AL DÍA MIÉRCOLES, 11 DE JUNIO DE 2008 DV 7 El Gobierno Vasco equiparará las pensiones más bajas con Arquetipos y arquetipejos el salario mínimo desde julio GIPUTXIRENE La medida beneficiará a alrededor de 20.000 personas en todo el País Vasco En Gipuzkoa, las Juntas Generales ya aprobaron un incremento similar VITORIA. El Gobierno Vasco apro- bó ayer un proyecto de ley con el que pretende complementar las pensiones más bajas y equipararlas al Salario Mínimo Interprofesional (SMI), garantizando que ninguna prestación sea menor de los 700 euros mensuales por doce pagas. La medida adoptada ayer por el Gobierno Vasco, que será remitida al Parlamento para su tramitación urgente, afectará a las personas que perciben las pensiones más bajas, sean o no contributivas, y supondrá un gasto anual para el Ejecutivo autonómico de 24,77 millones de euros. En Gipuzkoa, las Juntas Generales se adelantaron a lo anunciado ayer por el Gobierno Vasco y dieron luz verde la pasada semana a un complemento similar, al aprobar el Presupuesto Extraordinario de Gestión 2008-2011. En dicho documento también se contempla el aumento de las pensiones más bajas hasta el Salario Mínimo Interprofesional. Los perceptores del nuevo complemento anunciado por el Gobierno Vasco serán los pensionistas que no superen con sus ingresos el SMI y que carezcan de un patrimonio superior a cuatro veces la Renta Básica que les pudiera corresponder anualmente, descontando la vivienda habitual. Con esta ley se busca garantizar el 100% del SMI para las unidades convivenciales unipersona- ¡OPORTUNIDAD SE VENDE! (Por cese de actividad) BEASAIN BAR-RESTAURANTE - Muy alta rentabilidad - Excelentemente situado - Totalmente equipado Tel. 943 563 800 les, del 125% para las familias de dos personas y del 135% para las de tres o más miembros. El consejero de Justicia del Gobierno Vasco, Joseba Azkarraga, explicó tras la reunión del Consejo que la situación de los perceptores de las pensiones más bajas necesitaba una «respuesta urgente», ya que las pensiones de viudedad y las no contributivas están entre los 260 y los 300 euros mensuales, por debajo del umbral de pobreza. Por ello, una parte importante de los pensionistas complementarán sus pensiones con la Renta Básica que actualmente está entre los 616 y los 875 euros. Esta medida beneficiará a 7.527 perceptores actuales de este salario social, con un incremento medio de 84 euros mensuales y mil anuales. Como consecuencia de la elevación de la cuantía mínima de los ingresos para recibir la Renta Básica, del 88% al 100% del SMI, habrá unos tres mil nuevos perceptores de ésta, que complementarán sus pensiones en cincuenta euros mensuales de media, al pasar de los 650 a los setecientos euros. La medida tendrá un coste para las arcas públicas de 24,77 millones de euros El gasto más importante de esta medida viene dado por la modificación del concepto de unidad convivencial, ya que con esta reforma legal se pretende considerar al pensionista como unidad diferenciada de sus familiares, por lo que los ingresos de unos y otros no se computan. Esta modificación permitirá que 10.250 personas más accedan a la Renta Básica y complementen sus ingresos por pensiones con 125 euros mensuales de media, al pasar de 575 a los 700 euros. Este incremento supondrá anualmente un desembolso público de unos 15,4 millones de euros. En dos fases La entrada en vigor de la ley, una vez sea aprobada por el Parlamento Vasco, se producirá en dos fases: la primera, tras su publicación en el Boletín Oficial –previsiblemente en julio–, para los casos de elevación de la cuantía mensual de la Renta Básica de los perceptores actuales y en lo referente a los nuevos titulares que entren por la elevación de la cuantía. La segunda fase se producirá el 1 de enero del próximo año, en lo referente a la modificación de la unidad de convivencia. Azkarraga adelantó que este mes el Gobierno Vasco tiene previsto aprobar el proyecto de ley de Garantía de Ingresos y de inclusión social que, entre otros aspectos, recoge el complemento de vivienda. Además, señaló que con la remisión al Parlamento de estos dos proyectos de ley, el Gobierno Vasco cumple el acuerdo suscrito con el PSE-EE en marzo del año pasado. Además, recordó que el establecimiento de las cuantías de las pensiones es una competencia del Estado. N EFE JUAN AGUIRRE E l vasco es buena gente: paño de fiar, en general. Ahora que, cuando sale uno torcido, ¡pieza de museo!». Así se lo tengo oído decir a algunos de los más solventes sénecas y, a día de hoy, la experiencia no me lo desmiente. Pensarás que en todas partes es poco más o menos igual: sí, pero no exactamente. Entre nosotros se da con cuentagotas el taimado tipo meridional, y aún menos el sutil hipócrita septentrional por mucho que nos cuelguen el sambenito del jesuitismo, maquiavelismo de sotana urdido lejos de Loyola. Aquí lo usual es el carácter franco y el talante directo: rasgos admirables y gozosos cuando hay almíbar, pero que asustan cuando llevan acíbar. El asunto tiene tela y antecedentes. El primer viajero que visitó esta tierra y la describió, el tal Aimeric Picaud en el siglo XII, debió de tener la mala pata de tropezar con toda una patulea de cabrones euskarianos, por lo que cuenta en su célebre Liber Sancti Jacobi donde no deja txontxongilo con cabeza. Pasados casi novecientos años, el avieso con Eusko Label se ha convertido, mal que nos pese, en un hecho diferencial reconocido allende las Vasconias y aquende las Españas. Las actualidades de los últimos días me ahorran mayor gasto de tinta. No estoy seguro si fue an- tes o después de veranear en el «petit Eden résplendissant» de Pasajes, cuando Victor Hugo dio en la flor de que «cuanto más pequeño es el corazón, más odio alberga». Sea cuando fuere, el odio es algo serio aunque ahora lo banalicemos respecto a todo lo que nos displace (odiamos los callos a la madrileña, odiamos a Bea la fea, especialmente desde que es guapa, odiamos la Segunda División...). Pero el odio de verdad, el odio de filo y releje, es otra cosa: un deseo del mal ajeno, el antónimo del amor, o sea. Lo que hoy circula y nos envenena es un odio de señoritos esquinados, a la manera de un sobrepeso emocional que se visualiza en la política, que es la playa donde cada cual saca a relucir sus michelines éticos camuflados bajo el niqui ciudadano. Pues así como la belleza de verdad es la interior, la verdad del odio va por dentro: no se trata tanto de una respuesta sensitiva ante algo exterior cuanto de la cristalización de los complejos y los fantasmas del odiador que en su salsa se reconcome. El odio, como el miedo, es libre. Allá cada cual con sus desórdenes pasionales. Yo me quedo con la idea del jurista de que, si bien la ley no puede obligar a amar al prójimo, al menos tiene que hacer más difíciles las manifestaciones del odio. Dura Lex, sed Lex. En cuanto al paisanaje «de museo», el impagable consejo que da Bette Davis en Jezabel, la tempestuosa: «Cuanto menos rechines los dientes más te durarán, chiquillo». SOLUCIÓN INTEGRAL EN DESTRUCCIÓN DE DOCUMENTOS SEGI HIRU - centro especial de empleo Polígono 27, Martutene ✦ P.º Ubarburu, 32, pab. 3 ✦ 20004 Donostia. Tel. 943 460 977 ✦ Fax 943 453 870 ✦ [email protected]