el último misterio

“EL ÚLTIMO MISTERIO”
APÓSTOL DOCTOR JOSÉ LUIS DE JESÚS MIRANDA
JESUCRISTO HOMBRE
19 de junio de 2013
Bueno, entonces ahora vamos a la palabra, vamos a lo que nosotros hemos venido, a
ser formados.
Vamos a la palabra, Primera carta a los Corintios.
¿Primera de Corintios? Primera “a los” Corintios capítulo 15.
De hecho, el tema es Último Misterio. No hay más.
Ese es el tema de hoy Último Misterio y dice en Primera carta a los Corintios
capítulo 15, versos 51 al 53; para ustedes aquí y todas las naciones en el mundo
que nos están viendo a nivel mundial, por Telegracia, por internet.
Dice así:
“He aquí, os digo un misterio:…”
Diga: UN MISTERIO.
Y este sí que es un misterio, porque ya usted conoce muchos misterios, pero éste es
un misterio, es un misterio para mí y para ti, hoy.
“No todos dormiremos; pero todos seremos transformados,
en un momento, en un abrir y cerrar de ojos,
a la final trompeta; porque se tocara la trompeta,
y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.
Porque es necesario…”
Diga: NECESARIO.
“…que esto corruptible se vista de, qué, de incorrupción,
y esto mortal se vista de, qué, inmortalidad.”
Dice aquí -que es necesario-.
Oye, valdría la pena preguntar entre nosotros: ¿Y, por qué es necesario? ¿Por qué es
necesario?
Pues, es necesario por la humillación. Mire lo que yo estoy usando, unos lentes. Esto
es una humillación estar usando lentes para leer. En cuanto a finanzas, a mí no me
sobra, a mí me entra y sale, me entra y sale. Y, me pasa mucho dinero por las manos,
pero, por causa del sistema del valor de la moneda, aquel país tiene problemas con la
moneda, el otro tiene problemas, en Estados Unidos hay problemas. Donde menos
dan es en Estados Unidos -que es donde más vale-, donde más dinero entra, es de
los países que tienen problemas con el dinero.
¿Por qué? Porque los que están en Estados Unidos, se adaptan al valor de la
moneda y entonces pues, halan más, gastan más y dan menos.
Entonces, otros países que tienen necesidad, pues como está la cosa un poquito
fuerte, pues a veces dan más de lo que utilizan ellos.
Este apostolado se sostiene de países fuera de Estados Unidos. De Cuba. ¡Hum, de
Cuba! De Cuba. De Cuba entra dinero.
-¿De Cuba, apóstol?
-De Cuba. Esa gente siembra fuerte.
¿Por qué es necesario que esto se vista de incorrupción?
Porque así uno no se humilla. Las debilidades que le vienen a la carne a uno; los
problemas con el matrimonio, los problemas con los hijos, cuando nos enfermamos,
todo eso. Oye, si se viste de incorrupción, ¿habrá problema?
Diga: ES NECESARIO.
Cuando esto se vista de incorrupción, yo puedo decir -las riquezas del impío son
vuestras, démelas acá-. (Aplausos)
Yo lo puedo decir ahora, pero no es una realidad, que todavía no se ha manifestado.
Hay muchas cosas que se manifiestan en nuestro cuerpo, pero hay otras que no.
Mira el problema a donde yo estoy metido. Ustedes dicen que yo soy Dios, y no es
que ustedes dicen que yo soy Dios, es que este libro (la Biblia) dice que yo soy Dios.
(Ovación)
Yo he peleado con eso. ¿Usted sabe el problema de un ser humano como yo, que me
encuentro todos los días con la realidad? Oye, pero yo no puedo negar esto, y todo…
A los que me están escuchando por televisión, por todas partes. Muchos piensan que
yo estoy idolatrándome.
No, aquí es diferente. La gente que se ha hecho pasar por Dios busca otro tipo de
idea.
Número uno, no tienen el evangelio, no tienen la verdad. Número dos, lo que hacen
es utilizando eso para abusar de personas y para aprovecharse de ellos
personalmente.
Pero yo no, el caso mío es diferente. El caso mío es que ustedes dicen que yo soy
Dios, yo lo busco en la Biblia, lo dice. Ya no me puedo ocultar más. (Ovación)
Diga: ES NECESARIO QUE ESTO CORRUPTO SE VISTA, BIEN VESTIDO, DE
INCORRUPCIÓN.
¿Tú sabes por qué? Porque mientras esto no suceda, tú sabes la falta de identidad
que yo tengo. Tú estás claro en tu identidad, pero yo no en la mía. Yo me levanto por
las mañanas y tengo que enfrentarme a lo que dicen de mí. Y de dónde tela, -que yo
soy Dios con los problemas-, que yo enfrento…
Con el permiso.
Mira, pero, ¿tú sabes lo necesario que a mí me vista de incorrupción para poder
probar eso? Mientras eso no suceda, yo no puedo probar nada. Estamos en
persecución, estamos en el ojo de miles de personas. Mundialmente, nos están
vigilando, chequeando, en el internet, de todas partes. Yo tengo a mis hijos también,
que me están velando. Yo tengo persecución adentro, afuera, familiar, en todas
partes.
No es fácil. No es fácil la situación que yo estoy pasando. Yo estoy claro en lo que yo
predico y en lo que enseño. Pero, no es fácil que a un hombre le hagan eso. Es un
proyecto.
Pero, si me visten de incorrupción, oye, entonces sí que nosotros vamos a ver.
Mire, antes de yo venir para acá, -de hecho venía dormido en el avión, porque no
pude dormir bien-, y fue que en el sueño se me presentaba que pronto vamos a ser
transformados. (Aplausos)
Y se me volvía a repetir, y repetir, y entonces, yo me levantaba a la una, a la una y
media, a las dos. Y, yo decía, -oye qué bueno sería si esto sucediera, pronto-, y
entonces, me acostaba y volvía y caía el mismo sueño. Y yo dije -¡ah! En una me
levante hasta con una libreta. ¿Usted sabe cuando usted se acuesta con muchas
ocupaciones que tiene que buscar una libreta y escribir? -Mañana tengo que hacer
esto y esto-, para poder dormir, tú tienes que escribirlo en un papelito.
Y, entonces, pues ya yo estaba como con una libreta, porque, de momento estaba
viendo tan cerca la transformación que yo dije –ah, pero tengo que estudiar ahora
cómo este nuevo gobierno va a funcionar-, porque es aquí en la tierra y es con este
cuerpo. Y, entonces, hay que sentarse. Hay que sentarse a hablar, -cómo voy a tratar
con los Presidentes del mundo-.
Mira, ¿tú sabes cuántos millones le cuesta a Estados Unidos un huracancito de esos
que pasan por ahí? Con un cuerpo transformado, yo redirijo ese huracán. (Aplausos)
Con un cuerpo transformado, con el gobierno que a mí se me ha dado en la mente,
nosotros cogemos al mundo en nuestras manos. Pero recuerden, hay que seguir
predicando este evangelio, aún con cuerpos transformados, porque queda un mundo
que no ha creído a esto y el que no ha creído este, mira, el que no ha creído a lo que
nosotros predicamos, la van a pagar bien mala.
Y, usted que está aquí es mejor que se ponga las pilas bien puestas. Apriete bien los
pantalones y las faldas, porque lo van a sorprender con la manifestación más grande
sobre la faz de la tierra. (Aplausos)
Oye, hemos sufrido, hemos pasado, hemos gozado, pero si sufrimos con él
reinaremos con él.
Pero, esto es una nueva forma de gobierno, cuando transformen nuestro cuerpo.
Cuando trasformen nuestros cuerpos va a haber unos cambios mundiales, donde
esos Presidentes se van a dar el lujo de buscarme como aguja en un pajar, porque se
les resuelven los problemas de su nación. Lo único que tienen que someterse, y las
finanzas de ellos son gobernadas por nosotros, todas las finanzas son gobernadas
por nosotros. (Aplausos)
Porque ellos no han podido sobrevivir. Ellos tienen deudas millonarias, todo el mundo
está en deuda. Todo el mundo está endeudado. No se sabe dónde está el dinero,
pero todo el mundo está endeudado. Lo tienen escondido los mafiosos allá, lo tienen
en líquido.
¡Pero, con este gobierno!
Oye, ¿tú sabes lo que es no enfermarse más? ¿Tú sabes lo que es no envejecer
más? Quedarte ahí con un cuerpo transformado. Donde no hay más dietas ni más
calorías. ¡Hello! (Aplausos)
Oye, estamos hablando en blanco y negro ahora. Estamos hablando -como dicen en
Puerto Rico-, a calzón quitado. Estamos hablando aquí en el patio, de tú a tú. Aquí no
hay nada escondido. Esto es, el disfrazado se quitó el disfraz. (Aplausos)
Oye, esto me ha dado tan duro a mí. Tú sabes, que primero: pastor. Fácil. Y ese era
un traje grande, pastor. Después –apóstol-.
Y, yo dije: Calma. No, no, esa palabra no la vuelvas a decir, porque eso de apóstol,
muchacho.
Y, después empieza de que si El Otro. Y yo dice: Anda.
Eso fue otro problema más, que me tardo años comprenderlo y aceptarlo. Bueno, por
eso perdí a mi primera familia, porque ellos no aceptaron esto.
–Qué Otro, ni Otro, chico. Ese fue Apolo.
Y yo les dije: ¿Pero, y qué hizo Apolo? Si Apolo no edifico nada. Si hubiera edificado
se viera la edificación.
Y ahí, después, El Regidor de los Gentiles, y los gentiles esperarán en él.
Entonces, unos comenzaron a decir: –Él es el instrumento, él es la trompeta.
Pero, una trompeta no se toca sola.
Y, siguió. Y, entonces, a lo último ya: -Jesucristo Hombre.
Y, yo dice: -Ay, Padre. Esto no para.
-El deseado de las naciones. (Aplausos)
Pero, hoy más que nunca, hacia el mundo entero, hoy más que nunca es
necesario que esto corrupto se vista.
Si no se viste, el mundo no nos va a entender. Van a decir que ustedes me idolatran,
que ustedes están equivocados, que esto es una secta más, que le llaman a él, Dios.
Y, eso no se lo come todo el mundo. Tú te lo has comido, porque tú sabes cuando la
mamá coge al nene y no quiere la medicina y le abre la boca y se lo entierra y ¡wak!
Así tú te lo has tragado. A otro, la medicina le pasa más fácil.
Mira a mí, a mí, Dios ha tenido que metérmelo así, inyectado ahí, a ver si me llega.
Porque es que a mí es el más difícil de aceptar este proyecto, ese nombramiento. ¿Tú
sabes lo que es eso? Atreverse a decir que tú eres Dios. Eso nadie se atrevió a
decirlo, en dos mil años.
Hay unos versos que quiero leerles.
Vamos a ver Primera a Corintios capítulo 15, verso 21 en adelante, aquí hay un
misterio.
“Porque por cuanto la muerte entró, por quién, por un hombre,
también por un hombre la resurrección de los muertos.
Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.”
Fíjate, siempre es un hombre; por un hombre entra y por un hombre sale.
“Pero cada uno en su debido orden:
Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida.
Luego el fin…”
Diga: EL FIN.
“…cuando entregue el reino al Dios y Padre, es Dios y es Padre,
cuando haya suprimido todo dominio, toda autoridad y potencia.
Porque preciso es que él reine
hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies.”
En otras palabras, que tenemos que reinar y cuando José Luis desaparece y le
entrega todo al que está dentro de él, o yo no sé quién. Y entonces, es Dios sobre
todos, en todos y para todos. (Aplausos)
IGLESIA DE JESUCRISTO,
ANHELAMOS SER REVESTIDOS. ANHELAMOS UNA TRANSFORMACIÓN.
ÁNGELES DE NUESTRA CUBIERTA, PAPÁ DIOS,
NECESITAMOS ESA TRANSFORMACIÓN. NECESITAMOS QUE EN UN ABRIR Y
CERRAR DE OJOS, ESTO CORRUPTO SE VISTA DE INCORRUPCIÓN.
ESTA NOTICIA HAY QUE LLEVÁRSELA AL MUNDO.
HAY QUE LLEVARLE ESTA NOTICIA AL MUNDO CON EVIDENCIAS.
ESA TRANSFORMACIÓN ES LA RECOMPENSA,
DE GENTE QUE SE SOMETEN AL EVANGELIO DE LA INCIRCUNCISIÓN.
DIOS TIENE TODO EN ORDEN.
ÉL ESCONDIÓ ESE EVANGELIO. NADIE LO HABÍA VISTO EN DOS MIL AÑOS Y
AHORA DE MOMENTO, LO MANIFIESTA EN LA FORMA QUE SE HA REVELADO
A NOSOTROS.
PERO, LA RECOMPENSA DE SERLE FIEL AL EVANGELIO
QUE YO PREDICO ES LA TRANSFORMACIÓN DE TU CUERPO Y ESTO NO ES
EN VANO. ESTO NO ES EN VANO, LA RECOMPENSA VA A SER ESA.
¡Y, PRONTO RECIBIMOS ESA TRANSFORMACIÓN!