la gestión de los recursos naturales de áridos. problemática de

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LA GESTIÓN DE LOS RECURSOS NATURALES DE ÁRIDOS.
PROBLEMÁTICA DE ABASTECIMIENTO EN LA COMUNIDAD DE MADRID
César Luaces Frades
Ingeniero de Minas
Director General
Federación de Áridos
RESUMEN
La actividad de extracción de los recursos naturales minerales de áridos, materia
prima estratégica para el desarrollo de la construcción, muestra unas peculiaridades,
que la hacen merecedora de una gestión integrada dentro del ordenamiento
urbanístico.
Las características intrínsecas de la actividad extractiva, sus afecciones al entorno,
su imprescindible proximidad a los centros de consumo y el enorme volumen de
áridos consumidos en España, 560 millones de toneladas, en 2006, que son
1
transportados íntegramente por carretera, establecen unos condicionantes que no
pueden ser obviados, máxime cuando se trata de una materia prima de origen
mineral, cuya explotación está ligada a la existencia, en la naturaleza, de
yacimientos de áridos de calidad.
Todos estos factores hacen que la cohabitación de esta industria imprescindible, con
los desarrollos urbanísticos que aproximan sin cesar las ciudades a las canteras y
a las graveras, sea un aspecto delicado, a veces conflictivo, y sobre el que, en esta
comunicación se establecen propuestas integradoras, para asegurar un adecuado
suministro de esta materia que es la segunda más consumida por el hombre
después del agua (11.000 kg/hab/año).
Esta comunicación analiza el caso práctico de la situación en la Comunidad de
Madrid, que puede ser extrapolado a muchos otros lugares del país, donde una
inadecuada planificación territorial puede desembocar en una situación de
desabastecimiento de materias primas básicas, ocasionándose efectos negativos
sobre el entorno.
1. INTRODUCCIÓN
Las explotaciones existentes en la Comunidad de Madrid tienen una producción
actual de unos 37,4 millones de toneladas, que procede, en buena parte, de
canteras y graveras de tamaño importante, superando en algunos casos, 3 millones
de toneladas/año y en muchos otros, el millón de toneladas/año, siendo la media de
680.000 t/año por explotación, muy superior a la media española que es de unas
275.000 t/año.
Las inversiones en la actividad extractiva se realizan a largo plazo y por tal motivo
las empresas deben de tomar decisiones con una antelación mínima de cinco años,
2
debido a lo complejo de la tramitación, del proyecto técnico y de la puesta en
operación de las explotaciones de este tipo.
Resulta pues necesario, para el sector, que la política de actuaciones del Gobierno
de la Comunidad de Madrid, en relación con el desarrollo de la actividad extractiva
sea coherente, con objeto de que las empresas puedan establecer a corto, medio y
largo plazo su estrategia para garantizar el abastecimiento de la Comunidad de
Madrid, pues no se ha de olvidar que la actividad del sector es, básicamente, un
servicio público a la sociedad, por poner a disposición de ésta, las materias primas
que necesita para su desarrollo
2. PROBLEMÁTICA PLANTEADA EN LA COMUNIDAD DE MADRID EN
RELACIÓN CON LA ORDENACIÓN DEL TERRITORIO
2.1 Aspectos generales
Hasta fechas recientes, los límites del planeamiento se circunscribían a lo
estrictamente urbanístico (uso del suelo para edificación). La indeterminación legal
de los límites de la potestad de planeamiento, permite que estos Planes puedan
extenderse a otros fines, es decir, que regulen otros tipos de uso del suelo
(comercial, industrial, extractivo, etc.), lo que sobrepasa la potestad urbanística.
Hasta ahora, no hay experiencias claras en este sentido, más que en algún supuesto
muy concreto (centros comerciales, espacios naturales protegidos); por otra parte, el
marco legal es claramente insuficiente e impreciso al respecto. Los únicos casos que
conocemos de extensiones del planeamiento al campo de las actividades
extractivas,
han
sido
claramente
restrictivos,
desafortunados
e
incluso
inconstitucionales (STC 64/92), habiendo incluso casos en que algún Plan prohíbe
en todo el municipio toda actividad extractiva.
3
El ámbito municipal que siempre prevalece dificulta extraordinariamente la
planificación razonable con otros fines, y determina la privilegiación de políticas
locales poco sensibles a las exigencias del desarrollo económico, por lo que esta
práctica debe considerarse un abuso de la potestad urbanística y una
desnaturalización de la misma, motivo por el cual debe proscribirse por el legislador,
impidiendo que la potestad de planeamiento invada el ámbito extractivo.
Por otra parte, la necesidad de licencia de apertura para las explotaciones mineras
no está clara en el ordenamiento y perturba extraordinariamente la actividad de tales
explotaciones, que en su mayoría carecen de ella, estando expuestos así a toda
clase de veleidades municipales. Los intereses públicos protegidos por esta licencia
ni son diferentes ni prevalecen sobre los que son tutelados por la autorización
minera, por lo que debe aclararse definitivamente esta situación, estableciéndose
como únicamente necesaria la licencia de obras y la autorización de la autoridad
minera.
Por su parte, la licencia de obras no puede convertirse en un instrumento de presión
de los Ayuntamientos sobre las actividades extractivas, aclarándose que debe
concederse, como acto reglado que es, cuando no vulnere ninguna previsión
urbanística. Igualmente debe aclararse que esta vulneración nunca se produce
cuando se trata de extracciones situadas en suelo no urbanizable, entorno natural y
mayoritario de las actividades extractivas, salvo que existan áreas de especial
protección, conforme a la legislación especial sobre la materia, y cuya declaración
haya observado las garantías y procedimientos establecidos en tal legislación
especial.
Por último, a fin de evitarse todo abuso en la concesión o exigencia de licencias, se
debe eliminar la posibilidad de exigir licencias periódicas presuntamente necesarias,
4
al tratarse de actividades en funcionamiento. Y por supuesto, debe legalizarse la
situación de las actividades extractivas en funcionamiento, de acuerdo con lo
establecido en la propia Ley del Suelo, para evitar toda inseguridad jurídica,
actuaciones arbitrarias y perjuicio de derechos adquiridos.
También es muy insuficiente la actual legislación medioambiental, que propicia que
se produzcan a menudo arbitrariedades o criterios prohibitivos, basados únicamente
en la subjetividad de los funcionarios, por lo que la seguridad jurídica en este
fundamental punto es muy endeble. Y, también es justo reconocerlo, las garantías
legales sobre la obligación de restaurar, singularmente si cesa la explotación, son
muy exiguas. Todo ello sin duda requiere una mejora de la regulación legal, siendo
el objeto de esta comunicación realizar algunas sugerencias de mejora de la
legislación en estos sentidos.
2.2 El Parque del Sureste
En el año 2003, se realizó un estudio, por una tercera parte, la empresa EPM, donde
se pusieron de manifiesto diversos problemas relacionados con el denominado
Parque del Sureste, que pueden resumirse en uno: desde 2000, hasta fechas muy
recientes (07/11/2007) se han encontrado paralizados 33 expedientes. Muchos de
ellos contaban con una DIA favorable que, como incluía en sus condicionados la
aprobación de la Junta Rectora del Parque y ésta no ha resuelto expedientes en
cerca de 7 años, esta circunstancia ha supuesto una prohibición de facto de la
concesión de autorizaciones de nuevas explotaciones o de ampliaciones de las
existentes.
Según datos de la Dirección General de Industria, Energía y Minas, las reservas de
áridos medidas en las explotaciones del Parque son, para 2007, de 115,8 millones
de toneladas. Respecto al año 2001, las reservas han disminuido en un 42%. Al
5
actual ritmo de consumo, las reservas autorizadas permitirán producir áridos
durante 9 años, hecho que pone de manifiesto la gravedad de la situación
planteada.
De las 34 explotaciones activas existentes en 2001, hoy en día permanecen,
como tales 25 (73.5%). La superficie afectada, en 2001, era de 3.626 ha, mientras
que, en 2006, se ha reducido a 1.497 ha, que es el 4,7% de la superficie total del
Parque, con una importante reducción de 2.129 ha (-58%), por lo que, hoy en día,
los posibles efectos sinérgicos han quedado muy diluidos, considerando,
además, la recuperación de grandes superficies ya restauradas.
Todo ello, a pesar del Dictamen del Consejo de Estado 1002/1998, de 2 de abril de
1998 relativo al Plan de Ordenación de Recursos Naturales del Parque Regional en
torno a los cursos bajos de los ríos Manzanares y Jarama, que establece que “Que
el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales en torno a los ejes de los cursos
bajos de los ríos Manzanares y Jarama no puede establecer nuevas prohibiciones ni
limitaciones para extraer áridos en las zonas D1, D2 y F."
En efecto, la adopción de un criterio general sobre la zona D del Parque, en el
sentido de que se encuentra saturada de explotaciones mineras y por tanto no cabe
autorizar más explotaciones o ampliaciones de las existentes en la misma, supone
en la práctica y sin la menor duda el vaciar de contenido la autorización expresa que
la Ley reguladora del Parque, Ley 6/1994, contiene para esta Zona en relación con
las actividades extractivas. Nos encontramos ante una prohibición encubierta, frente
a la autorización legal expresa, lo que es contrario al mencionado Dictamen del
Consejo de Estado.
Por tanto, este criterio es frontalmente ilegal y supone una contravención manifiesta
de la Ley, sustituyendo indebidamente el criterio del legislador por el criterio
6
subjetivo y no fundado en expediente alguno, de un órgano administrativo. Y supone
asimismo una desviación de poder clarísima, ya que mediante un acuerdo singular
se trata ostensiblemente de eludir el citado Dictamen del Consejo de Estado sobre la
legitimidad de las explotaciones en esta zona, por lo que la violación del Art. 63.1 de
la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones
Públicas y del Procedimiento Administrativo Común es igualmente manifiesta.
2.3 Comarca de Campo Real
De forma coincidente, en el tiempo, se ha aprobado por el gobierno autonómico la
moratoria de la “Comarca de Campo Real”, mediante el Acuerdo del Consejo de
Gobierno de 14 de septiembre de 2006, por el que se amplía hasta el 30 de
septiembre de 2007 la declaración de no registrable por motivos de interés público a
efectos mineros de la comarca de Campo Real que aunque, como el propio acuerdo
establece, alberga un importante yacimiento de calizas, está afectada por uno de los
grandes programas de infraestructuras del Estado, en el que destaca el proyecto de
construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de Madrid. En virtud de este
acuerdo, las autorizaciones administrativas previstas en la Ley 22/1973, de 21 de
julio, de Minas, y no otorgadas, han quedado en suspenso hasta el 30 de septiembre
de 2007, habiéndose prorrogado recientemente.
2.4 Efectos de la situación expuesta
La política actual por parte de las administraciones competentes en materia de
Planificación Territorial, de Medio Ambiente, etc., por la que no se conceden, o se
paralizan durante años, los permisos solicitados para nuevas explotaciones de
áridos o para la ampliación de las existentes en las zonas consideradas como
“extractivas” (Zonas D) del Parque Regional en torno a los ejes de los cursos bajos
de los ríos Manzanares y Jarama o bien en otras zonas de la Comunidad de Madrid
7
que cuentan con yacimientos de interés para explotación de áridos (calizas,
dolomitas, granitos, etc.), en las que tampoco se conceden permisos porque han
sido consideradas áreas con algún tipo de protección (reserva de interés forestal o
ecológico, espacios comunitarios, etc.) o porque, previsiblemente, en un futuro, se
construya en alguna de estas áreas (Campo Real), el nuevo aeropuerto de Madrid, u
otras infraestructuras, está comprometiendo, gravemente el futuro suministro de
áridos de esta Comunidad.
En este contexto, el abastecimiento de las necesidades de áridos de la Comunidad
de Madrid se tendría que realizar desde nuevas explotaciones ubicadas en las
Comunidades limítrofes (Castilla-La Mancha y Castilla y León), siempre que éstas
concedieran los oportunos permisos, creando para la Comunidad de Madrid
mayores problemas de impacto ambiental y contaminación, así como, de carácter
social y económico tal y como a continuación se justifica, sin que exista el retorno
económico que supondría el que las materias primas se generasen en la Comunidad
de Madrid, lo que es posible al tener gran cantidad de reservas naturales en su
territorio.
Esta situación corre el riesgo de agravarse dramáticamente, si estas Comunidades
decidieran, en su territorio, aplicar a la actividad extractiva criterios similares a los
que se aplican en Madrid, incrementando, aún más, las distancias de transporte y
comprometiendo el desarrollo económico de esta Comunidad.
También, contra lo que pueda parecer, esta circunstancia, en lugar de disminuir la
huella ecológica de la Comunidad de Madrid, la aumenta considerablemente.
Si la actividad extractiva, evidentemente, no fuera una actividad regulada, el sector
no plantearía esta cuestión, al ser un problema de mercado, pero, al menos en el
caso de los áridos se plantea un carácter específico en un doble sentido:
8
Actividad regulada (requiere autorización administrativa).
Materia prima extractiva (base para la construcción).
La existencia de un 40,6 % de superficies protegidas, en la Comunidad, bajo
diversas figuras de protección como la red natura 2000, etc., unida a las superficies
urbanas y las destinadas a infraestructuras, deja lugar a pocas alternativas para la
explotación de áridos, sobre todo considerando que el porcentaje de superficie
media en España es de menos de la mitad (19,1%) y que la media europea es del
(10,01%), según los datos oficiales de la UE. Como contraposición, la minería de la
Comunidad, ocupa el 0,32% de la superficie, cuya restauración está, además,
asegurada mediante unos avales de restauración de 30,3 M€.
2.5 Reservas de áridos afectadas
Los anteriormente expuestos son dos ejemplos flagrantes de cómo, a la hora de
planificar, la Administración ha ignorado incomprensiblemente un aspecto
elemental de la cuestión, como es que los recursos mineros se encuentran donde
la evolución geológica ha ubicado los yacimientos, hecho este incontrovertible,
que no puede ser modificado por ningún planeamiento.
En efecto, los dos problemas manifestados han incidido sobre las dos principales
áreas de suministro de áridos para la Comunidad de Madrid, pues en el año
2001, la zona del Jarama (Parque del Sureste) representaba el 69,8% de la
producción y la de Campo Real el 25,2%, mientras que el 5% restante era
producido en otras zonas.
9
3. SITUACIÓN ACTUAL DEL CONSUMO DE ÁRIDOS DE LA COMUNIDAD DE
MADRID
Antes de proseguir con la comunicación es preciso dimensionar el sector de los
áridos en la Comunidad de Madrid.
3.1 El tejido empresarial del sector de los áridos de la Comunidad de Madrid.
Según las estadísticas oficiales, en la Comunidad hay unas 40 empresas de áridos
registradas que gestionan unas 60 explotaciones de áridos activas (ver plano
adjunto), si se considera que un porcentaje elevado de las oficialmente existentes,
están pendientes de caducar, en fases finales de restauración o son simples
ampliaciones. El 30 % de esta cifra son canteras y el resto son graveras. La
producción media por explotación, es la más importante del país, con más de
680.000 toneladas. Esta cifra no carece de relevancia, pues demuestra que el sector
ha alcanzado un grado de concentración en la Comunidad superior al del resto del
país, lo que permite minimizar el número de explotaciones para una misma
producción, con las ventajas medioambientales que ello conlleva1.
El número de explotaciones de la Comunidad de Madrid está en regresión, pues se
ha pasado de 71 en 2001 a 60 en 2007 (-15%), de las cuales, cerca de 20 se
encuentran en fases finales de abandono tras la restauración.
En cuestión de empleo generado, unos 630 trabajadores ocupan puestos directos,
1.500 son trabajadores subcontratados en operaciones mineras (perforación,
arranque, carga, transporte, etc.) y otros 3.800 se dedican al transporte de los
materiales, lo que totaliza cerca de 6.000. Eso sin contar, el importantísimo número
de trabajadores de sectores totalmente dependientes del suministro de áridos como
son, aguas abajo, la construcción, la producción y distribución de hormigón, la
1
Proyecto: Propuesta de indicadores de sostenibilidad de las explotaciones. Tamaño óptimo de las
explotaciones. Cátedra ANEFA de Tecnología de Áridos. Escuela Técnica Superior de Ingenieros de
Minas de Madrid (2007)
10
industria de los prefabricados, la fabricación de mezclas asfálticas, etc., como aguas
arriba, los proveedores de maquinaria, talleres, los suministradores de consumibles,
combustibles, explosivo, los gabinetes técnicos, etc.….
Según datos de la Comunidad de Madrid, entre el año 2001 y el 2006, se observa
que el cumplimiento de la restauración de las explotaciones es total, pues el
crecimiento de la superficie restaurada es superior al de la superficie afectada desde
el inicio, es decir, se restaura más terreno del que se afecta. Por otro lado, el terreno
afectado en 2006, 680 hectáreas, representa menos del 0,1% de la superficie total
de la Comunidad.
Como rasgo característico del problema que se está padeciendo, en todo ese
periodo, anualmente, se está restaurando más terreno que el que se altera, lo que
sólo es explicable si un porcentaje elevado de las explotaciones se encuentra en
fases finales de abandono y estas explotaciones no están siendo sustituidas por
otras nuevas.
CUADRO I
Evolución de las superficies afectadas y restauradas por la explotación de áridos
de la Comunidad de Madrid
2001-2006
Hectáreas
2001
2006
%
Superficie alterada desde el inicio
1779,78
2191,26
Superficie restaurada desde el inicio
1168,62
1511,02
Superficie restaurada en el año
211,87
180,32
Superficie alterada en el año
131,16
137,30
23,12
29,30
-14,89
4,68
3.2 Consumo de áridos en la Comunidad de Madrid en 2006.
Los áridos son una materia prima de origen mineral, básica para el desarrollo de la
construcción, edificación y obras públicas, que se consume de acuerdo con la
demanda de los mercados. Por ello, los principales consumidores son las
Administraciones Públicas y las empresas de áridos se limitan a poner a disposición
de la sociedad un recurso del Estado, por concesión o autorización de éste.
11
Según los últimos estudios realizados con ANEFA sobre las producciones,
consumos y procedencias de los áridos en la Comunidad de Madrid, se han obtenido
los siguientes datos:
CUADRO II
Evolución del consumo de áridos de la Comunidad de Madrid y de su procedencia
2001-2006
Miles de toneladas
Variación
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2006/2001
35.000
33.000
30.400
32.000
35.300
37.500
7,1
Producciones
38.000
38.000
40.000
41.000
48.000
50.500
32,9
Consumos
Diferencia
3.000
5.000
9.600
9.000
12.700
13.000
333,3
(importación)
% de áridos
8
13
24
22
26
26
importados
Nota: Todos los datos se estiman con un ± 5% de exactitud.
Aunque aparentemente, la capacidad productiva de las empresas de la Comunidad
de Madrid, no sólo se ha mantenido, sino que se ha incrementado en un 7%
respecto a 2001, en la práctica ha crecido muy por debajo del consumo, que lo ha
hecho un 32,9% y, desde luego, de lo que lo ha hecho el flujo de áridos procedente
de otras Comunidades, el +333%, en sólo cinco años.
Evolución de la producción y de las imporataciones de áridos en la
Comunidad de Madrid 2001-2006
Miles de toneladas
60.000
50.000
40.000
Importación
30.000
20.000
Producción CAM
10.000
0
2001
2002
2003
2004
2005
2006
Además, se está produciendo un fenómeno de enorme importancia que compromete
la futura capacidad de suministro de áridos de la Comunidad de Madrid y, por
consiguiente, el desarrollo de los planes de infraestructuras: las reservas explotables
12
autorizadas han sufrido una gran merma, hecho este objetivo y demostrable, pues el
consumo ha sido considerablemente superior a la reposición de reservas por la vía
nuevas autorizaciones o concesiones. Como ya se ha citado, en el caso del Parque
del Sureste, las reservas han caído entre 2001 y 2006 un 42%, por lo que a la fecha
de redacción de esta comunicación, en esa zona se dispone de recursos explotables
autorizados para los próximos 9 años.
Dicho de otro modo, la política de suministro de materias primas de la Comunidad es
insostenible, en lo que a áridos se refiere.
En la actualidad la procedencia de los áridos es:
Comunitarios: 37.500.000 toneladas (83,4%).
Extracomunitarios: 13.000.000 toneladas (16,6%).
Un porcentaje inferior al 1 % de los áridos procede del reciclado de residuos de
construcción y demolición.
CUADRO III
Procedencia del árido extracomunitario en 2006
Miles de toneladas
Basalto
Extracomunitarios
Ávila
Segovia
Ciudad Real
Cuenca
Guadalajara
Toledo
TOTAL
Sílice
Caliza
Pórfido
250
Granito
1.500
2.500
500
300
250
250
5.050
500
200
2.500
4.500
7.700
TOTAL
%
1.500
3.000
500
500
3.000
4.500
13.000
11,5
23,1
3,8
3,8
23,1
34,6
100,0
En el periodo de referencia (2001-2006), ha sido necesario importar desde las
Comunidades limítrofes unos 52.300.000 toneladas, cifra que es superior al
consumo de la Comunidad en 2006.
Este volumen de toneladas genera en la actualidad un transporte para el suministro
a las plantas (hormigón, aglomerado asfáltico, grava-cemento, etc.) y a las obras
13
que, calculado a una distancia media de 35 km, se obtienen los resultados que se
recogen en el Cuadro VII.
3.3 Sectores dependientes del consumo de áridos en la Comunidad de Madrid.
Más relevante es el valor inducido por la actividad de producción de áridos, en el
sector de la construcción de la Comunidad de Madrid, de la que es una pieza básica
e indispensable, a la hora de suministrar una materia prima esencial.
En la construcción, los 50,5 millones de toneladas de áridos consumidos son la
materia prima principal de hormigones, morteros y prefabricados, carreteras, balasto
para el ferrocarril, escollera para acondicionamiento de cauces, y otros muchos
usos.
Efectivamente, respecto a la importancia del sector de los áridos en la Comunidad
de Madrid, conviene introducir algunos datos sobre el sector de la construcción:
En 2006, la licitación pública en construcción fue de 5.095 millones de euros
repartidos, en 37,4% administración autonómica, 36,9% administración local y
25,7% administración central, siendo la tercera Comunidad (11% del total).
El Gobierno de la Comunidad ha aprobado un Plan de Transportes, dotado
con 2.233 millones de euros, para la construcción de nuevas líneas de Metro
convencional, Metro ligero, Tren de Cercanías o Metrobús, entre otros.
Asimismo, se ha aprobado el Plan de Carreteras 2007-2011, por el que se
destinan 4.200 M€ para actuaciones sobre 334 km de carreteras.
La candidatura a los Juegos Olímpicos de 2016 requerirá de nuevas
infraestructuras por definir.
En 2004, se iniciaron 68.835 nuevas viviendas. El número de viviendas
visadas por 1000 habitantes fue de 11, en 2006.
14
En 2004, trabajaban, en la construcción 314.500 personas (10% del empleo
total), y el Valor Añadido Bruto de este sector alcanzó los 12.655 M€ (9.5%
del VAB total).
El consumo de hormigón, en 2006, supuso 10,5 Mm3.
Las ventas de cementos grises, en 2006, alcanzaron los 4,7 Mt.
Las otras 5,9 toneladas para usos industriales han sido destinadas a la fabricación
de cementos, cales y yesos, a la producción de vidrio, a la industria química básica,
a la metalurgia básica, a las cargas de numerosos procesos industriales (papel,
cosmética, pinturas, …), así como a aplicaciones medioambientales como son la
depuración de aguas y de gases de centrales térmicas, la corrección de suelos, etc.
4. ESTUDIO CON LAS NUEVAS APORTACIONES EXTRACOMUNITARIAS Y
SUS PROCEDENCIAS
La política sobre áridos que se está siguiendo por parte de la Administración de la
Comunidad de Madrid, de continuar con las restricciones comentadas llevaría a una
nueva distribución en la procedencia de los áridos.
ANEFA ha elaborado el siguiente estudio que podría estimarse como real. Esta
alternativa supondría que la Comunidad de Madrid pasaría de suministrar el 92% de
sus necesidades con sus propios recursos de áridos, en 2001, al 36%, en 2011.
Para esa fecha, se ha estimado una evolución que muestra una caída del consumo
en 2007, para luego mantenerse estable, en 45 millones de toneladas anuales hasta
2011.
El siguiente cuadro es una modelización de la evolución del consumo para la CAM y
del suministro.
15
CUADRO IV
Previsión de la evolución del suministro de áridos a la Comunidad de Madrid
2006-2011
Miles de toneladas
2006
2007
2008
2009
2010
2011
Producción
37.500
30.200
26.650
23.100
19.550
16.000
CAM
Importación
8.500
10.300
13.250
16.200
19.150
22.100
Castilla La
Mancha
Importación
4.500
4.500
5.100
5.700
6.300
6.900
Castilla y
León
Total
50.500
45.000
45.000
45.000
45.000
45.000
Consumo
Evolución de la producción y de las imporataciones de
áridos en la Comunidad de Madrid 2006-2011
Porcentaje
100
90
80
70
60
Importación Castilla y
León
Importación Castilla
La Mancha
50
40
30
20
10
Producción CAM
0
2006
2007
2008
2009
2010
2011
Según ese escenario, entre los años 2007 y 2011, sería necesario importar unos
109,5 millones de toneladas para cubrir la demanda de los madrileños.
CUADRO VI
Procedencia de las importaciones de áridos
de la Comunidad de Madrid
2006-2011
Miles de toneladas
Ávila
Segovia
Ciudad Real
Cuenca
Guadalajara
Toledo
TOTAL
2.006
2.007
2.008
2.009
2.010
2.011
1.500
3.000
500
500
3.000
4.500
13.000
1.500
3.000
500
600
3.600
5.600
14.800
1.700
3.400
700
900
4.500
7.150
18.350
1.900
3.800
900
1.200
5.400
8.700
21.900
2.100
4.200
1.100
1.500
6.300
10.250
25.450
2.300
4.600
1.300
1.800
7.200
11.800
29.000
16
Total
2007-2011
9.500
19.000
4.500
6.000
27.000
43.500
109.500
Es conveniente tener en cuenta el plazo de tiempo necesario para la obtención de
los permisos de explotación, montaje, etc., de nuevas explotaciones tanto en Castilla
La Mancha como en Castilla y León, que se considera como mínimo de 2-3 años.
Por otra parte, estas nuevas explotaciones requieren la realización de grandes
inversiones.
5. IMPACTO SOBRE LA ECONOMÍA DE LA COMUNIDAD DE MADRID
Del estudio realizado se desprenden, como datos más relevantes:
1. Para satisfacer el déficit, se precisa una inversión en 20 nuevas explotaciones de
1 millón de toneladas anual en promedio (o mejora de las capacidades
productivas de las existentes), en otras Comunidades Autónomas, lo que
supondrá una inversión mínima de unos 120 millones de euros.
2. La inversión en otras Comunidades Autónomas para la compra de las nuevas
unidades de transporte estimadas (cabeza tractora bañera a 120.000
euros/unidad), ha ascendido a 127 M€ (1.061 camiones), para la situación actual,
y a 284 M€ (2.366 camiones), para el caso 2011).
3. El aumento medio del precio del árido por incremento del transporte 3,68
€/tonelada, para el caso actual, y 4,27 €/tonelada, para el supuesto 2011. Estas
cifras han supuesto un sobre coste anual, que afecta directamente al sector de la
construcción (vivienda y obra pública), de 47,8 M€, en 2006, y en 2011, rondarán
los 130 M€.
4. Por la venta del producto, se estima que, en 2006, se han dejado de ingresar
unos 78 M€ en la Comunidad de Madrid, mientras que, en el modelo de 2011, se
alcanzarán los 192 M€.
17
5. Además de la pérdida de impuestos y tributos, muy importante, pero de difícil
cuantificación, se dejan de percibir 49 M€ en concepto de salarios en 2006, para
rondar los 131 M€, en 2011.
6. Los costes económicos anuales producidos por kilómetros adicionales recorridos
por los camiones de áridos (cuadro X) totalizan 16 M€ anuales en 2006 y
alcanzarán los 28,2 M€ anuales en 2011.
7. Otras cantidades que se dejan de percibir, son gastos de operación,
mantenimiento, seguros, …
8. Es obvio que todas estas cantidades repercuten muy negativamente en la
balanza de pagos de la Comunidad de Madrid.
9. Además, se produce un efecto en cadena de deslocalización de empresas de
áridos y de productos afines (hormigón, aglomerados asfálticos, etc.), contrario a
la política económica e industrial de la Comunidad de Madrid.
CUADRO IX
Costes económicos en la Comunidad de Madrid sin contabilizar tributos
Millones de euros anuales
Inversión en nuevas
explotaciones
Inversión en camiones
Sobre coste áridos por
transporte
Pérdida de ingresos por venta
de producto
Pérdida de salarios
Costes derivados del
transporte (medio ambiente y
desgaste de viales)
Total
DIFERENCIA
AUTOABASTECIMIENTO - 2006
DIFERENCIA
AUTOABASTECIMIENTO - 2011
20,0
20,0
25,0
25,0
47,8
130,0
78,0
192,0
49,3
130,8
16,0
28,2
236,1
526,0
6. IMPACTO MEDIOAMBIENTAL DEL TRANSPORTE
El impacto medioambiental que ocasionaría en la Comunidad de Madrid, el aumento
de nuevas unidades trailer (1.160 uds.) circulando, así como el aumento de
18
kilómetros a realizar, 62,6 millones al año, que al ser, en su mayor parte en la
Comunidad de Madrid2, plantearía los siguientes efectos:
6.1 Tráfico
Entre otros, los principales efectos sobre el tráfico y la red de carreteras, sería el
siguiente:
Saturación de tráfico en las carreteras de acceso y circunvalación
Aumento de la siniestralidad, pudiendo estimarse en un incremento de 372
siniestros/año (según datos de empresas aseguradoras)
Deterioro y desgaste en las capas de rodadura por mayor tráfico de vehículos
pesados: Según el cuadro X, que se basa en diversos estudios científicos, el
coste económico derivado del desgaste de las vías públicas producido por un
camión de 25 toneladas es de 0,13 € / km. Los costes adicionales
ocasionados por los kilómetros adicionales recorridos por camiones de áridos
por motivo del cambio de procedencia de los áridos sería para 2006 de 4,6
M€/año y para 2011, de 8,1 M€/año
6.2 Contaminación por transporte
Partiendo de los siguientes datos:
Velocidad calculada media (sin aglomeraciones y atascos considerables) 40
Km/h
Condicionado a velocidad media obtenida estadísticamente según los
recorridos estimados
Potencia media de los motores 270 kw
Los contaminantes emitidos por los camiones diesel según datos aportados por
el servicio técnico de IVECO, serían de cerca de 3,75 millones de toneladas
2
El cálculo de distancias de la tabla VI presupone proximidad de las explotaciones de las
Comunidades limítrofes a la Comunidad de Madrid.
19
anuales, partiendo de los valores medios de contaminantes emitidos por los
motores de los vehículos en las emisiones de escape.
Según diversos estudios científicos, el coste económico derivado de la
contaminación producida por un camión de 25 toneladas es de 0,32 € / km. En
consecuencia, los costes adicionales ocasionados por los kilómetros adicionales
recorridos por camiones de áridos por motivo del cambio de procedencia de los
áridos sería para 2006 de 11,4 M€/año y para 2011, de 20,0 M€/año
6.3 Aumento de consumo energético
Dado que el incremento de kilómetros a realizar sería de unos 62,6 millones,
puede estimarse que el consumo de gasóleo adicional, para un consumo medio
de 40 litros a los 100 kilómetros, representaría un incremento de 25 millones de
litros cada año.
6.4 Residuos Tóxicos y Peligrosos (RTP)
Fruto de la nueva situación, se tendría el incremento anual en los RTP, que se
especifican a continuación:
Neumáticos (Con una duración media en este transporte de 70.000 kilómetros
y
12
neumáticos
por
unidad
de
transporte)
representarían
10.736
neumáticos.
Aceites: 312.346 litros
Filtros: 18788 unidades
Es fundamental considerar que, para gestionar estos residuos, se precisaría una
mayor capacidad de reciclaje.
20
7. IMPACTO LABORAL: DESTRUCCIÓN DE EMPLEO
De acuerdo con las estimaciones previstas, se perdería en la Comunidad de Madrid,
el siguiente empleo:
Empleo Directo
Empleo Indirecto
Subcontratas
mineras
Empleo Indirecto
Transporte y otros
Empleo Total
CUADRO XIV
Evolución del empleo
DIFERENCIA
DIFERENCIA
AUTOABASTECIMIENTO - 2006
AUTOABASTECIMIENTO - 2011
OTRAS
OTRAS
CCAA
CCAA
MADRID
TOTAL
MADRID
TOTAL
-218
218
0
-580
487
-92
-520
520
0
-1.380
1.160
-220
-1.317
1.317
0
-3.496
2.939
-557
-2.056
2.056
0
-5.456
4.586
-870
En relación con el caso de autoabastecimiento, se han perdido, ya en 2006, 738
empleos directamente relacionados con la actividad, y otros cerca de 1.320 en
transporte y otros, lo que suma unos 2.050 puestos de trabajo en zonas calificadas
de condición socioeconómica media-baja y baja de la Comunidad, por el Instituto de
Estadística de la Comunidad de Madrid. La situación para el caso 2011, es más
desalentadora, pues se habrían perdido 1.960 empleos del primer tipo, y unos 3.500
indirectos, para un total de cerca de 5.450.
Todo ello sin contar el empleo afectado en sectores afines, totalmente dependientes
del suministro de áridos como son la construcción, la producción y distribución de
hormigón, la industria de los prefabricados, la fabricación de mezclas asfálticas, etc.
8. CONCLUSIONES
La ausencia de consideración de las necesidades de suministro de áridos y la
elaboración de planes de ordenación del territorio que ignoran la existencia de
recursos naturales ya ordenados, a su vez por la normativa específica desemboca,
en muchos casos, como el que se analiza en esta comunicación, en un quebranto de
21
las políticas de abastecimiento de dichos recursos, y en efectos negativos para la
economía, el empleo y el medio ambiente de las Comunidades que se pretenden
ordenar. Han de considerarse, a la hora de realizar la planificación, las previsiones
de demanda de recursos naturales a medio y largo plazo, el inventario recursos
mineros y de reservas autorizadas y también analizar la logística de la distribución
de los áridos.
La conclusión más grave y contundente de la situación actual sería la dependencia,
creada de modo ficticio y sin elementos objetivos que lo justifiquen, de la Comunidad
de Madrid respecto a otras Comunidades Autónomas limítrofes, en el suministro de
una materia prima que es, después del agua, la de mayor consumo per capita 11
toneladas por habitante y año en el conjunto del país, es decir t/hab/año ó 30
kg/hab/día – 8,5 t/hab/año en la Comunidad-, y que además resulta, absolutamente,
necesaria e insustituible para la construcción (edificación y obra pública) y para
multitud de procesos industriales.
Esta dependencia se podría, en el futuro, ver, a su vez, agravada considerablemente
si éstas Comunidades Autónomas aplicasen políticas restrictivas similares a las de la
Comunidad de Madrid respecto a la actividad extractiva.
Los planes de infraestructuras de la Comunidad de Madrid – Plan de Carreteras
2007-2011, Plan de Movilidad, …-, así como la construcción de las instalaciones
relacionadas con una posible candidatura a los Juegos Olímpicos de 2016, se verán,
con toda probabilidad, gravemente afectadas por:
•
Una situación de posible desabastecimiento por falta de reservas.
•
Un marco de encarecimiento de las materias primas básicas de cerca del 50%.
Pese a que la minería de la Comunidad, ocupa únicamente el 0,32% de la superficie,
cuya restauración está, además, asegurada mediante unos avales de restauración
22
de 30,3 M€, la actividad se encuentra sometida a una presión administrativa
injustificada que se traduce, por ejemplo, en:
•
Se está cometiendo un abuso en la aplicación de la Ley del Parque Regional en
torno a los ejes de los cursos bajos de los ríos Manzanares y Jarama al no
autorizar, durante 7 años, las nuevas explotaciones en las Zonas D clasificadas
como extractivas.
•
Igualmente, sin la existencia de una legislación aplicable, se están restringiendo
las autorizaciones en las zonas de calizas del área de Campo Real en previsión
de la construcción del futuro segundo aeropuerto de Madrid
Si la situación actual no es corregida inmediatamente, las consecuencias pueden ser
extremadamente negativas para el conjunto de la economía de la Comunidad,
además de para el medio ambiente. La evolución actual, proyectada a 2001 tendría
los siguientes efectos negativos:
•
El impacto ambiental generado por el transporte de un volumen de más de 29
millones de toneladas de áridos procedentes de otras comunidades autónomas
sería enorme sobre la Comunidad de Madrid y en muchos ámbitos ecológicos e
infraestructurales, que puede valorarse en unos 28 millones de euros para 2011
•
Se incrementaría la siniestralidad en unos 372 siniestros/año
•
Se incrementaría, notablemente, el consumo de combustible, en 25 millones de
litros de gasóleo anuales, las emisiones a la atmósfera, en unos 3,7 millones de
toneladas y la generación de residuos tóxicos y peligrosos.
•
Se perdería una inversión que, en 2011 alcanzaría los 404 millones de euros, por
nuevas plantas y nuevas flotas.
•
En 2006, respecto a la situación de autoabastecimiento, se incrementó el coste
de la construcción en un mínimo de 47,8 M€ anuales por el sobre coste del
23
transporte, se dejaron de ingresar en la Comunidad de Madrid unos 78 M€ y una
masa salarial de unos 49 M€ fue a parar a trabajadores de otras Comunidades.
Para 2011, esas cantidades se estiman en 130 M€, 192 M€ y 131 M€
respectivamente.
•
En total se estima que, en 2011, el coste anual para la Comunidad de Madrid
sería de cerca de 525 millones de euros anuales.
•
Asimismo, respecto a la situación de autoabastecimiento, se han perdido unos
2.050
puestos
de
trabajo
totales,
en
zonas
calificadas
de
condición
socioeconómica media-baja y baja y para 2011, un total de cerca de 5.450.
24
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