la importancia de las inmunizaciones

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Revista Salud, Sexualidad y Sociedad 3(1), 2010
LA IMPORTANCIA DE LAS INMUNIZACIONES
THE IMPORTANCE OF IMMUNIZATION
Socorro Yamina Macavilca Mejia 1
RESUMEN
El presente trabajo nos muestra la definición de las inmunizaciones, refiriéndose al programa ampliado de inmunizaciones, su forma
de trabajo y estructura formal, además se definen también los conceptos de inmunidad y de anfígenos, se explica también la forma
de cómo realizar la cadena de frío y su complejidad, también se contempla el lugar de colocación de las vacunas, el intervalo
administrativo, desafíos del programa de inmunizaciones.
Palabras Claves: Inmunizaciones.
ABSTRACT
The present work shows the definition of immunizations, referring to the expanded immunization program, how they work and formal
structure also defines also the concepts of immunity and chalcogens, it also explains how to perform a cold chain and complexity, it
also includes the placement of vaccines, the interval administrative challenges of the immunization program.
Key words: Immunization.
INTRODUCCIÓN
El presente trabajo de investigación trata sobre las
Inmunizaciones y su importancia de cumplir con las
vacunas y dosis adecuadas para la prevención de
muchas enfermedades. como también el conocimiento
,la conservación adecuada como es la cadena de frio .
La vacuna es un preparado de antígenos procedentes
de microorganismos patógenos (microbios muertos de
cepas virulentas o vivos de cepas atenuadas), cuya
finalidad es la creación de anticuerpos que reconozcan
y ataquen a la infección y, por lo tanto, produzcan la
inmunidad del organismo inoculado.
El Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) se
basa en una resolución WHA 2757 aprobada por la
Asamblea Mundial de la Salud en Mayo de 1974. Esta
iniciativa, resultado de una acción conjunta entre las
naciones del mundo, la Organización Mundial de la
Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la
Salud (OPS), planteó como estrategia esencial para
lograr el objetivo de salud para todos en el año 2000, la
prevención de las enfermedades transmisibles en la
población infantil, a través del uso de vacunas
disponibles.
La vacuna suele consistir en dosis muy pequeñas del
propio agente (forma inactiva o atenuada) que origina la
enfermedad, por lo que provoca la creación de
anticuerpos que permanecen en el organismo y lo
protegen en el caso de futuros contagios.
INMUNIZACIONES
La Región de las Américas sigue siendo pionera en la
generación de conocimientos y experiencias valiosas
para la erradicación de las enfermedades prevenibles
por vacunación.
La inmunización es una intervención altamente costoefectiva que salva muchas vidas, cuyo objetivo es el
control y potencial eliminación de enfermedades
inmunoprevenibles, para mejorar la salud de la
población.
Las estrategias de erradicación de enfermedades han
sido uno de los principales vehículos para desarrollar o
mejorar las capacidades de vacunación y vigilancia en
la Región, sentando las bases para el establecimiento
de los programas actuales de vacunación.
Desde hace muchas décadas se han desarrollado
programas de inmunización eficaces que han formado
parte integral de los servicios de salud pública de la
Región Europea de la OMS y que han permitido la
erradicación mundial de la viruela en los años setenta
del pasado siglo y la certificación de la región libre de
poliomielitis en 2002.
Algunas conquistas notables en materia de erradicación
de enfermedades en la Región son la erradicación de la
viruela y la poliomielitis y, en este momento, la
interrupción de la transmisión autóctona del sarampión.
Estos logros han sido posibles a través del Programa
Ampliado de Inmunizaciones (PAI), como resultado de
una acción conjunta de los países de la Región y de
organismos internacionales, interesados en apoyar
acciones tendientes a lograr coberturas universales de
vacunación, con el fin de disminuir las tasas de
mortalidad y morbilidad causadas por las enfermedades
La Organización Mundial de la Salud (OMS) nos dice
que con la única excepción de la depuración del agua,
nada ha tenido mayor impacto en reducir la mortalidad,
que las vacunas .
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inmunoprevenibles y con fuerte compromiso de
erradicar y controlar las mismas.
Las enfermedades objeto del Programa son:
poliomielitis, sarampión, tétanos, difteria, tos ferina
(pertussis) tuberculosis, rubéola y rubéola congénita,
fiebre amarilla, Haemophilus influenzae, hepatitis B.
La Unidad de Inmunización de la Organización
Panamericana de la Salud da apoyo a los países de las
Américas en:






La ejecución de programas de vacunación
equitativos y sostenibles;
La introducción de nuevas vacunas de importancia
para la salud pública en la Región;
El fortalecimiento y apoyo de los sistemas
nacionales de vigilancia para las enfermedades
prevenibles por vacunación que operan
conjuntamente con sistemas adecuados de apoyo
de laboratorio, mediante la ampliación de una red
regional de laboratorios de diagnóstico y control de
calidad;
La promoción de la aplicación de nuevas técnicas
para mejorar la vigilancia regional de las
enfermedades y crear redes electrónicas que
permitan la notificación y confirmación de casos
sospechosos con mayor velocidad;
El suministro oportuno de vacunas a través del
Fondo Rotatorio para contener los costos e
incrementar la disponibilidad de las vacunas;
La realización de evaluaciones periódicas de los
programas nacionales de vacunación a cargo de
un equipo internacional ayuda a los países en la
elaboración de planes de acción quinquenales y
anuales.
Las metas establecidas por la Unidad de Inmunización
son las siguientes:




Eliminar la rubéola y el síndrome de rubéola
congénita;
Alcanzar y mantener 95% de cobertura para todas
las vacunas por municipio;
Mantener la erradicación de la poliomielitis y la
eliminación del sarampión;
Introducir vacunas nuevas y subutilizadas eficaces
en función de los costos
El Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) se
basa en una resolución WHA 2757 aprobada por la
Asamblea Mundial de la Salud en Mayo de 1974. Esta
iniciativa, resultado de una acción conjunta entre las
naciones del mundo, la Organización Mundial de la
Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la
Salud (OPS), planteó como estrategia esencial para
lograr el objetivo de salud para todos en el año 2000, la
prevención de las enfermedades transmisibles en la
población infantil, a través del uso de vacunas
disponibles.
El pilar fundamental que ha permitido que este
programa se sustente en el tiempo, a pesar de la gran
diversidad entre los países signatarios, es la visión
estratégica de la OPS de trabajar con metas
transnacionales, independiente de estas diferencias.
La gran diversidad en condiciones socioeconómicas,
organización en salud, indicadores básicos de salud,
voluntad política y convicción de la importancia del
programa, como en la aceptación de las vacunas por
parte de la población, gratuidad del programa, en la
disponibilidad de vacunas de demostrada eficacia
frente a problemas relevantes y contingentes en Salud
Pública, disponibilidad de una red de conservación y
distribución de vacunas bajo condiciones de cadena de
frío y en la existencia de un recurso humano
técnicamente competente, exigió que cada país pusiera
énfasis en sus necesidades para cumplir las metas
comunes.
A contar de 1995 se propone eliminar las
enfermedades invasivas por el Haemophilus influenzae
tipo b, mantener niveles de protección adecuada de la
población mediante refuerzos de vacunación y
desarrollar programas de vigilancia epidemiológica
activa de las enfermedades incluidas en el PAI, con el
objetivo de evaluar permanentemente el impacto de la
vacunación.
La vacuna es un preparado de antígenos procedentes
de microorganismos patógenos (microbios muertos de
cepas virulentas o vivos de cepas atenuadas), cuya
finalidad es la creación de anticuerpos que reconozcan
y ataquen a la infección y, por lo tanto, produzcan la
inmunidad del organismo inoculado.
La vacuna suele consistir en dosis muy pequeñas del
propio agente (forma inactiva o atenuada) que origina la
enfermedad, por lo que provoca la creación de
anticuerpos que permanecen en el organismo y lo
protegen en el caso de futuros contagios.
La técnica de administración depende del tipo de
vacuna; la más común es la inoculación, pero en
algunos casos es la ingestión o el spray nasal.
La primera vacuna fue descubierta por el médico ingles
Edward Jenner en 1798, cuando observó que los
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humanos quedaban inmunizados frente al virus de la
viruela humana si se les inoculaba con un preparado
del virus de la viruela vacuna. El término vacuna
procede del latín vacca, y Jenner denominó al proceso
descrito vacunación.
El sistema inmunológico ayuda a que su cuerpo luche
contra los gérmenes mediante la producción de
sustancias para combatirlos. Una vez que lo hace, el
sistema inmunológico "recuerda" el germen y puede
luchar contra él nuevamente. Las vacunas contienen
gérmenes muertos o debilitados. Cuando se le
administra a una persona sana, la vacuna desencadena
una respuesta del sistema inmunológico para que
responda, creando inmunidad.
Antes de existir las vacunas, las personas solamente
podían ser inmunes cuando verdaderamente contraían
la enfermedad y sobrevivían a ella. Las inmunizaciones
son una manera más fácil y menos riesgosa de hacerse
immune.
Las vacunas son el mejor avance médico de la
humanidad, porque previenen infecciones y por lo tanto
evitan enfermedades.
En este artículo se desarrollan conceptos generales
sobre inmunizaciones, como son: definiciones, cadena
de frío, eventos asociados a las vacunas, diferentes
esquemas de vacunación así como nuevos esquemas
para edades donde antes no se colocaban éstas y,
finalmente, lo que va a ser el futuro con las nuevas
vacunas que se crean e investigan todos los días.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) nos dice
que con la única excepción de la depuración del agua,
nada ha tenido mayor impacto en reducir la mortalidad,
que las vacunas (1).
Este desarrollo nos llevó inicialmente a que
desapareciera una enfermedad mortal como la viruela
en la década de los setenta en el siglo pasado y nos
encontremos cerca de acabar con otra enfermedad
mortal como la polio (2,3).
A muchas personas esto les ha pasado desapercibido
debido a que no han conocido todos los problemas y
muertes que ocasionan u ocasionaron estas
enfermedades, por ello el surgimiento de un grupo
opuesto a las vacunas lo único que ocasionan es la
persistencia de enfermedades que podrían ser
erradicadas y todo lo que ello conlleva, morbilidad y
mortalidad.
Actualmente existen más de treinta vacunas
disponibles para uso sistemático y no sistemático para
la prevención de enfermedades transmisibles, inclusive
para la prevención de enfermedades oncológicas,
encontrándose en investigación un número mayor y
para patologías que hasta hace unos años era un
sueño pensar en que no se pudieran evitar. Además es
importante recalcar que las inmunizaciones que hasta
hace poco tiempo eran “solamente para los niños”,
empiezan a convertirse en una excelente forma de
protección para todas las edades, existiendo un grupo
etáreo que se está empezando a beneficiar de esto:
personas de la tercera edad.
Inmunidad
Este término se ha utilizado para referirse a una
observación muy antigua, la cual consistía en que los
individuos que habían sufrido ciertas enfermedades
transmisibles estaban exentos de volver a padecerlas.
La inmunidad puede dividirse en:
a. Activa natural: producida por la infección.
b. Activa artificial: producida por la vacunación.
c. Pasiva natural: paso transplacentario de anticuerpos
de la madre al niño.
d. Pasiva artificial: producida tras la administración de
gammaglobulinas.(vida media corta: 17 a 24 días).
Nuestro sistema inmunológico distingue lo propio de lo
ajeno, desarrollando una respuesta inmune que debe
eliminar lo ajeno. Tiene ciertas características como
son:
a. Específica: distingue entre diferentes
Antígenos creando respuestas relacio-nadas a cada
uno de ellos
b. Memoria inmunológica: es importante que la
inmunidad se mantenga por amplios períodos de
tiempo.
c. Deben ser inocuas y eficaces.
Antígeno
Un antígeno es toda sustancia capaz de interaccionar
con el receptor de células T o B. Para lograr esta meta
las vacunas actuales utilizan varios tipos, hablándose a
veces de una molécula, otras de una bacteria, un virus
o una célula. Tipos de antígenos:
a. Toxoides: exotoxinas bacterianas, conservan su
antigenicidad perdiendo la toxicidad (ej. difteria,
tétanos).
b. Subunidades: polisacáridos de neumococo y
Haemophilus influenzae B.
c. Antígenos obtenidos por ingeniería genética: ej.
antígeno recombinante de la Hepatitis B.
d. Microorganismos muertos: ej. polio inactivada.
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e. Microorganismos vivos atenuados: ej. polio oral,
fiebre amarilla, triple vírica (sarampión, rubéola,
parotiditis), varicela.
Cadena de frío
Complejo sistema de conservación, manejo, transporte
y distribución de las vacunas. Punto más importante, el
no conocer cómo se deben manejar y mantener las
vacunas, nos conducirá a que éstas se inactiven, lo que
crearía una falsa sensación de seguridad, al pensar
que el sujeto está inmunizado.
Es por ello que debemos conocer que, ciertas vacunas
como: la polio oral (OPV), sarampión y fiebre amarilla
son muy sensibles al calor, en cambio otras como la
DPT, polio inactivada (IPV), hepatitis B, gripe y
Haemophilus influenza B, se inactivan con la
congelación.
A continuación revisaremos algunos datos en relación a
la cadena de frío, dejando para ustedes el revisar las
recomendaciones del manejo de las vacunas hechas
por los fabricantes.
a. Las vacunas se deben colocar en un refrigerador,
congelador, cuarto frío, donde solamente se
colocarán éstas, no mezclándose con
medicamentos, muestras u comida.
b. No se deben colocar vacunas en la puerta de los
refrigeradores, por la inestabilidad térmica a este
nivel.
c. La mayoría de vacunas se mantienen bien entre 28°C.
d. Llevar un reporte diario de las temperaturas de los
aparatos donde se almacenan las vacunas. Si
existiera algún problema, inmovilizar las vacunas y
ver qué sucedió, pudiéndose llegar a desecharlas
en caso necesario.
e. Utilizar contenedores especiales para el transporte
de vacunas.
1. Las vacunas son medicamentos termolábiles y
para garantizar su inmunogenicidad y eficacia
protectora, dentro de los programas de
inmunización, es imprescindible mantener la
cadena de frío.
El elemento fundamental en esta cadena es el personal
responsable de las vacunas, que debe conocer las
características de estabilidad de cada preparado con el
fin de evitar errores durante su manipulación.
Consideraciones generales
Técnicas para administración de las vacunas
Previamente a la aplicación de una vacuna se deben
hacer algunas preguntas para asegurar que la persona
que la va a recibir no
contraindicación. Preguntar por:
presente
ninguna
a. Reacción anafiláctica previa a la vacuna o a algunos
de sus componentes.
b. Enfermedad febril aguda grave o moderada.
b. En caso de ser mujer, si está gestando en ese
momento (por la probabilidad de asociar cualquier
malformación posterior del producto a la vacuna).
c. Explicar sobre las reacciones que pudieraocasionar
la colocación de éstas (ej. fiebre, dolor y tumefacción
en el lugar de la colocación, etc.
d. Enfermedades que produzcan inmuno-deficiencia.
f. Utilización continua y prolongada de corticoides
sistémicos.
g..Tratamiento antineoplásico o con gammaglobulinas.
Lugar de colocación:
Las vacunas intramusculares en lactantes menores de
2 años se deben colocar en el tercio medio externo del
vasto (muslo), nunca en región glútea. En los mayores
se debe aplicar en el músculo deltoides.
Intervalo de administración entre vacunas
Algunas vacunas requieren administrarse en varias
dosis para obtener una adecuada respuesta
inmunológica y que ésta además se mantenga en el
tiempo.
Intervalos mayores a lo establecido en el calendario de
vacunación no reducen las concentraciones finales de
anticuerpos, por lo que la interrupción del programa no
supone que se necesite reiniciar todas las dosis de
vacuna, ni la administración de dosis adicionales.
No es recomendable administrar vacunas en intervalos
menores al mínimo recomendado.
Otras pautas que hay que tener en consideración son:
en vacunas con microorganismos vivos, el intervalo
mínimo entre la administración no simultánea de una
vacuna con microorganismo vivo y una posterior de
inmunoglobulinas es dos semanas.
Consideraciones
generales:
Seguridad,
precauciones y contraindicaciones de las vacunas.
Este es un punto muy interesante, porque así como
existen reacciones secundarias con las vacunas, al
igual que con cualquier medicamento por más inocuo
que se considere (ej. antipiréticos), debemos tener en
consideración que las ventajas de la inmunización
superan con mucho el riesgo de las reacciones
asociadas a las vacunas y más aún los problemas que
ocasionaría la infección natural.
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Además debemos tener en cuenta que hay eventos que
pudieran suceder cuando se vacuna, pero que estos
son solamente eventos asociados y no existe una
relación causal con la vacuna colocada.
Contraindicaciones absolutas generales para todas las
vacunas
1. Reacción anafiláctica a dosis previas de la vacuna.
2. Reacción anafiláctica previa a alguno de los
componentes de la vacuna.
Precauciones generales para todas las vacunas
1. Enfermedad aguda, moderada o grave con o sin
fiebre.
2. Alergia al látex.
No son contraindicaciones para la vacunación
Existen muchas situaciones en las que el
desconocimiento o la interpretación incorrecta llevan a
recomendar no vacunar, es por esto que vamos a
reconocer falsas contraindicaciones:
1. Reacciones leves a dosis previas de DPT como:
dolor, enrojecimiento o inflamación en el lugar de la
inyección o fiebre menor de 40.5°C.
2. Enfermedad aguda benigna: resfrío o diarrea en un
niño sano, sin fiebre.
3. Niños con tratamiento antibiótico, no vacunar en la
etapa aguda de la enfermedad.
4. Madre del niño a vacunar esté embarazada o que el
niño esté en contacto estrecho con gestantes.
5. La prematuridad. En el niño prematuro seguirá el
mismo calendario vacunal y la misma dosificación que
los niños a término.
6. Niños que hayan tenido contacto reciente con un
paciente con patología infecciosa.
7. La lactancia.
8. Historia de alergia inespecífica en el niño o historia
familiar de alergia.
9. Historia de alergia a los antibióticos.
10. Historia de alergia no anafiláctica, al pollo o a las
plumas de aves.
Desafíos del API para los próximos años
En los próximos años se debería ampliar el espectro de
los países que incorporen a sus programas regulares
de vacunación, las vacunas contra la rubéola, el
Haemophilus influenza b y la hepatitis B. Para rubéola
el objetivo central de la vacunación es prevenir el
síndrome de rubéola congénita (SRC).
sin embargo, se debe tener presente y de acuerdo a la
experiencia acumulada en los países que ya han
incorporado la vacuna, que para cumplir con el objetivo
central de la vacunación se requiere lo siguiente:
a) un plan de vacunación combinado que considere la
vacunación del lactante (junto con la vacuna contra el
sarampión) y la vacunación de la mujer en edad fértil,
para cumplir el doble propósito de disminuir la
circulación del virus y de proteger a la mujer en edad de
procrear,
b) estudios serológicos transversales periódicos cada 4
a 5 años, en mujeres en edad fértil que permitan
orientar las estrategias de vacunación y la edad más
óptima de vacunación de la mujer,
c) educación permanente dirigida a la incorporación del
concepto del deber y del derecho de concebir un hijo
protegida de la posibilidad de infectarse con el virus
rubéola, responsabilidad que debe ser compartida entre
toda mujer y el médico gíneco-obstetra o la matrona y
d) en cada país establecer o implementar la vigilancia
epidemiológica de SRC, para la cual la experiencia
adquirida con el sarampión deja afortunadamente
mucho camino recorrido. Frente a este último punto, la
OPS puede difundir la experiencia adquirida en los
distintos países de la Región.
En cuanto al impacto de las vacunas contra el
Haemophilus influenzae B, los países que primero han
incorporado la vacuna en sus esquemas regulares son
Uruguay38 y Chile39 en agosto de 1994 y en julio de
1996 respectivamente, aunque ya en EEUU se
comenzó a utilizar a comienzos de esta década. El uso
de esta vacuna se ha expandido en la región y su
efecto en la disminución de enfermedad asociada a Hib
ha sido drástico. La carga de enfermedad causada por
este microorganismo ha sido extensamente estudiada y
la incidencia ha sido estimada entre 25 y 50 por
100.000 menores de 5 años.
Las manifestaciones clínicas más frecuentes son
meningitis, neumonía, sepsis, y epiglotitis. A pesar de
disponer de vacunas de la más alta seguridad y
eficacia, una limitante en la introducción de ellas al PAI
ha sido el costo, limitante que debería ser
contrarrestada prontamente gracias a la masificación
de su uso, a la disponibilidad de vacunas combinadas,
y porque los laboratorios productores debieran haber
recuperado buena parte del costo de la investigación.
La estrategia primaria para prevenir la transmisión del
virus hepatitis B (VHB) mediante la inmunización
universal es otro objetivo que se ha trazado
recientemente la OMS y que está siendo
implementada, aunque en forma disímil en los
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diferentes países de América. La globalidad actual del
mundo hace deseable que todos los países de las
Américas, independiente de sus niveles de prevalencia,
incorporen estrategias eficientes de eliminación de esta
infección. La Asamblea Mundial de la Salud recomendó
la incorporación de la vacuna contra VHB en los
programas de vacunación. A fines de 1998, cien países
lo habían logrado.
Otra gran esperanza está centrada en las vacunas
conjugadas contra S pneumoniae, las que se
encuentran disponibles en EEUU. Las vacunas a usar
en países de América Latina dependerán de la
epidemiología y de los resultados de los estudios
clínicos de eficacia.
La incorporación de vacunas combinadas, vacunas
mejoradas, y nuevas vacunas, así como la eficiencia de
los programas de vigilancia que requieren de una
evaluación constante de su cumplimiento y de sus
objetivos, serán solo alguna de las tareas que deberá
enfrentar el PAI en el próximo milenio. Se suma a este
desafío la flexibilidad que deberá tener el programa
frente a los procesos de descentralización y reforma de
los sistemas de salud en los países de la región.
Podríamos concluir que los logros obtenidos por el PAI,
en la región de las Américas, han sido
extraordinariamente satisfactorios: se ha certificado la
erradicación de la poliomielitis, escasos son los países
que presentan casos de sarampión, tétanos y difteria y,
la tos ferina aunque presente aún en forma significativa,
ha disminuido considerablemente. Por otro lado, la
erradicación de la poliomielitis animó a otros programas
a adoptar estrategias de cooperación interinstitucional e
intersectorial, de utilización de medios de
comunicación, de sistemas de información, de sistemas
de vigilancia epidemiológica, de métodos de
evaluación; un verdadero hito en la historia de la
medicina que creó una cultura de prevención.
En este éxito no se puede dejar de transmitir algunas
consideraciones que han favorecido el proceso:
•Implementación de los Programas Ampliados de
Inmunizaciones en los distintos países. •El rol
protagónico que ha jugado la OPS, con metas
transnacionales. •Apoyo en posicionar los programas
nacionales, en aunar experiencias, en desarrollo
tecnológico.
•Apoyo político y reconocimiento de los beneficios del
programa •Reconocimiento del PAI como un Bien del
Estado. •Reconocimiento del PAI como una
intervención que nivela las inequidades entre salud,
sociedad y gastos en salud.
•Existencia de esquemas de vacunación nacional con la
posibilidad de la exigencia en su cumplimiento dada por
los códigos sanitarios y los decretos leyes. •La
cobertura nacional de los programas. •La gratuidad del
programa para toda la población que habita en los
países.
•El que las enfermedades inmunoprevenibles puedan
ser efectivamente controladas por vacunas que
representan una intervención segura, específica, y de
eficacia comprobada mediante la investigación clínica y
epidemiológica. Ello debe ser promovido por toda la
comunidad médica, especialmente ante la amenaza del
surgimiento de grupos anti-vacunas, los cuales pueden
minar fuertemente los trascendentales logros obtenidos
durante los últimos decenios.
Conclusión
 Fortalecer el conocimiento de la población acerca
de la importancia de la vacunación como medida
preventiva y sus beneficios en los niños menores
de 05 años.
 Obtener el conocimiento apropiado correcto sobre
las inmunizaciones y su importancia.
 Brindar un conocimiento adecuado a la población
sobre las vacunas su importancia su
administración y su cumplimiento del calendario de
vacunación.
 Todo profesional de salud debe saber que las
inmunizaciones son para prevenir muchas
enfermedades.
 Las vacunas son medicamentos termolábiles y
para garantizar su inmunogenicidad y eficacia
protectora, dentro de los programas de
inmunización, es imprescindible mantener la
cadena de frío.
 Las vacunas su finalidad es la creación de
anticuerpos que reconozcan y ataquen a la
infección y, por lo tanto, produzcan la inmunidad
del organismo inoculado.
 la organización mundial de la salud a través del
programa ampliado de inmunizaciones brinda una
serie de vacunas
para la prevención de
enfermedades inmunoprevenibles,, a todos los
niños menores de 5 años ,MEF, adulto mayor,
personal en riesgo...
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Aceptado: 29/03/2010
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