Deporte y S.I.D.A. - Pilar Martín Escudero

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1. INTRODUCCI~N
A CONCEPT
;.- r . - . . y - , r i x . - . * F i I I . t - . q ~
DEPORTIVOS
EL EJERCICIO F~SICOEN EL PACIENTE VIH
1. Introducción a conceptos deportivos . . . . . . . . . . . . . . . .3
2. Revisión de la fisiopatología . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .ll
3 . Precauciones del riesgo de transmisión de VIH en el
deporte. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .13
4. Respuesta inmunológica al ejercicio y al entrenamiento: .16
Respuesta al ejercicio.
Res~uestaal entrenamiento.
5. Seguimiento y medicación: . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .19
Recomendaciones de revisión médico-deportiva.
Recomendaciones para un programa de ejercicio.
Consideraciones especiales.
6. Normas de prescripción de ejercicio: . . . . . . . . . . . . . . . .23
Entrenamiento de la resistencia.
Entrenamiento de la fuerza.
Entrenamiento de la flexibilidad.
Entrenamiento de habilidades neuromusculares.
7, Bibliografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .32
El contenido de esta información refleja las concluciones y hallazgos propios de los autores y no son necesariamente los de Merck
& CO. Inc., ni los de ninguna de sus afiliadas, y se presenta como
un servicio a la profesión médica.
E
n estas últimas décadas han acontecido tres hechos de especial relevancia que nos permiten entender los
cambios sociológicos presentes en la
actualidad y relacionados con el
deporte:
o Descenso
del trabajo físico,
aumentando por tanto el sedentarismo y tiempo de ocio, que pasa
este Último de ser un logro a una
necesidad de toda la población.
Esto ha permitido que se multiplique la oferta de las actividades
relacionadas con el d e ~ o r t e .
o Crecimiento del concepto de
"bienestar" o "calidad de vida"
donde se incluye la actividad física, ya que se observa que influye
en el individuo haciéndose sentirse bien, mejorando su salud,
aspecto, capacidad física y de
relajación y modificando las curvas de envejecimiento tanto
mentales como físicas. Esto ha
favorecido el auge de la cultura
deportiva y, como consecuencia,
de las ciencias del deporte,
teniendo conocimientos médicos
mucho más precisos de los conocidos hace años.
o Cambio de la mentalidad de
muchos facultativos médicos que
han pasado de recomendar reposo, después de una enfermedad,
a un régimen pautado de ejercicio tanto de prevención como de
tratamiento en diferentes enfermedades, fruto de múltiples
investigaciones que han evidenciado el efecto favorable del ejercicio físico sobre los diferentes
sistemas orgánicos (14,50).
Por ello surge el concepto de prescripción de ejercicio, que es un proceso por el cual a una persona sana o
enferma se le recomienda un régimen de actividad física individualizado y adecuado a sus necesidades, a
diferencia del concepto clásico de
prescribir, que es recetar un fármaco,
un tratamiento o un procedimiento
(50). Para poder realizar esta prescripción, en el ámbito de la medicina
del deporte, hay que repasar unos
conocimientos básicos de la adaptación del organismo durante la realización de esfuerzo físico y conocer
los diferentes sistemas por los que el
organismo capta energía en función
del esfuerzo físico.
l . S I S T E M A S ENERCÉTICOS
El organismo está diseñado para
moverse y poder realizar todo tipo de
actividades con los fines más diversos, para esto el cuerpo humano es
una central de energía sofisticada
que produce energía y permite así
que sus células funcionen (40).
Durante la realización de ejercicio
se desencadenan en el organismo
una serie de modificaciones fisiológicas, tanto de forma inmediata como
permanente, y también de forma
diferente según se trate de un individuo de vida sedentaria o de una persona entrenada regularmente (1, 4,
35), destinadas a:
o Disponer de 7-12 kilocalorías de
energía necesaria para la contracción muscular. (Gracias al desdoblamiento de ATP en ADP) (35).
o Ofrecer más oxígeno al músculo
que realiza el esfuerzo, actuando
a su vez sobre la recogida de oxígeno de los alvéolos del aire inspirado y su posterior transporte
por la sangre a los tejidos (1, 54).
La principal fuente de energía para
la contracción del músculo es el AT!?
..
Ejercicio Físico
VIH
--?
. .
.
Esta molécula de ATP a través de
transformaciones energéticas se convierte en energia cinética. La energia
se obtiene cuando el ATP es hidrolizado en ADP y fosfato inorgánico y se
utiliza en las proteínas miofibrilares
en el complejo actina-miosina. La
liberación de energía permite que los
bastones de las moléculas de miosina se desplacen; este hecho fue estudiado y descrito por Huxley. El consumo de ATP durante la contracción
será proporcional a la actividad de
las bandas de contracción (8,53). Para
disponer de los compuestos de alta
energia, que en cierto modo representan la moneda corriente para la
transferencia de energía, el organism o lo regenera continuamente durante largos periodos de ejercicio, resintetizándolo desde el ADP y fósforo
inorgánico y a través de cuatro sistemas energéticos (3, 52, 53).
la. Sistema del fosfágeno
Una de las fuentes inmediatas de
obtención de energia está mediado
por la enzima creatin kinasa (53). La
fosfocreatinina (PC) sufre un proceso
de desdoblamiento en fosfato y creatinina ofreciendo así 12 kcals perfectamente utilizables en la resíntesis de
ATP. Este sistema del fosfágeno está
presente en muy pequeña cantidad
en el organismo, pero sin embargo
se puede disponer de él inmediatamente (3, 35, 36). El sistema de la
adenil kinasa también puede proveer
rápidamente ATP, al sistema de contracción, durante un ejercicio intenso
(53).
ng,
.
,
~
Y-.
lb. Glicolisis anaerobia
Siendo la glucosa el substrato, la
formación neta de ATP se limita a dos
moléculas de ATP por cada molécula
de glucosa; la utilización de 180 g de
glucógeno, en ausencia de oxígeno,
nos va a permitir disponer de 3 ATP
de manera inmediata (3, 5, 35, 36). A
través de esta fuente energética se va
a disponer de mayor cantidad de
energia de forma rápida, sin embargo, presenta las siguientes limitaciones:
provisión de este elemento químico
por el sistema respiratorio, es decir
un tiempo de adaptación de 10 a 15
minutos (3,
. . 5.. 35.. 36):
- cantidad de ácido láctico acumulado en el músculo.
- disminución de glucógeno en el
músculo durante el ejercicio intenso.
- inhibición de la enzima fosfofruto-kinasa por la acidosis (3, 5, 48).
Id. Oxidación de los ácidos grasos
Por medio de este sistema energético, puramente aeróbico, se oxidan
los ácidos grasos que se hallan almacenados en el organismo en forma de
triglicérido (tres moléculas de ácidos
grasos y una de glicerina) (26). La
intensidad de esfuerzo obtenida a través de esta vía, es inferior al de otras
fuentes energéticas, sin embargo su
duración es ilimitada (hasta 120
horas se podría correr sólo con las
reservas de grasa), su recuperación
es más larga y exige un descanso,
dieta e hidratación adecuadas. Este
es el prototipo de fuente energética
utilizada en una etapa ciclista o una
maratón (26,341.
Las reservas de glucógeno se acumulan principalmente en dos sitios:
hígado y músculo.
En el hígado. se almacenan unos
100 g de glucógeno, que permiten
una cobertura energética útil para
una carrera de 20 minutos, ya que
sólo está en parte disponible dado
que el hígado jamás aporta todo su
glucógeno. Esta reserva desaparece
al final de un día de ayuno total (34).
En los músculos, las reservas son
mayores. La concentración del mismo
oscila entre 9 a 16 g por kilogramo
de músculo fresco, aunque la distribución del glucógeno es homogénea,
para un músculo dado, varía entre
diferentes músculos. Este glucógeno
juega un papel importante en la capacidad física para un ejercicio prolongado, siendo responsable del agotamiento cuando desaparece del músculo después de un ejercicio a 75%
del consumo máximo de oxígeno
(VO, máximo) (34).
Ic. Fosforilación oxidativa
A través de esta vía, la más generosa energéticamente de las tres, se
obtienen 39 ATP en presencia de oxígeno útil (3 ATP por la glucogenolisis
y 36 de la propia oxidación aeróbica
de las mitocondrias) para la oxidación de 180 g de glucógeno (3, 22).
Este camino energético, a diferencia
del anterior, no se encuentra limitado
por los productos de desecho (ya que
produce anhídrido carbónico y agua
que son fácilmente eliminados por el
organismo) sino por el oxígeno y la
11. UTILIZACIÓN
D E LAS
DIFERENTES FUENTES
ENERGÉTICAS SEGÚNEL
ESFUERZO
Los substratos energéticos utilizados varían con el esfuerzo físico. No
es solamente la sucesión de una
serie de sistemas energéticos que "se
.
',
VIH
encienden" y "se apagan" sino más
bien una mezcla continua con superposición de cada modo de transfe;
rencia eneruética con e re dominancia
de un tipo de fuente energética (32).
Ciertos grupos investigadores siguen
manteniendo la creencia de que el
ejercicio o trabajo físico se puede
dividir, basándose en lo anteriormente expuesto, en cuatro grupos en función de su duración:
- Ejercicios de menos de treinta
segundos. La energia se obtiene
predominantemente del sistema
del fosfágeno. Esta fuente energética es mínima en personas de
edad avanzada (26, 36). Aunque
todos los deportes requieren de
la utilización de los fosfatos de
alta energía, muchas actividades
dependen casi exclusivamente
de este medio de transferencia
tales como el fútbol americano,
la halterofilia, determinadas modalidades del atletismo, el béisbol y
el voleibol (32).
- Ejercicios de treinta segundos a
minuto y medio. La energía predominante en este caso es la glicolisis anaerobia (26, 36). Tal es el
caso de las carreras de 400 metros
Cuadro 1. Posibilidades de suministro de energía en función del tiempo
Oxidación de
ácidos grasos
Sistema del
fc'i
10 segundos
30 seg a 1 minuto y medio
Minuto y medto a tres minutos
Mas de tres minutos
+ti"L. \
j
Ejercicio Físico
.
'
o 410 metros vallas.
- Ejercicios de minuto y medio a
tres minutos. Donde la predominancia energética de la glicolisis
sriaerobia deja paso a la fosforilización oxidativa (26, 36). En este
grupo se incluye las pruebas de
800 metros, 1.500 metros e inclusive de 3.000 metros.
- Ejercicios de más de tres minutos. Donde prácticamente toda la
anergía la obtenemos de la fosforilización oxidativa y de la oxidación de los ácidos grasos (26,36).
Este es el sistema energético predominantemente utilizado en la
maratón o pruebas ciclistas de
ruta.
La potencia o intensidad del esfuerzo realizado también influye sobre la
utilización de los diferentes substratos energéticos, así:
Ejercicios de baja intensidad: En
trabajos realizados a 50% de la
capacidad aeróbica máxima, el
ejercicio es enteramente aeróbico y consume una mezcla de
"gasolinas", aunque la mayoría
es glucógeno y ácidos grasos
libr& en plasma. En ejercicios de
menos del 50% del VO, máximo
los lípidos cubren el 50 al 80% de
la energía necesaria. En estado
estable, la proporción de combustible de los Iípidos o de los
carbohidratos puede ser estimado por la ecuación respiratoria, la
relación de la producción de
monóxido de carbono en el consumo de oxígeno, derivado del
análisis del aire inspirado. Así
para los carbohidratos la razón
de la ecuación es de 1,0, mientras
que para las grasas es de 0,70
(22, 34).
Ejercicios de elevada intensidad:
En ejercicios realizados a más del
50% de la capacidad máxima
aeróbica, la utilización de carb o h i d r a t o ~se incrementa proporcionalmente. Los stocks de
glucógeno declinan inexorablemente, primero en las fibras tipo
I y luego en las fibras de tipo II.
Cuando las reservas de glucógeno están cercanas a estar exhaustas, se produce un descenso de
fuerza porque los ácidos libres
del plasma se convierten en
exclusiva "gasolina", pero no pueden proveer energía en un radio
del 50% de la capacidad máxima
aeróbica (22). El tiempo de permanencia en la prueba física en
intensidad moderada alta es
directamente proporcional a la
cantidad de glucógeno muscular
almacenado antes del ejercicio
(22).
Ejercicios de máxima intensidad:
Cuando la intensidad del ejercicio realizado sobrepasa el 90% de
la máxima capacidad aeróbica.
Los almacenes de fosfatos proveen la mayor capacidad de energía
para ese trabajo y suplementado
por la glicolisis anaeróbica con
ejercicios realizados al 80% del
consumo máximo de oxígeno
(VO, max) (25, 34).
111. C O N C E P T O S DE
ENTRENAMIENTO
Todas las actividades que realiza el
organismo sirven de estímulo para el
mantenimiento o mejora del funcionamiento de sus células, de tal forma
que cuantas más actividades realiza
mayor grado de funcionamiento
adquiere en la etapa de crecimiento y
menor grado de declinación se produce en la etapa de involución o
envejecimiento. Hipócrates de Cos ya
lo indicaba en su "Corpus Hippocraticum":
"Todas aquellas partes del cuerpo
que tienen una función, si se usan
con moderación y se ejercitan en el
trabajo para el que están hechas, se
conservan sanas, bien desarrolladas
y envejecen lentamente, pero si no se
usan y se dejan holgazanear, se convierten en enfermizas, defectuosas
en su crecimiento y envejecen antes
de hora" (50).
En la actualidad sabemos que los
efectos de la actividad física son múltiples y abarcan tanto al individuo en
general como a diferentes sistemas
tanto cardiovasculares, como musculares, metabólicos, etc. Uno de los
efectos de la actividad es la mejora
de las cualidades físicas (40). Las cualidades físicas básicas son el conjunto de aptitudes de la persona que la
posibilitan fisiológica y mecánicamente para la realización de cualquier actividad física.
De forma general se consideran
cuatro las cualidades físicas básicas
la resistencia, la fuerza, la flexibilidad
y la velocidad (31,411.
A)La resistencia: es la capacidad
psicofísica de una persona para
resistir la fatiga.
B)La fuerza: es la capacidad de
superar o contrarrestar fuerzas
mediante la actividad muscular.
C)La flexibilidad: es la cualidad físi-
VIH
ca básica que, con base en la
movilidad articular, extensibilidad y elasticidad muscular, permite el máximo recorrido de las
articulaciones en posiciones
diversas permitiendo al individuo realizar acciones motoras
con la mayor agilidad y destreza
posibles (31, 41)
D)La velocidad: es la capacidad
motriz para realizar actividades
motoras en condiciones dadas
en el tiempo mínimo (31, 41).
En ninguna actividad física estas
cualidades físicas aparecen de forma
pura y aislada sino más bien interrelacionadas entre sí. Cada vez que se
realiza un ejercicio se precisa siempre de una fuerza, se ejecuta con una
velocidad determinada con una
amplitud (flexibilidad) dada y en un
tiempo (resistencia) también determinado (31, 41).
La evolución y desarrollo de las
mismas van a conformar en principio
la condición física general de la per-
Cuadro 2. Las cualidades fisicas básicas y su modificación con la edad en un individuo
sano sedentario.
1
-
% Como
máximo
individual
.
.
I
i
i
i
i
====
R
1O
@
20
1
li
30
40
I
50
II
1
60
70
1
Resistencia
Velocidad
Fuerza
Flexibilidad
I
80
Edad
C \ ~ O
Físico
Ejercicio Físico
VIH
VIH
cona, para evolucionar y progresar
con posterioridad, hacia la condición
física específica, dentro del marco de
un proceso de entrenamiento a largo
plazo (31, 41).
El entrenamiento se define como
un proceso planificado y complejo,
que en el caso del ejercicio consiste
en organizar la cantidad y la intensidad del ejercicio para que las cargas
progresivas estimulen los procesos
fisiológicos de supercompensación
del organismo, favorezcan el desarrollo de las diferentes capacidades y
así promover y consolidar el rendimiento deportivo. Es decir, entrenamiento es igual a adaptación biológica (12).
Esta adaptación biológica, fruto del
entrenamiento, va a ejercer unos
efectos en el organismo humano
tanto de forma inmediata (variaciones bioquímicas y morfofuncionales
después de la ejecución del ejercicio)
como de forma permanente o como
efectos acumulativos (variaciones
que aparecen después de un largo
periodo de entrenamiento) (12, 18, 19).
La teoría y metodología de entrenamiento tiene sus propios principios basados en las ciencias biológicas, psicológicas y pedagógicas.
Estas guías y reglas que sistemáticamente dirigen el proceso global de
entrenamiento se conocen como
Principios de Entrenamiento. Todos
ellos se relacionan entre sí y garantizan la aplicación correcta de todo el
proceso de entrenamiento, aunque
son variables para cada autor (31).
Dentro de estos principios hay dos
aspectos, unos de carácter pedagógico como la participación activa, evidencia, accesibilidad y sistemática, y
otros de carácter biológico tales
como:
3
1. Que el nivel de estimulación de
la carga sea adecuado. Este
tiene aue suDerar el umbral de
movili;ación 'o umbral crítico de
entrenamiento del deportista,
de lo contrario no tendría efecto
el entrenamiento.
2. Que sea tenida en cuenta la relación entre la estimulación y el
periodo de descanso posterior.
Es necesario un cierto tiempo de
recuperación tras una estimulación eficaz con el fin de poder
soportar de nuevo una carga
parecida.
3. Que exista una variedad de cargas así como repetitividad y
continuidad, sin olvidarnos de la
periodización, individualidad,
alternancia, modelación y regeneración (12, 18, 19, 31 ,41).
IV. P R E S C R I P C I ~ ND E
EJERCICIO
Se entiende como componentes
del entrenamiento las magnitudes
que determinan o dosifican el propio
entrenamiento y que van a constituir
las parcelas fundamentales de toda
prescripción de ejercicio, y dentro de
ellas debemos distinguir tipo, sesión,
volumen, frecuencia e intensidad de
ejercicio (12, 40).
[Va) T i p o d e ejercicio
Los tipos de deportes pueden ser
clasificados según muy diferentes
variables pero desde el punto de
vista de prescripción de ejercicio
resulta más practico clasificarlos en
función de la intensidad y el tipo de
trabajo realizado (50):
Este tipo de clasificaciones a veces
son insuficientes y conviene recalificar los deportes según el grado de
destreza necesario para su realización (40).
I V b ) Sesión d e ejercicio
Toda sesión de ejercicio debe ser
estructurada en tres segmentos
indispensables para la realización de
un ejercicio con las mejores garantías
y con el fin de evitar efectos adversos. Estos segmentos son: a) el calen-
Cuadro 3. Modalidades d e ejercicios e n referencia a intensidad y t i p o d e trabajo (50).
CLASIFICACI~N
1. DEPORTES DE MODERADA O
ALTA REPERCUSION CARDIOVASCULAR
TIPOS Y CARACTER~ST~CAS
l. Deportes aeróbicos con participación muscular dinamica:
atletismo (pruebas de fondo), baloncesto, balonmano, ciclismo de ruta, esqui de fondo, fútbol, hockey
hielo, hierba y patines, rugby y tenis.
II. Deportes anaerobicos con participación muscular
mixta (isométrica y dinámica):
atletismo Ivelocidad), arles marciales: karate, judo,
badminton, esqui alpino, fútbol americano, natación sincronizada, motocross, squash, watwerpolo y
voleibol.
Ill.Deportes aeróbico-anaeróbico con participación muscular mixta:
bicicleta de montaria, boxeo, ciclismo pista, patinaje
velocidad, remo.
.
.
2. DEPORTES DE MODERADA
REPERCUSIONCARDIOVASCULAR
l. Deportes aeróbicos con participación muscular dinámica:
treking.
II. Deportes anaeróbicos con participación muscular isométrica:
motociclismo, surf y vela.
.
.
3. DEPORTES DE LIGERA O BAJA
REPERCUSIONCARDIOVASCULAR
Bolos, golf, tiro con arco.
1
tamiento (donde el organismo se prepara progresivamente al trabajo a
realizar) b) parte principal del ejercicio (con unas características que posteriormente se van a desarrollar), y c)
vuelta a la calma o periodo de enfriamiento (12,401.
I V c ) V o l u m e n d e l ejercicio
Es el componente cuantitativo de la
planificación deportiva. La noción de
volumen implica la cantidad total de
actividad ejecutada en el entrenamiento. Son partes integrantes del
volumen de entrenamiento tanto el
tiempo y duración del ejercicio, como
la distancia recorrida, la carga indicada y el número de repeticiones de un
ejercicio (12).
Es muy importante que sea lo sufi-
cientemente adecuada como para producir un gasto calórico de unos 1.200
kilojulios. Esto se puede conseguir:
- con ejercicios cortos de 5-10
minutos a intensidades mayores
del 90% del VO, máx (esto lleva a
mayores riesgos).
- con esfuerzos a intensidades más
bajas pero con una duración de
20 a 60 minutos (40). En este caso
se debe empezar realizando
sesiones de 12-15 minutos hasta
llegar a los 20 minutos. En las
personas muy desentrenadas se
pueden iniciar pausas de descanso para posteriormente irlas
reduciendo a medida que mejora
el estado de forma física (40).
Cuadro 4. Clasificación d e tipos d e depoirte e n función del grado d e destreza (40)
GRUPO
1
2
3
DESTREZA
De nivel baio e intensidad constante
De nivel medio e intensidad medianamente constante
De nivel alto e intensidad altamente variable
EJEMPLOS
Caminar, correr, pedalear
Nadar, esquiar, remar, patinar
Baloncesto, fútbol, deportes de
raqueta
1Vd) Frecuencia del ejercicio
Con frecuencia del ejercicio nos
referimos a las unidades de entrenamiento semanales (12). Así:
Cuadro 5. Pautas genéricas de sesiones
de entrenamiento semanales.
relación con el VO, máx . La frecuencia cardiaca máxima declina con la
edad y tiene diferencias individuales.
Sus valores los obtenemos de la
prueba de esfuerzo o de la fórmula
Fcmax= 220-edad (40). El American
College Sport Medicine recomienda
intensidad basada en:
-
Si esto mismo lo referimos e n función de los METS (MET= cantidad de
oxígeno consumido por sujeto en
reposo) que presenta un paciente,
podríamos indicar lo siguiente:
- Pacientes con e 3METS deben realizar sesiones múltiples cortas
diarias.
- Pacientes
con 3-5 METS deben
.
realizar 1 a 2 sesiones a la semana.
- Pacientes con > 5 METS sería
aconsejable la realización de 3-5
sesiones a la semana (11).
60-90% frecuencia cardíaca máxima.
- 50-85% del VO, máx o frecuencia
cardiaca de reserva.
- 40-50% del VO, máx con nivel de
forma física m u y bajo (11,12,40).
La intensidad se prescribe entre un
porcentaje mínimo y máximo de la
frecuencia cardiaca máxima del
siguiente modo:
O
IVe) lntensidad del ejercicio
La intensidad es el componente
cuantitativo del entrenamiento, pudiéndose considerar también como la
cantidad de trabajo de entrenamiento
realizado por unidad de tiempo. Es el
componente más difícil de prescribir
v, de
- - determinar. Los factores que lo
delimitan son: nivel de forma física,
presencia de medicación, riesgo de
complicaciones, preferencias individuales y objetivos del programa (12).
La frecuencia cardiaca es la mejor
forma de determinarla ya que guarda
Límite mínimo: (Fc de reserva x
0,5)+ Fc sentado.
~
O
O
Límite máximo: (Fc de reserva x
0,851 + Fc sentado.
Fc de reserva= FC máx- FC sentad o (11, 12, 40).
Podemos establecer cuatro zonas
de intensidad de entrenamiento basadas en la frecuencia cardiaca (11,12).
Cuadro 6. Tabla indicativa de intensidad
de ejercicio en función de la frecuencia
cardiaca.
I SlDA continúa siendo uno de los
problemas más serios de salud en
este milenio. De hecho, la OMS cifra
en 5 millones de casos de SIDA en el
mundo y unos doce millones de personas están infectados con el VIH
(virus de la inmunodeficiencia humana, agente viral etiológico del SIDA)
(9, 21, 37).
En estos últimos años se han hecho
esfuerzos considerables en la prevención, diagnóstico y tratamiento de la
enfermedad del SIDA, sin embargo,
una cura total para esta enfermedad
no existe (7,21, 23, 49). Esto ha facilitado que aparezcan estrategias complementarias dentro de la terapéutica
del SIDA como las intervenciones a
base del entrenamiento (21, 55). Esto
se ha realizado sobre la base de evidencias científicas que han indicado
que el entrenamiento físico n o sólo
es apropiado sino indicado para
gente infectada con el virus de la
inmunodeficencia humana (21).
La infección por el VIH (virus de la
inmunodeficiencia humana) es una
enfermedad m u y dinámica y progresiva debido a una infección selectiva
de las células CD4 del sistema inmunitario. Estos Iinfocitos, denominados
también células T-helper, son cruciales para el sistema inmune (21, 28).
Las células CD4 junto con los
macrófagos liberan citokinas, así
como varios tipos de interleukinas
(interleukina 2 e interferón gamma)
y factor de necrosis tumoral que
actúan y potencian la acción sobre
otras células. La disminución de
estas células produce una inmunosupresión que facilita el aumento de
infecciones oportunistas, así como el
descenso en el uso de los nutrientes
ingeridos y pérdida de la masa mus-
E
cular. La enfermedad progresará
hasta acabar con la vida del individuo
(21, 51).
El VIH se transmite por contacto
sexual, por exposición parenteral a
sangre o hemoderivados, por contaminación de heridas abiertas o de
mucosas por sangre infectada o por
transmisión vertical de una madre
infectada a u n feto o a un recién nacido. Aunque el virus puede ser detectado en varios líquidos del organismo, sólo la sangre tiene capacidad de
contagiar en lo que respecta a la
práctica de los deportes (17, 23, 49).
El VIH n o se transmite por la saliva,
lagrimas, contacto con el cuerpo,
sudor ni por objetos que son tocados
o usados por los pacientes infectados
con VIH. De esto podríamos establecer una clasificación de los líquidos
corporales sobre la cantidad de VIH
presente en los mismos:
- alta: sangre, semen, Iíquido sinovial, líquido amniótico, Iíquido
pericárdico y LCR.
- moderada: secreciones vaginales
y cervicales, leche materna.
- muy baja: lágrimas, saliva, esputo, orina.
- probablemente ninguna: el sudor
(9, 23).
La progresión natural clínica de la
enfermedad se puede estructurar en
líneas generales en tres estadios,
cada uno de los cuales presenta distinciones importantes q u e sirven
para protocolizar tanto diferentes test
de ejercicio como niveles de prescripción de ejercicio (9, 21).
Estadio 1: asintomático VIH seropositivo.
Estadio 11: inicio sintomático de VIH.
fl
Estadio 111: SIDA.
Es frecuente que la primoinfección
pase inadvertida, y a veces es necesario de 4 a 12 semanas para que la
persona se convierta en seropositiva
para VIH-1 (42).
En el Estadio 1 (>500 CD4/ml), las
personas en este estadio presentan
un relativo buen estado de salud y
están completamente libres de síntomas de la enfermedad por VIH. Este
estadio puede durar años, dependiendo de los hábitos de salud mantenidos por el individuo (9, 21).
Durante el Estadio 11, (500-200
CD4/ml), el número de células CD4
van a disminuir moderadamente.
Esto facilita el desarrollo de signos y
síntomas como la fatiga, la diarrea, la
pérdida de peso, la fiebre y la linfadenopatía. Si se efectúa un apropiado manejo del tratamiento de estos
pacientes, los individuos pueden
retrasar la progresión de la enfermedad unos años más (9,211.
El Estadio 111 (<200 CD4/ml), se
encuentra caracterizado por los efectos inmunológicos debidos a una
depleción importante de las células
CD4 que facilita la presencia de infecciones oportunistas poco frecuentes,
transformándose en el estadio más
severo y avanzado de la enfermedad
(20).
En este estadio, las complicaciones
infecciosas por VIH sobre el SNC se
extienden a cerebro, médula espinal,
músculos, nervios y articulaciones
produciendo en ocasiones neuropatias periféricas que limitan especialmente la habilidad para realizar ejercicio (51). A veces el cuadro clínico
puede complicarse con hemiparesia
que necesita de ortesis, ejercicios,
medicación antiespasmódica y varias
formas de medicina física (51).
Los avances realizados con los
agentes retrovirales y otras terapias
han incidido sobre todo en la mejora
de la calidad de vida de las personas
dentro de este estadio (9, 21).
3. PRECAUCIONES DEL RIESGO DE
TRANSMISIÓNDE VIH EN EL DEPC..
,
,
L
a mayoría de los esfuerzos en la
educación y prevención de la
infección por el VIH se han focalizado
en actividades no relacionadas con el
ejercicio. Sin embargo, en el momento que el jugador de baloncesto de la
NBA Magic Johnson anunció su
infección aumentaron las atenciones
sobre el riesgo de la infección por el
VIH en los deportistas y durante las
competiciones. El impacto social de
su noticia modificó en parte los programas educativos para la población
general y deportiva (6, 7, 9, 13, 45).
Por esto numerosas organizaciones deportivas de Estados Unidos
adoptaron protocolos específicos, a
través de políticas y procedimientos,
para educar a los atletas en la prevención de la transmisión del patógeno sanguíneo durante la competición
y con menos intensidad en el ámbito
amateur (46).
La posibilidad teórica del riesgo de
transmisión del VIH durante la realización de ejercicio es extremadamente baja y mucho menor que el riesgo
de transmisión del virus de la
Hepatitis B (30, 33). La literatura sólo
tiene referencia de un caso de posible transmisión del VIH de un atleta a
otro atleta, que ha sido cuestionado
epidemiológicamente. Este suceso
ocurrió entre dos jugadores de fútbol
que colisionaron y contactaron con
las heridas. Se cree que es debido a
que el riesgo de transmisión a través
de la exposición cutánea es menor
del 0,04% y no se han descrito exposiciones entre deportistas. Tanto es
así, que la Academia Americana de
Pediatría, la Academia Canadiense de
Medicina del Deporte y la Organización
Mundial de la Salud (OMS) no han
encontrado casos de atletas infecta-
.-
dos por el VIH por contacto directo. El
Centro de Control de Enfermedades
Infecciosas de Estados Unidos a junio
del 1993 no tenía recogido ningún
caso de transmisión del VIH durante
un evento deportivo (9, 16, 46, 49).
Estudios recientes efectuados sobre
el riesgo de transmisión del VIH por
heridas en determinados deportes
como en el fútbol americano, han
concluido que el riesgo de transmisión en el campo deportivo es m u y
remoto, siendo de una posibilidad
por cada mil partidos para algunos
autores y de menos de 1 por cada 85
millones de contactos por partido
para otros autores (23, 30, 46).
Hay que tener en cuenta que los
deportes de contacto con colisiones
presentan un riesgo mayor de exposición a sangre contaminada. Los
deportistas que compiten deben ser
conscientes de este pequeño riesgo
teórico de contagio y la persona que
realiza deporte y está infectada con el
VIH asume una responsabilidad
especial (16).
En 1991, el Comité Olímpico de
Estados Unidos estableció una clasificación de los deportes en función
del riesgo que comportaban para la
transmisión del VIH (16, 46, 49). (Ver
Tabla 1.)
En la actualidad se consideran al
boxeo, lucha libre, fútbol, rugby, hockey y artes marciales como los
deportes que comportan un mayor
riesgo de contagio (9, 23).
Desgraciadamente, el mayor riesgo
para que un deportista contraiga la
infección de VIH no es en el terreno
deportivo, sino en su actividad sexual
y en el consumo de drogas por vía
parenteral (16). Esto hace plantear
otro área de incidencia sanitaria que
es el caso del uso de esteroides ana-
6
l ~ , d o Físico
(;ie
.
Ejercicio Físico
VIH
VIH
. x.--,r.
que también las ocluyan antes de
prestar asistencia sanitaria (2, 46).
3. El personal sanitario debe disponer
de todo el equipo necesario para
tomar las precauciones adecuadas
en su asistencia sanitaria. Se utilizarán guantes de látex o vinilo,
mascarillas faciales, batas n o
absorbentes y de tipo desechable
cuando se mantenga contacto con
la sangre, fluidos corporales o se
instauren vías venosas o arteriales.
Es conveniente que se disponga de
material de limpieza, desinfectantes y recipientes independientes
para retirar los útiles manchados
de sangre. Se tendrá especialmente cuidado con las agujas que
deben de ser cuidadosamente dispuestas en recipientes de material
biosanitario contaminado (2, 46).
4. Las manos y todas las superficies
de la piel que hayan estado en contacto con la sangre o los líquidos
corporales deben ser lavados
inmediatamente con jabón o agentes germicidas. Deberá cambiarse
de guantes, batas y otros tipos de
utensilios una vez finalizado su
asistencia sanitaria. Las superficies
deportivas y sanitarias contaminadas se limpiarán inmediatamente
con soluciones desinfectantes. Las
sabanillas o toallas que han estado
en contacto con la sangre del
paciente infectado se colocarán en
recipientes especialmente separados para su lavado posterior con
agentes desinfectantes (2, 46).
Tabla 1. Clasificación de los deportes en función del riesgo de transmisión del VIH (16,461
deportiva, gimnasia rítmica, halterofilia, hípica, natación, natación sincronizada, patinaje, pentalón moderno, piragüismo, raquetball, remo, tenis, tiro con
arco, tiro olímpico, submarinismo, vela, voleibol, waterpolo.
bolizantes. En este supuesto hay 3
casos descritos en la literatura, siend o necesario que en estos casos los
deportistas tomen precauciones
similares a las que toman los infectados con hepatitis B (46).
En l o que respecta a la educación
de los atletas sobre el VIH, n o hay
duda que debe incluirse información
sobre prevención y modos de transmisión del VIH para reducir el miedo
y evitar equívocos relacionados con
el deporte. En ningún caso debe-Ser
denegada s u participación en u n
evento deportivo por esta causa, n i el
resultado del test del VIH será determinante para saber si el atleta puede
participar en el juego. Lo que si es
recomendable es que sea informado
el personal relacionado con el deportista infectado en el transcurso de u n
reconocimiento deportivo rutinario
respetando en todo momento su confidencialidad y conjugando el ser una
enfermedad de declaración obligatoria (7,461.
Existen unas precauciones universales para prevenir la transmisión del VIH
elaboradas por diferentes Servicios de
Salud de distintos países y que hemos
separado en precauciones para los
deportistas, prevenciones para el personal que atiende a deportistas afectos
de VIH y actitudes a tomar durante las
competiciones deportivas para su
mejor comprensión.
l. Prevenciones para el
deportista
1. Utilizar preservativo en todo tipo
de relaciones sexuales (2).
2. No compartir jeringas usadas durante el consumo de drogas intravenosas (IV) y especialmente en el
ámbito deportivo con el uso de
suplementos ergogénicos de tipo
IV y de esteroides anabolizantes
inyectables. Tener cuidado con las
prácticas de transfusión de sangre
por el riesgo de que se efectúe con
agujas usadas y evitar compartir
objetos personales que contengan
restos de sangre (2, 46).
3. Los tatuajes y el piercing, tan extendidos entre los deportistas en
estos últimos años, deben ser realizados con materiales que muestren garantías sanitarias (2).
4. En los desplazamientos a otros países con alta incidencia de VIH,
extremar las medidas higiénicas
indicadas anteriormente (2).
II. Precauciones para el personal
y otros deportistas que
mantienen contacto con un
deportista infectado por VIH
1. En la práctica deportiva el riesgo de
transmisión puede ser reducido al
mínimo en la manera en que es
atendida la herida. El personal sanitario deberá ser instruido sobre las
precauciones a tomar (2.46).
2. Es necesario extremar las precauciones sobre las heridas ya existentes. En el caso de que el deportista
infectado presente heridas que
puedan sangrar, éstas deberán ser
ocluidas antes del inicio del partido
con vendajes que resistan las exigencias de la competición. Si el
personal sanitario presenta laceraciones o erosiones es conveniente
m
111. Actitudes a tomar ante la
competición deportiva
1. Es responsabilidad del deportista
informar de su enfermedad, heridas y lesiones a médicos, entrenadores y personal relacionado con
la competición antes de empezar el
ejercicio. Si es u n deporte de contacto, el deportista se proveerá de
todos los materiales de protección
(incluidos protectores nasales y
oculares) necesarios para su práctica deportiva (2).
2. Durante la competición, si u n participante infectado sangra, se detiene el juego y se retira lo antes posible del terreno de juego. Se debe
controlar la hemorragia, lavar la
herida con agua y jabón o con u n
antiséptico y posteriormente proceder a un vendaje oclusivo que
resista las incidencias de la actividad deportiva. Una vez controlada
la situación, el jugador puede volver al terreno de juego. Cualquier
participante cuyo uniforme resulte
manchado de sangre deberá cambiarse de vestimenta antes de volver al terreno de juego. Si se producen pequeñas abrasiones o
pequeños cortes que no sangran
no se debe parar el juego, se espera al descanso reglamentario y se
cubre entonces la herida (2, 7).
3. Las maniobras de resucitación de
emergencia n o deben ser evitadas
en atletas que se sospecha que
tengan infección por VIH. El riesgo
de transmisión del VIH por la saliva
es m u y bajo. Debe facilitarse y se
recomienda usar bolsa de respiración para minimizar el riesgo de
contacto en el boca a boca (2).
4. Si el equipamiento o terreno de
juego se mancha de sangre debe
ser lavado inmediatamente con
toallas de papel o paños desechables. Las zonas contaminadas
deben ser desinfectadas con hipoclorito (lejía) diluido al 10% y
secarlo posteriormente. Las personas que se encarguen de este
cometido lo realizarán con guantes, así como las personas que se
encargan de la limpieza de las
zonas sanitarias y de las zonas de
entrenamiento (2).
5. Posteriormente a la finalización del
evento deportivo se debe volver a
evaluar las heridas limpiándolas y
cambiando el vendaje. Estas medidas, relatadas con anterioridad,
deben extenderse a todo tipo de
intervenciones deportivas c o m o
tratamientos rehabilitadores, masoterapia, etc ...
Ejercicio Físico
,. . , . . , . .
EJERCICIO Y AL ENTRENAMIENTO
Respuesta a l ejercicio
E
'ie
I ejercicio es bueno y beneficioso
para la mayoria de los individuos
infectados con VIH, pero es necesario
ser cautos y saber si la actividad física extenuante comporta beneficios
para el paciente VIH (9, 21, 51). Para
los individuos que están asintomáticos, la infección por el VIH, en la
mayoria de los casos, no altera las
respuestas fisiológicas debidas al
ejercicio con una sola sesión de ejercicio, pero en estadios más avanzados se observa u n descenso en la
forma física como respuesta al ejercicio intenso. Esto nos hace pensar que
existe una respuesta limitada al ejercicio en los niveles más elevados de
enfermedad y es razón para que éste
sea prescrito y ajustado en función
de la capacidad física del enfermo
(21).
Los estudios efectuados hasta la
actualidad sugieren que existen limitaciones en la habilidad del sistema
inmune y su respuesta al estrés en
los pacientes con VIH debidas a alteraciones de las respuestas neurohormonales y a una inadaptación al rendimiento por alteración en la cesión
de oxígeno periférico (27, 28).
Varios estudios científicos han
visto que durante el ejercicio intenso
y en el sobreentrenamiento se produce una supresión transitoria y más o
menos duradera de los parámetros
inmunológicos que hace que los atletas sean más susceptibles de sufrir
infecciones de tipo respiratorio
(9,28,51). En el caso de la infección
por el VIH, al igual que en otras enfermedades crónicas, las respuestas
inmunosupresoras agudas y a largo
tiemoo, derivadas del ejercicio
agudo, sobre las células del sistema
inmune tiene importantes implicaciones en individuos infectados, l o que
hace que n o sea recomendable u n
ejercicio físico a intensidades elevadas (21, 28, 51).
Aparentemente el ejercicio intenso
produce depleciones temporales de
las cuentas de las células T en atletas
sanos n o observándose l o mismo en
los pacientes infectados con el VIH
(22). Sin embargo, los neutrófilos
aumentan más y de manera más
marcada en los individuos infectados. Estas observaciones sugieren
que una persona con VIH tiene más
dificultad para movilizar los neutrófilos, células NK y LAK en la sangre
durante el ejercicio que produce una
situación que aumenta la vulnerabilidad d e infecciones oportunísticas
durante el ejercicio extenuante (51).
Estudios comparativos del sistema
inmune realizados entre grupos de
pacientes con VIH y personas sanas
han evidenciado .pocos cambios de
las células CD4 durante y después de
4 horas del ejercicio, siendo m u y
similares en ambos grupos. Estos
datos sugieren que la habilidad para
reclutar células CD4-T de la circulación durante el ejercicio se mantiene
en los individuos infectados por el
VIH. En contraste, la habilidad para
reclutar neutrófilos y células NK de la
circulación y la respuesta de las células NK está comprometida en estos
pacientes. Así se ha visto que el
número de neutrófilos se incrementa
más lentamente durante las cuatro
horas después del ejercicio en infectados comparado con los individuos
no infectados (28). La respuesta a la
indometacina también es significativamente menor durante el descanso
y después del ejercicio en infectados
respecto a n o infectados (28).
En cuanto a la inadaptación al rendimiento, por alteración de la oxigenación periférica, se observa una
limitación de la capacidad de resistencia al ejercicio en individuos infectados por VIH y n o entrenados. Así se
ha visto en u n estudio de 32 individuos VIH (+) asintomáticos sometidos
a u n programa de fatiga en u n cicloergómetro que presentaban unas
respuestas cardiovasculares anormalmente bajas, que incluyen una
caoacidad aeróbica baia así c o m o
mala capacidad de resistencia al ejercicio, con taquipnea, umbrales ventilatorios bajos, incremento de la frecuencia cardiaca con relación al consumo máximo de oxígeno comparad o con respuestas en hombres sanos
de similar edad (28).
Estos cambios que reflejan una
capacidad de cesión de oxígeno alterado podrían ser fruto de varios factores: anormalidades subclínicas cardiacas asociadas a la infección por el
VIH, anemia, enfermedad neuromuscular asociada a u n cansancio muscular o pérdida de la masa muscular
(21, 28, 51).
Resumiendo. el efecto del ejercicio en
individuos con infección por VIH es:
Estadio 1: En este estadio se
observa u n incremento e n las
células CD4.
Estadio 11: Se han anotado cambios incrementales tanto e n
número como en función de las
células CD4.
Estadio 111: Desgraciadamente en
este estadio los efectos sobre las
células CD4 no son concluyentes.
R e s p u e s t a al e n t r e n a m i e n t o
Los efectos que conlleva en la rutina diaria los regímenes de ejercicio
en los distintos niveles de enfermedad, aunque positivos son m u y variados y podrían resumirse del siguiente modo. Una participación regular
en actividades moderadas aeróbicas,
VI H
por parte de los pacientes con VIH,
produce:
a) U n incremento en el número
de células de CD4 y de la relación CD4lCD8,
b) Mejora de la resistencia de tipo
aeróbico, estado físico y capacidad oxidativa,
c) Incremento de la masa muscular, Y
d) Menor descenso de los niveles
de corticosteroides.
Esto supone una mejoría de su calidad de vida (por mayor energía física
y mejor estado de ánimo), así c o m o
una revalorización de la imagen corporal (9, 21, 46).
Esto queda demostrado por los
estudios realizados sobre el entrenamiento en pacientes con VIH, que han
sugerido que éste produce una mejoría del estrés y ansiedad, l o que
ayuda a recuperar la inmunocompetencia en los pacientes VIH infectados, sobre todo en los estados precoces de infección por liberación de
endorfinas. Esto queda reflejado al
analizar el efecto social, las variables
psicológicas y dimensiones de la
infección del VIH en pacientes asintomáticos a los que se les sometió a u n
programa de 45 minutos de cicloergómetro al 80% de la frecuencia cardiaca máxima según la edad, 3 veces
por semana durante 10 semanas. En
este estudio se vio que aparte del
efecto cardiovascualr del entrenamiento había u n aumento e n e l
número de células CD4-T después del
entrenamiento y era mayor en los
seronegativos comparados con los
seropositivos. Sin embargo, el númer o de células NK (tan importantes en
la defensa de las infecciones oportunísticas) se mantuvo después de la
notificación de la situación de positividad, descendiendo significativamente sobre todo en las personas
VIH-1 positivos que n o hacían ejercicio (23, 28, 38, 51).
l i ,Físico
~~
Gc\
- -
.
-?--,
. V-.I H
La pérdida del peso total, especialmente por pérdida de masa muscular, es frecuente en los individuos
infectados por el VIH. La magnitud de
la pérdida de la masa muscular es
considerada un factor pronóstico de
la progresión de la enfermedad. Esto
sugiere que las intervenciones que
sirven para evitar dicha pérdida y
aumentar la capacidad de resistencia,
son efectivas para limitar las consecuencias físicas de debilidad y contribuyen posiblemente a parar la progresión de la enfermedad (28).
En otro estudio efectuado para el
entrenamiento de resistencia con un
incremento progresivo de 15 repeticiones de baja intensidad y baja
resistencia y 10 repeticiones a alta
resistencia durante 6 semanas incluyendo flexión y extensión de extremidades superiores e inferiores se
observó un incremento en un 13 a un
15% de la fuerza, masa muscular y
tamaño de las piernas, no observándose efectos negativos durante el
mismo, lo que permitió llegar a la
conclusión de que el ejercicio de
fuerza ayuda a prevenir la atrofia, la
pérdida de la fuerza muscular y la
capacidad funcional de los pacientes
VIH (9, 28).
Resumiendo
Estadio 1: No se observan limitaciones al máximo esfuerzo durante la realización de los test de
esfuerzo para la mayoría de los
individuos y todos los parámetros
metabólicos están en el límite
normal para la mayoría de los
individuos (21).
Estadio 11: Se observan reducciones de la resistencia al esfuerzo
por:
5. SEGUIMIENTO Y MEDICACIÓN
b
6
a) Descenso del consumo máxim o de oxígeno, el consumo
máximo de oxígeno para el
umbral ventilatorio y del pulso
de oxígeno máximo.
b) Disminución de la reserva de la
frecuencia cardiaca y de la respiración (21).
u
n entrenamiento físico es una
excelente ayuda en la terapia de
la mayoría de las personas infectadas
con VIH, siempre y cuando sea usado
en combinación con la terapia nutricional, intervenciones psicológicas,
sin olvidarnos de mencionar el tratamiento propiamente médico (21).
Recomendaciones de revisión
médico-deportiva
Un examen médico-deportivo previo a la prescripción de ejercicio físico es necesario, ya que:
Estadio 111: En este estadio se
observa una dramática reducción
de la capacidad de ejercicio con
limitaciones más severas del consumo máximo de oxígeno de las
observadas en el anterior estadio,
a lo que hay que añadir las alteraciones en las respuestas neuroendocrinas (21). En los pacientes
con enfermedad muy avanzada
con cuentas de CD4 inferiores a
<100/ul se ha encontrado una
gran dificultad para prescribir
ejercicio (51).
1
I
I
l
l
1. Ayuda en el diagnóstico del
grado de afectación de la enfermedad en individuos sintomáticos o asintomáticos y determina las contraindicaciones
médicas para la práctica de
determinados deportes.
2. Valora la capacidad cardiovascular y pulmonar, así como la
resistencia muscular del individuo.
3. Evalúa la seguridad del entrenamiento y posibilita el desarrollo de una prescripción de
ejercicio sano y efectivo.
4. Valora la eficacia de las intervenciones.
5. Sigue el proceso de adaptación
y sirve de base para la prescripción del entrenamiento (40, 50).
C
5
La población que habitualmente
realiza deporte puede ser dividida en
función de la edad y los factores de
riesgo en cuatro grupos:
1" Deportistas menores de 35
años aparentemente sanos y
sin factores de riesgo.
2"eportistas
mayores de 35
años con menos de dos de los
principales factores de riesgo
cardiovascular.
3" Deportistas mayores de 45
años con menos de dos factores de riesgo cardiovascular o
mayores de 35 años con más
de dos factores de riesgo cardiovascular.
4 V q u e l l o s deportistas o pacientes que padecen enfermedades
metabólicas, pulmonares, cardiovasculares o de otra índole
con características de cronicidad, conocidas sea cual sea su
edad. En este grupo se incluiría
el paciente infectado por el VIH.
Una vez clasificada la persona que
realiza deporte en uno de estos cuatro grupos la indicación de un reconocimiento medico-deportivo deberá
ser planteada del siguiente modo:
Grupo 19 Se recomienda la realización de reconocimiento médico
deportivo. Está especialmente
indicado en aquellos deportistas
que participan en competiciones
de carácter nacional y regional.
Grupo 2" y 30 La Federación
Internacional de Medicina del
Deporte recomienda para estos
grupos una mínima valoración
cardiológica donde se incluiría:
historial médico-deportivo, examen físico detallado, electrocardiograma de 12 derivaciones,
prueba de esfuerzo máxima y
radiografía de tórax, a lo que sería
aconsejable unir una analítica de
sangre y orina.
Grupo 4". Obviamente, en dicho
grupo la práctica de una valoración cardiológica ampliada está
fuera de toda duda, inclusive en
cada escalón de progresión de la
forma física. El caso de una perso-
c
\.
-
..
(¿,do Físico
VIH
Ejercicio Físico
VI H
na infectada por el VIH, independiente de la edad o estadio de la
enfermedad, debe realizarse u n
completo examen físico y obtener
u n claro resultado del ejercicio a
realizar.
Dentro de este reconocimiento
médico-deportivo deberán estar
incluidas las siguientes pruebas: historia clínica y deportiva, valoración
de la flexibilidad, realización de
antropometría, dinamometría, espirometría, ECG en basal y prueba de
esfuerzo con registro electrocardiográfico de 12 derivaciones y obtención de parámetros ergoespirométricos. Además, se recomienda una
valoración específica de la habilidad
neuromuscular (21, 24).
La medida de los componentes
aeróbicos, a pesar de estar limitada
por los síntomas, van a variar en
dependencia del estadio de la enfermedad, por lo que las pautas a seguir
y recomendadas en la revisión médico-deportiva deben ser las siguientes:
Estadios1 y //:Se debe realizar u n
estudio de la máxima capacidad
aeróbica a través de una prueba
de esfuerzo monitorizada y de
carácter máximo (21). Se complementará con historia clínica médico deportiva, valoración de la flexibilidad, antropometría (donde
se obtendrán el porcentaje de tejid o muscular,
tejido graso y
hueso), valoración de la fuerza a
través de dinamometria de
manos, piernas y espalda, espirometría y registro cardiológico
basal. En el estadio II la historia
clínica
médico-deportiva
se
ampliará con un exhaustivo cuestionario sobre la sintomatología
que presente el paciente (24).
Estadio 111: En este caso, el estudio
médico deportivo para medir la
capacidad aeróbica debe ser submáxima y los objetivos de evalua-
ción del esfuerzo son los siguientes: determinar la capacidad funcional, elaborar u n rango de
intensidad apropiado para el ejercicio aeróbico, establecer u n apropiado m o d o de entrenamiento,
establecer y determinar los potenciales problemas y contraindicaciones para el entrenamiento, percibir potenciales factores estresantes (21, 24).
N o se debe olvidar la realización
exhaustiva de una historia clínica
médico-deportiva (con especial incidencia en las infecciones que presente el paciente), valoración de la flexibilidad, antropometría (donde se
obtendrán el porcentaje de tejido
muscular, tejido graso y hueso),
valoración de la fuerza a través de
dinamometría de manos, piernas y
espalda, espirometría y registro cardiológico basal. Se recomienda una
valoración específica de la habilidad
neuromuscular para evaluar las alteraciones psicomotoras y así poder
prescribir adecuadamente el ejercicio
(21, 24).
Para la realización de la prueba de
esfuerzo es posible la utilización de
bicicletas ergométricas estáticas,
sobre todo en el caso de que existan
complicaciones neuromuscu~ares.
Aunque siempre que sea posible se
intentará realizar la prueba de esfuerzo monitorizada en cinta rodante, ya
que ofrece valores más reales de la
capacidad aeróbica del individuo
(211.
En cuanto a las revisiones médicodeportivas posteriores es recomendable controles cada 6 meses para el
estadío 1, cada 3 meses en estadio II y
en el estadio III se hará u n seguimiento pautado en función de la sintomatología del paciente.
Recomendaciones para un
programa de ejercicio
La decisión de recomendar la práctica de deportes en pacientes con VIH
debe tomarse de forma individualizada teniendo en cuenta:
Estado de salud del deportista.
La situación de infección por el
VIH.
3. Las características del entrenamiento.
4. La posible contribución del
estrés derivado de la práctica
deportiva.
5.- El riesgo potencial de transmisión del VIH (2, 23).
de su vivienda habitual, es conveniente tener elaborado u n plan de
prevención que le ayude a continuar
su ejercicio y tener una rutina básica
sobre su enfermedad para que n o
tengan una recaída aguda (21).
En cuanto a la pauta de ejercicio,
ésta se ajustará en función de la frecuencia cardíaca obtenida c o n la
prueba de esfuerzo, porcentaje de
masa muscular, alteraciones neuromotoras, percepción del esfuerzo e
infecciones presentes.
Los individuos con VIH deben
empezar a realizar el ejercicio c o m o
terapia adjunta lo más pronto posible
durante su enfermedad, preferiblemente cuando están asintomáticos y
sanos. El programa de ejercicios
debe ser individualizado o integrado
dentro del estadio de la enfermedad,
alteraciones inmunológicas obtenidas a través de las muestras sanguíneas y tratamientos médicos (21).
La multitud de variedad de síntomas e infecciones oportunistas presentes en la enfermedad del SlDA
deben ser usualmente manejadas
con medicación incluyendo antivirales, antibacterianos y medicación
gastrointestinal, ya que los tratamientos anticáncer tienen una gran
variedad de implicaciones con el ejercicio (21).
Es importante que antes de cada
sesión de ejercicio, particularmente
en las semanas de inicio de entrenamiento, se proceda a u n asesoramiento del nivel de estado de salud
general tal como hemos indicado con
anterioridad. Dentro de la propia
prescripción es conveniente tener en
cuenta ciertas observaciones, como
por ejemplo: a) si el paciente presenta diarrea por unos días, es conveniente que la sesión de ejercicio sea
pospuesta o el programa de ejercicio
sea recambiado y modificado cuando
aumente la capacidad aeróbica o progrese la enfermedad; b ) si está lejos
Consideraciones especiales
Conviene recordar que el SIDA es
una enfermedad contagiosa y se
deben mantener unas precauciones
universales que deben de ser seguidas en todo momento, ya descritas
con anterioridad. Además, los individuos con VIH tiene u n riesgo aumentado de enfermedad infecciosa que
ha de ser tenida en cuenta para minimizar este riesgo (21).
Con respecto a la realización de la
prueba del VIH, insistir que la prueba
obligatoria n o está justificada por
razones médicas como requisito para
la actividad o la competición deportiva (16, 23, 49).
La realización del test de VIH produce beneficios tanto públicos c o m o
individuales. U n reconocimiento precoz del estado del infectado por el
VIH produce una modificación positiva con reducción del riesgo de infección a otras personas y anima a la
persona infectada a seguir una terapia y a u n seguimiento de los síntomas, l o que repercute tanto en la calidad de vida como en la duración de
la misma (7).
No hay datos concretos de quién se
debe realizar la prueba n i la frecuencia de la misma. Además, u n resultad o negativo n o es garantía de invulnerabilidad. Aunque la mayoría de
las personas dan positivo a los cuatro
meses de verse expuestas al VIH, en
otras puede tardar u n año en hacerse
1.
2.
!
C
!
l
~
l
i
i
1
i
ii
I
1
b
Físico
--
VIH
- T-v--"-
evidente. Un resultado negativo después de un año o más, después de
una posible exposición, indica que
esta persona no está infectada (16).
El consejo de someter a la prueba
del VIH debe contemplarse bajo un
contexto tanto medico como cientifico (7, 49). Se aconsejará a que se
sometan voluntariamente a la prueba
los deportistas y no deportistas que
hayan estado expuestos a la transmisión sobre todo:
1.
2.
3.
4.
5.
Los que han tenido varias parejas sexuales.
Los que hayan recibido inyección de productos no recetados
por un medico, como drogas
de abuso.
Los que hayan tenido contacto
sexual con personas de riesgo.
Los que padezcan alguna
enfermedad de transmisión
sexual como la infección por el
virus de la hepatitis B.
Los que hayan recibido transfusiones de sangre antes de
1985.
Para realizar dicha prueba, es necesario tener el consentimiento informado por escrito y analizar los resultados posteriormente según las normas nacionales o locales.
Es conveniente recordar algunas
consideraciones legales sobre la confidencialidad del paciente con infección VIH:
1.
La información médica es
exclusiva del paciente.
2. El paciente decidirá a quien le
da la información y que información debe dar.
3. Solamente habrá excepciones
a esta norma cuando colisione
con las leyes locales, regionales o nacionales.
4. Es responsabilidad del médico
conocer el riesgo de transmisión en la competición.
5. Todas las personas del ámbito
deportivo que rodean a estos
pacientes deberán atenerse a
estas normas y deberán ser
instruidos sobre los riesgos de
transmisión (23).
6. NORMAS DE PRESCRIPCIÓN
DE E J E R C T C I ~ ~
"v-s-'
D
e todo lo expuesto deducimos
que la prescripción de ejercicio
basada en la población sana no
puede ser extrapolada para los individuos infectados por el VIH y requiere de una específica prescripción (28).
E n t r e n a m i e n t o d e l a resistencia
La resistencia es la capacidad psicofísica de la persona para resistir la
fatiga. Puede considerarse igualmente como la capacidad que el cuerpo
posee para soportar esfuerzos originados por la actividad prolongada.
Existen muchos parámetros objetivos que demuestran que la resistencia es buena tanto para el entrenamiento físico de cualquier deportista
como para personas sedentarias y
especialmente en el paciente con VIH
(11; 15, 29).
En este último caso el ejercicio
aeróbico además de mejorar la resistencia, mejora la forma física, el
humor, la autoestima personal y el
sentirse bien (23, 28).
Para entrenar la resistencia aeróbica es necesario tener en cuenta unas
guías básicas para evitar lesiones,
para que el trabajo no sea extenuante y evite abandonar su práctica (11,
15, 29).
- Se utilizará cualquier tipo de ejercicio en el que se pongan en acción
grandes masas musculares: caminar, caminar rápido, trotar, trotarcorrer, correr, bicicleta, natación,
excursionismo, etc.; lógicamente
la intensidad y duración de estas
actividades estarán adaptadas a la
edad y condición física de cada
uno. En los grupos de riesgo y en
mayores de 35 años sin patología
previa está indicada la realización
previa de un reconocimiento
médico-deportivo.
- Se controlarán periódicamente las
pulsaciones, las cuales conformarán con exactitud el índice de
esfuerzo que se está realizando.
Progresivamente se irá comprobando cómo la frecuencia cardiaca no aumenta y, sin embargo, se
realiza la misma cantidad de ejercicio, esto es, un síntoma de
adaptación cardiovascular al
esfuerzo.
- Deberán evitarse todos aquellos
esfuerzos mantenidos que eleven
la frecuencia cardiaca por encima
de las 160 pulsaciones/min o en
función de la frecuencia cardiaca
máxima menos la edad. Esto se
habrá de tener especialmente en
cuenta en las personas que inician la realización de un deporte.
- Si la actividad elegida para la
mejora de la resistencia es la
marcha o carrera, habrá que vigilar que el terreno por donde se
practica no sea excesivamente
duro y que el calzado que se utiliza sea el adecuado. Esto evitará
problemas musculares en las
pantorrillas, bastante frecuente
en las mujeres.
- Hay un determinado número de
personas que a pesar de seguir
todos los consejos y normas que
se dan para la realización correcta de una actividad física, n o
logran progresar con el ritmo que
ellos quisieran. Las causas más
comunes son peso corporal elevado, la falta de coordinación y
en el caso del paciente con VIH el
grado de afectación.
- El calentamiento siempre debe
hacerse antes de iniciar una
sesión de entrenamiento, siendo
más intenso en los meses fríos
del año. El objetivo del entrena-
*
li,¿\do
Ejercicio Físico
VI H
Físico
4e\
VIH
miento es preparar al organismo
para obtener mejor la energía de
nuestras reservas por los músculos y evitar lesiones.
Tipo d e ejercicio
En los estadios I y II se ha observado que es mejor fomentar la práctica
de un deporte específico y adaptado
a las características del individuo en
vez de practicar ejercicio físico sin
más, ya que resulta un estímulo más
potente para este grupo, manteniendo un estilo de vida físicamente activo. El deporte elegido se atendrá a
las normas de prevención de riesgo
indicadas con anterioridad (21, 28).
Normalmente el ejercicio más
extendido es la carrera, ya que no
necesita grandes equipaciones, no
requiere de compañeros ni rivales,
no necesita el conocimiento de técnicas especiales y la intensidad y duración pueden graduarse con facilidad
(21).
Otras modalidades de ejercicio con
una buena relación costelbeneficio
son el ciclismo, la natación y la marcha. El aerobic es una modalidad de
ejercicio por la que las mujeres adultas sienten más atracción y debe ser
tenida en cuenta dentro de las prescripciones, pero no llegando a la
extenuación y con ritmos suaves de
baile. El baile de salón también
puede ser una buena alternativa (21,
50).
Duración
Se recomienda una duración de 30
minutos para la carrera y la natación
v de 60 minutos para el ciclismo o el
"aerobic" suave. En las etapas iniciales se puede comenzar con periodos
de ejercicio de 10 minutos, intercalando pausas de recuperación hasta
que la mejoría del estado físico
pueda permitir realizar un ejercicio
de 30 minutos de duración, sin llegar
al agotamiento (21, 28).
Frecuencia
Tres sesiones a la semana son suficientes para mantener un estado adecuado de salud. A medida que mejore la forma física del individuo, en
función del tiempo que disponga, se
podrá incrementar la frecuencia
hasta seis días por semana dejando
uno para descanso.
Se debería comenzar con dos
sesiones semanales en días no consecutivos en las dos primeras semanas, para después ir aumentando
progresivamente en combinación
con la intensidad y la frecuencia (21,
28).
Intensidad
En los estadios I y II la intensidad se
puede determinar siguiendo el
esquema expuesto en el cuadro 7
(211.
Para el estadio 111 habrá que limitar
la intensidad al principio para posteriomente ajustar ésta a la frecuencia
Cuadro 7. Ejemplo de programa de prescripción de ejercicio en función de la intensidad
para un paciente con VIH.
Mantenimiento
L-
10-12
13-15
16-18
> 18
>3
>3
23
>3
60-70
60-70
60-75
>60
25
30
30
230
cardiaca obtenida con la prueba de
esfuerzo, según la percepción del
esfuerzo. No debemos olvidar que en
este estadio el ejercicio físico nos
ayudará a frenar el deterioro de la
evolución natural de la enfermedad
pero no a mejorar la resistencia cardiovascular (21, 28).
y esteroides anabolizantes (55).
Los parámetros usuales del ejercicio aeróbico (intensidad, duración y
frecuencia) se emplean también
cuando se realiza un programa de
ejercicios para el desarrollo de la
fuerza y resistencia muscular.
Normas Generales (1 5 . 29, 44. 47)
Control de la forma física
Tal como hemos indicado con anterioridad, las revisiones médicodeportivas son recomendables cada
6 meses para el estadio l. cada 3
meses en estadio II y en el estadio III
se hará un seguimiento pautado en
función de la sintomatología del
paciente.
Entrenamiento de la fuerza
El entrenamiento para aumentar la
fuerza ha experimentado un notable
incremento en su popularidad durante la pasada década. Los atletas de
élite ya lo habían empleado para
mejorar su fuerza y tamaño muscular
y ahora los deportistas aficionados lo
usan para mejorar su condición física
(15, 29, 44, 47).
Su campo de aplicación es muy
amplio, pudiendo ser utilizado en:
1. Tratamiento de lesiones deportivas.
2. Control de peso.
3. Osteoporosis.
4. Mejora de la condición física.
5. Tratamiento de las lumbalgias.
6. Disminución los factores de
riesgo cardiovascular.
7. Control de estrés y ciertas alteraciones psicológicas (15,29,44,
47).
Se piensa que el entrenamiento
para aumentar la fuerza es uno de los
pilares básicos en los que se debe
basar todo programa bien compensado para mejorar la condición física.
Que en el caso del paciente con VIH
es especialmente beneficioso conjuntamente con la terapia farmacológica
1-i
el sujeto está poco o nada
entrenado, deber hacer más
entrenamiento general (más
volumen de entrenamiento)
ya que esto aumentará las
bases para un posterior trabajo específico.
2 V o d o trabajo de pesas debe ir
precedido de un calentamiento como mínimo de 20 minutos.
3-1
finalizar los ejercicios de
pesas se debe proceder a la
realización de ejercicios de
estiramiento. Estos ejercicios
no se pueden sustituir por otro
tipo de esfuerzo físico como la
natación o la sauna.
4-n
toda sesión de entrenamiento deben ejercitarse en
primer lugar los grandes grupos musculares, siguiendo en
orden decreciente hasta los
músculos más pequeños, ya
que éstos se fatigan antes y
con mayor facilidad, lo que en
caso contrario podría provocar una fatiga prematura
general, impidiendo con ello
el trabajo de los primeros. El
orden recomendado puede ser
el siguiente: piernas, tronco
(pectorales, dorsales), hombros, tríceps, bíceps, gemelos,
abdominales y cintura.
5 W n ejercicio no se considera
completo si a la vez no trabajamos sus antagonistas. Este
principio es de suma importancia en las pesas a la hora de
evitar lesiones musculares.
6 V o n el fin de evitar la mono-
s
Físico
..
.
'
.'
%
.;
,;
Ejercicio Físico
VIH
-' -'I.pIsvp
tonía y el estancamiento, es
necesario variar las cargas del
entrenamiento siguiendo el
esquema de la pirámide azteca.
7 V a m b i é n es muy conveniente
variar los sistemas de entrenamiento, aplicando diferentes
tipos de trabajo muscular: dinámico positivo (halterofilia o
body building), estático (isometría), excéntrico o negativo, combinaciones, etc. Así
como el ritmo de los ejercicios
(ritmo lento, medio o rápido).
Hay que tener en cuenta que
con las máquinas no se movilizan todos los grupos musculares.
8" La planificación de los ejercicios de pesas es conveniente
realizarla mensualmente. En
cuanto a los tiempos de recuperación, tan importante es la
recuperación después del ejercicio, como entre las series,
entre ejercicios y sesiones de
entrenamiento.
Pautas metodológicas para el entrenamiento de l a fuerza y la musculación (15, 29, 44, 47):
1" Test o pruebas de aptitud física
para la fuerza: Es conveniente
realizar una serie de pruebas
para conocer el estado de
fuerza inicial del sujeto y así
poder valorar posteriormente
el aumento de los mismos.
2 V a r g a s a utilizar: Cuando el
objetivo que se persigue es el
aumento de la fuerza; es necesario conocer previamente cuál
es lo máximo que levanta el
sujeto, probar el máximo que
puede levantar y a partir de ahí
planificar el entrenamiento. Las
cargas se clasifican en:
* Cargas muy pequeñas (10%
del peso máxirho levantado).
* Cargas pequeñas (25% del
VIH
*
*
*
peso máximo levantado).
Cargas medianas (50% del
peso máximo levantado).
Cargas submáximas (75% del
peso máximo levantado).
Cargas máximas (100% del
peso máximo levantado).
Al finalizar una serie, hasta las
más pequeñas, NUNCA se
acaba en máxima carga.
3" Número de repeticiones del
ejercicio: El número de repeticiones a efectuar debe ser
inversamente proporcional a la
carga. El protocolo elaborado
por Naglak propone:
Cuadro 8. Protocolo de Naglak.
CARGAS
REPETICIONES
Máxima
Submáxima
Grandes
Moderadamente grandes
Medianas
Pequeñas
Muy pequeíias
1
2-3
4-7
8-12
13-18
19-25
>25
4"
Número de series: Dependen
del nivel de preparación del
individuo, pero para iniciados, se recomienda empezar
por 3 series por ejercicio. Cada
mes se aumentarán progresivamente las series.
5" Recuperación o pausas: Su
duración y carácter. Después
de un esfuerzo es necesario
que el músculo se recupere
pero que no se enfríe. Así,
para trabajos no máximos,
las pausas serán generalmente
cortas (entre 30 segundos y 2
minutos) durante los cuales
se pueden intercalar ejercicios
suaves de elasticidad, soltura
y relajación muscular.
6" Tener en cuenta el objetivo que
se persigue:
Si se quiere fueiza máxima:
Ejercicios con grandes cargas (80-
100% del peso máximo levantado
y de forma lenta). Entrenamiento
no deseado en pacientes con VIH.
Si se quiere potencia: Ejercicios
con cargas entre 60-75% del
peso máximo levantado y lo
más rápido posible.
Si se quiere fuerza-resistencia:
Ejercicios con cargas pequeñas
(no superiores al 55% del
peso máximo levantado) y hacer
un gran número de series así
como de repeticiones y de manera lenta. Desde el punto de vista
cardiosaludable es mejor la fuerza resistencia.
7" Duración del entrenamiento: No
debe ser inferior a 35 minutos
ni superior a 2 horas. Si se
efectúa correctamente, después
de 6-8 semanas es un momento
adecuado para aumentar las
cargas.
El calentamiento (47)
Consiste en prepara progresivamente al organismo para
soportar el trabajo que va a
realizar. Sirve para:
-
Eliminar la rigidez muscular
del reposo.
- Evitar lesiones ostomusculares y articulares.
- Poner en funcionamiento progresivamente el corazón y los
pulmones.
- Incrementar progresivamente la temperatura y el flujo
sanguíneo progresivamente
a los músculos.
- Estirar los músculos y tendones.
- Preparar psicológicamente al
individuo.
Debe durar unos 10 minutos como
máximo y consiste en ejercicios de
muy baja intensidad (10-20 latidos1
minuto) por encima de la frecuencia
cardiaca de reposo, tanto en la carre-
ra suave como en los ejercicios gimnásticos. Proponemos un ejemplo de
calentamiento:
1" Fase: Trotar despacio durante
unos minutos.
2" Fase: Ejercicios gimnásticos dinámicos (con desplazamiento o en
movimiento) y se continúa con
ejercicios estáticos (in situ) tipo
abdominales, lumbares. Duración
de 5-6 minutos mínimo.
a) Giro de tobillo sobre la punta
del pie.
b) Caminar apoyándose sobre los
talones y sobre las puntas de
los pies.
C) Giros de rodillas.
d) Circunducciones de caderas.
e) Flexiones y extensiones de
piernas.
f) Inclinaciones laterales de tronco.
g) Caminando, realizar torsiones
de tronco hacia la pierna que
adelantamos.
h) Andando elevando los talones
hasta los glúteos.
i) Marchando, efectuar elevación
alternativa de brazos estirados.
j) Andando y levantando las rodillas.
k) Circunducciones de tronco.
1) Saltos alternativos de piernas y
elevación alternativa de brazos.
m)Unos pocos abdominales con
piernas flexionadas y umbares.
Entrenamiento d e l a
flexibilidad
La flexibilidad puede definirse
como el arco de movimiento de una
articulación o de una serie de articulaciones y depende de los músculos,
los tendones, los ligamentos y las
estructuras óseas (39, 43).
Existen tres métodos para estirar
los músculos y tejidos blandos que
limitan la flexibilidad:
1) El estiramiento balístico (rebote)
consiste en un movimiento rápido
67"
-:,-in
Físico
.,
VIH
Ejercicio Físico
T*T
. .
y espasmódico, en el cual una
parte del cuerpo se pone en movimiento y con el impulso alcanza el
límite de extensión de los músculos. Es la técnica de estiramiento
m á s peligrosa y que conlleva
mayor riesgo de lesiones (39, 43).
2 ) El estiramiento estático consiste
e n llevar al músculo hasta su
mayor longitud posible y mantenerlo en dicha posición u n mínim o de 15 a 30 segundos. Los
órganos tendinosos de Golgi sirven para inhibir la contracción del
músculo estirado. Este fenómeno
de relajación no aparece cuando
el músculo se estira con rapidez.
Este es el método más beneficioso de estiramiento pero n o necesita de u n seguimiento íntimo con
profesionales y es el que menos
daño produce (39, 43).
3) Facilitación propioceptiva (PNF):
que consiste en realizar el estiramiento ayudado de otra persona.
Este tipo hay que efectuarlo con
s u m o cuidado y está contraindicad o en cardiopatías e hipertensión
(39, 43).
El estiramiento estático es el preferido, por ser el más simple, fácil de
aprender y de llevar a cabo (39, 43).
Hay que tener en cuenta:
1. El estiramiento no es un concurso,
cada uno debe de llegar a su nivel.
2. El mejor método es la sensación
producida p o r el estiramiento
mantenido.
3. Cuando se realiza u n estiramiento
se tiene sensación de tirantez. Se
debe realizar del siguiente modo.
Se mantiene la postura hasta que
disminuye el dolor; entonces es
cuando se vuelve a estirar y se
mantiene otros segundos (15-30).
Si tenemos sensación de tirantez
excesiva entonces n o lo estamos
haciendo bien.
4. Es m u y importante mantener relajado el resto del cuerpo.
5. La respiración debe de ser lenta,
profunda y rítmica.
6. No hay que sufrir con el estiramiento para mejorar.
7 . Si se hace entrenamiento de fuerza, el estiramiento se debe intercalar entre series.
8. Con el ejercicio cardiovascular es
necesario realizar estiramiento
antes y después del m i s m o y
sobre t o d o de la musculatura
implicada en el esfuerzo.
9. Si es posible, acompañar el estiramiento con música ambiente
suave, ya que facilita la relajación
y mejora la realización de los ejercicios.
A continuación se exponen en figuras ejercicios de estiramientos de
todos los grupos musculares.
Fig 1. A) Estiramiento de hombros, espalda. cuello y brazos:
r
;
Fig 2. B) Estiramiento de raquis superior e inferior:
VIH
=,C\o Físico
.-
VIH
wu?---r
Fig 3. C) Estiramientos de las ingles. caderas y espalda:
/---\
n
l
f
*
I
Fig 4. D) Estiramiento de los músculos isquiotibiales:
-
i
,
Entrenamiento d e habilidades
neuromusculares
Si se analiza cualquier movimiento,
incluidas las tareas de la vida cotidiana, se observa que el resultado de
este movimiento depende del buen
funcionamiento de la interacción
entre el sistema nervioso central y la
musculatura esquelética (15).
La coordinación y equilibrio son
dos capacidades que están íntimamente relacionadas. No hay posibilidad de realizar movimientos coordinados sin una buena ejercitación
(15).
En el caso del paciente con VIH se
debe trabajar especialmente estas
cualidades por los beneficios que
comporta como preventivo de las
alteraciones neurológicas derivadas
de la infección, especialmente en los
últimos estadios (21). Si embargo
hay que ser especialmente cauto con
los ejercicios que se propongan y evitarse aquellos que conlleven riesgo
de caída (21).
Para ello son recomendable ejercicios muy sencillos que podemos dividir en:
1. Ejercicios en los que no se manipulan móviles: en ellos interviene
el componente espacial (apreciación de distancias) y la situación o
manejo del cuerpo o de distintos
segmentos de él (15).
Fig 5. E) Estiramiento de los gemelos:
2. Ejercicios en los que se emplean
móviles: en éstos interviene el
componente espacio y tiempo y
dentro de ellos se incluyen los
ejercicios de lanzamiento y recepción (15, 40).
-
Ejercicio Físico
VIH
Dentro del primer grupo se recomienda incluir los siguientes ejercicios:
1. Ejercicios de pie: alternando el pie
de apoyo al principio agarrado y
luego sin apoyo.
2. Andar sobre línea recta.
3. Andar hacia atrás.
4. Andar hacia delante con los ojos
cerrados.
5. Ejercicios de elevación de la pierna contraria de apoyo manteniendo el equilibrio.
6. Ejercicios de sentarse y levantarse.
7. Ejercicios de rodar por el suelo.
Dentro del segundo grupo se utilizarán móviles. El balón se considera
el más fácil de manejar:
1. Elevar el balón con las manos
alternativamente.
2. Rodear el cuerpo con el balón
3. Botar el balón con una mano y
otra alternativamente.
4. Tocar el balón con el pie y desplazarlo sobre el suelo.
5. Lanzar el balón con la mano hacia
un móvil.
6. Lanzar el balón con el pie hacia un
móvil.
7. Recepción del balón con las
manos y con bote previo estando
quieto.
8. Recepción del balón con el pie y
estando quieto.
9. Recepción del balón con las
manos y con el pie y con bote previo estando en movimiento.
1.
2.
3.
4.
5
6.7.
8.
9.
10.
11.
12.
13.
14.
15.
1
16.
17.
18.
19.
20.
21.
22.
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PACIENTE VIH
Los individuos con VIH deben empezar cuanto antes con el ejercicio
como terapia coadyudante.
No está justificado, desde el punto de vista médico, la obligación de realizar la prueba de VIH para poder participar en una competición.
1. PRECAUCIONES
GENERALES:
-..
-l. utilizar preservativo en todo tipo de relaciones sexuales.
--
2. N o compartir jeringas usadas en ninguna situación (drogas IV, esteroides anabolizantes, transfusiones sanguíneas).
3. Tatuajes y piercing se deben realizar con materiales que muestren
garantías sanitarias.
4.
Extremar las medidas higiénicas en los países con alta incidencia de
VIH.
2. PRECAUCIONES-PARA
EL DEPORTISTA:
- -- ---l. Es-responsabilidad d i d e p o r t i s t a informar de su enfermedad a médicos, entrenadores y personal relacionado con la competición.
2.
Las heridas que puedan sangrar deben ser ocluidas antes de la competición con vendajes que resistan las exigencias de la misma.
3. El deportista se proveerá de todos los materiales de protección necesarios para su práctica deportiva.
5. Duración: 30 a 60 minutos. Se empezará con pequeñas fracciones de
10 minutos de ejercicio con descansos intercalados hasta poder soportar los 30 minutos de ejercicio.
6. Intensidad: No sobrepasar el 85% de la frecuencia cardíaca máxima.
No llegar al agotamiento con el ejercicio.
7. Las pesas están especialmente indicadas para evitar la pérdida de la
masa muscular bien en forma de pocas contracciones máximas o con
ejercicios de fuerza-resistencia de todos los grupos musculares.
8. Complementar con ejercicios de coordinación (pelotas o móviles
diversos).
9. Finalizar el ejercicio siempre con 10 minutos de ejercicios de flexibilidad.
10. Beber agua ant&, durante y después del ejercicio.
5. CONSIDERACIONES
EN FUNCIÓN DEL
ESTADIO DE LA ENFERMEDAD:
-ESPECIALES
...- ..~
.
..
..-.---
.
.....
..
. ......
1. Seguir los puntos de prescripción de ejercicio.
2. Control médico deportivo cada 6 meses.
4. Si la vestimenta se mancha de sangre se debe parar el partido y pro-
ceder al cambio de la misma.
5. Toda superficie de juego que se manche de sangre contaminada debe
ser limpiada con hipoclorito (lejía) al 10%.
-
3. DEPORTES CON MAYOR
- - RIESGO
.DE CONTAGIO:
- -.
1. Seguir los puntos de prescripción de ejercicio.
2. Control médico deportivo cada 3 meses (especificar al médico los síntomas que presente).
3. El ejercicio se adaptará a los síntomas y sin llegar al agotamiento.
Boxeo, lucha libre y grecorromana, fútbol, rugby, hockey y artes marciales.
4. PRESCRIPCI~N
DE €IERCICIO:
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l. Para realizar e j e z r e v i a m e n t e hay que someterse a un reconocimiento médico deportivo completo.
2. Comenzar el ejercicio con 10 minutos de calentamiento.
3. Deportes recomendados:
Ejercicio aeróbico y de grandes grupos musculares: carrera, caminar,
baloncesto, balonmano, ciclismo, golf, mountain bike, remo, piragüismo, natación, aerobic, baile de salón, treking, tenis, tiro con arco, etc ...
4. Frecuencia: 3-5días/ semana.
1. Es obligatorio la realización de u n reconocimiento médico deportivo
previo a ser posible submáximo y en cicloergómetro.
2. El ejercicio de resistencia se desarrollará sin llegar al agotamiento. En
caso de alteraciones del equilibrio, se aconseja realizarlo con cicloergómetro y a base de deportes de bajo riesgo de caída.
3. Complementar el ejercicio de resistencia con el de pesas.
4. Realizar ejercicios de coordinación para mejorar las alteraciones de la
marcha.
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lEVENClONES ANTE LA PRACTICA DEPORTIVA
Para realizar ejercicio previamente hay que
someterse a un reconocimiento médico deportivo
completo.
t t t C I U \ U t L t J t H C l C l U tIbICU:
1. En la artritis reumatoide, mejora la movilidad articular, controla
el dolor y aumenta la fuerza muscular,
2. En la espondilitis anquilosante:mejora la evolución de la propia
enfermedad, mejora la capacidad física y la resistencia aeróbica,
mejora la función respiratoria,aumenta la movilidad y
flexibilidad de la columna y controla el dolor.
3. En la artrosis el ejercicio físico puede contribuir a mejorarla o
empeorarla .Si se hace bien, mejora la resistencia de la
articulación.
4. En la osteoporosis el ejercicio regular puede retrasar la edad en
que comienza la pérdida de masa ósea y también, el momento
en que la osteopenia es lo suficientemente significativacomo
para hacerse clinica.
5. En el dolor lumbar y la fibromialgia el ejercicio regular
disminuye el dolor.
RECONOCIMIENTO MÉDICO-DEPORTIVOPREVIO A LA PRÁCTICA:
1. Un historial médico de las articulaciones afectadas y
tratamiento mantenido
Usar prendas cómodas y amplias, y que no
opriman para facilitar la realización del ejercicio.
El calzado debe ser flexible, con suela gruesa y
adherente y con capacidad de absorción de la
carga. Los calcetines deben de ser de algodón
grueso y que permitan transpirar.
3. No llegar al agotamiento extremorevitando
sobrepasar el 85% de la frecuencia cardiaca
máxima.
(hipo e hipernatremia), previo consumo de
alimentos dos horas antes de empezar a realizar
el ejercicio.
5. Beber agua antes, durante y después de ejercicio
para evitar la deshidratación.
6. El ejercicio será regular,constante y progresivo en
intensidad y duración, así como de bajo impacto.
3. ECG de 12 derivaciones.
muy pequeñas y de muy poca duración, inclusive
se puede dividir el plan de ejercicio en varias
sesiones a lo largo del día. Lo objetivos serán a
corto plazo no a largo.
6. Test de apreciación psicológica del dolor con el fin de
determinar el potencial para la práctica deportiva.
7. Pruebas de fuerza muscular y de la flexibilidad.
8. Análisis de la estática de la marcha.
Circuitos de entrenamiento
de fuerza sin peso,máquinas
de fuerza, isometricos,
bandas elásticas. pilates
40.60% de la Fc.Máx.
3.5 días/sernana
20-30 minisesión
Realizando un aumento
progresivo de la sesión de
trabajo y con calentamiento
previo
El límite de peso vendrá
determinado por la
tolerancia al dolor
2-3 seriesde repeticiones
min.)
Flexibilidad: Para aumentar Stretching
el rango de las articulaciones
y descender las lesiones
asociadas
Funciona1es:Para mantener
las actividadesde la vida
diaria,vuelta al trabajo Y
mejorar la calidad de vida.
1-2 sesiones por día
Todos aquellos ejercicios
específicos que mejoren el
equilibrio,destreza,
resistencia,coordinación,
psicomotricidad,respiración
y relajación.
7-Hay que evitar posturas estáticas mantenidas en
el tiempo.
8. Es mejor comenzar con programas a intensidades
5. Analitica de sangre y orina.
Fuerza: Para aumentar la
contracción máxima y la
potencia
Deportes que utilicen
músculos grandes como
andar, bicicleta. piscina,
gimnasia acuática y danza
sin impacto.
4. Estar bien hidratado sin perdida de electrolitos
2. Examen físico detallado.
4. Prueba de esfuerzo máxima o submáxima (dependiendodel
nivel de profesionalidad del deportista) monitorizada
electrocardiográficamente y con control de la tensión arteria1
para cada escalón de esfuerzo.
Aeróbicos:Para aumentar el
consumo máximo de
oxígeno, pico máximo y
resistencia.
9- No realizar ejercicio que provoque dolor
persistente durante más de dos horas en cualquier
parte del cuerpo.
1O.En los momentos álgidos de la enfermedad,se
debe evitar la ingesta de analgésicos que puedan
enmascarar el dolor.
DeDortes aconseiables
Marcha
Esqui de medio fondo
Golf
Cicloturismo
Tiro con pistola
Tiro con arco
Caza
Pesca
Ping-Pong
Tenis
Bolos
Petanca y deportes tradicionales
De~ortesno aconseiables
Esquí nautico y de velocidad
Surf
Fútbol
Baloncesto
Voley
Judo y artes marciales
Automovilismo
Motorismos
Atletismo: saltos
Remo
Prosrama de ejercicio en ENFERMEDADES OSTEOARTICULARES
Inicio
Resistencia aeróbica
-
-
Cualquier tipo de ejercicio
que mueva grandes
grupos musculares.
(durante al menos 20 minutos;
3-4 veces a la semana)
BICICLETA
ERGONÓMICA
Realizar cinco
minutos de
andar rápido
O carrera
suave y
ejercicios
gimnásticos
Fuerza
Ejercicios de fuerza isometricos
Gimnasia acuática
Tai-chi (fuerza, flexibilidad)
Pilates (fuerza,flexibilidad)
Ejercicios respiratorios
Pilates (fuerza,flexibilidad)
Ejercicios de abdominales
Gimnasia acuática
Tai-chi (fuer~a~flexibilidad)
Pilates (fuerza, flexibilidad)
NATACIÓN
REMO
Ejercicios de abdominales
Pilates
Ejercicios de fuerza isometricos
Gimnasia acuática
Tai-chi (f~erza~flexibilidad)
Pilates (fuerza, flexibilidad)
Gimnasia acuática
Tai-Chi (fuer~a~flexibilidad)
Pilates (fuerza,flexibilidad)
Flexibilidad
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