ESTA PROVIDENCIA ES DE RESERVA, POR LO QUE SE PUBLICA SOLO SU EXTRACTO DADA SU IMPORTANCIA RELEVANTE SALA DE CASACIÓN PENAL : EUGENIO FERNÁNDEZ CARLIER M. PONENTE : 40211 NÚMERO DE PROCESO NÚMERO DE PROVIDENCIA : AP863-2016 : ÚNICA INSTANCIA CLASE DE ACTUACIÓN : AUTO INTERLOCUTORIO TIPO DE PROVIDENCIA : 23/02/2016 FECHA : Prevaricato por omisión DELITOS : Constitución Política de Colombia de 1991 art. FUENTE FORMAL 178, 182, 185 y 235 / Ley 5 de 1992 art. 4, 268, 286, 333, 351 y 366 / Ley 270 de 1996 art. 179 / Ley 599 de 2000 art. 414 / Ley 600 de 2000 art. 75-7, 99, 100, 327, 419, 464 y 465 TEMA: FUERO - Congresista: cesación en el ejercicio del cargo, análisis de la relación con las funciones «De acuerdo con lo previsto en los artículos 235, numeral 3°, de la Carta Política, y 75, numeral 7°, de la Ley 600 de 2000, la Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, es competente para adelantar “la investigación y juzgamiento de los senadores y representantes a la Cámara”; competencia que persiste incluso si han cesado en el ejercicio de sus cargos, pero en tal caso, sólo respecto de “las conductas punibles que tengan relación con las funciones desempeñadas”. En el presente asunto la competencia de la Sala para tramitar la investigación seguida contra HJVS no ofrece controversia, pues aunque a la fecha no ostenta la investidura de Congresista que tuvo entre el 20 de julio de 2010 y el 31 de octubre 2012, es evidente la relación que existe entre las funciones que desempeñaba como Representante a la Cámara y el delito cuya comisión se le imputa. En efecto, de acuerdo con la compulsa de copias que dio origen a la investigación, el incriminado habría omitido declararse impedido para tramitar una cantidad plural de investigaciones iniciadas contra Magistrados y Magistradas de la Sala Contencioso Administrativa del Consejo de Estado, pese a estar obligado a hacerlo por razón de la existencia de un proceso de pérdida de investidura que se adelantaba en perjuicio suyo ante esa Corporación, de cuya existencia tenía conocimiento. Esa conducta habría ocurrido en ejercicio de la función jurisdiccional que, en condición Representante a la Cámara e integrante de la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes, ejercía respecto de aforados constitucionales, conforme a lo dispuesto en el numeral 3° del artículo 178 de la Carta Política, así como en los artículos 4° de la Ley 5° de 1992, 179 de la Ley 270 de 1996 y 419 de la Ley 600 de 2000. A no dudarlo, pues, que el delito atribuido a VS, de estar demostrada su existencia, tendría clara relación con las facultades y competencias legal y constitucionalmente atribuidas a los miembros del Congreso y, en concreto, a quienes en condición de Representantes a la Cámara ejercen como investigadores en los procesos adelantados contra aforados constitucionales». INVIOLABILIDAD PARLAMENTARIA - Alcance: no cobija la omisión de declararse impedido para conocer de investigaciones como miembro de la Comisión de investigación y Acusación de la Cámara de Representantes «Constituye una garantía institucional para preservar la integridad de la función del Congreso, esto es, para tutelar la independencia de dicho órgano, de suerte que la actividad de quienes lo integran - legislativa, de control político, judicial - no sea objeto de intromisiones indebidas por otras ramas del poder público. Puesto en otros términos, para “asegurar que la formación de la voluntad de las Cámaras, sus deliberaciones y acuerdos, se realicen y adopten con absoluta libertad”. En ese entendido, la adecuada comprensión de la aludida garantía implica, como lo tiene decantado el Tribunal Constitucional, que los Senadores y Representantes son absolutamente irresponsables por los votos y opiniones que emiten en ejercicio de sus funciones, pero ello no significa que “no puedan cometer otros delitos o incurrir en otras responsabilidades en el desempeño de su cargo”, de suerte que “si la actuación del congresista es en ejercicio del cargo pero no consiste en la emisión de un voto o de una opinión, entonces su conducta cae bajo la órbita del derecho común”. Así las cosas, aunque los Congresistas no pueden ser investigados ni juzgados por el contenido o el sentido de sus votos y opiniones, otras conductas suyas, incluso relacionadas con el ejercicio de sus funciones, sí son pasibles de examen judicial sin que ello implique vulneración de la garantía de la inviolabilidad parlamentaria, como sucede por ejemplo y al decir de la Corporación en cita, con “la violación del régimen de conflicto de intereses”. En armonía con lo expuesto, esta Sala ha entendido que el estricto respeto de garantía constitucional aludida no impide que los miembros del Congreso sean investigados, juzgados y eventualmente sancionados por conductas distintas a la de manifestar sus votos y opiniones, de suerte que pueden ser procesados “por el delito de prevaricato por omisión, en el evento en que omitan el cumplimiento de un acto propio de sus funciones, como el de informar a la respectiva cámara las situaciones de carácter moral, ético o económico que los inhiban para participar en el trámite de un asunto sometido a su consideración”. Aplicadas las consideraciones precedentes al caso aquí examinado, se advierte que la inviolabilidad parlamentaria no cobija la conducta cuya comisión se le atribuye a VS, pues no se le investiga por el sentido de los votos y opiniones exteriorizados en ejercicio de sus funciones, sino por la presunta omisión en que habría incurrido al no declararse impedido para tramitar algunas investigaciones que le fueron asignadas en condición de miembro de la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes. Como quiera que esa conducta nada tiene que ver con el ejercicio autónomo y libre de interferencias de las funciones parlamentarias, sino con la posible comisión de una infracción de eventual relevancia jurídico penal ajena del todo a las opiniones del sindicado, nada obsta para que la Sala siga adelante con el procedimiento». CONGRESISTA - Funciones: función investigativa, obligación de declararse impedido cuando esté inmerso en una causal establecida en el Código de Procedimiento Penal /IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien a su vez adelanta actuación en su contra, el impedimento surge cuando hay vinculación formal de aquél a la actuación adelantada por este último «Ninguna disposición del Capítulo I del Título III de la Ley 600 de 2000, que regula “la actuación ante la Cámara de Representantes” en los “juicios especiales ante el Congreso”, contempla expresamente causales de impedimento para los Representantes investigadores, ni consagra la posibilidad de que estos pidan ser apartados de las indagaciones que les sean asignadas. Distinto sucede con los Senadores encargados del juzgamiento, pues el artículo 464 dispone que deben pedir ser apartados de su conocimiento cuando concurra en ellos alguna causal de impedimento, así: “presentada la acusación, el presidente del Senado advertirá a los senadores el deber en que están de manifestar si tienen algún impedimento para conocer de dicha acusación”. A su vez, el canon 465 contempla las causales de impedimento “para conocer de estos juicios”, en concreto, i) haber tenido parte en los hechos sobre los cuales versa la acusación; ii) haber declarado como testigo en el mismo asunto en favor o en contra del acusado; iii) haber votado en la Cámara de Representantes en favor o en contra de la acusación, y iv) cualquier otra de las causales de impedimento señaladas en este Código para las autoridades judiciales. Al tenor de dichos preceptos normativos es claro en que los Senadores tienen el deber jurídico de declararse impedidos para conocer del juicio, luego de presentada la acusación, cuando sobre ellos concurra una causal que así lo determine. Sin embargo, no permiten afirmar con igual claridad que tal deber cubre a los Representantes a la Cámara que adelantan la investigación y la eventual formulación del pliego de cargos. Similar sucede con las previsiones normativas contenidas en la Ley 5° de 1992 en relación con el “juzgamiento de altos funcionarios”. En efecto, el artículo 351 de ese cuerpo normativo señala que “hasta el día en que se inicie la audiencia pública podrán las partes proponer las recusaciones contra los Senadores”, precisando que “no son recusables sino por las causales de impedimento previstas en el Código de Procedimiento Penal”, pero nada dice respecto de los Representantes investigadores. Así pues, la normatividad reseñada no expresa que las causales de impedimento previstas en el Código de Procedimiento Penal sean aplicables tanto a los Representantes investigadores como a los Senadores, sino únicamente a estos últimos cuando actúan como Jueces en las causas promovidas contra aforados constitucionales. Con todo, el artículo 333 de la citada Ley 5° de 1992 dispone que el Representante investigador “en la investigación de delitos comunes tendrá las mismas atribuciones, facultades y deberes que los Agentes de la Fiscalía General de la Nación”, al tiempo que el 353 ibídem establece que “en las actuaciones que adelante la Cámara de Representantes contra altos funcionarios del Estado ejercerá funciones de Fiscal”. […] Por su parte, el artículo 366 ibídem dispone que “todo vacío procedimental de la presente ley será suplido por las disposiciones del Código de Procedimiento Penal”. En ese orden, para precisar cuáles son los deberes propios de los Fiscales que también son exigibles de los Representantes investigadores en las actuaciones seguidas contra aforados constitucionales, se hace necesario acudir a la regulación procedimental de la Ley 600 de 2000 y concretamente, al artículo 100 de ese compendio normativo, a cuyo tenor “los funcionarios judiciales deben declararse impedidos para conocer de actuaciones penales cuando exista respecto de ellos alguna causal de impedimento, tan pronto como se advierta su existencia a más tardar dentro de los cinco (5) días siguientes”. En síntesis, los Representantes a la Cámara que en condición de miembros de la Comisión de Investigación y Acusación fungen como investigadores en las actuaciones adelantadas contra aforados tienen el deber legal positivo de manifestarse impedidos para conocer de los trámites a su cargo, cuando en ellos concurra una o más de las causales impeditivas señaladas en el artículo 99 de la Ley 600 de 2000. El artículo 182 de la Carta Política - replicado en el numeral 6° del artículo 268 de la precitada Ley 5° de 1992 - señala que “os congresistas deberán poner en conocimiento de la respectiva Cámara las situaciones de carácter moral o económico que los inhiban para participar en el trámite de los asuntos sometidos a su consideración”. En igual sentido, el artículo 286 de la Ley orgánica contentiva del reglamento del Congreso establece que “todo Congresista, cuando exista interés directo en la decisión porque le afecte de alguna manera, o a su cónyuge o compañero o compañera permanente, o a alguno de sus parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad o primero civil, o a su socio o socios de derecho o de hecho, deberá declararse impedido de participar en los debates o votaciones respectivas”. A su vez, el canon 291 dispone que “todo Senador o Representante solicitará ser declarado impedido para conocer y participar sobre determinado proyecto o decisión trascendental, al observar un conflicto de interés”. Las disposiciones reseñadas establecen un deber constitucional y legal positivo, exigible de todos los miembros del Congreso, sin distinción de la cámara a la que pertenezcan, en el sentido de manifestarse impedidos para conocer y participar en los asuntos sometidos a su consideración, incluso aquéllos vinculados con la función jurisdiccional que ejercen respecto de ciertos aforados. Parecería entonces, en principio, que también es aplicable a las investigaciones adelantadas por los Representantes a la Cámara la circunstancia impeditiva de conflicto de interés prevista en la Ley 5° de 1992. Sucede, no obstante, que la conceptualización jurisprudencial del conflicto de interés que ha elaborado el órgano de cierre de la jurisdicción contencioso administrativa coincide con la comprensión que esta Corporación ha desarrollado respecto de la causal de impedimento consagrada en el numeral 1° del artículo 99 de la Ley 600 de 2000, que se configura cuando “el funcionario judicial, su cónyuge o compañero permanente, o algún pariente suyo dentro del cuarto grado de consanguinidad, segundo de afinidad o primero civil, tenga interés en la actuación procesal”. […] Se advierte […] de lo anterior que los artículos 268 de la Ley 5° de 1992 y 99, numeral 1°, de la Ley 600 de 2000 consagran situaciones homogéneas o análogas, que comparten sus elementos estructurales básicos y cuya configuración presupone condiciones fácticas y jurídicas semejantes. Siendo así, el conflicto de interés al que refiere la primera normatividad citada es una circunstancia de hecho y de derecho que se encuentra comprendida o subsumida en la causal impeditiva prevista en el numeral 1° del artículo 99 del Código de Procedimiento Penal, precepto éste cuya aplicación debe preferirse en el ámbito de las investigaciones adelantadas ante la Cámara de Representantes contra aforados constitucionales, no sólo por su carácter especial para actuaciones y funcionarios judiciales, sino también por virtud de la remisión expresa que a dicho código efectúa el artículo 366 de la Ley 5° de 1992. […] De lo expuesto la Sala concluye, primero, que los Representantes a la Cámara, en cuanto ejercen como investigadores de aforados constitucionales como miembros de la Comisión de Investigación y Acusación, están obligados a manifestarse impedidos, en los términos y oportunidad del artículo 100 de la Ley 600 de 2000, cuando sobre ellos recaiga alguna de las causales previstas para tal fin en el canon 99 ibídem. En segundo lugar, que cuando en los Representantes investigadores concurre una situación potencialmente constitutiva de conflicto de intereses, el eventual impedimento se encasilla en el numeral 1° del artículo 99 del Código de Procedimiento Penal, y lo establecido en el artículo 268 de la Ley 5° de 1992 se tendrá en cuenta para para las funciones parlamentarias distintas de la judicial. De cara al caso que se examina, importa anotar que cuando el eventual interés se origina en que el funcionario judicial está compelido a decidir sobre la situación penal, disciplinaria o administrativa de quien, a su vez, funge como investigador o Juez suyo en un asunto sancionatorio - como sucede con los integrantes de la Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado y los miembros de la Comisión de Investigación y Acusación - no basta para tener por configurada la causal impeditiva que en contra de aquél se haya interpuesto una denuncia o queja, esto es, que se adelante una indagación preliminar, porque ello no genera un interés concreto, actual y personal en el resultado de la actuación. En efecto, la Sala tiene discernido que la simple investigación recíproca entre Magistrados y Representantes a la Cámara es una circunstancia de la cual “no puede devenir ni objetiva ni subjetivamente ningún interés” y que, por lo mismo, no obliga a los funcionarios a pedir ser apartados del conocimiento de la actuaciones respectivas , porque de lo contrario “bastaría denunciar a los Magistrados ante la Comisión de Investigaciones y Acusación de la Cámara” - y viceversa - para lograr su desplazamiento. Entonces, el interés capaz de suscitar el impedimento surge únicamente ante la vinculación formal del funcionario a la actuación sancionatoria que en perjuicio suyo adelanta la persona de la cual funge como Juez o investigador , vinculación que sucede, en los procesos penales, mediante la diligencia de indagatoria o declaratoria de persona ausente (art. 126, L. 600 de 2000) o la formulación de imputación (art. 126, L. 906 de 2004), según el caso; en los asuntos disciplinarios, desde el momento de la apertura de investigación o la orden de vinculación (art. 91, L. 734 de 2002); y en los procesos sancionatorios administrativos, como el de pérdida de investidura, desde la notificación de la admisión de la respectiva demanda (art. 8°, L. 144 de 1994)». PREVARICATO POR OMISIÓN - Elementos / PREVARICATO POR OMISIÓN Se configura / AUTO INHIBITORIO - Inexistencia del hecho / AUTO INHIBITORIO - Atipicidad de la conducta «De acuerdo con la jurisprudencia de la Sala, se trata de un delito de omisión propia y sujeto activo calificado, que sólo puede ser cometido por quien tenga la condición de servidor público, y se perfecciona cuando el agente, alternativamente, omite, retarda, rehúsa o deniega un acto propio de sus funciones que estaba obligado a realizar o cumplir en oportunidad. La disposición transcrita consagra un tipo penal abierto o en blanco, cuya comprensión integral exige la remisión a los preceptos extra penales constitucionales, legales o reglamentarios - que consagran el deber o acto soslayado, y que en todo caso debe ser preexistente a la realización de la conducta investigada. En relación con el alcance de cada uno de los verbos rectores que integran la estructura de la conducta punible, la Corte ha sostenido que «omitir es abstenerse de hacer una cosa, pasarla en silencio; retardar es diferir, detener, entorpecer, dilatar la ejecución de algo; rehusar es excusar, no querer o no aceptar una cosa; y denegar es no conceder lo que se pide o solicita”. Debe tenerse en cuenta además que, como lo ha sostenido la Sala a partir de la entrada en vigencia del Acto Legislativo 02 de julio 1° de 2015, que reconoció la inviolabilidad de los votos y opiniones proferidas por los servidores judiciales en ejercicio de sus funciones, los delitos de prevaricato por acción y por omisión no se configuran ante la simple emisión de una decisión contraria al ordenamiento jurídico ni por la sola omisión o retardo en el cumplimiento de un deber funcional, respectivamente, sino que se requiere la comprobación de que el funcionario ha obrado con ánimo de favorecer indebidamente sus propios intereses o los de un tercero . En lo que atañe al aspecto subjetivo del delito, baste precisar que sólo fue consagrado por el legislador en la modalidad dolosa, de suerte que la infracción únicamente se configura si el agente conoce la obligación constitucional, legal o reglamentaria omitida y sabe que está jurídicamente forzado a actuar, pero a pesar de ello, de manera consciente y voluntaria, resuelve abstenerse de hacerlo […] En el presente asunto, la valoración conjunta de las pruebas recaudadas demuestra que la conducta atribuida al ex Representante HJVS no existió, examinada de cara a la omisión, y que es subjetivamente atípica en lo que tiene que ver con el retardo». NOTA DE RELATORÍA: PROVIDENCIA CON RESERVA LEGAL JURISPRUDENCIA RELACIONADA: Rad: C- 563 | Fecha: 24/10/1996 | Tema: CONGRESISTA – Función jurisdiccional: impedimento Rad: SU-047 | Fecha: 29/01/1999 | Tema: INVIOLABILIDAD PARLAMENTARIA – Alcance Rad: 11284 | Fecha: 31/05/1996 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra Rad: 8279 | Fecha: 27/09/1993 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra Rad: 10692 | Fecha: 30/08/1996 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra Rad: 12980 | Fecha: 12/06/1997 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra Rad: 23924 | Fecha: 01/04/2009 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra Rad: 36311 | Fecha: 07/03/2012 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra Rad: 41080 | Fecha: 17/04/2013 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra Rad: 38978 | Fecha: 16/05/2012 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra Rad: Sentencia C.P María Claudia Rojas Lasso EXP: 2012- 01443 | Fecha: 24/02/2015 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra Rad: Sentencia C.P Guillermo Vargas Ayala EXP: 2013- 00902 | Fecha: 31/07/2014 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra Rad: 45403 | Fecha: 24/02/2015 | Tema: IMPEDIMENTO - Interés en el proceso: cuando el funcionario conoce de proceso contra quien está siendo investigado por delitos en su contra