PRIMERA EDICIÓN (EN CATALÁN): FEBRERO DE 2016 SEGUNDA EDICIÓN: MARZO DE 2016 ©2016 STELLA FIRINU IMAGEN DE LA PORTADA: ORIOL CLOSA ILUSTRACIONES INTERIORES: STELLA FIRINU GRÁFICA: ORIOL CLOSA TRADUCCIÓN AL CASTELLANO: MARISOL GIMÉNEZ ©2016 DIARI CATALUNYA LLIURE www.catalunyalliure.cat [email protected] TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS POR SAFECREATIVE www.safecreative.org/work/1603196942438 Queda rigurosamente prohibida sin autorización escrita por correo electrónico o postal del editor cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra, que será sometida a les sanciones establecidas por la ley. LA EPOPEYA COLAUENSE STELLA FIRINU A Ada, fuente de inspiración cotidiana SUMARIO Introducción ................................................................................ 7 1.La coronación......................................................................... 10 2.El estreno ................................................................................ 13 3.La entrevista ........................................................................... 17 4.El enchufismo I ...................................................................... 19 5.La Casa del Pipí ..................................................................... 25 6.Ay, la cultura .......................................................................... 28 7.Guirilandia ............................................................................. 31 8.Unionismo .............................................................................. 34 9.Los cien días ........................................................................... 39 10.El viaje .................................................................................. 41 11.Subvenciones fantasiosas ...................................................... 44 12.Las mantas ............................................................................ 48 13.El enchufismo II ................................................................... 50 14.Pájaros .................................................................................. 54 15.La conquista de Madrid ....................................................... 56 16.El oportunismo ..................................................................... 61 17.Sensuales transparencias....................................................... 64 18.La ocasión perdida ............................................................... 66 19.La memoria .......................................................................... 70 20.Las purgas............................................................................. 73 21.Ambiciones........................................................................... 76 22.Ruedas .................................................................................. 80 23.Guirilandia de Llobregat ...................................................... 82 24.La fiesta................................................................................. 84 25.El PAM ................................................................................. 86 26.El cortejo .............................................................................. 89 27.Críticas plenarias .................................................................. 92 28.El santo domingo.................................................................. 95 29.La feria................................................................................. 101 30.El talèfunu ........................................................................... 104 31.Coronas y Coronela ............................................................ 107 32.Confesiones ......................................................................... 109 33.La huelga ............................................................................. 111 34.La patata .............................................................................. 114 35.Los okupas........................................................................... 116 Epílogo ..................................................................................... 118 Agradecimientos ...................................................................... 119 LA EPOPEYA COLAUENSE INTRODUCCIÓN "¡O soy reina o no juego!", debe haber gritado Ada Colau en las épocas de la Plataforma de los Afectados por la Hipoteca, cuando aún cabía dentro del llamativo uniforme amarillo de heroína, con antifaz negro estilo Batman y no necesitaba photoshop para aparecer en la revista Vanity Fair. Y como el trono ya hacía tiempo que estaba ocupado, se le encendió la bombilla de la carrera política. Dicho y hecho: reunió un grupo de fidelísimos con nombres impronunciables como ICV, EUiA, Equo, etc. y encabezó su marcha hacia la conquista de la Ciudad Condal. "¡O soy alcaldesa o no juego!", debe haber aclarado Ada Colau a sus compañeros cuando ya marchaban alineados hacia la plaza Sant Jaume, a pesar de haber asegurado que no aprovecharía la notoriedad alcanzada con la PAH -de la cual era portavoz- para hacer política. Los compañeros, y también los enemigos, se acordaban muy bien de lo que había dicho un tiempo atrás con aparente sinceridad. Efectivamente, cuando el Congreso había admitido a trámite la iniciativa legislativa popular por el derecho a la 7 LA EPOPEYA COLAUENSE vivienda digna promovida por "su" Plataforma, Ada Colau había declarado solemnemente a los micrófonos de Telecinco que aquella era "una victoria ciudadana y no de ningún partido", que no debía utilizarse "electoralmente" y que no le interesaba "entrar en política". Aun así, exactamente un año después, dejó la PAH para fundar su partido personal con el único objetivo de conquistar la alcaldía de Barcelona. En realidad, más que un partido -que según el artículo 6 de la Constitución Española debería tener una estructura interna y un funcionamiento democrático - el de la Colau apareció desde el principio como un proyecto meramente personal. Para empezar, Ada Colau dijo "no" a las primarias, rechazando rotundamente la posibilidad de que otro miembro de su coalición fuera escogido como alcaldable, y también dijo "no" al modelo asambleario y de participación ciudadana con los que había presentado su proyecto - originariamente conocido como Ganamos Barcelona y luego sustituido por Barcelona en Común-, proyecto caracterizado por un programa político muy peculiar, un único noble objetivo: echar al monstruo malo, es decir, CiU. ¡Y lo consiguió! El 8 LA EPOPEYA COLAUENSE 24 de mayo de 2015 demostró al mundo que no es importante si tienes estudios o no, cuántas lenguas hablas y qué currículo puedes exhibir porque, prescindiendo de todo esto, "¡sí, se puede!". 9 LA EPOPEYA COLAUENSE 1.LA CORONACIÓN Parece increíble cuántas cosas ha hecho ya Ada Colau desde el día de su investidura como alcaldesa de la ciudad de Barcelona. Para empezar, ya el mismo 13 de junio de 2015 encargó unas tareas imprescindibles para el buen funcionamiento del municipio, es decir, ordenó que se colocaran unas pantallas gigantes y otros medios de difusión exterior, en la plaza Sant Jaume para que todos pudieran admirarla y disfrutar con ella de su coronación. Republicanos y socialistas, además de un concejal cupaire, votaron a favor de su investidura y una vez cogida la vara, insignia largamente codiciada, la primera alcaldesa de la historia de Barcelona honró a su público con un desfile digno de la reina Isabel de Inglaterra, bajo una lluvia de pétalos y confeti, acompañada de su corte y -vaya!- de los concejales de la oposición manifiestamente avergonzados por aquella manifestación tan descarada de grandeza y un poco aterrorizados por la reducida presencia policial a pesar de la multitud allí concentrada. 10 LA EPOPEYA COLAUENSE Parece que, por esta operación de egocéntrica magnificencia, en vista de la que se habría podido contratar también un peluquero, el Ayuntamiento haya gastado 27.500 euros. No se utilizó ninguna alfombra roja -y nosotros que, ingenuamente, habíamos entendido que quería levantarlas sólo figurativamente, las alfombras del Ayuntamiento- ni tampoco el servicio de catering privado, como se había hecho durante la investidura de Xavier Trias. Y con respecto a las pantallas gigantes, colocadas para acercar la política a la gente, se ve que la ciudad de Barcelona podrá disponer de varias herramientas también para asistir a la próxima 11 LA EPOPEYA COLAUENSE Champions League, ya que al menos el Barça siempre se lo merece esto, por méritos futbolísticos o por la buena planta de sus jugadores. Y si la alcaldesa quisiera montarlas también durante alguna reunión del Consejo plenario, el público aún podría disfrutar de la belleza y elegancia del socialista Jaume Collboni o de la elocuencia encantadora y fascinante del republicano Alfred Bosch. Pero esta es otra historia... 12 LA EPOPEYA COLAUENSE 2.EL ESTRENO El día después de su investidura, una vez desmontadas las pantallas, la alcaldesa siguió actuando movida por su ansia de popularidad y, de hecho, ya era en Nou Barris, su feudo electoral, donde -¡qué coincidencia!- se detuvieron nueve desahucios. Poco importa que esto se haya conseguido por instancias del anterior ejecutivo municipal presidido por el convergente Xavier Trias; lo importante es estar allí, hacerlo ver, obtener una portada con un titular rimbombante y que, quede para la posteridad, que "lo primero que hizo la ex líder de la PAH fue detener unos desahucios". Salvo estos, sin embargo, los desahucios continuaron como antes, y lo hicieron sin heroínas dispuestas a enfrentarse a la policía a cambio de una foto propagandística, ya que la propaganda ya estaba hecha y el objetivo ya se había conseguido. Por otra parte, por una misteriosa ley natural sobre el crecimiento directamente proporcional de todo aquello que no debería crecer, junto con los humos a la cabeza de los nuevos gobernantes comenzó a subir también el nivelazo de sus políticas. El 17 de 13 LA EPOPEYA COLAUENSE junio, una decisión repentina de la honorable alcaldesa sacudió la opinión pública catalana: la renuncia a la candidatura Barcelona-Pirineos a los Juegos Olímpicos de Invierno del 2026 porque este evento "no es un objetivo para el nuevo Ayuntamiento" aunque fuente de ingresos de otro modo imposibles para los municipios del Pirineo. La noticia provocó un gran desconcierto entre los alcaldes de las ciudades directamente afectadas por esta decisión, Puigcerdà y La Seu d'Urgell, adoptada sin ningún diálogo e impuesta unilateralmente desde la capital. Esfumó así "la oportunidad de situar los Pirineos en el mundo", como denunció el alcalde de La Seu d'Urgell, Albert Batalla, a través de su cuenta de Twitter. Pero bueno, ¿qué nos importa? Que espabilen los municipios pirenaicos, ¡Barcelona es el ombligo del mundo y tiene otras prioridades! Y los montañeros tuvieron que pagar muy caro el haber tachado de pixapins a los nobles habitantes de la capital. ¡A ver quién mea más lejos, ahora! Por supuesto, la actitud de Barcelona en Común hacia los grandes eventos deportivos ya había sido manifestada abiertamente antes 14 LA EPOPEYA COLAUENSE de la investidura. Unos días después de las elecciones, por ejemplo, Ada Colau había anunciado que su gobierno no confirmaría la subvención de 4 millones de euros anuales para el circuito Barcelona-Cataluña donde se celebra, entre otras competiciones, el Gran Premio de España, ya que -dijo- "subvencionar la Fórmula 1 no es una prioridad, lo es más garantizar las becas comedor". La subvención anual había sido aprobada tres años atrás con el objetivo de promocionar "el mundo del motor, la marca Barcelona y la economía alrededor del circuito". El Ayuntamiento se había integrado en el Consorcio y el nombre "Barcelona" había sido añadido al original "Circuito de Cataluña". El año anterior el circuito había generado un impacto económico de 332 millones de euros en Cataluña (hoteles, restaurantes, etc.), de los que unos 188 millones sólo gracias al Gran Premio de España. Pero se sabe que los dineros crecen en los árboles del jardín encantado del Ayuntamiento y, por lo tanto, no hay que pensar de dónde sacarlos, sino sólo como gastarlos. Por los mismos motivos, unas semanas después, el gobierno municipal amenazó con retirar el apoyo a la Barcelona World Race 15 LA EPOPEYA COLAUENSE -organizada por la Fundación para la Navegación Oceánica de Barcelona en la que hay también la Cámara de Comercio, el Puerto y Fira de Barcelona- porque, según explicó la segunda teniente de alcaldía, Laia Ortiz, se trata de un evento "elitista" que no tiene "efecto redistributivo". Según un estudio elaborado por ESADE, la regata habría producido ingresos por unos 60 millones de euros, pero el nuevo gobierno municipal siguió despreciando los efectos positivos de todo lo que tiene el objetivo de promocionar la ciudad a nivel internacional y de atraer nuevos visitantes. 16 LA EPOPEYA COLAUENSE 3.LA ENTREVISTA El 19 de junio de 2015, Ada Colau concedió su primera entrevista como alcaldesa a Antoni Bassas del diario Ara y encendió las redes sociales con su afirmación de que "nadie se cuela en el metro por capricho o por diversión". Según la alcaldesa iluminada por el sacro fuego de "sí, se puede", nadie vulnera una norma por capricho, sino por necesidad, y el entrevistador tuvo que recordarle que hay gente que paga por utilizar el transporte público y que termina pagando el billete también para quien no lo hace, y "le duele, porque también va justa". Además, con ocasión de la misma entrevista, a pesar de haber anunciado en campaña electoral que durante su mandato no habría coches oficiales, Ada Colau informó orgullosamente a sus conciudadanos que ya tenía su coche oficial. Sin embargo, evidentemente, el Audi A6 de Trias no le gustaba mucho y, de hecho, optó por un Seat Alhambra de siete plazas en régimen de alquiler, coche que, por las características solicitadas, la empresa 17 LA EPOPEYA COLAUENSE tuvo ir a buscar en Sevilla. Quizás un monovolumen, por su apariencia, es más apto para representar lo que la alcaldesa predicaba en campaña electoral, pero seguro que alquilar un coche en lugar de utilizar el que el Ayuntamiento ya tiene no debe de ser un buen negocio. Y debe ser por el mismo motivo -para evitar llamar la atención y para guardar su imagen tan bien construida de activista de izquierda radical- que la cabeza del consistorio impuso un cambio de look a sus guardaespaldas que tuvieron que acostumbrarse a circular mudados como unos cupaires. En aquella época, el Ayuntamiento podía contar con una flota de 22 coches oficiales destinados al alcalde, a los tenientes de alcalde y a los presidentes de los grupos municipales, y no es malo recordar que, a pesar de haber anunciado, prometido y reiterado la reducción de los coches oficiales, el mes siguiente el gobierno municipal firmó un contrato bienal con la empresa Ecotaxi Barcelona que, a partir de entonces y por la cifra de medio millón de euros, habría garantizado el desplazamiento en taxi de los altos cargos del Ayuntamiento. 18 LA EPOPEYA COLAUENSE 4.EL ENCHUFISMO I El 26 de junio, cuando todavía no habían pasado dos semanas de la investidura de Ada Colau como nueva alcaldesa de la capital catalana, esparció la noticia de que su pareja, Adrià Alemany, había pedido la excedencia en la Fundación del FC Barcelona, donde trabajaba, para ir a ocupar el cargo que -según decían- su consorte le estaba amorosamente calentando en el Ayuntamiento. El día siguiente, también a causa de la ola de indignación levantada por este rumor, desde Barcelona en Común tuvieron que comunicar oficialmente que habían fichado a Alemany como responsable de relaciones políticas e institucionales del partido. El príncipe consorte, aclararon, "asumirá tareas que ya estaba desarrollando de manera voluntaria, pero que, visto el volumen que han adquirido, requieren dedicación exclusiva y, por tanto, pasa a ser un cargo remunerado". La misma Colau defendió públicamente el fichaje de su media naranja a través de su página de Facebook. Adrià Alemany "es alguien brillante, que aporta mu- 19 LA EPOPEYA COLAUENSE chísimo, y que ha Sacado tiempo de Debajo las piedras para Ayudar a que ganáramos las elecciones", escribió, y explicó que también por eso Barcelona en Común le había ofrecido un trabajo remunerado. Por lo tanto, Alemany empezó a trabajar para el partido en lugar de hacerlo para el Ayuntamiento. Ahora bien, que salgan del Ayuntamiento o del partido, los dineros llueven de la misma nube o, mejor dicho, los caga el mismo culo. De hecho, según prevé la ley sobre la financiación de los partidos políticos, los recursos económicos de cada partido están constituidos principalmente por las subvenciones públicas otorgadas para hacer frente a los gastos electorales y de funcionamiento (los recursos humanos y materiales, para entendernos) según el número de votos y los escaños obtenidos en ocasión de las últimas elecciones. Por tanto, los sueldos erogados a los cargos de Barcelona en Común provendrán de las arcas públicas al igual que los sueldos cobrados por sus concejales y sólo darán una vuelta más antes de llegar a los ávidos bolsillos de los perceptores. Además, dado que, según el Tribunal de Cuentas, Barcelona es uno de los municipios que distribuye más dinero a los partidos políticos, y 20 LA EPOPEYA COLAUENSE que durante el 2014 las formaciones con representación en el Ayuntamiento habían cobrado subvenciones por un total de 2,5 millones de euros, podemos hacernos una idea de las cifras puestas al alcance de Barcelona en Común después de las elecciones municipales de 2015. Por otra parte, aunque Alemany haya estado fijado por el partido y no por el Ayuntamiento, el mismo actuó en más de una ocasión como portavoz del gobierno municipal. En particular, durante las negociaciones para el cartapacio del Ayuntamiento, la pareja de la alcaldesa participó en una reunión crucial con los grupos de la oposición para pactar el reparto de los cargos de confianza entre los partidos. Parece que cada uno de los grupos municipales fue representado por el concejal que, a partir de entonces, actuaría como portavoz de su grupo mientras que Barcelona en Común fue representada por Alemany y por el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, que sin embargo, a continuación, dejó el papel de protagonista al consorte de la alcaldesa, personaje no elegido por el pueblo y externo al municipio. Y también otra media naranja participó en esa reunión sin formar parte del consistorio, es 21 LA EPOPEYA COLAUENSE decir, David Cid, coordinador de ICV en Barcelona y dulce pareja de Janet Sanz, concejal de Barcelona en Común. Poco a poco, la empresa familiar Colau & Co. había comenzado a ponerse en marcha... No muy preocupados por las acusaciones de nepotismo que comenzaron a llover por todas partes, los nuevos gobernantes de Barcelona siguieron contratando personas cercanas a los electos empezando por Vanesa Valiño, pareja del primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello. La Valiño se incorporó como asesora a la concejalía de Vivienda del Ayuntamiento dejando la dirección del Observatorio de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (DESC), una ONG alimentada por subvenciones públicas -unos 3,8 millones de euros en 7 años, según la prensa- donde trabajaban también Ada Colau y Gerardo Pisarello, y los concejales Jaume Asens y Gala Pin. Un traslado masivo del DESC al Ayuntamiento. 22 LA EPOPEYA COLAUENSE Ahora bien, como ya había hecho Ada Colau, también Pisarello tuvo que explicar públicamente los motivos del fichaje de su pareja, "persona que hace 10 años que trabaja en temas de vivienda", "de reconocida competencia en este ámbito", etcétera etcétera. El Pisy aprovechó la ocasión para recordar que Barcelona en Común "no hace la política de siempre" y "es importante que la ciudadanía lo sepa". Ostras, ¿qué decir? Ciudadanía, si aún no lo sabes, ¡sábelo! Por supuesto, haciendo caso omiso al hecho de que distribuir cargos de confianza a amigos o familiares choca contra los más elementales principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad, principios imprescindibles cuando se gestionan dineros públicos, la alcaldesa reinante de la capital catalana ya lo había dejado claro, que tenía toda la intención de continuar con el enchufismo descontrolado y, de hecho, había manifestado con todo el morro la voluntad de distribuir personalmente 62 de los 92 cargos remunerados del Ayuntamiento, es decir, 62 sueldos públicos pese a tener sólo 11 de 41 concejales. "Barcelona c'est moi", nos pareció que dijera la faraona Colau que, entre otros, por ejemplo, 23 LA EPOPEYA COLAUENSE nombró un director de alcaldía que ni siquiera había terminado la carrera y que, con sólo 25 años, empezó a cobrar un sueldo de casi 80.000 euros anuales, sólo un poco más bajo que la retribución del presidente del gobierno. 24 LA EPOPEYA COLAUENSE 5.LA CASA DEL PIPÍ Se desaconseja la lectura de este capítulo a un público sensible al uso de palabras inconvenientes o a la descripción explícita de funciones, no os escandalicéis, porque estoy segura de que vosotros también hacéis pipí cuando se os escapa. El 29 de junio de 2015, la predicadora de la "nueva política" llevó a cabo el enésimo fichaje, contratando otra ex compañera del DESC -feminista radical y activista "post-porno", según informó la prensa- como directora de comunicación del Ayuntamiento. Y quizás la señora Águeda Bañón era exactamente lo que el Ayuntamiento de Barcelona y su alcaldesa necesitaban para incrementar la plantilla, pero las imágenes que empezaron a circular por Internet no fueron una buena carta de presentación. En particular, la imagen de la Bañón que mea en medio de una vía pública despertó la hilaridad (y también la indignación) de los barceloneses que, por unas semanas, se debatieron entre las ganas de reír 25 LA EPOPEYA COLAUENSE y de llorar resignadamente, obviamente pasando por una meada de ordenanza. Por cierto, si la comunicación institucional pasa también a través de la satisfacción de las propias necesidades fisiológicas por la calle, seguro que en Barcelona hay miles de candidatos meones aptos para este cargo. Por otra parte, como ya aclaró el lejano 2005 el entonces alcalde Clos en ocasión de una entrevista radiofónica, "de casa se sale meado" y "si alguien tiene problemas de retención urinaria, ¡que se quede en casa!". Aún así, se ve que los afectados por dichos problemas no se quedaron en casa y, por tanto, el pipí fue desde el principio una cuestión de fundamental relevancia para el nuevo gobierno municipal que, como primera medida de su plan de choque contra el turismo masivo, ordenó la instalación de unos urinarios públicos por las calles del distrito de Ciutat Vella donde -dicen- circula el número mayor de meones. Tampoco el antiguo mercado del Born, donde aún se celebraba el Tricentenario de los hechos de 1714, se quedó sin su particular urinario -un urinario abierto, para 26 LA EPOPEYA COLAUENSE mear allí de pie con el público que te observa el culo, y "portátil", como si fuera un ordenador- que surgió prácticamente pegado a una de sus paredes laterales con la consiguiente indignación de buena parte de los ciudadanos. El grupo municipal de CiU no tardó en pedir el traslado del urinario a un lugar más discreto, ya que -como lamentó el concejal de Cultura del anterior gobierno municipal, Jaume Ciurana- su colocación fuera de la puerta del Born fue una "falta de respeto al patrimonio y a la memoria, así como a la estética y al paisaje urbano". La concejala Francina Vila, por su parte, definió los urinarios como un "invento de principiante" de la alcaldesa y un "ejemplo de cómo gobierna, desde el desconocimiento y con decisiones superficiales". El PP, en cambio, haciendo muestra de su puritanismo, pidió que los urinarios fueran cerrados, ya que a nadie le gusta asistir a las meadas de los demás, y también que pudieran utilizarse para mujeres y discapacitados. 27 LA EPOPEYA COLAUENSE 6.AY, LA CULTURA Que la alcaldesa de Barcelona no fuera una mujer excesivamente amante de la cultura, ya se sabía. Por el amor de Dios, no es el fin del mundo: se sabe que no todo el mundo ama estudiar y, además, si el electorado barcelonés hubiera querido un alcalde culto, habría podido votar Alfred Bosch que rezuma cultura por todos los poros de la piel y nunca podría representar los que sufren urticaria delante de una biblioteca. Ahora bien, el 7 de julio de 2015 la alcaldesa se cargó un evento, justamente cultural, a punto de celebrarse en Barcelona, es decir, la reunión anual del Parlamento Europeo de la Cultura que habría reunido en la capital intelectuales provenientes de toda Europa y que se celebra cada año en una ciudad europea diferente. Ada Colau decidió que esto no se debía hacer y borró el acto, cancelando la subvención ya concedida. La conferencia ya había sido organizada con el visto bueno del anterior gobierno municipal y quizá también por eso la alcaldesa decidió que no había que hacer ninguna reunión, ya que "esta 28 LA EPOPEYA COLAUENSE entidad no tiene vinculación con Barcelona" -como si las subvenciones concedidas en octubre siguiente a los emprendedores palestinos o al colectivo gay de Guatemala la tuvieran- y el gobierno de Barcelona en Común sólo dará "apoyo a encuentros que estén vinculados a la proyección de creadores de Barcelona y programas articulados con el tejido cultural de la ciudad ". El Ayuntamiento de Barcelona, por tanto, se negó a asumir el gasto relacionado con el evento, aunque la subvención ya hubiera sido prevista y otorgada por el equipo de Xavier Trias. Según denunció el exconcejal de Cultura del gobierno anterior, Jaume Ciurana, la decisión sobre la cancelación del acto habría podido "tener consecuencias jurídicas y económicas" porque el convenio ya estaba firmado y "parte de la subvención incluso ya pagada". Además, Ciurana criticó que el Ejecutivo presidido por Ada Colau hubiera suspendido la reunión sin ni siquiera ponerse en contacto previamente con sus organizadores, hecho perjudicial para el prestigio internacional de la ciudad que, según las pala- 29 LA EPOPEYA COLAUENSE bras del exconcejal, a partir de entonces sería considerada inevitablemente "nada fiable e incapaz de asumir sus compromisos, incluso, como es el caso, si ya están firmados y pagados". 30 LA EPOPEYA COLAUENSE 7.GUIRILANDIA A pesar de los beneficios indiscutiblemente aportados a la ciudad de Barcelona por el turismo, Ada Colau dejó claro desde el principio que haría de todo para luchar contra la invasión descontrolada de guiris. Y efectivamente, una de las primeras medidas adoptadas por su gobierno municipal había sido la suspensión de la concesión de nuevas licencias turísticas, incluidas las hoteleras, con la consiguiente parálisis de proyectos ya iniciados como la Torre Agbar, a punto de convertirse en un hotel de cinco estrellas de la cadena estadounidense Hyatt, y el edificio del Deutsche Bank, en los Jardinets de Gracia, adquirido por el grupo inversor KKH Property por 90 millones de euros con la intención de convertirlo en un hotel de cinco estrellas de la cadena Four Seasons. Unas semanas después de la adopción de la medida restrictiva, se comprobó que la Torre Agbar quedaba exenta de la moratoria, ya que el propietario había solicitado el certificado de régimen urbanístico antes de la publicación de la moratoria misma en el Boletín Oficial la Provincia de Barcelona, pero, salvo este caso 31 LA EPOPEYA COLAUENSE excepcional, la alcaldesa logró prohibir que en Barcelona se instalaran hoteles de lujo de cadenas presentes en todas las capitales europeas, con pérdidas de millones de euros y de miles de puestos de trabajo. Mientras tanto, llegó el verano y quien se esperaba una tregua debida a las vacaciones se quedó decepcionado. La ciudad se llenó de turistas y Ada Colau siguió haciendo muestra de su rechazo hacia los pobres extranjeros deseosos de visitar su ciudad. Como nada podía hacer contra los acuerdos de Schengen, la alcaldesa del cambio intentó buscar la manera para limitar el número de cruceros que quisieran atracar en el puerto de Barcelona, y también planteó la posibilidad de pactar y autorizar con antelación el recorrido de los turistas, dos millones de visitantes indeseados que deberían quedarse en casa en lugar de ir a "expulsar a la ciudadanía de su espacio público". Asimismo, comenzó a circular la noticia de que la alcaldesa empezaba a parir travesuras contra el bus turístico de la ciudad, tal vez debido al número reducido de pasajeros -versión oficial- o quizás porque podría ser considerado uno de los principales responsables de la circulación 32 LA EPOPEYA COLAUENSE de los guiris, esa raza tan odiada que procede de cada rincón del mundo civilizado y que ya es objeto de minuciosos documentales del National Geographic Channel. 33 LA EPOPEYA COLAUENSE 8.UNIONISMO El 31 de agosto de 2015 la faraona evidenció (¡por fin!) Su vocación unionista y anunció que no participaría en la Vía Libre, la manifestación organizada por la plataforma "Ahora es la hora" para el once de septiembre siguiente. Como ya hacía tiempo que se habían convocado las elecciones autonómicas, previstas para el 27 de septiembre, Ada Colau justificó su decisión con una presunta "referencia explícita" del acto con la campaña electoral llevada a cabo por la coalición independentista Junts pel Sí. Al final, el odio hacia el entonces presidente de la Generalitat, el convergente Artur Mas, pudo más que cualquier otra razón y la Colau declaró que no bajaría a la calle junto con la multitud de votantes de la lista electoral más grande que haya habido en Europa. Con su decisión respecto a la Vía Libre, pues, Ada Colau confirmó la actitud de su partido con respecto al independentismo, actitud que comenzó a revelar también en relación al discurso sobre la eventual adhesión del Ayuntamiento de Barcelona a la 34 LA EPOPEYA COLAUENSE Asociación de Municipios por la Independencia, adhesión considerada por ella y por sus compañeros como un instrumento de propaganda electoral a favor de Juntos por Sí, exactamente como la manifestación prevista para la Diada. Concretamente, con respecto a la adhesión de la capital catalana al AMI, la alcaldesa preanunció que, en el pleno justamente convocado para decidirlo, su grupo se abstendría, con el consiguiente impedimento a la adhesión misma por la imposibilidad de conseguir la necesaria mayoría absoluta. "El debate de la AMI no puede sustituir un referéndum en Cataluña", declaró Ada Colau, olvidando completamente que una consulta ya se había hecho el año anterior y que el 80,98% de 2.344.828 electores había votado a favor de la independencia. Llegó el 7 de septiembre de 2015 y con motivo de la petición firmada conjuntamente por los concejales de los grupos municipales de CiU, ERC y la CUP, llevó a cabo la sesión extraordinaria del pleno del Consejo Municipal de Barcelona a fin de debatir y 35 LA EPOPEYA COLAUENSE votar la adhesión de la ciudad a la Asociación de Municipios por la Independencia. A pesar del optimismo expresado por el cándido presidente del grupo municipal de ERC, Alfred Bosch, convencido de que al final Barcelona en Común se sumaría a la propuesta, o bien daría libertad de voto a sus concejales, el pleno rechazó la adhesión a la AMI por la abstención de todos los concejales del partido liderado por Ada Colau y de la concejala de Unión, Sònia Recasens, y por los previsibles 12 votos contrarios de Ciudadanos, PSC y PP. La propuesta, por tanto, obtuvo el voto favorable de sólo 17 concejales de los 21 necesarios. Y la alcaldesa no sólo se abstuvo, sino que también prohibió decididamente y dictatorialmente a sus concejales, privados del libre arbitrio, que votaran a favor. Aún no está claro con qué castigo 36 LA EPOPEYA COLAUENSE corporal la soberana amenazó a los eventuales desobedientes -la vara nos parece perfecta para unas sonoras nalgadas-, y probablemente no lo sabremos nunca, ya que los miembros de la corte colauense hicieron lo que les habían ordenado como buenos soldaditos, levantando paredes entre ellos y los concejales de la oposición que hasta entonces parecían dispuestos a garantizar una mínima estabilidad al gobierno municipal. Alfred Bosch, en particular, inmensamente decepcionado por el resultado de la votación, recordó a la alcaldesa que ERC había apoyado a su investidura también porque parecía que hubiera un acercamiento de Barcelona en Común a los ideales independentistas de los republicanos. Ada Colau, de hecho, cuando todavía buscaba consensos de manera muy oportunista, había dejado entender que iría a la Meridiana -donde cuatro días después tendría lugar la Vía Libre- y también que examinaría la posibilidad de votar favorablemente para la adhesión a la AMI mientras que, una vez investida, estaba usando la excusa de las elecciones que se acercaban -elecciones, recordemos, ya previstas meses antes de 37 LA EPOPEYA COLAUENSE su investidura- para desertar de las celebraciones de la Diada y para evitar pronunciarse sobre el AMI. 38 LA EPOPEYA COLAUENSE 9.LOS CIEN DÍAS Mientras tanto, entre críticas y polémicas, cien días ya habían pasado y Ada Colau los celebró informando a sus seguidores de la intensidad de los mismos, durante los cuales -según escribió en su muro de Facebook- "se han puesto en marcha las políticas con las que nos hemos comprometido con la ciudadanía y que harán de Barcelona una ciudad más justa y más democrática". "Ya hemos conseguido cosas que antes parecían imposibles", declaró, sin detallar qué cosas concretas se habrían alcanzado, y también explicó que se había "avanzado en cada uno de los ejes principales que nos marcamos y esto nos permite tener unas instituciones que hacen frente a las desigualdades". Y las palabras de la alcaldesa dejaron un poco confundidos a los ciudadanos que, por unos minutos, pensaron que habían vuelto a los meses de la campaña electoral, cuando todo era palabrería y declaraciones abstractas de intentos. La Colau siguió con su largo discurso genérico sobre derechos humanos, justicia e igualdad, todo muy bonito, sin ninguna concreción. "Han sido los primeros cien días, 39 LA EPOPEYA COLAUENSE pero los cambios empiezan a notarse", afirmó orgullosa tras haber paralizado una buena parte de la economía de la ciudad. Los partidos de la oposición, por su parte, aprovecharon la ocasión para subrayar la ausencia de programa del gobierno Colau que hasta entonces –afirmaron– sólo había improvisado. "Es un gobierno que básicamente se hace selfies, más preocupado por los tuits, por las publicaciones de Facebook y por lo que se dice de ellos en la red que de hacer el trabajo", lamentó el exalcalde Trias. 40 LA EPOPEYA COLAUENSE 10.EL VIAJE A finales del mes de agosto, el grupo municipal de ERC había registrado un ruego para que el consistorio emprendiera las medidas necesarias para acoger a los refugiados de guerra sirios. Ada Colau no sólo aceptó el ruego, sino que también aprovechó la ocasión para organizar su primer viaje oficial como alcaldesa y para marchar hacia Alemania para ir a mirar cómo se gestionaba allí el problema de los refugiados. En octubre, por lo tanto, Ada Colau salió de viaje, acompañada por una delegación de ocho 41 LA EPOPEYA COLAUENSE personas con las que fue a visitar, entre otros, el centro de recepción de los refugiados y los alojamientos a ellos destinados en la ciudad de Leipzig. A pesar de las invitaciones -como si se hubiera tratado de un viaje de fin de curso-, ningún miembro de la oposición no quiso acompañar a su alcaldesa. El exalcalde Xavier Trias rechazó la oferta debido al coste elevado del viaje, 12.700 euros que -destacó- habría tenido que aprovechar para las entidades especializadas. La presidenta del grupo municipal de Ciudadanos, Carina Mejías, destacó que la alcaldesa había emprendido ese viaje "innecesario" sólo para "buscar una foto", ya que el trabajo debería haberse hecho desde Barcelona y ese dinero se habría tenido que destinar a los refugiados ya presentes en la capital. El líder del grupo de los populares, Alberto Fernández Díaz, por su parte, además de criticar él también el coste del viaje, observó que la partida se habría tenido que destinar a "dar respuesta a las familias que lo necesitan". 42 LA EPOPEYA COLAUENSE En cambio, republicanos, socialistas y cupaires, más diplomáticos, apelaron a sus agendas para evitar la indeseada salida como miembros del humillante cortejo. 43 LA EPOPEYA COLAUENSE 11.SUBVENCIONES FANTASIOSAS El 28 de octubre de 2015, el Boletín Oficial de la Provincia de Barcelona informó sobre el otorgamiento de subvenciones a Entidades dedicadas al ámbito de la cooperación internacional. En particular, el Gobierno presidido por Ada Colau -contrario a las subvenciones a favor de la Fórmula 1 y de otros eventos internacionalmente relevantes- destinó 4 millones de euros a 70 proyectos de cooperación internacional, algunos fuertemente ligados a la extrema izquierda. Por ejemplo, 10.000 euros fueron destinados a la digitalización del documental "Cuba descriptiva", fundamental para el bienestar de los barceloneses, y 113.000 euros al colectivo de mujeres emprendedoras de La Habana, como si fuera posible montar una empresa en un país comunista como Cuba. Otros 62.500 euros se utilizaron para ayudar a los emprendedores palestinos a "superar el duelo" provocado por "la ocupación israelí" mientras que unos 150.000 euros fueron destinados a las "Brigadas Internacionales de Paz de Cataluña" para estudiar los 44 LA EPOPEYA COLAUENSE derechos humanos en Bogotá, y unos 60.000 fueron otorgados al colectivo gay de Guatemala. Y una subvención de 60.000 euros habría sido concedida más adelante, a principios del mes de diciembre -de forma directa y sin concurso-, a la Fundación Codespa Cataluña para el proyecto "Promoción de la gobernanza local en el municipio de Tetuán (Marruecos) mediante la ampliación de las capacidades institucionales y ciudadanas en la gestión de los Servicios Públicos". Según explicó el diario Economía Digital, la subvención habría sido otorgada sin previa convocatoria pública con motivo de "la excepcionalidad del proyecto". Esto confirma la predilección que Ada Colau siempre había tenido por las subvenciones a favor de proyectos totalmente improductivos para la economía, tal vez porque ella también siempre se había visto beneficiada. Ya en marzo de 2013, la prensa informaba que la entonces activista, cara visible de la PAH, que en 45 LA EPOPEYA COLAUENSE aquel tiempo luchaba -con éxitos remarcables- contra los desahucios, no lo hacía a cambio de nada, sino por las numerosas subvenciones cobradas por las entidades para las cuales actuaba. En particular, el Observatorio DESC, para el que Ada Colau oficialmente trabajaba, cobraba subvenciones para organizar cursos para "educar" a las comunidades latinoamericanas sobre temáticas sociales como, por ejemplo, la vivienda "de género" o la "soberanía alimentaria", y para monitorizar los desahucios en América Latina. Para esta tarea, entre 2003 y el 2011 el DESC recibió subvenciones públicas por un total de 3,75 millones de euros provenientes de gobiernos municipales, autonómicos y también del gobierno central. Unos 480.000 euros, por ejemplo, habrían sido erogados para el proyecto "El derecho a la ciudad y los derechos económicos, sociales y culturales en América Latina" mientras que 210.000 euros se habrían destinado al proyecto "Mujer y vivienda: construyendo dignidad". El dinero cobrado por la ONG, por lo tanto, no se destinó directamente a las comunidades interesadas, sino que se lo quedó la entidad para organizar estos cursos. Concretamente, con respecto a las subvenciones recibidas por el 46 LA EPOPEYA COLAUENSE Ayuntamiento de Barcelona entonces gobernado por Xavier Trias -gobierno que Ada Colau, durante su campaña electoral, tildaba impunemente de mafioso-, en cuatro años el DESC y la PAH habrían cobrado un total de 365.000 euros presentando como justificantes los sueldos de la actual alcaldesa (2.600 euros mensuales) por tareas de organi- zación y coordinación, y de la concejala Gala Pin (1.100 euros) como técnica del proyecto. 47 LA EPOPEYA COLAUENSE 12.LAS MANTAS Desde que Ada Colau se había convertido en alcaldesa, la presión policial y el nivel de seguridad en la ciudad habían bajado notablemente y, entre otras consecuencias, el fenómeno del "top manta" se había extendido desmesuradamente por las calles del centro. Como el exalcalde Trias había subido hasta 22 euros (¡qué despropósito!) el precio de las horas extras de los agentes de la Guardia Urbana, parece que, para el nuevo gobierno municipal, la policía tuviera que hacer sólo las horas ordinarias con la consecuencia de que los vendedores ambulantes ilegales se habían ensanchado por las vías públicas de una ciudad transformada en la capital mundial del "top manta". Al cabo de unas semanas, Barcelona se había convertido en un mercado a cielo abierto de productos contrahechos que había llegado a ocupar establemente incluso la plaza Sant Jaume, gracias también a la pasividad de la Guardia Urbana a la que se había prohibido cualquier intervención contra los manteros. De vez en cuando, la Colau había ordenado alguna batida de los agentes de policía municipal, pero 48 LA EPOPEYA COLAUENSE con la prohibición de llevar a cabo detenciones, ya que, según las órdenes del consistorio, "hay que dejarlos trabajar en paz o darles una alternativa ", en armonía con los comerciantes de toda la vida. Hacia la mitad del mes de noviembre, como que hasta entonces Ada Colau no había sabido resolver el problema de los manteros y los comerciantes barceloneses legales -cada día más cabreadosreclamaban una solución inmediata de la cuestión, el gobierno municipal se rindió a la evidencia de su ineptitud en cuanto a la cuestión y consintió en que se constituyera una Mesa de Ciudad que afrontara el tema de la venta irregular, un espacio de diálogo impulsado por el grupo municipal de ERC y presidido por su portavoz, Jordi Coronas, conocido por sus virtudes de hombre práctico y buen negociador. Ahora bien, hasta la constitución de la Mesa de Ciudad, aún no había habido ningún diálogo entre el sindicato de los manteros y el Ayuntamiento, ningún intento de solucionar el problema por parte de los órganos de gobierno municipal, aunque los manteros ya habían demostrado su voluntad de cumplir la normativa y, 49 LA EPOPEYA COLAUENSE justamente en el mes anterior, un centenar de ambulantes irregulares se habían asociado en un sindicato constituido con el objetivo de negociar con el Ayuntamiento para lograr la regularización de su actividad. "Ha llegado la hora de reconocer otra Barcelona, la Barcelona negra", había reivindicado Aziz Faye, portavoz del sindicato. Y Ada Colau debe haber pensado que, para blanquear, esta Barcelona negra, habría podido comprobar si entre sus antiguos compañeros del DESC o de la PAH había alguien que, mientras tanto, hubiera montado alguna empresa de pintura, con el fin de contratarlos. 50 LA EPOPEYA COLAUENSE 13.EL ENCHUFISMO II Como era previsible, a pesar de las acusaciones dirigidas a los representantes de la clase política hasta entonces en el gobierno, acusados de corrupción sin ninguna sentencia judicial de condena que lo confirmara, la que se presentó como encarnación de la "nueva política" se conformó sin ningún problema de adaptación a los métodos que, en sus discursos electorales, atribuía a la "casta". Y la colocación de parejas, familiares y amigos de los gobernantes siguió constituyendo una de las actividades contractuales predilectas del consistorio barcelonés. La política del enchufismo comenzada unas semanas después de la investidura, por lo tanto, continuó y, a finales de noviembre de 2015, los periódicos informaron de la contratación por parte del Ayuntamiento de Barcelona de unas empresas vinculadas a las parejas de dos cargos de Barcelona en Común. Concretamente, según informó el diario ABC, el ejecutivo de Colau habría decidido externalizar el proyecto de participación ciudadana contenido en su programa elec- 51 LA EPOPEYA COLAUENSE toral y lo habría hecho encargándolo a las empresas Razones Públicas y Punto Seis a través del procedimiento de adjudicación directa de los contratos menores regulado por el artículo 122 de la ley de contratos del sector público. La empresa Razones Públicas firmó unos contratos por la gestión de los procesos participativos en los distritos de Horta (9982 euros), Ciutat Vella (dos contratos por 3.900 y 1.936 euros), Sants (3250 euros) y Les Corts (5.900 euros), por un total de unos 25.000 euros, y no parece casual que dentro de aquella empresa trabaje la pareja de Raimundo Viejo, miembro de Barcelona en Común y concejal de Educación en el Ayuntamiento de Barcelona hasta su candidatura para las elecciones generales. En cambio, la empresa encargada de gestionar el proyecto en el distrito del Eixample con un contrato de 4.450 euros fue el colectivo Punto Seis, en el que trabajaba la pareja del concejal de Vivienda, Josep Maria Montaner, hasta su nombramiento como directora de Urbanismo en el Ayuntamiento de Santa Coloma tras las elecciones municipales del 24 de mayo de 2015. 52 LA EPOPEYA COLAUENSE Desde el Ayuntamiento justificaron la adjudicación directa por el importe de los contratos, aunque la oposición denunció que los mismos hubieran sido expertamente fraccionados justamente para que su importe fuera inferior a los 18.000 euros previstos por el citado artículo 122 de la ley de contratación. Por lo tanto, el nepotismo descarado continuó, a pesar de encontrar el apoyo de las normas que, por lo visto, son fácilmente eludibles. 53 LA EPOPEYA COLAUENSE 14.PÁJAROS A mediados de diciembre, la adaptación del gobierno colauense a los métodos de los antecesores tuvo que pasar también por la solución de los problemas de los pájaros barceloneses. Tal vez con motivo del feminismo imperante en la llamada "nueva política", o quizás debido a una antipatía escondida hacia su concejal volátil de Empleo y Empresa, Ada Colau confirmó el gasto de 407.000 euros por eliminar las palomas de la ciudad, a pesar de haber prometido un control ético y no letal de los animales, empezando por el uso de anticonceptivos. Pues, nada de condones y la empresa Columba Control S.L. encargada de la ingrata tarea desde hacía una veintena de añoscontinuó capturando con red las palomas para ejecutarlas con gas y eliminar los cuerpos. Además, el consistorio, por exigencias de igualdad entre plumados, incluso habría ordenado la captura de los polluelos de gaviota directamente de los nidos y su eliminación, porque en la capital no sobraran pájaros ni testosterona. 54 LA EPOPEYA COLAUENSE Las entidades animalistas, como era previsible, denunciaron estas prácticas por enésima vez, reprocharon a la alcaldesa el incumplimiento de las promesas electorales y recordaron que un estudio del Museo de Ciencias Naturales de Barcelona ya había demostrado la inutilidad de la eliminación periódica de las palomas, ya que, a pesar de la matanza anual, desde 1991 hasta 2006 su número había crecido un 95%. Sin embargo, a pesar de las presiones de organizaciones como "Corazón de paloma" e incluso del partido animalista PACMA, el Ayuntamiento no dio ni un paso atrás y siguió adelante con su lucha contra los peligrosos pájaros. 55 LA EPOPEYA COLAUENSE 15.LA CONQUISTA DE MADRID Aunque durante la campaña electoral para las elecciones autonómicas del 27 de septiembre, Ada Colau había preferido no mojarse a favor de ningún partido -tampoco de la lista podemita "Cataluña sí se puede" que, de hecho, obtuvo resultados muy decepcionantes-, cuando se convocaron las elecciones generales, la alcaldesa de Barcelona decidió que quería conquistar Madrid, aunque todavía no había encontrado el rumbo a su ciudad. Dado que las últimas encuestas sobre las intenciones de voto de los españoles mostraban una disminución vertiginosa de Podemos, Pablo Iglesias -profesor asociado del oportunismo en la Universidad Populista de las Castillas- pensó que podía conquistar el voto de los catalanes aprovechando el resultado de Barcelona en Común en las últimas municipales, y también -¿por qué no?- volviendo a mezclar y a cambiar su programa electoral, donde ya cabía todo y lo contrario de todo, para añadir también el derecho a decidir que -debe haber pensado- siempre tiene buena pinta entre los independentistas. 56 LA EPOPEYA COLAUENSE Ada Colau, por su parte, no dejó escapar la ocasión y aprovechó las necesidades de Podemos para ampliar su esfera de poder hasta el ámbito estatal, a fin de colocar personas de confianza también en Madrid, ya que las posibilidades de enchufar conocidos en Barcelona ya estaban acabando porque casi todos los cargos, desgraciadamente, ya estaban ocupados. Barcelona en Común, por lo tanto, decidió presentarse a las elecciones españolas junto con Podemos. Ada Colau impuso su verbo haciendo que Pablo Iglesias consintiera en que la lista se llamara "En Común Podemos", pero no consiguió que su pareja la encabezara por el rechazo expresado por los podemitas. La lista fue encabezada por el historiador Xavier Domènech, otro personaje cercano a la alcaldesa y hasta entonces responsable del comisionado de Memoria Histórica del Ayuntamiento, justamente creado para él solo cinco meses atrás durante las operaciones de fichaje de los miembros de la corte de la reina. Ahora bien, el 13 de diciembre, en ocasión del acto central de campaña electoral de Podemos en Madrid, Ada Colau aclaró una 57 LA EPOPEYA COLAUENSE vez más su actitud unionista. Víctima del entusiasmo por el egocentrismo satisfecho delante de aquella multitud podemita, durante su intervención se le escapó que "Madrid puede volver a ser nuestra capital", provocando las reacciones indignadas de los independentistas que, por un instante, se habían tragado la promesa de un referéndum en caso de victoria de En Común Podemos. A pesar de las intervenciones inmediatas en las redes sociales de la omnipresente pareja de la alcaldesa, que intentó desviar la atención hacia los gritos de los asistentes -gritos populistas de "viva Cataluña" sin ninguna referencia a la independencia-, la verdadera actitud de Ada Colau en cuanto a la libertad de los catalanes ya se había desvelado por enésima vez. En particular, según las palabras de la alcaldesa barcelonesa, Madrid habría podido convertirse "en la capital de la plurinacionalidad y del derecho a decidir todo". El significado de este "derecho a decidir todo" todavía es un misterio, pero ya desde entonces quedó claro que la independencia 58 LA EPOPEYA COLAUENSE no estaba incluida entre las cuestiones por decidir. Como siempre, sin embargo, el pueblo no ve lo que no quiere ver; y aunque esto haya pasado exactamente el día de Santa Lucía, protectora de los ciegos, ningún milagro hizo abrir los ojos a los electores. El día siguiente, el líder máximo de Podemos -quizás justamente para no tener que contestar preguntas sobre el resbalón de su aliada barcelonesa-, dejó plantado al pobre conductor radiofónico Jordi Basté que le esperaba para una entrevista en RAC1. "TU has hecho la cagada y ¡TU ahora la solucionas!", debe haberle dicho Pablo Iglesias a Colau. Entonces, con el objetivo de poner remedio al desastre, la alcaldesa de Barcelona respondió personalmente a las preguntas de Basté, pero, en lugar de arreglar las cosas, incluso consiguió agravar el daño, intentando convencer a los oyentes que, cuando había dicho "nuestra capital, quería decir la capital de la gente" -¿o sea?- y "debería haber calculado mejor que cada palabra se puede malinterpretar en campaña electoral, debería haber afinado más". Pues, Ada Colau sólo lamentó no haber preparado antes la mentira y haberse dejado escapar la 59 LA EPOPEYA COLAUENSE verdad, es decir, su voluntad de rendir vasallaje a la capital española, con Pablo Iglesias haciendo de paje junto al trono de Felipe VI. Aún así, los catalanes, conocidos también por su bondad, en lugar de traer a la Colau su deseo de someter a Cataluña aún más en España, le agradecieron su claridad tras meses de ambigüedad sobre el tema, y siguieron aguantándola con la santa paciencia de Job. 60 LA EPOPEYA COLAUENSE 16.EL OPORTUNISMO El 23 de diciembre de 2015, cuando ya se habían celebrado las elecciones españolas que habían decretado la victoria de En Común Podemos en Cataluña, la Comisión de Presidencia y Derechos de Ciudadanía del Ayuntamiento de Barcelona expresó formalmente su apoyo a la resolución independentista aprobada por el Parlamento catalán el 27 de octubre anterior a fin de comenzar el camino hacia la creación del nuevo estado. Lo hizo -que quede claro- gracias al voto favorable de ERC, CiU y la CUP mientras que, como era previsible, el PP, C 's y el PSC votaron en contra e, igualmente predecible, Barcelona en Común se abstuvo. Sin embargo, casi todos los medios de comunicación que informaron de la noticia llevaban como imagen destacada la foto de la alcaldesa que incluso parecía celebrarlo; y los titulares, al informar que el Ayuntamiento se adhería a la declaración de ruptura del Parlamento, hicieron que ensanchara el mensaje que Barcelona en Común, por fin, se había vuelto independentista. 61 LA EPOPEYA COLAUENSE El partido liderado por Ada Colau, al contrario, siguió sin mojarse a favor de la independencia. Con su abstención, Barcelona en Común dejó que el Ayuntamiento se adhiriera a la resolución independentista del Parlamento simplemente porque la aprobación no habría tenido ninguna consecuencia concreta para el propio Ayuntamiento y, por lo tanto, el gesto no contradijo su vocación unionista. Si añadimos que la resolución ya había sido anulada por el Tribunal Constitucional una veintena de días antes, no queda duda sobre la naturaleza meramente publicitaria del gesto. Así como quedan pocas dudas acerca de que Ada Colau sea principalmente unionista. Entre la promesa de un hipotético e irrealizable referéndum, hecha durante la campaña electoral para las elecciones generales con el único objetivo de recaudar votos entre los independentistas, y la declaración de que "Madrid puede volver a ser nuestra capital" hecha en frente del electorado podemita madrileño, se podría definir a la Colau como un futbolista que teorizando la ausencia de una federación de fútbol- consigue ha- 62 LA EPOPEYA COLAUENSE cerse fichar contemporáneamente por el Barcelona y el Real Madrid, presumiendo de ser pichichi a pesar de no haber marcado nunca ningún gol y con la esperanza de que los dos equipos no se den cuenta de la "bigamia futbolística". Por cierto, el doble juego no duraría hasta el infinito, ya que al menos dos veces en una liga los dos equipos deben enfrentarse. Y eso pasa también en la vida. A ver qué pasará cuando Ada Colau tenga que jugar su clásico... 63 LA EPOPEYA COLAUENSE 17.SENSUALES TRANSPARENCIAS A finales del mes de diciembre, Ada Colau estrenó el portal de transparencia del Ayuntamiento que, en un santiamén, llamó la atención de periodistas y chismosos, curiosos por las retribuciones y los bienes declarados oficialmente por los concejales y los consejeros de distrito. Sin embargo, según denunció la elegantísima presidenta del grupo municipal de Ciudadanos, Carina Mejías, el portal habría omitido la publicación de las dietas y de los pagos en especie que percibirían los concejales. Además, según observó la misma Mejías, en el portal no sale dónde va a parar la cuota de retribución a la que la alcaldesa y sus compañeros de partido habrían declarado renunciar al principio del mandato. Recordemos que, cuando tomó posesión del cargo, Ada Colau y todos los concejales de Barcelona en Común habían prometido que entregarían la parte de sueldo que excediera los 2.200 euros a alguna ONG, sin nunca especificar cuál, mientras que –según parece- después de 8 meses de la investidura, los miembros del gobierno barcelonés aún no habían elegido la organización a la 64 LA EPOPEYA COLAUENSE que destinar el sueldo excedente y, por lo tanto, seguían percibiendo la retribución íntegra declarada en el portal de transparencia. Por supuesto, ningún elector había pedido a la Colau y compañía que cobrasen una cifra en lugar de otra, sino que ellos mismos se habían comprometido. En caso contrario, ahora nadie se lo estaría reprochando. Se sabe que el infierno está empedrado de buenas intenciones... Dicho esto, dando un vistazo a dicho portal, lo que llama la atención es el hecho de que casi todos los miembros del gobierno municipal exhiben unas cuentas bancarias dignas de una puta (con perdón) durante la Semana Santa mientras que el ex alcalde Xavier Trias casi parece que debe excusarse por haber trabajado siempre y haber conseguido ahorrar alguna cosilla. O quizás el pobre Trias simplemente es uno de los pocos que sólo paga su verdadera transparencia. 65 LA EPOPEYA COLAUENSE 18.LA OCASIÓN PERDIDA Entre despropósitos, desaciertos y resbalones, llegó el año 2016. Ya habían pasado más de tres meses de las elecciones del 27 de septiembre y la Generalitat de Cataluña todavía seguía sin gobierno. Las negociaciones entre Junts pel Sí y la CUP se habían vuelto una verdadera telenovela por el rechazo expresado por los antisistema hacia Artur Mas. Se acercaba el día en que se habría agotado el plazo para la investidura del nuevo presidente de la Generalitat y unas nuevas elecciones en marzo parecían cada día más probables. El propio Mas había declarado, durante una entrevista, que Junts pel Sí no haría más ofrecimientos a la CUP y, si no se hubiera producido un milagro, el lunes siguiente habría firmado el decreto de convocatoria para que los catalanes volvieran a las urnas. Un acuerdo parecía imposible y ya había quien se estaba frotando las manos: Pablo Iglesias y Ada Colau, con la adrenalina todavía a flor de piel por los resultados alcanzados en las generales, ya se veían de nuevo en campaña electoral e incluso ya celebraban la 66 LA EPOPEYA COLAUENSE conquista de Cataluña. Iglesias lo había declarado expresamente, que Cataluña ya la tenían ganada, y la alcaldesa de Barcelona se mostraba cada día más excitada. Seguramente, la Colau ya tenía previsto volver a montar la pantalla gigante en la plaza Sant Jaume para su investidura, pero esta vez como presidenta del gobierno catalán, y probablemente ya se imaginaba paralizando alegremente la Generalitat como había hecho hasta entonces con el Ayuntamiento. El electorado independentista, en cambio, temblaba de miedo delante de esta posibilidad terrorífica y esperaba con ansia, casi febrilmente, un acuerdo in extremis entre Junts pel Sí y la CUP. Y el acuerdo llegó. Quizá por una gracia de Santa Rita de los milagros imposibles, o quizás gracias a la luna nueva conjunta con Saturno en el signo del Capricornio, aquel 10 de enero regaló un acuerdo épico apto para cambiar el curso de la historia y dibujado alrededor de un presidente de consenso nacido exactamente -parece mentira- bajo el signo de Capricornio. El elegido fue Carles Puigdemont, alcalde convergente de Girona y presidente de la AMI, que al cabo de unas horas ya había enamorado catalanas 67 LA EPOPEYA COLAUENSE y catalanes, e incluso a los cupaires gracias a la cabellera tan parecida a la de Anna Gabriel. "Artur Mas y su partido han tenido miedo a poner las urnas, pero es cuestión de tiempo", amenazó lloriqueando Ada Colau a través de Twitter una vez sabida la buena nueva y haber visto su sueño desvanecerse en el último momento. Y al día siguiente boicoteó el pleno excepcional justamente convocado para investir Puigdemont antes del agotamiento del plazo. La ausencia de la alcaldesa de la capital no pasó desapercibida. Si hubiera sido otra mujer, hubiéramos podido pensar que, de domingo, sin preaviso, puede ser que no hubiese encontrado un peluquero disponible y hubiera preferido quedarse en casa en pijama y albornoz, siguiendo el acto en la televisión en lugar de dejarse ver en versión descuidada. Pero, dado que el peinado no había sido nunca un problema para la alcaldesa y lo fue más, en aquel caso, la noticia del acuerdo alcanzado a última hora, nos la imaginamos rígidamente sentada en el sofá de su casa mientras 68 LA EPOPEYA COLAUENSE se mordisqueaba los puños por la ocasión perdida, con Pablo Iglesias gimiendo al otro lado del teléfono. Preguntada a través de las redes sociales sobre su ausencia descortés, Ada Colau se justificó con un compromiso anterior, compromiso que debía ser personal, ya que, según la página web del Ayuntamiento de Barcelona, la alcaldesa no tenía actos institucionales programados para ese día. Pero un alcalde es un alcalde, así como, según ya había explicado Mariano Rajoy, un plato es un plato y un vaso es un vaso. Ada Colau, por tanto, como alcaldesa de la capital catalana, habría tenido que hacer un esfuerzo y ocultar mejor la desesperación provocada por el logro de aquel acuerdo que evitó nuevas elecciones y la dejó desconsolada en su miserable escaño de alcaldesa de Barcelona. 69 LA EPOPEYA COLAUENSE 19.LA MEMORIA El 19 de enero del año 2016 de Nuestra Señora de Barcelona, Ada Colau se mostró a su pueblo en toda su magnificencia, ofreciendo un simbólico abrazo a sus electores desde las páginas del Vanity Fair, a través de una foto obra maestra de Photoshop, con unos quilitos mágicamente borrados y el pelo, por fin, perfectamente peinado. Aquel mismo día, Barcelona en Común se cargó la memoria histórica de la ciudad y de toda Cataluña llegando a votar -en ocasión de una reunión de la Comisión de Derechos Sociales, Cultura y Deportes- junto con el PP, Ciudadanos y el PSC contra la propuesta de ERC para que el Born CC consolidara y mantuviera la actual línea museística del espacio, centrada en el 1714 e inaugurada en septiembre de 2013 con la celebración del Tricentenario. Un tiempo atrás, se había esparcido la noticia de que el gobierno municipal tenía previsto el cierre de la exposición por una pre- 70 LA EPOPEYA COLAUENSE sunta falta de público –pese a los 1,5 millones de visitantes registrados durante el 2015- y por el hecho de que la exposición misma, inaugurada como temporal con ocasión del Tricentenario, había acabado transformando el centro cultural en un símbolo del independentismo y en un lugar "especial respecto al resto de espacios culturales de la ciudad". El gobierno barcelonés, pues, había manifestado la voluntad de sustituir la exposición por un centro de historia contemporánea. ERC, entonces, había presentado una propuesta para detener este ataque evidente a la memoria histórica de la ciudad, propuesta rechazada por los partidos unionistas del Ayuntamiento, incluida la formación liderada por Ada Colau, que confirmaron que el museo del Born seguiría abierto sólo hasta el marzo siguiente a fin de respetar unos compromisos ya firmados con unas escuelas. A partir del mes de abril, el centro cultural habría acogido otras exposiciones y probablemente ni siquiera habría seguido llamándose Born. Con motivo de las reacciones indignadas de sus conciudadanos y recordando que, tarde o temprano, cada político tiene que volver a pedir votos, la alcaldesa intentó tranquilizar a la población a 71 LA EPOPEYA COLAUENSE través de un tuit con el cual comunicó que "está claro que el Born no se toca". Ada Colau añadió que el Born no se cerraría, ni dejaría de ser referente del 1714, sino que se ampliaría a "más usos para la ciudad". Y por suerte, a mediados de febrero, estableció que el centro sólo cambiaría de nombre para convertirse en "Born Centro de Cultura y Memoria" en lugar de "Born Centro Cultural" y descartó definitivamente la posibilidad -también planteadade cubrir los yacimientos. 72 LA EPOPEYA COLAUENSE 20.LAS PURGAS El mismo día de la polémica sobre el Born, le llovieron otras acusaciones encima al partido liderado por la alcaldesa. Una consejera del distrito de Ciutat Vella, la paquistaní Huma Jamshed, fue despedida por "incumplimientos laborales". Según explicaron desde Barcelona en Común mediante un comunicado, la consejera "no estaba cumpliendo adecuadamente con su trabajo y había perdido la confianza política del resto de consejeros", dificultando "sacar adelante la actividad institucional y de gobierno del distrito "y generando una" sobrecarga de trabajo para el resto de consejeros". Huma Jamshed, por su parte, acusó a sus compañeros de partido de racismo explicando que nunca habían querido integrarla realmente al grupo municipal, no compartían con ella la información y tampoco dejaban que asistiera a las reuniones. Por ello, Jamshed comenzó unas protestas frente a la sede del distrito, incluida una huelga de hambre, y anunció la voluntad de recurrir al juzgado, el Síndic de Greuges, a SOS Racismo e incluso a la 73 LA EPOPEYA COLAUENSE justicia internacional. Según acusó la exconsellera, hacía tiempo que la concejala Gala Pin quería aprovechar su cargo para colocar alguna persona de su "clan de amigos íntimos" y, de hecho, hacía tiempo que le ofrecían cualquier cosa, incluso subvenciones para su asociación cultural, para que dimitiera a pesar de haber ganado unas primarias. Desde el partido se defendieron aclarando que los cargos de consejero de distrito "son designaciones de confianza y no son cargos electos", pero la exconsellera les recordó que, antes de las elecciones municipales, Barcelona en Común había celebrado unas primarias abiertas justamente para elegir a los primeros de sus consejeros, y ella había sido la ganadora en Ciutat Vella gracias también al elevado número de paquistaníes presentes en ese distrito. Con el despido, Huma Jamshed por fin se dio cuenta de que Barcelona en Común se había aprovechado de ella para conseguir el voto de muchos inmigrantes y, por tanto, invitó a la población de origen extranjero a "no votar nunca más a ningún partido". 74 LA EPOPEYA COLAUENSE El 24 de enero, las purgas continuaron y Ada Colau despidió a la directora general de Barcelona Activa, el organismo municipal que trata de incentivar el empleo en la capital. Según fuentes cercanas a la exdirectora, Susana Tintoré habría sido despedida porque, durante una conferencia, habría defendido que las empresas quieran mantener las plantillas por debajo de los 50 trabajadores para no tener que pasar de uno a tres delegados sindicales, como prevé la ley. Parece que el despido habría sido solicitado por la CUP y que Ada Colau lo habría aceptado para asegurarse el apoyo de los tres concejales liderados por José María Lecha. Desde el gobierno municipal, en cambio, defendieron la decisión de despedir a la Tintoré porque, así como la Jamshed, no habría cumplido "con sus deberes". 75 LA EPOPEYA COLAUENSE 21.AMBICIONES Hacia el final de enero, a pesar de la tercera posición conquistada en ocasión de las elecciones generales del 20 de diciembre, Pablo Iglesias anunció en rueda de prensa que reclamaba la vicepresidencia y la mitad de los ministerios del Gobierno, subordinando su apoyo a la investidura del líder del PSOE, Pedro Sánchez, a la aceptación de sus ambiciosas condiciones. Ya lo tenía todo planeado. En su cabeza ya tenía el mapa del nuevo organigrama, con repartición de los ministerios ya existentes e incluso los que le salían fantasiosamente de la boca según la ocasión y según el interlocutor, como el gracioso ministerio de la plurinacionalidad pensado justamente para colocar al cabeza de lista de En Común Podemos, Xavier Domènech, que meses atrás había inspirado también la institución del comisionado de Memoria Histórica del Ayuntamiento de Barcelona, precisamente creado para él por Ada Colau. Pedro Sánchez, a través de su cuenta de Twitter, recordó al líder podemita que España necesitaba soluciones y no sillas, y rechazó 76 LA EPOPEYA COLAUENSE el chantaje, contrariamente a lo que, mientras tanto, estaba pasando en el Ayuntamiento de Barcelona donde la alcaldesa hacía uso de todas sus armas de seducción para persuadir a los partidos de izquierda de la oposición para que entraran al gobierno asegurándole la mayoría absoluta. Ahora bien, así como su aliado en Madrid, tampoco la alcaldesa barcelonesa había ocultado nunca su desmedida ambición personal y el 25 de enero, ella también acompañada por el omnipresente Domènech -inspirador oficial de nuevos cargos a él destinados-, anunció al mundo su ambiciosa intención de refundar la izquierda catalana mediante un proceso que -dijo- culminará en la creación de un nuevo partido desligado de otras formaciones y de las dinámicas actuales de las izquierdas. La alcaldesa de la capital catalana explicó que esto se haría desde "la experiencia" acumulada por Barcelona en Común, que obviamente lideraría el proyecto, y por otras formaciones que habían logrado alcaldías en ocasión de las últimas elecciones municipales. "Hemos abierto un debate en Barcelona en Común desde la experiencia de gobierno que estamos acumulando", dijo la alcaldesa, presumiendo 77 LA EPOPEYA COLAUENSE de resultados y logros que la ciudad de Barcelona todavía estaba esperando, ya que las únicas medidas acertadas por el gobierno municipal hasta entonces -salvo las que constituían continuación del gobierno anterior- habían sido aquellas impulsadas por el grupo municipal de ERC. Xavier Domènech, sin embargo, fue mucho más claro en cuanto a los objetivos de este nuevo partido. "Estamos en condiciones de producir una alternativa de país", declaró sin medias tintas, confirmando que Barcelona ya se había vuelto demasiado pequeña para las ambiciones de su formación. Ada Colau incluso extendió la mano a formaciones de izquierda independentista como las que ya había engatusado antes de las elecciones españolas con el discurso sobre un hipotético referéndum. "Será bienvenido todo el mundo", concluyó la alcaldesa, dejando bien claro que las puertas estarían abiertas sólo para los que habrían reconocido su papel de reina. Aun así, la alcaldesa barcelonesa mostró más cautela que no su socio en el ámbito estatal declarando no tener "ambición de ocupar otros cargos". "En ningún momento me he planteado presentarme para presidir la Generalitat", dijo Ada Colau 78 LA EPOPEYA COLAUENSE en ocasión de una entrevista en Catalunya Radio, exactamente como dos años antes había declarado que no aprovecharía la notoriedad conseguida con la PAH para entrar en política. 79 LA EPOPEYA COLAUENSE 22.RUEDAS "Para mí, la imagen de seguridad de esta ciudad es un chico con monopatín", declaró Ada Colau el 21 de enero de 2016 en ocasión de la inauguración del Foro Español para la Prevención y la Seguridad Urbana. Durante su discurso, la alcaldesa recordó que, un tiempo atrás, había sido amenazada por un hombre en la calle y un chico con monopatín la había salvado de aquella peligrosa situación. Pero, al cabo de una semana, la alcaldesa olvidó la gratitud expresada públicamente hacia las cuatro ruedas y -según informó la prensa- se cargó el World Roller Games, una especie de olimpiadas de los deportes sobre ruedas que, el año siguiente, se habría celebrado en Barcelona si la ciudad hubiera podido contar con un ejecutivo más emprendedor. Pues bien, la Federación Internacional de Deportes sobre Patines, promotora de este evento, comunicó oficialmente que la primera edición de los World Roller Games, que habría tenido que llevarse a cabo en Barcelona, tendría lugar en China -que ya había reservado la segunda edición- 80 LA EPOPEYA COLAUENSE debido al "cambio radical de liderazgo en la alcaldía de Barcelona" que habría provocado la "incapacidad del gobierno municipal de garantizar la óptima organización del evento para el 2017". No está claro si el mismo gobierno municipal, consciente de sus límites, hubiera aceptado o incluso pedido liberarse del compromiso para posponerlo eventualmente al 2019. Por cierto, queda confirmada la tesis de que Ada Colau y el deporte son dos vías paralelas destinadas a no cruzarse nunca. Una lástima, ya que con un par de patines ya no necesitaría coche oficial para desplazarse ni Photoshop para salir en Vanity Fair. 81 LA EPOPEYA COLAUENSE 23.GUIRILANDIA DE LLOBREGAT El 27 de enero, mientras la alcaldesa dedicaba sus esfuerzos neuronales a la incubación del huevo de su nuevo proyecto político, el Ayuntamiento de L'Hospitalet aprovechó la ocasión para firmar un convenio con el Gremio de Hoteles de Barcelona. Como, después de siete meses, la moratoria hotelera decretada por el gobierno Colau -que había paralizado 35 proyectos económicos relacionados con el turismo- todavía estaba en vigor, la alcaldesa de L'Hospitalet, Núria Marín, y el presidente del Gremio de hoteles, Jordi Clos, suscribieron un protocolo en virtud del cual ambas partes se comprometían a promover y desarrollar el crecimiento hotelero de la ciudad y la promoción turística necesaria para asegurar el éxito empresarial de los nuevos proyectos. Las inversiones hoteleras, por lo tanto, decidieron dejar la capital para desplazarse hacia las ciudades del área metropolitana. Por ejemplo, fue justamente en Hospitalet donde la compañía aérea de bajo coste EasyJet decidió adquirir un área para construir un hotel de su cadena, easyHotel. 82 LA EPOPEYA COLAUENSE Todo ello provocó, entre otras consecuencias, la subida de los precios de los hoteles ya existentes en Barcelona, empezando por los establecimientos de lujo, y la pérdida de una cuota de mercado a favor de la ciudad de Madrid. Por tanto, la medida restrictiva adoptada por Ada Colau no sólo perjudicó al sector hotelero, sino también a los visitantes de la ciudad, aunque quizá eran justamente esos a los que la alcaldesa quería tener bien lejos. Y también la categoría de los hoteles de lujo, demasiado elitista para el gobierno municipal de Barcelona en Común, empezó a sufrir los ataques del consistorio. El mismo día del acuerdo entre el Gremio de Hoteles y el Ayuntamiento de Hospitalet, el hotel de cinco estrellas Princesa Sofía anunció el despido de 33 trabajadores debido a la orden del Ayuntamiento para que se cerrara el centro Aqua Diagonal Wellness. Las 33 personas ocupadas en el spa, pues, perdieron su empleo por la imposibilidad por parte del hotel de cumplir los requisitos impuestos por el Ayuntamiento que, siempre tolerante hacia manteros y okupas, en este caso habría detectado unas "irregularidades" en las instalaciones. 83 LA EPOPEYA COLAUENSE 24.LA FIESTA Durante aquel cálido mes de enero de 2016, la ciudad de Barcelona se confirmó como capital de la anarquía, de la libertad absoluta fuera de toda regla, y de la impunidad. Según explicó la página web vice.com y como informó unos días más tarde el diario digital directe!cat, el metro de Barcelona se convirtió en el escenario de una fiesta ilegal a base de música, alcohol, drogas y todo tipo de comportamientos vándalos, con destrucción de mobiliario urbano y graffitis por todas partes. Según las palabras del chico que asistió a la fiesta y que lo relató por Internet, los participantes comenzaron a emborracharse en una plaza cerca de una estación de metro hasta que un grupo de ellos, con un altavoz portátil, decidió bajar hacia los trenes. Los jóvenes se animaron cada vez más, arrastrados por la alegría de la multitud y por el alcohol que les corría por las venas, y comenzaron con los actos vandálicos, como el derribo de una valla a patadas entre gritos de "sí, se puede", dejando todo tipo de rastro a lo largo del camino con total impunidad. Una vez en el metro, 84 LA EPOPEYA COLAUENSE los presentes llenaron de firmas el mobiliario de la estación, hasta que llegó el tren. La manifestación salvaje se desplazó y los vagones se llenaron del desorden ruidoso de la multitud y de la música, entre gritos y golpes a las paredes y al techo hasta otra parada. La fiesta continuó de estación en estación. Los participantes bajaban y subían de los trenes, meando por los pasillos, dañando y ensuciando con graffitis y firmas, incluso tirando latas de cerveza contra los cristales. "Dos chavales estaban haciendo una meada en las vías cuando dos agentes quisieron venir a oprimir al pueblo, ignorando que todos en bloque comenzaríamos a abuchear de manera algo amenazante, como un rebaño de chimpancés en éxtasis pre-asesino," -explicó el narrador con orgullo- "el estado no tiene medios para oprimirnos". La fiesta siguió estación tras estación hasta una plaza donde el alboroto continuó sin que la policía, allí presente pero -parece- ocupada con otras cuestiones, interviniera. Todo el mundo tuvo claro que, cualquier cosa que se quiera emprender, y que no sea una actividad económica, en la Barcelona de Colau "sí, se puede". 85 LA EPOPEYA COLAUENSE 25.EL PAM El 28 de enero de 2016, el primer teniente de alcalde y portavoz del gobierno municipal, brazo derecho y también izquierdo, e incluso piernas de la alcaldesa, Gerardo Pisarello, presentó los ejes principales del Programa de Actuación Municipal (PAM) para el trienio 2016/2019 y lo hizo directamente a la prensa, sin diálogo previo con los grupos de la oposición, incluidos los que hacía semanas que la alcaldesa festejaba para que entraran en el gobierno. Pisarello declaró que el objetivo del programa elaborado por Barcelona en Común consistía en el logro de una ciudad más justa y menos desigual y, para conseguirlo, el gobierno municipal podría contar con un presupuesto de 1.660 millones de euros. Entre las otras medidas, que deberían ser negociadas con el resto de los grupos municipales y con los representantes del mundo económico y social de la ciudad, Pisarello mencionó, por ejemplo, la fijación de un salario mínimo de ciudad -medida constantemente 86 LA EPOPEYA COLAUENSE solicitada por Esquerra Republicana- y el logro de mayores recursos provenientes del turismo a través de un aumento de la cuota de la tasa turística cobrada por el Ayuntamiento o mediante la creación de nuevas tasas. Además, el primer teniente de alcalde destacó la necesidad de medidas ecológicas, imprescindibles para la salud de los barceloneses, también porque "no es casual que en la ciudad no llueva desde hace tres meses". No está claro si estas medidas ecológicas también incluirían el fichaje del arzobispo de la ciudad que, justamente para reclamar la lluvia a su jefe sentado allá arriba, pidió a todos los sacerdotes que rezaran para influir sobre los fenómenos meteorológicos catalanes, invitándolo también a empezar "rogativas con la misma intención" incluidas las famosas danzas de la lluvia. Otro de los objetivos del gobierno municipal, según explicó Pisarello, sería el de incrementar la participación ciudadana en la vida del ayuntamiento -no está claro si colgando post-it de todos colores en las paredes del Ayuntamiento o de qué otra manera- a fin 87 LA EPOPEYA COLAUENSE de contribuir, no se sabe cómo, a eliminar "las prácticas de mal gobierno". Y también la creación de la discutida moneda electrónica -¿colauets o cacahuetes? - Para impulsar la economía cooperativa y el incremento del número de viviendas sociales, a pesar de la multa infligida por la Generalitat al Instituto Metropolitano de Promoción de Suelo y gestión Patrimonial, ente que depende del Área Metropolitana, presidida por Ada Colau, por tener pisos vacíos. Por supuesto, como era previsible y a pesar de las buenas intenciones, el PAM elaborado por el Ejecutivo de Barcelona en Común resultó enseguida vacío de contenidos y de naturaleza principalmente propagandística, como si se tratara de sacar adelante una eterna campaña electoral. Para empezar, según observó el convergente Jordi Martí, el presupuesto de 1.600 millones de euros representó una "apuesta miedosa y poco ambiciosa" para una ciudad como Barcelona mientras que el presidente del grupo municipal de los republicanos, Alfred Bosch, reconoció que "son ideas bonitas", pero sin nada detrás, como "los decorados del Far West". 88 LA EPOPEYA COLAUENSE 26.EL CORTEJO A finales de enero 2016, Ada Colau seguía gobernando en minoría y continuaba festejando a los partidos de izquierda de la oposición con el objetivo de conseguir un pacto de gobierno estable que le permitiera llevar adelante la actividad del consistorio, comenzando por la aprobación de los presupuestos. A pesar de la necesidad de alianzas, sin embargo, la alcaldesa continuaba ignorando a la oposición con respecto a las cuestiones capitales del municipio. Al principio del mes, por ejemplo, sin ningún diálogo previo con los concejales que -decía- hubiera querido a su lado, había presentado a la prensa su Plan de Barrios, expresando el deseo de que republicanos, socialistas y cupaires se arrodillaran frente a ella para consentirle que lo realizara. Y lo mismo había hecho con el PAM. Visto que las cupaires -que no se ofenda Josep Garganté, pero se sabe que la CUP es mujer- parecían quererse mantener al margen de la disputa, el duelo interior de la alcaldesa continuó entre los otros dos objetos de deseo, el republicano Bosch y el socialista Collboni. 89 LA EPOPEYA COLAUENSE Alfred Bosch, que desde el principio había sido el más cortejado entre los miembros de la oposición, ya había aclarado que "para los republicanos la prioridad no es hablar de reparto de sillas, sino ayudar a la ciudad con propuestas" y había lamentado que, a pesar de los intentos de persuasión perpetrados por la alcaldesa, aún no se había entendido cuál era su modelo de ciudad. "Antes de hablar de pactos de gobierno, debemos saber qué ciudad queremos, cómo utilizamos los presupuestos, en los que invertimos, etcétera", había recordado Bosch subrayando la falta de concreción del gobierno municipal. Además, el presidente del grupo municipal de ERC había dejado bien claro desde el principio que nunca habría entrado en un gobierno con el PSC, poniendo a Colau frente a una elección que ninguna mujer quisiera tener que hacer. Jaume Collboni, en cambio, sí que hubiera querido entrar en el gobierno, y se resintió mucho por el rechazo expresado por los republicanos. El socialista tachó de "poco inteligente" el veto levantado por Alfred Bosch y siguió manteniendo un "contacto fluido" con la alcaldesa, ya que -dijo- su deseo habría sido el de 90 LA EPOPEYA COLAUENSE lograr un entendimiento estable y la aprobación de los presupuestos antes de Semana Santa, quizás para poder participar en la procesión pascual como miembro del ejecutivo en lugar de hacerlo como simple postulando. Los otros partidos de la oposición, por su parte, continuaban asistiendo con impotencia a los disparates municipales y a los intentos de constitución de una sacra congregación alrededor de la diosa. En particular, el portavoz del grupo municipal de CiU, Joaquim Forn, lamentó que, a pesar de hablar de "nueva política", Ada Colau buscaba un pacto estable de gobierno mediante la reconstitución de un tripartito que ya había fracasado años atrás e incluso a través de una alianza con el PSC que tanto había criticado durante la campaña electoral como principal responsable del actual modelo de ciudad. Forn criticó también las contradicciones del gobierno Colau que, cada vez, acababa votando lo contrario de lo que anunciaba, como en el caso de las luces de Navidad que la alcaldesa habría querido dejar de subvencionar y para las cuales confirmó la subvención ya prevista de 850.000 euros. 91 LA EPOPEYA COLAUENSE 27.CRÍTICAS PLENARIAS El 29 de enero de 2016 tuvo lugar una sesión ordinaria y extraordinaria del plenario del Consejo Municipal para la que la alcaldesa eligiera la escenografía donde había sido solemnemente coronada unos meses atrás, es decir, la sala de ceremonias del Ayuntamiento. El pleno se volvió a celebrar públicamente en el Saló de Cent para que la ciudadanía pudiera asistir, pero el público desertó del acto y los militantes allí presentes -los únicos asistentessólo fueron testigos de las críticas que, aquel día, llovieron encima de la alcaldesa por todos lados. Aquel viernes, efectivamente, todos los grupos municipales se pusieron de acuerdo sobre el hecho de que el gobierno del consistorio no tuviera ningún proyecto para la ciudad. Para empezar, el exalcalde Trias reclamó más participación, ya que la alcaldesa siempre había presumido de querer introducir un sistema de gobierno participativo, pero desde su investidura había ignorado sistemáticamente a los concejales que no conside- 92 LA EPOPEYA COLAUENSE raba afines. Los presidentes de los grupos municipales de Ciudadanos y del PP, por su parte, subrayaron las carencias del programa de gobierno. "Para redistribuir la riqueza, primero hay que generar las condiciones para crearla", explicó pacientemente Carina Mejías a una alcaldesa aún convencida de la infinidad del universo constituido por las arcas públicas. "Colau ha presentado un PAM con P de parálisis y con E de escaparate, que evidencia que no es consciente de sus responsabilidades", añadió el popular Alberto Fernández Díaz sin (por suerte) aclarar de qué va la "M". Y la acusó de "parar todo" y de ser "incapaz de comenzar nada". "¿Dónde está el cambio? ¡Hace ocho meses que lo esperamos! Lo queremos y lo compartimos, pero no lo acabamos de ver", se quejó el republicano Alfred Bosch. Y tampoco el socialista Jaume Collboni socorrió a su alcaldesa, resentido por no haber visto antes el PAM a pesar de las continuas invitaciones de la Colau para que su partido apoyara la acción de gobierno. Incluso la CUP criticó los primeros meses de gobierno de Barcelona en Común subrayando que "ha habido mucha propaganda triunfalista, pero 93 LA EPOPEYA COLAUENSE ninguna medida que rompa con la vieja política y apunte un cambio en el horizonte" y provocando así un desequilibrio emotivo en la alcaldesa, sorprendida por las duras palabras empleadas por la presidenta del grupo anticapitalista, María José Lecha. Ada Colau pidió comprensión, intentó defenderse alegando no haber fracasado como algunos querían y presumiendo de ser capaz de gobernar la ciudad gracias a la "humildad y entrega" de sus diez concejales, y volvió a pedir limosna de consensos a las fuerzas de izquierda para "alcanzar acuerdos estables". Los concejales pedidos, sin embargo, dejaron claro que no apoyarían a quien sólo intenta sacar adelante sus proyectos políticos personales como, por ejemplo, la campaña electoral para las elecciones generales o la constitución de un nuevo partido con el que presentarse en las próximas elecciones catalanas. 94 LA EPOPEYA COLAUENSE 28.EL SANTO DOMINGO Febrero comenzó con otra perla de la alcaldesa, que quizás pensó que hacía demasiado tiempo que no hacía enfadar a nadie, e ideó otra de sus travesuras. Para asegurarse el perdón divino previo y, sobre todo, para alcanzar la impermeabilidad a las blasfemias de las víctimas, Ada Colau recurrió a la inspiración religiosa heredada el año anterior directamente de la monja Forcades y decidió apelar a las Santas Escrituras. "Dios bendijo el día séptimo y lo santificó, porque en ese día descansó...", debe haber recitado por los pasillos desiertos del Ayuntamiento antes de informar a sus súbditos que los comercios -las odiadas actividades económicas regulares- debían cerrar durante los días festivos en verano. Obviamente –es inútil decirlo-, la medida no habría afectado a los manteros, principalmente musulmanes, y por lo tanto libres de obligaciones bíblicas, que habrían podido ejercer su actividad, con eficacia y eficiencia, también durante los domingos, sin el obstáculo constituido por los comerciantes regulares. 95 LA EPOPEYA COLAUENSE Dos años antes, el gobierno Trias había consentido la apertura festiva de los comercios de las zonas turísticas de Barcelona desde el 1 de julio hasta el 15 de septiembre por un horario de 8 horas entre las diez de la mañana y las seis de la tarde. Ahora bien, el 1 de febrero de 2016 Ada Colau presentó oficialmente a los comerciantes la propuesta para la eliminación de estos diez días de apertura festiva que serían sustituidos por dos domingos en mayo y dos en octubre. Pues bien, en virtud de esta medida, un comerciante del centro que decidiera abrir su tienda durante un domingo del próximo verano lo haría con el riesgo de una sanción municipal. Para justificar su pensamiento, el gobierno de Barcelona en Común citó una encuesta, llevada a cabo no se sabe muy bien cómo, y relató que, durante el verano anterior, sólo un tercio de los comerciantes -principalmente en la Barceloneta y en el Gótico- había aprovechado la facultad de apertura festiva. Según la misma encuesta, el 40% de los comerciantes no estaría de acuerdo con la apertura del domingo (entonces, el 60% sería favorable o indiferente, ¿no?) mientras que, con respecto a los ciudadanos, el 30% 96 LA EPOPEYA COLAUENSE (una minoría) estaría de acuerdo con la prohibición y el 50% incluso vería bien que se abriera cada domingo del año, opción rechazada por el 30% (de nuevo una minoría) de los comerciantes. El concejal de Empleo, Empresa, Comercio y Turismo, Agustí Colom, añadió que la decisión había sido "trabajada y pensada" con entidades de comerciantes, vecinos y sindicatos, afirmación desmentida por algunas asociaciones comerciales. Además del enfrentamiento inevitable con los comerciantes de la ciudad, los horarios comerciales propuestos por Barcelona en Común chocaron también contra el rechazo expresado por los grupos municipales de la oposición (a excepción de la CUP) cansados de la falta de diálogo, de la prepotencia demostrada por la alcaldesa y sobre todo de lo absurdo de sus políticas. Según observó la líder de Ciudadanos en el Ayuntamiento, Carina Mejías, restringir los horarios comerciales de los días festivos durante el verano "lastra la competitividad e impide la creación de empleo" en Barcelona. "Las grandes ciudades europeas compiten para atraer a los turistas y para seducir con una oferta en la 97 LA EPOPEYA COLAUENSE que el comercio juega un papel vital", destacó. De la misma opinión fue el presidente del grupo de los populares, Alberto Fernández, según el cual la eliminación de las aberturas festivas durante el verano "recorta libertades" e incide negativamente en el comercio de la ciudad. Y también los republicanos criticaron el intento de intervenir unilateralmente en un asunto tan delicado para el que -según sugirió muy sabiamente Alfred Bosch- se necesita "un gran acuerdo de ciudad". El republicano pidió al gobierno municipal que dialogara con todas las partes involucradas, es decir, con los comerciantes y también con todos los grupos de la oposición. Algunas asociaciones de comerciantes del centro de Barcelona, por su parte, reclamaron más libertad en cuanto a los horarios y reivindicaron que cada comerciante pudiera decidir libremente sus aperturas, una blasfemia para la alcaldesa, acostumbrada a otorgar este privilegio sólo a los irregulares. Por supuesto, también antes del intento de decretar prohibiciones de estilo cubano, los efectos nocivos de las políticas del gobierno Colau ya se habían manifestado. La prensa, de hecho, ya había 98 LA EPOPEYA COLAUENSE informado de la caída libre del número de aperturas de comercios en Barcelona desde la investidura de Ada Colau. Según había explicado el diario El Mundo, a partir de junio de 2015 sólo 96 licencias se habían solicitado al Ayuntamiento y esta sería la cifra más baja de los últimos años. Por ejemplo, durante el último semestre del gobierno Trias, 152 empresarios habían pedido los permisos necesarios para montar un negocio mientras que, durante el semestre anterior, las solicitudes de licencias habían sido 117. Según el informe municipal citado por el diario, la causa de la reducción del número de nuevas actividades no había dependido únicamente de la reducción de las instancias presentadas, sino también del hecho de que el Ayuntamiento gobernado por Barcelona en Común necesita más tiempo para instruir los procedimientos y para aceptar o denegar los permisos. Continuando la comparación con el año anterior, resulta que durante el segundo semestre de 2015 el consistorio había resuelto un centenar de solicitudes menos respecto a las que se habían resuelto en el año 99 LA EPOPEYA COLAUENSE anterior, cuando todavía gobernaba Trias, es decir, durante el segundo semestre de 2014 el consistorio había resuelto 214 solicitudes de licencia mientras que en el mismo periodo de 2015 (el primer semestre de gobierno Colau) se habían resuelto 117, un 45% menos. 100 LA EPOPEYA COLAUENSE 29.LA FERIA El 3 de febrero, la prensa informó sobre presuntas irregularidades que el Ayuntamiento habría cometido en la adjudicación de la "Feria de Abril 2016" -Feria anual de las tradiciones andaluzas- a la Federación FECAC (Federación de Entidades Culturales Andaluzas en Cataluña) con motivo de la oferta económica más ventajosa. La Fundación FECAC, entidad perdedora de la adjudicación a pesar de haber obtenido mejor puntuación en cuanto al programa cultural y al retorno del beneficio a las entidades andaluzas, pidió la revisión del procedimiento porque tres miembros de Barcelona Servicios Municipales -organismo gestor del espacio donde se celebra la feria- que formaban parte de la mesa de contratación podrían incurrir en incompatibilidades por haber sido implicados en una demanda por la rescisión del contrato relativo a la Feria del año anterior firmado justamente con la Fundación misma. Concretamente, esta entidad pidió que se aclarara si estos tres miembros podrían haber tenido intereses (directos o indirectos) 101 LA EPOPEYA COLAUENSE en el procedimiento, intereses que podrían haber determinado la adjudicación mediante una mayor valoración de la oferta económica respecto a otros criterios. Por otra parte, la misma oferta económica (que alguien definió "desmedida") presentada por la Federación contribuyó a alimentar las sospechas sobre eventuales irregularidades. De hecho, antes de presentar esta oferta, la Federación había lamentado la inviabilidad de la manifestación bajo las condiciones insostenibles impuestas por el gobierno Colau -o bien en cuanto a las condiciones económicas o bien por la reducción del espacio concedido, que el consistorio pretendía reducir hasta la mitad, con la consiguiente reducción del número de atracciones- e incluso había amenazado con trasladar el evento a otro lugar. Además, según denunció la Fundación, la Federación tenía deudas pendientes con la administración pública y, en particular, con el Ayuntamiento de Santa Coloma por la restitución de unas subvenciones indebidas y con la Diputación de Barcelona por un 102 LA EPOPEYA COLAUENSE alquiler impagado desde el 2014. Pues bien, a pesar de la existencia de deudas por unos 60.000 euros, la Federación ofreció 90.000 al Ayuntamiento de Barcelona por el concurso de adjudicación de la feria -despertando dudas sobre "la aparición" del dinero-, e inexplicablemente el Ayuntamiento le dió su confianza aunque ya le había congelado una subvención de 115.000 euros a causa de una investigación judicial en curso por presunto desvío de beneficios. El tiempo dirá... 103 LA EPOPEYA COLAUENSE 30.EL TALÈFUNU Durante la campaña electoral para las elecciones municipales y con motivo de una larga huelga de los trabajadores de Telefónica, Ada Colau había prometido que, cuando se convirtiera en alcaldesa, pararía el contrato del Ayuntamiento con la multinacional y no firmaría ningún otro si la empresa no aceptaba negociar con los huelguistas. La compañía Telefónica, de hecho, resultaba adjudicataria de dos lotes del concurso de telecomunicaciones de 2013 y había firmado un contrato con el Ayuntamiento por dos años, prorrogables a dos más mediante dos prórrogas de un año cada una. Cuando se acababan de celebrar las elecciones municipales, durante las dos semanas en que Xavier Trias hacía de alcalde en funciones, Ada Colau había exigido públicamente que éste no firmara la prórroga del contrato con Telefónica que caducaba justo entonces porque -había dicho- había que incluir cláusulas sociales que garantizaran los derechos de los trabajadores. Trias, que es todo un señor, se había conformado a pesar de saber que, 104 LA EPOPEYA COLAUENSE entonces, la prórroga era la única vía, y la Colau lo había celebrado como una "victoria" con los huelguistas de la multinacional, entre cava y chillidos de "sí, se puede". Un mes después, sin embargo, la misma Colau había olvidado a los huelguistas y había firmado la prórroga que había vetado a Trias. Seis meses en lugar de un año, pero el contrato había sido prorrogado. Ahora bien, el 4 de febrero de 2016, Ada Colau prorrogó de nuevo la adjudicación a Telefónica hasta la misma fecha (31 de julio) y por la misma cifra (3,2 millones de euros) por las que también Xavier Trias estaba a punto de firmar, con la única diferencia de que el contrato anual, como ya he explicado arriba, fue repartido en dos semestrales por 1,6 millones de euros cada uno. Por tanto, el Ayuntamiento de Barcelona y sus empresas asociadas continuaron con los servicios de telefonía fija y de acceso a Internet erogados por la multinacional hasta entonces duramente criticada. Una vez conquistado el escaño de alcaldesa, pues, Ada Colau había descubierto que hay cosas que no pueden hacerse de manera diferente y, durante una entrevista en Catalunya Ràdio, se justificó apelando a la "maquinaria burocrática y a las 105 LA EPOPEYA COLAUENSE reglas de la contratación, que no dependen sólo del Ayuntamiento, sino también de la Unión Europea". Ada Colau dio cuenta de que incluso una alcaldesa no tiene todo el margen que quisiera a la hora de poner las cláusulas de los contratos y comunicó que, más adelante, habría habido "grandes contratos que tampoco los puede hacer cualquiera, debe ser una gran compañía que tenga capacidad de dar servicio a todo el Ayuntamiento de Barcelona". Y también, por último, quizás Ada Colau entendió que tampoco Xavier Trias, durante su mandato, tenía todo el margen que hubiera querido, y él también tenía que enfrentarse a la "maquinaria burocrática" y a las "reglas de la contratación", sin necesariamente ser mafioso o corrupto, como se le acusaba durante la campaña electoral. 106 LA EPOPEYA COLAUENSE 31.CORONAS Y CORONELA El 7 de febrero de 2016, el gobierno municipal presidido por Ada Colau siguió con su obra de cancelación de la memoria histórica de la ciudad. Concretamente, el concejal de Derechos de Ciudadanía, Participación y Transparencia, Jaume Asens, negó que la asociación La Coronela de Barcelona participara en el cambio de guardia durante la jornada de puertas abiertas del Ayuntamiento con ocasión de la fiesta de Santa Eulalia, patrona de la ciudad. La asociación La Coronela había sido constituida con el objetivo de hacer revivir y honrar, a través de la recreación histórica de los hechos, los milicianos que defendieron Barcelona durante la guerra de sucesión, hasta el 11 de septiembre de 1714. La asociación, por lo tanto, participa en eventos de reconstrucción histórica como la jornada de Santa Eulalia, de la que había formado parte de manera totalmente gratuita en los últimos tres años. En febrero de 2016, sin embargo, el número tres del gobierno municipal rechazó la participación de la asociación, ya que -según su opinión, ya expresada también en relación a la cuestión 107 LA EPOPEYA COLAUENSE "Born"- la conmemoración del Tricentenario ya se había acabado y, por tanto, nada de coronas y coroneles. La única reina coronada de la ciudad ya no admitía competidores y los barceloneses tendrían que conformarse con una "programación alternativa de espectáculos infantiles para la jornada de este año". La asociación, obviamente, criticó duramente la decisión del consistorio, culpable de gastar dinero público en lugar de aprovechar las manifestaciones gratuitas y totalmente desinteresadas de los ciudadanos, pero el veredicto ya había sido emitido y los pobres miembros de la antigua milicia urbana tuvieron que volver a guardar las armas, a la espera de un alcalde más amante de la historia. En cuanto al responsable del rechazo, en cambio, todos los grupos de la oposición lamentaron las reiteradas ausencias (ocho ausencias consecutivas, parece) de Jaume Asens a la comisión de Derechos Sociales, Cultura y Deportes del Ayuntamiento. "Si le da pereza, que lo deje," -afirmó Jaume Ciurana, concejal de CiU, que reclamó su dimisión- "es una cuestión de respeto institucional y personal". 108 LA EPOPEYA COLAUENSE 32.CONFESIONES Según confesó coquetamente Ada Colau, el nuevo presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, "es una persona mucho más accesible que Artur Mas". Lo declaró el 8 de febrero en ocasión de la entrevista en "La mañana de Cataluña Radio", expresando su satisfacción por el encuentro del jueves anterior con el presidente, reunión durante la cual los dos representantes de las máximas instituciones catalanas habían alcanzado un acuerdo político sobre la segunda fase de construcción de la línea de metro hasta la Zona Franca. Preguntada por Mónica Terribas sobre los motivos de esta predilección, Ada Colau expuso su hipótesis que "tal vez depende del contexto y de las circunstancias", ya que -dijo- había conocido Mas cuando "este estaba en un momento muy complicado, de cansancio y de crispación". La alcaldesa de la capital catalana, pero, omitió recordar que, durante los meses de la campaña electoral para las elecciones municipales, más de una vez había tachado al entonces presidente de la Generalitat de mafioso y de 109 LA EPOPEYA COLAUENSE corrupto, sin ninguna investigación a su cargo ni ninguna sentencia judicial que lo confirmara. Quizás esperaba que, una vez convertida en alcaldesa, Mas olvidaría los insultos y las falsas acusaciones y le pondría la alfombra roja. Pero las palabras no se borran tan fácilmente y entonces, tal vez, la razón por la que Artur Mas, con la Colau, es una "persona menos accesible" que el nuevo presidente no es tan misteriosa y sólo confirma que, en la vida, tarde o temprano, todo se acaba pagando. 110 LA EPOPEYA COLAUENSE 33.LA HUELGA Durante la huelga organizada durante la primavera de 2015 por los trabajadores de Telefónica, el juez había ordenado el desalojo de los huelguistas que habían ocupado la sede de la empresa en la plaza de Cataluña. Ada Colau, que acababa de ganar las elecciones pero todavía no había sido investida como nueva alcaldesa de la ciudad, había declarado que "es inaceptable que Telefónica esté hablando de desalojo y que se niegue a negociar", recordando que los trabajadores estaban en huelga "para mejorar sus condiciones". Y "para mejorar sus condiciones" comenzaron a protestar también los trabajadores del metro de TMB. Dado que hacía cuatro años que tenían el sueldo congelado, comenzaron a reclamar que se renegociara el convenio colectivo y convocaron una huelga coincidiendo con el inicio del Mobile World Congress, a finales del mes de febrero. Durante la entrevista radiofónica del 8 de febrero, Ada Colau que ese día batió el récord de desaciertos- declaró que consideraba "incompatible" negociar con los trabajadores de TMB si 111 LA EPOPEYA COLAUENSE mantenían la huelga convocada para la semana del Mobile World Congress, subordinó las negociaciones a que la huelga fuera desconvocada y lamentó que se hubiera utilizado directamente esta forma de protesta en lugar de pasar previamente por una mesa de negociación. Las concejalas de la CUP hicieron notar a la alcaldesa que sus palabras eran poco dignas de una exactivista, le recordaron que la huelga es el instrumento que la ley pone al alcance del trabajador para poder reclamar mejores condiciones laborales y la invitaron a recordar los tiempos de la PAH, cuando ocupaba las entidades bancarias para luchar contra los desahucios y los bancos subordinaban las contrataciones al desalojo de los locales ocupados. Ada Colau, sin embargo, ya viajaba por otros mundos, ya ocupaba otro espacio sideral. El viernes anterior a la inauguración del MWC, la alcaldesa se implicó personalmente en las negociaciones entre Ayuntamiento y trabajadores, presumiendo de su capacidad de gestionarlas con éxito positivo, y fracasó clamorosamente. Su vocecita dulce no convenció a los rudos conductores que se levantaron de la mesa de negociación y confirmaron la huelga: el metro no circularía 112 LA EPOPEYA COLAUENSE durante los días 22 y 24 de febrero, y los autobuses no lo harían los días 23 y 25, dos horas por turno, con un 20% de servicios mínimos asegurados. La Colau y su fiel Pisy, por fin conscientes del hecho que también el dinero de las arcas públicas se acaba, intentaron explicar filosóficamente que TMB tiene una capacidad presupuestaria limitada, ya que se trata de una empresa pública, y un aumento de sueldo superior al 1% hubiera podido conllevar una subida de las tarifas. "Si hay huelga, la ciudad está preparada para asumir esta situación", afirmó Pisarello, intentando tranquilizar a sus conciudadanos, y pidió a las asociaciones de taxistas que reforzaran su flota para resolver la patata caliente de las huelgas de metro y autobuses. Instancia rechazada. Los taxistas volvieron la patata al remitente e incluso amenazaron a la alcaldesa que, si seguía con sus pretensiones, ellos también habrían organizado alguna protesta, como bloqueos o marcha lenta. Ada Colau empezó a perder la paciencia... 113 LA EPOPEYA COLAUENSE 34.LA PATATA Mientras los barceloneses asistían impotentes al rebote de la patata caliente de la huelga de metro entre las partes interesadas, otra patata seguía incendiando los ánimos de los ciudadanos y Ada Colau casi ganó un lugar en el Libro Guinness de los Récords consiguiendo atraer incluso la ira de la iglesia católica. Todo había comenzado el 15 de febrero de 2016, durante la entrega de los premios Ciudad de Barcelona,cuando el presidente del grupo municipal del PP, Alberto Fernández Díaz, había marchado indignado del Salón de Cent con motivo de un poema redactado como una oración, una especie de Padre Nuestro "personalizado" y dedicado a... ¡la patata! El popular había acusado a la alcaldesa de "confundir la libertad de expresión con el derecho a la ofensa y el insulto con la creatividad", dando el disparo de salida de una polémica que llegó hasta los vértices de la iglesia católica barcelonesa. A partir de ese día desgraciado, creyentes y clérigos comenzaron a llamar a la blasfemia, organizando manifestaciones por todas 114 LA EPOPEYA COLAUENSE partes para reclamar el respeto hacia su sentimiento religioso. Ada Colau intentó defender la libertad de expresión y también la sacralidad de la patata en un mundo tan machista y patriarcal como el nuestro, pero empeoró la situación, yendo a chocar contra obispos, arzobispos y toda la jerarquía católica, ofendiendo más aún a sus conciudadanos que reclamaron el mismo respeto reservado a los musulmanes, y añadiendo otro récord a su álbum ya lleno a reventar. Por solidaridad entre colegas, también la alcaldesa podemita de Madrid, Manuela Carmena, quiso celebrar la potencia femenina y autorizó una exposición de patatas -bautizada "GenitArte" y organizada por la tal Fundación Sexpol- en un centro social de su ciudad. La exposición, sin embargo, no duró muchos días y los ciudadanos lograron su cierre antes de que encendiera demasiado los ánimos de los madrileños. Nueva política... 115 LA EPOPEYA COLAUENSE 35.LOS OKUPAS El 12 de febrero, el grupo municipal de CiU había pedido a la alcaldesa que detuviera un "macroconcierto" de música punk que se estaba organizando en un edificio municipal del Eixample, conocido con el nombre de Transformadores, que el exalcalde Trias quería destinar a equipamientos para la tercera edad después de años de desuso. El edificio estaba ocupado ilegalmente desde hacía unos meses y, según había denunciado la concejala Francina Vila, los okupas -un grupo anarquista- habían convocado grupos punk provenientes de toda Europa para celebrar un concierto sin licencia municipal, sin el respeto de ninguna norma en materia de seguridad y de ruido, e incluso haciendo pagar un billete para asistir. Ahora bien, no sólo el Ayuntamiento no paró aquel concierto, sino que también, una semana después, según denunció el grupo municipal de los populares, pagó la factura de la electricidad del edificio ilegalmente ocupado. El gobierno presidido por Ada Colau, en lugar de desalojar a los ocupantes ilegales de un edificio 116 LA EPOPEYA COLAUENSE público, habría cargado a las arcas municipales una factura de 2.705 euros de electricidad por 4 meses. "Ya no se trata de que los okupas no pagan la electricidad porque se conectan al alumbrado público, ahora hay una nueva modalidad, es el mismo Ayuntamiento que les paga las facturas", denunció Alberto Fernández Díaz, quizá olvidando el pasado de okupa de la misma alcaldesa que, según informaba la prensa antes de que ganara las elecciones, una decena de años antes de su candidatura había ocupado ilegalmente un antiguo cuartel de la Guardia Civil en el barrio de la Barceloneta. Quién sabe si Xavier Trias, entonces, le pagaba la factura de la electricidad. Muy poco probable, por suerte. 117 LA EPOPEYA COLAUENSE EPÍLOGO Ada Colau ha demostrado ser un filón, un yacimiento interminable de anécdotas, las llamadas "colauadas", tan surrealistas que incluso llevaron a la acuñación de una nueva palabra que se podría proponer al Instituto de Estudios Catalanes entre los neologismos más representativos del 2016. ¿Vosotros creéis que será fácil la tarea de hacer fastidiar a todo el mundo? Pues no lo es y, sólo por eso, la alcaldesa merecería un Nobel. Por cierto, con el fracaso de las negociaciones con los trabajadores de TMB, los barceloneses entendieron que su heroína con el uniforme amarillo había desaparecido irremediablemente para dejar espacio a una nueva representante de la casta contra la que originariamente parecía querer luchar. Quizás todavía no ha desenvainado la varita mágica que presumía de poseer y sólo hay que esperar. "La paciencia es la fuerza del débil y la impaciencia, la debilidad del fuerte", decía Kant. Entonces, armémonos de paciencia y esperemos... 118 LA EPOPEYA COLAUENSE AGRADECIMIENTOS Gracias a mi socio, que siempre dice que sí a mis ideas más locas, a mi secretario por la paciente revisión de los borradores -debe ser frustrante discutir conmigo, tozuda como una mula- y a mis agentes secretos, mis ojos en Barcelona; gracias a mi maestro de estrategia y diplomacia a quien debo la gran parte de mi vocabulario; y gracias infinitas a la Reina de la Ciudad Condal, fuente permanente de inspiración, sin la cual esta Epopeya no existiría. 119 LA EPOPEYA COLAUENSE LA EPOPEYA COLAUENSE STELLA FIRINU Crónica semiseria de los primeros meses del gobierno municipal barcelonés presidido por Ada Colau, entre resbalones y desaciertos, pero siempre con el convencimiento de que, cualquier papel que quieras interpretar -que no sea el de Angelina Jolie, claro-, hace que tengas que levantar la varita y gritar "¡sí, se puede!" y así todos tus sueños se convertirán en realidad. 120