INTERNACIONALES ABRIL 2014 > sábado 26 5 A 20 AÑOS DE LA AEC (II Y FINAL) Bolívar y Fidel: junto al Caribe “Con la más profunda emoción y con infinita admiración por la obra inmensa de Bolívar. La visita a este lugar conmueve y deja recuerdos que no pueden borrarse. Con qué honor nuestra delegación ha tenido oportunidad de rendir tributo al Libertador el mismo día que sigue a su nacimiento, en el lugar en que expiró su gloriosa e inmortal vida. Pero Bolívar vive y vivirá siempre”. Dedicatoria en el libro de visitantes. Fidel Castro Ruz, Cartagena de Indias. Julio 25 de 1994 Gustavo Robreño Dolz Pudiera decirse que pocas veces como en esta ocasión estuvieron tan cercanos Simón Bolívar y Fidel Castro. Fue en una mañana soleada y calurosa de julio; el día anterior se había conmemorado el Aniversario 211 del nacimiento del Libertador, en los momentos precisos en que nuestro Comandante en Jefe suscribía en nombre de Cuba el Convenio Constitutivo de la Asociación de Estados del Caribe (AEC), en el Centro de Convenciones de Cartagena de Indias. Sería difícil encontrar simbolismo y coincidencia mayor. Fidel llegó en helicóptero casi al mediodía del 25 de julio de 1994 a las cercanías de la histórica quinta San Pedro Alejandrino, en la ciudad de Santa Marta —una de las tres “joyas” de la costa caribeña de Colombia junto a Barranquilla y Cartagena—, procedente del recorrido que incluyó la visita a la Ciudad Perdida, sitio arqueológico de los indígenas taironas, situada en plena Sierra Nevada, en la intrincada cordillera del noroeste, a 1 500 metros sobre el nivel del mar y entre altos picachos. Emocionante y solemne fue la entrada del líder histórico de la Revolución Cubana a la sede del más importante museo bolivariano del país, donde el Libertador exhaló el último suspiro —en una apartada y sencilla habitación de escaso mobiliario— el fatídico 17 de diciembre de 1830. Visiblemente conmovido recorrió Fidel durante dos horas aproximadamente aquellas instalaciones de San Pedro Alejandrino, a las que elogió por el cuidado y atención con que ellas se mantienen; expresando su reconocimiento a la dirección de ese centro. Ante el altar de la Patria, que contiene la impresionante figura bolivariana en mármol blanco, guardó respetuoso silencio y después, a los numerosos periodistas, expresó sus pensamientos sobre los inolvidables momentos: “Esto es realmente conmovedor —apuntó—, uno no se podía imaginar las cosas que hay aquí, el amor con que se ha conservado todo, lo bien cuidado que está. Desde las edificaciones de la hacienda que había aquí hasta el lugar donde Bolívar vivió y murió: el altar de la Patria, el museo de arte bolivariano y el mural, todo es impresionante…” “De Bolívar me he leído cuanto me ha caído en la mano y cuanta biografía he encontrado… eso explica todo lo que he sentido por él y el hecho de que llegue hasta aquí con una devoción tan grande…” Al relacionar esta visita con los acontecimientos vividos el día anterior, sentenció: “Para mí, Bolívar es uno de los hombres más grandes de la historia… En realidad fue también extraordinario que ayer se firmara la Asociación de Estados del Caribe, el mismo día del aniversario de su nacimiento…” Bolívar y Fidel: junto al Caribe. El mare nostrum caribeño los había convocado y Cuba —como siempre—, acudía al llamado de la unidad, la colaboración y la solidaridad entre hermanos. El mandato bolivariano y fidelista, una vez más, estaba siendo cumplido. El Comandante en Jefe Fidel Castro suscribe en nombre de Cuba el Convenio Constitutivo de la Asociación de Estados del Caribe. FOTO: LIBORIO NOVAL La subversión: tarea conjunta de las agencias federales de EE.UU. Las recientes revelaciones de un programa de la USAID contra Cuba que utiliza modernas tecnologías de la comunicación para desestabilizar el país, demuestra cómo este tipo de agencias se pone al servicio de los intereses de las Fuerzas de Operaciones Especiales del ejército de Estados Unidos Roberto García Hernández El gobierno de Estados Unidos emplea múltiples entidades federales en sus misiones de subversión en todo el mundo, desde las agencias de espionaje hasta especialistas en manipulación de los medios informativos, confirman documentos oficiales. Al respecto, la Circular de Entrenamiento TC-1801 Guerra No Convencional (GNC) publicada en el 2010 señala que debido a la naturaleza “político y militar de este tipo de contienda resulta vital la participación de las agencias del gobierno de Estados Unidos”. “El objetivo es lograr un enfoque gubernamental y el éxito a largo plazo, pues en varios momentos de un conflicto resulta necesaria la integración de las instituciones multinacionales e intergubernamentales”, añade el texto. Las recientes denuncias sobre los planes para imponer un programa subversivo a través de las nuevas tecnologías denominado Zunzuneo, revelaron una vez más el papel desestabilizador de organismos como la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). Esa entidad gubernamental, subordinada al Departamento de Estado, se destaca como fachada de los servicios de espionaje estadounidenses en diversas regiones del planeta. La USAID también apoya las acciones combativas del Pentágono en zonas de conflicto, y para garantizar ese vínculo el Departamento de Defensa dispone de representantes en las estructuras locales de la agencia en esos escenarios. Además, dentro de la Usaid existe la Oficina de Cooperación Cívico Militar (OCCM), cuya misión es conciliar las políticas de defensa y desarrollo “que tienen como fin estimular las capacidades únicas de ambas agencias para obtener mejores resultados”. Según el sitio de la USAID en Internet, la OCCMresponde a la exigencia oficial de que las actividades “en pro del desarrollo constituyan una asociación fuerte e igualitaria con la diplomacia para la defensa de los intereses de la seguridad nacional norteamericana”. Pero en esta cooperación entre entidades del Gobierno para el desarrollo de la Guerra No Convencional no son solo el Departamento de Estado y la CIA los únicos que participan. Expertos gubernamentales y de los medios de difusión apoyan las llamadas Operaciones de Información (OI) que realiza el Pentágono en ultramar. Según el manual JP-3-13 que regula esa actividad, las OI tienen como fin el empleo coordinado de la propaganda y otros métodos similares para lograr el éxito de las operaciones militares y su objetivo es “influir, corromper y usurpar el proceso de toma de decisiones del adversario”. También el Buró Federal de Investigaciones (FBI) constituye un elemento clave en estas funciones. Según un reciente artículo del diario estadounidense The Washington Post, los oficiales del FBI están ahora más dispuestos a discutir acerca de “una alianza poco conocida entre esa entidad y la jefatura de las Fuerzas de Operaciones Especiales (FOE)”. Esta relación beneficia a ambas partes porque dichas unidades élites utilizan la experiencia del FBI en el uso de los medios digitales y otras tecnologías para localizar a los insurgentes y detectar “posibles planes terroristas”. Según el Post, el FBI profundizó en los últimos años sus lazos con las fuerzas armadas estadounidenses y realiza entrenamientos de gran envergadura con los Destacamentos Seals de la Marina norteamericana, unidades élites que forman parte de las FOE. Estos son solo algunas evidencias de una obvia participación de mayor nivel del FBI en tareas de subversión desde las posiciones públicas o encubiertas que ocupan sus funcionarios en decenas de países, sobre las cuales existe muy poca información disponible al público. (PL)