“2015 ‐ Año del Bicentenario del Congreso de los Pueblos Libres” Senado de la Nación Secretaria Parlamentaria Dirección General de Publicaciones (S-1097/15) PROYECTO DE COMUNICACION El Senado de la Nación Vería con agrado que el Poder Ejecutivo, a través del organismo que corresponda, adopte las medidas necesarias para la inclusión de la carne de llama, en el Código Alimentario Argentino. Liliana B. Fellner. – FUNDAMENTOS Señor Presidente: Los Camélidos Sudamericanos son especies típicas de la región andina. Actualmente se reconocen cuatro especies de CS, dos de ellas de tipo silvestre, y otras dos domésticas. Las primeras se dividen, a su vez, en guanaco y vicuña; en tanto que las segundas se integran con dos sub especies: la llama y la alpaca. Como rasgo general de las cuatro especies, se advierte que son fuente de fibra, carne, trabajo y de muchos productos que son indispensables para la subsistencia de un amplio sector de la población alto andina, destacándose su eficiencia en el uso de la tierra en un ambiente adverso como lo son las frágiles praderas de los páramos andinos de los cinco países donde se concentra la mayor población natural de estas especies; Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador y Perú.1 Refiriéndonos específicamente a la llama, es posible decir que su crianza es una actividad económica central para la región andina de nuestro país. Justamente por su gran capacidad de adaptación a una geografía completamente hostil, y por sus múltiples aprovechamientos -descriptos precedentemente-, los pobladores de la región andina en general y de la Puna Jujeña en particular, encuentran en esta actividad un medio de subsistencia por demás importante. 1 Situación actual de los camélidos sudamericanos en argentina. ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA AGRICULTURA Y LA ALIMENTACIÓN OFICINA REGIONAL PARA AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE FAO/RLC. Junio 2005. Disponible en http://www.produccion‐ animal.com.ar/produccion_de_camelidos/camelidos_general/162‐situacion.pdf “2015 ‐ Año del Bicentenario del Congreso de los Pueblos Libres” En efecto, se estima que el 90 por ciento de las alpacas y la totalidad de las llamas se encuentra en manos de pequeños productores de subsistencia de estos asentamientos.2 Los censos ganaderos de llamas revelan la existencia, a modo aproximado, del siguiente stock de cabezas: Jujuy: 109.412; Catamarca: 25.967; Salta: 18.750; Otras provincias: 7.273, lo que hace un total de 161.402 Llamas.3 La gran mayoría de los criadores de Llamas son pequeños productores (90%) que poseen en promedio una tropa de no más de 80 animales. Estos a su vez poseen ovejas y en algunos casos vacas y cabras. Sólo una pequeña porción de criadores de Llamas de Argentina son productores económicamente estructurados y con una rentabilidad interesante. La faena se realiza tradicionalmente en la propia finca del productor y de allí se comercializa como carne fresca (100%). No obstante ello, van surgiendo nuevas alternativas, como la instalación de mataderos debidamente autorizados para llevar a cabo faenas controladas, pero hasta el momento esta modalidad tiene poca injerencia en la masa total de carne faenada. Aunque menos del 10% de dichas unidades tengan un carácter empresarial y que sus productos aún no gocen de una presencia significativa en el mercado formal, la ganadería de llamas cumple, desde hace mucho tiempo, un papel importante para las poblaciones locales y, actualmente, también constituye un potencial que ha comenzado a tenerse en cuenta. Sin embargo existe certeza en cuanto al futuro promisorio para el desarrollo de esta carne, fundamentalmente como un producto gourmet de alto valor, que ayuda a mejorar la situación económica del productor de la Puna. La carne representa la principal fuente de proteínas para los habitantes de la Puna, en Jujuy, Salta y Catamarca, y aunque siempre ha existido autoconsumo rural y local nunca ingresó en los canales comerciales formales. La carne de llama posee características que le son propias y que la diferencian de otras. El sistema de pastoreo marginal genera una carne magra; característica que puede facilitar su 2 Situación actual de los camélidos sudamericanos en argentina. ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA AGRICULTURA Y LA ALIMENTACIÓN OFICINA REGIONAL PARA AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE FAO/RLC. Junio 2005. Disponible en http://www.produccion‐animal.com.ar/produccion_de_camelidos/camelidos_general/162‐situacion.pdf 3 Fuente: INDEC. Censo Agropecuario 2002. “2015 ‐ Año del Bicentenario del Congreso de los Pueblos Libres” difusión como un producto saludable. Por ejemplo, posee un 20,3% de proteínas totales, contra 19% de la bovina y 16,5% del porcino magro. En lo relacionado con el colesterol, la nalga de llama contiene 29,3 mg por 100, la nalga bovina está en valores de 90, 70 las de ovino y porcino y 74 el muslo de ave.4 La faena de la carne de llama está habilitada por resolución de SENASA nº 13 del año 2003. Asimismo, se encuentra en proceso de discusión parlamentaria un importante proyecto que busca la incorporación de la llama en los alcances de la ley 25.422. En síntesis Sr. Presidente, la carne de llama además de ser un producto de consumo tradicional, por su excelente calidad es cada vez más demandada tanto por el público en general como por la alta cocina en particular. En este marco, teniendo en cuenta que no se encuentra legislada dentro del Código Alimentario Argentino, estimo necesario su incorporación al mismo, pues ello representará un significativo avance en la materia, incentivando a su producción y creando mejores condiciones para que este noble producto alcance un mayor desarrollo. Por los motivos expuestos, solicito a mis pares que me acompañen con su voto afirmativo para la aprobación del presente proyecto de comunicación. Liliana B. Fellner. – 4 http://www.produccion‐animal.com.ar/produccion_de_camelidos/Llamas/50‐carne_llama.pdf