Discurso Rector Apertura

APERTURA CURSO 2015-2016
Discurso de Alejandro Tiana, rector de la UNED
Madrid, 8 de octubre de 2015
Señoras y señores
Quiero transmitir un saludo especial y dar la bienvenida al Sr. Ministro ECD, que
nos visita hoy por primera vez. Gracias por acompañarnos y sea bienvenido a la
UNED, una universidad que cuenta ya con una larga trayectoria, que está
orgullosa de la misión que cumple en el panorama universitario español y que
continúa haciendo cambios para responder a las demandas y las necesidades
formativas de los ciudadanos españoles.
Quiero también expresar mi agradecimiento
- A todos quienes nos acompañan en este acto (en esta sala o a través de
los medios)
- A todas las personas que hacen posible que el acto se desarrolle tan
satisfactoriamente
o Coro y orquesta
o Intérpretes de lengua de signos
o Equipo de comunicación
o Responsables de medios técnicos y CEMAV
o Personal de mantenimiento, jardineros, ordenanzas, maceros y
seguridad
o Miembros de la editorial
o Equipo de protocolo
Y quiero asimismo expresar otras felicitaciones
- A la Secretaria General, por esa memoria tan completa y al mismo
tiempo tan atractiva que nos ha presentado acerca de los logros de la
UNED en el curso 2014-2015.
Considero que la memoria ofrece un cuadro muy certero de la situación
de la UNED en este momento y contiene elementos de gran utilidad para
valorar cuanto hacemos y conseguimos. Estoy seguro de que tanto a
nuestros distinguidos visitantes como a los miembros de nuestra
comunidad universitaria les habrá resultado de interés esta presentación
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que contiene una relación fiel de nuestra realidad, nuestras aspiraciones
y nuestros logros.
-
De manera especial al profesor Sebastián Dormido por su interesante
lección inaugural
o Me alegro de que sea un antiguo compañero del equipo rectoral de la
rectora Pérez Vera y colega con quien he tenido ocasión de colaborar
en diversas ocasiones.
o No resulta sencillo elegir un tema para esta tradicional lección de
apertura, dada la diversidad de la audiencia y las condiciones del acto.
El profesor debe conciliar su maestría en el campo que aborda y el
carácter motivador de su intervención para tan amplia concurrencia.
Y creo que el profesor Dormido lo ha conseguido. Enhorabuena.
o Y si me lo permite, debo decirle que he aprendido lo que es el
concepto de realimentación, que utilizaba con anterioridad pero sin
precisión. Me ha gustado su análisis acerca de cómo el concepto tiene
carácter de principio universal y se aplica a diversos campos del saber
y de la actividad humana. Me ha resultado muy interesante la
aplicación ya inmediata de la realimentación a los sistemas de control
de la actualidad y del futuro, así como los riesgos que su incorrecta
utilización puede implicar.
-
A los nuevos catedráticos y profesores titulares que han tomado
posesión de sus plazas en la UNED. Quiero destacar que, después de dos
años sin celebrar actos de este tipo, es la primera vez que como rector
tengo la satisfacción de retomarlos. Sin duda es una muestra del giro que
se ha producido con la ampliación de las tasas de reposición que nos
debe permitir volver a desarrollar una política de profesorado al servicio
de nuestra misión universitaria. Debemos pues felicitarnos.
BALANCE DEL CAMINO RECORRIDO
Este acto de inauguración del curso académico 2015-2016 se celebra cuando
acaban de superarse los dos primeros años de mi mandato como rector de la
UNED. Es un buen momento para echar la vista atrás y trazar un balance general
del camino recorrido hasta aquí.
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Permítanme que comience hablando de un asunto que me ha ocupado mucho
tiempo y energías en este tiempo y que me habrán oído comentar en otras
ocasiones. Cuando llegué al rectorado, la situación económica de la UNED era
ciertamente preocupante. El descenso sostenido de los ingresos en los años
anteriores, fruto de un acusado recorte de la financiación pública, que llegó a
caer más de un 20% entre 2010 y 2013, hizo que los gastos llegasen a superar a
los ingresos reales y que durante varios años nos encontrásemos en una
situación de déficit operativo. Si bien dicho déficit no fue nunca contable,
debido al contrapeso del remanente acumulado con anterioridad, que se iba en
consecuencia consumiendo, el riesgo que suponía para la UNED era indudable y
requería una actuación decidida. Para dar respuesta a dicha situación
propusimos y llevamos a cabo un riguroso plan de contención del gasto y de
búsqueda de nuevos ingresos que implicó considerables sacrificios. Creo que la
comunidad universitaria entendió en general la necesidad de dicho plan, o al
menos nos concedió su confianza para llevarlo adelante, y, aunque se
manifestasen quejas legítimas por algunas de las decisiones tomadas, colaboró
en su aplicación.
La buena noticia es que los esfuerzos realizados parecen haber comenzado a dar
algunos resultados. Como muestra del cambio que se ha producido quiero
mencionar que hemos cerrado el ejercicio presupuestario de 2014 dando la
vuelta a ese déficit operativo que he mencionado, ajustando los ingresos y los
gastos reales, lo que supone un esperanzador cambio de tendencia. Y el informe
de auditoría recientemente emitido por la Intervención General de la
Administración del Estado respecto de dicho resultado pone de manifiesto los
avances registrados en esa senda de equilibrio presupuestario y aleja algunos
riesgos que se cernían sobre nuestra universidad en años anteriores. No quiere
ello decir que nos hayamos librado de problemas, ni que nuestra situación
financiera no continúe siendo complicada, pero al menos hemos despejado las
sombras más oscuras que veíamos en el camino.
Aunque este asunto me haya preocupado y ocupado, no querría detenerme
excesivamente en él, pues no representa sino una condición, necesaria, sí, pero
condición al cabo, para cumplir nuestra misión universitaria, misión que abarca
la docencia, la investigación y la transferencia del conocimiento. Pues bien,
también en estos campos hemos realizado avances destacados, que no me
resisto a comentar.
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Para realizar un balance realista del camino recorrido en estos dos años, quiero
comenzar recordando que en el año 2014 elaboramos y presentamos unas
orientaciones estratégicas para el periodo 2014-2017, que están sirviendo para
dar sentido y coherencia a nuestros proyectos y actuaciones. La aplicación de
dichas orientaciones está teniendo una doble virtud. En primer lugar, evita que
actuemos mediante ocurrencias o simples intuiciones y basa nuestra actuación
en una estrategia que es fruto de un análisis cuidadoso de nuestra situación
actual y que está orientada hacia las metas que nos hemos marcado y las
prioridades que hemos establecido. En segundo lugar, aumenta la transparencia
de nuestra actuación para el conjunto de la comunidad universitaria y para
cualquier ciudadano que lo desee y nos permite rendir cuentas de lo que
hacemos y de nuestros resultados. Tuvimos ocasión de presentar y debatir
nuestra propuesta de orientaciones estratégicas en el Consejo de Gobierno, el
Claustro y el Consejo Social de la UNED, a cuyos miembros agradecí su
colaboración y de cuya consideración y discusión salió enriquecida. Y las
memorias de progreso que vamos presentando dan una idea precisa de los
avances que hacemos hacia su consecución.
Permítanme recordar que las tres líneas estratégicas establecidas, que marcan
nuestras principales metas para estos cuatro años, han sido definidas del
siguiente modo:
Presencia social y proyección de la UNED
Nos proponemos mejorar nuestra presencia social y conseguir que la
UNED sea reconocida como la universidad digital pública española de
referencia tanto en España como en el extranjero. Debemos destacar
nuestro carácter social y el compromiso con el acceso a la educación
superior y a la formación a lo largo de la vida, y poner en valor nuestra
singular metodología.
Docencia e investigación
Nos proponemos definir y realizar una oferta formativa atractiva,
rigurosa y adaptada a la sociedad y establecer un modelo de futuro para
la investigación y transferencia en la UNED, bajo los principios de calidad
en la docencia y la excelencia académica.
Gobernanza responsable y gestión profesional
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Nos proponemos adecuar y mejorar nuestro modelo organizativo para
agilizar la gestión, simplificar los procedimientos, mejorar la articulación
de la organización y optimizar costes.
Como han podido observar, la memoria del curso pasado presentada por la
Secretaria General ha estado organizada en torno a esos tres ejes. No se trata
de una casualidad, sino de la voluntad explícita de hacer uso de las
herramientas que mejor puedan contribuir al buen gobierno de nuestra
universidad, a la eficiencia de nuestra actuación y a la transparencia de nuestros
proyectos.
Sin ánimo de exhaustividad, me atrevo a señalar que en estos dos años hemos
realizado avances relevantes en varias direcciones, que quisiera sintetizar
brevemente:
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Hemos mejorado el servicio que prestamos a los estudiantes, facilitando
la matrícula, haciendo más asequible su pago y mejorando los servicios
de acogida al nuevo alumnado.
Hemos iniciado y desarrollado una nueva oferta de grados combinados.
Hemos puesto en marcha nuevos planes orientados a mejorar la
empleabilidad de nuestros estudiantes y al desarrollo del
emprendimiento económico y social.
Hemos diseñado una nueva política de PDI, adecuada a las nuevas
circunstancias y orientada a dar respuesta a los problemas de plantillas
que este tiempo de carestía ha causado.
Hemos desarrollado un proceso de acreditación de nuestras titulaciones
de grado y máster, que está obteniendo muy buenos resultados.
Hemos impulsado la participación de nuestros equipos de investigación
en diversas convocatorias de proyectos de I+D y diseñado caminos
innovadores para la financiación y articulación de los mismos.
Hemos abierto nuevas posibilidades para la transferencia de los
resultados de nuestra investigación, en colaboración con diversas
entidades, empresas e instituciones.
Hemos revisado el modelo de formación permanente que ofrece la
UNED, ordenando la oferta existente y abriendo nuevas vías en el ámbito
de la formación profesional y para el empleo.
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Hemos adaptado los centros asociados a las exigencias de la ley de
racionalización y sostenibilidad de la administración local y revisado la
estructura de los campus territoriales.
Hemos reforzado nuestra dimensión internacional, realizando nuevas
ofertas educativas en otros países, estableciendo acuerdos de
cooperación con diversas instituciones y reforzando la presencia de la
UNED en diversos organismos y asociaciones internacionales.
Hemos mejorado sustancialmente la transparencia de la UNED y de
nuestras actuaciones.
Como he tenido ocasión de decir otras veces y no me cansaré de repetir, se
trata de unos resultados muy meritorios, fruto de un trabajo colectivo. De nada
serviría el empeño del equipo de gobierno, por insistente que fuera, ¡y vaya si lo
es!, si no se viese acompañado por el apoyo de los diversos sectores de la
comunidad universitaria.
Creo que hemos avanzado notablemente en el cumplimiento del programa que
presenté a las elecciones rectorales. Saben quiénes me conocen que no me
gusta hacer promesas en vano y que me empeño en cumplir las que hago.
Como rector, he tenido ocasión de manifestar explícitamente que podemos
estar legítimamente satisfechos de lo que hemos conseguido en estos dos años.
Y me siento también obligado a expresar mi agradecimiento a todos los
miembros de la comunidad universitaria de la UNED, por el esfuerzo realizado, y
a todas las instituciones y personas que nos acompañáis en nuestro camino, por
la confianza que depositáis en la UNED.
DESAFÍOS DE FUTURO
Pero el hecho de que manifestemos satisfacción por los logros conseguidos no
implica que no seamos conscientes del camino que nos queda por recorrer ni de
las mejoras que debemos hacer.
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Hemos de continuar mejorando la atención que prestamos a nuestros
estudiantes, nuestra razón de ser última como universidad
Hemos de mejorar nuestra situación y nuestros indicadores en relación
con la investigación que desarrollamos y estimular la transferencia de sus
resultados
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Hemos de acelerar el proceso de actualización tecnológica, diseñando el
futuro previsible de los próximos años y ocupando una posición de
vanguardia en este campo
Hemos de impulsar con decisión nuestro proceso de internacionalización
Hemos de renovar nuestra oferta académica de grado, postgrado y
formación permanente para dar respuesta a las demandas sociales que
nos llegan y a las personas que confían en nosotros para continuar su
formación
Hemos de encontrar vías que nos permitan contar con los recursos
personales y materiales que necesitamos para desarrollar los nuevos
proyectos que estamos construyendo
Estamos viviendo una etapa apasionante, llena de desafíos y de expectativas,
que nos plantea exigencias que no podemos eludir. Cada vez más universidades
ofrecen cursos en línea y a distancia, se difuminan los límites con las
universidades tradicionales y la oferta educativa adquiere un carácter global.
Los estudiantes son cada vez más exigentes con nosotros y con lo que les
ofrecemos y las vías formativas que se abren ante ellos se multiplican.
Recibimos nuevas demandas de los territorios donde estamos asentados y
nuestro carácter nacional nos plantea nuevas posibilidades que no podemos
desaprovechar. En suma, estamos en un tiempo crucial.
Reflexionando sobre los retos que plantea esta situación, propuse al equipo de
gobierno que hiciésemos el ejercicio de situarnos en el futuro, dentro de unos
años. Precisamente en el año 2022 la UNED celebrará su cincuentenario. Es una
celebración muy especial y, aunque ya no seré para entonces rector en ningún
caso, me inquieta cuál puede ser el legado que recibáis quienes venís detrás de
nosotros para que la UNED continúe siendo esa gran universidad, reconocida,
prestigiosa y orgullosa de su función social que es y queremos que siga siendo.
Pero para hacer ese deseo realidad tenemos que trabajar ahora, no podemos
esperar.
Por ese motivo he decidido abrir un periodo de reflexión, debate y presentación
de propuestas para construir la UNED que necesitamos para el futuro,
precisamente en la perspectiva de 2022, de nuestro cincuentenario. Sin ánimo
de exhaustividad, hay un conjunto de cuestiones que debemos revisar: nuestra
oferta educativa de títulos de grado y de postgrado, en diversos campos, con
diversas trayectorias formativas y abiertos a la incorporación de nuevos campos
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profesionales; nuestro modelo educativo y nuestra metodología didáctica, con
el propósito de reforzar la flexibilidad que nos caracteriza; la función de los
centros asociados en el nuevo panorama; nuestro modelo de tutorías,
presenciales, en línea o combinadas; la oferta de materiales didácticos en
nuevos formatos digitales o integrados en los cursos virtuales; la infraestructura
tecnológica más adecuada para servir de soporte a la enseñanza y al
aprendizaje; la explotación de nuevas posibilidades para la investigación y la
transferencia; nuestra posición y reputación en el universo digital; nuestra
organización administrativa y el reparto de funciones entre los distintos tipos y
grupos de personal…
Para llevar adelante este proyecto constituiremos una comisión impulsora de la
iniciativa que aglutine una diversidad de visiones y bagajes. Durante este curso
iremos celebrando diversos tipos de actividades, jornadas, encuentros y
debates, reuniremos comisiones para analizar algunos de los aspectos
mencionados, produciremos informes y materiales que propicien la reflexión y
la discusión, plantearemos propuestas de actuación y desarrollaremos otras
actividades que permitan llegar a final de curso con planes para el futuro. El
objetivo es diseñar cómo debería ser la UNED del cincuentenario, de tal manera
que tengamos la posibilidad de adoptar decisiones con el tiempo suficiente para
hacer ese futuro posible. Esperamos poder presentar dentro de un año un
conjunto de realidades y de propuestas que asienten nuestro modelo
institucional y educativo para el futuro.
Nuestra comunidad no debe tener duda alguna acerca de nuestra voluntad de
cambio. Cuando fui elegido hablé de un cambio tranquilo, no alocado ni
insensato, pero cambio al fin y al cabo. Puedo afirmar, sin temor a equivocarme,
que nuestra universidad necesita introducir novedades en su organización y en
su modo de operación. Somos una universidad reconocida, prestigiosa y seguida
con atención por muchas personas e instituciones. Pero eso no puede alimentar
nuestra complacencia. Los tiempos cambian rápidamente y en educación
superior lo estamos viendo cada día. Necesitamos mejorar de forma continua y
hemos de estar atentos a las nuevas demandas que se nos plantean y a las que
debemos responder. Debemos ser protagonistas de nuestro futuro y no meros
espectadores.
Termino, Sr. Ministro, dirigiéndome de nuevo a Vd. Habrá visto que está ante
una comunidad universitaria consciente de la realidad, dinámica ante los retos
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que se plantean, comprometida con su misión universitaria y abierta al futuro.
Sabemos que tenemos que actuar y vamos a hacerlo. Pero también necesitamos
ayuda para llevar adelante esa tarea. No esperamos que la solución venga de
fuera, pero necesitamos ese apoyo. El MECD es nuestra autoridad de tutela y de
referencia. En consecuencia, me siento legitimado para solicitarle, en nombre
de esta comunidad universitaria, que nos apoye, que crea en nosotros, que nos
conceda confianza. No defraudaremos ni a nuestras autoridades ni a todos los
ciudadanos que han confiado y continúan confiando en nosotros, pero para no
defraudarles necesitamos su complicidad y confianza. Espero que recuerde este
mensaje de su primera visita a la UNED.
No me queda sino desear a toda la comunidad universitaria un buen curso
académico. Cuenten con su rector y con todo el equipo de gobierno para lo que
necesiten. Créanme si les digo que continuamos sintiéndonos honrados y
orgullosos de poder ofreciendo lo mejor de nosotros a nuestra comunidad
universitaria.
Muchas gracias por su atención.
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