060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 1 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE ATLETISMO Generalidades, biomecánica, lesiones y tratamiento en carreras de velocidad y carreras de resistencia Juan Manuel Alonso Martín, Pedro A. Galilea, Susana Regüela Sáez, Martín Rueda Sánchez, Saioa Segura Alcaide, Andreu Arquer Porcell, Alejandro Codina Trenzano, Luis González Molina, David López Capapé, Christophe Ramírez Parenteau, Josefina Espejo Colmenero, Alejandro Galán Rafael, Fernando García Herbera, Jorge González Solís, Isabel Arbonés Segador, Julieta París Cristóbal Coordinador: Dr. Ramón Olivé Vilás 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 2 Coordinador Dr. Olivé Vilás. • Jefe del Servicio de Medicina del Deporte, Consorcio Sanitario de Terrassa • Jefe de la Unidad de Salud CAR de Sant Cugat • Miembro de la Comisión Médica del Comité Olímpico Español (C.O.E.) • Máster Alto Rendimiento (C.O.E.) ATLETISMO Juan Manuel Alonso Martín • Licenciado en Medicina y Cirugía • Especialista en Medicina del deporte • Director Servicios Médicos Real Federación Española de Atletismo • Presidente de la Comisión Médica y Anti-dopaje de la IAAF • Miembro de la Comisión Médica del COE • Máster en Traumatología del Deporte Pedro • • • • A. Galilea Licenciado en Medicina y Cirugía Médico del Servicio de Fisiología del CAR de Sant Cugat Especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte Miembro ACSM Susana Regüela Sáez • Licenciada en Psicología • Psicóloga en el Servicio de Atención al Deportista del CAR de Sant Cugat Martín Rueda Sánchez • Diplomado en Podología • Miembro de la Asociación Española de Podología Deportiva (AEPODE) • Miembro de la Sociedad Española de Ortopodología y Biomecánica (SEIBOR) • Director Centre d´Estudis del Peu • Podólogo en el CAR de Sant Cugat • Colaborador RFEA Saioa Segura Alcaide • Diplomada en Nutrición Humana y Dietética • Nutricionista del CAR de Sant Cugat • Postgrado Oficial de Actividad Física y Salud Andreu Arquer Porcell • Doctor en Medicina y Cirugía • Especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte • Especialista en Medicina del Trabajo • Adjunto de los Servicios Médicos de la Real Federación Española de Atletismo del CAR de Sant Cugat • Médico Acupuntor y médico Homeópata Alejandro Codina Trenzano • Licenciado en Educación Física y Deportes • Entrenador Nacional de Atletismo • Entrenador del núcleo de velocidad de la RFEA del CAR de Sant Cugat • Entrenador Adjunto del sector de velocidad del comité técnico de la RFEA 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 2 Coordinador Dr. Olivé Vilás. • Jefe del Servicio de Medicina del Deporte, Consorcio Sanitario de Terrassa • Jefe de la Unidad de Salud CAR de Sant Cugat • Miembro de la Comisión Médica del Comité Olímpico Español (C.O.E.) • Máster Alto Rendimiento (C.O.E.) ATLETISMO Juan Manuel Alonso Martín • Licenciado en Medicina y Cirugía • Especialista en Medicina del deporte • Director Servicios Médicos Real Federación Española de Atletismo • Presidente de la Comisión Médica y Anti-dopaje de la IAAF • Miembro de la Comisión Médica del COE • Máster en Traumatología del Deporte Pedro • • • • A. Galilea Licenciado en Medicina y Cirugía Médico del Servicio de Fisiología del CAR de Sant Cugat Especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte Miembro ACSM Susana Regüela Sáez • Licenciada en Psicología • Psicóloga en el Servicio de Atención al Deportista del CAR de Sant Cugat Martín Rueda Sánchez • Diplomado en Podología • Miembro de la Asociación Española de Podología Deportiva (AEPODE) • Miembro de la Sociedad Española de Ortopodología y Biomecánica (SEIBOR) • Director Centre d´Estudis del Peu • Podólogo en el CAR de Sant Cugat • Colaborador RFEA Saioa Segura Alcaide • Diplomada en Nutrición Humana y Dietética • Nutricionista del CAR de Sant Cugat • Postgrado Oficial de Actividad Física y Salud Andreu Arquer Porcell • Doctor en Medicina y Cirugía • Especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte • Especialista en Medicina del Trabajo • Adjunto de los Servicios Médicos de la Real Federación Española de Atletismo del CAR de Sant Cugat • Médico Acupuntor y médico Homeópata Alejandro Codina Trenzano • Licenciado en Educación Física y Deportes • Entrenador Nacional de Atletismo • Entrenador del núcleo de velocidad de la RFEA del CAR de Sant Cugat • Entrenador Adjunto del sector de velocidad del comité técnico de la RFEA 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 4 Luis González Molina • Licenciado en Educación Física y Deportes • Entrenador Nacional de Atletismo • Entrenador del núcleo de vallas de la RFEA en el CAR de Sant Cugat • Entrenador Adjunto del sector de vallas del comité técnico de la RFEA David López Capapé • Licenciado en Medicina y Cirugía • Especialista en Cirugía Ortopédica y Traumatología Clínica CEMTRO (Madrid) • Consultor de los Servicios Médicos de la RFEA Christophe Ramírez Parenteau • Licenciado en Medicina y Cirugía • Especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte • Médico Adjunto de la Real Federación Española de Atletismo Josefina Espejo Colmenero • Licenciada en Medicina y Cirugía General • Médico colaborador Servicio Médico RFEA • Especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte • Master oficial Traumatología del deporte • Médico del Servicio Médico del Comité Paraolímpico Español Alejandro Galán Rafael • Diplomado en Fisioterapia • Especialista en Osteopatía y Fisioterapia Deportiva • Fisioterapeuta de la Real Federación Española de Atletismo • Director del Centro de Fisioterapia Dehesa de La Villa en Madrid Fernando García Herbera • Técnico Superior Deportivo en Atletismo • Adjunto del responsable nacional de fondo RFEA para pista y carretera • Especialista en medio fondo y fondo Introducción El atletismo es el deporte más elemental que existe. Sus distintas especialidades se basan en los movimientos más naturales del ser humano: correr, saltar, lanzar. Por ello, ya en las Olimpiadas de la Antigua Grecia aparecieron entre las pruebas que allí se disputaban, varias que podrían considerarse como las precursoras de las que hay ahora en las competiciones modernas de atletismo. Han ido creciendo en número y variando sus reglamentos y condiciones técnicas, sobre todo en lo que se refiere a los concursos. Estos son lo que los anglosajones llaman “pruebas de campo” para diferenciarlas de las carreras que se hacen en la pista oval. En los saltos horizontales se comenzaron haciendo sin impulso (carrera previa). En el salto de pértiga, ésta ha cambiado de consistencia a lo largo de los años (así como las zonas de caída) y en la altura pasamos por distintos estilos con “a tijera”, rodillo ventral o lateral y finalmente fosbury. En los lanzamientos, se cambió el peso de los artefactos o el centro de gravedad (jabalina), los estilos de impulsar el peso (frontal o giratorio) y cuando las mujeres comenzaron a competir, se rebajaron todos en su peso, para facilitarles la impulsión. En las carreras, también ha habido innovaciones, fundamentalmente en añadir distancias y en la superficie de las pistas, que han pasado por muchos tipos hasta llegar a las sintéticas, lo que ocasionó cambios en las formas de salir en velocidad (haciendo hoyos o con tacos de salida) o de los tipos de zapatillas de correr empleadas. Todas estas variaciones, han influido sobremanera en la forma de afrontar, técnicamente y en los sistemas de entrenamiento, a las personas que quieren dedicarse de manera seria a este deporte, tan básico pero tan espectacular y estético, que es el atletismo. Sigue siendo el deporte olímpico por excelencia y aunque los récords del mundo cada vez son más difíciles de batir, algunos siguen cayendo, como Bolt, Gebreselassie o Isinbayeba, por citar algunos. Jorge González Solís • Licenciado en Medicina y Cirugía • Servicios Médicos RFEA • Director Servicios Médicos RFEJYDA • Especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte Isabel Arbonés Segador • Diplomada en Fisioterapia • Fisioterapeuta de la Real Federación Española de Atletismo • Especialista en Medicina China • Osteópata Julieta París Cristóbal • Licenciada en Psicología • Master Universitario en Psicología de la Actividad Física y del Deporte • Psicóloga colaboradora de la RFEA desde 2003 José Mª Odriozola Presidente de la Real Federación Española de Atletismo y Vicepresidente de la IAAF 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 4 Luis González Molina • Licenciado en Educación Física y Deportes • Entrenador Nacional de Atletismo • Entrenador del núcleo de vallas de la RFEA en el CAR de Sant Cugat • Entrenador Adjunto del sector de vallas del comité técnico de la RFEA David López Capapé • Licenciado en Medicina y Cirugía • Especialista en Cirugía Ortopédica y Traumatología Clínica CEMTRO (Madrid) • Consultor de los Servicios Médicos de la RFEA Christophe Ramírez Parenteau • Licenciado en Medicina y Cirugía • Especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte • Médico Adjunto de la Real Federación Española de Atletismo Josefina Espejo Colmenero • Licenciada en Medicina y Cirugía General • Médico colaborador Servicio Médico RFEA • Especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte • Master oficial Traumatología del deporte • Médico del Servicio Médico del Comité Paraolímpico Español Alejandro Galán Rafael • Diplomado en Fisioterapia • Especialista en Osteopatía y Fisioterapia Deportiva • Fisioterapeuta de la Real Federación Española de Atletismo • Director del Centro de Fisioterapia Dehesa de La Villa en Madrid Fernando García Herbera • Técnico Superior Deportivo en Atletismo • Adjunto del responsable nacional de fondo RFEA para pista y carretera • Especialista en medio fondo y fondo Introducción El atletismo es el deporte más elemental que existe. Sus distintas especialidades se basan en los movimientos más naturales del ser humano: correr, saltar, lanzar. Por ello, ya en las Olimpiadas de la Antigua Grecia aparecieron entre las pruebas que allí se disputaban, varias que podrían considerarse como las precursoras de las que hay ahora en las competiciones modernas de atletismo. Han ido creciendo en número y variando sus reglamentos y condiciones técnicas, sobre todo en lo que se refiere a los concursos. Estos son lo que los anglosajones llaman “pruebas de campo” para diferenciarlas de las carreras que se hacen en la pista oval. En los saltos horizontales se comenzaron haciendo sin impulso (carrera previa). En el salto de pértiga, ésta ha cambiado de consistencia a lo largo de los años (así como las zonas de caída) y en la altura pasamos por distintos estilos con “a tijera”, rodillo ventral o lateral y finalmente fosbury. En los lanzamientos, se cambió el peso de los artefactos o el centro de gravedad (jabalina), los estilos de impulsar el peso (frontal o giratorio) y cuando las mujeres comenzaron a competir, se rebajaron todos en su peso, para facilitarles la impulsión. En las carreras, también ha habido innovaciones, fundamentalmente en añadir distancias y en la superficie de las pistas, que han pasado por muchos tipos hasta llegar a las sintéticas, lo que ocasionó cambios en las formas de salir en velocidad (haciendo hoyos o con tacos de salida) o de los tipos de zapatillas de correr empleadas. Todas estas variaciones, han influido sobremanera en la forma de afrontar, técnicamente y en los sistemas de entrenamiento, a las personas que quieren dedicarse de manera seria a este deporte, tan básico pero tan espectacular y estético, que es el atletismo. Sigue siendo el deporte olímpico por excelencia y aunque los récords del mundo cada vez son más difíciles de batir, algunos siguen cayendo, como Bolt, Gebreselassie o Isinbayeba, por citar algunos. Jorge González Solís • Licenciado en Medicina y Cirugía • Servicios Médicos RFEA • Director Servicios Médicos RFEJYDA • Especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte Isabel Arbonés Segador • Diplomada en Fisioterapia • Fisioterapeuta de la Real Federación Española de Atletismo • Especialista en Medicina China • Osteópata Julieta París Cristóbal • Licenciada en Psicología • Master Universitario en Psicología de la Actividad Física y del Deporte • Psicóloga colaboradora de la RFEA desde 2003 José Mª Odriozola Presidente de la Real Federación Española de Atletismo y Vicepresidente de la IAAF 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 6 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE ATLETISMO Índice MEDICINA EN ATLETISMO: GENERALIDADES 1. ANTECEDENTES HISTÓRICOS DEL ATLETISMO 8 Dr. Juan Manuel Alonso Martín 2. CARACTERÍSTICAS ANTROPOMÉTRICAS Y FISIOLÓGICAS EN ATLETISMO 11 Dr. Pedro A. Galilea 3. NECESIDADES PSICOLÓGICAS EN ATLETISMO 16 Susana Regüela Sáez 4. VISIÓN PODOLÓGICA DE LOS APOYOS EN ATLETISMO 19 Martín Rueda Sánchez 5. NUTRICIÓN/SUPLEMENTACIÓN EN EL ATLETISMO 21 Saioa Segura Alcaide 6. EPIDEMIOLOGÍA DE LAS LESIONES EN EL ATLETISMO 25 Dr. Juan Manuel Alonso Martín 7. MEDIDAS PREVENTIVAS EN EL ATLETISMO 30 Dr. Andreu Arquer Porcell CARRERAS DE VELOCIDAD (LISOS Y VALLAS)l 8. BIOMECÁNICA Y BASES DEL ENTRENAMIENTO 34 Alejandro Codina Trenzano Luis González Molina 9. LESIONES ESPECÍFICAS Y TRATAMIENTO MÉDICO-QUIRÚRGICO 43 Dr. David López Capapé Dr. Christophe Ramírez Parenteau Dra. Josefina Espejo Colmenero 10. TRATAMIENTO FISIOTERAPÉUTICO 55 Alejandro Galán Rafael CARRERAS DE RESISTENCIA (MEDIO FONDO, FONDO, MARATÓN, CROSS) 11. BIOMECÁNICA Y BASES DEL ENTRENAMIENTO 62 Fernando García Herbera 12. LESIONES ESPECÍFICAS Y TRATAMIENTO MÉDICO-QUIRÚRGICO 66 Dr. Christophe Ramírez Parenteau Dr. David López Capapé Dr. Jorge González Solís 13. TRATAMIENTO FISIOTERAPÉUTICO Isabel Arbonés Segador 79 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 6 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE ATLETISMO Índice MEDICINA EN ATLETISMO: GENERALIDADES 1. ANTECEDENTES HISTÓRICOS DEL ATLETISMO 8 Dr. Juan Manuel Alonso Martín 2. CARACTERÍSTICAS ANTROPOMÉTRICAS Y FISIOLÓGICAS EN ATLETISMO 11 Dr. Pedro A. Galilea 3. NECESIDADES PSICOLÓGICAS EN ATLETISMO 16 Susana Regüela Sáez 4. VISIÓN PODOLÓGICA DE LOS APOYOS EN ATLETISMO 19 Martín Rueda Sánchez 5. NUTRICIÓN/SUPLEMENTACIÓN EN EL ATLETISMO 21 Saioa Segura Alcaide 6. EPIDEMIOLOGÍA DE LAS LESIONES EN EL ATLETISMO 25 Dr. Juan Manuel Alonso Martín 7. MEDIDAS PREVENTIVAS EN EL ATLETISMO 30 Dr. Andreu Arquer Porcell CARRERAS DE VELOCIDAD (LISOS Y VALLAS)l 8. BIOMECÁNICA Y BASES DEL ENTRENAMIENTO 34 Alejandro Codina Trenzano Luis González Molina 9. LESIONES ESPECÍFICAS Y TRATAMIENTO MÉDICO-QUIRÚRGICO 43 Dr. David López Capapé Dr. Christophe Ramírez Parenteau Dra. Josefina Espejo Colmenero 10. TRATAMIENTO FISIOTERAPÉUTICO 55 Alejandro Galán Rafael CARRERAS DE RESISTENCIA (MEDIO FONDO, FONDO, MARATÓN, CROSS) 11. BIOMECÁNICA Y BASES DEL ENTRENAMIENTO 62 Fernando García Herbera 12. LESIONES ESPECÍFICAS Y TRATAMIENTO MÉDICO-QUIRÚRGICO 66 Dr. Christophe Ramírez Parenteau Dr. David López Capapé Dr. Jorge González Solís 13. TRATAMIENTO FISIOTERAPÉUTICO Isabel Arbonés Segador 79 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 8 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades ANTECEDENTES HISTÓRICOS DEL ATLETISMO Se puede afirmar que el atletismo es el primero de los deportes practicado por la humanidad. Las pistas más antiguas de que disponemos sobre la actividad atlética se remontan al año 3.500 antes de Jesucristo (a. J.C.); los bajorrelieves egipcios representan a hombres efectuando ejercicios de carrera, de salto, así como la natación y la equitación. La carrera, en este periodo egipcio, conocía ya un desarrollo real. En el país de los faraones, los señores utilizaban un hombre armado de un bastón que precedía las carrozas, gritando la calidad de sus amos, para hacer despejar el camino. Años más tarde en Japón, se creó una institución similar, los “djinrishki”, tiradores de carrozas que hacían gala de una resistencia a toda prueba. El atavismo de estos corredores de fondo conoce hoy sus prolongaciones en los maratonianos japoneses y etíopes. El atletismo ha existido igualmente, en un estado natural, entre los pueblos nómadas del Asia Central: kirguisos, bechkires y turkmenos organizaban juegos mortuorios en memoria de ancestros legendarios que incluían pruebas de carreras, de tiro al arco y de lanzamientos. La parte dedicada a los ejercicios físicos, y particularmente al atletismo, en la vida griega, fue inmensa. Los griegos se jactaban de ello de buena gana, estimando que la gimnasia establecía una diferencia fundamental entre ellos y las naciones bárbaras que no se ejercitaban de una manera metódica, racional y total. Desde el Siglo XV antes de nuestra era, los Cretenses tomaron el gusto a las carreras a pie, a la lucha y al combate contra los toros. Los preci osos bajorrelieves de Cnossos y los vasos esculpidos 8 de Aghia Triada nos revelan detalles precisos de cómo fue la vida atlética en Creta. Las más tempranas noticias documentadas de competiciones atléticas en el Mundo Antiguo se localizan sin duda en Grecia. La literatura clásica griega contiene descripciones de carreras llevadas a cabo en Grecia mil años o más antes de la era cristiana, en general en conexión con festivales religiosos. Se puede constatar en la lectura del canto XXIII de La Iliada donde se relatan los funerales de Patroclo en los muros de Troya, que ya se conocían la mayoría de los ejercicios practicados durante los Juegos Olímpicos, especialmente las carreras de cuadrigas, el pugilato, la lucha, la carrera a pie, el lanzamiento de disco y el de jabalina. Podemos citar que en La Odisea, durante una recepción donada por los Feacios, en honor de Ulises, éste, tras haber admirado los concurrentes que le fueron presentados, debió lanzar el disco para responder a un desafío de Aurelio. La sociedad deportiva descrita por Homero tuvo, enseguida, sus ceremonias, los grandes juegos: Juegos Fiticos, Istmicos, Nemianos y los más ilustres, los Juegos Olímpicos. Estos fueron llamados así porque se celebraban en Olimpia, una localidad en el noroeste de la península del Peloponeso, y su nacimiento se sitúa por unos en el año 1.222 a. d. J.C. y por otros en el 884. Estos juegos, según la leyenda siempre difícil de separar de la realidad en la mitología griega, fueron creados por Hércules. Tras matar a Augias, rey de Elida, hizo limpiar las cuadras, para dar gracias a Zeus y para permitir medirse a sus cuatro hermanos, Epidemes, Idas, Aionos e Iasus. Hércules trazó el “temenos” o recinto público, en el cual deberían celebrarse las competiciones. Puso el pie derecho en el suelo y yuxtapuso el izquierdo, después el derecho, y así sucesivamente, seiscientas veces. Así creó el “stadion” (estadio) que hoy sabemos que medía 192,77 m de largo, algo superior que el estadio de Delfos que medía 177,92 m. El “stadion”, una vuelta completa al estadio de Olimpia, era la única prueba del programa de los primeros Juegos Olímpicos. Otras pruebas fueron añadidas más tarde, aproximadamente 50 años después, tales como el “diaulos” (dos veces la longitud del estadio), el “dolichos” (que variaba de 7 a 24 veces la longitud del estadio) y el pentatlón (que incluía el “stadion”, salto de longitud, lanzamientos de disco y jabalina y lucha). Los Juegos Olímpicos duraron cerca de 1.200 años hasta que el emperador romano Teodosio decretó el fin de los mismos en el año 393 después de Cristo. En el Siglo XIV, cuando los escoceses quisieron celebrar la victoria de Bannockburn, consagrando la independencia de su país, crearon unos juegos donde se celebraban diversos lanzamientos tales como el martillo, la pica, la piedra, o el tronco. Estos ejercicios atléticos jugaron un importante papel en los festivales populares, que han sobrevivido hasta nuestros días, especialmente las pruebas de lanzamiento. Estos juegos denominados de las Tierras Altas o de las Fronteras escocesas han contribuido notablemente al desarrollo del deporte atlético británico. El Siglo XVII nos dejó informaciones de la afición del pueblo británico a los juegos deportivos, entre ellas la afición de los aristócratas a las pruebas hípicas y a los desafíos por corredores de relevos. Nacieron así los “footmen” (literalmente, los corredores a pie). Los nobles reclutaban a corredores entre sus súbditos para enviar mensajes entre casti- llos. Las familias ricas buscaban los corredores más rápidos y resistentes como si se tratara de caballos. Surgió así el pedestrismo, que se desarrollaría ampliamente en Gran Bretaña desde ese momento y hasta el Siglo XIX. El atletismo moderno comenzó a desarrollarse en las Islas Británicas, especialmente a partir de 1830 cuando empezó a ser posible medir el tiempo y las distancias de una manera segura. El mérito fundamental de sentar las bases del atletismo debe ser atribuido a las Universidades y Escuelas Públicas Británicas. Estos pioneros adoptaron reglamentos que en gran parte han permanecido hasta nuestros días sin ser modificados. Durante la segunda mitad del Siglo XIX el atletismo comenzó a desarrollarse tanto en las Islas Británicas como en los Estados Unidos. Así, la primera acta completa de resultados de una reunión atlética data del 4 de diciembre de 1860 en la Universidad de Oxford. El primer encuentro atlético entre las universidades de Oxford y Cambridge se disputó en 1864 y es considerado por algunos como el “encuentro fundacional” del atletismo moderno. Mientras, al otro lado del atlántico, la primera reunión atlética en pista cubierta tuvo lugar en Cincinnati (Ohio, EEUU) y la primera gran manifestación atlética a cubierto se celebró en Nueva York el 11 de noviembre de 1868. Mientras tanto, un hito clave en el desarrollo del atletismo moderno fue la celebración de los primeros Juegos Olímpicos de la Era Moderna en 1896 en Atenas, a instancias del Barón de Coubertin y tras la fundación del Comité Olímpico Internacional en 1894. En esta primera edición se disputaron las pruebas masculinas de 100 m, 400 m, 800 m, 1.500 m, Maratón, 110 m vallas, saltos de altura, pértiga, longitud y triple y los lanzamientos de peso y disco. Los historiadores parecen inclinados a creer que el atletismo feme- 9 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 8 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades ANTECEDENTES HISTÓRICOS DEL ATLETISMO Se puede afirmar que el atletismo es el primero de los deportes practicado por la humanidad. Las pistas más antiguas de que disponemos sobre la actividad atlética se remontan al año 3.500 antes de Jesucristo (a. J.C.); los bajorrelieves egipcios representan a hombres efectuando ejercicios de carrera, de salto, así como la natación y la equitación. La carrera, en este periodo egipcio, conocía ya un desarrollo real. En el país de los faraones, los señores utilizaban un hombre armado de un bastón que precedía las carrozas, gritando la calidad de sus amos, para hacer despejar el camino. Años más tarde en Japón, se creó una institución similar, los “djinrishki”, tiradores de carrozas que hacían gala de una resistencia a toda prueba. El atavismo de estos corredores de fondo conoce hoy sus prolongaciones en los maratonianos japoneses y etíopes. El atletismo ha existido igualmente, en un estado natural, entre los pueblos nómadas del Asia Central: kirguisos, bechkires y turkmenos organizaban juegos mortuorios en memoria de ancestros legendarios que incluían pruebas de carreras, de tiro al arco y de lanzamientos. La parte dedicada a los ejercicios físicos, y particularmente al atletismo, en la vida griega, fue inmensa. Los griegos se jactaban de ello de buena gana, estimando que la gimnasia establecía una diferencia fundamental entre ellos y las naciones bárbaras que no se ejercitaban de una manera metódica, racional y total. Desde el Siglo XV antes de nuestra era, los Cretenses tomaron el gusto a las carreras a pie, a la lucha y al combate contra los toros. Los preci osos bajorrelieves de Cnossos y los vasos esculpidos 8 de Aghia Triada nos revelan detalles precisos de cómo fue la vida atlética en Creta. Las más tempranas noticias documentadas de competiciones atléticas en el Mundo Antiguo se localizan sin duda en Grecia. La literatura clásica griega contiene descripciones de carreras llevadas a cabo en Grecia mil años o más antes de la era cristiana, en general en conexión con festivales religiosos. Se puede constatar en la lectura del canto XXIII de La Iliada donde se relatan los funerales de Patroclo en los muros de Troya, que ya se conocían la mayoría de los ejercicios practicados durante los Juegos Olímpicos, especialmente las carreras de cuadrigas, el pugilato, la lucha, la carrera a pie, el lanzamiento de disco y el de jabalina. Podemos citar que en La Odisea, durante una recepción donada por los Feacios, en honor de Ulises, éste, tras haber admirado los concurrentes que le fueron presentados, debió lanzar el disco para responder a un desafío de Aurelio. La sociedad deportiva descrita por Homero tuvo, enseguida, sus ceremonias, los grandes juegos: Juegos Fiticos, Istmicos, Nemianos y los más ilustres, los Juegos Olímpicos. Estos fueron llamados así porque se celebraban en Olimpia, una localidad en el noroeste de la península del Peloponeso, y su nacimiento se sitúa por unos en el año 1.222 a. d. J.C. y por otros en el 884. Estos juegos, según la leyenda siempre difícil de separar de la realidad en la mitología griega, fueron creados por Hércules. Tras matar a Augias, rey de Elida, hizo limpiar las cuadras, para dar gracias a Zeus y para permitir medirse a sus cuatro hermanos, Epidemes, Idas, Aionos e Iasus. Hércules trazó el “temenos” o recinto público, en el cual deberían celebrarse las competiciones. Puso el pie derecho en el suelo y yuxtapuso el izquierdo, después el derecho, y así sucesivamente, seiscientas veces. Así creó el “stadion” (estadio) que hoy sabemos que medía 192,77 m de largo, algo superior que el estadio de Delfos que medía 177,92 m. El “stadion”, una vuelta completa al estadio de Olimpia, era la única prueba del programa de los primeros Juegos Olímpicos. Otras pruebas fueron añadidas más tarde, aproximadamente 50 años después, tales como el “diaulos” (dos veces la longitud del estadio), el “dolichos” (que variaba de 7 a 24 veces la longitud del estadio) y el pentatlón (que incluía el “stadion”, salto de longitud, lanzamientos de disco y jabalina y lucha). Los Juegos Olímpicos duraron cerca de 1.200 años hasta que el emperador romano Teodosio decretó el fin de los mismos en el año 393 después de Cristo. En el Siglo XIV, cuando los escoceses quisieron celebrar la victoria de Bannockburn, consagrando la independencia de su país, crearon unos juegos donde se celebraban diversos lanzamientos tales como el martillo, la pica, la piedra, o el tronco. Estos ejercicios atléticos jugaron un importante papel en los festivales populares, que han sobrevivido hasta nuestros días, especialmente las pruebas de lanzamiento. Estos juegos denominados de las Tierras Altas o de las Fronteras escocesas han contribuido notablemente al desarrollo del deporte atlético británico. El Siglo XVII nos dejó informaciones de la afición del pueblo británico a los juegos deportivos, entre ellas la afición de los aristócratas a las pruebas hípicas y a los desafíos por corredores de relevos. Nacieron así los “footmen” (literalmente, los corredores a pie). Los nobles reclutaban a corredores entre sus súbditos para enviar mensajes entre casti- llos. Las familias ricas buscaban los corredores más rápidos y resistentes como si se tratara de caballos. Surgió así el pedestrismo, que se desarrollaría ampliamente en Gran Bretaña desde ese momento y hasta el Siglo XIX. El atletismo moderno comenzó a desarrollarse en las Islas Británicas, especialmente a partir de 1830 cuando empezó a ser posible medir el tiempo y las distancias de una manera segura. El mérito fundamental de sentar las bases del atletismo debe ser atribuido a las Universidades y Escuelas Públicas Británicas. Estos pioneros adoptaron reglamentos que en gran parte han permanecido hasta nuestros días sin ser modificados. Durante la segunda mitad del Siglo XIX el atletismo comenzó a desarrollarse tanto en las Islas Británicas como en los Estados Unidos. Así, la primera acta completa de resultados de una reunión atlética data del 4 de diciembre de 1860 en la Universidad de Oxford. El primer encuentro atlético entre las universidades de Oxford y Cambridge se disputó en 1864 y es considerado por algunos como el “encuentro fundacional” del atletismo moderno. Mientras, al otro lado del atlántico, la primera reunión atlética en pista cubierta tuvo lugar en Cincinnati (Ohio, EEUU) y la primera gran manifestación atlética a cubierto se celebró en Nueva York el 11 de noviembre de 1868. Mientras tanto, un hito clave en el desarrollo del atletismo moderno fue la celebración de los primeros Juegos Olímpicos de la Era Moderna en 1896 en Atenas, a instancias del Barón de Coubertin y tras la fundación del Comité Olímpico Internacional en 1894. En esta primera edición se disputaron las pruebas masculinas de 100 m, 400 m, 800 m, 1.500 m, Maratón, 110 m vallas, saltos de altura, pértiga, longitud y triple y los lanzamientos de peso y disco. Los historiadores parecen inclinados a creer que el atletismo feme- 9 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 10 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades CARACTERÍSTICAS ANTROPOMÉTRICAS Y FISIOLÓGICAS EN ATLETISMO nino se originó hace mucho tiempo, si bien en formas bastante diferentes a las que han prevalecido en el deporte de nuestros días. Ya, las mujeres egipcias hacia el año 2.000 a. d. J.C. concurrían entre ellas en los lanzamientos y en las halteras. En la Grecia Clásica, las mujeres tuvieron sus propias competiciones cada cuatro años en Olimpia en honor de Hera y denominada Heraia o Juegos Heros. Las mujeres podían también competir y ser proclamadas campeonas en las modalidades ecuestres de los Juegos Olímpicos. Curiosamente, las mujeres casadas no podían asistir a los Juegos como espectadoras y el incumplimiento era castigado con la muerte. No así las doncellas que sí estaban autorizadas a asistir. Las primeras citas del atletismo femenino moderno se encuentran en los Estados Unidos a fines del Siglo XIX. El atletismo femenino no empezó a tomar carta de naturaleza hasta que las primeras pruebas de mujeres se disputaron en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam en 1928, teniendo como antecedentes unos Juegos Mundiales Femeninos celebrados en Montecarlo en 1921, en París en 1922 y unos Juegos Olímpicos Femeninos oficiosos, no reconocidos por el CIO, disputados en Goteborg en 1926. Mientras transcurrió el Siglo XX el atletismo se fue desarrollando en diversos impulsos en Europa con los frenazos lógicos impuestos por las dos guerras mundiales. El avance definitivo del deporte atlético hasta convertirlo en lo que es hoy se debe a la presidencia en la IAAF del italiano Sr. Primo Nebiolo, que una vez elegido en 1981 revolucionó este deporte, en ocasiones en contra de una enorme oposición, introduciendo los Campeonatos del Mundo, que se celebraron por primera vez en Helsinki en 1983, instaurando los premios económicos en las pruebas de la IAAF, y convirtiendo, en fin, este deporte en profesional, algo impensable en el viejo mundo del atletismo aficionado. CARACTERÍSTICAS ANTROPOMÉTRICAS Dada la gran variabilidad de especialidades atléticas, es también muy grande la variabilidad en las características antropométricas de los deportistas de las distintas especialidades. De siempre es conocido el famoso dilema de si es el deporte (y en nuestro caso la especialidad atlética) la que hace al atleta, o es el atleta quien elige el deporte. Es también conocida la respuesta: el desempeño deportivo de alta intensidad se halla relacionado tanto a factores genéticos (“el atleta elige su deporte”), como a factores ambientales o de entrenamiento (“el deporte hace al atleta”). Y aquí no podemos escapar de esta disyuntiva. Dentro de unas características antropomé- tricas determinadas genéticamente, será más o menos importante el impacto y la capacidad de adaptación de un deportista al entrenamiento realizado. Por ejemplo, en muchas especialidades va a ser importante poseer una altura considerable. En principio se beneficiarán de tal característica las disciplinas de salto y lanzamientos, siendo un tema no tan determinante en las carreras. La altura por sí misma no bastará. Unas piernas proporcionalmente largas serán importantes para el rendimiento en los saltos y las carreras. En cambio en los lanzamientos será un tema menor, pues aquí en cambio será interesante poseer un tronco potente. Esta es una de las razones por las que los estudios de proporcionalidad tienen gran importancia en la selección de talentos (fig.1). Proporcionalidad 4,00 3,00 2,00 1,00 Índice Z BIBLIOGRAFÍA 0,00 -1,00 -2,00 Bravo J, Pascua M, García-Verdugo M, Gil F, Marín J. Atletismo 1. Carreras y Marcha. Madrid, Real Federación Española de Atletismo, 1998. Durantez C. Olimpia y los Juegos Olímpicos Antiguos Vol I. Pamplona, Delegación Nacional de Educación Física y Deportes. Comité Olímpico Español, 1975. Parienté R, Billouin A. La fabuleuse histoire de l’athlétisme. Paris: Minerva, 2003. 10 Quercetany RL. Athletics. A History of Modern Track And Field Athletics. Milan: SEP Editrice, 2000. Young DC. A Brief History of the Olympic Games. Hong Kong: Blackwell Publishing, 2004. -3,00 -4,00 m u ñ e c a a n t e b r a z o a b r a r e l t ó r a x c i n t u r a m u s l o g e m e l o t r i s u b e s c s u p r a i u m b m u s a n t p a n t p e s o a d i p o s o h u e s o m ú s c u l o r e s i d u a l Medida antropométrica Figura 1. Estudio de proporcionalidad 11 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 10 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades CARACTERÍSTICAS ANTROPOMÉTRICAS Y FISIOLÓGICAS EN ATLETISMO nino se originó hace mucho tiempo, si bien en formas bastante diferentes a las que han prevalecido en el deporte de nuestros días. Ya, las mujeres egipcias hacia el año 2.000 a. d. J.C. concurrían entre ellas en los lanzamientos y en las halteras. En la Grecia Clásica, las mujeres tuvieron sus propias competiciones cada cuatro años en Olimpia en honor de Hera y denominada Heraia o Juegos Heros. Las mujeres podían también competir y ser proclamadas campeonas en las modalidades ecuestres de los Juegos Olímpicos. Curiosamente, las mujeres casadas no podían asistir a los Juegos como espectadoras y el incumplimiento era castigado con la muerte. No así las doncellas que sí estaban autorizadas a asistir. Las primeras citas del atletismo femenino moderno se encuentran en los Estados Unidos a fines del Siglo XIX. El atletismo femenino no empezó a tomar carta de naturaleza hasta que las primeras pruebas de mujeres se disputaron en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam en 1928, teniendo como antecedentes unos Juegos Mundiales Femeninos celebrados en Montecarlo en 1921, en París en 1922 y unos Juegos Olímpicos Femeninos oficiosos, no reconocidos por el CIO, disputados en Goteborg en 1926. Mientras transcurrió el Siglo XX el atletismo se fue desarrollando en diversos impulsos en Europa con los frenazos lógicos impuestos por las dos guerras mundiales. El avance definitivo del deporte atlético hasta convertirlo en lo que es hoy se debe a la presidencia en la IAAF del italiano Sr. Primo Nebiolo, que una vez elegido en 1981 revolucionó este deporte, en ocasiones en contra de una enorme oposición, introduciendo los Campeonatos del Mundo, que se celebraron por primera vez en Helsinki en 1983, instaurando los premios económicos en las pruebas de la IAAF, y convirtiendo, en fin, este deporte en profesional, algo impensable en el viejo mundo del atletismo aficionado. CARACTERÍSTICAS ANTROPOMÉTRICAS Dada la gran variabilidad de especialidades atléticas, es también muy grande la variabilidad en las características antropométricas de los deportistas de las distintas especialidades. De siempre es conocido el famoso dilema de si es el deporte (y en nuestro caso la especialidad atlética) la que hace al atleta, o es el atleta quien elige el deporte. Es también conocida la respuesta: el desempeño deportivo de alta intensidad se halla relacionado tanto a factores genéticos (“el atleta elige su deporte”), como a factores ambientales o de entrenamiento (“el deporte hace al atleta”). Y aquí no podemos escapar de esta disyuntiva. Dentro de unas características antropomé- tricas determinadas genéticamente, será más o menos importante el impacto y la capacidad de adaptación de un deportista al entrenamiento realizado. Por ejemplo, en muchas especialidades va a ser importante poseer una altura considerable. En principio se beneficiarán de tal característica las disciplinas de salto y lanzamientos, siendo un tema no tan determinante en las carreras. La altura por sí misma no bastará. Unas piernas proporcionalmente largas serán importantes para el rendimiento en los saltos y las carreras. En cambio en los lanzamientos será un tema menor, pues aquí en cambio será interesante poseer un tronco potente. Esta es una de las razones por las que los estudios de proporcionalidad tienen gran importancia en la selección de talentos (fig.1). Proporcionalidad 4,00 3,00 2,00 1,00 Índice Z BIBLIOGRAFÍA 0,00 -1,00 -2,00 Bravo J, Pascua M, García-Verdugo M, Gil F, Marín J. Atletismo 1. Carreras y Marcha. Madrid, Real Federación Española de Atletismo, 1998. Durantez C. Olimpia y los Juegos Olímpicos Antiguos Vol I. Pamplona, Delegación Nacional de Educación Física y Deportes. Comité Olímpico Español, 1975. Parienté R, Billouin A. La fabuleuse histoire de l’athlétisme. Paris: Minerva, 2003. 10 Quercetany RL. Athletics. A History of Modern Track And Field Athletics. Milan: SEP Editrice, 2000. Young DC. A Brief History of the Olympic Games. Hong Kong: Blackwell Publishing, 2004. -3,00 -4,00 m u ñ e c a a n t e b r a z o a b r a r e l t ó r a x c i n t u r a m u s l o g e m e l o t r i s u b e s c s u p r a i u m b m u s a n t p a n t p e s o a d i p o s o h u e s o m ú s c u l o r e s i d u a l Medida antropométrica Figura 1. Estudio de proporcionalidad 11 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 12 Medicina en Atletismo: Generalidades Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Un tema muy importante, que estudiaremos de forma más detallada cuando hablemos de la fisiología, es el hecho que, al ser el atletismo un deporte individual, el trabajo que debe realizar el deportista será proporcional a la masa desplazada. Así en aquellas especialidades en que la resistencia sea el factor más importante será decisivo un BMI bajo, para que la carga de trabajo a desarrollar sea menor. Por lo general, los saltadores tendrán un mayor peso en proporción a su talla que los corredores, pero menor que los lanzadores, pudiéndose observar en ambos sexos. El porcentaje graso suele ser bajo en todas las especialidades, aunque en aquellas donde la masa es importante puede ser algo más alto (lanzamientos, hombres 11,3% ± 2,3%, mujeres 17,6% ± 3,4%). Finalmente, el estudio del somatotipo coincide sobre las líneas básicas comentadas anteriormente. A partir de un somatotipo medio de tipo ectomesomorfo (1,7-2,02,9) en los hombres, o uno de tipo mesoectomorfo (2,3-3,43,5) en las mujeres, la distribución en función de la especialidad es muy variable (fig. 2 y fig. 3). En la figura 2 podemos ver como a medida que la especialidad deportiva precisa de una masa importante, el segundo componente o componente mesomórfico va adquiriendo relevancia. En cambio en las disciplinas de carrera de larga y media distancia, en que es importante no tener un peso excesivo, este componente mesomórfico es menor, desviándose el somatopunto en sentido ectomórfico. CARACTERÍSTICAS FISIOLÓGICAS Carreras Es muy difícil condensar en unas pocas líneas la diversidad de las especialidades atléticas. Comentábamos anteriormente que el trabajo que debe realizar el deportista será proporcional a la masa desplazada. Por otro lado deberá considerarse el tiempo en que debe ser realizado este trabajo para tener un enfoque adecuado de las cualidades fisiológicas que van a verse solicitadas. En primer lugar debemos separar los tres grupos de eventos, pues podemos hacer discursos propios para cada uno de ellos. Así, pues, hablaremos separadamente de carreras, saltos y lanzamientos. Las carreras se definen por unas distancias fijas que deben ser realizadas en el mínimo tiempo posible. Esto determina que a igualdad de peso el trabajo realizado será igual para todos los atletas. Por lo tanto, las diferencias entre ellos serán debidas a la capacidad de entregar ese trabajo en un mínimo de tiempo, esto es la potencia a la que se realice ese trabajo. Esto es fundamental, pues en nuestro organismo existen diferentes sistemas de aprovisionamiento de energía cuya diferencia de funcionamiento estriba justamente en la potencia de cada uno de estos sistemas (fig. 4). kJ/min Somatotipos medios de atletas de diferentes especialidades 370 Sistema anaeróbico aláctico MESO MESO Shot, discus thrower Javelin throwers Decathonists 2 250 400 m runners & hurdlers Sprinters High, long, triple jumpers 3 2 4 2 Javelin throwers Pentathlonist Discus thrower 2 2 1 50+10 km runners 800+1.500 m runners Sprinters + hurdlers 400+1.500 m runners High, long jumpers Sistema anaeróbico láctico 125 ENDO ECTO ENDO Sistema aeróbico ECTO 0 Tiempo 10 s Figura 2. Atletas masculinos 10 min 100 min Figura 3. Atletas femeninos (de J.E.L. Carter (editor): Physical structure of Olympic athletes. Basel, New York: Karger, 1982 (Medicine and sport; v. 16)) 12 1 min Figura 4. Continuum energético 13 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 12 Medicina en Atletismo: Generalidades Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Un tema muy importante, que estudiaremos de forma más detallada cuando hablemos de la fisiología, es el hecho que, al ser el atletismo un deporte individual, el trabajo que debe realizar el deportista será proporcional a la masa desplazada. Así en aquellas especialidades en que la resistencia sea el factor más importante será decisivo un BMI bajo, para que la carga de trabajo a desarrollar sea menor. Por lo general, los saltadores tendrán un mayor peso en proporción a su talla que los corredores, pero menor que los lanzadores, pudiéndose observar en ambos sexos. El porcentaje graso suele ser bajo en todas las especialidades, aunque en aquellas donde la masa es importante puede ser algo más alto (lanzamientos, hombres 11,3% ± 2,3%, mujeres 17,6% ± 3,4%). Finalmente, el estudio del somatotipo coincide sobre las líneas básicas comentadas anteriormente. A partir de un somatotipo medio de tipo ectomesomorfo (1,7-2,02,9) en los hombres, o uno de tipo mesoectomorfo (2,3-3,43,5) en las mujeres, la distribución en función de la especialidad es muy variable (fig. 2 y fig. 3). En la figura 2 podemos ver como a medida que la especialidad deportiva precisa de una masa importante, el segundo componente o componente mesomórfico va adquiriendo relevancia. En cambio en las disciplinas de carrera de larga y media distancia, en que es importante no tener un peso excesivo, este componente mesomórfico es menor, desviándose el somatopunto en sentido ectomórfico. CARACTERÍSTICAS FISIOLÓGICAS Carreras Es muy difícil condensar en unas pocas líneas la diversidad de las especialidades atléticas. Comentábamos anteriormente que el trabajo que debe realizar el deportista será proporcional a la masa desplazada. Por otro lado deberá considerarse el tiempo en que debe ser realizado este trabajo para tener un enfoque adecuado de las cualidades fisiológicas que van a verse solicitadas. En primer lugar debemos separar los tres grupos de eventos, pues podemos hacer discursos propios para cada uno de ellos. Así, pues, hablaremos separadamente de carreras, saltos y lanzamientos. Las carreras se definen por unas distancias fijas que deben ser realizadas en el mínimo tiempo posible. Esto determina que a igualdad de peso el trabajo realizado será igual para todos los atletas. Por lo tanto, las diferencias entre ellos serán debidas a la capacidad de entregar ese trabajo en un mínimo de tiempo, esto es la potencia a la que se realice ese trabajo. Esto es fundamental, pues en nuestro organismo existen diferentes sistemas de aprovisionamiento de energía cuya diferencia de funcionamiento estriba justamente en la potencia de cada uno de estos sistemas (fig. 4). kJ/min Somatotipos medios de atletas de diferentes especialidades 370 Sistema anaeróbico aláctico MESO MESO Shot, discus thrower Javelin throwers Decathonists 2 250 400 m runners & hurdlers Sprinters High, long, triple jumpers 3 2 4 2 Javelin throwers Pentathlonist Discus thrower 2 2 1 50+10 km runners 800+1.500 m runners Sprinters + hurdlers 400+1.500 m runners High, long jumpers Sistema anaeróbico láctico 125 ENDO ECTO ENDO Sistema aeróbico ECTO 0 Tiempo 10 s Figura 2. Atletas masculinos 10 min 100 min Figura 3. Atletas femeninos (de J.E.L. Carter (editor): Physical structure of Olympic athletes. Basel, New York: Karger, 1982 (Medicine and sport; v. 16)) 12 1 min Figura 4. Continuum energético 13 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 14 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Así las carreras de corta duración (<20 segundos) dependerán del aporte energético a partir del sistema anaeróbico aláctico. Este sistema depende para su funcionamiento del estado de las reservas intramusculares de fosfocreatina. Unas reservas adecuadas, junto a un buen número de fibras (hipertrofia muscular y capacidad de sincronización de la actividad fibrilar) garantizarán un buen rendimiento en este tipo de especialidades. Las carreras más largas de 20 segundos, pero menores de 2 minutos dependerán en cambio de la potencia del sistema anaeróbico láctico de aporte de energía. Este sistema obtiene la energía necesaria para la contracción muscular a partir de la glucosa intramuscular y plasmática, con el inconveniente de la acumulación de hidrogeniones en el interior de la fibra, lo que acidifica el medio y puede llegar a bloquear la propia glucólisis. Determinante en el rendimiento será tanto el estado de las reservas intramusculares de glucosa como la tolerancia a la acidez intramuscular. Un tercer grupo de carreras es aquel de las que duran entre 2 y 30 minutos. En este tipo de competiciones el factor limitante es la potencia del tercer sistema energético, el aeróbico. Esta potencia viene definida por un parámetro ergométrico muy conocido como es el consumo máximo de oxígeno, o VO2max. Un VO2max alto se relacionará con una capacidad de obtención de energía alta por la vía aeróbica. El obtener energía por esta vía es menos solicitante a nivel de acidificación del medio, así como a nivel de integridad de las reservas intramusculares de glucosa del caso anterior, pero sigue dependiendo en buena medida de estos factores. Cuanto menor sea el VO2max más dependere- 14 mos de los otros factores para un óptimo rendimiento, y del justo equilibrio entre unos y otros dependerá la marca deportiva. Finalmente el cuarto tipo de carreras es aquel de todas aquellas que duran más de 30 minutos. Evidentemente el sistema aeróbico sigue siendo el predominante, pero ahora el discurso se dirige en otro sentido. Ante todo debemos recordar que la energía necesaria para el funcionamiento del sistema aeróbico de aporte de energía puede provenir tanto de la glucosa como de los ácidos grasos. La utilización de cada uno de estos sistemas tiene una justificación fisiológica. En principio los ácidos grasos están diseñados como almacén de energía, pues a igualdad de peso son capaces de almacenar más energía (9 kcal/gr, por 4 kcal/gr para la glucosa). Tienen el inconveniente que sus depósitos intramusculares son pequeños, al contrario que los de la glucosa, por lo que deben ser movilizados de estos depósitos subcutáneos para ser utilizados adecuadamente. Ello no garantiza una alta potencia sistema, que en cambio sí ocurre con la glucosa. Por otro lado los depósitos subcutáneos de grasa son muy grandes y difícilmente se verán expoliados, mientras los de glucosa son fácilmente vaciados. Durante la competición va a ser utilizada una mezcla de ambas fuentes de energía. Si por el entrenamiento el atleta será capaz de mejorar el aporte de energía a partir de los ácidos grasos, conseguirá preservar los depósitos intramusculares de glucosa, y así la podrá reservar para los momentos claves de la carrera, que serán los cambios de ritmo y la llegada. Medicina en Atletismo: Generalidades Saltos El rendimiento en los saltos ya no viene determinado por factores bioquímicos, pues, al ser carreras muy cortas, las reservas energéticas no se van a ver expoliadas. Las competiciones aún y todo suelen alargarse, con lo cual será interesante preservar un adecuado estado de hidratación y de las reservas de glucógeno, lo cual se logra con bebidas deportivas y pequeños snacks. El rendimiento deportivo va a depender de factores antropométricos y de aprovechamiento de la fuerza generada, o sea de factores de técnica deportiva. En la génesis de esta fuerza serán importantes tanto factores intramusculares (establecimiento de puentes cruzados, integridad de los elementos elásticos en serie,...) así como neuronales (coordinación intramuscular y entre músculos, engrama neuronal definido...). Lanzamientos Desde un punto de vista bioenergético, para este tipo de eventos vale cuanto hemos comentado anteriormente para los saltos. Quizás en estas competiciones tiene menos importancia el preservar un óptimo estado de hidratación, pues son competiciones más cortas. En cambio, como no hay desplazamiento del cuerpo, toma más importancia una masa suficiente para generar toda la energía a transmitir al arnés. 15 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 14 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Así las carreras de corta duración (<20 segundos) dependerán del aporte energético a partir del sistema anaeróbico aláctico. Este sistema depende para su funcionamiento del estado de las reservas intramusculares de fosfocreatina. Unas reservas adecuadas, junto a un buen número de fibras (hipertrofia muscular y capacidad de sincronización de la actividad fibrilar) garantizarán un buen rendimiento en este tipo de especialidades. Las carreras más largas de 20 segundos, pero menores de 2 minutos dependerán en cambio de la potencia del sistema anaeróbico láctico de aporte de energía. Este sistema obtiene la energía necesaria para la contracción muscular a partir de la glucosa intramuscular y plasmática, con el inconveniente de la acumulación de hidrogeniones en el interior de la fibra, lo que acidifica el medio y puede llegar a bloquear la propia glucólisis. Determinante en el rendimiento será tanto el estado de las reservas intramusculares de glucosa como la tolerancia a la acidez intramuscular. Un tercer grupo de carreras es aquel de las que duran entre 2 y 30 minutos. En este tipo de competiciones el factor limitante es la potencia del tercer sistema energético, el aeróbico. Esta potencia viene definida por un parámetro ergométrico muy conocido como es el consumo máximo de oxígeno, o VO2max. Un VO2max alto se relacionará con una capacidad de obtención de energía alta por la vía aeróbica. El obtener energía por esta vía es menos solicitante a nivel de acidificación del medio, así como a nivel de integridad de las reservas intramusculares de glucosa del caso anterior, pero sigue dependiendo en buena medida de estos factores. Cuanto menor sea el VO2max más dependere- 14 mos de los otros factores para un óptimo rendimiento, y del justo equilibrio entre unos y otros dependerá la marca deportiva. Finalmente el cuarto tipo de carreras es aquel de todas aquellas que duran más de 30 minutos. Evidentemente el sistema aeróbico sigue siendo el predominante, pero ahora el discurso se dirige en otro sentido. Ante todo debemos recordar que la energía necesaria para el funcionamiento del sistema aeróbico de aporte de energía puede provenir tanto de la glucosa como de los ácidos grasos. La utilización de cada uno de estos sistemas tiene una justificación fisiológica. En principio los ácidos grasos están diseñados como almacén de energía, pues a igualdad de peso son capaces de almacenar más energía (9 kcal/gr, por 4 kcal/gr para la glucosa). Tienen el inconveniente que sus depósitos intramusculares son pequeños, al contrario que los de la glucosa, por lo que deben ser movilizados de estos depósitos subcutáneos para ser utilizados adecuadamente. Ello no garantiza una alta potencia sistema, que en cambio sí ocurre con la glucosa. Por otro lado los depósitos subcutáneos de grasa son muy grandes y difícilmente se verán expoliados, mientras los de glucosa son fácilmente vaciados. Durante la competición va a ser utilizada una mezcla de ambas fuentes de energía. Si por el entrenamiento el atleta será capaz de mejorar el aporte de energía a partir de los ácidos grasos, conseguirá preservar los depósitos intramusculares de glucosa, y así la podrá reservar para los momentos claves de la carrera, que serán los cambios de ritmo y la llegada. Medicina en Atletismo: Generalidades Saltos El rendimiento en los saltos ya no viene determinado por factores bioquímicos, pues, al ser carreras muy cortas, las reservas energéticas no se van a ver expoliadas. Las competiciones aún y todo suelen alargarse, con lo cual será interesante preservar un adecuado estado de hidratación y de las reservas de glucógeno, lo cual se logra con bebidas deportivas y pequeños snacks. El rendimiento deportivo va a depender de factores antropométricos y de aprovechamiento de la fuerza generada, o sea de factores de técnica deportiva. En la génesis de esta fuerza serán importantes tanto factores intramusculares (establecimiento de puentes cruzados, integridad de los elementos elásticos en serie,...) así como neuronales (coordinación intramuscular y entre músculos, engrama neuronal definido...). Lanzamientos Desde un punto de vista bioenergético, para este tipo de eventos vale cuanto hemos comentado anteriormente para los saltos. Quizás en estas competiciones tiene menos importancia el preservar un óptimo estado de hidratación, pues son competiciones más cortas. En cambio, como no hay desplazamiento del cuerpo, toma más importancia una masa suficiente para generar toda la energía a transmitir al arnés. 15 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 16 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades NECESIDADES PSICOLÓGICAS EN ATLETISMO La psicología aporta conocimientos para poder afrontar las situaciones de competición de forma más eficaz. En algunas ocasiones el atleta y el entrenador ya hacen uso de ellas sin necesidad de la presencia del psicólogo, de forma natural y por un aprendizaje de ensayo error ante diferentes situaciones de competición. Así han adquirido unas rutinas útiles, para poder rendir. El atletismo, como deporte individual basado en las propias competencias del sujeto, sin ningún tipo de ayuda/accesorio extra (exceptuando con matizaciones el caso de la pértiga) plantea una serie de demandas psicológicas de gran especificidad que le diferencian de las necesidades psicológicas presentes en otros deportes aunque también sean individuales (ciclismo, gimnasia rítmica, natación o tenis, por citar tan sólo algunos). Por otro lado, y como se expresará a continuación, dentro del atletismo aparecen disciplinas tan diferentes entre sí como si de deportes distintos se tratase, puesto que las demandas planteadas en lanzamientos (basados en la técnica más depurada) o medio fondo (pruebas basadas en la táctica y la intuición) por ejemplo, son radicalmente opuestas, así que se hace necesario una especificación de cómo la psicología deportiva puede contribuir al respecto. El objetivo de este artículo es dar algunos ejemplos prácticos, con los que se trabaja para ayudar al atleta a adaptarse a su prueba y atender a lo relevante de modo que pueda rendir al máximo en cada momento. Según Pep Marí, psicólogo del Centre d’Alt Rendiment de Sant Cugat del Vallès, estas prioridades pueden dividirse en tres tipos: • Dosificación del esfuerzo. • Ejecución de un mismo patrón técnico. • Toma de decisión táctica. 16 Cuando la prioridad es la gestión del esfuerzo Las pruebas con esta prioridad serían las de fondo. Para la gestión la estrategia de carrera permite ajustar los momentos de cambio y planificar cuándo se van a hacer y cómo. Para poder llevarla a cabo es importante saber controlar el ritmo de carrera, para poder desarrollar una estrategia eficaz el atleta ha de conocerse, saber leer las sensaciones fisiológicas de forma correcta. Ha de haber entrenado en diferentes umbrales, aeróbico y anaeróbico, a diferentes intensidades, para reconocer cuándo puede cambiar, o seguir a un escapado. Seguro que todos los atletas lo hacen, pero la diferencia para que sirva como herramienta psicológica es trabajar de f orma consciente para reconocer esas sensaciones. Hay que tener en cuenta que la sensación puede variar, por ejemplo por la propia competición que hace estar más activado (con más tensión), o por la climatología (más seca o más húmeda) hará que el cuerpo reaccione de forma diferente. Las sensaciones se han de revisar en momentos concretos de la carrera, para que su revisión no sea la que bloquee al atleta. La información que se obtiene ha de servir para ajustar nuestra actuación. Como el foco atencional (hacia dónde dirijo la atención) cambia de externo a interno, es importante que se realice en lugares o momentos donde la atención sobre el recorrido o los rivales no sea relevante. Por ejemplo, si haces maratón, el punto recomendado sería en una avenida larga y ancha, evitando los cambios de rasante, las b ajadas pronunciadas, las curvas muy cerradas. Es importante saber qué hacer cuando las sensaciones se vuel- ven el enemigo. Una referencia que ayuda a remontar en esos momentos clave, es centrar la atención sobre la técnica, el tipo de apoyo que hago, la amplitud o la frecuencia que tengo. Cuando la prioridad es la repetición de patrón técnico En este tipo de pruebas, como los concursos (lanzamientos y saltos) y las carreras de velocidad y vallas, una de las claves sería saber cortar. Esto supone asumir que un lanzamiento o un salto, son independientes. Para poder cortar es necesario tener una rutina que permita volver a concentrarse en lo importante, aquello que permite generar un nuevo intento con toda la fuerza, velocidad y amplitud necesarias. Es interesante saber en qué momento tenemos que cortar, para ello hay que darse cuenta que lo que está pasando no ayuda a poder realizar bien nuestro salto, lanzamiento o carrera (en este caso pasa durante el calentamiento o previamente a la salida). Los pensamientos negativos o centrados en el futuro alejan la probabilidad de trabajar atendiendo a aquellas cosas que ayudan a conseguir el objetivo. Es importante que al identificar pensamientos que no contribuyen a construir se dejen pasar y se centre la atención en actividades que ayuden a prepararse para la acción. Puede que sea la ansiedad o la sensación de tensión muscular la que avise que hay que cortar. En este momento es importante relajarse a través de respiraciones diafragmáticas o con una técnica de relajación completa. Estas técnicas se han de trabajar de forma continua y progresiva en la dificultad para que sea efectiva en situaciones de competición. Tal vez el atleta se da cuenta que algo va mal cuando la técnica o la sensación de fatiga no corresponden a la intensidad de la ejecución. La ansiedad y la tensión excesiva disminuyen la precisión técnica y aumentan la fatiga. En ese momento hay que cortar con la rutina diseñada para poder centrarse de nuevo. Es posi- ble que tan sólo después de lanzar, saltar o terminar una carrera, el bajo rendimiento sirva para darse cuenta que estaba fuera de competición. El objetivo es identificar, darse cuenta cada vez antes, para poder cortar en la primera fase (pensamiento) y centrarse cada vez más rápido en aquellas actividades que ayudan a rendir al máximo. P ¿QUÉ SUCEDERÁ? ANSIEDAD RENDIMIENTO { Técnica Fatiga } TENSIÓN Muscular Cuando la prioridad es la toma de decisiones tácticas Las pruebas de medio fondo son en las que el rendimiento estará fundamentalmente filtrado por la lectura e interpretación que se hace de lo que está sucediendo en la carrera. En este tipo de pruebas es muy importante tener criterios de actuación en función de lo que sucede y asumir el riesgo de la decisión que se toma. Son pruebas en las que se combina la lectura de factores internos y externos. Es aconsejable elaborar una lista de cosas que pueden pasar y de alternativas de acción según lo que suceda. La decisión en el momento de competición se explica desde la “intuición”, pero anticipar la resolución de las diferentes situaciones (práctica imagi- 17 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 16 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades NECESIDADES PSICOLÓGICAS EN ATLETISMO La psicología aporta conocimientos para poder afrontar las situaciones de competición de forma más eficaz. En algunas ocasiones el atleta y el entrenador ya hacen uso de ellas sin necesidad de la presencia del psicólogo, de forma natural y por un aprendizaje de ensayo error ante diferentes situaciones de competición. Así han adquirido unas rutinas útiles, para poder rendir. El atletismo, como deporte individual basado en las propias competencias del sujeto, sin ningún tipo de ayuda/accesorio extra (exceptuando con matizaciones el caso de la pértiga) plantea una serie de demandas psicológicas de gran especificidad que le diferencian de las necesidades psicológicas presentes en otros deportes aunque también sean individuales (ciclismo, gimnasia rítmica, natación o tenis, por citar tan sólo algunos). Por otro lado, y como se expresará a continuación, dentro del atletismo aparecen disciplinas tan diferentes entre sí como si de deportes distintos se tratase, puesto que las demandas planteadas en lanzamientos (basados en la técnica más depurada) o medio fondo (pruebas basadas en la táctica y la intuición) por ejemplo, son radicalmente opuestas, así que se hace necesario una especificación de cómo la psicología deportiva puede contribuir al respecto. El objetivo de este artículo es dar algunos ejemplos prácticos, con los que se trabaja para ayudar al atleta a adaptarse a su prueba y atender a lo relevante de modo que pueda rendir al máximo en cada momento. Según Pep Marí, psicólogo del Centre d’Alt Rendiment de Sant Cugat del Vallès, estas prioridades pueden dividirse en tres tipos: • Dosificación del esfuerzo. • Ejecución de un mismo patrón técnico. • Toma de decisión táctica. 16 Cuando la prioridad es la gestión del esfuerzo Las pruebas con esta prioridad serían las de fondo. Para la gestión la estrategia de carrera permite ajustar los momentos de cambio y planificar cuándo se van a hacer y cómo. Para poder llevarla a cabo es importante saber controlar el ritmo de carrera, para poder desarrollar una estrategia eficaz el atleta ha de conocerse, saber leer las sensaciones fisiológicas de forma correcta. Ha de haber entrenado en diferentes umbrales, aeróbico y anaeróbico, a diferentes intensidades, para reconocer cuándo puede cambiar, o seguir a un escapado. Seguro que todos los atletas lo hacen, pero la diferencia para que sirva como herramienta psicológica es trabajar de f orma consciente para reconocer esas sensaciones. Hay que tener en cuenta que la sensación puede variar, por ejemplo por la propia competición que hace estar más activado (con más tensión), o por la climatología (más seca o más húmeda) hará que el cuerpo reaccione de forma diferente. Las sensaciones se han de revisar en momentos concretos de la carrera, para que su revisión no sea la que bloquee al atleta. La información que se obtiene ha de servir para ajustar nuestra actuación. Como el foco atencional (hacia dónde dirijo la atención) cambia de externo a interno, es importante que se realice en lugares o momentos donde la atención sobre el recorrido o los rivales no sea relevante. Por ejemplo, si haces maratón, el punto recomendado sería en una avenida larga y ancha, evitando los cambios de rasante, las b ajadas pronunciadas, las curvas muy cerradas. Es importante saber qué hacer cuando las sensaciones se vuel- ven el enemigo. Una referencia que ayuda a remontar en esos momentos clave, es centrar la atención sobre la técnica, el tipo de apoyo que hago, la amplitud o la frecuencia que tengo. Cuando la prioridad es la repetición de patrón técnico En este tipo de pruebas, como los concursos (lanzamientos y saltos) y las carreras de velocidad y vallas, una de las claves sería saber cortar. Esto supone asumir que un lanzamiento o un salto, son independientes. Para poder cortar es necesario tener una rutina que permita volver a concentrarse en lo importante, aquello que permite generar un nuevo intento con toda la fuerza, velocidad y amplitud necesarias. Es interesante saber en qué momento tenemos que cortar, para ello hay que darse cuenta que lo que está pasando no ayuda a poder realizar bien nuestro salto, lanzamiento o carrera (en este caso pasa durante el calentamiento o previamente a la salida). Los pensamientos negativos o centrados en el futuro alejan la probabilidad de trabajar atendiendo a aquellas cosas que ayudan a conseguir el objetivo. Es importante que al identificar pensamientos que no contribuyen a construir se dejen pasar y se centre la atención en actividades que ayuden a prepararse para la acción. Puede que sea la ansiedad o la sensación de tensión muscular la que avise que hay que cortar. En este momento es importante relajarse a través de respiraciones diafragmáticas o con una técnica de relajación completa. Estas técnicas se han de trabajar de forma continua y progresiva en la dificultad para que sea efectiva en situaciones de competición. Tal vez el atleta se da cuenta que algo va mal cuando la técnica o la sensación de fatiga no corresponden a la intensidad de la ejecución. La ansiedad y la tensión excesiva disminuyen la precisión técnica y aumentan la fatiga. En ese momento hay que cortar con la rutina diseñada para poder centrarse de nuevo. Es posi- ble que tan sólo después de lanzar, saltar o terminar una carrera, el bajo rendimiento sirva para darse cuenta que estaba fuera de competición. El objetivo es identificar, darse cuenta cada vez antes, para poder cortar en la primera fase (pensamiento) y centrarse cada vez más rápido en aquellas actividades que ayudan a rendir al máximo. P ¿QUÉ SUCEDERÁ? ANSIEDAD RENDIMIENTO { Técnica Fatiga } TENSIÓN Muscular Cuando la prioridad es la toma de decisiones tácticas Las pruebas de medio fondo son en las que el rendimiento estará fundamentalmente filtrado por la lectura e interpretación que se hace de lo que está sucediendo en la carrera. En este tipo de pruebas es muy importante tener criterios de actuación en función de lo que sucede y asumir el riesgo de la decisión que se toma. Son pruebas en las que se combina la lectura de factores internos y externos. Es aconsejable elaborar una lista de cosas que pueden pasar y de alternativas de acción según lo que suceda. La decisión en el momento de competición se explica desde la “intuición”, pero anticipar la resolución de las diferentes situaciones (práctica imagi- 17 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 18 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades VISIÓN PODOLÓGICA DE LOS APOYOS EN ATLETISMO nada), conocer cuándo puedes responder (gestión del esfuerzo) y saber a qué atender (concentración), ayuda a que la toma de decisiones “intuitiva”, sea más ajustada y efectiva. Estos son ejemplos para trabajar algunos puntos de las diferentes prioridades que en muchas pruebas no se dan por separado. Es interesante conocer qué es lo que mejor funciona para cada atleta y evaluar dónde hay que priorizar en función de la necesidad. Por eso es importante recordar que los recursos se diseñan, se entrenan y se ajustan. Este entrenamiento y ajuste de recursos del que hablamos va a depender en cada momento de una serie de variables que brevemente consideramos necesarias mencionar y que es fundamental tener en cuenta para no poner en juego la motivación del atleta que puede verse afectada si se le apura por defecto o por exceso. • Hay que adaptar el ajuste y el entrenamiento a la propia idiosincrasia del sujeto. Igual que cada entrenador adapta, por ejemplo, las series o cargas físi- 18 cas a la resistencia y fuerza de su atleta, lo mismo a la hora de realizar un entrenamiento mental. Valorando incluso, en el caso que sea necesario, el entorno afectivo-emocional del atleta. • Valorar, como ya se ha dicho aquí, la disciplina realizada y el nivel, así como su categoría/edad. • Priorizar la eficacia ante la expectativa. Con estas pequeñas directrices consideradas atenderemos a las demandas psicológicas a las que debemos responder de forma prioritaria, teniendo en cuenta que éstas serán tan heterogéneas como variedad existe en el espectro global de un deporte con tantas disciplinas como el atletismo, y recordando siempre cómo las demandas planteadas durante los periodos de entrenamiento marcan una importante diferencia con respecto a las demandas surgidas en los momentos competitivos, basadas éstas en la intervención puntual sobre la activación general del organismo, en ocasiones facilitadoras de la ejecución técnica-táctica, pero en ocasiones interferentes de la misma. La marcha normal requiere apoyos alternativos de cada pierna, con fases de oscilación, apoyo y despegue con intensidades y tiempos de apoyo y vuelo simétricos. Al estar en posición bipodal, el eje de carga se divide a partir de la lumbo-sacra en dos vectores que estarían representados por los iliacos y por cada una de las piernas. Para que la estructura corporal esté amortiguada y a la vez sea estable y resistente es condición indispensable que cada uno de los segmentos esté situado con un cierto grado de desequilibrio con relación al resto, es decir, no hay dos huesos en las extremidades que estén matemáticamente alineados en el eje vertical, si bien deben mantener una relación vertical entre sus articulaciones de forma que el centro de articulación coxofemoral, el centro de rodilla y el del cuerpo astragalino, se sitúen en el mismo eje. La estabilidad se consigue por la congruencia de caras articulares, más la tensión de estructuras económicas, es decir, cápsulas, ligamentos y fascias, más la tensión muscular necesaria para mantener el centro de gravedad en una posición de equilibrio. Cuando caminamos realmente nos encontramos en una situación de desequilibrio constante directamente proporcional a la velocidad de desplazamiento del centro de gravedad para lo que debemos recurrir a elevar y adelantar alternativamente cada una de las piernas de forma armónica. Esto comporta un adelantamiento alternativo de los iliacos además de un movimiento de anteposición y cierre, y por tanto un movimiento tanto sobre un eje vertical como horizontal, sin que los pies pierdan su alineación con relación al centro de progresión. Para esto es necesario que el fémur en el pie de apoyo se encuentre en rotación interna y valgo pasando a una rotación externa y varo en la fase de oscilación hasta el primer contacto del talón. Consecuentemente, el pie en el momento de apoyo se encuentra en pronación mientras que en la fase de primer contacto de talón está en discreto varo. Por tanto se han producido unas rotaciones fisiológicas entre los diferentes segmentos debido a la acción equilibradora de los músculos. Para que el centro de gravedad no sufra variaciones laterales importantes, debemos desplazarlo cada vez hacia la 19 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 18 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades VISIÓN PODOLÓGICA DE LOS APOYOS EN ATLETISMO nada), conocer cuándo puedes responder (gestión del esfuerzo) y saber a qué atender (concentración), ayuda a que la toma de decisiones “intuitiva”, sea más ajustada y efectiva. Estos son ejemplos para trabajar algunos puntos de las diferentes prioridades que en muchas pruebas no se dan por separado. Es interesante conocer qué es lo que mejor funciona para cada atleta y evaluar dónde hay que priorizar en función de la necesidad. Por eso es importante recordar que los recursos se diseñan, se entrenan y se ajustan. Este entrenamiento y ajuste de recursos del que hablamos va a depender en cada momento de una serie de variables que brevemente consideramos necesarias mencionar y que es fundamental tener en cuenta para no poner en juego la motivación del atleta que puede verse afectada si se le apura por defecto o por exceso. • Hay que adaptar el ajuste y el entrenamiento a la propia idiosincrasia del sujeto. Igual que cada entrenador adapta, por ejemplo, las series o cargas físi- 18 cas a la resistencia y fuerza de su atleta, lo mismo a la hora de realizar un entrenamiento mental. Valorando incluso, en el caso que sea necesario, el entorno afectivo-emocional del atleta. • Valorar, como ya se ha dicho aquí, la disciplina realizada y el nivel, así como su categoría/edad. • Priorizar la eficacia ante la expectativa. Con estas pequeñas directrices consideradas atenderemos a las demandas psicológicas a las que debemos responder de forma prioritaria, teniendo en cuenta que éstas serán tan heterogéneas como variedad existe en el espectro global de un deporte con tantas disciplinas como el atletismo, y recordando siempre cómo las demandas planteadas durante los periodos de entrenamiento marcan una importante diferencia con respecto a las demandas surgidas en los momentos competitivos, basadas éstas en la intervención puntual sobre la activación general del organismo, en ocasiones facilitadoras de la ejecución técnica-táctica, pero en ocasiones interferentes de la misma. La marcha normal requiere apoyos alternativos de cada pierna, con fases de oscilación, apoyo y despegue con intensidades y tiempos de apoyo y vuelo simétricos. Al estar en posición bipodal, el eje de carga se divide a partir de la lumbo-sacra en dos vectores que estarían representados por los iliacos y por cada una de las piernas. Para que la estructura corporal esté amortiguada y a la vez sea estable y resistente es condición indispensable que cada uno de los segmentos esté situado con un cierto grado de desequilibrio con relación al resto, es decir, no hay dos huesos en las extremidades que estén matemáticamente alineados en el eje vertical, si bien deben mantener una relación vertical entre sus articulaciones de forma que el centro de articulación coxofemoral, el centro de rodilla y el del cuerpo astragalino, se sitúen en el mismo eje. La estabilidad se consigue por la congruencia de caras articulares, más la tensión de estructuras económicas, es decir, cápsulas, ligamentos y fascias, más la tensión muscular necesaria para mantener el centro de gravedad en una posición de equilibrio. Cuando caminamos realmente nos encontramos en una situación de desequilibrio constante directamente proporcional a la velocidad de desplazamiento del centro de gravedad para lo que debemos recurrir a elevar y adelantar alternativamente cada una de las piernas de forma armónica. Esto comporta un adelantamiento alternativo de los iliacos además de un movimiento de anteposición y cierre, y por tanto un movimiento tanto sobre un eje vertical como horizontal, sin que los pies pierdan su alineación con relación al centro de progresión. Para esto es necesario que el fémur en el pie de apoyo se encuentre en rotación interna y valgo pasando a una rotación externa y varo en la fase de oscilación hasta el primer contacto del talón. Consecuentemente, el pie en el momento de apoyo se encuentra en pronación mientras que en la fase de primer contacto de talón está en discreto varo. Por tanto se han producido unas rotaciones fisiológicas entre los diferentes segmentos debido a la acción equilibradora de los músculos. Para que el centro de gravedad no sufra variaciones laterales importantes, debemos desplazarlo cada vez hacia la 19 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 20 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades NUTRICIÓN / SUPLEMENTACIÓN EN EL ATLETISMO pierna que apoya, con lo que se economiza el trabajo de la región lumbar y se reduce el par formado por la proyección del centro de gravedad y la fuerza de reacción que el suelo ejerce sobre el pie de apoyo. En el momento de apoyo unipodal, la pronación del pie comporta de abajo a arriba una rotación interna de la extremidad, mientras que la acción de los rotadores externos de la cadera ejerce una rotación externa estando así la pierna sometida a un par de fuerzas opuestas, es decir, a una torsión. El exceso de pronación o la insuficiencia de los rotadores externos de cadera, forzarían una rotación interna exagerada y por tanto una compresión externa en tobillo y rodilla, mientras que un varismo o una limitación en la rotación fisiológica de la cadera, como un acortamiento de glúteos o piramidal, generaría una compresión en la interlínea interna de la rodilla. Además de la compresión, el momento de fricción intersegmentaria también se afectará cuando entre los dos extremos no exista una compensación, es decir, exista una pronación del pie con una limitación en la rotación interna de la cadera o retrotorsión femoral, aumenta además el momento torsional, de igual manera que un varismo con una antetorsión del fémur. Estas fuerzas axiales también se verán incrementadas cuando la pierna estructuralmente no tiene una relación fisiológica ya sea en el plano frontal, es decir, un genu varo o un genu valgo, como en el plano horizontal, como la variación de la torsión fisiológica de alguno de sus componentes (aumento o disminución de la torsión de la tibia o del fémur). La alimentación influye de manera muy directa en el rendimiento del deportista. Una dieta adecuada, en términos de cantidad y calidad, antes, durante y después del entrenamiento y de la competición, es imprescindible para optimizar este rendimiento físico. Se debe establecer un régimen dietético conveniente para el deportista según su biotipo, el deporte que practica y el momento deportivo en el que se encuentra, consiguiendo así un buen estado nutricional y unas condiciones óptimas de reserva de energía y nutrientes que le permitan afrontar con garantías el momento de la competición. La ingesta energética debe cubrir el gasto calórico y permitir al deportista mantener su peso corporal ideal. En la alimentación del deportista no todos los macronutrientes tienen que estar en las mismas cantidades, además estos porcentajes variarán en función del momento deportivo en el que se encuentre. Situándonos en la dieta general del deportista durante épocas de entrenamiento el desglose sería el siguiente: Hidratos de carbono Las recomendaciones de hidratos de carbono en los deportistas son del 50-60% del total de la cantidad de calorías ingeridas, de las cuales los carbohidratos simples (azúcares) no deben superar el 8%, el resto carbohidratos complejos (pasta, arroz, almidones en general). 20 Proteínas Se recomienda que las proteínas no superen del 15-20% de la energía. El consumo de proteínas debería variarse mediante el consumo de proteína tanto animal (pescado, carne, huevos...) como vegetal (legumbres, frutos secos...). La proteína obtenida de la mezcla de cereales y legumbres es de alto valor biológico y más fácil de digerir. • Deportes de resistencia: 1,2-1,5 g/kg • Deportes de resistencia y velocidad: 1,5-1,8 g/kg • Deportes de fuerza: 1,8-2,5 g/kg Lípidos La ingesta óptima de grasas de la dieta no debe superar un 25-30% del total de calorías. Si el contenido lipídico es elevado el rendimiento físico será menor, es factor de riesgo de obesidad y además puede derivar en problemas digestivos. Por el contrario si el contenido de grasa de la dieta es muy bajo hay riesgo de sufrir deficiencias en vitaminas liposolubles y ácidos grasos esenciales. La distribución energética en la dieta es clave para una buena utilización del sustrato energético. Una buena distribución energética consistiría en dividir el total de Kcal diarias en 4 ó 5 tomas, planificadas en función de las posibilidades del individuo y del objetivo nutricional que tengamos con el individuo. 21 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 20 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades NUTRICIÓN / SUPLEMENTACIÓN EN EL ATLETISMO pierna que apoya, con lo que se economiza el trabajo de la región lumbar y se reduce el par formado por la proyección del centro de gravedad y la fuerza de reacción que el suelo ejerce sobre el pie de apoyo. En el momento de apoyo unipodal, la pronación del pie comporta de abajo a arriba una rotación interna de la extremidad, mientras que la acción de los rotadores externos de la cadera ejerce una rotación externa estando así la pierna sometida a un par de fuerzas opuestas, es decir, a una torsión. El exceso de pronación o la insuficiencia de los rotadores externos de cadera, forzarían una rotación interna exagerada y por tanto una compresión externa en tobillo y rodilla, mientras que un varismo o una limitación en la rotación fisiológica de la cadera, como un acortamiento de glúteos o piramidal, generaría una compresión en la interlínea interna de la rodilla. Además de la compresión, el momento de fricción intersegmentaria también se afectará cuando entre los dos extremos no exista una compensación, es decir, exista una pronación del pie con una limitación en la rotación interna de la cadera o retrotorsión femoral, aumenta además el momento torsional, de igual manera que un varismo con una antetorsión del fémur. Estas fuerzas axiales también se verán incrementadas cuando la pierna estructuralmente no tiene una relación fisiológica ya sea en el plano frontal, es decir, un genu varo o un genu valgo, como en el plano horizontal, como la variación de la torsión fisiológica de alguno de sus componentes (aumento o disminución de la torsión de la tibia o del fémur). La alimentación influye de manera muy directa en el rendimiento del deportista. Una dieta adecuada, en términos de cantidad y calidad, antes, durante y después del entrenamiento y de la competición, es imprescindible para optimizar este rendimiento físico. Se debe establecer un régimen dietético conveniente para el deportista según su biotipo, el deporte que practica y el momento deportivo en el que se encuentra, consiguiendo así un buen estado nutricional y unas condiciones óptimas de reserva de energía y nutrientes que le permitan afrontar con garantías el momento de la competición. La ingesta energética debe cubrir el gasto calórico y permitir al deportista mantener su peso corporal ideal. En la alimentación del deportista no todos los macronutrientes tienen que estar en las mismas cantidades, además estos porcentajes variarán en función del momento deportivo en el que se encuentre. Situándonos en la dieta general del deportista durante épocas de entrenamiento el desglose sería el siguiente: Hidratos de carbono Las recomendaciones de hidratos de carbono en los deportistas son del 50-60% del total de la cantidad de calorías ingeridas, de las cuales los carbohidratos simples (azúcares) no deben superar el 8%, el resto carbohidratos complejos (pasta, arroz, almidones en general). 20 Proteínas Se recomienda que las proteínas no superen del 15-20% de la energía. El consumo de proteínas debería variarse mediante el consumo de proteína tanto animal (pescado, carne, huevos...) como vegetal (legumbres, frutos secos...). La proteína obtenida de la mezcla de cereales y legumbres es de alto valor biológico y más fácil de digerir. • Deportes de resistencia: 1,2-1,5 g/kg • Deportes de resistencia y velocidad: 1,5-1,8 g/kg • Deportes de fuerza: 1,8-2,5 g/kg Lípidos La ingesta óptima de grasas de la dieta no debe superar un 25-30% del total de calorías. Si el contenido lipídico es elevado el rendimiento físico será menor, es factor de riesgo de obesidad y además puede derivar en problemas digestivos. Por el contrario si el contenido de grasa de la dieta es muy bajo hay riesgo de sufrir deficiencias en vitaminas liposolubles y ácidos grasos esenciales. La distribución energética en la dieta es clave para una buena utilización del sustrato energético. Una buena distribución energética consistiría en dividir el total de Kcal diarias en 4 ó 5 tomas, planificadas en función de las posibilidades del individuo y del objetivo nutricional que tengamos con el individuo. 21 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 22 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Distribución de principios inmediatos Hidratos de carbono: 50-60% Proteínas: 15-20% Lípidos: 25-30% El ejemplo de reparto energético por día en una dieta equilibrada sería: Desayuno: 25% * Esta distribución puede variar en función de los horarios de ent renami ento, est udi os o laboral del deportista. En relación a cuándo se debe comer, esto depende de las sesiones de entrenamiento. No conviene realizar entrenamientos inmediatamente después de comer sino que lo ideal es dejar 2 ó 3 horas entre la comida y el entrenamiento. Media mañana: 5% Medicina en Atletismo: Generalidades Recomendaciones de tentempiés durante la competición por modalidad • Carreras de velocidad y vallas: Se refiere a las distancias más cortas del programa atlético y van del 50 y 60 m a los 400 m, realizadas a gran velocidad. Son pruebas explosivas por lo que necesitan energía rápida. Ejemplo: 1 fruta grande o 1 barrita de muesli o ½ bolsa de palitos de pan. • DURANTE : Recomendaremos al atleta que ingiera pequeñas porciones de fruta fresca o secas y pequeñas porciones de barritas energéticas, incluso algún gel si se encuentra muy debilitado en la fase final. Además haremos hincapié en la hidratación estableciendo puntos de avituallamiento en los que el atleta pueda sustraer bebidas hidroelectrolíticas. • DESPUÉS: Es interesante empezar la reposición de líquidos inmediatamente después del ejercicio en frecuencia y cantidades adaptadas individualmente. Pueden utilizarse bebidas que contengan hidratos de carbono para facilitar la recuperación del glucógeno muscular. Recomendaremos hidratarse en la medida de lo posible antes de salir a pista a base de bebidas hidroelectrolíticas. Comida: 30% Merienda: 10% Cena: 30% • Carreras de fondo, maratón y marcha: El atleta en estas modalidades necesita 2 objetivos claros: • EJEMPLO DE PLANIFICACIÓN DE UN DÍA DE COMPETICIÓN POR LA MAÑANA (10:00H) Cuando la competición es por la mañana tendremos que realizar un desayuno completo, equilibrado y bajo en grasas. Desayuno precompetitivo (8:00h) • 1 vaso zumo de frutas natural o 1 pieza de fruta natural • 1 bol de leche entera o semidesnatada o 2 yogures • 1 bol de cereales o ½ bol de muesli • 2 rebanadas de pan (60 g) • 1 loncha de queso fresco (40 g) o 2 lonchas de queso semi (30 g) o 2 lonchas de pavo cocido o jamón york (40 g) • 1 cucharada sopera de mermelada o miel • Café, té o infusiones (sin abusar) No tomar bollería industrial, embutidos grasos, o fritos (Realizar el desayuno 1h 30 min ó 2 horas antes de la competición) 22 • • Conservar los niveles de glucógeno elevados, ya que son pruebas de resistencia por excelencia. Para ello debemos potenciar alimentos como cereales, legumbres, frutas y verduras. Los días previos a la carrera (3 ó 4 días) se incrementa aún más la ingesta de hidratos de carbono, llegando a ser del orden del 70% del consumo total de calorías. Mantener un buen nivel de hidratación. Tan importante como el glucógeno para el corredor es el agua, ya que una mala hidratación disminuye el rendimiento. El agua es importante por dos razones: permite un estado de hidratación adecuado y facilita el almacenamiento de hidratos de carbono en forma de glucógeno. En este caso dividiremos la carrera en varias partes: ANTES, DURANTE y DESPUÉS: ANTES: El atleta, la hora previa a la competición, se hidratará con bebida hidroelectrolítica y recomendaremos la ingesta de un tentempié que nos aporte unos 30 g de hidratos de carbono: • Salto ( altura, triple, pértiga) : El saltador inicia su competición en la altura o distancia que estime oportuna y dispone de tres intentos para superarla. Es un deporte de fuerza explosiva por lo cual necesita energía rápida y sentirse ligero a la hora de saltar. Después de realizar el desayuno dejando el margen de 1h 30min de digestión, recomendaremos hidratarse en la medida de lo posible a base de una bebida hidroelectrolítica. Durante el descanso entre salto y salto se recomienda ingerir una barrita energética y pequeños trozos de fruta fresca dividida en porciones pequeñas para evitar molestias gástricas e incluso alguna galleta simple, además de seguir hidratándose con la bebida hidroelectrolítica habitual. 23 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 22 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Distribución de principios inmediatos Hidratos de carbono: 50-60% Proteínas: 15-20% Lípidos: 25-30% El ejemplo de reparto energético por día en una dieta equilibrada sería: Desayuno: 25% * Esta distribución puede variar en función de los horarios de ent renami ento, est udi os o laboral del deportista. En relación a cuándo se debe comer, esto depende de las sesiones de entrenamiento. No conviene realizar entrenamientos inmediatamente después de comer sino que lo ideal es dejar 2 ó 3 horas entre la comida y el entrenamiento. Media mañana: 5% Medicina en Atletismo: Generalidades Recomendaciones de tentempiés durante la competición por modalidad • Carreras de velocidad y vallas: Se refiere a las distancias más cortas del programa atlético y van del 50 y 60 m a los 400 m, realizadas a gran velocidad. Son pruebas explosivas por lo que necesitan energía rápida. Ejemplo: 1 fruta grande o 1 barrita de muesli o ½ bolsa de palitos de pan. • DURANTE : Recomendaremos al atleta que ingiera pequeñas porciones de fruta fresca o secas y pequeñas porciones de barritas energéticas, incluso algún gel si se encuentra muy debilitado en la fase final. Además haremos hincapié en la hidratación estableciendo puntos de avituallamiento en los que el atleta pueda sustraer bebidas hidroelectrolíticas. • DESPUÉS: Es interesante empezar la reposición de líquidos inmediatamente después del ejercicio en frecuencia y cantidades adaptadas individualmente. Pueden utilizarse bebidas que contengan hidratos de carbono para facilitar la recuperación del glucógeno muscular. Recomendaremos hidratarse en la medida de lo posible antes de salir a pista a base de bebidas hidroelectrolíticas. Comida: 30% Merienda: 10% Cena: 30% • Carreras de fondo, maratón y marcha: El atleta en estas modalidades necesita 2 objetivos claros: • EJEMPLO DE PLANIFICACIÓN DE UN DÍA DE COMPETICIÓN POR LA MAÑANA (10:00H) Cuando la competición es por la mañana tendremos que realizar un desayuno completo, equilibrado y bajo en grasas. Desayuno precompetitivo (8:00h) • 1 vaso zumo de frutas natural o 1 pieza de fruta natural • 1 bol de leche entera o semidesnatada o 2 yogures • 1 bol de cereales o ½ bol de muesli • 2 rebanadas de pan (60 g) • 1 loncha de queso fresco (40 g) o 2 lonchas de queso semi (30 g) o 2 lonchas de pavo cocido o jamón york (40 g) • 1 cucharada sopera de mermelada o miel • Café, té o infusiones (sin abusar) No tomar bollería industrial, embutidos grasos, o fritos (Realizar el desayuno 1h 30 min ó 2 horas antes de la competición) 22 • • Conservar los niveles de glucógeno elevados, ya que son pruebas de resistencia por excelencia. Para ello debemos potenciar alimentos como cereales, legumbres, frutas y verduras. Los días previos a la carrera (3 ó 4 días) se incrementa aún más la ingesta de hidratos de carbono, llegando a ser del orden del 70% del consumo total de calorías. Mantener un buen nivel de hidratación. Tan importante como el glucógeno para el corredor es el agua, ya que una mala hidratación disminuye el rendimiento. El agua es importante por dos razones: permite un estado de hidratación adecuado y facilita el almacenamiento de hidratos de carbono en forma de glucógeno. En este caso dividiremos la carrera en varias partes: ANTES, DURANTE y DESPUÉS: ANTES: El atleta, la hora previa a la competición, se hidratará con bebida hidroelectrolítica y recomendaremos la ingesta de un tentempié que nos aporte unos 30 g de hidratos de carbono: • Salto ( altura, triple, pértiga) : El saltador inicia su competición en la altura o distancia que estime oportuna y dispone de tres intentos para superarla. Es un deporte de fuerza explosiva por lo cual necesita energía rápida y sentirse ligero a la hora de saltar. Después de realizar el desayuno dejando el margen de 1h 30min de digestión, recomendaremos hidratarse en la medida de lo posible a base de una bebida hidroelectrolítica. Durante el descanso entre salto y salto se recomienda ingerir una barrita energética y pequeños trozos de fruta fresca dividida en porciones pequeñas para evitar molestias gástricas e incluso alguna galleta simple, además de seguir hidratándose con la bebida hidroelectrolítica habitual. 23 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 24 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades EPIDEMIOLOGÍA DE LAS LESIONES EN EL ATLETISMO ( peso, martillo, • Lanzamiento disco, jabalina): Es un deporte básicamente de fuerza. Para conseguir un aumento de la masa muscular resulta interesante para estas personas combinar alimentos hidrocarbonados (pan, pasta, patatas, arroz, legumbres, frutas y verduras) con otros proteicos (carnes, pescados, huevos, leche y derivados). Si se toman combinados antes del ejercicio ayudan a la formación del músculo, y si se ingieren después del entrenamiento se favorece la recuperación del glucógeno y se evita la pérdida de proteínas. (ej: bocadillo de pavo o yogur con cereales). Asimismo, la hidratación es fundamental para que el rendimiento sea óptimo, por lo que se reco- Comida post-competición • • • 1er Plato: *arroz o pasta o (sin salsas grasas) cuscús mienda ingerir una cantidad suficiente de líquidos antes, durante y después de la práctica deportiva. Es un error beber sólo cuando se tiene sed, ya que para entonces el organismo ha comenzado a deshidratarse. • Pruebas combi nadas: Mezcla pruebas de resistencia y explosivas por lo cual iremos tomando referencia de los apartados anteriores en función de la prueba que realice en cada momento. 1,5 a 2 horas después de la competición iniciaremos al aporte de alimentos sólidos ( comida) con el objetivo de alcanzar los 400-600 g de hidratos de carbono ( incluyendo merienda y cena) en 24 horas. Merienda post-competición Cena post-competición • 1 er Plato: *Crema de verduras o sopa de ave o vegetales crudos o cocidos 1 barrita de cereales • Guarnición: 1 patata mediana o 3 c/pasta o arroz 1 fruta • 2º Plato: 1 ración de carne (125 g) (pavo, pollo, ternera o cerdo) o pescado blanco o azul o huevo (tortilla, vapor o cocidos 2 unidades) 1 yogur 3 nueces 2º Plato: 1 ración de carne (125 g) (pavo, pollo, ternera o cerdo) o pescado blanco o Azul (150 g) Guarnición: 1 plato de vegetales crudos o cocidos (excepto flatulentos) 1 bocadillo de pavo o jamón 1 rebanada de pan (40 g) • Postre: 1 ó 2 piezas de fruta o yogur (No tomar postres elaborados, sobre todo aquellos que contengan nata o azucares refinados) 1 zumo natural de frutas 1 bolsa de palitos de pan 1 rebanada de pan (40 g) • 1 queso fresco pequeño (40 g) *En función del biotipo del deportista variará la cantidad (g) de hidratos de carbono de los 1º platos. 24 Postre: 1 ó 2 piezas de fruta / yogur, cuajada o requesón con miel o mermelada La incidencia de lesiones que muestran los estudios realizados sobre el atletismo es algo dispar. Varios de ellos se han realizado en universidades americanas como parte de estudios comparativos con otros deportes. Los estudios publicados en series exclusivas de deportistas practicantes de atletismo indican porcentajes de atletas lesionados dentro de los diversos grupos que van desde 10% de atletas lesionados hasta 76%. En un reciente estudio en el Campeonato Mundial de Atletismo de Osaka 2007 el autor encontró una incidencia del 10%. En series de corredores de larga distancia las incidencias son similares y van desde el 20% hasta el 80%. La prevalencia mostrada en función de la exposición (número de lesiones por cada 1.000 horas de entrenamiento) va de 2,5 a 5,5. En estos estudios se utilizaron diversos periodos de observación, distintas definiciones de lesión y la forma de recoger los datos fue también diferente. Por tanto, es difícil comparar datos de unos estudios a otros, aunque en cualquier caso, se puede concluir que las incidencias lesionales en el atletismo son moderadamente altas. estudio que la incidencia lesional fue mayor en vallistas, seguidos de medio-fondistas y velocistas con índices algo menores en pruebas de saltos, pruebas combinadas, fondo, marcha y lanzamientos. El autor en su tesis doctoral halló que la especialidad con mayor número de lesiones fue la de vallas. En un reciente estudio en el Campeonato Mundial de Atletismo de Osaka 2007 el autor encontró que la especialidad que más se lesionó fue la de pruebas combinadas. En cualquier caso, no disponemos de datos científicos suficientes para evaluar si existen un grupo de especialidades atléticas que tenga mayor incidencia de lesiones que otras. El porcentaje de atletas lesionados en función de la especialidad ha sido escasamente analizado en la literatura. Sin embargo, podemos citar que D’Souza señala que los velocistas son los atletas que más se lesionan seguidos de vallistas, fondistas y lanzadores. Maestro y colaboradores indicaron que en su población de estudio los saltadores fueron los atletas con mayor índice lesional seguidos de lanzadores, velocistas y fondistas. Bennell y Crossley no encontraron diferencias significativas entre las incidencias lesionales entre los diferentes grupos de atletas. Por otro lado Villalón y colaboradores hallaron en su 25 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 24 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades EPIDEMIOLOGÍA DE LAS LESIONES EN EL ATLETISMO ( peso, martillo, • Lanzamiento disco, jabalina): Es un deporte básicamente de fuerza. Para conseguir un aumento de la masa muscular resulta interesante para estas personas combinar alimentos hidrocarbonados (pan, pasta, patatas, arroz, legumbres, frutas y verduras) con otros proteicos (carnes, pescados, huevos, leche y derivados). Si se toman combinados antes del ejercicio ayudan a la formación del músculo, y si se ingieren después del entrenamiento se favorece la recuperación del glucógeno y se evita la pérdida de proteínas. (ej: bocadillo de pavo o yogur con cereales). Asimismo, la hidratación es fundamental para que el rendimiento sea óptimo, por lo que se reco- Comida post-competición • • • 1er Plato: *arroz o pasta o (sin salsas grasas) cuscús mienda ingerir una cantidad suficiente de líquidos antes, durante y después de la práctica deportiva. Es un error beber sólo cuando se tiene sed, ya que para entonces el organismo ha comenzado a deshidratarse. • Pruebas combi nadas: Mezcla pruebas de resistencia y explosivas por lo cual iremos tomando referencia de los apartados anteriores en función de la prueba que realice en cada momento. 1,5 a 2 horas después de la competición iniciaremos al aporte de alimentos sólidos ( comida) con el objetivo de alcanzar los 400-600 g de hidratos de carbono ( incluyendo merienda y cena) en 24 horas. Merienda post-competición Cena post-competición • 1 er Plato: *Crema de verduras o sopa de ave o vegetales crudos o cocidos 1 barrita de cereales • Guarnición: 1 patata mediana o 3 c/pasta o arroz 1 fruta • 2º Plato: 1 ración de carne (125 g) (pavo, pollo, ternera o cerdo) o pescado blanco o azul o huevo (tortilla, vapor o cocidos 2 unidades) 1 yogur 3 nueces 2º Plato: 1 ración de carne (125 g) (pavo, pollo, ternera o cerdo) o pescado blanco o Azul (150 g) Guarnición: 1 plato de vegetales crudos o cocidos (excepto flatulentos) 1 bocadillo de pavo o jamón 1 rebanada de pan (40 g) • Postre: 1 ó 2 piezas de fruta o yogur (No tomar postres elaborados, sobre todo aquellos que contengan nata o azucares refinados) 1 zumo natural de frutas 1 bolsa de palitos de pan 1 rebanada de pan (40 g) • 1 queso fresco pequeño (40 g) *En función del biotipo del deportista variará la cantidad (g) de hidratos de carbono de los 1º platos. 24 Postre: 1 ó 2 piezas de fruta / yogur, cuajada o requesón con miel o mermelada La incidencia de lesiones que muestran los estudios realizados sobre el atletismo es algo dispar. Varios de ellos se han realizado en universidades americanas como parte de estudios comparativos con otros deportes. Los estudios publicados en series exclusivas de deportistas practicantes de atletismo indican porcentajes de atletas lesionados dentro de los diversos grupos que van desde 10% de atletas lesionados hasta 76%. En un reciente estudio en el Campeonato Mundial de Atletismo de Osaka 2007 el autor encontró una incidencia del 10%. En series de corredores de larga distancia las incidencias son similares y van desde el 20% hasta el 80%. La prevalencia mostrada en función de la exposición (número de lesiones por cada 1.000 horas de entrenamiento) va de 2,5 a 5,5. En estos estudios se utilizaron diversos periodos de observación, distintas definiciones de lesión y la forma de recoger los datos fue también diferente. Por tanto, es difícil comparar datos de unos estudios a otros, aunque en cualquier caso, se puede concluir que las incidencias lesionales en el atletismo son moderadamente altas. estudio que la incidencia lesional fue mayor en vallistas, seguidos de medio-fondistas y velocistas con índices algo menores en pruebas de saltos, pruebas combinadas, fondo, marcha y lanzamientos. El autor en su tesis doctoral halló que la especialidad con mayor número de lesiones fue la de vallas. En un reciente estudio en el Campeonato Mundial de Atletismo de Osaka 2007 el autor encontró que la especialidad que más se lesionó fue la de pruebas combinadas. En cualquier caso, no disponemos de datos científicos suficientes para evaluar si existen un grupo de especialidades atléticas que tenga mayor incidencia de lesiones que otras. El porcentaje de atletas lesionados en función de la especialidad ha sido escasamente analizado en la literatura. Sin embargo, podemos citar que D’Souza señala que los velocistas son los atletas que más se lesionan seguidos de vallistas, fondistas y lanzadores. Maestro y colaboradores indicaron que en su población de estudio los saltadores fueron los atletas con mayor índice lesional seguidos de lanzadores, velocistas y fondistas. Bennell y Crossley no encontraron diferencias significativas entre las incidencias lesionales entre los diferentes grupos de atletas. Por otro lado Villalón y colaboradores hallaron en su 25 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 26 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE La mayoría de las lesiones en el atletismo son por sobrecarga debidas a las muchas horas de entrenamiento que se requiere en especialidades técnicas como las vallas, los saltos o los lanzamientos. En la carrera también se dan más las lesiones por sobrecarga debido a los grandes volúmenes de entrenamiento y el elevado número de kilómetros que se entrenan a la semana. En general, en el atletismo se puede indicar que aproximadamente 70% de las lesiones son por sobrecarga y alrededor del 30% agudas. Así mismo, de los estudios publicados podemos deducir que los atletas practicantes de las especialidades de velocidad, saltos, lanzamientos y pruebas combinadas padecen en general más lesiones por sobrecarga. Estas especialidades presentan también más lesiones agudas en los miembros inferiores que los corredores de media y larga distancia. Hay pocos datos disponibles sobre la incidencia de los tipos de lesiones más frecuentes en el atletismo, si bien varios estudios han informado de las lesiones más habituales en este deporte. Así Watson y DiMartino citan la lesión más frecuente como el síndrome de estrés tibial medial seguido del esguince de tobillo y después la tendinopatía patelar, la rotura fibrilar de los aductores, la lumbalgia, la rotura fibrilar de los isquio-surales y otras lesiones menos habituales. Para Bennell y Crossley los diagnósticos más frecuentes en su estudio fueron la fractura de fatiga, seguida de las roturas fibrilares de los isquiosurales, las patologías de sobrecarga de la rodilla (la condropatía femoropatelar, la tendinosis patelar y el síndrome de la cintilla iliotibial), las tendinopatías del tobillo y el pie, el síndrome de estrés tibial medial y la lumbalgia. Parker sugirió que la lesión más frecuente en los atletas es la rotura fibrilar y la segunda los esguinces de tobillo. Para Lohrer las lesiones musculares en los atletas pueden encon- 26 trarse principalmente en el área isquiosural con un énfasis sobre el bíceps femoral mientras que el mismo autor establece que la lesión tendinosa degenerativa más frecuente es la tendinitis aquílea. El autor en su tesis doctoral halló que el tipo de lesión más habitual fue la contractura. En un reciente estudio en el Campeonato Mundial de Atletismo de Osaka 2007 el autor encontró que la lesión más frecuente fue la rotura fibrilar del muslo. Existen pocos estudios que informen de la distribución de las lesiones en el atletismo o en la carrera teniendo en cuenta el tejido lesionado. Podemos decir que las lesiones musculares de sobrecarga son las lesiones más frecuentes en el atletismo llegando a suponer el 67% de las lesiones en algunos estudios. Maestro y colaboradores se toparon con una mayor predominancia de las lesiones musculares (32%) sobre las tendinosas (28%), las ligamentosas (14%) y articulares (13%) entre otras. Villalón y colaboradores encontraron también las lesiones musculares como las más frecuentes (32,8%), seguidas por las tendinosas (28,8%), las ligamentarias (10,8%), las óseas (5,7%) y las de otros tejidos (cartílago, fascia, bursa, menisco y nervio que suponen el 16,6%). Trouss et al. hallaron que de todas las consultas médicas que llevaron a cabo en el Equipo Júnior Francés de atletismo en los Campeonatos del Mundo y de Europa de la categoría de 1997 a 2000, el 47,5% fueron musculares, 26,5% articulares y 25% tendinosas. Sevène, al estudiar las lesiones padecidas por los velocistas del Equipo Francés de atletismo durante las concentraciones y las competiciones en los años 1997 a 2000, señaló que el 36,6% de las lesiones de aparato locomotor se dieron en los músculos, 16% en los tendones, 13,7% en las articulaciones y 9,1% en los huesos. El autor en su tesis doctoral halló también Medicina en Atletismo: Generalidades que el tejido con mayor número de lesiones fue el músculo. Lohrer señala una variación sobre los resultados anteriores pues este autor observó una mayor incidencia de las lesiones tendinosas (45%) en el equipo nacional de atletismo alemán seguidas de las lesiones musculares (35%). En el estudio que realizaron Bennell y Crossley en 1996 registraron como el lugar más habitual la pierna (27,7%), seguido del muslo (21,5%), después la rodilla (16,2%), el pie (14,6%), la espalda/pelvis/cadera (13%) y el tobillo (7,3%). Para Villalón y colaboradores la localización más frecuente de las lesiones en su grupo de atletas estudiados fue el tobillopie (39,3%), después muslo (17,2%), rodilla (14,9%), raquis (10,5%), cadera (3,38%) y con menores porcentajes otras regiones anatómicas. Como se puede deducir de los estudios anteriores la mayoría de las lesiones ocurren en los miembros inferiores. Dependiendo de la especialidad atlética, la localización puede variar. Así los velocistas, los vallistas y los saltadores se lesionan más en el muslo, los medio fondistas y los fondistas en la pierna, los lanzadores en rodilla y codo/hombro según la prueba. Steinbrück halló una alta incidencia de lesiones raquídeas (42,1%) en los lanzadores de jabalina y de rodilla en los saltadores (37%). Rebella y colaboradores recientemente han mostrado que en los saltadores de pértiga la región en la que más lesiones se asientan es la columna lumbar. Hay muy poca información publicada sobre la severidad de las lesiones en el atletismo, la pérdida de tiempo de entrenamiento o competición debido a la lesión y la incidencia de lesiones catastróficas. La restricción en el tiempo dedicado al entrenamiento de la carrera es habitual entre los corredores pero está pobremente documentada en la literatura científica. La mayoría de las lesio- nes, como ya hemos visto anteriormente, son lesiones musculares que no son serias y curan bastante rápidamente. Las tendinopatías aquíleas y patelares son también frecuentes y requieren varias semanas de tratamiento antes de que se pueda reanudar la actividad al cien por cien. Hay algunas otras patologías más severas como las fracturas de fatiga que requieren varios meses de tratamiento para la curación. Afortunadamente muy pocas de las lesiones que se producen en el atletismo son catastróficas. La excepción se da en la prueba de salto con pértiga. Boden et al. informaron de 32 lesiones catastróficas en saltadores de pértiga entre 1982 y 1998 recogidas por el National Center for Catastrophic Sports Injury Research de los Estados Unidos de América. De ellas 50% causaron la muerte del atleta y 19% originaron minusvalías permanentes importantes. En el 78% de los casos, los atletas cayeron directamente fuera de la colchoneta, o en ella con el cuerpo y con la cabeza en el suelo que la rodea. Los lanzamientos son pruebas inherentemente peligrosas para sus practicantes, ya que pueden suponer impactos con proyectiles, ocasionando conmociones y contusiones cerebrales, fracturas de cráneo y heridas penetrantes. Otro aspecto de las lesiones en las pruebas de lanzamientos es el peligro al que se exponen los espectadores cuando el implemento es liberado de manera prematura o defectuosa cayendo fuera del sector de caídas sobre ellos u otros atletas. Esto ha ocurrido en pruebas de lanzamientos de jabalina, disco y martillo. Por lo que se refiere a las lesiones catastróficas durante la carrera, éstas se relacionan en su mayoría por colisiones de los corredores con un automóvil o motocicleta u otros objetos. La edad puede determinar ciertos tipos de lesión. Si bien no ha sido posible probar que la edad está relacionada estadísticamente con 27 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 26 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE La mayoría de las lesiones en el atletismo son por sobrecarga debidas a las muchas horas de entrenamiento que se requiere en especialidades técnicas como las vallas, los saltos o los lanzamientos. En la carrera también se dan más las lesiones por sobrecarga debido a los grandes volúmenes de entrenamiento y el elevado número de kilómetros que se entrenan a la semana. En general, en el atletismo se puede indicar que aproximadamente 70% de las lesiones son por sobrecarga y alrededor del 30% agudas. Así mismo, de los estudios publicados podemos deducir que los atletas practicantes de las especialidades de velocidad, saltos, lanzamientos y pruebas combinadas padecen en general más lesiones por sobrecarga. Estas especialidades presentan también más lesiones agudas en los miembros inferiores que los corredores de media y larga distancia. Hay pocos datos disponibles sobre la incidencia de los tipos de lesiones más frecuentes en el atletismo, si bien varios estudios han informado de las lesiones más habituales en este deporte. Así Watson y DiMartino citan la lesión más frecuente como el síndrome de estrés tibial medial seguido del esguince de tobillo y después la tendinopatía patelar, la rotura fibrilar de los aductores, la lumbalgia, la rotura fibrilar de los isquio-surales y otras lesiones menos habituales. Para Bennell y Crossley los diagnósticos más frecuentes en su estudio fueron la fractura de fatiga, seguida de las roturas fibrilares de los isquiosurales, las patologías de sobrecarga de la rodilla (la condropatía femoropatelar, la tendinosis patelar y el síndrome de la cintilla iliotibial), las tendinopatías del tobillo y el pie, el síndrome de estrés tibial medial y la lumbalgia. Parker sugirió que la lesión más frecuente en los atletas es la rotura fibrilar y la segunda los esguinces de tobillo. Para Lohrer las lesiones musculares en los atletas pueden encon- 26 trarse principalmente en el área isquiosural con un énfasis sobre el bíceps femoral mientras que el mismo autor establece que la lesión tendinosa degenerativa más frecuente es la tendinitis aquílea. El autor en su tesis doctoral halló que el tipo de lesión más habitual fue la contractura. En un reciente estudio en el Campeonato Mundial de Atletismo de Osaka 2007 el autor encontró que la lesión más frecuente fue la rotura fibrilar del muslo. Existen pocos estudios que informen de la distribución de las lesiones en el atletismo o en la carrera teniendo en cuenta el tejido lesionado. Podemos decir que las lesiones musculares de sobrecarga son las lesiones más frecuentes en el atletismo llegando a suponer el 67% de las lesiones en algunos estudios. Maestro y colaboradores se toparon con una mayor predominancia de las lesiones musculares (32%) sobre las tendinosas (28%), las ligamentosas (14%) y articulares (13%) entre otras. Villalón y colaboradores encontraron también las lesiones musculares como las más frecuentes (32,8%), seguidas por las tendinosas (28,8%), las ligamentarias (10,8%), las óseas (5,7%) y las de otros tejidos (cartílago, fascia, bursa, menisco y nervio que suponen el 16,6%). Trouss et al. hallaron que de todas las consultas médicas que llevaron a cabo en el Equipo Júnior Francés de atletismo en los Campeonatos del Mundo y de Europa de la categoría de 1997 a 2000, el 47,5% fueron musculares, 26,5% articulares y 25% tendinosas. Sevène, al estudiar las lesiones padecidas por los velocistas del Equipo Francés de atletismo durante las concentraciones y las competiciones en los años 1997 a 2000, señaló que el 36,6% de las lesiones de aparato locomotor se dieron en los músculos, 16% en los tendones, 13,7% en las articulaciones y 9,1% en los huesos. El autor en su tesis doctoral halló también Medicina en Atletismo: Generalidades que el tejido con mayor número de lesiones fue el músculo. Lohrer señala una variación sobre los resultados anteriores pues este autor observó una mayor incidencia de las lesiones tendinosas (45%) en el equipo nacional de atletismo alemán seguidas de las lesiones musculares (35%). En el estudio que realizaron Bennell y Crossley en 1996 registraron como el lugar más habitual la pierna (27,7%), seguido del muslo (21,5%), después la rodilla (16,2%), el pie (14,6%), la espalda/pelvis/cadera (13%) y el tobillo (7,3%). Para Villalón y colaboradores la localización más frecuente de las lesiones en su grupo de atletas estudiados fue el tobillopie (39,3%), después muslo (17,2%), rodilla (14,9%), raquis (10,5%), cadera (3,38%) y con menores porcentajes otras regiones anatómicas. Como se puede deducir de los estudios anteriores la mayoría de las lesiones ocurren en los miembros inferiores. Dependiendo de la especialidad atlética, la localización puede variar. Así los velocistas, los vallistas y los saltadores se lesionan más en el muslo, los medio fondistas y los fondistas en la pierna, los lanzadores en rodilla y codo/hombro según la prueba. Steinbrück halló una alta incidencia de lesiones raquídeas (42,1%) en los lanzadores de jabalina y de rodilla en los saltadores (37%). Rebella y colaboradores recientemente han mostrado que en los saltadores de pértiga la región en la que más lesiones se asientan es la columna lumbar. Hay muy poca información publicada sobre la severidad de las lesiones en el atletismo, la pérdida de tiempo de entrenamiento o competición debido a la lesión y la incidencia de lesiones catastróficas. La restricción en el tiempo dedicado al entrenamiento de la carrera es habitual entre los corredores pero está pobremente documentada en la literatura científica. La mayoría de las lesio- nes, como ya hemos visto anteriormente, son lesiones musculares que no son serias y curan bastante rápidamente. Las tendinopatías aquíleas y patelares son también frecuentes y requieren varias semanas de tratamiento antes de que se pueda reanudar la actividad al cien por cien. Hay algunas otras patologías más severas como las fracturas de fatiga que requieren varios meses de tratamiento para la curación. Afortunadamente muy pocas de las lesiones que se producen en el atletismo son catastróficas. La excepción se da en la prueba de salto con pértiga. Boden et al. informaron de 32 lesiones catastróficas en saltadores de pértiga entre 1982 y 1998 recogidas por el National Center for Catastrophic Sports Injury Research de los Estados Unidos de América. De ellas 50% causaron la muerte del atleta y 19% originaron minusvalías permanentes importantes. En el 78% de los casos, los atletas cayeron directamente fuera de la colchoneta, o en ella con el cuerpo y con la cabeza en el suelo que la rodea. Los lanzamientos son pruebas inherentemente peligrosas para sus practicantes, ya que pueden suponer impactos con proyectiles, ocasionando conmociones y contusiones cerebrales, fracturas de cráneo y heridas penetrantes. Otro aspecto de las lesiones en las pruebas de lanzamientos es el peligro al que se exponen los espectadores cuando el implemento es liberado de manera prematura o defectuosa cayendo fuera del sector de caídas sobre ellos u otros atletas. Esto ha ocurrido en pruebas de lanzamientos de jabalina, disco y martillo. Por lo que se refiere a las lesiones catastróficas durante la carrera, éstas se relacionan en su mayoría por colisiones de los corredores con un automóvil o motocicleta u otros objetos. La edad puede determinar ciertos tipos de lesión. Si bien no ha sido posible probar que la edad está relacionada estadísticamente con 27 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 28 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE las lesiones en el atletismo, algunos estudios han mostrado incidencias no significativamente mayores de lesiones en los atletas senior que en los júnior o juveniles. Bennell y Crossley encontraron que los atletas de más edad tenían más posibilidades de padecer varias lesiones. Por tanto, es difícil señalar cuál es la influencia exacta de la edad en las lesiones en el atletismo. El sexo “per se” no parece ser un factor de riesgo importante de lesión. Algunos autores encontraron sin embargo una incidencia no significativamente mayor en hombres que en mujeres. Otros investigadores en cambio hallaron índices lesionales mayores en mujeres. Como resumen, podemos concluir que el atletismo es un deporte con una incidencia lesional entre moderada y alta, con predominio de las lesiones por sobrecarga, en el miembro inferior y en el músculo. BIBLIOGRAFÍA Alexander MJL. Field Events. En: Caines DJ, Caines CG, Kindner JL, directores. Epidemiology of Sports Injuries. Champaign, Illinois: Human Kinetics, 1996:196-212. Alonso JM. Epidemiología de las lesiones en el atletismo y la carrera. Una revisión. Revista de Traumatología del Deporte, 2004;1(4): 24-33. Alonso JM. Epidemiología retrospectiva en el atletismo. Revista de Traumatología del Deporte. En prensa. Alonso JM, Junge A, Renström P, Engebretsen L, Mountjoy M, Dvorak J. Sports Injuries Surveillance During the 2007 IAAF World Athletics Championships. Clin J Sport Med 2009; 19:26-32. Bennell KL, Crossley K. Musculoskeletal injuries in track and field: incidence, distribution and risk factors. Aust J Sci Med Sport 1996;28(3): 69-75 28 Bennell KL, Malcolm SA, Thomas SA, Wark JD, Brukner PD. The Incidence and Distribution of Stress Fractures in Competitive Track and Field Athletics. A twelve-month prospective study. Am J Sports Med 1996;24(2):21151. Boden BP, Pasquina P, Johnson J, Mueller F. Catastrophic Injuries in pole-vaulters. Am J Sports Med 2001;29:50-54. D’Souza D. Track and filed athletic injuries-a one-year survey. Br J Sports Med 1994;28(3): 197202. Lohrer H. Sports orthopaedics in athletics-an analysis of the current situation. New Studies in Athletics 1995;10(4): 11-21. Maestro A, Egocheaga J. Patología del Aparato Locomotor en el Atletismo: Estudio Clínico de 522 Casos. Archivos Med Dep 1994;XI(44):351-356. Medicina en Atletismo: Generalidades Marti B, Vader JP. Minder CH, Abelin T. On the epidemiology of running injuries. The 1984 Bern Grand-Prix Study. Am J Sports Med 1988;16(3):285-294. Mueller FO, Cantu RC. National Center for Catastrophic Sport Injury Research 2006. [Citado el 11 Mayo 2008]. Disponible en URL: http://www.unc.edu/depts/nccsi/ AllSport.htm Mueller FO, Weaver BL, Yang J, Bowling JM, Marshall SW, Kaisbeek WD et al. Final Report: The North Carolina High School Athletic Injury Study; 2002;[Citado el 2 Abril 2008]. Disponible en URL: http://www.unc.edu/depts/exercise/FRED/Appendix%20HPDF.pdf Rebella GS, Edwards JO, Greene JJ, Husen MT, Brousseau DC. A prospective study of injury patterns in high school pole vaulters. Am J Sports Med 2008;36: 913-920. Sevène M. Suivi medical du sprint: conclusions à partir d’une population de 124 athlétes recensés au décours des stages entre 1997-2000. Sms Médecine du Sport, 2001, Mai:62-66. Trouss F, Cellier JG, Bosch M. Suivi medical des junior en athletisme. Sms Médecine du Sport, 2001, Mai:7-11. Villalón JM, Ramírez C, Alonso JM. Estudio retrospectivo de las lesiones en el atletismo. En: Guillén P director. Lesiones Deportivas. XXII Simposium Internacional de Traumatología FREMAP. 1995 23-25 Nov Madrid. Madrid, Editorial MAPFRE, 1996:165-171. Watson MD, DiMartino PP. Incidence of injuries in high school track and field athletes and its relation to performance ability. Am J Sports Med 1987;15(3): 251-254. Zemper ED. Track and Field Injuries. Med Sport Sci 2005;48:138-151. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 28 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE las lesiones en el atletismo, algunos estudios han mostrado incidencias no significativamente mayores de lesiones en los atletas senior que en los júnior o juveniles. Bennell y Crossley encontraron que los atletas de más edad tenían más posibilidades de padecer varias lesiones. Por tanto, es difícil señalar cuál es la influencia exacta de la edad en las lesiones en el atletismo. El sexo “per se” no parece ser un factor de riesgo importante de lesión. Algunos autores encontraron sin embargo una incidencia no significativamente mayor en hombres que en mujeres. Otros investigadores en cambio hallaron índices lesionales mayores en mujeres. Como resumen, podemos concluir que el atletismo es un deporte con una incidencia lesional entre moderada y alta, con predominio de las lesiones por sobrecarga, en el miembro inferior y en el músculo. BIBLIOGRAFÍA Alexander MJL. Field Events. En: Caines DJ, Caines CG, Kindner JL, directores. Epidemiology of Sports Injuries. Champaign, Illinois: Human Kinetics, 1996:196-212. Alonso JM. Epidemiología de las lesiones en el atletismo y la carrera. Una revisión. Revista de Traumatología del Deporte, 2004;1(4): 24-33. Alonso JM. Epidemiología retrospectiva en el atletismo. Revista de Traumatología del Deporte. En prensa. Alonso JM, Junge A, Renström P, Engebretsen L, Mountjoy M, Dvorak J. Sports Injuries Surveillance During the 2007 IAAF World Athletics Championships. Clin J Sport Med 2009; 19:26-32. Bennell KL, Crossley K. Musculoskeletal injuries in track and field: incidence, distribution and risk factors. Aust J Sci Med Sport 1996;28(3): 69-75 28 Bennell KL, Malcolm SA, Thomas SA, Wark JD, Brukner PD. The Incidence and Distribution of Stress Fractures in Competitive Track and Field Athletics. A twelve-month prospective study. Am J Sports Med 1996;24(2):21151. Boden BP, Pasquina P, Johnson J, Mueller F. Catastrophic Injuries in pole-vaulters. Am J Sports Med 2001;29:50-54. D’Souza D. Track and filed athletic injuries-a one-year survey. Br J Sports Med 1994;28(3): 197202. Lohrer H. Sports orthopaedics in athletics-an analysis of the current situation. New Studies in Athletics 1995;10(4): 11-21. Maestro A, Egocheaga J. Patología del Aparato Locomotor en el Atletismo: Estudio Clínico de 522 Casos. Archivos Med Dep 1994;XI(44):351-356. Medicina en Atletismo: Generalidades Marti B, Vader JP. Minder CH, Abelin T. On the epidemiology of running injuries. The 1984 Bern Grand-Prix Study. Am J Sports Med 1988;16(3):285-294. Mueller FO, Cantu RC. National Center for Catastrophic Sport Injury Research 2006. [Citado el 11 Mayo 2008]. Disponible en URL: http://www.unc.edu/depts/nccsi/ AllSport.htm Mueller FO, Weaver BL, Yang J, Bowling JM, Marshall SW, Kaisbeek WD et al. Final Report: The North Carolina High School Athletic Injury Study; 2002;[Citado el 2 Abril 2008]. Disponible en URL: http://www.unc.edu/depts/exercise/FRED/Appendix%20HPDF.pdf Rebella GS, Edwards JO, Greene JJ, Husen MT, Brousseau DC. A prospective study of injury patterns in high school pole vaulters. Am J Sports Med 2008;36: 913-920. Sevène M. Suivi medical du sprint: conclusions à partir d’une population de 124 athlétes recensés au décours des stages entre 1997-2000. Sms Médecine du Sport, 2001, Mai:62-66. Trouss F, Cellier JG, Bosch M. Suivi medical des junior en athletisme. Sms Médecine du Sport, 2001, Mai:7-11. Villalón JM, Ramírez C, Alonso JM. Estudio retrospectivo de las lesiones en el atletismo. En: Guillén P director. Lesiones Deportivas. XXII Simposium Internacional de Traumatología FREMAP. 1995 23-25 Nov Madrid. Madrid, Editorial MAPFRE, 1996:165-171. Watson MD, DiMartino PP. Incidence of injuries in high school track and field athletes and its relation to performance ability. Am J Sports Med 1987;15(3): 251-254. Zemper ED. Track and Field Injuries. Med Sport Sci 2005;48:138-151. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 30 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades MEDIDAS PREVENTIVAS EN EL ATLETISMO En atletismo, al igual que en el resto de especialidades de medicina deportiva, no basta con el tratamiento de las lesiones que se sufren, sino que es necesaria una actitud preventiva premeditada para evitar muchas de las lesiones y de las recaídas que se producen. Podríamos diferenciar varios aspectos principales: A. Control médico general previo al inicio de la práctica de atletismo Incluiría una historia clínica con exploración física, ECG, analítica sanguínea y, cuando ello sea posible, una prueba de esfuerzo. Esta primera visita debe permitir la detección precoz y la corrección de las siguientes posibles alteraciones, que pueden ponerse de manifiesto o descompensarse con la práctica del atletismo: • Alteraciones del aparato locomotor que precisan corrección: el pie (valgo, varo, plano, cavo), la rodilla (valgum, flexum, recurvatum, varum), la falta global o parcial de tono muscular o de flexibilidad/elasticidad, las alteraciones de la estabilidad pélvica o de la columna vertebral (escoliosis, cifosis, rectificación, etc.), y las dismetrías. • Alteraciones orgánicas: pulmonares (asma, etc.), cardiacas (arritmia, insuficiencia, valvulopatía, etc.), gastrointestinales (ulcus, colon irritable, etc.), o de otros órganos (hepáticas, renales, tiroideas, etc.). • Alteraciones funcionales/metabólicas: la diabetes, las anemias, las infecciones víricas /bacterianas, la hiperuricemia, la artritis, la amenorrea, el acné, etc. • Al t eraci ones en si tuaci ones especiales: durante el periodo de crecimiento, durante el 30 embarazo, tras largas convalecencias (cirugía, enfermedad, lesión), durante la lactancia/menopausia, etc. • A l t er aci on es n ut r i c i on al es : por ejemplo por falta de educación dietética (consumo inadecuado de nutrientes) o por problemas psicológicos (anorexia, bulimia), por “desorden vital” (irregularidad en los horarios, descanso insuficiente), o por consumo de tabaco, café, alcohol, etc. • Al teraciones de la moti vación: Individuales: la estética prevalece sobre la salud (musculación excesiva o deficitaria, mala nutrición, etc.); la “gloria” prevalece sobre la salud (se hace caso omiso a los síntomas corporales, “todo vale” para conseguir una medalla o una beca, etc.); por peculiaridades del carácter: exceso de timidez, exceso de espíritu combativo, agresividad, etc. (es preciso reconducir hacia la especialidad adecuada). Sociales/familiares: atletas “a la fuerza” por motivos paternos (intereses, frustraciones, etc.); necesidad enfermiza de afirmación a diferentes elementos sociales (padres, hermanos, amigos, grupo) o a sí mismos (autoafirmación). B. Seguimiento del deportista Una vez el deportista ya está en activo, es necesaria una actitud de vigilancia, seguimiento y apoyo que sirva al deportista de recordatorio de sus obligaciones con respecto a su salud actual y futura, tanto física como psicológica, y de sus aptitudes deportivas actuales y de formación de cara al futuro post-deportivo. Debemos controlar la formación y potenciarla para que sea suficiente en los ámbitos de: • Higiene: • Técnica deportiva: • Tener las suficientes horas de descanso y de ocio. • Corrección de defectos técnicos. • Disponer de horas para la preparación profesional tras la etapa deportiva. • Conocimiento de sus propios límites. • • Dedicar el tiempo preciso para el lavado corporal, y el cuidado de la boca, pies y uñas. Mantener una buena comunicación con el entrenador. • Recordar la necesidad de ser constantes en el control médico (vacunas, análisis de control, masajes de descarga, psicólogo, podólogo, etc.). • Potenciar la capacidad para identificar y solucionar en la fase inicial los problemas médicos (enfermedades, lesiones, dolores, cansancio, contracturas musculares y otros signos de alarma), para evitar los problemas subsiguientes. C. Material deportivo Debemos cuidar que el deportista use un buen material deportivo: • Adecuado a practicada. • Adecuado al momento del entrenamiento/competición (uso de clavos, etc.). • Adecuado a las características personales (peso, edad, talla, sexo, sudoración, particularidades morfológicas individuales, etc.). • Adecuado a las características geográficas (altitud, humedad, temperatura, viento, etc.) y a la estación. • Debemos vigilar asimismo que realice adecuadamente el cambio del material gastado/alterado o sucio/húmedo (no aprovechar material alterado o desgastado). • Nutrición: • Enseñar los conceptos nutricionales generales imprescindibles. • Realizar una dieta adecuada, tanto a la especialidad atlética como al ciclo concreto en que se encuentre. • Recordar la necesidad de realizar una hidratación suficiente. • Proporcionar unas correctas suplementaciones vitamínicas, minerales y proteínicas (ni excesivas ni insuficientes). • Concienciar para evitar el consumo de tabaco, alcohol, café, etc. la especialidad 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 30 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Medicina en Atletismo: Generalidades MEDIDAS PREVENTIVAS EN EL ATLETISMO En atletismo, al igual que en el resto de especialidades de medicina deportiva, no basta con el tratamiento de las lesiones que se sufren, sino que es necesaria una actitud preventiva premeditada para evitar muchas de las lesiones y de las recaídas que se producen. Podríamos diferenciar varios aspectos principales: A. Control médico general previo al inicio de la práctica de atletismo Incluiría una historia clínica con exploración física, ECG, analítica sanguínea y, cuando ello sea posible, una prueba de esfuerzo. Esta primera visita debe permitir la detección precoz y la corrección de las siguientes posibles alteraciones, que pueden ponerse de manifiesto o descompensarse con la práctica del atletismo: • Alteraciones del aparato locomotor que precisan corrección: el pie (valgo, varo, plano, cavo), la rodilla (valgum, flexum, recurvatum, varum), la falta global o parcial de tono muscular o de flexibilidad/elasticidad, las alteraciones de la estabilidad pélvica o de la columna vertebral (escoliosis, cifosis, rectificación, etc.), y las dismetrías. • Alteraciones orgánicas: pulmonares (asma, etc.), cardiacas (arritmia, insuficiencia, valvulopatía, etc.), gastrointestinales (ulcus, colon irritable, etc.), o de otros órganos (hepáticas, renales, tiroideas, etc.). • Alteraciones funcionales/metabólicas: la diabetes, las anemias, las infecciones víricas /bacterianas, la hiperuricemia, la artritis, la amenorrea, el acné, etc. • Al t eraci ones en si tuaci ones especiales: durante el periodo de crecimiento, durante el 30 embarazo, tras largas convalecencias (cirugía, enfermedad, lesión), durante la lactancia/menopausia, etc. • A l t er aci on es n ut r i c i on al es : por ejemplo por falta de educación dietética (consumo inadecuado de nutrientes) o por problemas psicológicos (anorexia, bulimia), por “desorden vital” (irregularidad en los horarios, descanso insuficiente), o por consumo de tabaco, café, alcohol, etc. • Al teraciones de la moti vación: Individuales: la estética prevalece sobre la salud (musculación excesiva o deficitaria, mala nutrición, etc.); la “gloria” prevalece sobre la salud (se hace caso omiso a los síntomas corporales, “todo vale” para conseguir una medalla o una beca, etc.); por peculiaridades del carácter: exceso de timidez, exceso de espíritu combativo, agresividad, etc. (es preciso reconducir hacia la especialidad adecuada). Sociales/familiares: atletas “a la fuerza” por motivos paternos (intereses, frustraciones, etc.); necesidad enfermiza de afirmación a diferentes elementos sociales (padres, hermanos, amigos, grupo) o a sí mismos (autoafirmación). B. Seguimiento del deportista Una vez el deportista ya está en activo, es necesaria una actitud de vigilancia, seguimiento y apoyo que sirva al deportista de recordatorio de sus obligaciones con respecto a su salud actual y futura, tanto física como psicológica, y de sus aptitudes deportivas actuales y de formación de cara al futuro post-deportivo. Debemos controlar la formación y potenciarla para que sea suficiente en los ámbitos de: • Higiene: • Técnica deportiva: • Tener las suficientes horas de descanso y de ocio. • Corrección de defectos técnicos. • Disponer de horas para la preparación profesional tras la etapa deportiva. • Conocimiento de sus propios límites. • • Dedicar el tiempo preciso para el lavado corporal, y el cuidado de la boca, pies y uñas. Mantener una buena comunicación con el entrenador. • Recordar la necesidad de ser constantes en el control médico (vacunas, análisis de control, masajes de descarga, psicólogo, podólogo, etc.). • Potenciar la capacidad para identificar y solucionar en la fase inicial los problemas médicos (enfermedades, lesiones, dolores, cansancio, contracturas musculares y otros signos de alarma), para evitar los problemas subsiguientes. C. Material deportivo Debemos cuidar que el deportista use un buen material deportivo: • Adecuado a practicada. • Adecuado al momento del entrenamiento/competición (uso de clavos, etc.). • Adecuado a las características personales (peso, edad, talla, sexo, sudoración, particularidades morfológicas individuales, etc.). • Adecuado a las características geográficas (altitud, humedad, temperatura, viento, etc.) y a la estación. • Debemos vigilar asimismo que realice adecuadamente el cambio del material gastado/alterado o sucio/húmedo (no aprovechar material alterado o desgastado). • Nutrición: • Enseñar los conceptos nutricionales generales imprescindibles. • Realizar una dieta adecuada, tanto a la especialidad atlética como al ciclo concreto en que se encuentre. • Recordar la necesidad de realizar una hidratación suficiente. • Proporcionar unas correctas suplementaciones vitamínicas, minerales y proteínicas (ni excesivas ni insuficientes). • Concienciar para evitar el consumo de tabaco, alcohol, café, etc. la especialidad 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 32 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE D. Alteraciones del volumen de actividad física En ocasiones el deportista no realiza el entrenamiento adecuado, por exceso o por defecto del mismo: exceso de entrenamiento, que puede producir tres situaciones patológicas: sobreentrenamiento manifiesto, “fatiga” psíquica, y fracturas de estrés; falta de entrenamiento; entrenamiento insuficiente para conseguir mejoras, entrenamiento irregular, o entrenamiento sin preparación de base. • Practicar pruebas de esfuerzo y cineantropometría regulares de control. • Realizar analíticas frecuentes para detectar y corregir posibles alteraciones. • Realizar estudios podológicos y biomecánicos, que permitan detectar y corregir alteraciones morfológicas o técnicas. • Tratamiento-evaluación: • Evaluar periódicamente el estado muscular del deportista para hacer las correcciones oportunas antes de que aparezca cualquier patología (contracturas, hipotonías, desequilibrios, asimetrías). • Usar sistemáticamente todas las técnicas que lleven a mejorar la flexibilidad y la propiocepción (excéntricos, técnicas propioceptivas, etc.). • Tratar hasta la curación completa cualquier lesión que se produzca. • No permitir una readaptación inadecuada (demasiado rápida) al entrenamiento y la competición. • Emplear deportes diferentes al atletismo para disminuir la reiteración de impactos y la agresividad del gesto deportivo (deporte en piscina, en elíptica, etc.). • Controlar con esmero el material deportivo según la modalidad deportiva practicada (situación de los clavos, características del calzado), y el gesto deportivo (con la ayuda del entrenador). E. Reincorporación a la práctica deportiva Vigilar y asesorar particularmente la fase en que, tras un periodo de inactividad el deportista vuelve a reiniciar la práctica deportiva, frecuentemente con ganas de recuperar el tiempo perdido, pero físicamente en unas condiciones distintas a las que se encontraba antes de dicho periodo. Debe ser muy gradual y progresiva tras lesión, enfermedad, inactividad prolongada por otros motivos, y debe contar con el apoyo médico y fisioterapéutico para facilitar la readaptación al entrenamiento y a la competición, con todas las técnicas que existen actualmente para este fin. Prevención en atletismo de alto nivel Hay que realizar todo lo anterior, con una serie de particularidades: • Seguimiento médico constante: 32 • Realizar visita de control ante cualquier problema nuevo. • Las pruebas complementarias deben realizarse lo más precozmente que sea posible. • Realizar controles dietético y psicológico periódicos para evitar desviaciones. Medicina en Atletismo: Generalidades • Interrelación entre especialistas: • Disponer de un fisioterapeuta permanentemente que, al igual que el médico, conozca bien al deportista y lo trate frecuentemente y regularmente. Ambos, médico y fisioterapeuta, deben estar bien compenetrados y contar con la total confianza del deportista. • Intentar “frenar” al deportista y al entrenador cuando se produce (por distintas circunstancias), una acumulación de carga física o psíquica que pone en peligro la integridad o la salud del deportista. • Intentar alcanzar el “summum” preventivo, muy difícil de conseguir de forma continuada: la interrelación deportista-entrenador-médicofisioterapeuta-psicólogo-ami gos del deportista. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 32 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE D. Alteraciones del volumen de actividad física En ocasiones el deportista no realiza el entrenamiento adecuado, por exceso o por defecto del mismo: exceso de entrenamiento, que puede producir tres situaciones patológicas: sobreentrenamiento manifiesto, “fatiga” psíquica, y fracturas de estrés; falta de entrenamiento; entrenamiento insuficiente para conseguir mejoras, entrenamiento irregular, o entrenamiento sin preparación de base. • Practicar pruebas de esfuerzo y cineantropometría regulares de control. • Realizar analíticas frecuentes para detectar y corregir posibles alteraciones. • Realizar estudios podológicos y biomecánicos, que permitan detectar y corregir alteraciones morfológicas o técnicas. • Tratamiento-evaluación: • Evaluar periódicamente el estado muscular del deportista para hacer las correcciones oportunas antes de que aparezca cualquier patología (contracturas, hipotonías, desequilibrios, asimetrías). • Usar sistemáticamente todas las técnicas que lleven a mejorar la flexibilidad y la propiocepción (excéntricos, técnicas propioceptivas, etc.). • Tratar hasta la curación completa cualquier lesión que se produzca. • No permitir una readaptación inadecuada (demasiado rápida) al entrenamiento y la competición. • Emplear deportes diferentes al atletismo para disminuir la reiteración de impactos y la agresividad del gesto deportivo (deporte en piscina, en elíptica, etc.). • Controlar con esmero el material deportivo según la modalidad deportiva practicada (situación de los clavos, características del calzado), y el gesto deportivo (con la ayuda del entrenador). E. Reincorporación a la práctica deportiva Vigilar y asesorar particularmente la fase en que, tras un periodo de inactividad el deportista vuelve a reiniciar la práctica deportiva, frecuentemente con ganas de recuperar el tiempo perdido, pero físicamente en unas condiciones distintas a las que se encontraba antes de dicho periodo. Debe ser muy gradual y progresiva tras lesión, enfermedad, inactividad prolongada por otros motivos, y debe contar con el apoyo médico y fisioterapéutico para facilitar la readaptación al entrenamiento y a la competición, con todas las técnicas que existen actualmente para este fin. Prevención en atletismo de alto nivel Hay que realizar todo lo anterior, con una serie de particularidades: • Seguimiento médico constante: 32 • Realizar visita de control ante cualquier problema nuevo. • Las pruebas complementarias deben realizarse lo más precozmente que sea posible. • Realizar controles dietético y psicológico periódicos para evitar desviaciones. Medicina en Atletismo: Generalidades • Interrelación entre especialistas: • Disponer de un fisioterapeuta permanentemente que, al igual que el médico, conozca bien al deportista y lo trate frecuentemente y regularmente. Ambos, médico y fisioterapeuta, deben estar bien compenetrados y contar con la total confianza del deportista. • Intentar “frenar” al deportista y al entrenador cuando se produce (por distintas circunstancias), una acumulación de carga física o psíquica que pone en peligro la integridad o la salud del deportista. • Intentar alcanzar el “summum” preventivo, muy difícil de conseguir de forma continuada: la interrelación deportista-entrenador-médicofisioterapeuta-psicólogo-ami gos del deportista. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 34 Carreras de velocidad Saludinámica (lisos y vallas) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE BIOMECÁNICA Y BASES DEL ENTRENAMIENTO VELOCIDAD La velocidad depende de la relación óptima entre dos factores: la frecuencia (pasos por segundo) y la amplitud de la zancada. Si analizamos el comportamiento de la velocidad en una carrera de 100 metros lisos de alto nivel, observamos que la máxima velocidad se alcanza en torno a los 60 metros. Desde el momento de la salida se va incrementando la amplitud de la zancada, alcanzando aproximadamente a los 60 metros una longitud de 2,4-2,6 metros. A su vez va disminuyendo el tiempo de contacto del pie en el suelo hasta los 90 milisegundos, permitiendo que también aumente la frecuencia hasta los 4,7-5,0 pasos/segundo a los 50-60 metros de distancia. Atendiendo a la figura 5, podemos definir cuatro fases bien diferenciadas: Amplitud (m) Frecuencia (Hz) 3,0 velocidad (m/s) 12 amplitud 11 velocidad 10 2,0 frecuencia 5 9 8 4 7 3 6 5 1,0 1. Una fase de velocidad de reacción ( previa al movimiento) . 2. Una fase de aceleración. 3. Una fase de velocidad lanzada o de máxima velocidad. 4. Una fase de resistencia a la velocidad. Cada una de ellas posee sus particularidades, sus medios de trabajo y sus elementos técnicos que, al final, gracias al entrenamiento sistematizado, conseguimos enlazarlas de manera sucesiva para interpretar lo que conocemos como carrera de velocidad. 1. LA FASE DE VELOCIDAD DE REACCIÓN Es el tiempo que transcurre desde la señal de salida hasta la reacción o puesta en acción del atleta. Los tiempos óptimos de reacción se aproximan a las 120140 milésimas de segundo. A pesar de que exista una permanente discusión sobre si la velocidad de reacción es o no mejorable mediante el entrenamiento, debemos intentar que nuestro atleta dé una respuesta motora eficaz a un estímulo (acústico en nuestro caso), por lo que el objetivo principal será estabilizar un tiempo de reacción óptimo. 2 4 3 2 1 1 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 Distancia (m) Figura 5. Velocidad, amplitud de la zancada y frecuencia de pasos en una 2. LA FASE DE ACELERACIÓN Comprende desde el punto inicial de la carrera (velocidad 0) hasta el momento en el que el atleta adquiere la máxima velocidad. Intervienen 3 elementos técnicos fundamentales: la salida de tacos, la carrera de aceleración y la colocación previa a la fase lanzada, que deben enlazarse correctamente para conseguir una fase de aceleración correcta. La salida de tacos determinada por el reglamento, se descompone en tres fases: • La posición inicial: Generalmente se colocará la pierna más fuerte y hábil en el taco delantero, la vista dirigida al suelo y hacia delante con la cabeza en línea con el tronco, evitando dejarla caer para no generar movimientos bruscos en la actividad vestibular que pueden ocasionar la pérdida del equilibrio. • La posición de listos: En ella se buscará una distribución equilibrada del peso entre las manos y los pies, y una elevación de la cadera por encima de la línea de hombros hasta conseguir una angulación de las rodillas entorno a los 90º para la pierna delantera y de 120º para la pierna trasera. • La acción de salida: En el momento del disparo se empuja con ambas piernas y ambos brazos simultáneamente, cobrando gran importancia la acción de empuje de la pierna delantera, la cual impulsa hacia delante hasta formar un ángulo de aproximadamente 45º con el suelo y manteniendo el cuerpo en línea. A su vez la pierna trasera abandona el taco dirigiendo la rodilla hacia delante acompañada por un braceo activo. La carrera de aceleración. En esta fase se adquiere la máxima velocidad mediante el trabajo de impulsión, en el que se aplica mayor cantidad de fuerza. La rodilla de la pierna de impulsión se extiende por completo y perfectamente alineada con el tronco, mientras que la rodilla de la pierna libre dirige el movimiento hacia delante manteniendo el pie “armado”. El tronco permanece más inclinado que en la carrera lanzada. carrera de 100 metros lisos de alto nivel. 34 35 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 34 Carreras de velocidad Saludinámica (lisos y vallas) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE BIOMECÁNICA Y BASES DEL ENTRENAMIENTO VELOCIDAD La velocidad depende de la relación óptima entre dos factores: la frecuencia (pasos por segundo) y la amplitud de la zancada. Si analizamos el comportamiento de la velocidad en una carrera de 100 metros lisos de alto nivel, observamos que la máxima velocidad se alcanza en torno a los 60 metros. Desde el momento de la salida se va incrementando la amplitud de la zancada, alcanzando aproximadamente a los 60 metros una longitud de 2,4-2,6 metros. A su vez va disminuyendo el tiempo de contacto del pie en el suelo hasta los 90 milisegundos, permitiendo que también aumente la frecuencia hasta los 4,7-5,0 pasos/segundo a los 50-60 metros de distancia. Atendiendo a la figura 5, podemos definir cuatro fases bien diferenciadas: Amplitud (m) Frecuencia (Hz) 3,0 velocidad (m/s) 12 amplitud 11 velocidad 10 2,0 frecuencia 5 9 8 4 7 3 6 5 1,0 1. Una fase de velocidad de reacción ( previa al movimiento) . 2. Una fase de aceleración. 3. Una fase de velocidad lanzada o de máxima velocidad. 4. Una fase de resistencia a la velocidad. Cada una de ellas posee sus particularidades, sus medios de trabajo y sus elementos técnicos que, al final, gracias al entrenamiento sistematizado, conseguimos enlazarlas de manera sucesiva para interpretar lo que conocemos como carrera de velocidad. 1. LA FASE DE VELOCIDAD DE REACCIÓN Es el tiempo que transcurre desde la señal de salida hasta la reacción o puesta en acción del atleta. Los tiempos óptimos de reacción se aproximan a las 120140 milésimas de segundo. A pesar de que exista una permanente discusión sobre si la velocidad de reacción es o no mejorable mediante el entrenamiento, debemos intentar que nuestro atleta dé una respuesta motora eficaz a un estímulo (acústico en nuestro caso), por lo que el objetivo principal será estabilizar un tiempo de reacción óptimo. 2 4 3 2 1 1 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 Distancia (m) Figura 5. Velocidad, amplitud de la zancada y frecuencia de pasos en una 2. LA FASE DE ACELERACIÓN Comprende desde el punto inicial de la carrera (velocidad 0) hasta el momento en el que el atleta adquiere la máxima velocidad. Intervienen 3 elementos técnicos fundamentales: la salida de tacos, la carrera de aceleración y la colocación previa a la fase lanzada, que deben enlazarse correctamente para conseguir una fase de aceleración correcta. La salida de tacos determinada por el reglamento, se descompone en tres fases: • La posición inicial: Generalmente se colocará la pierna más fuerte y hábil en el taco delantero, la vista dirigida al suelo y hacia delante con la cabeza en línea con el tronco, evitando dejarla caer para no generar movimientos bruscos en la actividad vestibular que pueden ocasionar la pérdida del equilibrio. • La posición de listos: En ella se buscará una distribución equilibrada del peso entre las manos y los pies, y una elevación de la cadera por encima de la línea de hombros hasta conseguir una angulación de las rodillas entorno a los 90º para la pierna delantera y de 120º para la pierna trasera. • La acción de salida: En el momento del disparo se empuja con ambas piernas y ambos brazos simultáneamente, cobrando gran importancia la acción de empuje de la pierna delantera, la cual impulsa hacia delante hasta formar un ángulo de aproximadamente 45º con el suelo y manteniendo el cuerpo en línea. A su vez la pierna trasera abandona el taco dirigiendo la rodilla hacia delante acompañada por un braceo activo. La carrera de aceleración. En esta fase se adquiere la máxima velocidad mediante el trabajo de impulsión, en el que se aplica mayor cantidad de fuerza. La rodilla de la pierna de impulsión se extiende por completo y perfectamente alineada con el tronco, mientras que la rodilla de la pierna libre dirige el movimiento hacia delante manteniendo el pie “armado”. El tronco permanece más inclinado que en la carrera lanzada. carrera de 100 metros lisos de alto nivel. 34 35 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 36 Carreras de velocidad Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE La col ocaci ón previ a a l a fase l anzada. Es la fase que enlaza la carrera de aceleración con la carrera lanzada. En ella la primera va perdiendo sus características de empuje mientras que se adecua la técnica de carrera lanzada. Progresivamente el trabajo de la pierna de impulsión disminuye, adquiriendo una acción más circular, y el tronco se endereza hasta adoptar su posición. Para la fase de aceleración, y en lo concerniente a las capacidades condicionales, se precisa del desarrollo de una fuerza y de una resistencia especial, tal y como muestra la siguiente tabla: Medios de trabajo Características Desarrollo de la fuerza x Fuerza máxima dinámica Squat completo Hasta 200% del peso corporal Fuerza explosiva Semi-squat Hasta 300% del peso corporal Fuerza elástica Semi-squat con salto Multisaltos horizontales Hasta 50-100 metros Subidas De 30 metros Arrastres De 30 metros (lisos y vallas) 3. LA FASE DE VELOCIDAD LANZADA Comprende desde el momento de la máxima velocidad hasta que ésta empieza a disminuir progresivamente. La técnica de carrera lanzada la dividimos en las fases de amortiguación, sostén, impulsión y fase aérea. pie, el cual desplaza el apoyo desde el metatarso hacia los dedos, sin modificar el ángulo de la pierna (140º), a la vez que se eleva el talón de la pierna libre hacia el glúteo. Esta fase finaliza cuando el fémur se encuentra totalmente vertical y se puede iniciar la fase de impulsión. Amortiguación. Se inicia con la toma de contacto del pie en el suelo. El pie ha descendido rápidamente flexionado hacia el suelo (para disminuir el tiempo de contacto). Con el avance de la pelvis, toda la extremidad inferior se flexiona sobre las tres articulaciones: cadera, rodilla y tobillo. En el momento en el que la rodilla se encuentra estable en la misma angulación (unos 140º) y la proyección del centro de gravedad recae sobre el pie, se inicia la fase de sostén. Impulsión. A partir de ese momento se produce una extensión de la pierna de apoyo (no es completa, pues llega a los 170º aproximadamente) que provoca un impulso que acelera el sistema y que termina en el momento en que el pie se separa del suelo. La pierna libre dirige el sistema horizontalmente hacia delante. Fase aérea. En esta fase se evidencia el movimiento de recuperación de la extremidad inferior para crear su función de alternancia. Sostén. Todo el sistema de la extremidad inferior “rota” sobre el Desarrollo de la resistencia Capacidad y potencia Arrastres (hasta 15kg) anaeróbica aláctica Aceleraciones de pie en series de repeticiones Aceleraciones de tacos con pausas cortas Carreras de 30 metros 140º 140º 170º Fase de amortiguación Fase de sostén Fase de impulso 36 37 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 36 Carreras de velocidad Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE La col ocaci ón previ a a l a fase l anzada. Es la fase que enlaza la carrera de aceleración con la carrera lanzada. En ella la primera va perdiendo sus características de empuje mientras que se adecua la técnica de carrera lanzada. Progresivamente el trabajo de la pierna de impulsión disminuye, adquiriendo una acción más circular, y el tronco se endereza hasta adoptar su posición. Para la fase de aceleración, y en lo concerniente a las capacidades condicionales, se precisa del desarrollo de una fuerza y de una resistencia especial, tal y como muestra la siguiente tabla: Medios de trabajo Características Desarrollo de la fuerza x Fuerza máxima dinámica Squat completo Hasta 200% del peso corporal Fuerza explosiva Semi-squat Hasta 300% del peso corporal Fuerza elástica Semi-squat con salto Multisaltos horizontales Hasta 50-100 metros Subidas De 30 metros Arrastres De 30 metros (lisos y vallas) 3. LA FASE DE VELOCIDAD LANZADA Comprende desde el momento de la máxima velocidad hasta que ésta empieza a disminuir progresivamente. La técnica de carrera lanzada la dividimos en las fases de amortiguación, sostén, impulsión y fase aérea. pie, el cual desplaza el apoyo desde el metatarso hacia los dedos, sin modificar el ángulo de la pierna (140º), a la vez que se eleva el talón de la pierna libre hacia el glúteo. Esta fase finaliza cuando el fémur se encuentra totalmente vertical y se puede iniciar la fase de impulsión. Amortiguación. Se inicia con la toma de contacto del pie en el suelo. El pie ha descendido rápidamente flexionado hacia el suelo (para disminuir el tiempo de contacto). Con el avance de la pelvis, toda la extremidad inferior se flexiona sobre las tres articulaciones: cadera, rodilla y tobillo. En el momento en el que la rodilla se encuentra estable en la misma angulación (unos 140º) y la proyección del centro de gravedad recae sobre el pie, se inicia la fase de sostén. Impulsión. A partir de ese momento se produce una extensión de la pierna de apoyo (no es completa, pues llega a los 170º aproximadamente) que provoca un impulso que acelera el sistema y que termina en el momento en que el pie se separa del suelo. La pierna libre dirige el sistema horizontalmente hacia delante. Fase aérea. En esta fase se evidencia el movimiento de recuperación de la extremidad inferior para crear su función de alternancia. Sostén. Todo el sistema de la extremidad inferior “rota” sobre el Desarrollo de la resistencia Capacidad y potencia Arrastres (hasta 15kg) anaeróbica aláctica Aceleraciones de pie en series de repeticiones Aceleraciones de tacos con pausas cortas Carreras de 30 metros 140º 140º 170º Fase de amortiguación Fase de sostén Fase de impulso 36 37 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 38 Carreras de velocidad Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE TÉCNICA DE VALLAS Las capacidades condicionales que se desarrollarán a nivel de fuerza y de resistencia serán: Medios de trabajo Características Desarrollo de la fuerza Fuerza reactiva x (lisos y vallas) Multisaltos verticales Vallitas Carreras con cinturón Se aplica en el trabajo de lastrado resistencia a la velocidad Al igual que en velocidad hay que aplicar al suelo la máxima fuerza hacia atrás en el mínimo tiempo, en la fase de vuelo no se puede aplicar fuerza y la trayectoria del CG no puede ser variada. Al aplicarlo a las vallas: ¿Cuál va ser el obj et i vo de l a t écni ca? lanzada. Hasta 6 kg de peso. • Que la cadera esté lo antes posible al otro lado de la valla ( batida) . Desarrollo de la resistencia Resistencia a la velocidad Carreras de 60, 80 y En series de repeticiones lanzada 100 metros a alta con cinturón lastrado el velocidad 30% del volumen total 4. LA FASE DE RESISTENCIA A LA VELOCIDAD En esta fase el atleta intenta mantener la máxima velocidad adquirida hasta el final de la carrera. Sin embargo la fatiga muscular se encarga de que ocurra todo lo contrario. En lo que se refiere al aspecto de las capacidades condicionales, adquiere mayor notoriedad el desarrollo de la resistencia frente al de la fuerza. Características Desarrollo de la resistencia Carreras de 200 a En series de repeticiones o en 500 metros pruebas repetidas según la x intensidad requerida Potencia láctica Resistencia a la velocidad Carreras de 120 a En pruebas repetidas y a alta 150 metros intensidad Carreras de 60, 80 y En series de repeticiones 100 metros con cinturón lastrado el 30% del volumen total 38 “ La carrera de aproxi maci ón debe ser con caderas altas y pies activos ( tobillos tensos) ” . El pie debe llegar al suelo cerca de la proyección del CG y realizando una acción hacia atrás buscando continuidad de acción. 2. LA BATIDA Para conseguir el objetivo de estar al otro lado de la valla lo antes posible y en actitud de continuar corriendo, es necesario que la cadera alcance su punto más Técnicamente se pretende que el atleta no modifique el modelo de la carrera lanzada. Medios de trabajo Capacidad láctica • Y con firmeza para seguir corriendo (continuación de carrera). más horizontal podrá ser la trayectoria de su CG. Batida Para su estudio, vamos a dividir la técnica de vallas en 4 fases: 1. Aproximación ( carrera previa a la valla) 2. Batida 3. Vuelo 4. Continuación de Carrera 1. APROXIMACIÓN Tiene que ser una carrera sólida, sin debilidades en los apoyos: en aceleración e impulsando. La altura de la cadera en el momento de la batida debe estar lo más alta posible; cuanto más alto sea un atleta en este punto, Continuación Carrera alto antes de la vallas y la sobrepase bajando. “ La valla se salta bajando” . Una batida vertical tendrá un efecto de frenado, la técnica pretende un ataque desde arriba y hacia abajo. El objetivo es borrar la noción de altura que representa la valla; ya que esto se opone al desplazamiento del atleta hacia delante a alta velocidad. El punto más alto del CG debe estar antes de la valla (unos 20/30 cm). Imaginar un salto sin modificar la altura del CG. Para ello “ Hay que batir lo suficientemente lejos” 39 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 38 Carreras de velocidad Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE TÉCNICA DE VALLAS Las capacidades condicionales que se desarrollarán a nivel de fuerza y de resistencia serán: Medios de trabajo Características Desarrollo de la fuerza Fuerza reactiva x (lisos y vallas) Multisaltos verticales Vallitas Carreras con cinturón Se aplica en el trabajo de lastrado resistencia a la velocidad Al igual que en velocidad hay que aplicar al suelo la máxima fuerza hacia atrás en el mínimo tiempo, en la fase de vuelo no se puede aplicar fuerza y la trayectoria del CG no puede ser variada. Al aplicarlo a las vallas: ¿Cuál va ser el obj et i vo de l a t écni ca? lanzada. Hasta 6 kg de peso. • Que la cadera esté lo antes posible al otro lado de la valla ( batida) . Desarrollo de la resistencia Resistencia a la velocidad Carreras de 60, 80 y En series de repeticiones lanzada 100 metros a alta con cinturón lastrado el velocidad 30% del volumen total 4. LA FASE DE RESISTENCIA A LA VELOCIDAD En esta fase el atleta intenta mantener la máxima velocidad adquirida hasta el final de la carrera. Sin embargo la fatiga muscular se encarga de que ocurra todo lo contrario. En lo que se refiere al aspecto de las capacidades condicionales, adquiere mayor notoriedad el desarrollo de la resistencia frente al de la fuerza. Características Desarrollo de la resistencia Carreras de 200 a En series de repeticiones o en 500 metros pruebas repetidas según la x intensidad requerida Potencia láctica Resistencia a la velocidad Carreras de 120 a En pruebas repetidas y a alta 150 metros intensidad Carreras de 60, 80 y En series de repeticiones 100 metros con cinturón lastrado el 30% del volumen total 38 “ La carrera de aproxi maci ón debe ser con caderas altas y pies activos ( tobillos tensos) ” . El pie debe llegar al suelo cerca de la proyección del CG y realizando una acción hacia atrás buscando continuidad de acción. 2. LA BATIDA Para conseguir el objetivo de estar al otro lado de la valla lo antes posible y en actitud de continuar corriendo, es necesario que la cadera alcance su punto más Técnicamente se pretende que el atleta no modifique el modelo de la carrera lanzada. Medios de trabajo Capacidad láctica • Y con firmeza para seguir corriendo (continuación de carrera). más horizontal podrá ser la trayectoria de su CG. Batida Para su estudio, vamos a dividir la técnica de vallas en 4 fases: 1. Aproximación ( carrera previa a la valla) 2. Batida 3. Vuelo 4. Continuación de Carrera 1. APROXIMACIÓN Tiene que ser una carrera sólida, sin debilidades en los apoyos: en aceleración e impulsando. La altura de la cadera en el momento de la batida debe estar lo más alta posible; cuanto más alto sea un atleta en este punto, Continuación Carrera alto antes de la vallas y la sobrepase bajando. “ La valla se salta bajando” . Una batida vertical tendrá un efecto de frenado, la técnica pretende un ataque desde arriba y hacia abajo. El objetivo es borrar la noción de altura que representa la valla; ya que esto se opone al desplazamiento del atleta hacia delante a alta velocidad. El punto más alto del CG debe estar antes de la valla (unos 20/30 cm). Imaginar un salto sin modificar la altura del CG. Para ello “ Hay que batir lo suficientemente lejos” 39 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 40 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE La batida es muy importante; uno no se equivoca si afirma que de esta acción va a depender gran parte de la construcción del franqueo de la valla, por dos razones: • Por la amplitud del paso, entre 3,30 m y 3,50 m, no es una zancada natural de carrera. • Por la necesidad de construir una acción de velocidad de la cadera. La acción de impulsión debe ser muy potente y enérgica. De todos los factores del rendimiento, el éxito va a depender del “ mantenimiento de la velocidad horizontal” en el salto de la valla. La relación entre el pie y el CG, en el apoyo de batida, debe ser similar a la del velocista. En el momento del contacto del apoyo de batida, el pie debe estar lo más cerca posible de la proyección del CG. La pierna de ataque debe ayudar con su acción, se anticipa en el movimiento y lo realiza muy flexionada. “ La pierna de ataque ataca desde la rodilla, cerrando ángulos ( aumento velocidad angular) ” . 3. FASE DE VUELO Una vez el pie de batida abandona el suelo, ya queda marcada la trayectoria y velocidad del Centro de Gravedad. Únicamente se trata de adoptar posiciones que eviten chocar con la valla y nos aporten una buena predisposición para continuar corriendo. Sobre la inclinación del tronco. La inclinación del tronco nunca se produce durante la batida y si fuese necesaria, sólo lo sería después de ésta, y será más pronun- 40 ciada cuanto mayor sea la altura de la valla respecto a la estatura del atleta. El objetivo es mantener el CG lo más parecido a la trayectoria del CG de un velocista, por supuesto teniendo en cuenta la altura de la valla. Sobre la pierna de ataque. Cuando el muslo de la pierna de ataque se sitúa paralelo al suelo, se produce una transferencia del Momento de Inercia a la parte baja de la pierna mediante la extensión de la rodilla. La pierna de ataque se debe extender, aunque el que vaya algo flexionada o extendida del todo no es significativo (es indiferente). Sí es importante la flexión del tobillo (pie armado), para preparar su apoyo reactivo. El talón es lo primero que sobrepasa la valla. La acción de la pierna de ataque intenta envolver la valla, porque cuando finaliza la extensión, no puede seguir elevándose, y debe iniciar el descenso. Es muy importante buscar esta acción desde la rodilla en vez de desde el pie. La mayoría de autores opina que es conveniente crear una ligera flexión de la pierna de ataque, que favorecerá la inclinación del tronco y la acción envolvente de la valla. Sobre la pierna de batida (pierna de paso). La pierna de batida debe hacer algo especial para no golpear la valla, esto es, en máxima flexión y con los ángulos articulares bien cerrados, debe abrirse late- Carreras de velocidad (lisos y vallas) ralmente (en abducción) y así aumenta su velocidad (en un movimiento de rotación, al acortarse el radio, aumentando la velocidad angular). El pie, después de la batida, debe estar armado y debajo del glúteo (nunca detrás), y nunca debe estar más alto que la rodilla. ¿Cuánto? Lo necesario según la altura de la valla. Los chicos llegan a colocar el muslo paralelo al travesaño, cuando la cadera se encuentra sobre la valla. Sobre los brazos. Los brazos además de equilibrar la acción, han de cooperar en la impulsión y en ayudar a seguir corriendo tras la valla. El movimiento ha de ser lo más parecido al braceo de la carrera en lisos. Los brazos actúan sinérgicos con las piernas, el intentar activarlos y que cambien, ayudará a que a su vez cambien las piernas (intentar evitar paradas de los mismos). El brazo correspondiente a la pierna de batida (el contrario a ésta) debe salir con energía hacia delante, ayudando a no perder velocidad en el apoyo de continuación de carrera, en un movimiento lo más similar posible al de los brazos en la carrera de velocidad. El brazo correspondiente a la pierna de ataque (su contrario) debe ir adelante, y desde aquí cambiar y marcar la posición normal de carrera de codo atrás, por el camino más corto y natural posible. En ese movimiento debe realizar un recorrido de adelante a atrás (evitando rotación). movimientos de En el recorrido del brazo de ataque, en su movimiento hacia atrás, la mano no debe alejarse del tronco yendo por fuera (no abrir brazos). Los brazos, al igual que las piernas, deben cerrar sus ángulos durante el franqueo de la valla. 4. LA CONTINUACIÓN DE CARRERA En cuanto el pie sobrepasa la valla debe buscar el suelo de forma activa. Si llega al suelo de forma pasiva no aprovecha la energía elástica acumulada. En el apoyo de continuación, la pierna de ataque está estirada y con tensión para, apoyándose en ella, trasladar la cadera hacia delante. Debe resistir sin ceder, evitando la amortiguación. En el apoyo de continuación, hay que intentar que sea debajo de la proyección de la cadera, y no delante, de esto va depender que la pérdida de velocidad sea mínima. En la recepción después de la valla, el tobillo debe estar flexionado (armado) para minimizar el frenado horizontal en el momento del contacto. Todo el cuerpo está alineado y compacto (rígido), con la intención de no perder energía (stiffness). La pierna de batida colabora con la misma intención, su objetivo es llegar bien flexionada (ángulos cerrados) y con el pie armado, alta y en la línea de carrera (adelante). 41 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 40 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE La batida es muy importante; uno no se equivoca si afirma que de esta acción va a depender gran parte de la construcción del franqueo de la valla, por dos razones: • Por la amplitud del paso, entre 3,30 m y 3,50 m, no es una zancada natural de carrera. • Por la necesidad de construir una acción de velocidad de la cadera. La acción de impulsión debe ser muy potente y enérgica. De todos los factores del rendimiento, el éxito va a depender del “ mantenimiento de la velocidad horizontal” en el salto de la valla. La relación entre el pie y el CG, en el apoyo de batida, debe ser similar a la del velocista. En el momento del contacto del apoyo de batida, el pie debe estar lo más cerca posible de la proyección del CG. La pierna de ataque debe ayudar con su acción, se anticipa en el movimiento y lo realiza muy flexionada. “ La pierna de ataque ataca desde la rodilla, cerrando ángulos ( aumento velocidad angular) ” . 3. FASE DE VUELO Una vez el pie de batida abandona el suelo, ya queda marcada la trayectoria y velocidad del Centro de Gravedad. Únicamente se trata de adoptar posiciones que eviten chocar con la valla y nos aporten una buena predisposición para continuar corriendo. Sobre la inclinación del tronco. La inclinación del tronco nunca se produce durante la batida y si fuese necesaria, sólo lo sería después de ésta, y será más pronun- 40 ciada cuanto mayor sea la altura de la valla respecto a la estatura del atleta. El objetivo es mantener el CG lo más parecido a la trayectoria del CG de un velocista, por supuesto teniendo en cuenta la altura de la valla. Sobre la pierna de ataque. Cuando el muslo de la pierna de ataque se sitúa paralelo al suelo, se produce una transferencia del Momento de Inercia a la parte baja de la pierna mediante la extensión de la rodilla. La pierna de ataque se debe extender, aunque el que vaya algo flexionada o extendida del todo no es significativo (es indiferente). Sí es importante la flexión del tobillo (pie armado), para preparar su apoyo reactivo. El talón es lo primero que sobrepasa la valla. La acción de la pierna de ataque intenta envolver la valla, porque cuando finaliza la extensión, no puede seguir elevándose, y debe iniciar el descenso. Es muy importante buscar esta acción desde la rodilla en vez de desde el pie. La mayoría de autores opina que es conveniente crear una ligera flexión de la pierna de ataque, que favorecerá la inclinación del tronco y la acción envolvente de la valla. Sobre la pierna de batida (pierna de paso). La pierna de batida debe hacer algo especial para no golpear la valla, esto es, en máxima flexión y con los ángulos articulares bien cerrados, debe abrirse late- Carreras de velocidad (lisos y vallas) ralmente (en abducción) y así aumenta su velocidad (en un movimiento de rotación, al acortarse el radio, aumentando la velocidad angular). El pie, después de la batida, debe estar armado y debajo del glúteo (nunca detrás), y nunca debe estar más alto que la rodilla. ¿Cuánto? Lo necesario según la altura de la valla. Los chicos llegan a colocar el muslo paralelo al travesaño, cuando la cadera se encuentra sobre la valla. Sobre los brazos. Los brazos además de equilibrar la acción, han de cooperar en la impulsión y en ayudar a seguir corriendo tras la valla. El movimiento ha de ser lo más parecido al braceo de la carrera en lisos. Los brazos actúan sinérgicos con las piernas, el intentar activarlos y que cambien, ayudará a que a su vez cambien las piernas (intentar evitar paradas de los mismos). El brazo correspondiente a la pierna de batida (el contrario a ésta) debe salir con energía hacia delante, ayudando a no perder velocidad en el apoyo de continuación de carrera, en un movimiento lo más similar posible al de los brazos en la carrera de velocidad. El brazo correspondiente a la pierna de ataque (su contrario) debe ir adelante, y desde aquí cambiar y marcar la posición normal de carrera de codo atrás, por el camino más corto y natural posible. En ese movimiento debe realizar un recorrido de adelante a atrás (evitando rotación). movimientos de En el recorrido del brazo de ataque, en su movimiento hacia atrás, la mano no debe alejarse del tronco yendo por fuera (no abrir brazos). Los brazos, al igual que las piernas, deben cerrar sus ángulos durante el franqueo de la valla. 4. LA CONTINUACIÓN DE CARRERA En cuanto el pie sobrepasa la valla debe buscar el suelo de forma activa. Si llega al suelo de forma pasiva no aprovecha la energía elástica acumulada. En el apoyo de continuación, la pierna de ataque está estirada y con tensión para, apoyándose en ella, trasladar la cadera hacia delante. Debe resistir sin ceder, evitando la amortiguación. En el apoyo de continuación, hay que intentar que sea debajo de la proyección de la cadera, y no delante, de esto va depender que la pérdida de velocidad sea mínima. En la recepción después de la valla, el tobillo debe estar flexionado (armado) para minimizar el frenado horizontal en el momento del contacto. Todo el cuerpo está alineado y compacto (rígido), con la intención de no perder energía (stiffness). La pierna de batida colabora con la misma intención, su objetivo es llegar bien flexionada (ángulos cerrados) y con el pie armado, alta y en la línea de carrera (adelante). 41 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 42 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Carreras de velocidad (lisos y vallas) LESIONES ESPECÍFICAS Y TRATAMIENTO MÉDICO-QUIRÚRGICO También colaboran los brazos con la intención de seguir corriendo, realizan con firmeza el movimiento natural de carrera. VALORACION DE LA TÉCNICA De cara a valorar la técnica de vallas y ser objetivo nos apoyaremos en unos parámetros: ROTURA DEL RECTO ANTERIOR CUADRICIPITAL cular, además del hematoma declive. A la exploración, hay dolor al tacto y la contracción resistida. Aunque más propia de futbolistas también es frecuente en atletas. En algunas ocasiones se puede asociar una avulsión de su inserción proximal. ESTRUCTURA DEL RECTO ANTERIOR CUADRICIPITAL En su extremo proximal, el músculo se divide en dos, insertándose el tendón directo en la espina ilíaca antero inferior y el reflejo en la ceja cotiloidea. El tendón reflejo es redondeado y posteromedial con respecto al directo. En su recorrido distal se aplana en forma de coma y rota lateralmente, ubicándose dentro del vientre muscular. Así es como si existiese un músculo dentro del otro. Con una unión miotendinosa dentro del vientre muscular, que es la estructura que puede lesionarse. • • • • Distancia de batida Distancia de continuación Altura del centro de gravedad Velocidades: – En el paso anterior – En la batida – En la continuación de carrera. El tendón distal transcurre en la porción profunda del músculo en sus dos tercios distales. La función del músculo es la extensión de la rodilla aunque también es flexor de la cadera, por su condición de biarticular. Una de las principales causas de lesión es la falta de coordinación con sus antagonistas, los isquiotibiales (que son mucho menos potentes que el cuadriceps), y sus agonistas entre los que destaca el iliopsoas. Por ello el mecanismo lesional más habitual suele ser el sprint por la alternancia de trabajo concéntrico y excéntrico, seguido de una posible lesión inicial en frío o al final por cansancio e incoordinación. El deportista refiere un dolor brutal en la cara anterior del cuadriceps en el momento de la lesión. A la inspección se puede apreciar una depresión sobre el vientre mus- 42 El tratamiento incluye el protocolo habitual, con un cuidado especial en la readaptación al gesto deportivo. Se recomienda movilidad inicial en bicicleta o en piscina sin trabajo del recto anterior. Una vez resuelto el hematoma, se inicia el trote en progresión, iniciando los cambios de ritmo cuando ya se consigue hacer carrera continua sin dolor. Como trabajo preventivo a largo plazo es fundamental el trabajo excéntrico de cuadriceps y mantener los cambios de ritmo corriendo. Tras cada sesión el atleta se pondrá hielo y procederá a estirar adecuadamente. LESIONES DE ISQUIOTIBIALES Las molestias de isquiotibiales son la lesión muscular más frecuente, siendo habitual en velocistas, vallistas y saltadores de longitud, siendo el resultado de roturas, cicatrices de las mismas o molestias referidas de patología lumbar. Por isquiotibiales se entiende el grupo de tres músculos que se inserta en la tuberosidad isquiática, extendiéndose hasta la pierna (tibia o peroné), semimembranoso, semitendinoso y bíceps femoral. Estos músculos está constituidos fundamentalmente por fibras rápidas (tipo II), por lo que estos músculos se adaptan bien a pruebas explosivas, pero se fatigan con mayor facilidad, lo que ju nto a ser músculos biarticulares los hace susceptibles a lesionarse. 43 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 42 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Carreras de velocidad (lisos y vallas) LESIONES ESPECÍFICAS Y TRATAMIENTO MÉDICO-QUIRÚRGICO También colaboran los brazos con la intención de seguir corriendo, realizan con firmeza el movimiento natural de carrera. VALORACION DE LA TÉCNICA De cara a valorar la técnica de vallas y ser objetivo nos apoyaremos en unos parámetros: ROTURA DEL RECTO ANTERIOR CUADRICIPITAL cular, además del hematoma declive. A la exploración, hay dolor al tacto y la contracción resistida. Aunque más propia de futbolistas también es frecuente en atletas. En algunas ocasiones se puede asociar una avulsión de su inserción proximal. ESTRUCTURA DEL RECTO ANTERIOR CUADRICIPITAL En su extremo proximal, el músculo se divide en dos, insertándose el tendón directo en la espina ilíaca antero inferior y el reflejo en la ceja cotiloidea. El tendón reflejo es redondeado y posteromedial con respecto al directo. En su recorrido distal se aplana en forma de coma y rota lateralmente, ubicándose dentro del vientre muscular. Así es como si existiese un músculo dentro del otro. Con una unión miotendinosa dentro del vientre muscular, que es la estructura que puede lesionarse. • • • • Distancia de batida Distancia de continuación Altura del centro de gravedad Velocidades: – En el paso anterior – En la batida – En la continuación de carrera. El tendón distal transcurre en la porción profunda del músculo en sus dos tercios distales. La función del músculo es la extensión de la rodilla aunque también es flexor de la cadera, por su condición de biarticular. Una de las principales causas de lesión es la falta de coordinación con sus antagonistas, los isquiotibiales (que son mucho menos potentes que el cuadriceps), y sus agonistas entre los que destaca el iliopsoas. Por ello el mecanismo lesional más habitual suele ser el sprint por la alternancia de trabajo concéntrico y excéntrico, seguido de una posible lesión inicial en frío o al final por cansancio e incoordinación. El deportista refiere un dolor brutal en la cara anterior del cuadriceps en el momento de la lesión. A la inspección se puede apreciar una depresión sobre el vientre mus- 42 El tratamiento incluye el protocolo habitual, con un cuidado especial en la readaptación al gesto deportivo. Se recomienda movilidad inicial en bicicleta o en piscina sin trabajo del recto anterior. Una vez resuelto el hematoma, se inicia el trote en progresión, iniciando los cambios de ritmo cuando ya se consigue hacer carrera continua sin dolor. Como trabajo preventivo a largo plazo es fundamental el trabajo excéntrico de cuadriceps y mantener los cambios de ritmo corriendo. Tras cada sesión el atleta se pondrá hielo y procederá a estirar adecuadamente. LESIONES DE ISQUIOTIBIALES Las molestias de isquiotibiales son la lesión muscular más frecuente, siendo habitual en velocistas, vallistas y saltadores de longitud, siendo el resultado de roturas, cicatrices de las mismas o molestias referidas de patología lumbar. Por isquiotibiales se entiende el grupo de tres músculos que se inserta en la tuberosidad isquiática, extendiéndose hasta la pierna (tibia o peroné), semimembranoso, semitendinoso y bíceps femoral. Estos músculos está constituidos fundamentalmente por fibras rápidas (tipo II), por lo que estos músculos se adaptan bien a pruebas explosivas, pero se fatigan con mayor facilidad, lo que ju nto a ser músculos biarticulares los hace susceptibles a lesionarse. 43 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 44 Carreras de velocidad Saludinámica (lisos y vallas) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE El lugar de asiento más habitual es la unión miotendinosa de la porción corta del bíceps. Funcionalmente realizan: • Extensión de cadera junto con el glúteo mayor. • Flexor de la rodilla. • Frenada de la extensión de rodilla a 30º de la extensión completa. • Estabilidad de la rodilla en la fase de apoyo. • Colabora con los gemelos en la extensión de la rodilla en la fase de despegue del pie. Factores predisponentes para su lesión son: • La lordosis lumbar fisiológica. • La falta de flexibilidad. • Un escaso calentamiento. • La fatiga muscular. • Una descompensación de fuerzas con respecto al cuadriceps. El mecanismo lesional suele ser una flexión brusca, con lo que se produce un estiramiento brusco de los músculos isquiotibiales. Así la rotura aguda viene provocada por una aceleración rápida o frenada brusca, y se presenta con dolor agudo y sensación de desgarro en la zona. En la exploración presenta dolor en la porción lesionada al estiramiento y la contracción resistida. El tratamiento se basa en el protocolo RICE, seguido de fisioterapia (masaje, US y un buen programa de estiramientos y fortalecimiento) seguido de una gradual vuelta al entrenamiento. Roturas leves evolucionan en tres semanas, pero en casos más graves es complicado pronosticar un 44 tiempo de recuperación. Para prevenir lesiones de grupo sería conveniente: este • Realizar una buena evaluación postural y corregir alteraciones. • Trabajar la flexibilidad. • Evaluar la fuerza y corregir descompensaciones. • Realizar calentamientos y estiramientos antes y durante los entrenamientos. • Trabajar la fuerza resistencia como parte del entrenamiento. Una lesión cicatricial crónica puede darse tras varias roturas y puede provocar dolor en el grupo muscular al correr, siendo el dolor provocado por un atrapamiento nervioso en la zona de cicatriz. Con un programa agresivo de estiramientos y masaje transverso profundo en la zona se consigue romper la cicatriz. La tendinopatía alta de isquiotibiales, también llamado síndrome isquiotibial, es una patología especialmente difícil de diagnosticar y tratar que ocurre por sobreuso en corredores de fondo y medio fondo. El diagnóstico puede ser complicado, aunque suele haber sensibilidad al tacto en la inserción de los isquiotibiales en la tuberosidad isquiática. Con una RMN se puede ver edema en el isquion o en la entésis. El tratamiento consiste en fisioterapia, estiramientos y fortalecimiento. En caso de no aliviarse los síntomas la cirugía consistirá en eliminar adherencias y tejido fibroso entre las inserciones de los tres músculos. Conviene no olvidar los dolores referidos dentro del diagnóstico diferencial ya que un síndrome facetario, una espondilolisis o listesis, una estenosis foraminal, una hernia discal o un síndrome piramidal pueden provocar un dolor. TENDINOPATÍA AQUÍLEA En la actualidad los estilos de vida señalan una marcada tendencia a la práctica del deporte, entendido éste como un símbolo de salud y de cuidado del cuerpo. El mundo del deporte ya no sólo alcanza a los deportistas de elite, si no a todo tipo de personas comprendidas en un amplio margen de edad, ya sea en un nivel profesional o de afición. La lesión es una tendinopatía que se produce en la unión osteo-tendinosa, en la tuberosita isquiática. Las personas que practican deporte de forma esporádica y sin ningún tipo de preparación son las que más riesgo tienen de padecer posibles lesiones tendinosas por falta de información y de preparación física adecuada en comparación con los deportistas profesionales. Lo que en un principio puede ser una práctica que mejora el estado de salud y bienestar puede llegar a ser el reverso de la moneda al complicarse con patologías tendinosas indeseables. Puede existir fibrosis y degeneración hialina de la entésis. La fibrosis puede atrapar alguna raíz del nervio ciático, provocando una patología radicular neuropática en la extremidad y simular dolor de origen lumbosacro. Sin embargo, el deporte de competición exige al deportista un alto número de horas semanales de entrenamiento en una modalidad o gesto técnico concreto. La repetición de este gesto durante miles de veces a diario, puede producir Los pacientes refieren un dolor profundo en la nalga o cara posterior del muslo al correr rápido, estirar esos músculos o sentarse sobre la tuberosidad isquiática. una demanda excesiva sobre una estructura determinada del cuerpo: músculos, huesos, ligamentos, tendones, etc. Se suelen asociar muchas modalidades deportivas con un grupo específico de lesiones, e igualmente a muchas lesiones se les denomina con el nombre de una modalidad. De esta manera se asocian en su denominación como se puede ver en la siguiente lista de correspondencias: 1. “Rodilla de saltador” a tendinopatía rotuliana. 2. “Codo del lanzador” a epitrocleitis. 3. “Fondistas” a tendinopatías lesiones por sobrecarga. o Existen numerosos estudios que analizan la incidencia lesional en deportistas (Krahl y Steinbruek, 1980). Igualmente, se ha teorizado sobre los factores que pueden influir en la patogenia de una lesión deportiva (Segesser, 1970; Cavanagh, 1980; Roesler, 1980; Marcus, 1983; Falsetti et al, 1983; Nigg, 1986; Kristoff y Ferris, 1987; Marti y cols, 1988; Ooijendijk y Van Agt, 1990; y Van Mechelen, 1992. El tendón en la práctica deportiva está expuesto a soportar grandes tensiones, sobrecargas y fricciones que provocan con facilidad lesiones inflamatorias, ya sean en forma de tendinopatías agudas o roturas espontáneas en los casos graves, con ausencia completa de la función y con solución de continuidad. La tendinopatía aquílea es quizás la más frecuente y la más peligrosa en el deportista, porque es la que tiene mayor peligro de acabar en una rotura del tendón. En el recorrido anatómico de un tendón desde su origen en el músculo hasta su inserción en el hueso, en las zonas de gran flexión, sirva de ejemplo la zona retromaleolar en el tobillo, el tendón está 45 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 44 Carreras de velocidad Saludinámica (lisos y vallas) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE El lugar de asiento más habitual es la unión miotendinosa de la porción corta del bíceps. Funcionalmente realizan: • Extensión de cadera junto con el glúteo mayor. • Flexor de la rodilla. • Frenada de la extensión de rodilla a 30º de la extensión completa. • Estabilidad de la rodilla en la fase de apoyo. • Colabora con los gemelos en la extensión de la rodilla en la fase de despegue del pie. Factores predisponentes para su lesión son: • La lordosis lumbar fisiológica. • La falta de flexibilidad. • Un escaso calentamiento. • La fatiga muscular. • Una descompensación de fuerzas con respecto al cuadriceps. El mecanismo lesional suele ser una flexión brusca, con lo que se produce un estiramiento brusco de los músculos isquiotibiales. Así la rotura aguda viene provocada por una aceleración rápida o frenada brusca, y se presenta con dolor agudo y sensación de desgarro en la zona. En la exploración presenta dolor en la porción lesionada al estiramiento y la contracción resistida. El tratamiento se basa en el protocolo RICE, seguido de fisioterapia (masaje, US y un buen programa de estiramientos y fortalecimiento) seguido de una gradual vuelta al entrenamiento. Roturas leves evolucionan en tres semanas, pero en casos más graves es complicado pronosticar un 44 tiempo de recuperación. Para prevenir lesiones de grupo sería conveniente: este • Realizar una buena evaluación postural y corregir alteraciones. • Trabajar la flexibilidad. • Evaluar la fuerza y corregir descompensaciones. • Realizar calentamientos y estiramientos antes y durante los entrenamientos. • Trabajar la fuerza resistencia como parte del entrenamiento. Una lesión cicatricial crónica puede darse tras varias roturas y puede provocar dolor en el grupo muscular al correr, siendo el dolor provocado por un atrapamiento nervioso en la zona de cicatriz. Con un programa agresivo de estiramientos y masaje transverso profundo en la zona se consigue romper la cicatriz. La tendinopatía alta de isquiotibiales, también llamado síndrome isquiotibial, es una patología especialmente difícil de diagnosticar y tratar que ocurre por sobreuso en corredores de fondo y medio fondo. El diagnóstico puede ser complicado, aunque suele haber sensibilidad al tacto en la inserción de los isquiotibiales en la tuberosidad isquiática. Con una RMN se puede ver edema en el isquion o en la entésis. El tratamiento consiste en fisioterapia, estiramientos y fortalecimiento. En caso de no aliviarse los síntomas la cirugía consistirá en eliminar adherencias y tejido fibroso entre las inserciones de los tres músculos. Conviene no olvidar los dolores referidos dentro del diagnóstico diferencial ya que un síndrome facetario, una espondilolisis o listesis, una estenosis foraminal, una hernia discal o un síndrome piramidal pueden provocar un dolor. TENDINOPATÍA AQUÍLEA En la actualidad los estilos de vida señalan una marcada tendencia a la práctica del deporte, entendido éste como un símbolo de salud y de cuidado del cuerpo. El mundo del deporte ya no sólo alcanza a los deportistas de elite, si no a todo tipo de personas comprendidas en un amplio margen de edad, ya sea en un nivel profesional o de afición. La lesión es una tendinopatía que se produce en la unión osteo-tendinosa, en la tuberosita isquiática. Las personas que practican deporte de forma esporádica y sin ningún tipo de preparación son las que más riesgo tienen de padecer posibles lesiones tendinosas por falta de información y de preparación física adecuada en comparación con los deportistas profesionales. Lo que en un principio puede ser una práctica que mejora el estado de salud y bienestar puede llegar a ser el reverso de la moneda al complicarse con patologías tendinosas indeseables. Puede existir fibrosis y degeneración hialina de la entésis. La fibrosis puede atrapar alguna raíz del nervio ciático, provocando una patología radicular neuropática en la extremidad y simular dolor de origen lumbosacro. Sin embargo, el deporte de competición exige al deportista un alto número de horas semanales de entrenamiento en una modalidad o gesto técnico concreto. La repetición de este gesto durante miles de veces a diario, puede producir Los pacientes refieren un dolor profundo en la nalga o cara posterior del muslo al correr rápido, estirar esos músculos o sentarse sobre la tuberosidad isquiática. una demanda excesiva sobre una estructura determinada del cuerpo: músculos, huesos, ligamentos, tendones, etc. Se suelen asociar muchas modalidades deportivas con un grupo específico de lesiones, e igualmente a muchas lesiones se les denomina con el nombre de una modalidad. De esta manera se asocian en su denominación como se puede ver en la siguiente lista de correspondencias: 1. “Rodilla de saltador” a tendinopatía rotuliana. 2. “Codo del lanzador” a epitrocleitis. 3. “Fondistas” a tendinopatías lesiones por sobrecarga. o Existen numerosos estudios que analizan la incidencia lesional en deportistas (Krahl y Steinbruek, 1980). Igualmente, se ha teorizado sobre los factores que pueden influir en la patogenia de una lesión deportiva (Segesser, 1970; Cavanagh, 1980; Roesler, 1980; Marcus, 1983; Falsetti et al, 1983; Nigg, 1986; Kristoff y Ferris, 1987; Marti y cols, 1988; Ooijendijk y Van Agt, 1990; y Van Mechelen, 1992. El tendón en la práctica deportiva está expuesto a soportar grandes tensiones, sobrecargas y fricciones que provocan con facilidad lesiones inflamatorias, ya sean en forma de tendinopatías agudas o roturas espontáneas en los casos graves, con ausencia completa de la función y con solución de continuidad. La tendinopatía aquílea es quizás la más frecuente y la más peligrosa en el deportista, porque es la que tiene mayor peligro de acabar en una rotura del tendón. En el recorrido anatómico de un tendón desde su origen en el músculo hasta su inserción en el hueso, en las zonas de gran flexión, sirva de ejemplo la zona retromaleolar en el tobillo, el tendón está 45 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 46 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE enfundado individualmente en una membrana sinovial doble. En las zonas de menor cizallamiento están rodeados por tejido conjuntivo más fino. En los movimientos de flexión y extensión del pie en la articulación del tobillo los tendones se desplazan con facilidad gracias a unas bolsas serosas encargadas de crear un espacio entre él y las estructuras vecinas para facilitarle su labor. Después de esta breve reseña anatómica se podrá entender mucha de la patología que ocurre en el tendón de Aquiles y estructuras vecinas que justifican los síntomas que padecen muchos de los corredores que sufren estos problemas. Etiopatogenia Recuerdo anatómico Presente en la cara posterior de la pierna surge o se origina de los músculos gemelos o gastrocnemios de aproximadamente 11 a 26 cm (interno y externo) que constituyen un sólo cuerpo carnoso, y el músculo soleo de aproximadamente 3 a 11 cm, situado en la profundidad de la pierna. Los tendones de estos 3 músculos, llamado por ello tríceps sural, se unen hacia el talón para formar el tendón de Aquiles qu e termina insertándose en la cara posterior del calcáneo (talón). En su mitad inferior, está rodeado de varias estructuras, lo que da lugar a distintas lesiones con síntomas muy similares. La función principal es la flexión plantar del pie o lo que es lo mismo ponernos de puntillas. El tendón de Aquiles es el más voluminoso, potente y resistente del cuerpo humano, con estas medidas aproximadamente: l ongitud 15 cm, anchura 1215 mm, espesor 5-6 mm. La fuerza necesaria para romperlo es del orden de 4.000 N. Con frecuencia, se encuentra sometido a fuerzas cercanas a 3.000 N al inicio del sprint o al realizar un salto. Cuando corremos, la fuerza del tendón se aproxima a 6-8 veces el peso del cuerpo, una carga similar a la máxima fuerza del tendón. Existen estudios que relatan fuerzas de 9 kN, que corresp onderían a 12,5 veces el peso del cuerpo durante la carrera. Carreras de velocidad (lisos y vallas) Composi ción del tendón Los tenocitos, células de los tendones, producen colágeno en respuesta al estiramiento, manteniendo así la capacidad de adaptarse a los estímulos mecánicos locales. Propiedades biomecánicas del tendón son ELASTICIDAD, PLASTICIDAD y VISCOSIDAD, propiedades condicionadas por su propia estructura tanto externa como interna, sin olvidarnos de dos factores importantísimos, como son la vascularización y la inervación. Su composición interna corre a cargo de: fibroblastos denominados tenocitos, fibras colágenas, sustancia fundamental con predominio del agua, proteoglicanos, glucoproteínas y elastina. Tenocitos y colágeno forman una estructura compacta denominada endotenon que a su vez está recubierto de un tejido conjuntivo llamado epitenon. Todo a su vez se encuentra reforzado por una vaina externa llamada peritenon. La proporción de las fibras colágenas disminuyen con la edad, repercutiendo directamente en una reducción de la elasticidad del tendón con los años. El resto de componentes se encargan de aportar cohesión a las fibras de colágeno. tancia del músculo y de su unión con el hueso debido a la menor irrigación; cosa que se resuelve, en parte, por el aporte vascular “extra” que proporciona la región que atraviesa ese tramo concreto de tendón. A pesar de ello, la nutrición resulta escasa lo que supone menor elasticidad y mayor exposición a la lesión ante una gran solicitación biomecánica por la práctica deportiva. Este es el caso de la tendinopatía del tendón de Aquiles que cuenta con una zona más susceptible de lesión que es el tercio medio del cuerpo tendinoso, de 2 a 6 cm por encima del calcáneo, a pesar de contar con el aporte vascular extra por parte de la arteria Tibial posterior. Cuando un tendón sobrepasa los límites de sus propiedades biomecánicas de elasticidad, plasticidad y viscosidad se produce la lesión de forma invariable. En un principio, el tendón se elonga ante una tensión, por su capacidad elástica hasta un 4%. Si persiste la tracción sufre una deformidad de tipo plástico que, de mantenerse con una tensión entre 3 -11,5 Kg/mm2 llega a romperse. Estos problemas de patología tendinosa se incrementan en las personas dedicadas al deporte profesional. Vascularización Clasificación de las lesiones El tendón se nutre a través de dos puntos: Dentro de la terminología que recoge la patología según localización que puede encontrarse en la tendinopatía aquílea se encuentran las siguientes palabras: • En la unión músculo tendinosa. • En la unión osteo-tendinosa. Esto justifica una mayor incidencia de patología en aquellos tendones de trayecto largo, sobre todo, en aquellos tramos que se encuentran a cierta dis- 1. Tendinopatía: Alteración cuerpo del tendón. del 2. Peritendinitis: Inflamación de la envoltura del tendón. 47 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 46 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE enfundado individualmente en una membrana sinovial doble. En las zonas de menor cizallamiento están rodeados por tejido conjuntivo más fino. En los movimientos de flexión y extensión del pie en la articulación del tobillo los tendones se desplazan con facilidad gracias a unas bolsas serosas encargadas de crear un espacio entre él y las estructuras vecinas para facilitarle su labor. Después de esta breve reseña anatómica se podrá entender mucha de la patología que ocurre en el tendón de Aquiles y estructuras vecinas que justifican los síntomas que padecen muchos de los corredores que sufren estos problemas. Etiopatogenia Recuerdo anatómico Presente en la cara posterior de la pierna surge o se origina de los músculos gemelos o gastrocnemios de aproximadamente 11 a 26 cm (interno y externo) que constituyen un sólo cuerpo carnoso, y el músculo soleo de aproximadamente 3 a 11 cm, situado en la profundidad de la pierna. Los tendones de estos 3 músculos, llamado por ello tríceps sural, se unen hacia el talón para formar el tendón de Aquiles qu e termina insertándose en la cara posterior del calcáneo (talón). En su mitad inferior, está rodeado de varias estructuras, lo que da lugar a distintas lesiones con síntomas muy similares. La función principal es la flexión plantar del pie o lo que es lo mismo ponernos de puntillas. El tendón de Aquiles es el más voluminoso, potente y resistente del cuerpo humano, con estas medidas aproximadamente: l ongitud 15 cm, anchura 1215 mm, espesor 5-6 mm. La fuerza necesaria para romperlo es del orden de 4.000 N. Con frecuencia, se encuentra sometido a fuerzas cercanas a 3.000 N al inicio del sprint o al realizar un salto. Cuando corremos, la fuerza del tendón se aproxima a 6-8 veces el peso del cuerpo, una carga similar a la máxima fuerza del tendón. Existen estudios que relatan fuerzas de 9 kN, que corresp onderían a 12,5 veces el peso del cuerpo durante la carrera. Carreras de velocidad (lisos y vallas) Composi ción del tendón Los tenocitos, células de los tendones, producen colágeno en respuesta al estiramiento, manteniendo así la capacidad de adaptarse a los estímulos mecánicos locales. Propiedades biomecánicas del tendón son ELASTICIDAD, PLASTICIDAD y VISCOSIDAD, propiedades condicionadas por su propia estructura tanto externa como interna, sin olvidarnos de dos factores importantísimos, como son la vascularización y la inervación. Su composición interna corre a cargo de: fibroblastos denominados tenocitos, fibras colágenas, sustancia fundamental con predominio del agua, proteoglicanos, glucoproteínas y elastina. Tenocitos y colágeno forman una estructura compacta denominada endotenon que a su vez está recubierto de un tejido conjuntivo llamado epitenon. Todo a su vez se encuentra reforzado por una vaina externa llamada peritenon. La proporción de las fibras colágenas disminuyen con la edad, repercutiendo directamente en una reducción de la elasticidad del tendón con los años. El resto de componentes se encargan de aportar cohesión a las fibras de colágeno. tancia del músculo y de su unión con el hueso debido a la menor irrigación; cosa que se resuelve, en parte, por el aporte vascular “extra” que proporciona la región que atraviesa ese tramo concreto de tendón. A pesar de ello, la nutrición resulta escasa lo que supone menor elasticidad y mayor exposición a la lesión ante una gran solicitación biomecánica por la práctica deportiva. Este es el caso de la tendinopatía del tendón de Aquiles que cuenta con una zona más susceptible de lesión que es el tercio medio del cuerpo tendinoso, de 2 a 6 cm por encima del calcáneo, a pesar de contar con el aporte vascular extra por parte de la arteria Tibial posterior. Cuando un tendón sobrepasa los límites de sus propiedades biomecánicas de elasticidad, plasticidad y viscosidad se produce la lesión de forma invariable. En un principio, el tendón se elonga ante una tensión, por su capacidad elástica hasta un 4%. Si persiste la tracción sufre una deformidad de tipo plástico que, de mantenerse con una tensión entre 3 -11,5 Kg/mm2 llega a romperse. Estos problemas de patología tendinosa se incrementan en las personas dedicadas al deporte profesional. Vascularización Clasificación de las lesiones El tendón se nutre a través de dos puntos: Dentro de la terminología que recoge la patología según localización que puede encontrarse en la tendinopatía aquílea se encuentran las siguientes palabras: • En la unión músculo tendinosa. • En la unión osteo-tendinosa. Esto justifica una mayor incidencia de patología en aquellos tendones de trayecto largo, sobre todo, en aquellos tramos que se encuentran a cierta dis- 1. Tendinopatía: Alteración cuerpo del tendón. del 2. Peritendinitis: Inflamación de la envoltura del tendón. 47 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 48 Carreras de velocidad Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE 3. Tenosinovitis: Inflamación la vaina tendinosa. de • Mala técnica en el gesto deportivo. 4. Entesopatías: Patologías propias de la inserción ósea del tendón. Las causas más frecuentes son las intrínsecas. 5. Rotura tendinosa: Solución de continuidad con pérdida de función. Las lesiones, además, pueden ser agudas o crónicas. Existen estudios que explican que el término tendinitis, implica la presencia de inflamación y de células inflamatorias en el interior del tendón, pero entre los pacientes con lesiones crónicas no se encontraron estas células ni en el tendón ni en el paratendón. Por esta razón, se suele hablar de la patología del tendón de Aquiles, en general, como Tendinopatías, (antiguas tendinitis) y de las roturas en especial. Factores determinantes o causales • Factores intrínsecos: • Por sobreesfuerzos físicos: la resistencia de un tendón es igual a la fuerza inicial del músculo multiplicado por cuatro. • Focos infecciosos crónicos: caries, amigdalitis infecciosas, etc. • Dietas: que aumentan la uricemia, provocando depósitos de ácido úrico en los tendones. E l acort amiento del tendón en un pie excesivamente cavo, la obli cuidad con que baja el tendón en un pie muy varo, que incide sobre la parte interna del tendón aumentando su tensión, por ser el gemelo interno más pequeño, la hipert rofia de los g emel os que condiciona una menor elasticidad del tendón, son factores que determinan o pueden determinar la presencia de patología en el tendón. De igual forma la mala biomecánica, l as causas infecci osas, el exceso de áci do úrico y la ingesta de anabolizantes u otras substancias prohibidas, pueden crear depósitos en el tendón que provocan su fragilidad. Los factores biomecánicos que predisponen a la lesión son diferentes, entre ellos: rotación excesiva del pie hacia dentro (pronación), el hábito de usar demasiado el extremo posterior del talón (revisando el tacón de las zapatillas de deporte, se nota dónde está más desgastado), las piernas arqueadas, la excesiva tensión de los músculos de la pantorrilla, los arcos de los pies muy pronunciados, tendón demasiado tenso y las deformidades del talón. En el estudio anátomo-patológico de los focos de lesión se puede encontrar: • Factores extrínsecos: • Problemas biomecánicos. • Mala adaptación del calzado. • Superficies duras. • Entrenamientos excesivos mal preparados. 48 1. Degeneración hipóxica, sobre todo en su tercio medio. 2. D eg en er aci ón mu c oi d e o mi xoi de de algunas fibras de colágeno que se encuentran adelgazadas y fragmentadas entre fibras aparentemente sanas. (lisos y vallas) 3. Degeneración l ipí di ca. En el inicio de la degeneración se encuentran grupos pequeños aislados de adipositos entre las fibras colágenas, que en fases más avanzadas llegan a interrumpir la continuidad de las fibras colágenas. La disminución progresiva de las fibras de colágeno que sobreviene con la edad, obligaría a realizar una preparación física adecuada (estiramientos, propiocepción), en todo tipo de deportistas, más aún en personas de cierta edad que practican deporte de forma intermitente. Las causas extrínsecas podrían ser consideradas como elementos sumatorios a la causa de la patología, como el terreno demasiado duro, el borde libre superior del contrafuerte demasiado elevado o demasiado rígido, etc. Correr cuesta abajo ejerce tensión sobre el tendón porque el pie delantero se adelanta antes de tocar el suelo y correr cuesta arriba también tensa el tendón porque los músculos de la pantorrilla deben realizar un esfuerzo mayor para subir el talón cuando los dedos se levantan, el calzado con suela rígida que no se doble en la zona que une los dedos al pie, ejerce tensión sobre el TA precisamente antes de que los dedos se levanten del suelo. En la fascia plantar una de las causas detonantes a tener en cuenta es el protagonismo adquirido por el nuevo calzado deportivo, en el que se abusa de los materiales absorbentes (cámaras de aire, etc.) siendo la fascia plantar la que tiene que actuar como estabilizador. Clínica El síntoma principal de la tendionopatía aquílea es el dolor, a veces, muy intenso que hasta le obliga a la marcha claudicante (cojera). Suele ser de comienzo progresivo y empeoramiento brusco por el mantenimiento de la acti vidad. Duele al comienzo y al final de la actividad. A veces, es visible la inflamación con signos de abultamiento, de bolsa con líquido dentro, en el cuerpo del tendón y rojo y hasta caliente en las bursitis. A la palpación, además de dolor, se puede notar la presencia de líquido por fuera del tendón en alguna de las cubiertas descritas. Existe dolor al apoyo monopodálico + elevación del cuerpo des de el suelo por flexión plantar. Igualmente al adoptar la posición de cuclillas con talones apoyados en el suelo. Son dos maniobras exploratorias para la búsqueda de sintomatología. La rotura completa, sin embargo, es un dolor explosivo tipo signo de la pedrada (se vuelven a mirar para atrás) que te deja cojo, a veces con crujido o chasquido audible. Diagnóstico Es fundamentalmente clínicoradiológico y debe ser emitido por médico. Clínico porque la presencia de síntomas es bastante sugerente de la presencia de esta patología, de ahí la importancia de la anamnesis y exploración física por parte del clínico. Hoy en día, la tecnología ha proporcionado una herramienta poderosa para alcanzar un diagnóstico con precisión que es la ECOGRAFÍA MÚSCULO-ESQUELÉTICA. Con ella se puede objetivar de forma más o menos precisa la presencia de inflamación a lo largo del tendón y en sus extremos dependiendo de la fase evolutiva en la que se encuentre el proceso. Igualmen- 49 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 48 Carreras de velocidad Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE 3. Tenosinovitis: Inflamación la vaina tendinosa. de • Mala técnica en el gesto deportivo. 4. Entesopatías: Patologías propias de la inserción ósea del tendón. Las causas más frecuentes son las intrínsecas. 5. Rotura tendinosa: Solución de continuidad con pérdida de función. Las lesiones, además, pueden ser agudas o crónicas. Existen estudios que explican que el término tendinitis, implica la presencia de inflamación y de células inflamatorias en el interior del tendón, pero entre los pacientes con lesiones crónicas no se encontraron estas células ni en el tendón ni en el paratendón. Por esta razón, se suele hablar de la patología del tendón de Aquiles, en general, como Tendinopatías, (antiguas tendinitis) y de las roturas en especial. Factores determinantes o causales • Factores intrínsecos: • Por sobreesfuerzos físicos: la resistencia de un tendón es igual a la fuerza inicial del músculo multiplicado por cuatro. • Focos infecciosos crónicos: caries, amigdalitis infecciosas, etc. • Dietas: que aumentan la uricemia, provocando depósitos de ácido úrico en los tendones. E l acort amiento del tendón en un pie excesivamente cavo, la obli cuidad con que baja el tendón en un pie muy varo, que incide sobre la parte interna del tendón aumentando su tensión, por ser el gemelo interno más pequeño, la hipert rofia de los g emel os que condiciona una menor elasticidad del tendón, son factores que determinan o pueden determinar la presencia de patología en el tendón. De igual forma la mala biomecánica, l as causas infecci osas, el exceso de áci do úrico y la ingesta de anabolizantes u otras substancias prohibidas, pueden crear depósitos en el tendón que provocan su fragilidad. Los factores biomecánicos que predisponen a la lesión son diferentes, entre ellos: rotación excesiva del pie hacia dentro (pronación), el hábito de usar demasiado el extremo posterior del talón (revisando el tacón de las zapatillas de deporte, se nota dónde está más desgastado), las piernas arqueadas, la excesiva tensión de los músculos de la pantorrilla, los arcos de los pies muy pronunciados, tendón demasiado tenso y las deformidades del talón. En el estudio anátomo-patológico de los focos de lesión se puede encontrar: • Factores extrínsecos: • Problemas biomecánicos. • Mala adaptación del calzado. • Superficies duras. • Entrenamientos excesivos mal preparados. 48 1. Degeneración hipóxica, sobre todo en su tercio medio. 2. D eg en er aci ón mu c oi d e o mi xoi de de algunas fibras de colágeno que se encuentran adelgazadas y fragmentadas entre fibras aparentemente sanas. (lisos y vallas) 3. Degeneración l ipí di ca. En el inicio de la degeneración se encuentran grupos pequeños aislados de adipositos entre las fibras colágenas, que en fases más avanzadas llegan a interrumpir la continuidad de las fibras colágenas. La disminución progresiva de las fibras de colágeno que sobreviene con la edad, obligaría a realizar una preparación física adecuada (estiramientos, propiocepción), en todo tipo de deportistas, más aún en personas de cierta edad que practican deporte de forma intermitente. Las causas extrínsecas podrían ser consideradas como elementos sumatorios a la causa de la patología, como el terreno demasiado duro, el borde libre superior del contrafuerte demasiado elevado o demasiado rígido, etc. Correr cuesta abajo ejerce tensión sobre el tendón porque el pie delantero se adelanta antes de tocar el suelo y correr cuesta arriba también tensa el tendón porque los músculos de la pantorrilla deben realizar un esfuerzo mayor para subir el talón cuando los dedos se levantan, el calzado con suela rígida que no se doble en la zona que une los dedos al pie, ejerce tensión sobre el TA precisamente antes de que los dedos se levanten del suelo. En la fascia plantar una de las causas detonantes a tener en cuenta es el protagonismo adquirido por el nuevo calzado deportivo, en el que se abusa de los materiales absorbentes (cámaras de aire, etc.) siendo la fascia plantar la que tiene que actuar como estabilizador. Clínica El síntoma principal de la tendionopatía aquílea es el dolor, a veces, muy intenso que hasta le obliga a la marcha claudicante (cojera). Suele ser de comienzo progresivo y empeoramiento brusco por el mantenimiento de la acti vidad. Duele al comienzo y al final de la actividad. A veces, es visible la inflamación con signos de abultamiento, de bolsa con líquido dentro, en el cuerpo del tendón y rojo y hasta caliente en las bursitis. A la palpación, además de dolor, se puede notar la presencia de líquido por fuera del tendón en alguna de las cubiertas descritas. Existe dolor al apoyo monopodálico + elevación del cuerpo des de el suelo por flexión plantar. Igualmente al adoptar la posición de cuclillas con talones apoyados en el suelo. Son dos maniobras exploratorias para la búsqueda de sintomatología. La rotura completa, sin embargo, es un dolor explosivo tipo signo de la pedrada (se vuelven a mirar para atrás) que te deja cojo, a veces con crujido o chasquido audible. Diagnóstico Es fundamentalmente clínicoradiológico y debe ser emitido por médico. Clínico porque la presencia de síntomas es bastante sugerente de la presencia de esta patología, de ahí la importancia de la anamnesis y exploración física por parte del clínico. Hoy en día, la tecnología ha proporcionado una herramienta poderosa para alcanzar un diagnóstico con precisión que es la ECOGRAFÍA MÚSCULO-ESQUELÉTICA. Con ella se puede objetivar de forma más o menos precisa la presencia de inflamación a lo largo del tendón y en sus extremos dependiendo de la fase evolutiva en la que se encuentre el proceso. Igualmen- 49 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 50 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE te se puede ver soluciones de continuidad o roturas incompletas o longitudinales. La RESONANCIA NUCLEAR MAGNÉTICA (RNM) es otra herramienta de gran sensibilidad y especificidad diagnóstica pudiendo afinar en el diagnóstico y aportar el diagnóstico de lesión en estructuras vecinas al mismo. Así nos permite valorar el hueso donde se inserta, espacios libres, etc. La radiología simple convencional, en un principio podría parecer relegada por las otras técnicas. Sin embargo, sigue teniendo utilidad para analizar alteraciones en el eje de carga, tipo de pie, calcificaciones, etc. El análisis biomecánico es fundamental para ir al origen del problema e intentar solucionarlo. Conocer el tipo de pisada, tanto en estático como en la marcha, nos proporciona mucha información que permitirá intentar corregir las circunstancias determinantes. Tratamiento y recomendaciones 50 minado a disminuir la carga de trabajo del tendón sin perder la función del tobillo), según la gravedad del cuadro. Quede claro que la rotura completa requerirá inmovilización rígida con vendaje de yeso. Reposo de ejercicios que impulsen el pie. Debemos suprimir el gesto deportivo que provoca la lesión, pudiéndose sustituir por otro que sea indoloro, un movimiento diferente: ciclismo, natación, carrera en agua, etc. La corrección de problemas biomecánicos debe hacerse una vez que haya desaparecido la clínica de dolor y entre las soluciones están la elaboración de plantillas de descarga. Muy importante la realización de ejercicios de reeducación funcional y propiocepción. Una vez que ha bajado la inflamación se inicia una fase de fortalecimiento. La principal medida terapéutica basada en la evidencia científica es la realización de ejercicios de componente excéntrico durante al menos tres meses. Otras terapias recientes tales como la escleroterapia de neovasos presentes alrededor del tendón parece ser prometedora en resultados, pero hacen falta más estudios para confirmar resultados. Carreras de velocidad (lisos y vallas) 1. Tener una buena condición física que permita adaptar el tendón a las cargas de trabajo. Ello implica hacer una buena sistemática de estiramientos, fortalecimiento correcto (pensar en la fase excéntrica) y una buena hidratación, higiene alimentaria, bucodental, etc. 3. Ser progresivos en las cargas de entrenamiento. Mejorar la técnica de carrera, además de pautas de entrenamiento. Hacer un buen y correcto calentamiento. 4. Efectuar estudios de la marcha y del gesto deportivo por especialistas. 2. Usar un correcto calzado con una buena descarga del talón. Evitar el calzado muy plano para terrenos llanos y rígidos, especialmente urbanos. Verificación frecuente de los tacones de los zapatos BIBLIOGRAFÍA Bjur D, Danielson P, Alfredson H, Forsgren S. Presence of a non-neuronal cholinergic system and occurrence of up- and down-regulation in expression of M2 muscarinic acetylcholine receptors: new aspects of importance regarding Achilles tendon tendinosis (tendinopathy).Cell Tissue Res. 2008 Feb;331(2):385-400.Epub 2007 Nov 13. [email protected]. Cuando aparece un proceso de tendinopatía aguda, es recomendable el uso, en primer lugar, de una serie de medidas conservadoras tales como la crioterapia local (frío a través de un paño colocado sobre la piel para evitar efectos desagradables del mismo, tipo quemaduras, durante 15 minutos, unas 3-4 veces al día) y la modificación del entrenamiento o incluso la suspensión del mismo hasta resolución del cuadro. El médico podrá prescribir medicación encaminada a bajar la inflamación y el dolor. La cirugía como tratamiento queda reservada para todos aquellos casos de no respuesta a las medidas conservadoras y/o los casos graves de rotura tendinosa completa, con una técnica de tenotomía longitudinal percutánea siendo efectiva en un 75-80% de casos. Prevención Piclet-Legre. Tendinopatías extrínsecas del pie. Tomo 2. Edit. E.M.C. Elsevier. E-27-090-A15. 2003. El REPOSO DEPORTIVO se debe hacer durante la fase aguda y debe ser completo, generalmente con inmovilización semi-rígida tipo tapping (el vendaje funcional enca- Consiste en todas aquellas medidas encaminadas a actuar sobre la causa, es decir, evitar la aparición de la tendinopatía a través de medidas del tipo: Puentes Zamora Y, Dalmau Coll A, García Sánchez M, Ariz G, Barrachina J, Parreño J.L., Pujol L, Ballbé A. Lesiones del tendón de aquiles, el punto débil del corredor. Núñez-Samper M. Biomecánica, medicina y cirugía. Barcelona: Edit. Masson, S.A., 1997. http://www.championchip.cat/lliga2 007/medicina/aquiles.htm Schepsis AA, Jones H, Haas AL. Achilles tendon disorders in athletes. Am J Sports Med. 2002 MarApr;30(2):287-305. Solan M, Davies M. Management of insertional tendinopathy of the Achilles tendon. Foot Ankle Clin. 2007 Dec;12(4):597-615, vi. [email protected] Van Linschoten R, den Hoed PT, de Jongh AC. Guideline Chronic Achilles tendinopathy, in particular tendinosis, in sportsmen/sportswomen. Ned Tijdschr Geneeskd. 2007 Oct 20;151(42):2319-24. Viladot Voegeli A. Lecciones Básicas de biomecánica del aparato locomotor. Barcelona: Edit. Springer, 2001. 51 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 50 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE te se puede ver soluciones de continuidad o roturas incompletas o longitudinales. La RESONANCIA NUCLEAR MAGNÉTICA (RNM) es otra herramienta de gran sensibilidad y especificidad diagnóstica pudiendo afinar en el diagnóstico y aportar el diagnóstico de lesión en estructuras vecinas al mismo. Así nos permite valorar el hueso donde se inserta, espacios libres, etc. La radiología simple convencional, en un principio podría parecer relegada por las otras técnicas. Sin embargo, sigue teniendo utilidad para analizar alteraciones en el eje de carga, tipo de pie, calcificaciones, etc. El análisis biomecánico es fundamental para ir al origen del problema e intentar solucionarlo. Conocer el tipo de pisada, tanto en estático como en la marcha, nos proporciona mucha información que permitirá intentar corregir las circunstancias determinantes. Tratamiento y recomendaciones 50 minado a disminuir la carga de trabajo del tendón sin perder la función del tobillo), según la gravedad del cuadro. Quede claro que la rotura completa requerirá inmovilización rígida con vendaje de yeso. Reposo de ejercicios que impulsen el pie. Debemos suprimir el gesto deportivo que provoca la lesión, pudiéndose sustituir por otro que sea indoloro, un movimiento diferente: ciclismo, natación, carrera en agua, etc. La corrección de problemas biomecánicos debe hacerse una vez que haya desaparecido la clínica de dolor y entre las soluciones están la elaboración de plantillas de descarga. Muy importante la realización de ejercicios de reeducación funcional y propiocepción. Una vez que ha bajado la inflamación se inicia una fase de fortalecimiento. La principal medida terapéutica basada en la evidencia científica es la realización de ejercicios de componente excéntrico durante al menos tres meses. Otras terapias recientes tales como la escleroterapia de neovasos presentes alrededor del tendón parece ser prometedora en resultados, pero hacen falta más estudios para confirmar resultados. Carreras de velocidad (lisos y vallas) 1. Tener una buena condición física que permita adaptar el tendón a las cargas de trabajo. Ello implica hacer una buena sistemática de estiramientos, fortalecimiento correcto (pensar en la fase excéntrica) y una buena hidratación, higiene alimentaria, bucodental, etc. 3. Ser progresivos en las cargas de entrenamiento. Mejorar la técnica de carrera, además de pautas de entrenamiento. Hacer un buen y correcto calentamiento. 4. Efectuar estudios de la marcha y del gesto deportivo por especialistas. 2. Usar un correcto calzado con una buena descarga del talón. Evitar el calzado muy plano para terrenos llanos y rígidos, especialmente urbanos. Verificación frecuente de los tacones de los zapatos BIBLIOGRAFÍA Bjur D, Danielson P, Alfredson H, Forsgren S. Presence of a non-neuronal cholinergic system and occurrence of up- and down-regulation in expression of M2 muscarinic acetylcholine receptors: new aspects of importance regarding Achilles tendon tendinosis (tendinopathy).Cell Tissue Res. 2008 Feb;331(2):385-400.Epub 2007 Nov 13. [email protected]. Cuando aparece un proceso de tendinopatía aguda, es recomendable el uso, en primer lugar, de una serie de medidas conservadoras tales como la crioterapia local (frío a través de un paño colocado sobre la piel para evitar efectos desagradables del mismo, tipo quemaduras, durante 15 minutos, unas 3-4 veces al día) y la modificación del entrenamiento o incluso la suspensión del mismo hasta resolución del cuadro. El médico podrá prescribir medicación encaminada a bajar la inflamación y el dolor. La cirugía como tratamiento queda reservada para todos aquellos casos de no respuesta a las medidas conservadoras y/o los casos graves de rotura tendinosa completa, con una técnica de tenotomía longitudinal percutánea siendo efectiva en un 75-80% de casos. Prevención Piclet-Legre. Tendinopatías extrínsecas del pie. Tomo 2. Edit. E.M.C. Elsevier. E-27-090-A15. 2003. El REPOSO DEPORTIVO se debe hacer durante la fase aguda y debe ser completo, generalmente con inmovilización semi-rígida tipo tapping (el vendaje funcional enca- Consiste en todas aquellas medidas encaminadas a actuar sobre la causa, es decir, evitar la aparición de la tendinopatía a través de medidas del tipo: Puentes Zamora Y, Dalmau Coll A, García Sánchez M, Ariz G, Barrachina J, Parreño J.L., Pujol L, Ballbé A. Lesiones del tendón de aquiles, el punto débil del corredor. Núñez-Samper M. Biomecánica, medicina y cirugía. Barcelona: Edit. Masson, S.A., 1997. http://www.championchip.cat/lliga2 007/medicina/aquiles.htm Schepsis AA, Jones H, Haas AL. Achilles tendon disorders in athletes. Am J Sports Med. 2002 MarApr;30(2):287-305. Solan M, Davies M. Management of insertional tendinopathy of the Achilles tendon. Foot Ankle Clin. 2007 Dec;12(4):597-615, vi. [email protected] Van Linschoten R, den Hoed PT, de Jongh AC. Guideline Chronic Achilles tendinopathy, in particular tendinosis, in sportsmen/sportswomen. Ned Tijdschr Geneeskd. 2007 Oct 20;151(42):2319-24. Viladot Voegeli A. Lecciones Básicas de biomecánica del aparato locomotor. Barcelona: Edit. Springer, 2001. 51 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 52 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE EL SÍNDROME DE COLA DE ASTRÁGALO El astrágalo, en la nómina anatómica talus, es un hueso corto que forma parte del tarso. Consta de seis caras articulares y se le relaciona con los siguientes huesos: • Tibia y peroné o fíbula, formando parte de la articulación tibioperoneo-astragalina o más conocida como “tobillo”. • Escafoides. • Calcáneo. Es sabida la importancia biomecánica del astrágalo en la distribución de fuerzas que llegan al pie a través suyo. El astrágalo distribuye la fuerza que le llega procedente de la tibia a la articulación subastragalina posterior, la articulación subastragalina anterior y al hueso escafoides (fig.6). Es interesante mencionar, por su trascendencia en la generación de lesiones deportivas, la existencia de un apéndice posterior o cola en el astrágalo. No hay que confundirlo con una variante anatómica, el conocido por os trigonum del astrágalo, que ofrece una imagen radiográfica de una cola de astrágalo suelta, a veces difícil de diferenciar de la fractura. Existen dos tubérculos en la cara posterior del astrágalo, uno postero-interno y otro postero-externo, entre los cuales pasa el flexor propio del primer dedo del pie. En ocasiones uno de estos tubérculos aparece hipertrófico, suelto o formando lo que se conoce como un os trígono. También éste se puede irritar por microtraumatismos repetidos contra el pilón tibial posterior. Esto ha sido denominado por Cabot como parte del síndrome de la cola del astrágalo. ETIOPATOGENIA Carreras de velocidad (lisos y vallas) del pie en hiperextensión forzada y mantenida. Sirve el ejemplo de movimientos bruscos del dorso del pie hacia atrás, como el producido al chutar con fuerza un balón, durante los cuales este relieve óseo bascula, llegando a chocar con la parte posterior de la tibia y se rompe. En estos deportistas la lesión crónica se produce por adoptar una flexión plantar extrema y mantenida, típica del ballet, con la repetición de gestos técnicos durante el entrenamiento, por lo que la cola del astrágalo queda comprimida entre el reborde posterior de la tibia y el calcáneo (Fig. 7). Este microtraumatismo repetido puede provocar desde l a inflamación aguda (“pinzamiento”) hasta la ost eonecrosi s a dicho nivel y no se deberá confundir con la fractura de Cloquet Shephard. El astrágalo es uno de los huesos peor irrigados de la extremidad inferior, por lo que no es de extrañar la existencia de fenómenos de necrosis o fenómenos de osteocondritis a dicho nivel. Más frecuentes son las necrosis parciales que pueden localizarse, sobre todo, en la cola y tróclea astragalinas. Cuando afectan a la cola, forman parte del llamado “ síndrome cola de astrágalo” (Fig. 7). Diagnóstico Clínicamente aparecerá dolor en la zona posterior del astrágalo, justo por delante del tendón de Aquiles, a un través de dedo, que aumenta con el ejercicio y en la posición de rodillas. También es doloroso a la palpación profunda y a la maniobra de reproducir dicha flexión plantar forzada (maniobra de pellizcamiento). Radiográficamente, la cola del astrágalo aparecerá con un aspecto atigrado o multifragmentado en el caso de las necrosis, y con un trazo de fractura en el caso de las roturas. En esta región anatómica las entidades patológicas pueden ser: 1. Agudas: De origen brusco, como sería la fractura de cola de astrágalo. 2. Crónicas: Por microtraumatismos de repetición. Entre las formas agudas se encuentran aquellas de consideración leve-moderada al pinzamiento o pellizcami ento de la col a del ast rágal o ( “ i mpingement” posterior del tobil lo, en lengua anglosajona) y como más grave la fractura de la col a del ast rágalo. Entre las crónicas nos encontramos el síndrome de cola del astrágalo. Figura 6. Distribución de las fuerzas a través del astrágalo 52 Este tipo de problemas se presentan preferentemente en bailarinas, futbolistas y, en nuestro caso, atletas de resistencia o saltos. Son estos deportistas en los que es frecuente la posición Figura 7. Flexión plantar extrema y mantenida durante el entrenamiento. Compresión de la cola del astrágalo entre el reborde posterior de la tibia y el calcáneo. 53 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 52 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE EL SÍNDROME DE COLA DE ASTRÁGALO El astrágalo, en la nómina anatómica talus, es un hueso corto que forma parte del tarso. Consta de seis caras articulares y se le relaciona con los siguientes huesos: • Tibia y peroné o fíbula, formando parte de la articulación tibioperoneo-astragalina o más conocida como “tobillo”. • Escafoides. • Calcáneo. Es sabida la importancia biomecánica del astrágalo en la distribución de fuerzas que llegan al pie a través suyo. El astrágalo distribuye la fuerza que le llega procedente de la tibia a la articulación subastragalina posterior, la articulación subastragalina anterior y al hueso escafoides (fig.6). Es interesante mencionar, por su trascendencia en la generación de lesiones deportivas, la existencia de un apéndice posterior o cola en el astrágalo. No hay que confundirlo con una variante anatómica, el conocido por os trigonum del astrágalo, que ofrece una imagen radiográfica de una cola de astrágalo suelta, a veces difícil de diferenciar de la fractura. Existen dos tubérculos en la cara posterior del astrágalo, uno postero-interno y otro postero-externo, entre los cuales pasa el flexor propio del primer dedo del pie. En ocasiones uno de estos tubérculos aparece hipertrófico, suelto o formando lo que se conoce como un os trígono. También éste se puede irritar por microtraumatismos repetidos contra el pilón tibial posterior. Esto ha sido denominado por Cabot como parte del síndrome de la cola del astrágalo. ETIOPATOGENIA Carreras de velocidad (lisos y vallas) del pie en hiperextensión forzada y mantenida. Sirve el ejemplo de movimientos bruscos del dorso del pie hacia atrás, como el producido al chutar con fuerza un balón, durante los cuales este relieve óseo bascula, llegando a chocar con la parte posterior de la tibia y se rompe. En estos deportistas la lesión crónica se produce por adoptar una flexión plantar extrema y mantenida, típica del ballet, con la repetición de gestos técnicos durante el entrenamiento, por lo que la cola del astrágalo queda comprimida entre el reborde posterior de la tibia y el calcáneo (Fig. 7). Este microtraumatismo repetido puede provocar desde l a inflamación aguda (“pinzamiento”) hasta la ost eonecrosi s a dicho nivel y no se deberá confundir con la fractura de Cloquet Shephard. El astrágalo es uno de los huesos peor irrigados de la extremidad inferior, por lo que no es de extrañar la existencia de fenómenos de necrosis o fenómenos de osteocondritis a dicho nivel. Más frecuentes son las necrosis parciales que pueden localizarse, sobre todo, en la cola y tróclea astragalinas. Cuando afectan a la cola, forman parte del llamado “ síndrome cola de astrágalo” (Fig. 7). Diagnóstico Clínicamente aparecerá dolor en la zona posterior del astrágalo, justo por delante del tendón de Aquiles, a un través de dedo, que aumenta con el ejercicio y en la posición de rodillas. También es doloroso a la palpación profunda y a la maniobra de reproducir dicha flexión plantar forzada (maniobra de pellizcamiento). Radiográficamente, la cola del astrágalo aparecerá con un aspecto atigrado o multifragmentado en el caso de las necrosis, y con un trazo de fractura en el caso de las roturas. En esta región anatómica las entidades patológicas pueden ser: 1. Agudas: De origen brusco, como sería la fractura de cola de astrágalo. 2. Crónicas: Por microtraumatismos de repetición. Entre las formas agudas se encuentran aquellas de consideración leve-moderada al pinzamiento o pellizcami ento de la col a del ast rágal o ( “ i mpingement” posterior del tobil lo, en lengua anglosajona) y como más grave la fractura de la col a del ast rágalo. Entre las crónicas nos encontramos el síndrome de cola del astrágalo. Figura 6. Distribución de las fuerzas a través del astrágalo 52 Este tipo de problemas se presentan preferentemente en bailarinas, futbolistas y, en nuestro caso, atletas de resistencia o saltos. Son estos deportistas en los que es frecuente la posición Figura 7. Flexión plantar extrema y mantenida durante el entrenamiento. Compresión de la cola del astrágalo entre el reborde posterior de la tibia y el calcáneo. 53 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 54 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Carreras de velocidad (lisos y vallas) TRATAMIENTO Tratamiento El tratamiento de las formas agudas consiste en el reposo deportivo, crioterapia local diaria y el empleo de antiinflamatorios orales prescritos por un médico. En ocasiones de gran inflamación que conlleva cierto grado de sinovitis o tendinopatía del flexor del primer dedo puede ser necesaria la infiltración o depósito local de sustancias antiinflamatorias. Una vez pasada la fase inflamatoria aguda convendría realizar un programa de fortalecimiento específico para poder adoptar la postura de flexión plantar forzada sin que conduzca a la patología. El tratamiento, en ocasiones, consistirá en la extirpación quirúrgica de la zona afectada vía artroscópica o por cirugía abierta. La fractura de cola de astrágalo y las necrosis dolorosas pueden tratarse artroscópicamente. Utilizando portales posteriores, para o trans-aquíleos, es posible acceder a la cara posterior de la articulación tibio-peroneo-astragalina, extraer el fragmento desprendido y limar la superficie residual. BIBLIOGRAFÍA Balius i Matas,R, Ardévol i Cuesta, J. Osteonecrosis aséptica de cola de astrágalo. APUNTS 1990; Vol. XXVII.295-299. http://www.imqt.com/almacen/pd f.Clases.fisio.CEU20060 7 / T e m a 2 0 3 8 FracturadelPie.pdf. Brent Brotzman S, Wilk K E, Daugherty K. Rehabilitación Ortopédica Clínica. ISBN 8 4 8 1 7 4 8 4 4 7 , 9788481748444. http://www.footphysicians.com/ espanol/SC3ADndrome_ del_Hueso_TrC3ADgono.htm. Busto Villarreal J.M, Fernández Fiaren M, Guillén Toledo J, Roure J. Síndrome de la cola del astrágalo. Rev Mex Ortop Traum 1999; 13(3): 200-202. MINOVES, M. La gammagrafía ósea en el diagnóstico y valoración de las lesiones deportivas. CETIR, Centre Medic. Barcelona. Rev. Esp. Med. Nuclear 20, 2 (132-152), 2001. 54 www.semergen.es/semergen2/m icrosites/Semergenhoy/febrero _04/PaginasdeSemergenfebrero13.pdf. FISIOTERAPÉUTICO TRATAMIENTO TENDINOPATÍA AQUÍLEA dad deportiva nos darán las llaves del éxito en el tratamiento de la tendinopatía aquílea. El tendón de Aquiles es el más resistente del cuerpo humano, pertenece al músculo tríceps sural que a su vez está formado por el vasto interno, el vasto externo y sóleo, con su inserción distal en el calcáneo. Dicho tendón tiene una aponeurosis anterior encargada de irrigarle. Fase I (Aguda). En el primer estadio de la lesión, utilizaremos todo tipo de medidas analgésicas y antiinflamatorias: En la tendinopatía aquílea es muy normal encontrarse a nivel microscópico con alteraciones estructurales de las fibras de colágeno con ausencia de inflamación, a esto se le llama “tendinosis”. B) Masaje-descarga de toda la musculatura posterior y de la planta del pie, masaje del tendón longitudinal y transverso. Por otro lado nos podemos encontrar con otras presentaciones clínicas como la “tendinitis aguda” que puede llegar a hacer crepitar el tendón, y/o una “entesitis” a nivel de la inserción calcánea. Lo normal es que aparezca una combinación de dichas patologías. Es una patología habitual en el atletismo y en deportes de carrera y saltos (volleyball, balonmano, etc.) y los factores que predisponen pueden ser el sobreuso (años de entrenamiento), alteraciones biomecánicas, calzado específico (zapatillas de clavos), sobrecargas musculares, poca flexibilidad muscular, etc. http://www.revistapodologia.com. TRATAMIENTO La tendinopatía aquílea, independientemente de su presentación, responderá mejor si el tratamiento es iniciado en el primer estadio de la lesión. Un diagnóstico precoz, unido a programa de tratamiento basado en disminuir el dolor y la inflamación, seguido de un buen programa de fortalecimiento en excéntrico, corrigiendo los factores predisponedores y biomecánicos, y acompañado de un retorno progresivo a la activi- A) Termo-electroterapia: Ultrasonidos, láser, interferenciales, etc. C) Movilizaciones y estiramientos suaves del tendón. D) Vendaje funcional elástico y/o vendaje neuromuscular (kinesiotaping). E) Limitaciones en el entrenamiento de carrera, pudiendo ser reemplazados por entrenamiento en piscina (correr en el agua), y/o máquina elíptica. Fase II. Superada la fase aguda y aunque continuemos con parte del tratamiento de la fase I, iremos introduciendo nuevas terapias: A)Fortalecimiento general del pie tanto de músculos agonistas como antagonistas, en cadena cinética abierta y cerrada. B)Trabajo propioceptivo-monopodal (platos inestables, equilibrios ojos cerrados, etc.). C) Programa de fortalecimiento en excéntrico (los finlandeses hablan incluso de empezar en fase aguda, aunque nosotros preferimos esperar a que baje la irritación del tendón). Dicho fortalecimiento se realizará a días alternos con cargas, y el resto sin cargas. La carga irá aumentando progresivamente, 55 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 54 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Carreras de velocidad (lisos y vallas) TRATAMIENTO Tratamiento El tratamiento de las formas agudas consiste en el reposo deportivo, crioterapia local diaria y el empleo de antiinflamatorios orales prescritos por un médico. En ocasiones de gran inflamación que conlleva cierto grado de sinovitis o tendinopatía del flexor del primer dedo puede ser necesaria la infiltración o depósito local de sustancias antiinflamatorias. Una vez pasada la fase inflamatoria aguda convendría realizar un programa de fortalecimiento específico para poder adoptar la postura de flexión plantar forzada sin que conduzca a la patología. El tratamiento, en ocasiones, consistirá en la extirpación quirúrgica de la zona afectada vía artroscópica o por cirugía abierta. La fractura de cola de astrágalo y las necrosis dolorosas pueden tratarse artroscópicamente. Utilizando portales posteriores, para o trans-aquíleos, es posible acceder a la cara posterior de la articulación tibio-peroneo-astragalina, extraer el fragmento desprendido y limar la superficie residual. BIBLIOGRAFÍA Balius i Matas,R, Ardévol i Cuesta, J. Osteonecrosis aséptica de cola de astrágalo. APUNTS 1990; Vol. XXVII.295-299. http://www.imqt.com/almacen/pd f.Clases.fisio.CEU20060 7 / T e m a 2 0 3 8 FracturadelPie.pdf. Brent Brotzman S, Wilk K E, Daugherty K. Rehabilitación Ortopédica Clínica. ISBN 8 4 8 1 7 4 8 4 4 7 , 9788481748444. http://www.footphysicians.com/ espanol/SC3ADndrome_ del_Hueso_TrC3ADgono.htm. Busto Villarreal J.M, Fernández Fiaren M, Guillén Toledo J, Roure J. Síndrome de la cola del astrágalo. Rev Mex Ortop Traum 1999; 13(3): 200-202. MINOVES, M. La gammagrafía ósea en el diagnóstico y valoración de las lesiones deportivas. CETIR, Centre Medic. Barcelona. Rev. Esp. Med. Nuclear 20, 2 (132-152), 2001. 54 www.semergen.es/semergen2/m icrosites/Semergenhoy/febrero _04/PaginasdeSemergenfebrero13.pdf. FISIOTERAPÉUTICO TRATAMIENTO TENDINOPATÍA AQUÍLEA dad deportiva nos darán las llaves del éxito en el tratamiento de la tendinopatía aquílea. El tendón de Aquiles es el más resistente del cuerpo humano, pertenece al músculo tríceps sural que a su vez está formado por el vasto interno, el vasto externo y sóleo, con su inserción distal en el calcáneo. Dicho tendón tiene una aponeurosis anterior encargada de irrigarle. Fase I (Aguda). En el primer estadio de la lesión, utilizaremos todo tipo de medidas analgésicas y antiinflamatorias: En la tendinopatía aquílea es muy normal encontrarse a nivel microscópico con alteraciones estructurales de las fibras de colágeno con ausencia de inflamación, a esto se le llama “tendinosis”. B) Masaje-descarga de toda la musculatura posterior y de la planta del pie, masaje del tendón longitudinal y transverso. Por otro lado nos podemos encontrar con otras presentaciones clínicas como la “tendinitis aguda” que puede llegar a hacer crepitar el tendón, y/o una “entesitis” a nivel de la inserción calcánea. Lo normal es que aparezca una combinación de dichas patologías. Es una patología habitual en el atletismo y en deportes de carrera y saltos (volleyball, balonmano, etc.) y los factores que predisponen pueden ser el sobreuso (años de entrenamiento), alteraciones biomecánicas, calzado específico (zapatillas de clavos), sobrecargas musculares, poca flexibilidad muscular, etc. http://www.revistapodologia.com. TRATAMIENTO La tendinopatía aquílea, independientemente de su presentación, responderá mejor si el tratamiento es iniciado en el primer estadio de la lesión. Un diagnóstico precoz, unido a programa de tratamiento basado en disminuir el dolor y la inflamación, seguido de un buen programa de fortalecimiento en excéntrico, corrigiendo los factores predisponedores y biomecánicos, y acompañado de un retorno progresivo a la activi- A) Termo-electroterapia: Ultrasonidos, láser, interferenciales, etc. C) Movilizaciones y estiramientos suaves del tendón. D) Vendaje funcional elástico y/o vendaje neuromuscular (kinesiotaping). E) Limitaciones en el entrenamiento de carrera, pudiendo ser reemplazados por entrenamiento en piscina (correr en el agua), y/o máquina elíptica. Fase II. Superada la fase aguda y aunque continuemos con parte del tratamiento de la fase I, iremos introduciendo nuevas terapias: A)Fortalecimiento general del pie tanto de músculos agonistas como antagonistas, en cadena cinética abierta y cerrada. B)Trabajo propioceptivo-monopodal (platos inestables, equilibrios ojos cerrados, etc.). C) Programa de fortalecimiento en excéntrico (los finlandeses hablan incluso de empezar en fase aguda, aunque nosotros preferimos esperar a que baje la irritación del tendón). Dicho fortalecimiento se realizará a días alternos con cargas, y el resto sin cargas. La carga irá aumentando progresivamente, 55 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 56 Carreras de velocidad Saludinámica (lisos y vallas) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE la velocidad de ejecución ha de ser muy lenta, unos 6 segundos de bajada, y el ejercicio se realizará en un escalón para aumentar los grados de flexión dorsal, excepto cuando estemos ante una entesitis, que se hará hasta 90 grados; el número de series y repeticiones será de entre 3 x 10 ó 3 x 15, dependiendo de la sintomatología del atleta. D) La electroestimulación en estiramiento en cadena cinética cerrada, dos o tres días a la semana. E) También nos está dando buen resultado la férula nocturna en estiramiento leve, aunque se utiliza más en fascitis plantar. F) El reinicio a la carrera ha de ser progresivo, empezando a correr a días alternos e ir aumentando el tiempo cada semana. Fase III. Readaptación funcional y prevención. En caso de que un atleta de élite haya sufrido una tendinopatía aquílea, sobre todo una tendinosis, será muy importante su tratamiento preventivo ya que sería fácil su recaída, sobre todo en la pretemporada, después del período vacacional. Esta profilaxis estará basada en: A) Programa muscular. de fortalecimiento B) Programa de fortalecimiento en excéntrico a diario. C) Reducción de los factores de riesgo (plantilla de descarga, masaje de gemelo y sóleo para evitar sobrecargas dos veces a la semana, etc.) TRATAMIENTO LESIONES DE LA MUSCULATURA ISQUIOSURAL Vamos a dividir en tres las posibles lesiones que afectan a este grupo muscular cuya función general es la flexión de rodilla y extensión de cadera. Biomecánicamente se usan mucho en la carrera, sobre todo en carreras cortas (velocidad) y es por ello una lesión muy frecuente en atletismo: 1. Rotura fibrilar. 2. Contractura muscular. 3. Síndrome de isquiotibiales. ROTURA FIBRILAR La rotura fibrilar viene de una manera “aguda” generalmente haciendo “sprints”, ya sea durante, como en la aceleración o frenada. El paciente siente un pinchazo fuerte en la cara posterior del muslo y al momento incapacidad funcional (dolor en la marcha, al estiramiento y a la palpación). La ecografía nos confirmará la lesión: Fase I (48 horas aprox.): • Protocolo RICE. • Vendaje compresivo. • Reposo relativo. • Presoterapia suave. Fase II (pasadas 48 horas hasta 10 días aprox.): • Termo-electroterapia; U.S, Láser, M.O, O.C, Corrientes interferenciales, etc. • Masaje suave y drenaje de la zona. • Movilizaciones límite de dolor. 56 pasivas hasta • Trabajo de los músculos antagonistas y no afectados por la lesión. Aún no es conveniente correr pero podrá entrenar en piscina, bicicleta y/o máquina elíptica. Fase III (A partir del 10º/15º días): Posiblemente la más importante. En teoría la cicatriz ya se ha cerrado (control ecográfico) y la sintomatología ya se ha reducido mucho; el objetivo será un tratamiento exhaustivo de la cicatriz y el comienzo del trabajo muscular. Continuaremos con el tratamiento de la fase II e iremos introduciendo nuevas terapias: • Masaje de descarga de la musculatura y tipo Cyriax, en la zona de la cicatriz para evitar adherencias y mejorar la calidad de la misma (2/3 veces a la semana). • Fortalecimiento muscular, empezando con ejercicios isométricos (en diferentes ángulos), seguidos de isotónicos concéntricos (con cargas progresivas) y quizás los más importantes ejercicios excéntricos, que nos ayudará a mejorar la calidad de la cicatriz y su protagonismo nos llevará incluso después de la lesión, ya que son muy impor- tantes también en la fase preventiva. Habrá que trabajar en excéntrico las dos funciones musculares de los isquiosurales (flexión de rodilla y extensión de cadera). • Electroestimulación en estiramiento (2/3 veces semana) aumentando la frecuencia cada semana. • En esta fase también nos puede ayudar la punción seca en los puntos gatillos miofasciales (dolores residuales). Fase IV: Esta fase puede durar 3 ó 4 meses después de la lesión, y se debería tener en cuenta en las pretemporadas. El objetivo es la readaptación al entrenamiento y prevención futura. Si el paciente puede realizar excéntricos sin dolor podrá empezar a correr de forma progresiva hasta hacer la velocidad sin molestias. Deberemos continuar en esta fase con: • Fortalecimiento excéntrico, independientemente del entrenamiento de pesas que requiera su disciplina atlética. • Electroestimulación en estiramiento 2/3 veces semana. • Masaje de descarga preventivo, 2 veces semana. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 56 Carreras de velocidad Saludinámica (lisos y vallas) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE la velocidad de ejecución ha de ser muy lenta, unos 6 segundos de bajada, y el ejercicio se realizará en un escalón para aumentar los grados de flexión dorsal, excepto cuando estemos ante una entesitis, que se hará hasta 90 grados; el número de series y repeticiones será de entre 3 x 10 ó 3 x 15, dependiendo de la sintomatología del atleta. D) La electroestimulación en estiramiento en cadena cinética cerrada, dos o tres días a la semana. E) También nos está dando buen resultado la férula nocturna en estiramiento leve, aunque se utiliza más en fascitis plantar. F) El reinicio a la carrera ha de ser progresivo, empezando a correr a días alternos e ir aumentando el tiempo cada semana. Fase III. Readaptación funcional y prevención. En caso de que un atleta de élite haya sufrido una tendinopatía aquílea, sobre todo una tendinosis, será muy importante su tratamiento preventivo ya que sería fácil su recaída, sobre todo en la pretemporada, después del período vacacional. Esta profilaxis estará basada en: A) Programa muscular. de fortalecimiento B) Programa de fortalecimiento en excéntrico a diario. C) Reducción de los factores de riesgo (plantilla de descarga, masaje de gemelo y sóleo para evitar sobrecargas dos veces a la semana, etc.) TRATAMIENTO LESIONES DE LA MUSCULATURA ISQUIOSURAL Vamos a dividir en tres las posibles lesiones que afectan a este grupo muscular cuya función general es la flexión de rodilla y extensión de cadera. Biomecánicamente se usan mucho en la carrera, sobre todo en carreras cortas (velocidad) y es por ello una lesión muy frecuente en atletismo: 1. Rotura fibrilar. 2. Contractura muscular. 3. Síndrome de isquiotibiales. ROTURA FIBRILAR La rotura fibrilar viene de una manera “aguda” generalmente haciendo “sprints”, ya sea durante, como en la aceleración o frenada. El paciente siente un pinchazo fuerte en la cara posterior del muslo y al momento incapacidad funcional (dolor en la marcha, al estiramiento y a la palpación). La ecografía nos confirmará la lesión: Fase I (48 horas aprox.): • Protocolo RICE. • Vendaje compresivo. • Reposo relativo. • Presoterapia suave. Fase II (pasadas 48 horas hasta 10 días aprox.): • Termo-electroterapia; U.S, Láser, M.O, O.C, Corrientes interferenciales, etc. • Masaje suave y drenaje de la zona. • Movilizaciones límite de dolor. 56 pasivas hasta • Trabajo de los músculos antagonistas y no afectados por la lesión. Aún no es conveniente correr pero podrá entrenar en piscina, bicicleta y/o máquina elíptica. Fase III (A partir del 10º/15º días): Posiblemente la más importante. En teoría la cicatriz ya se ha cerrado (control ecográfico) y la sintomatología ya se ha reducido mucho; el objetivo será un tratamiento exhaustivo de la cicatriz y el comienzo del trabajo muscular. Continuaremos con el tratamiento de la fase II e iremos introduciendo nuevas terapias: • Masaje de descarga de la musculatura y tipo Cyriax, en la zona de la cicatriz para evitar adherencias y mejorar la calidad de la misma (2/3 veces a la semana). • Fortalecimiento muscular, empezando con ejercicios isométricos (en diferentes ángulos), seguidos de isotónicos concéntricos (con cargas progresivas) y quizás los más importantes ejercicios excéntricos, que nos ayudará a mejorar la calidad de la cicatriz y su protagonismo nos llevará incluso después de la lesión, ya que son muy impor- tantes también en la fase preventiva. Habrá que trabajar en excéntrico las dos funciones musculares de los isquiosurales (flexión de rodilla y extensión de cadera). • Electroestimulación en estiramiento (2/3 veces semana) aumentando la frecuencia cada semana. • En esta fase también nos puede ayudar la punción seca en los puntos gatillos miofasciales (dolores residuales). Fase IV: Esta fase puede durar 3 ó 4 meses después de la lesión, y se debería tener en cuenta en las pretemporadas. El objetivo es la readaptación al entrenamiento y prevención futura. Si el paciente puede realizar excéntricos sin dolor podrá empezar a correr de forma progresiva hasta hacer la velocidad sin molestias. Deberemos continuar en esta fase con: • Fortalecimiento excéntrico, independientemente del entrenamiento de pesas que requiera su disciplina atlética. • Electroestimulación en estiramiento 2/3 veces semana. • Masaje de descarga preventivo, 2 veces semana. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 58 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE TRATAMIENTO CONTRACTURA MUSCULAR ca a tiempo para iniciar su tratamiento, la clínica irá aumentando y su evolución será más lenta. La contractura muscular aparece de una forma más o menos progresiva y generalmente se da por sobreesfuerzo, en ocasiones puede ser un preaviso de rotura muscular. La eco será negativa y la incapacidad funcional será más leve que en la rotura aunque a veces puede haber dudas, y el diagnóstico diferencial con rotura fibrilar será clave para el tratamiento fisioterápico. En cuanto al tratamiento será el mismo que en la fase II y III de la rotura pero acortando los tiempos de actuación: Fase I: (1ª semana) • Termo-electroterapia analgésica antiiflamatoria, U.S, M.O, Corrientes interferenciales, etc. • Masaje descarga de la musculatura. • Movilizaciones pasivas y estiramientos progresivos. Fase II: • Masaje transverso tipo Cyriax, masaje transverso en estiramiento. • Fortalecimiento muscular, sobre todo en excéntrico. • Electroestimulación miento. en estira- • Readaptación progresiva a los entrenamientos. TRATAMIENTO SÍNDROME DE ISQUIOTIBIALES Es una tendinopatía que afecta a la inserción proximal de los isquiotibiales (tuberosidad isquiática), que aparece de forma progresiva, y permite al atleta entrenar con ciertas limitaciones pero si no se diagnosti- 58 La sintomatología será dolor debajo de la nalga, duele más en frío y al inicio del entrenamiento e incluso puede llegar a doler estando en sedestación por compresión de la zona (conduciendo, sentado en clase, etc.). En muchas ocasiones irá unido al síndrom e del piramidal. Para su correcto diagnóstico será necesario una R.N.M donde se verificarán los cambios degenerativos del tendón con afectación incluso del periostio. El tratamiento tendrá como objetivos disminuir la sensibilidad dolorosa y posible inflamación inicial, y una segunda fase de mejora de la calidad del tendón y eliminación de posibles adherencias y fibrosis. Fase I: (1ª semana) • Limitar el entrenamiento sobre todo las carreras de velocidad y todo aquel ejercicio que moleste. • Electro-termoterapia analgésica antiinflamatoria sobretodo U.S y O.C o M.O. • Masaje descarga fuerte de la musculatura isquiosural para disminuir la tensión de la inserción. • Técnicas osteopáticas sobre todo de la columna lumbopélvica. Fase II: • Masaje transverso y transverso en estiramiento, evitamos adherencias y provocamos vasodilatación de la zona. • Electroestimulación de la musculatura isquiosural en estiramiento 2/3 veces semana. Este tratamiento se mantendrá varios meses después de la lesión para evitar recaídas, incluso en las pretemporadas venideras. Carreras de velocidad (lisos y vallas) • Protocolo de fortalecimiento en excéntrico a días alternos sobre todo del componente de extensión de cadera (se pueden realizar con el fisioterapeuta o con cinchas en espalderas). Se realizarán series de 3 x10 que irán aumentando en carga y repeticiones progresivamente. Nos dará mejor resultado si el trabajo excéntrico lo realizamos después de la electroestimulación en estiramiento y antes de entrenar. Es posible que en esta fase aparezca más dolor y empeore la sintomatología sobre todo durante las 2 primeras semanas. Aunque el paciente ya esté entrenando con normalidad sería conveniente continuar con el protocolo 2/3 meses más, adaptándolo a sus entrenamientos y sobre todo en las pretemporadas, como tratamiento preventivo, ya que son habituales sus recidivas. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 58 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE TRATAMIENTO CONTRACTURA MUSCULAR ca a tiempo para iniciar su tratamiento, la clínica irá aumentando y su evolución será más lenta. La contractura muscular aparece de una forma más o menos progresiva y generalmente se da por sobreesfuerzo, en ocasiones puede ser un preaviso de rotura muscular. La eco será negativa y la incapacidad funcional será más leve que en la rotura aunque a veces puede haber dudas, y el diagnóstico diferencial con rotura fibrilar será clave para el tratamiento fisioterápico. En cuanto al tratamiento será el mismo que en la fase II y III de la rotura pero acortando los tiempos de actuación: Fase I: (1ª semana) • Termo-electroterapia analgésica antiiflamatoria, U.S, M.O, Corrientes interferenciales, etc. • Masaje descarga de la musculatura. • Movilizaciones pasivas y estiramientos progresivos. Fase II: • Masaje transverso tipo Cyriax, masaje transverso en estiramiento. • Fortalecimiento muscular, sobre todo en excéntrico. • Electroestimulación miento. en estira- • Readaptación progresiva a los entrenamientos. TRATAMIENTO SÍNDROME DE ISQUIOTIBIALES Es una tendinopatía que afecta a la inserción proximal de los isquiotibiales (tuberosidad isquiática), que aparece de forma progresiva, y permite al atleta entrenar con ciertas limitaciones pero si no se diagnosti- 58 La sintomatología será dolor debajo de la nalga, duele más en frío y al inicio del entrenamiento e incluso puede llegar a doler estando en sedestación por compresión de la zona (conduciendo, sentado en clase, etc.). En muchas ocasiones irá unido al síndrom e del piramidal. Para su correcto diagnóstico será necesario una R.N.M donde se verificarán los cambios degenerativos del tendón con afectación incluso del periostio. El tratamiento tendrá como objetivos disminuir la sensibilidad dolorosa y posible inflamación inicial, y una segunda fase de mejora de la calidad del tendón y eliminación de posibles adherencias y fibrosis. Fase I: (1ª semana) • Limitar el entrenamiento sobre todo las carreras de velocidad y todo aquel ejercicio que moleste. • Electro-termoterapia analgésica antiinflamatoria sobretodo U.S y O.C o M.O. • Masaje descarga fuerte de la musculatura isquiosural para disminuir la tensión de la inserción. • Técnicas osteopáticas sobre todo de la columna lumbopélvica. Fase II: • Masaje transverso y transverso en estiramiento, evitamos adherencias y provocamos vasodilatación de la zona. • Electroestimulación de la musculatura isquiosural en estiramiento 2/3 veces semana. Este tratamiento se mantendrá varios meses después de la lesión para evitar recaídas, incluso en las pretemporadas venideras. Carreras de velocidad (lisos y vallas) • Protocolo de fortalecimiento en excéntrico a días alternos sobre todo del componente de extensión de cadera (se pueden realizar con el fisioterapeuta o con cinchas en espalderas). Se realizarán series de 3 x10 que irán aumentando en carga y repeticiones progresivamente. Nos dará mejor resultado si el trabajo excéntrico lo realizamos después de la electroestimulación en estiramiento y antes de entrenar. Es posible que en esta fase aparezca más dolor y empeore la sintomatología sobre todo durante las 2 primeras semanas. Aunque el paciente ya esté entrenando con normalidad sería conveniente continuar con el protocolo 2/3 meses más, adaptándolo a sus entrenamientos y sobre todo en las pretemporadas, como tratamiento preventivo, ya que son habituales sus recidivas. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 60 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE TRATAMIENTO ROTURA DEL RECTO ANTERIOR CUDRICIPITAL Aunque es bastante común en el fútbol también se da con cierta frecuencia en el Atletismo, sobre todo en velocistas y saltadores. El recto anterior forma parte del aparato extensor de la rodilla pero también es flexor de cadera (biarticular) y esto le hace especialmente susceptible de lesión. La rotura muscular suele venir de forma aguda, generalmente al realizar un “sprint” sin haber calentado lo suficiente o bien por fatiga e incoordinación de agonistas y antagonistas. La impotencia funcional es clara, refiere un pinchazo fuerte normalmente en el 1/3 medio o superior del músculo, la eco nos confirmará la lesión. Es una lesión que nos suele dejar una cicatriz de grandes dimensiones que se puede palpar e incluso ver cuándo se contrae el cuadriceps, por lo tanto el trabajo de la cicatriz será muy importante. El tratamiento fisioterápico será como el de cualquier rotura muscular: Fase I: (48 horas) • Protocolo RICE • Vendaje compresivo y emplastos nocturnos con Árnica • Masaje suave de drenaje. • U.S, Láser, Electroterapia. • Movilizaciones suaves de cadera y rodilla e ir aumentando progresivamente. • Comenzar a trabajar la musculatura antagonista. 60 (lisos y vallas) Fase I II: (pasados 10 días aprox.) de un gran esguince). En esta fase comenzamos con el tratamiento de la cicatriz y el entrenamiento de la musculatura afectada, además de las medidas de la fase II realizaremos: La causa de la lesión suele ser por fatiga o estrés de dicha zona (microtraumatismos de repetición) y es típico de deportes en los que se realice flexión plantar forzada como en el ballet o el atletismo. Otra causa puede ser la aparición de un hueso supranumerario llamado “ostrigonum” que se ve en RX como un fragmento óseo. En estos casos el tratamiento suele ser quirúrgico. El modo de aparición del dolor suele ser progresivo, aparece ante una flexión plantar forzada, el paciente refiere dolor y sensación que el astrágalo choca con algo. • Masaje de descarga del cuadriceps haciendo mas hincapié en el recto anterior, masaje transverso profundo y transverso en estiramiento (2/3 veces semana). No olvidar tratar el psoas iliaco que ayuda al recto en la flexión de cadera y se suele ver acortado en esta lesión. • Comenzar el fortalecimiento muscular con la secuencia habitual: Isométricos, concéntricos y excéntricos. El trabajo Excéntrico tendrá mucha importancia para evitar las retracciones de la cicatriz y sus adherencias. • Electroestimulación en estiramiento 2/3 veces en semana. • Desactivación de los Puntos Gatillos Miofasciales con técnicas conservadoras o invasivas como la punción seca. Fase I V: La readaptación funcional, comienzo a los entrenamientos de forma progresiva, empezar con carrera lenta y terminar con la velocidad. En esta fase es conveniente seguir con el trabajo en excéntrico y la electroestimulación, ya que esta lesión puede provocar recaídas en la vuelta a los entrenamientos de velocidad. • Presoterapia suave Fase II: (48 horas-10 días aprox.) Carreras de velocidad TRATAMIENTO SÍNDROME DE LA COLA DEL ASTRÁGALO Es una patología que se asienta en la cara posterior del tobillo, zona cola del astrágalo y pre-aquílea, normalmente por detrás del maléolo externo (aunque a veces también puede doler en cara posterior de maléolo interno normalmente por secuelas inflamatorias El tratamiento irá encaminado a bajar la inflamación de la zona posteriormente a la readaptación funcional del pie. Si en 15 días no mejora lo deseado lo más normal y efectivo sería realizar una infiltración. Fase I: • Reposo, podrá entrenar agua y/o bicicleta. en • Termoelectroterapia analgésica y antiinflamatoria. • Masaje drenaje y tipo Cyriax en la zona. • Vendaje funcional y/o neuromuscular. • Fortalecimiento manual con el fisioterapeuta en rangos articulares no dolorosos de pie y tobillo. Fase II: Si a los 15 días es capaz de realizar la flexión plantar sin dolor comenzaremos la readaptación funcional del tobillo en esta secuencia: • Fortalecimiento en cadena cinética cerrada (puntillas, talones, talón-punta…). • Propiocepción del pie y tobillo. • Entrenamiento de carrera. • Saltos. Como suele ser una patología de origen biomecánico el tratamiento se puede complementar con una visita al podólogo para analizar la pisada del paciente, ya que con unas plantillas de descarga podemos prevenir y disminuir la incidencia de esta lesión. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 60 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE TRATAMIENTO ROTURA DEL RECTO ANTERIOR CUDRICIPITAL Aunque es bastante común en el fútbol también se da con cierta frecuencia en el Atletismo, sobre todo en velocistas y saltadores. El recto anterior forma parte del aparato extensor de la rodilla pero también es flexor de cadera (biarticular) y esto le hace especialmente susceptible de lesión. La rotura muscular suele venir de forma aguda, generalmente al realizar un “sprint” sin haber calentado lo suficiente o bien por fatiga e incoordinación de agonistas y antagonistas. La impotencia funcional es clara, refiere un pinchazo fuerte normalmente en el 1/3 medio o superior del músculo, la eco nos confirmará la lesión. Es una lesión que nos suele dejar una cicatriz de grandes dimensiones que se puede palpar e incluso ver cuándo se contrae el cuadriceps, por lo tanto el trabajo de la cicatriz será muy importante. El tratamiento fisioterápico será como el de cualquier rotura muscular: Fase I: (48 horas) • Protocolo RICE • Vendaje compresivo y emplastos nocturnos con Árnica • Masaje suave de drenaje. • U.S, Láser, Electroterapia. • Movilizaciones suaves de cadera y rodilla e ir aumentando progresivamente. • Comenzar a trabajar la musculatura antagonista. 60 (lisos y vallas) Fase I II: (pasados 10 días aprox.) de un gran esguince). En esta fase comenzamos con el tratamiento de la cicatriz y el entrenamiento de la musculatura afectada, además de las medidas de la fase II realizaremos: La causa de la lesión suele ser por fatiga o estrés de dicha zona (microtraumatismos de repetición) y es típico de deportes en los que se realice flexión plantar forzada como en el ballet o el atletismo. Otra causa puede ser la aparición de un hueso supranumerario llamado “ostrigonum” que se ve en RX como un fragmento óseo. En estos casos el tratamiento suele ser quirúrgico. El modo de aparición del dolor suele ser progresivo, aparece ante una flexión plantar forzada, el paciente refiere dolor y sensación que el astrágalo choca con algo. • Masaje de descarga del cuadriceps haciendo mas hincapié en el recto anterior, masaje transverso profundo y transverso en estiramiento (2/3 veces semana). No olvidar tratar el psoas iliaco que ayuda al recto en la flexión de cadera y se suele ver acortado en esta lesión. • Comenzar el fortalecimiento muscular con la secuencia habitual: Isométricos, concéntricos y excéntricos. El trabajo Excéntrico tendrá mucha importancia para evitar las retracciones de la cicatriz y sus adherencias. • Electroestimulación en estiramiento 2/3 veces en semana. • Desactivación de los Puntos Gatillos Miofasciales con técnicas conservadoras o invasivas como la punción seca. Fase I V: La readaptación funcional, comienzo a los entrenamientos de forma progresiva, empezar con carrera lenta y terminar con la velocidad. En esta fase es conveniente seguir con el trabajo en excéntrico y la electroestimulación, ya que esta lesión puede provocar recaídas en la vuelta a los entrenamientos de velocidad. • Presoterapia suave Fase II: (48 horas-10 días aprox.) Carreras de velocidad TRATAMIENTO SÍNDROME DE LA COLA DEL ASTRÁGALO Es una patología que se asienta en la cara posterior del tobillo, zona cola del astrágalo y pre-aquílea, normalmente por detrás del maléolo externo (aunque a veces también puede doler en cara posterior de maléolo interno normalmente por secuelas inflamatorias El tratamiento irá encaminado a bajar la inflamación de la zona posteriormente a la readaptación funcional del pie. Si en 15 días no mejora lo deseado lo más normal y efectivo sería realizar una infiltración. Fase I: • Reposo, podrá entrenar agua y/o bicicleta. en • Termoelectroterapia analgésica y antiinflamatoria. • Masaje drenaje y tipo Cyriax en la zona. • Vendaje funcional y/o neuromuscular. • Fortalecimiento manual con el fisioterapeuta en rangos articulares no dolorosos de pie y tobillo. Fase II: Si a los 15 días es capaz de realizar la flexión plantar sin dolor comenzaremos la readaptación funcional del tobillo en esta secuencia: • Fortalecimiento en cadena cinética cerrada (puntillas, talones, talón-punta…). • Propiocepción del pie y tobillo. • Entrenamiento de carrera. • Saltos. Como suele ser una patología de origen biomecánico el tratamiento se puede complementar con una visita al podólogo para analizar la pisada del paciente, ya que con unas plantillas de descarga podemos prevenir y disminuir la incidencia de esta lesión. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 62 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) BIOMECÁNICA Y BASES DEL ENTRENAMIENTO Según el Consejo Internacional para el Deporte y la Educación Física, definen la biomecánica como “el conocimiento del papel que desempeñan las fuerzas mecánicas que producen los movimientos, su soporte autonómico, así como su diseño central”. La Escuela Soviética de Biomecánica la define como “la ciencia de la coordinación de los movimientos en el hombre”. Creo que para nosotros los técnicos en este caso de medio fondo y fondo, según mi visión personal llevada al día a día, la podríamos definir como el estudio y aplicación de los medios y recursos a nuestro alcance para la correcta ejecución de los movimientos y fuerzas que intervienen en este caso en la carrera. IMPORTANCIA PARA EL ATLETA Y EL ENTRENADOR Los corredores de medio fondo y fondo que comienzan a edades tempranas y consiguen mejorar constantemente con el entrenamiento, son la clara evidencia de que el trabajo realizado con ellos ha sido estudiado y adaptado a las exigencias de su progresión. Paralelamente al crecimiento físico del corredor va el deportivo, con un aumento del volumen y la calidad del trabajo que, si está bien planificado y estructurado, hace que esta mejora sea continua y progresiva. Pero a la vez que aumenta este trabajo, también aumenta el riesgo de lesión. Por eso hay que controlar constantemente los gestos técnicos del atleta e ir corrigiéndolos, de tal forma que los apoyos y movimientos sean correctos. Trabajando una técnica de carrera correcta y una buena condición física, tendremos un muy buen soporte para incrementar el trabajo y, en consecuen- 62 cia, mejorar el rendimiento. Hay que recordar también que una buena eficacia de carrera hace disminuir el consumo de oxígeno y por tanto, al mejorar este nivel máximo también hay una mejora en el rendimiento. Teniendo claros todos estos principios básicos tanto por parte del entrenador como del atleta, podremos tener un muy buen criterio a la hora de detectar y consensuar carencias puntuales que necesiten una corrección, bien sea con ayuda de personal especializado, o simplemente potenciando y corrigiendo puntualmente la parte afectada que puede haberse deteriorado en cualquier momento de las fases de la carrera. Lógicamente una mejora biomecánica en la carrera va acompañada de un buen trabajo de fuerza específica repartida lo más correctamente posible en el conjunto del movimiento técnico. Tendremos en cuenta que el primer contacto con el suelo en la carrera lo tiene el pie, y es el que va a transmitir ese primer impacto al resto de la cadena cinética (rodilla, cadera…). Según lo correcto y equilibrado de ese primer apoyo, el resto de los músculos, tendones y articulaciones que intervienen en las fases de la carrera lo harán de una forma más o menos efectiva que a la larga nos podría provocar una lesión. Es muy importante trabajar todos los movimientos gestuales por separado y en conjunto con ejercicios de aplicación y asimilación. Con una buena técnica de carrera podremos no llegar a tener una mejora en el rendimiento, pero está claro que una mala técnica conduce a unos resultados mejorables y sobre todo a un mayor riesgo de lesión. BASES DEL ENTRENAMIENTO Cada vez es más difícil encontrar atletas con los que trabajar debido a que hoy en día son muchas las posibilidades de hacer infinidad de cosas que no suponen un esfuerzo físico como es el entrenamiento serio y estructurado. Por eso debemos cuidar lo que tenemos y trabajar con ello de tal manera que vayamos mejorando las cualidades físicas y técnicas del futuro corredor, siempre con vistas a su longevidad deportiva. No debemos apresurarnos en querer resultados sorprendentes que nos pueden llevar a acortar su vida deportiva. Si un atleta tiene buenas condiciones, debemos saber ir trabajando todo este potencial para que haya una constante progresión desde categorías inferiores hasta llegar a la máxima categoría. Hay demasiados atletas con un futuro impresionante que se han quedado en el camino debido un excesivo trabajo puntual que les ha cortado su proyección. Pero eso no quiere decir que no tengan que entrenar duro, sino simplemente bien dosificado y estando atentos a que realmente están asimilando ese trabajo. Desde jóvenes deben ir aprendiendo lo que es la terminología del entrenamiento, para qué sir- ven los diferentes sistemas, habituarse al manejo del cronómetro y sobre todo a confiar y creer en su entrenador, que es el que va a guiarle en su progresión deportiva. Y todo con unas cargas de trabajo bien planificadas y dosificadas según su edad y condición física. Debemos tener también muy claro a nivel de exigencia tanto del atleta como del entrenador que es difícil llegar a los objetivos, pero más difícil es mantenerse. SELECCIÓN DE OBJETIVOS Lo primero, antes de planificar debemos tener claro qué es lo que queremos trabajar y con qué perspectivas. Por eso definiremos unos objetivos a largo plazo y a corto plazo. OBJETIVOS A LARGO PLAZO Serán los que nos ayudarán a definir un sistema de trabajo para un corredor de medio fondo y fondo y que repartiremos en cada una de las temporadas según la asimilación del trabajo anterior y la progresión del atleta, y que describo en el siguiente esquema: 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 62 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) BIOMECÁNICA Y BASES DEL ENTRENAMIENTO Según el Consejo Internacional para el Deporte y la Educación Física, definen la biomecánica como “el conocimiento del papel que desempeñan las fuerzas mecánicas que producen los movimientos, su soporte autonómico, así como su diseño central”. La Escuela Soviética de Biomecánica la define como “la ciencia de la coordinación de los movimientos en el hombre”. Creo que para nosotros los técnicos en este caso de medio fondo y fondo, según mi visión personal llevada al día a día, la podríamos definir como el estudio y aplicación de los medios y recursos a nuestro alcance para la correcta ejecución de los movimientos y fuerzas que intervienen en este caso en la carrera. IMPORTANCIA PARA EL ATLETA Y EL ENTRENADOR Los corredores de medio fondo y fondo que comienzan a edades tempranas y consiguen mejorar constantemente con el entrenamiento, son la clara evidencia de que el trabajo realizado con ellos ha sido estudiado y adaptado a las exigencias de su progresión. Paralelamente al crecimiento físico del corredor va el deportivo, con un aumento del volumen y la calidad del trabajo que, si está bien planificado y estructurado, hace que esta mejora sea continua y progresiva. Pero a la vez que aumenta este trabajo, también aumenta el riesgo de lesión. Por eso hay que controlar constantemente los gestos técnicos del atleta e ir corrigiéndolos, de tal forma que los apoyos y movimientos sean correctos. Trabajando una técnica de carrera correcta y una buena condición física, tendremos un muy buen soporte para incrementar el trabajo y, en consecuen- 62 cia, mejorar el rendimiento. Hay que recordar también que una buena eficacia de carrera hace disminuir el consumo de oxígeno y por tanto, al mejorar este nivel máximo también hay una mejora en el rendimiento. Teniendo claros todos estos principios básicos tanto por parte del entrenador como del atleta, podremos tener un muy buen criterio a la hora de detectar y consensuar carencias puntuales que necesiten una corrección, bien sea con ayuda de personal especializado, o simplemente potenciando y corrigiendo puntualmente la parte afectada que puede haberse deteriorado en cualquier momento de las fases de la carrera. Lógicamente una mejora biomecánica en la carrera va acompañada de un buen trabajo de fuerza específica repartida lo más correctamente posible en el conjunto del movimiento técnico. Tendremos en cuenta que el primer contacto con el suelo en la carrera lo tiene el pie, y es el que va a transmitir ese primer impacto al resto de la cadena cinética (rodilla, cadera…). Según lo correcto y equilibrado de ese primer apoyo, el resto de los músculos, tendones y articulaciones que intervienen en las fases de la carrera lo harán de una forma más o menos efectiva que a la larga nos podría provocar una lesión. Es muy importante trabajar todos los movimientos gestuales por separado y en conjunto con ejercicios de aplicación y asimilación. Con una buena técnica de carrera podremos no llegar a tener una mejora en el rendimiento, pero está claro que una mala técnica conduce a unos resultados mejorables y sobre todo a un mayor riesgo de lesión. BASES DEL ENTRENAMIENTO Cada vez es más difícil encontrar atletas con los que trabajar debido a que hoy en día son muchas las posibilidades de hacer infinidad de cosas que no suponen un esfuerzo físico como es el entrenamiento serio y estructurado. Por eso debemos cuidar lo que tenemos y trabajar con ello de tal manera que vayamos mejorando las cualidades físicas y técnicas del futuro corredor, siempre con vistas a su longevidad deportiva. No debemos apresurarnos en querer resultados sorprendentes que nos pueden llevar a acortar su vida deportiva. Si un atleta tiene buenas condiciones, debemos saber ir trabajando todo este potencial para que haya una constante progresión desde categorías inferiores hasta llegar a la máxima categoría. Hay demasiados atletas con un futuro impresionante que se han quedado en el camino debido un excesivo trabajo puntual que les ha cortado su proyección. Pero eso no quiere decir que no tengan que entrenar duro, sino simplemente bien dosificado y estando atentos a que realmente están asimilando ese trabajo. Desde jóvenes deben ir aprendiendo lo que es la terminología del entrenamiento, para qué sir- ven los diferentes sistemas, habituarse al manejo del cronómetro y sobre todo a confiar y creer en su entrenador, que es el que va a guiarle en su progresión deportiva. Y todo con unas cargas de trabajo bien planificadas y dosificadas según su edad y condición física. Debemos tener también muy claro a nivel de exigencia tanto del atleta como del entrenador que es difícil llegar a los objetivos, pero más difícil es mantenerse. SELECCIÓN DE OBJETIVOS Lo primero, antes de planificar debemos tener claro qué es lo que queremos trabajar y con qué perspectivas. Por eso definiremos unos objetivos a largo plazo y a corto plazo. OBJETIVOS A LARGO PLAZO Serán los que nos ayudarán a definir un sistema de trabajo para un corredor de medio fondo y fondo y que repartiremos en cada una de las temporadas según la asimilación del trabajo anterior y la progresión del atleta, y que describo en el siguiente esquema: 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 64 Carreras de resistencia Saludinámica (medio fondo, fondo, maratón, cross) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE OBJETIVOS A CORTO PLAZO Ya tenemos definidos cuáles son nuestros objetivos a largo plazo, así que ahora nos centraremos en los de corto plazo, que son los específicos para la presente temporada. Para ello definiremos las semanas que disponemos para repartir el trabajo desde que decidimos comenzar a entrenar hasta la o las fechas o los objetivos competitivos. Una vez visto esto comenzamos a planificar las sesiones de entrenamiento y el trabajo según sea la categoría del atleta. Hay varias formas de repartir el trabajo a lo largo de una tempora- segundo objetivo importante de la temporada, no consigamos el nivel deseado. Por ora parte, para hacer trabajo de calidad necesitamos una climatología adecuada o unos medios para evitar trabajar con la musculatura en un ambiente frío, y eso no está al alcance de todos, así que debemos prever los problemas y adaptarnos al medio del que disponemos. Pese a esto, he planificado varias veces con doble periodización pero teniendo claro cuál de los dos objetivos de la temporada es más importante. da. En mi caso la planificación consta de BASE, PRECOMPETICIÓN, COMPETICIÓN y TRANSICIÓN, haciendo fases de cada una de ellas según las semanas de trabajo y dependiendo de cuándo quiero que mis atletas alcancen el punto o los puntos de forma máximo(s). Personalmente no me gusta trabajar con doble periodización por varias causas. Hacer que el atleta alcance un estado de forma óptimo necesita de trabajo muy exigente y de mucha calidad sea cual sea el nivel. Esto crea un desgaste que puede provocar que, cuando queramos repetir este trabajo de cara al En la figura 8 podemos ver un ejemplo de planificación de un corredor de campo a través que tiene el objetivo, por ejemplo, en el campeonato de España en marzo y que comenzaría a entrenar en octubre, para lo que disponemos de 22 semanas de entrenamiento. Ya tenemos un objetivo de forma y el tiempo que disponemos para intentar conseguir la forma máxima así que vamos a repartir el trabajo. Tenemos que tener presente qué volumen e intensidad de entrenamiento son inversamente propor- DÍA/PERIODO cionales, es decir, comenzamos con mayor volumen para consolidar una buena base y conforme avanza la temporada y se acerca el objetivo, disminuye el volumen y aumenta la intensidad, dicho de forma rápida y clara. El reparto del trabajo en cada semana debe hacerse en función de la asimilación y adaptación que observemos en nuestros atletas día a día, así como el volumen y las intensidades, que variarán en función del nivel de cada uno. También debemos decidir si queremos trabajar por el método de supercompensación del entrenamiento (ej. dos semanas de carga y una de descarga) o por hipercompensación, con cargas semanales continuas hasta el objetivo. EJEMPLOS DE MICROCICLOS SEMANALES En el siguiente cuadro podemos ver un ejemplo de cómo podría ser un microciclo semanal en cada uno de los periodos arriba planificados, teniendo en cuenta que el atleta podría ser un fondista o medio fondista de categoría juvenil o júnior y en semana de no competir. BASE PRECOMPETICIÓN COMPETICIÓN FARTLEK Velocidad Resistencia extensivo Velocidad Resistencia intensivo Interval Training Extensivo Interval Training Intensivo Escalera velocidad MIÉRCOLES Carrera continua + COND. FÍSICA Carrera continua + COND. FÍSICA Carrera continua + COND. FÍSICA JUEVES Ritmo Resistencia Largo Ritmo Resistencia Corto Ritmo Competición VIERNES Carrera continua Carrera continua Carrera continua SÁBADO CUESTAS Técnica de carrera + aplicación Técnica de carrera + aplicación DESCANSO DESCANSO DESCANSO LUNES MARTES x DOMINGO Figura 8. Ejemplo de planificación. 64 65 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 64 Carreras de resistencia Saludinámica (medio fondo, fondo, maratón, cross) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE OBJETIVOS A CORTO PLAZO Ya tenemos definidos cuáles son nuestros objetivos a largo plazo, así que ahora nos centraremos en los de corto plazo, que son los específicos para la presente temporada. Para ello definiremos las semanas que disponemos para repartir el trabajo desde que decidimos comenzar a entrenar hasta la o las fechas o los objetivos competitivos. Una vez visto esto comenzamos a planificar las sesiones de entrenamiento y el trabajo según sea la categoría del atleta. Hay varias formas de repartir el trabajo a lo largo de una tempora- segundo objetivo importante de la temporada, no consigamos el nivel deseado. Por ora parte, para hacer trabajo de calidad necesitamos una climatología adecuada o unos medios para evitar trabajar con la musculatura en un ambiente frío, y eso no está al alcance de todos, así que debemos prever los problemas y adaptarnos al medio del que disponemos. Pese a esto, he planificado varias veces con doble periodización pero teniendo claro cuál de los dos objetivos de la temporada es más importante. da. En mi caso la planificación consta de BASE, PRECOMPETICIÓN, COMPETICIÓN y TRANSICIÓN, haciendo fases de cada una de ellas según las semanas de trabajo y dependiendo de cuándo quiero que mis atletas alcancen el punto o los puntos de forma máximo(s). Personalmente no me gusta trabajar con doble periodización por varias causas. Hacer que el atleta alcance un estado de forma óptimo necesita de trabajo muy exigente y de mucha calidad sea cual sea el nivel. Esto crea un desgaste que puede provocar que, cuando queramos repetir este trabajo de cara al En la figura 8 podemos ver un ejemplo de planificación de un corredor de campo a través que tiene el objetivo, por ejemplo, en el campeonato de España en marzo y que comenzaría a entrenar en octubre, para lo que disponemos de 22 semanas de entrenamiento. Ya tenemos un objetivo de forma y el tiempo que disponemos para intentar conseguir la forma máxima así que vamos a repartir el trabajo. Tenemos que tener presente qué volumen e intensidad de entrenamiento son inversamente propor- DÍA/PERIODO cionales, es decir, comenzamos con mayor volumen para consolidar una buena base y conforme avanza la temporada y se acerca el objetivo, disminuye el volumen y aumenta la intensidad, dicho de forma rápida y clara. El reparto del trabajo en cada semana debe hacerse en función de la asimilación y adaptación que observemos en nuestros atletas día a día, así como el volumen y las intensidades, que variarán en función del nivel de cada uno. También debemos decidir si queremos trabajar por el método de supercompensación del entrenamiento (ej. dos semanas de carga y una de descarga) o por hipercompensación, con cargas semanales continuas hasta el objetivo. EJEMPLOS DE MICROCICLOS SEMANALES En el siguiente cuadro podemos ver un ejemplo de cómo podría ser un microciclo semanal en cada uno de los periodos arriba planificados, teniendo en cuenta que el atleta podría ser un fondista o medio fondista de categoría juvenil o júnior y en semana de no competir. BASE PRECOMPETICIÓN COMPETICIÓN FARTLEK Velocidad Resistencia extensivo Velocidad Resistencia intensivo Interval Training Extensivo Interval Training Intensivo Escalera velocidad MIÉRCOLES Carrera continua + COND. FÍSICA Carrera continua + COND. FÍSICA Carrera continua + COND. FÍSICA JUEVES Ritmo Resistencia Largo Ritmo Resistencia Corto Ritmo Competición VIERNES Carrera continua Carrera continua Carrera continua SÁBADO CUESTAS Técnica de carrera + aplicación Técnica de carrera + aplicación DESCANSO DESCANSO DESCANSO LUNES MARTES x DOMINGO Figura 8. Ejemplo de planificación. 64 65 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 66 Carreras de resistencia Saludinámica (medio fondo, fondo, maratón, cross) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE LESIONES ESPECÍFICAS Y TRATAMIENTO MÉDICO-QUIRÚRGICO FRACTURAS DE ESTRÉS Las fracturas de estrés son lesiones óseas producidas por la repetición de microtraumatismos. Fueron descritas por primera vez en 1855 en soldados que presentaban dolor y tumefacción en el dorso del pie después de marchas prolongadas. Desde 1970 se han estudiado ampliamente estas lesiones en deportistas, especialmente en los corredores. Las fracturas de estrés son fracturas por fatiga de un hueso normal sometido a una carga acumulada superior a la que es capaz de soportar. Son múltiples los factores que influyen en el desarrollo de esta patología. Los hay intrínsecos (caracteres genéticos, morfológicos, anatómicos y biomecánicos de cada uno) y extrínsecos (descanso, alimentación, material deportivo, errores de entrenamiento). Los factores extrínsecos tienen un papel fundamental a la hora de prevenir la aparición de estas fracturas. Es importante recordar aquí la mayor predisposición de sufrirlas en mujeres corredoras que presenten la llamada tríada de la mujer atleta, que incluye trastornos de la alimentación, amenorrea y osteoporosis. Deben entenderse como un espectro continuo de enfermedad ósea por sobrecarga. Hay una fase inicial en la que el hueso empieza a no ser capaz de recuperarse a tiempo entre los esfuerzos a los que es sometido. En esta fase el atleta está asintomático. Las microfracturas pueden entonces ir sumándose si la 66 Las localizaciones más comunes son el pie (los metatarsianos centrales, los sesamoideos, el escafoides y el calcá neo), la pierna (la tibia es una de las localizaciones más frecuentes, el peroné también en algunas ocasiones), la región inguinal (el cuello del fémur) y la pelvis (cada vez se diagnostican más casos en el sacro y en el pubis). sobrecarga continúa, de modo que la fractura acaba haciéndose macroscópica. Si no se detecta en esta fase precoz la lesión puede progresar hasta convertirse en una fractura completa del hueso incluso con desplazamiento del mismo. Los síntomas son insidiosos, dolor al entrenar o competir, mejora al descansar, altibajos que dificultan o retrasan el diagnóstico. Lo fundamental es tener un alto índice de sospecha para evitar que no pasen sin diagnosticar. Debemos reseñar que no todas las fracturas ocurren en corredores. También son frecuentes en saltadores de todas las disciplinas y por supuesto en marchadores. En lanzadores son más raras y en ellos no deben descartarse otras localizaciones diferentes de las típicas, en este caso en miembro superior o costillas. Las radiografías inicialmente son negativas, pero si ha pasado suficiente tiempo con síntomas pueden aparecer callos de fractura en huesos largos como los metatarsianos del pie, o líneas de esclerosis en huesos esponjosos como el calcáneo. En fracturas como el cuello femoral o el escafoides del pie pueden verse líneas de fractura completas incluso con desplazamiento. ALTO RIESGO Adjuntamos tabla de las fracturas de estrés más comunes, según su clasificación en fracturas de alto, intermedio o bajo riesgo. Entre paréntesis se indica la localización de los síntomas. RIESGO INTERMEDIO BAJO RIESGO Sesamoideos (Debajo dedo gordo) Metatarsianos 2º-3º-4º (Antepie) Cuello femoral lateral (Ingle-Cadera) Cuello femoral medial (Ingle-Cadera) Calcáneo (Talón) Diáfisis tibial anterior (Borde anterior pierna) Maleolo tibial (Borde interno tobillo) Diáfisis tibial posteromedial (Borde interno pierna) Escafoides (Empeine) x Cada hueso es diferente y así el tratamiento también lo es. Por eso es importante diferenciar las fracturas de alto riesgo de complicación de las de riesgo bajo o intermedio. Quinto metatarsiano (Borde externo del pie) Astrágalo (Tobillo-Empeine) Peroné (Borde externo pierna) Sacro (Región glútea) Hoy en día casi nunca se llega a esa fase en deportistas de alto nivel. El uso de la gammagrafía ósea o de la resonancia magnética nos permite confirmar el diagnóstico en fases iniciales. En algunas fracturas es bueno hacer un estudio de la gravedad de la lesión con el TAC o escáner óseo. 67 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 66 Carreras de resistencia Saludinámica (medio fondo, fondo, maratón, cross) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE LESIONES ESPECÍFICAS Y TRATAMIENTO MÉDICO-QUIRÚRGICO FRACTURAS DE ESTRÉS Las fracturas de estrés son lesiones óseas producidas por la repetición de microtraumatismos. Fueron descritas por primera vez en 1855 en soldados que presentaban dolor y tumefacción en el dorso del pie después de marchas prolongadas. Desde 1970 se han estudiado ampliamente estas lesiones en deportistas, especialmente en los corredores. Las fracturas de estrés son fracturas por fatiga de un hueso normal sometido a una carga acumulada superior a la que es capaz de soportar. Son múltiples los factores que influyen en el desarrollo de esta patología. Los hay intrínsecos (caracteres genéticos, morfológicos, anatómicos y biomecánicos de cada uno) y extrínsecos (descanso, alimentación, material deportivo, errores de entrenamiento). Los factores extrínsecos tienen un papel fundamental a la hora de prevenir la aparición de estas fracturas. Es importante recordar aquí la mayor predisposición de sufrirlas en mujeres corredoras que presenten la llamada tríada de la mujer atleta, que incluye trastornos de la alimentación, amenorrea y osteoporosis. Deben entenderse como un espectro continuo de enfermedad ósea por sobrecarga. Hay una fase inicial en la que el hueso empieza a no ser capaz de recuperarse a tiempo entre los esfuerzos a los que es sometido. En esta fase el atleta está asintomático. Las microfracturas pueden entonces ir sumándose si la 66 Las localizaciones más comunes son el pie (los metatarsianos centrales, los sesamoideos, el escafoides y el calcá neo), la pierna (la tibia es una de las localizaciones más frecuentes, el peroné también en algunas ocasiones), la región inguinal (el cuello del fémur) y la pelvis (cada vez se diagnostican más casos en el sacro y en el pubis). sobrecarga continúa, de modo que la fractura acaba haciéndose macroscópica. Si no se detecta en esta fase precoz la lesión puede progresar hasta convertirse en una fractura completa del hueso incluso con desplazamiento del mismo. Los síntomas son insidiosos, dolor al entrenar o competir, mejora al descansar, altibajos que dificultan o retrasan el diagnóstico. Lo fundamental es tener un alto índice de sospecha para evitar que no pasen sin diagnosticar. Debemos reseñar que no todas las fracturas ocurren en corredores. También son frecuentes en saltadores de todas las disciplinas y por supuesto en marchadores. En lanzadores son más raras y en ellos no deben descartarse otras localizaciones diferentes de las típicas, en este caso en miembro superior o costillas. Las radiografías inicialmente son negativas, pero si ha pasado suficiente tiempo con síntomas pueden aparecer callos de fractura en huesos largos como los metatarsianos del pie, o líneas de esclerosis en huesos esponjosos como el calcáneo. En fracturas como el cuello femoral o el escafoides del pie pueden verse líneas de fractura completas incluso con desplazamiento. ALTO RIESGO Adjuntamos tabla de las fracturas de estrés más comunes, según su clasificación en fracturas de alto, intermedio o bajo riesgo. Entre paréntesis se indica la localización de los síntomas. RIESGO INTERMEDIO BAJO RIESGO Sesamoideos (Debajo dedo gordo) Metatarsianos 2º-3º-4º (Antepie) Cuello femoral lateral (Ingle-Cadera) Cuello femoral medial (Ingle-Cadera) Calcáneo (Talón) Diáfisis tibial anterior (Borde anterior pierna) Maleolo tibial (Borde interno tobillo) Diáfisis tibial posteromedial (Borde interno pierna) Escafoides (Empeine) x Cada hueso es diferente y así el tratamiento también lo es. Por eso es importante diferenciar las fracturas de alto riesgo de complicación de las de riesgo bajo o intermedio. Quinto metatarsiano (Borde externo del pie) Astrágalo (Tobillo-Empeine) Peroné (Borde externo pierna) Sacro (Región glútea) Hoy en día casi nunca se llega a esa fase en deportistas de alto nivel. El uso de la gammagrafía ósea o de la resonancia magnética nos permite confirmar el diagnóstico en fases iniciales. En algunas fracturas es bueno hacer un estudio de la gravedad de la lesión con el TAC o escáner óseo. 67 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 68 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE El tratamiento depende mucho del momento del diagnóstico y de la localización. Fracturas de los metatarsianos, las falanges y los sesamoideos Las fracturas de los metatarsianos centrales (sobre todo 2º y 3º) son las más comunes en militares y en gente normal que realiza una larga marcha, no especialmente en atletas. Se pueden diagnosticar con rayos X casi siempre y el tratamiento es conservador. Las fracturas de estrés del quinto metatarsiano sí son más frecuentes en deportistas pero más en fútbol y baloncesto que en atletismo. En muchos casos requieren cirugía mediante osteosíntesis con tornillo, incluso con injerto óseo en los casos de retardo de consolidación o en pseudoartrosis. Son raras las fracturas de estrés del primer metatarsiano pero hay casos descritos. La evolución es buena con el reposo. Las falanges son una localización mucho más rara de fracturas de estrés. Se han publicado algunos casos en la falange proximal del primer dedo que se han solucionado con el cese de la actividad de carga durante 6 semanas. Los sesamoideos son una localización infrecuente de estas lesiones. El sesamoideo medial parece más afectado. El dolor al correr o ponerse en puntillas debe hacernos sospechar una lesión en esta localización. Deben obtenerse proyecciones radiológicas anteroposteriores y oblicuas del pie, además de una proyección especial axial de los sesamoideos. No deben confundirse sesamoideos bipartitos o multi- Radiografía de fractura de estrés en tercer metatarsiano. 68 Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) partitos con fracturas de los mismos. Los bordes lisos y regulares hablan a favor de la primera condición. Ante la duda una gammagrafía ósea o una resonancia nos podrían dar el diagnóstico. Si se confirma la fractura de estrés el tratamiento es ortopédico con inmovilización y descarga de aproximadamente 6 semanas. En algunos casos de mala evolución es necesaria la operación en la cual se puede resecar el fragmento más pequeño de la fractura, incluso del sesamoideo entero. También puede intentarse el aporte de injerto óseo para favorecer la unión de los fragmentos. Fracturas en calcáneo, cuboides, astrágalo y escafoides Las fracturas del escafoides o navicular merecen una reseña especial en este capítulo porque son muy frecuentes en atletas de diferentes disciplinas (medio fondo, salto con pértiga, vallas y saltos), además de en otros deportes (tenis, fútbol y baloncesto). Son fracturas que si pasan desapercibidas tienen un alto riesgo de mala evolución. Debemos sospecharlas en todo paciente con dolor en el empeine al correr o saltar. Diagnosticadas pronto evolucionan favorablemente con medidas conservadoras (reposo, inmovilización Resonancia magnética de fractura completa de escafoides. 69 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 68 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE El tratamiento depende mucho del momento del diagnóstico y de la localización. Fracturas de los metatarsianos, las falanges y los sesamoideos Las fracturas de los metatarsianos centrales (sobre todo 2º y 3º) son las más comunes en militares y en gente normal que realiza una larga marcha, no especialmente en atletas. Se pueden diagnosticar con rayos X casi siempre y el tratamiento es conservador. Las fracturas de estrés del quinto metatarsiano sí son más frecuentes en deportistas pero más en fútbol y baloncesto que en atletismo. En muchos casos requieren cirugía mediante osteosíntesis con tornillo, incluso con injerto óseo en los casos de retardo de consolidación o en pseudoartrosis. Son raras las fracturas de estrés del primer metatarsiano pero hay casos descritos. La evolución es buena con el reposo. Las falanges son una localización mucho más rara de fracturas de estrés. Se han publicado algunos casos en la falange proximal del primer dedo que se han solucionado con el cese de la actividad de carga durante 6 semanas. Los sesamoideos son una localización infrecuente de estas lesiones. El sesamoideo medial parece más afectado. El dolor al correr o ponerse en puntillas debe hacernos sospechar una lesión en esta localización. Deben obtenerse proyecciones radiológicas anteroposteriores y oblicuas del pie, además de una proyección especial axial de los sesamoideos. No deben confundirse sesamoideos bipartitos o multi- Radiografía de fractura de estrés en tercer metatarsiano. 68 Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) partitos con fracturas de los mismos. Los bordes lisos y regulares hablan a favor de la primera condición. Ante la duda una gammagrafía ósea o una resonancia nos podrían dar el diagnóstico. Si se confirma la fractura de estrés el tratamiento es ortopédico con inmovilización y descarga de aproximadamente 6 semanas. En algunos casos de mala evolución es necesaria la operación en la cual se puede resecar el fragmento más pequeño de la fractura, incluso del sesamoideo entero. También puede intentarse el aporte de injerto óseo para favorecer la unión de los fragmentos. Fracturas en calcáneo, cuboides, astrágalo y escafoides Las fracturas del escafoides o navicular merecen una reseña especial en este capítulo porque son muy frecuentes en atletas de diferentes disciplinas (medio fondo, salto con pértiga, vallas y saltos), además de en otros deportes (tenis, fútbol y baloncesto). Son fracturas que si pasan desapercibidas tienen un alto riesgo de mala evolución. Debemos sospecharlas en todo paciente con dolor en el empeine al correr o saltar. Diagnosticadas pronto evolucionan favorablemente con medidas conservadoras (reposo, inmovilización Resonancia magnética de fractura completa de escafoides. 69 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 70 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE y descarga) que se aplican según el caso. En fracturas completas puede plantearse la ostosíntesis con un tornillo, incluso con aporte de injerto óseo para favorecer la consolidación. En el cuboides sin embargo son excepcionales las fracturas por fatiga. Pueden confundirse con una tendinitis de peroneos. Las fracturas del calcáneo también se diagnostican con relativa frecuencia en corredores y saltadores. La presentación clínica es de dolor en ambos lados del talón. Pueden verse en las radiografías simples si han pasado algunas semanas desde el inicio de los síntomas. Una radiografía negativa no excluye el diagnóstico que se debería hacer con resonancia magnética, que nos permite evaluar bien el resto de estructuras del talón que pueden ser fuente también del problema. El tratamiento de descarga durante 4-6 semanas suele ser suficiente para la curación del atleta. El astrágalo tampoco es una localización típica en atletas pero hay casos tanto en el cuerpo, como en el cuello o en la tuberosidad lateral del hueso. Esta última localización puede originar un dolor crónico en la cara lateral del tobillo y al ser tan rara la lesión es fácil que nadie la diagnostique por falta de sospecha. El escáner puede identificar la fractura. El tratamiento indicado consiste en la inmovilización y descarga durante 6 semanas. Fracturas de estrés de la tibia y el peroné La parte posterior del terci o i nferior de la t ibia es la localización más frecuente de fracturas de estrés en corredores. La importancia del calzado y la prevención con ortesis parece fundamental en una lesión en la cual la hiperpronación parece desarrollar un papel decisivo. Debe hacerse el diagnóstico diferencial con periostitis y con tendinitis del tibial posterior. Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) Fracturas en la región inguinal y la pelvis De entre las fracturas de esta región hay que destacar que las fracturas del cuello femoral son de alto riesgo, sobre todo las que se producen por tensión en la cortical lateral del mismo. En estos casos, que se suelen diagnosticar con rayos X, es necesaria la fijación interna con tornillos canulados. En casos de fracturas incompletas de la parte medial del cuello (fracturas por compresión) la descarga y el reposo pueden ser suficientes. En los últimos años, sobre todo por la mayor accesibilidad a las pruebas de imagen como la resonancia, ha aumentado el diagnóstico de fracturas de estrés en el sacro. La modificación de la actividad y la aplicación de protocolos de vuelta progresiva a la actividad han sido útiles en la recuperación de los atletas que las han sufrido. En general son fracturas incompletas, que precisan inmovilización y descarga. Otra localización de peor pronóstico es la cortical anterior de la diáfisis tibial, que aparece más en deportes de salto. En esta fractura el tratamiento muchas veces es quirúrgico mediante enclavado endomedular. Las fracturas de estrés del maleolo tibial también pueden requerir fijación interna si cuando se diagnostican son visibles en la radiografía simple. Las fracturas de estrés en el peroné suelen ocurrir por encima del maleolo y son fracturas de bajo riesgo que evolucionan favorablemente con descarga. Radiografía que muestra fractura del cuello femoral. 70 71 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 70 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE y descarga) que se aplican según el caso. En fracturas completas puede plantearse la ostosíntesis con un tornillo, incluso con aporte de injerto óseo para favorecer la consolidación. En el cuboides sin embargo son excepcionales las fracturas por fatiga. Pueden confundirse con una tendinitis de peroneos. Las fracturas del calcáneo también se diagnostican con relativa frecuencia en corredores y saltadores. La presentación clínica es de dolor en ambos lados del talón. Pueden verse en las radiografías simples si han pasado algunas semanas desde el inicio de los síntomas. Una radiografía negativa no excluye el diagnóstico que se debería hacer con resonancia magnética, que nos permite evaluar bien el resto de estructuras del talón que pueden ser fuente también del problema. El tratamiento de descarga durante 4-6 semanas suele ser suficiente para la curación del atleta. El astrágalo tampoco es una localización típica en atletas pero hay casos tanto en el cuerpo, como en el cuello o en la tuberosidad lateral del hueso. Esta última localización puede originar un dolor crónico en la cara lateral del tobillo y al ser tan rara la lesión es fácil que nadie la diagnostique por falta de sospecha. El escáner puede identificar la fractura. El tratamiento indicado consiste en la inmovilización y descarga durante 6 semanas. Fracturas de estrés de la tibia y el peroné La parte posterior del terci o i nferior de la t ibia es la localización más frecuente de fracturas de estrés en corredores. La importancia del calzado y la prevención con ortesis parece fundamental en una lesión en la cual la hiperpronación parece desarrollar un papel decisivo. Debe hacerse el diagnóstico diferencial con periostitis y con tendinitis del tibial posterior. Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) Fracturas en la región inguinal y la pelvis De entre las fracturas de esta región hay que destacar que las fracturas del cuello femoral son de alto riesgo, sobre todo las que se producen por tensión en la cortical lateral del mismo. En estos casos, que se suelen diagnosticar con rayos X, es necesaria la fijación interna con tornillos canulados. En casos de fracturas incompletas de la parte medial del cuello (fracturas por compresión) la descarga y el reposo pueden ser suficientes. En los últimos años, sobre todo por la mayor accesibilidad a las pruebas de imagen como la resonancia, ha aumentado el diagnóstico de fracturas de estrés en el sacro. La modificación de la actividad y la aplicación de protocolos de vuelta progresiva a la actividad han sido útiles en la recuperación de los atletas que las han sufrido. En general son fracturas incompletas, que precisan inmovilización y descarga. Otra localización de peor pronóstico es la cortical anterior de la diáfisis tibial, que aparece más en deportes de salto. En esta fractura el tratamiento muchas veces es quirúrgico mediante enclavado endomedular. Las fracturas de estrés del maleolo tibial también pueden requerir fijación interna si cuando se diagnostican son visibles en la radiografía simple. Las fracturas de estrés en el peroné suelen ocurrir por encima del maleolo y son fracturas de bajo riesgo que evolucionan favorablemente con descarga. Radiografía que muestra fractura del cuello femoral. 70 71 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 72 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE FASCITIS PLANTAR Es una de las patologías más frecuentes que nos encontramos en el atletismo, sobre todo en especialidades de impacto repetido, como las de fondo (3.000 metros, 3.000 obstáculos, 5.000 metros, 10.000 metros, maratón, cross…) y saltos. Recordemos que la aponeurosis plantar superficial comprende tres partes: aponeurosis plantar externa, interna y media. A nivel posterior se inserta sobre la tuberosidad posterointerna del calcáneo, y termina a nivel anterior en la superficie plantar de las articulaciones metatarsofalángicas (figura 9). CLÍNICA El atleta refiere dolor en la planta del pie, comúnmente muy puntual a la palpación en tuberosidad posterointerna del calcáneo, y a lo largo del borde interno de la aponeurosis. Diagnóstico La radiografía simple nos puede ayudar a discernir si existe exostosis/espolón calcáneo, aunque éste no es necesariamente la causa del dolor: la radiografía puede ser normal y existir dolor. Lo único que traduce es la hipersolicitación de la fascia plantar. También nos sirve para realizar un primer despistaje en Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) el diagnóstico diferencial con otras entidades. Ecográficamente (figura 12) nos podemos encontrar inflamación a nivel de la tuberosidad, así como engrosamiento, pero es la RMN la que mejor muestra lesiones degenerativas a nivel de la aponeurosis y mejor nos descarta una fractura de stress de calcáneo. Diagnóstico diferencial: a) Ruptura facial: suele ocurrir en un contexto agudo (ojo, no siempre), con un dolor brusco, con sensación de crujido de la planta del pie, e incapacidad funcional. La RMN confirma el diagnóstico. b) Fractura de stress del calcáneo. c) Espondiloartropatías (Síndrome de Reiter, espondilitis anquilosante, etc.) Figura 12. La fascia se encuentra engrosada e hipoecoica. d) Atrofia/degeneración de la almohadilla grasa. e) Patologías nerviosas: síndrome del túnel del tarso, dolores neuropáticos, lesión del nervio abductor del 5º dedo, etc. Tratamiento • Hielo tras cualquier actividad física. • Férula nocturna en flexión dorsal de las articulaciones metatarsofalángicas (figura 10 y 11). • Estiramientos y movilización: el acortamiento muscular y la limitación en la flexión dorsal del pie, favorecen esta condición. • Vendaje funcional: limita la tensión de la fascia plantar (figura 13). Figura 10 Figura 9 Figura 11 72 Figura 13 73 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 72 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE FASCITIS PLANTAR Es una de las patologías más frecuentes que nos encontramos en el atletismo, sobre todo en especialidades de impacto repetido, como las de fondo (3.000 metros, 3.000 obstáculos, 5.000 metros, 10.000 metros, maratón, cross…) y saltos. Recordemos que la aponeurosis plantar superficial comprende tres partes: aponeurosis plantar externa, interna y media. A nivel posterior se inserta sobre la tuberosidad posterointerna del calcáneo, y termina a nivel anterior en la superficie plantar de las articulaciones metatarsofalángicas (figura 9). CLÍNICA El atleta refiere dolor en la planta del pie, comúnmente muy puntual a la palpación en tuberosidad posterointerna del calcáneo, y a lo largo del borde interno de la aponeurosis. Diagnóstico La radiografía simple nos puede ayudar a discernir si existe exostosis/espolón calcáneo, aunque éste no es necesariamente la causa del dolor: la radiografía puede ser normal y existir dolor. Lo único que traduce es la hipersolicitación de la fascia plantar. También nos sirve para realizar un primer despistaje en Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) el diagnóstico diferencial con otras entidades. Ecográficamente (figura 12) nos podemos encontrar inflamación a nivel de la tuberosidad, así como engrosamiento, pero es la RMN la que mejor muestra lesiones degenerativas a nivel de la aponeurosis y mejor nos descarta una fractura de stress de calcáneo. Diagnóstico diferencial: a) Ruptura facial: suele ocurrir en un contexto agudo (ojo, no siempre), con un dolor brusco, con sensación de crujido de la planta del pie, e incapacidad funcional. La RMN confirma el diagnóstico. b) Fractura de stress del calcáneo. c) Espondiloartropatías (Síndrome de Reiter, espondilitis anquilosante, etc.) Figura 12. La fascia se encuentra engrosada e hipoecoica. d) Atrofia/degeneración de la almohadilla grasa. e) Patologías nerviosas: síndrome del túnel del tarso, dolores neuropáticos, lesión del nervio abductor del 5º dedo, etc. Tratamiento • Hielo tras cualquier actividad física. • Férula nocturna en flexión dorsal de las articulaciones metatarsofalángicas (figura 10 y 11). • Estiramientos y movilización: el acortamiento muscular y la limitación en la flexión dorsal del pie, favorecen esta condición. • Vendaje funcional: limita la tensión de la fascia plantar (figura 13). Figura 10 Figura 9 Figura 11 72 Figura 13 73 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 74 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE • Descarga de la fascia y musculatura del sistema Aquiles-calcáneo-plantar: la fascia es parte integrante del sistema suro-aquileo-calcáneo-plantar. Tiene un papel importante en la transmisión de fuerzas desde el tríceps sural hacia los dedos, siendo su elasticidad un factor importante para generar gran cantidad de energía en cada zancada o salto. Estiramientos dinámicos con una pelota. • Modificación del impacto posterior: talonera, plantilla, cambio de calzado. El pie plano es un factor favorecedor, puesto que distiende la aponeurosis y tiende a pronar el pie. El pie cavo acorta el sistema aquiles-calcáneo plantar. También deben valorarse las superficies sobre las que se entrena y defectos en el entrenamiento. Las zapatillas de entrenamiento deben ser cómodas, del tamaño adecuado, mejor comprarlas al final del día, con una suela amortiguadora, estabilizadora y flexible. • Iontoforesis con corticoide. US continuos en la fase postaguda de la lesión. • LÁSER. • Cyriax: reabsorbe el edema y disminuye el espasmo muscular. • Homeopatía/fitoterapia: harpagofito, Árnica; si el dolor es localizado y puntiforme en talón sin extenderse a la planta del pie: Kalium Bichronium. 74 Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) • Tratamiento médico: antiinflamatorio oral o intramuscular. • TOC: terapia de ondas de choque; en casos de dolor crónico; existen autores que la recomiendan, pero su efectividad está en estudio. • Infiltraciones: deben ser de uso lo más restringido posible, para no favorecer la ruptura de la fascia. Por otro lado, la vía de abordaje debe ser lateral, para no favorecer la degeneración de la almohadilla grasa, que ocurriría en caso de un abordaje inferior. • Cirugía invasiva o mínimamente invasiva (endoscópica) en caso de persistir la sintomatología: fasciotomía plantar; se actúa realizando una limpieza de la fascia inflamada, con variantes como la resección o no del espolón, extracción de tejidos circundantes dañados, descompresión nerviosa… Con una cirugía mínimamente invasiva, el atleta suele incorporarse antes al ejercicio que con una aproximación abierta. Sin embargo, hay más riesgo de producir daño nervioso durante la intervención. • Incidir en la potenciación de la musculatura intrínseca, estiramientos del sistema suro-aquileocalcáneo plantar y en la propiocepción cuando la fascitis esté resuelta, a modo de prevención, cuando el caso esté resuelto. Mantener las medidas biomecánicas que han logrado la resolución de la patología. BIBLIOGRAFÍA R. Danowski; J.-C. Chanussot, Traumatología del deporte, MASSON. Rachelle Buhbinder, M.B, B.S, F.R.A.C.P, Plantar fascitis. N. Engl J Med 350;21. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 74 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE • Descarga de la fascia y musculatura del sistema Aquiles-calcáneo-plantar: la fascia es parte integrante del sistema suro-aquileo-calcáneo-plantar. Tiene un papel importante en la transmisión de fuerzas desde el tríceps sural hacia los dedos, siendo su elasticidad un factor importante para generar gran cantidad de energía en cada zancada o salto. Estiramientos dinámicos con una pelota. • Modificación del impacto posterior: talonera, plantilla, cambio de calzado. El pie plano es un factor favorecedor, puesto que distiende la aponeurosis y tiende a pronar el pie. El pie cavo acorta el sistema aquiles-calcáneo plantar. También deben valorarse las superficies sobre las que se entrena y defectos en el entrenamiento. Las zapatillas de entrenamiento deben ser cómodas, del tamaño adecuado, mejor comprarlas al final del día, con una suela amortiguadora, estabilizadora y flexible. • Iontoforesis con corticoide. US continuos en la fase postaguda de la lesión. • LÁSER. • Cyriax: reabsorbe el edema y disminuye el espasmo muscular. • Homeopatía/fitoterapia: harpagofito, Árnica; si el dolor es localizado y puntiforme en talón sin extenderse a la planta del pie: Kalium Bichronium. 74 Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) • Tratamiento médico: antiinflamatorio oral o intramuscular. • TOC: terapia de ondas de choque; en casos de dolor crónico; existen autores que la recomiendan, pero su efectividad está en estudio. • Infiltraciones: deben ser de uso lo más restringido posible, para no favorecer la ruptura de la fascia. Por otro lado, la vía de abordaje debe ser lateral, para no favorecer la degeneración de la almohadilla grasa, que ocurriría en caso de un abordaje inferior. • Cirugía invasiva o mínimamente invasiva (endoscópica) en caso de persistir la sintomatología: fasciotomía plantar; se actúa realizando una limpieza de la fascia inflamada, con variantes como la resección o no del espolón, extracción de tejidos circundantes dañados, descompresión nerviosa… Con una cirugía mínimamente invasiva, el atleta suele incorporarse antes al ejercicio que con una aproximación abierta. Sin embargo, hay más riesgo de producir daño nervioso durante la intervención. • Incidir en la potenciación de la musculatura intrínseca, estiramientos del sistema suro-aquileocalcáneo plantar y en la propiocepción cuando la fascitis esté resuelta, a modo de prevención, cuando el caso esté resuelto. Mantener las medidas biomecánicas que han logrado la resolución de la patología. BIBLIOGRAFÍA R. Danowski; J.-C. Chanussot, Traumatología del deporte, MASSON. Rachelle Buhbinder, M.B, B.S, F.R.A.C.P, Plantar fascitis. N. Engl J Med 350;21. 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 76 Carreras de resistencia Saludinámica (medio fondo, fondo, maratón, cross) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE SÍNDROME DE LA CINTILLA ILIOTIBIAL O RODILLA DEL CORREDOR • Prueba de Renne: dolor al apoyo unipodal con 30-40º de flexión de rodilla. BURSITIS DE LA CADERA Y CADERA EN RESORTE También conocido como síndrome del limpiaparabrisas, es típica de corredores de fondo. Se trata de una tendinitis de la fascia lata y en algunos casos de una inflamación de la bursa subyacente. • Prueba de Noble: hacer flexoextensión pasiva de rodilla, presionando 3-4 cm por encima de la interlinea articular. El dolor aparece a los 30º, y más en varo. Las lesiones de la pelvis y la cadera son menos frecuentes que en el resto del miembro inferior en atletas, pero en ocasiones son causa de una larga baja. Además de las lesiones óseas y articulares que pueden causar dolor, el origen de este último está en muchos casos en la inflamación de las bolsas o bursas sinoviales de esta región anatómica. Por las repetidas flexiones y extensiones de rodilla la bandeleta iliotibial roza sobre el epicóndilo femoral externo, donde se sitúa la bolsa serosa. Las fibras posteriores de la bandeleta son las más implicadas en este roce. El rozamiento es máximo a los 30º de flexión de la rodilla. Clínicamente se manifiesta por dolor en el compartimento externo de la rodilla, irradiado a veces hacia el lateral del muslo. Las molestias aumentan con los kilómetros de carrera y más en terrenos duros y ondulados (cuestas abajo). Con el tiempo las molestias van a más, pudiendo llegar su intensidad a obligar al atleta interrumpir la carrera. TRATAMIENTO • Evitar gesto deportivo doloroso durante unos días. • Cuidar técnica de carrera (correr en extensión). • Crioterapia. • Antiinflamatorios. • Masaje de descarga de lata y tensor de la fascia. fascia • Masaje transverso profundo. • Estiramientos del músculo. • En ocasiones, infiltración con corticoides. • En casos muy rebeldes la cirugía puede aliviar el cuadro. PREVENCIÓN Son factores predisponentes genu varo o un calcáneo varo. un • Evitar cuestas abajo. • Corregir alteraciones de la pisada. Clínicamente se caracteriza por dolor punzante en la cara lateral de la rodilla de comienzo súbito, que aumenta con el kilometraje y se confirma mediante: 76 • Evitar calzado desgastado. • Fortalecimiento abductores del muslo. TROCANTERITIS La trocanteritis es una patología frecuente no solamente en atletas, sino también en personas que no hacen deporte. Consiste en la inflamación de la bursa que recubre el trocánter mayor del fémur, como consecuencia del continuo roce del tendón de la fascia lata (músculo glúteo mayor y tensor de la fascia lata) en ese punto cuando caminamos o corremos. El diagnóstico es sencillo y una buena exploración física nos revelará la lesión. Es aconsejable realizar una radiografía de la pelvis con las caderas para estudiar la forma del fémur proximal, descartar la presencia de algún osteofito (que no suele estar presente) y valorar la articulación de la cadera (cambios degenerativos, choque femoro-acetabular, etc.). Además hay que valorar como siempre los factores biomecánicos que pueden favorecer el desarrollo de ésta y otras lesiones (alineación de los miembros inferiores, dismetrías, pisada, etc.). El tratamiento inicial consistirá en evitar la actividad que intensifica el dolor, crioterapia, antiinflamatorios orales y fisioterapia. En caso de no resolverse o mejorar significativamente lo más útil es realizar una infiltración con anestésico local y corticoide, que puede repetirse una o dos veces más hasta la resolución completa de los síntomas. Si el cuadro no es típico, debe descartarse otro origen del dolor, como por ejemplo patología lumbar y discal, con irradiación a la zona lateral del muslo. BURSITIS DEL PSOAS Esta lesión se produce por la inflamación de la bolsa serosa situada entre el tendón de psoas ilíaco y el trocánter menor del fémur. El dolor que produce se localiza en la región inguinal y se exacerba con la flexión repetida y con la extensión de la cadera. El diagnóstico es clínico, pero a veces no es fácil diferenciarla de otros procesos intraarticulares patológicos, como roturas del labrum, artritis y artrosis de la cadera (ojo en deportistas veteranos) o lesiones osteocondrales de la cabeza femoral. También entran en el diagnóstico diferencial otros dos procesos graves: la fractura de estrés del cuello y la necrosis avascular de la cabeza. El tratamiento consiste básicamente en antiinflamatorios, estiramientos y fisioterapia. La infiltración en esta zona es menos segura. En la actualidad la artroscopia de cadera puede jugar un papel importante en casos refractarios. CADERA EN RESORTE Muy en relación con los dos procesos mencionados existe lo que denominamos cadera en resorte, coxa saltans o “snapping hip” en inglés. Es un término que incluye cualquier proceso que consiste en la percepción de un resalte o chasquido audible y palpable en la región de la cadera, en la mayoría de los 77 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 76 Carreras de resistencia Saludinámica (medio fondo, fondo, maratón, cross) COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE SÍNDROME DE LA CINTILLA ILIOTIBIAL O RODILLA DEL CORREDOR • Prueba de Renne: dolor al apoyo unipodal con 30-40º de flexión de rodilla. BURSITIS DE LA CADERA Y CADERA EN RESORTE También conocido como síndrome del limpiaparabrisas, es típica de corredores de fondo. Se trata de una tendinitis de la fascia lata y en algunos casos de una inflamación de la bursa subyacente. • Prueba de Noble: hacer flexoextensión pasiva de rodilla, presionando 3-4 cm por encima de la interlinea articular. El dolor aparece a los 30º, y más en varo. Las lesiones de la pelvis y la cadera son menos frecuentes que en el resto del miembro inferior en atletas, pero en ocasiones son causa de una larga baja. Además de las lesiones óseas y articulares que pueden causar dolor, el origen de este último está en muchos casos en la inflamación de las bolsas o bursas sinoviales de esta región anatómica. Por las repetidas flexiones y extensiones de rodilla la bandeleta iliotibial roza sobre el epicóndilo femoral externo, donde se sitúa la bolsa serosa. Las fibras posteriores de la bandeleta son las más implicadas en este roce. El rozamiento es máximo a los 30º de flexión de la rodilla. Clínicamente se manifiesta por dolor en el compartimento externo de la rodilla, irradiado a veces hacia el lateral del muslo. Las molestias aumentan con los kilómetros de carrera y más en terrenos duros y ondulados (cuestas abajo). Con el tiempo las molestias van a más, pudiendo llegar su intensidad a obligar al atleta interrumpir la carrera. TRATAMIENTO • Evitar gesto deportivo doloroso durante unos días. • Cuidar técnica de carrera (correr en extensión). • Crioterapia. • Antiinflamatorios. • Masaje de descarga de lata y tensor de la fascia. fascia • Masaje transverso profundo. • Estiramientos del músculo. • En ocasiones, infiltración con corticoides. • En casos muy rebeldes la cirugía puede aliviar el cuadro. PREVENCIÓN Son factores predisponentes genu varo o un calcáneo varo. un • Evitar cuestas abajo. • Corregir alteraciones de la pisada. Clínicamente se caracteriza por dolor punzante en la cara lateral de la rodilla de comienzo súbito, que aumenta con el kilometraje y se confirma mediante: 76 • Evitar calzado desgastado. • Fortalecimiento abductores del muslo. TROCANTERITIS La trocanteritis es una patología frecuente no solamente en atletas, sino también en personas que no hacen deporte. Consiste en la inflamación de la bursa que recubre el trocánter mayor del fémur, como consecuencia del continuo roce del tendón de la fascia lata (músculo glúteo mayor y tensor de la fascia lata) en ese punto cuando caminamos o corremos. El diagnóstico es sencillo y una buena exploración física nos revelará la lesión. Es aconsejable realizar una radiografía de la pelvis con las caderas para estudiar la forma del fémur proximal, descartar la presencia de algún osteofito (que no suele estar presente) y valorar la articulación de la cadera (cambios degenerativos, choque femoro-acetabular, etc.). Además hay que valorar como siempre los factores biomecánicos que pueden favorecer el desarrollo de ésta y otras lesiones (alineación de los miembros inferiores, dismetrías, pisada, etc.). El tratamiento inicial consistirá en evitar la actividad que intensifica el dolor, crioterapia, antiinflamatorios orales y fisioterapia. En caso de no resolverse o mejorar significativamente lo más útil es realizar una infiltración con anestésico local y corticoide, que puede repetirse una o dos veces más hasta la resolución completa de los síntomas. Si el cuadro no es típico, debe descartarse otro origen del dolor, como por ejemplo patología lumbar y discal, con irradiación a la zona lateral del muslo. BURSITIS DEL PSOAS Esta lesión se produce por la inflamación de la bolsa serosa situada entre el tendón de psoas ilíaco y el trocánter menor del fémur. El dolor que produce se localiza en la región inguinal y se exacerba con la flexión repetida y con la extensión de la cadera. El diagnóstico es clínico, pero a veces no es fácil diferenciarla de otros procesos intraarticulares patológicos, como roturas del labrum, artritis y artrosis de la cadera (ojo en deportistas veteranos) o lesiones osteocondrales de la cabeza femoral. También entran en el diagnóstico diferencial otros dos procesos graves: la fractura de estrés del cuello y la necrosis avascular de la cabeza. El tratamiento consiste básicamente en antiinflamatorios, estiramientos y fisioterapia. La infiltración en esta zona es menos segura. En la actualidad la artroscopia de cadera puede jugar un papel importante en casos refractarios. CADERA EN RESORTE Muy en relación con los dos procesos mencionados existe lo que denominamos cadera en resorte, coxa saltans o “snapping hip” en inglés. Es un término que incluye cualquier proceso que consiste en la percepción de un resalte o chasquido audible y palpable en la región de la cadera, en la mayoría de los 77 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 78 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) TRATAMIENTO FISIOTERAPÉUTICO casos molesto. Si es así el origen puede estar tanto en el resalte del tendón de la fascia lata a nivel de la bursa trocantérea (cadera en resorte externa), a nivel del paso del psoas ilíaco hacia el trocánter menor (cadera en resorte interna) o a nivel intrarticular, debido a cuerpos libres, lesiones del cartílago o del labrum (cadera en resorte intrarticular). El abordaje de esta patología debe ser similar a las bursitis comentadas previamente, siempre y cuando haya dolor. En algunos casos persistentes será necesaria la cirugía con extirpación de la bursa y “Z”plastia o resección elíptica en la fascia del glúteo mayor (cadera en resorte externa) o alargamiento del psoas, que es excepcional (cadera en resorte interna). Si el origen de los resaltes es intrarticular, debe confirmarse con RM o artro-RM y lo indicado sería la realización de una artroscopia. TRATAMIENTO FRACTURAS DE ESTRÉS El proceso de tratamiento en fisioterapia consta de los siguientes pasos, siendo importante reseñar que se aplicarán progresivamente dependiendo de la evolución del paciente: 1. Propiocepción. Su ejecución ha de ser precoz. • En descarga, buscando la estimulación a través de receptores cutáneos. • En apoyo empezaremos con carga bipodal, siguiendo pautas de menos a más, hasta llegar al apoyo unipodal. • Empezaremos con terrenos planos y estables para, progresivamente, introducir diferentes suelos (tierra, arena, etc.) sin olvidar el trabajo con distintas plataformas y espumas de distinto grosor. • Debemos llegar hasta emular el gesto deportivo. 2. Hidrocinestesia. Nos da la herramienta más eficaz para reeducar la marcha activamente: • El atleta realizará diferentes ejercicios en la piscina, con un nivel de flotación que le permita reproducir su gesto deportivo. • El agua nos ofrece una resistencia que nos ayuda a que se estimulen los propioceptores. • Iremos aumentando la resistencia, gracias a cambios en los ejercicios para que la turbulencia creada sea mayor. 3. Cinesiterapia: • Isométricos: sin alterar la longitud del músculo en la contracción. • Contraresistencia (incluyendo el trabajo con gomas de distinta resistencia). • Concéntricos: en la contracción, el origen y la inserción del músculo se aproximan. 4. Masaje profundo en la musculatura implicada. 5. Estiramientos: • Estáticos pasivos: el grupo muscular a trabajar se coloca en tensión progresivamente mediante una fuerza externa (pe/el fisioterapeuta). • Dinámicos: se llevan a cabo, sobre todo, cuando el deportista realiza el calentamiento y se efectúan con movimientos lanzados que crean la activación del reflejo miotático. • Técnica miotensiva: colocamos al músculo que vamos a estirar en preelongación. 1) Le pedimos un movimiento contra-resistencia. 2) Relajación. 3) Estirar el músculo pasivamente. Nota: dependeremos siempre de la evolución del deportista. TRATAMIENTO FASCITIS PLANTAR Como en el caso anterior, el seguimiento del siguiente proceso, dependerá de la evolución del paciente y, en igual grado, de la elección del profesional. 1. F érula nocturna con flexión dorsal 90º. Dado el efecto doloroso de la férula, se irá aumentando el tiempo de exposición. 2. Masaje profundo en tríceps sural y arco plantar. 3. Movilización articular general del pie, haciendo hincapié en las articulaciones tarsometatarsianas y subastragalinas. 4. Vendaje rígido de descarga. Da la oportunidad al atleta de seguir la pauta de entreno marcada por su equipo médico. • Excéntricos: en la contracción, el origen y la inserción se alejan. 78 79 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 78 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) TRATAMIENTO FISIOTERAPÉUTICO casos molesto. Si es así el origen puede estar tanto en el resalte del tendón de la fascia lata a nivel de la bursa trocantérea (cadera en resorte externa), a nivel del paso del psoas ilíaco hacia el trocánter menor (cadera en resorte interna) o a nivel intrarticular, debido a cuerpos libres, lesiones del cartílago o del labrum (cadera en resorte intrarticular). El abordaje de esta patología debe ser similar a las bursitis comentadas previamente, siempre y cuando haya dolor. En algunos casos persistentes será necesaria la cirugía con extirpación de la bursa y “Z”plastia o resección elíptica en la fascia del glúteo mayor (cadera en resorte externa) o alargamiento del psoas, que es excepcional (cadera en resorte interna). Si el origen de los resaltes es intrarticular, debe confirmarse con RM o artro-RM y lo indicado sería la realización de una artroscopia. TRATAMIENTO FRACTURAS DE ESTRÉS El proceso de tratamiento en fisioterapia consta de los siguientes pasos, siendo importante reseñar que se aplicarán progresivamente dependiendo de la evolución del paciente: 1. Propiocepción. Su ejecución ha de ser precoz. • En descarga, buscando la estimulación a través de receptores cutáneos. • En apoyo empezaremos con carga bipodal, siguiendo pautas de menos a más, hasta llegar al apoyo unipodal. • Empezaremos con terrenos planos y estables para, progresivamente, introducir diferentes suelos (tierra, arena, etc.) sin olvidar el trabajo con distintas plataformas y espumas de distinto grosor. • Debemos llegar hasta emular el gesto deportivo. 2. Hidrocinestesia. Nos da la herramienta más eficaz para reeducar la marcha activamente: • El atleta realizará diferentes ejercicios en la piscina, con un nivel de flotación que le permita reproducir su gesto deportivo. • El agua nos ofrece una resistencia que nos ayuda a que se estimulen los propioceptores. • Iremos aumentando la resistencia, gracias a cambios en los ejercicios para que la turbulencia creada sea mayor. 3. Cinesiterapia: • Isométricos: sin alterar la longitud del músculo en la contracción. • Contraresistencia (incluyendo el trabajo con gomas de distinta resistencia). • Concéntricos: en la contracción, el origen y la inserción del músculo se aproximan. 4. Masaje profundo en la musculatura implicada. 5. Estiramientos: • Estáticos pasivos: el grupo muscular a trabajar se coloca en tensión progresivamente mediante una fuerza externa (pe/el fisioterapeuta). • Dinámicos: se llevan a cabo, sobre todo, cuando el deportista realiza el calentamiento y se efectúan con movimientos lanzados que crean la activación del reflejo miotático. • Técnica miotensiva: colocamos al músculo que vamos a estirar en preelongación. 1) Le pedimos un movimiento contra-resistencia. 2) Relajación. 3) Estirar el músculo pasivamente. Nota: dependeremos siempre de la evolución del deportista. TRATAMIENTO FASCITIS PLANTAR Como en el caso anterior, el seguimiento del siguiente proceso, dependerá de la evolución del paciente y, en igual grado, de la elección del profesional. 1. F érula nocturna con flexión dorsal 90º. Dado el efecto doloroso de la férula, se irá aumentando el tiempo de exposición. 2. Masaje profundo en tríceps sural y arco plantar. 3. Movilización articular general del pie, haciendo hincapié en las articulaciones tarsometatarsianas y subastragalinas. 4. Vendaje rígido de descarga. Da la oportunidad al atleta de seguir la pauta de entreno marcada por su equipo médico. • Excéntricos: en la contracción, el origen y la inserción se alejan. 78 79 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 80 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE 5. Masaje transverso profundo o Cyriax. Muy importante aplicar en la zona concreta del dolor, pues es entonces cuando gana en eficacia. Los dedos del fisioterapeuta y la piel del paciente han de ser una unidad. Como su nombre indica, el masaje ha de ser transverso a la estructura afectada y su frecuencia será de días alternos. El tratamiento acabará cuando, valorando la fascia plantar, no persista el dolor. 6. Técnica de ganchos o fibrólisis diacutánea. Es una técnica externa que nos permite llegar de una manera analítica a estructuras donde los dedos no pueden llegar con la precisión y la fuerza que da el gancho. También nos da la ventaja de que podemos trabajar encima de un taping con efectividad. 7. Propiocepción. Su ejecución ha de ser precoz. La progresión será según la tolerancia del atleta. Esta técnica facilita que las vías aferentes afectadas puedan volver a transmitir una mejora de la coordinación de la zona lesionada. • En descarga, buscando la estimulación a través de receptores cutáneos. • En apoyo empezaremos con carga bipodal, siguiendo pautas de menos a más, hasta llegar al apoyo unipodal. • Empezaremos con terrenos planos y estables, para progresivamente, introducir diferentes suelos (tierra, arena, etc.) sin olvidar el trabajo con distintas plataformas y espumas de distinto grosor. • Debemos llegar hasta emular el gesto deportivo. 80 8. Estiramientos. Disponiendo de la misma tipología que en el homónimo apartado anterior, incidiremos especialmente sobre la fascia y el tríceps sural. Kinesio 9. Técnica de vendaje Taping. Esta técnica nos ofrece una estimulación propioceptiva, una corrección funcional, un soporte pasivo y una corrección mecánica. En el caso del cual estamos hablando, utilizaríamos la técnica de fascia, que nos da un cambio de la tensión de la piel y de la fascia, proporcionándonos una posición deseada de las mismas. Esta técnica la podemos combinar con el vendaje rígido. 10.C ineseterapia. Utilizando los mismos abordajes citados anteriormente, pero insistiendo en el pie y la pierna. 11.Crioterapia. Se aplicará siempre después de entrenar y antes de acostarse, durante una media de diez minutos. TRATAMIENTO SÍNDROME DE LA CINTILLA ILIOTIBIAL O RODILLA DEL CORREDOR 1. Masaje profundo de descargas de fascia lata, tensor de la fascia y glúteo. 2. Masaje transverso profundo o Cyriax (ver comentario en fasticitis plantar). 3. Fibrólisis diacutánea (ver comentario en fascitis plantar). En este caso, nos ayuda mucho a romper las posibles adherencias que se hayan creado en las repetidas inflamaciones del tracto iliotibial. Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) 4. Electroterapia. Ultrasonidos y/o láser. En ultrasonidos usaremos la modalidad pulsátil con efectos antiinflamatorios y analgésicos. 5. Estiramientos de los músculos implicados (ver comentarios en fractura de estrés). 6. Técnica de vendaje Kinesio Taping. Nos ofrece una estimulación propioceptiva, una corrección funcional, un soporte pasivo y una corrección mecánica. Usaremos la técnica fascial y correccional, que nos deja libre todo el rango de movimiento. 7. Hidrocinestesia. Nos da la herramienta más eficaz para reeducar la marcha activamente: • • • El atleta realizará diferentes ejercicios en la piscina, con un nivel de flotación que le permita reproducir su gesto deportivo. El agua nos ofrece una resistencia que nos ayuda a que se estimulen los propioceptores. Iremos aumentando la resistencia, gracias a cambios en los ejercicios para que la turbulencia creada sea mayor. 8. Fortalecimiento de los músculos abductores del muslo. 9. Al regresar al entrenamiento, el atleta debe tener en cuenta empezar a correr en terrenos planos sin pendientes pronunciadas, con calzado que no se encuentre desgastado en la zona externa del talón. Debe realizarse un buen estudio plantar de la huella en dinámica o revisar plantillas, en caso de utilizarse. Gradualmente, se irán introduciendo ejercicios de potenciación del eje cadera-muslo-pierna. TRATAMIENTO BURSITIS TROCANTÉREA 1. Masaje profundo en los músculos implicados. 2. Propiocepción (ver fascitis plantar). 3. Técnica de vendaje de Kinesio Taping. Utilizaremos la técnica muscular y la técnica de los puntos gatillos. 4. Ultrasonidos en modalidad pulsátil con sus consabidos efectos antiinflamatorios y analgésicos. 5. Crioterapia. Para conseguir la disminución del dolor. 6. Inhibición de los puntos gatillos del tensor de la fascia lata, glúteo mayor, glúteo medio y menor. 7. Técnica de spray y estiramiento. Importante que el spray nunca se aplique después del estiramiento. Se ha de aplicar antes o a la vez. Estiraremos el tensor de la fascia lata lesionado, que para llevarlo cerca de su límite (según deportista), el fisioterapeuta debe fijar la pelvis con una mano para fijar el movimiento de la columna lumbar e ir aplicando el frío tal como vamos progresando en el estiramiento. 8. Movilización general de la coxofemoral, sin olvidar todas las articulaciones próximas. 9. Durante el retorno al entrenamiento, hay que evitar correr en superficies con pendiente lateral, no utilizar el calzado desgastado y revisar plantillas o ir al podólogo (en caso que no se tengan plantillas). 81 060308 AF salud dinamica 10:SKY 02/04/09 16:46 Página 80 Saludinámica COMUNICADOS MENARINI EN SALUD Y DEPORTE 5. Masaje transverso profundo o Cyriax. Muy importante aplicar en la zona concreta del dolor, pues es entonces cuando gana en eficacia. Los dedos del fisioterapeuta y la piel del paciente han de ser una unidad. Como su nombre indica, el masaje ha de ser transverso a la estructura afectada y su frecuencia será de días alternos. El tratamiento acabará cuando, valorando la fascia plantar, no persista el dolor. 6. Técnica de ganchos o fibrólisis diacutánea. Es una técnica externa que nos permite llegar de una manera analítica a estructuras donde los dedos no pueden llegar con la precisión y la fuerza que da el gancho. También nos da la ventaja de que podemos trabajar encima de un taping con efectividad. 7. Propiocepción. Su ejecución ha de ser precoz. La progresión será según la tolerancia del atleta. Esta técnica facilita que las vías aferentes afectadas puedan volver a transmitir una mejora de la coordinación de la zona lesionada. • En descarga, buscando la estimulación a través de receptores cutáneos. • En apoyo empezaremos con carga bipodal, siguiendo pautas de menos a más, hasta llegar al apoyo unipodal. • Empezaremos con terrenos planos y estables, para progresivamente, introducir diferentes suelos (tierra, arena, etc.) sin olvidar el trabajo con distintas plataformas y espumas de distinto grosor. • Debemos llegar hasta emular el gesto deportivo. 80 8. Estiramientos. Disponiendo de la misma tipología que en el homónimo apartado anterior, incidiremos especialmente sobre la fascia y el tríceps sural. Kinesio 9. Técnica de vendaje Taping. Esta técnica nos ofrece una estimulación propioceptiva, una corrección funcional, un soporte pasivo y una corrección mecánica. En el caso del cual estamos hablando, utilizaríamos la técnica de fascia, que nos da un cambio de la tensión de la piel y de la fascia, proporcionándonos una posición deseada de las mismas. Esta técnica la podemos combinar con el vendaje rígido. 10.C ineseterapia. Utilizando los mismos abordajes citados anteriormente, pero insistiendo en el pie y la pierna. 11.Crioterapia. Se aplicará siempre después de entrenar y antes de acostarse, durante una media de diez minutos. TRATAMIENTO SÍNDROME DE LA CINTILLA ILIOTIBIAL O RODILLA DEL CORREDOR 1. Masaje profundo de descargas de fascia lata, tensor de la fascia y glúteo. 2. Masaje transverso profundo o Cyriax (ver comentario en fasticitis plantar). 3. Fibrólisis diacutánea (ver comentario en fascitis plantar). En este caso, nos ayuda mucho a romper las posibles adherencias que se hayan creado en las repetidas inflamaciones del tracto iliotibial. Carreras de resistencia (medio fondo, fondo, maratón, cross) 4. Electroterapia. Ultrasonidos y/o láser. En ultrasonidos usaremos la modalidad pulsátil con efectos antiinflamatorios y analgésicos. 5. Estiramientos de los músculos implicados (ver comentarios en fractura de estrés). 6. Técnica de vendaje Kinesio Taping. Nos ofrece una estimulación propioceptiva, una corrección funcional, un soporte pasivo y una corrección mecánica. Usaremos la técnica fascial y correccional, que nos deja libre todo el rango de movimiento. 7. Hidrocinestesia. Nos da la herramienta más eficaz para reeducar la marcha activamente: • • • El atleta realizará diferentes ejercicios en la piscina, con un nivel de flotación que le permita reproducir su gesto deportivo. El agua nos ofrece una resistencia que nos ayuda a que se estimulen los propioceptores. Iremos aumentando la resistencia, gracias a cambios en los ejercicios para que la turbulencia creada sea mayor. 8. Fortalecimiento de los músculos abductores del muslo. 9. Al regresar al entrenamiento, el atleta debe tener en cuenta empezar a correr en terrenos planos sin pendientes pronunciadas, con calzado que no se encuentre desgastado en la zona externa del talón. Debe realizarse un buen estudio plantar de la huella en dinámica o revisar plantillas, en caso de utilizarse. Gradualmente, se irán introduciendo ejercicios de potenciación del eje cadera-muslo-pierna. TRATAMIENTO BURSITIS TROCANTÉREA 1. Masaje profundo en los músculos implicados. 2. Propiocepción (ver fascitis plantar). 3. Técnica de vendaje de Kinesio Taping. Utilizaremos la técnica muscular y la técnica de los puntos gatillos. 4. Ultrasonidos en modalidad pulsátil con sus consabidos efectos antiinflamatorios y analgésicos. 5. Crioterapia. Para conseguir la disminución del dolor. 6. Inhibición de los puntos gatillos del tensor de la fascia lata, glúteo mayor, glúteo medio y menor. 7. Técnica de spray y estiramiento. Importante que el spray nunca se aplique después del estiramiento. Se ha de aplicar antes o a la vez. Estiraremos el tensor de la fascia lata lesionado, que para llevarlo cerca de su límite (según deportista), el fisioterapeuta debe fijar la pelvis con una mano para fijar el movimiento de la columna lumbar e ir aplicando el frío tal como vamos progresando en el estiramiento. 8. Movilización general de la coxofemoral, sin olvidar todas las articulaciones próximas. 9. Durante el retorno al entrenamiento, hay que evitar correr en superficies con pendiente lateral, no utilizar el calzado desgastado y revisar plantillas o ir al podólogo (en caso que no se tengan plantillas). 81