CONOCIMIENTO_2o

Anuncio
CONOCIMIENTO
El conocer es un hecho primario, espontáneo e instintivo, y por ello no puede ser
definido estrictamente. Se podría decir que es un proceso en el que están
vinculados
estrechamente
las
operaciones
y
procedimientos
mentales,
subjetivos, con las operaciones y formas de actividad objetivas prácticas,
aplicadas a los objetos.
El conocimiento depende de la naturaleza del objeto y de la manera y de los
medios que se usan para reproducirlo.
CONOCIMIENTO Y PENSAMIENTO
El conocimiento es un proceso mediante el cual la realidad se refleja y
reproduce en el pensamiento humano.
El pensamiento constituye también un proceso activo que refleja la realidad en
conceptos, juicios, razonamientos, teorías, etc.
El pensamiento hace posible el reflejo mediato de la realidad, permite descubrir
las conexiones esenciales existentes en la realidad.
Se puede afirmar que el término pensamiento es sinónimo de conocimiento y,
propiamente, el resultado último del proceso conocer. En este sentido, el
término pensamiento adquiere mayor generalidad que el término conocimiento.
PENSAMIENTO PRIMITIVO
Se denomina también instintivo, automático, sensoriomotor y sincrético.
El pensamiento no surgió bruscamente en la evolución biológica, comienza en
lenta e insensiblemente tanto en la historia de la humanidad como de nuestra
vida personal, se inicias desde sus formas más simples tal como comienza en los
albores de nuestra vida o como aparece en los primates o animales subhumanos.
Se manifiesta en condiciones de emergencia, cuando la integridad del ser es
amenazada.
Surge bruscamente, sin etapas, isntintivamente; pues, a determinados estímulos
corresponden determinadas respuestas.
No tiene formulación verbal, opera con datos sensoriales y motores, tal como
ocurre en un niño recién nacido; propiamente se fundamenta en la teoría de los
reflejos condicionados.
PENSAMIENTO PRE MÁGICO
Constituye una transición entre el pensamiento primitivo y el pensamiento
mágico. Existe en los primates más evolucionados y se manifiesta en los niños de
2 a 3 años.
Se encuentra determinado por el estado emocional imperante en el momento y,
mediante éste, los objetos exteriores adquieren un significado y un valor diverso
u opuesto.
Es una especie de proyección imaginativa de los impulsos internos y, por eso,
adquieren una tonalidad alusinatoria.
El individuo vive sumergido en un ambiente fantasmagórico; pues se pierden las
relaciones entre el sujeto y el mundo material; no es posible diferenciar lo que
son las sensaciones, las imágenes o las representaciones.
El pensamiento premágico o arcaico contiene los símbolos del inconsciente
colectivo, esto es imágenes correspondientes a los períodos iniciales de la vida
humana.
PENSAMIENTO MÁGICO
Corresponde a un extenso período de la prehistoria humana, en el que ya se
había iniciado el lenguaje oral, pero aún no se había descubierto la lógica.
En la evolución individual domina entre los 3 y 6 años de vida, aunque este
dominio no es absoluto, porque ya se encuentran atisbos de pensamiento más
evolucionado.
El pensamiento mágico constituye la base de las creencias, leyendas mitos y
tradiciones. Las religiones y sus textos contienen esta clase de pensamientos.
Se manifiesta en un conjunto de ritos que tienen por objeto influir sobre las
personas,
animales, y espíritus imaginarios para
obtener un
resultado
determinado.
Supone que existe una conexión sobrenatural entre el hombre y el mundo que lo
circunda, porque se considera cada objeto o fuerza produce o transmite sus
propiedades.
LA CREACIÓN DEL MUNDO
Cuando aún no existía ni la tierra ni el mar ni el aire, había un gran abismo llamado Ginnungagap, un lugar sin fondo y sin
luz. Al sur se encontraba la tierra del fuego, llamada Muspelheim o Muspell, donde solo vivía una criatura, el gigante Surt,
que poseía una espada llameante. Ningún otro ser podía vivir allí, debido a su enorme calor.
Al norte había otra región completamente distinta, el Niflheim o tierra de las tinieblas y el agua, una zona oscura, tenebrosa
y fría. En ella se encontraba el manantial Hvergelmir, del que nacían doce ríos llamados Elivagar.
Los doce ríos desembocaban en Ginnungagap, y al entrar en contacto con el viento helado del abismo se transformaban en
bloques de hielo. Del mismo modo, las chispas y las llamas del Muspelheim, al llegar al Ginnungagap y caer sobre los hielos,
formaban nubes de vapor.
Con el paso del tiempo el vapor, que se fue haciendo escarcha, llenó el abismo. De este surgieron una criatura malvada, el
gigante Ymir (Ymer), la personificación del océano helado y el antepasado de los gigantes del hielo, y una vaca gigante,
Audhumla, que alimentaba a Ymir con su leche. Esta, a su vez, lamía el hielo para extraer su sal, fundiéndolo con su lengua
tibia. Así surgió un nuevo ser, el dios bueno Buri, enterrado desde tiempos remotos en estos hielos.
La leyenda cuenta que mientras Ymir dormía, empezó a sudar y, al mismo tiempo, de su mano izquierda se formaron un
hombre y una mujer, gigantes como él. Después nacieron un hijo tras otro, y de ellos surgió la legión de gigantes helados.
Buri engendró un hijo, Bor, que se casó con una giganta llamada Bestla, con la que tuvo tres hijos: Odín, Vili y Ve. Cuando
los gigantes descubrieron el nacimiento de los tres dioses Aesir, iniciaron una guerra contra ellos. El enfrentamiento duró
muchos años, hasta que los hijos de Bor asesinaron a Ymir.
Su sangre lo inundó todo. La totalidad de los gigantes murió, excepto Bergelmir y su esposa, que huyeron en un barco hasta
llegar a Jotunheim, una inhóspita tierra que poco afectaba a las criaturas del frío. Sus descendientes seguirían siendo
enemigos de los dioses.
Odín, Vili y Ve tomaron el gigantesco cadáver de Ymir y lo arrastraron al Ginnungagap, donde lo despedazaron para formar el
Universo: de su carne se formó el Midgar o la tierra de los mortales, que fue colocado entre el Asgard o la tierra de los
dioses, y el Jotunheim, hogar de los gigantes; la sangre se transformó en los mares y océanos; sus huesos formaron las
montañas, los valles y las colinas; sus cabellos fueron utilizados para crear la vegetación de la tierra; los dientes rotos y
afilados se convirtieron en acantilados y rocas; con su cráneo crearon la bóveda celeste. Debajo pusieron a cuatro enanos
para sostenerla: Nordi, Sudri, Austri y Vestri (los cuatro puntos cardinales). De los restos de su cerebro surgieron las
primeras nubes; con sus cejas crearon un muro alrededor del inhabitable exterior.
Solo faltaba la iluminación de ese espacio. Mediante fuego y calor de Muspelheim, los dioses formaron las estrellas, la Luna y
el Sol. También crearon dos carros para que ambos recorrieran el firmamento. Para conducirlos, se eligió a una pareja de
hermanos, descendientes de los Aesir: Mani (Luna) y Sunna (Sol). En el mundo nórdico, el Sol es femenino, y la Luna,
masculina.
Mani tenía dos ayudantes, Hjuki y Bil, hijos de Vidfin. La Luna los robó de la Tierra. Ellos simbolizan la luna menguante y
creciente.
Por otro lado, el gigante Norvi tuvo una hija, a la que llamó Nott (la noche), muy oscura. Esta se casó en tres ocasiones y
tuvo varios hijos. Con Dellinger, el dios de la aurora, pariente de Odín, tuvo al bello Dag (el día).
Odín, Vili y Ve regalaron a Nott y a Dag un caballo para que recorrieran el cielo. El de Nott era Hrimfaxi, de cuyas crines
caían las gotas del rocío sobre la tierra. El caballo de Dag era Skinfaxi; su crin dorada era tan brillante que iluminaba la
tierra.
Los responsables de las estaciones eran dos dioses conocidos como Invierno y Verano. El primero era un dios huraño. Por el
contrario, Verano era un dios amable. El viento era creado por las alas de un gigante en forma de águila que vivía al norte
del mundo; se llamaba Hraesvelg.
Representación de Ymir,
el primero de los
malvados gigantes de
hielo.
EL PENSAMIENTO LÓGICO
Este pensamiento se diferencia de los que lo precedieron porque está regido por
principios diferentes y entre ellos el más importante es el “principio de
contradicción”.
El principio de contradicción permite introducir la noción de substancia, esencia o
categoría y se da a cada objeto o ser una estabilidad o permanencia que antes no
tenía.
Desde este momento, las formas podrán variar pero las esencias serán siempre
inmutables, y el sujeto cognoscente tratará de descubrirlas por debajo de las
apariencias.
El principio de causalidad fue descubierto gracias al principio de contradicción; este
puede formularse así: toda acción tiene una causa y un efecto; todo cuanto existe
es efecto de algo y causa de otro algo, es decir, tiene un antecedente (causal) y un
consecuente (efectivo).
En este sentido, el hombre concibe a la realidad como un ser histórico y adquiere un
orden temporal irreversible.
EL PENSAMIENTO DIALÉCTICO
La dialéctica se estructura sobre la base de la concepción materialista del proceso
histórico y del desarrollo del conocimiento, generalizando los procesos reales que
ocurren en la naturaleza, en la sociedad y en el pensamiento.
El pensamiento dialéctico es el resultado de la aplicación de las leyes de la dialéctica
al pensamiento y sus formas, nos muestran porqué vías y en qué formas capta
nuestro intelecto la verdad objetiva.
La ley de la contradicción es su principio fundamental; ella constituye la fuerza
motriz y la fuente de todo desarrollo; en esta ley se encuentra la clave de todos los
demás principios y categorías del desarrollo dialéctico.
Entre estos principios y categorías tenemos: el desarrollo de la transformación de los
cambios cuantitativos en cualitativos, los saltos dialécticos, la negación de la
negación.
LOS OBJETOS DEL CONOCIMIENTO
Es necesario referirnos al mundo objetal con el
propósito de diferenciar las
clases de objetos, tanto desde el punto de vista materialista, como desde el
punto de vita idealista.
OBJETOS EN GENERAL
Formalmente se denomina objeto a todo lo que es capaz de admitir un predicado
cualquiera, todo lo que puede ser sujeto de un juicio.
La noción expuesta es la más general posible, ya que no importa que lo mentado
exista o no exista: basta que se pueda pensar y decir algo de ello.
Todo pensamiento se refiere a un objeto; porque, nuestro pensamiento es
siempre pensamiento de algo, y ese algo es el objeto del pensamiento, que no se
identifica con él.
Ningún pensamiento se refiere a la “nada”, porque, inclusive este término se
convierte en objeto del pensamiento.
El objeto existe independiente del sujeto.
SIGNIFICADOS DEL TÉRMINO OBJETO
Los principales significados del término objeto se dan mediante los siguientes
sentidos:
a) Sentido etimológico: Proviene de la raíz latina obiectum, de obiicere
poner delante, lo que está en frente de mí, es decir, aquello que va a ser
conocido.
b) Sentido vulgar: Objeto es todo aquello que ocupa un lugar en el espacio,
todo aquello que tiene extensión o también todo aquello que impresiona
a nuestros sentidos.
c) Sentido lógico: Objeto es todo cuanto el pensamiento pueda referirse, la
referencia del pensamiento puede ser real o ideal. Pueden ser sujetos de
un juicio las siguientes clases de objetos: reales, síquicos, lógicos,
ideales, valores, metafísicos.
d) Sentido dialéctico: El objeto constituye el conjunto de aspectos,
propiedades y relaciones fijados en la experiencia e incluidos en el
proceso de la actividad práctica y socio histórico del hombre.
OBJETOS REALES: FÍSICOS Y SÍQUICOS
Son aquellos que se dan en la experiencia sensible, en la percepción interna o
externa.
Los objetos reales físicos son aquellos que se aprehenden en las percepciones
externas, son las cosas materiales que se caracterizan por la temporalidad, la
espacialidad, la causalidad.
La temporalidad es la duración en el tiempo. La espacialidad significa que
ocupan un lugar en el espacio. La causalidad significa que están sujetos a la
relación de causa y efecto.
Los objetos reales síquicos son aquellos que los aprehendemos en la percepción
interna o íntima. Son los hechos de conciencia, tales son: la atención, un
recuerdo, el pensar, un deseo, etc.
Los objetos síquicos se caracterizan por la temporalidad, duración y por la
causalidad: aunque no ocupan un lugar en el espacio, hacen referencia relativa al
cuerpo humano.
t
Documentos relacionados
Descargar