Poder Judicial de la Nación Neuquén, 31 de marzo de 2011. AUTOS Y VISTOS: Para resolver sobre la excepción de defecto legal interpuesta por la demandada a fs. 35/42 de los presentes caratulados: “FACAL HUGO EDGARDO C/ ADMINISTRACION NACIONAL DE LA SEGURIDAD SOCIAL (ANSES) S/ LEY 24.463” (Expte. 418 - Fº 262 - Año 2009); y CONSIDERANDO: 1) Que a fs. 15/16 vta. se presenta el Dr. Hugo Edgardo patrocinio letrado interponer “recurso Facal de la de por Dra. derecho María apelación” propio, Alicia contra la con Varni, el a resolución dictada por la Administración Nacional de la Seguridad Social –ANSeS-, a fin de requerir la revocación de la misma y se haga lugar al reajuste previsional aplicando la doctrina de la Corte federal en el caso “Badaro”. USO OFICIAL Expone que la resolución dispositiva resuelve rechazar jubilatorio oportunamente la atacada en solicitud planteada, en su de parte reajuste virtud de no resultarle de aplicación obligatoria lo dictado por la Corte Suprema de Justicia en el fallo “Badaro”. Relata que obtuvo su jubilación en fecha 30 de junio de 1985 mediante Resolución N° 4464 y que a partir de aquel momento los coeficientes empleados para transferir los aumentos correspondientes a su beneficio no fueron legítimos y que debe establecerse la movilidad de su haber jubilatorio mediante la utilización del nivel general del índice de salarios elaborado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos. Refiere que a modo de reflejar el deterioro de su jubilación, su haber apenas supera los $ 2.000 y la persona que ocupa igual posición a la que el desempeñaba al momento de retirarse, a inicios del año 2009 gozaba de un haber mensual de $ 7.290 y con descuentos la suma de $ 5.860, resultando manifiesta la falta de correspondencia entre los valores. Añade que la demanda tiene por objeto reajustar los haberes previsionales conforme el Derecho judicial del fallo citado y el derecho que surge del veredicto “Cirillo” por lo que deja pedida su aplicación como Derecho judicial. Destaca que el período que requiere el reajuste abarca a partir del 1 de enero de 2002 y hasta el 31 de diciembre de 2006 y deja solicitado se disponga el pago retroactivo de dos años posteriores al momento del reclamo administrativo. Agrega que la acción lleva el pedido expreso para que se declare emergentes del la inconstitucionalidad art. 7 inc. 2 de la de ley las 24.463 normas y sus correlativas y derivadas. Plantea la cuestión federal del art. 14 de la ley 48 para el caso de su denegatoria. Ofrece prueba. 2) Que a fs. 17 se tiene por promovida la demanda contra el ANSES conforme las normas que rigen el proceso ordinario, ordenándose previo a todo, librar oficio a la Procuración Del Tesoro de la Nación a los fines previstos por el art. 8 de la ley 25.344, el que se agrega debidamente diligenciado a fs. 20. 3) Corrida vista al Ministerio Público Fiscal (fs. 22) a fin que se expidiera sobre la habilitación de la instancia y la competencia, manifiesta que “conforme surge de la presentación de fs. 15/16 el actor impugna la Resolución N° RSU-D-2123/09 de la ANSES UDAI Neuquén, que rechazó el pedido de reajuste de haberes. Conforme lo dispone el art. 15 de la ley 24.463 (modificado por el art. 3 de la ley 24.655), no resulta necesaria la interposición de recurso alguno en sede administrativa a efectos de acceder a la instancia judicial”. “… en orden a la verificación del cumplimiento del plazo estipulado en el art. 25 inc. a) de la ley 19.549… ha sido respetado, encuentra por lo cumplido”. tribunal…. estimo que “… estimo respecto corresponde que a conocer dicho la a recaudo competencia la justicia se del de excepción…”. A fs. 24 se declara habilitada la instancia judicial, corriéndose traslado a la accionada- ANSES- de la demanda instaurada. 4) Que a fs. 35/42 comparece el Dr. Jorge Vela actuando como apoderado del ANSES con el patrocinio del Dr. Juan Carlos excepciones Teppa, de a Defecto contestar Legal, la demanda, deduciendo oponiendo subsidiariamente defensa de prescripción liberatoria. Indica que la pretensión de la actora resulta ser confusa y carente de precisión, ya que de acuerdo con el postulado inicial la actora plantea en el objeto que viene a Poder Judicial de la Nación “interponer recurso de apelación contra la resolución dictada por la Administración Nacional de Seguridad Social – ANSeS…. a fin de requerir la revocación de la misma…”. Considera que la especial formulación del objeto de la demanda, atenta con la debida formulación de la acción procesal, en virtud que el recurso en esta instancia se interpone siempre como medio impugnativo, ante resoluciones emitida por el Juez. Por consiguiente esta equivocada iniciación del proceso, viene a enervar el debido ejercicio de la defensa en juicio de su mandante, además, asegura representará una severa dificultad para el juez al momento de dictar sentencia. Puntualiza que la pretensión impetrada, provoca una confusión e indeterminación del objeto de la demanda, pues da inicio a una instancia judicial única en el mundo jurídico, USO OFICIAL utilizando un concepto tal como el de recurso de apelación, que no deviene aplicable en este estadio procesal. 5) Corrida vista de las excepciones opuestas, el actor la contesta a fs. 44/45. Afirma que en la presentación de la demanda no se precisa ni se vislumbra cuál ha sido el perjuicio concreto que le acarreó la utilización del vocablo “apelación”, por cuanto el objeto del pleito, así como su pretensión, están claramente definidos y el escrito de demanda cumple con todos los requisitos formales y sustanciales previstos por el artículo 330 del CPCCN. Agrega que el haber interpuesto como defensa la presente excepción es un simple acto dilatorio por parte de la demandada, a quien en nada le modifica o perjudica el empleo de la palabra “apelación” como similar a la palabra “impugnación”. Destaca que la accionada, ha comprendido el objeto del juicio y así lo ha demostrado al contestar su demanda, en la que ha quedado evidenciada que su derecho de defensa no se ha visto lesionado. 6) Llegados estos autos a despacho para resolver sobre la excepción de defecto legal interpuesta por el apoderado del ANSeS, Dr. Jorge Vela a fs. 35 y vta. punto III a, preciso es recordar que la excepción normada por el art. 347, inc. 5º del Cód. Procesal resulta admisible cuando: “la imprecisión, oscuridades u omisiones de la demanda impidan o dificulten la refutación o la producción de las pruebas conducentes a cargo del accionado” (Cfr. Lino E. Palacios y Adolfo Alvarado Velloso en “Código Procesal Civil y Comercial de la Nación”, Tomo Séptimo, Pág. 366, Editorial Rubinzal – Culzoni; C. J. Colombo, "Código Procesal Civil y Comercial de la Nación", t. I, p. 569, 4ª ed.; S. C. Fassi, "Código Procesal Civil y Comercial de la Nación", t. I, p. 562, 1971 y jurisprudencia de Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil y Comercial Federal, sala II causas 5073 del 25/2/77; 5145 del 21/4/77 etc.). La misma es omisión o la enunciaciones “…el medio acordado para denunciar la formulación imprecisa legalmente exigibles o ambigua al de las escrito de interposición de la demanda”⋅ (Cfr. Lino E. Palacios y Adolfo Alvarado Velloso en “Código Procesal Civil y Comercial de la Nación”, explicado bibliográficamente, y anotado Tomo Rubinzal - Culzoni), y Séptimo, jurisprudencial Pág. 366, y Editorial requiere que las falencias que exhiba la demanda revistan la entidad suficiente como para afectar el derecho de defensa del demandado, privándolo entonces de la posibilidad de oponerse adecuadamente a la pretensión de su contrincante por lo que tiene una vinculación directa y estrecha con el derecho constitucional de defensa en juicio. A su vez el art. 330 del CPCyCN contiene los recaudos que debe contener el escrito de demanda, aunque no existen fórmulas sacramentales para la redacción, basta con que en sus legales, que pretensiones términos no del resulten tienen actor cumplidas otro y objeto preparar que los las exigencias concretar elementos para las la instrucción del proceso. Que respecto del tema se ha expedido en reiterados fallos la Excelentísima Corte Nación al determinar que: Suprema de Justicia de la “La excepción de defecto legal está condicionada a que la omisión u oscuridad en que se incurre, coloquen al contrario en verdadero estado de indefensión, al no permitirle oponer las defensas adecuadas u ofrecer las pruebas conducentes”. (“Guanco, Julio C. y otra c. Provincia de Tucumán y otros”, 11/10/2005, La Ley Online; Cita en Fallos Corte: 328:3682, en concordancia con “Caffaro, Norberto José y Otros c. Provincia de Buenos Aires”, 2002-1218; “Terrero, Felipe Carlos y otros c. Provincia de Buenos Poder Judicial de la Nación Aires”, 1988-09-27; “Asociación de Superficiarios de la Patagonia c. Yacimientos Petrolíferos Fiscales S.A. y otros”, 2006-08-29). Volviendo con tal marco conceptual a analizar el caso que demanda, nos ocupa, punto 1. tenemos que “Objeto”, la que actora señalo “interpone en la recurso de apelación contra la resolución dictada por la … ANSeS,… a fin de requerir la revocación de la misma…”. En oportunidad de emitir su dictamen la Sra. Fiscal dio por sentado que la intención del actor era impugnar la Resolución Nº RSU D 00536/2008 de la ANSES, que rechazó el pedido de reajuste de haberes. Ciertamente, el art. 15 de la ley 24.463 no utiliza el verbo “apelar” sino que autoriza a “impugnar” las resoluciones de la Administración nacional de la Seguridad USO OFICIAL Social ante los juzgados federales con asiento en las provincias, dentro del plazo de caducidad previsto en el art. 25, inc. a) de la ley 19.549, mediante demanda de conocimiento pleno. Pero como se manifestara, el art. 330 del CPCyC no exige fórmulas sacramentales. Impugnar significa, según el Diccionario de la Real Academia Española, segunda acepción, “Der. Interponer un recurso contra una resolución judicial.”, mientras que apelar es “1. intr. Recurrir a alguien o algo en cuya autoridad, criterio o predisposición se confía para dirimir, resolver o favorecer una cuestión. ...2. intr. Der. Recurrir al juez o tribunal superior para que revoque, enmiende o anule la sentencia que se supone injustamente dada por el inferior.”. Ambos vocablos aluden claramente a la vocación de cuestionar la validez o atacar una disposición frente a otro organismo judicial con facultades para hacerlo. En el punto es menester recordar que el lenguaje, incluso el formalizado en la escritura de un libelo, tiene como características la vaguedad y la ambigüedad. La vaguedad del lenguaje es cierta falta de precisión en el significado (designación) natural de todas las palabras, todas las palabras son vagas en alguna medida. El significado de las palabras puede presentarse –según una clásica comparacióncomo una luz proyectada sobre una superficie: habrá una parte claramente iluminada en el centro, y su alrededor seguiría reinando la oscuridad, pero entre claridad y oscuridad habrá un cono de penumbra, en cuyo ámbito el objeto iluminado será visible. Del mismo modo, conjunto central de y para cada palabra, existe casos en los que el nombre un resulta aplicable. Habrá un número infinito de casos en el entorno a los que no aplicaríamos la palabra en modo alguno. Pero existe también un cono de vaguedad, donde nuestros criterios de aplicación resultan insuficientes y los casos no pueden resolverse sin apelar a otro tipo de criterios que brinden mayor precisión, como podría ser el contexto. La ambigüedad –o polisemia- por su parte, vendría a complicar aún más la situación, ya que si la designación de las palabras suele resultar insuficiente en un gran número de casos, la situación se complica cuando una palabra tiene dos o más designaciones, o como cuando –en el una palabra puede significar esto y aquello. Considero que caso analizado- nos encontremos con problemas de vaguedad y ambigüedad en sentido lingüístico, y no ante una falta total de coherencia textual que viola las reglas lógicas de la progresión temática. Existe una articulación real de las frases en el desarrollo informativo del libelo, que permite conocer cuál es el contenido de la de manera evidente pretensión sustancial que se reclama. Así, la expresión utilizada por la actora en el objeto de la demanda no ha modificado el fin ni la intención impugnativa de la misma y no ha colocado en desventaja procesal alguna a la demandada, ya que tal circunstancia no le impidió interpretar cabalmente el sentido y alcance de la pretensión. En efecto, adviértase que en forma coetánea a la interposición de esta excepción pudo contestar la demanda sin inconveniente alguno y ofrecer las pruebas que consideró pertinentes, ejerciendo con amplitud su derecho de defensa, actitud que priva de todo sustento al agravio vinculado con este tópico. Por todo lo expuesto, rechazaré la defensa analizada con costas por su orden (art. 21 ley 24.463), por lo que RESUELVO: 1) RECHAZAR la excepción de defecto legal interpuesta por la Administración Nacional de la Seguridad Poder Judicial de la Nación Social a fs. 35 y vta. punto III a.2) Con costas por su orden (art. 21 ley 24.463). Diferir la regulación de honorarios para el momento oportuno (art. 33 ley 21.839). Regístrese y notifíquese. Proveyendo al escrito que antecede: Resérvese en Caja de Seguridad el expediente administrativo acompañado, USO OFICIAL debiendo aclarar la demandada a qué fines lo adjunta.