IDENTIFICACION-COMUNICACION EN EL ARTE RICARDO U LLOA B. Como epílogo a los problemas aquí presentados-en este Congreso Filo • .sófico- en torno a la esencia del arte, presento esta preocupación por indagar "el actuar" de una obra de arte ante un sujeto que la contempla, es decir, la relación de un sujeto creador con un sujeto receptor. Ante nosotros el espectáculo de un mundo artístico incomprensible y casi inexistente a un gran número de hombres y de seres. Hecho fatal en el curso de esas posibilidades que en determinada relación constituyen eso que se llama vida humana. Creo que lo esencial en la definición del arte general o del singular-música, pintura, etc.reside en su planteamiento como hecho creador, simplemente creación que nos lleva a un concepto superior asentado en el hombre histórico, a través de la ciencia histórico-cultural de Dilthey, y del hombre de la evolución creadora de Bergson. El hombre ante la obra de arte significa esto: entre ésta y aquél debe suceder algo que explica el hecho creador y su efecto, es decir, la obra creada. Este proceso lo defino así: el arte se nos ofrece como un lenguaje cuyo mecanismo tendrá por objeto comunicar dos sujetos. El hecho definitivo es que, entre el sujeto creador y el sujeto receptorcasi podríamos decir re-creadorcon sus mundos singulares cerrados en sí mismas, se hace necesaria una identificación y comunicación que los hace explicables entre sí; que los hace vivenciales, que los hace expresivos o inter-expresivos, que los hace comprensibles u objetos de conocimiento, de inter-conocimiento. Carlos Bousoño en España, nos explicó una teoría que define a la poesía como comunicación. Nosotros la podríamos hacer extensiva a todas las artes. El ser creador necesariamente define una comunicación ante un espectador, le ofrece un mundo que ha de ser sentido, conocido y aprehendido. Pero no debemos confundir los términos. Comunicación significa, a mi entender, el proceso que explica o hace real la obra de arte ante el hombre que la mira, más no la define. Es decir que poesía es poesía antes que comunicación. Luego ante nosotros dos problemas: uno el de la definición del arte mismo; otro, el del encontrar como este arte se puede o debe transformar en un lenguaje inteligible. Ahora sólo nos interesa lo segundo. Pero estaremos en lo cierto al contentamos con proponer una comunicación. Pensemos en una Fuga de Bach, y admitamos dos hombres: uno amante de la música clásica, otro verdaderamente negado a ella. Ante el desarrollo de la Fuga y nuestros dos sujetos sucederá lo siguiente: comunicación en el primer caso y no comunicación en el segundo. Y lo cierto es que la música de Bach permanecerá tan existente en su esencia más radical para y en ambos casos. Luego este mecanismo que se explica o define como "comunicación", es incompleto. Se completa al decir que toda comunicación habrá de nacer desde una "identificación" previa. 308 SEGUNDO CONGRESO EXTRAORDINARIO INTERAMERICANO DE FILOSOFIA Identificación ya significa un proceso que se manifiesta en forma de vínculocon otras personas o situaciones; y por su parte comunicación significa o implica una transmisión de un individuo a otro. Aplicado a nuestro interés, esto significaría que como fenómeno artístico se opera una comunicación, una trasmisión de un individuo a otro nacida desde un vínculo de esencias. Al identificamos con esa Fuga de Bach esta se nos comunica; y dicha. identificación implica tanto el "sentir" lo que una Fuga es, como el "saber" Ü' "comprender" lo que una Fuga "significa". Y este sentir y saber significan tambión un sentir y saber de un estilo, de una historia, de un hombre, de un arte, de una ciencia, de una forma, de un contenido, de un mundo y una totalidad. Es decir, se hace necesario un proceso especial que puede estar bien definido en una cita de Combarieu que nos ofrece Leopoldo Hurtado, en su Introducción a la Estética de la Música y que nos dice: " ... volver al libre juego de nuestras fuerzas interiores; intelectualizar la sensibilidad y sensibilizar la inteligencia" . . Esto nos presenta una buena cantidad y abundancia de problemas a tratar. AqUÍ sólo podremos citar de pasada uno de ellos: la relación de nuestra identificación-comunicación con el contenido y con la forma. Se precisa una identificación-comunicación de contenido y de forma. Con demasiada frecuencia se olvida que toda obra de arte es un ser que "vive" con un, alma y un cuerpo. Y creemos que ambos constituyen un todo inseparable y armónico; un todo orgánico como el ser humano, del cual no podríamos separar nunca, en forma absoluta, el ser "de dentro" con el "ser de fuera" . Para una posible identificación profunda, le es necesaria a la aprehensión propiamente dicha, que el sujeto receptor mantenga muy presentes y claros, el "vivir" y "existir" de tal organismo, al cual deberá distinguir, analizar y sintetizar. O sea lo mismo que en nosotros, que en nuestro todo. Debemos saber y poder analizar cada parte para integrarlas luego, inseparables ya en nuestro "organismo existencial". Esta identificación con la forma y el contenido significa que el sujeto receptor deberá implicarse una "vivencia" que desde los problemas. de contenido y los formales haga posible una síntesis totalizadora. N aturalmente que una comunicación con lo que estrictamente podría ser: considerado como problema formal, presupone una identificación con lo que estrictamente es estructura y forma, y con lo que estrictamente es contenido. Supongamos ante nosotros dos obras pictóricas: La Piedad de Roger Van der Weyden y la Adoración de los Reyes de Rubens. La identificación-comunicación se nos presentaría así: Lo formal nos dice un flamenco primitivo-Vander \lV eyden con todas las características de esta época pictórica; y nos dice de un flamenco barroco con las características de tal estilo, sentido desde el ser mismo de Rubens y plasmado en la famosa obra del Museo del Prado. Lo formal nos obliga a un introducimos en la estructura de ambos cuadros. Nos presenta el problema inicial del pintor al tener ante sí una superficie por llenar, y ya por lo pronto nos dice que el primitivo, en su obra del Prado de Madrid, "opera" sobre una tabla y con determinados materiales; y que el clásico lo hace, sobre una tela y con materiales distintos. Veremos que Van der Weyden se expresa ante todo en "intensidad" que robustece su acción desde una forma desprovista de agilidad y que tiende a cerrarse sobre sí misma. En cambio, Rubens se "extiende" y se abre a un mundo de mayor libertad, donde es posible plasmar un sentimiento cósmico a través de la forma abierta y pictórica del barroco. Veremos como el primitivo define una composición y como trabaja con su pincel y sus pigmentos. Sentiremos entonces la definición de los problemas de "superficie" 22 - 26 JULIO 1961 - SAN JOSE - COSTA RICA 309 .Y de "dispersión". De su parte, Rubens con una concepción distinta del espacio, 110S definirá los problemas de la construcción en profundidad, de la pincelada pictórica. Así podríamos seguir indicando aspectos que a la larga nos llevarán a una conclusión: el encontrarnos con lo que medularmente significa "pintura", es decir, .a ese "hacer" especial en una superficie con colores, formas y determinados materiales. Esto lo haremos extensivo a las demás artes. Así en lo musical ten-driarnos que encontrarnos con las "formas móviles de sonido" de Hanslick para .someter nuestro interés al "material sonoro". No podremos evitar el pensar y .sentir la música ya no como y únicamente expresión nacida desde las percepciones sonoras al actuar sobre la vida afectiva del hombre. El contenido nos obliga a penetrar en otro aspecto de la identificacióncomunicación de los dos cuadros propuestos. Creo que nos llevará desde la per.sonalidad singular del creador hasta una síntesis filosófica del sentido. Sentiremos de Van der Weyden su ingente sentimiento religioso dramático .dentro de una orientación filosófica más general de todo un estilo. Rubens con ímpetu nos dirá de una vitalidad cósmica bastante antagónica al espíritu del gran pintor primitivo flamenco. El contenido definirá muy especialmente el "sentido" de la obra de arte. Conclusiones adjuntas: Un sujeto que pretendiera "mirar" y "sentir" al -cuadro del primitivo desde el mundo propio que pertenece a Rubens y el Barroco -como visión única-falsearía la posibilidad de un lenguaje de comunicación. y lo contrario: mal parado saldría el arte de Rubens si le aplicáramos una retina religiosa y "primitiva". Lo que Rubens nos puede dar es su mundo singular -ciertamente una sola cosa-y la identificación consistirá en penetrar en la esencia .de ese mundo. Mas no olvidemos que nos hemos referido al ser totalizador de la obra de ..arte, esa alma, espíritu o cuerpo indisoluble. Formulo entonces los siguientes principios adicionales: A) Que la relación del sujeto creador con la obra y el sujeto receptor se basará muy de inmediato, en lo que constituye la forma y el contenido de un arte; forma y contenido del arte en general; forma y contenido de un estilo, de una .personalidad, de un mundo. B) Que no existe delimitación absoluta entre el contenido y la forma, corno dos aspectos distintos y no relacionados de la creación. C) Que el sujeto receptor, ya basándose en lo estrictamente formal o estrictamente de contenido-haciendo un corte violento--deberá buscar 10 unitario y totalizador, la síntesis orgánica, de manera que "el sentido" profundo de la obra nazca desde la dual existencia y esencia de dos factores-alma y cuerpo-que se .arrnonizan y fusionan en un ser único. N uestro problema de la identificación-comunicación se separa, aunque no se niega a la intuición bergsoniana. Aún tomando en cuenta la distinción que hace Bergson entre inteligencia e instinto y sus relaciones con la materia y la forma, no creo que sea suficiente su explicación de la intuición estética como .resolución al problema del hacerse inteligibles nuestros dos sujetos. Bien comprendo como la intuición nos puede llevar "hasta el interior mismo de la vida", pero el ser creador no se mueve en un único campo de "simpatía" para penetrar "en el interior del objeto" -y el instinto es simpatía para Bergson-. El acto .creador, creo yo, implica-aunque suene paradójico-una síntesis especial entre instinto e inteligencia.