Ésta es la historia de un camino, o de muchos caminos que al final conforman un único camino. Los pies descalzos de miles de hombres y mujeres los trazan. Son caminos que se van construyendo con dolor, con sangre, con carne quemada y lágrimas, pero que viven atravesados de sonrisas, de besos y caricias. Es un camino que surca la Tierra, imponiéndose al barro de las guerras o al yermo de la barbarie. Una nueva esperanza, la que siempre ha vivido dentro de nosotros. Las palabras. Una palabra. Casandra. Casandra debería ser la protagonista de esta odisea, la desdichada heroína clásica que avisaba de los infortunios por venir sin que nadie atendiera a sus advertencias. Pero Casandra no es un único ser. Casandra está naciendo día a día y estas historias cuentan algunos de esos nacimientos. CASANDRA LA COMPAÑÍA TEXTOS Armando Nascimento, Mª Pia Daniele, Matei Visniec, Dragica Potocnjak, Miguel Morillo, Juan,Pablo Heras, Raul Hernández. DRAMATURGIA Raul Hernández, Luis Miguel González, José Ramón Fernández y la colaboración de José Monleón. REVISIÓN DEL TEXTO Pedro Álvarez-Ossorio DIRECCIÓN Pedro Álvarez-Ossorio COORDINACIÓN GENERAL José Monleón REPARTO Actor / Abuelo / Jefe Guardián / Prisionero / Shevo / Psiquiatra Madre de Armin / Mujer Víctima Stanko / Inmigrante / Krsto / Enfermero Mujer Verdugo / TíA de Armin Joven / Hermana de Armin Vibko / Subjefe / Hermano de Armin Niño/ Armin Emilio Alonso Antonio Morales Asunción Sanz Mustapha Bahja Medea Pochkhua Daidee Veloz Pablo Huetos José Manuel Muñoz ESCENOGRAFÍA G.V.R. / Vicente Palacios MÚSICA ORIGINAL Phil Spectrum EDICION Y EFECTOS Santi Martínez / Enrique Galera SELECCIÓN MUSICAL (canciones populares georgianas y rusas) Medea Pochkhua DISEÑO ILUMINACIÓN José Casado / Pedro Álvarez-Ossorio Manuel Colchero TECNICO DE ILUMINACIÓN Manuel Colchero FOTOGRAFÍA Carmen Picazo IMAGEN Vicente A. Serrano Esperanza Santos EFECTOS ESPECIALES Hector Ruiz PRODUCCIÓN LA FUNDICIÓN Lourdes García / Toni Hurtado PRODUCCIÓN IITM Angela Monleón COPRODUCE DANZA MOBILE COLABORACIÓN ESPECIAL COMISIÓN EUROPEA AGRADECIMIENTOS TCM-AUDIOVISIÓN / LA IMPERDIBLE Joaquín Avila / Angel Alfonso Amodeo / Rosa Castro Iglesias Y a todos los participantes en las etapas anteriores Cronología del PROYECTO CASANDRA: Nov-Dic 2.000: Madrid (Festival Madrid-Sur); 8 autores de cinco países (España, Italia, Portugal, Eslovenia y Francia) reunidos durante un mes en un laboratorio de escritura, proponen y escriben, diversos textos vinculado a los Derechos Humanos. Ene-Mar 2.001: Todos esos materiales son adaptados a una estructura dramática, vertebrando las distintas historias en un drama único, sobre la figura mítica de Casandra, por el grupo Astilleros y bajo la coordinación de Raul Hernández. Mar-Abr 2.001: Un colectivo de dirección, formado por un español, una italiana y un portugués, contando con un músico francés, un escenógrafo esloveno, y un reparto de actores de España, Italia y Portugal, completan este encuentro en el imaginario en un Laboratorio de puesta en escena, y siempre bajo el epígrafe Teatro y Derechos Humanos. Los resultados se muestran al público en Leganés y Getafe (España), Lisboa-Amadora (Portugal) y L’Aquila y Pescara (Italia). Sep- Oct 2.001: El IITM decide retomar el trabajo en España y elaborar con todos estos materiales un espectáculo. Se trabaja sobre una nueva dramaturgia del texto. Tanto la música como la escenografía son también revisadas con nuevas incorporaciones. Se le encarga la dirección a un único director, Pedro Alvarez-Ossorio. Y serán ocho los actores encargados de hacernos llegar esta peculiar declaración de los Derechos Humanos, 4 de ellos representantes de minorías, un marroquí, una cubana, una georgiana y un chico con Síndrome de Down, bailarín de la compañía Danza Móbile. Con estas nuevas incorporaciones el proyecto amplía las minorías representadas que subrayan un espectro de las zonas originarias de nuestra emigración. Todos ellos profesionales del sector vinculados sobremanera no sólo con el teatro, sino también con los objetivos del IITM. Esta última parte, de este largo proyecto, se estrenó en el Festival Madrid Sur, 2.001, los días 26, 27 y 28 de Octubre, participando posteriormente en el 24 Festival Internacional de Teatro y Danza Contemporáneos de Badajoz, el 2 de Noviembre, y en el Teatro Lope de Vega de Sevilla los días 7, 8 y 9 de Diciembre, coincidiendo con el 53 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (10 de Diciembre de 1948). La Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Convenio Europeo de Derechos Humanos, del 50, integrado a la Constitución Española, la inclusión de tales derechos en el Tratado de Amsterdam, distintas declaraciones comunitarias que amplían el censo de los Derechos Fundamentales, la creación de un tribunal internacional, e incluso acciones militares realizadas bajo la invocación de los Derechos Humanos, son parte esencial de la construcción de una nueva convivencia. Paralelamente, la realidad nos sitúa ante innumerables ejemplos de flagrante incumplimiento, no sólo en los episodios puntuales de las guerras y su espantoso corolario, sino en la misma cotidianeidad de una serie de sistemas culturales e ideológicos comúnmente aceptados que, de hecho, imposibilitan la aplicación y exigibilidad de tales derechos. Frente a esa contradicción cabe, desde luego, limitarse a la denuncia y repetir que estamos ante la enésima decepción política contemporánea, prodiga en discursos fraternales y abundante en ejemplos de todo lo contrario. Cabe también acompañar la denuncia de la convicción de que los intereses y las ideologías que determinan el curso de la historia constituyen una barrera infranqueable a cualquier proceso que haga real la vigencia de unos derechos que, no olvidemos, comportan también una serie de deberes, en la medida que se reduce la enraizada aceptación del privilegio. Cabe también, y esa es la raíz y la razón de este espectáculo, que a la vulneración habitual de los Derechos Humanos opongamos su defensa, convencidos de que forman parte del progreso de la sociedad humana y que en ellos se resuelven en justicia muchos de nuestros conflictos. Ninguna simplificación en esta postura. Nada más ingenuo que ponerse a cantar los derechos humanos, como han hecho tantas ideologías de la fraternidad, dándole la espalda al curso de la historia. Por el contrario, estamos ante un camino antiguo, lleno de víctimas y de seres ejemplares, que, paso a paso, han ido introduciendo en el pensamiento y en el imaginario de amplios sectores la utopía posible, el norte ético, de los Derechos Humanos. Esa es nuestra Casandra, la Utopía que espera, la que sabe que la miseria y la violencia de nuestro tiempo es un paso más en el largo camino hacia esa realidad que ya empieza a ser reconocida en los espacios internacionales, que, cada vez es menos un mero sentimiento, para alcanzar la condición de un Derecho, de una norma para el comportamiento personal y la vida de las sociedades. José Monleón Director del IITM Un camino construido a partir de muchos caminos. Si el proyecto "Argonautas" fue un viaje en el que debíamos aprender a respetar la diferencia, con el proyecto "Casandra" hemos intentado construir un camino a partir de muchos caminos. Caminos andados a lo largo de un año por las múltiples y diversas personas que decidimos emprenderlos, bajo el lema "la defensa de los derechos humanos". Propuesta arriesgada y previsiblemente fácil de no llegar a ningún puerto, con tantas sinergias tirando en sentido diverso, que haber conseguido una unidad ética y estética ha sido casi un milagro. Que hubo muchos caminos fue la parte más positiva de esa propuesta pero que entre todos conformábamos un único camino no se hacía evidente a pesar de las buenas intenciones. Por eso necesitábamos de una gran dosis de imaginación, un refrenar nuestros impulsos naturales a la búsqueda de soluciones particulares, un saber escuchar y aprovechar cualquier propuesta del otro y sobre todo una gran generosidad por parte de todos y cada uno para hacerle frente al reto. Múltiples nacionalidades, edades, diferencias religiosas y culturales que mostraban colores diversos sobre un mismo tema. Españoles, Franceses, Eslovenos, Italianos, Portugueses, Marroquíes, Cubanos o Georgianos, todos y cada uno debíamos aprender en la mirada del otro. Capacitados o discapacitados, víctimas o verdugos, agraviadores y agraviados, huyendo de cualquier maniqueísmo, todos y cada uno de nosotros quisimos investigar sobre nuestros comportamientos más instintivos desde posiciones diversas. Y eso es lo que ofrecemos, porque lo importante era que fuera verdadero. El compromiso individual y colectivo tendría sentido si conseguíamos hablar desde nuestra verdad, desde nuestra experiencia. El objeto era hablar de lo vivido más que de lo aprendido. No partíamos de la nada, el año de trabajos previos había originado muchos materiales, y, con todos esos materiales, pues, nos planteamos hablar con una sola voz, concretarlo en esta nueva revisión del espectáculo; capaz de reunir tanta experiencia, llena de nuevos lenguajes nacidos de tantas voces, y darle una lectura homogénea. Que, como decían nuestros antiguos dramaturgos, ofrecemos hoy al público esperando haber acertado y quedando a su benevolencia. Pedro Álvarez-Ossorio ... “¿Somos capaces de poner en práctica los principios éticos básicos respecto a la igualdad de todos los seres humanos? ¿Están las sociedades de hoy haciendo realmente todo lo posible para impedir que los individuos actúen como lo hicieron los dioses y héroes en el tiempo de Casandra? ¿Tiene todo el mundo en nuestras sociedades el derecho a la vida, la libertad y la seguridad personal? ¿Cómo nos enfrentamos a la tortura, a los castigos y los tratamientos inhumanos o degradantes y qué es lo que hacemos para evitarlos?” Las cuestiones son innumerables, pero no deberíamos evitar nuestra responsabilidad personal a causa de su número. Deberíamos actuar, deberíamos contar historias de los degradados, de los castigados, de los privados de Derechos Humanos. Deberíamos usar nuestro derecho a no guardar silencio, nuestro derecho a la libertad de opinión y expresión, la libertad de mantener opiniones sin interferencia y de buscar, recibir e impartir información e ideas a través de cualquier medio y sin consideración de fronteras. Ya que nuestro medio es el teatro, es a través del teatro donde desarrollamos nuestro derecho a la libertad de reunión, asociación y asamblea pacífica, y lo compartimos con nuestras audiencias. Este es uno de los objetivos principales del Proyecto Casandra. Usar el derecho a no guardar silencio, como hizo Casandra. Hablar sobre su historia y hablar sobre las historias de las Casandras contemporáneas: mujeres y hombres, negros y blancos, pequeños y grandes, pobres y ricos... Tomaz Toporisic (Teatro Mlandinsko. Eslovenia) ... Cada textualidad, cada microescena, van desgranando los ecos del personaje trágico. Casandra está en el diálogo entrecortado entre dos enemigos, separados por la inquietante línea de la frontera; en los dolores de parto de una mujer que huye de la barbarie y va a dar a luz un niño; en la crónica de un inmigrante hastiado; en la conversación de un infeliz detenido y que sueña con una llamada telefónica. Allí, en todos esos paisajes del desaliento, está la joven troyana. Casandra recoge, como propuesta textual, la propia intención de Esquilo. El poeta es un sabio y un educador del pueblo que propone situaciones de su tiempo. No puede eludir lo real y aspira a influir en el pensamiento y la reflexión del otro. Ese mismo “deber” dramatúrgico, esa responsabilidad, ha encontrado muchas y múltiples formas para ser expresado. La literalidad de la denuncia, la inmediatez del discurso, tan eficaz en lo político, no es el único modelo de referencia en lo artístico. Casandra es una propuesta que abre caminos de debate sobre la vindicación de unos derechos que siguen siendo, como recordaba José Saramago, en el discurso pronunciado ante la concesión del Premio Nobel, la gran exigencia y el deber moral de los progresistas hoy: el cumplimiento real y práctico de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Itziar Pascual ... Vuelve a estar en primer plano el objetivo “político” del teatro, fundamental para una actividad colectiva como la nuestra. He aquí el sentido de apelar a la cultura de la polis griega y a su teatro. Y también el significado de este coro de personas, vestidas con uniformes contemporáneos en un pedazo del planeta Tierra, que intentan liberarse de la apatía ideológica y de la sensación de impotencia dando voz a su guerra interior, comunicándola al público directamente o a través de varias historias. La respuesta al conflicto no es el conflicto, para quien desea la paz. No es la pasividad. Es la fe laica en el concepto de justicia. Es dar voz a los sufrimientos causados por las atrocidades, dar cuerpo a los muertos para restituirles un sentido, es decir “¡basta!” a la violencia. Nicoletta Guidotti / Pedro Álvarez-Ossorio / Pedro Saavedra ... Trabajando sobre las obras originales, Casandra comenzó a perfilarse como una presencia que atravesaba los textos. Casandra, no ya un personaje, sino una voz que urgida por la razón, y aún sabiendo que sería despreciada por todos, siente el deber de anunciar una verdad que nadie quiere ver. Es un largo camino no de una persona, sino que han recorrido miles de personas. Un camino basado en el respeto a la persona, a la vez que al bien común, y en la certidumbre de que, para que esto se dé, debe haber una ley que asegure esa convivencia. Es un sueño que quizá empezó con la idea de democracia en Grecia, hace 2500 años, y que Esquilo expresó al final de Las Euménides. (...) Por eso, para mí la gran lección de este montaje fue comprender que el proceso de creación de Casandra, como fue el de su antecedente, Argonautas 2000, refleja en sí esa idea de comunidad, de camino compartido, lleno de indecisiones, de pequeñas traiciones, pero también de encuentros y de conquista de una tierra común, de un lenguaje en el que se dé cabida a todas las voces. Raúl Hernández La Fundación Instituto Internacional del Teatro del Mediterráneo (IITM), señala en el artículo 4 de sus estatutos que tendrá como objeto fomentar y promover las expresiones escénicas, así como todo tipo de iniciativas culturales que contribuyan a la finalidad de desarrollar y manifestar la cultura mediterránea en todas sus vertientes, el intercambio cultural y la solidaridad entre los pueblos mediterráneos. El trabajo realizado en el cumplimiento de estos objetivos ha implicado la creación y mantenimiento de un tejido que engloba 24 países: 15 europeos, 6 africanos y 3 del Mediterráneo Oriental, partiendo de una concepción de la mediterraneidad asentada en su estimación cultural, entendiendo que varias culturas básicas han ido estableciendo un espacio lleno de afinidades e influencias, susceptibles de crear una cierta conciencia común, respetando la personalidad de los pueblos, frente a las ideologías que magnifican las diferencias como razón de sus continuos conflictos. Así el IITM, ha trabajado por una cohesión cultural, respetuosa con las singularidades, convencido de que sólo el recíproco conocimiento y el respeto mutuo entre los pueblos podrá ser garante de la prosperidad y paz de la zona. La labor del IITM ha merecido el reconocimiento de la UNESCO que lo incorporó a su Programa Mediterráneo, el reiterado apoyo de la Comisión Europea y de los Ministerios de Cultura y Asuntos Exteriores de España en muchas de sus actividades y la atención regular de las Comunidades Autónomas de Madrid, Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha. El IITM tiene su origen en el Festival de Mérida, que durante los años 83/88 –dirigido por José Monleón- pasó de festival de teatro clásico a encuentro con la tradición mediterránea. En el 89 empezó a plantearse la creación del IITM como fundación autónoma, enriqueciendo la defensa del diálogo cultural mediterráneo con el convencimiento de que era una tarea esencial para reducir las tensiones de la zona, fruto, a menudo, de interesadas y falsas lecturas de la historia. La reunión fundacional tuvo lugar en Mérida, en 1990, desarrollándose a partir de entonces una serie de actividades que culminaron en la aprobación colectiva de los Estatutos y la constitución legal de la Fundación en julio de 1991. Desde entonces a hoy se han realizado más de 400 actividades en diversas ciudades del ámbito mediterráneo, a veces en contextos pacíficos, a veces en contextos inmersos en la violencia o apenas salidos de ella. Numerosas declaraciones han ido explicitando los compromisos éticos del Instituto en diversas áreas, generando, en todos los casos, sus correspondientes Redes o Programas. Programa de trabajo 2000-2001 - Argo: Nueva Europa Casandra: Teatro y Derechos Humanos Madrid Sur Al Mutamid Los niños del Mediterráneo Odisea 2001 Cultura y Emigración Argonautas 2000 → Para más información sobre el IITM, visitar la página - - Foro Ibn Arabi Dionysos Espacio Teatral Grecolatino - Una fiesta para Aristófanes - Acción Teatral de la Valldigna Islas del Mediterráneo Prometeo Publicaciones www.iitm.org DECLARACION UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANOS PREÁMBULO Considerando que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana. Considerando que el desconocimiento y el menosprecio de los derechos humanos han originado actos de barbarie ultrajantes para la conciencia de la humanidad y que se ha proclamado como la aspiración más elevada del hombre el advenimiento de un mundo en que los seres humanos, liberados del temor y de la miseria, disfruten de la libertad de palabra y de la libertad de creencias. Considerando esencial que los derechos humanos sean protegidos por un régimen de derecho, a fin de que el hombre no se vea compelido al supremo recurso de la rebelión contra la tiranía y la opresión. Considerando también esencial promover el desarrollo de relaciones amistosas entre las naciones. Considerando que los pueblos de las Naciones Unidas han reafirmado en la Carta su fe en los derechos fundamentales del hombre, en la dignidad y el valor de la persona humana y en la igualdad de derechos de hombres y mujeres; y se han declarado resueltos a promover el progreso a social y a elevar el nivel de vida dentro de un concepto más amplio de la libertad. Considerando que los estados miembros se han comprometido a asegurar, en cooperación con la Organización de las Naciones Unidas, el respeto universal y efectivo de los derechos y libertades fundamentales del hombre, y Considerando que una concepción común de estos derechos y libertades es de la mayor importancia para el pleno conocimiento de dicho compromiso: LA ASAMBLEA GENERAL PROCLAMA LA PRESENTE DELARACIÓN UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANOS como ideal común por el que todos los pueblos y naciones deben esforzarse, a fin de que, tanto los individuos como las instituciones, inspirándose constantemente en ella, promuevan, mediante la enseñanza y la educación, el respeto a estos derechos y libertades y aseguren, por medidas progresivas de carácter nacional e internacional, su reconocimiento y aplicación universales y efectivos, tanto entre los pueblos de los estados miembros como entre los de los territorios colocados bajo su jurisdicción. Artículo I. Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros. Artículo II. 1. Toda persona tiene los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión pública o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra distinción. 2. Además, no se hará distinción alguna fundada en la condición política, jurídica o internacional del país o territorio de cuya jurisdicción dependa una persona, tanto si se trata de un país independiente, como de un territorio bajo administración fiduciaria, no autónomo o sometido a cualquier otra limitación de soberanía. Artículo III. Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona. Artículo IV. Nadie estará sometido a esclavitud ni a servidumbre: La esclavitud y la trata de esclavos están prohibidas en todas sus formas. Artículo V. Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes. Artículo VI. Todo ser humano tiene derecho, en todas partes, al reconocimiento de su personalidad jurídica. Artículo VlI. Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley. Todos tienen derecho a igual protección contra toda diferenciación que infrinja esta Declaración y contra toda provocación a tal discriminación. Artículo VIII. Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo, ante los tribunales nacionales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución o por la ley. Artículo IX. Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado. Artículo X. Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial, para la determinación de sus derechos y obligaciones o para el exámen de cualquier acusación contra ella en materia penal. Artículo XI. 1. Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en que se le hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa. 2. Nadie será condenado por actos u omisiones que en el momento de cometerse no fueren delictivos según el derecho nacional o internacional. Tampoco se impondrá pena más grave que la aplicable en el momento de la comisión del delito. Artículo XII. Nadie será objeto de injerencias arbitrarias en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia, ni de ataques a su honra o a su reputación. Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra tales injerencias o ataques. Articulo XIII. 1. Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un estado. 2. Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio y a regresar a su país. Artículo XIV. 1. En caso de persecución, toda persona tiene derecho a buscar asilo, y a disfrutar de él, en cualquier país. 2. Este derecho no podrá ser invocado contra una acción judicial, realmente originada por delitos comunes o por actos opuestos a los propósitos y principios de las Naciones Unidas. Articulo XV. 1.Toda persona tiene derechos una personalidad. 2. A nadie se privará arbitrariamente de su nacionalidad ni del derecho a cambiar de nacionalidad. Artículo XVI. 1. Los hombres y las mujeres, a partir de la edad núbil, tienen derecho, sin restricción alguna por motivos de raza, nacionalidad o religión, a casase y fundar una familia; y disfrutarán de iguales derechos en cuanto al matrimonio, durante el matrimonio y en caso de disolución del matrimonio. 2. Sólo mediante libre y pleno consentimiento de los futuros esposos podrá contraerse el matrimonio. 3. La familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a la protección de la sociedad y del estado. Articulo XVII. 1. Toda persona tiene derecho a la propiedad, individual y colectivamente. 2. Nadie será privado arbitrariamente de su propiedad. Articulo XVIII. Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia. Artículo XIX. Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión. Articulo XX. 1. Toda persona tiene derecho a la libertad de reunión y de asociación pacíficas. 2. Nadie podrá ser obligado a pertenecer a una asociación. Articulo XXI. 1. Toda persona tiene derecho a participar en el gobierno de su país, directamente o por medio de representantes libremente escogidos. 2. Toda persona tiene el derecho de acceso, en condiciones de igualdad, a las funciones públicas de su país. 3. La voluntad del pueblo es la base de la autoridad del poder público; esta voluntad se expresará mediante elecciones auténticas que habrán de celebrarse periódicamente, por sufragio universal, e igual, y por voto secreto u otro procedimiento equivalente que garantice la libertad de voto. Articulo XXII. Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad social y a obtener, mediante el esfuerzo nacional y la cooperación internacional, habida cuenta de la organización y los recursos de cada estado, la satisfacción de los derechos económicos, sociales y culturales indispensables a su dignidad y al libre desarrollo a su personalidad. Articulo XXIII. 1. Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a condiciones equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección contra el desempleo. 2. Toda persona tiene derecho, sin discriminación alguna, a igual salario por trabajo igual. 3. Toda persona que trabaja tiene derecho a una remuneración equitativa y satisfactoria, que le asegure, así como a su familia, una existencia conforme a la dignidad humana, y que será completada, en caso necesario, por cualesquiera medios de protección social. 4. Toda persona tiene derecho a fundar sindicatos y a sindicarse para la defensa de sus intereses. Artículo XXIV. Toda persona tiene derecho al descanso, al disfrute del tiempo libre, a una limitación razonable de la duración del trabajo y a vacaciones periódicas pagadas. Artículo XXV. 1. Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene asimismo derecho a los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez u otros casos de pérdida de sus medios de subsistencia por circunstancias independientes de su voluntad. 2. La maternidad y la infancia tienen derecho a cuidados y asistencias especiales. Todos los niños, nacidos de matrimonio o fuera del matrimonio, tienen derecho a igual protección social. Artículo XXVI, 1. Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental. La instrucción elemental será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para todos, a función de los méritos respectivos. 2. La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos, y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz. 3. Los padres tendrán derecho preferente de escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos. Artículo XXVII. 1. Toda persona tiene derecho a tomar parte libremente en la vida cultural de la comunidad, a gozar de las artes y a participar en el progreso científico y en los beneficios que de él resulten. 2. Toda persona tiene derecho a la protección de los intereses morales y materiales que le correspondan por razón de las producciones científicas, literarias o artísticas de que sea autora. Artículo XXVIII. Toda persona tiene derecho a que se establezca un orden social o internacional en el que los derechos y libertades proclamados en esta Declaración se hagan plenamente efectivos. Articulo XXIX. 1. Toda persona tiene deberes respecto a la comunidad, puesto que sólo en ella puede desarrollar libre y plenamente su personalidad. 2. En el ejercicio de sus deberes y en el disfrute de sus libertades, toda persona estará sujeta a las limitaciones establecidas por la ley con el único fin de asegurar el reconocimiento y el respeto de los derechos y libertades de los demás y de satisfacer las justas exigencias de la moral, del orden público y del bienestar general en una sociedad democrática. 3. Estos derechos y libertades no podrán en ningún caso ser ejercidos en oposición con los propósitos y principios de las Naciones Unidas. Artículo XXX. Nada en la presente Declaración podrá interpretarse en el sentido de que confiere derecho al estado, a un grupo o a una persona para emprender y desarrollar actividades o realizar actos tendentes a la supresión de cualesquiera de los derechos y libertades proclamados en esta Declaración. 10 DE DICIEMBRE DE 1948 PROYECTO CASANDRA Entre las tres etapas del proyecto han participado: Agustín Giménez Ana Cloe Ángela Monleón Antonio Morales Armando Nascimento Rosa Asunción Sanz ATAES Carmen Picazo Daidee Veloz Danza Móvile Dragica Potocnjak Educación y Cultura - Cultura 2.000 Emilio Alonso Enrique Galera Esperanza Santos Eva Martelli Federico Fiorenza Fernando Esteve Festival Madrid Sur Francesca Musci Francesco Anello G.V.R Giacomo Vallozza Héctor Ruiz IITM Joao Mota José Casado José Manuel Muñoz José Monleón José Ramón Fernández Juan Pablo Heras La Fundición Laura Pazzaglia Lourdes García Luis Miguel González Cruz M.E.C.Gral. De Cooperación y Comunicación Mª Jesús Andrino Mª Pia Daniele Manuel Colchero Matei Visniec Medea Pochkhua Michelle de Maria Miguel Morillo Mustapha Bahja Nicoletta Guidotti Nieves Mateo Nuno Nunes Pablo Huetos Pedro Álvarez- Ossorio Pedro Zaavedra Phil Spectrum Pilar Sánchez Raúl Hernández Garrido Rebeca Sáenz de Jubera Reme Rodríguez Richard Martin Santi Martínez TCM Audiovisión Teatro Stabile d'Abruzzo Tomás Toporisic Toni Hurtado Vicente A. Serrano Vicente Palacios