m b i a r teniente á los propieiarios de los oficios públicos enagenados para examinarse en lugar
distinto del designado per la ley, u ordenanza , para que los clérigos
puedan abogar en lo civil ; v finalmente toda dispensa que altere las
condiciones reglamentarias de los citados oficios y profesiones ú otros
semejantes.
El señor SAN MIGUEL manifestó estaba conforme con algunos
de los puntos comprendidos en este articulo, mas no a.i con todos.
Que en cuanto a las dispensas de edad para administrar bienes, le parecía que sobraba esta clausula, ó que era necesario se diese mas
claridad, pues le parecía que esta dí-pensa no hablaba con los m e nores de edad que tienen curador , pues si no le tienen es claro que
no necesita dispensa para administrar sus bienes.
T o c a n t e al suplemento de faltas d e conüimacíon d e privilegios,
dijo no lo entendia bastante b i e n , pues estando en el día abolidos
los privilegios ignoraba cuales fuesen los que necesitasen confirma
cion.
Añadió, llamaba su atención sobre manera la dispensa sobre formalidades en los oficios renunciables e t c . . pues estando ya en toda
la nación formada la opinión de la utilidad que resulta de la estiuclon de todos los oficios públicos que deben incorporarse á la corona , debiendo sostenerse únicamente aquellos que lo son por título
oneroso , no parecía se estaba en el caso de dar mas latitud i estas
dispensas.
El señor C A F R A N O A , como de la comisíou, apoyó e l a r t í c u i o y
manifeaó las razones en que se había fundado para dar el dictamen.
El señor O N D O V I L L A dijo que a su parecer no debían tener
lugar en este articulo las dispensas á los abogados para revalidarse
de escribanos, pues sabiendo bien lo que es este oficio, habiendo seguido su carrerra y sufrido un evamen, habían tenido la práctica suficiente para examinarse de escribano, y que lo nue debería hacerse
para evitar á los letrados e:.ta especie de desaire , que por tal le consideraba, era obligarles á s^icar el título de tales escribanos y pagar
los derechos.
. . . .
Espuso, quisiera le esplicase la comisión que clase de privilegios
eran los en que -e dispensa el suplemento de fallas de confirmacion , pues habiendo cCíado estos no le parecía se estaba en el caso de conceder tales dispensas, y por lo mismo desearía mayor ampliación que la que contiene el articulo. Que en cuanto á las forma
lidades acerca de los oficios renunciables, ya el señor san Miguel había hecho todis las observaciones que son consiguientes á la niateria,
sí bien es verdad habia omitido una, cual es, el que se perjudican los
derechos de la nación , pues sabido es que cuando se incurre en una
informalidad, a q u t l que hace la renuncia debe el oficio incorporarse
á la corona , y si se admite esta dispensa se perjudicaba como dejaba
dicho al estado.
Que iguales observaciones p o d a n aplicarse á la facultad de nombrar tenientes á los propietarios de los oficios públicos enagenados;
mas que no quisiera , añadió , se concedieran dispensas , como se han
concedido en otros casos , para examinarse los escribanos ante los
jueces de primera instancia , sino ante el tribunal superior en cuya
provincia va a servir la escríbanla.
El señor C A F R A N G A : De-pues de contestar á las observaciones
hechas por el señor preopinante acerca de las viudas que pasan á
segundas nupcias , y de sus deseos de que uo se conceda facultad á
los escribanos para examinarse por otro que por el tribunal de ja
provincia donde deba servir su oficio , dice , en cuanto á los privilegios que necesitan de confirmación, ser notorio que cuando los r e El orador entra en seguida a hacer varias observaciones acerca yes se veían en un caso estraordínario , vendían oficios públicos , y
de la legitimación de los hijos naturales, facultad conocida al princi- que de estos oficios á la muerte del rey , porque esto uo podía venpio, y lomada en España del derecho romano, que el príncipe enton- dei se y la muerte se lleva consigo todos los derechos , era de los que
ces era el poder ejecutivo y el legislativo a un mismo tiempo sin que se necesitaba pedir confii niacíou.
hubiese otro á quien para estos casos se pudiera a c u d i r ; pero que
Los señores ONLiOVlLLA Y C A F R A N G A rectifican vanos
ahora no estábamos en ese c a s o , pues si hay un príncipe con pohechos.
der ejecutivo, pleno y completo es con una parte sola del poder legis
El señor marques de V A L G O R N E R A espuso, que con respecto a
lativo.
la dispensa acero.) de las viudas que pasan á segundas nupcias, sino
En cuanto» la tarifa a' que por el señor marques de Valgornera estaba bastante claro podía ser objeto de una adición ; pero que no
se había a l u d i d o , dijo que no podía verse sin escándalo pues se veía podia menos al hablar de las dispensas de edad para administrar bieen ella señalado un precio para el que legitimase hijos adulterinos, nes que se conceden por este articulo, de manifestar encontraba una
otro para los hijos sacrílegosy para los hijos habidos sin esposa: mani- discordancia con el articulo 3 " al que por necesidad tenia que tocar;
festó que todos los legi ladorts al tratar de est» materia se habían vis- pues al paso que en el que se discutía se concedía al gobierno la
to en una dura alterna'iva; que por una parte habiau visto seres d e s - facultad de dispensar la edad para admiiistrar bienes , y en lo cual
graciados , infelices, inocentes, que uo tenían culpa de los delitos de estaba c o n f o r m e , no podia estarlo con respecto al que habla de los
sus p a d r e s , y por otra la necesidad de conservarlas buenas c o s t u m - médicos cirujanos y otras profesiones, no conviniendo en manera
bres , de uo atacar principios de m.»i alidad y de hacer que se guarda- alguna con la limitación que allí se pone , porque era evidente que
se cierta especie de consideración á lo establecido por las leyes. Que á la edad d e 22 anos podía un individuo por su talento precoz ser
la del título 15 p a i t í d a 5 . " a l hablar d é l a legitimación de los hijos un escelente médico ó hallarse en aptitud de ejercer olracualqma
distiogue antes las diversas especies que hay de hijos legítimos; di
ra profesión , y por esta coartación que se pone al gobierno verse
ce que después hay hijos naturales, distinguiendo muy bien al ha
privado de hacer uso de sus talentos.
Llar de estos en contraposición con los legítimos los naturales proQue lo que convenia era establecer un buen plan de estudios en
píamente dichos , y otros que son algo mas que naturales. En seguida procede á esplicar el modo como definen las leyes de partida el que se fijase lo que se habia de a p r e n d e r , y coriegir los abusos
esta clase de hijos , demostrando la cautela con que dichas leyes que ha habido de recibir por medico á un individuo cou siete años de
procedieron en el particular; rcpit"; que la tarifa del año 1817 seíia- teología y de leyes.
lada para esta clase ile dispen-as no se puede leer sin escándalo , y
El orador después de otras observaciones acerca de los particuesperaba que la comisión á quien c o r r e s p o n d a , de acuerdo con el lares contenidos en el articulo , mauífesló sus deseos de que la c o gobierno , resolverá' se restable'.can a' sus primitivos límites.
misión admitiera la adición que propuso de la palabra «onerosos»
En cuanto á las dispensas de edad de que también habia encon • con respecto a la confirmación de los privilegios.
El señor P R E S I D E N T E suspendió esta discusión , diciendo q u e
trado reparos el señor preopinante , aunque mas bien podria consi-
Riañana ¿ las doce se reuniria el senado para continuar la discusión
pandiente , y levantó la sesión á las tres y medía.
Madrid 7 ife lebrero.
E\ acta elector.lI ile Ssvilia y 1J propuesta <le una p e n sión (le 2 0 , 0 0 0 rs. para Ja viuda dei general Canteíae liau
ocupado la sesión de a y e r .
La cuestión de Sevilla ya la hemos espuesto á nuestros
lectores : apurados los diputados y los suplentes antes de t o m a r asiento los siete diputados q u e corresponden á a<{uc!ld
provincia y fallando todavía un (iipntado , el p;effi políijco
c r e y ó , y á nuestro juicio con ra/uii, t|ue debia lleiiaiseel
liueco por el medio que la ley llama ¡-efundas elecciones, es.
lo es, designaiiilo como candidatos ios tres q u e q u e d a r o n
con mas votos en la elección a n t e r i o r .
La comisión propuso la anulación de lo lieclio sin p o ner nada en su lugar, y el cnncrreso ha aprobado que se
haga nueva elección parcial, dando mas valor á las razones
espuestas por el señor Galiano sobre la probabilidad q u e
hay en favor de la menoría de los electores obrando como
se ha hecho en -Sevilla , que á la letra del articulo 4 I de
la ley electora! que prescribe la segunda elección para lodos los ca;sOs en que la vacante sea antes de q u e los e l e gidos tomen asiento ea el congreso. Este ha podido hacerlo
i n t e r p r e t a n d o la ley pues por su contesto literal el acta <le
Sevilla debió aprobarse ; pues la no elección de los s u p l e n tes se deni ."Iró ya en la discusión que no producía per-juicio alouno iiorque se conipletaria i n d u d a b l e m e n t e en el
salón el niiincro de d i p u t a d o s a p r o b a n d o el acta.
La pensión de la señora de Ganlerac propuesta por la c o misión sufrió desde el principio fuertes impugnaciones y a
por el estado angustioso del erario piíblico ya p o r q u e la i n t e resada disfruta 2!5S r s . según hemos demostrado en otro artículo de nuestro periódico; y nadie , que sepamos, ha podido
desmentirlo. P r i m e r o rectificó la comisión su d i c l a m e n , a ñ a diendo que los 2 0 3 rs, propuestos se e n t e n d e r í a n como ú n i co pago por el tesoro : cosa no solo justa, sino qtie está m a n dado por regla g e n e r a l , á fin de que no haya <[uien pueda
percibir dos haberes. Y si estose hace con l o s q u c á veces d e scinpeñan dos destinos importantes, no sabemos poríjue no se
ha de hacer respecto de las pensiones de las clases pasivas.
La inscripción en el congreso de los nombres de algitnf.i?
patriotas dignísimos ocupó por lillimo á los diputados , y la
discusión quedó p e n d i e n t e para el dia siguiente.
Al hacernos cargo del artículo inserto en el Espafíol,
en
que el señor Florez Estrada , refutando dos artículos d e !
Mundo, trató de defender su proposición y de otros señores
diputados para la suspensión de la venta de fincas nacionales,
solo fijamos la consideración en el cálculo q u e hacia S. S . , y
sobre todo en el principio injusto y destructor de todo c r é dito de no pagar interés alguno á los acreedores. Mas, como
la materia es de suma importancia, y la celebridad del autor de la proposición , ha contribuido á aumentármela , no
creemos deber dejar pasar sin contestación n i n g u n a de las
especies que se han tocado en su apoyo.
VA señor Florez Estrada para dar m a y o r importancia á
su sistema, a p u n t ó varias proposiciones, que no se detuvo
á demostrar, dando por incuestionable su exacta aplicación
á nuestro caso ; y vamos á desvanecer esta suposición. Dice
en p r i m e r lugar que es un principio económico que " de la
mejor distribución de la propiedad territorial d e p e n d e n e cesariamente la mayor y mas sólida prosperidad de un pais."
Admitimos el principio, a u n q u e no deja de exigir reservas,
como nos lo prueba la prosperidad de la Inglaterra donde
la propiedad está reconcentrada en pocas manos, y la p o breza de algunas de nuestras provincias d o n d e se halla s u m a m e n t e dividida ; p e r o no convenimos en la proposición
de que «por el solo plan d e arriendos á censo, se p u e d e
conseguir esta mejor distribución de la propiedad, y .sacar á la nación del estado de miseria en q u e se halla.» L a
propiedad territorial .se dividiría mas de lo que lo está •, pero
no m e j o r , p o r q u e la mejor división es la q u e está mas acomodada á los medios de cultivo ; y cuando á las masas d e s g r a ciadas que forman la mayoría de la sociedad no se les p u e d e n
dar y u n t a s , ni a p e r o s , ni grano para s i m i e n t e , ni para c o m e r en el año que habia de t r a n s c u r r i r antes q u e recibiesen
el p r i m e r fruto de la tierra que se les repartiese á censo, ¿cómo es posible c[ue con este repartimiento se pudiera mejorar
su suerte? Sin los medios de c u l t i v o , y sin lo necesario para
mantenerse que los obligaría á trabajar en otra p a r l e para adq u i r i r el sustento diario, t e n d r í a n q u e t e n e r las tierras r e p a r tidas en el abandono, y la miseria principal lejos de d i s m i n u i r s e , iría en a u i n e n t o .
Prescinde también su señoria «de q u e por el solo plan de
censos se puede recompensar á toda la b e n e m é r i t a clase m i litar.» Naiiie desea mas sinceramente q u e nosotros q u e se
premie d e b i d a m e n t e al q u e ha pasado su juventud ó p e r d i d o
su salud Ó su carrera e n el penoso servicio de las armas ; p e r o
despojar á los acreedores del estado de toda su hipoteca p a r a
estas recompensas , sería tan injusto como el despojar á lo.s
grandes de España , ó á los demás ricos projúetarios de sus
fincas para distribuirlas en estos premios ; ó como sí al ir á
distribuirse los bienes de un coacurso e n t r e los acreedores,
se les arrebatasen para recompensar á la benemérita clasn
militar. Sus servicios los hacen á la nación en g e n e r a l , y la
nación toda debe sufrir proporcionalmente la carga de las
recompensas.
,
Pero qué premio es este para los beneméritos militares,
ni qué medio para mejorar la suerte de las masas , aun c u a ' i do unos y otros tuviesen los mediüs n/;cesar¡os p^ra el cuh.i~ ¡Darles
— • por un
- - canon -•YO?
de * por 100 tierras q u e nadie
q u i e r e en a r r e n d a n i i e n t o por el misino p r e c i o ! pues para esto el q u e quiera a r r e n d a r tierras necesita n i n g u n a gracia d e
las c o r t e s , del g o b i e r n o , ni de persona a l g u n a ? Bien hace
su señoría de prescindir de este medio de recompensas y de
m e j o r a s , pues los militares y las masas mismas prescinden d e
«1 a u n q u e sobran tierras q u e a r r e n d a r , con e n t e r a libertad
«i.e dejarlas cuando les convenga.
Presi'iiiile " de que por este solo plan se p u e d e conseguir
q u e los pueblos tomen Ínteres ea la causa de la libertad y del
tioiío úü {salid'' ; y es bien que prest-inda de ello ; por q u e
r u a n d o ninguna veataja se sigue de esto á los pueblos ; c u a n do ese r e p a r t i m i e n t o iiuitil y aun perjudicial á la a g r i c u l t u ra no puede hacerse sin robar á una clase i n í l u y e n t e y b e n e in(;rita los medios de reintegro q u e de u n modo legal y sol e m n e les están asignados , ¿ q u é interés podria inspirar la
m e d i d a hacia un gobierno q u e asi tratase á sus legitiuioa a c r e e dores?
l'rescinde « del notorio perjuicio q u e de la venta de los
bienes nacionales se sigue á toda la clase propietaria. » \ ¿ eu
<¡ué es!á ese perjui(;io? Si las fincas rústicas fuesen uno de los
.Trticulos de comercio q u e a u m e n t a n su valor con los c a m ÍJÍOS, y q u e solo lo tienen en cuanto p u e d e n euagenarse á u n
precio m a y o r q u e el q u e se paga por ellos, convendríamos en
t:l perjuicio q u e se supone ; porque cuanto m a y o r es la canlí«lad de efectos d e una misma clase q u e se ponen en venta,
t a n t o mas suele rebajar su precio. P e r o las tierras no a u m e n tan su valor precisamente por los cambios , sirao por las mejoras q u e se hacen en el cultivo-, y cabalmente estas mejoras estan casi siempre en razón inversa del n ú m e r o de cambios,
p o r q u e no emplea su capital e n mejorarlas q u i e n no se p r o ..pone sacar p o r si mismo el fruto de ellas.
Prescinde «de la escandalosa dilapidación d e la única h i poteca q u e el estado tiene para p a g a r á sus a c r e e d o r e s . " ¡Di
lapidación! ¿EIs dilapidar las fincas nacionales el venderías i
ios mismos a c r e e d o r e s , ó á cualesquiera otros para e m p l e a r
su p r o d u c t o e n beneficio de ellos? Ño dudamos q u e en a l g u nas ventas no h a y a habido de p a r t e de los empleados todo el
celo y cuidado y toda la buena fe q u e debían esperarse ; pero
y a muchos de los defectos q u e se notaron al principio se han
corregido , y los q u e q u e d a n están solo en los e n t o r p e c i m i e n tos q u e se oponen á las v e n t a s ; pero si algún vicio quedase
todavía , con u n poco de cuidado de p a r t e del gobierno q u e daría e n m e n d a d o . Por c o n s i g u i e n t e , hace bien en prescindir
d e la general demoralizacion producida p o r una
tnalversacionpñhüca
q u e no existe.
Prescinde " de la i r r e p a r a b l e injusticia d e satisfacer á
una parte d e t e r m i n a d a d e acreedores, c u a n d o c o n o c i d a m e n te el estado no p u e d e satisfacer á las r e s t a n t e s . " C u a n d o todos los acreedores son llamados á la amortización por medio
d e las v e n t a s , y todos p u e d e n pedir el r e m a t e de las q u e
p u e d a n acomodai-les, u í n g u n o queda escluido ; y el q u e no
e m p l e e su p a p e l no p u e d e decir q u e se le perjudica : a d e mas m i e n t r a s no lo amortice le devenga intereses ; y estos
intereses! t e n d r á n m a y o r probabilidad de ser pagados c u a n t o
m a y o r sea la am_ortizacion por medio de las ventas , lo cual
t a m b i é n a u m e n t a el valor del papel en la plaza , y todos los
aci eedores reciben el beneficio. La irreparable injusticia estaría en pjrivar á los acreedores de los intereses y de la c o m p r a
•defi-ncas nacionales, como hicimos ver en el artículo a n t e r i o r
- sobre este a s u n t o .
Prescinde por último " d e los i n n u m e r a b l e s males q u e se
siguen 6 la sociedad e n t e r a de toda ley q u e ocasiona oscilaciones e n el valor d e algún artículo i m p o r t a n t e de r i q u e z a , "
•Ta hemos h e c h o ver q u e no h a y el perjuicio q u e se quiere s u ;pouer-, p e r o si lo h u b i e r a seria igual ó m u y poco m e n o r con
t¿\ sistema de censos q u e con el de ventas. Los artículos de c o mercio varían d e precio y proporcionan c a m b i o s , según la
necesidad q u e d e ellos h a y a ; pues todo el m u n d o p u e d e ver
q u e u u artículo m u y buscado a u m e n t a de valor , y dismi. iiuye en proporción q u e va cesando la d e m a n d a .
•'La de las tierras n o p u e d e ser grande mientras con ¡a t r a n quilidad y seguridad de los campos y caseríos no acudan los
capitales á esplotar d e b i d a m e n t e u n r a m o de riqueza pública,
(¡ue es el mas desatendido e n t r e nosotros, y el q u e en el día
mas q u e n i n g ú n otro ha de elevar la prosperidad de España á
u n grado a d m i r a b l e . Si las tierras vinieran de otros países,
r o m o los artículos de consumo , y se echara en el mercado
una gran masa de e l l a s , como la q u e p e r t e n e c e a la nación,
la necesidad de ellas , q u e siempre será proporcionada á la
población y á los medios de c u l t i v o , disminuiría necesariam e n t e ; pero las tierras están y a e n t r e nosotros, y se c u l t i van y satisfacen la necesidad q u e d e ellas podria h a b e r . Y si
se quiere decir q u e p o r q u e estaban en matioy nuicrtas
para
la v e n t a , lo estaban también para el cultivo; la misma n o v e d a d causarían dándolas á censo q u e en v e n t a , la necesidad
se satisfaría del mismo m o d o , la d e m a n d a seria igual , y la
uiisma alteración ú oscilación produciría en los precios.
Celebraremos q u e el señor F l o r e z Estrada dé á esta m a teria toda la claridad q u e a n u n c i a , sin atenerse ú n i c a m e n t e
á los datos de los q u e basta ahora h a n i m p u g n a d o su plan:
esto nos proporcionaría la ocasión de c o n t r i b u i r al mejor esc l a r e c i m i e n t o d e u n a cuestión de suma importancia para el
p a í s , sobre la c u a l , a u n q u e mas ilustrada la opinión , no deja
d e h a b e r todavía algunos alucinados.
Como la cuestión del Canadá es i n t e r e s a n t e , hemos t r a d u c i d o el siguiente artículo sobre las quejas de aquellos h a hita.ites y las concesiones del ministerio ingles.
<, Ku los primeros momentos de la insurrección del Canadá'no esc u c h ó la Inglaterra m a s q u e las inspiraciones de su nacionalidad y
solo aco-ió ios consejos mas violentos y el partido estreino de esterminar a'los rebeldes , llevar la voz como lo hacian los radicales para
r e c o r d a r los derechos de los canadenses y esponerse á ser acusados
di; traición contra la madr,p patria. Después ha calmado aquella irrit«c¡on y un individuo de la camaia de los comuues se ha atrevido á
r t c k t e a r u n a aiuuistia ut¡¡ver>ái.
Esta mudanza era precisa as! qne se supiese en Inglaterra con
mas exactitud el verdadero estado de aquella revolución. Este conociniianto ha ¡do cundiecdo poco á poco hasta q u e la discusión celebrada en el parlamento ha puesto los hechos en la evidencia y ya
no es dudosa la justicia de las reclamaciones del C a n a d á , y en lus
dábales se h a n culpado mutuamente los diversos partidos que han
ocupado el p o d e r , pero sin negar ya la existencia de las faltas: lo
cual ha demostrado q u e en todas las épocas de la administración se
han cometido grandes lujusticias contra los habitantes de aquella co
louia^ A u n eslau sin cumplir las promesas solemnes hechas al Canadá
en 1 , 9 1 , sancionadas en 1 7 9 6 ; y los que han osado reclamar su ob>
servancia han sido presos como sediciosos. A l cabo de medio siglo se
oyen las quejas de aquella fiel colonia; pero solo para hacer averil
guaciones estériles del mal , ó para tomar medidas ilusorias que le
alivian poco ó nada , pues es un hecho demostrado ya que las c o misiones indagatorias de 1828 y 1853 , y los actos que fueron consecuencia de e l l a s , ninguna mejora proporcionaron á los padecimientos del Canadá , que permaneció en la misma situación.
Fiiiidanse las pretensiones de los canadenses en derechos antiguos y reconocidos formalmente por la metrópoli; de hechos que
los liberales ingleses tienen por legítimos, porque se fundan en
aquellas garantías mas preciosas para todus los paises coustitucionales , como son el v o t a r l a s conlribucioues , i n t e r v e n i r l o s gastos y
participar el pueblo de un modo racioual eu atención de los negocios públicos. Asi que , la discusión del parlamento sobre la cuestión
del 4 íoadá producirá el efecto de presentar a Inglaleu-a de u:i modo nuevo la resistencia d e su colonia, de eslinguir todo resentimiento
nacional, y obligar al gobierno á entrar eu una via de moderación, á
lo cual parece muy diapuesto.
be ha publicado en Londres un despacho del departamento de las
colonias sin duda con el objeto de preparar la opinión á las medidas
que piPHsa tomar el gobierno Sabido es que este trata de piiner una
especie de consejo al nuevo gobei nadcr general, y el documento del
mmi.itro de las colonias da una idea de los elementos que han de
componer este consejo ; el legislativo y la asaiid)lea del alto Canadá
formaran una p a r t e : otra el consejo legislativo del bajo Canadá, y
por último e n t r a r á n los nombrados por los electores del bajo Canadá,
Algo complicada es esta máquina en v e r d a d , y no muy conforme
con lo que exije la urgencia y el tamaño de los acouteciinientos.
¿Qne Será, p u e s , este consejo?
C r n o poder constitucional dista mucho de las formas legales y de
las gai-antias que deben ofrecer tales asambleas por d e p e n d e r abso
lutanienle del gobernador. Como simple cuerpo consultivo tiene
demasiada inlluencia para que pueda dejar á ningún goliernador aunque sea Mr. Durham, una completa libertad de acción, lia sido pues
una ocurrencia infeliz porque S' el gobierno cree que las circunstaüs
cías hacen necesario un dictador en el Canadá , valia mas dej^ile toda su acción y toda su reiponsabilidad ; y asi pareceiia mas fundado
el s¡.-.tema d e suspensión momentánea aun(|Ue absoluta de la constitución y la completa delegación de poderes en favor del enviado de
Inglaterra,
Pero prescindiendo ya de la forma egecutiva que se prefiera, el
documento del departamento de las colonias declara que la m¡sion
del lord Durham será: 1." la revisión de la constitución de 1 7 9 1 ; 2."
la oi-ganizacion del consejo legislativo bajo nuevas bases; 3 . " la reconstitución del orden judicial ; y 4, ° la cuestión del voto , é intervención de l o s g a l c s públicos. Tales son las concesiones que parece
encargado de realizar el nuevo g o b e r n a d o r , y nótese bien que
á e.sto se reducen las reclamaciones del Canadá , desatendidas por
espacio de 42 años. En este largo espacio de cerca de medio siglo han
hecho los canadenses servicios muy señalados á la metrópoli. Mas de
una vez han triunfado de los enemigos jde Inglaterra por su valor y
udeliiUd, y sin embargo no se han atendido sus quejas. ¿ C u á n t o m e jor hubiera sido , pues que son j u s t a s , haberlas atendido al principio sin dar lugar á la insurrección !
El g o b i e r n o , á quien tantas veces se han vaticinado los resulta
dos de su indiferencia respecto de la guerra de estas prov
cumphdos los presagios, y ojalá sean'eslas las últimas lecciones q u e
le decidan a fijarse eu tan mesplicable abandono , á pesar la t e r r i l " e
responsabilidad de que le cargará la España , la Europa entera y a
ht^manidad ultrajada y á resolverse á agolpar aqni grandes rrcúr^sos
que abrumen , q u e destruyan , que aniquilen la fac '
acción sanguiuaria
y devastadora.
-t
Escriben de B u r g o s :
El dia 29 entiaron de Valladolid un escuadrón de húsares y dos
I , ,
• " " c3i,urtuiuii uc misares y
baterías montadas: se supone que una pa.sará á Villarcayo y oti a á
Logroño Antes de ayer salió un convoy de,dmero y vestuarios para
el cuartel general : y se esta disponiendo o¡(ro de gitanos, que sal Irá
en b . e v e . Puede decirse que la sierra ha quedado libre de facciones
En esta provincia y en las de Logroño y Soria han quedado dis-'
persos algunos m a l h e c h o r e s , que hacen mucho daño eu los c a minos.
*""
La acción del 50 hubiera sido de mayor importancia á no h a b e r
faltado (ignorase por q u e ) la división de S i e r r a ; porque ademas
de haber cogido al enemigo algunos batallones , se hubiera tomados
o
- ' punto interesante de Arciniega. y los rebeldes se hubiese
n visto
obligados á refugiarse á lo interior.
lljsta la noche no hemos recibido ayer los periódicos franceses y
á esta hora solo jiodeiuos dar la bolsa de Londres del 2 / .
Los consolidados han bajado de 9 1 ' / g á 9 2 ; y luego volvieron á
subir 92 Vg. Españoles 19 '/4 con el cup.)ii.
La cotización de Paris debia ser del 28 que fue domingo.
Nuestro corresponsal d é l a Coruña nos escribe con fecha 31 d e l
mes anterior :
Dícese que el coronel Cayuela viene á desempeñar un mando i m portante en esta provincia : ¡0|alá salga cierta la noticia! Es el m a s
apro|)ósito para acabar con las faccioues y restituirnos \a paz.
Parece que entre las cosas robadas jiorlos rebeldes en la villa de
Carballo , lo fue la bandera de aquellos nacionales. Ya tenemos dado
noticia de lo al'i ocurrido , pero según se nos ha referido última-,
mente , minoramos mucho las atrocida<les cometidas entonces.
Se está forinaudo causa sobre los desgraciados sucesos de Carballo.
El señor brigadier Ocaña parece que nos deja: va á desempeñar
el gubierno militar de Badajoz,
F31 dia 25 una columna compuesta de cazadores del 15 y alguna
caballería del 5 . " ligero al mando del teniente Bañuelos tropezó con
los rebeldes eu número de 140 caballos y 200 infantes , acaudillados
por los cabecillas Beas, Ramos y fray Saturnino, todos los cuales se
hablan reunido eu Mezonzo, partido de Sanliago, con el objeto de
dar un golpe en otro p u n t o . Sin embargo de la superioridad n u m é rica de los contrarios, dicho teniente no titubeó en atacarlos , con
tal arrojo y tal éxito, que los enemigos se pusieron en completa dispersión, dcjaudo en el campo seis muertos, tres caballos y varios efectos de guerra , llevándose también bastantes heridos. Por n u e s t r a
parte no ha habido mas pérdida que la de dos soldados del 5," malamente heridos.
En el Patriota
de anoche hemos visto un estracto d e los r e l é •
vantes servicios (latrióticos del señor Abascal q u e acaba de ser exonerado d é l a administración de correos de Madrid. No permitiendo la
inserción de otros materiales de interés el dar lugar á estos d o c u mentos, pagamos al menos este tributo de justicia al señor Abascal
por si algo puede resarcirle de la falta que se ha cometido contra el
el testimonio del aprecio de sus conciudadanos. Después de la vaga
acusación q u e contra los empleados depuestos produjo en el c o n g r e so el señor ministro de Gracia y Justicia, es menos de estrañar la
vindicación á que han acudido algunos de estos beneméritos servidoSabemos q u e llegan ya á 51 las deposiciones de oficiales de las se»
res del estado por medio de la imprenta ; aunque sin esto la opinión
cretarías del d e s p a c h o , á saber : 18 de la Gobernación, 7 dé Hacienhabia conocido la verdadera causa de las exoneraciones que no es
da , 5 de Estado y 3 de Justicia, sin contar las remociones de los
ciertamente el querer inal uuestias instituciones.
archivos y de algunos infelices porteros á quienes ni la pequenez de
sus plazas ha podido garantirlos riel sistema de reacción que se ha
apoderado del ministerio. Sabemos que estas remociones tienen muy
Del Siecle , periódico de Paris del 23 de enero , traducimos lo
numerosa correspondencia en las provincias , aunque se cuida de no siguiente :
publicar en la Gaceta los nuevos nombramientos; y aun se hacen es»El viage del señor T a r e n o á Madrid tiene u n doble objeto p o tas operacionescon cierta reserva.
lítico e individual. En cuanto al político, sabido es de todos , y '
alguno lo dudase que consulte el Diario de los Debates de hoy y sal
Desde a n t e a y e r corría la noticia de q u e Benicarld liabia caído en dra d e la duda. El señor T o r e n o es el comisionado oficioso yy •subor
poder de los r e b e l d e s ; lo cual no parecía tan diñeil después de la diñado del ministerio francés en Madrid , y asi se esplican la
admiraciones y las apoteosis pomposas de la imprenta las
ii súbidesgracia de Morella, Hoy q u e se nos ha vuelto á dar la noticia i n - tas
. ,
.
.
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— .......pre
niinisle'
serta en otro l u g a r , por conduelo que no nos permite dudarla ; nos nal en masa. En cuanto al o
gobierno de Madiid,
el ».uuiie
coud es respecto
•,.-•
lamentamos de que este triste acontecimiento haya ocurrido eu s e - d«:l ministerio Ofalia l o q u e era Mendizabal respecto del de Calaguida del desastre de Morella.
t r a v a , es d e c i r , el alma del gabinete y su gefe v e r d a d e r o , p o r Si se permite que en el mediodía y en el c e n t r o siga la inacción que los demás lo son en apariencia. A u n (;uede decirse que tiene
y la falta de auxilios, de poco servirán las ventajas que podamos con- un pie en el miiiisleiio estando el señor Mon , que es su criatura y
seguir en el n o r t e .
aun algo mas. El joven Mon entró en los negocios bajo los auspicios
del señor T o r e n o cuando era este ministro de hacienda : primero
Los redactores del Defensor del Pueblo, periódico que se p u b l i - fue empleado en la policía de Madrid , y después marchó de i n t e n caba en (Judiz , han circulado una hoja volante, haciendo ver al p ú - dente de rentas de Granada , donde estaba cuando las juntas.
blico las causas por que continúa suspensa la publicación de aquel
Estando el señor Mon en el ministerio es lo mismo que si estuviera
diario , dando e n t r e otras razones , la del estado de guerra que aííige el señor conde de T o r e u o ; circunstancia que conviene tener p r e s e n t e
todavía á aquella capital, lo cual uo se concibe con el estado de tran- porque da la clave de la posición actual. Uno y otro fueron los a r quilidad y orden en que dicen se e n c u e n t r a . Ademas espresa dicha dienles partidarios del Estatuto , asi como son hoy los mas c o m p r o hoja , que los partes del señor c o n d e de Cleonard son i n e x a c t o s ; y metidos campeones de la reacción que ha empezado en España bajo
que S. E. e.-.ta rodeado de personas q u e le engañan comprometiendo el ministeiio üfalia. Por este título goza el señor Toreno las alabansu lepuCaciuij y buen n o m b r e .
zas de la imprenta ministerial, aunque en España nadie se hace ya
ilusión respecto de este personage.
En cuanto al objeto individual que ha atraído al señor T o r e n o al
DiVese que la facción de Tallada ha sido batida por las tropas de
los generales Sanz y U l i b a r r i , y que algún alcalde lo ha comunicado teatro político de España debe buscarse desde la época en que a r rendó á la casa de Rothschild los azogues de Almadén; contrato q u e
al gefe político,
(C)
anularon las cortes por la escandalosa ilegalidad de las condiciones
• El correo de Valencia q u e llegó ayer trae las noticias siguientes: en un negocio de tantos millones. La casa de Rostchild parece q u e
Dia 31 de e « t n > , = - L a 2,» brigada de la 2.» división del ejército hace ciertas reclamaciones al señor T o r e n o , y de aqui los r u m o r e s
del c e n t r o ha llegado á Liria, E n la capitanía g e n e r a l no se han r e - d e empréstito suscilados en el seno de las cortes, como un medio de
obtener muchas cosas bueuas.
cibido mas partes,
No queremos nosotros p e n e t r a r en estos negocios tenebrosos,
Itlem 1,0 de febrero.=^'£.\
comandante de armas de Almansa avisa en 28 del p a s a d o , q u e la facción de Tallada habia retrocedido y pues el tiempo descubrirá todo lo que hoy se o c u l t e ; pero creemos
se hallaba á dos leguas de Albacete en el p u n t o llamado del Solo», útil el prevenir la opinión para que no puedan engañarla los e m bustes de los partidos. El Diario de los Debates cuida de a c r e d i brar.
— De Játiva con fecha 29 trasladan el parte del general de aque- tarlos con una perseverancia que prueba la importaucia que se les da
lla provincia , que dice a s i : «A las doce del dia 26 del corriente e n - e n t r e cierta clase de gentes.»
tró en Alcaraz el rebelde Basilio con su facción, compuesta de unos
La correspondencia de Talavera de la Reina para esta corte lia
4® hombres de infantería y caballería : á las cuatro de la tarde del
misino dia llegó a la citada ciudad la mitad de la fuerza de Tallada, sido interceptada junto á Domingo Pérez , habiéndose solo recibido
de aquella principal un pequeño paquete y un legajo deteriorado que
quedando el re.slo de la fuerza en Viveros y Ballestero : ayer , según los avisos que tengo , permanecían en los indicados puntos; p e - contiene al parecer documentos judiciales, á los cuales, reconocidos,
ro hoy debe Basilio haíjer salido de Alcaraz con dirección al reino se dará el giro correspondiente. ( G . )
de M u r c i a , haciendo su marcha por Bogarra y E l c h e , á pasar el
puente de I z o , cuya ruta debe seguir Tallada mañana e n igual diFONDOS PÚBLICOS.
rección,
BOLSl DI MiDBID DEL 6 DI riBRBEO.
ídem 2 . — E l gobernador militar de Segorbe avisa con fecha de Títulos del 5 p o r 100 nuevos, con los dos
ayer haber llegado á Caudiel dos compañías facciosas y alguna ca»
c u p o n e s , al contado
, . 18 V2 á 18 5/ 1.120,000
balleria de Viscarro,
I d . id. i d . á fecha
18 '/2 '' 19* 2 960,000
Nada sabemos de la parte de Vinaroz ni del general en gefe.
Id. id, id, 1/2 prima
,
.
,
_
.
.
.
.
.
19
Va a 19 1/4 1 700,000
ídem 3. = Morella ha caído en poder de los facciosos.
Deuda sin ínteres ,, a n t e r i o r , ' / p r i m a . .
5'/,(; a 5 »/,s 2.000 000
Benicarló también ha sucumbido después de una heroica r e s i s tencia , y luego ha sido abandonado por los facciosos.
Ya hace dias circulan ambas desagradables noticias , que acaban
de ser couíirniadas de una inaaera oficial.
EDITOR RESPONSABLE
imprenta del Eco del Coiiiercio.
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